la compilación y redacción de texto estuvo a cargo de la...

Primera edición: abril de 2006D.R. © Suprema Corte de Justicia de la NaciónAv. José María Pino Suárez Núm. 2C.P. 06065, México, D.F.

ISBN 970-712-572-1

Impreso en MéxicoPrinted in Mexico

La compilación y redacción de texto estuvo a cargo de la Dirección General Adjunta a la Presidenciadel Consejo de la Judicatura Federal.

La edición de esta obra estuvo al cuidado de la Dirección General de la Coordinación de Compilacióny Sistematización de Tesis de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

MANUAL PARA EL ANÁLISIS

DEL CÓDIGO DE ÉTICA

DEL PODER JUDICIAL DE LAFEDERACIÓN

SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN

Ministro Mariano Azuela GüitrónPresidente

Primera SalaMinistro José Ramón Cossío Díaz

Presidente

Ministro José de Jesús Gudiño PelayoMinistra Olga Sánchez Cordero de García Villegas

Ministro Juan N. Silva MezaMinistro Sergio A. Valls Hernández

Segunda SalaMinistra Margarita Beatriz Luna Ramos

Presidenta

Ministro Sergio Salvador Aguirre AnguianoMinistro Juan Díaz Romero

Ministro Genaro David Góngora PimentelMinistro Guillermo I. Ortiz Mayagoitia

Comité de Publicaciones y Promoción EducativaMinistro Mariano Azuela Güitrón

Ministra Margarita Beatriz Luna RamosMinistra Olga Sánchez Cordero de García Villegas

Comité Editorial

Dr. Eduardo Ferrer Mac-Gregor PoisotSecretario Ejecutivo Jurídico Administrativo

Mtra. Cielito Bolívar GalindoDirectora General de la Coordinación deCompilación y Sistematización de Tesis

Lic. Laura Verónica Camacho SquiviasDirectora General de Difusión

Mtro. César de Jesús Molina SuárezDirector General de Casas de la Cultura Jurídica

y Estudios Históricos

Dr. Salvador Cárdenas GutiérrezDirector de Análisis e Investigación Histórico Documental

Dirección General Adjunta a la Presidencia

del Consejo de la Judicatura Federal

Abel Aguilar SánchezDirector General

María Leticia Taboada SalgadoSecretaria Técnica

Eduardo Aguilar ChíuDirector de Atención de Presidencia

Gerardo Manuel Huet CovarrubiasCoordinador Administrativo

COMPILACIÓN Y REDACCIÓN DE TEXTO

CONTENIDO

7

Presentación del Sr. Ministro Presidente ........................... 13

Introducción .................................................. 17

Instrucciones generales ......................................... 19

Programa de sesiones de estudio ................................. 23

Instructivo para cada sesión ..................................... 25

PRIMERA SESIÓN

Ficha de desarrollo de la sesión .............................. 27

I. Texto en estudio del Código de Ética: Presentación ............. 29

II. Dinámica: Tarjeta de presentación........................... 33

III. Guión para el tema de Presentación ........................ 35

IV. Lectura auxiliar: Palabras del Ministro Presidente Mariano Azuela

en la presentación del Código de Ética del PJF .................. 37

V. Cuestionario de reflexión sobre la lectura .................... 39

8 PODER JUDICIAL DE LA FEDERACIÓN

SEGUNDA SESIÓN


I. Texto en estudio del Código de Ética: Nociones previas ......... 43

II. Dinámica: Collage ¿Quién soy?............................. 47

III. Guión del tema de nociones previas ........................ 49

IV. Lectura auxiliar: El coro de Antígona, de Sófocles ............. 53


TERCERA SESIÓN


I. Texto de estudio del Código de Ética: Preámbulo ............... 59

II. Dinámica: Jerarquía de valores ............................. 63

Definiciones .............................................. 65

Valores del grupo .......................................... 67

III. Guión sobre el tema del Preámbulo......................... 69

IV. Lectura auxiliar: La definición de la ética, del

Mtro. Antonino González .................................... 71


CUARTA SESIÓN


I. Texto en estudio del Código de Ética: Capítulo I, Independencia ... 79

II. Dinámica: Abanico personal ............................... 81

III. Guión sobre el tema de Independencia judicial................ 83

IV. Lectura auxiliar: Discurso de Pericles (fragmento) ............. 87


9MANUAL PARA EL ANÁLISIS DEL CÓDIGO DE ÉTICA DEL PJF

QUINTA SESIÓN


I. Texto en estudio del Código de Ética: Capítulo II, Imparcialidad ... 95

II. Dinámica: El testimonio ................................... 97

Cuestionario sobre El testimonio.............................. 101

Respuestas al cuestionario................................... 103

III. Guión sobre el tema de la Imparcialidad ..................... 105

IV. Lectura auxiliar: La muerte de Sócrates, relatada por Platón ..... 111


SEXTA SESIÓN


I. Texto en estudio del Código de Ética: Capítulo III, Objetividad .... 119

II. Dinámica: 1a. Autoevaluación sobre cumplimiento del Código ... 121

III. Guión sobre el tema de la Objetividad....................... 123

IV. Lectura auxiliar: Diálogo "De lo justo", de La República de Platón.. 125


SÉPTIMA SESIÓN


I. Texto en estudio del Código de Ética: Capítulo IV, Profesionalismo 133

II. Dinámica: formando equipos............................... 137

III. Guión sobre el tema de el Profesionalismo................... 139

IV. Lectura auxiliar: El ABC de la deontología judicial, fragmentos

del texto del Ministro Juan Díaz Romero ....................... 143



OCTAVA SESIÓN


I. Texto en estudio del Código de Ética: Capítulo V, Excelencia ..... 153


III. Guión sobre el tema de la Excelencia y las virtudes (I) ......... 157

IV. Lectura auxiliar: Huehuetlatolli, Consejos de un padre mexica

a sus hijos ............................................... 169


NOVENA SESIÓN


I. Texto en estudio del Código de Ética: Capítulo V, Excelencia ..... 177

II. Dinámica: Rompecabezas ................................. 179

III. Guión sobre el tema de la Excelencia y las virtudes (II) ......... 185

IV. Lectura auxiliar: "Deontología de los jueces y magistrados",

del libro Deontología Jurídica del Dr. Víctor Manuel Pérez Valera ... 197


DÉCIMA SESIÓN


I. Texto en estudio del Código de Ética: fragmentos seleccionados

a juicio del Coordinador .................................... 205


III. Guión para sesión de recapitulación y compromiso ............ 209

IV. Lectura auxiliar: "Decálogo de los juzgadores", del libro

Deontología Jurídica del Dr. Víctor Manuel Pérez Valera ........... 211



Bibliografía general ............................................ 217

Apéndice: Texto completo del Código de Ética ....................... 219

13

PRESENTACIÓN

En agosto de 2004, los Plenos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el

Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y el Consejo de la Judicatura

Federal, aprobaron el Código de Ética del Poder Judicial de la Federación, que

sistematizó los lineamientos conductuales idóneos para que los juzgadores y perso-

nal administrativo desempeñen cabalmente su labor. Sería inexacto afirmar que,

a más de un año de aquel acontecimiento, los preceptos del Código hayan resuelto

muchas buenas intenciones. Miles de miembros de este Poder cuentan con un

ejemplar de la obra y la toman en cuenta para el desarrollo de sus actividades.

No obstante, a fin de aclarar el contenido del Código y descubrir el ascendiente

que ha tenido en sus destinatarios, se ha diseñado el presente Manual para el

análisis del Código de Ética del Poder Judicial de la Federación, destinado a

incentivar a los integrantes de los órganos jurisdiccionales y las unidades adminis-

trativas en pro de la cultura ética y la excelencia profesional que exige la actividad

jurisdiccional. En la consecución de una óptima impartición de justicia, es tarea

propia tanto de los titulares de los órganos jurisdiccionales, como de titulares de

las unidades y áreas administrativas del Poder Judicial de la Federación, infundir


en el personal a su cargo el conocimiento y aplicación de los principios, reglas y

virtudes contenidos en el Código de Ética.

Precisamente para coadyuvar en esta importante labor de conocer y aplicar el Código

de Ética, el presente manual recoge la experiencia de la Dirección General Adjunta

a la Presidencia del Consejo de la Judicatura Federal en el estudio y análisis de

este documento, el cual brindo a mis compañeros juzgadores y a las áreas adminis-

trativas tanto de la Suprema Corte de Justicia de la Nación como del Consejo de la

Judicatura Federal como un instrumento didáctico, que coadyuve al conocimiento,

estudio y vivencia del propio Código. En este manual se propone el análisis siste-

mático y gradual del texto en una serie de diez sesiones de estudio, diseñadas para

ser instrumentadas en cada órgano jurisdiccional y unidad administrativa, que con-

juntan lecturas, estudio, reflexión, motivación, exposiciones y dinámicas varias

que serán del interés de los participantes.

Lejos de reservarse únicamente para el estudio personal, este manual prevé los

ejercicios y dinámicas que, a lo largo de diez meses, pueden desarrollar los servi-

dores del Poder Judicial de la Federación, coadyuvando así al fomento de virtudes

que deben cultivarse si se pretende satisfacer diversos fines cardinales, entre los que

prevalece la probidad en la función judicial. Conforme se produzcan, cabe esperar

que las sesiones motiven múltiples temas afines al interés de los participantes, quie-

nes gradualmente, y no sólo influenciados por sus relaciones laborales, podrán

apreciar el espacio que han dedicado a los valores éticos en su quehacer diario,

propiciando un esfuerzo automático que permita alcanzar actitudes que a la postre

redunden en provechosos beneficios para la comunidad.

En el mensaje que acompañé a la entrega del Código, señalé que es de desear que

dicho texto se convierta, mediante su gradual asimilación, en el libro de cabecera


de todos los integrantes del Poder Judicial Federal, identificándose plenamente

con su contenido y sirviendo de marco de referencia inexcusable para iluminar su

actuar cotidiano al servicio de la justicia.

La experiencia revela que la práctica de las virtudes radica en el ejercicio de la

libertad y que por diferentes circunstancias es factible que pueda uno alejarse de

ellas, de modos diversos y por tiempos variados. De ahí que sea conveniente pro-

fundizar en su conocimiento, para que al comprenderlas exista siempre la razón y

la conciencia que estimulen la actuación cotidiana. La creatividad de cada persona

y de cada grupo podrá ofrecer variadas fórmulas para lograrlo. Una de ellas es la

que se comparte en este primer número de la serie: “La Ética Judicial en la Praxis”.

Ante los retos técnicos, humanos y éticos que plantea la impartición de justicia en

un nuevo siglo, frente a una sociedad cada vez más compleja, activa y demandante,

estoy seguro que prevalecerán el esfuerzo, la dedicación y el comportamiento ético,

así como la creatividad desplegada por los miembros del Poder Judicial Federal

para hacer realidad el mandato constitucional de impartir justicia pronta y expedita,

cumpliendo con los principios rectores de la carrera judicial: independencia, impar-

cialidad, objetividad, profesionalismo y excelencia; éste último reflejado en la práctica

de las virtudes humanas y judiciales contenidas en nuestro Código de Ética.

Ministro Mariano Azuela Güitrón

Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación

y del Consejo de la Judicatura Federal

INTRODUCCIÓN

17

La aprobación del Código de Ética del Poder Judicial de la Federación por los

Plenos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, del Consejo de la Judicatura

Federal y del Tribunal Electoral del PJF en agosto de 2004, significó la culminación

de un largo proceso de investigación, redacción y consenso, para dotar a dicho

Poder de un código propio que sintetizara en un texto accesible los principios

rectores de la ética jurisdiccional.

Así, el Código de Ética constituye un punto de partida para la reflexión ética y

personal de cada servidor público judicial y es un documento valioso que se propone

instruir como referente deontológico para guiar y sensibilizar sobre los valores

fundamentales en el servicio de impartición de justicia.

Como medio para coadyuvar a hacer realidad lo anterior y llevar al terreno de la

práctica diaria los principios y virtudes contenidos en el Código de Ética, se ha

elaborado el presente manual, el cual surge por iniciativa del Sr. Ministro Presidente

Mariano Azuela Güitrón y recoge la experiencia vivida por el personal de la Dirección

General Adjunta a la Presidencia del Consejo de la Judicatura Federal, quienes a lo


largo de cuatro meses dedicaron una serie de sesiones a la lectura y estudio del

Código de Ética, conjuntando análisis, exposiciones, discusiones y dinámicas

tendientes a una mayor compenetración con su contenido.

En el presente manual se propone, como herramienta para coadyuvar al cono-

cimiento y aplicación del Código de Ética, una serie de diez sesiones de estudio

del mismo. La propuesta está encaminada a incentivar la participación de todo el

personal, tanto jurídico como administrativo del PJF, en sus respectivas áreas de

trabajo. Se sugiere que este esfuerzo sea encabezado por el propio titular del órgano

o unidad administrativa –juez, magistrado o director–, quienes naturalmente tienen

la potestad de decidir sumarse a este proyecto. Dicho titular puede delegar esta

función en un coordinador idóneo.

El manual es de aplicación potestativa, concibiéndose como un medio que facilita

al responsable de cada órgano difundir entre el personal a su cargo el conocimiento

y aplicación del Código, esforzándose en adecuarlas entre sus responsabilidades y

carga de trabajo habitual.

En cada sesión –de dos horas de duración– se lee un segmento del Código y

enseguida se analiza, reflexiona y discute. Para su mejor comprensión se ofrece un

guión para estudiar el tema en turno, así como una lectura complementaria alusiva

al tema. Asimismo, como un modo de incentivar la participación, cada sesión

inicia con una dinámica que busca promover el conocimiento personal, la inte-

gración y comunicación en equipo, así como la práctica de valores y virtudes en

los ámbitos personal y laboral.

Adicionalmente se anexa una bibliografía general sobre los temas tratados, así

como el texto completo del Código de Ética del Poder Judicial de la Federación.

INSTRUCCIONES GENERALESPARA LAS SESIONES DE ESTUDIO

Se desarrollarán 10 sesiones de estudio, reflexión y vivencia en torno a los temas

contenidos en el Código de Ética del Poder Judicial de la Federación, en cada uno

de los órganos jurisdiccionales y unidades administrativas del PJF.

MISIÓN:

Profundizar en la importancia y el contenido del Código de Ética, e implemen-

tarlo como parte de una cultura de ética y excelencia profesional en el de-

sempeño cotidiano de la función pública.

OBJETIVOS:

- Resaltar al personal del PJF la importancia de su función en la impartición

de justicia del Estado mexicano.

- Propiciar el conocimiento y estudio progresivo del Código de Ética y su

contenido.

19


- Alentar la participación de los integrantes del PJF mediante ejercicios y

dinámicas.

- Fomentar una conciencia y una cultura de la ética y la excelencia profesional

como actitud vital en el desempeño del trabajo cotidiano.

- Coadyuvar a que el personal del PJF asuma el compromiso de aplicar el

Código de Ética en su desempeño como servidores públicos.

TEMARIO:

Presentación

Nociones previas

Preámbulo

Independencia

Imparcialidad

Objetividad

Profesionalismo

Excelencia I

Excelencia II

Recapitulación y compromiso

OPERATIVIDAD:

FECHAS: Periodicidad mensual, en la fecha que determine el titular de cada

órgano jurisdiccional y administrativo del PJF que desee sumarse a este

esfuerzo de estudio, reflexión y vivencia de los principios, valores, reglas y

virtudes contenidos en el Código de Ética del PJF.


HORARIO: En el horario fuera del tiempo de atención a los ciudadanos y

justiciables que determine el titular de cada órgano; se sugiere que sea por la

tarde y en horario inamovible una vez fijado.

AGENDA: Sesiones de estudio y análisis del Código de Ética de 2 horas de

duración distribuidas de la siguiente manera:

• 30 minutos de dinámica de introducción.

• 15 minutos de exposición del tema en turno.

• 15 minutos de lectura de una sección del Código.

• 45 minutos de comentarios de los participantes.

• 10 minutos de lectura auxiliar de un texto clásico.

• 5 minutos de reflexión final.

LUGAR: En el interior del recinto de cada órgano jurisdiccional o unidad

administrativa involucrada.

PARTICIPANTES: Todo el personal del PJF, en su órgano respectivo:

1. Titulares de cada uno de los 546 órganos jurisdiccionales y 137

unidades administrativas del PJF, quienes, de sumarse a este esfuerzo,

encabezarán estas sesiones.

2. Personal de dichos órganos y unidades administrativas, contabili-

zándose un total de 27,912 personas al 31 de diciembre de 2005.

COORDINADORES: Cada titular de órgano y unidad, de decidir sumarse a

este esfuerzo, coordinará y encabezará las sesiones de reflexión en sus

respectivos órganos, o bien delegará esta función en un coordinador.


Para facilitar el desarrollo de dichas sesiones, se proporciona el presente

manual, que contiene una propuesta de metodología de las sesiones, el temario

respectivo, las dinámicas, lecturas complementarias y guiones de cada sesión,

así como una bibliografía.

PROGRAMA DE SESIONES DE ESTUDIODEL CÓDIGO DE ÉTICA DEL PJF

SESIÓN TEXTO CÓDIGODE ÉTICA

DINÁMICA TEMA LECTURAAUXILIAR

1La presentación delCódigo de Ética,fracciones I a VI

Tarjeta depresentación

Presentación Mensaje del Sr. Mi-nistro PresidenteMariano Azuela

2Las nociones pre-vias, fracción VII,incisos 1 a 5

Collage ¿Quién soy? Nociones previas El coro de Antígo-na, de Sófocles

3El preámbulo delCódigo de Ética

Jerarquía de valores Preámbulo ¿Qué es la ética?

4Capítulo I Abanico personal Independencia Discurso de

Pericles

5Capítulo II Percepción "El

Testimonio"Imparcialidad La muerte de

Sócrates

6 Capítulo III Autoevaluación 1 Objetividad La República

7Capítulo IVcompleto, hasta lafracción 4.19

Formando equipos Profesionalismo El ABC de ladeontologíajurídica

8Capítulo V, hasta lafracción 5.8

Autoevaluación 2 Excelencia I Consejos de un pa-dre mexica a sushijos

23

9Capítulo V, de lafracción 5.9 a la5.17

Colaboración"Rompecabezas"

Excelencia II Cualidades de losjuzgadores

10Selección de frag-mentos a criteriodel coordinador

Autoevaluación 3 Recapitulación ycompromiso

Decálogo de losjuzgadores

25

INSTRUCTIVO PARA CADA SESIÓN

Para el adecuado desarrollo de cada una de las diez sesiones de estudio del Código

de Ética, se proporciona el siguiente material:

• Ficha para el desarrollo de la sesión respectiva (primera foja).

• Texto del Código de Ética a estudiar en la sesión. (I)

• Dinámica sugerida y ficha técnica para implementarla, y en su caso, los

formatos pertinentes. (II)

• Guión para el estudio y reflexión del tema de la sesión, contenido en la

sección correspondiente del Código de Ética. (III)

• Lectura complementaria tomada de un texto clásico. (IV)

• Cuestionario para alentar la reflexión en torno a la lectura. (V)

27

PRIMERA SESIÓN

TEMA: La presentación del Código de Ética.

OBJETIVOS: Conocer cómo se elaboró el Código de Ética.

Entender el propósito del Código de Ética.

Asimilar la importancia y utilidad del Código.

DINÁMICA: Tarjeta de presentación: dinámica de conocimiento e

integración.

EXPOSICIÓN INICIAL: Concepto de Código de Ética profesional.

TEXTO DEL C. DE ÉTICA: Presentación, incisos I a VI.

LECTURA AUXILIAR: Mensaje del Sr. Ministro Presidente Mariano Azuela Güitrón

en la presentación del Código de Ética.

PUNTOS A RESALTAR: El Código de Ética debe ser un referente objetivo del

adecuado actuar ético, profesional y personal de los

servidores públicos del PJF.

29

PRESENTACIÓN

I. En virtud de las innovadoras transformaciones que vive cada día la sociedad

mexicana, es natural que los juzgadores en su interrelación cotidiana, se involucren

en esta dinámica, como acontece en otros sectores, dando ocasión a la genera-

ción de ligas de interés que podrían afectar su libre conciencia y papel esencial en

la impartición de justicia, por lo que resulta de gran utilidad que existan referentes

que identifiquen los valores y principios relativos al ejercicio de la función

jurisdiccional.

II. Cada día la sociedad busca estar informada y el Estado ha venido fortaleciendo

los canales de acceso a la información pública, condiciones que la hacen cuestionar

o emitir juicios que pueden trascender en la conciencia libre del juzgador, en virtud

de que sus actos judiciales son sometidos al escrutinio público a través de los

instrumentos de impacto social, lo que puede ocasionar pérdida de confianza en

los órganos de administración de justicia, si éstos no actúan con independencia,

imparcialidad, objetividad, profesionalismo y transparencia.

