La Iglesia de la Arquidiócesis de Medellín que se proyecta

ISSN: 2248-8162

Diciembre de 2012 / No. 13

SER SACERDOTELa Arquidiócesis de Medellín recibe con alegría estos 11 nuevos sacerdotes que han recibido su ordenación presbiteral el pasado 24 de noviembre en la Catedral Metropolitana de Medellín por imposición de manos de nuestro arzobispo. Es una bendición de Dios poder contar con estos ministros de Dios para que anuncien el Evangelio en nuestra Iglesia Particular.

La Arquidiócesis cuenta con veintisiete colegios, una fundación de obra social que agrupa otras cinco instituciones que prestan servicio educativo a los más pobres, tres universidades y un programa de asisten-cia social a niños huérfanos y sin familia. Son más de cuarenta mil niños y jóvenes que pasan por nuestras aulas cada día, más de dos mil empleados entre docentes, personal administrativo, de apoyo y de servicios generales. En conjunto, la obra educativa Arquidiocesana es una experiencia única en la Iglesia universal. P.3

BODAS DE PLATASACERDOTALES

BUEN ADVIENTO Y FELIZ NAVIDAD P.3

“Caminar es avanzar, crecer, lograr lo definitivo. Caminar a la luz del Señor es responder a la vocación que hemos recibido, realizar la misión que se nos ha confiado, animar el paso de los que nos acompañan por la vida, promover el desarrollo integral de la sociedad, impulsar el proceso con el que Dios dirige la historia”.

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LA EDUCACIÓN ARQUIDIOCESANA,HUMANA, INCLUYENTE Y DEALTA CALIDAD.

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El 4 de diciembre, en la Parroquia Nuestra Señora de Belén, sede de la Vicaria Episcopal del Orien-te, la Arquidiócesis de Medellín, presidida por el Arzobispo y en compañía de los Obispos Auxilia-res, algunos Obispos eméritos, más de cien sacerdotes y un gran número de fieles, celebró la Eucaristía en gratitud al Señor por los 25 años de sacerdocio del Obispo Auxiliar, mons. Hugo Torres Marín. P.7

Pesebre: Parroquia Nuestra Señora de Belén

Monseñor Ricardo Tobón RestrepoArzobispo de Medellín

CONSEJO DE REDACCIÓN: + Monseñor Ricardo Tobón (Arzobispo de Medellín), Pbro. Juan Pablo Cardona (Director), Pbro. Germán Bustamante (Redacción), Pbro. Luis Fernando Arroyave, Pbro. Elías Lopera, Pbro. Alexander Pareja, Henry Horacio Cháves y Mauricio Agudelo.DISEÑO: Departamento de diseño, Arquidiócesis de Medellín.

Año 2 / No. 13

“CAMINEMOSHa llegado, de nuevo, el tiempo litúrgico de Adviento. En nuestra sociedad, prácti-camente queda desaparecido bajo el ruido de los juegos pirotécnicos, el pasa-jero fulgor de las luces de colores, el afán del entretenimiento vacío y el sopor de una vida superficial y frívola. Es bueno que en este tiempo, al menos los católi-cos, escuchemos la invitación que nos llega a través del profeta Isaías (2,5): “Ven, caminemos a la luz del Señor”. Comencemos, entonces, por preguntar-nos: ¿en nuestra vida personal, familiar y social, realmente caminamos o estamos estancados o, tal vez, retrocedemos? Se nos han ido las fuerzas y el tiempo con frecuencia en conseguir dinero y finalmente no estamos conten-tos con lo que tenemos, en pelear y es más lo que hemos perdido que lo que hemos ganado, en procurarnos placer y comodidad y después de todo nos sentimos descontentos y rotos por dentro. Si caminamos, ¿a qué luz lo hacemos? ¿A la luz de nuestras pasio-

Recientemente ha sido radicado en el Senado de la República el proyecto de ley 70/2012, que pretende reglamentar en Colombia la práctica de la eutanasia activa y del suicidio asistido. Este proyecto de ley se presenta como una “necesaria regulación” de la sentencia 239 de 1997 de la Corte Constitucional que despenalizó la eutanasia en un caso específico, cuando el enfermo terminal solicita reiteradamente, con plena libertad y consciencia, a su médico tratante, la terminación anticipada de su vida con el fin de evitar el sufrimiento. Sin embargo, el texto que ahora se propone establece nuevas especies y procedimien-tos que legalizan ampliamente la práctica del homicidio eutanásico en el país. En los últimos años hemos visto avanzar un plan, a nivel mundial, para legalizar el aborto, para legitimar la eutanasia y para propiciar la instrumen-talización de la vida embrionaria. Detrás de este plan hay intereses ideológicos, políticos y económicos. Para imponerlo se emplean con frecuencia engaños y verdades parcia-

nes, a la luz de las presiones mediáticas y sociales, a la luz de una sociedad de consumo, a la luz de la rutina, la indife-rencia y el sinsentido? Es hora de caminar a la luz del Señor. Caminar es avanzar, crecer, lograr lo definitivo. Caminar a la luz del Señor es responder a la vocación que hemos recibido, realizar la misión que se nos ha confiado, animar el paso de los que nos acompañan por la vida, promover el desarrollo integral de la sociedad, impul-sar el proceso con el que Dios dirige la historia. De un modo concreto, propongo que en este Adviento caminemos todos en cinco senderos indispensables para nuestra vida personal y para el bienestar

de la sociedad:

Crecer en la fe: no se puede decir que se camina de verdad sin la segu-ridad que da Dios. Dios no es nuestro adversario, sino la vida misma que vale la pena vivir. Sólo desde Dios todo se esclarece y se hace posible.

Por eso es necesario convertirse, dejar que Dios nos sane y llene de alegría nuestro corazón. Adviento es un tiempo de profunda renovación interior.Construir la reconciliación. No podemos seguir siendo la región más violenta de Colombia. Debemos superar cada día, en situaciones concretas, la agresión y el odio con la fraternidad. Si la paz no empieza en nuestro corazón y en nuestra casa, no empieza en ninguna parte. El adviento nos ofrece la ocasión de un encuentro personal e íntimo con Dios que nos lleve a vivir el amor, es decir, a pasar de la muerte a la vida. Impulsar la justicia y la solidaridad. No se entiende cómo podemos compaginar nuestra fe cristiana con el egoísmo y la inequidad social en que vivimos. No podemos permitir que este tiempo esté marcado por excesos en la comida, por abuso del licor, por despilfarro en regalos para

algunos y en hambre y sufrimiento para otros. Debemos despertar a lo esencial y actuar con coherencia. Este es un tiempo para compartir.Abrir espacio a la esperanza. El adviento nos hace mirar hacia el verdadero futuro. No podemos estar dormidos en la superficialidad. No podemos contentarnos con una tranquila mediocridad. Es preciso trabajar, como dice San Pablo, por “los bienes de arriba”. Nuestro deber es vigilar para reconocer los signos del Señor que llega. Esta actitud vence toda angustia y todo temor; nos llena de vigor y de gozo en el camino.Seguir el ejemplo de María. Ella es la persona que mejor ha vivido el Adviento. Ella nos enseña a acoger la venida íntima de Dios a nuestra vida. Ella realizó con fidelidad todo lo que Dios le pedía al servicio de los demás. Vivamos este tiempo con los sentimientos que ella expresó en su Magníficat y que es un verdadero canto a la fe, a la solidaridad, a la alegría y a la esperanza.

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Arzobispo de Medellín

+Ricardo Tobón Restrepo

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A LA LUZ DEL SEÑOR”

EUTANASIA ACTIVA Y SUICIDIO ASISTIDO

A nuestros lectoresuna feliz navidad

y un venturosoaño nuevo

les, con apariencia de cientificidad, que se difunden a través de diversos medios. Con estas confusiones y mani-pulaciones del lenguaje se busca ganar a legisladores y jueces, desconcertar al personal sanitario y polarizar la opinión pública al servicio de la “cultu-ra” de la muerte. Es así como para muchos resulta difícil discriminar con claridad valora-ciones jurídicas, conductas éticas y actuaciones correctas, sobre todo, en situaciones límite de sufrimiento que suscitan una gran sensibilidad y que tienen amplia difusión mediática. Se puede llegar, por ejemplo, a no distin-guir la conducta eutanásica del acto legítimo de limitación del esfuerzo terapéutico. Es pues de gran importan-cia tener ideas claras porque, según el significado que se le dé al término eutanasia, su práctica puede aparecer ante la gente como un crimen horrendo o como un acto de humanidad y solida-ridad. Contribuye a que se acepte la eutanasia la mentalidad individualista

que se impone con frecuencia, la visión hedonista que quiere equiparar vida digna con vida sin sufrimiento, la equivo-cada comprensión de la libertad como capacidad de decidir cualquier cosa que el individuo juzgue necesaria o conve-niente. Desde estos parámetros se concluye que “mi vida es mía y nadie puede decirme lo que tengo que hacer con ella” o “yo decido cuándo mi vida no merece ya la pena” o “a nadie se le puede obligar a vivir una vida sin calidad”. Por eso, los católicos debe-mos presentar el sentido y el valor de la vida y poner en evidencia los peligros que la legalización de la eutanasia puede traer para la sociedad. Una sociedad que acepta la termi-nación activa de la vida en razón de la precariedad de la salud niega la digni-dad y los derechos de las personas enfermas o disminuidas violando el principio de igualdad que sustenta la convivencia ciudadana de un Estado. De otra parte, establece el permiso para asesinar. Igualmente, crea una presión moral institucionalizada sobre los ancia-

nos y quienes se puedan sentir una carga para sus familiares o para la comu-nidad. Así mismo, puede generar un clima de desconfianza y de temor frente a la propia familia y a las instituciones sanitarias que estarían en la posibilidad de matar, máxime cuando son frecuentes las crisis económicas en el sector de la salud. El momento que vivimos, nos llama a propiciar una seria reflexión en las universidades católicas, en los encuen-tros sacerdotales, en los seminarios y en los grupos apostólicos sobre la eutanasia y sus implicaciones éticas, jurídicas y médicas, de tal modo que podamos aportar al debate público, a los políticos que deben tomar graves decisiones, al personal vinculado a los centros sanitarios y a tantas personas que necesitan orientación, no sólo las consideraciones que se derivan de nuestra fe, sino también motivaciones válidas y convincentes en el campo humano y racional para hacer una opción clara por la defensa de la vida y la dignidad de la persona humana.

