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Entrenamiento de la “Acción Táctica” en el fútbol sala

Autor: Bruno Travassos• EntrenadordeFútbolSalaIINivel

• DepartamentodeCienciasdelDeporte,UniversidaddeBeiraInterior,Covilha

• Doctorado en la toma de decisiones en la Escuela de Fútbol Sala en la Facultad deMotricidadHumana,Lisboa

l Fútbol Sala se caracteriza por la imprevisibilidad de las relaciones de la cooperación y la oposición entre los jugadores, en un contexto determinado (por ejemplo, el juego oficial de una liga en particular) para alcanzar un objetivo específico (por ejemplo, marcar un gol).

Esta relación entre los jugadores y los equipos permite la aparición de constantes cambios en las condiciones de juego. Esto significa que los comportamientos colectivos e individuales no pueden ser

pre-programados a priori pero resultan de la constante exploración de posibilidades de

acción por los jugadores y por el equipo (Araújo, Davids, y Hristovski, 2006).

En esta perspectiva son conductas esenciales para el diálogo con el fin de desarrollar la dinámica entre los jugadores de un mismo equipo, bajo el marco de la oposición del adversario. Por lo tanto, se trata de un equilibrio fundamental entre el cumplimiento de los principios del

juego (Ofensivos y defensivos) que rigen el comportamiento colectivo

del equipo, y la capacidad individual para explorar las posibilidades de acción

(Garganta, 2009).

E



Para operacionalizar un entrenamiento que responda a estas necesidades es necesario desarrollar una “acción táctica “ individual contextualizada por las características individuales de los jugadores y por el modelo de juego de equipo. Por acción táctica entendemos la capacidad del jugador de explorar intencionalmente la situación de juego para indentificar “Ventanas de oportunidades” para la acción (por ejemplo espacio para pasar o disparar, espacio para esquivar al adversario, las posibilidades de terminar en la esquina).

Por lo tanto, se requiere no sólo a los jugadores la capacidad de actuar,

sino también la de percibir las variaciones en el contexto de juego. Los jugadores tienen que tener la capacidad de detectar y utilizar la información disponible en su contexto y adaptar sus acciones la información percibida (Araújo et al., 2006). Más de decorar y automatizar un conjunto de acciones, los jugadores deben desarrollar su capacidad de detectar “Ventanas de oportunidades” que especifiquen sus posibilidades de acción en todo momento. Esto implica que para que el entrenamiento soporte las necesidades del juego, la concepción de las tareas de entrenamiento sea representativa de las que los jugadores desempeñan en la competición. Una tarea representativa es una tarea que permite que el jugador perciba y actue como se pretende que lo haga en el juego (Araújo, Davids, y Passos, 2007). Para esto, es necesario que la información disponible sobre la tarea coincida con el juego, por lo que la acción del jugador sea en realidad acción táctica, acción que resuelva y que logre los objetivos del equipo.

Como desarrollar acciones de entrenamiento representativas?

De acuerdo con lo presentado, las tareas de entrenamiento deberán mejorar la relación entre la percepción y la acción de los jugadores. Esto significa más que entrenar situaciones donde se procuran mejorar aspectos técnicos, tácticos, físicos y psicológicos de forma aislada, a menudo sin ningún tipo de correspondencia con el juego (Mitchell y Oslin, 2007), los entrenadores deben desarrollar ejercicios basados en acontecimientos del juego. Uno de los procesos que podrían ser utilizados podrá ser la descomposición del juego en unidades funcionales (Por ejemplo, 1x1, 2x1, 2x2, 3x2 ...).

Para la manipulación de las situaciones de entrenamiento, el enfoque basado en las limitaciones (Davids, Araujo, y Shuttleworth, 2005) considera que mediante la manipulación de las limitaciones del individuo, de la tarea y del medio ambiente es posible organizar las sesiones de entrenamiento con el fin de mejorar la acción táctica individual y colectiva.

Las restricciones del individuo se refieren a la manipulación de las capacidades individuales (Por ejemplo, jugar con fatiga, bajo presión psicológica, jugar con un solo pie ...)

Tarea mediante la manipulación de normas y objetivos (el espacio y el tiempo disponibles para la acción, el número de jugadores involucrados, su disposición, tipo y número de balones, tipo de acciones permitidas y el objetivo) y del medio ambiente cambiando los aspectos externos juego en sí (Por ejemplo, tipo de suelo, público, luminosidad, ruido...).

