revista dma – ampliad la mirada: anuncio (julio – agosto 2015)

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AMPLIAD LA MIRADA: ANUNCIO

2015Año LXII Mensualn. 7/8 Julio/Agosto

Poste Italiane SpA Spedizione in Abbonamento Postale D.L. 353/2003 (conv. in L. 27/02/2004 n° 46) art.1, comma 2 - DCB Roma

DMA spa 2015 07-08-8_Layout 2 16/07/15 09:33 Pagina 1

4EditorialAnunciadores en camino

5Primerplano6La Paz es el caminoPaz en Sri Lanka

8Mujeres en contextoUna mujer para otras mujeres

10Cultura ecológicaCorresponsablesdel futuro

12Hilo de AriadnaHeridos y heridores

Profundizaciones

pedagógicas bíblicas

y educativas

15DossierAnuncio, diálogo

27En búsqueda28Don y culturasEstilos de vida y gratuidad

Lecturaevangélica

de los hechos

contemporáneos

dmaRevista de las Hijas

de María AuxiliadoraVia Ateneo Salesiano 81

00139 Roma

tel. 06/87.274.1 • fax 06/87.13.23.06e-mail: [email protected]

Directora responsableMariagrazia Curti

RedacciónMaria Helena MoreiraGabriella Imperatore

ColaboradorasMaria Americo • Julia ArciniegasPatrizia Bertagnini • Mara BorsiCarla Castellino • Piera Cavaglià

Maria Antonia Chinello Anna Rita Cristaino • Emilia Di MassimoDora Eylenstein • Palma Lionetti Anna

Mariani • Adriana NepiMaria Perentaler • Loli Ruiz Perez Debbie Ponsaran • Maria Rossi•

Eleana Salas • Martha SéïdeGiuseppina Teruggi

2REVISTA DE LAS HIJAS DE MARÍA AUXILIADORAdma damihianimas

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30La PalabraEmaús: la revelaciónen el pan compartido

32Carisma y liderazgoUna casa en construcción

35Una mirada sobre el mundoJunto a los Rom

37Comunicar38Vida consagradaComunicación y misión

Informaciones

noticias novedades

del mundode los media

40VídeoLos niños saben

42LibroDe las periferias del mundo al Vaticano

44MúsicaEntre ciudades y periferia

46CamilaLas Buenas Noches están servidas

n.7/8 Julio Agosto 2015Tip. Istituto Salesiano Pio XI

Via Umbertide 11, 00181 Roma

ASSOCIATAUNIONE STAMPA PERIODICA ITALIANA

Traductorasfrancese • Anne Marie Baud

giapponese • ispettoria giapponeseinglese • Louise Passero

polacco • Janina Stankiewiczportoghese • Maria Aparecida Nunesspagnolo • Amparo Contreras Alvareztedesco • ispettoria Austria - Germania

EDICIÓN EXTRACOMERCIAL

Istituto Internazionale Maria Ausiliatrice

Via Ateneo Salesiano 81, 00139 Roma

c.c.p. 47272000

Reg. Trib. Di Roma n. 13125 del 16-1-1970

Sped. abb. post. art. 2, comma 20/c,

legge 662/96 – Filiale di Roma

3 AÑO LXII • MENSUAL /JULIO AGOSTO 2015dma damihianimas


rodea: los sufrimientos de los pueblos, el deseo de relaciones abiertas y densasde fraternidad, las esperanzas de los jóvenes, el bien hecho por muchas co-munidades esparcidas en todos los Con-tinentes.

La presencia que nos habita es la Palabraque reconocemos en el mandamientobondadoso de Jesús. Queremos ser ‘salde la tierra y luz del mundo’ con la fuerzaprofética de su Palabra. La Profecía se re-aliza en el compromiso de evangeliza-ción, de responsabilidad social y ecológi-ca, de gratuidad en las relaciones de fra-terna cercanía a todos, de apertura al diá-logo en la diversidad, de educación a lapaz en contextos de conflicto.

El anuncio es educar y educarnos a am-pliar la mirada para la construcción delReino de Dios y la fidelidad al carisma sa-lesiano. En el compromiso de anunciarnos unimos a los jóvenes, somos unafuerza como comunidad atestiguando labelleza del Evangelio en su integridad, ensu más profunda sencillez.

Siempre en camino, reconocemos la vozde Aquel que nos llama a anunciarlo conla vida, dispuestos a compartir la expe-riencia de los que se dejan guiar por elsoplo creativo del Espíritu de Dios.

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Anunciadores en camino

Maria Helena Moreira

Muchas son las ventanas que se abren enla perspectiva capitular: “¡Ampliad la mi-rada!”Queremos acoger esta invitación empu-jados por el fuerte deseo de abrazar nue-vos y sorprendentes horizontes. Para al-canzar la meta, sin embargo, hay que en-caminarse. El éxodo pide estar dispues-tos a buscar la mirada, a afinar la escuchaporque el Autor de esta invitación siguellamándonos.

Ampliad la mirada intentando abrirnos alanuncio para vivir el misterio de una Pre-sencia. Hacernos anunciadores de unaexperiencia que nos hace ‘casa’ habitadapor una Presencia que da significado a laPalabra.

En la escuela de la convivencia con Jesús,narrando su mensaje, los discípulos po-nen en práctica el mandato: “¡Id y predi-cad el Evangelio a todas las naciones!”.En esta misión son sostenidos por elMaestro, porque la esencia del mensajees Jesús mismo. El anuncio se convierteasí en experiencia, narración, testimo-nio de vida de los que se dejan transfor-mar por su Presencia.

Los discípulos de Emaús han vivido unencuentro que ha abierto de par en parsus ojos. Es aquí donde nace la mirada re-novada, capaz de acoger y conocer, consensibilidad nueva, la realidad que nos


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Profundizaciones

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Aproximadamente de 280.000 personas – ca-si siempre pertenecientes a la minoría tamilen el norte y en el este de Sri Lanka – fueronobligadas a vivir en campos de prófugos lle-nos de gente. En mayo de 2009, el ejército deSri Lanka ocupó la última de las zonas con-troladas por la Liberation Tigers of Tamil Ee-lam. El 18 de mayo de 2009, el presidente deSri Lanka Mahinda Rajapaksa declaró que laguerra civil finalmente había terminado. Laselecciones de 2015 han sido un signo de fu-turo, porque Maithripala Sirisena se ha con-vertido en Presidente derrotando al ex pre-sidente Mahinda Rajapaksa implicado en loscrímenes de guerra.Sri Lanka está aún en una fase de post-con-flicto. El país está todavía ásperamente divi-dido y los esfuerzos de reconciliación vaci-lan. Centenares de hombres, mujeres y ni-ños han muerto y muchos otros llevan den-tro de sí las cicatrices de la guerra que les hahecho frágiles psicológica, física, social ymoralmente.

Las fma en Sri Lanka: proyectos de pazAl final de la guerra civil con el País dolientepor las consecuencias del Tsunami destructi-vo del 2005, 6 fma de la Inspectoría india deChennai, audaces y valientes, llegaron a SriLanka por invitación del inspector Don AntonyHumer sdb y por voluntad de la Madre Gene-ral M. Ivonne Reungoat. La inspectoría deChennai asumió así la responsabilidad de lamisión que se ha inauguró oficialmente el 30

Sri Lanka, situado en la punta meridional de India y en posición estratégica por las principales rutas marítimas del Océano Índico, es conocida como la “Perla en el Océano Índico” y una “Tierra de gente sonriente”.

Motivos del conflicto

En el siglo V a.C., los emigrantes indoarianosdel norte de la India se establecieron en laisla y ahora son llamados singaleses. Des-pués de dos siglos, un grupo más pequeñodel Tamil Nadu, los Tamil han migrado alNorte de este País. Desde el comienzo de suasentamiento en la isla hubo un conflictoentre los dos grupos étnicos – Tamil y Singa-leses – que se intensificó después de la In-dependencia. En 1976 se constituyó la Libe-ration Tigres of Tamil Eelam (organizaciónseparatista militante, LTTE), que aumentó latensión en las zonas dominadas por los Ta-mil. En 1981 los policías Sinhala fueron acu-sados de haber quemado la biblioteca pú-blica de Jaffna, provocando un ulterior re-sentimiento en comunidades tamil, mien-tras en 1983 trece soldados fueron asesina-dos en una emboscada LTTE, desencade-nando revueltas anti-tamil que llevaron a lamuerte a centenares de tamil. Fue el iniciode la “Primera Guerra Eelam”.

El final de la guerra y el alba de la paz

La guerra civil en Sri Lanka duró más de 30años y provocó más de 100.000 víctimas.


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Sri LankaKanickaraj Tamizharasi


de junio de 2008 en presencia de los inspec-tores/ras de India, numerosos sacerdotes, her-manas, bienhechores, jóvenes y niños. Hoy lasfma tienen cuatro comunidades.

En Nochchiyagamma, donde la población espreferentemente budista singalesa, el 30 dejunio del 2008 se inauguró la primera escue-la para muchachas y para los prófugos deguerra. Una ocasión para iniciar contactosregulares con las familias y ofrecerles toda laayuda requerida. Las hermanas acompañana la gente, a través de itinerarios de paz y dereconciliación, a curar, perdonar y vivir enpaz. La comunidad trabaja también en la pa-rroquia, y acoge a las muchachas deseosasde emprender un camino espiritual en bús-queda del proyecto de Dios sobre su vida.La primera fma es Sor Usha Nanthini apenasprofesa y hay 3 novicias, 2 postulantes y 3 as-pirantes en formación.

En Negombo las hermanas viven en un apar-tamento “Boscopura” entre la gente: vícti-mas del tsunami y dispersados. Sor Mary

Ann Fernando, la directora, dice: “Acogemosa las jóvenes tamil y singalesas en nuestracasa. La instrucción favorece el conocimien-to y aceptación mutua. Aprenden los dosidiomas nacionales, a relacionarse y acoger-se con sus diferencias culturales. El 21 deabril de 2014 en Kochchikade se inaugurótambién una casa de formación con 5 mu-chachas”.

En Vavunya está la casa ‘Don Bosco’ para la re-habilitación de los niños ex-soldados y delos huérfanos de guerra, inaugurada el 17 deseptiembre de 2009. Aquí las hermanas orga-nizan seminarios, momentos de oración, el‘counselling’ personal y de grupo, son alrede-dor de 70 los huérfanos de guerra ayudadosa curarse de las heridas que llevan dentro desí. Hasta hoy 14 jóvenes han sido acompaña-das a emprender con alegría la vida familiar,89 muchachas han regresado a las familias deorigen. La directora Sor Metilda Fernandodice que al inicio las muchachas eran rebel-des, indiferentes y era muy difícil educarlas apedir excusa y perdón, pero el cuidado, elafecto, las intervenciones formativas de lacomunidad, las han cambiado.El obispo de Jafnna ha invitado a las fma ensu diócesis. El 15 de octubre de 2011 se ini-ció una nueva presencia en Jafnna con 2hermanas. La comunidad está al servicio dela parroquia y acoge a los niños víctimas dela guerra. Sor Kanickaraj Shanthi Selvi, la di-rectora, explica que la comunidad promue-ve la paz entre la gente del lugar con las visi-tas a las familias, sobre todo aquellas másproblemáticas, reza con ellos y hace ‘elcounseling’ a sus miembros. Enseña a los ni-ños de la escuela y a las muchachas del Cen-tro de formación profesional, los valores delperdón y de la honestidad. Animan a la gen-te a acercarse al sacramento de la reconcilia-ción, que es el medio potente para promo-ver la paz en la familia y en la sociedad.

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“La paz en el mundo inicia en elcorazón de cada persona hu-mana”. Las fma en Sri Lanka es-tán convencidas de esto y lanzansu mensaje de unidad y comu-nión, de curación de las heridasy de construcción de relacio-nes de paz con la pasión del “Damihi animas” y con la invitaciónde María Dominica Mazzarello,“A ti las confío”. Las fma vanadelante con valentía y confian-za, ampliando la mirada, para sermisioneras de paz y de esperan-za con el pueblo de Sri Lanka.


mujer de fe y de oración, afrontó con valen-tía la enfermedad del cáncer. El 27 de abrilconcluyó su vida a la edad de 53 años.

Una vida a paso de mujer

Sor Bernadette fue una mujer creativa y te-naz, sencilla y colaboradora, supo implicar apersonas y entes para promover los dere-chos de los niños y de las mujeres.Su experiencia ha sido una respuesta con-creta contra la violencia y el subdesarrollopara la dignidad femenina en muchos Paísesdel mundo. “El nivel de explotación de lasmujeres es fuerte – afirmaba en una entre-vista a un diario -, por lo cual, sólo con el cre-cimiento de la autoestima y la potenciacióncultural, a partir de la alfabetización y forma-ción, las mujeres empiezan a entender quepuede haber una alternativa. Para superarlas discriminaciones enraizadas en la culturay en la sociedad es indispensable implicar alos hombres. La emancipación de las muje-res no es fin a sí misma, pero es ventaja de lasociedad entera”.Como representante del Instituto fma, diouna aportación competente a la Comisiónon the Status of Women (CSW) en la sede dela ONU en Nueva York. Apasionada y deter-minada se comprometió para que el Insti-tuto fma pudiera conseguir el Estatuto con-sultivo en el Consejo económico y social(ECOSOC) de la ONU. Fue la persona clavepara el nacimiento de la Red Internacionalde Vida Consagrada contra la Trata de Perso-nas “Talitha Kum”. Favoreció la formación denuevas redes, sostuvo las campañas organi-zadas para el Mundial de fútbol en Sudá-

Una mujer para otras mujeresGabriella Imperatore

“Una mujer diminuta y enérgica, con grandes ojos expresivos y sonrientes” ¿Qué mejor homenaje? Narrar, dejar huella de los gestos y de las palabras de una mujer, que ha creado un network entre mujeres, para promover los derechos y la dignidad de las mujeres y de los niños en la India y en muchos Países del mundo.

