Feliz de ser sacerdote

hojaparroquial30 de marzo de 2014Nº 2.713 SemaNario de la dióceSiS de Segorbe-caStellóN

2 // Hoja Parroquial

Agenda DiocesanaViernes 4.* X Jornada de los Abuelos en el Colegio Mater Dei.* 13h30 El Espejo de la Iglesia Diocesana en COPE.

Sábado 5.* Escuela de Familias en los salones de la Concate-

dral. (Del. de Familia y Vida)* 21h ITV Matrimonial en la Capilla del Carment (c/

Florida – Benicasim).

Domingo 6. V de Cuaresma.* 9h45 Iglesia Noticia en COPE.* Ultreya diocesana de Cursillos de Cristiandad (La

Consolación de Vila-real).* Procesión diocesana de Semana Santa en La Vilave-

lla.

“«¿Crees tú en el Hijo del hombre?”Primera Lectura1Sam 16,1b.6-7.10-13a. En aquellos días, el Señor dijo a Samuel: -«Llena la cuerna de aceite y vete, por encargo mío, a Jesé, el de Belén, porque entre sus hi-jos me he elegido un rey.» Cuando llegó, vio a Eliab y pensó: -«Seguro, el Señor tiene delante a su ungido.» Pero el Señor le dijo: -«No te fijes en las apariencias ni en su buena estatura. Lo recha-zo. Porque Dios no ve como los hombres, que ven la apa-riencia; el Señor ve el cora-zón.» Jesé hizo pasar a siete hijos suyos ante Samuel; y Samuel le dijo: -«Tampo-co a éstos los ha elegido el Señor.» Luego preguntó a Jesé: -«¿Se acabaron los mu-chachos?» Jesé respondió: -«Queda el pequeño, que precisamente está cuidan-do las ovejas.» Samuel dijo: -«Manda por él, que no nos sentaremos a la mesa mien-tras no llegue.» Jesé mandó a por él y lo hizo entrar: era de buen color, de hermosos ojos y buen tipo. Enton-ces el Señor dijo a Samuel: -«Anda, úngelo, porque es éste.» Samuel tomó la cuer-na de aceite y lo ungió en medio de sus hermanos. En aquel momento, invadió a David el espíritu del Señor, y estuvo con él en adelante. Palabra de Dios.

Salmo responsorialSal 22.

R/. El Señor es mi pastor, nada me falta. R/. El Señor es mi pastor, nada me falta: en verdes praderas me hace recostar, me conduce hacia fuentes tranquilas y repara mis fuerzas. R/. Me guía por el sendero justo, por el honor de su nombre. Aunque camine por caña-das oscuras, nada temo, porque tú vas conmigo: tu vara y tu cayado me so-siegan. R/. Preparas una mesa ante mi, enfrente de mis enemigos; me unges la cabeza con per-fume, y mi copa rebosa. R/. Tu bondad y tu miseri-cordia me acompañan todos los días de mi vida, y habitaré en la casa del Se-ñor por los años sin término. R.

Segunda LecturaEf 5,8-14. Hermanos: En otro tiempo erais tinieblas, ahora sois

luz en el Señor. Caminad como hijos de la luz -toda bondad, justicia y verdad son fruto de la luz-, buscan-do lo que agrada al Señor, sin tomar parte en las obras estériles de las tinieblas, sino más bien denunciad-las. Pues hasta da vergüen-za mencionar las cosas que ellos hacen a escondidas. Pero la luz, denunciándo-las, las pone al descubierto, y todo lo descubierto es luz. Por eso dice: -«Despierta, tú que duermes, levánta-te de entre los muertos, y Cristo será tu luz.» Palabra de Dios.

EvangelioJn 9,1-41. En aquel tiempo, al pasar Jesús vio a un hombre ciego de nacimiento. Y escupió en tierra, hizo barro con la sali-va, se lo untó en los ojos al ciego y le dijo: -«Ve a lavar-te a la piscina de Siloé (que significa Enviado).» Él fue, se lavó, y volvió con vista. Y los vecinos y los que antes solían verlo pedir limosna preguntaban: -«¿No es ése el que se sentaba a pedir?»

