sensor tpm

16
Descripción de los Sistemas de Control de la Presión de los Neumáticos y evidencias científicas de su eficacia 9

Upload: david-mora-hernandez

Post on 24-Jun-2015

189 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Sensor Tpm

Descripción de los Sistemas de Control de laPresión de los Neumáticos y evidencias científicas de su eficacia

9

Page 2: Sensor Tpm

El objetivo de esta línea

de actuación de Fitsa

es difundir la eficacia,

científicamente probada,

de las tecnologías de

seguridad y protección

ambiental –valores

positivos– presentes en

el automóvil.

Con ello se pretende

poner en valor social y

de mercado

el conocimiento de

estas tecnologías,

induciendo así su

demanda por parte de

los ciudadanos en

beneficio de su seguridad

y del medioambiente,

que es uno de

los Objetivos Directores

de las actuaciones de

la Fundación.

En los trabajos de

investigación y análisis

han colaborado diversas

entidades especializadas

en los ámbitos

tecnológicos concretos,

y a quienes Fitsa expresa

su reconocimiento.

Page 3: Sensor Tpm

• El 29 por ciento de los

vehículos, según un estudio

elaborado en los países de la

Unión Europea, circula con la

presión de los neumáticos

por debajo de sus

especificaciones.

• En un 70% de los

accidentes mortales

atribuidos a un fallo

mecánico, el vehículo

implicado tenía algún tipo

de problema en los

neumáticos. Los sistemas

de control de la presión de

los neumáticos

contribuirían a prevenir

una gran parte de los

mismos.

• La instalación de sistemas

de control de la presión de

los neumáticos permitiría

circular con un mayor nivel

de seguridad, alargar la

vida de los neumáticos y

economizar combustible.

• Gracias a ello, la instalación

de estos sistemas en todos

los vehículos nuevos

presentaría un beneficio

social superior a su coste.

Descripción

de los Sistemas

de Control de

la Presión

de los

Neumáticos

y evidencias

científicas de

su eficacia

Page 4: Sensor Tpm

En los últimos años se ha prestado una

notable atención a la forma de reducir las

lesiones en caso de accidente, por

ejemplo mediante la instalación de

innumerables airbags al vehículo. Sin

embargo, a menudo sucede que el

elemento más importante a la hora de

evitar accidentes es el que menos

atención recibe por parte del conductor:

el neumático. Según indican diversas

encuestas a conductores, el porcentaje

de población que revisa con asiduidad la

presión de sus neumáticos es realmente

bajo. Además, en algunas estaciones de

servicio es imposible medir la presión

correctamente, por lo que incluso hasta

los usuarios de la vía más responsables

pueden estar circulando de forma

habitual con una presión inadecuada.

Un estudio llevado a cabo por Michelín en

2004 en 17 países europeos y Turquía

demostró que un 29% de los 8.600

turismos examinados circulaban con

presiones muy bajas en los neumáticos

(con una presión entre un 25 y un 50%

inferior a la correcta), y que a un 13% le

faltaba más de la mitad del aire, una

situación que los expertos califican de

“altamente peligrosa”. Un neumático con

una presión insuficiente no solo acorta

su vida útil y produce un mayor

consumo de combustible, sino que

empeora notablemente el

comportamiento dinámico del vehículo

y es más susceptible de sufrir un

pinchazo o un reventón, con las

peligrosas consecuencias que esto puede

acarrear.

Concienciar al conductor de los peligros

de un mantenimiento inadecuado de su

vehículo ha sido siempre la tarea más

difícil para la Administración, por lo que

una de las posibles alternativas en la

práctica puede consistir en relegar al

conductor de esta tarea, al menos hasta

cierto punto, y otorgársela a su propio

vehículo.

Y esto ya es posible técnicamente en la

actualidad, ya que mediante un sistema

de control automático de la presión de

los neumáticos (en inglés, Tire Pressure

Monitoring System - TPMS), el conductor

Page 5: Sensor Tpm

es capaz de conocer la presión de los

neumáticos en todo momento o, al

menos, de circular con la tranquilidad de

que será avisado de una eventual pérdida

de presión. Esto le permitirá viajar con

un mayor nivel de seguridad, alargar la

vida de los neumáticos y economizar

combustible.

