psicosis infantiles

12
PSICOSIS INFANTILES La psicosis ha evolucionado en su semiología y ha cambiado su marco teórico a lo largo del tiempo. Actualmente se distingue entre ciertas formas clínicas (prepsicosis y parapsicosis). La historia recién de las psicosis infantiles está señalada por la introducción, en 1943, del autismo de Kanner. I. Estudio clínico de las psicosis infantiles A. ESTUDIO DE LAS PRINCIPALES CONDUCTAS 1. Aislamiento-Autismo: incapacidad del niño para establecer un adecuado sistema de comunicación con su entorno. Característico del autismo, puede darse desde muy temprana edad. En el curso del primer año: los niños autistas son tranquilos, no solicitan nada a nadie, son indiferentes ante la presencia de un adulto. Hay ausencia de actitudes anticipatorias (por ej.: no vuelven la cabeza hacia la madre cuando ésta entra en el cuarto). Se notan alteración a nivel psicomotor: ausencia de sonrisa (3 er mes) y ausencia de reacción de angustia ante el extraño (8º mes). Segundo y tercer año: el autismo es evidente. No hay contacto con el entorno, ni con la madre siquiera. Mirada vacía, ausente, aunque a veces se nota una vigilancia extrema (observar al adulto de reojo). Rehúsa el contacto físico y parece no reaccionar cuando los padres se marchan (no llora) ni ante la presencia de extraños. Utiliza los objetos de forma extraña, mediante manipulaciones repetitivas y estereotipias. Se interesa por objetos duros, sonoros, trozos de objetos. No se presenta el vínculo normal hacia un objeto en particular. Las muñecas y los figurines humanos pueden desencadenar su agresividad (les arranca la cabeza, etc.). Las relaciones con otros niños son nulas, en algunos casos cualquier tentativa de contacto humano despierta crisis de cólera violentas, hetero o autoagresivas. 2. Conductas motoras: Anomalía Tónica: hipotonía generalizada, la catatonia es rara, pero puede presentarse en las psicosis de la segunda infancia. Gestualidad inhabitual: por ejemplo, el juego de las manos ante los ojos puede persistir durante mucho tiempo. La marcha se adquiere dentro de los cánones normales. Comportamientos motores específicos, las estereotipias motrices: son frecuentes. Se trata de movimientos repetitivos de las manos, la cara, en la marcha y la cabeza. Deambulación, balanceo, olfateo, etc.

Upload: ana272

Post on 13-Dec-2014

37 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Psicosis Infantiles

PSICOSIS INFANTILES

La psicosis ha evolucionado en su semiología y ha cambiado su marco teórico a lo largo del tiempo. Actualmente se distingue entre ciertas formas clínicas (prepsicosis y parapsicosis).

La historia recién de las psicosis infantiles está señalada por la introducción, en 1943, del autismo de Kanner.

I. Estudio clínico de las psicosis infantiles A. ESTUDIO DE LAS PRINCIPALES CONDUCTAS

1. Aislamiento-Autismo: incapacidad del niño para establecer un adecuado sistema de comunicación con su entorno. Característico del autismo, puede darse desde muy temprana edad. En el curso del primer año: los niños autistas son tranquilos, no

solicitan nada a nadie, son indiferentes ante la presencia de un adulto. Hay ausencia de actitudes anticipatorias (por ej.: no vuelven la cabeza hacia la madre cuando ésta entra en el cuarto). Se notan alteración a nivel psicomotor: ausencia de sonrisa (3er mes) y ausencia de reacción de angustia ante el extraño (8º mes).

Segundo y tercer año: el autismo es evidente. No hay contacto con el entorno, ni con la madre siquiera. Mirada vacía, ausente, aunque a veces se nota una vigilancia extrema (observar al adulto de reojo). Rehúsa el contacto físico y parece no reaccionar cuando los padres se marchan (no llora) ni ante la presencia de extraños. Utiliza los objetos de forma extraña, mediante manipulaciones repetitivas y estereotipias. Se interesa por objetos duros, sonoros, trozos de objetos. No se presenta el vínculo normal hacia un objeto en particular. Las muñecas y los figurines humanos pueden desencadenar su agresividad (les arranca la cabeza, etc.). Las relaciones con otros niños son nulas, en algunos casos cualquier tentativa de contacto humano despierta crisis de cólera violentas, hetero o autoagresivas.