Unos decían: -«El mismo.» Otros decían: -«No es él, pero se le parece.» El res-pondía: -«Soy yo.» Llevaron ante los fariseos al que ha-bía sido ciego. Era sábado el día que Jesús hizo barro y le abrió los ojos. También los fariseos le preguntaban cómo había adquirido la vista. Él les contestó: -«Me puso barro en los ojos, me lavé, y veo.» Algunos de los fariseos comentaban: -«Este hombre no viene de Dios, porque no guarda el sábado.» Otros replicaban: -«¿Cómo puede un peca-dor hacer semejantes sig-nos?» Y estaban divididos. Y volvieron a preguntarle al ciego: -«Y tú, ¿qué dices del que te ha abierto los ojos?» Él contestó: -«Que es un profeta.» Le replicaron: -«Empecatado naciste tú de pies a cabeza, ¿y nos vas a dar lecciones a nosotros?» Y lo expulsaron. Oyó Jesús que lo habían expulsado, lo encontró y le dijo: -«¿Crees tú en el Hijo del hombre?» Él contestó: -«¿Y quién es, Señor, para que crea en él?» Jesús le dijo: -«Lo es-tás viendo: el que te está hablando, ése es.» Él dijo: -«Creo, Señor.» Y se postró ante él. Palabra del Señor.

Próxima semana: V de Cuaresma 1Sam 16,1b.6-7.10-13a / Sal 22 / Ef 5,8-14 / Jn 9,1-41

IV de Cuaresma (4ª Semana del salterio)

El Evangelio del Domingo

Sábado 5 de abrilDe 10h a 17h

Parroquia de San José Obrero(c/ Pintor Oliet, 48 Castellón)

Jornada de pastoral obrera

Sentido y valor del trabajo humano

Hoja Parroquial // 3

La vocación al sacerdocioQueridos diocesanos: En la reciente visita ad limi-na, el papa Francisco nos dijo que las vocaciones al sacerdocio son “un aspecto que un obispo debe poner en su corazón como ab-solutamente prioritario”. Y ello no sólo porque ne-cesitamos sacerdotes, sino sobre todo porque, como el papa emérito, Benedicto XVI nos dejó dicho, he-mos de ser “conscientes del gran don que los sacerdotes son para la Iglesia y para el mundo; a tra-vés de su mi-nisterio el Señor sigue sal-vando, se hace presente en nues¬tro mundo y santifi-ca a los hombres”.

En un mundo cerra-do a Dios y centrado en el bienestar material, en el disfrute inmediato y en el prestigio social, no es fácil hablar de la vocación al sa-cerdocio ni descubrir que el sacerdote es un don de Dios. Tampoco es fácil des-cubrirlo para los cristianos y las familias cristianas, si están tocados por esa men-talidad mundana y una cultura no vocacional. Las comunidades parroquiales,

aunque piden te-ner un buen sacer-dote, no siempre lo valoran como un regalo de Dios necesario para toda comunidad cristia-na: si así fuera les llevaría a promover en su seno las voca-ciones. Pese a ello, hemos de afirmar que la vocación sacerdotal y el sacerdote son un don de Dios.

La vocación y el minis-terio sacerdotal son, antes de nada, un gran regalo de Dios para el propio sacer-dote, que no lo es por mé-ritos propios sino por puro amor de Dios. La historia de toda vocación sacerdo-tal es un diálogo de amor: es la historia personal entre el amor de Dios que llama y la libertad del hombre que responde a Dios en el amor: el don precedente de Dios y la respuesta libre , responsable y generosa del hombre son las dos caras inseparables de toda voca-ción sacerdotal. El Evange-lio de Marcos presenta así la vocación de los Doce:

Jesús “subió a un monte, y llamando a los que él qui-so, vinieron a él” (3.13). Está por un lado la decisión ab-solutamente libre de Jesús y por otro, el ‘venir’ de los Doce, el ‘seguir’ a Jesús. La iniciativa libre y gratuita es

de Jesús: él es quien llama, fruto de su amor de predi-lección.