¡Se acerca la NAVIDAD! Este acon-tecimiento nos llena de gozo y de esperanza. Se renueva el amor y la ternura en nuestros trabajos y familias al contemplar el misterio de DIOS que hace cercano al hombre la persona de JESÚS, que viene a revelarnos el amor y la ternura de nuestro Padre DIOS. Lo que nos evoca la NAVIDAD es precisamente un aire de familia, que muy pocas veces logramos hacer realidad. La familia es la que nos hace ser hombres y mujeres de bien, porque en ella se aprenden las lecciones más fundamentales: el respeto por la vida del otro, el perdón, la fidelidad. Alrededor de la familia el ser humano aprende a ser precisamente eso: humano. Cuando hablamos de humano no podemos pensar que es diferente de Dios, al contrario, cuanto más se acerca el hombre a Dios más humano se hace, porque lo más humano es lo que Dios ha dejado grabado como una huella imborrable en el corazón de cada uno. Dios mismo se hace hombre en medio de una familia, para que comprendamos lo valiosa que es, tanto que hasta Dios mismo la nece-sitó para hacerse presente en medio de la humanidad. Necesitó de un calor de hogar, necesitó de una madre, de un Padre. La Navidad nos invita a compartir en familia nuestros sentimientos de gozo y unidad bajo el amor del Padre común que nos reúne en el hogar en torno a Jesús. Llevemos ese espíritu a todos los ambientes que frecuentamos, a nuestros amigos y compañeros, al mundo que nos rodea a través de nuestras vidas llenas de esperanza, proclamando con sencillez y profun-da alegría que Cristo ha nacido en nosotros. La Navidad es celebrar la realidad más profunda y preciosa que al hombre le pueda acontecer: Dios dejó de ser un Dios en las nubes y pasó a ser, DIOS CON NOSOTROS. El verdadero espíritu de la Navidad es el de una gran alegría y regocijo, porque ha nacido el Salvador, porque Dios se ha hecho hombre, se ha hecho partí-cipe de nuestra naturaleza; ha compartido con nosotros alegrías, penas y sufrimientos, se hizo semejante en todo a nosotros, menos en el pecado, como expre-sa San Pablo: "El Cordero libre de pecados cargó con todos los

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P. JuanPabloCardona

pecados de nosotros para ofrecér-selos al Padre Eterno como único holocausto y hostia pura de sacri-ficio agradable a Dios". La auténtica Navidad es compar-tir la alegría de tener a Dios con nosotros; reflexionar sobre lo mucho que el Padre Dios nos ama. "Tanto amó Dios al mundo que nos envía a su Hijo" (Jn.3, 16) para que sea hermano nuestro, para que nos enseñe el mandamiento del amor: "Ámense los unos a los otros como Yo los he amado" (Jn.15, 17) ¡Qué alegría experimentar de nuevo en esta NAVIDAD que Dios nos ama infinitamente y nos invita a hacer de nuestra vida una ofrenda de amor a Dios a nuestros herma-nos, manifestado a través de su ENCARNACIÓN EN LAS ENTRA-ÑAS DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA! Jesús, hecho niño en un pesebre, comienza a enseñarnos a confiar y aceptar la voluntad del Padre que le ha enviado. Nos enseña a ser pobres y humildes, pues la verdade-ra grandeza está en el alma y en nuestras buenas obras. En su nacimiento se identifica con los pobres de la tierra, con los persegui-dos, con los que sufren discrimina-ción y no tienen ni tendrán, como Él no tuvo un lugar adecuado donde nacer. Si nos encerramos en noso-tros mismos nunca podremos compartir. Cristo nace en nuestros corazones cuando destruimos las barreras que nos separan del hermano, en la familia, en la comunidad. Convi-vir en comunidad nos hace rechazar al "ser humano viejo" que es egoísta, esclavizado por sus propias necesidades, y transformarnos en el ser humano nuevo que se caracteri-za por estar siempre preocupado por los demás y que vive con el corazón agradecido (Col. 3, 12-17) Es el momento de aprender a sonreír para hacer el mundo más amable, es el momento de descubrir la ternura del Niño de Belén y apropiárnosla, para contribuir a desarrollar la civilización del amor y de la ternura. No pode-mos dejar de hacernos la pregunta

¿estamos dispuestos a nacer de nuevo, a ser hombres nuevos? Navidad es tiempo de perdón, es la proclamación de la gozosa noticia de que Dios nos ama y quiere que estemos todos unidos en su amor misericordioso, perdonándonos y pidiéndonos que perdonemos a los demás, incluso las ofensas más graves. Sólo el amor de Dios, capaz de hermanar a los hombres de toda raza y cultura podrá hacer que desa-parezcan las dolorosas divisiones, los contrastes ideológicos, las desigualdades económicas y los violentos atropellos que oprimen todavía a la humanidad. Quien perdona abre el corazón a los demás y se hace capaz de amar, de comprender al hermano y de entrar en sintonía con él. La práctica del perdón según el ejemplo de Jesús, desafía y abre los corazones, cura las heridas del pecado y de la división, y crea una verdadera comu-nión. Sin la búsqueda cotidiana del rostro de Cristo, el Hijo de Dios, en su Palabra, en la oración, en la Eucaristía celebrada y adora-da, en los hermanos con los cuales Él se identifica, se deja espa-cio a la mediocri-

dad, al aburguesamiento progresivo, al prevalecer de proyectos persona-les sobre aquellos comunitarios. Si queremos encontrar a Dios tendre-mos que buscarlo donde está. Él se ha hecho ser humano, se ha metido dentro de cada uno de nosotros. Está presente en cada persona que nos rodea: en los más necesitados, en nuestros familiares, en nuestros vecinos... por eso es imposible prepararnos para la Navidad olvidán-donos de todos ellos y de las situa-ciones que forman parte de nuestra vida cotidiana.

En el niño “Emmanuel”,

de la Navidad.recuperamos el espirtu

Para todos nuestros lectores de MISIÓN, les deseo una navidad en un ambiente de oración, alegría, unidad familiar en torno al pesebre. Escu-chemos con devoción la Palabra de Dios, compar-tamos la experiencia de la encarnación, y sigamos creando una nueva socie-dad basada en la Justicia, la reconciliación, la solida-ridad, el amor y la paz.

“Un niño nos ha nacido, un hijo se nos ha dado”,

(Is. 9, 5).

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Está claro que la vida es un milagro diario por celebrar, pero cuando se trata de la vida de un medio que como MISIÓN requiere de tantas voluntades y alcanza un año de haber visto la luz, es obligatorio celebrar con ustedes, los lectores. Los asiduos y disciplinados, pero también los ocasionales y los que apenas nos descubren. Una celebración que debe superar la vanidad de leernos en letras de molde, como se decía, para involucrar una reflexión sobre su signifi-cado y alcance. La celebración del aniversario de un medio es en sí misma la congratulación con la palabra. Más aún cuando habla-mos de un medio que, como éste, se ha propuesto dar testimonio, ser la voz, ofrecer guías y motivar reflexiones. Un esfuerzo que parte de la Arquidiócesis

con todo el impulso del señor Arzobispo quien le ha dedicado tiempo y empeño para darle altura, en procura de que llegue a los ciudadanos del común. Es decir, que supere la expectativa de ser un medio “oficial de la curia” para convertirse en un espacio útil para quien lo lea, tratando de que los lectores sean sobre todo laicos, a quienes les llegue la palabra desde otros puntos de vista y en otros tonos. Un propósito que implica también un trabajo administrativo y de financiación que aún tiene la ruta por mejorar. Como tiene por mejorar la promoción, la distribución y hasta el sentido de compromiso en algunos sectores. Que seguramente tiene por mejorar en conte-nido, ajustar secciones y ofrecer alterna-tivas. Pero insisto, un esfuerzo que vale

la pena y se viene consolidando sin renunciar a los sueños. En la evaluación del año, se habló por ejemplo, de aumentar el tiraje y disminuir la periodici-dad, de buscar nuevos aliados e impul-sar mejores oportunidades. En todo caso, sin ser demasiado confidente, hay que decir que la evaluación fue detalla-da, nutrida y positiva, pero al mismo tiempo realista e ilusionada. También hay que reiterar que lo por celebrar es la voz, el espacio para la palabra. Esa que con frecuencia la frené-tica realidad de la guerra no deja escuchar. La misma que suele perderse en el laberinto de hechos que ocupan los medios: los fallos que creemos fallidos, los vericuetos de la política interna y externa, las opiniones sobre las opinio-nes, las decisiones de quienes tienen

potestad pero no siempre la sapiencia. La palabra que se abre lugar en busca de quien quiere oír, para llevar ideas a quien está dispuesto a asumir el reto de pensar. Noticias y pedagogía sobre sínodos, cónclaves y palabras de fe; pero también reflexiones sobre tolerancia, respeto, convivencia y ejercicio de la vida con y para los otros. Valoración de la familia y de la compañía. Y sea oportuno también hacer notar a los lectores que así como se trata de un medio que no está dirigido al clero sino a los ciudadanos, también contempla un abanico de visiones, que distan mucho de ser cátedra cerrada y se acercan más bien a “conversatorio” en el que hace falta la voz de quienes leen, su retroalimentación. Porque el círculo de la palabra que celebramos sólo se cierra con lo que sea capaz de generar en quien la escucha o quien la lee.

