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MEDICiÓN DE LAS PERSONAS:

VARIABLES, MUESTRAS Y

CRITICA CUALITATIVA

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Este capitulo es una inlfOducción a¡lenguaje y los concep tos de la medición de las ciencias sociales. las variables son sucesos identifkados que cambian de valor al medirlos.

Muchos conceptos explicativos en la p5ícol091a no son observables de manera dire<la, sino que se tratan como constructos hipot~ti(os al igual que en olras ciencias. Según ~ paradigma de invl'Slig<Ki6n tradidCHlal (el "modelo dentifKo1, las Yitriables que deben mdirs! nectsitan defi nidones operacio· nales predsu (los pasos que se dan para medir el fenómeno), a fin de que 105 investigadores co­muniquen eficazmente 5U5 hallazgos. los conceptos de confiabilidad de las mediciones (consistencia) y validez (si el instrumento mide lo que prelende medir) se presentan brevemente. En la segunda parte de este capItulo, se considera la forma tn que se elige a las personas para su estu­dio en la imestigadón psicológica. Los asptCtos que surgen son los sM]uientes. Las muestras deben ser repr~Hentatins dt aquellos a quienes pueden genHaliurse los r~ sultados.

VARIABLES

Una variable es todo aquello que varía. ~ que estoy presentando una definición bastante circular, pero es un comienzo. Considere algunas cosas que varían:

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La sel&d6n con igualdad de probabilidades pro­polCKlna muestras representativas si éstas son lo suficientemente grandes. Las diversas técnicas de selección no aleatoria (cuotas, muestreo de bola de nieve, ca· sos crlticos, 9'upoS focales, paneles) bus­can brindar pequeñas muestras represen­tatins, o al menos útiles. Las muestras de oportunidad r autoselectins pueden es­tar sesgadas. El tamaño de las muestras para los experimen-105 es un tema muy polfmico; las grandes no siempre son las mejores. En el trabajo experimental estricto debe mante­nem al mlnimo la 'arianza en el desempeño de 105 participantes. La dimensión cualitativa-cuan­titati'a se presenta (amo una división funda­mental dentro de la teoría de 105 métodos en la investigación psicológica contemporánea, (on una crítica general al positivismo. Se aludirá a esta dimensión en todo el texto cuando la inves­tigación yarie en la medida en que empln as­pe<tos de cada modelo. Algunos investigadOfes consideun que ambos métodos son comple­mentarios y no antagónicos.

1) La estatura (varia conforme uno cre.:e; difiere de un individuo a otro).

2) El tiempo (al responder con ·sí" o "no' a las pre­guntas; al resolver una serie de anagramas).

3) El partido político por el que votan las personas. 4) Los 5e\1timient05 que uno siente hada la pareja o

los padres. S) La extTa,'ersión, 6) La actitud hacia los v~ndalos. 7) L. ansiedad

Observe que todo esto ""ria:

• En uno mismo de un momento. otro. • Entre diferentes individuos en la sociedad,

La esenda de eslUdiar cualquier cosa (a,'cs, geologia, emociones) es la observación de los cambios en las variable. Si nada cambiar.l, no habria nada que oh­se.-var, El fundamento de la ciencia conSiSte en rela­cionar los cambios observados en de terminadas variables con los que ocurren en Otrlls.

MEDICiÓN DE VARIABLES

Una variable puede adoptar varios v.lol'I:$, ta! vez muchos ck: ellos en cierto r.lngo. El ""lor suele ser numblco, aunque no neceariamente, En el ejemplo 3 de la lista anterior, los diferentes valores son nOm­bres; ese tipo de variables se conoce corno variahles categóricu, porque cada valor de eUa es una catego­ria dif~iada y rualitatÍ\ .. mente separada, Si bien el posible decir por q~ partido , 'ota una persona, esto no m ide su acti tud politica en una escala; de igllal modo, se puede preguntar a lo:; individuos si srh solteros o casados, si cohabitan o est:l n divorcia­cbs o separados, pero no es posible decir "qué tan casados" están, indidndolo con un núm('ro en una

'deala. Las , .. riables como la estatUr.l, el tiempo y la cantidad ck: hermanos que uited tiene se conocen como vari.bles medidu, pues uno se v.le de un número para indicar en qu~ parte de una escala se encuentra la persona en esa variable, Una de las prin­cipales ta~as.1 trllUr de e""luar las variables p$ico­lógkas, • menudo comilit<:' en pas:lr de un. variable calegórica (p. ej_, me gUSta/me: disgusu, o tranquil'" ansioso) a una variable medid. (grado de gusto; cuin ansioso es)( v~ase la p. 169).

En el caso del ejemplo 4, aún no se decide cómo evaluar los ·sentimienIOS· , Algunas de las Vllriables son fáciles de medir y uno es13 familiarizado con el tipo ck: instrumento de medición necesario. La esta­tUr.l es una de ésus y el tiem po Olra, aunque el equi­po nt'«Sario para medir 100 "tiempos de reacción· (como en el ejemplo Z) puede ser muy complejo, debido a los inte.valoo lan breves que se dan en este ,~

Algunas \ .. riables son familiares en t&minos con­ceptuales, pero medirla~ en forma num~rica parece algo muy dificil, extraño o imposible de hacer, como en el caso de la actitud, la ansiedad o los sentimien·

«(..o..ptrao 2)

los. Sin embargo, aunque a las personas suele agrao darlcs pensar que no hacen --O siquiera pueden ha­cer- mediciones p$icológicas de la genle, hay Ii menos cierta medición burda implicita en afirmacio­nes como · Se opone fuertemente al consumo de ti­garrillos" o "No parece particularmente renuenle a la idea de vivir en Manchester·. Si se opone ·fuertemen­te", entorlCcs es de suponer que se ubique un púO" mis arriha que alguien que se opone·~o un poco.

En psicología , si se tr.lbaja con variables como 11 actitud y la ansiedad, es necesario estar en posibili­dades de espe<.:ificarlas con precisión, en pa rte poi'

que se desea ser e"acto en la medición de su cambleo, yen parte porque es imponanle comunicar a los de­mis los hallazgos. Si se aspir.l a que eslOS trabajos _ tomen con seriedad, debe existir la posibilidad de qur loo demás los repliquen cOn ayuda de los mismor procedimientos de medición que uno ulHizo y qur obtengan los mismos resullaclos.

La siguiente sección es una introducción al de­bate que exÍ5te entre 10$ psicólogos sob~ la exacu­lud con que es posible medir, 0 . 1 menos evaluar di! algún modo, variables p$kológicas como la "actit"" y la "ansit>clad". Quizá lo primero seria prcguntarw simplemente ¿que son estas variables?

DEFINICIÓN DE lAS VARIABLES PSICOLÓGICAS

En Pi j",,,,IugBf, int&nte Bscribir SU propia deMici6n de:

al intelig&ncia

b) ansi&dad

el slJI)e'sto6n

Tal vez esto haya sido dilJdI. Ahora, dé aIgoJnQII ejemplos de pIIl"$OI'\IUI que manifiestan estas caracterist\cas..

Probablemente las definiciones resul len muy difio­les, sobre todo la primera. ¿Por qué se presenta esu dificullad para definir t&minos que se emplean tOr dos los dias y que se entienden bien? El lector debe haber u$ldoestos l&minos muchas \''''0:'$ al comum­carse con los demás, diciendo, por ejemplo:

• "Pienso que Mary es muy inteligente· • "David se pone anlioso siempre que se le ICI!:P­

" un perro" • "¿Ahora la gente es menos sU",,"!idos. qU<!

.ntel?"

CONSTRUCfOS PSICOLÓGICOS

Sin embargo, mnfio en que al lector le rt'Sulte rebo­vamenle f'¡ci! dar ejemplos de personas in teligen

ansiosas o supersticiosas. En el capitulo 1, se comen­tÓ que la información sobre las personas debe prove­nir, de .1g(1n modo, de lo que dicen o hacen. Cuando uno es joven e!i un poco psi<:ólogo. Uno se forma un eonapto de "inteli~a" o "ansiedad" apTendiendo cuile¡ son sus signos o manife!itaciones (p. ej., en el caS(l de b ansiedad, morderse los labios, tronarse los dedos, hablar con voz tr;'>mula).

Observe que se aprende que ciertas cosas se ha­cen "inteligentemente": sumar en forma correcta, hacerlo con npidez, terminar un romp«abeu.s. A quienes hacen e¡to una y otra '<use les llama "inteli­gen tes" (el adverbio se ha vuelto adjetivo); a partir de ahi sólo hay un paso pan elaborar aflrmaciones como "tkne mucha inteligencia", donde se halla un sustantivo en vez de un adjetivo. Es fácil pensar en la inteligencia en términos de una cual idad material, o que existe en forma independiente, pues se le em­plea como sustantivo.

El filósofo griego Platón se topó con es~ tipo de problemas a! plantearse preguntaS como" ¿qut es la justicia?". El problema se lb en parte porqut', en es­pañol al menos, tOS posible hacer la pregunta " ¿qué es X?"; en tan to que seria mejor preguntar" ¡qut es ser X?" o incluso" ¿qué es Ktuar en forma parecida