III. Es un derecho de los justiciables que la administración de justicia sea impartida

por jueces con autoridad moral que garanticen una justicia accesible, pronta,

I. TEXTO EN ESTUDIO DEL CÓDIGO DE ÉTICA


completa, imparcial y previsible, basada en la letra o la interpretación jurídica de

la ley y, a falta de ésta, en los principios generales del derecho, sin que se privilegie

cualquier otro interés.

IV. El incremento de los litigios en los órganos de administración de justicia del

Poder Judicial de la Federación, evidencia la judicialización de los diferendos socia-

les, y hacen patente la confianza social depositada en los tribunales, así como la

importancia de la actividad jurisdiccional, lo que obliga a actualizar los sistemas

de trabajo y actitudes ante esas nuevas exigencias.

V. Sabedores de la alta responsabilidad social que tienen los impartidores de justicia

ante los justiciables y el Estado mexicano, la Suprema Corte de Justicia de la

Nación, el Consejo de la Judicatura Federal y la Sala Superior del Tribunal Electo-

ral, en su carácter de instancias orgánicamente superiores, la primera y la tercera

como sus depositarios y el segundo como órgano con independencia técnica, de

gestión y para emitir sus resoluciones; consideran conveniente establecer principios

rectores de ética judicial dirigidos a los juzgadores que integran el Poder Judicial

de la Federación para hacer patente en todo momento la garantía constitucional pre-

vista en el artículo 17 de la Carta Magna, relativa a que toda persona tiene derecho

a que se le administre una justicia, pronta, completa e imparcial.

VI. Con el Código de Ética del Poder Judicial de la Federación se pretende contar

con un nuevo elemento que coadyuve a garantizar que la jurisdicción sea realizada

por personas en las que se sumen la confianza, la calidad técnica y la ética.

Si bien la ética se traduce en un comportamiento humano que se caracteriza en ser

unilateral, inherente a la conciencia del sujeto y sólo imperativo para él, resulta

vital para la sana convivencia dentro de una colectividad, y particularmente


importante en la función judicial por la trascendencia social que adquiere, pues en

este quehacer debe imperar en el juzgador un sentido ético que equilibre el poder

que el Estado deposita en su persona para que al conocer de los procedimientos

emita sus resoluciones conforme a la técnica jurídica y los principios éticos, pro-

curando ser justo desde el Derecho.

Este documento se formula con el propósito de ayudar a los juzgadores a resolver

los conflictos éticos que con motivo de su trabajo se les presentan. Será exclu-

sivamente la conciencia de cada uno de ellos, el intérprete y aplicador del Código,

en tanto que la sociedad será quien califique los aspectos observables de su

conducta.

33

II. DINÁMICA

TARJETA DE PRESENTACIÓN

OBJETIVOS:

- Facilitar la integración del grupo.- Expresar el conocimiento de sí mismo y el de los demás.- Valorar las virtudes y cualidades propias y de los demás compañeros de trabajo.

RECURSOS MATERIALES:

- Un cartoncillo tamaño tarjeta por participante.- Una pluma o lápiz por participante.- Salón iluminado, amplio y con mesa de trabajo.

DURACIÓN:

- 30 minutos.

TAMAÑO DEL GRUPO:

- De 10 a 30 personas.


DESARROLLO:

- Cada participante recibirá su tarjeta y pondrá en ella su nombre, con buena

caligrafía, como si fuera una "tarjeta de presentación". Al reverso escribirá la

palabra "CUALIDADES". (Aprox. 5 minutos)

- Cada participante pasará su propia tarjeta al compañero de la izquierda y

simultáneamente recibirá la tarjeta de su compañero situado a la derecha.

Al tener la tarjeta ajena, escribirá, en la medida de lo posible, una cualidad del

propietario de la tarjeta, en el lado respectivo de la tarjeta. (Aprox. 1 minuto)

- La tarjeta no regresará de inmediato a su dueño, sino que se repetirá el paso

anterior, para que cada tarjeta circule alrededor de la mesa de los participantes

de manera que cada quien escriba algo. (Aprox. 15 minutos en total)

- Al final, cada participante recibirá su propia tarjeta con los comentarios de

los demás. A manera de conclusión, cada participante expresará aquello que

le haya impresionado. (Aprox. 10 minutos)

35

III. GUIÓN PARA EL TEMA DE PRESENTACIÓN

El Código de Ética del PJF es la culminación de un proyecto que surgió hace casi

8 años, y de la inquietud compartida por la comunidad judicial iberoamericana.

La necesidad de reforzar la posición institucional del juez frente a presiones externas

que pueden suponer una amenaza a su independencia, para que ejerzan sus funciones

con responsabilidad, independencia e imparcialidad, ha sido materia de estudio

en las Cumbres Iberoamericanas de Presidentes de Cortes y Tribunales Supremos de

Justicia, y en los Encuentros Iberoamericanos de Consejos de la Judicatura.

Particularmente, el tema relativo a la ética judicial ha sido objeto de consideración

y análisis por parte del Poder Judicial de la Federación desde 1999, en el marco de

la II Cumbre Iberoamericana celebrada en Caracas, Venezuela. En ese entonces,

los países participantes, entre ellos México, hicieron, una "declaración de principios

éticos" que fueron recogidos en el Código de Ética del Funcionario Judicial

Iberoamericano", el cual consta de 19 cánones.

Pero más allá de comulgar con las aspiraciones de nuestros homólogos iberoame-

ricanos, de dar respuesta a una inquietud compartida y de cumplir con la agenda


judicial iberoamericana, la génesis y fundamento del Código de Ética del Poder Judicial

de la Federación se encuentra en los artículos 17 y 100 de la Constitución Política de

los Estados Unidos Mexicanos. Este sustento constitucional aporta solidez al Código,

en la medida en que detalla y da contenido a los postulados sobre la calidad ética

de los integrantes del Poder Judicial, que el propio Constituyente estimó que deben

reunir.

Los trabajos para la redacción de este Código iniciaron en 2003 con la expedición

de un Anteproyecto ordenado por los Plenos de la Suprema Corte de Justicia de la

Nación y del Consejo de la Judicatura Federal, para lo cual se analizaron documentos

similares de otros países, así como material bibliohemerográfico sobre ética judicial.

Este estudio se plasmó en el disco compacto "Hacia un Código de Ética para el

Poder Judicial de la Federación", que se distribuyó entre sus órganos.

El 29 de junio tuvo lugar la sesión conjunta de los Plenos de la Corte y del Consejo,

y de la Sala Superior del Tribunal Electoral, en el que se analizaron los Proyectos

de la Comisión de Redacción y del Pleno de la Suprema Corte. Se elaboró un

nuevo documento con las modificaciones pertinentes y, de nueva cuenta, se puso

a consideración de los tres órganos colegiados, quedando aprobado por cada Pleno

en el mes de agosto de 2004.

37

IV. LECTURA AUXILIAR

PALABRAS DEL MINISTRO PRESIDENTE MARIANO AZUELA GÜITRÓNEN LA PRESENTACIÓN DEL CÓDIGO DE ÉTICA DEL PJF

Para concluir de manera muy breve, expreso mi gratitud a quienes integraron la

Comisión Redactora de este Código de Ética del Poder Judicial de la Federación,

no solamente por el tiempo que invirtieron, sino por todas las aportaciones que

finalmente ofrecieron un digno documento que fue materia de análisis por los Plenos

de la Suprema Corte, del Consejo de la Judicatura y de la Sala Superior del Tribunal

Electoral.

Mi gratitud también a los integrantes de estos órganos colegiados. Ponerse de

acuerdo en un código tres órganos colegiados no es sencillo, y revela, sin lugar a

dudas, que supieron anteponer a sus preocupaciones intelectuales, a sus posiciones

ideológicas, lo que finalmente ha permitido las grandes obras jurídicas como la

Declaración Universal de los Derechos Humanos, en que se busca que finalmente

sean las convicciones esenciales sobre el ser humano y sobre la vida social, las

que se reflejen en la obra conjunta que se realiza.

Hoy, como se ha dicho por los expositores, tenemos un documento; un documento

que ya es reflejo de lo que es la conducta de quienes a través de una vida dan


testimonio de ser buenos jueces, pero va a surgir la incógnita: ¿Este documento

contribuirá a que el Poder Judicial de la Federación imparta la justicia que el

artículo 17 de nuestra Constitución ofrece a todos los mexicanos? ¿La prontitud de

la justicia, el que la justicia sea completa, el que se dé la imparcialidad, será

expresión cotidiana en todas las decisiones, en todas las sentencias que se emitan?

Estamos ante ese reto. Y seguramente que no habrá sino el límite de la imaginación

de todos los trabajadores del Poder Judicial que encuentren las formas de hacer

existencial este Código de Ética.

Lejos de haberse concebido como un catálogo de obligaciones morales, el código

pretende, simplemente, que los juzgadores cuenten con una herramienta eficaz

para resolver conflictos éticos que se les presenten con motivo del ejercicio de sus

funciones. Este anhelo derivó del consenso que originó la redacción del código, y

en el que fueron escuchados todos los sectores de la sociedad, pues la impartición

de justicia atañe por igual a juzgadores y justiciables.

Confiemos y seamos optimistas de que en el futuro veremos cómo lo que está mal

se transforme en regular, lo que está regular se transforme en bueno, y lo que está

bien se transforme en mejor, para que así sintamos la satisfacción de cumplir con

nuestro compromiso de impartir justicia como nuestra Constitución lo marca.

39

1. ¿Qué es el Código de Ética?

2. ¿En qué radica su importancia?

3. ¿Por qué es fruto del consenso de tres órganos colegiados del PJF?

V. CUESTIONARIO DE REFLEXIÓNSOBRE LA LECTURA

SEGUNDA SESIÓN

TEMA: Las nociones previas del Código de Ética.

OBJETIVOS: Conocer y asimilar adecuadamente las pertinentes precisio-

nes conceptuales sobre el contenido del Código de Ética.

Entender la estructura lógica del texto.

DINÁMICA: Collage "¿Quién soy?", dinámica de conocimiento y expre-

sión personal.

EXPOSICIÓN INICIAL: Los 4 principios del Código y las 17 virtudes humanas y

judiciales.

TEXTO DEL C. DE ÉTICA: Fracción VII. Nociones previas de la Presentación del

Código de Ética.

LECTURA AUXILIAR: El coro de Antígona, texto de Sófocles que reflexiona sobre

el valor del ser humano.

PUNTOS A RESALTAR: El Código de Ética es una herramienta valiosa para conocer

y aplicar las virtudes humanas y judiciales.

41


VII. Nociones previas:

1.- Denominación.- Aunque la estructura de este documento no es propia-

mente un "cuerpo de normas dispuestas según un plan metódico y siste-

mático", que es la acepción que comúnmente se le da a la palabra "código",

se emplea este vocablo por ser la denominación preponderante que se ha

dado a documentos similares, existentes en otros países de Iberoamérica.

Además, desde el punto de vista gramatical, tal locución es correcta, pues

dicho término también puede emplearse en sentido figurado, para deno-

minar a "un conjunto de principios y reglas sobre cualquier materia".

2.- Destinatarios.- Los principios, reglas y virtudes judiciales que se contie-

nen en este Código de Ética del Poder Judicial de la Federación, tienen

como destinatarios a los titulares de los órganos del Poder Judicial de

la Federación, así como a los demás integrantes de dichos órganos en la

medida en que tales principios, reglas y virtudes judiciales resulten

aplicables a la función que cada uno de ellos desempeña.

43


3.- Finalidad.- En el Código se recogen los principios, reglas y virtudes

judiciales, que se consideran idóneos para constituir un referente deonto-

lógico, que pueda no sólo guiar la conducta de los juzgadores federales

y sus auxiliares, sino facilitar la reflexión ética sobre los diversos aspectos

de la función que desempeñan; consecuentemente, tales principios y

reglas no son elaborados con la finalidad de complementar o reglamentar

la legislación vigente en materia de cualquier tipo de responsabilidad

jurídica de los miembros del propio Poder Judicial de la Federación.

4.- Estructura.- El Código se divide en cinco capítulos. En los cuatro primeros

se definen los que se consideraron los cuatro principios rectores funda-

mentales de la ética judicial (independencia, imparcialidad, objetividad

y profesionalismo). Después de cada principio, se enunciaron algunas

reglas relacionadas con el mismo, que se estiman importantes. El listado

de estas últimas no es, por tanto, de carácter taxativo, pues se estima

que el Código de Ética debe ser un instrumento flexible, que constituya

un punto de partida para la reflexión ética personal de cada juzgador

y no un catálogo exhaustivo de deberes morales.

En el capítulo quinto no se recoge propiamente un principio rector de la

Ética Judicial, sino que bajo el rubro denominado "Excelencia", se pro-

ponen una serie de virtudes judiciales, que en su conjunto conforman el

perfil ideal de un buen juzgador.

5.- Contenido.- Los referidos cuatro principios que se desarrollan en sendos

capítulos del proyecto (independencia, imparcialidad, objetividad y

profesionalismo) y la excelencia judicial a que se refiere el último capítulo,

corresponden a los principios que, conforme al artículo 100, párrafo

séptimo de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos,


rigen a la carrera judicial. Esta coincidencia es deliberada, pues lo que

se pretende es recoger y desarrollar, en el aspecto ético, los principios

que, por contenerse en la Ley Fundamental, son reconocidos y acepta-

dos por los propios juzgadores y por la sociedad en general, como

directrices de la función jurisdiccional.

Los principios referidos se estructuran de manera coherente, tomando

como hilo conductor la independencia judicial en sentido lato (enten-

dida como la actitud que debe asumir el juzgador para ejercer la función

jurisdiccional, sólo desde la perspectiva del Derecho).

Los tres primeros principios (independencia judicial en sentido estricto,

imparcialidad y objetividad) son las tres manifestaciones de la indepen-

dencia judicial en sentido lato: La primera, se refiere a la actitud del

juzgador frente a influencias extrañas al Derecho, provenientes del sistema

social; la segunda, frente a influencias ajenas al Derecho provenientes

de las partes en los procesos sometidos a su potestad; y la tercera,frente a influencias extrañas al Derecho provenientes del propio juzgador.

El cuarto principio (profesionalismo), se refiere al ejercicio responsabley serio de la función jurisdiccional. Finalmente, la excelencia, se consideracomo un arquetipo al que deben aspirar los juzgadores, mediante el

cultivo de las virtudes judiciales que se definen en el Código.

Este Código de Ética proporciona una visión institucional de los valores y

virtudes que rigen el sistema de impartición de justicia de México y ayudará

a los servidores del Poder Judicial de la Federación a mejorar la efectividad

de nuestra institución, al mismo tiempo que constituirá un referente objetivo

para la valoración de la conducta personal de cada uno de quienes tenemos

el honor de servir a nuestra Patria en la judicatura.

47

II. DINÁMICA

COLLAGE ¿Quién soy?

OBJETIVOS:

- Facilitar la comunicación en pequeños grupos.

- Expresión de tensiones, intereses y motivaciones personales.


- Un cartoncillo tamaño carta para cada participante.

- Un papel, tijeras, pegamento, revistas y plumones para el grupo.

- Salón suficientemente iluminado, amplio y con mesa de trabajo.

DURACIÓN:

- 30 minutos.

TAMAÑO DEL GRUPO:

- Equipos de 4 a 7 personas.


DESARROLLO:

- Se organizan equipos de 4 a 7 integrantes cada uno.

- Cada participante seleccionará de las revistas imágenes y símbolos que lo

identifiquen. Con recortes pegados al cartoncillo, cada participante debe

contestar a la pregunta: ¿Quién soy? ( Aprox. 10 minutos)

- Cada uno de los integrantes del equipo, interpreta el "Collage" de cada

participante. Sólo cuando los compañeros han expresado su punto de vista, el

autor explica o aclara su obra. (Aprox. 15 minutos en total)

- Una vez que los equipos han terminado se hace una mesa redonda general

con el objeto de evaluar la experiencia y hacer que afloren los sentimientos de

los participantes. (Aprox. 5 minutos)

49

III. GUIÓN DEL TEMA DE NOCIONES PREVIAS

Necesidad de nociones previas

El Código de Ética del PJF es el resultado de diversas aportaciones y del cuidadosotrabajo de una Comisión nombrada especialmente para su redacción. Recoge lo mejorde una serie de instrumentos jurídicos similares, adaptando lo necesario a nuestropropio entorno. En su parte introductoria, este documento hace una serie de preci-siones que son esenciales para evitar confusiones en la interpretación del texto.

En primer lugar, aclara que la denominación del documento es el de "Código", noen su acepción moderna relativa a un dispositivo normativo obligatorio, sino en suacepción clásica, general y más amplia de un corpus iuris.

Asimismo, aclara que, aunque en un primer momento sus destinatarios naturalesson propiamente los juzgadores federales, ciertamente también va dirigido a todoslos integrantes del PJF en su calidad de coadyuvantes en la tarea de la imparticiónde justicia.

El Código de Ética del Poder Judicial de la Federación es un documento que busca

constituirse como referente deontológico para guiar y sensibilizar a todos sus


miembros sobre los valores fundamentales en el servicio de impartición de justicia.

Dicho Código tiene el propósito de ayudar a los juzgadores a resolver los conflictos

éticos que se les presenten con motivo de su trabajo y ciertamente no es un catálogo

exhaustivo de deberes morales, sino un punto de partida para determinar la

conveniencia de determinadas conductas por parte de los destinatarios

Importancia de la ética

El comportamiento ético de los servidores públicos es una condición esencial

para el buen gobierno. Como actividad dirigida al Bien Común y a tutelar valores

sociales y bienes jurídicos fundamentales, el servicio público no debe contaminarse

con prácticas inmorales, socialmente nocivas. Esto es particularmente importante

en el ejercicio de la impartición de la Justicia, tanto por su inherente contenido

ético como por su condición de valor social por excelencia.

Toda institución debe velar tanto por la capacidad técnica como por la calidad

moral de sus integrantes. El comportamiento de los individuos, ya sea positivo o

negativo, afecta al desempeño de toda organización humana. Por ello, es necesario

impulsar una actitud congruente entre el comportamiento personal y la naturaleza

y fines de las instituciones.

Para que una persona asuma una conducta adecuada, es necesario crear en ella la

convicción suficiente. Esto puede lograrse actuando en tres niveles de la psique

humana:

1. Emotivo: La persona interioriza el Código y lo hace propio.

2. Intelectual: El contenido del Código es comprendido.

3. Acción: Los preceptos del Código se transforman en conductas.


Es importante resaltar que un Código de Ética es un documento vivo. Es también

un instrumento al que se acude para reafirmar la identificación del grupo y con el

grupo. Se constituye en referente deontológico y junto con la cultura organizacio-

nal da un punto de apoyo y orientación en un mundo cambiante. Los destinatarios

acuden a él como seres inteligentes y dotados de una voluntad libre.

Para evitar discusiones sutiles, el Código recoge indistintamente una serie de

principios, reglas y virtudes, tanto netamente de ética jurídica, como de ética general,

en cuanto que conllevan el mejor logro de la función jurisdiccional. Los principios

generales siguen al art. 100 constitucional y dan pie a los capítulos del Código.

Dichos principios se traducen en reglas de aplicación y deben vivirse a través de

virtudes personales.

El Código contiene 32 reglas, no taxativas sino que son puntos de reflexión personal:

4 sobre independencia, 5 de imparcialidad, 4 sobre objetividad y 19 sobre profe-

sionalismo. La excelencia se visualiza como un arquetipo al que hay que aspirar

mediante el cultivo de 17 virtudes, éticas y humanas, que se consideran idóneas

para el desempeño de la labor jurisdiccional.

53


EL CORO DE ANTÍGONA, DE SÓFOCLESSegún traducción de Ángel Ma. Garibay

Muchos misterios hay: de todos los misterios, el más grande es el hombre.

Puede él surcar el mar grisáceo y llegar a la opuesta orilla empujado por las revueltasolas. Nada importa que bramen ellas, ni que enfurezca el Sol sus ardores. Marchaseguro y llega a donde intentar pretendía.

Hay un ser sólo que puede torturarlo. Es la tierra madre. Es ella incansable, esindomable pues prodiga año tras año, innúmeras cosechas a su labor. Pero él consu arado, en interminable afán, la labra y recoge de ella el don que aviva, y la fatigacon el trabajo de los caballos.