Como entonces ocurrió con los Doce, también su-cede ahora en el caso de la vocación sacerdotal: es Je-sús quien mira con cariño, elige y llama; él es quien consagra y confía su misma misión, comprometién-dose a es¬tar siempre con el elegido para que pueda cumplir la sublime mi-sión que Él le encarga. El propio seminarista y el sa-cerdote han de vivirlo con gratitud y alegría, y con generosidad y fidelidad crecientes. Por todo ello, el sacerdote está llamado a ser -ante todo y por entero- un hombre de Dios, apasiona-do por Jesús y por el Evan-

gelio. Al responder a la lla-mada de Dios, el sacerdote deja de pertenecerse a sí mismo para ser de Dios y, desde Dios, servidor de su Iglesia y de la humanidad entera.

Sí, el sacerdote es un gran regalo para la Iglesia y para el mundo. A través de los sacerdotes, Cristo si-gue presente hoy, sanando y salvando a los hombres. Los sacerdotes son envia-dos por el mismo Cristo para hacerle presente y para ofrecer a todos los hombres la salvación, la libertad, la vida y la felicidad verdade-ras. Sólo a la luz del miste-rio de Dios, de su amor y de su irrevocable designio de salvación para todos, es posible comprender ade-cuadamente la vocación sacerdotal y el sacerdocio católico en su verdad más profunda: ser don de Dios para la Iglesia y para la hu-manidad, prolongando en el tiempo el único Sacerdo-cio de Jesucristo.

Con mi afecto y bendi-ción,(*) ObispO de segOrbe-Castellón

pOr Juan Manuel gil

Consejos pequeños de gran valorSentir seguridad, tener un sentimiento de identidad y confianza basados en la fe en lo que uno es, en la necesidad de re-lacionarse interesante, amar, solidarizarse con el mundo que nos rodea.

Jamás basarse en el deseo de tener, poseer, dominar. De lo contrario te vol-verás esclavo de tus posesiones.

Hay que saber estar plenamente pre-sente ahí donde uno se encuentra.

Sentir la alegría que causa dar y com-partir, y no acumular y explotar.

Tratar de reducir en la mayor medida posible la codicia, el odio y los engaños.

Deprenderse del mirarse demasiado a sí mismo y aceptar las limitaciones inhe-rentes a la existencia humana.

Hacer del pleno desarrollo de sí mis-mo y del prójimo la meta suprema del

vivir.Saber que el mal y la destrucción son

consecuencias necesarias de haber des-cuidado el propio desarrollo.

Saber que muy pocos han alcanzado la perfección en todas la cualidades, reco-nociendo que esta ambición no es más que otra forma de codiciar y de tener.

No engañar, pero tampoco dejarse engañar por los otros. Se puede admitir ser llamado inocente, pero no ingenuo.

Este es el ideal: Esforcémonos todos en generar una fuerza de pensamiento que nos permita alcanzar el objetivo pro-puesto.

Vivir plenamente como se puede re-sulta tan satisfactorio que es difícil preo-cuparse por lo que uno logra o no.

Desecha toda literatura que polucio-

na los pensamientos de los jóvenes. Al contrario: inunda su cerebro con pensa-mientos e ideales nobles.

No hay delito mayor que el cometido por el intelectual malvado, que infunde ideas malignas en la mente de los jóvenes.

Todos los tiempos son propicios para orar y crecer en valores. Pero el tiempo de Cuaresma favorece la disposición de las personas que llegan a encontrar una mayor cercanía con el Señor y una mayor diligencia en practicar las virtudes. Por eso le llamamos tiempo de salud.

Hay que encontrar un tiempo como la Cuaresma, que aporte al hombre paz mental, que infunda en su corazón las virtudes divinas de compasión, de servi-cio a sus semejantes, de amor a Dios y un intenso deseo de realizarse.

MOns. CasiMirO lópez llOrente *

Tribuna

4 // Hoja Parroquial

Soy SacerdoteEste año, Vicente Agut, párroco de la Natividad de Almazora, llega a las bodas de oro sacerdota-les. Fue ordenado el 14 de agosto de 1964, una se-mana después de cumplir veinticuatro años. Asegu-ra que si volviera a nacer, cogería el mismo camino: “Estoy convencido que de ninguna otra manera sería más feliz de cómo lo he sido estos cincuenta años”. Sin embargo confi esa que le queda una espina: “De momento no he consegui-do enviar a nadie al semi-nario”. Aunque no es del todo exacto. En sus dife-rentes destinos pastorales, ha bautizado a varios niños que ya están ordenados. Uno de ellos es Domin-go Galindo, párroco de la Asunción de Onda, bau-

tizado en la Vall en 1976. Como Agut, no se ve sien-do otra cosa que sacerdote.

