la gualdra no. 45, lunes 9 de marzo de 2012

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SUPLEMENTO CULTURAL No. 45 - 9 DE ABRIL DE 2012 - AÑO 1 DIR. JÁNEA ESTRADA LAZARÍN Jesús Romero (Happy) -Título: El payaso, Técnica: fotografía digital, 12 x 18”-. Actualmente se encuentra en exhibición en la exposición colectiva de Fotografía Zacatecana Contemporánea “Tiempos de Luz y Silencio”, en la Casa Municipal de Cultura.

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lunes 9 de marzo de 2012

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Page 1: La Gualdra No. 45, lunes 9 de marzo de 2012

SUPLEMENTO CULTURAL No. 45 - 9 DE ABRIL DE 2012 - AÑO 1 DIR. JÁNEA ESTRADA LAZARÍN

Jesús Romero (Happy) -Título: El payaso, Técnica: fotografía digital, 12 x 18”-. Actualmente se encuentra en exhibición en la exposición colectiva de Fotografía Zacatecana Contemporánea “Tiempos de Luz y Silencio”, en la Casa Municipal de Cultura.

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La Gualdra es una coproducción de Ediciones Culturales y La Jornada Zacatecas. Publicación semanal, distribuída e impresa por Información para la Democracia S.A. de C.V. Prohibída la reproducción total o parcial del contenido de esta publicación, por cualquier medio sin permiso de los editores.

Carmen Lira Saade / Dir. General

Raymundo Cárdenas Vargas /Dir. La Jornada de [email protected]

Jánea Estrada Lazarín /Dir. La Gualdra

[email protected]

Sandra Andrade Trinidad /Diseño

Juan Carlos Villegas /Ilustraciones

[email protected]

Canta como el grillo (es tu cruz)por Gabriel Luévano Gurrola

La alucinación de un mundo normal (I)por Nelson Guzmán Robledo

Recomendaciones de La Gualdra:

Adanowsky

Madama Butterfly

Otros CaminosExposición de gráfica digital,de Odín Barrios

Los Románticos de Zacatecas*“Ya lo dijo Rufus Taylor”

La ciénega teatroLos motivos de ir

Las paradojas de la promociónde la lecturapor Eduardo Campech Miranda

Castillo de sal si puedespor Ester Cárdenas

LOSING COUNTPerdiendo la cuentaArte por la paz en Méxicopor Armando Haro

Joseph Conrad“Era un hombre de lo más exigente,como amante y como marido”por Mauricio Flores

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Esta Semana de Pascua, la segunda del Festival Cultural Zacatecas 2012, aún quedan muchas actividades programa-das y en este número continuamos ha-ciendo una serie de recomendaciones para usted. La intención nuestra, desde hace dos números es brindarle una in-formación más extensa sobre algunas exposiciones, obras de teatro, conciertos y presentaciones de libros, pues obser-vamos que en el programa general se dan, por ser tantas las actividades y por cuestiones de espacio en el impreso, da-tos escuetos sobre ciertos eventos. Nos hemos dedicado entonces a buscar más información que la que se brinda en el programa para que sea usted, finalmente el que decida qué hacer, a dónde ir y pro-gramarlo en su agenda de vacaciones. La semana pasada tuvimos la oportunidad de asistir a todos los even-tos artísticos que le recomendamos y nos quedó un muy buen sabor de boca. Nos da mucho gusto, asimismo, que sus comentarios enviados a nuestro correo coincidan también con nosotros en que no es posible asistir a todo lo programado pero que sí podemos hacer una selección de lo que más nos gusta e interesa y dis-frutar de espectáculos de nuestro agrado. Le confieso yo también que no todo lo programado en este Festival es de mi in-terés ni de mi gusto personal… pero he visto las calles repletas de gente contenta y todo se ha desarrollado en un ambiente de paz. La frase de popularizar el arte es algo que de entrada no me convence y se presta mucho a confusión; por favor no confundamos lo que es el arte y la cultu-ra; son dos conceptos que aunque están relacionados son completamente diferen-tes. Sí, queremos un pueblo cultivado, un país culto, eso nadie lo discute; pero las formas de “cultivar” el espíritu son muy diversas y en un sano ejercicio de crítica le invito a reflexionar sobre esto. Un festival cultural -y su progra-mación- deberían de tener siempre como objetivo central acercar a los habitantes de un lugar en específico manifestacio-nes artísticas a las que difícilmente tiene acceso la gente. Le doy un ejemplo, el Festival del Desierto, en San Luis Potosí, tiene un programa de no más de 15 ac-tividades; pero esas mismas actividades conforman un circuito en el que lo mis-

mo que se presenta en Real de Catorce, se presenta en las demás comunidades del desierto; lo leyó usted bien: las mis-mas actividades; no hay variación en la programación, por lo que todos los habi-tantes tienen las mismas oportunidades de escuchar, ver y disfrutar lo mismo, sin que la calidad de los espectáculos se vea afectada. Algo similar pasa en el Estado de Hidalgo. Y no, no se me mal entienda, simplemente quiero decir que en Zacate-cas deberíamos buscar que todas las cosas que hagamos sean para mejorar. No bas-ta con reducir el presupuesto de un solo festival, incluso, no hace falta que se dis-minuya -el hecho de que cualquier presu-puesto destinado a la cultura se reduzca no debería considerarse nunca como un logro-. En todo caso me gustaría que un día nos dijeran que con el mismo presu-puesto del año pasado –por decir algo-, se hizo un replanteamiento del proyecto y que ahora, con el mismo dinero, se hizo una programación que tenga más impac-to en las comunidades de nuestro Estado. Aquí el asunto siempre será no confundir lo grandote con lo grandioso –como en una ocasión lo mencionó atinadamente el crítico zacatecano Iván Martínez-. Por lo pronto el Festival Cultu-ral Zacatecas 2012 sigue su curso y hasta ahora ha tenido cosas muy buenas. Es una verdadera lástima que la programación en la Plaza Miguel Auza haya termina-do ya; todo lo que se presentó durante la semana pasada tuvo calidad, la gente que asistió todas las noches lo puede consta-tar. Pero aún queda mucho por ver… le recomiendo seguir de cerca lo programa-do en el Teatro Fernando Calderón, por ejemplo. Y que siga visitando las múlti-ples exposiciones en exhibición durante esta temporada ¿Ya vio la que se encuen-tra en la bóveda de la Ciudadela del Arte? Si no es así, cuando vaya se llevará una muy grata sorpresa, y si ya la vio, tal vez coincida conmigo en que Retrospectiva, de Manuel Durón, exhibe unos grabados en técnica litográfica impecables. Lo invito a que siga mandán-donos sus comentarios y sugerencias a nuestro correo electrónico y a que dis-frute de esta Semana de Pascua.

Jánea Estrada Lazarí[email protected]

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9 de ABRIL DE 2012

Por Gabriel Luévano Gurrola

Canta como el grillo(es tu cruz)