Pero puede también atrapar y encerrar dentro de sus trampas, al alado ejército delos pájaros que sin cesar agitan la cabeza. Como a los peces habitantes de lasaguas, que cautiva en sus redes.

¡Ingenioso es el hombre…!

Y la palabra y el pensamiento que vuelan como el viento y las leyes que rigen las

ciudades, él solo sin maestro las ha aprendido. Y supo hallar también defensa


contra las flechas que le lanza el frío insospechable, o los duros azotes de la lluvia.

Para todo halla recursos y remedios. Nada que traiga el futuro incierto podrá

superarlo.

Un solo ser resulta para él irreductible. No tiene un sortilegio con lo que rehúya. Es el

Averno, en que la muerte lo arroja, por más que para vencer las dolencias, aun las

más reacias, tenga remedio y medicina…

1. ¿Qué es el ser humano?

2. ¿Qué distingue al ser humano de otros seres vivos?

3. ¿En qué radica su dignidad eminente?


55

57

TEMA: El Preámbulo del Código de Ética.

OBJETIVOS: Asimilar los anhelos de justicia del pueblo mexicano que

cimientan la existencia del Poder Judicial de la Federación.

Comprender nuestra responsabilidad como continuadores

de la obra de los grandes juristas que nos han precedido

DINÁMICA: Valores, sobre la propia jerarquización de valores.

EXPOSICIÓN INICIAL: La importancia de la ética profesional y judicial.

TEXTO DEL C. DE ÉTICA: Preámbulo del Código de Ética.

LECTURA AUXILIAR: Definición de la ética, por el Mtro. Antonino González de

la Universidad Complutense de Madrid.

PUNTOS A RESALTAR: La tarea de la ética es el reconocimiento de la dignidad de

la persona y sus derechos inherentes.

TERCERA SESIÓN

59


PREÁMBULO

Hay anhelos que son universales, como la búsqueda sempiterna de una sociedad

de hombres libres, que les garantice su desarrollo humanístico y los emancipe de

temores. Una de las más bellas expresiones de ese afán generoso, quedó brillante-

mente consagrado en la exposición de motivos de la Constitución Federal de 1824,

la primera del México independiente, cuyos postulados han sido igualmente

inspiradores del presente Código de Ética, en cuanto a que "…sin justicia no hay

libertad, y la base de la justicia no puede ser otra que el equilibrio entre los derechos

de los demás con los nuestros.", en el anhelo de "… hacer reinar la igualdad ante

la ley, la libertad sin desorden, la paz sin opresión, la justicia sin rigor, la clemencia

sin debilidad; demarcar sus límites a las autoridades supremas de la nación, combinar

éstas de modo que su unión produzca siempre el bien y haga imposible el mal;

arreglar la marcha legislativa, poniéndola al abrigo de toda precipitación y extravío;

(…) asegurar al Poder Judicial una independencia tal que jamás cause inquietudes

a la inocencia ni menos preste seguridades al crimen…," y en la conciencia de que

"… el honor nacional está altamente comprometido en la conducta que observamos.

Si nos desviamos de la senda constitucional; si no tenemos como el más sagrado

de nuestros deberes mantener el orden y observar escrupulosamente las leyes que

comprende el nuevo Código; si no concurrimos a salvar este depósito y lo ponemos


a cubierto de los ataques de los malvados; mexicanos, seremos en adelante

desgraciados, sin haber sido antes más dichosos".

Estos pensamientos bien pueden expresar la tarea de la ética de nuestro tiempo: la

preocupación del hombre por el respeto y el reconocimiento a la dignidad de los

otros. Hablar hoy de ética equivale a hablar de justicia, pues las relaciones armónicas

entre las personas sólo pueden construirse cuando se respetan los derechos que a

cada uno le corresponden.

La labor del juzgador no sólo requiere el conocimiento de la ciencia jurídica, porque

hay espacios en los que su única directriz es su propia conciencia. Esta requiere

ser ilustrada a partir de patrones de conducta asumidos libremente, que tiendan a

hacer efectivos los valores que si bien están ínsitos en el propio quehacer del juez

y en el ordenamiento jurídico, es indispensable explicitar, pues debe tenerse presente

que lo callado, aunque obvio, se olvida, se disimula o se desdeña.

El presente Código de Ética del Poder Judicial de la Federación, pretende ser una

espiga de tan profundos pensamientos, trayendo a la reflexión a la conciencia y a

la práctica, los principios, reglas y virtudes inherentes a la función jurisdiccional,

que se encuentran compenetrados en el sentir de nuestra comunidad, que los

juzgadores ilustres, desde antaño, han asumido como propios y que definen los prin-

cipios constitucionales de la carrera judicial cuyo punto nodal es la independencia

del juzgador.

Este Código aspira al reconocimiento de que la ética judicial sea la senda por

la que transiten cotidianamente los servidores públicos del Poder Judicial de la

Federación; que sea un documento no sólo informativo, sino formativo a tal punto

que su práctica reiterada se convierta en la segunda naturaleza del juzgador, para


que, a través de su vida, dé contenido, claridad y sistematización a tales postulados;

porque el conocimiento de la ética no es innato, sino por el contrario, es adquirido:

lo innato es tan sólo la disposición para adquirirlo.

La aparición de este Código no obedece a que los juzgadores desconozcan o sean

ajenos a estos principios, sino a la necesidad de plasmar en un documento, de

manera sistematizada, las directrices que constituyen un referente institucional para

incentivar y facilitar la reflexión crítica de cada juzgador sobre su conducta.

Por ello, la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el Consejo de la Judicatura

Federal y la Sala Superior del Tribunal Electoral, han considerado necesaria la

publicación del presente Código, como instrumento que fomentará la formación en

el conocimiento ético por parte de todos aquellos que se encuentran investidos

con la honrosa y trascendente responsabilidad de dirimir conflictos en el seno de

la sociedad.

63

II. DINÁMICA

JERARQUÍA DE VALORES

OBJETIVOS:

- Explicitar la propia jerarquía de valores.- Analizar las actitudes hacia objetivos vitales.


- Dos formatos predeterminados para cada participante; "Definiciones" y"Valores del Equipo".- Un cartel con una lista de 9 valores diferentes que se proponen.- Salón suficientemente iluminado, amplio y con mesa de trabajo.

DURACIÓN:

- 30 minutos.

TAMAÑO DEL GRUPO:

- Equipos de 4 a 7 personas.


DESARROLLO:

- Se organizan equipos de 4 a 7 integrantes.

- Los participantes leerán y estudiarán la lista de 9 valores propuestos.

- Cada participante, en el formato de "DEFINICIONES" deberá jerarquizar sus

valores conforme a su propio criterio, tomando en cuenta:

- Asignar el número 1 al valor más importante.

- Asignar el número 9 al valor menos importante.

- Asignar a los demás valores los números restantes. ( Aprox. 5 minutos)

- Una vez terminado el ejercicio individual, cada participante mostrará su propia

lista y se llenarán en cada equipo los formatos de "VALORES DEL GRUPO".

(Aprox. 10 minutos)

- Una vez que los participantes han terminado se hace una mesa redonda

general con el objeto de evaluar la experiencia y comentarla. (Aprox. 15

minutos)


DEFINICIONES

LIDERAZGO Lograr ser un dirigente influyente; organizar las activida-

des de la gente para lograr los objetivos de la colectividad

o de la organización a la que pertezco.

PERICIA Lograr ser una autoridad en determinada especialidad

técnica en cualquier campo; perservar hasta alcanzar nivel

de experto.

PRESTIGIO Llegar a ser una persona muy conocida, obtener distincio-

nes y reconocimiento, alcanzar una posición elevada.

SERVICIO Contribuir al bienestar de los demás; ser útil a los que se

encuentran en dificultades.

RIQUEZA Ganar mucho dinero; hacer una gran fortuna.

AFECTO Ganar y compartir amistad y afecto a través de la familia

y de los amigos.

SEGURIDAD Conseguir una posición económica estable y segura.

DEBER Dedicarse plenamente al cumplimiento de mis responsa-

bilidades, a la búsqueda de valores, ideales y principios.

PLACER Disfrutar lícitamente de la vida, ser feliz y divertirse, tener

las cosas buenas de la vida.


VALORES DEL GRUPO

VALOR TÚ 1 2 3 4 5 TOTAL PRO-MEDIO

LIDERAZGO

PERICIA

PRESTIGIO

SERVICIO

RIQUEZA

AFECTO

SEGURIDAD

DEBER

PLACER

69

III. GUIÓN SOBRE EL TEMA DELPREÁMBULO DEL CÓDIGO DE ÉTICA

Teniendo en consideración que el objeto de un preámbulo consiste en anunciar el

mensaje que encarna el espíritu y refleja el propósito justificativo de la creación de

determinado texto normativo, y que su valor radica en que permite acercar a los

lectores, de manera sintética, al fondo de las determinaciones normativas, su base

histórica y sus ideales inspiradores, se estimó conveniente sustituir la "exposición

de motivos" del Proyecto inicial del Código de Ética por una "Presentación", y

redactar un nuevo preámbulo que cumpliera con la finalidad antes apuntada, pero

conservando el texto originalmente propuesto dentro de la "Presentación".

En el preámbulo actual se advierten las características esenciales del Código: se

apela a su contenido histórico, a su génesis constitucional, a los valores, reglas y

principios asumidos por los jueces de antes y de ahora, que continuarán vigen-

tes porque constituyen innegables aspiraciones universales.

La transcripción de la Constitución de 1824 nos lleva de manera inmediata a los

orígenes mismos del Poder Judicial Federal, para recordarnos los ideales que lo

mueven y los principios que deben animarlo siempre.


El preámbulo del Código de Ética recoge la idea del señor Ministro Aguirre Anguiano

de que lo callado, aunque obvio, se olvida, se disimula o se desdeña. Los principios,

reglas y virtudes judiciales que aquél recoge son obvios para cualquier juzgador,

no sólo porque los primeros se derivan de la propia Constitución Política, sino

porque se desprenden del sentido común. En todos ellos subyace la pregunta

esencial: ¿cuál es la suerte de los justiciables? De ahí la delicada tarea de impartir

justicia.

71


LA DEFINICIÓN DE LA ÉTICAEnsayo Apuntes de Ética General, del Mtro. Antonino González

La palabra "ética" procede del vocablo griego ethos, que posee dos sentidos fundamen-

tales. Según el primero y más antiguo, ethos significaba 'residencia, morada, lugar

donde se habita'. Se usaba, sobre todo en poesía, con referencia a los animales,

para aludir a los lugares donde se crían y encuentran, a los de sus pastos y guaridas.

Después, se aplicó a los pueblos y a los hombres para referir a su país o patria. Este

sentido fundamental de ethos como lugar exterior o país en que se vive pasaría a

significar posteriormente, en la época aristotélica, el lugar que el hombre lleva

en sí mismo, el de su actitud interior, el de su referencia a sí mismo y al mundo.

El ethos sería el suelo firme, el fundamento de la praxis, la raíz de la que brotan

todos los actos humanos.

La acepción más usual del vocablo ethos, según toda la tradición filosófica a partir

de Aristóteles, y que atañe directamente a la ética, es la que significa 'modo de ser'

o 'carácter'. De ahí que el vocablo ethos tenga un sentido más amplio que el que

hoy tiene la palabra "ética", ya que lo ético comprende las disposiciones del hombre

en la vida, su carácter, sus costumbres y también lo moral. En realidad se podría

traducir por 'modo' o 'forma de vida' en el sentido hondo de la palabra, como


modo de ser o forma de vida que se va adquiriendo, apropiando, incorporando a lo

largo de la existencia. Esta apropiación de una forma de vida se logra mediante

el hábito, es decir, no es como el pathos ('lo dado por la naturaleza'), sino que se

adquiere mediante la repetición de actos iguales.

Lo ético se produce así en el entorno del círculo formado por las nociones de

ethos, hábito y acto, en el que se resumen los dos significados usuales de ethos: el

principio de los actos y el resultado de los mismos actos. Ethos es, por una parte,

carácter acuñado, impreso en el alma por los hábitos; pero, por otra parte, ethos es

también la fuente de donde dimanan los actos.

Cuando los latinos tradujeron los sentidos de lo ético a su lengua lo hicieron con

la palabra mos, mores ("moral"), pero sin que se perdiera la riqueza de las distintas

acepciones griegas, claramente perceptibles en el latín clásico. La obra moral del

hombre parece consistir, al hilo de la etimología griega, en la adquisición de un

modo de ser. Pero este modo de ser se logra y afirma gradualmente, por lo cual

se dan diferentes niveles de apropiación: el pathos, las costumbres y el carácter.

El más bajo es el nivel del pathos, el de los sentimientos, que son ciertamente

míos, pero tal vez pasajeros y, de cualquier modo, escasamente dependientes

de mi voluntad. Las costumbres significan ya un grado mucho más alto de posesión.

Por encima de ellas, el carácter constituye una impresión de rasgos en la persona

misma: el carácter es la personalidad que hemos conquistado a través de la vida,

lo que hemos hecho de nosotros mismos, viviendo. Mos, mores, en su sentido

pleno, significa pues, como ethos, 'modo de ser' o 'carácter'. Pero el carácter se

adquiere por hábito, se adquiere viviendo. Por eso, mos, mores, significa también

'costumbre'.

Hay que entender por "ética", por tanto, la investigación crítica de los fenómenos

morales o bien de las normas morales de la conducta, es decir, la investigación


sistemática tanto de los conceptos "bueno", "malo", "deber", "justo", "injusto", etcétera,

como de los principios según los cuales usamos o deberíamos usar tales conceptos.

Entendida así, la ética ha sido calificada con frecuencia, desde Aristóteles, de ciencia

práctica para distinguirla de la filosofía teorética. Esta denominación provocó en la

Filosofía Moderna no pocos equívocos, al no advertir que la ética trata primariamente

del saber y no de la conducta y que, por tanto, su función no puede ser de suyo

provocar decisiones morales concretas. No obstante, esta denominación de "filo-

sofía práctica" es legítima, ya que las preguntas más abstractas de la ética están en

definitiva orientadas a la conducta moral.

La ética y la moral

A pesar de su etimología común, y a pesar de que ambas nociones se identificaron

durante cientos de años a lo largo de la historia, actualmente es común diferenciar

el concepto de ética del concepto de moral, sobre todo a partir de que se delimitaran

ambos significados en la tradición filosófica anglosajona.

La ética es una teoría filosófica de la acción con una doble tarea que cumplir.

Un primer momento trata de detectar los caracteres específicos del fenómeno uni-

versal de la moralidad. Un segundo momento de distanciamiento y elaboración

filosófica sitúa al pensador moral en el ámbito de los argumentos que pueden ser

universalmente aceptados. La primera tarea consiste primariamente en tener que

habérselas con el hecho moral, hecho humano irreductible a otros y cuya no com-

prensión hace incomprensible el mundo humano. Es cierto que filósofos y científicos

de todos los tiempos han intentado dar cuenta de moral desde la biología, la

psicología, la sociología o la economía, pero los reiterados fracasos de esos intentos,

por la tozudez de los hechos morales para emerger con nueva fuerza, han demostra-

do que lo moral no se rinde, sino que reaparece reiteradamente del modo más

insospechado.


Esta reflexividad ética constituye un lenguaje filosófico con respecto al lenguaje

moral y, por tanto, no pretende aumentar el número de las prescripciones morales.

La cuestión ética no es de modo inmediato ¿qué debo hacer? sino ¿por qué debo?,

es decir, consiste en hacer concebible la moralidad, en tomar conciencia de la

racionalidad que hay ya en el obrar, en acoger especulativamente en conceptos

lo que hay de saber en lo práctico. Precisamente porque la tarea de la ética consiste

en esclarecer el fundamento por el que los juicios morales se presentan con

pretensiones de necesidad y universalidad, su objeto se encuentra en la forma de

la moralidad, es decir, ha de proporcionar el procedimiento lógico que permita

discernir cuándo un contenido conviene a la forma moral.

75

1. ¿Qué es la ética?

2. ¿Está pasada de moda o es siempre actual?

3. ¿Realmente es una guía para nuestro quehacer cotidiano?


TEMA: Principio de independencia judicial.

OBJETIVOS: Conocer qué es la independencia. Reconocer los actos

contrarios a ella. Aplicar en la labor cotidiana este principio

toral de la labor judicial.

DINÁMICA: Abanico personal, sobre los roles que desempeñamos

como personas y profesionistas.

EXPOSICIÓN INICIAL: La independencia judicial, conceptos teóricos y marco

normativo.

TEXTO DEL C. DE ÉTICA: Capítulo I

LECTURA AUXILIAR: Discurso de Pericles en el que ensalza las virtudes que

hicieron de Atenas, un modelo para el mundo conocido.

PUNTOS A RESALTAR: La independencia es el principio esencial que permite

impartir justicia con apego al derecho.

CUARTA SESIÓN

77

79


CAPÍTULO I

INDEPENDENCIA

1. Es la actitud del juzgador frente a influencias extrañas al Derecho, provenientes

del sistema social. Consiste en juzgar desde la perspectiva del Derecho y no a

partir de presiones o intereses extraños a aquél. Por tanto, el juzgador:

1.1 Rechaza cualquier tipo de recomendación que tienda a influir en la tramitación

o resolución de los asuntos que se sometan a su potestad, incluso las que

pudieran provenir de servidores del Poder Judicial de la Federación.

1.2 Preserva el recto ejercicio de su función denunciando cualquier acto que

tienda a vulnerar su independencia.

1.3 Evita involucrarse en actividades o situaciones que puedan directa o indirecta-

mente afectar su independencia.


1.4 Se abstiene de recomendar, insinuar o sugerir, con un fin ilegítimo, el sentido

en que deban emitir los demás juzgadores cualquier determinación judicial

que tenga efecto sobre la resolución de un asunto.

81

II. DINÁMICA

ABANICO PERSONAL

OBJETIVOS:

- Fomentar el conocimiento de uno mismo y de los demás.

- Ejercitar la expresión oral y la escucha activa de los demás.


- Salón suficientemente iluminado y amplio.

DURACIÓN:

- 30 minutos.

TAMAÑO DEL GRUPO:

- 10 a 30 personas.


DESARROLLO:

- Se organiza al grupo en parejas, para que entablen un diálogo amistoso en

torno a 5 ámbitos relativos a su propia vida:

- Personal, familiar, laboral, comunitario y altruismo.

- Al final, de manera libre se comenta la experiencia, en la que se descubre la

necesidad de conocernos, saber expresarnos y escuchar a los demás.

83

ETIMOLOGÍA

INDEPENDENCIA

IN = Negación.

DE = Complemento posesivo.

PENDEO, PENSUM = Estar colgado, pendiente.

Negación de dependencia, de vinculación, de subordinación, de sometimiento…

Cualidad de independencia, que no tiene dependencia de otro.

INDEPENDENCIA JUDICIAL

Independencia judicial en sentido lato (entendida como la actitud que debe asumir

el juzgador para ejercer la función jurisdiccional, sólo desde la perspectiva del

derecho).

"La función judicial en nuestra época ha asumido una creciente complejidad, en

virtud de que lo que se había concebido de manera tradicional como una actividad

puramente técnica de resolución de conflictos jurídicos, se ha transformado en

III. GUIÓN SOBRE EL TEMA DEINDEPENDENCIA JUDICIAL


uno de los servicios públicos esenciales del Estado contemporáneo…" Héctor

Fix-Zamudio.

INDEPENDENCIA y autonomía son presupuestos de la IMPARTICIÓN DE JUSTICIA.

La impartición de justicia no debe estar sometida al poder político.

INDEPENDENCIA JUDICIAL: elemento esencial del ESTADO DE DERECHO.

"La independencia judicial no es sólo una pieza básica del Estado de derecho para

el correcto funcionamiento técnico jurídico de éste, sino que también lo es desde el

punto de vista de su legitimación política… La percepción por parte de los ciuda-

danos de que sus jueces actúan con independencia es una de las circunstancias

necesarias para que asuman y aprecien los valores en que se funda el Estado de

derecho… no basta que se haga justicia, sino que debe ser vista" Luis María

Díez Picazo.

El PODER JUDICIAL es el control de y equilibrio entre poderes.

Es instancia de solución de conflictos.

INDEPENDENCIA como VALOR: Sometimiento a la LEGALIDAD.

INDEPENDENCIA como GARANTÍA que permite el ejercicio de la función jurisdic-

cional en el Estado de derecho. También llamada independencia judicial.

A su vez, la INDEPENDENCIA JUDICIAL stricto sensu se subdivide en:

Independencia PERSONAL: Protección al Juez de los poderes públicos.

Independencia COLECTIVA: Protección a la institución de la JUDICATURA.

Independencia INTERNA: Se protege al Juez de la estructura judicial.