Las limitaciones más fácilmente manipulables con el fin de dirigir la atención de los jugadores hacia los comportamientos deseados se relacionan con la tarea. Sin embargo, la manipulación de todos ellos podrá estar presente en la construcción de los ejercicios de entrenamiento en función de los objetivos.

A continuación se presentan algunos ejercicios donde a través de la manipulación de las

limitaciones de trabajo podremos mejorar la acción táctica de los jugadores de fútbol sala.

Estas tareas deben permitir el descubrimiento de “ventanas de oportunidad” que especifican soluciones diferentes del juego, y el éxito obtenido será clave para entender las oportunidades disponibles.

El entrenador debe tener como objetivo dirigir la atención de los jugadores a las posibilidades de juego y a la información que se especifica en esas “Ventanas de oportunidades”, aunque la decisión debe ser responsabilidad del jugador en todo momento. Este proceso promueve comportamientos más ajustados a las condiciones de juego, como variabilidad e imprevisibilidad de la conducta de los jugadores para lograr un determinado objetivo.

Ejemplos de tareas de entrenamiento:Ejercicio 1

Objetivo general: Identificación de “ventanas de oportunidades”, Precisión y velocidad en el pase;

Propósito de la Tarea: Pase escogiendo velocidad y la precisión;

Descripción de tareas: 12 jugadores en cuatro filas que forman un cuadrado de 5x5m. 2 balones circulan entre los jugadores, no pudiendo recibir ninguno de ellos dos balones a la vez.

• 1 ª ronda - Los jugadores pueden jugar hacia delante y en diagonal, pasando a la fila de delante;

• Etapa 2 - Los jugadores pueden jugar hacia delante, de lado o en diagonal, pasando a la fila de delante;

• Etapa 3 - Los jugadores pueden jugar hacia delante, de lado o en diagonal, de pasando a cualquier cola. Todas las filas tienen que tener siempre tres elementos;

• Fase 4 - Igual que el anterior, pero colocar un defensa adversario



Comportamientos esperados: Identificación de “ventanas de oportunidades” en el posicionamiento de los jugadores sin el balón; Ajuste constante de las acciones a realizar; Realizar el pase con precisión al jugador sin balón, con el aumento de la variedad de posibilidades de pase se espera que jugadores aumenten su atención y búsqueda de las diferentes posibilidades.

Normas complementarias: limitar el número de toques; poner los balones de diferentes pesos o diámetros, aumentar o disminuir el espacio en función de que el entrenador quiera más o menos tiempo para la acción (Mayor espacio - más tiempo, menos precisión; menos espacio – menos tiempo, más precisión).

Ejercicio 2Objetivo general: Lectura de las posibles acciones de los compañeros y de los adversarios, la coordinación entre compañeros; Identificación de “ventanas de oportunidades” para pasar, pase como medio de comunicación, dinámica de grupo;

Objetivo Tarea: Circulación del balón en espacios reducidos (10m x10m);

Descripción de tareas: 5 jugadores con el balón; 3 jugadores sin el balón, un jugador defensivo

Los jugadores con el balón deben mover el balón con los jugadores sin balón, de manera que el defensa no pueda tocar a ningún jugador sin balón. Si el defensa toca a un jugador sin balón, éste pasa a ser defensa. El jugador que recibe el balón no podrá devolvérselo a aquel que hizo el pase. El defensa puede interceptar los pases.

Comportamientos esperados: Constante lectura de la posición de los jugadores sin el balón; Ayuda constante entre los compañeros con balón y sin balón; Identificación de posibilidades de pase, teniendo en cuenta al compañero, y también a la defensa y a sus posibilidades de acción; Realizar el pase con precisión al jugador sin el balón, ya sea parado o en desplazamiento.

Normas complementarias: El jugador que haga un pase hacia fuera pasa a defender; limitar el número de toques; no se les permite hablar; Aumentar el número de jugadores; Cambiar el espacio de juego.



