periódico misión ed. 10
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Periódico ArquidiocesanoTRANSCRIPT
La Iglesia de la Arquidiócesis de Medellín que se proyecta
ISSN: 2248-8162
Septiembre de 2012 / No. 10
HACE 33 AÑOS FUE ELEGIDO JUAN PABLO I “EL PAPA DE LA SONRISA”El 26 de agosto de 1978, tras el fallecimiento del Papa Pablo VI, el entonces Patriarca de Venecia, Card. Albino Luciani, era elegido Sucesor de Pedro.
LAS CAUSAS DE NULIDADMATRIMONIALEl Tribunal Eclesiástico sondea las posibles causales que pueden llevar a solicitar o bien un indulto apostólico o bien una declaración de nulidad. Veamos las caracte-rísticas que acompañan ésta solicitud.
Desde el 17 al 21 de septiembre se llevará a cabo el encuentro de misioneros "ad-gentes" de la arquidió-cesis de Medellín. Este evento tendrá la asistencia de cerca de 20 sacerdotes alrededor del nuestro arzobispo, mons. Ricardo Tobón Restrepo.
Desde el 1 al 13 de septiembre, el Arzobispo de Medellín, mons. Ricardo Tobón Restrepo, y sus obispos auxiliares, viajarán a Roma para participar de la visita “Ad limina Apostolorum” que periódicamente todos los obispos del mundo deben realizar. P.2
LA “VISITA AD LIMINA APOSTOLORUM”
ENCUENTRO DEL ARZOBISPOCON LOS SACERDOTES AD GENTES
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El 26 de agosto de 1962, hace cincuenta años, de manos de monseñor Tulio Botero Salazar, Arzobispo en el entonces de Medellín, en la Catedral Basílica Metropolitana, se ordenaron algunos presbíteros. P.12
50 AÑOS DE ALEGREMINISTERIO
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Este año los Obispos de Colom-bia estamos realizando la Visita ad Limina. Después de un primer grupo que estuvo en Roma el pasado mes de junio, iremos, ahora en septiem-bre, los demás obispos del país. “Limina Apostolorum” significa “los umbrales o memorias de los Apósto-les”. Se trata de una visita a los luga-res donde son venerados los sepul-cros de los Apóstoles Pedro y Pablo. Por ellos, Roma es la sede de la Cátedra del Papa, en la cual todos los católicos encontramos el princi-pio y fundamento visibles de la unidad de la fe y de la comunión. La visita a las tumbas de los Apóstoles se ha realizado, según testimonios fidedignos, desde el siglo II y a partir del siglo IV ha sido muy frecuente hasta el día de hoy. En el caso de los obispos, esta visita tiene un significado particularmente especial, pues se entiende como una manifestación y un medio de comu-nión con la Cátedra de Pedro. De esta manera, se expresa y realiza la íntima relación entre Iglesia particu-lar e Iglesia universal, pues, según la
CONSEJO DE REDACCIÓN: + Monseñor Ricardo Tobón (Arzobispo de Medellín), Pbro. Juan Pablo Cardona (Director), Pbro. Germán Bustamante (Redacción), Pbro. Luis Fernando Arroyave, Pbro. Elías Lopera, Pbro. Alexander Pareja, Henry Horacio Cháves y Mauricio Agudelo.DISEÑO: Departamento de diseño, Arquidiócesis de Medellín.
En este tiempo en que el género epistolar se reduce pequeños mensa-jes de texto que cambian la q por la k y la ortografía se deja para después por afán o moda, mucho antes de que los medios masivos hablaran de “la carta del presidente de Bancolombia”, ya la epístola había sido leída no sólo por empleados a los que iba dirigida, sino por incontables usuarios de internet. De hecho al conocerla mi reacción fue preguntar si sería verdad o se trataría de una carta apócrifa con afán pedagógico. Mi duda reposaba en la abundan-cia de reenvíos masivos y en la atribu-ción del mensaje a uno de los más discretos líderes empresariales de la región. Con la certeza del origen me
LA “VISITA AD LIMINA APOSTOLORUM”
llegó también el asombro por la acogida de la reflexión. Algunos pusieron en duda la autoridad moral de Bancolom-bia o del Éxito para hablar de ética; otros dijeron que para ser consecuente el banco debería reducir el cobro de transacciones; no faltó quien dijera que el directivo se metió en asuntos priva-dos y otras liviandades. Pero la mayo-ría de voces han reflejado admiración por la valentía del empresario y comu-nión con su sentir. Hoy debemos valorar que con la difusión del mensaje se propagó una reflexión solidaria en torno a la imagen de ventajosos y fariseos que queremos quitarnos de encima. Una evidencia de que ni el señor Yepes es una golondri-na buscando el verano, ni la ética se quedó en los libros. El eco del regaño,
la acogida a programas como Antioquia Legal, dan cuenta del cambio de un paradigma en épocas globalizadas, en donde poco a poco se va abriendo paso la idea de que triunfar no es igual a conseguir dinero. Realización personal, proyecto de vida, conciencia social, no serán muletillas cotidianas en calles y cantinas pero empiezan a instalarse en la forma de pensar de una época y un lugar. No quiero pecar de ingenuo o demasiado optimista. La tarea no está hecha ni hemos dejado atrás la cultura mafiosa que nos ha representado, pero me parece que se avanza en ese camino. Ya no suena loco ni bobo el llamado a respetar al otro y portarse bien aunque nadie esté viendo. Es probable que aún nos falte mucho para alcanzar el propósito pero antes estaba
más lejos. En todo caso, siempre, en toda sociedad, en todas las geografías y los calendarios, habrá quienes prefie-ran el camino corto y disfruten hacer trampa. Seguro también habrá quienes le tuerzan el pescuezo a la ética y no lo disfruten, así el arrepentimiento les dure hasta la próxima travesura. Pero insisto, cada vez está más abonado el terreno para reflexiones y moralejas como las que hizo famosas en las últimas semanas el presidente de Bancolombia. Y una última luz de esperanza que veo en el episodio en mención, tiene que ver con el probado uso de las redes para algo más que chistes, pornografías y promesas de riquezas súbitas. La carta de don Carlos a los fariseos, hizo evidente que el problema no está en el medio sino en el mensaje. La alternativa será pues utilizar mejor los medios y afinar los mensajes.
Epístola de don Carlos a los fariseosHenryHoracioChaves
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doctrina del Concilio Vaticano II, la Iglesia particular hace presente en una comunidad humana concreta el misterio de salvación al que, por la Iglesia universal, están llamados todos los hombres de la tierra. El Beato Juan Pablo II explicaba la Visita ad Limina así: “Los obispos, con la visita a las sedes de los Após-toles, expresan ese vínculo con Pedro, que une a la Iglesia en todo el orbe terrestre. Al venir a Roma cada cinco años, traen consigo, en cierto modo, a todas aquellas Iglesias (es decir, las diócesis) que mediante su ministerio episcopal y, al mismo tiempo, mediante la unión con la Sede de Pedro, permanecen en la comunidad católica de la Iglesia universal. Al venir a visitar las sedes Apostólicas, los obispos traen también a Roma noticias ¡y cuán valiosas!, sobre la vida de las Iglesias de las que son Pastores; sobre los progresos de la obra de la evangelización; sobre los gozos y dificultades de los hombres y de los pueblos entre los que cumplen su misión” (9.9.1979).
Arzobispo de Medellín
+Ricardo Tobón Restrepo
La Visita ad Limina tiene, concretamente, tres momentos de particular importancia. En primer lugar, el homenaje a las tumbas de los Apóstoles Pedro y Pablo; no se trata de un simple protocolo o de un acto administrativo, sino de una verdadera peregrinación con la cual se hace referencia a aquella única fe, que estos Apóstoles testimonia-ron con su martirio. En segundo lugar, el encuentro con el Sucesor de Pedro; también aquí se va más allá del simple intercambio de infor-maciones para significar la afirma-ción y consolidación de la colegiali-dad episcopal. El deber de la colabo-ración de todos los obispos con el Sucesor de Pedro está fundado sobre su comunión “cum Petro et sub Petro”. El tercer momento de la visita es el encuentro con los responsables de los dicasterios de la Curia Romana para que los obispos tengan acceso directo a sus respec-tivas competencias y puedan infor-marse sobre diversos aspectos de la común solicitud pastoral. Para facili-
tar esto, antes de la visita, todos los obispos envían una detallada relación sobre el estado de su dióce-sis, que es conocida en la parte que les corresponde por cada uno de los dicasterios. A partir de estos infor-mes y de un diálogo directo, se inter-cambian criterios y reflexiones con relación a la vida de la Iglesia y a la misión que está llamada a cumplir en el momento presente. Cuando hacen la Visita ad Limina los Obispos de diócesis cercanas a Roma los acompañan algunos sacerdotes y fieles. Yo quisiera que, conscientes del valor teológico, espiritual y pastoral de esta visita, nos acompañaran todos los sacerdotes, religiosos y fieles de la Arquidiócesis de Medellín con su oración y su afecto eclesial. Así la Visita ad Limina no será solamente la expresión de la comunión de los Obispos con el Papa, sino la conso-nancia de toda nuestra Iglesia parti-cular con la Iglesia de Roma, la cual, según una conocida frase de San Ignacio de Antioquía, preside en la caridad la comunión universal.
