PEDALEAR E V I S T A

5 Pasos para una Ciudad Ciclable

København: el nuevo refugio para ciclistas urbanos

Publicación Mensual :: www.revistapedalea.com Año 2 :: Nº 17 :: Octubre 2015

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Claudio Olivares:La bicicleta en favor de la experiencia urbana

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Revista digital sobre ciclismo urbano, de edición mensual.

Fomentamos el uso de la bicicleta como medio de transporte l impio, saludable y moderno.

Abordamos temas relacionados al mundo de la bicicleta con un enfoque periodístico,

como también tendencias y cultura.

Directora: Myriam Salazar

Textos: Claudio Olivares Medina

Carolina Lugo RománMauricio Campbell

Myriam Salazar

Colaboración especial de Jesper Fersløv Andersen

Fotografías: Claudio Olivares Medina

Víctor Rojas Myriam Salazar

Portafolio: Ángel Fernández

Diseño y Diagramación: LME Límitada

Ventas: Victor Rojas

victor.revistapedalea@gmail.com+ 56 9 78528444

Contacto: contacto@revistapedalea.com

@revistapedalea revista pedalea

Revista Pedalea es una publicación independiente, editada por La Máquina Editores Limitada. Revista Pedalea no se responsabiliza por las opiniones de sus colabora-dores. Todos los derechos reservados. Las imágenes publicadas en este sitio no pueden ser reproducidas por ningún medio sin autorización.

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EDITORIAL

La bicicleta es limpia, sana y barata. La bicicleta no contamina. La bicicleta te da la posibilidad de hacer ejercicio. La bicicleta es barata en comparación con otros medios de transporte.

La bicicleta nos ayuda a resolver algunos de los principales desafíos que enfrenta el mundo: el cambio climático y los problemas ambientales, las enfermedades humanas relacionadas con la contaminación del aire y la falta de ejercicio, por ejemplo diabetes. Solo por mencionar algunos de los retos que la bi-cicleta puede contribuir positivamente a resolver. Además, la bicicleta puede evitar el estrés y la espera en el tráfico.

Estoy convencido de que la bicicleta tiene un gran potencial en Chile, en parte porque varios de los retos que menciono son visibles y documentados en el país. Una ciudad como Santiago, que me gusta mucho, necesita la bicicleta para solucionar de mejor manera algunos de sus desafíos.

Yo soy optimista. Creo que aún más chilenos en los próximos años optarán por tener su propia bicicleta. Hoy en día cada vez más chilenos tienen una. Varias figuras políticas la están utilizando activamente y trabajan por mejores condiciones para los ciclistas. Espero y creo que esta tendencia continúe.

Los chilenos son personas activas y amantes de las actividades al aire libre: senderismo, excursiones de camping, asados, ciclismo de montaña, esquí, surf y mucho más. Con el amor y las ganas de hacer actividades al aire libre de los chilenos, estoy seguro de que la bicicleta como medio de transporte tie-ne grandes posibilidades para convertirse en una parte importante e integral de la vida diaria de Chile. Además, su fantástico clima invita a hacerlo.

La bicicleta es parte del futuro en Chile

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Sin embargo, para que esto ocurra se necesita un gran esfuerzo de los políticos, contratistas, urbanistas y arquitectos, organizaciones de ciclismo, automovilistas, ciudadanos. ¡De todos nosotros!

Creo que la experiencia de Dinamarca como nación de ciclismo puede inspirar el proceso de cambio que Chile puede optar por elegir. Permítanme destacar dos simples pero muy impor-tantes experiencias de Dinamarca y especialmente de Copenhague.

En primer lugar. Las ciudades crean personas, las ciudades crean conducta. Una ciudad que se centra en carreteras, puentes y túneles tendrá más autos. Una ciudad que se centra en ci-clovías, aparcabicis y oportunidades para llevar la bicicleta en los trenes tendrá más bicicletas. Esa es una de las experiencias de Dinamarca y Copenhague. La gente utiliza las oportunida-des que la sociedad crea, y opta por no usar lo que no está disponible. Suena trivial, pero el impacto de esta experiencia es grande. Mediante la creación de mejores condiciones para los ciclistas, creamos más ciclistas.

A menudo nos encontramos con el argumento de que el ciclismo realmente no es una opción en muchas de las metrópolis del mundo. Fundamentalmente es demasiado peligroso andar en bicicleta en las ciudades, se dice, y la solución de los tacos y la demanda de transporte es una extensión de la red vial con carreteras de circunvalación, lo cual es importante, pero no es suficiente. La experiencia de Copenhague es que las inversiones en ciclovías y aparcabicis crean más ciclistas.