inteJ¡-

espaiiol b. que engaña a

~~~~~~~::'"~'~''"~:'~~ . I "'"" m ,;;, "I'SUhlI pensando". Los dos primeros enunciados su­ponen un lugar, un depósito, una COSI ; el último es como la fnse "estaba durmiendo". Pensar es algo que UIIO hace: el hecho de que, en apañol, uno pueda hacerlo "en la mente", no significa que haya C$.:I CQS3

extrll que hace el propio pensamiento en lugar de que UIIO 10 haga.

Algunos psicólogos (sobre todo el conduct ista Skinner, quien adoptó una postun empirista el<tre­mal afirmarian que los sucesos oblóCTVables (como morderse los labios) y, en el caso de la ansiedad, los sucesos internos direc1:amente mensurables (el au­mento en el ritmO C.roiKO O la se.:reción de adrena­lina), guardan todo. relación con la ansiedad, de hecho, ~ta el sencillamenle lodos eslOS SUCI:$OS y nada mu. Dirian que no es necesario suponer con­ceptos extra además de e!itas cosas observables y medibles. Suponer la existencia de estructuras o pro­cesos in ternos, como "act itud " o "pulsión", se con­sidera algo "mentalista", poco objetivo y poco científico. Este punto de vista, por SUpUC:'>lo, hace que sea relativamente fácil medir la "ansiedad" -sencillamente uno cuenta la cantidad de \'ecC:'> que alguien se muerde los labios y mide su rilmo cardiaco.

___ ..IlM~ \AS P9SONAS 21

Otros psicólogos sostienen que hay mas; por ejemplo, que la acti tud de una persona es más que la suma de afirmaciones sobre, y acciones hacia , el oh­jeto de la actitud. Aflrmarían que el concepto es útil en el desarrollo de la l«)ria, aun cuando no puedan captarla y medirla con exactitud en los detalles. Se comportan, de hecho, como los cientificos"duros" en la flsica. Ningún fisko ha visto nunca di rectamente un átomo o un quark, pues fisicamente es imposible. (Tal \"eZ sea lógicamente imposible "ver" siquiera la inteli~a , pero eso es otro asunto. ) Lo que los fisi­cos hacen es ¡ .. poner que existen :lIamos y quarks, y luego calcular cuántas de las evidencias f'l$kas se ex­plican por medio de ellos. Así, los quarks son CONS­TRUerOS HIPOTÉTICOS. Sobrevivirán como par­te de una teQria general siempre que la cantidad de CUestiOlles que expliquen sea mayor que la que no logran explicar O que los contrlldke.

En forma tentativa, los psicólogos tratan ronce.,­tos como la inteligenm, la ansiedad o la actitud tam­bien romo ronstructos hipo~cos. Se . upone que existen como factores que clan cuenta de fenómenos observables. Si, o:kspués de investigaciones en las que se intenta sustentar y refuta r la existencia de los COIIS­tructos, estas explicaciones siguen siendo factibles, entonces los constructos permanecen como entidades teóricas. Un estado de ansiedad se infiere a! observar que la persoru suda, tartamudea y tiembla, pero no se percibe la "ansiedad" como tal, de modo que ésta es un constructo hipotético - una alusión a un estado interno que se supone que desempeña su función en­tre todos los efectos en el comportamiento humano.

ORGANIZACiÓN DE LOS CONSTRUcrOS

Un constructo psicológico puede relacionarse con 0\n)5 en un marco explicalh'o a panir del Ola! >On

posibles o susceptibles de comprobación otns pre­dicciones. Por ejemplo, quizá se afirme que resulta probable que quienes tienen una baja autoestima sean muy hostiles hacia los miembros de los grupos étnicos minoritarios. Aunque no es posible observar directa­mente la aUlocstima, si es factible recurrir a una es­cala psicomttrica (vtue el capitulo 7) para medirla. Otra opción es suponer a partir de hallazgos de in­ve!itigaciones antmores que una educación autorita_ ria estricta suele relacionarse con baja aUloestima. La "educación autoritaria" se evalúa con relativa facili­dad y abiertamen te median te la observación del esti­lo de los padres y por medio de entrevistas. Luego habria que buscar una relación: ¿acaso quienes han experimentado una educación autoritaria :;uelen IYU­

lIifestar un componamiento discriminatorio hacia los miembros de los grupos minoritarios! En la figura 2- 1, se ilustrll esta posible relación entre con5tructos hi­pottticos y compOrtamientos observables.

C",,_e~

== :3l Edutoc;60 """"'k>''', MIr'o::Io _________________ ----. bajo """"'>Ii ....

1 Lo. poicólogo. ~"'"" • in_ demo.Iro< """ r.Iac>6n ..,~ • • "", Oo. _,~:k-j';' _~'>e

)-'1 .... ,iobIe, , ~"NobIft Y ....,.not e oi9o .... mon>u,gb!e.

j co:trud negat;Wl hoda Compc<k>mienlo di""i",inolOo'io .. ------------ -- --- l1"P<""""" w .... ib ... hcx:io le» ",ietnbto< do le» 9"'P<»

Figura 2-1. Mo= *"plicotivo del vír.culo hípolé~co entre edv<odÓ/1 _icta y C<>mpo<tamienlO di ""im inotorio,

.......... inofi.,.""

Mu..Oo ..... laI/ou<e>o> privo<lo> ---<><> di_ -"-....

DEFINICIONES OPERACIONALES DE LOS CONSTRUcrOS PSICOLÓGICOS

Cuando los psicólogos utilizan constructos hipotéti­cos en sus trabajos de investigación y planteamientos teóricos, obviamente deben explicar muy bien el tra­tamiento que les darán como variables. Sus defini­dones deben ser precisas, Incluso en el caso de las variables que se miden con mayor facilidad, como la capacidad de la memoria de corto plazo, las defini­cionesdebcn ser daras. Una dificultad particular para los psicólogos es que muchos ténninos que tal vez deseen investigar ya existen en el lenguaje cotidiano, C<ln amplias variaciones en su posible significado.

Comente con sus colegas o piense en los térrrunos que se muestran a con~nuaci6n. ¿Cómo podrra medirse o eva luarse cualqUH3la de estos térmiroos?

Identidad Atención Reforzam;ento Egocéntlico Actitud

Neurótico tnstinto Confonnidad Inconsciente Conciencia

En busca de la objetividad, los cientificos que realizan investigaciones tratan hacer que sus varia­bles sean "operacionales-, Una DEFlNICION OPE­RACIONAL de la variable X da el conjunto de actividades necesari as para medir X. Es como un

conjunto de instrucriones Por ejemplo, en fiska, la presión se define precisamente como peso o masa por unidad de área; para medirla es indispensable ave­riguar el peso que se imprime en un área y dividirlo entre ésta.

Incluso al medir la estatura de una persona, si uno quiere coincidir con las mediciones de otros, deberá especi ficar condiciones como el punto exac­to que se toma como la parte superior de la cabeza y cómo debe pararse la persona; así, una definición de estatura puede ser ' distancia desde el piso hasta la coronilla con los pies descalzos y cOn la coronilla di­rectamente por encima de la columna". Sin embargo, en general, la estatura y el tiempo no plantean un problema profundo debido a que las unidades de medición ya estan definidaJS dara y universalmente.

En determinada investigación sobre memoria, quizá se defina a la 'capacidad de memoria a corto plazo" como la "lista más larga de dígitos que el parti­cipante recuerda perfectamente en más de 80% de los ensayos ' , Aqui, en cada intentO el participante debe intentar re«>rdar la serie de digitos presentados en el orden en que se dieron; se implementarán va­rios ensayos C<ln series de 3 a, por ejemplo, 12 digitos de extensión. Al final de esto, es relativamente senci­llo calcular la medición de la capacidad de memoria a corto plazo, en función de la definición operacional.

Si un investigador ha medido el C<lmportamien­to de 'control" de las madres con sus hijos, tendria que ofrecer el esquema de codificación (véase el capitulo 5) que se da a los asistentes para que hagan

sus registros durante la observación . Ello incluirla ca\~8orías como "restricción mica", "advertencia ,,~ bal", "exigencia verbal", etc., y dar ejemplos detalla­dos a los observadores durante el entrenamiento.

El conocido ejemplo de definición operacional en in"~gación psicológica es la definición de inlcU­~ia como "lo que ~ mide con la prueba de inte­ligencia (determinada) que se utiliza"; debido a las difet"tn(:ias q..., hay en~ esus pru~as, obviamente n() existe en psicologia d CQI'lS1mSO universal del que g<Jzan 101; fl$icO$. l\xlria .rgwnenta~ que si bien 1<)$ ftskos tienen mu<:has formas de medir la pre$Íón, en realidad saben lo que ésta el: por otra parte, ¿será que IQ$ psicólogos tienen varias formas de medir la in­teligencia? De hecho, simplemente no están en b misnu posición. Los Ssiros obtilffiell casi exactamente k:I5 mi$mQS ~tados con sus diversas mediciones y tienen un objetivo rstindar que han acordado y al que p~ referi~ En cambio, no hay un <'Stánclar que se haya acordado en el caso de la inteligenda, sino vmos indicadora que compiten unos con otros. Los psicólogos aún recurren I l.s pruebas para tratar de establecer un acuerdo sobre l. naturaleza de la in teligencia misma. (V(:ase: la sección sobre antli.l:is f.ctorial en el capitulo 7.)

Una del1.nición openadonal proporciona un m(:. todo mis O menos válido ¡wa mMír cierta parte de un consuucto hipotttiCo; pocas veces cub..., la totali­dad de lo q~ se entiende normalmen te por ex oons­In.tcto. Resulb dil'lci! imaginar una definición opeo nocional que pueda expresar el significado rico y di­verso de la inteligencia humana. Sin embargo, en el caso de cualquier investigaciÓfl, se debe plantear enc­umente 10 que se oonsidern como indicador del cons­truClo en el que se está interesado. A manera de ~em­plo, considere el proyecto re.liudo por algunos es­tudíantes que colocaron una escalera contra una pa­red y ob$ervaron a los hombres y mujeres q~ cami· naban debajo de ella o que evitalnn hacerlo. En esta investigación se planteó una definición vp<:iacional (limitada) del "comportamimto supersticioso' como evitar pasar po!" delnjo de una escalera.

Imagine que está a punto pon'" a prueba las hipótesis que se plantean a continuación. En cada caso. es impfe&. c:tndibIe ofrecer delinieior>ElS operacionales de las varia· bles asoeilldas. Si sirve de algo. pregUntese '¿qué COI)­tar' como (agresividad) en eslfl estudio? ¿eólho se madi­,. .actamente1". Pierse con IOdo cuidado Y luego plan-1M el procediidsnto exaeIO que utilizarla para rem~zar la rrlildiQOO de las varia""", .

a) Los nIIIos a los que se castiga tlsleamenie son más agresivos.

b) El dettrioro de la memoria puede ser resultado del estrés en ellrabajo.

el Los padres que ~n mucha estimutaei6n vi­auaI Y auditiva Iomerllan el dasarrolo del lenguaje en .. _-

d) Es más probable que las personas ao=ettan a la lIOIi­álud de alguien en Cllilen confian.