Días atrás, monseñor Hugo Torres Marín, monseñor Armando Santama-ría, el Vicario Episcopal de la zona Oriente P. Iván Londoño, el ecónomo de la arquidiócesis P. Octavio Barrien-tos, el Vicario de Educación P. Carlos Mario González y los Arciprestes de la zona tuvimos como reunión periódica, un encuentro en el Centro de Forma-ción Agropecuaria, LA SANDALIA en Fredonia, obra social de la arquidióce-sis que lidera hace muchos años Monseñor Armando Santamaría junto con los internados de GRANJAS INFANTILES, HOGARES SAN JOSE Y CASA DE ACOGIDA BELEN. Como en otras oportunidades donde hemos conocido los internados y otras obras que lidera monseñor Santamaría, esta vez dedicamos todo el día para conocer y compartir en “La Sandalia”. Ha sido una grata experien-cia porque, además de tener un día entero de esparcimiento, pudimos conocer todo lo que se hace como obra social de la arquidiócesis y el servicio que se presta a los jóvenes de la ciudad y de varias zonas rurales para estudiar y reforzar los conoci-mientos del campo, en lo que tiene que ver con los cultivos y los animales, con instructores del SENA a través de un convenio. La hacienda cuenta con vacas, búfalos, caballos, mulas, gallinas, árboles frutales y otros cultivos que se hacen con las técni-cas que enseñan los instructores a los jóvenes que allí se preparan, bien sea por una semana, o por el periodo
[email protected] 3 P. Germán Valencia JARAMILLO
de un año y medio para recibir su certificación técnica y así poder traba-jar efectivamente en la labor del campo en los pueblos y veredas donde habitan. Salimos a las 9:00 am de la curia de Medellín, hicimos un alto en Fredo-nia hacia las 011:00 am para saludar al párroco y sus vicarios quienes no pudieron acompañarnos porque estaban en las fiestas patronales de Santa Ana, madre de la virgen María. A las 11:30 arribamos a la finca a unos 20 minutos del pueblo; Monseñor Armando nos ilustró de cómo se adquirió la finca en la que hubo muchas dificultades al principio de tipo legal y cuya negociación tenía como objetivo realizar una obra social, la cual ha venido cumpliendo su objetivo a cabalidad. Luego, recorrimos parte del Centro de Formación Agropecuaria para cono-cer los salones y dormitorios donde los jóvenes habitan y que están en remode-lación para tener una mejor calidad. Antes del almuerzo se nos presen-taron dos videos que mostraban también las obras de los internados de GRANJAS INFANTILES Y HOGARES SAN JOSE, obras que albergan 1.100 niños y jóvenes en estado de pobreza y orfandad. Muchos de los niños y niñas que han pasado por estos hoga-res ya son jóvenes que trabajan en la misma obra social con sentido de perte-nencia y gratitud y hacen sus estudios técnicos y universitarios también con la ayuda de las fundaciones.
Después de los videos, algunos jóvenes nos hablaron de la experiencia enriquecedora que han tenido en la hacienda y expresaron su gratitud hacia la Iglesia y a monseñor Armando Santamaría quien siempre se ha mostrado cerca-no a ellos y los visita con frecuencia. Después del almuerzo monseñor Armando Santamaría nos invitó a la casa principal que aún se conserva de la finca y se nos mostró la cantidad de vacas, caballos y mulas que tiene la hacienda y que sirven para la práctica de los estudiantes y el sostenimiento de la misma, e incluso, en muchas ocasiones, los frutos que se perciben son enviados a los internados. Muchos de los presentes hicimos un recorrido a caballo, liderados por el mayordomo y monseñor Hugo Torres para conocer las tierras de aquel lugar y mientras tanto, los que no sabían montar a caballo o temían hacerlo, hicieron su siesta y tomaron tinto. Ya en la tarde, antes del regreso, nos reunimos con el administrador de la finca, el mayordomo y los trabajadores de la hacienda, quienes se presentaron, expresaron el oficio que les correspondía en la finca y manifestaron su gratitud por la obra social que la Iglesia realiza y por el trabajo; se les dio un detalle que monseñor Armando Santamaría les llevó y les agradecimos su atención. Poste-riormente hicimos una evaluación en la que todos expresamos la satisfacción por conocer más de cerca las obras sociales que se adelantan en la arquidióce-sis, el esfuerzo que monseñor siempre ha realizado por sacarlas adelante y el bien que se hace para quienes se benefician de ellas.
Jóvenes graduados por el Centro de Formación Agropecuaria La Sandalia
Monseñor Hugo Tores Marín, monseñor Armando Santamaría Ortíz y padre Octavio Barrientos.
Monseñor Hugo Torres Marín. Padre Wilson Uribe y padre Iván Londoño.
Nació en Medellín el 29 de febre-ro de 1968. Hijo de Julián Darío y Cecilia. Tenía 8 hermanos: Luis Fernando, Iván Darío, Alvaro León, Hernán Jaime (quien puso un nego-cio de comidas rápidas en el atrio para estar pendiente de su herma-no), Gladys Mercedes, Luz Marina, María Cecilia (Le dicen Chila, reem-plazó a otra María Cecilia que murió y quien buscaba vivir cerca a la casa cural para acompañar y ayudar al padre) y Rafael. Tiene un tío sacer-dote, el padre Jorge Luis Villegas, franciscano. En la parroquia de El Santo Sepulcro en Manrique celebró los sacramentos de la iniciación cristiana. Estudió la primaria y el bachille-rato en el IDEM. Concentraciones de Manrique. El padre Carlos Alberto Hoyos Gómez lo orientó vocacional-mente y lo envió al Seminario Mayor de Medellín donde se formó para el sacerdocio ministerial, estudiando filosofía y teología en las facultades respectivas de la UPB. Lo ordenó como presbítero monseñor Héctor Rueda Hernández, Arzobispo de Medellín, en la Basílica Metropolita-na, el 10 de diciembre de 1994.Sus compañeros de ordenación son: Hernán Darío Acevedo A., Luis Hum-berto Arboleda T., Jorge Iván Arbole-da H. (fallecido), Carlos Edo. Cataño R., Carlos Enrique Londoño G., Jaime Alberto López M., Francisco Javier Marín A., Edgar Humberto Martínez O., Jaime Humberto Mejía J., Carlos Alberto Moncada F., Julio Enrique Montoya R., Pedro Antonio Ospina S., Luis Fdo. Palacio G., Francisco Javier Saldarriaga G., Humberto Velásquez A. (fallecido) y Alejandro Villa U. No se ordenaron en la misma fecha pero son compa-ñeros de curso: Jorge Enrique Benju-mea B., Pedro Justo Berrío B., Héctor Augusto Botero O. y Jhon Arango T. Sus casi 18 años de ministerio sacerdotal los dedicó a la pastoral en las parroquias, como Vicario parro-quial en la parroquia San Alfonso María de Ligorio (Medellín), San
P. ElíasLoperaCárdenas
Judas Tadeo (Medellín) y Ntra. Sra. de Chiquinquirá en La Estrella. Como párroco en las parroquias Madre del Salvador (Itaguí); El Divino Niño (Bello) siendo al mismo tiempo Capellán del Colegio de La Presentación y, luego; del Colegio de La Salle en esa localidad; en San Felipe Apóstol (Sabaneta) con la capellanía del Colegio de la Presen-tación (Envigado); en Santo Tomás de Villanueva (Copacabana). Durante los años de su forma-ción en el Seminario era lleno de paz y un excelente compañero, sencillo y sereno, pausado y calmado. En su ministerio empezó su calvario con una serie de hechos insólitos, trági-cos e inexplicables, que lo afectaron profundamente porque era muy sensible. Lo afligió mucho la pérdida de su mamá. En el Divino Niño se le entró la creciente de la quebrada vecina y lo dejó sin nada; confesan-do un joven llegó otro y lo asesinó a los pies del padre Henao; falleció una mujer, dizque era bruja, en el momento en que él oraba para que fuera liberada y se ganó las amena-zas de algún grupo violento del sector. En San Policarpo padeció las extorsiones de las bandas de Boston. Le dieron escopolamina. Además padeció enfermedades muy raras, varios pre-infartos y el síndro-me guillain barré. Se encerró en sus tristezas, sus miedos y en una vida muy atormentada. Siempre contó con el acompañamiento de profesio-nales, de algunos sacerdotes que lo buscábamos y el apoyo de su Obispo. Su ministerio tenía el enfoque carismático, gozaba con la liturgia, centró su espiritualidad en la Euca-ristía (llevaba cuidadosamente un libro de las misas que celebraba como sus compañeros los padres Carlos Cataño y Fernando Palacio), en Jesucristo como su Maestro de vida y en la Virgen Santísima. Siem-pre muy respetuoso y fraterno. Se dedicó a su ministerio, cantaba muy bien y publicó un CD de música religiosa, tenía carisma para los
jóvenes y sus Eucaristías eran muy concurridas. Consideraba la parroquia como un espacio de oración, regocijo, paz y celebración de una comunidad que camina en el proceso de evangelización y en la búsqueda de un Jesús que nos lleva a su Reino y a la eternidad, como él decía. De un infarto se fue para la eternidad, en su alcoba, el 15 de agosto de 2012 en las primeras horas de la mañana y lo encontró el sacristán antes de la misa vespertina. Las exequias se celebraron en la parroquia Santo Tomás de Villanueva, el 16 del mismo mes a las cinco de la tarde, presididas por monseñor Ricardo Tobón Restrepo, Arzobispo de Medellín, concelebradas por monseñor Gilberto Jiménez N., monseñor Edgar Aristizabal Q., monseñor Elkin Fernando Álvarez B. y unos 80 sacerdotes, con el templo abarrotado de fieles. La Iglesia que peregrina en Medellín con su Arzobispo monseñor Ricardo Tobón Restrepo, sus Obispos Auxiliares y su Presbiterio agradece a Dios y a la familia del padre Julio César su vida y su ministerio sacerdotal, haciendo llegar un saludo de condolencia a sus familiares y amigos. Q.e.p.d.
Presbítero
En su homilía, el señor Arzobispo se refirió al padre Julio diciendo: “El padre Julio Cesar ha terminado su camino, fue llamado por Dios a confi-gurarse con Cristo en el Bautismo. Por la ordenación sacerdotal participó de la condición de Cristo Pastor. Fue asociado a la cruz del Señor a lo largo de su existencia por muchos y extraños sufrimientos. Ahora, como esperamos, descansa en las manos de su Señor. Damos gracias por lo que el Señor le regaló a lo largo de su vida, por el servicio que el pudo prestar en la Iglesia, por todo aquello que constituyó ese tejido misterioso de la gracia y de la libertad humana que en el fueron produciendo la reali-dad de la salvación…Dios por Cristo hace en el ahora una acción creado-ra. Toma su vida y su obra y las transforma. Para el cristiano la muerte no existe…la muerte es la liberación para poder vivir en la plenitud de Dios”.