2. Conductas motoras: Anomalía Tónica: hipotonía generalizada, la catatonia es rara, pero

puede presentarse en las psicosis de la segunda infancia. Gestualidad inhabitual: por ejemplo, el juego de las manos ante los

ojos puede persistir durante mucho tiempo. La marcha se adquiere dentro de los cánones normales.

Comportamientos motores específicos, las estereotipias motrices: son frecuentes. Se trata de movimientos repetitivos de las manos, la cara, en la marcha y la cabeza. Deambulación, balanceo, olfateo, etc.

Inestabilidad: niños es constante estado de agitación. Los golpes, las caídas, no desencadenan ni llanto ni defensa. En otros casos se puede observar una inhibición motriz masiva y torpeza gestual.

3. Trastornos del lenguaje: Puede darse ausencia total del lenguaje (autismo). Son niños

silenciosos que no emiten mas que ruidos extraños y estereotipados. Otras veces la aparición del lenguaje tarda mucho (4-5 años).

El canturreo es frecuente, puede retener las frases de una canción sin otro tipo de lenguaje. Se da acompañado de ecolalias, a veces.

Page 2: Psicosis Infantiles

En algunos casos, cuando el lenguaje existe, se perciben anomalías en cuanto a la utilización de los pronombres (el yo es sustituido por tu o por el).

Se dan también estereotipias verbales, neologismos extraños y verbalismo solitario.

el lenguaje no tiene una función comunicativa y es habitual la indiferencia frente al lenguaje del otro. El niño no responde a su nombre y no se perturba frente a los ruidos. Es necesario descartar el diagnóstico de sordera.

4. Trastornos de las funciones intelectuales: es común el déficit intelectual, y su evolución es variable. Diversas funciones específicas (organización temporo-espacial, rítmica, etc.) pueden estar perturbadas. Hay que señalar también la dificultad en la integración del esquema corporal, verificada con los dibujos del muñeco.

5. Trastornos afectivos: además del autismo son frecuentes los trastornos afectivos. Oscilaciones rápidas del humor: sin razón alternan fases de tristeza

o llanto con inhibición motriz, con fases de risas y agitación motora.

Crisis de angustia aguda: pueden ser espontaneas o después de frustraciones mínimas, o tras un cambio imprevisto del entorno. La angustia es masiva y representa una ruptura en la continuidad psíquica del niño, quien experimenta una vivencia de estallido o aniquilación. A veces van acompañadas de crisis de agitación o coléricas.

Crisis de risa: parecida a la risa discordante del adulto, gritos o quejas brutales sin vinculación aparente con el ambiente.

Crisis de cólera, intolerancia a la frustración, automutilaciones: son frecuentes.

6. Trastornos de las conductas mentalizadas: Las fobias son frecuentes en las psicosis de la segunda infancia. Los rituales son a veces múltiples: al acostarse, de verificación,

de contacto, de ordenamiento, de limpieza, etc. El delirio es raro en el niño, excepcional antes de los 10 años. La

presencia del delirio muestra profundas distorsiones en el reconocimiento del Yo y del otro, del mundo real y del imaginario. La temática delirante se centra en el cuerpo, o retoma temas evocados en el ambiente. Puede haber delirio de persecución de la misma forma que en el adulto.

Las alucinaciones son difíciles de constatar. Diferenciar la alucinación de una actitud soñadora autística no es fácil en el niño pequeño.

7. Trastornos psicosomáticos y antecedentes somáticos: Trastornos del sueño: son muy frecuentes. Hay dos tipos (aparecen en

el primer semestre y pueden durar años): el insomnio tranquilo del bebe: mantiene los ojos abiertos en la

oscuridad sin reclamar la presencia materna. El insomnio agitado: el niño grita, se mueve, chilla, sin poder

calmarse durante horas, todas las noches Trastornos alimenticios precoces: succión deficiente, anorexia,

rechazo del biberón o del seno, vómitos repetidos, etc. Aparecen en el 1er semestre.

Page 3: Psicosis Infantiles

Trastornos esfinterianos: enuresis, encopresis, pueden ser primarios o secundarios, permanentes o intermitentes.