a) Es más probable que a quienes se les dijo que un recién nacido es varón lo deSCfiban en tunción del astereolipo poputar que tien&n de ésle. que a quie­nes se les dijo que es niI\a.

He aquí algunas ideas.

l. Castigo Rslco: Cantidad de veces que los pad~ infonnan que les pegan a sus hijos a la semana; aplicación de un cuestionario a 105 pad~ sobre actitudes hacia el castigo fisico. Agresividad: C an­tidad de vKesen que un niño inicia un comporta­miento de juego brusco observado en el patio de la escuela; cantidad de solicitudes de jugucte'5 vio­lmtos ~ las carus de Navidad.

2. Estri;s: Las ocupaciones que se definen como mis estrl!$.lJltl:$, que ocasionan mas mfenneohdl:$, ata· ques cardiacos, elc. Memoria: Q uiul se: opte por definirla como se hizo en el caso de la capacidad de la m emoria. COMO plazo, lineas atrás, o los par· ticipante¡; podrian llevar un diario de los indd~· tes susceptible'5 de olvidarse.

J . (Etapa de) Deunollo del lenguaje: DunlCión de las verbaliuciones de los niños, dimemión del va­eabulario, etC EJtimullción: Cantidad de VKes en que los padres inician el juego sensorial, ~U"e otras cosas, durante la observación en casa.

~. Aceptación: Si la¡M'rsona meta accede a la solici· tud de cambio en la calle por paMe de los investi­gadores. Confilnza: Tal vez S(' le ddlna en i"'nni· nos de la vestimenta, la función y el estatus aso­ciado; en una condición, el investigador se viste elegantemmte con un maletin de mMico; ~ la otra, con ropa desaliñada. Otra posibilidad es que se pida a los participante'5 que evalúm la honra­dez en una escala despui;s de que se: h. hecho la solicitud.

S. RespuelU ertetf:Otipl<h: Cantidad de vece'5 que el participallle,.l describir al beb<':, emplea t""mi­IIOS que provienen de una liSta e'5pe<:iflca¡ en la cual se han anotado descripciones tomadas las res­puestas ofrecidas por grupo de personas del pú­blico acerca de qu'" caractffisticas infantiles eran típicamente masculinas y femeninas.

CONFIABILlDAD y VALIDEZ

Cuando las mediciones tienen CONFlABIUDAD y VALIDEZ, los demis investigado~ las t!"llur'n con credibilidad; sin evaluaciones confiables r. v'lidas, no puede ~aliurse el objetivo normal de • investiga­ción. Si las mediciones no son con l1.ables O vilidas, los investigadores descubririn que ouos hallazg<.>$ entran en conflicto con los suyos. El problema es mis

- G agudo pan 105 psicólogos. ya que hay menos~­so entTe ellos que ffltff otroS científicos sobre la medición de (OI\StruCt05, () incluso sobTe cu.tles de tslO$ $01\ importantes () significativos para la male­ria , Un buen ejtmplo de los peligros implícitos rea­les cuando los iO\<estigadores emplean conceplosque no se han acordado en fonna objetiva oon Otr05 exa­minadores es el de la llamada "esquizofrenia lenta", una afección observada solamente por los "mMicos· de l. ex Unión Soviética. Los únicos pacientes que manifestaban los síntomas enID disidentes contrarios al sistema político existente; a<km:ú, 10$ unicos psi­quialr.l5 que ob$ervab.an estOS síntomas ~n los que habían rteíbido formación por parte de un mismo p$iquialn, y ~Io habían sido obse",ados en ciMas cliniclI$quese hallaban bajo ¡a jurisdicción de la KGB (d servicio de seguridad del gobierno soviético en ~ entonce) (Jonvsky, 1989). ~ ha« .lgUn tiempo uno puede rom)rar

en la fannacia una t ira de plástico que seooloca en la frente de los bebe ysirve ¡>.ara medir la temperatura; se trata de una gran mejora en relación con el termó­metro de vidrio que habia que tratar de mantener bajo la axila o incluso en sitios a .... n más incómodos. Sin embargo, lo primero que se desearia comprobar, antes de gastar dinero en este nuevo instnlmento de mf!clición, es si mide realmente la temperatura como el viejo termómetro. Aclem;is, no seria agradable que, al ver el color de la tira, este cambiara entre una som­In y otra a sabimdas,sobre todo. de que la temperlltu­ra del ~ no puede oscilar tanto en tan poco tiempo.

En el primer caso, b cuestión se centra en la VA­LIDEZ del instrumento (¿este mide: lo que se supo­ne que debe mf!clirn Si la lectura cambia constante­mente entonces se preguntaria por la CONFIAB ILI­DAD del mismo (¿es consistente', produce las m is­mas lectunos en 13$ mismas circunstancias?), Tanto la C(lnf1abilidad como la validez se analizarán ron ma­yor detalle en el capitulo 7, en donde se aplican a determinadas pruebas y escalas ~iCQlógícas. Sin em­b,;argo, los próximos capitulos tratan sobre los m~to­dos gentnlles en la im'estig;w;ión psicológica y, a "eces, sert nett$ario hacl:T referencia al signif1Cl1do general de estos ttnninos y algunos mas.

1) ConSabilldad.. Cualquier medición que se em­plee en la vida debe ser confiable, de lo contrario resulta ;n .... ti!. Al lector JlQ le gustaria que el velo­cimetro de su auto le diera diferentes lecturas de la misma velocidad real en distintas ocasiones. Esto aplica • las mf!cliciones psico;,lógicas tanto oomo a cualquier otra; de modo que los cuestionarios de­ben producir los mismos resultados al probarlos nuevamente en las mismas personas en momen­tos diferentes (siempre que no les haya sucf!clido nada signifklltivo): los distintos observaclorcs que cuentan los actos agrcsiVQS de los niños deben lle­gar a cuentas similares; las ClIiifoClldones de la in­u:nsid.d de la imagínena sexual en los infonnes oniricos deben ser similares de un jUCil. a otro.

2) Validc:z. Además de soer consistente, tambi61 se debe tener confianza en que el instrumento de me­dición mide 10 que se . upone que debe mMir. Al lector no le gustaria que su velodmetro registra­ra la presión del ~te o queel termómetro midie­ra la humedad. En psicología, este asp«to tiene una importancia absolutamente crucial, ya que a menudo resulta dif1cil coincidir en lo que "es real­mente" un constructo, y las cosas en psicología no son tan manejab!t'S o "accesibles" como en fisica o química. IR. modo que la validCil.es el aspecto que determina si las medicionl'S psicológicas reaLnen­te evalúan cierto fenómeno que se estudia. Una escala psicológica tal ,= mida una variable que no se pre1endla me:llr o algo que no tiene mucho interes; un cuestionario ideado para medir la aser­tividad, por ejemplo, posiblemente mida en reali­dad algo más afin al egoismo; una escala pensad. para medir el "animismo" en los sueños, y que cuen­ta la cantidad de gatos y perros que se informan, tal vez simplemente haga eso y naoo más.

Los términos especiales validez interna y extema no aluden a la validez de las mediciones, sino a la de los efectos aparent~'S que se demuestran en el traba· jo experimental y en estudios similares (p. ej. , ¿el es­tudio de investigación «,!mente demuestra q ue la memoria podría mejorarse con algún tipo de entre­namiento especial?) En el capitulo 4, se abordan m.1s a fondo estos temas.

MUESTRAS

Suponga que acaba de regresa r del aeropuerto con una amiga llegada de la India que permanecerá ron usted durante algunas semanas y ella le cambia a los canales de la televisión; para horror suyo, uno de los peores programas de juegos imaginables está en la pantalla y se apresura a decirle que eso no es común en la programación de la televisión británica. Imagí­ne ahora que se están midiendo las actitudes hacia los sindicatos y se decide utilizar el comedor de la universidad para elegir a las personas que lespondc­rán a :¡ti cuestionario; de manera inadvertida, los hom­bres y mujcra que se eligen son principalmente per­sonas con pUest05 sindicales en un curso de forma­ción para adquirir habilidades de negociación. En amb.::.$ casos, se ha csrogido una muestra JlQ repre­sentativa y, en amb.::.$, puede distorsionarsc la propia visión de la realidad.

• POBLACIONES y MUESTRAS

Uno de 105 principales objetiv05 del estudio cientifi­co consiste en hacer generalizaciones a partir de cier­tas muestraS. A un psicólogo podría intercurle esta-

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ble«T ciena cualidad de todo oomporumienlo hu­mano, o las caracteristicas de cierto grupo de ~ 1I;l$, como las q~ tienen una fuerte CQIlfknu, pe"SOOaI (> las que h." u:nido educación pteC$Colar. En cada caso, 1. POBLAC¡ON la constituyen todos los miem· bros ainenles de ese grupo, conocidos en tlkminos mis t& nicos como ·casos" (este concepto se emplea­r~ 8 veces en las siguientes explicaciones). Dado que la población en si nonnalmente será demasiado grande como para que sea posible investigar cada caso que hay en ella, normalmente se elige una MUESTRA de la población. La ra~6n es que si se CQOl;idcr.;¡ una mU<!$­

tra lo sulkif!f1temente pareja ~una que por lo me­nos sea reprHe1lutiVII (vl!ase más adelante)-, f!f1-

tonces se podrán generalizar los resultados de la muestra. ron algunas precauciones, a toW la pobla­ción, b cual no necesariamente alude a personas. Un biólogo podria int~ en una población que com· prenda todas la coles en un campo; un psicólogo tal V('2; mid:i los tiempos de ~acción de los participan­tes, en cuyo caso la población no son lu pertOn.s que podrian ponerse a prueba, sino todas las veces que podria producirse tal reacción; una población podria eslar formada por \Odas las compai'oias tn cierto paÍS que cuenun con guarderias para los hijos d~ los empleados, de ahí el uso del término neutrQ "casos·,

Otro término t~ico, empleado a menudo en relación con lasencue;tas, es el MARCO DE MUES­TREO, el cual se refiere a la población de la que se toman. una muestn, pero sude ser mili especifICO que eltmnino vago "población·. Por e;cmplo, si se desean evaluar las actitudes de los estudiantes hacia su universidad, entonces el mwco de muestrW de donde senI nl!«$ario elegir a la mueslTll senI la po­blación estudiantil de la unh'ersidad; sin ~bargo, si se quiere dl'SCUbrir algo sobre los problemas que en­frentan las estudiantes que son madres solteras, en­tonces se requerirá a estudiantes que sean madres solteras como marco de muestre<J, incluyendo a aque­llas que est!n en todo tipo de universidad o colegio superior.

Al marco de muC$lre<J en este sentido tambi~ se le oonoce corno POBLACION META. Al emplear estos conc~tos, oonviene tener presente la idea de la encuesta política con la que $e busca estimar b cantidad de penonas que votarin por el partido en d gobierno; d encuesudor plCgunu a decenas de mi­llones de vountes (en el Reino Unido) para obtener una muestra, bastante pequeña, pero lo suficient~ nw:nte grande como para que dé una buena estima­ción de cómo votar.! toda la población. Los psicólogos que realizan investigaciones tradicionales eligen ideal­men te muestT1l$ de la población a la que les gustaria generalizar cualquier resultado significativo.