La Palabra

santodelmes@arqmedellin.com

Hace algunos años leí un libro titulado “El santo que libertó una raza” de Ángel Valtierra y ese santo es San Pedro Claver quien es todo un paradigma y que tiene mucho que decirle a nuestra sociedad actual. Su entrega incansable, la vivencia profunda de los consejos evangélicos, su celo pastoral y la entrega sin límites, ni condiciones hacen de este hombre un modelo en cuanto a la viven-cia profunda en la defensa de los derechos humanos y en la promoción de la vida y de la paz. Este hombre de Dios nació en Verdún (España), en 1580. Se graduó de la Universidad de Barcelona y a los 19 años decide ser Jesuita e ingresó a Tarragona. Mientras estudiaba filosofía en Mallorca en 1605 se encontró con San Alonso Rodríguez, portero del colegio. Fue providencial. San Alonso recibió por inspiración de Dios conocimiento de la futura misión del joven Pedro y desde

entonces no paró de animarlo a ir a evan-gelizar lo territorios españoles en Améri-ca. Un punto central de la personalidad de San Pedro Claver, ha sido el espíritu eminentemente contemplativo de su acción apostólica, al igual que su tempe-ramento retraído y callado. El crucificado era el centro de su espiritualidad y de su heroísmo. Es importante reconocer su profunda vivencia espiritual, su piedad y buenas costumbres, recorrió a la perfec-ción los caminos de la ascética y de la mística, por lo cual se gano el calificativo de ser “una llama en la noche”. Toda su acción se desarrolla en Cartagena, ciudad situada en todo el trópico de la región Caribe de nuestro país, con una temperatura elevada. Por su posición geográfica eran comunes las enfermedades extraordinarias y desco-nocidas, las moscas y demás insectos, al igual que los grandes huracanes propi-ciaban grandes epidemias. Además de esto la tierra era un poco estéril. Pedro Claver fue un loco y un apasionado por la cruz, tenía en mente el deseo de sufrir y con su trabajo diario, duro y sin descanso, con la consagración de su vida, 40 años al servicio de los negros esclavos y la búsqueda del dolor corporal, la oración y la ausencia de comodidades, construyó su propia cruz. Unos informes suyos destacan varios rasgos de su vida: era poco prudente, de juicio regular y de grandes talentos, con una gran capacidad para el trabajo con negros, con ideales de santidad. Era un hombre de mucha tolerancia y de grandes dotes intelectua-les los cuales no los demostraba.

Toda esta semblanza del santo nos lleva a entender que su vida no fue nada fácil, que en la relativa calma y paz de su convento había también grandes tempestades que le ocasionaron grandes dolores en el alma. Este santo era media-no de cuerpo, tenía el rostro flaco, algo largo, la barba medianamente poblada entre negra y cana, los ojos grandes y melancólicos, la nariz afilada, de color trigueño y con las penitencias y los malos tratamientos del cuerpo estaba ya amari-llento. Poseía una fuerte herencia campesina lo que lo hizo hábil para el trabajo rudo y pesado. Este hombre vivió en plena austeri-dad y feliz pobreza, vivió en medio del desprendimiento y de la simplicidad, tenía un gran cuidado en cuanto a la moralidad social con los de abajo y con los de arriba, es decir con los más ricos y con los más pobres. Creía plenamente en la obediencia como el mejor camino para la santidad, por esta virtud desapa-recen de él las indecisiones y de ese modo ejerce su ministerio con una entre-ga profunda y de santidad decidida. La noticia de su muerte conmovió a todos los habitantes de Cartagena, los negros vinieron a despedirlo y a agrade-cerle tantas enseñanzas y su preocupa-ción continua. Para despedirlo le besa-ban la mano, doña Isabel de Urbina mando a preparar un ataúd en puro cedro, forrado en tela blanca y guarnecido con pasamanos de oro y cerraduras doradas. El gobierno se encargo de su entierro, no en el suelo como era

propio enterrar en la época sino en un lugar honorífico y representativo distinto del lugar en el que entierran a los demás. La gente pasaba objetos por encima de su cuerpo para venerarlos luego como reliquias. Pedro Claver quien nunca vivió en medio de los homenajes y los reconoci-mientos ahora los recibía y su fama de santidad se estaba extendiendo. El pobre entre los pobres, el esclavo entre los esclavos se había ganado la simpatía, el cariño y el afecto no solo de los negros y de los pobres, sino también de los blancos.

P. Alexander ParejaBotero

opinion@arqmedellin.comHenryHoracioChaves

Padre, en el momento de la oración de los fieles u oración universal de la comunidad, lo hace con la inten-ción de que se realice el plan de Dios, la liberación del ser humano, en todo sentido, haciendo que el Reino de Dios, sea una realidad desde ya. La oración que hacemos se caracteriza por su sentido comunita-rio, se pide por la comunidad, las familias, los grupos, la parroquia, la nación, etc.Al presentar sus intenciones, para que el Reino de Dios, se haga reali-dad a través de la verdad, la justicia y el amor, la comunidad se dispone a colaborar para que todo se realice,

conforme a la voluntad de Dios. Cada miembro de la comunidad necesita la gracia de Dios, su luz y su fuerza para colaborar en la búsqueda de la realización de lo que se pide. En todo caso, en la oración de los fieles, pedimos especialmente a Dios, que nos ayude a vivir y a aspirar al Reino de Dios, con un corazón sincero.

En la misa, pedimos a Dios perdón, le ofrecemos alabanza y le damos gracias. La oración de los fieles es una conversación de hijos, con su Padre; todos hablan de sus necesi-dades, angustias y esperanzas, piden al Padre, armonía, justicia y paz para la comunidad. Manifiestan la necesidad de misericordia y bendiciones de Dios en las más diversas situaciones. La comunidad presenta sus necesidades al Padre, y Él con su infinita bondad y sabiduría, interviene en la vida de cada uno y de la comu-nidad en la forma que mejor convie-ne. Quien presenta una petición al

Cada vez que se recita el Credo o se responde a las promesas de fe se reitera y renueva la profesión de fe que se hizo en el sacramento del bautismo. Se cumple así una doble función: por una parte y primordialmente, de acuerdo con su sentido original, se expresa el compro-miso individual con Dios, manifestado en Jesucristo por el Espíritu Santo; y, por la otra, se pone de manifiesto la norma de lo que cree la comunidad. La profesión de la fe cristiana posee, pues, un sentido individual y un sentido comunitario: la hace cada fiel, porque la fe es personal, cada uno adopta su propia actitud delan-te de Dios, pero también la fe se ha recibo de los otros, se comunica a través del anuncio y se vive y pronuncia en comunidad. Originalmente, el Símbolo, como fórmula, no se compuso para la misa. Servía para la profesión de fe personal con ocasión del catecumenado y el bautismo, de ahí que esté redactado en primera persona del singular. La iniciativa de recitar el Credo en la misa se originó en el Oriente, a partir del siglo VI. Según el testimonio de Teodoro el Lector, Timoteo, patriarca de Constan-tinopla (511-518), con la intensión de manifestar la oposición a la herejía y confirmar la fe en la ortodoxia, dispuso que al acabar la anáfora y antes del Padrenuestro toda la asamblea lo recita-se (cf. Fragm. 2, 32, Historia eclesiástica: PG 86, 202). Tal novedad la imitarán rápidamente las demás liturgias de Oriente, y será decretado como norma para todo el Imperio.

Este uso pasó a la Península Ibérica, a la parte sometida al dominio bizantino. Los visigóticos, con su rey Recaredo (586-601), arrianos, que ocupaban aquella zona, al convertirse a la fe romana, sellaron su propia conversión con un acto público en el III concilio de Toledo (589), para lo cual se determinó que, en adelante, en todas las iglesias de España y Galicia fuera recitado el Credo, exactamente conforme al texto utilizado en las liturgias de Oriente. Así, mientras el pueblo antes del Padrenues-tro hacía junto y con voz clara la solemne profesión de fe, el sacerdote tenía en la mano sobre el cáliz la hostia consagrada y la elevaba delante de todos. De este modo el Símbolo pasó a ser una de las plegarias que presiden la Sagrada Comunión, como aun hoy se mantiene en la liturgia hispano-mozárabe. La recitación del Credo en las Galias llega por influjo de Paulino de Aquilea (726-802) quien aseguraba que la fórmu-la del Símbolo era apta para combatir el adopcionismo; y pedía a sus sacerdotes que aprendieran de memoria el texto del Símbolo Niceno-Constantinopolitano. Carlomagno (768-814) adoptará el uso en su capilla palatina de Aquisgrán para después del Evangelio. El canto del Símbolo en la misa se propagará rápidamente, y ya a finales del siglo VIII, en Benevento (Italia), se cantará después del Evangelio; la melo-día con la que se interpretaba nada tenía de común con las formas musicales de la tradición romano-franca. En los inicios del siglo XI, la liturgia

romana no incluía el Símbolo en la misa, ni se planteaba su uso dentro de la celebración. Bernón de Reichenau (978-1048) relata que el emperador romano-germánico Enrique II (973-1024) estando en Roma, en 1014, con ocasión de su coronación, manifestó al papa Benedicto VIII (1012-1024) cuánto le había extrañado no oír en la misa el Símbolo, contrariamente en uso en todas las Iglesias del Norte. A lo que el Papa respondió que la Iglesia de Roma no había sentido la necesidad de introducirlo en la misa porque ésta nunca se había contaminado de herejía; sin embargo, accediendo al deseo del emperador, dispuso que se incluyera el Credo en el ordinario de la misa solemne para ser cantado por todos. Sólo a inicios del siglo XII, se encuentra de forma estable, reservado para los domingos y fiestas principales que conmemoran un misterio mencio-nado en el mismo Símbolo: fiestas del Señor, la Natividad hasta Pentecostés, la Virgen María, los Apóstoles, Todos los Santos y la Dedicación de la Iglesia. Se estableció la norma mediante la cual sólo las fiestas de los mártires, vírgenes y confesores queda-rían sin Credo. Hasta la reforma efectuada por el papa Pío V, los cuatro doctores de la Iglesia (Gregorio Magno, Ambrosio, Agustín y Jerónimo) se equiparaban a los Apóstoles, ya que, como propagadores de la fe, merecían la distinción del Credo. Pero también a las fiestas de los demás santos se concedió la prerrogativa de su uso cuando se celebraba con especial solemnidad. A tal punto, el Credo llegó a considerarse, como un elemento que daba mayor solemnidad a las fiestas. Así, al limitarse los días que debía decirse, la profesión de fe pierde su

carácter apologético y, dicho luego del Evangelio, se convierte en una verda-dera afirmación fervorosa de los fieles en la Palabra de Dios. Su contenido doctrinal se puede considerar como una continuación o resumen de la instrucción que se da en la homilía; se convierte además en punto de transi-ción entre la liturgia de la Palabra y la liturgia de la Eucaristía. Al contrario de lo que sucede con los demás cantos de la misa, son raros los casos de manuscritos y aun de libros impresos que contengan más de una melodía para el Credo. Y esta melodía siempre se trata de una modu-lación musical para una sencilla recita-ción, que conservó el gregoriano. Pero a partir del predominio de la música polifónica, el Credo se convirtió en la parte musical más brillante del ordina-rio de la misa, hasta el punto de sobre-salir con relación a los demás textos cantados en la Eucaristía. Hoy, dentro de la misa, el Símbolo o profesión de fe se presenta como respuesta de todo el pueblo a la Palabra de Dios que ha sido proclama-da y expuesta por medio de la homilía: haciendo memoria de los grandes misterios de la salvación, la asamblea los confiesa antes de comenzar la liturgia de la Eucaristía (cf. IGMR 67). «Recitar con fe el Credo es entrar en comunión con Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, es entrar también en comunión con toda la Iglesia que nos transmite la fe y en el seno de la cual creemos» (CEC 197).