Vino la Cuaresma. Vino y se fue, dejan-do, entre otras cosas, un fuerte sabor a mariscos primero atrayente, luego abu-rrido y a nauseabundo incienso barato. Aunque siempre, más allá de todo eso, me queda una espinita en el corazón. Algunos participamos, desde que tene-mos memoria, en la conduerma social, uniendo las manos en actitud condoli-da, como si no tuviéramos otra razón para pensar que no fuera el reveni-miento de un Santo Cristo molido. Me acuerdo de las comidas cuaresmales. Toda la familia sentada, evocando todo menos las nociones de tragedia que exige la tradición. Más que eso, las reuniones eran campos evocativos en los que, una y otra vez cada año se contaban las mismas his-torias, ocurridas aproximadamente por esas fechas. Una de ellas, la que me conmovía en mayor grado, era la del peón que, descansando bajo un árbol, a la orilla del río en la hacien-da de mis bisabuelos, halló la muerte al beber de su cantimplora. Yerto, de mil colores (cada quién aducía uno) lo encontraron para revisar luego el agua donde bebía y hallar, un enorme grillo. Tras las comidas, mansos re-sabios de aquella tradición de los siete platillos, en la que todos los comen-sales debían comer de absolutamente todo, sin chistar (y con la cual hubiera sido muy dichoso), se procedía, ahora sí, a la expectación del sacrificio. Era tiempo de ver el viacrucis. De niño sólo se dobla la cabeza y con lágrimas en los ojos, arropado en los brazos de la madre, se permite al adjetivo dan-tesco entrar en el inconsciente, en-carnado en una figura ensangrentada, lacerada, cargando una gran cruz a la cual sería clavada. La infausta escena de nuestro pecado más vil, me decían. Pero uno crece, según eso, y aprende a amar (según eso) y cam-bian un tanto las cosas. Ya se puede huir, buscar un lugar apartado de las sombras sacras del martirio y los can-tos en silencio por el jubileo de la re-surrección. Y todavía, del perentorio ruido de los peregrinos. Sigo recor-dando: lo que más miedo me daba de las representaciones era el sonido de pasos, acompasados por los tambores violentos, cuchilladas a la conciencia,

recordatorio de que al que traen es a uno mismo, sólo basta esperar el tur-no de una reencarnación próxima. De niño uno cree escuchar tambores, a lo lejos. Y consciente, o inconsciente-mente, quién sabe, uno corre y se en-cierra, escondiendo la atención en los libros. Así, por estas fechas descubrí a uno de mis poetas más queridos. En esencia, la crucifixión es un medio evocativo para reflexionar en el amor. Por extensión (profana-ciones quizá) puede ser también un pretexto para amar, carnal y espiri-tualmente a una persona. ¿Se puede crucificar a alguien con un beso? Para el gran poeta peruano César Vallejo (1892-1938) en El poeta a su amada, el beso no es sólo una reconciliación ín-tima con el cuerpo (el propio y el del otro), igualmente es una puerta a la imbricación de concepciones privadas, un lazo para hilvanar lo sagrado con lo terreno; o mejor, para demostrar que nunca han sido más que lo mismo:

En esta noche clara que tanto me has mirado, la Muerte ha estado alegre y ha cantado en su hueso.

En esta noche de setiembre se ha oficiado mi segunda caída y el más humano beso.

César Vallejo, El poeta a su amada

Amada, en esta noche tú te has crucificadosobre los dos maderos curvados de mi beso,y tu pena me ha dicho que Jesús ha llorado,y que hay un Viernes Santo más dulce que ese beso.

Lejos de minimizar el dolor o menospreciar el éxtasis pasional, Vallejo logra con su poesía un espacio donde el lector es capaz de husmear en lo profundo de sus abismos y en-trar en un estado de conocimiento anímico a partir del fluir místico de sus temáticas. Poeta del dolor hu-mano, como fue reconocido, es un sobreviviente del canto intrínseco del mundo, ése que vegeta en la esperanza, marginal siempre, del que tiene que al-zar la voz para saberse cierto. La amada se perpetúa en el instante beato de un beso y el poeta, se perpetúa, para su pesar y su gozo, en cada verso. Y cada palabra se vuelve clavo, que se nombra y regresa, al unir a su decidor en las cruces del aire, al universo de la poesía. Resulta bueno, vivificante, aprenderse de memoria algunos poe-mas de Vallejo y cantárselos a nuestra tristeza en las noches santas de la cua-resma infinita que es la vida. Grillos finalmente, los vates siempre entonan

su gloria en las penumbras al final del día. En estas fechas de Semana Santa, emprendo las relecturas del peruano, con fruición y con deleite. Su ritmo, me hace olvidar los tambores. Su rit-mo, me hace traer a la memoria la historia del grillo, causa y evidencia de la muerte, que como el poeta, no la niega, sino que la canta y la limpia. De cierto modo las perso-nas tienen su rito diario de deicidio, su crucifixión. Al matar cada año un Jesucristo idealizan ese calvario ín-timo y propio. Uno se muere, así de sencillo, y vuelve a la a vida cuando es preciso, a las primeras luces de la ma-ñana. El lenguaje se muere, se petrifi-ca en la boca junto al alma, pero en las gargantas que dicen versos, resucita en máximo esplendor. Ahora bien, no sé a qué se deba, a todos nos gusta presumir nues-tro calvario. No lo entiendo, por qué no dejarlo fluir sin pretensiones. Por qué traer a un anciano, parece ser, vicario

de Cristo, para que nos diga que vale-mos la pena y podemos llegar al final de la carrera. A nuestros pulcros gober-nantes les ha de ser grato y saludable ver al Papa de cerca y demostrarle que también ellos son mártires de su mis-mo pueblo, que los ataca a pesar de los innumerables esfuerzos para volver este valle de lágrimas soportable. (Si se van a morir éstos, pues de una vez, pensarán. Total, todo se vuelve daño colateral, a su manera de ver). Nos estamos cayendo a pedazos y no tres veces. La rememoración de la muerte de Cristo, considerada verda-deramente humana, debiera tender a una exploración individual y a un balance entre cuanto queda de las tra-diciones y de la apertura a la crítica. Cada quien vive la Cuaresma y saca sus conclusiones. Yo he sacado las mías: Me quedo con Vallejo, las po-sibilidades de convivencia y el miedo, que aunque no resulte muy agradable, puedo decir, es lo único que tengo.

Pieter Brueghel, El combate entre don carnaval y doña cuaresma (detalle).

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LA GUALDRA NO. 45

Por Nelson Guzmán Robledo

La alucinación de unmundo normal (I)

Es una regla general que una mano mueve inadvertidamente los hilos de nuestra percepción del mundo. Las calles poseen el sentido que nuestro camino les impone: los callejones que erráticamente atraviesa el noctámbulo y la ruta que sigue el burócrata para llegar a su trabajo el lunes por la ma-ñana no son el mismo. Quien busca una dirección no repara en las som-bras de los árboles proyectadas sobre las baldosas del parque que cruza, en la forma irrepetible de la nube so-bre su cabeza, en el perro que hurga los cestos de basura, ni en el enigma que cada mirada transeúnte arroja; su apresurado objetivo le permite ver en cambio los letreros de avenidas, la incoherencia de los números escritos al frente de las casas, el puente que al-guien le habrá referido o la hora que le dicta su teléfono portátil. Pero esta condición va mu-cho más allá del mero descuido de quien observa el mundo que tiene frente a sí, de su distracción accidental o de la disminución de sus facultades merced al cansancio o al hambre; está presente en la forma misma sobre la que descansa la percepción. Así, en cierto sentido las cosas que creemos ver fuera de nosotros, están ya dibu-jadas en nosotros mismos, pues toda percepción lleva implícita la huella de nuestros deseos y nuestros conoci-mientos: el geólogo ve en el acantilado el lento movimiento de las piedras, ahí

donde un profano percibe un bonito paisaje o un suicida un escenario pro-picio. La existencia misma de las cosas que vemos depende de la posibilidad de inscribirlas en el campo de nues-tros sentidos. En un cuento titulado There are more things, Borges ilustra esta condición general de la percepción, cuando su protagonista, un estudian-te de filosofía norteamericano, debe trasladarse a una ciudad próxima a Buenos Aires para negociar una he-rencia y al poco tiempo, invadido por una curiosidad febril, incursiona en la antigua propiedad de su familia, recién vendida a un misterioso ex-tranjero y cuyo mobiliario le resulta incomprensible:

El comedor y la biblioteca eran ahora, una gran pieza desmantela-da, con uno que otro mueble. No intentaré describirlos, porque no estoy seguro de haberlos visto, pese a la despiadada luz blanca. Me explicaré. Para ver una cosa hay que comprenderla. El sillón presupone el cuerpo humano, sus articulaciones y partes; las tije-ras, el acto de cortar. ¿Qué decir de una lámpara o de un vehícu-lo? El salvaje no puede percibir la biblia del misionero; el pasajero no ve el mismo cordaje que los hombres de a bordo. Si viéramos realmente el universo, tal vez lo entenderíamos.