SESGO EN El MUESTREO

Para hacer estimaciones confiables, es necesario que la muestra $el representativa de la población a la que

se desea generalizar los resultados. Seria ridiculo que el encuestador entrrnstara sólo a quienes viven en la ciccunscripción del primer minÍ$tn). Si $e estudiara el comportamiento .1 conducir de hombres y muje­res, observando a los oonductOfes en una ciudad a las 11 :45 a.m. o las 3:30 p.m., la muestra de autos con conductoras probablemente contar.! con una canti­dad mayor de la usual de niños de corta edad. A esta carga en una muestra con una sobrerrepresentación de una determinada categoria se le conoce como SESGO EN EL MUESTREO. La muestra evaluada en el comedOf de l~ universidad era una mueslTll .sesgada, si K 5uponia que K estaba busc~ndo una muestra de la actitud actual del p úblico m gmenl hacia los sindicatos.

El mélodo que se utiliza p1111l1 eat·Nacef contacto OJO las pIIIfSOll3S limita el marco de muestreo. Si un irMlstigador desea 001_ una mues\fa de las actitudes de lodos los habitantes de una ciudad, ¿~I de los siguóenles mélo­dos generarla seS90 Y por qué?

a) Emplea r el directorio teHltónk:o

b) Hacer ona !lEl1ec:ción por casas

e) Utilizar la lista electoral

d) Inlerrogar a las per$OnU en la calle

Confío en que el lector coincida con que la lista electoral proporcionar.! el sector mas amplio y sin .sesgo de la población, aunque no incluiría a los pri­sioneros, a las personas sin hogar, a los nue ... /)!; resi­dentes oa personas bajo atención psiquiatrica de largo pla~o. Si uno se vale de un método de muestreo rela­tivamente sin sesgo!;, entonces se obtendrian canti­dades de hombres, mujeres, personas mayores de 60 años. diabéticos, profesioniStas jóvenes, miembros de tod/)!; los grupos culturales, etc., en proporción con su frecuencia de incidencia en toda la ciudad, siem­pre y cuando la muestra Ka bastante grande. El em­ploo del directorio telefónico posee un sesgo implícito, )'11 que elimina a los que no pcs ~tI1 teléfono y a quie­nes no aparecen en el directorio; la Klección por ca­sas excluye a quienes esUin internos en instituciones residenciales; las entrevista, en la call~ nO conlarán. personas que est~ trabajando, en el h/)!;pilal, y I$Í

5ucesivamenle, Según Ora (1965), muchosestudios experimen­

tales qu izá estén sesgados sencillamente porque la muestra uti li7.ada estA consti tuida por voluntariOS. Ora descubrió que éstos eran significativamente dis­tintos de la norma en las siguientes características: dependencia de losdem:b; inseguridad; agresividad; introversión; neuroticismo; dejarse influir por los ,,-

De hecho, llamar a muchos de 105 partidpantes estadounidenses ·voluntarios" es algo engañoso. En

Mttooos CE

los departamentos de psicología de EUA el e$tudian­te sut'le ser requerido para que participe en ci~ cantidad de proyectos de in'·estiga.ción como pane de la ", eierva de panicipantes" del depanamento (véa­se Sieber, 1999); el "volutariado' sólo tiene que ver con determinado tipo de proytttos. Hasta mMiaclos del decmio de 1970-79, por 10 menos, tambibl su­cedía que la gran mayoria de los estudiantes eslad<:>­unidenses eran de raza blanca y varones.

Otu fuente común de sesgo de muestreo es el uso mu)' frecuente de e¡tudíante$ comQ participan­les en 105 e$tudi05 de investigación. Sears (1986) de­mostró, en 1985, que 74% de los panicipantes en 1<JS estudiQS publicados en todos los numeros de las cua­tro revístas de investigación mu significativas de EUA fueron estudiantes de licenciatura. Banyarrl y Hunt {ZOOO} averiguaron el empleo de estudianteS en las investig¡ociones publicadas en dos importantes revis­tas del Reino Unioo durante 1995 y 1996, Y descu­brieron que sólQ en 3 1 e$tudios (29.0%) se utilizó una mucstnl de adultos que rK)erli.n estudiantes, aun­que en sci!; (S.6'lI» de tala estudios tambibl se em­pleó a estudiantes como pane de la muestra; en algunos de CSIOS casos, los adultos eran miembros del personal docente universitario. De las 18 635 pei"S(' . nas que formaron las mueslnS de las dO$ publicacio­nes, 44'l> eran estudiantes de licenciatuTa, 23% eran estudiantes de otro nivel)' sólo 29% eran adultos no estudiantes.

¿Importa Que k:ls individuos no sean iguales?

Si importa, p<>r supuesto. De hecho, este aspecto está en el núcleo del estudio de la psicología. Los psicól<:>­gO$ investigad.,res difieren en su inquietud sobre la naturaler.J de sus panicipantes, y esto dept'nde en gran medida del tip<> de investigación que realizan. En muchO$ experimentos de laboratorio en psicolo­gía, por ejemplo en el imbito de la pen;epción, la naturaleza de klfi individUQl!i C'o·aluaclos ul '-cz no se considere un aspecto imp<>nante. Impona un poco por supuesto (se podrian tener panicipantes con ce­guera al color) pero, en general, la mayor pane de 10$ sistemas perceptuales humanos, Sin dud;.. nh-el bi<:>­lógioo. 50n similares.

El investigador suele interesarse de manera es­pecifica en el efecto experimental , en una diferencia en~ la$ condiciones y no entre 10$ tipos de per$O­nas.. En este CISQ el investigador necesiu, en cieno sentido, ' un grupo promedio de personas" en cad;. condición. Si el efecto funciona en este grupo de per­sonas. elegidas arbitrariamente a partir de b pobla­ción mela , entonces el interés final podría formularse como' ¿en quiénes no funciona este efecto?".

En la psicología soci.a\, o el estudio de las dife­rencias individuales, la V3riación entre las personas en la investigación adquiere una importancia medular. Cm frecuencia, las diferencias entre las per50nasSQn

prKisamente el enfoque del estudio (véase la $K­

ci6n de "EstudiO$ sobre diferencias entre grupos', po 68). Por ahora, sin embargo, debe considerarse el as.­pecto de las diferencias en tre las personas en 10 1<)­

cante a un experimento de bboratorio tradicion;u sobre cierto tipo de desempei\<l mental.

Suponga que ...... grupo experimental busca una ~sta de

palabras que rimen con ~ vocablo "mesa", m~tras cuen· tan hacia atnis por grupos de siete: en tanto que 00 grupo control hace ko mismo PIfO sin oontar. El desellopei\o de este úttimoes superior. ¿Esta diterenci8 podrIa debefse a a90 distinto a la distracción del conteo?

ConAo en qut' alguna de $\l$ pO:Sibles explica.ci<:>­ne¡ haya 'ioo que lal vez el grup<> control resultó ser mejor con el sonioo de las palabras; quiz.á hubiera algunos poetas o compositores de canciones bastan­te buCllO$ entre eUos.lo cual pudo haber oculTÍdo de manera ronuita al uoignar a las personas a sus respec­tivos grupos. pero se trata de un sesgo de muestreo imponante. De ser asi, se diria que el estudio es con­fuso debido a las VARIABLES DE LOS PART[­OPAN1"ES; con este tbmino se alude a variaciones entre las personas que actúan como participantes y que resultan imponantes para el estudio con el que se trabaja (véase la p. 43) .

MUESTRAS REPRESENTATIVAS

Si se estAn investigando diferencias entre categorias Q grupos de personas (p. ej., en trer.roPietariO$ y no propi~rios de computadoras, en ermen.s y médi­cos, o niños de 8 y 12 ao'iO$ de Mad) es preci$O obte­ner muestras REPRESENTATIVAS de las pobbciones de las que se extraen (p. ej" todOlllos propietari<JS de computadoras). Si se desea una muestra Pf'Queo'ia de enfermeras que indique con bastante precisoon quié­nes en general piensan en el esUtus y las recompen­sas por SU trabajo, entonces se necesita que la muestra refleje la variedad de caracteristicas de esta pobla­ción en su conjunto; uno no querd, por ejemplo, que en este grupo haya demasiadas enfenneras bien pa­gadas o que laboren en el pabellón de atención a en­fermO$ mentales. Mis bien se buscaoi una minirre­presenudón de esta población tota\.

Si se elige demasiadas enfermeras bien remune­radas habrá u n sesgo en la muestra. ¿Cómo asegurar­se de que 10$ individuos que se elijan no introduzcan un sesgo de muestreO? La \'erd.d simple y lbna es que una muestra verdaderamente represenutiva es un ideal abstracto que suele ser inalcanzable en la prác­tica. Uo meta práctica que es pO:Sible plantear consis­te en elim inar todo el sesgo de mul'$tl"CO que sea posible. Es necesa rio aseguu rse d e que ningún subgrupo en particular de miembros de la población m~ esté subrepresentaoo o sobre-rrepresmtado.

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• SELECCIÓN CON IGUALDAD DE PROBABILIDADES Y MUESTREO ALEATORIO

De modo que aqui se requiere una muestra en la que haya las mismas probabilidades de contar con una persona que sea parecida a las otras. Dicho en térmi­nos más formales, esto es lo que se conoce como MÉ­TODO DE SELECCIÓN CON IGUALDAD DE PROBABILIDADES (mesip):

Un método de selección con igualdad de proba­bilidadesesun procedimiento para generar una mues­tra en la que cada caso de la población meta tenga la misma probabilidad de ser sele.:cionado_

Existen varias formas de acercarse lo más posi­ble a este ideal y todas ellas suponen cierta forma de selección aleatoril_

Significado de lo aleatorio

Lo aleatorio no es simple azar. El significado estricto de la se<:uenciación aleatoria es que ningún suceso es predecible a partir de ninguna de las secuencias anteriores. Las ele.:ciones humanas al a~ar pueden tener cierto patrón subyacente del que no se es cons­ciente. Esto no se aplica a la mariposa' la evolución la ha llevado a hacer una secuencia aleatoria intermi­nable de giros durante el vuelo (a menos que se le­sione), laque hace que la predicción resulte imposible par.¡ cualquiera de sus depredadores mucho más po­derosas.

¿Cuál de los procooimientos sOguientes considera usted que genera ría un g;upo de personas que formarlan una muestra aleatoria?

a) Elegir a cualquiera en la calle para que responda a un cuestionario (~ación meta: el púbfico 911 general)

b) Elegir cada quinta casa en una calle {Población meta: la calle}

e) Elegir cada décimo nombre en el registro escolar {Po­bIaci6n meta: la escuela}

(1) Pegar un barderin en una lista 00 nombres (~ac;oo meta: los nomt)res de la lista)

e} Elegi r papelitos de un somt)rero que lleven inscritos los nombres de todos los estudiantes del WobbIy CoIIege y pedir a los seleccionados que respondan un cuestionario sobre comportamiento sexual (Población meta: los estudiantes del WobbIy COII6g6)

