pueblos 26 - junio de 2007

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  • 8/12/2019 Pueblos 26 - Junio de 2007

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    Revista de Informacin y Debate Junio de 2007 N 26www.revistapueblos.org

    Dossier: El Mundo rabe bajo control?> Palestina: el gobierno de unidad nacionaly sus perspectivas - Repitindonos sobre Lbano - Irak: cinco aos de ocupacin - Irn y el desafonuclear - Marruecos: es posible un cambio desde la continuidad?

    Mxico: Crisis poltica y respuestas sociales> La tragedia mexicana - Esperando elmilagro econmico - Oaxaca, en pie de lucha! - La Otra Campaa: la insurreccin radical delMxico de abajo

    Miradas: Infancia y trabajo> Encuentro y desencuentro de matrices culturales del Nortey del Sur - Los NNATs. Una minora activa por una vida digna - El trabajo contra los nios -El sindicalismo de clase frente al trabajo infantil

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    PueblosN 26 (II poca)Junio de 2007

    Periodicidad trimestral

    Fundada en 1995Segunda poca 2002

    Editada porPueblos

    C/Gran Va, 40 5 oficina 228013 Madrid

    CoordinadorLuis Nieto Pereira

    ResponsableAloia lvarez Fens

    Consejo EditorialAsociacin Paz con Dignidad Centro de

    Iniciativas para la Cooperacin bat (CIC-bat) Centro de Asesora y Estudios Sociales(CAES) Entrepueblos Instituto de

    Promocin de Estudios Sociales - Navarra(IPES-Navarra) Mugarik Gabe - Euskadi

    ngeles Dez Jaume Botey Carlos GmezGil Agustn Maraver Adolfo Rodrguez Gil

    Carlos Taibo

    Consejo de RedaccinLuis Nieto Pereira, Juan Pablo Crespo, Carles Girbau,Pascual Serrano, Aloia lvarez Fens, Decio Machado

    Corresponsal en Centroamrica:Luis Miranda

    ([email protected])

    Diseo: Amani KonanMaquetacin: Manuel Ponce

    FotografaM Jos Comendeiro

    IlustracinPaula Cabildo

    Colaboracin grficaMonero Hernndez, Latuff, La Otra Grafika, EduardoPrez, Larme, Asociacin PENGON, Alberto Arce,J. Kalvellido, Beatriz M. Ballesteros, marta Martnez

    Muoz.

    Entidades colaboradorasJusticia i Pau de Catalua, Instituto Galego de

    Anlise e Documentacin Internacional

    AgradecimientosGema Jov Roig y todas aquellas entidades

    y personas que han hecho posible la elaboracinde este nmero.

    ImpresinImgraf Impresores, S.L.

    Depsito legalM.47.658-1999

    ISSN1577-4376

    Administ rac inTel./Fax: 91 523 38 24

    www.revistapueblos.org / [email protected]

    PublicidadEsta publicacin slo incluir publicidad de entidades pblicas

    y privadas cuyo contenido no est en contradiccin con la lnea

    editorial de PUEBLOS. La publicidad no superar el 5% delespacio fsico de la revista.

    Derechos (copyleft)Cualquier parte de esta publicacin puede ser reproducida de

    cualquier forma siempre que se cite la fuente y el autor.

    Ahmed Gabaly naci en Gaza (Palestina) en el ao 1951 y posee la nacionalidadespaola. En el ao 1973 obtiene el ttulo en Artes Aplicadas y oficios artsticos, trasasistir a clases de dibujo figurativo en el Crculo de Bellas Artes de Madrid durantecuatro aos. Ha realizado diversas exposiciones de pintura individuales y colectivasen distintos pases. Tambin ha trabajado en el departamento de Escenografa de Te-levisin Espaola durante los ltimos 30 aos. Debido a su origen, este artista ha re-

    alizado diversos trabajos relacionados con la causa Palestina y a favor de una pazjusta y duradera en todo Oriente Medio y por la igualdad entre los pueblos.

    Portada

    Ahmed Gabaly

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    Informacin y debate PUEBLOS Junio 2007 3

    Sumario

    Editorial . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 4

    OpininEl reto de la participacin ciudadana (Carlos Girbau) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5

    Mxico: Crisis poltica y respuestas socialesLa tragedia mexicana. De la revolucin traicionada a la ascensin del fascismo(Alfredo Bravo Olivares) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6Esperando el milagro econmico (Alfonso Moro) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9Oaxaca, en pie de lucha! Algunas reflexiones sobre el conflicto (Roberto Olivares) . . . . . .12

    La Otra Campaa: la insurreccin radical del Mxico de abajo (Eduardo Prez) . . . . . . . . .15

    ComunicacinLa necesidad de alternativas en la comunicacin (Decio Machado) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18Las ONG en los medios: de la mitificacin al descrdito (Aloia lvarez Fens) . . . . . . . . . . . . .21

    EntrevistaBrahim Gali, delegado del Frente Polisario en el Estado espaol: Echamos demenos la contundencia del gobierno espaol en una defensa clara de la legalidadinternacional (Aloia lvarez Fens)

    Dossier: El Mundo rabe bajo control?(Artculos de Mustafa Barghouthi, Alberto Arce, Eman A. Khamas, Majed Dibsi y Manuel Lorenzo Villar)

    Miradas: Infancia y trabajoEncuentro y desencuentro de matrices culturales del Norte y del Sur(Alejandro Cussinovich V) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 43Los Movimientos de nios, nias y adolescentes trabajadores. Una minora activapor una vida digna (Marta Martnez Muoz) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 46El trabajo contra los nios (Jos Manuel Martn Medem) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 49El sindicalismo de clase frente al trabajo infantil (Jordi Rib) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .52

    CooperacinLa ayuda al desarrollo de la Unin Europea en Centroamrica: actualidady tendencias (Henry Morales Lpez). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 54Ayuda pblica al desarrollo o endeudamiento?. Mal: deuda externa y resistencias(Aminata Barry Tour) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 57Entrevista a Emilio Rabasco Jimnez, director adjunto del Fondo Andaluz deMunicipios para la Solidaridad Internacional (FAMSI) (Aloia lvarez Fens) . . . . . . . . . . . . . . . 59

    CulturaLibros:Leer a... Naguib Mahfuz (Clara Alonso) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 60Nuevas publicaciones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 61Reseas de: Poltica del disenso. Sociologa de los movimientos sociales,de Xavier Gods i Prez (Raquel Anula) yLa Globalizacin de la Nada,de George Ritzer (Clara Alon so). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 62Msica: El embrujo y los mimbres del nuevo fado (Fernando Blanco). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 63Cine: Un festival para despertar conciencias (Alejandro Pedregal) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .65

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    4 2007 Junio PUEBLOS Informacin y debate

    Editorial

    Editorial

    El naufragiode la condicin humana

    Los dioses haban condenadoa Ssifo a empujar sin cesaruna roca hasta la cima de una

    montaa, desde donde la piedra volve-ra a caer por su propio peso. Habanpensado con algn fundamento que nohay castigo ms terrible que el trabajo

    intil y sin esperanza. Albert Camusreinterpretaba este mito griego comometfora del esfuerzo ftil e incesantedel hombre moderno: Ssifo, el hroeabsurdo, se habra visto irremisible-mente sentenciado a consumir su vidaen las fbricas, trabajando de sol a sol,sin ms futuro que seguir cargando suroca eternamente en un empeo intil.Esta reflexin la hizo hace sesenta ycinco aos pero sta y otras de sus in-terpretaciones sobre lo absurdo de lacondicin humana siguen vigentes,aunque hoy el nuevo proletario de los

    dioses tenga la piel ms oscura y na-vegue en un barco a la deriva.

    Primero fue en las pateras, luego enlos cayucos y ahora las esperanzas va-nas viajan en grandes buques conde-nados al desguace. En el momento deescribir estas lneas 26 hombres, sereshumanos, personas o individuos (eldiccionario es riqusimo) viajan en unbarco cualquiera hacia las costas de al-gn puerto. Perdn por la imprecisin,no, no son turistas en un crucero de lu-

    jo, vienen de Costa de Marfil, son 26

    inmigrantes, o indocumentados, o sinpapeles, o ilegales, o clandestinos...que viajan hacia la costa catalana en unpesquero de bandera espaola que lesrescat hace das del naufragio que su-frieron entre las costas de Malta y Li-bia. El ACNUR les espera en Tarrago-

    na para tratar de acogerles al derechode asilo debido a la situacin en la quese encuentra su pas, pues ni las auto-ridades libias ni maltesas han queridollevarse el problema a casa.

    Si el humanitarismo fuese mensu-rable podra parecer que el gobiernoespaol es el ms compasivo entre susvecinos pues no es la primera vez queacude al rescate de algunos de estoshroes absurdos que intentan alcan-zar el espejismo europeo. Entre febre-ro y mayo de este mismo ao nuestrasautoridades ya nos vendieron su bene-

    volencia al asumir la crisis del MarineI mientras mauritanos e indios (al pa-recer mucho ms malos que nosotros)se desentendan de las 369 personas(la mayora asiticos) que viajaban enun barco a la deriva tratando de alcan-zar las costas de Canarias. Como si debalones se tratase estos cientos de se-res humanos han sido utilizados du-rante tres meses en un juego de fuer-zas diplomtico en el que sus voces ysus derechos no fueron invitados aparticipar.

    Tras haber invertido muchos mesesy miles de euros en prepararse para car-gar su roca e intentar alcanzar la cima,estos Ssifos modernos han visto cmoel tan cacareado respeto a los DerechosHumanos les llevaba de vuelta a las fal-das de la montaa. Pero ya hemos com-

    probado sobradamente que no es posi-ble ponerle puertas al mar; que las va-llas de espino slo desvan la ruta dequien intenta alcanzar el puerto, perono matan la intencin. Y que la diplo-macia no es ms que el arte del disi-mulo y el humanitarismo el nuevo dis-fraz de la culpa judeocristiana.

    23 de las personas que viajaban enel Marine I permanecen todava en Nua-dib negndose a confesar su nacionali-dad para evitar ser repatriados como lohan sido sus compaeros de viaje, entu-siasmados ahora por haber sido trasla-

    dados de la inmunda nave de pescadodonde han malvivido durante estos me-ses a un centro de acogida, pues, co-mo dice Camus, el esfuerzo mismo pa-ra llegar a las cimas basta para llenar uncorazn de hombre. Y es que Ssifo,proletario de los dioses, impotente y re-belde, conoce toda la magnitud de sucondicin miserable: en ella piensa du-rante su descenso. La clarividencia quedeba constituir su tormento consuma almismo tiempo su victoria. No hay des-tino que no venza con el desprecio.

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    Opinin

    El reto de la participacin ciudadana

    Opinin

    La abstencin electoral crece. Elapoyo social a los partidos de-crece. La confianza de los ciu-

    dadanos en el gobierno desciende. Lasinstancias de representacin polticapierden fuerza ante el empuje de lasempresas y una "iniciativa privada"que abarca cada vez ms campos, "ex-propiando" de lo pblico aspectos im-pensables hace slo 30 aos. El Esta-do mengua de tal forma que gobiernoy poder se disocian en la prctica co-

    mo dos ideas distintas, y votar se trans-forma para muchos en un ejercicio quegenera desconfianza o resignacin y,en ningn caso, entusiasmo.