Nació en Cocorná (Ant) el 19 de noviembre de 1933, hijo de Luis María y María Jesús. Tuvo ocho hermanos, seis ya fallecidos: José Jesús, Juan Bautista, Francisca, el padre Marcos de la diócesis de Dorada-Guaduas, Julia y María Jesús; y dos supérstites: Francisco y Manuel. Dos primos sacerdotes de esta Arquidiócesis, los padres José Fernando Aristizabal Ramírez y Miguel Darío Aristizabal Bustamante. Los sacramentos de la iniciación cristiana los celebró en la parroquia de su pueblo natal. La primaria la hizo en la Escuela urbana de varones de Cocorná. Ingresó al Seminario Conciliar de Medellín donde hizo el bachillerato en el Menor. Pasó al Seminario Mayor e hizo filosofía y teología. Ordenado presbítero de manos de monseñor Tulio Botero Salazar, Arzobispo de Medellín, el 16 de octubre de 1960, estaba cercano a cumplir los 52 años de sacerdocio. Sus compañeros de ordenación son: monseñor Gonzalo Rivera Gómez y los padres Hernando Escobar M., José Helí López A., Gabriel López G., Mario Martínez V., Hernán Muñoz Herrera, Gustavo Restrepo A., Julio Uribe U. y Eloy Velásquez J.
Sirvió a la Iglesia, en la Arquidió-cesis de Medellín, como Vicario cooperador en las parroquias de San Antonio de Padua (Barbosa) y de Santa Bárbara en el municipio del mismo nombre. Pasó como forma-dor al Seminario Menor y profesor de latín y filosofía. Como párroco en Santa Ana (Bello), San Eduardo Rey (Bello-Machado), Cristo Rey (Guayabal), San Pío X (Itaguí), El Sagrario (Medellín, barrio Sevilla), Santa Inés (Bello), El Salvador (Medellín). Gozando de su retiro fue colaborador en el templo de San Juan de Dios y en la parroquia de Ntra. Sra. de la Candelaria, sobre todo, atendiendo las confesiones de los fieles. Fue un sacerdote digno, apaci-ble y tranquilo, vivió su sacerdocio con alegría y a conciencia, muy íntegro en todos sus procederes, acogedor, fraterno, sencillo, pobre, humilde, consagrado de tiempo completo a sus responsabilidades ministeriales. Su vida sacerdotal marcada por la imitación a la Virgen Santísima, a la que profesaba un amor y devoción singular. Su caridad se concentró en sus obras a favor de los pobres. Fue el centro de unión de la familia. Me cuentan que le ofreció el rector del Seminario de hace unos quince años que lo acom-pañara en el Equipo de formadores
Presbítero
como Director Espiritual del Semina-rio Mayor y respondió: “A esta edad ya no soy capaz para relacionarme y orientar debidamente a los jóvenes de hoy”, una excusa fácil para seguir con sus actividades en la parroquia donde estaba, pero indica el perfil de su sacerdocio y el testimonio de vida que nos deja. Al llamar a algunos familiares y amigos repetían: “Murió un santico”. Se sintió un poco enfermo por una virosis y descansó en el Señor en el Centro de Urgencias de Niquía (Bello), a las 9.45 de la noche del 17 de agosto de 2012, de un infarto. Las exequias en la parroquia de Santa Ana (Bello) las celebró mon-señor Ricardo Tobón Restrepo, Arzobispo de Medellín, concelebra-das por monseñor Gonzalo Rivera Gómez, monseñor Gilberto Jiménez Narváez, monseñor Elkin Fernando Alvarez Botero y unos 50 sacerdo-tes, con la participación nutrida de familiares, feligreses y amigos. La Iglesia, que peregrina en Medellín, con su Arzobispo, monse-ñor Ricardo Tobón Restrepo, sus Obispos Auxiliares y su Presbiterio da gracias a Dios por la vida y el sacerdocio ejemplares del padre Conrado, extiende un saludo de esperanza y condolencia a su familia y a sus amigos, y ruega a Dios que le dé el descanso eterno.
En su homilía, el Señor Arzobispo se refirió al padre Conrado diciendo: “Estamos ante un sacer-dote que logró vivir la llamada que el Señor le hizo con fidelidad; que se mantuvo en la consagración que recibió hasta el final de su vida; que se entregó por la Iglesia allí donde fue puesto: con humildad, con responsabilidad, con gran generosidad. Un sacerdote que ayudo a tantas personas a vivir su fe cristiana y a caminar hacia Dios…Gracias por lo que él fue para su familia desde niño, gracias por lo que significó en nuestro presbiterio como hermano y como amigo, gracias por el trabajo que realizó en distintas parroquias y en diversos encar-gos que le fueron encomendados…gracias por su vida interior que fue tan agradable a Dios, desde la oración, desde la inmolación, desde la fe sublime. Tenemos que dar gracias porque desde hoy ha sido asociado a la Pascua del Señor”.
[email protected]@arqmedellin.com
Nace Ezequiel el 9 de abril de 1848 en el seno de una familia católica y humilde con profundos valores huma-nos y cristianos, en la España del siglo XIX, a orillas del rio Ebro en la región de la Rioja. Desde niño cuentan algunas crónicas sintió inquietudes vocacionales y el deseo profundo de entregar su vida a la causa del Señor. Era inteligente, inquieto, le encantaba jugar el tejo, y presentaba buenas relaciones con sus compañeros. En 1864 ingresó como religioso al convento de los agustinos recolectos y allí empieza su aprendizaje para ser un buen fraile. Son varias las experiencias misioneras que realiza hasta ser ordenado sacerdote para siempre. Pero la voz del Señor resuena por medio de los superiores y una nueva tierra lo espera en nuestro país. Es llevado a una tierra poco conocida de casi 45.000Km2 de extensión, rodeada de ríos grandes y caudalosos, es la tierra del Casanare. El padre Ezequiel piensa en aquellas gentes. En cuanto le es posible recorre las inabarcables planicies acompañado de tres religiosos. Examina, visita enfermos, administra sacramentos. Se conservan ocho cartas en los anales de la historia que dan testimonio de su labor misionera y que conmovieron la conciencia de Colombia y contagiaron su preocupación por tantos infieles. Llega el momento en que la Santa sede, erige el Casanare como vicariato apostólico y le nombra su pastor. Es una
nueva etapa en la vida de nuestro santo. Allí según su propósito permanecería hasta la muerte. “¡Quién me diera poder decir al exhalar mi último suspiro en una mala choza, o en arenosa playa, o al pie de un árbol: ya no quedan infieles en Casanare”. Una pobre choza le sirve de palacio episcopal. El mismo dirá: “hago de obispo, de misionero y de sacristán”. Porque, «una sola alma vale más que la vida del hombre». En febrero de 1896 llegó a Casana-re una comunicación oficial de que monseñor Ezequiel Moreno había sido nombrado obispo de Pasto. De 1896 a 1906, en diez intensísimos años servirá a sus fieles con todos los medios a su alcance. El nuevo obispo vivió, como era su costumbre, en máxima sencillez. Comida frugal y, en su alcoba, un jergón de paja. Se preocupa de los colegios, lucha para que se imparta una formación católica, alienta la llegada de misioneros, promueve el culto y las devociones, fomenta la construcción de iglesias y santuarios, escribe y propaga cartas pastorales y desvela los artificios de la propaganda antirreligiosa. Convirtiéndo-se en el abanderado y símbolo de la defensa de los valores cristianos en la Colombia del siglo XIX. En esta misión vivió este hombre situaciones difíciles y dolorosas, fue incomprendido, despreciado, calumnia-do. Sufrió una profunda noche espiritual en su alma. Cuenta la historia que con ocasión de las polémicas suscitadas en torno a su persona por su firmeza en la defensa de la fe, durante su visita ad limina en 1898, presentó su renuncia al Papa León XIII. Lo hizo no por falta de fortaleza, sino para evitar "conflictos" o "disgustos" a la Santa Sede y para no mermar la fama "de un hermano en el episcopado". La renuncia no fue admitida y fray Ezequiel tuvo que volver a su dióce-sis, donde lo esperaban nuevos ataques y las angustias de una guerra civil. En 1905 enferma gravemente, se siente cansado y débil, una llaga le afecta el paladar, luego los médicos dictaminan que padece un cáncer termi-nal. Exclama: “Me he puesto en manos de Dios. Él hará su santa voluntad. Hay que descansar en lo que Él quiera hacer. ¡Qué consolador es todo esto!” Viaja a España para ser intervenido y hasta en la clínica exclaman: “Es un santo”. Luego tienen que operarlo de nuevo, pero los dolores son demasiado fuertes, pero sin impacientarse, sino con una profunda paz, un 19 de Agosto de 1906 muere con tan solo 58 años de edad. Será luego Beatificado por Pablo VI el 1º de Noviembre de 1975 y canoniza-do en la ciudad de Santo Domingo el 11 de Octubre de 1992 por Juan Pablo II presentado al mundo como ejemplo de pastor y misionero.