Durante su años de ser-vicio (ha estado en Nules, Vall de Uxó, Castellón y Basílica del Lledó, antes de su actual destino), Vi-cente Agut asegura que ha aprendido a ser más com-prensivo con las personas, incorporando a su manera de ser la bondad y la mise-ricordia de Dios: “De na-cimiento tengo un tempe-ramento muy fuerte, y con el tiempo ha ido maduran-do”. Es el efecto de la voca-ción en el desarrollo de su identidad como persona. Dice que todo le ha ayuda-do: “los sacramentos, pero también la amistad de la gente; ellos me han arri-mado a Dios porque al ver cómo respondían al Señor, también me empujaba a responder yo”.

Una vocación con prestigioNinguno se presenta para ser presbítero pensando en el reconocimiento, pero sí que es verdad que muchas veces su labor se gana la admiración de la gente. La mayoría de poblaciones de la Diócesis les ha dedicado calles, y muchas han reconocido a sus sacerdotes el título de hijo predilecto o adoptivo. De los primeros fue el Venerable Juan Bautista Bertrán, hijo de Atzeneta y cura de L’Alcora, en el siglo XVI. Y le siguieron muchos más. Algunos por su labor en la parroquia, como Mn. Pascual Tomás en Eslida, mn. Juan Puig i Puig en Vilafranca, o el Vicariet de Onda, mn. José Martí. Otros por su labor humanitaria, como Ricardo Miralles, promotor de la misión diocesana en Safané.

Hubo quien hizo una aportación signifi cativa a la vida de la población, promoviéndola a nivel cultural y económico, como Cardona Vives en Castellón, o Eugenio Messeguer en Bechí, que entre otras obras fi nanció la casa de espiritualidad, actual sede del Seminario Redemptoris Mater. Alguno hasta tiene un historial aventurero, como Eduardo Galindo Rodríguez, sacerdote de Alfondeguilla que fue capellán de navío de la armada.

En el siglo XX abundan los mártires de la persecución religiosa de los años 30, como D. Marcelino Blasco en Segorbe, o el beato José María Piquer Martí, en Onda. En algunos casos, era tal su prestigio que fueron protegidos por los mismos que en otras partes les perseguían, como con Manuel Belcaire, en Bechí. En esa misma población, se reconoció la labor de D. Herminio Pérez Güemez con una calle aún en vida (falleció en 2012). Y la estima llega hasta nuestros días con el nombramiento en los últimos años de hijo predilecto de Elías Sanz en Zucaina, y adoptivo para Guillermo Sanchiz en Vila-real.

Reportaje

G. F.

Miércoles 2 de abril19h30, Teatro del Raval

Castellón

Hoja Parroquial // 5

Soy SacerdoteDomingo Galindo

también une su identidad sacerdotal con el trato con la gente: “La santifi cación del sacerdote va unida ín-timamente al servicio de la comunidad. Santifi cación de uno y otro van juntas”. Ahí encuentra cada día la energía para comenzar la jornada: “La vocación hace que cada día te sien-tas entregado en la tarea de salir a cumplir una misión ante Dios y el pueblo. No te perteneces a ti mismo, sino que de alguna manera estás entregado al servicio de Dios y de los otros”.

El corazón en el cielo y en la tierra. Es una cons-tante en los sacerdotes. José Llopis, ordenado en 1967, cura de Tales e im-pulsor del Racó de Sant Francesc, explica que co-mienza la jornada con un largo tiempo de oración

para consagrar el resto del día a la atención a las personas. Esta cadencia ha conformado su vida de modo que no puede sepa-rarse de la llamada recibi-da: “Sin esta estructura vo-cacional confi gurada por Dios, los hermanos, los ne-cesitados y la lectura aten-ta del mundo de hoy, sería impensable mi vida. Ha cimentado y proyectado, en un ámbito de paz y ar-monía divinas, todo lo que ha sido mi vida y cada una de las circunstancias en las que me he encontrado”. Tres testimonios que, al concluir el mes vocacional de marzo, ilustran cómo la vocación al sacerdocio da respuesta a la búsqueda de felicidad y proyecto perso-nal de los que reciben la llamada de Dios y respon-den con generosidad.