    Entonces, cmo lograr que la so-ciedad avance hacia modelos ms hu-manos, superadores de las explotacio-nes y opresiones actuales? Cmo te-

    jer las complicidades imprescindiblespara cambiarla?

    La globalizacin y sus consecuen-cias representan un duro reto al que noes fcil responder. Y no slo porque lavida, ya sea en el Norte o el Sur del

    planeta, empeore para los trabajado-res, especialmente para las mujeres,los migrantes, los jvenes, etc... sinoporque las formas polticas, inclusoaquellas que aparentemente se mues-tran ms democrticas, sufren una de-gradacin imparable.

    Y es en este contexto donde los"presupuestos participativos" represen-tan un ejemplo en la bsqueda de nue-vas formas de implicacin de la ciuda-dana en la poltica, ms all de la in-dispensable votacin cada cuatro aos.

    El municipio brasileo de Porto Alegrefue y sigue siendo una experiencia devalor universal sin la que resultara im-posible hablar hoy de la extensin decriterios participativos en diversas esfe-ras de la actividad social y poltica, so-bre todo en el espacio del poder local.El peso de esas iniciativas adquiere nue-vas dimensiones, como lo demuestranlas jornadas internacionales organiza-das por la red FALen Mlaga a finalesde marzo para constituir un grupo de

    trabajo sobre este particular en el mar-co de las conclusiones del Foro de Au-toridades Locales por la Inclusin So-cial y la Democracia Participativa quetuvo lugar con ocasin del Foro SocialMundial 2007 de Nairobi (Kenia).

    Ningn proceso de transformacinsocial puede llevarse a trmino sin unaprofunda implicacin y organizacinde la sociedad en su favor; resulta ne-cesaria una ciudadana activa y paraque esa activacin exista, es impres-cindible demostrar en la prctica quela participacin puede transformar las

    cosas. Los presupuestos participativossuponen un camino para la "supera-cin" de una democracia cada vez msformal y rgida que objetivamente s-lo favorece las polticas ms neolibe-rales. Los presupuestos, como cual-quier otra apuesta por una ms y mejorparticipacin de la sociedad, son unavacuna contra el abstencionismo, ladesidia y el desnimo. Desde ese pun-to de vista, constituyen mecanismoseficaces que ayudan a la construccinde tejido social y al establecimiento de

    un lenguaje de "Estado" comprensiblepara todos. Y adems representan fr-mulas tiles para tratar los problemasderivados de la planificacin y modosdel crecimiento, ya sean industrias,modelo energtico, formas de acceso ala vivienda o sobre el binomio campo-ciudad. Todo ello, por no hablar de suutilidad contra la corrupcin al estar sufuncionamiento sujeto a unos parme-tros de transparencia exigidos por lapropia naturaleza de los mismos.

    Las ltimas elecciones municipa-les y autonmicas del pasado 27 demayo a buen seguro habrn sido endistintas localidades una oportunidadpara aquellos que defienden la necesi-dad de regenerar y apostar por nuevoscaminos a favor de la democracia conmaysculas. Reconociendo los lmitesque puedan tener, muchas veces pro-cedentes del propio cors local, en elque mayoritariamente ven la luz; de lascondiciones a travs de la cuales lasentidades reciben el dinero de los ciu-dadanos; de la posible burocratizacin

    de los procesos de participacin, lospresupuestos participativos ofrecenventajas notables y suficientes para serms y mejor explorados. Y estamos se-guros de que la prctica participativapor la va del presupuesto habr avan-zado en muchos lugares tras los lti-mos comicios. La rueda de la historiagira a su favor.

    *Carlos Girbau es coordinador del Foro SocialMadrid y miembro de Paz con Dignidad

    y del Consejo de Redaccin de Pueblos.

    Carlos Girbau*

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    Mxico

    generacin fue educada, cualquier in-tento de participacin en la transfor-macin de las estructuras autoritariasdel gobierno dominado por el PRI setradujo en represin.

    El punto a partir del cual podemosencontrar una renuncia total por par-te del PRI a cualquier vestigio de laRevolucin Mexicana es la entrada envigor en Mxico de las ideas del neo-liberalismo, cuando se renuncia a to-dos los logros de sta, evidencindo-se con la entrada en vigor del Tratadode Libre Comercio de Amrica del

    Norte (TLCAN) cuya oposicin realse manifiesta con el surgimiento delEjrcito Zapatista de Liberacin Na-cional (EZLN). Lzaro Crdenas de-ca: La escuela en Mxico necesitaun programa que ensee al nio loque realmente le sea til en su mayoredad. Hay que educarlo en contactocon la naturaleza; inculcarle la ideo-loga de la Revolucin Mexicana; pre-pararlo para el trabajo colectivizado,toda vez que Mxico debe lograr sudesarrollo por el propio esfuerzo or-ganizado de los mexicanos. De seguir

    Mxico con un sistema individualistaperderemos de aprovechar las rique-zas naturales y las ventajas agrcolase industriales del pas.

    Lamentablemente para los mexi-canos esta visin fue la que se perdiy basta con echar un vis tazo a lascondiciones econmicas, polticas ysociales de Mxico para ver cual fueel resultado.

    La organizacin silenciosade la extrema derechaDesde que Mxico se declara inde-

    pendiente se manifiesta la existenciade grupos conservadores que preten-den instaurar su visin. Estos gruposson los que van a encabezar la oposi-cin a la Reforma Juarista y a promo-ver la intervencin francesa en Mxi-co. Una vez derrotado Maximilianopierden fuerza, pero no su influencia.Durante el porfirismo se fortalecen ymantienen cotos de poder a partir dela organizacin eclesistica. Triun-fante la Revolucin, los curas catli-cos encabezan una rebelin, la de los

    ganizacin se manejaba por medio depequeas organizaciones de fachadaque escondan el objetivo real, slo susmiembros saban acerca de la estruc-tura y organizacin del Yunque, bajo

    juramento eran declarados soldados deDios y la patria bajo el lema el queobedece no se equivoca.

    En el libro El Yunque, la ultrade-recha en el poder, de lvaro Delgado(Grijalbo, Mxico, 2002) se describeel proceso de surgimiento y consoli-dacin de esta organizacin. El primerpaso fue la creacin de dos organis-

    mos de expansin: el Frente Universi-tario Anticomunista (FUA) y el Movi-miento Universitario de RenovadoraOrientacin (MURO), que funciona-ban como grupos de choque pero ocul-tando la labor de captacin de jvenescatlicos, anticomunistas y patrio-tas. Del mismo modo el Yunque to-ma el control de la Asociacin Catli-ca de Jvenes Mexicanos y crea aosdespus la Guardia Unificadora Ibe-roamericana (GUIA) fundada por elex Diputado Federal Luis Pazos, yNueva Guardia y Juventud Inconfor-

    me Positiva, desarrollando una estruc-tura de fidelidad entre sus miembros,que pone por encima de la familia y laiglesia a la organizacin. Los empre-sarios se unieron para apoyar esta or-ganizacin, es el caso de Salinas Pri-ce, dueo de una de las televisoras queconforman el duopolio informativo enMxico, quien acepta haber financia-do al MURO.

    Los empresarios conforman laConfederacin Patronal de la Rep-blica Mexicana (COPARMEX) queen la actualidad tiene una profunda in-

    fluencia poltica y econmica y cuyospresidentes han sido destacadosmiembros del Yunque, a la vez quecrean toda una estructura de respaldosocial a travs de Desarrollo HumanoIntegral y Accin Ciudadana(DHIAC); Asociacin Nacional Cvi-ca Femenina y Comit Nacional Pro-vida, estas ltimas reconocidas comoorganizaciones sumamente conserva-doras opuestas entre otras cosas a lautilizacin de anticonceptivos y alaborto. En aos recientes podemos

    Cristeros contra el gobierno de Calles,argumentando la falta de condicionespara ejercer el culto. Este levanta-miento es derrotado, sin embargo lograechar races en el pas.

    En 1937 se funda la Unin Nacio-nal Sinarquista, movimiento antiagra-rista, anticomunista, antisemita y pro-nazi. El fundador, Salvador Abascal,promova la instauracin de un go-bierno catlico en Mxico, uno de sushijos Carlos Abascal fue secretario deGobernacin de Fox y actualmente esmiembro del comit ejecutivo del Par-tido Accin Nacional. En 1955 en Pue-bla Ramn Plata Moreno concibe lacreacin de una organizacin secretacon una estructura difcil de desarticu-lar, que tuviera como fin la formacin

    de cuadros polticos de extrema dere-cha, preparados poltica y militarmen-te y cuyo objetivo sera instaurar elreino de Dios en Mxico, as des-arrolla un complejo entramado de or-ganizaciones civiles, empresarialesy polticas en todo el pas, con la estra-tegia de ir apoderndose de las activi-dades polticas y econmicas. La or-

    Esta forma de actuar basada en

    vejaciones y abuso del poder se repite

    una y otra vez en Mxico cuando surge un

    movimiento social

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    8 2007 Junio PUEBLOS Informacin y debate

    Mxico

    contar con la conformacin de algunasorganizaciones de fachada que se unena las que a lo largo de 50 aos se hanconformado: Mxico unido contra ladelincuencia, A favor de lo Mejor y laAsociacin Nacional de Padres de Fa-milia (ANPF).

    La estrategia fue tomar por asaltoel PAN (Partido de Accin Nacional)y controlarlo para tener acceso a lospuestos de eleccin popular y de estemodo imponer su proyecto de pas. Elclmax de su proyecto se dio con Vi-cente Fox, quien al llegar a la presi-

    dencia de la Repblica dio puestos fun-damentales a los yunquistas en su go-bierno, los ms destacados: ManuelAguilar Mora, actual procurador gene-ral de la Repblica; Salazar Senz, se-cretario del Trabajo, y Manuel Espino,lder nacional del PAN, junto con unalarga lista de diputados locales y fede-rales, gobernadores y presidentes mu-nicipales que junto con las cpulas em-presariales dictan la poltica econmi-ca y social de Mxico. Es evidente quela decadencia del PRI, que gobern du-rante 70 aos, dio un impulso al PAN

    y al Yunque, junto con la implantacintotal del modelo neoliberal, que no de-bemos olvidar entr a sangre y fuegoen Amrica Latina.

    La situacin actualEl primer gobierno de extrema derechaen Mxico encabezado por Fox trajoconsigo el incremento del desempleo,la pobreza, la migracin, el hambre ysobre todo de la represin. La polticaeconmica dominante ha sido la neo-liberal, se ha promovido la existenciade un puado de diez grupos empresa-

    riales que dominan la economa en to-dos los sentidos. La desigualdad eco-nmica no necesita explicarse, CarlosSlim posee 53.000 millones de dlares,siendo as el segundo hombre ms ri-co del mundo, mientras que la econo-ma mexicana no da ni para que losmexicanos coman. El narcotrfico do-mina una buena parte del pas y por siesto no bastara Fox vino a formalizarla existencia de la Polica Federal Pre-ventiva (PFP), polica poltica que fuecreada por Zedillo para desarticular a

    los movimientos sociales y populares.La PFP debut en su triste funcin re-primiendo al movimiento estudiantil

    de 1999-2000 en la UNAM, que des-pus de una huelga de 9 meses fueaplastado con la encarcelacin de msde 1.000 estudiantes, lo que marc latnica del sexenio de Fox y la del ini-cio del de Caldern.