La reflexión nos lleva a contemplar la Natividad de la Santísima Virgen María y a descubrir en ella la mujer elegida para una misión grande en la tierra. En la Niña María se ve prefigurada la historia de la salvación de la humani-dad, al ser elegida, predestinada y preser-vada de toda mancha de pecado. Si en nuestra cultura gustamos de celebrar y recordar la fecha del cumpleaños, como no recordar el día feliz y memorable en que la madre del Señor empieza a compartir nuestra vida terrena. San Juan Damasceno pronuncio un 8 de Septiembre estas palabras de gran valor: “¡Oh feliz pareja, Joaquín y Ana, a ustedes está obligada toda la creación! Por medio de ustedes, en efecto, la creación ofreció al Creador el mejor de todos los dones, o sea, aquella augusta Madre, la única que fue digna del Crea-dor. ¡Oh felices entrañas de Joaquín, de las que provino una descendencia abso-lutamente sin mancha! ¡Oh seno glorio-so de Ana, en el que poco a poco fue creciendo y desarrollándose una niña completamente pura, y, después que estuvo formada, fue dada a luz! Hoy emprende su ruta la que es puerta divina de la virginidad. De Ella y por medio de Ella, Dios, que está por encima de todo cuanto existe, se hace presente en el mundo corporalmente. Sirviéndose de Ella, Dios descendió sin experimentar ninguna mutación, o mejor dicho, por su benévola condescendencia apareció en la Tierra y convivió con los hombres". Al recordar este natalicio presente-mos nuestros presentes a la Virgen Madre, Aquí va una carta de agradeci-
miento que en nombre de quienes te amamos me permito dirigirte: “Te damos gracias María por ser una mujer limpia, libre y de mucha fe. Te damos gracias porque estuviste llena de gracia, porque estabas precisamente llena de vida. Te damos gracias porque supiste encontrar la libertad siendo esclava, aceptando la única esclavitud que libera, la esclavitud de Dios. Gracias porque fuiste valiente, gracias por no tener miedo, gracias por tu libertad de palabra cuando hablaste con Isabel. Gracias por atreverte a decir que Dios derriba del trono a los poderosos sin preocuparte por lo que pensaría Hero-des. Gracias por haber sabido que eras pobre y que Dios te había elegido preci-samente por ser pobre. Gracias porque supiste hablar de los ricos. Gracias porque supiste ser la más maternal de las vírgenes y la más virginal de las madres. Gracias porque entendiste la maternidad como un servicio a la vida. Gracias por ser tan alegre en tiempos de muchas tristezas. Gracias por atreverte ir embarazada hasta Belén, Gracias por dar a luz donde cualquier otra mujer se hubiera avergonzado. Gracias por haber sabido ser luego una mujer de pueblo, por no haber necesitado ni ángeles, ni criadas que te amasaran el pan y te hicieran la comida, gracias por haber vivido sin milagros ni prodigios, gracias por haber sabido que estar llena no era estarlo de títulos y honores sino de amor. Gracias por quedarte en silencio y en la sombra durante la misión de Jesús, pero sosteniendo de lejos el grupo de mujeres que seguían a tu hijo. Gracias por haber subido al Calvario cuando pudiste quedarte alejada del llanto, por aguantar al lado del sufriente. Gracias por aceptar la soledad de los años vacíos. Gracias por ser la mujer más entera que ha existido y gracias por haber sido la única mujer de toda la historia que volvió entera a los brazos de Dios”.
Gracias María por existir entre nosotros. Gracias Madre por darnos a Jesús.
EZEQUIEL MORENO DIAZ
P. Alexander ParejaBotero
SAN
“Ella dará a luz un hijo, a quien pondrás el nombre de Jesús, porque él salvará a su Pueblo de todos sus pecados” San Mateo 1, 21
“HAGO DE OBISPO, DE MISIONERO
Y SACRISTAN”
7P. RafaelPosadaSoto
Este artículo está tiene la motiva-ción de dar apoyo, con información científica, para saber hacer bien hecho lo que hay que hacer a todas las perso-nas involucradas en esta enfermedad, en especial para los cuidadores de estos pacientes que se convierten para los esquizofrénicos en un refugio seguro, eficaz y responsable (sus familiares, amigos y personas compasivas). Esquizofrenia es lo que anterior-mente se llamó locura, hoy se dice ha roto con la realidad, hizo una fisura. Es como cuando Cristóbal Colón se alejó de la orilla y se fue mar adentro y en esta analogía que he presentado ellos entran en extremos peligros sin nosotros poderlos rescatar.Les escuchamos decir:
Que son poseedores de poderes divinos.Que tienen conocimientos especia-les.Que su pensamiento está controla-do por la televisión, radio, computa-dor, un chip implantado en el cerebro, extraterrestres, etc.Hacen reclamos y quejas con evidencias falsas producto de su imaginación realizando repetidas demandas en los juzgados con acusaciones inverosímiles. Los acusados los juzgan de ser unos calumniadores y crean conflictos a nivel familiar y social.Están convencidos de ser traiciona-dos, con conspiraciones, espiados, que los quieren envenenar y seña-lan a vecinos, amigos, familiares de que las enfermedades que tienen es por culpa de ellos. Enojados porque quien está con ellos no es la persona que han querido y que conocen; se trata de un impostor, de un doble, en conse-cuencia la rechazan y le temen.Nos pueden ver como si fuéramos la reencarnación del demonio, Cristo o un ángel.Se autodenominan y así actúan como si fueran justicieros del pueblo, contra una tiranía, creen-cias religiosas, política.Se autoeligen autoreformadores.Planean ataques violentos, arries-gando sus vidas y la de los demás.Se refieren a sus cuerpos como si estuvieran deformados.Consideran que son el centro de atención, donde quiera que estén,
porque los demás los desean bien sea por su belleza, atracción erótica o lo importante que es su persona. Todo esto producto de su imagina-ción porque no coincide con la realidad.No quieren salir durante el día pero si en la noche porque son la luna.Son violentos con su pareja por celos infundados.
Esta serie de creencias falsas es lo que se llama delirios tales como: Paranoide, erotomanía, reivindicación, celotipia, doble, etc. Otro síntoma en el esquizofrénico son las alucinaciones, pueden aparecer bajo cualquier modalidad sensorial: auditiva, visual, gustativa, olfatoria, táctil. Las de mayor frecuencia y revelación de la enfermedad esquizofrenia son las auditivas. Estas voces irreales las escuchan como amenazas, avergon-zándolos, humillándolos, menoscaban-do su dignidad. Les causan mucho tormento. Cuando los síntomas son delirios, alucinaciones y pensamiento ilógico los psiquiatras dicen que la enfermedad es de buen pronóstico y los denominan factores positivos. La causa de ellos es el exceso de una sustancia química dopamina (Neurotransmisor), que se produce en unas células dopaminérgi-cas, que hace circuito con el tálamo y corteza cerebral en el área frontal, y aquí y ahora gracias a la ciencia se puede regular su producción con medi-camentos. Además de estos síntomas se dan otros que se denominan de mal pronós-tico, Estos factores son negativos y son: mirada desviada, rigidez del cuerpo, retraimiento social, de pocas palabras, abandono en su aseo personal, descui-do por sus objetos, anhedonia (perdida del placer). Todavía hay muchos enigmas por resolver de las causas de estos factores. Entre ellas está la heren-cia, el gen responsable está en el cromosoma 5 ó 6. También hay estudios que indican daño en el lóbulo frontal y temporal, la presencia de aumento de tamaño del tercer ventrícu-lo, disminución del tamaño del hipotála-mo, estudios epidemiológicos de la enfermedad indican que la desnutrición en el periodo gestacional y el sufrimiento en el parto pueden ser causa de la enfermedad. O sea que los factores
negativos se deben a daños en el cerebro. Estamos ante una enfermedad en que nada vuelve a ser en ellos ni en sus familias como lo fue antes de aparecer la esquizofrenia. Todo cambia en la familia, la convivencia se hace difícil, unos porque no aceptan sus delirios, otros porque tratan inútilmente de convencerlos que están equivocados, ansiosos, con rabia y gastos y esfuerzos inútiles, porque no falta quien señale al esquizofrénico de estar poseído por el demonio o haber recibido un maleficio y en consecuencia lo manejan con hechi-ceros practicando conjuros y ritos para obtener su alivio y otros con exorcista tratando de sacarles el demonio que tienen dentro. Ambas mediaciones son desacertadas porque como ya la dije su causa es biológica. El manejo es por el médico psiquiatra. Ellos tienen el cono-cimiento para hacer el diagnóstico y manejo de la enfermedad. El diagnóstico es muy importante porque hay que saberlo diferenciar de otras enfermedades que presentan estos mismos síntomas, tales como: tumores cerebrales, epilepsia, demen-cia senil, delirio alcohólico, depresión psicótica, síndrome de abstinencia, Alzheimer, encefalopatías muy comu-nes por insuficiencia renal y otras. También porque tiene mejor pronóstico cuando el tratamiento se hace desde el inicio de la enfermedad y no cuando está muy avanzada. Antes del descubrimiento de los medicamentos para esta enfermedad en los años 1950, los esquizofrénicos pasaban sus vidas recluidos en sanato-rios psiquiátricos. Hoy el tratamiento es ambulatorio con algunos casos excep-cionales, por las características de sus crisis que se hace necesario su hospita-lización porque pone en riesgo su vida y la de otros. Esto lo digo para quitar el temor de que pueden ser recluidos en centros psiquiátricos. Los medicamentos tienen efectos secundarios como lentitud en los movimientos, sacar y entrar continua-mente la lengua, presentan el movimiento de estar abriendo y cerran-do las piernas, dificultad para estar quietos, impotencia sexual, estreñimien-to, visión borrosa. Es de mucha importancia mantener la adherencia al tratamiento. Hay que visitar al psiquiatra periódicamente, no
descuidar el medicamento aunque tenga estos efectos colaterales. Para ellos el momento más importante del día es la hora de tomar la droga. Hay que crearles hábitos que los protejan de las recaídas, como es el abandono al tratamiento, consumir alucinógenos (marihuana, bazuco, morfina). Al respecto hago este comen-tario, las drogas alucinógenas no son la causa de la enfermedad pero si es un gatillo para disparar la crisis. Lo normal es que esta enfermedad se presenta a finales de la adolescencia con excepciones se da en la niñez y edad adulta. Recuerden que el tratamiento oportuno ayuda mucho. El tratamiento tardío y descuidado empeo-ra la enfermedad. Cuando insisto que hay que evitar en los posible las recaí-das es porque ellas son peligrosas al deteriorar cada vez más a la persona e inducirla al suicidio. El esquizofrénico sufre mucho por las emociones de miedo, depresión, ansiedad. Una esquizofrenia bien manejada puede rescatar a la persona para autocuidarse e incluso trabajar. Los familiares y enfermos acuden con mucha frecuencia a pedir orienta-ción y consejería cuando se presentan estos delirios y alucinaciones a sacerdo-tes, les pido remitirlos al psiquiatra, dado la importancia de recibir un adecuado manejo y evitar la confusión, el sufrimiento y los riesgos que ella tiene. Muchas de las personas que están en las cárceles, habitantes de la calle, drogadictos, matrimonios en crisis, abandono de trabajo y de estudio, problemas sociales son efectos de esta enfermedad.