Para Edmund Husserl, toda percepción está inevitablemente atra-vesada por el tejido de significados al que integramos los objetos de nuestra percepción como si fuera un hilo más

de su urdimbre. Situando a cada cosa en los anaqueles —a la vez vastos y estre-chos— de nuestro horizonte de sentido, cada cosa que percibimos la situamos junto al resto de las cosas que ya poseen significado. Determinando previamen-te las posibilidades de sentido, cualquier objeto sólo es percibido en la medida en que se acomodan al horizonte que las circunscribe. Es esto lo que Borges nos dice justamente cuando afirma que para ver una cosa hay que comprenderla y que en realidad no vemos el universo en su totalidad, ni por consecuencia lo entendemos. Conocer es por ello necesa-riamente olvidar, borrar la riqueza de los objetos dejando en su lugar úni-camente el signo que nuestro afán de

nomenclatura les asigna. En cuanto forman parte del mundo de las cosas y de los significados, cada objeto pierde su singularidad irreductible. La hoja de un árbol es en sí misma única e irre-

petible, pero en cuanto veo sólo en ella la palabra hoja, en cuanto veo aquello que comprendo, la hoja ya no está. Los horizontes de nuestra conciencia sin embargo permanecen abiertos; sus límites son necesariamen-te fluctuantes: se amplían y contorsio-nan según los objetos ajustan sus for-mas. Pero ello sólo ocurre cuando la perplejidad se apodera de nosotros y hace aparecer ante nuestra mirada ob-jetos que carecen de sentido, percep-ciones que no podemos encerrar en el círculo de los sentidos habituales. La experiencia estética nace necesariamente de la imposibilidad de circunscribir nuestra percepción al ho-rizonte normal del sentido. Un objeto desprovisto de toda referencia al con-junto de las cosas que lo vuelve prede-cible trae su singularidad a la presencia. Cuando el árbol deja de ser un vegetal provisto de tronco, ramas, follaje y fruto para ser un ser vivo que respira en este momento, un individuo respetable, con personalidad y brillo; cuando la lluvia no es ya un incómodo motivo para sacar el paraguas o correr hacia la marquesina más próxima y logramos escuchar en ella sílabas que ignoramos como las de una lengua extranjera, entonces vemos. Y nos vemos también súbitamente li-bres de la red del sentido, de la que mu-chos temen permanentemente escapar, como también temen aquellos ensueños que nos hacen sentir que caemos cuan-do dormimos la siesta de la tarde.

Fernando Botero, Masacre en Colombia

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9 de ABRIL DE 2012

Plaza de Armas / Lunes 9 de abril, 20:30 hrs.Adanowsky

Adanowsky regresa a México después de grandes y espectaculares presen-taciones en Sudamérica: compartió el Festival Lollapalooza de Chile con Arc-tic Monkeys y Foo Fighters; además de actuar junto a Gush en un tour francés que los llevó a Perú y a Argentina. Romántico, oscuro y místico Adanowksy es un multifacético artista de renombre que ha sabido conjugar el melodrama de las artes escénicas con la sensibilidad y la espiritualidad de la composición musical y los shows en vivo. De esta manera, el hijo menor de la dinastía Jodorowsky puede mos-trarse brutal cantando un verso como “muero por ti” o directamente cursi cuando atraviesa en escena una muñeca de trapo con un cuchillo de cincuen-ta centímetros. Por otro lado, a la hora de cantar en francés, Adanowsky suele dejarse llevar por su costado más punk y logra una efervescencia única donde brillan sus dos alter ego hasta el mo-mento: “El Ídolo” y “Amador”. Sensuali-dad, actitud crooner, espíritu de cabaret y catarsis franco-latina son, en suma, al-gunos de los rasgos que envuelven a este misterioso y subyugante artista. Luego de “La muerte de Ama-dor” el gran espectáculo que brindó el pasado 9 de marzo en el Teatro Metro-politan de México, con un rotundo sold out y con la sublime puesta en escena de Alejandro Jodorowsky –su padre, a quien ha llamado un dictador ange-lical-, regresa a México para revivir los últimos recuerdos de Amador. Ante la tradición que mar-có la muerte de “El ídolo”, es ahora el turno de Amador de morir a manos de su propio creador: Adanowsky, quien

doliente asume el papel de padre que sacrifica a su amado hijo en pos del na-cimiento de un nuevo alter ego. La extinción de “El ídolo” fue calificada como uno de los shows más importantes en la historia del rock hispanoamericano. Y es desde marzo cuando el artista franco-mexicano nos confronta con una puesta en escena surrealista, trágica y cómica en su de-cadencia para dar muerte a Amador. El show en Zacatecas será una de las úl-timas oportunidades de disfrutar de la voz y la presencia de Amador sobre un escenario.

¿Quién es Adanowsky?Adán Jodorowsky (Adanowsky) nació en París el 29 de octubre de 1979, es hijo del también polifacético Alejan-

dro Jodorowsky (ucranio-chileno) y de Valerie Jodorowsky (irlandesa-mexica-na); tras la separación de sus padres él vive con su padre. Es un artista multi-disciplinario: actor, cineasta, bailarín, dibujante, músico y compositor. Ha participado en cinco películas como actor, de las cuales tal vez la más co-nocida sea Santa Sangre –dirigida por su padre en 1989- en la que interpreta el papel de Young Fénix cuando tenía apenas 10 años; a esa misma edad co-noce a George Harrison, quien le ense-ña los primeros acordes en la guitarra. Como integrante de la banda punk The Hell Boys grabó tres discos –él era bajista del grupo-; y en su ca-rrera como solista ha grabado tres más: Étoile Éternelle (2006), El Ídolo (2008) y Amador (2010).

“Como no ganaba mucho dinero tocando rock and roll, me contrataron para tocar con unos cantantes famosos en Francia, lo hice. Fue una gran lección para mí, el bajista acompaña y está al servicio de la música y del cantante. Aprendí a domar mi ego. Aprendí a escuchar. Sólo que dos años después unas ganas enormes de cantar me invadieron. No sé por qué, seguramente yo quería brillar, que me aplaudieran. Tenía 21 años y estaba de-cidido a ser un rockstar. Quería mujeres, fama, quería que la gente me vea, quería existir como artista, quería entrar gratis en las fiestas, quería que se tomen fotos conmigo, entonces empecé a componer y a escribir […] De repente, decido hacer mi primer concierto como Adanowsky, fue el 17 de febrero del 2003 (día del cumplea-ños de mi padre) en el barrio Bastille en París, la sala se llamaba “La Scène”. Lla-mé a todos mis amigos y se llenó. Cuan-do me subí en el escenario pensé “¡Ya lo estoy haciendo!” Dije lo mismo la primera vez que me acosté con una mujer... Grabé mi primer disco en una casa enorme, un castillo en las afueras de Paris. […] El disco sale en Francia (en francés con el nombre Étoile Éternelle) [a partir de eso] Hago giras y giras por todo el mundo y decido hacer una trilogía, tres discos con tres personajes diferentes. Dirijo mis videos y yo mismo me ocupo de los trajes, el visual, el concepto, todo, absolutamente todo. Todavía viviendo en Francia, me separo de una mujer y compongo mi nuevo disco “Amador”. […] Ahora estoy en la Ciudad de México, vivo solo, toqué mucho, en muchos países, tuve historias de amor, el corazón roto pero vivo feliz. Hice giras en Estados Unidos, España, Ucrania, Argentina, Chile, Francia, Polo-nia... Viví mucho pero ese pequeño punk de la época de The Hell Boys que vive en mi no está muerto. Cada día es un co-mienzo. Cada viaje que hago es un maes-tro. Estoy viviendo de mi pasión porque creí en mí. Ahora la fama me encanta, la disfruto, pero con los años aprendí a amar la creación, mi meta ya no es brillar pero disfrutar”.*

*Fragmento de su biografía, incluida en: http://www.facebook.com/Adanowsky-Music#!/AdanowskyMusic/info