La segunda experiencia de Dinamarca es igual de simple e importante. Soluciones sustenta-bles en materia de planificación urbanística requiere no sólo de buenos directores de obras públicas, sino de aún más diálogo y participación. Todos los actores deben estar involucrados: políticos, urbanistas, arquitectos, economistas, expertos en medio ambiente, automovilistas, ci-clistas, ciudadanos, medios de comunicación. Las decisiones duraderas requieren que la base de decisiones esté plenamente informada y que todos los actores tengan acceso al proceso.

En muchas partes del mundo, el tema de la bicicleta termina a menudo en una guerra infructífe-ra entre los automovilistas y los ciclistas. En mi opinión, este debate no debe ser una discusión pro-ciclista o pro-automovilista, sino una discusión que incluye ambas partes. Una discusión para encontrar los puntos de equilibrio correctos y cambiarlos para llegar a las mejores solu-ciones para la sociedad tanto a corto como a largo plazo.

En marzo de 2016, Santiago será sede del Foro Mundial de la Bicicleta, una oportunidad única para centrarse en la forma en que, a través de un diálogo abierto, se pueda integrar la bicicleta más fuertemente en nuestras visiones y decisiones.

La Embajada de Dinamarca en Chile ha anunciado que vamos a contribuir con la experiencia danesa al foro de la bicicleta. Estamos ansiosos con este proyecto y queremos continuar el diálogo con TODOS los actores que trabajan con el ciclismo en Chile, tanto los participantes positivos como los más críticos.

Jesper Fersløv AndersenEmbajador de Dinamarca en Chile

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ACTUALIDAD

Nos quejamos de nuestras ciudades con mayor frecuencia de lo agradecemos de vivir en ellas. Fueron creadas para acercar a las cosas. En ellas podemos aprender y educarnos, acceder a salud, intercambiamos servicios y bienes, establecemos nuestras conexio-nes sociales. Colaboramos y nos desarrollamos. Mientras mejor ha-gan su trabajo más virtuosas serán.

Sin embargo nuestra experiencia urbana puede no ser la mejor. Ta-cos, contaminación del aire, ruido, tiempos de desplazamiento ex-tendidos, violencia vial, abandono del espacio público, inseguridad, son elementos que se encuentran frecuentemente en las quejas de los ciudadanos. El tiempo para compartir se torna escaso, estamos menos tiempo en casa, competimos con los demás en vez de cola-borar y muchas veces se percibe al otro como un estorbo en nuestro camino. Los niños y adultos mayores pierden su independencia y el espacio urbano termina resultando hostil.

Me atrevo a aventurar que detrás de cada una de nuestras quejas hay un deseo en todos nosotros por una ciudad más amable, una necesidad de una experiencia urbana positiva, donde el hecho de vivir juntos sea entonces en un impulsor del desarrollo de las perso-nas. Nuestra relación emocional con la ciudad cambia, la valoramos, la cuidamos. Construimos la ciudad entre todos y accedemos a sus beneficios con equidad, independiente de nuestra condición socio económica, edad, etc.

Por Claudio Olivares Medina

La integración de la bicicleta en favor de la experiencia urbana

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Afortunadamente hoy hay abundantes iniciativas que buscan mejorar la ciudad. Algunas dedicadas al espacio público, otras a la cooperación, otras en el ámbito de la movilidad y accesibilidad urbana... Hay estrategias notables por el lado de las iniciativas relacionadas al uso de la bicicleta. Un trabajo cons-tante por más de 15 años ha permitido levantar el tema poco a poco. En los últimos 10 años el uso de la bicicleta se ha duplicado en Santiago y en algunas zonas su uso ha aumentado un 600%. Con bastante frecuencia aparecen ejemplos provenientes de ciudades de Europa del norte y Escandinavia, Copenha-gue y Amsterdam son las estrellas e iconos de la integración de la bicicleta en la vida urbana.

El pasado mes de agosto un grupo de personas, profesionales del ámbito público, privado y ciudadano de América Latina tuvieron la oportunidad de participar en un viaje de estudios a Dinamarca. El Semina-rio Móvil La Ciudad Ciclable organizado por la Embajada de Ciclismo de Dinamarca, Despacio (Colom-bia) y Bicivilízate (Chile) permitió conocer de primera fuente las estrategias, desafíos y resultados de las políticas aplicadas que han hecho de sus principales ciudades referentes a nivel mundial en el uso de la bicicleta y calidad de vida en general.