P. Hernán Escudero
Cuando surgen los asentamien-tos en las grandes ciudades, va con ello apareciendo diferentes tipos de necesidades indispensables para vivir bien. Los servicios públicos, por ejemplo; las vías, los centros educativos, comerciales, hospitala-rios, en fin; también una necesidad apremiante: el lugar del templo, para hacer comunidad en nombre de Dios; y casi siempre, es una construcción que sobresale a todas las demás; resultado del esfuerzo y sentido de unidad. Allí se enseña la
ires y venires, de litigios en la secre-taría de Gobierno Municipal, logra-ron obtener la creación de la parro-quia, hoy enclavada en los barrios Trianón y Oasis II, del Municipio de Envigado. El 19 de Junio de 1987 el señor arzobispo de Medellín, cardenal Alfonso López Trujillo, creó la parroquia Nº 255 erigida en honor a - San Ignacio de Antioquía- obispo y mártir de la metrópolis Siria de Antioquía, tercera en orden de grandeza del vasto imperio Romano, que tuvo como primer obispo al apóstol Pedro, al que le sucedieron Evodio y después Igna-cio –Portador de Dios- como a él le gustaba llamarse. Llevado prisio-nero a Roma, víctima ilustre de la persecución de Trajano que le condena a morir devorado por las fieras en el coliseo Romano. Duran-te su viaje prisionero escribe siete cartas dirigidas a varias iglesias, en las que trata de: Cristo, la constitu-ción de la Iglesia y la vida cristiana. “Déjenme ser alimento de las fieras, que me permitirán gozar de Dios. Yo soy trigo de Dios. Es nece-sario que sea molido por los dientes de las fieras, para que me convierta en puro pan de Cristo”. Sus palabras de amor a Cristo y a la Iglesia quedarán en la memoria de las futuras generaciones. Quien las escribe es un obispo que encar-na autoridad y los carismas del espíritu. “Allí donde esté el obispo, está la comunidad, así como en donde esté Cristo Jesús, allí está la Iglesia católica” Vale anotar que las expresiones “Iglesia católica” y “cristianismo” son vocablos creados por él. Y en Antioquía fue donde la comunidad, por primera vez, tomó el nombre de CRISTIANOS. El Santoral Romano conmemo-ra la celebración del santo patrono, el día 17 de Octubre, fecha en la cual la comunidad parroquial se engalana, recibe la visita del Obispo y presenta los jóvenes, que previamente preparados, se confir-man en la fe; niños y niñas que hacen su primera comunión, en esa experiencia maravillosa de alimen-tarse por primera vez en la cena del Señor y de sentirse invitados de honor al banquete de la Eucaristía.Han pasado tres sacerdotes por la
Palabra, se comparte la Eucaristía, se alaba al Señor. Hace veinticinco años nace un sueño. Un sueño que se fue prepa-rando durante siete largos años en la mente de muchos habitantes del sector, tales como: Alfredo Fernán-dez, Margarita Tobón, Luis Miguel Ramos, Lola Guzmán, Luis Giraldo, Fanny Jaramillo, Ligia Álvarez, Dora Raigoza, Laura Vélez, e Irene Orozco, quienes se convierten luego en la primera junta pro-templo. La construcción de la primera ramada
fue obra del trabajo incansable de los señores: Juan Bautista Muñoz y Enrique Meneses. Con la celebración de la Euca-ristía todos los sábados en la tarde, con la asistencia de varios habitan-tes del barrio el Trianón, que siendo feligreses de la parroquia María Reina de la Paz, fueron cultivando la semilla de la fe para un día tener su comunidad parroquial más cerca de sus hogares y con ese espíritu de buenos cristianos, en medio de muchos obstáculos y dificultades, de
administración parroquial: El padre William Restrepo Vásquez, El padre Wilson Álvarez Herrera y el padre Hernán Escudero Betancur, párroco actual. Queda en la sensi-bilidad de la comunidad, un sabor de gratitud y aprecio, al aporte personal que cada uno de los sacerdotes ha puesto, en el acompañamiento al anuncio del Evangelio. Cada párroco ha hecho una labor brillante en la comunidad, acompañándola en lo sacramental, con el testimonio de vida, en la convocatoria a los grupos de la parroquia y en la remodelación del templo, que se ha estado llevando en todos estos años. De una ramada hecha de guaduas en el año de la fundación, a un templo digno e imponente que se planta hoy, signo de la renova-ción de cada creyente; esfuerzo y sentido de pertenencia de una comunidad nueva que vive la fe del Señor resucitado y se identifica con la tarea de la gran misión conti-nental que va germinando en las vocaciones sacerdotales y religio-sas. Las cinco familias que han regalado un hijo sacerdote, son la cosecha del trabajo pastoral en la comunidad: Padre José Luis Pania-gua Restrepo, Padre Sergio Alejan-dro Arcila Zea, Padre Daniel Mene-ses Álvarez, Padre Federico Marín Ospina y Padre Pedro José Guzmán Ardila. En la parroquia se ora por ellos, son signo de bendi-ción en la comunidad.
Los grupos que apoyan la pastoral, son los apóstoles que siguen a Cristo, trabajan con él, se entregan a él y han asumido por muchos años esa gran responsabi-lidad de ser templos vivos del Espí-ritu Santo; En el servicio a la comunidad, cada uno tiene su carisma y su don, su valioso aporte es diverso y enriquecedor. Este año, con motivo de las “Bodas de Plata” la parroquia ofrecerá un gran homenaje de reconocimiento y gratitud a todos los feligreses que han sentido suya, la causa de continuar viviendo la experiencia de la fe cristiana. Dicha efemérides consta de tres partes:
El templo parroquial en su interior hoy presenta una transformación que ha sido posible gracias a la generosidad de todos los feligreses y se ha venido haciendo durante varios años. El altar mayor y la sede combinados con enchapes de madera y mármol, dan un toque de elegancia a los símbolos sagrados de la celebración eucarística. El Altar del sagrario, entremez-clado de bronce, madera y mármol, es el lugar más visitado del templo. Aquí muchos feligreses hacen ratos de Oración a Jesús Sacramentado. El altar a la Santísima Virgen María, también en armonía de los anteriores, son un homenaje de amor filial de la comunidad a la presencia de la Reina de nuestros corazones por estos veinticinco años de acompañamiento y de protección. Para el próximo año, Dios mediante, se hará una intervención en la fachada que da al pasaje peatonal, para hacer una amplia-ción al templo, agregando unos cien metros cuadrados de más. Dios siga bendiciendo esta familia que va caminando tras las huellas de Cristo y que orientada en el nuevo modelo de parroquia, sea lugar donde el amor de caridad hace posible vivir la COMUNIÓN para ser comunidad eclesial UNA Y SANTA a pesar de nuestras limita-ciones… (DA 176).
Sábado 13 de Septiembre
Celebración sacramental de la primera Comunión a niños y niñas, y Confirmación a jóve-nes.
Domingo 14 de Septiembre
Comedor, bazar y tablado.
Miércoles 17 de Septiembre
Santa Misa concelebrada por los párrocos de La Paz, Se-ñorial y el Trianón. Conferen-cia sobre la “Crisis del amor humano” por el Padre: Carlos Yepes Vargas.
Grupo de Catequistas.(Sacramentos de iniciación cristiana)Pastoral de la salud.(Acompañamiento a los enfermos)Hnas. Esclavas Misioneras del Smo. Sacramento.(Ministras extraordinarias de la Eucaristía y pastoral de la salud)Grupo La Guardia de Honor.(Adoración y reflexión de la Palabra)Cofradía del Santo Sepulcro. Jóvenes universitarios.(Con laboriosidad y entrega aportan en las grandes celebraciones: semana santa, navidad y patronales)Comunidad neo-catecumenal.(Pequeñas comunidades en la celebración de la Palabra y la Eucaristía)La Roca Firme.(Grupo carismático de adoración y alabanza)
Legión de María.(Adoración y reflexión de la Palabra)Servidores del Altar.(Niños y niñas acólitos)Grupo de Lectores.(Proclamadores de la Palabra)Grupo de Apoyo(Trabajo y dedicación en las grandes celebraciones: semana santa, navidad y patronales)Grupo de la Tercera Edad.(Encuentro de nuevas experiencias, a través de actividades físicas)Grupo Scouts Anaconas 177.(Niños, jóvenes y dirigentes “Siempre Listos”, trabajando en el servicio para Dios, la Patria y el Hogar)Grupo apoyo Social.(En la visita y distribución de las ayudas de la comunidad, a familias pobres)Asesores Jurídicos.(La Universidad de Envigado orienta de manera gratuita a la comunidad).
Grupos Pastorales
Todos los días, todos los hom-bres, tomamos decisiones; algunas tan simples que casi que pasan desapercibidas pero, otras veces, estamos urgidos a tomar decisiones más complejas y exigentes. El hombre es un ser facultativo. En él, decidir es una capacidad y es una responsabilidad. Hay decisiones en la vida que se pueden aplazar, que se pueden evitar pero, también, existen otras decisiones que son irrenunciables e inaplazables y entre estas están las decisiones de conciencia, las decisiones éticas, morales o religiosas. A veces los creyentes cristianos conocemos “la Verdad” pero no nos hemos decidido por Cristo que es “el Camino, la Verdad y la Vida”; sabe-
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mos de Cristo pero no nos hemos decidido a “ir con Él”, a entrar en íntima relación con la verdad del Padre hecha carne, con su vida, con su misericordia, con su compasión, con su bondad, con su perdón, con su amor de servicio, con su amor hasta la entrega total. Se dice que alguna vez estando Gandhi en el silencio del Himalaya se inclinó sobre un cristalino arroyue-lo, tomó una piedrecita empapada en agua desde siempre, la partió con otra, y al observar su interior excla-mó: “así son los cristianos que yo conozco. Llevan veinte siglo empa-pados de Cristo y están perfectamen-te secos por dentro” Hemos aprendido que al acto intelectual ha de seguir el acto volitivo.
El Evangelio, presenta el mensaje principal para la vida de la comunidad cristiana; es la buena nueva anunciada por Jesús, a través del evangelista.