Page 6: La Gualdra No. 45, lunes 9 de marzo de 2012

LA GUALDRA NO. 45

Viernes 13 de abril, 20:00 Hrs. / Teatro Fernando CalderónGiacomo Puccini (Lucca 1858-Bru-selas 1924) viajó en 1900 a Londres para el estreno de Tosca, allí tuvo la ocasión de ver la obra teatral homóni-ma del estadounidense David Belasco quedando totalmente impresionado por ella. Madama Butterfly está divi-dida en tres actos con libreto de Giu-seppe Giacosa y Luigi Illica (último de los realizados por esta pareja) basado en la obra de Belasco que se inspiró a su vez en la novela del francés Pierre Loti, Madama Chrysanthème. Música de Giacomo Puccini. El estreno tuvo lugar en el Teatro de la Scala de Milán el 17 de febrero de 1904, sufriendo un estrepitoso fracaso.*

Acto IEl teniente B.F. Pinkerton, un mari-nero a bordo del USS Abraham Lin-coln en el puerto de Nagasaki se casa con Cio-Cio-San o Madama Butterfly, una geisha japonesa de 15 años. El ca-samentero Goro ha arreglado la boda y rentado una pequeña casa en la co-lina para que ellos vivieran. El cónsul americano Sharpless, un hombre ama-ble, ruega a Pinkerton renunciar a su plan, debido a que la chica cree que el casamiento es una unión. El teniente se ríe de él, y la novia aparece junto a sus amigas geisha, alegre y sonriendo. Sharpless se entera de que, para mos-trar la confianza de ella en Pinkerton, ha renunciado la fe a sus ancestros y por eso ella nunca puede regresar con su propia gente. Pinkerton también se entera de que es la hija de un desgra-ciado samurai quien cometió sppuku, y por ello la pequeña niña fue vendi-da para ser entrenada como geisha. El contrato de matrimonio es firmado y los invitados están brindando por la jo-ven pareja cuando el bonze, un monje budista, entra, pronunciando una mal-dición contra ella por haber tomado la fe del extranjero, e induce a sus amigas y parientes a abandonarla. Pinkerton, irritado, apresura a los invitados y ellos salen enfadados. Con palabras de amor él consuela a la triste novia, y ambos comienzan una nueva vida felizmente.

Acto IIEl acto dos comienza tres años des-pués. El viaje de deber de Pinkerton ha acabado, y él ha regresado a los

Estados Unidos, habiendo prometido regresar “cuando los petirrojos ani-den nuevamente”. El fiel sirviente de Butterfly, Suzuki, sospecha y con ra-zón que él los ha abandonado, pero es reprochado. Mientras tanto, Sharpless ha sido nombrado por Pinkerton en una carta para contarle a Butterfly que él se ha casado con una mujer ameri-cana. Viendo su maravillosa fe, el cón-sul no puede resistirse a destruirla. Butterfly se encuentra tan salvaje con el placer de ver la carta de su amante que es incapaz de com-prender su contenido. Ella cree que Pinkerton está de regreso, y en su alegría se rehúsa a escuchar a Yama-dori, un rico pretendiente llevado por Goro, diciendo que ella ya está casada. Goro intenta explicarle que una espo-sa abandonada es una esposa divor-ciada, pero ella declara orgullosamen-te, el cónsul se va con tristeza. Pero Butterfly ha sido por mucho tiempo sujeto de burlas. Justo cuando las cosas no se pueden poner

peor, disparos distantes saludan la nue-va llegada de los hombres de guerra, el Abraham Lincoln, el barco de Pinker-ton. Butterfly y Suzuki, en una alegría salvaje, decoran la casa con flores y se adornan ellos mismos y a los niños con vestidos de gala. En tanto pasa la no-che, una larga orquesta junto a un coro toca, mientras que Suzuki y los niños se van quedando dormidos gradual-mente- pero Butterfly, alerta y sin mos-trar signos de cansancio, no se mueve.

Acto IIIEl acto tres se abre con Madama But-terfly aún observando determinada y firmemente. Suzuki se despierta y le lleva al bebé. Ella lo persuade a la exhausta niña para que descanse. Pinkerton y Sharpless llegan y avisan a Suzuki la terrible verdad, pero el teniente se encuentra profundamen-te herido de culpa y vergüenza. De-masiado cobarde para decirle a ella en persona, él no puede permanecer, pero deja la ingrata tarea a su infor-

tunada esposa. Suzuki, al principio violentamente enojado, es finalmente persuadido a escuchar cómo Shar-pless le dice a ella que Mrs. Pinkerton cuidará del niño si Butterfly se rinde. Butterfly aparece, radiante, esperando ver a Pinkerton, pero en vez de ello se enfrenta con la nueva esposa de éste, Kate. Ella recibe la verdad con una cal-ma patética, educadamente felicita a su reemplazante, y le pregunta a ella si puede decirle a su marido que en me-dia hora tendrá al niño, y que ella mis-ma “encontrará paz”. Luego, habiendo despedido a sus visitantes, ella es deja-da a solas. A la hora prevista, Pinker-ton y Sharpless regresan, y encuentran a Madama Butterfly muerta por su propia mano luego de haberse despe-dido de su pequeño niño. Ella ha usado como arma la espada de su padre, con la inscripción: “Morir con honor, cuan-do uno no puede seguir viviendo con él”. La ahora humillada, hija del desgracia-do samurai, ha decidido morir orgullo-samente por seppuku -el modo en que un samurai muere por honor-.

Ópera MADAMA BUTTERFLYLa acción se desarrolla en Nagasaki a principios del siglo XX

Personajes:Madama Butterfly (Cio Cio San), sopra-no: MARIBEL SALAZAR

Suzuki, camarera de Cio Cio San, mezzo-soprano: ENCARNACIÓN VÁZQUEZ

Kate Pinkerton, esposa americana de Pinkerton, soprano: DARENKA CHÁVEZ

B. F. Pinkerton, teniente de navío, tenor: JOSÉ LUIS ORDOÑEZ

Sharpless, cónsul de los Estados Unidos en Nagasaki, barítono: JESÚS SUASTEDolore, hijo de Cio Cio San: SARA MANZO

Orquesta Filarmónica de ZacatecasDirector General: Alfonso VázquezOscar Tapia: Director de escena

*Fuente: http://www.pianomundo.com.ar/operas/madamabutterfly.html. Esta ópera está muy bien explicada y detallada en: http://www.unanocheen-laopera.com/viewtopic.php?t=11939

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9 de ABRIL DE 2012

Nació en la Ciudad de México. Ganadora del Premio Especial del INBA por su destacada participa-ción en el XXV Concurso Nacional de Ópera “Carlo Morelli” en el Pala-cio de Bellas Artes en 2005. Comenzó sus estudios de Canto y Repertorio Operístico con el Maestro Emilio Pérez Casas. Ha to-mado cursos de canto con la Mezzo Soprano Graciela Araya. Repertorio operístico con Rogelio Riojas y Ja-mes Demster. Debutó en 2006 en el Pala-cio de Bellas Artes cantando el rol de Mimí de la ópera La Boheme, de Giacomo Puccini, bajo la batuta de Enrique Patrón de Rueda. Ac-tualmente es alumna de la Soprano Mayda Prado, discípula de María Callas, y forma parte de los talleres de arte dramático y Dicción Lírica Alemana dirigidos por la Maestra Prado. Fue invitada en 2010 por la Ópera de Sophia en Bulgaria para cantar el rol de Mimí en “La Bohe-me” de Giacomo Puccini. Repre-sentó a México en el “2010 Pasade-na Tournament of Roses” Pasadena California, USA. En 2011 Maribel fue invi-tada a participar en el XXV Festival Cultural Zacatecas 2011 alternando con figuras de fama internacional como el Tenor José Carreras. Invita-da por la Ópera de Bellas Artes Ma-ribel Salazar cantó el papel principal de la ópera “Madama Butterfly”, de Giacomo Puccini, recibiendo im-portantes críticas del público y de la prensa especializada. Palacio de Bellas Artes 2011.