La respuesta es que ninguno de estos métodos supone una sele.:ción aleatoria pura. En el inciso a) podria evitarse a personas cuya apariencia sea des­agradable, o enas posiblemente lo eviten a unO por la misma razón. En d) hay menos probabilidade!; de pegar un banderin en la parte superior o inferior del papel . En e) la sele.:ción inicial es aleatoria, pero la

muestra no cOlllará con quienes se nieguen a tomar parte o aquellos que estén ausentes ese día. En b) y c), la definición no es daramente satisfactoria. Sin embargo, en estos casos es posible, con un pequeño ajuste, generar una muestra con igualdad de probabi­lidades utili~ando el método del muestreo sistemi­tic() que se describe más adelante.

Muy pocos proyectos de investigación psicoló­gica han extraído una muestra aleatoria verdadera (o una "muestra aleatoria simple", como sedescribe más adelante) a partir de una población grande. Un mé­todo usual consiste en hacer una promoción en la prensa local; lo mas común todavia es contactar a las personas por medio de contacto personal; flnalmen­te,lo más frecuente de todo es recurrir a estudiantes. Una línea muy común en los infonnes prácticos de los estudiantes es "Se eligió una muestra aleatoria"_ En la experiencia del autor, esto nunca ha sido cierto, a menos que l. población meta se limitara al año en curso o la universidad, e induso entonces la selec­ción aleatoria seria sumamente rara.

Lo que los estudiantes (y otros investigadores) pueden hacer razonablemente es tratar de obtener una muestra lo menos sesgada posible, o hacer que ésta sea bastante representativa eligiendo a individuos de importantes subcategorias (unos más jóven~ otros mayores, ete.) CQmo se deKribe bajo el titulo "Mues­treo estratificado", más adelante. Decualquier modo, es m uy importante analizar este aspecto al interpre­tar los resultados y evaluar la propia investigación, de lo contrario, aquello que parece un efecto general qui?" sólo sea resultado de un muestreo descuidado_

Ahora se considerarin varios métodos de mues­treo, de los cuales los primeros son los métodos de sele.:ción cOn igualdad de probabilidades.

Muestra aleatoria simple En una MUESTRA ALEATORIA SIMPLE cada caso en la población meta tiene las mismas probabilida­des de selecdón y también toda posible combina­ción de CISOS. Si se ne.:esita una muestra aleatoria simple de 20 empleados de Wi~zo Fireworks en Nemen, entonces deben tomarse todos los nombres de los empleados y utilizar uno de los primeros tres métodos que se describen en el apartado 2-).

Muestra aleatoria sistemática En una MUESTRA ALEATORIA SISTEMATICA seleccionamos cada en6imo Caso de la población, donde n es cualquier númerO (p. ej. , cada quinta per­sona). Sin embargo. para satisfacer la definición mesip, antes de empezar la selección cada caso debe tener las mismas probabilidades de estar en nuestra mues­tra_ Este requisito no se cumple en los incisos b) y c) del ejercicio anterior. Para hacer que en esos méto­dos se utilice el muestreo con igualdad de probabili­dades debe elegirse el punto de partida en forma aleltoria: si se piensa escoger cada décimo caso, en­tonces se selecciona aleatoriamente un número en­tre 1 Y lO, por ejemplo, el 7 y, a partir de ahi, serán

Apartado 2- 1. Cómo obtener una muestra aleatoriamente

51's (jór¡ ele una muestra aleatoria simple

1. Selección por computadonl

Las computadoras pueden generar una serie InIerminable de números aleatOfÍOll. Se trata de nUrne­ros Que no guardan ab$Olul8mante ninguna relación entre si como secuencia y se eligen con la misma freQ.l8llCia. Dada una pcb'.,ióf¡ de nomb<es. la oomputadcIfa los utilizarla para sele ,ciooar un ~IO aleatorio dellamaño necesario.

2. Cuoorot; de númetOl aleatorlol Otra posibilidad es uliliUlr la oomputadora para ¡¡anerar un conjunto de núme<08 aleatorios que se registren y utiIioen panal\acer rualquief sela uión por cuenta propia; esta tabla 8¡)tIr&cEI en el Apéndi-08 (:()11M) evadm "...., . Empezando en Q "'Io:¡<jer parte del cuadro Y despené"« T' ·.eltical u horizon­talmente. se produoe una secueneiIo aleatoria de númeroa. Para elegir a cinco personas alealOriamenle de un grupo de 50, esigne a caóB una un numero del t el 50 y accede si C\Iadro despla.¿á.ndose por ésle vertical u horlzontalmef1!e. Elija a las personas Que tengan 101 primeros cinco números que aparezcan al d u¡V,zlfH por el cuadro.

3.. $eleCCión manual Las pelotes numeradas en una sesión de Ioterla o los números en una rueda de ruleta se eligen en forma aleatoria, como sucede con los boletos de una rWa extraldos de un cilindro o un sombrero. alem.,... que eaMn debidamente revueIIo. , que elas'nd ..... ><tttor no pueda .... 1os papele. y que éstos se encuentren dobtatbi de manera que no ha)lll ninguno óle<ente de los dem6s. Usted pueck escoger de esta manera una iTIi.I8stra de 20 de la población universilaM. j)8ro necesitaré ur.a caja grande en vez ~ -.omtlrero"tan popular en las respuestas a las preguntas en la sele:ción eleatOtia en II.IOIII.lO$ téc:nicoII, la caja debe "",Clli8JW cada vez que se extrae un nombre.

Otros proc.cllmlenlo. alealoo1ol AalgnllClón alealoria • grupo ••• perimenlBlea

Al f9dactar jr,fo¡" e 8 es pe sible contundir la distlnc:i6l1 entre mueatreo llealorio Y aTl!iilRIICIón aleatOÑ la cual sigI.r ..... kaoer que lodos sus part>ci;Jerl1es sean I ....... :! llttlM:>s de una pobIadón meta J. como ya se dijo, lograrlo es muy dillciI , si ae&1IO mposibia. Sin emb8'9Q, si ha Qbteni(io 40 parlicipao­les, resutte muy sencilla la tarea de ASIGNARLES ALEATORIAMENTE a las condiciones de su expe­rimef11O: nla -ciooar1a a 20 de 40 median1e cuadros como ya se expIic:ó. Esto también puede lleva .. a cabo lanzando una mooeda al aire en el caso del po., .... participante para decdr en qu6 001'6>;0 deben participar, y alternando !Odas las asigrw:iones IlUl:lsr,as. En !él ... lOS 6$blclos, esto seria .. e¡emplO de moestreo aleatorio II$I&mético. Un método algo desagra(!able seda lanzar una mor_ por cada participan1e. lo que dejarla el posible problema de que a los úffimas se les tenga que asig>Ir s une (:()Itdició .. QUI rep<esenle el lado de la moneda QUI haya caldo con menos frecuencia,

Ooc:lin1amlento de efluyo aleatorio '1 secuenclllClOO de materiales de estlmulaclón

Posiblemente se desee poner 20 palabras en una lista de oo." ".""., ", ... , I es necesario asignar a cada palabra un nUmero aleatorio como ya se entonces se ponen Igf

narán ahonti en forma aleatoria, SI las pal¡tbras Iomtan doe conjun101, LnO de plantas,.monees asle procedimiento ALEATORIZARrA debidamente los condk:looes de un experlmenlo dlsellado para pon8f a pi'ueba la diferencia en velocidad de cación de las dos categorias de palabras. AsI, seria impc slble i!dMr.ar arWnaI o planta.

sckccion:tdos los c;w)s 7", 17", 27"y asi s1.laSivamcnte. Así, al CQffiien7.o. cada individuo tll':ne la misma pro­babilid~d dI: ser elegido, pero nO toda combina­ción. de individuos, ya qUI: sólo pu/!den obtenerse 10 posibles combinaciones.

Muestra estratifICada

Si se tonu una muestra relativamente pequena de un. población grande cuy., cancteristi<:1l$ son cono-

cida5, es posible asegurar una buena en la m~tra, en tanto s.. apliq~ un Suponga qUI: quierl: una muestra estudiantes; podria optar por j

d o, de ane. de psicología, etc" en cantid.det Si I~ de I

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lamento de arU. La selecciÓll aleatoria dentro de los ~tr.ltos ~ crucial aqui.

Los $ubstctore (ts decir, Ktr.Itos) de la pobla­ción que ~ identiflcan como importante variarán ~gUn la investigación en curso. Si, por ejemplo, estu­dia el tema de las actitudes hacia el de~mpleo, que­rríl asegura I'SC una represenución proporcional de empleados y descmpleados,en tanto que si se tratara del aborto tal vez se de$earia involucrar diversas reli­giones. Si la investigación tiene un enfoque local, entonces lo imporunte serian las proporciones loca­les y no [as nacionales. En la práctica, con investiga­ciones, pequeña escala y muestns limitad .. sólo es posible aoomotbr unos cuantos t:Stratos importan­tes. En todo caso, aqudl05 que se utilicHI drbm ~ el<haustivO$ (es decir, tienen que ahMcar a toda la población l. ~ deben utilizar, digamos, ,,'lb de mMi­CQ$, y'!Ii de po:r1Onal de enfermena y z'll. de otro tipo de po:r:sonal, don<k )( + y + z = 100. No es posible deci r q ue la m uestnr. está estratificada si un estrato (p. ej., el personal administrativo) se ha dejado fuera por completo.

Si se obtiene una muestr1l aleatorillTlente des­de ¡Uf dlvenot eltntos que se han identificado, se est~ siguiendo un método mesip. Cada individuo cuenta con las mismas posibilidades de ser elegido, lal como si todos 105 nombres del ~.I se ffIf:Z­ela .... dentro de una tómbola.

Muestras en racimo

Una opeión al muestreO estr:atificaOO que suele ser mis conveniente y e<:Qflómica consiste en selt<:cío­nar ·...:imos· que repraenten subcategoril$.. Asi, en una un iYe!"Sidad, en ve>: & obtener una liSta de todos los estudiantes de geograru. y luego elegir aleatoria _ mente una muestra de este estrato, el investigador podria escoger en forma aleatoria sencillamente una de las clases ~ta seria un racimo sencillo y su se­lección Ille.toria sirve de nuevo para hacer que el proceoo & selección sea un método mesip-; lo an­terior reduce la necesidad de dedicar tiempo y es­meno a obtener una muestra de estudiantes de geografia que tal va esttn repartidos entre toda la población estudiantil. Evidentemente, el método estj abierto. la critica & que (¡)l va no todos los raci­mos ~n tan representativos del subgr\lpo entero como se pretendía.

M~TODOS DE MUESTREO QUE NQ SE BASAN

• tN LA PROBABILIDAD

Muestreo por cuotas

Esle maodo ha sido popular entre las compañías de investigación de merados y los encuestadores & opi-

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nión. Consiste en obtener a personas de estr:atos, en proporción a Su incidencia en la población general, pero dejando la sele«ión de ca<;1a estr:ato enter.lmen­te a los instrumentos del en trevistador, quien es poco probable que utilice métodos ale. torios puros, sino que sólo d~aria de entrevistar, por ejemplo, a varo­nes de 18 a 21 años de edad una vez que se hubiera cubierto la cuota. El muestreo por cuota quizá no siempre identifique un conjunto exhaustivo de es­tratos y tal vez también tienda a abarcar IiÓlo a los entrevistados de cada cuota con los que sea m:is fácil entrar en contacto o abordar.