Sor Bernadette Sangma de la Inspectoría fmade Shillong (INS), procede de una familiarica de fe que le ha dado una sólida forma-ción humana y cristiana. Eran 7: tres herma-nos y cuatro hermanas, de las cuales dos fmay un salesiano. A la edad de 18 años inició laformación y emitió la Profesión Religiosa el5 de agosto de 1984. En 1990 fue enviada aRoma a la Facultad Pontificia de Ciencias dela Educación “Auxilium”, donde en 1994 ob-tuvo la Licenciatura en Pedagogía distin-guiéndose por la capacidad de búsqueda y laapertura a la interculturalidad. En 1999 fue lla-mada a Roma, a Casa Generalicia, a colabo-rar en el Ámbito para la Familia Salesiana conatención a la situación de la mujer y a la tratade los seres humanos, realidades que la hanencontrado no sólo sensible, sino activa-mente comprometida. En 2004 consiguió elDoctorado en Metodología de la educaciónen la Facultad Pontifica Salesiana (UPS). En2010 partió para África donde ha dado suaportación de competencia y pasión educa-tiva salesiana en el Instituto de Pastoral juve-nil de Nairobi. Desde 2013 Sor Bernadette,


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frica y las Olimpiadas invernales en Vancou-ver, organizó y preparó los Congresos de laRed en 2008 y 2009.“La trata no es una realidad lejana de noso-tros; sucede en nuestros barrios y golpea anuestros conocidos, las niñas y los niños denuestras escuelas y parroquias. Para contras-tar este fenómeno, es necesario ‘un acerca-miento hermenéutico para afrontar los múl-tiples aspectos de sus causas, para resanar yacompañar el camino de reconstrucción dela vida de los que están implicados y heridosy para crear consensos y acuerdos en las po-líticas de decisión a todos los niveles’.”Es una necesidad que llama en causa a mu-chas Congregaciones que con sus multifor-mes carismas pueden ofrecer respuestas di-ferenciadas y complementarias: “ningún ca-risma puede sentirse extraño al fenómenoque pisotea todo derecho fundamental ydignidad de la persona humana, que pro-porciona sufrimientos devastadores a mu-chas mujeres o, peor, a niñas y niños inde-fensos”. (Relación en el Congreso 2009, Reli-giosas en red contra la trata).


Una mujer sonriente y audaz

Bernadette supo conquistar con la sonrisa,su ternura y generosidad los corazones de lagente y de muchas mujeres que en ella si-guen creyendo que el cambio es posible.Mujeres en contexto es el título de la seccióncuidada por ella hasta 2014 para la revistaDMA del Instituto FMA. Su atención cons-tante y el diálogo con la cultura contemporá-nea le permitieron compartir experiencias ytestimonios concretos de promoción de lamujer, en muchas naciones, en la óptica dela reciprocidad.Aún teniendo como destinatarias a las muje-res, su acción pasa a través de la sensibiliza-ción de toda una comunidad, con base en ra-íces precisas: “Todo parte de la formaciónespiritual que revaloriza la dignidad de lamujer, creada a imagen y semejanza de Dios”,explica Sor Bernardette. Esta universalidadpermite también trabajar en contextos hete-rogéneos, donde las diferencias religiosas yétnicas son causa de sangrientos choques, fa-voreciendo en cambio un diálogo eficaz, ca-paz de superar las barreras de los antagonis-mos, en el respeto de las diferencias.Una red de mujeres lugar del diálogo, muje-res que trabajan juntas a favor de la vida. Eneste espacio abierto a la reciprocidad, pue-den desembocar las flores de la aportaciónespecífica de la identidad femenina a la so-ciedad, flores que dan frutos también en elcampo de la sostenibilidad y de la paz. Es lapaz que pasa a través de las relaciones inter-personales, mujeres en red que se ponenjuntas para construir comunión.Sor Bernadette no tiene dudas: “Es la relaciónde reciprocidad entre hombre y mujer, la di-ferencia fundamental, que puede diseñar elprimero de muchos círculos concéntricosde justicia y de paz”.Hechos, no palabras.

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cias del presente, sino también a las del fu-turo. “Herederos de las generaciones pasa-das y beneficiarios del trabajo de nuestroscontemporáneos, tenemos obligacionespara con todos, y no podemos desinteresar-nos de los que vendrán después de noso-tros a agrandar el recinto de la familia huma-na. La solidaridad universal, que es un he-cho y para nosotros un beneficio, es ade-más un deber”.Se trata de una responsabilidad que las ge-neraciones presentes tienen respecto a lasfuturas, una responsabilidad que pertenecetambién a cada uno de los Estados y a la Co-munidad internacional” (CDS nº 467).Este llamamiento es una llamada fuerte yuna invitación a arremangarse las mangas ycomprometerse, tanto a nivel micro comomacro, para crear las condiciones a fin deque las futuras generaciones que habitaránel Planeta después de nosotros, no tenganque pagar por nuestras opciones egoístas,sino que podamos gozar de los resultadosde nuestro compromiso como consumido-res responsables.

Consumidores responsables

Según diversos proyectos de educación am-biental, el consumidor responsable es aquelque reflexiona sobre las consecuencias quesus adquisiciones, su estilo de vida, sus op-ciones cotidianas pueden tener en el am-biente y en la sociedad. Se trata de aprendera hacer opciones de consumo según crite-rios éticos que no pesen en el ambiente, enlos animales, en las personas y en nuestraconciencia (www.eat-ing-net). Por esto es

Corresponsablesdel mañanaMartha Séïde

“Actúa de forma que las consecuenciasde tu acción sean compatibles con la permanencia de una auténtica vida humana sobre la Tierra” (Hans Jonas).

Esta afirmación del filósofo Hans Jonas esuna invitación a afrontar con lucidez y res-ponsabilidad el gran reto ecológico delmundo de hoy. En efecto, por las últimas re-laciones de la ONU, confirmadas por innu-merables investigaciones científicas, está yademostrado que hoy la vida sobre la tierraestá amenazada. El futuro de nuestro Plane-ta está en peligro y paradójicamente, la in-tervención humana está considerada porlos estudiosos la primera causa de destruc-ción de la biodiversidad (www.wwf.it). Estasituación consolida la convicción de quetodos estamos interconectados y, por lotanto, cada una de nuestras acciones, hastala más insignificante tiene consecuenciasrelevantes sobre el equilibrio del Planeta ysobre el futuro de todos. Por lo tanto, es ur-gente que todos los seres humanos seanconscientes de los efectos que provocansus acciones y que se hagan cargo de susresponsabilidades.

Todos responsables

La Iglesia no cesa de llamar la atención desus fieles y de todas las personas de buenavoluntad para asumir con responsabilidadesta tarea: “La responsabilidad para con elambiente, patrimonio común del génerohumano, se extiende no sólo a las exigen-


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indispensable apostar por la educación des-de la tierna infancia para crear esta concien-cia de la corresponsabilidad del futuro delPlaneta y de consecuencia de la humanidad.A este respecto, existe una pluralidad de ini-ciativas sencillas y pequeños gestos que to-dos pueden realizar para cultivar esta acti-tud y para capacitar a las jóvenes generacio-nes a elegir el futuro del Planeta.(cf. Il decalogo del consumatore responsabi-le en http:www.eat-ing.net/attach/tucosa-puoifare.pdf).

Elige tú el futuro del planeta

La Asociación del Centro nacional de lasObras Salesianas en el sector de la escuela(CNOS/Scuola) en Italia, respondiendo alreto educativo, ha aprovechado la ocasióndel evento Expo Milano 2015 para lanzar unEdicto nacional con el fin de acompañar alos alumnos de las escuelas salesianas y re-flexionar sobre la responsabilidad a asumir

respecto a nuestro Planeta. Se trata de hacerrenacer en los estudiantes el conocimientode lo que les rodea, en cuanto la vida de-penda de los recursos ambientales, decuanto estamos en grado de alterar losequilibrios hombre-naturaleza a través denuestras costumbres y, por lo tanto, decuanto somos responsables de nuestro fu-turo y del futuro del Planeta.La salvaguardia de los recursos hídricos,energéticos y ambientales no se entenderácomo una regla impuesta desde fuera, sinocomo una buena praxis que brota del ínti-mo conocimiento de ser responsables delambiente. El CNOS/Scuola sugiere elaborartrabajos teniendo en cuenta la riqueza debi-da también a la presencia, en Italia, de mu-chachos de diversas culturas. Los ganadoresserán invitados a presentar los trabajos rea-lizados a EXPO Milano 2015 (cf. Regolamen-to Bando, en http://www.cnos-fap.it).

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Casa don Bosco en Expo Milano 2015La Familia Salesiana ha inaugurado el pabellón Casa Don Bosco en Expo Milano 2015,el 1 de mayo de 2015. Para la Familia de Don Bosco, dos son las apuestas vencedoraspara la sostenibilidad y el futuro del planeta: la opción educativa y el protagonismo delos jóvenes. Don Bosco decía, en efecto, que “los jóvenes son la porción más precio-sa y más delicada de la sociedad humana”.En el año del Bicentenario del nacimiento de Don Bosco, sus Exalumnos/as, los delas Hijas de María Auxiliadora junto a los Amigos de Don Bosco, se han movilizadopara la iniciativa “Damos Casa Don Bosco”. En signo de agradecimiento y gratitudhacia Don Bosco y la Familia Salesiana, han decidido activar una cosecha para dar“Casa Don Bosco” a los muchachos de Ucrania a fin de que se convierta en un lugarde escuela y educación para la vida, que pueda representar para muchos jóvenesuna experiencia de vida.

Estás invitado/a a habitar Casa Don Bosco, visitando el sitio:http://www.expodonbosco2015.org/site/it/news

LUZCONTRA


actitud inadecuada, en el temor de perdera la persona que ha sido y que podría sertodavía un punto importante de referenciaen la vida.En cambio, los tipos más bien introvertidospueden ser tentados de tomar distancias,de cerrarse y de rebuscar continuamentesobre cuanto ha acaecido, experimentan-do fuertes sentimientos de rabia, de odio yde rencor respecto a quien los ha herido.Al inicio, estos sentimientos pueden serfuerzas que ayudan a distanciarse de lapresencia embarazosa del que produce lahenda, pero con el paso del tiempo, si sedejan acumular en el ánimo, se hacen pe-sadillas del otro, envenenan la vida, redu-cen y empobrecen las relaciones interper-sonales y pueden también hacer más vul-nerables las manifestaciones de algunostrastornos psicosomáticos. Algunas personas, teniendo en la espaldauna educación religiosa más bien rígida ypor lo tanto estando estimuladas por unexcesivo sentido del “tener que ser”, no to-leran sentir en ellas el surgir de sentimien-tos negativos de hostilidad. Quisieran per-donar en seguida la ofensa recibida y olvi-dar. Creen que perdonar la ofensa padeci-da depende de la voluntad, que basta que-rer firmemente. Intentan, pero inútilmen-te; la herida continúa quemando dentro. Y,no logrando olvidar como quisieran, searrastran dentro pesados sentidos de culpay de incapacidad.Una reacción que casi siempre mezcla a ca-si todas/os es el hecho de sentirse víctimas,

Heridos y heridores

Maria Rossi

Entre personas que viven juntas, sobre to-do cuando existe una relación de estrechaconvivencia como en la relación de parejay en la de normales comunidades religio-sas como las nuestras, es casi imposibleque no nazcan disensiones, litigios, incom-prensiones, mal entendimiento, actitudesque hieren. Cuanto más las relaciones per-sonales son íntimas y fraternas, más pro-fundas se hacen las heridas y el sufrimien-to intenso y doloroso, a veces también des-concertante.Quien hiere se hace para el otro/a una pre-sencia interior embarazosa que molesta yesclaviza, una presencia que estimula a re-buscar continuamente sobre cuanto ha su-cedido, reavivando, con el deseo de clarifi-cación, los sentimientos de rabia y de ren-cor, de odio y de venganza. Este “rumiarrencoroso”, como lo definen los estudio-sos, quita o sea como fuere limita la posibi-lidad de vivir serenamente, de pensar enotra cosa, de expresar en plenitud las pro-pias capacidades humanas, de ser positiva-mente creativos/as. No ayuda a perdonar ya curar, antes bien, puede favorecer el sur-gir de molestias psicosomáticas. Pero, nofaltan vías de salida, caminos de curación.

Posibles reacciones

Cada uno/a reacciona a la afrenta comopuede. Algunas personas, de carácterpronto, tienden a reaccionar con agresivi-dad, a expresar sin moderación y con tonosencendidos la rabia y el disgusto que expe-rimentan, culpabilizándose, luego, por la


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injustamente heridas por personas quehan sido ayudadas y favorecidas, por per-sonas que por posición o tarea habrían po-dido y debido ser sostén, ayuda, consuelo.Es difícil darse cuenta de haber sido y depoder ser también injustos/as heridores/as.Cuando uno/a reacciona con fuerza contraotro/a, generalmente lo hace para restable-cer un equilibrio de justicia roto anterior-mente. Y sin embargo, no es raro herir in-conscientemente a veces también solo conllevar una vida más comprometida y honra-da de la del grupo de convivencia. En reali-dad somos todos/as los posibles “crucifica-dos” y “crucificadores”.