Nació en ciudad de Camargo, Chi-huahua. En Estados Unidos, ha can-tado con la Compañía de Ópera de Portland Oregon en las óperas La Flauta Mágica de W. A. Mozart; Ro-meo y Julieta, de Gounod; y Gianni Schicchi, de G. Puccini. Realiza su debut en el Pala-cio de Bellas Artes cantando el pa-pel de Luigi en la ópera Il Tabarro, de G. Puccini. Cantó con el tenor Plá-cido Domingo en la gala de zarzuela titulada “Viva La Zarzuela” en Pue-bla. En el Concurso Iberoamericano de Canto en Guanajuato, obtiene los premios Bellas Artes de México y el premio Instituto de Cultura de Guanajuato. Realiza su debut en Europa cantando en la Casa de Ópera de Innsbruck, Austria, el papel prota-gónico de la ópera Don Carlo de G. Verdi y participa en el Festival Inter-nacional de Bregenz en la produc-ción de Il Trovatore de G. Verdi. Realiza su debut como Don José, en la ópera Carmen de Bizet con la Orquesta Sinfónica de Xala-pa y es invitado como solista de la Orquesta Filarmónica de la UNAM para interpretar la Novena Sinfonía de Beethoven. Interpretó a Mario Cavaradosi de la ópera Tosca en la producción de la Ópera de Nuevo León. En el 2010 participa con la Compañía Nacional de Ópera de Bellas Artes en la puesta en escena de la ópera Carmen y en el estreno de la ópera Únicamente la verdad, de Gabriela Ortiz, interpretando el papel de El Tigre.

Han transcurrido veintiocho años desde que realizara su debut en ópera, cantando “Amhal y los vi-sitantes nocturnos” de Gian Carlo Menotti. De entonces a la fecha ha acumulado un repertorio cercano a los noventa primeros papeles en oratorio, ópera y concierto; ha par-ticipado en trece grabaciones; ha cantado con prácticamente todas las orquestas sinfónicas del país; ha sido invitado a los más im-portantes festivales culturales de México; ha actuado en todos los teatros y salas de concierto de im-portancia del territorio nacional. Ha aparecido también en numerosos programas de Radio y Televisión y la prensa ha sido más que genero-sa en sus elogios a lo largo de su brillante carrera. Ha compartido el escena-rio con figuras de la talla de Plá-cido Domingo, Gilda Cruz Romo, Francisco Araiza, Cristina Gallardo, Verónica Villarroel, Ramón Vargas, Rosario Andrade, Paul Plishka y Ro-lando Villazón entre otros muchos.Cada año, desde 1985, ha actuado ininterrumpidamente en el Palacio de Bellas Artes en ópera, oratorio y concierto. Sus más recientes actua-ciones han incluido recitales de lied en las Ciudades de Nueva York y Washington. Es Fundador y Direc-tor de la Compañía de Ópera de Morelos.

Cantante mexicana de trayectoria internacional. Recibe la Medalla Mozart, en su primera edición, de manos del presidente de México. Premiada en tres ocasiones por la Unión de Cronistas de Teatro y Mú-sica. Premiada en el Concurso In-ternacional Francesc Viñas en Bar-celona y Carlo Morelli en México. Se ha presentado en la Ópera de Berlin, Ópera de Karlsruhe en Alemania, en el Teatro Villamarta en Jerez de la Frontera, España, el Teatro Pérez Galdós de las Islas Ca-narias y en el Teatro Teresa Carreño de Venezuela cantando Adalgisa de la ópera Norma y Seymour en Anna Bolena. Ha cantado el Cherubino de las Bodas de Fígaro alternando con grandes cantantes como Renée Fleming en el Teatro Colón de Bue-nos Aires, así como en la gira anual de la New York City Opera, la Ópera Metz de Francia y el teatro Teresa Carreño de Venezuela. Ha sido invitada a cantar en diferentes escenarios y festivales: el Festival Rossini en Putbus Alema-nia; en la Catedral de Canterbury, Inglaterra; al Mosaico Cultural de Antigua Guatemala y al Teatro Na-cional con la Orquesta Sinfónica de Costa Rica. Asimismo se presentó en la Academia de Música de Bu-lawayo en Zimbabwe, en el Festival Hispano de Música, en el Museo de Arte de Pretoria en Sudáfrica y en el Teatro Noga de Tel Aviv, Israel; y en Japón, sólo por mencionar algunos.

Maribel Salazar(Soprano)

José Luis Ordóñez (Tenor)

Jesús Suaste(Barítono)

EncarnaciónVázquez

(Mezzosoprano)

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LA GUALDRA NO. 45

Según el método chino del Siang Mein basta mirar detenidamente el rostro de una persona para conocer a detalle su carácter y su historia. Claro que para lograrlo la observación debe hacerse con base en un sistema establecido de inferencias. Lo que el Siang Mein hace es recoger las claves que permiten una lectura adecuada. Odín Barrios ha tenido una idea semejante a la hora de abrir “Otros caminos” y con ello meter al es-pectador en una práctica que se sigue realizando en la actualidad aunque esté lejos de ser reconocida como una forma válida de conocimiento. Llamada fisonomía dentro de la tradición occidental, la lectura de

Esta obra es la primera de tres de mon-tajes que abordan el tema de la soledad y el reflejo en los espacios en donde se desarrollan estos personajes tan co-munes en nuestra sociedad. “Los Motivos de Ir” habla sobre la ausencia de la necesidad de estar. Tras la muerte de su esposa, Ra-món decide emigrar junto con sus tres hijos a Estados Unidos. Al estar ante la ausencia de su mujer y en un lugar

Los Románticos de Zacatecas es una ban-da mexicana que se formó en diciembre del 2007, en la ciudad de Zacatecas, Zac. Cuando Jesús Manzanares Jr. “Manza-nas” (Voz y Guitarra) volvió a México procedente de California, donde perma-neció varios años dedicado a la búsqueda de músicos que gustaran del buen rocan-rol y no se negaran a sus raíces gruperas y románticas. Al regresar a nuestro país, Manzanas comenzó a trabajar en las primeras canciones de los románticos con “Guichis” (Requinto), su hermano menor. Posteriormente se unió a ellos “Tony” Montes, conocido baterista de la escena local de Fresnillo, Zac.

DiscografíaEPs: Los Románticos de Zacatecas (2008). Álbumes de estudio: Muchacha (2010). Y Ya lo dijo Rufis Taylor (2012) G.I.G. * Fuente: http://www.facebook.com/?ref=tn_tnmn&__adt=12&__att=iframe#!/pages/Los-Romanticos-De-

Zacatecas-OFICIAL/120879667966891?sk=info

En exhibición en la Casa Municipal de Cultura

Miércoles 11, 19:00 Hrs. / Teatro del IMSS

Plaza de Armas / Jueves 12 de abril, 19:30 hrs.

Otros CaminosExposición de gráfica digital, de Odín Barrios

La ciénega teatro Los motivos de ir. Desnivel del espacio dramático. Tres historias que coinciden. PRIMERA PARTE.