Generalmente nos encandilamos con sus soluciones, en el sentido que de solo verlas las encontramos fantásticas y creemos que mágicamente aparecieron de un día para otro y las bicicletas brotaron. Tam-bién pensamos que son “otra cultura, mucho más avanzada”, y la verdad es que son gente de este mis-mo planeta, salvo que han tomado decisiones a lo largo del tiempo que han permitido mantener las co-sas a escala humana en vez de dejar que sus ciudades hayan sido moldeadas por el uso del automóvil.

Por ejemplo, A finales de los 60 Copenhague no era precisamente el paraíso del uso de la bicicleta que es hoy. El automóvil estaba entrando fuertemente. Se estaban proponiendo autopistas que cruzaban la ciudad, barrían con el espacio público y que liquidaba los barrios. La ciudad estaba ad portas de expan-dirse. Una fuerte resistencia ciudadana, con protestas violentas en algunos casos, hicieron girar el timón hacia otro lado y Copenhague dejó de mirar a Estados Unidos y empezó a observarse. Que querían sus ciudadanos, que hacían, que disfrutaban. El clima, su geografía, su cultura, etc. Se habilitaron las primeras vías peatonales y se inició un proceso que hoy ya lleva alrededor de 50 años y sigue en curso.

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No fue de un día para otro.

Desde mi perspectiva chilena te-nía en mente entrevistarme con diferentes personas vinculadas a la toma de decisiones en ma-teria de ciudad con el fin de co-nocer cuáles son los elementos esenciales de la normativa da-nesa que definen prioridad a las personas por sobre una ciudad pensada para que se muevan los autos. Luego de 4 a 5 entre-vistas con urbanistas, expertos en seguridad vial, profesionales del transporte y miembros de la federación de ciclistas daneses, mi sorpresa fue grande cuando una y otra vez, al ser consulta-dos por las leyes que estaban detrás de ese alucinante uso de la bicicleta y exquisitos espacios públicos. “Es que no hay leyes ni obligaciones específicas”. Na-die me contestó que allá existe una ley de la bicicleta o algún decreto que la declare priori-taria, etc. Se trata de que en sí es una excelente herramienta para acceder a la ciudad, es barata, práctica, limpia, sencilla, al alcance de todos, etc... Que resulta casi obvio fomentarla. Porque además ayuda a lograr otras cosas que son por un lado, legales, y por otro éticas, por ejemplo: brindar rutas seguras a los niños a sus escuelas, recono-cer a los ciudadanos a lo largo de todo el ciclo de vida. En este sentido, los adultos mayores son tan importantes como los niños, y se privilegia su independencia y participación en la vida coti-diana. Entonces por qué tomar decisiones urbanas que atenten contra el desarrollo de sus vidas alejando las cosas, haciéndoles difícil el acceso al espacio públi-co, colegios, amigos, etc? No se necesitan leyes para decir que la vida es sagrada.

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Entonces, existen normativas generales, que apoyan los valores del país, sus aspectos culturales y éti-cos. Para los detalles no son necesarias normativas estrictas que regulen todo. Las recomendaciones de diseño, acuerdos en determinados lenguajes (por ejemplo la señalización vial), recomendaciones de infraestructura, existen, pero varían en el tiempo porque la vida urbana es dinámica y si se quiere ir mejorando a lo largo del tiempo, estas no pueden ser obligaciones estáticas. Estructuras rígidas que se transforman en una carga difícil de modificar y que impide una respuesta rápida a las necesidades que van apareciendo en la ciudad.

Si tengo un medio de transporte que contamina y genera riesgos a la salud, la seguridad y habitabilidad de la ciudad, no lo incentivo, lo regulo, lo controlo, traspaso los costos que genera a sus usuarios, mien-tras como estado, tomo decisiones que favorezcan modos de transporte eficientes, amigables, baratos, etc.

Un monitoreo constante de los objetivos planteados es una herramienta clave para identificar si las ac-ciones tomadas son las adecuadas o no, permite saber si pueden ser mejoradas o deben ser cambia-das. Se trata de una aproximación a identificar oportunidades de mejora en vez de ver problemas. Quien busca problemas encontrará problemas, quien busca oportunidades de mejora encontrará soluciones, que a menudo son nuevas y deben ser implementadas para ser probadas y cuanto antes mejor, par-tiendo pequeños, a bajo costo pero buscando generar alto impacto, no en el sentido de ser vistosas, si no que un alto impacto en el sentido que brindan la solución de inmediato, en su estado más precario, pero eso puede y debe ser mejorado en el tiempo. Es el pensamiento de diseño aplicado directamente en la ciudad. Empatizar (identificar la posibilidad de mejora entendiendo a los usuarios), proponer una solución, prototipar, probar, medir, mejorar, prototipar, medir, mejorar... Etc.