Pasos de curación

Querer perdonar es importante, pero unacto de voluntad no es suficiente. Las ofen-sas, las “heridas” si bien conciernen sobretodo a los sentimientos, implican a toda lapersona. Y para que el perdón no quede enuna buena intención expresada a nivel devoluntad y las heridas puedan cicatrizarse,es necesario tener presente que se trata deun proceso complejo, de un camino no fá-cil ni lineal, de una peregrinación a reco-rrer por etapas y sin forcejeos de tiempo.Desde hace algunos decenios, también lasciencias psicológicas han descubierto elfuerte valor terapéutico del perdón. En laactual ya abundante literatura, tanto cientí-fica como religiosa, se proponen intere-santes métodos y se ofrecen preciososconsejos para la curación. Estos son emple-ados sobre todo en las escuelas y en loscursos de formación que se proponen sos-tener a las personas heridas en el fatigosocamino de liberación de la presencia em-barazosa del heridor y de los sentimientosnegativos para curar. Aludo a algunos quepueden ser utilizados también individual-mente.Una gran ayuda, experimentada por gene-

raciones en el ámbito religioso y actual-mente confirmada también científicamen-te, es la oración como confianza en unaPersona que comprende y que puede venira socorrer. Algún Autor sugiere ponersedelante del Crucifijo y, pensando en la per-sona que ha ofendido, repetir, con todo elsufrimiento que se lleva dentro, la oraciónde Jesús: “Padre perdónales porque no sa-ben lo que hacen”. Si se hace con constan-cia, esta u otra oración, es posible experi-mentar gradualmente un sentido de libera-ción; el paso de la rabia, de la angustia a lacompasión. Y cuando quien ha herido pro-duce lástima ya no es un pedrusco queaplasta, ya no está dentro, sino que estáfuera, distanciado y privado de su podernegativo.Algunos Autores afirman que las dificulta-des para perdonar están unidas a menudoal hecho de la no aceptación de uno mis-mo. Lytta Basset y Bellini E. subrayan un li-bro suyo sobre el perdón: “Perdonar esempezar a aceptarse uno mismo”. Aceptary elaborar todo lo que forma parte de unomismo, desde el aspecto físico a las carac-terísticas psicológicas cognitivas emotivas,al propio estado social y a la propia historiasin remover o excluir fragmento alguno, esuna buena premisa a no dejarse herir de-masiado profundamente y a curar más fá-cilmente. Si una persona, por ejemplo, noha aceptado un defecto físico suyo, unabroma en sí misma es inocua, podría llevar-la a un sufrimiento y a una reacción apa-rentemente exagerada. La broma hace da-ño porque, tocando el punto débil, reabreuna herida no cicatrizada.Una cosa importante es la de aceptar sentiry resentir el sufrimiento que el otro/a haprovocado sin desalentarse por el normalresurgir de los sentimientos de rabia, deodio y de venganza. A veces, para sobrevi-vir a la afrenta, se tiende a remover, pero



tencias y habilidades sociales. Se trata deun conjunto de características tempera-mentales, cognitivas y emotivas, que pre-disponen a la apertura y a la comprensiónde los demás. Algunas de estas capacida-des son la capacidad de escucha respetuo-sa y empática; el sentido del humorismo; lacapacidad de relativizar; la atención a la hi-giene y a una digna presentación de unomismo; el creer que, haciendo hincapié enlos recursos humanos de la resiliencia y enla fuerza que viene de la oración, es posi-ble superar odios, rencores y sentidos deincapacidad.Las habilidades sociales se aprenden gene-ralmente en familia, pero son también fru-to de opciones personales. Como la resi-liencia, se pueden mantener, perfeccionar,pero también dejar deteriorar. Se apoyanen la autoestima, en la percepción de lapropia competencia, en la asertividad, en laempatía, pero sobre todo en aquel sentidode serenidad y de bienestar profundo queviene del conocimiento que la propia vidaha sido y es significativa. La vida de las per-sonas consagradas, si bien no físicamente,sea como fuere ha contribuido de mil ma-neras a engendrar y hacer crecer la vida. La atención a cultivar estas habilidades,además de prevenir disensiones y heridas,facilita el desarrollo, el mantenimiento y la“nueva costura” de las relaciones sociales yfraternas, tan importantes en las conviven-cias y también en la vida de las comunida-des religiosas. Las habilidades sociales sontambién una gran ayuda en la misión edu-cativa. Estas, mientras contribuyen a respe-tar, a comprender, a hacer crecer y a no he-rir a las personas cercanas, indirectamentecooperan también a poner fin a todasaquellas guerras que dejan heridas que searrastran en generaciones y a la creaciónde la tan suspirada paz.

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cuanto se ha removido queda dentro, mo-lesta y siempre puede resurgir con toda sufuerza angustiosa y desestabilizadora. Al-guno/a cree que hay que olvidar, pero noes posible olvidar algunas situaciones nihay que hacerlo. Todo, formando parte denuestra historia que es, sea como fuere,historia “sagrada” hay que aceptarlo. Es im-portante encontrar la fuerza y la valentía demirar a la cara la situación, no dejar sedi-mentar en el ánimo los sentimientos nega-tivos, sino soportar y elaborar el dolor parapoder gradualmente liberarlo del peso delas emociones negativas y curar.Para facilitar la curación, también es útil dar-se cuenta de que somos todos/as posiblesheridores/heridoras. El conocimiento deque se puede herir también sin quererlo,hace verdaderos/as y humildes, capaces deuna mirada de misericordia, porque com-prende que quien ha herido lo ha hechoquizás porque a su vez ha padecido pesa-dos maltratos y por lo tanto, aún sabiendo,no sabía lo que hacía. Es de gran ayuda sa-ber, como las ciencias están abundante-mente demostrando y la experiencia confir-ma, que somos resilientes, que poseemos,es decir, energías y recursos suficientes pa-ra superar las dificultades y el estrés.

Para prevenir

Una atención que podría/debería interesara todos/as y distinguir en particular a lasFMA, es la prevención. El Sistema Preventi-vo de Don Bosco forma parte de nuestraespiritualidad. Para prevenir y evitar los sin-sabores que comúnmente nacen en la con-vivencia comunitaria, bastaría, a veces, cul-tivar las virtudes caseras de la buena edu-cación, del respeto, de la paciencia, del re-conocimiento, virtudes que el Papa ha sin-tetizado simpáticamente en tres sencillaspalabras: “Permiso. Perdona. Gracias”.En ámbito psicológico se habla de compe-


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Ampliad la mirada


gracias al don del Espíritu: “Recibiréis lafuerza del Espíritu Santo, que vendrá sobrevosotros, y seréis mis testigos en Jerusalén,en toda Judea y Samaria, y hasta los confi-nes de la tierra”. (He 1, 8)La evangelización es obediencia al manda-to recibido y necesidad insustituible departicipar a otros la experiencia del Señor yla alegría que deriva de ello. San Juan, ensu Primera Carta escribe: “Lo que hemosoído, lo que hemos visto con nuestrosojos, lo que contemplamos y tocaron nues-tras manos, acerca de la Palabra de vida…os lo anunciamos, para que también voso-tros estéis en comunión con nosotros” (Jn 1, 1-4).La Iglesia es misionera por su naturaleza,lleva adelante en la historia el anuncioevangélico. Un anuncio que implica aquien ha encontrado a Cristo: parte del tes-timonio de la vida y se desarrolla en las másvariadas expresiones de educación a la fehasta la actividad misionera.

Testimonio y oración

Cristo se anuncia viviéndolo: “Convertidoen nueva criatura, el bautizado ha de vivir yactuar como tal. Tanto a nivel personal co-mo comunitario. En su rostro ha de res-plandecer el rostro mismo de Cristo. Estaes una verdadera y propia exigencia de suvital incorporación a Él en el sacramentodel bautismo”. (A. von Speyer, in Misticaoggettiva).Esta es una forma nueva de anuncio queimplica a todos y a todas. En la Evangeliinuntiandi Pablo VI afirma que el hombre

Anuncio, diálogo

Anna Mariani, Gabriella Imperatore

Transformados por el encuentro con Él, ellos vuelven sin demora a Jerusalén, ciudad de la Pascua y de Pentecostés, con el deseo de anunciar al Señor resucitado y de compartir la experiencia de felicidad plena que ha ampliado su mirada y su corazón (CG XXIII).

Llamados a anunciar

El anuncio del Evangelio es la característicade los discípulos del Señor. María Magda-lena, aquella la primera que encuentra y re-conoce a Cristo Resucitado, es el icono dela misionariedad propia de la vocación cris-tiana, cuya invitación es la de anunciar que“el Señor es el ¡Viviente!”.“¡He visto al Señor!” este es el anuncioque ofrece a todos María, esa sencilla mu-jer que lleva a todos el evento más extraor-dinario que se ha verificado en la historiade la humanidad.De aquí nace la exigencia de la fe que pre-supone la predicación y el testimonio delos que primero han acogido en su vida alSeñor Jesús.“Id, pues, y haced discípulos a todas lasgentes, bautizándolas en el nombre del Pa-dre y del Hijo y del Espíritu Santo, y ense-ñándoles a guardar todo lo que yo os hemandado. Y he aquí que yo estoy con voso-tros todos los días hasta el fin del mundo”.(Mt 28, 19-20).Una tarea ardua lo que el Señor confía asus discípulos, pero posible porque con-fortada por su presencia y hecha posible


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contemporáneo escucha con más ganas alos testimonios que a los maestros o, si es-cucha a los maestros, lo hace porque sontestimonios. Más que a las palabras, elhombre de hoy cree en los hechos. San Pe-dro en su carta (cf. 1 Pe 3, 1) escribe que“una vida santa y respetuosa conquista, sinnecesidad de palabras, a los que rechazancreer en la Palabra”. Forma parte de la eco-nomía de la salvación la llamada para losdiscípulos de Cristo a ser sal de la tierra yluz del mundo. Esta es la evangelización dela que habla el Señor: “Brille así vuestra luzdelante de los hombres, para que veanvuestras buenas obras y glorifiquen a vues-tro Padre que está en los cielos”. (Mt 5, 16).Una persona cercana a Dios irradia luz.Juan susultó en el seno de Isabel a la llega-da de María que llevaba a Jesús en su seno.El testimonio de una vida santa se hace, así,

exigencia para dar fecundidad al anuncio.“Es necesario que nuestro celo por la evan-gelización brote de una verdadera santidadde vida y que la predicación, alimentadapor la oración y, sobre todo, por el amor ala Eucaristía, a su vez, haga crecer en santi-dad a aquel que predica”.“El mundo, - afirma Pablo VI – que a pesarde los innumerables signos de rechazo deDios, paradójicamente lo busca a través decaminos inesperados y siente dolorosa-mente su necesidad, reclama evangeliza-dores que le hablen de un Dios que ellosconocen y que les es familiar, como si vie-ran al Invisible. El mundo exige y espera denosotros sencillez de vida, espíritu de ora-ción, caridad hacia todos y especialmentehacia los pequeños y los pobres, obedien-cia y humildad, desprendimiento de noso-tros mismos y renuncia. Sin esta contraseña



tamente unida al testimonio de unidad da-do por la Iglesia” (J. Saraiva Martins, LaChiesa).El testimonio evangélico al que el mundose muestra más sensible es el del amor ha-cia los pobres y hacia quien sufre. La gra-tuidad de actitudes y gestos evangélicosque contrastan con el egoísmo presente enel hombre “hace nacer precisas preguntasque orientan a Dios y al Evangelio. Tambiénel compromiso por la paz, la justicia, losderechos del hombre, la promoción huma-na, es un testimonio del Evangelio, si es sig-no de atención por las personas y está or-denado al desarrollo integral del hombre”.Un testimonio hasta el martirio. No por na-da la palabra “testimonio” traduce el griegomartyria, de donde viene, en español,“mártir”. Y la sangre de los mártires sigue

de santidad, nuestra palabra difícilmente seabrirá camino en el corazón del hombre denuestro tiempo, sino que peligra ser vana einfecunda”. (EN 76)

Unidos para anunciar

Condición esencial para la eficacia de laevangelización es la unidad entre los segui-dores de Cristo, empezando por el am-biente existencial en el que cada uno estácolocado: “En cuanto evangelizadores, no-sotros hemos de ofrecer a los fieles de Cris-to la imagen no de hombres divididos y se-parados por litigios que no edifican paranada, sino de personas maduras en la fe,capaces de reencontrarse juntos por enci-ma de las tensiones concretas, gracias a labúsqueda común, sincera y desinteresadade la verdad. Sí, la evangelización está cier-


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siendo en la historia de la Iglesia el sello dela fecundidad apostólica. “Cuando el Hijodel hombre venga, ¿encontrará la fe sobrela tierra? (Lc 18,8).La evangelización que tiende únicamente ala conservación de la fe, ¡no basta ya! Esnecesaria una misionariedad que anuncienuevamente el Evangelio, sostenga sutransmisión, salga al encuentro de loshombres y de las mujeres de nuestro tiem-po atestiguando que también hoy es posi-ble, bello, bueno y justo vivir la existenciahumana en conformidad al Evangelio y ensu nombre, contribuir a renovar toda la so-ciedad. Cristianos no se nace, sino que sehace, decía Tertuliano. Es importante for-mar educadores de la fe, una fe adulta ca-paz de confrontarse con la cultura y evan-gelizarla. En la total fidelidad al anuncioevangélico y a la tradición eclesial, éste lle-vará también el rostro de las muchas cultu-ras y de los muchos pueblos en los que esacogido y enraizado. En las expresionescristianas de un pueblo evangelizado, el Es-píritu Santo embellece a la Iglesia, mos-trándole nuevos aspectos de la Revelacióny regalándole un rostro nuevo. “La Iglesiaintroduce a los pueblos con sus culturas ensu misma comunidad”, para que “los valo-res y las formas positivas” que cada culturapropone “enriquezcan la manera en la queel Evangelio es anunciado, comprendido yvivido”. De tal modo “la Iglesia, asumiendolos valores de las diferentes culturas, seconvierte en “sponsa ornata monilibussuis”, la “esposa que se adorna con sus jo-yas” (Is 61, 10)” (EG 116).La diversidad cultural no es una amenaza ala unidad de la Iglesia. Es el Espíritu Santoenviado por el Padre y por el Hijo, quetransforma nuestros corazones y nos hacecapaces de entrar en la comunión perfectade la Santísima Trinidad, donde cada cosaencuentra su unidad. Él construye la comu-nión y la armonía del Pueblo de Dios. Laevangelización

reconoce gozosamente estas múltiples ri-quezas que el Espíritu engendra en la Igle-sia y pide un nuevo protagonismo de losbautizados. Esta convicción se transformaen una llamada directa a cada cristiano, pa-ra que ninguno renuncie al propio com-promiso de evangelización, desde el mo-mento en que, si uno realmente ha hechoexperiencia del amor de Dios que le salva,no necesita mucho tiempo de preparaciónpara ir a anunciarlo, no puede esperar quele vengan impartidas muchas lecciones olargas instrucciones. “Cada cristiano es mi-sionero en la medida en la que se ha en-contrado con el amor de Dios en Cristo Je-sús. Ya no decimos que somos “discípulos”y “misioneros”, sino que somos siempre“discípulos-misioneros”. Si no estamosconvencidos, miremos a los primeros discí-pulos, que inmediatamente después de ha-ber conocido la mirada de Jesús, iban aproclamarlo llenos de alegría: “Hemos en-contrado al Mesías” (Jn 1,41). La samaritana,apenas terminado su diálogo con Jesús, seconvirtió en misionera, y muchos samarita-nos creyeron en Jesús “por la palabra de lamujer” (Jn 4,39). También San Pablo, a par-tir de su encuentro con Jesucristo, “en se-guida anunciaba que Jesús es el hijo deDios” (He 9,20).