Los Románticos de Zacatecas*“Ya lo dijo Rufus Taylor”

rostros es uno de los muchos conoci-mientos que no pasaron la prueba del método y fueron excluidos del cuerpo de la ciencia que empezó a confor-marse en el siglo 16. “Otros caminos” nos recuer-da lo fructíferas que pueden ser en el terreno de las artes esas interpreta-ciones alternas o no reconocidas de la realidad. De hecho, el artista aplica una filosofía similar a todas las áreas de la acción y el pensamiento en que la oficialidad impone un solo camino, un solo método. Hay otra manera de entender “Otros caminos” y es la que concier-ne totalmente a Odín, quien tras ha-ber alcanzado un pleno dominio de

En su primera etapa co-menzaron a experimentar con varios estilos, como el noise rock y el punk, siempre bajo la influencia de la músi-ca norteña y romántica en sus letras. Tiempo después se unió “Gerber” en el bajo para completar el cuarteto, pronto desarrollaron su música, has-ta su sonido actual, definido por ellos mismos como “rock”, aunque para algunas personas su estilo entra en lo indie y en lo garage punk. Los Románticos de Zaca-tecas abrirán el concierto de Alan Parson’s Proyect este próximo jueves.

la electrólisis, apuesta ahora por una nueva técnica. Su anterior exposición “Cua-tro elementos y una ausencia”, presenta-da en el Instituto Potosino de las Bellas Artes en agosto del 2011, ya apuntaba el camino a seguir con la inclusión de va-rias serigrafías que aparecieron junto a los grabados en electrólisis. Ese recorrido se completa aquí, con una muestra compuesta ex-clusivamente por piezas trabajadas en gráfica digital e impresas en serigrafía. En ese sentido, “Otros caminos” sig-nifica la apertura de una nueva vía de creación que probablemente tardará un buen rato antes de agotarse.

Alberto F. Márquez

Fotografía de portada: Abraham Orozco.

donde es difícil la comunicación, deci-de suicidarse. Anuar, su hijo, le impide realizar el suicidio por lo que en ese

punto de hecho y salvación, Ramón queda parapléjico, causando en Anuar la necesidad de morir. Sofía carga con

el peso de mantener a la familia en es-pera de los 15 años de Laura, la menor.

Con las actuaciones de:Noé Germán, Karla María Ríos, Maye-la Venegas, Kalio de León y Ana María Morquecho.Con Dramaturgia y dirección de Iván Guardado.Bajo la producción de: LA CIÉNEGA TEATRO.

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9 de ABRIL DE 2012

Por Eduardo Campech Miranda

Por Ester Cárdenas

Las paradojas de la promoción de la lecturaÚltimamente ha estado haciendo eco en mi cabeza aquella tonada de un pro-grama televisivo de los años ochenta, llamado “El tesoro del saber”. Ésta, más o menos, decía así: “En los libros halla-rás, el tesoro del saber. Para ti todo será, si aprendes a leer”. Si la memoria no me falla, el objetivo del programa era hacer accesible a la infancia la divulgación científica. Lo cuestionable es que no presentaban la bibliografía donde se sustentaba el guión del programa. De esta manera, aunque el libro y la lectura estuvieran presentes en la canción, en la escenografía y hasta personificados, no existía una congruencia. Esta misma situación se presenta a menudo desde distintos foros y esfuerzos de promo-ción lectora. Sirva como ejemplo la pues-ta en marcha del programa “Miér-coles de lectura”. Con todo el proto-colo y parafernalia, se dio a conocer la convocatoria para la obtención de

Hace veintiséis años surgió el Festival Cultural Zacatecas: jazz, teatro, artes plásticas, cine, escritores de primer nivel invitados a presentar sus libros y una modesta feria del libro a la que el poeta José de Jesús Sampedro de-nominó: Fiesta: el lector, la lectura. En aquellos tiempos estaba al frente

una beca a los mejores lectores de primaria y secundaria. En ese marco (con minúscula), el profesor del mis-mo nombre (pero con mayúscula), realizó una apología de la lectura, lo mismo que cada uno de los que tomaron la palabra, ante más de un centenar de alumnos de los niveles aludidos. Una vez concluido el lan-zamiento de la convocatoria, todos y cada uno de los funcionarios em-prendieron la graciosa huída. El acto de lectura que se presentaba inmedia-tamente era lo de menos. Y mucho menos se podría esperar que alguno de ellos hiciera alu-sión a dos acontecimientos del mundo de los libros (celebrados también el 21 de marzo, junto con la entrada de la primavera y el natalicio de Benito Juá-rez): el Día Mundial de la Poesía y el natalicio de Pascuala Corona. El hecho, más allá de ser anecdótico, es reflejo de que la lectura se sigue promocionando

desde la no lectura. Es decir, quizá los funcionarios no requieran una forma-ción lectora sólida para ostentar los car-gos que les fueron asignados (sabemos cómo son estas cosas en nuestro país), pero la presencia de docentes que labo-ran en el Programa Nacional de Lectura en Zacatecas, haría suponer que al me-nos una mención se haría de tales acon-tecimientos en tal marco (con minúscu-la, otra vez). La promoción de la lectura, desde la no lectura es el preámbulo de un fracaso. Es la necedad de prohibir a los hijos que no fumen, con un cigarro en la boca. Es ser ese carnicero vegeta-riano que recomienda su producto a la clientela. En resumen, es una irrespon-sabilidad justificada en un buen propó-sito. Nadie es tan tonto como para no apoyar la lectura, pero tampoco, nadie debe ser tan tonto, como para pensar que la lectura, por sí misma, cambiará este país. Hasta la próxima.

de lo que entonces se conocía como Centro Cultural, el arquitecto Álvaro Ortiz Pesquera, quien tuvo la sensibi-lidad de incluir a los libreros en estas actividades. Zacatecas dejó de lado el silencio y las calles desiertas que ca-racterizaban la Semana Santa. Los li-breros nos organizamos y decidimos

invitar a colegas de libros usados espe-cializados en historia. En un principio nos instalamos en El Portal de Rosales, posteriormente en El Portal de las Flo-res, el cual a medida que se abrían más librerías, resultó insuficiente y se nos ofreció como sede la Alameda García de la Cadena -que resultó un espacio poco propicio-; posteriormente se nos instaló en el Jardín de Independencia, proporcionándonos la infraestruc-tura adecuada y hasta hace dos años organizábamos las presentaciones de libros intercalando autores locales con escritores como Enrique Serna, Paco Ignacio Taibo II, Sara Sefchovich, René Avilés Fabila, Francesca Gargallo, El-mer Mendoza, Elena Poniatowska, José Agustín, Guadalupe Loaeza, Juan Villoro, Alain Derbez, Christopher Domínguez, Evodio Escalante... Una de la presentaciones más exitosas y placenteras que recuerdo fue la del libro El cine nuevo del nuevo siglo de Francisco Sánchez a la cual se invitó al actor Odiseo Bichir y al cineasta Juan Antonio de la Riva a conversar sobre esta publicación: anécdotas, comenta-rios y un público participativo convir-tieron dos horas en un parpadeo. El año pasado por primera vez en veinticinco años la Asociación de Libreros de Zacatecas no fue con-vocada a formar parte del Festival Cultural y supusimos que las nuevas autoridades desconocían nuestra par-ticipación histórica y activa. Perogru-

llados insistimos hasta que fuimos recibidos por el actual director y éste accedió a incluirnos en el festival. La sede fue la Plaza Bicentenario donde aparte de la Feria del Libro se envió una serie de espectáculos musicales de tipo norteño con un volumen en-sordecedor que ahuyentaba hasta a los expositores. Este año, autoridades muni-cipales nos acogieron generosamente en el único sitio accesible y libre: la calle Ventura Salazar y aunque no aparece-mos en los programas del Festival Cul-tural Zacatecas, finalmente el Instituto accedió a proporcionarnos los toldos; así que estimado lector, ahí estamos los libreros zacatecanos y nuestros invita-dos ofertando la felicidad que produce la lectura de un libro. Poesía, novela, cuento, ensayo, teatro, bestsellers, li-bros difíciles de conseguir están ahí; en una de ésas hasta tiene la suerte de toparse con El cuarteto de Alejandría, de Lawrence Durell, o ¿por qué no? El segundo sexo, de Simone de Beauvoir y quizás un libro de poemas de Gregory Corso o Adrian Henry, todo puede su-ceder en esa calle en la que por ahora, los olores a pescado y fritura se mez-clan y caminan de la mano con los li-bros de Herodoto, Nietzsche, Cortázar y un largo etcétera. Los lectores son una élite, pero una élite a la cual todo el mundo puede pertenecer.

Alberto Manguel

Feria del libro: Fiesta, el lector, la lecturaUn libro aunque esté en el comercio trasciende el comercio.