Volviendo a Chile, país donde hay normas para todo, muy parecido a lo que sucede con el país que más hemos mirado para el desarrollo urbano de mercado de nuestras ciudades, Estados Unidos, donde hay reglas y normas para todo. Si y no, puede o no puede, por aquí y no por acá. No se trata de acuerdos sociales, si no dictámenes en papel de lo que se puede y no se puede, un manual de instrucciones para el diseño de la ciudad. Y quién puede innovar en el desarrollo de una mejor calidad de vida, experiencia urbana y habitabilidad de las ciudades si la lógica urbana está definida en papel y cambiarla implica años de negociaciones, discusiones, “podría ser que...”, donde incluso está el congreso de la nación involucrado?

¿Será que el exceso de normativa inhibe el desarrollo de nuestro sentido común?

A los daneses les ha tomado 50 años llegar al punto donde están hoy, exportando su conocimiento para que otras naciones puedan (si quieren) aprender de su experiencia. Si hay algo que celebrar no son necesariamente sus soluciones de infraestructura ciclo inclusiva, son los procesos y esa aproximación orientada a diseñar y brindar soluciones. Una aproximación de menos discusión y más acción es lo que les han permitido ostentar hoy el título de una de las naciones con mejor calidad de vida urbana.

¿Tendremos que esperar nosotros en Chile 50 años y más para poder ver cambios positivos en nuestras ciudades? No lo creo. El 90% de la población del país vive en ciudades, lo que hace urgente tomar de-cisiones y aplicar diseño que permita mejorar nuestra calidad de vida, equidad y accesibilidad urbana. Debemos dar el primer paso para iniciar nuestro propio proceso, debemos monitorear, verificar que tal vamos en el logro de nuestros objetivos. Y reportar nuestros avances y deudas, de tal manera que todos sepamos cómo vamos, que nos hace bien y que cosas no tanto. Que nos agrada y que debemos dejar atrás. Así avanzamos.

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MI PRIMERA BICICLETAComenzó estudiando Diseño, Imagen y Sonido para después viajar a Buenos Aires donde estudió Programación en Neu-rolingüística. “Hice mi pregrado de yoga aquí, después me fui a recorrer el mundo. Di clases en diferentes lugares, viví en Bar-celona y el último lugar donde estuve fue Polonia, hace un año estoy en Chile.

De vuelta en Santiago creó Pop-Up Yoga Sand, donde además de dictar clases de yoga invita a sus alumnos a participar de una experiencia sensorial con una especial preparación de café.

¿En qué consiste esta expe-riencia?

Cuando uno realiza una práctica de yoga todos los sentidos co-mienzan de alguna manera a ser un poquito más sutiles, entonces después de una práctica las co-sas saben diferente, mi idea en el fondo es que las personas puedan tener esas vivencias con una mayor conciencia, por-que así disfrutan mucho más las cosas ya que te conectas mucho más con lo que estás viviendo.

“Depende de la preparación del café, hay diferentes sabo-res, olores y todo eso te lleva de alguna manera a un viaje. Haces la práctica de yoga, flui-da y concentrada, tiene que ver con el campo energético, mental y físico. Luego de eso hay una instancia en donde se prepa-ra un café filtrado, es toda una ceremonia, una terapia. Antigua-mente en Medio Oriente el café era muy importante, hay algunas

Criss Sandoval:instructor de yoga y barista, invita a la gente a crear y seguir sus sueños

Por Myriam Salazar

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etnias que lo preparaban como terapia, como un rito. La idea es hacer este pequeño ritual; de alguna manera todo lo que tú entregas es la energía que le pongas a las cosas y como sabrá al final, entonces hacemos un tipo de preparación que se centra en el filtrado, donde proliferan los sabores dulces y flo-rales del café” comenta Criss.

Practicamos en diferentes lugares, por ejemplo en Sala Om en Bustamante # 44, poquita gente, un es-pacio chiquitito pero con el corazón siempre prendido. La idea de Pop-Up Yoga Sand es montarlo en parques o terrazas al aire libre, con Dj, música y otras experiencias como comida vegetariana, esta idea la desarrollé en Polonia, lo hice bastante allí quiero replicarlo y tratar de no copiar nada, la idea es crear todo el tiempo.