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P. CarlosMarioHincapiéPérez

P. GabrielJaimeMolinaVélez

goticas@arqmedellin.com

6personaje@arqmedellin.com

P. ElíasLoperaCárdenas

Pequeño de estatura, su voz gruesa y con su piel morena es de fe grande, de esperanza cierta, de oración continua y de espíritu firme en el Señor; pues lleva la tarea, no fácil, encomendada por el Señor Arzobispo de ser canónigo penitenciario y el exorcista de la Arqui-diócesis de Medellín. El 31 de enero de 1934 nació en el barrio Manrique de Medellín, en la parroquia de El Calvario. Hijo de José Ernesto y María Jesús, el primero de La Ceja y la segunda de Amalfi, pueblos planos, bien trazados y muy hermosos. Se crió en un hogar sencillo y pobre, ubicado en Palacé en Lima con Italia, compartiéndolo con sus otros hermanos: Luz Marina, Néstor, Rodri-go, Óscar, Javier, Edelberto y María Elena. Lo bautizó el padre José María Escobar en la parroquia Ntra. Sra. de La Candelaria, el 4 de febrero de 1934 y allá mismo fue confirmado por monseñor Manuel José Caycedo Martí-nez. Fue preparado para la Primera Comunión por los Carmelitas en la parroquia de El Carmen y por los Salesianos en la del Sufragio, pero la hizo en la Candelaria. Hizo sus estudios de primaria en la escuela Juan del Corral en Prado Centro, el año de preparatoria en otro Colegio del Centro y primero de bachi-llerato con los padres franciscanos en San Benito. Interrumpió sus estudios y se puso a trabajar, pues había muchas necesidades en su casa y el debía de ser el punto de apoyo para sus progeni-tores y hermanos, como mandadero en los negocios y farmacias del vecinda-rio; se colocó en Plata Martillada y, su dueño Kodici Dinami, le regaló, cuando se ordenó, el cáliz y la patena, precio-sos, que se los robaron cuando era párroco en Santa Rosa de Lima. En 1951 ingresó al Seminario Menor de Medellín al patio de chicos donde estudió secundaria y en el Seminario Mayor estudió filosofía y teología. La tonsura la recibió el 23 de mayo de 1959, las primeras órdenes menores el 18 de octubre del mismo año, las segundas órdenes menores el 2 de abril de 1960, el subdiaconado el 22 de octubre de 1961, el diaconado el 7 de abril de 1962 y el presbiterado el 26 de agosto del mismo año, en la Basílica Metropolitana, de manos de monseñor Tulio Botero Salazar, Arzobispo de Medellín. Le ha servido a la Arquidiócesis de Medellín en la pastoral parroquial y en la docencia. Fue Vicario parroquial en Cisneros (1962-1963); en Fredonia,

al mismo tiempo que era párroco en Minas de Fredonia y profesor del Liceo (1963-1964); y en la parroquia de Santa Ana en Medellín (1964-1965). Párroco en la Pintada y Damasco en la parroquia Santa Cecilia (1965-1974). La Pintada era un corregimiento muy deprimido a orillas del Cauca, zona de tolerancia, de vicios y miserias; su propósito fue la promoción humana, la educación y el desarrollo, por eso, fundó el colegio y fue profesor; construyó la unidad deportiva, Coldeportes le puso su nombre en reconocimiento y gratitud; apoyó la electrificación de los barrios y las veredas. Párroco en Santa Elena (1974-1983), donde también fundó y fue rector del Colegio, construyó la unidad deportiva y fue condecorado con la medalla “El Nutibara de Oro” en reconocimiento de su liderazgo educativo y deportivo; visitaba constan-temente las 17 veredas. Pasó a Santo Tomás de Villanueva, Copacabana, (1983-1997), Capellán de Jardines de la fe, de la Normal María Auxiliadora de Copacabana y otros colegios; luego, fue Rector de Granjas Infantiles (1990) y pasó como docente al Carmelita Arcila en la América. Párroco en Santa Rosa de Lima en La Floresta (1997- 2007). Fue nombrado Canónigo penitenciario por monseñor Alberto Giraldo Jaramillo y como Exorcista de la Arquidiócesis por monseñor Ricardo Tobón Restrepo. Actualmente se desempeña también como Capellán de la Legión de María. Como docente participó en todos los concursos para el escalafón hasta el grado 12 y se jubiló en el Magisterio. Nos cuenta que lo que más le ha gustado del sacerdocio ha sido el oficio de párroco por la imitación de Jesucris-to Buen Pastor, por la acción pastoral tan diversificada en una comunidad concreta en la catequesis, en la liturgia y, sobre todo, en la acción social; pues se vive el ideal más grande y sublime que es servir a la gente. Ha sido un sacerdote coherente, convencido de su identidad sacerdotal y de sus principios religiosos; su ministerio se caracteriza por su obediencia con un claro concepto de la autoridad jerárquica y por su sensibilidad social. Prima su sacerdocio y el cumpli-miento de su deber y, luego, su familia. Por su sencillez y frater-nidad ha sido muy cercano a la comunidad, sobre todo, a los niños, a los enfermos, a las familias, a los educadores y a los campesinos; con qué gusto celebraba en sus parroquias con música y regalos los días festivos de la madre, del educador, del campesino, del

niño,… Como docente sabe la pedago-gía y el método para transmitir el Evan-gelio, pero, lo hace primero con el ejemplo de vida. Ora mucho, dedicado al confesionario, atiende en ocasiones, descuidando su diabetes, hasta avan-zada la noche compromisos de grupos apostólicos y personas necesitadas de la paz interior; es muy consciente y responsable de su labor y de su minis-terio, sobre todo, al enfrentar a los demonios en esta época donde hay tantos. El CIC de 1917 cánones 391-422, antes en vigencia, y ahora el CIC de 1983 cánones 503-510 nos precisa lo pertinente al Capítulo Catedral o Cabildo de Canónigos y le da como función prioritaria el tributar a Dios un culto más solemne en la Iglesia Catedral y en nombre de todo el presbiterio. En la actualidad encontramos como canónigos activos a los Ilmos. Sres. Pbros. Saúl Londoño, Macario Botero, Javier Cada-vid y Jorge Suárez, pues, el Deán: Argiro Ochoa y Santiago Ospina están muy limitados por sus quebrantos de salud; el padre Bernardo Correa, quien venía a conformar el grupo de los capitulares, no se adaptó y depuso el ofrecimiento. El canon 509 & 2 pide que se dé la canonjía “a sacerdotes que, destacándose por su doctrina e integri-dad de vida, hayan desempeñado meritoriamente su ministerio”. El canon 508 & 1 reza: “El canónigo penitencia-rio,… tiene en virtud de su oficio, la facultad ordinaria no delegable, de absolver en el fuero sacramental de las censuras latae sententiae no declaradas ni reservadas a la Santa Sede…” Y para nombrarlo como exorcista el Señor Arzobispo tuvo en cuenta lo que establece el canon 1172, que debe-mos recordar todos los

sacerdotes de la Arquidiócesis y de otras Iglesias particulares: & 1. “Sin licencia peculiar y expresa del Ordinario del lugar, nadie puede realizar legítima-mente exorcismos sobre los posesos. & 2. El Ordinario del lugar concederá esta licencia solamente a un presbítero piado-so, docto, prudente y con integridad de vida”. Con 79 años de vida y 50 de sacerdocio acude diariamente a la Misa capitular, a la celebración de la liturgia de las horas, a sentarse en el confesio-nario largo rato, a la Legión de María, a visitar los enfermos y los tristes y, acude cuando lo requieren para exorci-zar algún poseso o posesa; y en alguna ocasión lo zarandeó una energúmena. Vive en el edificio Bolivia, entre Bolivia y Sucre. Le agradecemos sus servicios a la Iglesia de Medellín y que Dios permita que siga enriqueciéndonos con su ejemplo de vida y su ministerio.

Ser Sacerdote hoy, implica:Vivir la vocación como misterio y don, pues ésta descubre la verdad de nuestra existencia y nos llama para estar con el Señor, para ser como Él y para ir con ÉL al encuen-tro de los hombres. El mundo anhela y necesita presbíteros que muestren que la vocación llena su existencia. Ser hombres de oración, de esta manera entenderemos que Jesús no llama a hombres capacitados, si no que capacita a los llamados. A través de la oración Dios hace fecundo el ministerio del Sacerdote.Predicar solo a Dios, y para ello es indispensable escucharle en su

El 4 de diciembre, en la Parroquia Nues-tra Señora de Belén, sede de la Vicaria Episcopal del Oriente, la Arquidiócesis de Medellín, presidida por el Arzobispo y en compañía de los Obispos Auxiliares, algunos Obispos eméritos, más de cien sacerdotes y un gran número de fieles, celebró la Eucaristía en gratitud al Señor por los 25 años de sacerdocio del Obispo Auxiliar, mons. Hugo Torres Marín, a quien se le rinde un sentido homenaje de gratitud por su vida y minis-terio, como recalcaba el Arzobispo en la homilía “Las Bodas de Plata Sacerdota-les de monseñor Hugo nos permite revivir la fe, la Fe en Cristo, único media-dor, que une la orilla de los hombres con la orilla de Dios. Nos permite sentir la fraternidad que tiene sus fundamentos en el bautismo y en el orden sagrado. Nos permite expresar la profunda comu-nión eclesial que en el sacerdocio minis-terial encuentra uno de sus elementos fundantes y estructurales. Nos permi-te vivir la alegría de la misión porque

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P. GermánAndrésBustamante

Ser Sacerdote Palabra, de lo contrario terminaría-mos predicándonos a nosotros mismos. Hoy el mundo esta deseoso de Dios y de sacerdotes que entre-guen su vida por el anuncio de la Buena Noticia, de manera especial con un testimonio de vida que lo manifieste.Seguir el ejemplo de un Dios que es pobre, porque Dios es amor y el amor no deja nada para sí, por el contrario lo da absolutamente todo, hasta su vida. Dejarse cautivar por Dios, sólo así sabremos escucharle en la voz de nuestro Obispo y permanecer unidos a él, formando así un solo cuerpo.