A NIVEL INTERNACIONAL

Es un principio general, aceptado y consagrado en legislaciones nacionales y en

tratados internacionales. Es la tendencia mundial. En derecho comparado, siempre

se debe analizar con prudencia, tomando en cuenta los factores interrelacionados.

Tiene como base las garantías de audiencia y legalidad.

MARCO NORMATIVO

17 CPEUM Autonomía e independencia

94 CPEUM Carrera Judicial y CJF

111 CPEUM Inmunidad procesal

68 LOPJF Autonomía e independencia

131 LOPJF Responsabilidades

8 LFRASP Responsabilidades

221 CPF Delito de tráfico de influencias

"Independencia judicial, por tanto, es el pilar fundamental, el objetivo primero que

deseamos cumplir para alcanzar una situación real de Estado Democrático de

Derecho. En ello está puesto ya el esfuerzo de quienes tenemos el honroso encargo

de ser Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación Mexicana". Ministra

Olga Sánchez Cordero.

87


FRAGMENTOS DEL DISCURSO DE PERICLESELOGIANDO A LOS CAÍDOS EN LA GUERRA DEL PELOPONESO(Siglo V a.C.)

Nosotros, pues, en lo que toca a nuestra República, gobernamos libremente; y

asimismo en los tratos y negocios que tenemos diariamente con nuestros vecinos

y comarcanos, sin causarnos ira o saña que alguno se alegre de la fuerza o demasía

que nos haya hecho, pues cuando ellos se gozan y alegran nosotros guardamos

una severidad honesta y disimulamos nuestros pesar y tristeza.

Comunicamos sin pesadumbre unos a otros nuestros bienes particulares, y en lo

que toca a la República y al bien común no infringimos cosa alguna, no tanto por

temor al juez, cuanto por obedecer las leyes, sobre todo las hechas a favor de los

que son injuriados, y aunque no lo sean, causan afrenta al que las infringe.

Para mitigar los trabajos tenemos muchos recreos, los juegos y contiendas públicas,

que llaman sacras, los sacrificios y aniversarios que se hacen con aparatos honestos

y placenteros, para que con el deleite se quite o disminuya el pesar y tristeza de

las gentes. Por la grandeza y nobleza de nuestra ciudad, traen a ella de todas las

otras tierras y regiones mercaderías y cosas de todas clases; de manera que no nos

servimos y aprovechamos menos de los bienes que nacen en otras tierras que de

los que nacen en la nuestra.


Y en efecto, más queremos el reposo y sosiego, cuando no somos obligados por

necesidad de los trabajos continuos, y deseamos ejercitarnos antes en buenas

costumbres y loable policía que vivir siempre con el temor de las leyes; de manera

que no nos exponemos a peligro pudiendo vivir quietos y seguros, prefiriendo el

vigor y fuerzas de las leyes al esfuerzo y ardor de ánimo. Ni nos preocupan las

miserias y trabajos antes que vengan. Cuando llegan, los sufrimos con tan buen

ánimo y corazón, como los que siempre están acostumbrados a ellas.

Por estas cosas y otras muchas, podemos tener en grande estima y admiración

esta nuestra ciudad, donde viviendo en medio de la riqueza y suntuosidad, usamos

de templanza y hacemos una vida morigerada y filosófica, es, a saber, que sufri-

mos y toleramos la pobreza sin mostrarnos tristes ni abatidos, y usamos de las

riquezas, más para las necesidades y oportunidades que se pueden ofrecer que

para la pompa, ostentación y vanagloria. Ninguno tiene vergüenza de confesar su

pobreza, pero tiénela muy grande de evitarla con malas obras.

Todos cuidan de igual modo de las cosas de la República que tocan al bien común,

como de las suyas propias; y ocupados en sus negocios particulares, procuran

estar enterados de los del común. Sólo nosotros juzgamos al que no se cuida de la

República, no solamente por ciudadano ocioso y negligente, sino también por

hombre inútil y sin provecho.

Cuando imaginamos algo bueno, tenemos por cierto que consultarlo y razonar

sobre ello no impide realizarlo bien, sino que conviene discutir cómo se debe

hacer la obra, antes de ponerla en ejecución. Por esto en las cosas que emprendemos

usamos juntamente de la osadía y de la razón más que ningún otro pueblo, pues

los otros algunas veces, por ignorantes, son más osados de lo que la razón requiere,

y otras, por quererse fundar mucho en razones, son tardíos en la ejecución.


En suma, nuestra ciudad es totalmente una escuela de doctrina, una regla para

toda la Grecia, y un cuerpo bastante y suficiente para administrar y dirigir bien a

mucha gente en cualquier género de cosas. Que todo esto se demuestra por

la verdad de las obras antes que con atildadas frases, bien se ve y conoce por la

grandeza de esta ciudad; que por tales medios la hemos puesto y establecido en

el estado que ahora veis; teniendo ella sola más fama en el mundo que todas las

demás juntas.

Sólo ella no da motivo de queja a los enemigos, aunque reciba de ellos daño; ni

permite que se quejen los súbditos como si no fuese merecedora de mandarlos.

Y no se diga que nuestro poder no se conoce por señales e indicios, porque hay

tantos, que los que ahora viven y los que vendrán después, nos tendrán en grande

admiración…

91

1. ¿Qué cualidades cimentaron la grandeza de la Atenas clásica?

2. ¿Qué virtudes cívicas seguimos admirando hoy en día?

3. ¿Por qué era importante para los griegos la obediencia a la ley?


93

TEMA: El principio de imparcialidad.

OBJETIVOS: Conocer qué es la imparcialidad. Reconocer los actos

contrarios a ella. Aplicar en la labor cotidiana este principio

toral de la labor judicial.

DINÁMICA: El testimonio, ejercicio de percepción de la realidad.

EXPOSICIÓN INICIAL: La imparcialidad, conceptos y marco normativo.

TEXTO DEL C. DE ÉTICA: Capítulo II

LECTURA AUXILIAR: La muerte de Sócrates, texto clásico de Platón que nos

hace reflexionar sobre las consecuencias de una decisión

injusta.

PUNTOS A RESALTAR: La imparcialidad nos exige no favorecer a una parte en

detrimento de la otra, para así poder impartir justicia.

QUINTA SESIÓN

95

CAPÍTULO IIIMPARCIALIDAD

2. Es la actitud del juzgador frente a influencias extrañas al Derecho, provenientesde las partes en los procesos sometidos a su potestad. Consiste en juzgar, conausencia absoluta de designio anticipado o de prevención a favor o en contra dealguno de los justiciables. Por tanto, el juzgador:

2.1 Evita conceder ventajas o privilegios ilegales a cualquiera de las partes.

2.2 Rechaza cualquier dádiva que provenga de alguna de las partes o de terceros.

2.3 Evita hacer o aceptar invitaciones en las que el propio juzgador considereque se verá comprometida su imparcialidad.

2.4 Se abstiene de citar a las partes o personas vinculadas con ellas, fuera de lasoficinas del órgano jurisdiccional en el que ejerza su función.

2.5 Se abstiene de emitir cualquier opinión que implique prejuzgar sobre unasunto.


97

OBJETIVOS:

- Mostrar cómo cotidianamente confundimos los hechos con inferenciassubjetivas.- Subrayar la importancia que tiene el concentrar la atención y analizarobjetivamente.


- Salón suficientemente iluminado y amplio.- Cuestionarios impresos para todos los participantes.

DURACIÓN:

- 30 minutos.

TAMAÑO DEL GRUPO:

- 10 a 30 personas

II. DINÁMICA

EL TESTIMONIO


DESARROLLO:

- Se lee una breve historia, de apenas un párrafo, que conjunta hechos

contundentes con aseveraciones ambiguas.

- A continuación, a los participantes se les entrega una fotocopia del

CUESTIONARIO adjunto.

- Se tienen 10 minutos para contestar dicho cuestionario, en el cual se con-

signan 15 afirmaciones, cada una de las cuales debe ser calificada de

"Verdadera" (V), "Falsa" (F) o "Dudosa" (?).

- Se considera "Verdadera" la afirmación sólo si todos los términos de la

oración son ciertos. Se considera "Falsa" si alguno de los elementos de

la oración es, de manera indubitable, falso o no verdadero, aunque otros sean

ciertos. Se considera "Dudosa" si la oración en su totalidad es incierta, no

pudiendo afirmarse ni negarse nada en términos absolutos.

- Las respuestas son con frecuencia sorpresivas y el ejercicio permite reflexionar

sobre la objetividad y sobre cómo con frecuencia nos dejamos arrastrar por

suposiciones.

EL TESTIMONIO

Un hombre de negocios acababa de apagar las luces de la tienda

cuando un hombre apareció y demandó dinero. El dueño abrió una caja

registradora. El contenido de la caja registradora fue extraído y el hombre

salió corriendo. Un miembro de la policía fue avisado rápidamente.

99


CUESTIONARIO SOBRE EL TESTIMONIO

PARA SER RESUELTO POR LOS PARTICIPANTES

1. Un hombre apareció después que el dueño apagó las luces

de su tienda. V F ?

2. El ladrón era un hombre. V F ?

3. El hombre que apareció no demandó dinero. V F ?

4. El hombre que abrió la caja registradora era el dueño. V F ?

5. El dueño de la tienda extrajo el contenido de la caja

registradora y salió corriendo. V F ?

6. Alguien abrió una caja registradora. V F ?

7. Después de que el hombre que demandó dinero extrajo el

contenido de la caja, huyó a toda carrera. V F ?

8. Aunque la caja registradora contenía dinero, el testimonio

no dice cuánto. V F ?

9. El ladrón demandó dinero del dueño. V F ?

10. Un hombre de negocios acababa de apagar las luces

cuando un hombre apareció dentro de la tienda. V F ?


11. Era a plena luz del día cuando el hombre apareció. V F ?

12. El hombre que apareció abrió la caja registradora. V F ?

13. Nadie demandó dinero. V F ?

14. La historia se refiere a una serie de eventos en los cuales

únicamente se mencionan tres personas: el dueño de la tienda,

un hombre que demandó dinero y un miembro de la fuerza

de la policía. V F ?

15. Los siguientes eventos ocurrieron: alguien demandó

dinero, una caja registradora fue abierta, su contenido fue

extraído y un hombre huyó de la tienda. V F ?


RESPUESTAS AL CUESTIONARIO

1. ? ¿Está seguro de que el "hombre de negocios" y el "dueño" son la

misma persona?

2. ? ¿Puede hablarse de un "robo" necesariamente? Tal vez el hombre

que demandó dinero era un acreedor, o el hijo del dueño. Ellos a

veces "demandan" dinero.

3. F Una fácil para que no se les caiga la moral.

4. V El artículo "el" que antecede al sustantivo "dueño" no deja lugar a

duda.

5. ? Podría parecer poco probable, pero la historia no necesariamente

lo excluye.

6. V El testimonio dice que el dueño abrió la caja registradora.

7. ? No sabemos quién extrajo el contenido de la caja, ni es necesa-

riamente cierto que el hombre haya huido.

8. ? La cláusula dependiente es dudosa; la caja registradora pudo –o no

pudo- haber contenido dinero.

9. ? Un robo, ¿de nuevo?


10. ? ¿No es probable que el hombre haya aparecido frente a una ventana,

o se haya quedado en la puerta, sin haber realmente entrado a la

tienda?

11. ? Las luces de las tiendas generalmente permanecen prendidas durante

el día.

12. ? ¿No sería posible que el hombre aparecido haya sido el dueño?

13. F El relato dice que el hombre que apareció demandó dinero.

14. ? ¿Son el dueño y el hombre de negocios la misma persona? ¿O son

dos personas diferentes? Lo mismo puede preguntarse del dueño

de la tienda y el hombre que apareció.

15. ? ¿Huyó? ¿Qué no pudo simplemente haberse ido de prisa?

105

III. GUIÓN SOBRE EL TEMA DELA IMPARCIALIDAD

CAPÍTULO II

IMPARCIALIDAD

Cualidad de imparcial, que no favorece a ninguna de las partes, que no toma parte

ni partido…

ETIMOLOGÍA

IN = Negación.

PARTIALIS = Parcial, parte de. Lo relativo a una parte del todo.

Que no juzga o procede con parcialidad, inclinándose a una de las partes.

PARTE

Del latín Pars, partis.

Porción de un todo.

Se denomina parte a las personas que adquieren los derechos y obligaciones que

nacen de una determinada relación jurídica que ellos crean.


Cuando asume la posición activa se le denomina acreedor, y es deudor cuando

asume la posición pasiva.

PARTE Y TERCERO

Al concepto de parte se opone el concepto de tercero, por el que se entiende toda

persona ajena a los efectos del acto jurídico; es un extraño a la relación misma,

aunque concurra a su celebración. Son terceros concurrentes los testigos y notarios;

son terceros otorgantes aquellos que sin tener un interés directo establecen una

relación de derecho.

En la relación procesal, el concepto de parte presupone la existencia de una con-

tienda, de un litigio, en la que las partes que intervienen alegan cada cual su derecho.

En el proceso se denominan: actor y demandado; el primero es el titular de la

pretensión deducida en la demanda y el segundo es aquel a quien se le exige

el cumplimiento de dicha obligación.

PARCIALIDAD SUBJETIVA

Un tribunal se encuentra afectado de parcialidad cuando existe una relación personal

de un juez con una causa concreta, de tal forma que sus convicciones, compromisos

o emociones personales resulten suficientemente fuertes para prevalecer sobre lo

prescrito por las leyes.

PARCIALIDAD OBJETIVA

También cuando existen circunstancias que se relacionan con la persona del juez,

o con la posición del órgano de justicia que redunden en una prefiguración del

fallo, se podrá hablar de parcialidad del tribunal.


La parcialidad incide en la voluntad y ofusca a la inteligencia.

"La afición desordenada de favorecer o perjudicar injustamente a otro"

REMEDIO

La sana indiferencia.

Clarificar la intención.

"El ser humano actúa siempre en vista de un fin, no se encierra en el acto presente

sino que se asoma hacia un horizonte que da sentido a su conducta".

ORIGEN

El principio de imparcialidad tiene como origen el principio de acceso a la juris-

dicción, establecido en el art. 17 constitucional, que establece que toda persona

tiene derecho a que se le administre justicia por tribunales que estarán expeditos

para impartirla en los plazos y términos que fijen las leyes, emitiendo sus resolu-

ciones de manera pronta, completa e imparcial.

EL PRINCIPIO RECTOR DE IMPARCIALIDAD CONSISTE EN NO ESTAR A

FAVOR O EN CONTRA DE NINGUNA DE LAS PARTES INVOLUCRADAS

PRINCIPIO RECTOR DE IMPARCIALIDAD

Es el principio de imparcialidad, sin demérito de los demás, uno de los más impor-

tantes, ya que implica sostener el compromiso social de ubicar el ejercicio juris-

diccional en un nivel óptimo del interés colectivo de la sociedad y en el respeto a

la decisión de quienes constitucionalmente tienen la función de resolver conflictos

y especialmente sobreponerlo a las pretensiones e intereses tanto de particulares

como de las autoridades.


Asimismo, tiene conexión íntima con y de hecho, se ejerce a través de algunos

principios procesales:

PRINCIPIO DE IGUALDAD DE LAS PARTES

Independientemente de la posición en que se ubiquen las partes dentro de un

proceso (actor o demandado), ambos tienen las mismas garantías, prerrogativas,

derechos y obligaciones legales o formales, es decir, no deben existir privilegios a

favor de alguna de las partes, lo que se resume en el aforismo: "No debe permitirse

al actor lo que al demandado se le prohíbe".

PRINCIPIO IURA NOVIT CURIA

El juez conoce el derecho y debe aplicarlo, aun cuando las partes no lo invoquen.

Dime los hechos, y yo te diré el derecho…

PRINCIPIO DE INMEDIATEZ

Es el contacto personalísimo permanente que tiene el juzgador con las partes y con

todos los elementos objetivos que conforman el proceso, durante todos los actos y

actuaciones, con carácter de protagonista activo y director del proceso. Este principio

tiene una especial importancia en toda la fase probatoria y de alegatos, en la que el

juez personalmente observa y escucha a los contendientes. Se dice que a través de

este principio el juez "vive" el proceso.

PRINCIPIO DE EXHAUSTIVIDAD

El juzgador debe estudiar integralmente el escrito recursal e interpretar la verdadera

intención del promovente, a efecto de dar soluciones completas en su resolución.


PRINCIPIO DE ADQUISICIÓN PROCESAL

Las pruebas que obren en autos, independientemente de quien las haya presentado,

pertenecen al proceso y no a la parte aportante, por lo que pueden beneficiar

o perjudicar a cualquiera de los contendientes.

PRINCIPIO DE PUBLICIDAD (O SECRECÍA)

Los actos del tribunal deben ser del total conocimiento de las partes y de todos los

interesados para que puedan fiscalizarlos, evitando actuaciones procesales

ilegítimas, al margen del conocimiento de las partes.

MARCO NORMATIVO

CPEUM Art. 17

CPEUM Art. 14

CPEUM Art. 100

LOPJF Capítulo Impedimentos

CFPC Art. 170

111

Estaba cercana la puesta del sol y él había pasado mucho tiempo dentro. Vino,

pues, y se sentó, ya bañado, y después nos habló mucho. En esto se presenta el

criado de los Once y de pie delante de él dice:

–A ti, Sócrates, no tendré que reprocharte, como reprocho a otros, el que se irriten

contra mí y me maldigan cuando les comunico la orden de beber el brebaje forzán-

dome a ello los que mandan. En cambio tú, como he visto mil veces en todo este

tiempo, eres el hombre más noble, más pacífico, en fin, el mejor de cuantos jamás acá

han entrado; y especialmente en estos momentos estoy seguro de que no te irritarás

contra mí, pues conoces a los responsables, sino con ellos. Así que, pues sabes

ahora ya lo que vengo a anunciarte, adiós, y procura sobrellevar lo mejor posible

esto, que es inevitable.

Y echándose a llorar dio media vuelta y se fue. Sócrates, alzando los ojos hacia él,

le dijo:

–Adiós tú también, y cumpliré lo que me encargas. –Y dirigiéndose a nosotros

exclamó–: ¡Qué hombre tan atento! Toda esta temporada venía a visitarme y me


LA MUERTE DE SÓCRATES,Relatada por Platón


daba conversación a ratos; se mostraba ser de lo mejor. Y ahora, ¡cuán delicadamente

llora por mí! Así que, Critón, obedezcámosle y que traiga la droga si está ya macha-

cada; y si no que la machaque el encargado.

Critón dijo entonces:

–Pero Sócrates, si no me equivoco, todavía está el sol sobre los montes y aún no

ha acabado de ponerse. Y a mí me consta que, en estas ocasiones, otros suelen

beber el brebaje, pero muy tarde después de recibir el aviso, y no sin antes haber

comido y bebido a su gusto. Conque no hay que apurarse; aún queda tiempo.

–Es natural, Critón –respondió Sócrates–. que esos que dices hagan tales cosas,

pues piensan que con hacerlas consiguen algo; y es natural también que yo no las

haga, pues no creo conseguir nada con beber un poco más tarde si no es hacerme

digno de risa ante mí mismo con ese apegarme a la vida y andar escatimando lo

que ya no es nada. Así que haz lo que mandan, y déjate de impertinencias.

Oyendo esto, Critón hizo una señal al esclavo que estaba allí cerca. Salió el chico,

y al cabo de un rato volvió con el que tenía que dar el brebaje, que en una copa ya

traía machacado. Sócrates dijo al ver a éste:

–Perfectamente, buen hombre. Tú que sabes de esto, ¿qué es lo que hay que hacer?

–No hace falta más –dijo el hombre– sino que después de beber te pasees un poco

hasta que sientas pesadez en las piernas, te acuestes luego, y ello obrará por sí

mismo. –Y diciendo esto alargó la copa a Sócrates. Él la tomó, y muy serenamente,

sin temblar ni inmutarse lo más mínimo, ni en su color ni en sus facciones, sino

mirando al hombre por encima, como un toro, como tenía por costumbre, le dijo:


–Una pregunta: ¿con esta bebida se permite hacer alguna libación o no?

–Pues mira, Sócrates –respondió el hombre–. Solemos machacar ahí sólo la canti-

dad suficiente para beber.

–Entendido –respondió– Pero al menos se permite, y aun se debe, elevar una

oración a los dioses por el feliz cambio de residencia de acá abajo a allá: así les

suplico, y así sea.

Y diciendo esto, de un trago, con toda facilidad y suavidad, bebió hasta el fondo.