Y nosotros ¿qué esperamos?¿Creemos enlo que anunciamos? Nuestras comunida-des ¿viven como creyentes? ¿Damos testi-monio con la vida de que hemos encontra-do al Señor?

“La evangelización es un compromiso coti-diano que compete a todos. Se trata de llevarel Evangelio a las personas con las que cadauno se relaciona, tanto a los más cercanoscomo a los desconocidos. En este anuncio elprimer momento consiste en un diálogo per-sonal en el que la otra persona se expresa ycomparte sus alegrías, sus esperanzas” (Fran-cisco, Evangelii Gaudium).



ra que privilegia el diálogo como forma deencuentro, la búsqueda de consenso y deacuerdos. En el diálogo con el Estado y lasociedad la Iglesia, junto a las distintas for-mas sociales, está llamada a acompañar laspropuestas que puedan responder mejor ala dignidad de la persona y al bien común yproponer siempre con claridad los valoresfundamentales de la existencia humana pa-ra transmitir convicciones que puedan lue-go traducirse en acciones concretas.He aquí dos experiencias significativas pa-ra la promoción del diálogo interreligioso ysocial.

Diálogo social para la paz

Sor Ibtisam Kassis, fma de la comunidad deNazareth, explica: “El 2 de abril 2015 la Cor-te Suprema de Israel emitió el Decreto derevocación de los trabajos para el muro deseparación en el histórico Valle del Cremi-san, sede de dos institutos salesianos, ydonde alrededor de 400 niños cristianos ymusulmanes frecuentan la escuela mater-na y elemental de las fma. “La Corte Supre-ma Israelí, después de haber consideradolos varios recorridos del muro de protec-ción en la zona de Cremisan, declara que“no hay otra opción que la de cambiar elrecorrido del muro, que deje a las herma-nas salesianas y a los padres salesianos uni-dos entre sí y con sus respectivos terrenos.La Corte Suprema pide al Ejército y al Mi-nisterio de Defensa israelí que considerenotras alternativas menos dañinas para lapoblación local y para los institutos que seencuentran en el valle”, refiere el Decreto.En estos nueve largos años el diálogo ha si-do la fuerza y el instrumento para construirjusticia y paz. Muchas han sido las ayudasrecibidas, el diálogo primero con los abo-gados de St. Yves y los de Beitjala, luegocon otros entes sociales y políticos que sehan prodigado para estudiar e intentar ca-minos alternativos, con la Iglesia y la Diplo-macia, frecuentes los encuentros con los

Llamados a dialogar

Según cuanto se narra, en los inicios de lacreación Dios mismo hablaba con los hom-bres. Era como si hablando con los hom-bres Dios quisiera acostumbrarles a la pala-bra. Dios, así, no sólo da la palabra sino queenseña al hombre el uso de la palabra efec-tivamente dialógica y lo que ha acontecidoen el diálogo originario resuena en la rela-ción yo-tú interhumana que, si auténtica,permanece siempre un eco de aquella pri-mera relación.Papa Francisco habla a menudo de diálogo,no como una doctrina, más bien como unapedagogía del encuentro. Él esboza en pa-labras y gestos un itinerario, una escuela,un camino del encuentro pastoral y social,que propone tanto a los individuos como alas comunidades. En aquella pedagogía eldiálogo resulta el momento verbal de lamás amplia labor del encuentro. Centrali-dad de la misión quiere decir centralidaddel diálogo. “Dialogar significa estar con-vencidos del que otro tiene algo buenoque decir, hacer espacio a su punto de vis-ta, a su opinión, a sus propuestas… y paradialogar hay que salir al encuentro del otrodesarmados, bajar las defensas y abrir laspuertas” (Francisco, Discurso a la comuni-dad de los Escritores de La Civiltà Cattolica– 14 junio 2013).El diálogo es posible entre lugares y cultu-ras distantes entre sí, entre un lugar delmundo al otro, hoy cada vez más cercanos,interdependientes, necesitados de encon-trarse y de crear espacios reales de auténti-ca fraternidad y solidaridad. La cercaníacrea comunión y la pertenencia realiza elencuentro. La cercanía adquiere forma dia-lógica y crea una cultura del encuentro. Pa-ra la Iglesia, en este tiempo hay ámbitos dediálogo en los que ha de estar presente pa-ra cumplir un servicio a favor del pleno de-sarrollo humano y perseguir el bien común.Es tiempo de saber proyectar, en una cultu-


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Obispos de varias partes del mundo. Em-bajadores y Cónsules de los distintos Paí-ses Europeos y americanos, los represen-tantes de la Comunidad Europea para cre-ar mentalidad y favorecer consentimientoy acuerdo con el gobierno israelí. Hemosacogido la noticia con gran alegría y sobretodo con mucha admiración por la CorteSuprema que ha mirado con ojos humanosun problema social bastante grave, sobretodo para la obra educativa desarrolladapor las fma, que goza mucho de su aprecio,y para las muchas familias que frecuentannuestra escuela que sufrían por esta causaabsurda. El fruto más grande de esta graciaes para nuestros alumnos, que cada díaoyen hablar de paz y de amor para cadahombre, y quedan perplejos ante todo loque cada día están obligados a vivir: violen-cias e injusticias. Este es un signo de que laJusticia y la Paz son posibles, porque hay

mucha gente que desea la paz y defiendelos intereses y el bien de los otros”.

Encontrar al Dios del diálogo

Del 13 al 15 de mayo en el Centro Ad Gen-tes en Nemi (Roma) ha tenido lugar elworkshop del tema “Encontrar al Dios deldiálogo: leer los libros sagrados de las reli-giones abramistas”, para promover el diálo-go entre Hebreos, Musulmanes y Cristia-nos a través de la lectura de sus Libros Sa-grados (Tanakh, Biblia, Corán). El works-hop, organizado por la Sociedad del VerboDivino (SDV) y por el Servicio de Docu-mentación y Estudios sobre la Misión (SE-DOS) ha tenido lugar con ocasión de laconmemoración del 50º del Concilio Vati-cano II, para reflexionar sobre los docu-mentos de la Iglesia y mantener vivo el es-píritu de diálogo y de apertura hacia unmundo cada vez más multiétnico y multi-




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da rreligioso. El prof. David Ford, Regius Pro-fessor of divinity en la Universidad de Cam-bridge, en Inglaterra, junto a sus colegashebreos y musulmanes ha propuesto elScriptural Reasoning, es decir la lectura co-lectiva razonada del Tanakh, de la Biblia ydel Corán. “La escucha es la regla de oro –afirma – la actitud de apertura en la verdady en el amor ha de caracterizar el diálogocon los creyentes de las religiones no cris-tianas”. El diálogo interreligioso es unacondición necesaria para combatir el fun-damentalismo religioso y político que nosólo amenaza la armonía entre las comuni-dades de religiones distintas, sino que estambién causa de muchos conflictos en to-do el mundo. Para los cristianos como paralas otras comunidades religiosas el diálogoes un deber, sólo así se aprende a aceptar alos demás en su diferente forma de ser,pensar y expresarse.Esta experiencia ha presentado grandes re-tos, ante todo, la seguridad de la propia fe

y el conocimiento del propio texto sagra-do, no para discutir con los otros creyentesy convencerles, sino para ayudar a enten-der “las razones de la propia fe”. No se hade tender a dialogar para vivir juntos, hayque tender a construir juntos una sociedaden el que las religiones sepan escucharse.Nunca se debe descuidar el vínculo esen-cial entre diálogo y anuncio, que lleva a laIglesia a mantener e intensificar las relacio-nes con los no cristianos. La evangelizacióny el diálogo no son opuestos, se sostieneny se alimentan recíprocamente.

¿Creemos que el diálogo es el camino paraconstruir juntos puentes de misericordia yde reconciliación? ¿Estamos convencidosde que para dialogar hay que salir desarma-dos al encuentro del otro, bajar las defen-sas y abrir las puertas?

comunicazione@[email protected]


OBJETIVOS DE DESARROLLO DEL MILENIO

AGENDA POST 2015

PROMOVER LA IGUALDAD

DE GÉNERO Y EL EMPOWERMENT

DE LAS MUJERES

LA DECLARACIÓN DEL MILENIO PROMUEVE LA IGUALDAD ENTRE LOS SEXOS

Y EL EMPOWERMENT DE LAS MUJERES COMO DERECHOS HUMANOS DE BASE.

SOSTIENE ADEMÁS QUE RECONOCER A LAS MUJERESSU JUSTA TAREA

ES LA MANERA PARA COMBATIR CON ÉXITO LA POBREZA, EL HAMBRE, LAS ENFERMEDADES

Y PARA ESTIMULAR UN DESARROLLO VERDADERAMENTE SOSTENIBLE.

LAS MUJERES TIENEN UNA INFLUENCIA ENORMEEN EL BIENESTAR DE LAS FAMILIAS

Y DE LAS SOCIEDADES.


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TALITHA KUM, RED INTERNACIONAL DE VIDA CONSAGRADA CONTRA LA TRATA DE PERSONAS, UNA RED DE MUJERES COMPROMETIDAS EN PROMOVER LA CULTURA DE LA VIDA, DE LA LIBERTAD, DEL RESPETO, DE LA DIGNIDAD HUMANA DE TODO SER HUMANO.

OBJETIVOS DE DESARROLLO DEL MILENIO

AGENDA POST 2015


Lecturaevangélica

de los hechos

contemporáneos


educando están abiertos al descubrimientodel misterio que es el otro y a la riqueza de vi-da de la que es sujeto. Esto es posible si existeun cierto “desprendimiento” entre educadory educando. El educador no necesita de sualumno porque ya está realizado de otro mo-do. Comunica con el alumno por el gozo decompartir la propia experiencia y valorar la vi-da del alumno. La relación educativa es gratui-ta cuando se vive como un recíproco y espon-táneo dar y recibir.