Ser hombres que amamos sin medida y nos consagramos a salva-guardar el Amor Divino. Si nos senti-mos amados por Dios comprendere-mos que el celibato es un don gratui-to que recibimos de Dios.Reactualizar el misterio de la Cruz y llenar de amor al prójimo levantán-dolo de su fragilidad con misericor-dia y justicia. En última instancia, ser Sacer-dote, significa ser testigo de los sufrimientos de Cristo y participar de la gloria que va a manifestarse, siendo pastores que gobernamos con buena gana y con generosidad, convirtiéndonos a la vez en modelos

del rebaño. (Pedro 5,1-4)

P. LuisCarlosRueda

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“damos gracias a Dios que lo ha elegido,lo ha sostenido y lo sigue enviando a trabajar en su Viña”.

bodas de plata de monseño hugo torres marín

La Arquidiócesis de Medellín recibe con alegría estos 11 nuevos sacerdotes que han recibido su ordenación presbiteral el pasado 24 de noviembre en la Catedral Metropolitana de Medellín por imposición de manos de nuestro arzobispo. Es una bendición de Dios poder contar con estos ministros de Dios para que anuncien el Evangelio en nuestra Iglesia Particular.

el Señor nos sigue enviando a todos a bogar mar adentro en la esperanza de que venga su Reino”. Monseñor Hugo Torres fue ordena-do sacerdote el 26 de noviembre de 1987 de manos de mons. Joaquín García Ordoñez en la Catedral de la Diócesis de Santa Rosa de Osos a la cual pertenece, fueron sus compañeros los sacerdotes Jesús Hernando Jarami-llo Peña , Gustavo Alonso Sepúlveda Hincapié, Amado de Jesús Pérez Zapata, Eduardo Mejía Zapata y Jorge Humberto Cárdenas Montoya, fallecido. Su ministerio lo ha desempeñado como vicario parroquial de Nuestra Señora del Rosario, en Don Matías; profesor del Seminario Mayor de Santa Rosa de Osos; Director de la Escuela Apostólica "Monseñor Miguel Ángel Builes" de Rio Grande en Don Matías; Formador del Seminario Mayor; Vicerrector y Director Académico de la Fundación Universitaria Católica del Norte, y segundo Rector de dicha institu-

ción; fue también Vicario Episcopal para la Pastoral siendo Párroco en Valdivia, y desde 2009 se desempeñaba como Rector del Seminario "Santo Tomás de Aquino" en Santa Rosa de Osos cuando fue nombrado como Obispo Auxiliar de Medellín. Se agradece al Señor el ministerio sacerdotal de mons. Hugo Torres Marín como Obispo auxiliar de la Arquidiócesis, así nos lo recuerda el arzobispo: “Con él damos gracias a Dios que lo ha elegido, lo ha sostenido y lo sigue enviando a traba-jar en su viña”.

8P. Juan M.

SánchezGarcía

Creada el 17 de junio del 2004, por monseñor Alberto Giraldo Jaramillo desprendida de la parroquia Nuestra Señora del Carmen y la Preciosa Sangre en el municipio de Bello con un buen numero de habitantes repartidos en 6 urbanizaciones (Guarani, Hato Viejo, Riachuelos, Lagos de Riachuelos, Cascadas de Riachuelos y Florida Verde) por las veredas Potrerito y Hato viejo ahora Barrio y por el barrio el Carmelo sector muy tradicional de Bello. Al sector de la parroquia pertenecen dos instituciones educativas El Fernando Vélez y el Carlos Pérez Mejía. Limitamos con la parroquia del sagrado corazón, con el corregimiento de san Félix, con parís, con el santo Cristo, con nuestra señora del Carmen. Tener como patrono al mismo Dios encarnado es algo muy especial ya que cuando se conoce la vida de algunos santos, descubrimos como muchos quisieron tener por modelo a imitar a quien nosotros tenemos por patrón el niño del pesebre. Hablar de la parroquia del Emmanuel es mirar un sueño hecho realidad. Sí, un sueño porque en el sector del Carmelo que es muy tradicional de Bello, un grupo de personas, muchos años atrás lucha-ron por tener una parroquia cercana ya que hacían parte de la parroquia del Carmen y estaba bastante retirada. Pero dicho grupo encontro muchos obstáculos para su fin, algunos murieron sin conocer

su sueño. En el 2002 el arzobispo Alber-to Giraldo nombro al Pbro. Jhon Jairo Martínez como animador pastoral del sector con miras de acompañar el proceso de fe de la comunidad y el 17 junio del 2004 se crea la parroquia nombrado al anterior como primer párro-co. Agradecemos al Pbro. Jhon Jairo el haber puesto los cimientos de la comu-nidad parroquial, su esfuerzo por crear una conciencia de nueva parroquia. El 30 de noviembre del 2004 se nombra al Pbro. Carlos Andrés Restre-po Cano como el segundo párroco quien pastorea esta comunidad por dos años y medio, quien se encargaría de darle imagen y estructura de parroquia, dinamiza la comunidad y gestiona planos y licencias para la construcción del complejo parroquial. También a él le agradecemos su testimonio y esfuerzo por trasmitir el evangelio. El 6 de junio del 2007 se nombra al Pbro. Juan Manuel García Sánchez como tercer párroco (la parroquia tubo un administrador parroquial durante dos meses siendo este es el Pbro. Carlos Alberto Restrepo ) el cual le asumió una comunidad de fe que se venia formando y gracias al trabajo de lo sacerdotes anteriores el pudo llevar a cabo la construcción del complejo parroquial ( casa, salón, despacho y templo parro-quial ) lo primero que se gestiono fue ampliar el lote y comprarlo porque estaba en comodato con el municipio de

En el horizonte una gran luzviaja en la historia

y con el tiempo vence tinieblashaciéndose Memoria.

Iluminando nuestra vidaclaro nos revela

que no se vive si no se buscaa la Verdad.

De mil caminos llegamos a Romaal paso de la fe

sentimos el eco de la Palabraque todavía resuena

entre estos muros, bajo este cielopor el mundo entero.

Está vivo hoy el Hombre nuevo:Cristo Jesús Y aquíbajo la misma luz,

bajo su misma cruz,cantamos a una voz:

E’ L’Emmanuel, L’Emmanuel, L’EmmanuelE’ L’Emmanuel, L’Emmanuel.

Bello, se actualizaron las licencias de construcción y se realizaron algunas modificaciones a los plano, después con los grupos que funcionan en la parro-quia se buscaron los recursos económi-cos para iniciar la contrición. Se han hecho empanadas, rifas, colectas pro templo, comedores, banquetes, viejo tecas, convites de trabajo, campañas del ladrillo, cemento entre otros. Esta familia ha ido caminando en el pasar de los años fortaleciendo su fe y comprometiéndose con el proyecto de hacerle al Emmanuel una casa en medio de la casa de los hombres. La parroquia ha adoptado como himno el mismo de la jornada mundial de la juventud del 2000 alguna parte del mismo:

parroquiadelmes@arqmedellin.com

Objetivos del Año de la Fe

Tipsitos de fe

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Celebramos las fiestas patronales durante los días que preparan la navidad del 15 al 25 de diciembre.

Inician con una cena llamada cena de amor por mi parroquia el sábado 15 a las 7:30pmSe tiene el rezo de la novena por sectores y eucaristías en los mismos para las familiasSe realiza la navidad para niños, jóvenes El 24 en la noche se hace la proce-sión con el niño del pesebre

Algunas experiencias de feligreses

“La experiencia más grande es haber vivido en carne propia: la edificación de una comunidad eclesial alrededor del la construcción del templo y tener como director espiritual un sacerdote, hombre de Dios, que ha dedicado lo mejor de su vida a atender a su rebaño que Dios mismo le encomen-dó y también de una manera muy paisa y sencilla “cargar cemento, arena y ladrillos” con arte. Otra expe-riencia es haber guiado a los niños y niñas a mis encomendados hacia Dios con una catequesis bajo la dirección de nuestro párroco” Beatriz Paniagua “Desde hace mas de 40 años espe-rábamos tener una parroquia en nuestro barrio el Carmelo, por fin hace mas o menos ocho años se formo la comunidad y obtuvimos la bondad de Dios para la creación de la parroquia Emmanuel y desde hace cinco años el pastor que guía con mucho amor, gran empeño y tenaci-dad su rebaño, adelanta la construc-ción de la casa del Dios con nosotros, lo cual hace sin escatimar su perse-verancia para sacar adelante el templo y su comunidad. En todo este tiempo he pertenecido al grupo de pastoral” Elena Giraldo SOLUCIÓN CRUCIGRAMA BÍBLICO AÑO DE LA FE

Párroco: Juan M. García Sánchez

Teléfonos: 454 16 07 / 454 16 07

E mail párroco: p.delemmanuel@arqmedellin.com E mail despacho: delemmanuel@arqmedellin.com Sitio web: www.arqmedellin.com/delemmanuel

Horario de Misas: Fin de Semana: Sábado: 6:00 p.m. Domingo: 8:00 a.m. 12 m. 5:00 p.m. 7:00 p.m. Semana: Lunes: 8:00 a.m. Martes: 6:00 p.m. Miércoles: 8:00 a.m. Jueves: 8:00 a.m. 6:00 p.m. Viernes: 6:00 p.m. Horario despacho parroquial: Martes a viernes de 2:00 p.m. a 5:00 p.m.

Ubicación

Redescubrir los contenidos de la fe profesada, celebrada, vivida y rezada".Con el Concilio se nos ha ofrecido una brújula segura para orientarnos en el camino del siglo que comienza.Intensificar la reflexión sobre la fe para ayudar a todos los creyentes en Cristo a que su adhesión al Evangelio sea más consciente y vigorosa, sobre todo en un momento de profundo cambio como el que la humanidad está viviendo.Invitar a una auténtica y reno-vada conversión al Señor, único Salvador del mundo.

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Comprometerse a favor de una nueva evangelización para redescubrir la alegría de creer y volver a encontrar el entusiasmo de comunicar la fe.Suscitar en todo creyente la aspiración a confesar la fe con plenitud y renovada convicción, con confianza y esperanza.Comprender de manera más profunda no sólo los conteni-dos de la fe sino, juntamente también con eso, el acto con el que decidimos de entregar-nos totalmente y con plena libertad a Dios.