Carlos Fuentes

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LA GUALDRA NO. 45

100 Años Michelangelo AntonioniMichelangelo Antonioni (Ferrara, 1912 - Roma, 2007). Director de cine italiano. Unos planos largos y espaciosos van si-guiendo a sus personajes hasta que su esencia se revela a la mirada. A través de una inmovilidad calmosa, las tomas transmiten la despótica presión que el tiempo ejerce sobre las emociones del ser humano. Así puede resumirse el cine de Antonioni. En 1960 cosechó su primer éxito internacional, La aven-tura, que supuso la culminación de la madurez tanto de su estética irrepetible como de sus temas y estilo de cámara. El tema dominante de La aventura -y de las otras dos películas que componen la llamada trilogía de Antonioni, La no-che y El eclipse-, así como de la poste-rior El desierto rojo (1964), se centra en la esterilidad emocional del hombre mo-derno, en su inútil intento de afi rmarse en un mundo tecnológico. Es uno de los artistas del cine de posguerra dotados de más talento para la creación. Nacido en el seno de una fa-milia de clase media, cursó estudios de Filosofía y Letras, Economía y Comer-cio en el Instituto Técnico de Bolonia. Se dedicó inmediatamente al periodis-mo en calidad de crítico cinematográ-fi co en las páginas del diario Il Corriere Padano. Marchó a Roma a fi nales de los años treinta y continuó su labor ci-nematográfi ca en la revista Cinema.

Domingo 8, 12:00 hrs.CRÓNICA DE UN AMOR, Dir. Miche-langelo Antonioni.Italia/ 1950/ 100 min.

Lunes 9, 12:00 hrs.LA AVENTURA, Dir. MichelangeloAntonioniItalia/ 1960/ 145 min.

Martes 10, 12:00 hrs.LA NOCHE, Dir. Michelangelo AntonioniItalia/ 1961/ 122 min.

Miércoles 11, 12:00 hrs.BLOW-UP (DESEO DE UNA MAÑANA DE VERANO), Dir. Michelangelo AntonioniReino Unido/ 1966/ 108 min.

Jueves 12, 12:00 hrs.ZABRISKIE POINT, Dir. Michelangelo An-tonioni EUA/ 1970/ 110 min.

Viernes 13, 12:00 hrs.MÁS ALLÁ DE LAS NUBES,Dir. Michelangelo Antonioni, Win WendersItalia/ 1995/ 113 min.

S�bado 14, 12:00 hrs.EROS, Dir. Michelangelo Antonioni, Wong Kar-Wai, Steven SoderberghHong Kong/ 2004/ 104 min.

FUNCIONES INFANTILESMiércoles 4, Viernes 6 y Sábado 7,12:00 hrs. Cortometrajes para niños.Varios niños directores

SEMANA CINE ALEMÁNCuota de recuperación: $20.00

Lunes 9, 18:00 hrs. y 20:00 hrs.EL MAL DEL SUEÑO, Dir. Ulrich KöhlerAlemania-Francia-Países Bajos/ 2010/ 91 min.

Martes 10, 18:00 hrs. y 20:00 hrs.BAJO LA CIUDAD, Dir. Christoph Ho-chhäuslerAlemania-Francia/ 2010/ 105 min.

Miércoles 11, 18:00 hrs. y 20:00 hrs.TRES, Dir. Tom TykwerAlemania/ 2010/ 119 min.

Jueves 12, 18:00 hrs. y 20:30 hrs.EL LISTÓN BLANCO, Dir. Michael HanekeAlemania -Austria - Francia - Italia /2009/ 145 min. Viernes 13, 18:00 hrs. y 21:00 hrs.LA BANDA BAADER MEINHOF, Dir. Uli Edel. Alemania-Francia–República Checa/ 2008/ 150 min. Sábado 14, 18:00 hrs. y 20:00 hrs.SAL Y PIMIENTA, Dir. Fatih Akin. Alemania/ 2009/ 99 min.

Domingo 15, 18:00 hrs. y 20:00 hrs. CISNES, Dir. Hugo Vieira da SilvaAlemania/ 2011/ 126 min.

ARTISTA INVITADO: Olivier A. Dubois (Canadá)Realizador Canadiense. Su propuesta se ha desarrollado desde hace 10 años en el ámbito del video documental, el corto-metraje y el video-arte. Sus obras han sido premiadas en el festival SPASM y en el Fes-tival Vidéastes Recherchés, en Canadá. Ha realizado proyectos en diferentes regiones de Canadá, Europa, África y desde 2008 en México. Sus obras han sido exhibidas en diferentes países y ha participado también como jurado en diferentes festivales. Coreografía e interpretación. Georgina Alcántara

Lic. en coreografía por el INBA y Lic. en Psicología por la UNAM. Realizó estudios de doctorado en España y de especialización en Francia. Directora y coreógrafa del grupo Animus Danza Contemporánea de 1998 a la fecha. Ha participado en diferentes proyectos artísticos inter-disciplinarios e internacionales en México, Panamá, España, Francia y Canadá. Ha sido investigadora del INBA y ha impartido conferencias y publicado diversos textos en el ám-bito de la semiótica y la psicología.

Jueves 12, 18:00 hrs.FUNCIÓN ESPECIAL.Cortometrajes.•HIS, Dir. Olivier A Dubois•COMO UN PEQUE�O TESORO, Dir. Oli-vier A. Dubois•LOBSTER’S GAME (EL JUEGO DE LA LANGOSTA), Dir. Olivier A. Dubois•NAVIRES MULTICOLORES (NA-VES MULTICOLORES), Dir. Olivier A. Dubois y Georgina Alcántara•TRAMPA DORADA, Dir. Olivier A Dubois

FUNCIÓN DE TERRORFunción especial Celebrando los 100 años de Universal Pictures

Viernes 13, 18:00 hrs.TIBURÓN, Dir. Steven Spielberg

Programación de Cine / 26 Festival Cultural Zacatecas 2012Lugar: Cineteca Zacatecas

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9 de ABRIL DE 2012

Por Armando Haro*

LOSING COUNT

Insertos en el horizonte de la pérdi-da de inocencia del hombre de nues-tro tiempo, el arte se ha manifestado como el contra-movimiento por exce-lencia de dicho horizonte. Inocencia perdida de la humanidad por la masi-ficación de los individuos al perderse toda espiritualidad que les brinde re-fugio, y por el dominio irracional de la naturaleza a la que se le pasa factura del confort que exige el capitalismo. Frente a ello, la actividad cívica subli-me del arte ha puesto en evidencia la mascarada anodina de los hombres que, buscando la felicidad, han perdi-do su espíritu al preferir la apariencia a la verdad, ocultando la podredum-bre de su corazón con maquillajes y estéticas, modas y estilos, cuando lo que repercute en el mundo es una in-sondable soledad de individuos que ya no se comunican. Así sucedió con el arte de posguerra, cuyos cruentos trazos y figuraciones expresionistas llevaron la anti-estética de la vanguardia a los hornos crematorios de los campos de concentración, a la fosa común de los holocaustos vigesimonónicos. Ha-ciendo evidente también, mediante la ironía, el elevado costo que la produc-ción en serie de los artículos cotidia-nos tiene para la tierra, pues no hay nada más opaco para la naturaleza que el lustre que el detergente Brillo brinda para nuestros hogares. De esta manera la búsqueda de la felicidad no es sino la ruta directa que la humani-dad se ha trazado hacia su más pro-fundo desasosiego, que ni la naturale-za ni los dioses podrán ya sufragar. Y así, ingenuamente pensa-mos que esto ha ocurrido ya, en otros sitios, en un tiempo ya pasado, pero no estamos conscientes que habita-mos un sitio único que es la Tierra y todo nuestro presente es producto de nuestros actos pasados como única Humanidad. Ahora nos ha tocado a nosotros la repercusión de estos he-chos, los cuales, lo queramos o no, tienen que ver con la para-militariza-ción del Estado para asegurar la paz. Inseguridad creciente producto de la necesidad irrefrenable de un pueblo empobrecido por tener un poder ad-quisitivo de primer mundo, pero que, la carencia de valores y la falta de cul-