La cross roja

Mi infancia fue muy bonita y desde chico tuve una relación súper especial con la bici. Soy el mayor de cuatro hermanos, el que me sigue siempre ha sido mi partner, mi amigo. Aprendimos a la misma edad a andar en bici y a nadar, mi papá me enseñó como a los 5 o 6 años, después con los amigos del barrio.

Para mí la bicicleta más que un medio de transporte al final se transforma en una especie de amistad porque le pones nombre, la cuidas, la llevas a todas partes, nunca te dice nada, es como la novia ideal, la mía se llama la plateada porque es cromada completamente.

Me crié en varios barrios, iba en un colegio que se llamaba República de Zaire. Nos íbamos en bici al colegio porque no quedaba tan lejos, pero varias veces me la robaron ya que no nos dejaban entrar las bicicletas dentro del colegio. No había cultura ciclista, tenía que dejarla afuera. Hartas anécdotas y har-tos sustos también. Muchas veces casi me atropellaron, hasta me asaltaron por la bicicleta cuando niño y a veces era traumante. Pero lo pasaba bien, siempre con amigos. Me acuerdo de algunas películas que vi cuando niño, donde los protagonistas tenían bicicross. Esa bicicross roja fue la que me trajo el viejo pascuero. Me acompañó harto tiempo esa bicicleta porque me quedaba grande jajaja.Nosotros los chilenos somos una sociedad un poquito enferma, en el sentido de que no tiene aper-tura de corazón, no hay concien-cia de las cosas, cada persona hace las cosas para sí y no ve al resto. A nuestro país le hace falta abrirse un poco más hacia el respeto con uno mismo y con el resto. Cuando hay una catás-trofe todos nos unimos y somos los más solidarios, pero hay que ser solidarios todos los días, con el que pide en la calle, con el vecino. El respeto es lo principal para que esta sociedad funcione y la bicicleta es una apertura de conciencia y a nivel físico tam-bién.

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Mi nombres es Carolina Lugo, soy diseñadora industrial de la Universidad de Nariño en Pasto - Colombia y le apuesto todos los días hace 5 años al proyecto Bicivilízate Pasto, proyecto que nació como tesis de grado y se convirtió en una iniciativa ciudadana que fomenta el uso de la bicicleta como medio de transporte, de transformación urbana y social.

En estos años estudiando, leyendo y trabajando por el uso de la bicicleta en la ciudad, conocí los ejem-plos de ciudades que han logrado moverse en bicicleta y mejorar su calidad de vida, Copenhague ha sido el sueño hecho realidad de los que creemos en ciudades ciclables y soñaba con conocer ese lugar que inspira mi trabajo, la ciudad danesa que he tomado como ejemplo para transformar mi ciudad.

Durante el Seminario – Taller La Ciudad Ciclable, se cumplió para mi ese sueño y Copenhague me reci-bió con todo lo que tenía para enseñarme y demostrarme que es mucho el trabajo que nos queda por delante cuando pasas la calle con los ojos cerrados y todo se detiene para que puedas pasar y te dices: Bienvenida a Copenhague una ciudad planeada para todos y diseñada a escala humana, la nación más feliz del mundo donde el 48% de la población se mueve en bicicleta, cuna de Jan Gehl, de la Sirenita y la deliciosa Carlsberg.

VIVENCIAL

5 Pasos para una Ciudad Ciclable

Pedalear es uno de los actos más poderosos que el ser humano puede hacer por su ciudad, el medio ambi-

ente, la comunidad y las generaciones futuras.

Por Carolina Lugo Román

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Entender y estudiar la lógica de la ciudad, los ha llevado a satisfacer las necesidades reales de sus habitantes, lo notas cuando alquilas una bici y puedes pasear toda la ciudad sin contratiempos, cuando pasa a tu lado una niña de 6 años, sola en su bici, camino al colegio y ves a las madres y padres llevar sus niños en una Cargo Bike. Copenhague es fácil de leer, su infraestructura, señalización y cultura ciu-dadana la hace una ciudad ciclable.

De estos días en bici por Copenhague, me queda no solo la esperanza de que a nosotros nos tome me-nos tiempo llegar a esa ciudad que soñamos sino también la lección que guiará mis acciones para la transformación de mi ciudad, lección que he resumido en 5 pasos para una Ciudad Ciclable:

• 1. Estudios y generación de datos: Realizar estudios y conteos en diferentes dimensiones, conocer las necesidades reales de nuestra ciudad y demostrar.