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Debo advertir que el tema es amplio y difícil y por tanto sólo lo tocaré parcial-mente; debo advertir que el tema es apasionante pero difícil de totalizar en un breve discurso; debo advertir que no toda soledad es negativa, ni toda soledad es positiva. En la liturgia del Domingo 09-09-12, en el Evangelio de Mc. 7,21-27, aparece la curación de un sordomudo por parte de Jesús pero, por qué despertó el “asombro” de la gente? Porque Jesús, sana al afligido y porque curar a un sordomudo era ganar a un hombre para la relación interpersonal, era recuperarlo para un contacto humano sin problemas. Dirá, esto, algo para el hombre de hoy?El sordomudo de Mc. 7 era un hombre con serias dificultades de relación y comunicación humana, era un ser “aparte” (aislado), era un ser en soledad. Y, en este sentido, es válida imagen de una humanidad que padece soledad por incomunicación, sordera y mudez. Quién lo creyera, la soledad es uno de los más graves males de nuestra sociedad y conlleva severas consecuen-cias para la salud física, psíquica, social, política, humana y religiosa del hombre:

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El contacto humano ha perdido calidez y cordialidad sincera; se han debilitado las relaciones profundamente humanas, nos hemos acostumbrando a lo puramente convencional debido a múltiples intere-ses y egoísmos, a desconfianzas y orgullos, a odiosas discriminaciones. Einstein en su tiempo decía: “Temo el día en que la tecnología sobrepase nuestra humanidad” y yo, desde hace rato, “temo el día en que la excelencia técnico-académica se imponga a la excelencia humana” Qué significa soledad humana?: Etimológicamente significa aislamiento o confinamiento, falta de contacto con otros. Esta condición de vida puede apare-cer como: Soledad por propia elección: Ésta, puede surgir, de forma positiva, producti-va y sana, como soledad mental que propicia altos niveles de concentración a pesar de las circunstancias externas (técnicas de meditación budista), o como soledad espiritual religiosa para buscar a través de la oración llegar a la ilumina-ción espiritual; igualmente se podría hablar de una soledad física para elimi-nar distracciones y concentrarse más fácilmente, o para descansar sin ser

distraído, o simplemente por privacidad. Esta soledad es productiva y sana mien-tras no responda a un complejo narcisis-ta y egolátrico o a una enfermiza ruptura de las relaciones interpersonales, por rechazo al otro. Soledad impuesta: Una de sus formas es un intencional aislamiento emocional; acá, la persona, por causa de un estado psíquicamente alterado se aísla emocionalmente a pesar de tener una red social normal. Otra soledad impuesta es la exigida clínica y terapéuti-camente por causa de una enfermedad orgánica o psiquiátrica para favorecer el tratamiento y proteger a los demás; esta no es deseable pues el paciente no logra prepararse para ella y le agrega sufrimiento humano. Otra, es el aislamiento por castigo (prisioneros) o por carencia de grupos primarios (familia, amigos, etc.) y, en ambos casos, la persona se puede sentir despreciada o rechazada y llegar a una desviación social irreversible Otra de sus formas es la de aquellos hermanos nuestros que son víctimas de nuestra intransigencia y de nuestros radicalismos; aquellos que son víctimas de la discriminación por causa de su color, origen, credo, condi-ción social, etc.; aquellos que están

condenados al olvido, al aislamiento y soledad porque les hemos dado la espalda o porque les hemos declarado casos perdidos matando “el amor y la esperanza”. Y, enfatizo en esta soledad impuesta por su carácter traumático, por su sabor a frustración o por ser camino para enfer-mar. Además, porque la acción y la palabra de Jesús al sordomudo “EFFETA” (Ábrete) es un dramático llamado a aliviar a quien, tal vez, hemos dejado en soledad y “no tiene a quien escuchar, no tiene quien le escuche, no tiene a quien hablar, no tiene quien le diga una palabra”. Pero, también enfatizo, lo hermoso qué sería que, con nuestra acción y palabra, algún sordomudo de hoy (alguien que ha elegido insanamente vivir en soledad y aislamiento) quisiese, de nuevo, entrar en contacto y comunicarse con el otro para proclamar su humanidad y compartir sus buenas noticias, para comprometerse a construir con el otro un mundo más justo, más amable, más humano y más digno de los hijos de Dios. Qué hermoso sería que algún sordomudo de hoy, lograse escuchar, ahora, la palabra del otro que clama desde su humanidad herida, que necesita ser escuchado en un mundo de sordos, que necesita decir quién es, cuáles son sus valores, sus ideales y esperanzas, sus temores y angustias, que necesita hablar de sus vacíos y sinsentido de vida.

LA SOLEDAD HUMANA

Hubo una discusión alegato y quien se retiro de la Iglesia Católi-ca y se acogió a otra, atacaba que esa pedidera o solicitud de ayudas mantenía cansada a la feligresía. Que desde cuando se conocía estaban haciendo tal iglesia. Que por que los curas no se ingeniaban unas empresas productivas para hace lo que les viniera en gana.

Que en la Católica todo era plata y rezo ventiado. Que qué amera. No digo su religión ni lo que se hablo de ella, porque cada quien es libre de decidirse mas no de ofender. Pues si en la Iglesia Católica se reza de lo lindo como también se oyen desde la calle los cánticos de los cultos, por doquier. En todas las religiones se reúnen estilos entre apasionados, engreídos y descreídos.La nuestra pide para hacer. Por si se tienen dudas por parte de los fríos de la propia religión Católica o de cualquiera otra forma de pensar, para quienes hay respe-to, es bueno hacer un corto sobre vuelo de lo que ha ideado, estable-cido, mantenido y marcado en el mundo la Iglesia Católica por medio de personas que cumulen y cumplieron su gran Misión en los quehaceres de vida que se inge-niaron, porque nadie se los ha impuesto. A quién se le ocurrió establecer, impulsar y seguir constante en la

batalla de la educación privada? Cuando en el sector público, o en el político, se les dio por montar unas Universidades con algunos ribetes anticlericales no salieron a flote los Centros Educativos de nuestra Iglesia? Y quién salió con la idea de los velar por niños y adultos creando orfanatos y asilos, como apéndices parroquiales?. Que después el Estado les dio la mano; que ya le quitó a Raimundo y todo el mundo; es otra cosa. Cuántas comunidades se mueven por el mundo en su apos-tolado, con entrega y sacrificio, como Hermanitas de los Pobres, Misioneros, en Centros de salud, corrección a la drogadiccion, reclu-sión, Y por los Medios de Comunica-ción la tarea es seria, sobria y continua. Iniciando por el mas antiguo: el PÚLPITO, y en el solo Medellín se tiene este periódico arquidiócesano MISIÓN, con un año de apostolado, El Católico de

la Fundación Social Juan Pablo II, Televida, Emisoras Minuto de Dios, Santa María de la Paz,........... Y cuando los empresarios de Antioquia, dieron la pauta Nacional, antes de que hubieran normas al respecto, fundaron las 4 Cajas de Compensación (Comfama, Comfenalco, Comfamiliar Camacol y la de Acopi) para servicio de sus afiliados, la Arquidiócesis de Mede-llín se apiadó de las empresas sueltas, y fundó la CAJA ABIERTA de Compensación Familiar la cual Presidio el señor Arzobispo, dele-gando en el Vicepresidente Dr. Juan Guillermo Restrepo Jaramillo y como primer Director Don Paulino Londoño a quien, ante su estado de salud, remplacé, por 3 años, desde diciembre de 1982. Y para no ser interminables apenas si menciono como el PRIMER Centro de Turismo en todas partes a Iglesias y Capillas, antes que buena parte de los Museos.

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P. AncízarRestrepoToro

FedericoVelásquez

ocurrencias@arqmedellin.com

coloquiosdevida@arqmedellin.com

El domingo 2 de diciembre, en el primer domingo de Adviento, la Pastoral Juvenil de la Arquidiócesis de Medellín, dirigida y orientada por padre Mauricio Salazar, celebró la graduación de Animadores Juvenil a 83 jóvenes de 28 parroquias. Las parroquias que acogieron el llamado del Arzobispo para formar animado-res juveniles durante este año, fueron: Cristo Resucitado, El Divino Redentor, El Sagrario, Nuestra Señora de Chiquinquirá (La Estrella), Jesús Amigo, Jesús Obrero, La Divina Misericordia, La Divina Provi-dencia, La Purísima Concepción, Madre del Amor Divino, María Auxi-liadora, María Reina de la Paz, Marie Poussepin, Nuestra Señora de la Asunción, Nuestra Señora de la Resurrección, Nuestra Señora de la Valvanera, Nuestra Señora de los Dolores (Sabaneta), Nuestra señora del Encuentro, Nuestra Señora del Rosario (Bello), Nuestra Señora del Sufragio, San Agustín, San Cayeta-no, San Diego, San Irineo, San Leopoldo Mandic, Santa Teresa de

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Jesús, Santo Cura de Ars y Santo Tomás de Aquino. Parroquias invitadas: Niño Jesús de Praga (Pereira) y Nuestra Señora de la Anunciación (Pereira). En la homilía, el padre Mauricio, se dirigió a los jóvenes y a sus fami-lias, exhortándolos: “Los grados de

animadores no se hacen para quedar bien con nadie, el grado de Animado-res depende del grado de experien-cia que tengas del Señor Jesucristo en tu vida. Eso es un animador juvenil. Es el que tiene un tal grado de conocimiento de Cristo que lo único que quiere es que todos conoz-

can a Cristo….no son para entrete-ner un grupo de jóvenes…los mas importante es transmitir el mensaje de Cristo. Que este grado de anima-dores nos ayude a decir sí al llamado que Cristo nos hace para que tenga-mos parroquias rejuvenecidas, parroquias vivas, una Iglesia guiada por la juventud”. La ceremonia de graduación se realizó en la parroquia Nuestra Señora de los Dolores del Municipio de Sabaneta.

P. JuanPabloCardona

12haciendonospresentes@arqmedellin.com

posicionados cinco de los nuestros: Colegio Parroquial San Francisco de Asís, puesto número 1 en el municipio de Bello, 29 en Antioquia y 342 a nivel nacional; Bachillerato masculino de la UPB, puesto 29 en el municipio de Medellín, 43 en Antioquia y 441 en ranking nacional; Unidad Educativa San Marcos, puesto 6 en el municipio de Envigado, 44 en Antioquia y 454 a nivel nacional; Colegio Parroquial San Buenaventura, número 2 en Bello, 61 en Antioquia y 638 a nivel nacional; Liceo Salazar y Herrera, puesto 48 en el municipio de Medellín , 100 en Antioquia y 1058 en Colombia.