–Nosotros, en general, habíamos tenido hasta entonces un regular dominio de noso-

tros mismos para contener el llanto; pero cuando le vimos beber y que ya había

bebido, fue otra cosa. A mí, no obstante mis esfuerzos, se me salieron las lágrimas

y hube de cubrirme para desahogarme, llorándome a mí mismo, ya que no a él,

pues mi propia suerte me privaba de tal amigo. Critón, antes que yo, no pudiendo

contener las lágrimas, se había levantado e ido. Y Apolodoro, que durante todo el

tiempo anterior no había cesado de llorar, entonces rompió en tales rugidos de

dolor y de cólera, que a todos los presentes nos partía el corazón, si no al propio

Sócrates. Entonces dijo éste:

–¿Qué hacéis, hombres desconcertantes? Y pensar que he despedido de aquí a las

mujeres principalmente para evitar tales excesos. He oído decir que se debe morir

con dignidad. Un poco pues de calma y valor.

Al oír esto nos avergonzamos y contuvimos nuestros lloros. En esto él, que se

paseaba, avisó que sentía ya pesadas las piernas, y en seguida se acostó boca

arriba, pues así se lo había ordenado aquel hombre. Éste le palpó inmediatamente


y observó ya ahora, y después de tiempo en tiempo, los pies y piernas. Apretándole

fuertemente un pie le preguntó si sentía, y la respuesta fue que no. Pasó de aquí a

las piernas, y sucesivamente nos fue mostrando que se iba enfriando y quedando

yerto. De nuevo lo volvió a tocar, y le dijo que, cuando llegara al corazón, sería el

momento de partir. Ya casi la región del vientre estaba fría; y él, destapándose

(pues antes se había tapado) dijo estas palabras, las últimas que pronunció:

–Critón, le debemos sacrificar un gallo a Esculapio; con que pagadlo y que no se

os olvide.

–Así se hará –respondió Critón–. Mira si tienes algo más que decirme.

A esta pregunta él ya no respondió, sino que después de unos instantes, se movió,

y en seguida el hombre lo destapó: tenía fijos los ojos. Al verlo, Critón le cerró

ojos y boca.

Tal fue el fin de nuestro amigo, el hombre mejor de los de su tiempo, conocido por

nosotros, y además el más prudente y el más justo.

115

1. ¿Era Sócrates culpable?

2. ¿Qué opinas de su frase: "más vale sufrir una injusticia que cometerla"?

3. ¿Qué fuerza tendrían las enseñanzas socráticas sin su ejemplo final?


TEMA: El principio de objetividad.

OBJETIVOS: Conocer qué es la objetividad. Reconocer los actos contra-

rios a ella. Aplicar en la labor cotidiana este principio toral

de la labor judicial.

DINÁMICA: Autoevaluación 1, sobre la aplicación en la labor cotidiana

de los principios de independencia e imparcialidad.

EXPOSICIÓN INICIAL: La objetividad en materia jurisdiccional.

TEXTO DEL C. DE ÉTICA: Capítulo III.

LECTURA AUXILIAR: Final del libro décimo de La República, texto de Platón

sobre el valor de la justicia.

PUNTOS A RESALTAR: Las resoluciones que se tomen deben estar motivadas

por la consecución de la justicia mediante la aplicación

del derecho.

SEXTA SESIÓN

117

119

CAPÍTULO IIIOBJETIVIDAD

3. Es la actitud del juzgador frente a influencias extrañas al Derecho, provenientesde sí mismo. Consiste en emitir sus fallos, por las razones que el Derecho lesuministra y no por las que se deriven de su modo personal de pensar o de sentir.Por tanto, el juzgador:

3.1 Al emitir una resolución, no busca reconocimiento alguno.

3.2 Al tomar sus decisiones en forma individual o colegiada, buscará siempre larealización del derecho frente a cualquier beneficio o ventaja personal.

3.3 Si es integrante de un órgano jurisdiccional colegiado, trata con respeto asus pares y escucha con atención y apertura de entendimiento sus plan-teamientos y dialoga con razones y tolerancia.

3.4 Procura actuar con serenidad de ánimo y equilibrio interno, a fin de que sus

decisiones estén desprovistas de aprensiones y prejuicios.


121

II. DINÁMICA

1a. AUTOEVALUACIÓN SOBRE CUMPLIMIENTO DEL CÓDIGO DE ÉTICA

1. ¿He denunciado influencias o presiones externas graves hacia mi

trabajo?

2. ¿He procurado no dejarme influir por las notas periodísticas que

afecten a algún servidor público del PJF o relativas al caso en estudio?

3. ¿He cumplido con mi obligación de todo funcionario de denunciar

cualquier delito o falta al Código de Ética?

4. ¿He tenido la honestidad intelectual, la convicción y los criterios

jurídicos para mantener mi posición?

5. ¿He evitado el comentar imprudentemente el sentido de mis proyectos

o el contenido de asuntos delicados a personas ajenas a la resolución

del mismo?

6. ¿Me he esforzado por tratar bien a todos los ciudadanos que se presen-

ten para atención, indistintamente de su condición, aspecto y trato?


7. ¿He procurado siempre calificar objetivamente los proyectos y asuntos

sometidos a mi consideración, atendiendo a los documentos y el

expediente, sin inventar o suponer hechos?

8. ¿He sido siempre veraz en mis respuestas a una petición?

9. ¿He sido humilde frente a las observaciones que me hacen los com-

pañeros de trabajo, independientemente de su rango jerárquico?

10. Al analizar los asuntos a dictaminar ¿me he abstenido de destacar

los argumentos que favorecen mi propio criterio sin minimizar los

que se oponen a éste?

11. En las reuniones de trabajo ¿he escuchado con atención y respeto

los argumentos de los demás, especialmente los argumentos con-

trarios, sin menospreciar o encasillar a quienes lo sustentan? ¿He va-

lorado en su justa medida los argumentos contrarios a mi postura?

12. ¿He evitado prejuzgar sobre el contenido de un asunto sin antes

analizarlo, y evitar que esto influya en la elaboración del proyecto o

solución?

13. ¿He leído con detenimiento los anexos que se agregan a los asuntos

que se me turnan, a fin de comparar si coinciden con la información

aportada?

123

III. GUIÓN SOBRE EL TEMA DELA OBJETIVIDAD

ETIMOLOGÍA

Obiectus

A Ab: a, hacia.

Lectus: Lanzado, aventado, cuerpo lanzado, que se arroja.

Término multívoco.

Propiedad de los objetos. Aquello de que consta su realidad.

Característica del conocimiento en virtud de la cual éste carece de todo elemento

subjetivo y refleja lo más perfectamente posible su objeto real.

Adecuación del objeto al intelecto (Adecuatio rei ad intellectum).

Realismo objetivo u objetivismo: Afirma la existencia de los objetos con indepen-

dencia del sujeto que los conoce. Aquello que existe fuera del sujeto.

"La objetividad es una nota que corresponde a los objetos, no al sujeto que los

percibe". Karl Popper.


Objetividad es aquello en lo que con actitud científica y honesta nos ponemos de

acuerdo, unánime o mayoritario, en lo que es objetivo o real.

MARCO NORMATIVO CONSTITUCIONAL

Art 100

Art. 41, frac. III

Art. 109, frac. III

Art. 116, frac. IV, inciso b

Art. 134

Art. 100

¿Qué es objetividad desde el derecho?

¿La objetividad puede ser una actitud?

Operación del juicio ante los bienes que son presentados por la inteligencia.

Se confunde con indiferencia.

"Conciencia" se deriva del latín conscientia, propiedad del espíritu humano dereconocerse en sus atributos esenciales y en todas las modificaciones que en sí

mismo experimenta.

Conocimiento interior del bien que debemos hacer y del mal que debemos evitar.

Objeción de conciencia.

Actitud de desobediencia hacia determinada norma jurídica aplicable, cuando el

sujeto se ve obligado al desacato de la misma por motivos que le imponen sus

convicciones personales.

125


DIÁLOGO DE LA REPÚBLICA O DE LO JUSTO,DE PLATÓN, FINAL DEL LIBRO DÉCIMO.

–¿No hemos pasado a la justicia, en esta pesquisición, de todo lo que le es necesario,

y puesta aparte los honores y las recompensas que tú le has atribuido sobre la fe

de Homero y de Hesíodo? ¿No hemos demostrado que la justicia es por sí misma

mayor bien del alma; que ésta debe llevar a cabo lo que es justo, posea o no el

anillo de Giges, y, si se quiere también, a más de esto, el casco de Hades?

–Muy cierto es lo que dices.

–No puede, pues, parecer mal, mi querido Glaucón, que nos vean ahora restituir a

la justicia y a las demás virtudes, parte de las ventajas que le son propias, las

recompensas que los hombres y los dioses han unido a ellas, y que el hombre

justo recibe en vida y después de la muerte.

–Nada hay más censurable en ello.

–¿Me devolverás tú, a tu vez lo que te he prestado al principio de este diálogo?


–¿El qué?

–No tuve dificultad en concederte que el hombre justo pueda pasar por malvado y

el malvado por justo, porque tú creíste que aunque fuese imposible engañar en

esto a los hombres y a los dioses, había que suponerlo posible, con todo, en interés

de tu rebusca, para que pudiese plenamente apreciarse la justicia y la injusticia,

tomadas una y otra en sí mismas. ¿No te acuerdas de ello?

–No tendría razón para no recordarlo.

–Ahora que las hemos apreciado, te conjuro, en nombre de la justicia, a que le

restituyas los honores que de dioses y hombres recibe, y que tú mismo ayudes

a restablecerla en sus derechos: después de haberte hecho convenir en las ventajas

que hay en ser justo, y en que la justicia no defrauda las esperanzas de los que la

practican, quiero que convengas asimismo en que aventaja infinitamente a la injus-

ticia en aquellos bienes que se granjea la reputación del hombre virtuoso.

–No me pides más que lo justo.

–Me concederás, pues, en primer lugar, que el hombre virtuoso y el malvado son

conocidos por los dioses tales cuales ellos son.

–Te lo concedemos.

–Y que si la cosa es así, el uno es querido, el otro aborrecido de los dioses, como

desde el primer momento hemos convenido.

–Verdad es.


–¿No me concederás asimismo que el hombre querido de los dioses sólo bienes

puede esperar por parte de ellos, y que si tales veces recibe males, es en explicación

de las culpas de su vida pasada?

–Sin duda alguna.

–Fuerza es, pues, reconocer, respecto del hombre justo, que, encuéntrese indigente

o enfermo, o en cualquier otra situación considerada como desventurada, esos

pretendidos males redundarán en provecho suyo durante su vida o después de su

muerte. Porque la providencia de los dioses permanece necesariamente atenta a

los intereses de aquel que se esfuerza por llegar a ser justo y alcanzar, con la

práctica de la virtud, la más perfecta semejanza que el hombre pueda tener con

la divinidad.

–No es natural que un hombre de ese carácter sea olvidado por aquel a quien se

esfuerza en asemejarse.

–¿No hay que pensar todo lo contrario del malvado?

–Sin duda alguna. Así, por parte de los dioses, los frutos de la victoria se quedan

para el justo.

–Esa es, por lo menos, mi opinión.

–Y por parte de los hombres, ¿no es así como ocurren las cosas, ya que al fin hay

que decir la verdad? ¿No ocurre a los pícaros y perversos lo mismo que a esos

atletas que corren muy bien al arrancar del punto de partida, pero que no corren lo

mismo cuando hay que volver? Lánzanse al principio con rapidez; pero al final de


la carrera la gente se burla de ellos cuando les ve, que, con las orejas gachas, se

retiran precipitadamente sin ser coronados, mientras que los verdaderos corredores

llegan a la meta, siguen el premio y reciben la corona. ¿No cabe la misma suerte,

por lo regular, a los justos? Quiero decir: que al final de cada una de esas empresas

y al final de su conducta y de su vida, los hombres les pagan el tributo de gloria y

de recompensa que se les debe.

–Tienes razón.

–Permitirás, pues, que aplique a los justos lo que tú mismo has dicho de los

malvados. Pretendo que los justos, cuando entran en la edad madura, llegan, en el

Estado en que viven, a todas las dignidades a que aspiran; que conciertan a su

antojo alianzas para ellos y para sus hijos; en una palabra: todo lo que tú has dicho

de aquéllos, lo digo yo de éstos. En cuanto a los malvados, sostengo que, aun

cuando hubieran conseguido al principio ocultar lo que son, la mayor parte de

ellos se traiciona al final de la carrera; que cuando llegan a viejos, se les cubre

de ridículo y de oprobio, que son juguetes de los extranjeros y de sus conciudadanos,

y, para servirme de expresiones que tú considerabas demasiado fuertes respecto

del malvado, digo que serán azotados, torturados, abrasados con hierros candentes:

en una palabras, imagínate que oyes de mi boca todos los géneros de suplicio de

que entonces hacías tú mención. A ti te toca ver si quieres concederme que tendrán

que sufrir todo eso.

–Sí; tanto más cuanto que no dices cosa que no sea puesta en razón.

129

1. ¿Qué es la justicia?

2. ¿Por qué es la justicia una virtud?

3. ¿Es equiparable la conducta del malvado con la del justo, o son claramente

distintas?

4. ¿La justicia defrauda las esperanzas de quienes la practican? ¿Por qué?


TEMA: El profesionalismo jurisdiccional.

OBJETIVOS: Conocer qué es el profesionalismo. Reconocer los actos con-

trarios. Aplicar en la labor cotidiana los hábitos y conductas

que implica una actuación profesional.

DINÁMICA: Formando equipos, ejercicio para valorar la disponibilidad

a trabajar en equipo.

EXPOSICIÓN INICIAL: Conceptos teóricos sobre profesionalismo y ejercicio

profesional.

TEXTO DEL C. DE ÉTICA: Capítulo IV

LECTURA AUXILIAR: El ABC de la Deontología Judicial, texto imprescindible del

Ministro Juan Díaz Romero sobre la ética de los juzgadores.

PUNTOS A RESALTAR: Es importante adquirir conductas que nos lleven a actuar

profesionalmente en nuestro desempeño diario.

SÉPTIMA SESIÓN

131

133


CAPÍTULO IV

PROFESIONALISMO

4. Es la disposición para ejercer de manera responsable y seria la función

jurisdiccional, con relevante capacidad y aplicación. Por tanto, el juzgador:

4.1 Se abstiene de cualquier acto que pueda mermar la respetabilidad propia de

su cargo, tanto en el ámbito público como en el privado.

4.2 Actualiza permanentemente sus conocimientos jurídicos estudiando los

precedentes y jurisprudencia, los textos legales, sus reformas y la doctrina

relativa.

4.3 Procura acrecentar su cultura en las ciencias auxiliares del derecho.

4.4 Estudia con acuciosidad los expedientes y proyectos en los que deba intervenir.

4.5 Funda y motiva sus resoluciones, evitando las afirmaciones dogmáticas.


4.6 Dedica el tiempo necesario para el despacho expedito de los asuntos de su

juzgado o tribunal.

4.7 Asume responsable y valerosamente las consecuencias de sus decisiones.

4.8 Acepta sus errores y aprende de ellos para mejorar su desempeño.

4.9 Guarda celosamente el secreto profesional.

4.10 Lleva a cabo por sí mismo las funciones inherentes e indelegables de su cargo.

4.11 Trata con respeto y consideración a sus subalternos.

4.12 Escucha con atención y respeto los alegatos verbales que le formulen las

partes.

4.13 Trata con amabilidad y respeto a los justiciables.

4.14 Administra con diligencia, esmero y eficacia el órgano jurisdiccional a su

cargo.

4.15 Cumple puntualmente con el deber de asistir a su tribunal o juzgado.

4.16 Sabe llevar el cumplimiento de su beber hasta el límite de sus posibilidades,

y separarse de su cargo, cuando su estado de salud u otros motivos perso-

nales, no le permitan desempeñar eficientemente sus funciones.

4.17 Se abstiene de emitir opiniones sobre la conducta de sus pares.


4.18 Cumple con sus deberes de manera ejemplar para que los servidores públicos

a su cargo lo hagan de la misma manera en los que les correspondan.

4.19 Busca con afán que sus acciones reflejen la credibilidad y confianza propias

de su investidura.

137

OBJETIVOS:

- Facilitar la integración e identificación del grupo.

- Analizar la interactividad por afinidad entre los miembros del grupo.


- Salón iluminado y amplio.

DURACIÓN:

- 30 minutos.

TAMAÑO DEL GRUPO:

- De 10 a 30 personas.

II. DINÁMICA

FORMANDO EQUIPOS


DESARROLLO:

- En cada paso, las personas "sueltas" que no lleguen a completar el equipo

deseado (par, trío, cuarteto o sexteto), formarán un equipo extra.

- Cada participante hará pareja con algún otro participante, completándose X

parejas. Se tomará nota de las parejas que se forman y el tiempo invertido.

- Ahora, cada una se juntará con alguna otra pareja para formar Y cuartetos.

Se tomará nota del proceso, de los cuartetos que se forman y el tiempo invertido.

- Se deshacen los equipos totalmente y se repite el paso 1. Se toma nota,

particularmente de si se forman nuevas parejas o se repiten.

- A continuación, se invita a las parejas a formar tríos. Para ello, será indis-

pensable que algunas parejas previas se deshagan. Se toma nota del proceso,

de los tríos que se formen y del tiempo invertido.

- Se invita a los tríos a unirse en sextetos. Se toma nota del proceso, de los

sextetos que se forman y del tiempo invertido.

- Finalmente, se invita a los diferentes sextetos, así como a un posible equipo

de supernumerarios a unirse en un solo gran grupo y se les exhorta a funcionar

siempre con ese espíritu.

139

III. GUIÓN SOBRE EL TEMA DEEL PROFESIONALISMO

Profesionalidad:

• Cualidad de profesional (competente y responsable en una profesión).

• Cualidad de la persona u organismo que ejerce su actividad con relevante

capacidad y aplicación.

El término correcto de este principio es profesionalidad, pero la CPEUM la menciona

como profesionalismo.

¿Qué es el profesionalismo?

La definición de profesionalismo comprende lo que el servidor público en ejercicio

de sus funciones hace y el cómo lo hace, es decir, involucra la aplicación de un

cúmulo de conocimientos jurídicos especializados y la capacidad de incrementar

de manera constante ese conocimiento; implica integrar las habilidades, actitudes

y valores con los cuales se hace merecedor de la confianza y reconocimiento tanto

del titular que lo designó, como de la sociedad que constitucionalmente demanda

una impartición de justicia, pronta, completa, imparcial y gratuita.


Por lo que se refiere al conocimiento jurídico, este principio demanda:

Ejercicio de responsabilidad y disciplina.

Compromiso con la transmisión del conocimiento y actualización permanente.

Capacidad de trabajo con alto nivel de complejidad y certidumbre.

Reflexión y capacidad de autocrítica respecto a sus decisiones y acciones.

Demostración de compromiso continuo en busca de la excelencia.

El profesionalismo requiere que el servidor público ejercite, entre otras habilidades

y actitudes:

Liderazgo y estabilidad emocional.

Espíritu de servicio y colaboración.

Capacidad organizativa y delegatoria.

Capacidad de adaptación.

Toma de decisiones.

Trabajo en equipo.

Comunicación y confidencialidad.

El profesionalismo requiere indudablemente que el servidor público conozca,

acepte y viva las virtudes que el Código de Ética propone y se encuentran

contenidos en el capítulo de EXCELENCIA.

Actitudes opuestas al profesionalismo:

Abuso de poder, arrogancia, avaricia, mentira, fraude y falta de conciencia.


APÉNDICE AL GUIÓN (opcional)

Otro enfoque del profesionalismo, en el ámbito de la Administración Pú-

blica Federal (Criterios que pueden analogarse al Poder Judicial de la Federación)

1. ¿Qué es el Servicio Profesional de Carrera?

Es un instrumento para la administración del personal público que garantiza que el

ingreso, desarrollo y permanencia de los servidores públicos de confianza en las

Administraciones públicas, sea a través de principios tales como el mérito, igualdad

de oportunidades, legalidad, eficiencia, objetividad, imparcialidad, equidad, voca-

ción de servicio y lealtad institucional, con el propósito de impulsar la profesio-

nalización de la función pública, en beneficio de la sociedad

2. ¿Por qué es importante la instauración de un Servicio Profesional de Carrera en

la Administración Pública Federal?

Es importante para combatir el compadrazgo, el amiguismo, el nepotismo y la

improvisación en la libre designación de los servidores públicos de confianza. Así

como la politización del servicio público, la corrupción, el paternalismo, la inesta-

bilidad, la incertidumbre, y la falta de profesionalismo.

3. ¿En que beneficia el Servicio Profesional de Carrera al fortalecimiento y

consolidación de la vida democrática de nuestro país?