Ejercicio 3

Objetivo general: Identificación de las “ventanas de oportunidad para el ataque y la defensa; Coordinación entre los compañeros; transiciones en superioridad numérica; equilibrio ofensivo

Objetivo de la tarea: Circular el balón en un espacio reducido y salida en transición en superioridad numérica;

Descripción de tareas: En un espacio de 5x20 en el centro del campo, juego de 3x3. Cada jugador de un equipo tiene un peto de color diferente (rojo, azul, amarillo). Cada jugador del equipo contrario tiene un peto con los mismos colores. Después de realizar cinco pases consecutivos, dos jugadores del equipo en posesión del balón pueden salir rápido en transición ofensiva. Sólo puede defender uno

de los jugadores del equipo que defiende con el mismo color de peto de uno de los jugadores atacantes (2x1). Si el defensa gana la posesión del balón podrá iniciar de inmediato la posesión del balón por parte de su equipo.

Comportamientos esperados: lectura constante y ajuste en el posicionamiento defensivo, realización constante de coberturas ofensivas y defensivas, constantes desmarques sin balón, control del balón bajo presión, precisión en el pase, objetividad de las acciones después de cinco pases.

Normas complementarias: Limitar el número de toques de los atacantes, condicionar la defensa de zona o individual, limitar el tiempo de posesión del balón de conformidad con el régimen de energía preferida.

La tareas presentadas obligan a una constante identificación de posibilidades de acción, de ajuste de los comportamientos de los compañeros y los adversarios, así como el logro de la salida motriz adaptada a la situación. Proporcionan a los jugadores información contextual sobre los movimientos y las posiciones de los compañeros, así como de los defensas para interceptar el pase. Permite que la persona que recibe el pase dirija su atención hacia la defensa y el espacio para recibir el balón/ apoyo del compañero.

En resumen, el entrenamiento de la acción táctica debe dirigir la atención de los jugadores, hacia las “Ventanas de oportunidades” que van surgiendo, dadas las características de los propios jugadores. La relación espacio-temporal entre compañeros y adversarios, es un factor clave en esta operación.

Estos ejercicios podrán llevarse a cabo en diferentes partes de la unidad de entrenamiento, teniendo en cuenta otros aspectos que se prentenden considerar. Por ejemplo, si nos encontramos con que se están produciendo muchos pases equivocados al final del juego, entonces nuestra pregunta puede no estar directamente en los problemas que evidenciamos, sino en la fatiga que altera la capacidad de respuesta del individuo. De este modo, cada uno de los ejercicios deberá ser realizado en un estado de fatiga, por ejemplo, en la parte final del entrenamiento, llevando a nuevas adaptaciones de los jugadores. Esta intervención tendrá repercusiones en factores como la concentración, atención, o la predisposición para la acción. Además, no hay un tiempo determinado para hacer ejercicio y descansar porque esta manipulación dependerá de la capacidad energética que el entrenador desea mejorar. Con la integración de la exigencia fisiológica estos ejercicios tendrán grande transferencia para el juego, ya que pueden trabajar de manera conjunta los diferentes factores que afectan al comportamiento individual y colectivo.

ConclusionesEn conclusión, pretendemos resaltar que el desarrollo de la acción táctica deberá tener como objetivo final mejorar el potencial individual de las características del juego y el modelo de juego a implementar. Esta construcción debe tener en cuenta que una persona ante una situación dada descubre o redescubre siempre soluciones únicas de acuerdo con las relaciones establecidas y el estado de juego. El mejor jugador será aquel que sea capaz de ver y actuar sobre lo que otros no ven y explorar constantemente nuevas “Ventanas de oportunidades”.

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Araujo, D., David, K., y Passos, p. (2007). La validez ecológica, diseño representativo, y la correspondencia entre tareas experimentales y el establecimiento de restricciones de comportamiento: Opina sobre Rogers, Kadar, y Costall (2005). Psicología Ecológica, 19(1), 69-78.

Davids, K., Araujo, D., y Shuttleworth, R. (2005). Aplicaciones de la teoría de sistemas dinámicos al fútbol. En T. Reilly, J. Cabri + D. Araujo (Eds.), V Ciencia y Fútbol: Las Actas del Congreso Mundial de la Quinta de Ciencias del Deporte y Fútbol (Pp. 537-550): Routledge.

Garganta, J. (2009). Análisis de tendencias de rendimiento táctico en los deportes de equipo: Cerrando la brecha entre la investigación, la formación y la competencia. Puerto Apocalipsis. Cien. Gastos, 9(1), 81-89.

Mitchell, S., y Oslin, J. (2007). Ecológica análisis de tareas en la enseñanza de juegos: juegos tácticos modelo. En W. Davis & G. Broadhead (Eds.), Análisis Ecológico de Trabajo y el Movimiento.Champaign: la cinética Humanos.

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