Revisión de vida

Un espacio importante en la educación a lagratuidad es la revisión del modelo de vida enla que los jóvenes de hecho se inspiran másallá de las declaraciones de principio. La revi-

Estilo de vida y gratuidadA cargo de Mara Borsi

Todo lo que se vive en el espacio y en el tiem-po, educa o deseduca a la gratuidad. Dondeprevalece el agonismo, la relación de poderentre educadores y educandos y entre losmismos educandos, el rendimiento comoúnico criterio de reconocimiento del valor deuna persona, no se educa a la gratuidad. Enlos ambientes en los que la relación educativaes formal, en cuanto nadie sale de su tarea dealumno o de profesor, de padre o de hijo, desacerdote y de fiel porque se tiene miedo delencuentro personal y de la profundización delas relaciones.Un aspecto particular de la educación a la gra-tuidad está dado por la relación entre educa-dores y educandos. En la relación educativa lagratuidad empieza cuando el educador y el


Me llamo Ana Inés Izquierdo Donato, soyuruguaya, animadora de oratorio y exalumnasalesiana. En enero de 2014 llegué a Méxicopara seis meses de voluntariado en el IMCIDon Bosco de Matagallinas, en la Sierra Mi-xe, en el Estado de Oaxaca.Formo parte del Vides Uruguay. En mi paíscon los otros voluntarios del grupo trabajéen un barrio periférico de la capital, dondellevábamos a cabo actividades para las muje-

res, talleres con la finalidad de realizar pe-queñas entradas económicas.Poco a poco maduré el deseo de hacer vo-luntariado a nivel internacional. Así empecéuna formación a distancia y contemporánea-mente el acompañamiento formativo con elVides Uruguay.La formación me ha comprometido mucho,me presentaba elementos de tipo práctico,informaciones a nivel teórico. Pasaba el

La palabra a los jóvenes

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tiempo y aumentaba el deseo de poder reali-zar esta experiencia; sentía también queDios me llamaba al don y a la confianza.Transcurrido el período formativo me pro-pusieron el servicio de voluntariado en Oa-xaca. Llegando a la Sierra Mixe a la casa deDon Bosco me puse a la escucha de las fma,de los Salesianos, de los muchachos y sobretodo de las niñas. Mis mejores maestras fue-ron precisamente las niñas, me explicaronsobre su cultura, sus tradiciones, su formade percibir e interpretar la vida. Me enseña-ron también a acercarme más a Dios. Las ni-ñas con las que llevé a cabo el servicio vo-luntario me dejaron entrar en su vida y estoha sido verdaderamente un don grande.Siento que he crecido mucho desde el pun-

to de vista humano. Gracias a cada una deellas he podido comprender de nuevo, vol-ver a aprender y asimilar de otra forma loque dice Don Bosco: “Me basta que seáis jó-venes para que os ame”.El apoyo de las hermanas y su acompaña-miento me ha hecho conocer de otra formael Instituto de las fma, compartir con ellas,aprender el trabajo educativo a través de suejemplo en lo cotidiano, ha sido una expe-riencia muy enriquecedora.Creo que como voluntarios, hemos de estardispuestos a dar lo mejor de nosotros mis-mo, a hacer los mejores esfuerzos en las co-sas que piden las personas que viven connosotros. Como voluntarios estamos llama-dos a darnos a nosotros mismos, a ser reflejode un Dios que ama a cada persona.

sión hay que conducirla no con la actitud mo-ralista de quien se detiene sobre todo en loslados negativos, sino con la actitud educativaque invita a los jóvenes a darse cuenta de labúsqueda que ya están viviendo de gratuidad.La revisión de vida implica también el esfuer-zo de traducir en objetivos medianamente al-canzables la meta final de la consolidación dela gratuidad. ¿Qué objetivos proponer enconcreto aquí-ahora en este ambiente educa-tivo? ¿Cómo hacer de manera que la necesi-dad de gratuidad y espontaneidad no se re-duzca a redimensionar las esperanzas de vida,a una confusión de las relaciones, a búsquedapura y sencilla de placer sin capacidad de in-vertir las energías en el futuro?La maduración de un estilo de vida inspiradoen la gratuidad se enriquece también por unaseria confrontación con la experiencia cristia-na que es acogida y al mismo tiempo supera-ción de la petición de gratuidad. La tradiciónbíblica es rica de temas unidos a la gratuidad.En un cierto sentido la gratuidad es la dimen-sión última de la historia de la salvación desdela creación a la alianza, desde la predilecciónde Dios por el pueblo hebreo a la encarna-ción como gesto de puro amor de Dios por el

hombre, del misterio de la vida trinitaria quees acogida en la diversidad a la vida proféticade “acogida” de la primera comunidad cristia-na. La petición de gratuidad encuentra unafuerte contribución en la contemplación de locotidiano en el que se viven las cosas de cadadía como lugar de encuentro con Dios, a labúsqueda de aquel hilo de salvación que unejuntos la historia personal y la de la humani-dad en la acogida que Dios reserva al hombre.En la contemplación y en la oración se apren-de a aceptarse a uno mismo sin manías esqui-zofrénicas, compartiendo los límites y lasbúsquedas de la propia existencia. Se apren-de a leer la vida en “transparencia” como pro-vocación a un crecimiento delante del hom-bre y de Dios. Sólo un contemplativo puedemadurar una actitud de gratuidad. En la con-templación la vida se hace canto elevado alamor gratuito que envuelve la existencia. Só-lo cuando nos sentimos amados por Dios yhechos “criaturas nuevas” por don, nos hace-mos capaces de unaAux real gratuidad, aun-que permanece el compromiso de un largotirocinio de aprendizaje.

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taba con ellos a la mesa, tomó el pan, lo ben-dijo, lo partió y se lo dio.Entonces se les abrieron los ojos y lo recono-cieron. Pero él desapareció de su vista.

Lectura: El texto en sí mismo

Ya están llegando a Emaús: han caminado porlo menos diez kilómetros. Notemos quemientras hacían el “camino geográfico”, vi-vieron un “camino interior”; ¿qué rasgos tuvoese camino interior?, ¿desde dónde y haciadónde?¿Cómo podríamos interpretar el gesto de Je-sús que “hace ademán de seguir adelante”?“¡Quédate con nosotros, que ya se hacetarde!”. Efectivamente era ya tarde y estabancansados. La segunda parte de la frase es des-criptiva: “Es tarde, está oscuro”. Pero podríaexpresar realidades más profundas, relaciona-das con la situación inicial de los discípulos:analizarlo.La primera parte de la frase es una peticiòn:“¡Quédate con nosotros!” A la luz del itinera-rio interior vivido, puede revelar también di-mensiones hondas: analizarlo.“Mientras estaban a la mesa, tomó el pan, lobendijo, lo partió y se lo dio”. Jesús vuelve aocupar el centro, al mismo estilo suyo: entra,se queda, se pone familiarmente a la mesa,comparte. Sobre todo los sorprende, comoen el Cenáculo, con el gesto de partir el pan. “Se les abrieron los ojos y lo reconocieron”.Este es el culmen de la perícopa; esa “fraccióndel pan” les permite reconocer al Maestro.Desde los orígenes la Iglesia reconoce la Eu-caristía como “fuente y culmen” de su vida.“Entonces se les abrieron los ojos y lo recono-cieron. Pero él desapareció de su vista”. Lucas

Emaús: revelación por el pan compartido Eleana Salas

AmbientaciónUna Biblia grande; sobre la Biblia un crucifijoy cerca el cirio pascual. Una canastilla conpanes.

Invocación al Espíritu Santo:Espíritu Santo ven, ven (Bis) en el nombrede Jesús.(Una canción conocida por todos, invo-cando al Espíritu Santo)

Llegamos al momento culminante de la expe-riencia vivida por los discípulos de Emaús: larevelación en el pan partido y compartido.El corazón de esos discípulos está lleno de es-tupor ante el Desconocido que ha sido capazde abrirles de nuevo a la esperanza. Toda elalma se les asoma por los ojos y los oídos; yasienten “arderles el corazón” luego de escu-char sus palabras.Entremos también nosotras en esa casa: deje-mos por un momento nuestros muchos ‘co-nocimientos’ y dispongamos un corazónnuevo para dejarnos sorprender por Aquélque ahora domina totalmente la escena.

El texto es proclamado con claridad por unalectora.Cada participante vuelve a leer el texto.Luego se podría hacer resonancia de las frasesmás significativas.

Lucas 24,28 - 31Se acercaban al pueblo adonde se dirigían, yél hizo ademán de seguir adelante.Pero ellos le insistieron:—Quédate con nosotros, que se hace tarde yel día se acaba.Entró para quedarse con ellos; y, mientras es-


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juega con ‘los ojos’ y ‘la vista’: ¿qué ojos seabren y qué vista se cierra?

Meditación: El texto para nosotros, hoy

Si bien los corazones se han ido abriendo a laesperanza, hay resabios de amargura: “Es denoche; está oscuro”. Traigamos una vez mása la mente y al corazón los rasgos de oscuri-dad y de “noche”: de la humanidad, de los jó-venes, de la comunidad. Lo compartimos.“Reconocer al Señor” es el momento culmi-nante de las manifestaciones del Resucitado.Miremos a nuestros jóvenes, la comunidad, lahumanidad… qué manifestaciones de “ham-bre de Dios”, qué capacidad -o incapacidad-de “reconocerlo”…“Lo reconocieron en el partir del pan”. Esa“fracción del pan” es el momento culmi-nante. Verifico la centralidad real que tiene laEucaristía en mi vida, cada día; su centralidadreal en la comunidad.

Oración

Hagamos nuestra la súplica: “¡Quédate connosotros!”. Aquellos discípulos ya no pue-den hacer a menos del Desconocido que lesha abierto el corazón. Repitamos reiterada-mente la frase, interioricémosla, oremos apartir de ella, pues tampoco nosotras pode-mos hacer a menos de Él.

“Lo reconocieron en el partir del pan”:Orar-pedir-suplicar ojos capaces de reco-nocer al Señor, un corazón que viva inten-samente cada Eucaristía, para poder reco-nocerlo también en sus otras manifesta-ciones. Compartimos alguna resonancia de nuestraoración.

Contemplación – CompromisoNo basta estudiar y orar la Palabra de Dios;es preciso que vaya germinando en nues-tra vida.¿De qué manera puedo encarnar una“vida eucarística”, como María, “Mujer eu-carística”?¿Cómo podríamos expresar mejor en quela Eucaristía es “el centro de nuestra jor-nada, donde la comunidad se fundamentay se renueva”? (C. 40).Tenemos la capacidad de reconocer al Se-ñor no sólo en el culto eucarístico, sinotambién en sus otras presencias?

ORACIÓN FINAL:Quédate junto a nosotros, que la tarde estácayendo, Que sin ti a nuestro lado, nada hay justo,nada hay bueno. (E. Vicente)

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lugar de la fraternidad, necesario para quelos jóvenes puedan creer que estas expe-riencias son posibles.La Madre, en su discurso de apertura del CGXXIII afirmó: “Con los jóvenes y con toda lacomunidad educativa nos comprometemosa construir la casa de la fraternidad a travésde relaciones humanizadoras. La relaciónnos salvará del individualismo y de la auto-rreferencialidad. Estamos llamadas a reavi-var la profecía de la fraternidad y a hacerque alcance las periferias existenciales denuestro corazón y de todas las personas queencontramos en nuestro camino”. El RectorMayor ha subrayado que la fraternidad esuno de los aspectos esenciales que constitu-yen nuestra vida religiosa salesiana. Ha aus-piciado un continuo crecimiento a fin deque “realmente nuestra vida comunitariatenga toda la fuerza de atracción que tiene lafraternidad vivida según el Evangelio, hasta elpunto de ser irresistible en su atracción” (Ac-tas del CG XXIII nº 26; págs. 111; 142). Una fra-ternidad que alimenta el espíritu de familia.

El espíritu de familia: preciosa herencia

Madre Elisa Roncallo, definida por DonBosco: “alma angelical… corazón hecho paraamar y hacerse amar por todos, por su hu-mildad, admirable dulzura y fuerte pacien-cia”, es aquella que favoreció la irradiacióndel espíritu salesiano del Instituto a la socie-dad y, dentro del Instituto, promovió el espí-ritu de familia.En calidad de Consejera General escribe 8Circulares sobre el espíritu de familia (24 de

Una casa en construcción

Carla Castellino

Es la novedad que los jóvenes esperan de nosotras: “pasar de una casa ya hecha a una en construcción con laparticipación de toda la comunidadeducativa, implicada en el pensar, rezar y actuar. Donde nadie se sientaque ya ha llegado o crea que sólo elotro ha de cambiar”.Los jóvenes nos quieren “capaces de cons-truir relaciones verdaderas, de abrir las es-tructuras, las mentes, los corazones, de com-partir lo cotidiano con cuantos atraviesan elumbral de nuestras casas, con una presenciaauténtica y simpática que sabe dejar aparteel perfeccionismo y el ansia de control, sabecrear espacios de diálogo para vivir el man-damiento del amor en espíritu de familia,sabe compartir también las dificultades ybuscar juntos las soluciones”. Desean ser“animados, sostenidos, por nosotras, al pro-fundizar la fe y las responsabilidades socia-les, nos quieren disponibles en el acompa-ñamiento espiritual para ayudarles a encon-trar el sentido de lo que viven, sin respues-tas prefabricadas, con un lenguaje más mo-derno y creativo”. Nos piden que seamostestimonios de la “casa fundada en la Roca,en la que el amor de Dios se manifiesta en lacomunión fraterna, signo tangible que lesfascina, les hace sentir en casa, les contagiay paso a paso les conduce al encuentro conJesús” (Actas CG XXIII nº s 17-18; p. 162).

La fraternidad: irresistible atracción

La comunidad religiosa, corazón de la comu-nidad educativa, es para cada fma el primer


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julio 1916/24 de julio 1917). Exhorta a las fmaa volver a los valores que fundan y constru-yen el clima educativo salesiano.El espíritu de familia en la interpretación deMadre Elisa está basado en la caridad, en lagratuidad, en la confianza mutua entre supe-rioras y hermanas, entre hermanas y herma-nas, y brota del deseo común de ayudarse,de compadecerse, de completarse mutua-mente, de hacerse bella y serena la vida en elservicio del Señor. Es un clima que se cons-truye gracias a la aportación de todas y decada una y tiene como imprescindible funda-mento el amor de Dios y como modelo idealla experiencia vivida por los Fundadores. Elespíritu de familia es pues caridad que seexpande y se refuerza en las relaciones a tra-vés de algunas actitudes características:Santo desinterés: rectitud y búsqueda delbienestar del otro.Competición de delicada caridad entre lascasas y las hermanas: compartir bienes ma-teriales y espirituales, desde no hacer sentirel ‘mío’ y el ‘tuyo’.Fraterna competición de estima y de honormutuo: aprecio recíproco, saber gozar deléxito del otro y dar a cada hermana el lugarde honor que merece; darlo en nuestramente, en nuestro corazón, en nuestras pa-labras y en nuestra vida práctica.