En las nuevas condiciones del país en las cuales se está dando de manera efectiva

la alternancia política, la instauración de un Servicio Profesional de Carrera es un

paso indispensable para la transición democrática, ya que ésta no se agota


en comicios transparentes y creíbles, es también un conjunto de principios, proce-

dimientos e instituciones que le dan vida a la democracia.

El Servicio Profesional de Carrera corresponde a una cultura que reconoce el mérito

y la igualdad de oportunidades, mediante el cual se establecería una forma racional

y justa para seleccionar y promover a los servidores públicos de confianza a

través de criterios objetivos y procedimientos imparciales que tomarán en cuenta

su capacitación y su desempeño.

143


EL ABC DE LA DEONTOLOGÍA JUDICIAL (Fragmentos)Por el Ministro Juan Díaz Romero

Los que saben de esta materia escriben que la palabra deontología procede de dos

vocablos griegos que son: déon-déontos que significa lo que es menester, lo que

conviene; denota la idea de necesidad. La palabra logos indica aquí estudio,

conocimiento, tratado. Debe notarse que en griego jurídico, déon-déontos tiene la

noción de obligatoriedad, lo que es obligatorio, de manera que etimológicamente

designa a la ciencia o tratado de los deberes.

Esta cara tan específica es la fisonomía más conocida de la deontología, esto es, la

que se refiere a los deberes que ha de acatar el hombre de bien en el ejercicio de

una profesión…

En la actualidad, la figura del juez resalta en la sociedad como nunca antes se

había visto; en nuestro país, la amplitud de su función es particularmente notoria

por la novedad de los campos constitucionales y electorales que ahora pisa,

advirtiéndose ya en el futuro inmediato el crecimiento de las controversias

internacionales.


Es necesario, pues, dar mayor difusión a la deontología judicial e irla enriqueciendo

con nuestras propias vivencias; nos conviene sistematizar sus principios para

enaltecer la función del juzgador. Participo de la opinión de aquellos que consideran

que esta disciplina debe formar parte de la educación de los jueces hasta el extremo

de que llegue a constituir la silueta fundamental de su personalidad.

Desde el fondo de mi esperanza creo firmemente que el juez debe ser un héroe

cívico, un factor vivo del cambio cultural de nuestro pueblo, un humanista sensitivo,

un continente sólido de la justicia. Ser juez es muy difícil; y ser juez perfecto es

imposible. El único que ha existido fue crucificado hace veinte siglos en medio

de dos ladrones.

Pero aunque las prendas que se requieren son muchas y muy complejas, bien

pueden sintetizarse, a manera de aprendizaje rudimentario, en un ABC, según deseo,

se irán ampliando y sistematizando.

AUTONOMÍA DE CRITERIO

Esta es la condición básica del juez; consiste en la potestad que tiene de decir el

derecho de modo imparcial entre partes contendientes, dentro de la libertad que

le marcan la Constitución, las leyes y su buena conciencia. El juez debe cuidar su

autonomía de cualquier ataque, como se resguarda la joya más valiosa de la vocación

jurisdiccional.

El juez debe cuidar la autonomía de su criterio a fin de que sus interpretaciones

jurídicas no se conviertan en esa tela de araña donde queden atrapados sólo los

desvalidos. Al respecto, don Quijote le dice a Sancho Panza, cuando iba a gobernar

la Insula Barataria: "Hallen en ti más compasión las lágrimas del pobre, pero no

más justicia que las informaciones del rico".


BENEVOLENCIA EN EL TRATO

Este postulado está basado en la bondad, virtud que debe ser como una llama

interior del juez que alumbre, dé vida y calor humano a toda persona que trate con

él. Tiene tres frentes principales: con los litigantes; con los colegas y con el personal

del órgano judicial. Hace unos años dije, citando a un filósofo francés, Luc de

Clapiers, que "no podemos ser justos si no tenemos un corazón bondadoso".

CONDUCTA CORRECTA

Este principio ve a la vida privada del juez, cuyo compartimiento debe corresponder

a la de una persona de bien. Un legislador o un miembro del Ejecutivo pueden

ser respetados por su fuero y su poder; un juez suele ser respetado por su conducta

proba.

¿Quién va a respetar la sentencia de un juez borracho, vicioso o corrupto? Sólo la

hombría de bien da respetabilidad a sus palabras. Entiéndase: no se trata de oler a

santidad; si a esto se aspira, tanto mejor, pero basta con que el juez sea, como

decimos los mexicanos, "gente decente", lo cual está al alcance de todo ser humano

con un poco de voluntad.

DILIGENCIA

El juez, como símbolo de la justicia y guardián del derecho, tiene el deber de

aplicarse con celo a la vocación que la sociedad le confió y que él aceptó. Es difícil

encontrar otra labor más honrosa que la de juez, pero si la hubiera, ésta no debe

interferir con la judicatura a tal punto que por atenderla se descuide, olvide o

abandone la función del juzgador. El juez debe serlo de tiempo completo.


La incuria en el estudio de los asuntos, la negligencia en la revisión y firma de los

acuerdos y fallos, o la desidia en el despacho, se reflejan en los autos y senten-

cias, donde proliferan los desechamientos injustos de demandas, las inadmisiones

infundadas de pruebas, resoluciones superficiales en las que campean los

sobreseimientos y las inoperancias y, en fin, rezagos indefendibles que provienen

de la dejadez.

EXCELENTE TÉCNICA

Más que nada, este principio es un ideal.

El juez debe ser un estudioso perpetuo, de modo que esté actualizado en la práctica,

en la doctrina y en la jurisprudencia, pues vive en un mundo jurídico que,

como reflejo de una sociedad que cambia más aprisa que las instituciones, no

admite rezago ni inmovilidad.

FIDELIDAD A LA JUSTICIA

La fidelidad es el apego perdurable a algo o a alguien; es, pues, una virtud que no

tiene contenido propio, sino que depende de lo valioso que sea el objeto del

apego. Sólo cabría considerarse a la fidelidad como virtud, si ese "algo" o "alguien"

objeto de la lealtad, es valioso o meritorio, y así, puede hablarse con certeza de

fidelidad cuando el apego recae sobre tendencias humanistas o culturales, sobre la

bondad, la verdad o la justicia, o sobre cualquiera de las virtudes cuyo aprecio

distingue al hombre sensato.

Trasladando estas observaciones tan generales y elementales al quehacer vocacional

de la impartición de justicia, el juzgador debe serle por siempre fiel; no una vez; no


a veces; no; a fuerza de voluntad, la fidelidad del juzgador a la justicia ha de ser

perpetua. Aquí debe recordarse la definición clásica y más conocida que Ulpiano

da de la justicia como "la constante y perpetua voluntad de dar a cada quien lo

suyo", donde la virtud fidelidad hace bajar de las nubes abstractas a la virtud justicia

para hacerla concreta, terrena, intensamente humana, porque sólo fructifica a través

de los dictados, decisiones o conductas de seres humanos sobre otros seres huma-

nos. De ahí la importancia de esa voluntad "constante y perpetua".

Así la fidelidad se convierte en la maestra más exigente del juzgador porque nunca

está totalmente satisfecha, sino sólo transitoriamente, pues apenas ha sido justo en

un caso y ya está exigiendo la misma fidelidad para el siguiente, y así para siempre.

EPÍLOGO

Este ABC de la Deontología Judicial es muy elemental. Estoy seguro que ustedes,

con su experiencia y observación encontrarán conceptos más profundos y otras

iniciales importantes para llenar el abecedario de las virtudes que son propias del

juzgador.

149

1. ¿Qué es la deontología?

2. ¿Es honrosa la labor del juzgador? ¿Por qué?

3. ¿Ha de ser perpetua la fidelidad del juzgador a la justicia? ¿Por qué?


151

TEMA: La excelencia y sus virtudes. (1)

OBJETIVOS: Conocer qué es la excelencia. Desterrar los vicios contarios.

Aplicar en la labor cotidiana las virtudes humanas y judicia-

les que implica la impartición de justicia.


de los principios de objetividad y profesionalismo.

EXPOSICIÓN INICIAL: Conceptos teóricos sobre excelencia y virtudes anexas.

TEXTO DEL C. DE ÉTICA: Capítulo V, incisos 5.1 a 5.8

LECTURA AUXILIAR: Huehuetlatolli, consejos de un padre mexica a sus hijos.

PUNTOS A RESALTAR: La labor jurisdiccional se enaltece con prácticas de exce-

lencia y con la vivencia continua de virtudes humanas y

judiciales indispensables.

OCTAVA SESIÓN


CAPÍTULO V

EXCELENCIA

5. El juzgador se perfecciona cada día para desarrollar las siguientes virtudes

judiciales:

5.1 Humanismo: En cada momento de su quehacer está consciente de que las

leyes se hicieron para servir al hombre, de modo tal que la persona constituye

el motivo primordial de sus afanes.

5.2 Justicia: En cada uno de los asuntos sometidos a su potestad, se esfuerza

por dar a cada quien lo que le es debido.

5.3 Prudencia: En su trabajo jurisdiccional y en las relaciones con sus colabo-

radores, recoge la información a su alcance, con criterios rectos y objetivos;

consulta detenidamente las normas del caso, pondera las consecuencias

favorables y desfavorables que puedan producirse por su decisión, y luego

toma ésta y actúa conforme a lo decidido.

153


5.4 Responsabilidad: Asume plenamente las consecuencias de sus actos, resultado

de las decisiones que tome, procurando que sus subordinados hagan lo

mismo.

5.5 Fortaleza: En situaciones adversas, resiste las influencias nocivas, soporta

las molestias y se entrega con valentía para vencer las dificultades y cumplir

con su función jurisdiccional.

5.6 Patriotismo: Tributa al Estado Mexicano el honor y servicio debidos, defen-

diendo el conjunto de valores que, como juzgador federal del Estado Mexicano,

representa.

5.7 Compromiso social: Tiene presentes las condiciones de iniquidad que han

afectado a una gran parte de la sociedad a lo largo de nuestra historia, y

advierte que la confianza y el respeto sociales que merezca serán el resultado

de un trabajo dedicado, responsable y honesto.

5.8 Lealtad: Acepta los vínculos implícitos en su adhesión a la Institución a la

que pertenece, de tal modo que refuerza y protege, en su trabajo cotidiano, el

conjunto de valores que aquélla representa.

155

1. ¿He evitado realizar actos dentro y fuera del trabajo que puedan

mermar la respetabilidad de la función que desempeño, tales como

decir palabras impropias, actuar de manera prepotente y/o vestir

indecorosamente?

2. ¿He evitado ingerir alimentos dentro del trabajo en lugares

inapropiados?

3. ¿He procurado atender siempre los oficios oportunamente, sin

demorarlos?

4. ¿He mantenido siempre coherencia entre el ser y actuar, tanto en mi

vida pública como privada?

5. ¿He realizado mi trabajo con puntualidad, diligencia, limpieza, exce-

lencia y dedicación?

II. DINÁMICA



6. Al presentarse un malentendido, ¿he buscado aclararlo en ese

momento para no quedarme con falsas ideas y caer en el chisme?

7. ¿He procurado destinar tiempo a actualizar mis conocimientos en

materia jurídica, manejando normatividad, jurisprudencia y doctrina

jurídica?

8. ¿He asumido mi responsabilidad personal al surgir algún problema

por alguna omisión u olvido personal, sin "endosar" el problema a

terceros?

9. ¿He procurado que el trato con el personal del PJF, incluyendo al

personal de seguridad y de intendencia, sea siempre de cordialidad

y respeto?

10. ¿He procurado el ahorro y utilizar de manera óptima los recursos

disponibles así como conservar el mobiliario que se encuentra a mi

cargo?

11. ¿Asisto puntualmente a las labores, y en caso de fuerza mayor, me

he reportado al jefe inmediato?

12. ¿Procuro que mis problemas personales no influyan en mi trabajo?

13. ¿Manejo con discreción las llamadas y asuntos de los superiores

jerárquicos y he tenido un adecuado manejo de la documentación?

157

III. GUIÓN SOBRE EL TEMA DELA EXCELENCIA Y LAS VIRTUDES (I)

¿Qué es excelencia?

(Del lat. excellentia).

Superior calidad o bondad que hace digno de singular aprecio y estimación.

¿Qué es calidad?

(Del lat. qualitas, -atis).

Propiedad o conjunto de propiedades inherentes a algo, que permiten juzgar su

valor.

De propiedades o cualidades superiores (virtudes), que por su valor, se hace digno

de singular aprecio y estimación.

Valor

(Del lat. valor, -oris).1. m.

Grado de utilidad o aptitud de las cosas, para satisfacer las necesidades, proporcionar

bienestar o deleite.

Cualidad de una persona o cosa por la que merece ser apreciada.

-

-


VIRTUD

(Del lat. virtus, -utis).

Actividad o fuerza de las cosas para producir o causar sus efectos.

Eficacia de una cosa para conservar o restablecer la salud corporal.

Fuerza, vigor o valor.

Poder o potestad de obrar.

Integridad de ánimo y bondad de vida.

Disposición constante del alma para las acciones conformes a la ley moral.

HUMANISMO

Niethammer, alemán, utiliza en 1808 por primera vez el término "humanismo"

(Renacimiento y autores clásicos).

Cualquier doctrina filosófica que intente aclarar el significado del hombre en el mun-

do, sus valores y sus ideales. Jacques Maritain (el hombre integral). Emmanuel

Mounier (personalismo comunitario).

El Código de Ética del PJF lo conceptúa así: En cada momento de su quehacer está

consciente de que las leyes se hicieron para servir al hombre, de modo tal que la

persona constituye el motivo primordial de sus afanes.

JUSTICIA

"Término medio entre el exceso y el defecto, principio de toda virtud". Aristóteles.

"La suma de todas las virtudes". Tomás de Aquino.

Iustitia est constant et perpetua voluntas ius suum cuique tribuendi. "Justicia es la

constante y perpetua voluntad de dar a cada quien lo suyo".

-


La justicia es "un hábito según el cual uno da al otro lo que es suyo, según derecho,

permaneciendo en ello con una voluntad constante y perpetua". Tratado de la justicia

de Tomás de Aquino.

La virtud de la justicia reside en la voluntad.

Dar a cada uno lo suyo implica saber y querer. Saber es el arte del derecho o de lo

justo. Querer es un acto de la voluntad. Cuando la voluntad tiene ese hábito, posee

la virtud de la justicia (virtud del ius), su objeto es entregar al otro lo suyo.

PRUDENCIA

Origen etimológico: procul-videre, ver lejos, más allá del fenómeno. Prudentia:

previsión.

Auriga virtus: la virtud que va al frente, que guía.

Genitrix virtus: madre de las virtudes. Tomás de Aquino.

Es la virtud de la decisión. El prudente es el que decide bien.

Arte de la decisión. Arte de gobernar.

Virtud que reside en la inteligencia. Inteligencia práctica.

Captar el problema y resolverlo con criterios verdaderos.

Es el hábito intelectual que juzga la conducta humana libre (obrar humano), desde

el punto de vista de su conveniencia o disconveniencia para un bien.

Juicio preceptivo: ordena realizar una conducta en tanto constituye un medio para

alcanzar un fin.

La prudencia es, en suma: saber actuar; saber qué debo hacer o no hacer aquí y

ahora, dadas estas circunstancias. Es la sensatez y la rectitud en el obrar.

PRUDENCIA Y DERECHO

Iuris prudencia.

Objetivo: resolver los problemas de la contingencia: cambiantes, casuísticos, diferentes.


Dimensión intelectual (memoria, industria y solercia) y dimensión volitiva (cautela,

providencia e imperio).

RESPONSABILIDAD

La persona responsable asume plenamente las consecuencias de sus actos, resultado

de las decisiones que tome, procurando que sus subordinados hagan lo mismo.

Cualidad de responsable.

Deuda, obligación de reparar y satisfacer, por sí o por otra persona, a consecuencia

de un delito, de una culpa o de otra causa legal.

Cargo u obligación moral que resulta para alguien posible yerro en cosa o asunto

determinado.

Capacidad existente en todo sujeto activo de derecho para reconocer y aceptar las

consecuencias de un hecho realizado libremente. (Derecho)

Real Academia de la Lengua Española

RESPONSABLE

Del latín: responsum, supino.

respondere, responder.

Obligado a responder de algo o por alguien.

Dicho de una persona: que pone cuidado y atención en lo que hace o decide.


RESPONSABILIDAD

La responsabilidad es la virtud mediante la cual respondemos ante nosotros mis-

mos y ante los demás de los deberes adquiridos, asumiendo las consecuencias de


nuestros actos. En la medida en que crece la persona adquiere mayor número

de responsabilidades.

¿Por qué es un valor la responsabilidad?

La responsabilidad es un valor, porque gracias a ella podemos convivir en sociedad

de una manera pacífica y equitativa.

La responsabilidad en su nivel más elemental es cumplir con lo que se ha com-

prometido, o la ley hará que se cumpla. Pero hay una responsabilidad mucho más

sutil (y difícil de vivir), que es la del plano moral.

El segundo paso es lograr de manera estable, habitual, que nuestros actos

correspondan a nuestras promesas. Si prometemos "hacer lo correcto" y no lo

hacemos, entonces no hay responsabilidad.

El tercer paso es educar a quienes están a nuestro alrededor para que sean

responsables.

FORTALEZA

En situaciones adversas, resiste las influencias nocivas, soporta las molestias y se

entrega con valentía para vencer las dificultades y cumplir con su función

jurisdiccional. Fortaleza del provenzal: fortalessa fuerza y vigor. En la doctrina

cristiana, virtud cardinal que consiste en vencer el temor y huir de la temeridad.

¿Qué es la fortaleza? Imaginemos a un corredor en una carrera: que busca llegar a

la meta, pero para lograrlo necesita saltar muchos obstáculos. Y para poder hacerlo

necesita entrenar y estar fuerte. Así es la vida: el hombre busca ser bueno, tener

muchas virtudes. Sin embargo, la vida está llena de dificultades y obstáculos para

lograr esto. Entonces, ¿cómo le hacemos? La fortaleza es la virtud que ayuda a

vencer con valor los peligros y los obstáculos en la vida. La fortaleza ayuda también

a aguantar con firmeza y sin miedo las cosas malas y a no echarse para atrás


cuando se ha conquistado un bien. La vida del hombre es una lucha: a veces hay

que atacar al enemigo y otras veces hay que resistir sus ataques. La fortaleza da al

hombre decisión, valor, coraje, energía, constancia y aguante para atacar y resistir.

¿Para qué queremos la fortaleza? Un hombre débil no puede pasar esas dificultades,

se entristece, se deprime, se desespera, cae sin remedio y no puede volver a

levantarse; en cambio un hombre fuerte, lleva en el alma una gran energía para

luchar: El también siente el peso de las dificultades pero no se deja aplastar, busca

lograr lo que quiere, aunque tenga que esforzarse mucho. No es tibio, no es mediocre:

Hay muchos hombres que se cansan y no quieren luchar por ser mejores. Se entregan

a una vida de rutina, al ¡ahí se va!, al ¡ya ni modo así soy yo y nunca voy a cambiar!

En cambio la fortaleza no deja ser tibio, siempre hay fuerzas para volverse a levantar,

para esforzarse por ser mejor. Tiene un alma valiente ante toda clase de peligros y

de enemigos. Soporta los mayores dolores con gozo y alegría: el dolor existe en la

vida: la enfermedad, la muerte, el egoísmo, la maldad. La fortaleza modera ciertas

pasiones, así como afianza la voluntad para que no desista de conseguir el bien

difícil de alcanzar, aun pese al peligro que ello entrañe para la vida corporal. En otras

palabras, la fortaleza se caracteriza por atacar y resistir, es decir, es una virtud que

tolera lo desagradable y acomete lo necesario pese a las dificultades que se

presenten.

PATRIOTISMO

¿Qué significa para algunas personas ser patriota? Haber nacido en un país rico en

recursos o de gran tradición. Portar los colores nacionales en un evento deportivo

o en el viaje al extranjero. Algunos más sólo sienten pertenecer a su país en la

fecha de una celebración nacional y sólo como pretexto para organizar una fiesta

con sus amigos. La conciencia parece despertarse cuando aparecen los desastres,


las guerras y otros sucesos extraordinarios resaltando el patriotismo y la solidaridad,

pero el todo pasa y volvemos al ritmo de vida habitual.

Asimismo, debemos tener cuidado de no caer en el nacionalismo que propone un

sentimiento de exclusividad y superioridad; no importa cual sea la cualidad más

destacada del país, contribuir productivamente, cultivar los valores cívicos, respetar

y amar a la patria es un bien que garantiza la seguridad y estabilidad de vida que

las personas necesitan para desarrollarse.