Por eso, no basta con conocer la verdad; es preciso optar por la verdad y encarnar la verdad en nues-tra vida. Una verdad que no se vive es algo así como una verdad que no convence. Nuestra vida o es una convencida verdad o se hace una escandalosa mentira. Y si no enseñamos la verdad de qué somos testigos? Lo más doloroso y dañino es separar la claridad de pensamiento de la claridad de vida. La incongruen-cia de vida le quita valor a la congruencia del pensamiento. Dice San Juan Crisóstomo: “Buena cosa es enseñar si el que enseña también obra porque, más que enseñar lo que se sabe, es fundamental enseñar lo que se vive”. Y, agrega, más recien-temente, S. S. Paulo VI: “El hombre moderno escucha más a gusto a los que dan testimonio que a los ense-ñan o, si escucha a los que enseñan, es porque dan testimonio” La congruencia de un hombre de seguros principios humanos y cristia-nos no se debe alterar sin más. No se debe lastimar ni siquiera con la prueba, con el dolor, con el sufrimien-
to; más bien, se debe acrisolar cuando se afronta el dolor o el sufri-miento, la culpa y la muerte. Este hombre, interiormente sólido y exte-riormente congruente, no hace de su dolor o sufrimiento un dolor o sufri-miento para el otro; este hombre tiene improntado en lo profundo de su ser este principio: “Es difícil escri-bir con sangre pero qué bien se escri-be con ella”; de este hombre se puede decir lo que decía un preso sobre los escritos de V. E. Frankl: “Escribe como quien vive lo que escribe”. El testigo de humanidad y de Fe, en su congruencia, no lo es sólo mientras tiene capacidad de hacer, mientras tiene capacidad de gozar la belleza y el amor; lo es, también, con su actitud, cuándo las capacidades de hacer, disfrutar y amar se le hacen esquivas y se enfrenta, enton-ces, aún a las situaciones más extremas, más dolorosas o injustas que puedan pensarse pues quien tiene conciencia del “para qué”, de la “razón de ser” de su vida, es capaz de resistir casi cualquier cómo.
P. AncízarRestrepoToro
P. Carlos MarioHincapiéPérez
En la Eucaristía, la Palabra y el pan son inseparables. Transmiten el mundo interior de Cristo, su ser y existir para todos nosotros, sus hermanos. La Palabra y el pan alimentan, dan fuerza para el camino. Así como el pan, en la vida diaria, calma el hambre y simboliza la convivencia familiar, la Palabra, como la buena noticia, anima, informa, orienta, hace encontrar el rumbo seguro para seguir el camino que Dios quiere. El Evangelio de Jesucristo, es uno solo, anunciado durante casi dos mil
años. Pero cuatro personas redacta-ron su texto, en épocas diferentes. Son reconocidas por los cristianos como “Evangelistas”. En el orden en que aparecen en la Biblia, son ellos: Mateo; Marcos; Lucas, Juan. Mateo y Juan formaron parte de los doce após-toles. Los otros dos, Marcos y Lucas, conocieron al Maestro de otra forma, pero convivieron con los Apóstoles, de quienes escucharon muchos relatos. En todo caso, el Evangelio, es la Palabra de Jesús, que nos está invitando permanentemente a un cambio de vida.
V.E. Frankl
Jesucristo, continúa presente entre nosotros, a través de su Palabra. La mesa de la Palabra de Dios, está unida a la mesa del pan y del vino. La Euca-ristía, es también la Palabra, alimento que da fuerza, que genera vida nueva. El Evangelio es también, signo de presencia de Jesús entre nosotros. El don de la Palabra, de la comunica-ción, es típico de Jesús. Jesucristo, está presente por su Palabra, como está presente en el Padre. De este modo, alimenta la fe del cristiano, mediante la Palabra y mediante el pan.
11M. RodrigoDurangoEscobar
Teniendo como base la indisolubili-dad del matrimonio católico, es decir, contraído para toda la vida, nos vamos a detener ahora en analizar en general las diferentes circunstancias que pueden afectar la misma indisolubilidad o aquellas que atacan la misma raíz contractual o sacramental y manifies-tan formal o aparentemente un matri-monio que de hecho no se realizó. En estas diferentes circunstancias entra a trabajar el Tribunal Eclesiástico para sondear las causales que pueden llevar a solicitar o bien un indulto apos-tólico o bien una declaración de nulidad. Lo veremos por partes. Hay dos hechos que hay que considerar en el matrimonio, según el canon 1141, para considerar su plena validez, uno, ser rato, en el momento de la celebración, y otro, ser consuma-do, después de la misma. Se necesitan
los dos para que el matrimonio tenga su poder de indisolubilidad. “El matri-monio rato y consumado no puede ser disuelto por ningún poder humano, ni por ninguna causa fuera de la muerte”.Un matrimonio es “rato” cuando se celebra con todas las formalidades exigidas: consentimiento de las partes frente a dos testigos y un sacerdote autorizado para presenciarlo. Y es consumado cuando, como reza el canon 1061 §1, “los cónyuges han realizado de modo humano el acto conyugal apto de por sí para engendrar la prole al que el matrimonio se ordena por su misma naturaleza y mediante el cual los cónyuges se hacen una sola carne”. Cuando sucede que el matrimonio es “rato pero no consumado” por cualquier circunstancia, entendida la consumación sólo después del matri-monio, se puede pedir una dispensa del mismo al Sumo Pontífice cuando se ha suscitado un problema serio e irreversible entre los cónyuges. Uno de
éstos puede acercarse al Tribunal Eclesiástico o a la Curia Diocesana más cercana para exponer su problema y solicitar ayuda. Otra manera posible de solicitar dispensa del matrimonio es cuando, celebrado un matrimonio válido por dos personas no bautizadas, una de ellas se convierte y recibe el bautismo y la otra parte rehúsa el bautismo y no acepta continuar la convivencia con el bautiza-do por el hecho de ser un converso. Por mérito del llamado “Privilegio paulino” el Sumo Pontífice concede la dispensa de disolución del vínculo a favor de la fe y permite que el converso pueda contraer un nuevo matrimonio así sea con perso-na no bautizada que acepte su condi-ción de católico. No existe otro privilegio que permita la disolución de un matrimonio válido. Quienes han contraído válidamente el matrimonio y tienen dificultades para la convivencia deben buscar medios efica-ces como la pastoral familiar o los psicó-
logos de contextura cristiana que les permitan reconocer sus fallas persona-les y renovar sus compromisos matri-moniales en pro de una convivencia pacífica. Cuando estos medios no son suficientes la Iglesia les permite a los esposos la separación permaneciendo el vínculo. Se va en búsqueda del derecho a la dignidad y felicidad perso-nales. En Colombia esta separación se hace por medio de la autoridad civil. Sin embargo hay que pensar en el mal que se les hace a los hijos en su psico-logía, en su formación estructural y en la proyección de su futuro.
El 26 de agosto de 1962, hace cincuenta años, de manos de monse-ñor Tulio Botero Salazar, Arzobispo en el entonces de Medellín, en la Catedral Basílica Metropolitana, recibieron el presbiterado monseñor Roberto López Londoño (Obispo de Jericó), monseñor Iván Moreno Agudelo, monseñor Carlos Hernán Vélez Saldarriaga, el canónigo Jorge E. Suárez Álvarez y los padres Igna-cio Álvarez Gómez, Luis Fernando Madrid Mesa y Jairo Antonio Piedrahita Mesa. Para la diócesis de Sonsón-Rionegro se ordenaron mon-señor Oscar Ángel Bernal (fue Obispo de Girardota) y Alpidio Betan-cur Giraldo, que se incardinó después en la Arquidiócesis. Queda-ron en el presbiterio de la diócesis de Caldas los padres Darío Meneses y Enrique Jaramillo; en la diócesis de Girardota quedó el padre Eliseo Tobón. El padre Horacio Gómez del clero de la Arquidiócesis de Maniza-les. Pidieron la dispensa del ministe-rio, Abilio Castaño, Santiago Pérez y Tulio Vélez. Ya descansan en paz monseñor Oscar Ángel, monseñor Nelson Sierra y los padres Alpidio Betancur y Alberto Castaño. En la Eucaristía de acción de gracias celebrada el 22 de agosto de este año en la Catedral de Medellín, monseñor Roberto López en su homi-lía inspirada en dos textos bíblicos: “El Señor es mi Pastor, nada me faltará” (Sal 22) y “Ay de los pastores que se apacientan a sí mismos” (Ez 34, 7) dio gracias a Dios por la vida, la fami-lia: “ha sido el primer seminario” (OT 2), los sacramentos de la iniciación cristiana, por los maestros de prima-ria, del Seminario Menor y Mayor, de la universidad. Decía monseñor Roberto: ¿Cómo no recordar agrade-
P. ElíasLoperaCárdenas
cidos la bondad del P. José Mejía Escobar, nuestro primer rector , el dinamismo emprendedor de monse-ñor Eugenio Restrepo Uribe, el aporte del padre Pedro Nel Martínez Gallego, o la virtud acrisolada de los directores espirituales: José Salazar. Jesús Antonio Gómez y Fabio Restrepo, y el testimonio de cultura bíblica del padre Humberto Jiménez Gómez? Agradeció a monseñor Tulio Botero Salazar el haberles conferido el don del sacerdocio ministerial, que hizo que en estos cincuenta años hayan sido discípulos misioneros en el servicio de la Palabra, del culto sagrado y de la promoción integral de las personas y las comunidades. A los compañeros: Abilio Castaño, Santiago Pérez y Tulio Vélez, que pidieron sus dispensas y no siguieron ejerciendo el ministerio recibido, les admira el haber seguido creciendo como creyentes formados, maduros y comprometidos, pues, “están llama-dos por Dios, para que, desde la familia, y desempeñando su propia profesión, guiados por el espíritu evan-gélico, contribuyan a la santificación y transformación del mundo…” (LG 31). Oró por los compañeros que ya terminaron su peregrinación por la tierra: monseñor Oscar Ángel Bernal, monseñor Nelson Sierra y los padres Alpidio Betancur y Alberto Castaño, que gocen de la resurrección pascual. Ser sacerdotes hoy en un mundo convulsionado y en la cultura post-moderna, no es tarea fácil. Es una misión que supera nuestras capaci-
dades humanas, siempre limitadas. Con el Vaticano II, iniciado hace 50 años, cuyos textos “son brújula segura para orientarnos en el camino del siglo que comienza” (JP II, NMI, 57) pensamos que: “No podríamos ser ministros de Cristo si no fuéramos dispensadores de una vida distinta a la terrena, ni podríamos tampoco servir a los hombres si permaneciéramos ajenos a su vida y condiciones de los mismos” (PO 3). Esto implica ser “hombres de Dios, preparados para toda obra buena” (2Tm 3, 17), dedica-dos de tiempo completo “no a ser servidos, sino a servir, al estilo de Jesús” (Mt 20, 28) (cf. Homilía de monseñor Roberto López). El señor Arzobispo de Medellín, monseñor Ricardo Tobón Restrepo,
sus Obispos Auxiliares y el presbite-rio de la Arquidiócesis nos unimos complacidos a esta acción de gracias por las Bodas de Oro sacerdotales que celebran nuestros hermanos sacerdotes. Los felicitamos y les reconocemos y agradecemos estos 50 años de servicio sacerdotal orde-nado, vividos en comunión y partici-pación. Que el Señor los colme de bendiciones y los conserve muchos años en la experiencia de “conocer a Jesucristo por la fe en un encargo que el Señor, al llamarnos y elegir-nos, nos ha confiado” (DA 18) y en la “gran tarea de custodiar y alimentar la fe del pueblo de Dios” (DA 18).