Nuestros colegios premiados

Es destacable también la participación en el programa público-privado que busca fomentar el mejoramiento de la educación en nuestra ciudad y en nuestro departamento: Medellín, la más educada, Antioquia, la más educada. La Alcaldía de Medellín, la Gobernación de Antioquía y Pro-Antioquia evalúan los colegios, maestros y estudiantes en diferentes categorías a lo largo y ancho de la ciudad y del departamento. Una de las categorías evaluadas es el sistema de gestión de la calidad aplicado a los procesos educativos. El Instituto Parroquial Jesús de la Buena Espe-ranza fue premiado como el mejor en dicha categoría. Este año la Normal Antioqueña tuvo su proceso de recertificación alcanzado desempeños notables ante el Ministerio de Educación Nacional. De las 36 normales que existen en Colombia, el MEN destacó ocho, dentro de la cuales hay dos en Antio-quia, una de ellas, la nuestra. Esto significa un reconocimiento al desem-peño exitoso y también una responsa-bilidad. A nuestra Normal se le ha encomendado el acompañamiento de dos normales en los departamentos del sur del país, para apadrine un proceso de mejoramiento en estas instituciones a través de la metodolo-

humana, incluyente y de alta calidad.La Educación Arquidiocesana,

gía de pedagogía espejo. Ya el equipo de trabajo de la Normal Antioqueña se encuentra empeñado en dicha labor. Nuestras instituciones responden así a la misión dejada por nuestro Señor y al mandato otorgado por la Iglesia, madre y maestra. Un año 2012 en el que se le ha cumplido al Señor.

Educar es la labor que le corresponde a la Iglesia, por mandato propio de Jesucristo, ella misma es madre y maestra. La Arquidiócesis de Medellín lleva a cabo esta misión con entusias-mo, convencida de que educar es un bien inigualable, la mayor misericordia que se puede hacer por las futuras generaciones. Dos son los caminos de los que se vale para hacerlo: el primero, a través del acompañamien-to espiritual en las diferentes realida-des como las capellanías de universi-dad, de colegios, la educación religio-sa escolar, presencia de sacerdotes en instituciones educativas oficiales entre otras; la segunda forma de hacer visible el mandato de Cristo es a través de nuestras propias institu-ciones educativas.

Educación Arquidiocesana, única en la Iglesia universal.

La Arquidiócesis cuenta con veintisie-te colegios, una fundación de obra social que agrupa otras cinco institu-ciones que prestan servicio educativo a los más pobres, tres universidades y un programa de asistencia social a niños huérfanos y sin familia. Son más de cuarenta mil niños y jóvenes que pasan por nuestras aulas cada día, más de dos mil empleados entre docentes, personal administrativo, de apoyo y de servicios generales. En conjunto, la obra educativa Arquidio-cesana es una experiencia única en la Iglesia universal.

Educando con calidad a los más pobres.

Nuestras instituciones están así disemi-nadas por el Área Metropolitana dentro del territorio que comprende la Arquidió-cesis de Medellín. Es de destacar la gran presencia que se hace en los barrios pobres y marginados ofreciendo educación de calidad a los más necesi-tados. Son 11 los colegios que se encuentran en la periferia y que hace posible la educación a los niños de las familias sin recursos. En sus aulas recibieron formación durante el 2012 alrededor de 8.560 estudiantes: educa-ción gratuita y de calidad, subvenciona-da por cobertura educativa, fundacio-nes y donaciones, aportes de la Arqui-diócesis de Medellín y donaciones voluntarias. El año 2012 ha sido de grandes éxitos, para gloria de Dios y servicio de nuestros estudiantes.

La UPB entre las mejores de Colombia

Colombia cuenta con 286 Instituciones de Educación Superior. La Universidad Pontificia Bolivariana, sede Medellín, ha sido destacada, en la novena posición, como la mejor universidad de nuestro país, puesto establecido por “Ranking-U-Sapiens” 2011-2012. Este organismo internacional clasifica las universidades de acuerdo a los siguientes parámetros: según los avances investigativos y científicos que alcancen, según el número de grupos de investigación acreditados en Colciencias, según la cantidad de artículos especializados publicados en revistas indexadas, según el volumen de doctores y post-doctores docentes, entre otros ítems. Ocupar el noveno puesto pone a la UPB en la vanguardia de la investigación colombiana y la posiciona como una de las mejores en el contexto latinoamericano. Son destacables los avances científicos en investigación cardiovascular de la facultad de Medicina de la Universi-dad. ¿Qué significa este reconocimien-to? Que se está aportando de manera significativa al desarrollo de Colombia, que los estudiantes tienen la garantía de que serán los mejores profesiona-les, que la UPB hace ciencia.

Nuestros colegios entre los mejores del país

El ICFES, de acuerdo a los resultados obtenidos por pruebas Saber 11, hace una clasificación de los colegios. De los 23.365 establecimientos educati-vos que tiene Colombia según los datos estadísticos del Ministerio de Educación Nacional, destaca los 1.100 colegios de mejor desempeño. Dentro de los cuales se encuentran muy bien

Colegio Parroquial San Francisco de Asís

Unidad Educativa San Marcos

Colegio Parroquial San Buenaventura

Liceo Salazar y Herrera

Inst. Parroquial Jesús de la Buena Esperanza

Normal Antioqueña

Universidad Pontificia Bolivariana

Bachillerato masculino de la UPB

P. CarlosMario González

Hemos venido hablando de los impe-dimentos dirimentes que inhabilitan a la persona para contraer válidamente matrimonio si no precede, cuando es posible, una dispensa del Sr. Arzobis-po o de su Vicario general y ya hemos expuesto los impedimentos que nacen de circunstancias personales y objetivas y los que nacen de causas jurídicas. Continuando el tema de los impe-dimentos dirimentes nos encontramos con el tercer tipo de éstos que son los que nacen de delitos propiamente. Son ellos primero el Rapto (c.1089) que se presenta cuando un hombre, no al contrario, rapta a una mujer, es decir se la lleva sin el consentimiento de la misma, y en circunstancias especiales de su familia, para contraer matrimonio con ella sin importarle otra cosa que el cumplimiento de su deseo. Natural-mente que a ello van unidas las amenazas, las presiones, el miedo y el dinero. El segundo es el crimen (c.

1090) que sucede en el momento en que alguien, casado o casada por la Iglesia, se enamora perdidamente de otra u otro y para conseguir llegar libre a un nuevo matrimonio por la Iglesia, conservando en apariencia su compro-miso de fe, realiza u ordena el crimen de su cónyuge. Este impedimento es tan grave que su dispensa está reser-vada a la Santa Sede, es decir, no la puede conceder ni el Sr. Arzobispo de la arquidiócesis ni su Vicario general, debe solicitarse a Roma. El cuarto y último tipo de estos impedimentos dirimentes son los que nacen por parentesco. Aquí debemos considerar cuatro modalidades que la Iglesia determina claramente. La primera es la consanguinidad (c.1091) propia-mente dicha, es decir, la unión familiar que nace de un vínculo sanguíneo. El impedimento se presenta cuando el vínculo es muy próximo. Para dar mayor claridad al impedimento

tenemos que hablar de las dos líneas que se presentan en él, la línea recta que cobija a abuelo, padre, hijo, nieto, bisnieto, etc. y la línea colateral que, usando un tronco común, se abre a los hijos y a los hijos e hijos de éstos interrelacionándolos. De ahí vienen las denominaciones que usamos, tío, sobrino, primo. Este impedimento de consanguinidad prohíbe y no concede ninguna clase de dispensa ni en línea recta (padre, hijo, nieto), ni el segundo grado de la línea colateral, es decir, hermanos. El impedimento dispensable se da en la línea colateral de tercero y cuarto grado, es decir, entre tío y sobri-na y entre primos hermanos. De ahí en adelante no existe ningún impedimento invalidante para contraer matrimonio. A este impedimento de consangui-nidad se asemejan las tres modalida-des restantes que no implican vínculos sanguíneos sino sociales. La primera es la afinidad (c.1092), que afecta la relación entre los cónyuges y sus respectivas familias. El matrimonio está prohibido en línea recta sin dispensa especial, es decir entre uno de los cónyuges ya viudo y el hijo o hija o padre o madre del otro. La segunda es

la pública honestidad (c. 1093) que se da cuando una pareja convive sin matrimonio católico y crea el mismo impedimento en línea recta que el anterior. Finalmente el parentesco legal (c. 1094) que se genera por la adopción e impide el matrimonio sin dispensa especial en línea recta y en segundo grado de línea colateral, es decir con el padre o madre adoptantes y con los hermanos de adopción.

nulidad matrimonialLas causas de

M. RodrigoDurangoEscobar

Como regalo de navidad es la llegada del tercer libro del Santo Padre que habla de la Infancia de Jesús, que complementa una excelente trilogía que nos ayuda a prepararnos, adecuada-mente, para vivir el tiempo de adviento y celebrar con júbilo la fiesta de Navidad.El primer capítulo está dedicado a la genealogía del Salvador en los evange-lios de Mateos y Lucas, muy diferentes uno del otro, pero ambos con el mismo significado teológico-simbólico: la colocación de Jesús en la historia y su origen verdadero como principio; un nuevo inicio en la historia del mundo.El tema del segundo capítulo es el anun-cio del nacimiento de Juan Bautista y el de Jesús. El Papa, releyendo el diálogo entre María y el arcángel Gabriel según el evangelio de Lucas, explica que, a través de una mujer, Dios busca “una nueva entrada en el mundo”. El tercer capítulo está centrado en el acontecimiento de Belén y en el contexto histórico del nacimiento de Jesús: el impero romano que -bajo Augusto- se extiende de Oriente a Occidente y, con su dimensión universal, permite la entra-da en el mundo de un “portador universal de salvación” es ,efectivamente, “la plenitud de los tiempos”. A los Reyes Magos, los sabios que vieron surgir la estrella “del rey de los judíos” y fueron a adorarlo y a la fuga a Egipto, está dedicado el cuarto capítulo. Las figuras de los magos están dibuja-das como un emblema fascinante de la inquietud, de la búsqueda y de la expec-tativa interior del espíritu humano. Por último, el final, con el relato -según el evangelio de Lucas- del último episodio de la infancia de Jesús; de la última noticia que tenemos antes del principio de su vida pública con el bautismo en el río Jordán. Es el episo-dio de los tres días, durante la peregri-