Cuando los valores cívicos están bien cimentados, nace la preocupación por ayudar

a los demás, no sólo a nivel comunitario, sino como una extensión que traspasa

las fronteras.

Patriotismo: Amor a la patria, sentimiento y conducta propios del patriota.


Patriota: Persona que tiene amor a su patria y procura todo su bien.


Compatriota: Del latín: compatriota. Persona de la misma patria que otra.

Del latín: Cum: vinculación. Patria, patris: el lugar de nuestros padres, ancestros.

PATRIOTISMO

El patriotismo es el valor que se fortalece con el sentimiento de identidad y

pertenencia al lugar en que naciste. El patriotismo debe ser entendido como el

valor que nos hace vivir plenamente nuestro compromiso como ciudadanos y

fomentar el respeto que debemos a nuestra nación. El patriotismo se manifiesta

por los valores que transmitimos como ciudadanos conscientes: trabajo, con-

ducta, modales, respeto a las normas y costumbres, pero podemos suponer que de

poco sirve tener una actitud recta cuando se transige con la trampa, el abuso y la

pereza.


COMPROMISO SOCIAL

Compromiso. (Del lat. compromissum). m. Obligación contraída. m. Palabra dada.

Social. (Del lat. socialis). adj. Perteneciente o relativo a la sociedad. Sociedad.

(Del lat. societas, -atis). f. Agrupación natural o pactada de personas, que constituyen

unidad distinta de cada uno de sus individuos, con el fin de cumplir, mediante la

mutua cooperación, todos o alguno de los fines de la vida.


¿Qué debemos entender por sociedad? Una sociedad es un conjunto de personas

ligadas de manera orgánica por un principio de unidad que supera a cada una de

ellas. La natural sociabilidad del hombre hace descubrir también que el origen

de la sociedad no se halla en un contrato o pacto convencional, sino en la misma

naturaleza humana. La socialización expresa igualmente la tendencia natural

que impulsa a los seres humanos a asociarse con el fin de alcanzar objetivos que

exceden las capacidades individuales.

"Una sociedad perdura en el tiempo: recoge el pasado y prepara el porvenir."

¿Qué características debe tener nuestra participación, para hacer efectivo nuestro

compromiso social? La solidaridad, que desde un punto de vista como virtud moral,

es la determinación firme y perseverante de empeñarse por el bien común; es decir

por el bien de todos y cada uno, para que todos seamos verdaderamente respon-

sables de todos. La solidaridad implica que los hombres de nuestro tiempo culti-

vemos aún más la conciencia de la deuda que tenemos con la sociedad a la cual

pertenecemos, la cual se salda con las diversas manifestaciones de la actuación

social, para que el camino de los hombres no se interrumpa sino que permanezca

abierto para las generaciones presentes y futuras.

-

-


Subsidiariedad: conforme a este principio, todas las sociedades de orden superior

deben ponerse en una actitud de ayuda, (apoyo, promoción y desarrollo) respecto

a las menores.

LEALTAD

Cumplimiento de lo que exigen las leyes de fidelidad y las del honor y hombría de

bien. Leal.- (Del lat. Legalis). Que guarda a alguien o algo la debida fidelidad.

Fidedigno, verídico y fiel, en el trato o en el desempeño de un oficio o cargo

Legalis.- Legalidad, verdad, realidad "ceñido a la ley justa".Fidelidad.- (Del lat.

Fidelitas, atis) lealtad, observancia de la fe que alguien debe a otra persona.

Puntualidad, exactitud en la ejecución de algo. (Real Academia de la Lengua) Los

romanos usaban el término fidelidad. Fidelitas .- Observancia de la fe, de la confianza.

Lealtad es un término que se generaliza en el Renacimiento. Actualmente lealtad y

fidelidad son sinónimos. Acepta los vínculos implícitos en su adhesión a la

institución a la que pertenece, de tal modo que refuerza y protege, en su trabajo

cotidiano, el conjunto de valores que aquélla representa. (Código de Ética) La lealtad

es un corresponder, una obligación que se tiene al recibir algo valioso.

Es un compromiso a defender lo que creemos y en quien creemos. Por eso el

concepto de la lealtad se da en temas como la patria, el trabajo, la familia o

la amistad. Cuando algo o alguien nos han dado algo bueno, le debemos mucho

más que agradecimiento.

A lo largo de la vida, las personas se asocian, se unen a otras personas, a grupos,

a instituciones. Cuando decimos que "pertenecemos" a una familia, a una nación a


una iglesia, queremos expresar esto: que nos hemos vinculado de una manera

especial a un grupo determinado.

Como vemos, la lealtad se relaciona estrechamente con otros valores como la

amistad, el respeto, la responsabilidad y la honestidad entre otras. Todos esperamos

la lealtad de los demás. A nadie le gusta ser traicionado, o saber que un amigo

habló mal de nosotros. Traición es el término opuesto a la lealtad; y pocos adjetivos

pueden ser tan punzantes como el que se nos catalogue de traidor o traidora,

los traidores son sujetos de nuestro desprecio, y pocas veces nos detenemos a

pensar en las razones de su traición. Lo que realmente nos impacta es la traición

por sí misma.

Detectar la lealtad (o deslealtad) en los demás es fácil, pero es necesario pregun-

tarnos ¿cómo estoy viviendo yo la lealtad? ¿Realmente sé qué es? ¿Qué esperan

los demás de mí?

La lealtad es una virtud, la vivencia de un valor, pues quien es traidor se queda

solo. Cuando somos leales, logramos llevar la amistad y cualquier otra relación a

su etapa más profunda. Sin embargo la lealtad implica un compromiso que va más

hondo: es el estar con un amigo en las buenas y en las malas, es el trabajar no sólo

porque nos pagan, es el apoyar a nuestros clientes a mejorar sus vidas. No sólo por

obligación, sino porque tenemos un compromiso más profundo con la empresa en

donde trabajamos, y con la sociedad misma.

Somos leales cuando nos mantenemos unidos al grupo o personas con las que

nos hemos vinculado. Cuando protegemos, apoyamos y defendemos los valores (de

amistad, deportivos, familiares, religiosos, las relaciones laborales con clientes y


compañeros de trabajo, etcétera) que promueve la institución a la que nos hemos

vinculado.

No basta conocer los valores, es necesario darlos a conocer y reforzarlos para lograr

un cambio de actitud. Al hacerlo, logramos madurar en nuestras relaciones labora-

les, de amistad, fortalecer el afecto y desarrollarnos personal y profesionalmente.

169


HUEHUETLATOLLICONSEJOS DE UN PADRE MEXICA A SUS HIJOS(Códice Florentino)

Al hijo mancebo:

Escucha, es el tiempo de aprender aquí en la tierra, ésta es la palabra: atiende y de

aquí tomarás lo que será tu vida, lo que será tu hechura.

Por un lugar difícil caminamos, andamos aquí en la tierra. Por una parte un abis-

mo, por la otra un barranco. Si no vas por en medio, caerás de un lado o del otro.

Sólo en el medio se vive, sólo en el medio se anda...

Pon y guarda este discurso en el interior de tu corazón. No se te olvide; que sea tu

tea, tu luz, todo el tiempo que vivas aquí sobre la tierra...

Reverencia y saluda a tus mayores; consuela al pobre y al afligido con buenas

formas y palabras...

No sigas al loco que no honra ni a su padre ni a su madre; porque esos tales son

como animales, de ellos no oigas ni tomes consejos...


No te burles del anciano, el enfermo, el mutilado o de alguien que ha pecado. No los

insultes ni odies, pero humíllate ante Dios a fin de que no te suceda lo mismo…

No pongas mal ejemplo o seas indiscreto o interrumpas a otros. Si alguien no

habla bien o coherentemente, ve de no hacer lo mismo; si no es cosa tuya el hablar,

guarda silencio.

Si te preguntan algo, responde sobriamente y sin afectación, lisonja o prejuicio de

otros, y lo que digas serás bien recompensado...

Donde quiera que vayas camina con un aire de paz y no hagas caras ni gestos

impropios…

Ya es bueno, ya es conveniente que cuando algo te sea recomendado, luego, con

tranquilidad escuches, luego, tranquilamente, responderás si acaso podrás hacerlo,

o si acaso no es posible.

No le mentirás a las personas; sólo lo recto, sólo lo verdadero dirás, si no es

posible o si podrás hacerlo; no lo dirás con desgano, no sea tal vez que otro reciba

el encargo.

Si siempre así haces serás muy amado.

No sólo así, sin cuidado, hagas la recolección; ya bien colócate, toma bien las cosas,

fíjalas, echa bien raíces, haz bien la sembradura en tu sementera. Planta magueyes,

planta nopales; haz bien tu casa para que aquí, con la ayuda de los demás, junto a

ellos, dejes a los que has educado, a los que has sostenido.


Mañana, se fatigará, flaqueará, el que da apoyo, el que da ayuda…

Ya sabes que el venado, cuando lo persiguen, va asustado, no sabe que corre para

caer en la trampa donde morirá. ¿Y tú, acaso eres venado para que no sepas a

dónde vas? Porque te ha sido mostrado el camino que has de seguir, de tu arbitrio

lo habrás consumado si lo pierdes.

Como el árbol frutal que ya no reverdece, que ya no da retoños –sólo da retoños,

sólo da renuevos si resiste a la helada–, entonces del todo se marchita, así se

seca. Y tú, si ya no reverdecieras, si ya no dieras renuevos cuando haya verdor, es

porque de tu voluntad te has arrojado en la boca de las fieras...

A la hija pequeña:

Se vive en la tierra, se es jefe, señor, noble, águila, tigre. Hay quienes nomás buscan

morirse. Pero se actúa, se vive, se construye, se trabaja, se busca uno mujer, se

casa él, se casa ella, se madura.

Pues ahora, mi niña, oye bien, mira con calma; aquí está tu madre, tu señora, de

cuyo seno y entrañas te despegaste, te desprendiste; como una plantita, como una

hierbita te alzaste, echaste hojas, floreciste; como si hubieras estado dormida y

despertaras.

Mira, oye, entiende, así son las cosas en la tierra. ¿Cómo vivirás, por dónde has

de ir? Se dice, niña mía, palomita, chiquita, que la tierra es en verdad un lugar

difícil, terriblemente difícil.

Así pues, no vivas de cualquier modo, no vayas por donde sea...

173

1. ¿Qué importancia daban los antiguos mexicas a virtudes como la discreción, la

sobriedad, la sencillez, la veracidad y la prudencia?

2. ¿Qué opinas del consejo de "ir siempre en medio"?

3. ¿Es válido "vivir de cualquier modo", "ir por donde sea"?

4. ¿Por qué el padre previene a sus hijos de ello?


175

TEMA: La excelencia y sus virtudes. (2)

OBJETIVOS: Conocer qué es la excelencia. Desterrar los vicios contra-

rios. Aplicar en la labor cotidiana las virtudes humanas y

judiciales que implica la impartición de justicia.

DINÁMICA: Rompecabezas, sobre la importancia de la comunicación

en la colaboración en equipo.

EXPOSICIÓN INICIAL: Conceptos teóricos sobre excelencia y virtudes anejas.

TEXTO DEL C. DE ÉTICA: Capítulo V, incisos 5.9 a 5.17

LECTURA AUXILIAR: Deontología de jueces y magistrados: Las cualidades de

los juzgadores.

PUNTOS A RESALTAR: La labor jurisdiccional se enaltece con prácticas de exce-

lencia y con la vivencia continua de virtudes humanas y

judiciales indispensables.

NOVENA SESIÓN

177


CAPÍTULO V

EXCELENCIA


judiciales:

…

5.9 Orden: Mantiene la adecuada organización y planificación en el trabajo a su

cargo.

5.10 Respeto: Se abstiene de lesionar los derechos y dignidad de los demás.

5.11 Decoro: Cuida que su comportamiento habitual tanto en su vida pública

como privada, esté en concordancia con el cargo y función que desempeña.

5.12 Laboriosidad: Cumple diligentemente sus obligaciones de juzgador.


5.13 Perseverancia: Una vez tomada una decisión, lleva a cabo los actos necesarios

para su cumplimiento, aunque surjan dificultades externas o internas.

5.14 Humildad: Es sabedor de sus insuficiencias, para poder superarlas, y también

reconoce sus cualidades y capacidades que aprovecha para emitir de la mejor

manera posible sus resoluciones, sin pretender llamar la atención ni esperar

reconocimientos.

5.15 Sencillez: Evita actitudes que denoten alarde de poder.

5.16 Sobriedad: Guarda el justo medio entre los externos y evita actos de

ostentación que vayan en demérito de la respetabilidad de su cargo.

5.17 Honestidad: Observa un comportamiento probo, recto y honrado.

179

II. DINÁMICA

ROMPECABEZAS

OBJETIVOS:

- Aprender la importancia de la comunicación para el buen funcionamientodel equipo.- Aprender la importancia de la colaboración activa para lograr las metas delequipo.


- Salón suficientemente iluminado y amplio.- 4 rompecabezas de figuras geométricas. (se anexa planilla)

DURACIÓN:

- 30 minutos.

TAMAÑO DEL GRUPO:

- 10 a 30 personas, dividido en equipos de 4 personas.


DESARROLLO:

- Tomando como referencia la planilla anexa, se elaboran en foami o en cartulina

de colores, el número de rompecabezas necesarios. Cada equipo de 4 personas

debe contar con un juego de rompecabezas consistente en 4 cuadrados de 3

piezas cada uno, con un total de 12 piezas de colores.

- Los colores son de asignación libre. Se recomienda que sean colores visto-

sos, y entre más variados y contrastantes, mejor, con un mínimo de 4 colores

diferentes.

- A cada uno de los equipos se les entrega un rompecabezas de 12 piezas

geométricas. Cada persona recibe 3 piezas diferentes. La meta es armar cuatro

cuadros de igual tamaño, uno por cada miembro del equipo.

- Como las piezas están intercambiadas, sólo es posible armar los cuatro

cuadros si los 4 participantes colaboran entre ellos, cediéndose piezas. Para

que las cosas funcionen, no basta con que cada quien "arme" su propio cuadro,

sino que es indispensable tener visión de equipo y ver el trabajo que se tiene

que hacer de forma integral.

- Adicionalmente, existe la limitación de que no es posible hablar ni comu-

nicarse por señas. La única forma de comunicarse y colaborar, es aportando

piezas.

- Se toma el tiempo que llevó a cada equipo armar su rompecabezas y al final

se comenta la experiencia, centrándose en la importancia de la comunicación.


PLANILLA DEL ROMPECABEZAS

Cuadrado 1

3 piezas

3 colores


Cuadrado 2

3 piezas

3 colores


Cuadrado 3

3 piezas

3 colores


Cuadrado 4

3 piezas

3 colores

185

III. GUIÓN SOBRE EL TEMA DELA EXCELENCIA Y LAS VIRTUDES (II)

ORDEN

A todos nos agrada encontrar las cosas en su lugar, pero lo más importante es el

orden interior y es el que más impacta a la vida.

Es muy fácil dejar cautivarse por la primera impresión. Eso todos lo sabemos. Pero

el orden es un valor en el cual fácilmente podemos percibir la parte más superficial

del mismo. Por supuesto que a todos nos agrada encontrar las cosas en su lugar,

ver un sitio limpio y donde cada cosa tiene su propio espacio. Sin embargo el

orden es algo mucho más profundo que eso.

El orden externo de la persona, de su espacio de trabajo, de su casa o incluso de

su automóvil, son muy importantes, es cierto, pero lo más importante es el orden

interior y es el que más impacta a la vida. Sin duda todos conocemos a gente

desordenada que olvida pagar sus cuentas, o que no sabe colocar sus prioridades

adecuadamente en la vida y que termina generando un desastre en su propia vida

y en la de los demás.


Adquirir el valor del orden va mucho más que acomodar cosas y objetos, es poner

todas las cosas de nuestra vida en su lugar. Por ejemplo nadie sale del trabajo a

media mañana para ir a jugar un partido con los amigos, tampoco a nadie se le

ocurre amar perdidamente a su mascota y desatender a sus hijos. Sin embargo,

el desorden puede estar disfrazado muy sutilmente y es fácil darle tres o cuatro horas

más al trabajo y no estar con la familia, y uno puede sentirse muy tranquilo porque

"está poniendo en orden sus prioridades". Si, el trabajo es importante, pero tiene

su espacio y sus límites. Igualmente ocurre con aquella persona que decide no tomar

una oportunidad única de trabajo porque le implica sacrificar un poco de su familia.

El valor del orden debe ayudarnos a darle a cada cosa su peso, a cada actividad su

prioridad. A cada afecto el espacio que le corresponde.

El orden interior se refleja en todas nuestras cosas. Si recreamos nuestra imaginación

en fraguar proyectos un tanto inalcanzables, nos entretenemos en pensar qué hare-

mos el próximo fin de semana, o en los nuevos accesorios para nuestro automóvil,

difícilmente nos concentraremos en las cosas importantes que debemos hacer y

perdemos un tiempo valioso. En este ambiente ficticio está la pereza, no nos extrañe

que nos cueste "mucho trabajo" recoger las cosas o terminar a tiempo cualquier

actividad.

RESPETO

Latín respectus, atención, consideración. Veneración, acatamiento que se hace a

alguien. Miramiento, consideración, deferencia. Miedo (recelo o aprensión). Mani-

festaciones de acatamiento que se hacen por cortesía. Diccionario de la Lengua

Española. Se abstiene de lesionar los derechos y dignidad de los demás. El Código

de Ética


RESPETO

Virtud por medio de la cual se reconoce la dignidad de cada persona y el trato que

se merece por tener la condición de "persona". Todo ser humano tiene dignidad y

valor inherentes, sólo por su condición básica de ser humano. Actitud de com-

prensión y aceptación de las personas, en el entendido de que cada uno es dife-

rente. Este valor será verdadero en función de su capacidad para hacernos

más humanos. ¿Qué es respetar? Respetar es reconocer los derechos de los demás.

Respetar a alguien es tratarlo de acuerdo a su dignidad, por lo que, donde hay

respeto reina un ambiente cordial y amable, propio de la caridad.

El respeto es una actitud que poco a poco se ha ido perdiendo en las nuevas

generaciones que son poco tolerantes y que muchas veces no les gusta seguir

normas. Para obtener respeto por parte de los que nos rodean, es imprescindible

que los respetemos del mismo modo. Ya que no podemos exigir algo que no

podemos dar. "Todos, por el simple hecho de ser seres humanos, tenemos el derecho

de ser respetados".

Debemos respetar a todas las personas sin importar diferencias físicas, sociales,

intelectuales, religiosas o políticas. Un servidor público comprometido con el valor

respeto, lo proyecta valorando en las demás personas su dignidad humana, como

la suya propia. Lo muestra también siendo respetuoso de las libertades y derechos

de los demás; cumpliendo con las normas y leyes que rigen al servidor público

como a la ciudadanía en general. Actuar conforme el valor respeto implica también

un trato amable, cordial, y tolerante.

"Mexicanos: encaminemos ahora todos nuestros esfuerzos a obtener y a consolidar

los beneficios de la paz. Bajo sus auspicios, será eficaz la protección de las leyes


y de las autoridades para los derechos de todos los habitantes de la República.

Que el pueblo y el gobierno respeten los derechos de todos. Entre los individuos,

como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz", Benito Juárez.

DECORO

(Del lat. -decorum)

1. m. Honor, respeto, reverencia que se debe a una persona por su nacimiento o

dignidad.

2. m. Circunspección, gravedad.

3. m. Pureza, honestidad, recato.

4. m. Honra, pundonor, estimación.

5. m. Nivel mínimo de calidad de vida para que la dignidad de alguien no sufra

menoscabo. Su sueldo le permite vivir con decoro.

Fragmento del Manual de Carreño, Sección Primera:

De la conversación en general: "La conversación es el alma y el alimento de toda

sociedad, por cuanto sin ella careceríamos del medio más pronto y eficaz de

transmitir nuestras ideas y de hacer más agradable y útil el trato con nuestros

semejantes. Pero pensemos que ella puede conducirnos a cada paso a situaciones

difíciles y deslucidas, cuando no esté presidida por la dignidad y la discreción, y

que no baste el deseo y la facilidad de comunicar nuestros pensamientos para

-


hacerlo de manera que nos atraigamos el aprecio y la consideración de las personas

que nos oyen...".

Proyecta una imagen congruente de tener las virtudes que lo hacen merecer la

confianza depositada sobre la terrible obligación de impartir justicia.

LABORIOSIDAD

Trabajar es solo el primer paso, hacerlo bien y con cuidado en los pequeños detalles

es cuando se convierte en un valor.