    A partir de ese momento slo sepueden contabilizar fracasos para losmovimientos sociales en Mxico, in-cluso el Frente de Pueblos en Defensa

    de la Tierra de San Salvador Atencoque haba frenado la construccin delnuevo aeropuerto en 2001, fue repri-mido violentamente en mayo de 2006,teniendo como saldo ms de 200 dete-nidos, ocho casos de violacin, cincode abuso sexual y dos muertos, todoesto a manos de la PFP y del gobiernodel Estado de Mxico encabezado porEnrique Pea Nieto. En esta represincolaboraron los tres niveles de gobier-no: el federal con filiacin panista (de-recha), el estatal prista y el municipalperredista (izquierda) con lo que los

    principales partidos polticos naciona-les dejan bien claro de qu lado estn.

    Esta forma de actuar basada en ve-jaciones y abuso del poder se repiteuna y otra vez en Mxico cuando sur-ge un movimiento social; el caso msreciente es el de Oaxaca, que raya enel genocidio.

    Con la llegada al poder de formacuestionada de Felipe Caldern, a tra-vs de un fraude reconocido hasta porlas autoridades electorales, se abre unapoca de franca ascensin del fascis-mo en Mxico: el dogma del orden y

    progreso con la promocin de la manodura, un neoliberalismo a ultranza, ungobierno ultraconservador, una cam-paa de combate al narcotrfico que lonico que pretende es la militarizacindel pas, trabajadores que reciben unincremento salarial del 3 por cientomientras que el ejrcito y Fuerzas Ar-madas reciben el 46, un grupo de ex-trema derecha al frente del pas quepretende instaurar un reino oscurantis-ta y el manejo de la falsa izquierda pe-rredista, Mxico se encuentra en unasituacin trgica, como nunca antes en

    su historia.Mientras en Amrica Latina se

    siente un aire de esperanza, Mxico pa-rece regresar en el tiempo y encami-narse franca y abiertamente a la pocade las dictaduras militares, esa es la tra-gedia mexicana, a la cual este pueblocomienza a hacer frente con base en elesfuerzo, la lucha y la organizacin.

    *Alfredo Bravo Olivares es profesor deeconoma en la Universidad Nacional Autnoma

    de Mxico (UNAM).

    Crisis poltica y respuestas sociales

    Con la llegada al poder de forma

    cuestionada de Felipe Caldern (...) se

    abre una poca de franca ascensin del

    fascismo

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    Informacin y debate PUEBLOS Junio 2007 9

    Mxico

    El sexenio del presidente VicenteFox que concluy en diciembrede 2006 ha pasado a la historia

    como el de un sonado fracaso econmi-co, poltico y social. La promesa de ha-

    racterizado entre otros factores por larpida apertura de las fronteras, la re-duccin de las subvenciones (principal-mente al sector agrcola) y el desman-telamiento de las cadenas de produccindel mercado interno. Una consecuenciade eso es la creciente desigualdad queexiste entre el crecimiento del PIB, el delas exportaciones y el de las importa-ciones. En el perodo 1995-2006, mien-tras el PIB creci un 17 por ciento, lasexportaciones alcanzaron un aumentode un 36,7 por ciento y las importacio-nes de un 41,4 por ciento. Ese compor-

    tamiento fue an ms marcado entre2001 y 2006 cuando las mismas varia-bles aumentaron un 6,57 y un 52 porciento, respectivamente. Es fcil perci-bir que pese al bajo ritmo de crecimien-to econmico interno, el de las impor-taciones mantiene su dinmica1.

    Esperando el milagro econmicoAlfonso Moro*

    La economa mexicana est inmersaen una aparente paradoja. Mxico es,

    tras Chile, el pas latinoamericanoque ms acuerdos de libre comercioy/o de complementacin econmicaha firmado en los pasados aos, 43desde que en 1994 entr en vigor el

    Tratado de Libre Comercio deAmrica del Norte (TLCAN), firmado

    con Estados Unidos y Canad. Almismo tiempo, el crecimiento sigue

    sin lograr verdaderamente despegary, lo ms preocupante, los tanesperados beneficios del libre

    comercio apenas s llegan a unreducido sector de la poblacin. Pese

    a las reiteradas promesas de bienestarsocial que las polticas liberales

    deberan aportar, la mayora de losmexicanos sigue esperando que se

    realice ese milagro.

    cer crecer el Producto Interno Bruto(PIB) en un 7 por ciento de promedioanual entre 2001 y 2006, qued reduci-da en los hechos a un miserable 1,6 porciento. Son los peores resultados en es-te rubro desde la crisis de principios delos aos ochenta.

    Esta anemia econmica se produjoa pesar de que la coyuntura internacio-nal fue bastante favorable para el pas.En efecto, salvo un corto perodo de re-cesin de los Estados Unidos en 2001,los otros cinco aos se caracterizaron poruna dbil tasa de inters en el mercado

    mundial, el incremento acelerado de losprecios del petrleo (primera fuente deingresos del pas), una aceleracin de losintercambios mundiales y una relativaestabilidad monetaria. Tan evidente esque algo falla en la poltica econmicadel gobierno como dramticas resultansus consecuencias sociales.

    Los gobiernos que han conducido elpas desde hace 13 aos, cuando se fir-m el TLCAN (Tratado de Libre Co-mercio de Amrica del Norte), han apli-cado un riguroso recetario liberal ca-

    1 Las cifras en las que estn basados todos losclculos provienen, salvo indicacin expresa,del Anexo Estadstico al Sexto Informe de Go-bierno, Presidencia de la Repblica, Mxico,2006, as como del Informe Anual 2006 del Ban-co de Mxico.

    MJosComendeiro

    Las protestas por la precaria situacin econmica de la mayora de la poblacin mexicana son constantes. En la foto, manifestacin de los vendedores de flores en el Zcalo, Mxico D.F.

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    10 2007 Junio PUEBLOS Informacin y debate

    Mxico

    Efectos sobre el empleoLa ruptura de las cadenas de produccininterna se produjo en razn de las suce-sivas crisis que sacudieron al pas en laspasadas dos dcadas (la ltima, conoci-da como efecto tequila, fue en 1994-1995) y por la forma en la que se dio laapertura comercial. Ese hecho ha teni-do graves consecuencias sobre la crea-cin de empleo, rengln en el que laeconoma simplemente no logra absor-ber al cerca de un milln de personasque cada ao intenta incorporarse almercado laboral. De acuerdo con el Ins-tituto Mexicano del Seguro Social, el to-tal de empleos permanentes y eventua-les creados durante la administracin fo-xista fue de 1.400.000 puestos, mientrasque 7 millones de personas pasaron aformar parte de la poblacin econmi-camente activa (PEA).

    Al iniciar su mandato, Vicente Foxprometi que garantizara un empleo acada mexicano, a travs de su famosafrase sobre el derecho de cada personaa tener un changarro (chiringito). Perolos pasados seis aos resultaron nefastosen materia de empleo. El Instituto Na-

    cional de Estadstica, Geografa e Infor-mtica (INEGI), dio a conocer a media-dos de noviembre pasado un informedonde se destaca que la poblacin endesocupacin total, esto es, la que nologr trabajar ni siquiera una hora, du-rante el mes de septiembre era de 1,8millones de personas!; que la poblacinsubocupada alcanz los 3,5 millones,mientras que otros 11 millones de mexi-canos en edad y condicin de trabajar sedesempeaban en la economa infor-mal.2 Y eso no es todo. Entre 2000 y2005, se perdieron 900.000 empleos en

    el campo y otros 700.000 en la industria.Definitivamente, existe una distanciaabismal entre la octava potencia mun-dial por el volumen de su comercio ex-terior a la que gustan referirse las auto-ridades cuando hablan de Mxico, y lalacerante realidad que una mayora de lapoblacin vive da a da.

    Qu sucedi con esos millones depersonas que no encontraron una opor-

    tunidad para trabajar correctamente? Alfinal del ao 2000 el pas tena 98,4 mi-llones de habitantes, y al cierre del 2006se estim una cifra de 104,9 millones.Es decir, en seis aos la poblacin au-

    ment en 6,4 millones de personas. Almismo tiempo, la Organizacin Inter-nacional para las Migraciones (OIM),con sede en Suiza, afirma que en el mis-mo periodo 3,4 millones de personasabandonaron el pas (575.000 por ao),de los que un 45 por ciento son mujeres.Segn la misma fuente, hoy estn afec-tados por el despoblamiento 600 muni-cipios de los 2.445 que existen en M-xico. El desarrollo poblacional es nega-tivo all en un 25 por ciento.

    Migracin y remesas

    La creciente incapacidad de la economapara absorber a quienes se integran en lavida activa ha hecho que en menos detres lustros Mxico se haya convertidoen el primer expulsor de mano de obradel mundo, por encima de China, India,Turqua o Filipinas, segn Ral Delga-do, director de la Red Internacional deMigracin y Desarrollo. Conforme conesa red, once millones de mexicanos vi-ven ahora en Estados Unidos y 28 mi-llones de habitantes de ese pas son deorigen mexicano.

    Sin exagerar, puede afirmarse que

    gracias a las remesas enviadas por esosinmigrantes la situacin social no ha ex-plotado en el pas. El informe anual de2006 del Banco de Mxico reporta queentre 2001 y 2006 los ingresos por re-mesas familiares ascendieron a 91.807millones de dlares, lo que hace de es-te rubro la tercera fuente de divisas delpas, slo superada por las exportacio-nes de petrleo y la Inversin Extranje-ra Directa (IED). Segn el Banco Inter-americano de Desarrollo esos recursosrepresentan hasta el 15 por ciento del in-

    gresoper cpitaen las zonas rurales delpas. Ms en general, 4 millones de fa-milias (17 millones de personas) reci-ben regularmente remesas3. El BancoMundial destaca que si los flujos de in-migrantes se componan antes de per-sonas de menor cualificacin, ahora hanvenido a sumarse personas con estudiosuniversitarios, lo que no hace sino agra-var el problema de la falta de mano deobra cualificada4.

    Ciertamente, puede afirmarse que allado de estos hechos coexisten en M-xico empresas y hombres de negociosmuy poderosos, tanto que varios de ellos-comenzando por el magnate de la tele-fona Carlos Slim- aparecen entre loshombres ms ricos del mundo. Cemex,Amrica Mvil Grupo Modelo, GrupoDesc, Grupo Minero Mxico, GrupoBimbo, Gruma S.A., Industrias Peolesy Televisa, entre otros, forman parte delreducido nmero de empresas benefi-ciadas y enriquecidas gracias a las pol-ticas seguidas desde hace dos dcadas.Sin embargo, existe un problema adi-cional que es preciso destacar. Ni laapertura comercial desenfrenada ni las

    polticas asistencialistas promovidas es-tos aos han servido para corregir la ca-da vez ms aguda concentracin de losingresos, y an menos la pobreza.