Antecedentes somáticos: la existencia de antecedentes patológicos es superior a la observada en una población normal. Factores de vulnerabilidad: embarazo difícil, prematuridad, patología neonatal, etc.

Epilepsia: asociado frecuentemente con las psicosis infantiles.

B. AGRUPACION DE LAS CONDUCTAS El segundo plano de estudio de las psicosis es el sindromico, es decir, las

agrupaciones de los rasgos de comportamiento en conjuntos más o menos estables y coherentes. La dificultad del estudio sindromico de las psicosis infantiles proviene de su gran diversidad y de la ambigüedad del repertorio nosográfico de cada autor.

La agrupación aquí propuesta implica cierta arbitrariedad que se expresa en la clínica mediante la mutliplicidad de las formas limítrofes: parapsicosis, prepsicosis, trastornos graves de la personalidad, etc.

La mayoría de los autores (franceses) están de acuerdo en distinguir las psicosis precoces de las de la segunda infancia (6-12 años), llamadas también psicosis de la fase de latencia o de la edad escolar.

1. Psicosis precoces: a. Autismo precoz de Kannerb. Otras psicosis precoces.

2. Psicosis de la segunda infancia.

1. Psicosis precoces Autismo precoz de Kanner: el inicio es precoz, el síndrome puede ser

observado en el transcurso del 2º o del 3er semestre y es evidente durante el 2º año. Se asocia a: aislamiento o soledad, inmutabilidad, ausencia de lenguaje.

La inmutabilidad indica la necesidad ansiosa del niño autista de mantener su entorno idéntico, objetos y muebles deben conservar un mismo lugar, un mismo aspecto y un mismo orden.

Estos niños gozan de una buena salud física, raramente están enfermos y tienen un satisfactorio desarrollo motor. Tienen un elevado umbral frente a estímulos dolorosos, también al frío y al calor.

Presentan una incapacidad de reconocimiento y de discriminación de las diversas emociones mímicas faciales.

Evolución: dos factores tienen valor predictivo: la existencia de un cociente intelectual superior a 50 y la ausencia de lenguaje transcurridos ya los 5 años, lo que aumenta el riesgo de que el niño siga en su aislamiento autista.

Alrededor de la mitad de estos niños no evolucionan, el autismo sigue siendo intenso, el lenguaje no se adquiere y el funcionamiento cognitivo es pobre. Con la edad el cuadro evoluciona hacia un retraso grave.

Los niños que llegan a adquirir un lenguaje y un mínimo de funcionamiento cognitivo no evolucionan a un déficit mas grave. Pero son raros los niños que llegan a acceder a un nivel de autonomía que permita la inserción escolar y profesional

Page 4: Psicosis Infantiles

Otras psicosis precoces: se distinguen del autismo porque aparecen después de un periodo de desarrollo normal en apariencia (inicio: entre 2-3 años y 5-6 años). Son mas frecuentes que el autismo de Kanner.

Síntomas: crisis de angustia, perturbaciones motrices, rituales defensivos, trastornos del lenguaje y de la voz, trastornos psicosomáticos, frecuente labilidad afectiva, existencia de una catexis deficitiaria de las funciones cognitivas.

Cada autor propone una agrupación de estos síntomas en distintas patologías. Por ejemplo:

M. Malher: psicosis simbiótica, que comienza durante el 3er o 4º año de vida. Se puede observar irregularidad en el crecimiento y vulnerabilidad del Yo ante la más mínima frustración. En la evolución de las psicosis simbiótica se dan una sucesión de manifestaciones afectivas ambivalentes: tanto búsqueda imperiosa de contacto afectivo con el otro que rápidamente toma un cariz de fusión como reaccion de angustia y de huida ante la amenaza representada por la absorción. El niño puede morder y calmarse al mismo tiempo, acariciar y pellizcar, etc.

F. Tustin describe tres tipos de autismo:1. Autismo primario normal: es la prolongación del autismo primario

normal, se da principalmente en los casos de carencia afectiva grave.

2. Autismo secundario de caparazón (ASC): el niño parece construirse un caparazón alrededor de su Yo. La huida de todo contacto es extrema. Se asemeja al autismo infantil de Kanner.