Muestra autoselectiva

Seguramente el lea,"" recuerda a los estudiantes que colocaron una escalera contra una pared yobserva­ron cuántos hombres y m ujeres pasaNn por debajo de ella o la rodeaban; en dicha investigación los ex­perimentadores no podlan elegir la muestr:a; tenían que confiar en la observación de 11$ personl$ que acertaban a pasar por la calle en esos momentos. Los voluntarios de un experimento tambi61 son auto­selectivos.

Muestra de oportunidad o comodidad

Se ha visto que buena parte de las im'estigaciones se realizan en estudiantes (quienes tambitn $Uelen ser VQlunuriOS); raJes participantes son sencillamente los mi.'! fáciles & conseguir. Una gran conferencia brin­da la oportunidad de probar a muchas personas en una oola ocasión. Debido a estas razones, a dichas muatras suele designársela como no aleatorias y se la conoce como MUESTRAS D E OPORlUN1DAD o de COMODIDAD. us muatras disponibla en un experimento natura] (véase el capítulo 5) oon también de: naturaleza oportuni sta. Si existe la opor­tunidad de estudiar a los niños que losun por experi­mentar una innovación educativa, el in"estigador a cargo no tiene control sobl"f: la muestra.

Muestns como esas se reimen a menudo bajo el término mis general de MUESTRA FORlUITA -el tipo que se elige tambibl si uno va a la biblioteca y simplemente selecciona a juirnquiera que pase (aun­que la afinrtl>Cióf1 de que e preguntó todos suena a menudo un poco sospechOA).

• MUESTREO INTENCIONAL

Kalton (1983) hace referencia a otra categoria de muestras no aleatorial denominadas MUESTRAS INTENCIO NALES o MUESTRAS D E ELECCIÓN D E EXPERTOS. La elección aquí la hace el invati_ gador sobre la base & las personas mis representati_ vas para los temu& la investigación o que tengan la experiencia apropiada en la materia. Considere algu­nos ejemplos para aclarar este aspecto.

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Muestreo de bola de nieve

Es una tknica empleaoo con frecuencia en investi­gación cualiutiva (vf:ase el capitulo 9) en la cual se necesita información, por ejemplo. del personal cla­ve m una organización o de quimes tienen expe­riencia personal o profesional, por ejemplo. sobre alcoholismo. El investigador elegiria a varías perso­nas claves para en trevistarlas y est05 contactos po_ drí an darle información mre otros contact05 impor­tantes que tambif:n entrevistaria.

Casos crfticos

Un caso ~~ial en ocasiones subraya rosas que se relacionan con otros que no son especiales en $U

mayoría. Los <'St..ruos de Freud sob~ la neurosis le dieron importantes vislumb~ ~a cid posible fun_ cionamiento del inconsciente en la mente de cual. quiff ~rsona. Los investigadores inler~os en el aprendizaje perceptual han estudiado a personas que han rttuperado la viSta de manera asombrosa .

Grupos focales y paneles

lo5 investigadores puedm reunir a un grupo de ex­pertos. a qui<:nes tienen un interes particular en un tema o. m el caso de los grupos focales, sencillamen­te a un grupo ck personas que, cabe esperar, son bas­tante representativas de La población en ~erat . Estos grupos se reúnen mis de una ,·ez, posiblemente con regularidad, para pmporcionar infonnadón, como se describe con un poco mis: de detalle m el capitulo 6.

TAMAÑO DE LA MUESTRA

Uno de 105 recursos más populares en el repertorio de respuestas preparadas de muchos estudiantes a la innrucdón "Sugiera modificaciones a esta investiga­ción" es "El investigador debió haber incluido a mis: participantes". Esto no es necesario si se ha demos­trado una dif=cia significativa <:nlte dos grupos., a mmos que a) haya una buena razón para sospechar que existe un ses$" de muestreo o b) si se esU repli_ cando el estudio (vf:ase el capitulo 4) . Si la in,·estiga_ ción no ha lograd o demostrar una diferencia significativa, podría 50Specharse que existe un saga en las muestras, pero ¿convienf, ai'iadir simplemente mis a las muestras que ya se han sometido a prueba?

Argumento en favorde las muestras grandes

Es más fácil generar sesgo con muestns pequei'ia$. Confio m que el siguiente ejemplo aclare esto. Si tuviera que elegir a S personas de un grupo com­puesto por S católicos, S musulmanes, S hindúes y 5 budistas, es más probable que dicha muestn incu­I ritora <:n un 5esgQ religioso que si se seleccionan a 10 per$OJ\a5. Así, si se escogiera sólo a 5 individuos, po-

drian ser todos católicos, pf!TO tnlUnoo.s.e de 10 eso ya no seria posible. En gmen], cuanto mlyor se. la muestra menos probable leIi que se produzca un sesgo de muesueo grave.

Al pasar a la prueba de signilkancia de las dife­rencias entre conjuntos de puntuaciones se observa que los tamaños de m~tra mayores aumentan la "fuena· de las pruebas estadísticas (véase la p. 257). Hacen más probable que se dete<:te un efecto si t3te existe. Las muestraS pequeñas pueden llevar a la con­clusión de que no hay diferencia real entre grupos o condiciones. Suponga que hay mas gente en favor que en contra del iborto en todo el país en una pro­porción de 6 a 5; una esU'ltesia de muestreo peque­iío, que gerteN: 12 en favor y 10 m contn no conven­ceni a nadie ck que esta discrepancia representa l. realidad, pero una difCTmcia de 360 a 300 podría ser mis convincente. Aunque no se ha abordado toda­via el tema de la probabilidad, confio en que su sen­tido adquirido de los factores probabilísticos coincioo con esto.

Argumentos en contra de las muestras grandes

Quizá encubran un diseño débil Como se verá,lO$ mf,todos experimentales tienen que ver con el control de todas las variables, excepto las que se investigan. Si se necesita una muestn muy granck para ckmostnr una difCTmcia entre dos me­todos experimentales, podria ser que el $iStema ck medición o manipulación de las condiciones est:f: ena­do y que se requiera refonar\() a fin ck quitarle va­riables indes.oables que contribuyan a una falta de diferencia dara mlte las puntuaciones. Es necenno investigar algunas de lu ".mmazas a la validez inter­na y externa" de5crí tu en el capitulo 4 .

Quizá dificulte ver las variables participan/es Es posible que un efecto opere en algunas personas y no en otras: podria funcionar con 105 buenos lecto­res, pero no con lectores defidmtes. Tomar una mues­tn grande oori una difermcia significativa a la larga

- entre los grupos (originada tólo por los buenos lec-tores), pero tal '·ez haga que se pase por alto una discrep~ncia importante entre las perwnas, pertinente para el efecto y que valdría b pena in,·e$tigar mis: a roo,,"

Son costosas y toman bastante tiempo 1.0 ideal seria qu~ razon~ como el costo nunca fue­ran un obsUculo m el progreso cientifico;sin embar­go, para ser realistas, no siempre es posible poner a prueba muestn'iS grandes, y los Investigadores (así como los estudiantes de psicología) se ven precisa­dos a crear buenos disei'ios que no siempre exijan ~,.

/Jeg;Jn a producir diferencias insigni(lCafl /es Mis acklante se explica que DunCI debe emplearse el tmnino "insignificante" al referirse a una difCTm-

ela entre muestras en que se piense no existe una diferencia ~al entre las dos poblaciones de las cuales se extraen. Más bien, tal diferencia "no es signifIcati­va". Aquí, sin embargo, por "diferencias insignifican­tes" se alude a diferencias reales entre poblaciones que no tienen importancia real en términos cientifi­<:os o pskológi<:OI$.. Si se toma a toda la gente de Barnsley cuyos nombres <:omenuran con 'C' y"D", sin duda habria una diferencia pequeña y t rivial en b puntuación promedio de Cl de las dos pobladones; siempre existe alguna pequeña fluctuación en las mediciones. Una diferencia aqui, por ejemplo, de 0.03 (cuando el promedio de C I suele serde lOO), carece­ria de signiflcldo y no habría nada importante qué hac~ o decir al ~pccto.

Poder y magnitud del efecto

La disyunt iva de si las diferencias.'iOll signifi<:ativas o no tiene mucJ,o que ver ron la cuestión del poder estadístico y la magnitud del efecto. Esos términos se tratarán tknicamente en el capitulo 12, oote por ahora advertir queson de importancia medu[arcuan­do los estudiantes preguntan ' ¿a <:uántos participan­tes debo poner a prueba en mi estudio?". El poder es la probabilidad de que.se demuestre un efecto, si rea[­mente lo hay, dados los indicadores y el tamaño de muestra utiliudos. La magnitud del efecto es e[ ta­maño (normalmente estimado) de la diferencia que uno está probando.

RODUCCIÓN AL DEBATE CUANTITATIVO-CUALITATIVO

Huta ahora esta exposición .se ha centrado mayo­nuriamente en la aproximación <:onvencional a la Investiga.:ión científica en psicología, en la cual el mé­tOdo hipotéti~uctivo comprende los temas de este capitulo: definición, medición y control enric­tOS de las variables y muestreo estructu rado. Este ftÚoque, adoptado principalmente por los psi<:ólt>­p a principios del $iglo XX, supone que la observa­CIÓn precisa y el anilisis de datos llevarán a b creación de "leyes" que expliquen todas las relaciones entre .. \'ariables, y que puedan validarse haciendo rons­tmtemente prediccione5 precisas de más variables. l'n principio fundamental que subyace al método es lfirmar que los unicos fenómenos significativos que pueden estudiarse en fonna cientiflca son los que es posible ob servar directamente y medir cuantiuti­nme:nte - principio central del POsmVlSMO-. Tal fllasofla de la ciencia, sobre todo en el oonduc­e.mo (p. ~., Skinner, 1953), predominó en las inves­::.¡ac:iones psicológicas desde mediados del siglo XX bu mediados del decenio de 1970-79. Sin embar-

por ese entonces ---en parte desencldenadas por ·xnh¡os en la masoRa de la investigación en la socit>-

logia y debido a la v:pansión de la psicología aplica­da a varios ~mbitos nuevos (p. ej., $.Jlud, discapad­dad)- se suscitaron fuert6 objeciones <:ontra la apli<:ación del mo!-todo experimental en la investiga­ción psicológica. Hubo una objeción más gmenl al hlfasis en la cu.antiScaelón de cualqui~ fenómeno psicológico con el propósito de darle respaabilidad a la investigación. Pua los investigadores. esto le dio a la psicologia una imagen pseudocientifka, pero ac­tuó a favor de la verdadeta comp~ón de lu per­sonas como tales y no como "sujetos" cientiflcos.