• 2. Actores: Articular la fuerza de los diferentes actores: academia, voluntad política, organizaciones y ciudadanía.

• 3. Infraestructura e intermodalidad: Infraestructura que te invite a moverte en bicicleta, lo que la ciudad nos ofrece determina el comportamiento de las personas, Bicicarriles, intersecciones segu-ras, semaforización para bicicletas y peatones, contador de ciclistas, puentes que ahorran tiempo y hacen eficiente tu viaje, espacio para todos los modos de transporte etc. Ejemplo interesante: The Cycle Serpent, Norreport Station

• 4. Programas: Fomento del uso de la bicicleta desde pre – escolar hasta bachillerato y programas al trabajo en bici. Ejemplo Interesante: Cycling without age.

• 5. Políticas Públicas: Trabajar para que el estado dé como resultado a la presión de la sociedad, políticas reales como lineamiento de trabajo para transformar la ciudad.

No olvidar preguntarse todos los días: ¿Cuál es la meta? ¿Cuál es la ciudad que queremos?

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AndrésAchavar

Por Ángel Fernández

Pintor e ilustrador comenzó a relacionarse desde pequeño con el arte gracias a la motivación que recibió de su madre, “en ese entonces era la pintura y la música y creo que eso, poco a poco, fue definiendo mi vida, una práctica constante que de un hobbie fue tomando forma y me llevó a incorporarlo como una manera de vivir. Más ade-lante, lo tomé en serio gracias a cursos y ahí fue cuando descu-brí la acuarela como una compa-ñera incansable de mis trabajos” agrega Achavar.

Fundador de la Asociación de Pintores ChileAcuarelas 2013 y Director en Chile de la Interna-tional Watercolor Society (IWS Chile) en 2015. Sus obras se encuentran en Estados Unidos, España, Francia y en Regiones de Chile.

Su técnica corresponde a la acuarela y el estilo a la línea de lo figurativo concentrándose en el Realismo Contemporáneo. Sus temáticas son urbanos, pinturas mundanas, recorridos cotidianos en donde el estudio de la luz es un eje principal.

Mis obras cuentan historias, son pinturas expresivas imbuidas en un estado de ánimo en donde el misterio atrae al espectador de una forma mágica. Son pinturas con fuerza y la interpretación de la luz captura el alma de los lugares que pinto.

PORTAFOLIO

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El proceso creativo surge a partir de escaparse de locaciones co-nocidas por el turista y centrarse en el comportamiento de la luz, desde ese momento el lugar debe ser capaz de inspirarme y verlo como una pintura resuelta en mi cabeza. Las locaciones en más de una ocasión voy a visitar para capturar una mejor luz por la mañana, por la tarde, de ahí nacen los apuntes, bocetos, la composición y finalmente la obra.

¿Cuáles son tus referentes?Referentes hay varios por nom-brar algunos actuales como Alvaro Castagnet (Uruguay), Manuel Gomez Hassan (Chile), Joseph Zbukvic (Australia-Croa-cia) y antiguos como William Turner (Ingles), Winslow Homer (EE.UU.)

¿Cómo ves el mundo que te rodea?Me encuentro en Santiago hace poco tiempo y el mundo que me rodea se olvida de la belleza que los rodea dado al factor tiempo, factor vandalismo con el entorno y también mencionar el factor inmobiliarias, es una lástima. Al mismo tiempo veo una parte de Santiago que se preocupa de su historia, su patrimonio, tam-bién de grupos que restauran el entorno, grupos que nos trasla-dan al pasado sobre los lugares donde estamos. Como pintor me toca asumir un papel ser un observador y además asumir la misión de restaurar la belleza de lo olvidado a través de mis pinturas.

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Al pasar por la esquina de Bellavista con Loreto en pleno barrio Recoleta llama la atención el letrero Kø-benhavn (Copenhague) y dan ganas de entrar y saber de qué se trata.

¿Una tienda de bicicletas? ¿Una cafetería?

Al entrar a København Commuter Coffee descubres una cafetería de especialidad en la que un barista prepara un perfecto expreso y a un par de pasos conectas con una tienda de bicicletas y continúa con un taller ciclista que incluso cuenta con una ducha para bicicletas.

Esteban Latorre es uno de los responsables de este singular espacio, “es un proyecto que está en de-sarrollo”, cuenta Latorre. Él a través de su experiencia viviendo en el extranjero desarrolló un modelo de negocio que mezcla el café con una tienda y servicio para bicicletas.