3. Autismo secundario regresivo (ASR): caracterizado por la regresión protectora, frente al terror experimentado ante el no-Yo y lo desconocido. La fragmentación, la dispersión y la escisión son los mecanismos prevalentes.

Las formas “limítrofes”: son patologías intermedias entre las organizaciones neuróticas y las psicóticas. El contacto con la realidad esta parcialmente preservado, pero la naturaleza de las relaciones establecidas, los mecanismos defensivos y la vivencia fantasmática aproximan estas formas a las observadas en las psicosis infantiles.

Pertenecen a este campo:1. Disarmonías evolutivas de cariz psicótico2. Distimias Graves3. Prepsicosis 4. Parapsicosis5. Organizaciones caracteriales graves.

2. Psicosis de la segunda infanciaLos signos manifiestos aparecen entre los 5-6 años y los 12-13 años. Son más

raras que las psicosis precoces, algunas son la prolongación de una forma precoz. En algunas formas las conductas psicóticas aparecen después de una infancia aparentemente normal, aunque esta “normalidad” hay que tomarla con reservas. La historia clínica de estos niños muestra en muchos casos signos de una distorsión precoz en alguna de las líneas madurativas: anorexia precoz y rebelde, trastornos graves del sueño, docilidad y sumisión excesivas, rituales obsesivos, etc. Estos signos no fueron valorados por la familia ni por los médicos en su debido momento.

Page 5: Psicosis Infantiles

Las psicosis de la segunda infancia se dan en personalidades mucho mas estructuradas, con un grado de maduración superior que en las precoces. El lenguaje se halla elaborado, lo real es percibido como tal etc. Las manifestaciones psicóticas aparecen como conductas regresivas o desestructuradas en relación con las actitudes anteriores del niño.

a) Reacción al retraimiento: se asemeja al autismo secundario. El niño poco a poco pierde el interés, rompe las relaciones con sus amigos, se aísla cada vez mas en sus habitaciones, rehúsa salir y cesa en sus actividades deportivas o culturales. Este aislamiento puede llegar a ser extremo. En algunos casos el niño conserva una aparente adaptación social con algunos trastornos del comportamiento: rechazo escolar, fugas, crisis de cólera y agresividad, etc.

b) Conductas motrices: se organizan según dos polos: Inhibición y retraimiento: aspecto estupuroso, mímica pobre,

actitudes catatónicas transitorias que señalan fases de agravación. Inestabilidad y agitación psicomotriz: a veces se trata de una

antigua inestabilidad que nunca ha podido ser controlada por el niño y que se presenta con crisis de agitación aguda o crisis de cólera con hetero o autoagresión, fugas incesantes, etc. Se acompañan de trastornos del sueño, rechazo alimenticio y trastornos esfinterianos. En ocasiones aparecen conductas muy impulsivas: violencias verbales, agresiones violentas a un tercero, piromanía, conducta delictiva, etc. Normalmente reacciona antes esas conductas con indiferencia.

c) Trastornos del lenguaje: Posibilidad de un mutismo secundario: lentamente el niño deja de

hablar, en principio con el círculo externo a la familia, después puede llegar a ser total. A veces se mantiene la comunicación mediante la escritura o el dibujo.

La regresión formal del lenguaje: desestructuración de la organización lingüística con anomalías similares a las encontradas en las psicosis precoces, que puede llegar a la completa desorganización (retorno al lenguaje autoerotico, etc.). Pueden aparecer neologismos y manierismo verbal.

Hipercatexis del lenguaje: búsqueda de un lenguaje adulto-morfo. El niño puede aprender las definiciones del diccionario o de una lengua nueva. Aparece como un obstáculo a la comunicación y al intercambio afectivo.

d) Fallos en la catexis cognitiva: fallos bruscos en la capacidad intelectual. Este empobrecimiento intelectual suele aparecer como una defensa contra la vivencia psicótica de mutilación o desrealización.

e) Trastornos de cariz neurótico: Fobias: pueden ser extensivas y cambiantes o muy fijadas,

racionalizadas por el niño y su familia. Obsesiones: son muy frecuentes. Los rituales poder ser antiguos (al

acostarse) pero enriquecidos con nuevas manifestaciones (rituales de ordenamiento, de limpieza, de lavado, de verificación, etc.)

a) Manifestaciones de ruptura con la realidad: a partir de los 6 años la invasión del pensamiento por manifestaciones delirantes o sensorializadas, pero son muy raras. En el curso de episodios agudos se puede observar:

Page 6: Psicosis Infantiles

Bouffées de angustia hipocondríaca o cinestésica: dolores de cabeza, de abdomen, de espalda, etc. Las angustias hipocondriacas expresan la fragilidad de la imagen corporal, la amenaza de mutilación, etc.