La Adoración Nocturna llena el Seminario para pedir por las vocaciones

Este domingo concluye un mes dedicado de mane-ra particular a las vocaciones sacerdotales. Para dar el tono, marzo comenzó con una vigilia de adoración eucarística organizada por las secciones masculina y femenina de la Adoración Nocturna (ANE y ANFE) en el Seminario Mater Dei. La Vigilia comenzó a las diez de la noche con la procesión de banderas hasta la Iglesia del Seminario, y participaron adoradores y

adoradoras de todos los pueblos en los que este movi-miento está presente en la Diócesis.

Conchín Soler, presidenta de ANFE, explica que para la Adoración Nocturna “la vigilia por las vo-caciones es muy importante ya que nos hacen falta muchos y santos sacerdotes. Nuestra misión es pedir por ellos y para que vengan muchos más a los Semi-narios”. La vigilia terminó con un chocolate caliente, pero “el corazón ya estaba lleno del Amor de Dios”, explica Soler.

REDACCIÓN. caStellóN.

6 // Hoja Parroquial

El legado del escultor Amorós en VillafrancaComo preámbulo a la Se-mana Santa la “Associació Cultural Setmana Santa Vilafranca” ha organizado una exposición antológica del escultor villarealen-se Pascual Amorós. En la muestra, que se presenta en las Salas Góticas del Ayun-tamiento de Vilafranca has-ta el próximo 4 de mayo, se exhiben las esculturas que realizó para esta población, así como las fotografías de las obras que realizó el ar-tista para otras parroquias de la diócesis. Pascual Amorós fue posiblemente el último escultor - ima-ginero más fructífero de la provincia de Castellón. Después de realizar sus es-tudios en Valencia y de co-nocer los trabajos de imagi-nería de diversos maestros valencianos en cuyos ta-lleres hizo prácticas como aprendiz, abrió un taller en

Villarreal, su ciu-dad natal. En esta ciudad dedicó la mayor parte de su vida a la crea-ción de imágenes religiosas por en-cargo. El escultor Amorós murió en 1943.

Obras religiosas en muchas parroquias de la diócesis

Son obras del taller del escultor Amorós los pa-tronos de diver-sas poblaciones de la diócesis: El Cristo del Hospital, el san Pascual yacente del altar de la Purísima en la Arcipres-tal o Ntra. Sra. de Gracia, todas ellas en Vila-real, completada esta última por Pascual Fuster; Ntra. Sra. de la Misericordia en la Ba-

sílica del Salvador y Santa Bárbara en las Alquerías de Burriana; Ntra. Sra. de las Alquerías del Niño Per-dido; los santos Abdón y San Senén en Villavieja; la Mare de Déu de les Santes en Cabanes, retocada des-pués por Vicente Rodilla

Zanón; la Mare de Déu del “Adjutori” en Benlloch, completada por Pedro Gil, la Virgen del Lledó de la parroquia de la Sda. Fami-lia de Castellón o la Santa Elvira de la Basílica del Lle-dó entre otras muchas.

Del trabajo de este ar-tista es también una des-tacada muestra de escul-turas religiosas que posee la parroquia Santa María Magdalena de Vilafranca: el Cristo Yacente con su correspondiente urna – se-pulcro; el Cristo Crucifica-do que participa junto al anterior por las calles de Vi-lafranca en la procesión del Santo Entierro del Viernes Santo; la reconstrucción de la antigua imagen de la pa-trona la Mare de Déu del Losar y el Cristo Crucifica-do que preside el Altar Ma-yor del Templo Parroquial, encargada en 1935 al escul-tor por mossén Blas Carda Saporta.