“Estamos enfocados en el servicio al cliente más que en el producto. Si bien es cierto tenemos un café de muy buena calidad, trabajamos con baristas que de verdad saben mucho del café y se capacitan constantemente. Tampoco nos enmarcamos dentro de una cafetería de especialidad como se les llama en Santiago hoy en día” comenta Latorre.

El objetivo principal es brindar una atención de calidad, a través de una cafetería con internet, venta de accesorios y productos, como también servicios para la bicicleta. Aquí en 20 minutos -tiempo que demora en reparar un pinchazo de rueda- el cliente puede esperar su bicicleta en la comodidad de la cafetería y seguir conectado.

Københavnel nuevo refugio para ciclistas urbanos

EL TALLER

Por Myriam Salazar

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En København Commuter Coffee tienes la posibilidad de contar con un servicio a partir de las 7am, imagina que vas a tu trabajo a las 7 de la mañana y pinchas una rueda, entras a un lugar en donde de-jas la bicicleta, sigues conectado gratuitamente y además puedes tomar desayuno mientras espera tu bicicleta.

¿Cómo nace el proyecto?Soy publicista y también estudié sicología, toda la vida mis trabajos han estado orientados hacia el servicio. Desde chico me gustaron las bicicletas y además trabajé en una compañía extrajera de café, que involucra un café de muy buena calidad, el que es consumido por un perfil específico de personas. Así fui descubriendo una inte-resante mezcla con estos dos elementos, la bicicleta y el café. Hay un segmento de gente que busca diseño, la sustentabilidad, que tiene que ver con el café muy fuertemente. Hace un par de años em-pecé a ver esto pero nunca con un proyecto claro, hemos trabajado con varias personas el concepto más amplio de este espacio.

Luego de trabajar en Buenos Aires volví a Chile me di cuenta que la economía permitía emprender, pensé en una estrategia y empezó a funcionar, el tema de las bicicletas estaba muy fuerte y la cafetería también y ahí dije ahí está, se puede.

BaristasRebeca Silva es venezolana y barista, está a cargo de que cada café llegue perfecto a manos del cliente. “ Trabajamos con café Altura, de Guatemala, es muy fresco ya que viene en grano verde y es tostado en Santiago, hay días que llega tostado el mismo día. “Mi especiali-dad es el expreso y el arte late –diseño sobre la espuma de leche- la gente me pide que le dibuje bicicletas sobre el café”.

Nosotros no buscamos

vender 100 millones de

bicicletas, lo que buscamos es la experiencia de

compra personalizada.

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El barrioEste es además un modelo sus-tentable en cuanto a integrar al barrio, los vecinos tienen des-cuentos y están invitados a tener una esquina totalmente distinta de lo que era, antes estaba bien abandonado y sucio.

¿Porque ubicar este proyecto en esta esquina?Tiene que ver con la proyección turística que tiene Loreto, es una calle con historia, la Chim-ba. Además el edificio tiene un carácter muy escandinavo, me-dio europeo, era lo que andaba buscando para la marca Køben-havn.

Un cliente que llega a Køben-havn Commuter Coffee le mos-tramos la tienda y empezamos a trabajar con él en torno a la uti-lidad que tendrá la bicicleta. Lo primero es buscar el perfil, luego margen de presupuesto y terce-ro le preguntamos los colores que prefiere. Con estos datos trabajamos el ciclo de la infor-mación, ingresamos estos datos a nuestro sistema y obtenemos dos o tres bicicletas que se aco-modan mejor a cada cliente, él decide y realiza la compra. En nuestra tienda puedes llevarte una bicicleta desde los $300.000 hasta una por varios millones de pesos, cuenta Esteban.

A fin de 2015 contarán con una terraza con biciestacionamien-tos y trabajan para ser un aporte a la cultura, haciendo eventos con artistas y bandas en vivo. København Commuter Coffee proyecta expandirse hacia re-giones y el extranjero.

www.kobenhavn.clLoreto N°5, Recoleta

Lunes a viernes 07:00 a 20:00

Sábado y domingo 09:00 a 19:00

Facebook: København

Commuter Coffee

Twitter: @KobenhavnSCL

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EMPRENDENCLETA

Verónika Maier es diseñadora in-dustrial, usa una impecable bici-cleta setentera que compró en el Persa Bío Bío en una tienda de antigüedades ya que le gusta lo retro.