Ideas delirantes polimorfas: ideas difusas, poco elaboradas. Predominan las ideas de tinte persecutorio.

Alucinaciones: es discutible ya que la frontera con la ensoñación imaginativa o la fantasía no siempre es fácil de determinar. Las más frecuentes son las visuales y cinestésicas, son poco elaboradas.

C. EVOLUCION DE LAS PSICOSIS INFANTILESSe observan globalmente las siguientes evoluciones:

Evolución hacia la debilidad profunda o severa: agravación de la no catexis cognitiva inicial. Evolucionan a cuadros de encefalopatías infantiles.

Evolución centrada en el autismo: el lenguaje puede haber sido adquirido pero es extraño, asintáctico. La intensidad del autismo hace imposible la escolarización, a pesar de un rendimiento cognitivo conservado.

En los dos casos anteriores, en la edad adulta el cuadro clínico será el de una psicosis deficitaria o una psicosis esquizofrénica con predominio de sintomatología autística. Se produce una absoluta dependencia institucional.

Mejora parcial con evolución de la sintomatología: o Hacia conductas de tipo fóbico u obsesivas que constituyen la

expresión de las tentativas de control interno por parte del sujeto.

o O hacia la aparición de trastornos mayores del comportamiento, de tipo caracterial grave o psicótico. Expresan la tentativa de proyectar al exterior las pulsiones destructoras.

En estas ultimas formas, la crisis de la adolescencia si bien resulta difícil, constituye una posibilidad de cambio. Si bien aparece la violencia y agresividad, conductas sexuales desbocadas, en algunos casos, esta evolución temporalmente caótica permite la reelaboración de la organización fantasiosa y cierta liberación en relación al proceso psicótico. En la edad adulta, estos paciente pueden entrar en el cuadro de “trastornos de la personalidad” con un déficit cognitivo mas o menos importante.

Evoluciones favorables: algunas veces se observa una relativa regresión del autismo, adquisición del lenguaje, y un grado suficiente de adaptación social para permitir la escolarización y la actividad profesional. Exceptuando el autismo de Kanner, se ha comprobado buenas evoluciones en el conjunto de las psicosis infantiles. Estos en la edad adulta se pueden incluir dentro del cuadro de trastornos de la personalidad, pero sin déficit intelectual.

Factores de pronóstico desfavorable: o Existencia de factores orgánicos asociados a la psicosis

infantil: afectación neurológica, prematuridad, parto difícil, etc.

Page 7: Psicosis Infantiles

o Ausencia de lenguaje más allá de los 5 años o aparición muy retrasada.

o Profundidad de retraso intelectual.o Precocidad en la aparición de los trastornos: cuantos antes

aparezca la psicosis, mayor es la posibilidad de que evolucione a un cuadro de autismo grave o tenga una evolución profundamente deficitaria.

o Calidad de la familia: la existencia de patología psiquiátrica paterna, padres separados o ausentes y la carencia de sostén maternal son factores de mal pronóstico.

Factores de pronóstico favorable: o Aparición tardía de la psicosis.o La existencia de fobias u obsesiones que impidan la evolución

deficitaria.o El tipo de tratamiento, mantener al niño en el ambiente familiar,

siempre que este sea bueno.

D. DIAGNÓSTICO DIFERENCIALSindrome de Rett: encefalopatía evolutiva no congénita, de etiología

desconocida, que solo afecta al sexo femenino. Los criterios diagnósticos son: Desarrollo neurológico y mental normal durante los primeras 7-18 meses. Detención del desarrollo a partir de esa edad, seguido de detección

mental y conductual rápido, que conduce a un estado de demencia en menos de 18 meses.

Perdida de manipulación voluntaria remplazada por estereotipias de las manos.