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La Iglesia recibe del Señor Jesús el envío de enseñar, de hacer discípulos: Id púes y haced discípulos a todas las gentes bautizándolas en el nombre del padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándoles a guardar todo lo que yo os he mandado. Y he aquí que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin de mundo (Mt 28). La Iglesia responsa-ble de esta tarea, envía a hacer presencia de Jesucristo en todos los lugares de la tierra, la evangelización no es un valor añadido a la vida eclesial, es su razón de ser, es para lo que el Señor Jesús la ha puesto, todo bautizado debe sentirse en el lugar donde esté llamado a ser evangelizador. La Iglesia no se agota en una Diócesis, por eso desde hace muchos años esta Iglesia particular de Medellín promueve dentro de su clero la misión “ad gentes”, en otros sitios donde se hace necesaria la presencia evangeli-zadora, no solo por la falta de agentes de pastoral, sino también porque en el
P. JuanFernando GómezJiménez
compartir la tarea cada diócesis se enriquece pastoralmente, tanto quien envía como quien recibe un misionero. El misionero no va a nombre propio, no se envía él mismo, el misionero va en nombre de su Iglesia particular a prestar el servicio que le encomiendan, por eso es vital la comunión y comuni-cación con su obispo, con su clero y con sus hermanos sacerdotes que se encuentran viviendo la misma expe-riencia en lugares diversos. La Arquidiócesis de Medellín tiene presencia “ad gentes” dentro de Colombia en el Banco Magdalena; fuera de Colombia en Canadá, Estados Unidos, Cuba, Brasil, Argentina, Francia, España, Italia. Convencidos de ello, los misione-ros ad gentes, venimos realizando año tras año un encuentro fraternal para estrechar lazos de comunión y comuni-cación, buscando enriquecer la expe-riencia misionera de la Arquidiócesis de Medellín.
En esta comunión misionera, en el año 2011, en la celebración de la Jorna-da Mundial de la Juventud, la Iglesia de Ibiza (España) acogió veinte jóvenes de la Arquidiócesis de Medellín, este año del 17 al 21 de septiembre, aproxi-madamente veinte de los misioneros ad gentes de nuestra Iglesia, tendremos la oportunidad de encontrarnos en la isla, acogidos por Monseñor Vicente Juan Segura, Obispo de Ibiza, donde la Arquidiócesis presta su servicio desde hace 7 años, actualmente somos tres sacerdotes quienes apoyamos esta labor misionera en esta Iglesia hermana (Padre Álvaro González, Padre Juan Fernando Gómez y padre Sergio Arcila). Contaremos con la presencia del Señor Arzobispo de Medellín, Monseñor Ricardo Tobón Restrepo, y el vicario de misiones, Pbro. Orlando Ramírez.
ENCUENTRO DEL ARZOBISPO DE MEDELLÍNCON LOS SACERDOTES MISIONEROS
Durante estos días tendremos la oportunidad de orar juntos, dar a conocer los testimonios de cada misión, compartir una jornada de restiro espiri-tual dirigido por nuestro Arzobispo. Esperamos que nuestra Iglesia Madre se una espiritualmente a este encuentro, para que en comunión con nuestro Pastor podamos seguir, en nombre de la Iglesia Universal, cumpliendo la tarea que el Señor Jesús nos ha encomendado.
Padre Álvaro González, Padre Juan Fernando Gómez, sacerdotes de laArquidiócesis de Medellín en Ibiza con Monseñor Vicente Iván Segura.
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Desde el 1 al 13 de septiembre, el Arzobispo de Medellín, mons. Ricardo Tobón Restrepo, y sus obispos auxiliares, viajarán a Roma para participar de la visita “Ad limina Apostolorum” que periódicamente todos los obispos del mundo deben realizar. Esta visita es un momento privilegiado de la comunión con el Sucesor de Pedro, y el momento que tienen los obispos de compartir la común responsabili-dad en la animación pastoral de las comunidades diocesanas. Es él quien confir-ma la misión que se les ha confiado a los obispos, para que a su vez, ellos confir-men la fe a sus comunidades. Es en Roma donde se custodian las reliquias de los Apóstoles Pedro y Pablo, columnas de la unidad de la Iglesia, donde los obispos tendrán la oportunidad de celebrar la Eucaristía por la Iglesia de Medellín.
“Pactemos paz, construyamos convivencia”
“VENIMOS A OFRECER EL CORAZÓN” Manifestación contra la violencia en la Comuna 5
VISITA “AD LIMINA” APOSTOLORUM
LA IGLESIA ESTA DISPONIBLE A CONTRIBUIRA UN EVENTUAL PROCESO DE PAZ
Mons. Ricardo Tobón R.
Arzobispo de Medellín
Obispo Auxiliar de Medellín
Mons. Edgar Aristizabal
Obispo Auxiliar de Medellín
Mons. Hugo A. Torres M.
Obispo Auxiliar de Medellín
Mons. Elkin F. Álvarez.
Unámonos, a través de la oración, con este momento de comunión que
tiene la Arquidiócesis de Medellín con el Santo Padre.
Mesde laBiblia
Ante la invitación que nos ha hecho el Papa Benedicto XVI, de celebrar el año de la FE, con motivo de los cincuenta años del comienzo del Concilio Vaticano II, el 11 de octubre próximo, y de los veinte años de publicado el Catecismo de la Iglesia Católi-ca, hemos visto conveniente proponer el tema de la Fe, para el mes bíblico, de manera que, desde distintos aspectos de la Sagrada Escritura, podamos ayudar a la profundización de este tema, para una vivencia más consciente y fructuosa de este tiempo de gracia. Las figuras bíblicas que aquí se ofrecen, nos permiten entender que la fe debe encar-narse en respuestas de total confianza en Dios, para poder obedecerle siempre, aunque no se entiendan las exigencias que el Señor hace. Ejemplo claro de ello en al Antiguo Testamento es Abraham, a quien se le pide sacrificar a su hijo. En el Nuevo Testamento encontramos la fascinante figura de María, una joven que responde con presteza a la invitación de ser madre del Hijo de Dios, aunque no entendiera suficientemente lo que estaba aconteciendo en ella. Gracias a esa respuesta juvenil y generosa de “aquí está la esclava del Señor…”se encarnó el Salvador y todos nosotros podemos obtener la justificación y llegar a ser hijos de Dios en el Hijo amado, Jesucristo. Las otras figuras van plasmando matices diversos de la fe, pero todas ellas como parte fundamental de la historia de la salvación tanto en el antiguo como en el nuevo testamento. Que apoyados en la fe que hemos recibido de nuestros mayores y que debemos vivir, celebrar y proclamar, contribuyamos a hacer del año de la Fe, una experiencia que fomente y suscite en otros el deseo de acercarse al Dios que cumple las promesas que hace y por tanto que regala la esperanza y nos compromete en el amor.
“Reconciliémonos” es la invitación que, la Pastoral Social de Medellín y el Arciprestazgo de San Judas Tadeo, hicieron el pasado 3 de agosto en la comuna 5, a través de un acto simbólico por la vida a raíz de los tristes aconte-cimientos de violencia ocurridos en la zona, lo anterior buscando motivar el inicio de diversos procesos de reconciliación. En la cancha la Maracaná del sector la Esperanza, del Barrio Castilla, en la Parro-quia el Santo Evangelio, el Arcipreste, Pbro. Juan David Torres; los párrocos del Arciprestazgo, Pbro. Darío Gonzalo Martínez; Pbro. Jhon Jairo Alzate Tabres de San Gregorio Magno; Pbro. Bernardo Agudelo García de San Bautista Precursor; Pbro. Alfredo Hoyos de la Parroquia San Judas, líderes de la zona y organizaciones cívicas, acompañados por la comunidad se unieron con valentía y llenos de esperanza a compartir solidariamente con los familiares víctimas de la violencia, a celebrar el signo que anuncia el Evangelio de la vida, a restablecerlo con el perdón que cura las heridas y restablece en profundidad las relaciones humanas truncadas. Este signo nos da la oportunidad de ofrecer el corazón en las manos del príncipe de la paz, las exigencias de la justicia y la necesidad del perdón, actitudes que solo desde el encuentro con Jesucristo, podremos vivir.
Con el lema “Pactemos Paz, construyamos convivencia”, el Secretariado Nacional de Pastoral Social Nacional y la Pastoral Social de la Arquidiócesis de Medellín , junto a otras organizaciones que trabajan por la paz en Colombia, realizará la Semana por la Paz 2012. La semana por la paz se llevará cabo del 9 al 16 de septiembre. Durante 8 días, se realizarán actividades de reflexión como talleres, conferencias y diversas iniciativas, invitando a todos y todas a buscar salidas a todo tipo de conflicto y a dignificar la vida de los más vulnerables.Con el lema propuesto en la Semana por la Paz 2012, se busca promover y eviden-ciar el compromiso ciudadano por la paz, como estrategia de incidencia política para la solución política del conflicto armado interno, la construcción de la Paz integral y la reparación integral a las víctimas.
Convencidos de que el diálogo es el único camino posible para obtener la paz, los Obispos de Colombia recibi-mos con alegría y esperanza el anuncio del señor Presidente de la República sobre conversaciones exploratorias con las fuerzas insurgentes para establecer las bases de un proceso de paz que pueda conducirnos, con la ayuda de Dios, a poner fin al conflicto armado. Brindamos nuestro decidido apoyo a esta iniciativa gubernamental. Reconocemos la prudencia y la seriedad con las que el Gobierno nacio-
nal ha venido desarrollando estos acercamientos preliminares. En ese contexto, queremos reafirmar ante la opinión pública nuestra disponibilidad de contribuir a la búsqueda de la paz, favoreciendo un clima de perdón y reconciliación entre todos los colombia-nos y facilitando el encuentro y el entendimiento entre el Gobierno, la sociedad civil y los diversos actores del conflicto armado. Invitamos a nuestros fieles y al pueblo de Colombia a hacer propia la causa de la paz aportando cada uno
desde su condición los elementos requeridos para la construcción de un estado de derecho que permita la convivencia en la justicia, la solidaridad y la fraternidad. Oremos unidos por la paz, con fervor y convicción, invocando la bendi-ción abundante de Dios sobre nuestra Patria.