No existe actualmente en Europea

ninguna normativa comunitaria que

exija la implantación de este tipo de

sistemas en los nuevos vehículos que

salen al mercado, por lo que habría que

confiar en que sean los propios

fabricantes de automóviles los que

apuesten por una progresiva

implantación universal de los mismos.

Sin embargo, tampoco habría que

descartar a largo plazo una normativa al

respecto: en Estados Unidos la

Administración Nacional para la

Seguridad del Tráfico (National Highway

Traffic Safety Administration - NHTSA)

obligará a partir de 2008 a instalar en

todos los nuevos automóviles de turismo

y vehículos todoterreno sensores de

presión capaces de detectar pérdidas de

presión superiores a un 25% del valor de

la recomendada por el fabricante.

Page 6: Sensor Tpm

Descripción de losSistemas de Controlde la Presión de losNeumáticos

Existen dos tipos principales de sistemas

de control de la presión de los

neumáticos: los sistemas de detección

indirecta y los sistemas de detección

directa. Al margen de éstos, existen

otros tipos de sistemas alternativos que

también pueden resultar prácticos a la

hora de mejorar la seguridad en la

conducción.

a) Sistema de detección INDIRECTA

de la pérdida de presión:

Este sistema asocia las pérdidas de

presión a las reducciones de la

circunferencia del neumático medidas a

El trabajo de la Fundación FITSA y del

Centro de Investigación y Desarrollo en

Automoción (CIDAUT) titulado

”Descripción de los sistemas de control de

la presión de los neumáticos y evidencias

científicas de su efectividad” revisa los

distintos tipos de sistemas, su

funcionamiento y las ventajas que

aportan. El trabajo repasa también

diversos estudios existentes acerca de la

previsible disminución de accidentes y

víctimas gracias a estos sistemas, así como

el coste de implantación y los potenciales

beneficios obtenibles para nuestro país.

Page 7: Sensor Tpm

Las desventajas radican en que este

sistema no es normalmente capaz de decir

qué rueda es la que está desinflada, ni de

detectar una pérdida simultánea de

presión en todas las ruedas, así como

tampoco de comprobar la rueda de

repuesto. Este sistema tampoco es capaz

de detectar pérdidas de presión por

debajo de un cierto umbral mínimo.

b) Sistema de medición DIRECTA

de la presión en los neumáticos:

Con este sistema, mediante un pequeño

sensor (o manómetro) en cada rueda,

resulta posible detectar incluso

pequeñas caídas de presión respecto

a la recomendada por el fabricante del

vehículo. La mayoría de estos sistemas

disponen de sensores de temperatura

y de presión acoplados a la válvula de

inflado. Los datos son transmitidos

mediante antenas hasta un módulo de

control, el cual los analiza y muestra

al conductor a través de un testigo o

pequeña pantalla digital en el salpicadero.

El coste de un sistema de medida directa

de la presión es superior al coste del

sistema de detección indirecta, y además

exige un cierto mantenimiento (por

ejemplo, la sustitución de los sensores o

las válvulas averiados).

Por otro lado, las ventajas con respecto al

sistema indirecto son la mayor

sensibilidad a los cambios de presión

(detecta desviaciones de hasta 0,1 bares o

kgf/cm2 de presión) y la posibilidad de

medir presiones individualmente en cada

rueda, incluso en la de repuesto, y con el

coche parado.

través de los sensores de velocidad de

las ruedas. Su funcionamiento se basa en

que los descensos de presión provocan

una reducción del radio efectivo de la

rueda, y por tanto una mayor velocidad de

giro con respecto al resto de neumáticos

(las ruedas con menor radio han de girar

más rápido para recorrer la misma

distancia). El sistema compara la velocidad

relativa de una rueda con respecto a las

demás y avisar al conductor cuando

detecta diferencias significativas.