Competición bien entendida de recíprocaconfianza que no es manifestación indebidade las propias impresiones con menoscabode la caridad y de la unión fraterna, sino el fa-miliar y recíproco intercambio de pensa-mientos que une en un único corazón a di-rectora y hermanas, les hace sentir comunesno sólo los bienes espirituales y materiales,sino también las alegrías, los éxitos, las pe-nas, las preocupaciones, las responsabilida-des, todo, en suma, lo que interesa a la casay forma la verdadera vida.Competición de noble recíproca franqueza:saber decir la palabra de verdad que impidea tiempo la falta, o la remedia enseguida, sinresiduos de pena o de desconfianza y queno excluye la cortesía, la oportunidad y laprudencia. Una palabra preparada con sabi-duría en la oración, que sabe esperar con pa-ciencia el momento de la calma, la ocasiónfavorable y sabe hacer seguir a la correcciónun gesto de estima y de afecto para demos-trar que la falta o la equivocación corregidoshan sido completamente olvidados.Madre Elisa afirma: si todas las FMA vivieranestas actitudes “¡como sería más amable lafamilia espiritual, que se convertiría tambiénen la familia del corazón!”. El espíritu de familia no es sólo una bellaherencia a custodiar, sino un reto al que res-ponder en nuestro cotidiano camino de con-versión a recorrer con determinación y va-lentía.

El espíritu de familia: un reto

“El espíritu de familia reta a la comunidadeducativa a aprender a comunicar con auten-ticidad, sencillez y rectitud para crear unambiente abierto y favorable a la maduraciónde cada persona, donde nos sentimos custo-dios y responsables de cada miembro, nosólo unidos por tareas a desarrollar” (Actasdel CG XXIII nº 27). ¿Cómo acoger y respon-der a este reto?

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Para profundizar: Giuseppina Mainetti, Madre Elisa Roncallo fra le prime dis-cepole de S. Giovanni Bosco, Turín, Istituto FMA 1946;

Lina Dalcerri, Tradizioni salesiane,spirito di famiglia, Roma Istituto FMA1973

Piera Ruffinato, La relazione educati-va. Orientamenti ed esperienzenell’Istituto delle FMA, Roma, LAS 2003


La opción por los pobres en el ambiente delos Rom para los Salesianos nació en Barde-jov en el barrio Poštárka, donde en 1991 em-pezó a trabajar Don Pedro Bešenyei, sale-siano. Gradualmente, la intervención de losSalesianos se ha difundido en Jarovnice, Mi-chalovce. Después del año 2000 empezó eltrabajo entre los gitanos también en Eslova-quia occidental en Plavecký Štvrtok, en cola-boración con las fma. En 2008 llegó la invita-ción de la Archidiócesis de Košice de desarro-llar este trabajo en Košice en el barrio LunikIX; en este lugar la acción se ha encaminadomás allá de sdb y fma también por un grupode voluntarios laicos que forman parte inte-grante de la comunidad.

Estar en medio de los Rom

Las fma viven y trabajan entre los pobres, lapresencia entre ellos requiere un estar ahí yun vivir con y para la misión, para encontrarcaminos alternativos, para buscar llegar al co-razón de los destinatarios. Por esto es impor-tante compartir la misión entre sdb, fma ylaicos. “Vida” entre los pobres significa, enefecto, que los miembros de la comunidad-equipo, viven en medio de ellos, rezan jun-tos, sostienen el funcionamiento del centro,buscando desarrollar los procedimientos úti-les para la evangelización, para la catequesisy la praxis pastoral, y hacer sucesivamentesu verificación. “Interacción” entre los po-bres, significa hacerse sensibles a las necesi-dades del cuerpo y del espíritu de los desti-natarios, para comprender la integridad de lapersona en el contexto del lugar en el que

Junto a los Rom

Anna Rita Cristaino

Sor Slávka Butková es de la directora de la comunidad de Košice en Eslovaquia, junto a Sor Anna Chrkavá ya Sor Alžbeta Sárkžyová, las otras dos fma que componen la comunidad,va cada día al barrio Luník IX, habitadopor más de 6.000 Rom que viven en condiciones de superpoblación y amenudo privados de los mínimos servicios. El agua corriente está a disposición sólo pocas horas al día y las habitaciones a menudo están privadas de calefacción.

El trabajo de las Hijas de María Auxiliadora si-gue un proyecto compartido con los Salesia-nos que han construido una Iglesia y un Cen-tro pastoral para poder actuar con más efica-cia al servicio de los habitantes del barrio.Los gitanos sobre todo de etnia Rom consti-tuyen el 7,5% de la población total de Eslova-quia. Desde el punto de vista económico, lamayor parte de ellos pertenece al grupo conla más baja tasa de renta: una décima parte dela población Rom vive en la pobreza. Segúnlos datos del censo del 2011, el 10% de la po-blación declara que pertenece a ninguna re-ligión, mientras que el 79,6% dice que se ad-hiere al Cristianismo. Otros pertenecen aotras religiones no cristianas. Pero los Rom delas iglesias cristianas casi siempre muestranun cierto interés sólo respecto al Bautismo ya la sepultura. Falta la participación en la vidaactiva de la parroquia. En realidad no sientena Jesús y el mensaje evangélico como unaparte integrante de su vida personal.


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vive. El “recorrido de búsqueda” requiere,ante todo, la comprensión de las dinámicasde la vida en los varios sitios locales, en modoque la misión implique a los miembros de lacomunidad gitana, en vista del desarrollo deuna activa comunidad cristiana.Las fma en particular visitan a las personas ensus domicilios, constituidas casi siempre porbarracas construidas por ellos mismos o vie-jos apartamentos desaliñados. Aquí se po-nen a la escucha buscando comprender cuá-les son las necesidades más urgentes y cuá-les las problemáticas más importantes a re-solver.Narra Sor Slávka Butková: “En Eslovaquia tra-bajamos con los Rom desde hace 7 años en elbarrio Lunik 9 en Kosice (una ciudad del Estede Eslovaquia) barrio donde viven sólo losRom. Antes ya trabajamos 10 años en Pla-vecký Štvrtok y todavía antes 5 años en Mi-chalovce. Por lo tanto desde 2003 nos dedica-mos intensamente a esta misión. En Nitratambién trabajamos así desde hace 3 años.En Luník IX y en Nitra nos dedicamos especí-ficamente sólo a la pastoral de los Rom, estoporque parte de la población Rom vive mar-ginada del resto de la ciudad, casi como enun gueto.En nuestro trabajo encontramos algunas difi-

cultades. Es muy difícil, por ejemplo, hablarde Dios; hay una pobreza extrema y es difícilhacerles sentir que Dios es bueno y se cuidade todos. Los Rom en Lunik IX no ven satisfe-chas sus necesidades fundamentales, dadoque no tienen agua, han de llevársela en losjarros pequeños, no tienen alojamientos ade-cuados, viven en las barracas que se hanconstruido con lo que han encontrado cercade los contenedores, o bien si tienen un piso,está destruido y han de repararlo a su costa.Hay una alta tasa de desocupación, porquetambién cuando encuentran un trabajo si elque da el trabajo descubre que se trata de unRom, se echa atrás. Hemos constatado queesto sucede a menudo, nosotros buscamospara ellos un trabajo, pero luego nos tropeza-mos contra tanta desconfianza. Esto es causade problemas económicos, y la mayoría seencuentra viviendo sólo con las pensionessociales de alrededor de 60 € con los que tie-nen que pagar el alquiler, la electricidad ytodo el resto. Cuando no tienen con qué pa-gar y tienen encima los acredores, entoncesadquienen creditos y alqunos de ellos se hanendeudado de por vida.Con ellos intentamos resolver los distintosproblemas prácticos que tienen que afrontar:cómo presentar los documentos para las



vende los vestidos limpios y el hijo quedasiempre con los sucios). Dos horas más tarde,una de estas mamás viene con los hijos anuestra casa al despacho para arreglar unosasuntos y yo veo que los hijos están aseados,peinados, tienen los vestidos limpios, y yocasi no los había reconocido. Entonces feli-cité a aquella mamá y ella se sintió bien, gra-tificada y orgullosa de cuán bellos son sus hi-jos y de cómo ella ha logrado ponerlos en or-den, sólo que quizás nadie antes le había di-cho que lo hiciera. Y así paso tras paso ense-ñamos a las mamás a cuidarse de los propioshijos y les hablamos de la presencia de Dios,diciendo que todo (los vestidos u otras cosasbuenas) procede de él y que han de venir adarle gracias también el domingo a la Misa”.

Una vida más llevadera

El trabajo de nuestras hermanas por lo tantose dirige a la persona en su integridad. Haypromoción humana, asistencia, educación yevangelización. Todo para hacer la vida eneste barrio más fácil para vivir y más digna. Amenudo los Rom no conocen bien el eslo-vaco, entonces las fma les acompañan a lasoficinas. Se comprometen a ayudarles a en-contrar las personas precisas que puedan re-solver sus problemas u ofrecerles un trabajo.El 95% de la población rom está sin trabajo.Por todo esto es importante un trabajo enequipo que llegue a los pequeños y a las fa-milias para que puedan tener conocimientode su valor y comprometerse a construir unfuturo mejor para aquel barrio. No siemprees fácil. A menudo los que logran estudiar yemanciparse de una situación de precarie-dad, dejan Luník IX y por lo tanto no reinvier-ten cuanto han recibido a favor de quien viveallí. Por esto la presencia de las Hijas de Ma-ría Auxiliadora y de los Salesianos es garantíade continuidad y de soporte para una pobla-ción que quiere crecer.

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pensiones o los estipendios, etc.Pero en nuestro vivir junto a ellos hay tam-bién muchas alegrías. Cuando estamos entreellos vemos que nos aceptan y lo expresantambién con palabras o gestos. Más de unavez ha sucedido que nos han dicho: “Desdeque estáis aquí vosotras, hermanas, estamosmejor, las cosas se mueven, tanto en el llevaradelante las diversas prácticas con las institu-ciones, sea porque el ambiente está hacién-dose menos rudo, se busca un mejor com-portamiento y si hay equivocación, la pre-sencia de las hermanas nos ayuda a hacer unpaso para pedir excusa”. Nos damos cuentade que habría mucho más que hacer, peropara esto sería necesario que todas las insti-tuciones en Lunik IX afrontaran estas cosascon responsabilidad, se encontraran juntos yreflexionaran sobre lo que hay que hacer.Una gran importancia tienen también los en-cuentros de los grupos de los coetáneos, eloratorio dominical, el coro de los jóvenes yde los niños, porque a través de los niños ymuchachos se pueden atraer mejor a los pa-dres.Luego hay episodios muy bellos e interesan-tes. Por ejemplo, a menudo vienen con noso-tras mamás que piden los vestidos para los hi-jos. Cuando llegan, yo voy con ellas para co-ger las cosas, y hay que atravesar la Iglesiapara llegar a los locales de Caritas. Entoncesallí rezamos juntos, damos gracias a Dios y lepido al Señor que proteja a aquellas familias.Es una cosa breve, pero las mamás rezan sin-ceramente. Un día, mientras estaba dándoleslos vestidos de Caritas para los hijos, me dicuenta de que una de las mamás tenía a loshijos muy sucios, sus caras estaban sucias defango, no se habían lavado desde al menosuna semana, tenían los cabellos despeina-dos, los vestidos muy sucios. Entonces dije:“bien, mamás, yo os doy las cosas limpias,pero quiero ver a vuestros hijos lavados ylimpios y que lleven encima estas cosas lim-pias” (porque a menudo sucede que la mamá


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Informaciones

noticias novedades

del mundode los media


religiosa profunda, incisiva, lejana de los es-tereotipos que connotan la religiosidad delos adultos.

Los jóvenes sí, pero…

¿Cómo reducir, pues, la distancia entre noso-tros y el mundo juvenil? Y sobre todo, ¿cómosuperar la tentación de creerse inadaptadasa esta gran tarea?El contexto en que vivimos cambia a una ve-locidad a la que no estamos acostumbradas;la de los medios personales, de los smartp-hone, es una verdadera y propia revolución,porque permiten desvincularse del ordena-dor y estar siempre conectados, estar siem-pre en movimiento, conducir una existenciaque no separa nunca el cable. La Web, hoy,se ha transformado en el lugar de la conver-sación, de la implicación, del intercambio con-tinuo; en suma en un espacio de participaciónal cual nos sentimos, a menudo, no prepara-das. Los media actuales, en buena sustancia,han dejado de ser mediadores entre la per-sona y el mundo y se han convertido ellosmismos en protagonistas de primer plano dela vida social. Si esta es la realidad en la queestamos sumergidas, hay que decidir si adap-tarse sencillamente a ella, o habitarla y hacer-la habitable, transformándola en un ambien-te en el que nuestra humanidad y la de los jó-venes puede expresarse.Esta es, de hecho, la apuesta a la que la erahipertecnológica nos reta: apuntar sobre lohumano con premura y atención, para evitardejarnos arrollar por un modelo técnico quenos es imposible dominar, lentos como so-mos para captar y elaborar sus significados

Comunicación y misiónPatrizia Bertagnini

En la confrontación difícil y estimulantedel diálogo intergeneracional, nuestras capacidades comunicativas y educativasencuentran su piedra de toque Esta confrontación representa una ocasión para verificar los modelos relacionales que adoptamas, y puede indicar si ellos están claramente en sintonía con la lógica de la Encarnación, que pide pasar de la vigilancia a la visibilidad, de la escucha al acompañamiento, de la narración a la evangelización.Tenemos una misiónEn la experiencia educativa de Don Bosco yen la tradición del Instituto, el don del ca-risma se expresa en un estilo de vida mar-cado por un fuerte impulso misionero, unavocación evangelizadora que se realiza pre-firiendo la educación de quien se encuentraen situación de pobreza y de peligro. En estaperspectiva la fórmula “evangelizar edu-cando y educar evangelizando” respondebien al compromiso de hacer de la educa-ción un espacio en el que se comunican sig-nificados útiles para el crecimiento humanoy cristiano, y de la evangelización la oportu-nidad de hacer madurar a la persona en ple-nitud según el ejemplo de Cristo. Tal tareamisionera se cruza, sin embargo, con una re-alidad juvenil en continuo cambio que, enmuchos contextos, manifiesta algunos ries-gos: caer en un relativismo ético auto refe-rencial; vivir la realidad virtual como antí-doto a la incertidumbre, a la desorientación,a la precariedad, la fatiga de una experiencia