    La Secretaria de Hacienda y Crdi-to Pblico (SHCP) revel en un estudiosobre la distribucin del ingreso, la car-ga fiscal y el beneficio social publicadoen marzo pasado que el 10 por ciento dela poblacin ms pobre del pas percibeel 1,1 por ciento del ingreso nacional,mientras que en el extremo opuesto el 10por ciento ms rico concentra el 39,6por ciento de los recursos5. Casi al mis-

    mo tiempo, la nueva titular de la Secre-tara de Desarrollo Social (Sedeso), Be-

    Crisis poltica y respuestas socialesLa economa simplemente no logra

    absorber al cerca de un milln de

    personas que cada ao intenta

    incorporarse al mercado laboral

    2 La Jornada, 24 de septiembre y 19 de no-viembre de 2006.

    3 En 2001 se registraron 27,7 millones de reme-sas por un valor promedio de 321 dlares cadauna. Para 2006 las cifras fueron de 65,8 millo-nes de transacciones por un valor promedio de350 dlares. Banco de Mxico (2006): InformeAnual, op cit.

    4 Ver Close to Home. The Development Impactof Remittences in Latin America, World Bank,Washington, 2006.

    5 La Jornada, 28 de marzo de 2007.

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    Mxico

    *Alfonso Moro es doctor en economa, miembrode la organizacin France-Amrique Latine e

    integrante de la Red birregional Unin Europea-Amrica Latina, Enlazando Alternativas.

    atriz Zavala, re-conoci en unacomparecenciaante el Senadoque los ndicesde pobreza de lapoblacin mexi-cana se encuen-tran en los mis-mos niveles de1994, justo cuando entr en vigor elTLCAN. Contrariamente a lo afirmadopor Vicente Fox, la responsable dijo queel 47 por ciento de los mexicanos (49millones de personas) vive en pobrezapatrimonial. De ese total, 19 millonespadecen tambin de pobreza alimenta-ria6. Queda claro que sin los ingresos delas remesas que aportan los inmigrantesla situacin sera mucho peor.

    A la luz de estos datos intentemosresponder aunque sea en forma sucintaa dos preguntas: Cun competitiva esla economa mexicana? Quines sonlos beneficiarios de los acuerdos de li-bre comercio?

    La balanza comercial

    En los pasados seis aos, las exporta-ciones y las importaciones aumentaronen una tasa anual media (TCAM) del 8,4y el 8,1 por ciento respectivamente, va-riaciones que pueden dar la idea de quela brecha entre el sector externo e inter-no se estara cerrando. Nada ms falso.Si se sustrae de las exportaciones la par-te efectuada por las empresas maquila-doras y de petrleo, el crecimiento se re-duce a un 7,7 por ciento en promedioanual. Lo contrario sucede con las im-portaciones, donde al sustraer las com-pras de las maquiladoras la TCAM se

    eleva al 9,2 por ciento. Como se dijo an-tes, pese al menor crecimiento, persisteuna bulmica tendencia importadora delos sectores productivos -en particulardentro de la industria manufacturera-, as

    Kong y Singa-pur, el dficitsum ms de63.000 millo-nes de dlares,e igual sucedicon China y Ja-pn con los queel pas acumulun saldo nega-

    tivo comercial de ms de 50.000 mi-llones de dlares en cada caso!

    El dficit comercial acumulado enlos pasados seis aos fue casi seis ve-ces mayor al del sexenio 1995-2000,eso pese a que el crecimiento econ-mico result mucho menor. Y las me-didas anunciadas hasta ahora por el go-bierno de Felipe Caldern difcilmen-te corregirn esa tendencia. La para-doja a la que se hizo referencia en unprincipio es, simplemente, aparente.Como los hechos prueban, existe en re-alidad una incompatibilidad entre elmodelo aplicado hasta ahora y las po-sibilidades de lograr el crecimiento condesarrollo que los mexicanos exigen.

    Segn lo pactado en el TLCAN,

    Mxico deber abrir por completo susfronteras en 2008 a las compras demaz y frijol (productos base de la die-ta familiar) provenientes de EE UU yCanad, lo que sin duda agravar lacrisis econmica que padece el cam-po y tendr efectos devastadores pa-ra las familias campesinas. Al mismotiempo seguir la presin sobre los sa-larios bajo el prurito de no perdercompetitividad.

    Los movimientos de protesta y des-contento social surgidos en el pas enestos ltimos tiempos (Atenco, Oaxa-

    ca, mineros, Chiapas, maestros, cam-pesinos, etc), como puede entenderse,tienen un origen material. Desde hace15 aos los distintos gobiernos hanprometido realizar el milagro de hacercrecer, verdaderamente, al pas y ga-rantizar una vida digna a sus habitan-tes. Cunto tiempo ms habr que es-perar el milagro?

    como de la poblacin de altos recursos.En efecto, la descomposicin sectorialpor tipo de bienes importados muestraque fueron los bienes de consumo (ge-neralmente de lujo) los que tuvieron unmayor crecimiento (87 por ciento), se-guidos por los bienes intermedios (49por ciento) y de capital (36 por ciento).

    En cuanto a los resultados en ma-teria de acuerdos comerciales, desde la

    firma del TLCAN y hasta el fin de2006, Mxico multiplic sus exporta-ciones hacia sus dos socios del Nortepor casi cinco veces y las importacio-nes por tres, lo que arroja una balanzafavorable para el pas. Por el contrario,con la Unin Europea, con la que exis-te un acuerdo de libre comercio desdeel ao 2000, el desequilibrio explot li-teralmente al acumular al final del aopasado un dficit comercial de 81,688millones de dlares; es decir, que porcada dlar que el pas le vende a la UE,adquiere mercancas y servicios por

    otros tres dlares.En el caso de los nuevos pases in-

    dustrializados del sudeste asitico(NICs), a saber: Corea, Taiwn, Hong

    Mxico deber abrir por completo sus

    fronteras en 2008 a las compras de maz

    y frijol (productos base de la dieta familiar)

    provenientes de EE UU y Canad

    6 La Jornada, 12 de abril de 2007. Pobreza pa-trimonial significa no contar con recursos parasatisfacer necesidades de alimentacin, vesti-do, calzado, vivienda, salud, transporte pblicoy educacin. Por pobreza alimentaria se en-tiende que la persona no puede tener acceso alos alimentos indispensables para el desarrollode las capacidades humanas.

    En menos de tres lustros Mxico se ha

    convertido en el primer expulsor de mano

    de obra del mundo, por encima de China,India, Turqua o Filipinas

    MJosComendeiro

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    12 2007 Junio PUEBLOS Informacin y debate

    Mxico

    Crisis poltica y respuestas sociales

    Oaxaca, ubicado en el surestemexicano, es uno de los 3 es-tados ms pobres de Mxico.

    Paradjicamente es el estado con ma-yor diversidad cultural y biolgica delpas. En Oaxaca el poder poltico y

    econmico ha estado concentrado enmuy pocas manos y durante muchotiempo los gobernantes no han hechootra cosa que enriquecerse y abusar delpoder en detrimento de una gran ma-yora cada vez ms empobrecida.

    El monopolio del PRI (Partido Re-volucionario Institucional), que a nivelnacional termin el 2 de julio de 2000,en Oaxaca se protegi con un fraude

    electoral. Como producto de ese frau-de Ulises Ruiz Ortiz llega al gobiernode Oaxaca a pesar del descontento po-pular. El nuevo gobernador no slo nohace nada para ganar cierta legitimidadsino que, por el contrario, decide des-de el primer da de su gobierno ven-garse de sus enemigos polticos. El dade su toma de posesin manda tomarlas oficinas delDiario Noticias, orde-na detener a Gabino Cu (candidatoopositor y verdadero ganador de laeleccin); poco despus empieza a per-

    Roberto Olivares*

    seguir fiscalmente a empresarios queapoyaron a Cu y encarcela o hacedesaparecer a lderes sociales de dife-rentes regiones del estado.

    Por si esto fuera poco, decide "re-modelar la ciudad1, lo que no slo pro-duce rechazo por representar un gravedao a su patrimonio histrico, sinopor la descarada maniobra de dividirlas millonarias obras entre 27 empre-

    sas de familiares y amigos para evadirlas licitaciones y autoadjudicarse loscontratos a travs deprestanombres.Esta decisin del gobierno fue comouna bofetada para las colonias popula-res que no tienen los mnimos serviciossanitarios y de infraestructura y a losque se les ha dicho durantes aos que"no hay presupuesto".

    Oaxaca, en pie de lucha!Algunas reflexiones sobre el conflicto

    El 14 de junio de 2006 la represinal plantn magisterial en el centrode la ciudad de Oaxaca gener un

    rechazo generalizado de la sociedady fue el catalizador para iniciar unmovimiento social en contra de la

    injusticia histrica que se ha vividoen el estado. As nace la APPO

    (Asamblea Popular de los Pueblos

    de Oaxaca). Desgraciadamente,tanto el gobierno federal como el

    estatal optan por la represin comoforma de solucin al conflicto. Unamala apuesta, ya que el movimiento

    social en Oaxaca sigue vivo.

    1 Hay que aclarar que la ciudad de Oaxaca estconsiderada como patrimonio cultural de la hu-manidad por la UNESCO.

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    Informacin y debate PUEBLOS Junio 2007 13

    Mxico

    A pesar de la campaa de despres-tigio en contra de la APPO, orquesta-da tanto en algunos medios locales co-mo nacionales, esta asamblea popularlogra aglutinar a un gran nmero depoblacin oaxaquea y convencer en

    su accin poltica porque promueveque las decisiones se tomen por con-senso y no por mayora, lo que obligaa la direccin colectiva y a las organi-zaciones ms numerosas (como la sec-cin 22 del magisterio) a buscar acuer-dos que en general sean aceptados portodos los sectores. Tal vez sea por estoque la agenda de la APPO se centr endos coincidencias fundamentales: lasalida del gobernador y la necesidad deuna reforma del estado, como solucio-nes a una crisis institucional muy agu-da que vive el pas entero, pero que se

    expresa con particular gravedad en Oa-xaca, ya que ni siquiera la divisin depoderes existe: ni el poder legislativoni el judicial tienen autonoma, todosson empleados del gobernador. Porello, la APPO se enfrenta a un enemi-go muy poderoso.

    Por si esto fuera poco, el conflictooaxaqueo coincide con el fin del se-xenio panista y en el contexto de unaeleccin presidencial muy cuestiona-da. El PRI pasa a ser la tercera fuerzapoltica a nivel nacional, pero se con-vierte en la pesa de la balanza que ne-

    cesita el PAN (Partido Accin Nacio-nal) para legitimar a Felipe Caldern.Esto genera negociaciones entre elPAN y el PRI que dan como resultadola represin por parte de las fuerzas fe-derales al movimiento popular oaxa-queo y el apoyo al gobernador de Oa-xaca, a pesar de los exhortos que la c-mara de diputados federal y la de se-nadores hicieron al gobernador paraque renunciara o pidiera licencia.

    En Mxico, tanto simpatizantes co-mo detractores del movimiento social

    oaxaqueo coinciden en que la salidadel gobernador es una condicin in-dispensable para la resolucin del con-flicto; sin embargo, el apoyo a Ulisespor parte del PAN demuestra el tama-o de su miedo ante la crisis de legiti-midad de Caldern y tambin la gravecrisis constitucional, ya que a pesar delconsenso en el Congreso de la Uninsobre la necesidad de la renuncia delgobernador, ha habido trabas jurdicasque demuestran lo obsoletas que sonlas leyes en este pas.