La editorial Apostola-do Mariano Carmelita (AMACAR) ha editado un libro sobre la vida del beato carmelita Alberto Mª Mar-co Alemán, muy vinculado con Onda. Los autores son Rafael María López Melús y Juan Gil Aguilar, y pre-sentan su obra como “un breve y sencillo libro que recoge con amor y grati-tud la vida de un mártir carmelita que derramó su sangre durante la persecu-ción religiosa que sufrió nuestra amada España en el periodo 1936-1939. El Carmelo, en este hijo tiene mucho ejemplo dignos de ser conocidos e imitados por sus hermanos”.

Alberto Mª Marco na-

ció en Caudete en 1894. Ingresó en la orden car-melita en Olot y realizó su noviciado en Onda. Después de su profesión perpetua y ordenación sa-cerdotal, vuelve a la Plana en 1920 para participar en la fundación de las escue-las del Castillo de Onda,

donde también fue profe-sor. El beato Marco solo estuvo dos años, pero dejó una fuerte impronta en los alumnos, muchos de los cuales conservaron fotogra-fías de la clase con él. En el momento de su martirio, en 1936, era prior del Car-melo de Madrid y fue asesi-

nado junto con ocho com-pañeros. El 13 de octubre del 2013 fue beatificado en Tarragona.

+ Ediciones AMACAR, Apdo. de Correos 53 12200 ONDA. Telf. 636 055 440 amacaronda@hotmail.com

REDACCIÓN. VilaFraNca.

REDACCIÓN. oNda.

Vida del beato fundador de las Escuelas del Castillo de Onda

Cristo de la Agonía, 1935. Altar Mayor de la parroquia de Vilafranca

Vida Diocesana

Hoja Parroquial // 7

El sábado próximo, 5 de abril, mons. Casimiro Ló-pez Llorente presidirá en la parroquia de Santo Tomás de Villanueva la ceremonia de envío de la familia Ripo-llés-Sánchez a Kosovo. Se trata del octavo matrimo-nio de Segorbe-Castellón que ha decidido ponerse al servicio de la Iglesia uni-versal para participar en la fundación de comunidades cristianas en países de fuer-te descristianización. En su caso, se instalarán en una ciudad de mayoría musul-mana junto con un sacerdo-te, dos seminaristas y cuatro familias más para recuperar una parroquia cerrada desde hace ocho años.

Sergio Ripollés y Mª dolores Sanchez son miembros de una comu-nidad Neocatecumenal y

desde hace tiempo ya se planteaban responder a una llamada misionera en familia. La primera vez se ofrecieron hace quince años pero no ha sido hasta ahora que han podido rea-lizar su deseo. El detonante fue la Jornada Mundial de la Juventud de Madrid en 2011. Desde entonces han seguido un itinerario de discernimiento específico, y el 1 de febrero recibie-ron el envío de manos del Papa Francisco en Roma y

conocieron su destino.En ese momento, sus

tres hijos David, de 19, Be-lén, de 14 y Mónica, de 9 años, estaban en misa en Castellón. Un SMS y una mirada entre ellos fue su-ficiente para saber que no acabarían el curso en Es-paña: “Hay nervios pero lo vivo bien porque veo que el Señor está detrás de todo esto”, reconoce el mayor. La mediana explica que cuan-do lo ha dicho a sus amigas le responden que está loca,

aunque no duda en seguir a su familia. Mónica sien-te que echará en falta a sus amigas y abuelos, pero está convencida: “Cuando mis padres me lo explicaron, ya sabía que era voluntad del Señor”.

De momento tienen visado de turistas porque España no reconoce el esta-do de Kosovo. Durante tres meses tendrán que conse-guir renovar el permiso para permanecer en el país y bus-car trabajo. Hasta entonces Sergio Ripollés trabajará para la parroquia. Como fa-milia, su labor será mostrar cómo viven los católicos, comunidad que no supe-ra el 1% de la población: “Nuestra misión ahí es res-ponder al deseo del Obispo local de que la gente vea una familia cristiana: cómo reza-mos juntos, vamos a misa, nos perdonamos y oramos”.

• Domingo 6. Merienda del Hambre en Chóvar en los Salones de la Coo-perativa, a las 17:00 h

•Sábado 5. Cena del Hambre en Chilches lu-gar Multifuncional, a las 20:30 h.

•Miércoles 9. Cena del Hambre en Castellón, lugar Jardín del Casino antiguo, a las 20:00 h.