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nación de Pascua, en que Jesús, con doce años, se aleja de María y de José para quedarse en el Templo de Jerusa-lén discutiendo con los “doctores”. Él, que “crecía en sabiduría, edad y gracia”, se manifiesta aquí en el misterio de su naturaleza de verdadero Dios y, al mismo tiempo, de verdadero hombre que “piensa y aprende de modo humano”.P.D. Las palabras del Santo Padre en el libro “La Infancia de Jesús” sobre el buey y la mula son: “El pesebre hace pensar en los animales, pues es allí donde comen. En el Evangelio no se habla en este caso de animales. Pero la medita-ción guiada por la fe, leyendo el Antiguo y el Nuevo Testamento relacionados entre sí, ha colmado muy pronto esta laguna, remitiéndose a Isaías 1,3: ‘el buey conoce a su amo, y el asno el pese-bre de su dueño; Israel no me conoce, mi pueblo no comprende’”

Desde el 3 de diciembre el Santo Padre Benedicto XVI comenzó su participación oficial a través de las redes sociales, en especial a través de la red llamada “Twitter”. que tendrá ocho perfiles en ocho idiomas que son español, italiano, portugués, alemán, polaco, árabe, inglés y francés, el usuario escogido en espa-ñol ha sido @pontifex_es. Igualmente se podrá descargar una aplicación para teléfonos inteligentes que se ha denomi-nado “The Pope App” o la aplicación del Papa, en español, que permitirá, a todos los que la descarguen, tener las activida-des del Papa durante las 24 horas del día incluso en audio, video o texto. Esta red social de los 140 caracte-res y con la aplicación “The Pope app” se

jefecomunicaciones@arqmedellin.com

Sobre la Infancia de Jesús, un gran regaloque nos da el Santo Padre

prepara para acoger de nuevo al Papa, quien manifestó, a su vez, la voluntad de lograr hablar de Dios a todos los hombres con todo medio posible. El Santo Padre nos recuerda la fundamen-tal y originaria importancia de la comuni-cación para la transmisión de la fe. Habló de un método de Dios en la comunica-ción, el método de la humildad, de forma que Dios no dudó en hacerse uno de nosotros para mostrarse. Habló de Jesús comunicador que se dirigió a los hombres de su tiempo usando su lenguaje. El Papa, entrando en el mundo de la comunicación digital, realiza un gesto cuya originalidad se halla en la historia misma de la Iglesia.

El Papa en twitter y con una aplicación para“Smartphones”

“Los discípulos de Jesús al Servicio del Altar abrimos la Puerta de la Fe”, fue el lema con el que más de 1000 niños se dieron cita el pasado 2 de diciembre en la Catedral Metropolitana para celebrar la Eucaristía con la que se abrió el tiempo de Adviento, la cual fue presidida por el Señor Arzobispo, quien valoró enormemente el servicio que los niños y niñas prestan en el Altar y les señaló que ellos son privilegiados y que por lo tanto deben ser modelos en la vida cristiana.

ENCUENTRO DE SERVIDORES YSERVIDORASDEL ALTAR

“Señor te doygracias porque me llamas nuevamentea tu servicio”

El Curso se ha pensado para que puedan participar católicos y no creyentes, para los católicos practicantes la “categoría verificadora” será LA CARIDAD, para los no creyentes yno practicantes de la Fe la “categoría verificadora” será LA JUSTICIA; porque el Periódico Misión está destinado a todos, inclu-so para personas que tienen otras confesiones religiosas, para ellos utilizare-mos la “categoría” BIEN COMÚN. Estas categorías éticas las explicaremos en el3 tema…Por ahora veámoslo esquemáticamente:

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P. LuisFernandoArroyave

Recuerda que por el carácter misionero del Periódico de nuestra Arquidióce-sis de Medellín, debes compartirlo con personas alejadas de la Fe, no creyentes y personas que tienen otras confesiones religiosas… ¡¡¡eso es Misión!!! Y en este AÑO DE LA FE es absolutamente necesario que compar-tamos con otros la riqueza de nuestra Fe. Personas de todas las edades y niveles educativos pueden acceder a este Curso, para UNIVERSITARIOS/PROFESIONALES se sugerirán algu-nas lecturas de profundización, igualmente para POLÍTICOS, EMPRESA-RIOS y personas del ámbito CULTURAL.Este Curso a diferencia del Curso Bíblico no será abierto… necesariamente formalizaremos una INSCRIPCIÓN a través de un correo electrónico que se asignará para hacer seguimiento a los distintos módulos que desarrollare-mos. Tienes 2 opciones:- Leer contenido del Curso cada mes (igual al Curso Bíblico) para adquirir conocimiento…- Formalizar la participación con una inscripción que permita CERTIFICAR ante tu párroco que una vez finalizado el Curso eres idóneo para fortalecer EL COMITÉ DE ACCIÓN CARITATIVA de tu Parroquia. Para los no creyen-tes o personas de otras confesiones religiosas aunque no tengan una misión dentro de la pastoral de la Iglesia Católica se pueden acercar al párroco y

compartir con él las inquietudes que vayan surgiendo a lo largo del Curso. Aunque el Curso tiene por destinatarios al grupo de personas que mencionamos, se privilegiará LA FORMACIÓN DE LOS LAICOS que hacen parte del COMITÉ DE ACCIÓN CARITATIVA para respon-der en parte a los Programas Pastorales de la Arquidiócesis de Medellín.

Destinatarios del Concurso

CatólicoNo creyentesPersonas con otras confesiones religiosas

Categoría ético-teológica

CaridadJusticiaBien común

La Doctrina Social de la Iglesia(en adelante DSI) se ha formado a través de los siglos por las numerosas enseñanzas de los Papas sobre temas políticos, sociales, económi-cos y culturales. La DSI no es una “ideología” sino una reflexión creyen-te sobre las realidades sociales a la luz del Evangelio para construir sociedades justas y en paz. Desde el Antiguo Testamento encontramos luces sobre la vida social, y el Señor Jesús también dio enseñanzas sobre temas que afec-tan la vida comunitaria; sin embargo, la primera gran respuesta a los problemas sociales la dio el PAPA LEÓN XIII en una Carta Encíclica que se llama “DE LAS COSAS NUEVAS” (en latín: Rerum novarum) en el año 1891. Ahí el Santo Padre examina la condición de los trabaja-dores asalariados, especialmente la situación de indigna miseria que sufrían los obreros de la industria. León XIII (1810-1903).

El contexto histórico de esta gran Encíclica es LA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL, el sistema capitalista entraba en una gran crisis que duró de 1873 a 1896, el gran problema que se enfrentaba en la sociedad era EL DESEMPLEO, El Papa León XIII propondrá soluciones acordes a la verdad y equidad. Como te puedes dar cuenta en estos últimos años también hemos afrontado crisis económica (después estudiaremos la diferencia entre “crisis” y “rece-

sión”), y el desempleo es otro proble-ma que hoy vivimos y es tan antiguo como el trabajo humano.

TAREAS Y ACCIONES PARA LA VIDA:

En la próxima edición estudiaremos cuál es EL DESIGNIO DE DIOS PARA LA HUMANIDAD, por lo tanto, hay que tener claridad sobre los compromisos que implica LA ALIAN-ZA:

Escribe los 10 Mandamientos.¿Cuáles Mandamientos se refieren a la fidelidad a Dios?¿Cuáles Mandamientos tienen que ver con las relaciones sociales del Pueblo de la Alian-za?

Consigue una lámina/dibujo/foto que muestre un problema social que afecta directamente tu comunidad…En la próxima edición daremos el correo electrónico para que formalices la inscripción y envíes las tareas que cada mes propo-nemos; un equipo de laicos me ayudará a revisar tareas para hacer seguimiento al curso y así certificarlo cuando termines.Ingresa a www.vatican.vaNavega siguien-do esta ruta:

Sumos Pontífices / León XIIIEncíclicas (a la izquierda de la página)Rerum novarum (En español o el idioma que quieras leer)Tienes un mes para leer la Encíclica: escribe las ideas que consideres fundamentales. Realiza un resumen de 2 a 3 páginas (máximo), lo vamos a necesitar para comprender cómo evoluciona el pensa-miento social de la Iglesia.

León XIII (1810-1903)

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¡¡¡Bienvenid@sal Curso 2012-2013 de Doctrina Social de la Iglesia!!! Está diseñado para “principiantes” o “inexpertos” en temas de LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA.

¿Estás list@? ¡¡¡Iniciemos de

inmediato el Curso!!!

dsi@arqmedellin.com

Hemos cumplido un año de circulación en la Arquidióce-sis de Medellín. Al Señor Arzobispo muchas gracias por encabezar este medio y dedicar mes a mes un buen rato de su tiempo. A los más de cien mil lectores mensuales nuestros más sinceros agradecimientos. A nuestros patrocinadores mil gracias por creer en nuestro medio pastoral. A las 135 parroquias que mes tras mes hacen sus aportes para que circule gratuitamente Dios les pague. Al Comité Editorial, que bueno que creyeron en este sueño hecho realidad. A los articulistas, bendicio-nes por sus letras y pensamientos plasmadas en este medio para formación del pueblo de Dios. Al equipo de Diseño y Comunicación gracias por su creatividad y dedicación sutil para que sea impactante el diseño y la proyección del pensamiento de la Iglesia. A los Vicarios Episcopales y Arciprestes muchas gracias por la logísti-ca y distribución de MISIÓN. A la Iglesia Arquidiocesa-na de Medellín muchas gracias por acoger este nuevo medio de evangelización y formación en la fe y en la vida humana y cristiana.

Al iniciar un nuevo año renovamos nuestro compromiso de proyectarnos como un medio orientado a la evangeli-zación, a la información y al actuar pastoral de la Arqui-diócesis de Medellín.

Agradecemos a todos ustedes la fidelidad de lectura y la valoración que han manifestado al esfuerzo de la Arqui-diócesis, de los articulistas, y de todo el equipo que hace posible que MISIÓN llegue a cada uno de ustedes.

ANIVERSARIO