Previo a esto, se habían aludo fuertes voces, aun­que principalmente marginales. Lippmann (1922), a quien se le reconoce universalmente como quien acu­M el «:rmino ' estereotipo", comentó lo siguiente sob~ el intento por medir la inteligencia:

Si [ ... 1 M arraiga la ImpreBlón de que estal pruebas miden rNlrTIeIlte la i"rteIigenr::ia, que consIiIuyen cief· la especie de jtkio final SCIbAI la capackbd Wantil, que revelan "danIlllcamenla- su ca._ idad predad· nada. entone . : $aria ni! Y8CIIS mejor que todos los ewk.radooes de la Intel"gencia y todos sus eun'iona­rios se hundieran sin ar:IvtIrtenc:la en al mar de I0Il

""..,.. (1922: 19)

Considere ahora una observación de Bem y Loaren de long (1997) relativa a las esperanzas de los filóso­fos europeos de<:imonónicos que querían convertir a la hermenéutica (originalmente un método para dar sentido a los textos clási<:os en un contexto cultural) en el método fundamenul de las ciencias humanas:

Wilhalm DiI!hey (1833-19 11 ) Y r:Aro5 sOOaron con ha­cer de la hermenéutica una metodoloQra aóHda y fTNIduIar de las clandaa humanaa. Su nenciórl ... ¡¡arantizar la IIUlUllOonla de estos estudios y proteger­I0Il de las cH 1Cias natu ...... prepondetantM. La Idea central es que hay Cfe8COO • • humanas. como las obras literarias ¡ ... I y la conr:luet.a ql,>8 no pueden objaINarse oomo cosas dascooactadaa de los sujao 1051"rur"r1anot; por al oontniIrIo, están nana. de valores y deben entenderse en al cont&X!O de su tlampo y situación cultural.

[1991: 23)

ClJANTlFICACIÓN y EXPERIENCIA CUALITATIVA

' Cuantificación" signifi<:a medir sobre una base nu­m~rica, aunque $610 sea poi" la frecuencia. Siempre que uno <:uenta, cuantifica, y ubicar a la gente en categorlas es un preludio a la acción de contar. C lasi­Acar a las personas por su 5igno zodiacal entraña una forma rudimentaria de cuantifl<:ación; lo mismo ocu­m: al ponerle una califkación a un ensayo.

En cambio, la invest igación cualitativa hace hin­<:api~ en significados, experiencias {con frecuencia

32

descritas verbalmente), descripciones, etc. Los datos en bruto serán exactamente lo que las per$Onas ha­yan dicho (en entrevistas o oonversaciones grabadas) o una descripción neutTll de 10 que se ha observado (lo cual conlleva problemas respecto a si alguna ob­servación puede ser verdaderamente "neutra" o sólo de hechoo). Los datos cualitativos pueden cuantifi­carse mas tarde en cierta medida, pero un "método cualitativo" valora los datos como cualitativos.

Es más bien como la diferencia entre contar las formas y los colores de un montón de dulces en com­paración con sentirlos, jugar con ellos, comerlos; o contar crepúsculos en vez de apreciarlos. La diferen­cia entre uno y otro quizá sea ligeramente cuantifi­cable, pero estas mediciones no transmiten la im­portanda y el efecto especial de unos sobre otros.

En definición estricta, una variable sólo puede ser cuantitativa. Al cambiar, adquiere valores diferen­tes. Aunque a veces hay sólo dos valores (p. ej., varón y mujer), un positivista afirmaría que los psicólogoo sólo pueden estudiar variables porque el contraste y la CQTT\paración únicamente ocurren cuando hay cam­bio; lo que se modifica es una variable y é5ta debe ser cuantificable.

Reason y Rowan (\98\) exponen con elocuen­cia el argumento contrario a este punto de vista en un planteamiento $Obre lo que denominan "cuan­tofrenia":

Se están haCÍElIlÓO demasiadas rnt'!diciones. Algunas oosas quo son oornéricameota precisas no son ver­daderas, .. n tanto que si son CÍElI'1aS otras que no son numéficas. la investigación 0!t0d01<a arro¡a f8SuHa­dos signifo:;ativos desde el punto de vista estadistioo, pero insignificanles desde la perspectiva humana: en la investigaciÓn humana. es rnucIlo mejor _ profun­

dament .. in!eresante quo Cflrterameote aburrido. 11981: KV)

Ese es un comentario aplastante, que hace parecer que tooa investigación es "humanamente insignifi­cante" si nO emplea los métodos que prefieren los autores. Las COSa S no $On asi. Gran número de ejercí­ci05 de investigación, posiblemente tedi0505 pero pre­cisos, han enseñado mucho acerca de los procesos perceptuales y sobre lo que mueve a uno a dar ayuda a otras personas. Sin embargo, no se hubiera hecho este planteamiento sin un exceso de énfasis dentro de la investigación psicológica actual en la medición objetiva y la observación directa de cada ooncepto, de manera que se devaluaran temas importantes no susceptibles de este tratamiento.

Sobre el tema de la "emoción", por ejemplo, en los libros de texto actuales hay poco relacionado con la propia comprensión cotidiana de ese término. Hay extraiíoo estudios en 105 quese inyecta fármacos a las personas y se les pone con un actor alegre o enojado, y otros en los que se les da 'información falsa sobre sucesos a 105 que normalmente $On totalmente aje-­nas --como su ritmo cardiaco O respiratorio--. Estas

. ,

cosas $On cuantificables, como lo $On las respuo: • cuestionarios, pero ofrecen un panorama muy , cho $Obre el concepto completo de la emoción mana.

• Al revisar el volumen amplio y""d. estudios pertinentes, al algo como un la función de los métodos cualitativos, como cribe a continuación.

Postura cuantitativa pura

Es un planteamiento que tativos como carentes de vidad, confiabilici.ad y sideran que la medición

teamientos no tienen sentido.

Los datos cualitativos pueden cuantiftcarse

Los hallazgos cuantitativos se incremental por medio de datos cualitativos o se desarrollan a partir de éstos

manera es entrevistas plicativas

p'" quizá propicie

nuevos estudios cuando se al observador $Obre el valor

ayudar al prójimo.

Métodos cualitati\lOs y cuantitativos: instrumentos diferentes para usos distinla5

Si el interé5 se centra en la ~~~¡::~:~~~: ción humana en la delección por la capacidad para procesar i

a ciertas velocidades, entonces SE' antoja razonable lle­var a cabo investigaciones experimentales sumamente controladas en las que se aplique un alto grado de cuantificación ell'3cta_ Si su arca es la psicología apli­cada a la practica del trabajo social , los cambios de conciencia en el enveje.:imiento o la experiencia del duelo, es muy probable que los métodos cualitativos resulten apropiados para ese trabajo. A diferencia de la postura ya descrita, donde el trabajo cualiutivo se considera importante pero subordinado al análisis cuantitativo final, Reicher y Emmler (1986) en sus estudios utilizaron una encuesta cuantitativa inicial para identificar los grupos apropiados de adolescen­tes, a quienes posteriormente se les sometió a en­cuestas cualitativas exhaustivas CQn<::emien.tes a las actitudes hada la autoridad formal.

Postura cualitativa pura (radical)

No existe una posición cualitativa (mica y aquella de emplear sólo métodos cualitativos, como una espe­cie de dogma nuevo y radical y como método elegi­do, es común a varias ramas del movimiento cuali­tativo. La mayor parte de los modelos cualitativos no son sólo cuestión de elección metodológica, sino que se acompañan de una postura ideológica o filosófica que rechaza absolutamente el positivismo y los plan­teamientos hipotético-deductivos, sobre bases teóri­camente argumentadas, y los juzga dañinos para la comprensión apropiada de la acción humana. Un importante tema cualitativo común ha sido la insis­tencia en la función del investigador en la construc­ciÓD de conocimientos en el proceso de investigación, en contraste con la idea convencional del investiga­dor que descubre "hechos" ya existentes acerca de la conducta y la experiencia humanas.

33

VALORES RELATIVOS DE lOS ESTUDIOS CUANTlTATNOS y CUALITATNOS

En general, los métodos mas "estrechos" y rigurosos dan pie a datos más confiables e internamente vi li­dos (vease el capitulo 4) , a efectos replicables y a la pretensión de mayor objetividad. Con todo, los re­sul tados están abiertos a la critica de que dan infor­mación limitada y poco realista, ya que se valen de indicadores que captan sólo una diminuta parte del concepto originalmente en estudio (figura 2-2). Las investigaciones cualitativas, que tienen controles más holgados y se realizan en circunstancias más natura­les y cotidianas, dan resultados de mayor riqueza e infonnación más realista; sus partidarios consideran, por tanto, que hay mas probabilidad de reflejar el pensamiento y la acción humanos en un contexto natural y culturnl. No obstante, tambien han tenido que sacar en su defensa el argumento sólido de que los datos cualitativos dificultan mucho la replicación y de que existen muchas fonnas, en ocasiones con­trarias, de organizar los datos cualitativos e interpre­tar los datos. Una defensa contra este argumento es, desde luego, que los datos estadisticos tambien se interpretan de manera diversa y que los distintos es­tudios afTojan resu ltados basta nte diferentes, subor­dinados a menudo a la fonna en que se han construido y operacionalizado las variables.

Los métodos controlados Sin excesivo rigor ge­nerarán cantidades y tipos de infonnación imprede­cibles que el investigador debe tamizar, organizar y seleccionar en función de su importancia, pero esos métodos dejan más margen para que el investigador maniobr<.! al interrogar a los participantes y decidir que observaciones valen más la pena, fomentando así una interacción humana más natural y menos artif] -

"'odos y datos cualitativos •

Métodos y dotos cuanritorivos •

Figura 2-2. V("ioxione •

e<:1T$ CO<'lC*P'O' de in""'~9oó6n de !o iny e>ligad6n cuolitalM> y c,", nlitotiva .

. ' .... •

s, '0' • , >. r>afl¡rali,ta'

• ~o"".~ • • ... • -•

Inl .. ""adOn Limi:odc

• In'-<p_ión Ob¡oIiva

Confiabllidod

Ih,flexibilick>cl Ip. 1(2)

• • s...na""", ..... Lrt.<:iUr<ldo

• ',w • .. •

" ' .... ""rLidorioo <:101 mo<:IooIo miloLiY<> o~,,,,,,n o. ".''' .... 0 $LI16Lico q .. $LI Oo/ini>.., WL móoodc:. no fIKO$(If_ ...... po:-..n moyo< ,.b,.,i.;.!ad. _ ""'-'>< po;:odeto empleo, .. o. ""'.......,........" como <"",ocio loo 'co!ikoóor" ::opocótados' """. U/IO ,,,,,,lo do colikoc¡c", poLO -codihcor'" lo

f ... obwvodo.IJ<>""'''''' """",'i","",, do lo ._i"":;O do....., '*"""'''¡';';''''' do "",!:reto puodo osaib< ... en """'" objoIhoo y luego .... i"' ... ,., ...,. ... bvsco do procioióLl y reIIo¡o Iiot: lo, LO~' do U/IO pot>oo"IO poLO opc ..... al olx:no podrían conta, .. CO<nO .:kJIo. _ objoIiv<:o qvo .....