•Viernes 25. Cena del Hambre en la Parroquia de Ntra. Sra. del Carmen de Castellón, a las 20:15 h.

•Viernes 25. Cena del Hambre en Segorbe salón Multiusos, a las 21:30 h.

•Viernes 2. Cena del Hambre en Nules salón Multiusos a las 20:00 h.

•Viernes 9. Cena del Hambre en Betxi en los salones parroquiales de c/ San Antonio, a las 20:00 h.

Cenas del Hambre del mes de abril

REDACCIÓN. caStellóN.

El Obispo envía una familia de Castellón en misión a Kosovo

Vida Diocesana

P. Lucio del Burgo, Maestro de Novicios del Desierto de las Palmas

dep. legal: cS 97-1960Suplemento del b.o. del obispado

edita: Obispado de Segorbe-Castellón director: Juan Manuel Gil coordinador: Josep Miquel Francés redacción: Guillem Farré.Oficina de Prensa: teléfono 964 222 819 / Fax: 964 722 018 / mcssegorbecastellon@planalfa.es / hpsegorbecastellon@hotmail.com / www.obsegorbecastellon.es

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hojaparroquial

“Sin fascinación por la persona de Jesús, no hay vocación”

El P. Lucio del Burgo (Almodóvar del Campo, Ciudad Real, 1946) es desde 2011 el maestro de novicios de los Carmelitas descalzos, que congrega a los candidatos de España y Portugal en el Desierto de las Palmas para un año de profundización del ca-risma carmelitano y la es-piritualidad antes de hacer profesión. Durante veinte años estuvo en el convento de Miami, colaborando en la formación de seminaris-tas.

¿Hay diferencia entre una profesión y la vocación?Muy notable porque la vida religiosa, como la sacerdotal, no es solamente una profe-sión en el sentido material de la palabra, sino que hay una llamada de Dios que es quien ha tenido la iniciativa. Y claro, al haber llamada de Dios tiene que haber una respuesta del hombre que significa oración, entrega al Señor, descubrir un mundo nuevo, ser solidario... todos estos valores cristianos que lleva dentro de sí la voca-ción. Pero la gran distin-

ción es la persona de Jesús. Sin fascinación, seducción, atractivo de la persona de Jesús en el candidato, no te-nemos absolutamente nada. Es la persona de Jesús quien ha llamado y trasformado el corazón de la persona, le da nuevos horizontes.

¿Qué ayuda interiormente a dejarse transformar por la vocación?Lo primero es observar en el candidato y hacerle esta pre-gunta: Tu, ¿por qué quieres ser religioso o sacerdote? Y buscar una intención que sea sana: no porque quiere huir del mundo, sino que

sea una opción religiosa. No quiero decir que desde el principio sea así, pero tene-mos que caminar hacia ahí. Lo segundo es que tenga educabilidad, capacidad de ser educado. En tercer lugar, la apertura a los formadores, a la cultura que se le va dan-do, a ver el mundo con los ojos de Dios. En definitiva, se trata de dar puntos fijos y solidez a su vocación.

¿No se pierden vocaciones siendo tan exigente?Hay que verlas gradualmen-te. ¡Si analizamos las mo-tivaciones que tuvo Santa Teresa según las cuenta ella

en el libro de su vida, no está claro! Pero había esa ca-pacidad de educabilidad, y entonces descubres que hay madera. Hay que ir poco a poco.

¿Y externamente?Primero, que se deje acom-pañar. Segundo son funda-mentales los sacramentos y la oración: si no hay este contacto con la persona de Jesús, la vocación se va idea-lizando más y más, mientras que el encuentro con el Se-ñor la va serenando y for-taleciendo. También ayuda vivir en comunidad, porque los demás te animan.

¿Cómo se va transforman-do la persona por la acogi-da de la vocación?Tiene gusto por estar con el Señor, tiene necesidad de hacer oración, lee con agra-do la Palabra de Dios, ve su propia historia y la de los demás con distinta perspec-tiva, es decir, veo a los demás con ojos de misericordia y compasión, se hace más so-lidario, las causas mundiales le afectan: el hambre, la gue-rra... en todos estos aspectos creo que la persona va cam-biando considerablemente.

G. F. beNicaSSim.