La principal ventaja de este sistema es que

resulta muy fácil de implementar en un

vehículo que esté equipado con sistema

de antibloqueo de frenos (ABS), ya que la

velocidad de rotación de las ruedas se

puede obtener directamente de los

sensores de velocidad de giro de las

ruedas del propio sistema ABS. Tras un

acuerdo alcanzado entre la Comisión

Europea y los fabricantes de vehículos,

todos los automóviles nuevos disponen en

la actualidad de sistema ABS.

Page 8: Sensor Tpm

La siguiente ilustración muestra de modo

esquemático el funcionamiento de un

sistema de medida directa de la presión

de los neumáticos.

El mercado de accesorios también ofrece

en la actualidad la posibilidad de instalar

este tipo de sistemas en los vehículos

que carezcan del mismo.

c) Sistemas alternativos:

Como alternativa a los dispositivos

descritos hasta este punto, existen los

llamados aircheckers o comprobadores

de presión. Se trata de tapones de

válvula que llevan ya incorporado el

sensor de presión. La información es

transmitida al conductor por el propio

sensor, de forma visual y a través de un

código de colores: si la presión es la

adecuada, el extremo del sensor (situado

en el mismo tapón de la válvula)

mostrará un color verde, amarillo si la

presión desciende y de color rojo cuando

su valor sea muy bajo.

Código de colores del tapón y sistema antirrobo mediantellave especial para un sistema visual de comprobación de presión de los neumaticos.

SAFE CAUTION

TPM

TPM

DANGER

Sensores de presión

Receptor / Decodificador

Unidad central

CAN

Cuadro de instrumentos

PRESIÓN CORRECTA

PRESIÓN ERRÓNEA

PRESIÓN ERRÓNEA

PINCHAZO

1

2

3

4

5

Page 9: Sensor Tpm

Aunque no se trate de un sistema de

control de la presión de los neumáticos,

perece la pena mencionar otro tipo de

avances en este campo. Uno de ellos son

los llamados neumáticos Run Flat,

aparecidos en los últimos años y

diseñados para poder circular a una

velocidad máxima de 80 km/h durante

una distancia de entre 80 y 200 km

(según fabricantes) aunque el neumático

haya perdido todo el aire y sin que exista

riesgo de desllante.

Puesto que en estos casos el conductor

podría no darse cuenta, al menos en los

primeros instantes, de un eventual

pinchazo, se hace necesario con este tipo

de neumáticos disponer de un

dispositivo de control de la presión que

avise al conductor del eventual

problema. La figura de abajo muestra uno

de los sistemas “run flat” existentes.

Por último, la revolución de los

neumáticos: ruedas…¡sin aire! Se trata del

modelo Tweel de Michelin (nombre que

proviene de combinar las dos palabras

inglesas que significan, respectivamente,

neumático y llanta: Tire + Wheel). El Tweel

consiste en un tipo de rueda que consigue

la flexibilidad mediante una serie de

láminas situadas radialmente fabricadas

en material compuesto, como se muestra

en la siguiente fotografía.

DSST tyre without air Standard tyre without air

DSSTTechnologysidewallswith newlydevelopedcompound

DSST tyre Normal tyre

Page 10: Sensor Tpm

por una unidad de control electrónico

capaz de detectar bajas presiones de aire

en las ruedas y emitir una señal al

conductor en las situaciones que requieran

de su atención.

En las motocicletas, también los

beneficios del sistema pueden ser

mayores que en el caso de los turismos al

minimizarse el riesgo de pérdida de

control por una presión insuficiente en los

neumáticos. En los vehículos de dos

ruedas, las pérdidas de control pueden

acarrear peores consecuencias que en los

de cuatro, debido a la menor protección

de los ocupantes de motocicletas en caso

de caída.

No solo para coches

El ámbito de aplicación de los sistemas de

control de los neumáticos puede

extenderse también a motocicletas y

camiones.

En el caso de los camiones, su aplicación

está plenamente indicada, al tratarse de

vehículos destinados a realizar un gran

número de kilómetros al año. El ahorro de

combustible y la vida útil de sus

neumáticos serán mucho mayores si éstos

circulan con la presión recomendada, y más

aún cuando se trate de camiones de varios

ejes o con un gran número de ruedas.