    Un elemento fundamental para la

    organizacin del movimiento popularfueron los medios de comunicacin,especialmente la radio, columna ver-tebral de la organizacin ciudadana.El gobierno del estado tambin lo en-tendi as, por lo que el 14 de juniouno de los objetivos centrales del ope-rativo policial fue la destruccin deRadio Plantn, la radio de la seccin22 del magisterio. ste fue el inicio dela peregrinacin del movimiento porvarias emisoras. Radio Universidadfue la segunda radio del movimiento,y al ser atacada nuevamente por el go-

    bierno, se tom la Radio y la Televi-sin Pblica de Oaxaca, que sufrieronel mismo destino: los transmisoresfueron atacados por sicarios del go-bernador. La APPO decide entoncestomar 12 estaciones de radio privadasdurante 24 horas y quedarse con dosde ellas hasta la cada de Ulises. Estono sucedi, ya que la APPO como unamedida de distensin, decide devol-ver las 2 estaciones de radio. Para en-tonces, ya estaba nuevamente en el ai-re Radio Plantn.

    La represinDurante el conflicto se han cometidoinfinidad de violaciones a los Dere-chos Humanos y constitucionales.Durante los 6 meses que la APPO tu-vo el control de la ciudad con el apo-yo de una gran mayora de la socie-dad, las policas del estado dispara-ban contra las personas tanto en lasbarricadas como en las marchas des-de la clandestinidad. Esto arroj unsaldo de ms de 20 muertos e infini-dad de personas desaparecidas y he-

    El origen de la APPOEn este contexto, el magisterio oaxa-queo se instala en el centro histricoen mayo de 2006 demandando mejo-ras salariales; el gobernador se niega anegociar y el 14 de junio decide des-alojarlos con el uso de la fuerza pbli-ca. La represin al plantn magisterialgener un rechazo generalizado de lasociedad y despert acciones de soli-daridad pocas veces vistas en Oaxaca.ste fue el catalizador para iniciar unmovimiento social en contra de la in-

    justicia histrica que se ha vivido en el

    estado, simbolizada ahora por el go-bernador espurio, corrupto y autorita-rio Ulises Ruiz.

    Diversas organizaciones socialesdeciden solidarizarse con el magisterioy aprovechan la coyuntura para crearun frente comn de lucha. As nace laAPPO (Asamblea Popular de los Pue-blos de Oaxaca) el 20 de junio de 2006.Estas organizaciones deciden agrupar-se partiendo del modelo de Asamblea,que es el mximo rgano de autoridaden las comunidades indgenas. Se for-ma un frente muy amplio y diverso de

    lucha que tiene como principal de-manda la renuncia del gobernador y lapuesta en marcha de la reforma pro-funda del estado de Oaxaca.

    La APPO es difcil de definir, perose podra decir que es un espacio deconvergencia de diferentes organiza-ciones, movimientos sociales y ciuda-dana no organizada. Desde los gruposms estructurados, como es el caso dela seccin 22 del magisterio, que agru-pa a 76.000 maestros y maestras, hastaorganizaciones sociales e indgenas demenor tamao pero con influencias te-

    rritoriales importantes, organizacionesde la sociedad civil, ONG, hasta pe-queas agrupaciones vecinales y ciu-dadana sin experiencia previa de orga-nizacin. Lo novedoso de esta forma delucha es que logr la convergencia desectores sociales que jams haban con-fluido en una serie de acciones conjun-tas y coordinadas. Otro elemento im-portante de la APPO es la estructura ho-rizontal en la toma de decisiones y laaceptacin de la heterogeneidad y di-versidad de sus integrantes.

    Lo novedoso de esta forma de lucha

    es que logr la convergencia de sectores

    sociales que jams haban confluido

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    14 2007 Junio PUEBLOS Informacin y debate

    Mxico

    *Roberto Olivares forma parte dela organizacin oaxaquea Ojo de

    Agua Comunicacin(www.laneta.apc.org/ojodeagua).

    Crisis poltica y respuestas socialesridas. Uno de esos muertos, el perio-dista estadounidense Bradley RolandWill, fue utilizado como pretexto pa-ra la intervencin de la PFP (PolicaFederal Preventiva), que en realidades la polica militar disfrazada de po-lica civil. A partir del 29 de octubre,cuando llegan 5.000 elementos de laPFP a "restaurar el orden y abrir lasvas de comunicacin", los enfrenta-mientos fueron subiendo de tono, es-pecialmente tras el 2 de noviembre,da en el que se defiende a la Univer-sidad Autnoma Benito Jurez de Oa-

    xaca y en el que la poblacin logra re-plegar con palos y piedras a los mili-tares disfrazados de policas. Esta de-rrota del cuerpo policial, combinadacon la nueva designacin del actualsecretario de gobernacin, RamrezAcua (miembro de la corriente deultraderecha conocida como el Yun-que), dan como resultado la masacredel 25 de noviembre, en la que la po-lica cometi excesos y viol todoslos derechos ciudadanos. Golpearony detuvieron ilegalmente a 200 per-sonas, de las cuales por lo menos la

    mitad ni siquiera tenan que ver nadacon el conflicto: vendedoras ambu-lantes, menores de edad y gente de latercera edad fueron brutalmente gol-peados e ilegalmente detenidos por elsimple hecho de haber estado en ellugar equivocado en el momentoequivocado.

    El nmero de muertos a da dehoy es de 23, el nmero de desapare-cidos es incierto, pero se habla de msde 60. Hubo casi 300 personas dete-nidas de las cuales ms de 200 han te-nido que ser liberadas por falta de

    pruebas pero que siguen enla cuerda floja, ya que estnen libertad bajo caucin, yquedan 62 detenidos en pe-nales de Oaxaca y en otrosde mediana y mxima segu-ridad en distintos lugares delpas. La Comisin Civil In-ternacional de Observacinde los Derechos Humanos yotros organismos han docu-mentado y expuesto la gra-vedad de la situacin. Sin

    embargo, los gobiernos, tanto estatalcomo federal, han hecho caso omisoa las recomendaciones y han optado

    por la represin como forma de solu-cin al conflicto, evidentemente unamala apuesta, ya que el movimientopopular en Oaxaca no se detendr.

    Tras la represin del 25 de no-viembre hubo un repliegue significa-tivo del movimiento social, e inclusoincertidumbre, pero apenas comen-zando el ao el movimiento reinicisus acciones en varios frentes: El frente electoral: se aproximan

    las elecciones locales de diputadosen Oaxaca y la APPO ha iniciadosus movilizaciones en varias re-

    giones del estado. Si se logra ma-yora en el congreso negociandolas candidaturas con los partidosde oposicin, podrn sentarse lasbases para lograr las reformas a laconstitucin del estado que garan-ticen una participacin y controlciudadano sobre los recursos y lasdecisiones del gobierno. Se daraun gran paso cualitativo: pasar deun sistema agotado de democraciarepresentativa hacia un modeloms justo y responsable de demo-cracia participativa.

    El frente de la calle: las moviliza-ciones en las calles, las marchas ylos plantones van en aumento yaunque con menor espectaculari-dad que en meses pasados, la gen-te sigue manifestndose en contradel gobierno. Pero estas accionesno quedan en la mera protesta,hay una gran proliferacin de to-do tipo de iniciativas ciudadanas(talleres, encuentros, coloquios,eventos culturales, proyeccionesy exposiciones), en las que se re-vela el descontento que surge de

    una poblacin agraviada pero quesabe encauzar creativamente larabia y la frustracin. Es tal lacantidad y a menudo la calidad detodos estos eventos, que resultaimposible asistir a todos inclusoteniendo todo el tiempo para ha-cerlo. Lo mismo en un encuentrode comunicadores y comunicado-ras que en la funcin de un grupode danza contempornea, el in-grediente poltico, el rechazo alactual estado de cosas o las pro-puestas concretas de nuevos mo-

    delos de convivencia se vuelvenla constante de una Oaxaca que

    jams volver a ser l a misma yque ha vencido no slo a un go-bernador sino a todo un sistema apartir de la recuperacin e incre-mento de su dignidad, que de ma-nera inversamente proporcionales la gran derrota del gobierno.En vez de parlisis e intimidacin,

    que fue lo que el gobierno esperabacomo resultado de la salvaje repre-sin que puso en marcha, la represinha producido una intensa efervescen-

    cia y ha fomentado el ejer-cicio de la imaginacin y lacreatividad para construiruna nueva forma de convi-vencia social que puedaarrojar con su lucha algu-nas luces de esperanza a lahumanidad. Oaxaca sigueen pie de lucha!

    La represin ha producido una intensa

    efervescencia y ha fomentado el ejercicio

    de la imaginacin y la creatividad para

    construir una nueva forma de convivencia

    social

    PaulaCabildo

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    Informacin y debate PUEBLOS Junio 2007 15

    Mxico

    La Otra Campaa:la insurreccin radical del Mxico de abajo

    Eduardo Prez*

    Desde el verano de 2005, cuando elEjrcito Zapatista de LiberacinNacional sac a la luz su Sexta

    Declaracin de la Selva Lacandona,el nuevo movimiento se ha ido

    consolidando poco a poco. Losmarginados por el sistema se estnviendo, se estn hablando y se estnpreparando para un estallido social

    que en Mxico parece estar mscerca cada da que pasa.

    pesino de Hidalgo, un msico de son ja-rocho de Veracruz, una zapoteca de Oa-xaca, un preso poltico de Guerrero, unatrabajadora de las maquilas de Puebla,un taxista del Distrito Federal, una tra-bajadora sexual de Tlaxcala, un traba-

    jador petrolero de Tabasco, un abogadodel Estado de Mxico, un chichimecade Guanajuato, una joven punk de Ja-lisco, un marxista-leninista de Nayarit,un pescador de Michoacn...

    Para empezar a entender qu esLa Otra Campaa slo hace fal-ta echar un vistazo a la lista de

    los detenidos en los enfrentamientoscon la polica en la batalla campal demayo de 2006 en el pueblo de San Sal-vador Atenco. Es posible que sea elnico lugar en todo Mxico en el quese pueden encontrar al mismo tiempocampesinos, estudiantes de Economa,telefonistas e indgenas mazahuas. Por-

    que, a diferencia de los tradicionalesmovimientos revolucionarios, ste nobusca en ningn sujeto social concre-to el motor de la transformacin. Nocree que tengan que ser slo los prole-tarios industriales, los campesinos o losguerrilleros los que vayan a derrocar alas autoridades y a los capitalistas y to-men las riendas del pas. El nico re-quisito es estar abajo, es decir, no es-tar colocado en puestos de poder, y ala izquierda, lase: ser anticapitalistaen sus diversas frmulas.