7 o qw .... ~ on 0.5 .., ......, 0>C0I0 do ClClitud hacía el alx:no do O o 30 .

.. "" ....... io> _~ ..... )los qw .. hocen ... _oo ........ 010.) po.:eden '"9ui'" procodimÓOO' .... do 'ocopiloción do ::lelO. cobol""", .. cwn~licodo.. $:o -'>or90 ...... """io> cvotilotM:» iO<'>dotón <"~""'p.e .. le!" n::rtvLO!i,IO •• 00J0qU0 lo. """ .. i ..... podo-i<m""""'" o cobo en "" ooI6t> ..... ive:".iIo:"io

~'. ·UNtvE!Ul rJ)AD ...... '9" . ...... el .... i.".", "",rdo,:(l y • • .,...1_1 ... lo págioo 72. COOPEIlATIVA

PE COLIlMDlAj ,'EP~ "fi'· 1,"ITO

,

dal , con fHU¡. ..... mis realistas. El pr«ioes un ma­yor SCSIO indJridu.al ~ potencia, Pf"O esto 10 ac~ tan los invetipdores cualitativos romo un lI$pKI.o inevitabl~ de la investigaciótl humana, lo cual suele 1ft lsnondo o disfrazado porquienes pe! :~ .. un m ­foque cuantiutivo. Donde 1001 investigadores cuanti­utivos verian un problema m que los estudios Im'nOOl rigurosos y d~ más .mplio akan~ penniun pocl gt'fIcraliz.ación mtre Jo¡¡ difttentes estudios, SU!! coo­trapartes con un enfoque cuallut ivo observan ulUl fortalezca m que _ est1.dios produzcan datos ricos, \1niCOf Y quin dWKiks de comparar con 0U'0Ii h.­~ Pf"O ma v,uidof en terminas del rdkjo q\M2 hxm de la rnlidad y meoOl dislonion.oo. por las exigmciu de la optiKicHoallZKión Y l. medkión cien­tirlCll estricta.

En d Clpítulo 9, SI! tratari este asp«tO con ma· yor profundidad y SI! P¡&."TItaran 101 div~ mao­dos cualitativos que !le anplean K\ualmml~ En d capitulo 19, se lSoef()rlIrá al lector sobre cómo.bor­dar el .n,lisis de 101 datOS rualiutivOl. No es lógico esp<;¡ar q\M2 te abarque I.a di~idad completa que cubrm 1001 tutOl dedicados a los m~odos cu.lita·

GLOSARIO DO

tivas (p. ej., H.)'ft. 1997; Will.&. 2001 ; Smith , 20(3); sin embargo, es posible Indicar ruilH son las decisio­nes m3s importantes, cuiJes terif,n las princi¡nles do· Srul"d e. y,lo mM importante de todo. .consejar q\M2 se verifique I concienn. q~ cI.-scs de mt-todos ha,­y qué tipos de procedimicnlOl se necesiurLan seguir mi..,. de ~mprender la recolección de datos.

I..a razón de esta breve introducdón. y qu~ 511'

retomari postmorml'tlte ~I tftll. m el capitulo 9, es ad\~r al lector oportunamente sobre los probl .... mas q\M2 se presentan en <:$to$ hnbit05 para que, al ~ 101 primer05 materi.lea: de esU obn, los tenga m mmte y los cuestion~ m thminOl de este deNte Mimismo, no qu~ que cuando llque al capitulo 9 r$tO le ~ Y ~ ",Entoncft todo el 1JU,l<"­

rial anterior fue una pn pérdida de tiempo!". ~ hecho, Otn raUin ea: que se han intqrado algunct puntOS de visu y conceptos cualiutivos en los capt­tulOlsobre 10& méWdoI de interrogación (sobr~ todQ. d trabajo sobre mlRVistas), de manera que ere c~ ciente que no todo!; los m~odos de investigacK.. psicológiCl conl~n un procedimil'tlto rigido qut debJ segui~ de manera estricta.

Poner varios tnSaJOS de \,1'1 expe¡illellto en I.IW S«UenCi¡ sin Stsgo. en la que la PI toS" .. es i.'9O'Si*

Constructo ~~ico

Datos rualitatiYos

~ (ot¡.Ii>'iid6n) __

"""'. _.

Pone!" iI las personas en dileretes (ChicjcjJ)(!$ de \,1'1 erpeiitltlM en bl!l(l básiUF'iE! • ...... &"ado en c¡ue los hiIIiIz90s o "eidttnes pueden fepetil se con f"Sllado\ si'niafes: tIIÍ:iI' midad de las medkIones

Fmlmmo cuya existencia se da por supuesta, ., por cooIirmarse, quoe ~ d' • observados; se fl'lalU¡oe 0)t'tI) ~ de los dtxtos .TIja ib.slas evidencias kl SCISItf"9I'

1niofmad6n leWwta que 00 tiene forma flI.lfllérica

1niofmad6n «era. de \,1'1 fenómeno en bma ~ c¡ue consiste en valores de._ ción o fl'eruenóI -o 5 ici6n de v.w.le en ttrilWlos de los IRm eMC!OS c¡ue se dati lIMa su .necia6rl

TerdtJlÓii a Irataf conceplO5 abstraaos como er.dad' ¡ reales

Poslu'a rne~. en la que se l«aban datos Cl/aIioarivos y que oorm-hellte __ que la r.Iormación sobre los sucesos y la tlIpericnd¡¡ humiInos. CUiIfldo se feóJce .. bma~, pierden la mayor parte de su sio;roificado importante ~a la ~

Gfl4'O elegido de la población para IN itwestigadón

Muestra seIecdonada en la que cada IIkllblo de la pobIilCión mda tierle la JIisma ridad de ser dc:;ido y de la que pueden edritetse too.s las "",,"binaciones posties

Muesueo I )kl pir' esrudio sobre la base de la propil Kción de los rr--mOl Iegat 11 pwilO de muestreo

De oportunidad

En racimo

Estratificada

Por cuota

Representativa

~ada

Sesgo de muestreo (a sesgo de SEI(C(ií,,)

Sistemática , aleatoria)

___ - 'MrnoúN OC""""""",,· . GJ--Muestra elegida porque es f<ld de oolener para hacerle pruebas

Muestra elegida de un área (1 agrupación espeáflCaS como represemativa de UI"Ia población

MlIeStra elegida de modo que kIs grupos espeQficados aparezcan en cantidades pl"Oporcio­nales a su tamaño en la población meta; dentro de cada subgrupo los casos son aleatorios

MlIeStra elegida eo forma 110 aleatoria, pero de modo que los grupos específICOS aparezcan en cantidades ¡xoporcionales a su tamafio en la población meta

T!pO de muestra que se pretende ak:anzar para generalizar los resu~ados de la investigacióo

Muestra en la que los miembros de un subgrupo de la pobIaóón meta están sobrerrepre­sentados (1 subrrepresentados Tendenda sistemática a la sobrerrepresentación (1 subrrepresentación de algunas catego­nas en una muestra

Muestra elegida tomando cada enésimo (aso de una lista de la población meta; es "aleatoria" si el ponto de partida de nse elige de marlera aleatoria

Número que no guarda relació!l en absoluto COI1 kls otros números de su conjunto

Todos los posibles miemhros del grupo ~ cual se extrae la muestra

Idea metodológica de que los fenómenos del m.mdo --incluidas la e~perieocia humana y la cro:b:.ta social se redicel a hedw:l5 observatks Y a las reIacmes matemáticas e!1Te éstos

Grado en que los inStrumefllos miden lo que se pretende que midan; además, grado en que puede confiarse en el dedo de una investigación, como algo real o "no contaminado" o confundido

Fenómeno que varia y al qtJe pueden dársele valores especiIicos cuantHati'los o categóricos

1 tCu61 podría ser una definición operacional de "ruido", "rango de atención", "$Onri.o", "fruslTación" en las siguientes hipótesi, planteadas sin mo.x:ho rigor? ."

a) El ruido ¡nRuye en la ekiencia dellfabajo b) La hora del dio ¡nRuye en el rango de atención c) La. sonri.os suelen prodo.x:ir o cambio $Onrir.as d) Lo OQresividod puede ser resultado de la frustrocian

2 Un amigo dice "Mi gato odio o Beethaven. Cado vez que pongo uno sinfonía sole corriendo de la caso". aDiría usted que esta medido de lo actitud de la golo hacia Beethoven es confiable, válido, ambos cosos a ninguno?

3 El ob jetiva de determinada investigaci6n es comporar lo. actitvdes de las madres de lo. clases trobajodoro y media hacia la diloCiplina en la crianza de los hijo •. tQue faclotes deben tomarse en cuenta al elegir dos m\leslfos comparables (diferentes de la clase social)?

4 Un psicólogo pone un anuncia en el baletin de lo universidod poro e studiantes que e.ten d ispvestas o portic~ por en un experimenta rela~va o lo. electo> del coosumode olcohol en el apetito. tPor qué razones lo mueslfo reunida no podría ser uno .elecci6n aleatorio de estudiantes?

___ ,CCNInJ,o

5 aPor cuál de los siguientes mérodos podrio e~lroerse una muestra alealoO'ia simple de estudionles de licencio­luro en pIkoIogio~

o) b)

,)

Elegir VIlO uniY8Uidod oleoloáomente y emplea. a todoolos estudiante. de psicoIogio de esto ins~ludól'­Agrupar 1) todos los er.tudionlel de p,iooIog¡o de oodo universidad po< inicial de apellido poterna lA. B, Z). Luego seleccionor oleotoriomenle O uno per>OOll de coda grupo inicial en codo universidod.

POI1ef los nombres de lodo. los estudionle$ de licenc:ioIvro en psic:oIogio de IOdos los universidoóes en un """,bre.o muy grande, mezdorlos y e)(!roer las nombrtn sin ver.

6 Un inv'nligodor quiere !.OI'ldear las oc~tudes de los léMlr.es hacio lo ley y el orckon, los enl,evistoOores l!eoon la, cuestionarios con a lumnos de sexto grado que se ofrecen como voluntarios en lal e$Cuelos que oeaplon SU

inclusi6n en el estudio. A los Fumilias tambien se los seleccÍOI'\a aleatoriamente del direclorio I&Iefónic:o local. Se interrogo osimiWlO o Iot ~I en los clubes !ocale... Aoolice vario. formos en las que lo mve .... o completa del eW<!io pudiera filo. ,..,~_

7 D.i e¡emplos de .~perienciol humonol que pudieron le' muy diflcile. de cuon~ficor en formo .ignificotivo a útil. luego propongo Io<mo. en que pucliero intentone la medición.

RESPUESTAS 1 Eiemplo.:

a) Ruido: U~I~ uno graboc:ión de audio de sonidos ....,.;;6nicos a emplee \000. medidas a diferentes óecibele •• Efic>.tM:io: Cifra. de proooxx:ibn; ""rore •.

b) RansJO de al. nc:ión: Se mide par Jos error .. cometido. al cantor el número de "¡.ej'igle.luminasa." percibidas por minuto en Un<! panlolla como la del ,adar.

c) Sonriaa: Según la reconozco un calificador que descoooce la finalidad de la i""".tigocibn Y que dUfe mó. de un segundo.

d) frusfnKión: PIonlee a lo. participante. acertijos mI!)' dificile. de resolvef y recampenselo. de manera muy generoso cuando lo. resuelvon con rapidez. [E.tg no es uoo definición de lo Iru>lfación como con~, ¡in<! de Un<! experiencio fruotronle pa,a los prap6silO$ del e~perimenla·l

2 N\edicibn confiable, pera ¡!evolúo el desagrado de lo gato por Beethaven mós que su actitud hacia lo música en gene,al, o incluso hacia cualquier close de loOflido repen~noi

3 Por ejemplo, óreo, cantidad de hijo., edad, nivel educalivo akonzada, ele.

4 Sólo de voluntario.; deben leer el boletín; no se ¡ndui,ío a lo. abstemios .

.5 5610 elle. da a t~. loo ".tudiante. y todo. las combinaciones la mioma oportunidad de selección.

6 los alumnos de sexto grado loOfl YOIuntorioo. SóIo ... pueden lomar muestras de las escuelas que aceptaran el e!-ludio. Na puede incluirse a las que 00 tienen lelélooo. Ouienes acuden a los dubes con mós frecuenciCl ~enen mós prabClbilidades de ser elegidas.

7 Un ejemplo e. el omor; pero tol ~ez podria ideorse un cue'~OIlorio sobre amor no romóntico utilizonda reodivo. que pregooten por Jos e.fuerzo. reolizodo. paro montel'\efse en cootoclo, sobre lo que se sacrifico­río por ver o lo otra penooo, etc . Oh-o e iemplo e. lo e~p&fiencío del prejuicio; pero podrío pedirse O ~ vÍdim(H que lleven un diorio de Jos incidentes y que en Un<! li.to de W!f,li<:oc:ión pongon morco. en los sen~miento. que txperimenloron "" respueoto a e.t.01 incidenla .