Para los vehículos pesados existen ya en el

mercado sistemas de inflado automático

que aprovechan la presión del tanque de

aire del circuito neumático de frenado o

suspensión para mantener la presión en el

interior de los neumáticos a un nivel

preestablecido. El sistema es supervisado

Page 11: Sensor Tpm

Costes y beneficiosde los sistemas decontrol de la presión

Los sistemas de control de la presión de

los neumáticos pueden ser adquiridos

como opción en varios modelos de

vehículos (en otros forman ya parte del

equipamiento de serie) por cantidades

que oscilan habitualmente entre los 100

y los 700 euros.

Respecto a los sistemas aftermarket, su

precio es similar al de los equipos

originales, si bien las prestaciones no son

siempre las mismas. Su disponibilidad en

tiendas especializadas es todavía muy

limitada en España, y en la mayor parte de

los casos sólo es posible adquirirlos a

través de Internet.

En los Estados Unidos, la Administración

Nacional de la Seguridad del Tráfico

(National Highway Traffic Safety

Administration - NHTSA) estima un coste

final del sistema de entre 37 y 54 euros

por vehículo cuando la totalidad de los

turismos, vehículos todoterreno, pick-

ups y monovolúmenes salgan equipados

de fábrica con sistemas de control de la

presión de los neumáticos.

Para estimar el ahorro de víctimas que se

podría derivar en España de la

universalización del sistema de control

de la presión de los neumáticos, el

trabajo FITSA-CIDAUT partió de un

estudio realizado por el Instituto

Universitario de Tráfico y Seguridad Vial

Page 12: Sensor Tpm

(INTRAS) de la Universidad de Valencia, el

cual analizó una muestra de alrededor de

200.000 accidentes con víctimas ocurridos

en España durante la década de los 90 y

hasta el año 2001. Los resultados más

significativos de este estudio fueron:

- Un 1,6% de los vehículos accidentados

tenían algún tipo de defecto mecánico:

fallos en el sistema de iluminación,

suspensión, frenos, o deficiencias

relacionadas con la carga o los

neumáticos.

- Un 60% de los accidentes por fallo

mecánico fueron achacables al deterioro

de los neumáticos: un 31% por

pinchazos o reventones, y un 28%

debido al excesivo desgaste de los

neumáticos. En definitiva, casi el 1% de

todos los accidentes son debidos al mal

estado de los neumáticos.

- En un 70% de los accidentes mortales por

fallo mecánico, el vehículo implicado tenía

algún tipo de problema en los neumáticos.

De lo anterior se deduce que un accidente

debido a un fallo en los neumáticos tiene

más probabilidades de ser mortal que si

fuese debido a otro tipo de fallo

mecánico.

En cuanto al consumo de combustible, se

estima que un descenso de la presión de

inflado de un 12% por debajo de lo

recomendado produce un incremento del

consumo de combustible del orden del 1%.

Algo similar sucede en cuanto a la duración

de los neumáticos: según estudios

Page 13: Sensor Tpm

realizados por Michelin, circular con una

presión de inflado un 3,3% inferior a la

recomendada aumenta el desgaste del

neumático en torno a un 2,5%, y hacerlo

con un 17% menos de presión produce una

disminución de la vida del neumático de en

torno al 12%. Con un 33% menos de

presión la disminución de dicha duración

llega hasta el 38%.

Una relaciónbeneficio-costefavorable

Con todos estos datos, es posible calcular

con cierta precisión la relación beneficio-

coste que resultaría de equipar en España

a todos los vehículos (turismos, camiones,

furgonetas y motocicletas) con un

dispositivo de control de la presión de los

neumáticos.

Para los cálculos, el ahorro en consumo de

combustible se estima en un 1,1%,

mientras que el aumento de la duración

de los neumáticos en un 14%. En cuanto al

coste del sistema, se considera un coste

variable de entre 30 y 200 euros en el caso

de los turismos, dependiendo del tipo y

prestaciones del sistema, siendo un 50%

superior en el caso de camiones y un 50%

inferior en el de motocicletas (al requerir

éstas un menor número de sensores). En

cualquiera de los casos anteriores, se

estima que los sensores representan un

coste equivalente al 50% del precio de

todo el sistema, y se considera que su

sustitución es necesaria con cada cambio

de neumáticos.