    La Otra Campaa est constituidapor personas que, a primera vista, tienenvidas y necesidades diferentes, pero sise les escucha, se comprueba que tienendos caractersticas comunes: su exclu-sin del sistema social y su conformi-dad con la Sexta Declaracin de la Sel-va Lacandona, que les llama a construiruna alternativa. As es como se com-prende que ya formen parte del movi-miento un cristiano de Chiapas, un cam-

    La

    OtraGrafika

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    Mxico

    Por lo que se ha visto hasta el mo-mento, La Otra Campaa no se quedaen la tradicional postura de la izquierdaoriginal, segn la cual la conquista delos medios de produccin es la recetapara todos los males. Esa es una metaprincipal, pero la recuperacin de ese ra-dicalismo no ha hecho perder la in-fluencia de los movimientos socialesque protagonizaron la renovacin des-de mediados del siglo XX, como el fe-minista o el ecologista. As, el machis-mo o la discriminacin que padecen loshomosexuales o las trabajadoras del se-

    xo estn bien presentes en La Otra Cam-paa. Un adherente del Comit LsbicoGay de Occidente declar a la revista

    Rebelda que la discriminacin pro-viene de la izquierda tambin, y es unreto para La Otra Campaa. Otro co-lectivo de gays y lesbianas seala: Sino tocamos las estructuras ms silen-ciosas del sistema, las que tienen que vercon las libertades para amar a quien que-remos amar, para decidir sobre nuestrocuerpo, el cambio no ser verdadero.

    A la vez que se intenta esta modi-ficacin en la izquierda de siempre,

    los nuevos tambin introducen cam-bios, por ejemplo retomando consig-nas y aplicndolas a su contexto: lassexoservidorasmilitantes reivindicanque la calle es para quien la talonea.

    La diversidad de gentes tambin seda en cuanto a diversidad ideolgica,siempre dentro de las propuestas alter-nativas al sistema capitalista. Es el ca-so del anarquismo, que en Mxico tie-ne implantacin principalmente desdela poca de los hermanos Flores Ma-gn, exponentes del radicalismo socialde la Revolucin Mexicana junto a

    Emiliano Zapata y Francisco Villa. Loslibertarios mexicanos, dispersos por to-do el pas y sin grandes organizaciones,se han adherido a La Otra Campaa, yaque sus principios concuerdan com-pletamente con el rechazo a los parti-dos polticos del nuevo movimiento.Sus propuestas suelen incidir en la ne-cesidad de evitar la reproduccin demecanismos autoritarios: Debemosimpedir que La Otra Campaa se con-vierta en una burocracia, seala el Co-lectivo Autnomo Magonista.

    El origende La OtraLa Otra Cam-paa surge delEjrcito Zapa-tista de Libe-racin Nacio-nal (EZLN)en verano de2005. Es la l-tima bala delos zapatistasen su afn por

    juntarse con elpueblo mexi-cano. Pese aque tuvieronuna etapa enla que lo parecan, los insurgentes deChiapas nunca se han limitado a rei-vindicar sus derechos como pueblosindios. Siempre intentaron enlazar conel resto de la izquierda, con iniciativascomo el Frente Zapatista de LiberacinNacional o la Convencin NacionalDemocrtica. Ninguna funcion, qui-z por la excesiva apertura de la con-vocatoria, como ha reconocido el pro-

    pio subcomandante Marcos.Esta vez es diferente. Se excluye a

    todos los partidos polticos con regis-tro electoral y se afirma que el objeti-vo no es slo reivindicar derechos, si-no destruir el sistema poltico y eco-nmico y dar paso a otro modelo en elque sean los de abajo quienes manden.Ideas que han supuesto para el movi-miento el desprecio constante del po-der poltico y meditico.

    En el terreno organizativo, La OtraCampaa no cuenta todava con unaestructura definida, y de momento la

    Comisin Sexta zapatista es en laprctica el nico portavoz de cara alexterior y un elemento fundamental enla relacin entre los distintos territo-rios. Dicho esto, el movimiento cuen-ta ya con gran cantidad de asambleasmunicipales, nutridas bsicamente porlos grupos de izquierda existentes encada lugar.

    Tambin se da la organizacin re-gional, que responde a la estructura-cin poltica de Mxico, aunque en elfuturo no ser as necesariamente, pues

    Crisis poltica y respuestas socialesMs curioso es que Gloria Arenas,

    presa por dirigir un grupo armado mar-xista, coincida con ellos: No quere-mos una estructura vertical, centrali-zada, autoritaria, homogeneizante nihegemonizante, pero tampoco unared amorfa. ste parece ser el senti-miento predominante de los adheren-tes a la Sexta Declaracin de la SelvaLacandona.

    En su mayora, tambin los parti-dos (sin registro electoral) y organi-zaciones de corte leninista se han im-plicado en La Otra Campaa. Sin em-bargo, en algunas ocasiones se produ-cen contradicciones, pues en un mo-vimiento cuya base es no luchar porel poder quiz resulte extrao que enmuchas reuniones alguien proclameel ya conocido programa de formarun gobierno provisional que d pasoa una asamblea constituyente. Msraro todava resulta observar a losmiembros de un grupsculo colgandoen cada uno de los actos pblicos supancarta con los retratos de Marx, En-gels, Lenin y lo que ya a muchos ad-herentes les resulta demasiado indi-

    gesto: Stalin.Ms all de estos detalles, se han

    producido fricciones de importancia.Un grupo leninista fue duramente cri-ticado cuando abandon el plantnen apoyo de los presos de Atenco pa-ra marchar junto a Andrs Manuel L-pez Obrador, lder del Partido de laRevolucin Democrtica (PRD), su-puesta vctima de fraude electoral yobjeto de crticas demoledoras de LaOtra Campaa por su pasado y pre-sente neoliberal, corrupto y represor.Tambin ha habido polmica en el se-

    no de la insurreccin oaxaquea, don-de los partidos han tratado de imponersu ley y desvirtuar el espritu horizon-tal del movimiento.

    El nico requisito es estar abajo, es decir,

    no estar colocado en puestos de poder, y

    a la izquierda, lase: ser anticapitalista en

    sus diversas frmulas

    EduardoPrez

    Los acontecimientos de Atenco sirvieron para fobloqueo de

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    Mxico

    ya se ha anun-ciado que esposible que lademarcacinpor estadoshecha por elMxico dearriba no tienepor qu coin-cidir con laque desee elMxico deabajo, atentotambin, porejemplo, almapa de na-cionalidadesindgenas. En

    cuanto a la organizacin a una escalamayor, los acontecimientos de Atencopropiciaron la celebracin de variasasambleas nacionales para tratar el te-ma, tanto en ese mismo pueblo comoen la capital del pas.

    Actualmente una delegacin zapa-tista compuesta por varios comandan-tes recorre la geografa nacional, y den-tro de poco tiempo se elaborar el PlanNacional de Lucha, as como la es-tructuracin del movimiento.

    El futuro prximoDesde que cay el rgimen de parti-do de Estado, los acontecimientos seacumulan en Mxico. Se sucedenhuelgas, disturbios, rebeliones, frau-des electorales y encarcelamientosmasivos. No sera extrao que FelipeCaldern fuera el primer presidenteposterior a la Revolucin Mexicanaque no acaba su mandato. VicenteFox subi al poder legitimado por ha-

    ber derribado al PRI. Caldern lo hahecho manchado de sangre y acusa-do de fraude. Y adems, est la histo-ria. No son pocas las voces que indi-can la similitud de los acontecimien-tos del presente con los que abrieronel camino a la Revolucin Mexicana.Y las que sealan, como el subco-mandante Marcos, que si 1810 diopaso al Mxico independiente y 1910al Mxico moderno, 2010 inaugura-r un Mxico sin capitalismo. La te-sis es: el pas va a estallar, y mejor se-

    r que nos organicemos para que es-talle de la manera ms pacfica y or-ganizada posible.

    Para poner fin a esta introduccina lo que es y representa La Otra Cam-paa, no se me ocurre nada mejor quereproducir un fragmento del discursotitulado Hasta morir si es preciso,pronunciado por el subcomandanteMarcos en el Zcalo de Mxico DF el1 de mayo de 2006. Los lectores y lec-toras sabrn entender por qu algunosconsideramos que La Otra Campaa esel factor que hoy sita a Mxico en pri-mera lnea de las luchas populares detodo el mundo:

    Hemos decidido unir nuestras lu-chas no para cambiar un gobierno,sino para derrocarlo. No para pedir-le a los ricos, sino para sacarlos deeste pas. Van a salir, los vamos a de-rrocar, y los zapatistas acostumbra-mos cumplir con nuestra palabra.(...) Vivos o muertos, presos o en li-bertad, desaparecidos o en la calle,en la montaa, en el ro, en el mar,venimos a repetir lo mismo a los deall arriba, a los grandes polticos, alos grandes ricos: los vamos a ha-cer pedacitos a todos! Y las empresaslas van a manejar los trabajadores,Telmex la van a manejar los telefo-nistas. Vamos a quitarle a los terra-tenientes la tierra, y la van a traba-

    jar los campesinos con buenos pre-cios para sus productos, sin transg-nicos, sin qumicos, como de por strabajamos la tierra los campesinos.Vamos a quitarles la escuela a los

    funcionarios corruptos, idiotas y me-diocres que las tienen y se las vamosa entregar a los universitarios. Va-mos a quitarles los bancos a los ban-queros. Vamos a quitarles las indus-

    trias a los grandes propietarios. Y va-mos a quitarles los gobiernos a losmalos gobernantes y los vamos a to-mar nosotros, a gevo!

    (...) Se trata, compaeros y com-paeras, que la soledad que senta-mos, el miedo, la angustia, cambie debando. Que ahora tengan miedo losde all arriba, que se llenen de an-gustias y que se caiga la bolsa de va-lores, y que la nica empresa que veaal alza sus ganancias sea la de la l-nea area que tenga vuelos a Miami.

    (...) Vamos a cambiar todo esto,juntos, como debe de ser, desde aba-jo y desde la izquierda. Vamos a po-nerle hora, fecha y lugar, para que

    podamos abrir las puertas de la cr-cel y sacar a todos nuestros compa-eros que estn presos, a nuestrascompaeras, a toda la gente pobreque est presa injustamente. Y las

    puertas van a estar abiertas slo eltiempo suficiente despus para metera sos que estn all arriba a la cr-cel, que es donde deben estar. Que se

    junten con los violadores, los narco-traficantes, los multihomicidas, sonigual que ellos.

    (...) Va a haber democracia de a deveras, la nuestra, la de abajo, no deesos polticos que arriba han con-vertido la poltica en una mercanca

    y su quehacer en una prost itucinque se viste de encaje.

    (...) Somos La Otra Campaa, es-tn con nosotros trabajadores y tra-bajadoras sexuales, estn con nos-otros homosexuales, lesbianas, trans-gnero. Estn con nosotros nios dela calle, trabajadores de la calle, pe-queos locatarios, comerciantes in-

    formales, comerciantes de mercados.Estn con nosotros los pueblos in-dios. Estn con nosotros campesinossin tierra o en proceso de dejar de te-nerla. Estn con nosotros obreros, es-tudiantes, maestros, ancianos. Esta-mos los feos, los apestosos. Estamosaqu en La Otra Campaa lo mejorde este pas, y eso es lo que vamos ahacer.

    *Eduardo Prez es redactor y ex corresponsalen Mxico del peridico Diagonal.

    Ha habido polmica en el seno de la

    insurreccin oaxaquea, donde los

    partidos han tratado de imponer su ley

    y desvirtuar el espritu horizontal del

    movimiento

    rtalecer la organizacin. En la foto pintada en uncarreteras.