Ataxia del tronco y de la marcha. Periodo prolongado de estabilización aparente con aparición de

anomalías neurológicas.No se han observado algunas conductas frecuentes en el autismo infantil:

juegos estereotipados, rechazo del contacto corporal, hiperactividad motora, y apego excesivo a determinados objetos.

II. ENFOQUE GENETICO E HIPÓTESIS DE PREDOMINIO ORGÁNICOEnfoque genético: las investigaciones realizadas en este campo señalan que:

El análisis genético muestra que el autismo infantil es una entidad nosográfica diferente de las otras psicosis del niño.

Las psicosis tardías son probablemente de etiología heterogénea.

Hipótesis de contenido orgánico: los resultados de diversas investigaciones parecen demostrar la existencia de una anomalía neurológica, cuya localización, naturaleza y papel no están determinados con exactitud.

a) Estudios cromosómicos: presencia de X frágil en autistas.b) Estudios anátomicos: existencia de una atrofia específica de los

lóbulos VI y VII del cerebelo específicas del autismo precoz. Puede estar relacionada con la hipótesis de un defecto cognitivo.

c) Estudios electroencefalográficos: existencia de anomalías inespecíficas y no localizadas.

Page 8: Psicosis Infantiles

d) Estudios bioquímicos: aumento de los valores plasmáticos de serotonina en pacientes autistas.

e) Hipótesis bioquímica: elevada frecuencia de abortos espontáneos en las madres de niños autistas que hace pensar en una anomalía relacionada con una enzima fetal.

III. ENFOQUE PSICOPATOLÓGICO E HIPÓTESIS DE PREDOMINANCIA PSICOGENÉTICA Enfoque psicopatológico: si bien existen grandes variantes semiológicas

entre uno y otro psicótico, no se puede negar una cierta similitud psicopatológica en algunos detalles. Este conjunto de rasgos podría constituir lo que algunos autores llaman el “núcleo psicótico”. Este se refiere a:

Existencia de una angustia primaria de aniquilación, mutilación o absorción, que implica la disolución del individuo.

No distinción entre el Yo y el no-Yo, el no reconocimiento de sus límites y el de los otros. Ausencia de sonrisa ante el rostro humano, no aparición de ansiedad ante el extraño, la no percepción de los límites corporales, etc.

Ruptura con la realidad como consecuencia de la no delimitación precisa del contorno de si mismo. La realidad externa se incluye en si, y amenaza su existencia. Mínimos cambios externos pueden provocar la aparición de reacciones catastróficas.

Prevalencia de los procesos primarios sobre los secundarios: la no relevancia del tiempo y/o del espacio, mantiene al niño psicótico en el ámbito de los procesos primarios, en el que cualquier afecto debe ser instantáneamente evacuado. Si no es así, corre el riesgo de aniquilar al sujeto o de aniquilarse a si mismo.

La ausencia de nexo entre las pulsiones libidinales y las pulsiones agresivas, donde se da una predominancia de las pulsiones agresivas o de muerte.

Utilización de mecanismos de defensa arcaicos: o La identificación proyectiva: consecuencia de la no distinción

entre Yo/no-Yo (mantiene al niño en un universo caótico).o La escisión: la vida afectiva, intelectual y el entorno son

objeto de una fragmentación que dificulta adquirir una experiencia vivida en su continuidad.

o La introyección, la negación, la idealización y la omnipotencia. Estas defensas representan lo que M. Klein ha llamado la posición

esquizoparanoide en el niño.

Hipótesis psicogenética fundamentada en el ambiente: papel de los padresEl entorno tiene un importante papel en la aparición y posterior

mantenimiento de la psicosis infantil. Estas hipótesis etiológicas pueden estar asociadas a otros factores constitucionales, hereditarios, adquiridos, psicogenéticos u orgánicos. Algunas de las características del entorno que pueden propiciar la aparición de la psicosis en los niños son:

Un origen y nivel sociocultural variable. Gran cantidad de situaciones difíciles (divorcio, familias incompletas,

etc.) Atmosfera y organización familiar confusas: papeles paternos poco

diferenciados o cambiantes, separación entre generaciones imprecisa e incierta, etc.

Page 9: Psicosis Infantiles

Son habituales las situaciones dramáticas, el desconcierto paterno, la mistificación.