“Bienaventurados los que trabajan por la paz” (Mt 5,9)
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A medida que nos aproximamos al final del curso bíblico es importante que realicemos las tareas propuestas. Gracias a todos los que han escrito al correo electrónico y a quienes han sido pacientes para esperar respuestas.
Recuerda que cualquier inquietud sobre la Biblia la puedes resolver con tu párroco.
Motivación
Carta a los Hebreos 12, 1-17
que hace a la predicación de los após-toles (2, 3-4) distante del primer anun-cio recibido (13, 7; Cf. 10, 32). Básicamente la Carta a los Hebreos presenta dos líneas de argumentación: en primer lugar desa-rrolla el tema del sacerdocio de Jesu-cristo y después trata el tema de la fe a partir de la experiencia del Éxodo.El texto lo podemos leer siguiendo esta estructura:
Prólogo (1, 1-4) propone los temas: Jesús Hijo de Dios, Palabra creadora, camino, único mediador y sumo sacerdote de la nueva alianza.Jesús Hijo de Dios (1, 5.2,11) a partir de textos del Antiguo Testa-mento se demuestra que el Hijo de Dios es superior a los ángeles y que su enseñanza es auténtica; Hijo de Dios que compartió la realidad humana, la carne y sangre e incluso los sufrimientos y la misma muerte para liberarnos del poder del maligno.Jesús es el verdadero sumo sacerdote del nuevo pueblo de Dios (3,1.5,10) Jesús transmite de verdad la Palabra de Dios que debe ser escuchada (por eso es comparado con Moisés), al experi-
Lectura de la Palabra de Dios 1
explicación 2
mentar las más profundas realida-des humanas este es un sumo sacerdote compasivo y misericor-dioso.El sacerdocio de Cristo es una nueva realidad (5,11. 6,20) supe-rior al levítico y al del Antiguo Testamento, pues anuló el valor de los sacrificios de antes y porque en este nuevo sacerdocio la ofrenda, el oferente, la víctima y el sacerdote son la misma realidad: la ofrenda es la vida del oferente.La comunidad nueva (11, 1. 13, 21) presidida por el sumo sacer-dote Jesús está unida con la comunidad del Antiguo Testa-mento, que tiene por piedra fundante la fe y unas característi-cas especiales: es una comuni-dad santa, cultual, que enseña la Palabra de Dios y se mantiene obediente y fiel, con una atención preferencial con los más pobres.Conclusión de la Carta (13, 20-25) bendición final, doxología, breves noticias y saludos.
Introducción San Pablo no es el autor de la carta a los Hebreos: el estilo literario y la forma de utilizar los textos del Antiguo Testamento nos permite concluir que el Apóstol Pablo no escri-bió esta carta, que además no tiene el saludo ni la acción de gracias que caracterizan a los escritos de San Pablo, aunque los temas que trata esta carta son muy afines al pensa-miento paulino: Abrahán modelo de fe, la ley, la alianza del Sinaí, la fe.
CARTA A LOS HEBREOS
Tema 10
atenciónatenciónatención
3Tareas del CursoBíblico y acciones para la VidaPara el próximo mes es absolutamen-te indispensable leer:
Estas 7 cartas son llamadas “Católi-cas” porque no van destinadas a una persona o comunidad en particular sino a todos los creyentes en general. Las 7 cartas Católicas son breves, es necesario leerlas este mes para aprovechar mejor las explicaciones que daremos en la próxima edición de nuestro Periódico Misión.
Carta de SantiagoCarta de San Judas1 y 2 de San Pedro1, 2 y 3 de San Juan
P.
Ya afirmamos que San Pablo no escribió esta carta, ¿quién lo hizo? Posiblemente un redactor influencia-do por el pensamiento del Apóstol, un autor anónimo, un judío de cultura griega, buen orador y conocedor del Antiguo Testamento. Tampoco sabemos con certeza el lugar y fecha de redacción de esta carta, y aunque se denomina “a los hebreos” no sabemos exactamente quienes eran los destinatarios de esta carta. Posiblemente el autor se encuentra en Italia (13, 24) y al hablar de la liturgia del Templo como de una realidad actual (8, 4s) hace pensar que se redactó antes del año 70. Este es un escrito de “la segunda generación cristiana” por la referencia
Dios te pague por tu DiezmoTu aporte ha sido muy importante
El Santo Padre, Benedicto XVI, ha enviado un mensaje a la VI Asamblea Ordinaria del Forum Internacional de Acción Católica (FIAC), que se celebra en Iaşi, Rumanía, del 22 al 26 de agosto. En el mismo, el Papa señala que los laicos no deben ser considerados “cola-boradores” del clero sino “corresponsa-bles” del ser y el actuar de la Iglesia. “La corresponsabilidad –afirma el pontífice en su mensaje- exige un cambio de mentalidad referido, en especial, al papel de los laicos en la Iglesia, que deben ser considerados no como 'colabo-radores' del clero, sino como personas realmente 'corresponsables' del ser y del actuar de la Iglesia. Es importante, por tanto, que se consolide un laicado maduro y comprometido, capaz de dar su propia aportación específica a la misión eclesial, en el respeto de los ministerios y de las tareas que cada uno tiene en la vida de la Iglesia y siempre en cordial comunión con los obispos”. El papa exhorta a los participantes a profundizar y vivir un “espíritu de comu-nión profunda con la Iglesia, característica de los inicios de la Comunidad cristiana”. El Papa hace un llamado a la santidad y a una vida “trasparente”,
El Papa afirma la corresponsabilidad
de los laicos en la Iglesia
años fue elegido Juan Pablo I:
“El Papa de la sonrisa”
“guiada por el Evangelio e iluminada por el encuentro con Cristo, amado y seguido sin temor”. Y concluye exhortándoles a asumir y compartir “las opciones pastorales de las diócesis y de las parroquias, favorecien-do ocasiones de encuentro y de sincera colaboración con los otros integrantes de la comunidad eclesial, creando relacio-nes de estima y comunión con los sacer-dotes, por una comunidad viva, ministe-rial y misionera”, así como a cultivar “relaciones personales auténticas con todos, empezando por la familia”, ofreciendo su disponibilidad “a la partici-pación a todos los niveles de la vida social, cultural y política teniendo siempre como objetivo el bien común”.
mío, con todo el corazón y por encima de todo os amo, bien infinito y felicidad eterna nuestra; por amor vuestro, amo al prójimo como a mí mismo y perdono las ofensas recibidas. Señor, que os ame cada vez más». Amar a Dios – explicó Juan Pablo I - es caminar, correr con el corazón hacia Él, aunque ello cueste sacrificio y nos aproxime a la cruz de Cristo. Amar con todo el corazón, significa seguir el mandato evangélico «Amarás al Señor Dios tuyo con todo el corazón, con toda el alma, con todas tus fuerzas». Al destacar que «¡Dios es dema-siado grande para darle sólo unas migajas de nuestro tiempo o corazón!», hizo hincapié asimismo en que «el amor a Dios es inseparable del amor al hermano, un amor que no debe ser sólo de palabra, sino de hechos; concretizado en la práctica de las obras de misericordia, que hay que completar con el amor y ayuda efecti-
va a los pueblos que sufren hambre y necesitan justicia, además de caridad. Debemos también perdonar las ofensas recibidas», pues «el Señor nos mandó reconciliarnos con el hermano, antes de ofrecer nuestra ofrenda ante el altar. Finalmente, amar cada vez más al Señor quiere decir que, como en todo lo demás, hemos de crecer en el amor a Dios, aumentando siempre nuestro amor hacia Él». Y cómo no recordar hoy el radio-mensaje Urbi et Orbi que Papa Luciani dirigió al mundo un día después de su elección. En el que manifestando su anhelo de entregarse «al servicio de la misión universal de la Iglesia, es decir al servicio de la humanidad, de la verdad, de la justicia, de la paz, de la concordia, de la colaboración entre las naciones y entre los pueblos», Juan Pablo I se dirigía a los «hombres, hermanos de todo el mundo». Subra-yando que «todos estamos compro-metidos en la obra de elevar al mundo hacia una justicia cada vez mayor, hacia la paz estable, hacia la coopera-ción sincera...».
Teniendo presente las tensiones que se viven en la nación libanesa se prosiguen los preparativos para la llegada del Papa, el próximo 14 de septiembre. Se espera mucho con esta visita, que se prolongará hasta el 16 de septiembre, en un pueblo que vive su propio testimonio de sangre, pero al mismo tiempo una minoría que vive en la confianza y esperanza de Jesucristo. El motivo es la firma y publicación de la Exhortación apostólica post-sinodal de la asamblea especial para Oriente Medio del Sínodo de los Obispos que tuvo lugar en el Vaticano en octubre de 2010. Los eventos que se han presentado últimamente no ensombrecen la visita del Santo Padre, antes, esta visita da confianza a la gran mayoría de la pobla-ción libanesa y a todos los cristianos de Oriente Medio. Con la presencia del Santo Padre se abre la posibilidad de impulsar el verdadero diálogo entre los musulmanes y el pueblo cristiano.
Hace 33 El 26 de agosto de 1978, tras el fallecimiento del Papa Pablo VI, el entonces Patriarca de Venecia, Card. Albino Luciani, era elegido Sucesor de Pedro. Lo fue durante 33 días, hasta el 28 de septiem-bre de ese mismo año en que falleció repentinamente. El día antes de su muerte, el 27 de septiembre, este Pontífice que recibió en seguida el apodo de ‘el Papa
de la sonrisa’ y que precedió al beato Juan Pablo II, había
dedicado su audiencia general a la virtud teologal de la caridad.
Recordó con dulzura, a este propó-sito, una oración que le
había enseñado su mamá y contó que
él la repetía con frecuen-
cia. «Dios
en Oriente Medio