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despiertos, capacidad de ir más allá de lamera apariencia y actitud a cuidarse del otro.A esto se añada la necesidad de despertarsey de abrir los ojos a un mundo que – si bienno se dé cuenta – necesita la misma luz queha dado claridad a nuestra experiencia devida.“[…] amados en aquellas cosas que les gus-tan”. El tema de la escucha, subraya Mons.Pompili, “realiza operativamente un gradopeculiar – quizás el más alto – de la comuni-cación”. La escucha penetra de sí la accióneducativa a tal punto que la educaciónmisma es, en su naturaleza, un acto de escu-cha, de atención profunda a las preguntasdel otro, de sintonía con su vivencia y consus esperanzas. En este sentido amar a los jó-venes significa entrar con respeto y delica-deza en su mundo, en su espacio, hechomás de miedos que de esperanzas, más deincertidumbres que de perspectivas, más deesperanzas que de iniciativas; acompañarlesa descubrir que también más allá del umbralde aquel mundo tienen derecho a ser reco-nocidos en su unicidad e irrepetibilidad.“[…] aprendan a ver el amor en aquellas co-sas que naturalmente les gustan poco”. La di-mensión de la narración porque no existeproceso formativo que no sea narrativo y re-lacional; se narra y se nos narra negociandoel propio sí con el de los otros y constru-yendo, de tal modo, significados, realidadeseventuales, futuros posibles. Se necesita cul-tivar el conocimiento que narrar no es nuncainocente, neutro o superficial. Esto inco-moda nuestra tranquilidad llamándonos ala necesidad de ponernos en discusión, deproponerse y acoger al otro en recorridosautobiográficos que exigen autenticidad devida y enraizamiento en el Evangelio. La na-rración más autorizada y profunda es unaBuena Noticia que ayuda a dar a la propiavida una dirección significativa, a orientar aun sentido ulterior que interpela la respon-sabilidad personal.

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Hoy ¿qué hombre y qué mujer tenemosdelante? ¿Cuáles son los retos y laspuestas al día necesarios para una vidaconsagrada que quiera vivir con el mis-mo “estilo” del Concilio, es decir en ac-titud de diálogo y de solidaridad, de pro-funda y auténtica “simpatía” con loshombres y las mujeres de hoy y su cul-tura, su íntimo “sentir”, su autocon-ciencia, sus coordinadas morales?”(Congregación para los institutos de vi-da consagrada y las sociedades de vidaapostólica. Scrutate, nº 13, Roma, 2014).

respecto a su rapidez de desarrollo.

Más allá de todos los miedos

Superar el temor de no ser entendidos es,pues, el primer paso para proponer a los jó-venes de hoy el mensaje cristiano. A estameta se llega adquiriendo la convicción deque nuestra pasión educativa se funda en ellenguaje del amor que puede ser compren-dido por todos, en todo tiempo, en todo lu-gar. En esta óptica es posible recuperar nues-tra tradición como horizonte dentro del cualcolocarse como comunicadores cristianos.“Que los jóvenes no sólo sean amados, sinoque ellos mismos conozcan que son ama-dos”. La dimensión de la vigilancia declinadaen su triple acepción de atención a estar


LOS NIÑOS SABENde Valter Veltroni, Italia, 2015

Mariolina Perentaler

’Los niños saben’, el segundo film del ex alcaldede Roma Walter Veltroni, interroga nuestro futu-ro – y está de acuerdo con la critica que le hacen.Explora el mundo de la infancia con su estilo, ofre-ciéndonos una mirada importante sobre un mun-do constantemente descuidado”. El documentalllega después del buen éxito del precedente‘Cuando estaba Berlinguer’ apenas premiadocon la Cinta de plata. Es un viaje a través de Ita-lia, la vida y el futuro, con los ojos de los chiqui-llos. Hablan treinta y ocho niños entre los 8 y los13 años, “de todas las clases sociales, de muchí-simas regiones italianas – explica el autor – de di-versas identidades culturales y religiosas. Explicanel tiempo de su vida, la relación con la familia, conel amor, con la esperanza, también con Dios”. Unproyecto laudable que busca restituir en la com-plejidad de hoy la sabiduría innata de la infancia.‘Los niños nos miran’ amonestaba Vittorio De Si-ca, ‘los niños saben’, repite Walter Veltroni, pe-ro hay que detenerse, estar escuchándoles. He aquípor lo tanto el sucederse de secciones de vida vis-tos a la altura de una mirada que enternece porla inocencia y desconcierta por el conocimiento(quizás ‘inconsciente’), enviando al cuadro de unpaís entero.

El docufilm narra la visión de los más pequeñosLa estructura es sencilla: la entrevista. Perohay un puzzle de Italia de hoy y del futuro enlos rostros de los 39 niños que el director ha“interrogado” entre las paredes confortantesde su habitación, desvelando con gracia laimagen multiforme de una generación. En es-te trabajo suyo ‘cede’ literalmente la palabra a ellos, los niños. Veltroni se ha adentrado en


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la infancia más invisible de hoy, yendo a labúsqueda de historias particulares, de niños que tuvieran algo interesante que decir. Y ha encontrado muchas. A despecho de laaparente sencillez, el corazón del film, es pre-cisamente el casting cuidadísimo; los protago-nistas han sido elegidos por una rosa de 350.Rostros significativos, representantes de di-versidades sociales y de todo tipo de trauma.Un filipino en estrecheces económicas, unaniña nigeriana abandonada por el padre, unajovencísima musulmana que dialoga con lasotras religiones, el rom con el padre en la cár-cel, el pequeño circense, el genio matemáti-co, el enfermo de leucemia alejado de loscompañeros, dos gemelas de las cuales unacon el síndrome de Down, la hija de una pare-ja de lesbianas, los hijos huérfanos de un pa-dre hebreo homosexual y el sobrino de vícti-ma del terrorismo. Pero cada historia, aún lasmás chocantes y dolorosas, en la boca de losniños se convierten en narraciones colorea-das de argucias y sinceridad. Fuera del lugar eldirector abre el discurso con una preguntasencilla y luego deja la escena al pequeño pro-tagonista de turno, que – tímido y extroverti-do, empachado o divertido – la ocupa con de-sarmante autenticidad. Se sonríe a menudo yescuchamos cautivados, también por ciertas“píldoras de sabiduría desconocidas a mu-chos adultos”. Caras frescas, nuevas, ojos pro-fundos que saben acompañarse bien con laspalabras pronunciadas con acentos distintos,de Norte a Sur e – incluso sólo con pocas imá-genes – logran darnos a conocer situacionesfamiliares y sociales. Como cinéfilo que es, eldirector-político abre su narración poniendoen fila muchas escenas célebres de film que


han tenido en los niños y sus héroes, partien-do del pequeño Antoine Doinel (Jean-PierreLéaud) que cerraba con una liberadora carre-ra hacia el mar el fulgurante film de exordiode François Trufaut, ‘Los cuatrocientos golpes’.Es el primer extraordinario batir de alas con elque se abre el film y anuncia: los niños sonaquellos hijos que pueden volver a dar vientoa la barca encallada de nuestra historia. Traenen primer plano su movimiento ‘vital’, físico,de pulso de hijos. Un tema querido por Vel-troni narrador: la crisis, el dolor, la derrota noson cerrazón, sino ocasiones para dar másgrosor y apertura a la vida. Se trata de interro-gar el paso entre las generaciones y descubrirprecisamente que ‘Los hijos saben’. De poten-ciar un proceso de filiación – sobre todo don-


de aparece surcado por un trauma, por un va-cío, por una ausencia o por una discontinui-dad insensata. Las palabras de los niños vantomadas en serio como sus deseos y la res-ponsabilidad de los adultos es la de no dejar-los solos y no sofocarlos, con sus esperanzasy sus prejuicios. La dimensión política del filmconsiste precisamente en el indicar comoesencial para cada discurso educativo “la re-composición del pacto simbólico entre las ge-neraciones”: el adulto no ha de ceder la res-ponsabilidad de la respuesta a las inquietudesy a las esperanzas de sus hijos. Y esta respues-ta consiste, ante todo, en la escucha de su pa-labra.

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La idea del film

Después del pasado (Cuando estaba Berlinguer)el director y político Veltroni invita y elige miraral futuro a través de la infancia.

Lo hace en búsqueda de los valores de la “iz-quierda que querría” (por citar uno de sus últi-mos libros): pacifismo, igualdad, derechos civi-les –escribe Rafaela Giancristofaro. Lo haceoponiendo una primigenia, presunta pureza delos niños al cinismo de la edad adulta/política.En la esperanza que, haciéndoles enunciar asus protagonistas (los adultos de mañana) talesvalores se impriman en el DNA del País”. Éste esel valor, pero también el límite del film. En lu-gar de profundizar un discurso alto sobre nues-tras responsabilidades adultas, Veltroni se limi-ta a confirmar una idea de los niños (y de Italia)en conjunto feliz y ‘esperanzada’. Su buena fese conmueve pero no necesita exagerar, hayque permanecer en la tierra, volver a los niños,a su condición y al destino que nosotros adul-tos les hemos preparado, les preparamos. Ha-cernos responsablemente conscientes que res-petarlos quiere decir, saber captar aquello nue-vo y a la vez eterno que ellos pueden expresary pueden darnos. Escucharles quiere decir ayu-darles a entender, a confrontarse con quien es-tá dispuesto a enseñarles pero también aaprender de ellos, en una óptica generosa decambio, liberación, solidaridad.

El sueño del film

La frase de una espectadora de doce años: “Espe-ro que lo vean nuestros padres, así nos entende-rán mejor”.

Walter Veltroni la definió “el cumplimientomás hermoso” tanto que la expresión fue ele-gida para el póster. Queda efectivamente eleslogan ideal, capaz de sintetizar la intencióndel autor como el mensaje de la obra: “Los ni-ños saben muchas cosas, pueden enseñarlas alos adultos”. Esta segunda dirección de Veltro-ni parte del pequeño príncipe de Antoine deSaint-Exupery: “Los mayores no entiendennunca nada solos y los niños se cansan de ex-plicarles todo cada vez”. También por esto LaNazione comenta: “Entre ‘Los niños nos miran’(1943) de De Sica y ‘Comizi infantili’ (2007) deStefano Consiglio, el ‘bonista’ Veltroni envía alremitente la etiqueta y cuenta con verdaderasensibilidad de escucha”. En efecto, en sus en-trevistas y tomas a los niños, a menudo se repite una palabra y es ‘soledad’. Muchos di-cen que se sienten solos. Desde el punto devista pastoral la obra es para no perderla, sin-tetiza CNVF: “Aconsejable por el estímulo quepropone como punto de partida para enrique-cer el argumento con ulteriores e importantesaportaciones en un diálogo con adultos y los niños, en una dimensión educativa y didác-tica”.

PARA HACER PENSAR


pero en la convalecencia sufrió el zarpazodel trauma y la depresión. Al filo de la muer-te pidió a Dios diez años más de vida. Ycuando se cumplieron esos diez llegó sunombramiento de obispo.

¿Por qué, Jesús?

“Siento una fatiga inmensa, lo sabes, me pa-rece que no soy capaz de seguir adelante,mientras la pequeña se va al cielo. La vida esverdaderamente dura, ¿por qué, Jesús? Perotu piensas en todo, ¿verdad?”. Esta impresio-nante confesión de confianza en Dios la tu-vo Juliana, la madre de Joào, cuando perdióa su hija de apenas cuatro meses. Sintió en elfuneral que podría flaquear tanto física co-mo psíquicamente, y pensó en sus otros treshijos, en su marido. Y de su corazón surgióesta oración, porque no podía venirse abajo.Los pobres no pueden permitirse el lujo dellorar, porque tienen que sobreponerse parasobrevivir.Este es uno de tantos episodios que el carde-nal João lleva grabados en su personalidad,nos dice algo de la fuente de su ser y de su fe.Sus raíces están en una familia con una fe só-lida, que supo salir adelante en medio de lasmiserias de su país, Brasil, tan rico y pobre ala vez, pero que da a luz a gente luchadora.El relato del viaje en tren de una punta a otradel país de la familia Braz de Aviz cuandoJoão y su hermano Amauri eran pequénos,buscando fortuna en el norte, de Mafra aApucarana, es digno de una película de Felli-ni.Las conversaciones íntimas de sus padres,Joào Avelino y Juliana, sobre la aventura que

João Braz de Aviz con Michele ZanzucchiDe las periferias del mundoMaría Dolores Ruiz Pérez

“João Braz de Aviz es el cardenal, de origen Brasileño, actual Prefecto dela Congregación para Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica (CIVCSVA).Está realizado como un libro-entrevista parapresentar la trayectoria vital del cardenal dela vida consagrada desde sus humildes orí-genes. Deja ver el perfil de un hombre quebuscó siempre no despegarse de la tierra, dela vida real, del pueblo, y así huir de las vani-dades propias de los escalafones mundanos.Un hombre de Iglesia que comparte el “ca-risma de la unidad” (Focolares - Chiara Lu-bich). Mediante una narración viva y actual, acce-demos a la vida de una de las figuras clave enel cónclave que eligió al papa Francisco. Enmedio del Año de la Vida Consagrada, estelibro, sin duda, es un buen recurso para se-guir profundizando en lo que estamos cele-brando y conocer más a Mons. Braz de Aviz.Este cardenal viene de las periferias geográ-ficas y existenciales de la Iglesia. El Brasil delos extremos sociales, el entorno laboral y fa-miliar, el del origen y el de la emigración in-terna, e incluso el entorno de los seminariospor los que pasó. En las periferias del mundo hay estructurasde pecado, personas heridas, violencias de-satadas, hay noches oscuras interminables,hay dolores insufribles. João Braz de Aviz lasconoce bien al haber sido abaleado acciden-talmente en un tiroteo entre guardias de unfurgón blindado y delincuentes que preten-dían robarlo. Salvó la vida de puro milagro,


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estaban emprendiendo, sobre el futuro desus hijos, sobre el deseo de que uno de ellospudiera ser llamado por Dios para el sacer-docio, te adentran en el misterio del ser hu-mano. Y así creció y maduró un joven alto yapuesto que nunca olvidó sus orígenes. Esmás, que buscó siempre no despegarse de latierra, del “humus”, como a él le gusta decir,del sufrimiento, de la vida real, del pueblo.