Ciertos modelos específicos de comunicación intrafamiliar: doble vinculo (doble mensaje, contradictorio en su contenido), descalificaciones, paradoja, etc.

Hipótesis psicogenéticas fundamentadas en el niño o en interacción padres-hijo

M. Klein: el desarrollo del niño normal pasa por fases arcaicas y las primeras angustias experimentadas son de naturaleza psicótica. Las defensas organizadas contra dichas angustias caracterizan la “posición esquizoparanoide” propia de los primeros meses de vida. La psicosis infantil, no sería otra cosa que la persistencia de esta fase más allá del desarrollo normal. La intensidad de las pulsiones agresivas no han permitido el desarrollo de las pulsiones libidinales.

F. Tustin: habla de la “depresión psicótica”, y la define como un sentimiento de ruptura dentro de la continuidad que crea un agujero negro. El niño lucha contra el mediante unos mecanismos arcaicos o un repliegue autista, o mediante la identificación proyectiva o maniaca.

Margaret Malher: estudia la evolución de la relación madre-hijo bajo el ángulo de la autonomía progresiva de este último. Distingue varias fases en este proceso:

o Fase autista inicial: el bebé no es consciente de su individualidad ni la de su madre. La satisfacción de sus necesidades depende de su omnipotencia autista.

o Fase simbiótica: el niño es capaz de atender y anticipar confiadamente la satisfacción, gracias a las huellas mnémicas que el placer de la gratificación ha dejado. en este estadio el máximo peligro consiste en la perdida del objeto simbiótico, lo que equivale a la perdida de una parte de si mismo.

o Fase de separación-individuación (6 a 30 meses): el niño esta muy cerca de su funcionamiento autónomo y disfruta de ello. La explosión motriz del niño le permite alejarse de la madre. Lentamente, la interiorización de los objetos y la adquisición de la noción de permanencia del objeto le dan la seguridad necesaria para la autonomía.

Malher concibe la psicosis infantil como el resultado de los fracasos en el proceso de individuación, cuyo origen se halla tanto en el niño como en la madre. En el desarrollo del niño hay algunas fases que no pueden ser superadas dada la angustia masiva que suscita el acceso al objetivo siguiente. Para defenderse de ello, el niño utiliza “mecanismos de sostén” que se oponen a la progresión del Yo.

Winnicott: el origen de la psicosis infantil debe buscarse entre los avatares de la relación de adaptación reciproca madre-hijo. Especialmente en el tiempo en que el niño experimenta “desilusión” frente a ella. Si la madre falla, el bebé puede experimentar angustias impensables o agonías primitivas tales como el retorno a un estadio de no integración, a la perdida del sentido de la realidad. El niño se defiende contra la ansiedad mediante diferentes mecanismos: desintegración, despersonalización, estado autista, exacerbación del narcisismo primario, etc.

Page 10: Psicosis Infantiles

IV. TRATAMIENTO El enfoque terapéutico depende de los modelos teóricos del clínico. La mayor

parte de los clínicos coinciden en la necesidad de un enfoque multifocal que excluya pautas rígidas y sea capaz de adaptarse a las situaciones individuales y a las evoluciones observadas en el curso del crecimiento.

Las intervenciones terapéuticas son numerosas y variadas. Psicoterapias: es un enfoque básico de las psicosis precoces pero no

siempre es posible llevarla a cabo. Tratamientos educativos y reeducativos: es determinante la relación

establecida entre el niño psicótico y el cuidador o maestro, ya que el niño progresa a partir de esta relación.

Soporte pedagógico: es conveniente mantener la escolaridad ordinaria siempre que el niño obtenga beneficios de esto.

Terapias conductuales: su objetivo es reforzar los comportamientos positivos y extinguir los comportamientos negativos.

Tratamientos farmacológicos Acciones terapéuticas dirigidas a los padres: orientación parental,

apoyo psicológico, terapia familiar, participación en un grupo de padres, psicoterapia individual, etc.

Tratamientos institucionales: en muchos casos, el mantenimiento del niño en si medio habitual, especialmente el escolar, llega a hacerse imposible y las distintas intervenciones terapéuticas citadas no pueden llevarse a cabo de forma ambulatoria. Por eso el hospital de día constituye la indicación de terapia institucional muy utilizada.