A partir de todos estos valores, la

siguiente tabla muestra la relación

beneficio-coste para una medida de

seguridad vial consistente en la

introducción universal en España de los

sistemas de control de la presión de los

neumáticos (cantidades expresadas en

millones de euros).

De los resultados obtenidos se concluye

claramente que una medida como la

implantación universal del sistema de

control de la presión de los neumáticos

en todos los vehículos presentaría un

beneficio social superior a su coste.

COSTES Precio del sistema = 30 ¤ Precio del sistema = 200 ¤

Implantación 771,85/10 5.145,69/10

Mantenimiento 117,73 784,83

TOTAL 194,9 1.299,4

BENEFICIOS

Ahorro en combustible 346 346

Mayor vida útil del neumático 1.185 1.185

TOTAL 1.531 1.531

RELACIÓN BENEFICIO-COSTE 7,8 1,2

Page 14: Sensor Tpm

Así, para un sistema de medida de

presión que tuviese un coste total de 30

euros, los beneficios podrían llegar a ser

hasta 7,8 veces superiores a los costes

globales. Para un sistema de control de la

presión de los neumáticos con un precio

final de 200 euros, los beneficios

seguirían siendo superiores a los costes,

aunque con un margen mucho menor

que en el caso anterior, dado que los

beneficios serían ahora únicamente un

20% superiores a los costes.

Los cálculos anteriores no han tenido en

cuenta los considerables ahorros sociales

asociados a la prevención de accidentes y

de víctimas mortales y heridos, por lo

que de tener en cuenta dichos ahorros,

los beneficios todavía excederían en

mayor medida a los costes de

implantación del sistema de control de la

presión de los neumáticos. En otras

palabras, incluso sin tener en cuenta los

ahorros en costes de accidentes, el precio

del sistema de control de presión de los

neumáticos quedaría compensado por el

ahorro de combustible y la mayor vida

útil de los mismos.

Para un precio del sistema de entre 30 y

200 euros, el consejo para el

automovilista debería ser muy claro: “no

se lo piense dos veces, ahorrará más en

neumáticos y combustible de lo que le

cuesta el sistema”.

Page 15: Sensor Tpm
Page 16: Sensor Tpm

© FITSA 2007. La obra se encuentra protegida por la ley española de propiedad intelectual y/o cualesquiera otras normasresulten de aplicación. Queda prohibido cualquier uso de la obra diferente a lo autorizado bajo esta licencia o lo dispuesto enlas leyes de propiedad intelectual.

Se permite la copia, distribución y reproducción de la presente obra siempre que se realice de forma individual, no lucrativay con la indicación de sus autores, de su procedencia y de los derechos de FITSA sobre la misma.

Prohibido sublicenciar la obra. Prohibida la modificación, reducción o ampliación de la obra así como su incorporación a otrasobras sin el previo y expreso consentimiento por escrito de FITSA.

Centro colaborador

Evidencias cientificas de la eficacia de las tecnologías

Colección 2006

1.- El programa EuroNcap.2.- Avance en el diseño de los reposacabezas3.- Sistema de alerta de cambio involuntario de carril4.- Avisa cinturones5.- El control electrónico de estabilidad y el sistema de ayuda a la frenada6.- Control inteligente de velocidad7.- La llamada automática e-call8.- Las luces de conducción diurna9.- Sistemas de control de la presión de los neumáticos

10.- Las luces diurnas en vehículos de cuatro ruedas y la accidentalidad de ciclomotores y motocicletas11.- Los sistemas de navegación12.- La protección de peatones y ciclistas13.- Tecnologías de propulsión híbridas

Individualmente se pueden descargar en www.fundacionfitsa.org

Patronos de la Fundación Fitsa

dis

eño:

ww

w.ju

and

elam

ata.

com