Rieldling es un pequeño pueblo ubicado en Bavaria, Alemania. “Mi pueblo es tan chico que te-nía que ir a l kínder garden y la primaria a otro pueblo. Siempre tomaba el bus desde chica y para ir al colegio no podía usar la bicicleta porque era demasia-do lejos” cuenta Verónika Maier.Su infancia estuvo rodeada por la naturaleza, en una casa de campo con dos jardines gigan-tes, junto a su abuela, hermanos y padres. Cerca hay un bosque muy tranquilo donde incluso se pueden ver venados y otros ani-males.

Cuando terminó el colegio viajó a Panamá a hacer labor social por seis meses, le gustó el idioma y quería conocer mejor América latina y aprender español. “No sabía mucho de Chile, pensaba que era mucho más diferente de dónde vengo, para mi Santiago tiene mucho de Europa”.

“La primera vez que llegué a Chi-le vine por intercambio en 2008 por un semestre, después de eso volví un par de veces más, terminé mi carrera en Alemania y hace dos años regresé a San-tiago. Me gusta mucho andar en bicicleta, cuando estudiaba la usaba todos los días, porque es más rápido y me gusta ser in-

Hohok: accesorios con un toque retro para un

viaje seguro y con estilo

Por Myriam Salazar

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dependiente. Cuando llegué me di cuenta de que pocas personas usaban la bicicleta. En estos dos años ha crecido mucho la cantidad de usuarios de la bici”. De esta forma Verónika fue conociendo más de las necesidades que se manifiestan sobre dos ruedas, “vi que no había gran oferta de accesorios cómodos para usar en bici y los que había eran más bien outdoor, no tan urbanos. Así fue como creó su marca de diseño para ciclistas.

Verónika se encantó con la cultura selk’nam, “me llama la atención como se pintan, sus máscaras y vestidos, tenía muchas ganas de conocer la Tierra del Fuego”. De esta cultura tomó el nombre para su proyecto, Hohok que significa cabalgata.

Sus productos van desde bolsos para llevar cómodamente en la bicicleta como es el bolso Akainik, fabricado en cuero y cosido a mano. Otros productos de esta línea son billeteras, portapasaporte, carteras, tarjeteros y cinturones todos en cuero. Para la fabricación utiliza materiales que consigue en el barrio Victoria como lona, al-godón, cuerina, además recicla sacos de café con los que realiza detalles en los yoga mat. Todos ellos pueden ser personalizados, por ejemplo tu billetera puede llevar tu nombre grabado.

Los diseños de Hohok se pueden encontrar en su sitio web y locales como København Commuter Coffee y Cachay Pop en el Drugstore. Antes de fin de año lanzará un online shop para facilitar la compra.

www.hohok.deFacebook: Hohok Handgemacht

+569 8426 0117

URBANO

Khaled Darwich Moreno, actor

Khaled Darwich Moreno, actor Daniela Castillo Toro, actriz

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LIBROS

Duermes. Las pesadillas no cesan. Te gustaría despertar, pero algo lo impide. Eres mala, muy mala. La peor persona del mundo. Ese niño se aparece todo el tiempo cuando tratas de descansar. Es un verdadero fantasma. Nunca has sabido bien cómo fuiste capaz de matarlo si él te quería, confiaba en ti. Tenía apenas seis años.

Fumas. Te tranquiliza a ratos. Lo necesitas porque esos sueños ni siquiera te dejan en paz cuando estás despierta. Te vuelven loca. Es lo que todos piensan de ti: estás loca. Y eres peligrosa. Nada que se pudiera adivinar de tu delicada apariencia.

Actúas. Ya no quieres ser Sophie. Ese nombre te tiene marcada como asesina, ladrona: una criminal buscada por la policía y por los padres del niño. El niño…

Hablas. Piensas. Escribes todo lo que te pasa por la cabeza. No tienes filtro. Por eso todos sabemos lo que hiciste, la clase de mujer que eres.

Engañas. Huyes. Robas. Matas. Improvisas para sacar ventajas porque no quieres hacerte cargo de lo que hiciste. Hasta que de pronto dudas. Un detalle, un mínimo detalle y dudas. De todo.

Vives en la oscuridad. Aletargada. Hasta que un rayo de luz se filtra entre las nubes. Hay esperanza. No sabes si tomarla. Aunque no lo crean los demás, sufres con todo el mal que haces. Estás en el mo-mento crítico para decidir. Hazlo.

Por Mauricio Campbell

Vestido de noviaPierre Lemaitre

Editorial alfaguara291 páginas

$ 14.000