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    Comunicacin

    Es la era de la percepcin: mu-chos analistas sociales llaman asta la poca de la manipula-

    cin de smbolos. Ms importante que

    el producto en s de una industria (to-dos son similares) las empresas des-arrollan marcas y sellos de fbrica, pa-ra competir entre ellas. El resultado esla importancia cada vez mayor de laimagen, y sta exige la elaboracin ydistribucin de mensajes que le gene-ren valor psicolgico al producto. Esun valor agregado de carcter psicol-gico, no transforma el producto, perogenera mayores niveles de venta y porlo tanto mayor beneficio.

    De manera similar funciona la noti-cia. En la actualidad los medios de co-

    municacin no informan, construyenespectculo y distraen. Venden sus n-dices de audiencia o sus niveles de in-cidencia a la publicidad, a las grandesempresas y multinacionales, ms all desus propios procesos de concentracin.

    Los controles sobrela informacinEl desarrollo tecnolgico ha generadola necesidad de expertos que manipu-len smbolos, a la vez que se reduce lanecesidad de tcnicos y operarios que

    La necesidad de alternativasen la comunicacin

    Decio Machado*

    Hace dos o tres generaciones las personas progresaban en su profesin sieran capaces de manipular adecuadamente cosas que con posterioridad se

    convertan en objetos de consumo. La comunicacin, aun siendo importante,estaba lejos de tener la relevancia de la que disfruta hoy. La globalizacin hatransformado la sociedad; la revolucin tecnolgica y el autodesarrollo de la

    fuerza trabajadora han llevado al mundo a creer en los smbolos.

    Comunicacin

    manejen mquinas. La percepcin hapasado a ser un valor de primer ordenen el proceso de produccin, de igualmanera que lo es tambin en la elabo-

    racin de ideas.Las empresas, las instituciones y

    los gobiernos necesitan de imagen, vi-ven de ella para valorar sus productos,conservar su poder o mantener vigen-te su gobernabilidad. Se invierte y gas-ta tanto en imagen porque a travs dela comunicacin se influye, se mani-pula y se persuade.

    El sector de la comunicacin estsaturado de tcnicos que cuidan el as-pecto esttico del medio; que un pe-ridico est bien diseado, que el es-cenario de un estudio de televisin sea

    atractivo, o que los spots publicitariossean efectivos. Para todo ello existenespecialistas en la forma y lo esttico(tcnicos, diseadores, correctores deestilo, productores de publicidad...).

    Y por otro lado estn los expertos,que cubren el aspecto ideolgico, in-tervienen en la manipulacin de la in-formacin. Deciden qu es noticia yqu no, la importancia de una noticia,el espacio que va a ocupar, la decoran,eligen la foto, ilustracin o efecto desonido que va a acompaarla. Deciden

    en definitiva, el impacto de la noticia,pero no de acuerdo a su importancia,sino desde sus intereses ideolgicos, es

    decir, los intereses econmicos e ideo-lgicos de los grupos propietarios delmedio.

    Los medios de comunicacin ya nonecesitan domesticar cotidianamente asus empleados, estos por inercia cum-plen su papel de defensa de los intere-ses ideolgicos de su patrn. En el des-estructurado mundo laboral de la co-municacin, donde elfreelance, el au-tnomo y el becario imperan, quienrompe con esta dinmica sin ms es se-parado del medio.

    MJosComendeiro

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    El poder mediticoEl alejamiento de la realidad de los pe-riodistas y la premisa imperativa del

    negocio (intereses del grupo o de la pu-blicidad), han hecho predecir a muchosautores la extincin o la muerte del pe-riodismo tico.

    Lo que antes se llamaba el cuartopoder ahora es ms bien el segundo.Pero sus funciones han cambiado: elcuarto poder era la censura de los otrostres, mientras que aqu el segundo seplantea en trminos de influencia glo-bal y general sobre el funcionamientode las sociedades. En la actualidad seconsidera que el poder se ha desplaza-do esencialmente hacia la esfera de la

    economa y, dentro de ella, hacia elmbito financiero. Los mercados fi-nancieros son los que, en definitiva,dictan y determinan el comportamien-to de los responsables polticos (Ra-monet,La tirana de los medios).

    La lgica del cuarto poder, en su mi-sin cvica de calibrar el funcionamien-to de los tres poderes, ha pasado a la his-toria. Adems esos tres poderes hoy sehan transformado y son, en orden de im-portancia: el econmico, el meditico yquedando a la cola, el poltico.

    Informacin y debate PUEBLOS Junio 2007 19

    Comunicacin

    asegurarse la adhesin a tal idea o par-tido, en el caso ms general de la ide-ologa hay que reafirmar el apoyo a unsistema de vida, aun, y por lo tanto,cuando el mismo est perjudicando dealguna forma a quien lo adquiere me-diante una suerte de automatismo. Lamonopolizacin del sentido implicaotras monopolizaciones: la de los me-dios de produccin, la de la educacin,la de los mayores beneficios sociales,la de la fuerza... En sntesis: el mono-polio del poder (Daniel Prieto Casti-llo,Retrica y Manipulacin Masiva).

    La estructura del poder ha sidotransformada. Es la globalizacin, y s-ta tiene entre otros, tres pivotes funda-mentales: lo econmico financiero, lomilitar y lo ideolgico. En todas, la co-municacin desarrolla un papel funda-mental.

    En lo econmico financiero, sien-do el entorno donde se dictan y deter-minan la mayora de decisiones, demanera especial a los actores polticosy de manera general al conjunto de lasociedad, la comunicacin tiene un pa-pel principal. El nuevo capitalismo se

    mueve a base de informacin, la cualse ha convertido en un producto de in-tercambio.

    En lo militar: todo lo que se opon-ga a la globalizacin es acusado de te-rrorismo, satanizado en los medios decomunicacin, y por lo tanto justifica-das las actuaciones de amenaza, chan-taje o agresin militar que se ejerzansobre el enemigo.

    Lo ideolgico es el mbito por ex-celencia para los medios de difusin.Estos se han convertido en el aparatoideolgico de la globalizacin econ-

    mico capitalista. Ya no slo porque lainformacin tiene hoy valor mercantil,sino porque los medios poseen el con-trol sobre la opinin pblica y las re-acciones ciudadanas.

    El control de la fabricacin y dis-tribucin de la informacin es el in-tento de control de las conciencias ypor lo tanto, de las conductas.

    No han dejado de tener vigor vie-jas palabras: Las ideas dominantes dela clase dominante son en cada pocalas ideas dominantes, es decir, la claseque ejerce el poder material dominan-

    te en la sociedad resulta ser al mismotiempo la fuerza espiritual dominante.La clase que controla los medios deproduccin intelectual, de tal maneraque en general las ideas de los que nodisponen de medios de produccin in-telectual son sometidos a las ideas dela clase dominante (Carlos Marx,La

    Ideologa Alemana).

    Un nuevo modeloEl inters por los medios de comunica-cin se ha manifestado a travs de ab-

    Tanto tcnicos como expertos tra-bajan en un mismo proceso de co-municacin. Similar al proceso pro-

    ductivo, donde estn los obreros ylos expertos, ambos necesarios en elproceso de produccin, en la comu-nicacin todo est planificado, cadaquien conoce su funcin y se buscanresultados.

    En retrica (lase comunicacin)nada hay gratuito, los mensajes, suselaboradores y sus emisores persiguenalgo muy concreto. En el caso de la pu-blicidad se trata de promocionar mer-cancas, de asegurar su venta; en el ca-so de los mensajes polticos hay que

    La independencia, valor esencial del

    periodismo y base de la legitimidad de su

    poder, desaparece ante la incuestionable

    libertad de empresa en el mbito de la

    comunicacin de masas

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    Comunicacin

    Comunicacinsorciones o fusiones entre grandes gru-pos, pero ha provocado tambin el in-ters de otras muchas empresas dedi-cadas a sectores diferentes. Junto a losmercados financieros, la comunicacinse ha convertido en uno de los gruposms dinmicos de la economa global.

    Durante los ochenta y noventa elsector creci de forma importante. En1999 cinco empresas europeas, entre lasque se encontraban Sogecable, CanalPlus y Mediaset, duplicaron su valor.

    Las comunicaciones son un sectordonde invertir, sobre l afluyen ml-

    tiples empresas que van desde el sec-tor armamentstico hasta la banca.Siendo claramente constatable la in-fluencia del poder econmico sobre elcontenido, adems de la censura queconlleva formar parte de un grupoempresarial.

    La independencia, valor esencialdel periodismo y base de la legitimi-dad de su poder, desaparece ante la in-cuestionable libertad de empresa en elmbito de la comunicacin de masas.

    Construir contrapoder

    A pesar del abrumador poder medi-tico, avanzan por doquier experien-cias que, tejiendo redes poco a poco,van teniendo cada vez mayor capaci-dad de incidencia social. Por poner al-gunos ejemplos:

    En Amrica Latina las radios co-munitarias cubren importantes seg-mentos de poblaciones locales y cuan-do se unen en cadena para transmitirsus noticieros o programas especialesllegan a importantes sectores de la po-blacin, causando incidencia en lospblicos. Las radios comunitarias, en

    el mbito local, son un importantecontrapoder, que ha logrado resistir larepresin de diversos gobiernos, quehan intentado eliminarlas quitndolesfrecuencias y permisos. Esas peque-as radios de alcance limitado, se hanconvertido en sujetos polticos de suscomunidades.

    Tambin universidades e institu-ciones educativas han descubierto elpotencial de los medios de comunica-cin para divulgar su punto de vista ylos estudios e investigaciones de sus

    centros educativos, as como dar es-pacios a un pblico variado.

    Ejemplos claros los tenemos enEl Salvador, donde la Universidad

    Centroamericana Jos Simen Ca-as (UCA), con su emisora en fre-cuencia modulada YSUCA, de alcan-ce nacional, y su programa de televi-sinMiradas, contratando espaciosen canales de televisin privados,adems de la serie de revistas espe-cializadas con que cuentan, se hanconvertido en importantes generado-res de opinin pblica.

    En el caso de las televisiones elejemplo de Venezuela puede ser elms significativo. En 2002 los mediosde comunicacin desarrollaron una

    estrategia para crear una atmsferapregolpista. En la vspera del golpe laprensa ya no desarrollaba trabajo in-formativo. Los periodistas y editoria-listas ms importantes eran lderes dela oposicin poltica, un escenariodonde la tica profesional se vio re-ducida a la inexistencia.

    Tras el fracasado golpe la polti-ca gubernamental permiti que mo-vimientos sociales y el Estado crea-ran una plataforma meditica paraevitar el monopolio absoluto de losmedios de comunicacin privados.

    Desde entonces, se ha vivido un pro-ceso de democratizacin importantede las comunicaciones, un cambiode paradigma comunicacional, don-de radios populares, prensa barrial,agencias contrainformativas y tele-visiones comunitarias estn tenien-do un importante desarrollo. Desta-cando este ltimo, hay ya ms de 13emisoras que transmiten por fre-cuencia de aire en diferentes regio-nes, desde canales campesinos enzonas rurales, paralelamente al des-

    arrollo de otras tantas experienciasen barrios urbanos.

    En Europa la apuesta ms fcil pa-ra la comunicacin alternativa ha si-do Internet. Solamente en el Estadoespaol tenemos un buen panorama:Rebelin, Nodo50, Kaos en la Red,La Haine, los Indymedia, Insurgente,etc., as como un importante nmerode blogs de contrainformacin, y ml-tiples pginas web de organizacionespolticas y colectivos sociales, carga-das de noticias.