* La exposición se encuentra en exhibición actualmente en El Estudio, en la Plazuela de Santo Domingo, frente al Museo Pedro Coronel.

tura y educación, llevan a considerar el camino fácil del hurto material y espiritual de sus congéneres. Frente a esta realidad inme-diata e instantánea, ahora, el deber de nuestro arte es cumplir con aquella con-signa de contra-movimiento que la ex-periencia del mundo nos exige y la cual el arte del siglo pasado ha instaurado como sino de nuestro haber actual. De esta manera Perdiendo la Cuenta: Arte por la paz en México no es una mera reacción nihilista frente al avance de la pérdida de valores y la creciente e in-sondable depredación de la tierra, sino que se plantea como el patente contra-movimiento a estos ineludibles aconte-cimientos. Y lo hace, no sólo de manera marginal y solitaria, sino desde el centro mismo de los hechos y de manera global y colectiva, ya que, respecto a la pérdi-da de las garantías individuales y de la aparente paz que se había vivido, todos, absolutamente todos, tenemos algo que decir, y el arte es el medio ideal para ello. Porque, si bien el arte algunas veces oculta la verdad mediante la ilusión y la apariencia, otras, como lo es el presente caso, el arte resulta más verdadero que la verdad. De esta manera esta exposi-ción de expresiones de crítica e incon-formidad, de metáfora y realidad, de hechos de los cuales hemos perdido ya la cuenta, se caracteriza también por la participación de artistas de múltiples nacionalidades y regiones, de idiosin-crasias y estilos de la que, a su vez, se irá perdiendo la cuenta. Seguramente tú, espectador, tendrás que aportar con tu mirada una respuesta a las in-cesantes e incansables preguntas que todas estas imágenes plantean: ¿Cuán-tos seres queridos más tendremos que perder? ¿Cuántas mentiras más ten-dremos que soportar? ¿Cuánto tiempo más tendremos que vivir esta paranoi-ca inseguridad para que vuelvan con bien, para que se nos hable con la ver-dad, para que volvamos a disfrutar de la paz? Y más aún, ¿qué participación inconsciente tenemos en todo ello? Por el momento sólo nos queda emitir este grito que esperamos se transforme en canto, un canto de esperanza, un canto de paz que nos haga encontrarnos nue-vamente como hermanos.

* www.linguadegatopardo.blogspot.com

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LA GUALDRA NO. 45 / 9 de ABRIL de 2012

Por Mauricio Flores*

Definió bien Jessie Conrad: una esposa no debe estar absorta con su marido y menos aún el marido debe estar absorta con la esposa. “Compañera”, diríamos ahora, del gran escritor polaco durante más de tres décadas, Jessie supo aguantar en el tiempo las experiencias acumuladas al lado del autor de El corazón de las tinieblas. Cerca-na su muerte, se volcó a la escritura de una de las biografías más sentidas de este personaje fundamental de la literatura universal, y quien en múltiples evocaciones se nos muestra ahora en su verdadera humanidad, revestida de lucidez y sensibilidad. Digamos que Jessie, tras once años de viudez, hizo a un lado las oscuridades del olvido para mostrarnos el corazón del Capitán Joseph, y con éste, el de ella misma.

Guardiana de su memoria

El orgullo que siento es triple. En primer lugar, la atención al artista de las palabras, una labor constante e incansable. En segundo lugar, la atención a su bienestar material, su hogar y sus hijos. Durante la pri-mera mitad de su vida como escritor, también fui su secretaria, con lo que cada uno de sus libros era como otro hijo. Y en último lugar, tengo el privilegio y la enorme satisfacción de ser considerada guardiana de su memoria, y de la herencia de la fama que heredan sus hijos, y a través de ellos sus propios hijos.

Jessie Conrad

No es nada más el mundo de Joseph Conrad (1857-1924). Es también el de su esposa, Jessie, quien lo acompañara en las buenas y las malas durante trein-ta años. Nunca más acertada aquella frase de por tierra y por mar. Joseph Conrad y su mundo, recuperado del olvido por la editorial Sexto Piso, y en buena traducción de Gabriel Bustelo, da cuenta de la cotidianidad del gran escritor polaco, autor de relatos céle-bres ya insertos en la literatura univer-sal de todos los tiempos, pero también, lo dice la autora, de “un genio con mu-chos caprichos”. Esta biografía fue escrita por la “señora de Conrad”, Jessie (1873-1936) un año antes de su muerte. En ella se pormenoriza cada una de las etapas que experimentó la pareja, des-de un complicado noviazgo de seis semanas hasta el tránsito por la viu-dez. Sin quedar fuera, por supuesto, el nacimiento de dos hijos y hasta de los nietos. Un periodo largo en el que, ad-vierte la autora, el Capitán Conrad “ya había vivido la mitad de su vida y no tenía la menor idea de cómo se cuida-ba a una esposa”. Tras el matrimonio, Jessie descubrió la maravilla de los en-cantos y talentos del escritor. “Era un hombre de lo más exi-gente, como amante y como marido -es-cribe Jessie-. Yo siempre le decía que era como una ostra, pues no veía nada que no quisiera ver. Tal vez su maravilloso encanto se debiera a eso precisamente, unido a su talento para plantear símiles tan útiles como interesantes”. Siempre al lado del gran es-critor, lo mismo en viajes marítimos que en trenes, o en sus estancias lon-dinenses, francesas o polacas, Jessie atestiguó cómo se iban sucediendo sus facturas literarias, y con ellas, su grado de aceptación. El rigor de

Conrad al momento de ponerse a es-cribir y hasta sus no pocos malesta-res físicos y emocionales. “Fiel a sus costumbres, tuvo un achaque de gota y mal humor…”, lamenta una esposa dieciséis años menor, “Siempre la gota, la dolen-cia más disparatada del mundo, o en todo caso la que más hace disparatar a quien la padece”. Ante lo que ella adoptaba siempre, lo repite a lo largo de sus memorias, “una actitud filosó-fica. Conforme pasaba el tiempo, cada vez me hacía más filósofa”. Vendrían después los hijos, la Gran Guerra, el reconocimiento a la obra literaria, la acumulación de los achaques. Convaleciente de una operación, Jessie supo de la muerte de su esposo. El gran escritor que “había sido un marido, pero también un hijo”. El hombre que, al mismo tiempo que le reclamó “atención e indulgencia”, le suscitó el gran orgullo por el éxito de su obra. “Inspiraba admiración el vo-lumen de trabajo que habría logrado hacer pese a unas dificultades únicas. ¿Quién podría hablar de esas dificulta-des con más ternura y comprensión que su esposa, ahora su viuda?”.

Vivir en armoníaTransparente ante una sociedad que no se permitía del todo que una mujer hablara de su marido, Jessie escribió: “Durante el tiempo que vi-vimos juntos, aprendí a valorar a Jo-seph Conrad, por encima de todo, su carácter verdaderamente adorable, mientras admiraba su genialidad y procuraba tener paciencia con su exceso de sensibilidad. Si yo hubiera sido incapaz de entender su natura-leza exótica, tal vez nunca hubiéramos podido vivir juntos con tanta armonía”.

Empeño, el de biografiar a una persona tan cercana, que no resul-to sencillo. “¡No!”, exclama Jessie casi al final del libro. “Ésta no ha sido una ta-rea leve, no me he permitido caer en la autocompasión, la pena ni el olvido. En muchas ocasiones he tenido que dejar

Jessie Conrad, Joseph Conrad y su mundo, Sexto Piso, México, 2012, 434 pp.* [email protected]

de escribir, pues la emoción me ha im-pedido continuar. En todo momento, Jo-seph Conrad ha sido una presencia tan nítida que con cada palabra que escri-bía recordaba su gesto, una postura, un tono de voz. Y al final le recuerdo con la misma claridad que hace diez años, o incluso hace veinte y treinta años”.