Creer y luchar por una Iglesia más pobreMuy sencillo es este gigante de la bondadque nunca ha dejado de creer y de lucharpor una Iglesia más pobre, más amable, másalegre y esperanzadora. Impresiona su vida de humilde sacerdote deApucarana y obispo (de Ponta Grossa, Ma-ringá y Brasilia), que junto a la religiosidad aprueba de bomba de sus padres, abrazó conprovecho la espiritualidad de la unidad delmovimiento de los Focolares, que segúnconfiesa, tanto le ha ayudado siempre a noperder el norte, a no renunciar a su deseo deser sólo un niño evangélico.En la síntesis de su pensamiento, profundi-zado en su tesis doctoral, tiene claro que elamor es la ley de la vida, y no hay otra. Estonos lleva a que no podemos vivir nuestra fesin construir las relaciones con los demás; elotro no puede ser un peso sino una luz, y la


auténtica posibilidad de vivir el amor. Y unosolo no puede vivir el amor. Puedo sentir yquerer amar a Dios, pero sin el otro no pue-do alcanzarlo. ¿Cuál es la voluntad de Dios?No es tanto lo que me dice el superior deturno; en efecto, yo puedo obedecer aun-que él se equivoque, porque la voluntad deDios es algo mucho más alto que la voluntadde quien me da la orden. Y en el amor verdadero, no puede faltar elamor al pobre, la cuestión de los pobres. “Sino se integra en la convivencia social no sevive el Evangelio” dice. “En este sentido, lateología de la liberación no solamente esútil, o sea positiva, sino que es incluso nece-saria, porque sin los pobres, sin que seanamados, no hay cristianismo. Hay que crearuna estructura social que sea capaz de justi-cia. Las estructuras que existen hay que so-meterlas a crítica, viendo si crean comunióny amor. Si no se da el amor a los pobres, tam-poco se da la fraternidad.

El gran valor a cultivar

Mons. João nos dice que el gran valor quedebemos cultivar en estos momentos espermanecer como familia, “que yo pueda es-tar junto a ti sin miedo, y viceversa”. Nuestrashistorias personales son diferentes, nos hanmarcado de manera diferente, pero yo vivomi vida contigo, contigo que estás aquí, aho-ra: debemos construir aquí la amistad, nues-tra relación. Es necesario recuperar la con-fianza. Si el otro es Jesús para nosotros, en-tonces tú aprendes del hermano y crecescon él. La Iglesia se está moviendo en este sentidoporque hay personas como este cardenal yel Papa y otros muchos que lo viven. En el Va-ticano habrá de todo, como en todos sitios,pero este hombre de bien nos da el testimo-nio que dejó su Brasil y está entre la gente decorazón bueno y abierto en quienes se ma-nifiesta el Espíritu.

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gar al público con una canción que ya ha pa-sado a la historia: Talkin ‘bout a Revolution’donde dice; “Poor people gonna rise up /and take what’s theirs (los pobres se subleva-rán / y cogerán lo que les pertenece…)”. Ini-cia así su viaje de cantautor que lo lleva a na-rrar la degradación de las periferias y las in-justicias sociales.No pocas dificultades encuentra cuando pu-blica en 1989 la canción Subcity con una claray directa crítica al Presidente de Estados Uni-dos George Bush: “People say it doesn’t exist/ ‘Cause no one would like to admit/ Thatthere is a city undergound / Were people liveeveryday / Off the waste and decay / Off thediscards of their fellow man. / Here in subcitylife is hard / We can’t receive any govemmentrelief / I’d like to please give Mr. President myhonest regards / For disregarding me (Lagente dice que no existe / Porque nadie qui-siera admitir / Que haya una ciudad subterrá-nea / Donde la gente vive todos los días / en-tre los desechos y la degradación / entre losrestos de su prójimo. Aquí en los suburbiosla vida es dura / No podemos recibir alivio al-guno / Me gustaría darle señor Presidentemis saludos honestos / Por haberme igno-rado)”.

Dame esperanza: Gimme Hope Jo’anna

Ha sido una de las canciones más cantadasen 1988 en todo el mundo. El texto de la can-ción es un ataque explícito de Eddy Grant,cantante guyanés naturalizado británico, a lapolítica de segregación racial llamada Apart-heid e instituida después de la guerra por elgobierno de etnia blanca en Sudáfrica.

Entre ciudad y periferia

Mariano Diotto

Las canciones siempre han servido paradenunciar las situaciones incómodas ysensibilizar al público, a los políticos, a la sociedad sobre las incomodidadessociales y sobre las inmoralidades del mundo. La dualidad entre ciudad y periferia en el tiempo se ha revestido dedos posiciones bien precisas: la ciudad vista como innovación y tecnología, mientras la periferia como degradacióny pobreza.

En los últimos años la visión ciudad-periferiase está dando la vuelta en cuanto las ciuda-des están siendo cada vez más emblema delvacío construido y del anonimato, mientrasque la periferia es signo de vuelta a las tradi-ciones, a la naturaleza, a la sencillez.Los cantautores cultivan dentro de sí estaparticular sensibilidad y, más allá de las típi-cas canciones de amor, también saben con-movernos afrontando estos temas tan de ac-tualidad, pero al mismo tiempo espinosos, através de músicas y textos que hablan direc-tamente al corazón del público, acaso tra-vestidos por motivos pegadizos o sencillasbaladas.

Tracy Chapman y la pobreza que se hacerescate

Era el 1988 cuando apareció en la escenamundial esta cantante de Cleaveland quegracias a una beca de estudio para estudian-tes negros menos acaudalados, logra licen-ciarse en Antropología y cultura afro ameri-cana en la Tufos University de Medford y lle-


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Jo’anna, en efecto, es el diminutivo de la fa-mosa ciudad de Johannesburgo donde sedesarrollaron violentos choques entre poli-cía y la población de color procedente delcampo. En la canción se citan también dosNóbel de la Paz, Nelson Mandela y el arzo-bispo anglicano Desmond Tutu, que enaquellos años lucharon por la liberación delpueblo africano. El refrán muy alegre y baila-ble logró vehicular la canción en todo elmundo llevando un mensaje de libertad y lasensibilización hacia un problema que elmundo occidental tendía a ignorar.

Another day in Paradise con Phil CollinsEsta canción, del año 1989, es la narración delos sin techo que cada día viven por la callesin una morada fija. “She calls out to the manon the street / He can see she’s been crying /She’s got blisters on the soles of her feet / Shecan’t walk but she’s trying (Ella llama al hom-bre por la calle / él ve que ella ha llorado / ellatiene los pies recubiertos de ampollas / no lo-gra caminar pero lo está intentando)”. El es-tilo musical de esta balada es completamentedistinto de aquel utilizado por el cantante,hasta aquel momento, y de aquel de Génesisdel cual había formado parte durante años.Este giro sobre temas de sensibilización so-cial permite a Phil Collins iniciar una nuevacarrera musical con canciones más significa-

tivas y de contenido de valor hasta su retirooficial de las escenas musicales en 2011.

También los cantantes contemporáneosafrontan estos temas tan comprometidos:Where is love de los Black Eyed Peas, Clan-destino de Manu Chao, People are peopledel Depeche Mode, Living Darfur de los Mat-tafix, / Clandestini de Ricardo Cocciante delmusical Il gobbo di Notre Dame, Chemobylde Paola Turci, Heal the World de MichaelJackson, Working class hero de los GreenDay, L’impossibile vivere de Renato Zero, Lavoce de Laura Pausini.

Tracy Chapman con sus palabras: “What did/ do deserve this / Had my trust in god / Wor-ked everyday if my life / Trought l had someguarantees / That’s what I trought / At leastthat’swhat / thought / (Que he hecho paramerecer esto / Tenía fe en Dios / He trabajadotodos los días de mi vida / Pensaba que teníaalgunas garantías / Es lo que pensaba / Al me-nos esto es lo que he pensado)”. Y como de-cía Italo Calvino “De una ciudad no gozas lassiete o las setenta y siete maravillas, sino larespuesta que da a una pregunta tuya” y es-tas canciones son seguramente la respuestaa la pregunta de un mundo más justo y equi-tativo con todos”.

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de una jornada entera de oración, no setiene tanto entusiasmo, interés y ganas deestar escuchando: los votos, la oración, lavida fraterna, la misión, este año tambiénel Capítulo General. En suma, en aquellos(pocos por definición…) minutos que cie-rran la jornada han de estar dentro las re-comendaciones de un año entero sobretodos los temas imaginables… pero ¿seráposible?

Cuando era hermana joven estaba másbien difundida la frase que los “2 o 3”mi-nutos sugeridos por Don Bosco comolongitud ideal de unas Buenas Noches, setransformaran en “203” minutos por direc-toras demasiado cumplidoras. Obviamen-te era una frase chistosa (203 minutos soncasi tres horas y media, ni mucho menosun chocar los dedos) pero muchas ins-pectoras de hoy (creedme, me he infor-mado cuidadosamente), conscientes de laexageración, parece que han quitado “o”y han retenido únicamente las cifras.

Quien sabe si en su interior ¿no estánconvencidas de que, en el fondo, 23 mi-nutos bastan casi apenas a restituir a lashermanas cuanto se les quita? Por otraparte, directoras que las Buenas Noches,cada vez más a menudo, las sustituyencon el telediario, el juego de damas, lostrabajitos para el día después y de cuantascosas ¡está lleno el mundo!

Palabra de C.

Las Buenas noches ¡están servidas!

Que se me quiera escuchar o no, yo ten-go la obligación moral de decirlo; tam-bién las inspectoras tiene ataques de mo-dernidad que ¡preocupan no poco! Nin-guna de vosotras, amigas mías queridísi-mas, se ha percatado que, para estar conlos tiempos, nuestras buenas y sanas su-perioras desnaturalizan una de las másbellas tradiciones que el Instituto nos hadejado. Y bien sí, también las Buenas No-ches, de salesiana memoria, han termina-do en la trituradora de ¡la época de hoy!

Pero digo, ¿no habéis participado nuncaen una de aquellas tandas de Ejercicios Es-pirituales en las que se quiere revolucio-nar a toda costa nuestras sanas costum-bres? Va, dejad que os lo diga, yo sí he es-tado en ellas y os aseguro que son un ver-dadero y propio atentado a ¡nuestra iden-tidad! Por lo general, después de la pri-mera conferencia del predicador inicia unlarguísimo momento de silencio y refle-xión personal que culmina en las celebra-ciones de la noche. Sería también una bo-nita experiencia si no fuera que las más delas veces se sacrifica el encuentro con lainspectora que, defraudada de una oca-sión tan glotona para advertir a las herma-nas, se recorta un sustancioso espacio deintervención en las Buenas Noches.

Y he aquí este hermoso momento denuestros días transformado en una espe-cie de sermón de la noche que, después


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DOSSIER: AMPLIAD LA MIRADA…MISIONARIEDAD

La misionariedad no es sólo cuestión de territorios geográficos

sino de pueblos, de culturas y de personas individuales.

La vida crece y madura en la medida en que se da para

la vida de los otros. Todos estamos enviados a los caminos

del mundo para caminar con los hermanos, testimoniando

la fe en Cristo y anunciando su Evangelio.

CULTURA ECOLÓGICA: EL MENSAJE DE LA BIODIVERSIDAD

La agro biodiversidad es el fruto del encuentro de cultura

y naturaleza. Es expresión de las diversas civilizaciones

que a lo largo de los siglos han encontrado en las diversas

áreas habitadas del planeta, varios modos de producir alimento,

modelar paisajes, inventar las más increíbles soluciones técnicas.

HILO DE ARIADNA: IEL RECONOCIMIENTO DEL OTRO

Dinamismo comunitario de preferencias y repulsiones.

Consecuencia sobre las personas y sobre la comunidad:

Celos, divisiones, contraposiciones, dependencias.

Perspectivas de desbloqueo.

COMUNICAR: COMUNICACIÓN Y ANIMACIÓN

Crear participación y aceptar estar implicados,

en la óptica de una construcción compartida de los procesos

educativos y comunicativos.

CARISMA Y LIDERAZGO: ESTUDIA HACERTE AMAR

Las temáticas afrontadas en el texto, con referencias

carismáticas a Don Felipe Rinaldi son: secreto y confianza,

suspensión del juicio, claves de una buena animación.

da mihi animas:

nuestra forma decrecer juntos

Próximo número


“QUIEN SABE QUE ES AMADO,AMA, Y QUIEN ES AMADO OBTIENE TODO,

ESPECIALMENTE DE LOS JÓVENES”DON BOSCO

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REVISTA DE LAS HIJAS DE MARÍA AUXILIADORA


revista dma – ampliad la mirada: anuncio (julio – agosto 2015)

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