    A efectos de prensa escrita el es-

    cenario se estrecha bastante. En elmbito europeo, el peridicoIl Mani-

    festo fue el primer y ms influyenteejemplo de iniciativa meditica y pro-yecto poltico en s mismo, que pre-tenda transformar la poltica, y msespecficamente que las institucionespolticas de la izquierda italiana seabrieran a relaciones creativas con losmovimientos sociales.

    Podramos reconocer en Europaalgunos proyectos ms de similarformato pero de menor envergaduraqueIl Manifesto. En el Estado espa-

    ol el ms relevante en este sentido,fue el peridicoLiberacin, que tu-vo una existencia efmera. Veinteaos despus ha surgido el proyecto

    Diagonal, un peridico de mbitoestatal, bien hecho y con una gestinhorizontal y participativa. Cumpli-dos dos aos de su nacimiento, sevalida como una alternativa que po-co a poco va superando sus tres fren-tes ms dbiles, el formato quince-nal, la centralidad del proceso infor-mativo (falta de estructuras ms allde Madrid) y fundamentalmente su

    fragilidad econmica.En la actualidad la importancia de

    los medios de comunicacin alterna-tivos es vital. Estn poco a poco sien-do instrumentos creativos para esta-blecer conexiones entre diversos tiposde resistencia, expandiendo nuevasiniciativas y exponiendo al poder aotra forma de crtica que la realizadadesde los medios masivos.

    *Redaccin Pueblos.

    Las radios comunitarias, en el mbito

    local, son un importante contrapoder, que

    ha logrado resistir la represin de diversos

    gobiernos

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    Comunicacin

    Comunicacinmunicacin se hicieron eco de la noti-cia aprovechando la coyuntura paraelaborar un perfil realista de una enti-dad a la que anteriormente publicita-ban sin miramientos dada la jugosa es-trategia de marketing sobre la que seha sostenido esta fundacin. Ms allde la denuncia de estos graves hechos,los medios han atendido por fin a lacrtica que se le viene haciendo desdehace aos a esta organizacin dentrodel sector, en relacin fundamental-mente con sus campaas publicitarias.Baste decir que ANESVAD fue expul-

    sada de la CONGDE (Coordinadora deONG para el Desarrollo-Espaa) porno aceptar su cdigo de conducta que,entre otras cosas, impide hacer campa-as publicitarias catastrofistas o que norespeten la dignidad de las personasbeneficiadas, as como difundir men-sajes e imgenes que expresan una su-perioridad del Norte y/o que presentana la gente del Sur como objetos denuestra pena y no como socios en eltrabajo conjunto de desarrollo2.

    Tras la difusin de este hecho, unabuena parte del pblico, que lleva aos

    digiriendo imgenes de cuerpos comi-dos por la lcera de Buruli, se ha sen-tido engaado. En palabras de PascualSerrano: el ciudadano normal, no re-lacionado con el movimiento de soli-daridad, que llegaba a su casa por lanoche despus del trabajo y encendala televisin, llegaba a la conclusin deque ANESVAD era una organizacinemblemtica, lder y representativa delpanorama de la cooperacin espaola,la asociacin ideal a la que dirigirse pa-ra dar su pequea colaboracin, in-quieto ante un mundo injusto3. Este

    ciudadano normal comprueba ahoraque lo que sala en televisin no eralo mejor, ni era lo verdadero. Simple-mente era el que pagaba4.

    Algo semejante ha sucedido con laFundacin Intervida, la otra ONG

    la excepcin oculta la regla, ya quetanto Intervida como ANESVAD fun-cionan a la manera de la mayora de lasgrandes ONG, es decir, situando elmarketing y la cultura empresarial enla base de su estrategia5.

    El medio es el mensajeEn los primeros das de esta crisis losmedios de comunicacin se dejaronllevar por la corriente creando peli-grosas confusiones en la opinin p-blica. Titulares como ste: La Fun-dacin Lealtad detecta anomalas en

    la contabilidad y gestin de 70ONG, aparecido en el diario El Pa-s el 9 de abril, han provocado la des-confianza de la ciudadana en todo elsector, al dejar en segundo plano laexplicacin sobre la tarea de la cita-da fundacin: analizar de forma vo-luntaria ciertos principios de trans-parencia y buenas prcticas de lasONG que lo requieran para ofrecer-se limpias a las empresas que des-een realizar donaciones. El hecho deque una ONG no haya solicitado laauditora de esta fundacin (o de

    otras), o de que haya fallado en al-guno de los criterios establecidos porsta, no nos da patente de corso paradenostarla. No todas las ONG tienenque someterse a auditoras privadas,pues en el Estado espaol dispone-mos de suficientes mecanismos p-blicos de control.

    Y qu decir de la diferencia de en-foque entre los dos principales diariosdel Estado al abordar la cuestin.Mientras El Pas, que ha publicado in-formaciones muy crticas y de tonosensacionalista sobre la investigacin

    abierta a Intervida, advirtiendo, eso s,de que la ONG no haba querido darningn tipo de declaracin en su de-fensa, El Mundo, uno de los patrocina-dores de la organizacin, ha atendidoms bien a las justificaciones dadas porsus directivos, entre otras cosas, entre-vistando a toda pgina a uno de susfundadores.

    cuestionada ltimamente en los mediosy hasta ahora sostenida en gran medi-da gracias a ellos. La primera ONG en

    volumen de ingresos de carcter pri-vado y estrella del apadrinamiento es-t siendo investigada por la fiscala delTribunal Superior de Justicia de Cata-lunya por un presunto desvo de dine-ro por parte de sus directivos. En con-creto, se tratara del desvo de 45 mi-llones de euros procedentes del apa-drinamiento de nios en Per y Guate-mala a travs de la creacin de empre-sas farmacuticas, alimentarias, inmo-biliarias y otras que nada tienen quever con su misin.

    Ms all de esto, el destape del

    escndalo ha servido tambin paraque los medios atiendan a otros asun-tos relacionados con la prctica de laorganizacin, como es el de que su so-licitud de entrada en la CONGDE nofuese admitida o el hecho, ms me-ditico an, de que se le estuvieseadjudicando el mismo nio a variospadrinos; por no hablar de su estrate-gia de captacin de fondos, que ha uti-lizado lemas tan desafortunados co-mo: No me dejes, mi vida est en tusmanos o Slvame del sufrimiento,de la miseria, del hambre. Slo t pue-

    des hacerlo.Segn Miguel Romero exista

    fundamento suficiente para considerara Intervida una ONG sospechosa almenos desde hace 8 aos y a pesar deello ha gozado de un xito empresarialespectacular y un reconocimiento p-blico ms que notable. Por ese motivo,explica Romero, la excepcionalidadde Intervida ms que explicar, ocultaproblemas. Todo parece reducirse a uncaso de corrupcin, ante el cual la so-lucin est en la transparencia. Pero

    Los casos de dos ONG particulares han

    servido para abrir un debate pblico que

    quizs nos ayude a desmontar ciertos

    mitos sobre el desarrollo y el trabajo

    de las ONG

    2 CONGDE (1998): Cdigo de conducta de lasONG de Desarrollo. Ver en: www.congde.org

    3 SERRANO, Pascual (15-03-2007): Anesvady la televisin, en www.rebelion.org

    4 Op. cit

    5 ROMERO, Miguel (mayo 2007): Intervida: laexcepcin y la regla, en El Viejo Topo, n 232,pp. 15-19.

  • 8/12/2019 Pueblos 26 - Junio de 2007

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    Informacin y debate PUEBLOS Junio 2007 23

    Comunicacin

    Pero, ms all de estas diferenciasde enfoque, relacionadas con los inte-reses particulares de cada medio, eltratamiento informativo de estos dosacontecimientos ha supuesto unaamenaza para todo el sector. Pero tam-bin ha servido, por lo menos, paraabrir un debate pblico muy necesa-rio; no tanto sobre la necesidad de ape-lar a la transparencia en las ONG y debuscar mecanismos de rendicin decuentas efectivos, pues, al igual quesucede en el mundo empresarial, co-mo seala Romero: la transparencia

    consiste no tanto en lo que se es, sinoen lo que se parece (y es que tener lascuentas claras no implica necesaria-mente que se realice una cooperacinresponsable y de calidad). Tambin, ylo que es an ms importante a mi pa-recer, sobre la heterogeneidad de unsector que debe dejar de ser visto co-mo un todo unitario.

    Las formas de organizacin y fun-cionamiento, los valores y los discur-sos de las ONG son tantos y tan varia-dos como los que puedan existir encualquier esfera de la realidad social,

    como han dejado patente las cartas, co-municados y artculos de opinin re-cogidos afortunadamente en los me-dios advirtiendo a los periodistas deldao que estaban causando en el sec-tor al, por poner slo un ejemplo, en-marcar toda la informacin relativa alcaso Intervida bajo el ttulo genri-co: La situacin de las ONG6.

    La parte por el todoLas ONG son un fenmeno relativa-mente joven en el Estado espaol, puesno se consolidaron aqu hasta bien en-

    trada la dcada de los 80. Hoy en daexisten cientos de ONG con una pre-sencia en los medios de comunicacincada vez ms relevante, lo que ha con-ducido, segn Carlos Gmez Gil, a undeliberado inters por situarlas en pri-mera fila meditica e institucional, co-

    mo portadoras de virtudes y represen-tantes cualificadas de la sociedad7.Por lo menos hasta ahora.

    Pero si indagamos un poco en esta

    cuestin nos daremos cuenta de queson tan slo 4 5 las ONG con pre-sencia meditica real, lo que no guar-da necesariamente relacin con subuen hacer en materia de cooperacinal desarrollo. El volumen de ingresos,la estrategia de marketing y publicidad,sus filiaciones polticas y empresaria-les, as como su acatamiento del dis-curso oficial sobre el desarrollo sonquizs explicaciones ms acertadas siasumimos las dificultades a las que seenfrentan las ONG para desligarse delproceso de globalizacin econmica en

    marcha.Pero, como sostena Pascual Serra-

    no, al ciudadano medio se le ha ocul-tado esta realidad, se le ha presentadoel mundo de las ONG como un todo yse le ha convencido, primero, de quelas ONG son los nicos espacios ti-les, altruistas y carentes de los bastar-dos intereses que mueven a los Estadosen el mundo de la solidaridad8 y, se-gundo, de que el nico discurso vlidosobre el desarrollo es el que defien-den las grandes. Las ONG hegemni-cas, de la mano de los medios de co-

    municacin ms influyentes de este pa-s, han alimentado un sustrato repletode equvocos e inexactitudes, carentede rigor y de precisin, que ha hechobien poco por educar pedaggicamen-te a la sociedad sobre los retos de la so-lidaridad, la justicia social, el desarro-llo, los derechos humanos, la paz y lacooperacin9.

    Es necesario que se destape un ca-so de corrupcin para que el discursode las ONG hegemnicas se vea cues-tionado en los medios? Por qu no ha-blar tambin de valores? Son muchaslas ONG, a menudo de mediano y pe-queo tamao, que desarrollan su tra-bajo con honestidad y verdadero inte-rs en