Alguna vez un cómico dijo: "Tan terrible es el trabajo que hasta pagan por hacerlo",

sin embargo el trabajo es un valor fundamental.

Cuando alguien se refiere a nosotros por "ser muy trabajadores" nos sentimos

distinguidos y halagados: los demás ven en nosotros la capacidad de estar horas y

horas en la escuela, en la casa o en la oficina haciendo "muchas cosas importantes".

Efectivamente esa puede ser la razón, pero existe la posibilidad de carecer de un

sistema de trabajo que nos lleva a "trabajar" más tiempo de lo previsto. Esto se

identifica con claridad cuando iniciamos varias tareas y sólo terminamos algunas,

generalmente las menos importantes (las que más nos gustan o se nos facilitan),

además de ir acumulando labores que después se convertirán en urgentes.

La laboriosidad significa hacer con cuidado y esmero las tareas, labores y deberes

que son propios de nuestras circunstancias. El estudiante va a la escuela, el ama

de casa se preocupa por los miles de detalles que implican que un hogar sea

acogedor, los profesionistas dirigen su actividad a los servicios que prestan. Pero

laboriosidad no significa únicamente "cumplir" nuestro trabajo. También implica el


ayudar a quienes nos rodean en el trabajo, la escuela, e incluso durante nuestro

tiempo de descanso; los padres velan por el bienestar de toda la familia y el cuidado

material de sus bienes; los hijos además del estudio proporcionan ayuda en los

quehaceres domésticos.

Podemos, fácilmente, dar una apariencia de laboriosidad cuando adquirimos

demasiadas obligaciones para quedar bien, aun sabiendo que no podremos cumplir

oportunamente; también puede tomarse como pretexto el pasar demasiado tiempo

en la oficina o la escuela para dejar de hacer otras cosas, como evitar llegar temprano

a casa y así no ayudar a la esposa o a los padres. Al crear una imagen de mucha

actividad pero con pocos resultados se le llama activismo, popularmente expre-

sado con un "mucho ruido y pocas nueces". Es entonces cuando se hace necesa-

rio analizar con valentía los verdaderos motivos por los que actuamos, para

no engañarnos ni pretender engañar a los demás cubriendo nuestra falta de

responsabilidad.

La pereza es la manera común de entender la falta de laboriosidad; las máquinas

cuando no se usan pueden quedar inservibles o funcionar de manera inadecuada,

de igual forma sucede con las personas: quien con el pretexto de descansar de su

intensa actividad –cualquier día y a cualquier hora– pasa demasiado tiempo en el

sofá o en la cama viendo televisión "hasta que el cuerpo reclame movimiento",

poco a poco perderá su capacidad de esfuerzo hasta ser incapaz de permanecer

mucho tiempo trabajando o estudiando en lo que no le gusta o no le llama la

atención.

Para ser laborioso se necesita estar activo, hacer cosas que traigan un beneficio a

nuestra persona, o mejor aún, a quienes nos rodean: dedicar tiempo a buena lectura,

pintar, hacer pequeños arreglos en casa, ayudar a los hijos con sus deberes, ofrecerse


a cortar el pasto... No hace falta pensar en grandes trabajos "extras", sobre todo

para los fines de semana, pues el descanso es necesario para reponer fuerzas y

trabajar más y mejor. El descanso no significa "no hacer nada", sino dedicarse a

actividades que requieren menor esfuerzo y diferentes a las que usualmente

realizamos.

PERSEVERANCIA

"Hay hombres que luchan un día y son buenos, hay otros que luchan un año y son

mejores, hay quienes luchan muchos años y son muy buenos, pero, hay quienes

luchan toda la vida; esos son los imprescindibles", Bertolt Brecht.

"Perseverar es decidir triunfar en cada circunstancia que nos toca vivir".

Perseverancia del latín perseverantia: acción y efecto de perseverar.

Constancia en la virtud y en mantener la gracia hasta la muerte.

Perseverar: mantenerse constante en la prosecución de lo comenzado, en una actitud

o en una opinión.

La perseverancia como hermana de la fortaleza.

"El que persevera alcanza". Una vez tomada una decisión, lleva a cabo las actividades

necesarias para alcanzar lo decidido, aunque surjan dificultades internas o externas,

o pese a que disminuya la motivación personal a través del tiempo.

La perseverancia no es compatible con la terquedad, ni se debe confundir con la

rutina. Superación de las dificultades que provienen de la prolongación del esfuerzo


en el tiempo. La inconstancia como el vicio principal que se le opone. El es-

fuerzo continuo supone gran autodominio.

"Si se siembra la semilla con fe y se cuida con perseverancia, sólo será cuestiónde recoger sus frutos", Thomas Carlyle.

HUMILDAD

Diccionario de la lengua española:

Humildad (del latín humilitas,- atis). f virtud que consiste en el conocimiento delas propias limitaciones y debilidades y en obrar de acuerdo con ese conocimiento.

Bajeza de nacimiento o de cualquier otra especie.

Código de Ética:

Humildad: es sabedor de sus insuficiencias, para poder superarlas, y también

reconoce su cualidades y capacidades que aprovecha para emitir de la mejor manera

posible sus resoluciones, sin pretender llamar la atención ni esperar recono-

cimientos. El egoísmo del hombre se vence con la entrega generosa a los demás.

SENCILLEZ

Es una virtud por medio de la cual se manifiesta la actitud auténtica de la persona,

requiere claridad de inteligencia y rectitud de voluntad, dejando de lado dobleces,

complicaciones para que sea transparente e íntegro ante las personas y ante Dios.

Sencillez cualidad de sencillo.

Sencillo, lla. (del latín *singellus, por singulus).

1. adj. Que no tiene artificio ni composición.


SOBRIEDAD

Etimología

Sobriedad: (del lat. sobrietas, atis).

Sobrio, bria: (del lat. sobrius).

Temperantia.

La palabra sobriedad se deriva de medida. Al decir que alguien es sobrio indicamos

que guarda una medida.

La sobriedad se apropia, de un modo específico, una materia en la cual es sumamente

laudable el observar una medida, cual es la bebida alcohólica.

En cambio, si tomamos la sobriedad en sentido genérico, puede aplicarse a cualquier

materia, exactamente igual que dijimos antes sobre la fortaleza y la templanza

(q.123 a.2; q.141 a.2).

Valor a las cosas importantes. Permite a la persona distinguir entre lo adecuado y

lo exagerado. La virtud de la sobriedad permite a la persona que la vive, distinguir

entre lo que es razonable y lo que es inmoderado, y utiliza sus cinco sentidos, su

tiempo, su dinero y sus esfuerzos de acuerdo a criterios rectos y verdaderos. El que

no vive esta virtud se deja esclavizar por los cinco sentidos (la visión, el tacto, el

oído, el gusto y el olfato) y se deja arrastrar por el uso del tiempo según sus

caprichos. Usa su dinero no para la adquisición de las cosas necesarias para la

vida, sino que lo despilfarra para satisfacer sus apetitos egoístas.

Hoy día se está hablando mucho de la necesidad –cierta– de educar para el consumo

adecuado. Pues bien, la más acertada "educación del consumidor" consiste en

ayudar a los hijos a adquirir la virtud de la sobriedad.


"Guarda el justo medio entre los extremos y evita actos de ostentación que vayan

en demérito de la respetabilidad de su cargo".

HONESTIDAD

Es la conciencia clara "ante mí y ante los demás". Es el reconocimiento de lo que

está bien y es apropiado para nuestro propio papel, conducta y relaciones. Es una

forma de vivir congruente entre lo que se piensa y lo que observa ante el prójimo.

Es hablar de lo que se piensa y hacer lo que se ha dicho. No hay contradicciones

ni discrepancias entre los pensamientos, palabras o acciones. La honestidad es

ser por fuera lo que se piensa por dentro, sin embargo en ocasiones es fácil tener

actitudes deshonestas como:

La hipocresía, aparentando una personalidad para ganarse la estimación de los de-

más; mentir continuamente; simular trabajar o estudiar para no recibir una llamada

de atención; el no guardar en confidencia algún asunto del que hemos hecho la

promesa de no revelarlo; no cumpliendo nuestra palabra, compromisos y la infide-

lidad. Debería haber honestidad en el corazón y también honestidad en la cabeza.

De lo contrario habrá autoengaño o la tendencia de engañar a los demás, oscureciendo

los asuntos con excusas interminables y explicaciones confusas.

Una persona honesta es aquella que aspira a observar los códigos de conducta

más elevados, que es leal a los principios benevolentes y universales de la vida y

cuyas decisiones se basan en discernir claramente entre lo que es correcto y lo

que es erróneo.

Si queremos ser honestos, debemos empezar por enfrentar con valor nuestros

defectos y buscando la manera más eficaz de superarlos, con acciones que nos lleven


a mejorar todo aquello que afecta a nuestra persona y como consecuencia a nuestros

semejantes, rectificando cada vez que nos equivocamos y cumpliendo con nuestro

deber en las labores grandes y pequeñas sin hacer distinción.

Reflexionar

1. ¿Aprovecho el tiempo trabajando con intensidad y profesionalmente? ¿Evito

aparentar ocupación para no recibir llamadas de atención?

2. ¿Cumplo con la promesa de no revelar confidencias recibidas, sean personales

o profesionales?

3. ¿Evito aprovecharme de la ignorancia, el descuido, las debilidades o el exceso

de confianza de los demás?

4. ¿Devuelvo con oportunidad y en buen estado, todo lo que he recibido en préstamo?

5. ¿Reparo el daño causado a los bienes ajenos por mi descuido o pereza?

6. ¿Rechazo toda murmuración o comentarios que afecten a la reputación de los

demás?

7. ¿Procuro hablar siempre bien de las personas?

8. ¿Es mi comportamiento igual con todas las personas y en todo lugar?

197


DEONTOLOGÍA DE LOS JUECES Y MAGISTRADOS (1)Del libro Deontología Jurídica, del Dr. Víctor Manuel Pérez Valera

Importancia del juez y su responsabilidad

"Es una verdad de Pero Grullo sostener que en los jueces reside fundamentalmente

el peso del Poder Judicial. Un poder que, desde luego, no debe ser despótico ni

arbitrario, sino guiado y temperado por el derecho y la ética pero, aun así, es

innegable que los jueces tienen gran poder. El aforismo latino res iudicata facit de

albo nigrum et de quadrato rotundum (‘la cosa juzgada hace lo blanco negro y

lo cuadrado redondo’) nos pone de cara a las enormes metamorfosis del poder

sobrehumano de los jueces".

El comentario anterior es de Piero Calamandrei y se suaviza con la cita que aduce

de Aristóteles, quien afirma que el juez es el derecho o la justicia viviente, lo cual

nos remite a la relación entre ética y derecho, ya que sólo si el juez pronuncia una

sentencia justa, el derecho adquiere sentido: el juez es el que, finalmente, hace que

el derecho se concrete en la justicia.

La función judicial es de gran responsabilidad. Una sola sentencia injusta provoca,

según Francis Bacon, mayores males que los delitos cometidos por particulares:


éstos corrompen las corrientes de las aguas, aquélla envenena la fuente. En otras pala-

bras, la sentencia injusta infecta y gangrena la vida de la sociedad, es como cometer

el delito el impedir que se castigue justamente al que lo cometió, pues como atina-

damente lo expresó Publio Siro: "el juez resulta condenado cuando absuelve al

culpable". Ante su enorme responsabilidad, el juez debe ser consciente de que su

interpretación y aplicación de las normas jurídicas afectan profundamente no sólo

a algunos seres humanos, sino también el amplio espectro del orden social.

Esta moralidad en la vida pública del juez nos lleva de la mano al ámbito de su vida

privada. Si la moralidad en la vida privada del abogado ofrece cierta garantía de

que será una persona honesta en la vida profesional, con mayor razón se exige del

juez una vida privada íntegra y recta, y si fuere posible, intachable. Desde luego,

no se trata de que aparenten lo que no son, sino de que se esfuercen por asumir

una conducta ética como forma de vida. Debido a su alta investidura, el juez, más

que otros actores del proceso, debe tener siempre presente los ideales éticos que

lo impulsen a una constante superación en todos los aspectos de su vida.

Además de la moralidad, hay otros aspectos de la vida profesional del juez que

repercuten en su vida privada. Una de esas cargas que debe llevar a cuestas es la

soledad, en parte por el secreto profesional, en parte por la pesadumbre de enfren-

tarse, como el confesor, con los aspectos más deleznables del ser humano.

Con todo sería contraproducente que tratara de aliviar esa carga con la rutina, que

irremediablemente lo conduciría a sentencias frías, mecánicas y deshumanizadas.

Aligerar en algo este peso ayudan los tribunales colegiados, que tienen la ventaja

de repartir un tanto las responsabilidades. Sin embargo, cuando se trata de un

tribunal colegiado, la existencia de un ponente no exime a los demás miembros

de asumir plenamente el caso, de estudiarlo a fondo, de reflexionar sobre él acucio-

samente y de emitir su voto con absoluta responsabilidad ética.


Puntualizando un poco más las responsabilidades judiciales, dice F. Bacon que las

funciones del juez pueden reducirse a cuatro, todas ellas trascendentales:

1. Determinar el origen y encadenamiento de las pruebas;

2. Moderar a los litigantes y a los abogados postulantes;

3. Sintetizar y comparar los puntos esenciales aducidos por las partes, y

4. Pronunciar sentencia.

Cualidades que deben adornar al juez

Del juez se exige fundamentalmente competencia e integridad; la primera es una

tarea ardua y prolongada, ya que la tentación es dejar de prepararse o confiar

demasiado en la experiencia; la segunda, que siempre tiene que estar presente,

consiste en actuar justamente, "de acuerdo con el derecho y según los usos de

éste", sin dejarse influir por recomendaciones o amenazas, filias o fobias.

La imparcialidad es, sin duda, la virtud suprema del juez. Ésta tiene diversas mani-

festaciones. Una de ellas es la independencia política. En opinión de Calamandrei,

debería ser suficiente motivo para recusar a un juez el que estuviere afiliado a un

partido político. No se pretende que el juez sea apolítico, sino que no manifieste

sus tendencias políticas públicamente, pues aunque esto no sea garantía absoluta

de imparcialidad, es una ayuda para librarse de presiones partidistas. La inde-

pendencia del Poder Judicial, tan clara en la teoría, en la práctica es un ideal no

fácil de alcanzar.

Ahora bien, el imperativo de imparcialidad debe brotar en el juez de su talante

ético. Un connotado litigante como Calamandrei opina que para ser juez no se

requiere una gran inteligencia; le basta y sobra con la normal, pero su superioridad


reside en el aspecto moral, el cual debe ser tan eminente, que incluso perdone al

abogado el que sea más inteligente que él. En cambio, es de temer el juez muy

inteligente, demasiado seguro de sí, que rápidamente llega a conclusiones.

Con lo anterior, de ninguna manera se quiere insinuar que el juez no deba ser

inteligente, o que no se le exija que sea un buen conocedor del derecho, sino que

sobre esas dotes poseer una alta sensibilidad moral y un sentido vivo de la justicia

de la cual brote la corazonada o el chispazo inteligente que intuya la solución

justa en el caso concreto.

201

1. ¿Por qué impartir justicia conlleva una enorme responsabilidad?

2. ¿Por qué los juzgadores deben esforzarse por "asumir una conducta ética como

norma de vida"?

3. ¿Cuáles son las principales "cualidades que deben adornar a un juez"?


203

TEMA: Recapitulación y compromiso.

OBJETIVOS: Repasar el contenido del Código de Ética y visualizarlo de

manera integral. Asumir un compromiso personal para

hacer realidad los postulados del Código en la labor

cotidiana como servidores públicos del PJF.


de los principios de objetividad y profesionalismo.

EXPOSICIÓN INICIAL: La importancia del compromiso personal, ya que todos

conformamos el PJF.

TEXTO DEL C. DE ÉTICA: Se sugiere releer algunos fragmentos seleccionados, a

juicio del titular del órgano.

LECTURA AUXILIAR: Deontología de jueces y magistrados: Las cualidades de

los juzgadores.

PUNTOS A RESALTAR: Identificarnos plenamente con el contenido del C. E. para

que ilumine nuestro actuar cotidiano.

DÉCIMA SESIÓN

205

En esta sesión se hace una selección de fragmentos escogidos del Código de

Ética, que a juicio del titular del órgano sean significativos y trascendentes para el

personal de su área. Se invita a la gente a participar y hacer comentarios generales

y aplicar los principios del Código a su quehacer profesional.


207

II. DINÁMICA


1. ¿Respeto a los compañeros cuando exponen sus comentarios u

opiniones personales?

2. ¿Aprovecho el tiempo efectivo de estancia en la oficina?

3. ¿Conservo el buen ánimo y disposición en el desempeño de mis

funciones cuando las situaciones son adversas?

4. ¿Tengo sentido de pertenencia con el equipo de trabajo y sentido de

lealtad con nuestros superiores?

5. ¿Hago buen uso de la papelería oficial, destinando los oficios para

el cumplimiento estricto de las funciones propias del área?

6. ¿Contribuyo con mis acciones y actitudes al fortalecimiento de

nuestro país, y a enaltecer con mi trabajo al Poder Judicial de la

Federación?


7. ¿Me he esmerado en mantener limpio y ordenado mi lugar de trabajo?

8. ¿He usado siempre adecuado vocabulario, forma de vestir y

comportamiento?

9. ¿He sabido respetar a los demás con el trato, las actitudes, gestos y

aun con la mirada, sin rebasar los límites del "espacio vital"?

10. ¿He cuidado que mis actividades de convivencia sean adecuadas,

que no desemboquen en situaciones incorrectas ni sean en lugares

inapropiados?

11. ¿He cuidado que mis adquisiciones materiales no sean ostentosas?

12. ¿He procurado no cubrir fallas e ineptitudes con justificaciones?

13. ¿He tenido cuidado de no ser prepotente ni buscar a toda costa ser

quien tiene la última palabra en una conversación?

14. ¿Admito con sencillez cuando no conozco con profundidad de algún

tema?

¡Recuerda!:

Que nuestros actos buenos sean como un libro abierto,

para que puedan servir de ejemplo… (Don Quijote de la Mancha)

209

III. GUIÓN PARA SESIÓN DERECAPITULACIÓN Y COMPROMISO

Como en esta sesión se relee una selección de fragmentos del Código de Ética que

a juicio del titular del órgano sean significativos y trascendentes para su propio

personal, es pertinente repasar los conceptos fundamentales o que más hayan

llamado la atención a lo largo de las sesiones de estudio. Es importante invitar a la

gente a participar activamente, haciendo los comentarios pertinentes y poniendo

los ejemplos que permitan aplicar de una mejor manera los principios del Código

a su quehacer profesional.

La aparición de este Código, como bien lo expresa su preámbulo, no significa que

antes de él los juzgadores carecieran de ética ni que fueran ajenos a estos principios,

pues ética, valores y principios siempre los ha habido en el Poder Judicial Federal;

el nuevo Código obedece solamente a la necesidad de plasmar en un documento, de


incentivar y facilitar la reflexión crítica de cada juzgador sobre su conducta, fomen-

tando la formación en el conocimiento ético por parte de todos aquellos que nos

encontramos investidos con la honrosa y trascendente responsabilidad de dirimir

conflictos en el seno de la sociedad.


Es importante motivarlos a involucrarse de manera personal en el afán de asumir y

vivir los valores y principios contenidos en el Código. Esto puede incluso lograrse,

a juicio del titular del órgano respectivo, mediante la suscripción de un "Compromiso"

personal de acatar el contenido del Código, a efecto de lo cual puede improvisarse,

al final de la sesión, un sencillo acto de compromiso público en cada órgano

jurisdiccional.

Para ello, igualmente, puede ser muy útil el reflexionar en torno a la MISIÓN y la

VISIÓN del Poder judicial de la Federación:

MISIÓN

El Poder Judicial de la Federación imparte justicia observando indefectiblemente

los principios de independencia, imparcialidad, objetividad y profesionalismo y

sus miembros desarrollan cada una de las actividades que les han sido encomen-

dadas dentro del marco de la excelencia.

VISIÓN

La excelencia en el desempeño profesional de los miembros del Poder Judicial de la

Federación la convierte en el modelo a seguir por las demás instituciones públicas

del país. Es garante de la paz social y el Estado de derecho, su labor es columna

vertebral de la viabilidad y sustentabilidad de la nación. Defiende la estabilidad

política, económica y social del país y logra que México sea una nación plenamente

democrática, orgullosamente pluriétnica y multicultural, con profundo sentido de

unidad nacional. La actuación profesional del Poder Judicial de la Federación permite

que la convivencia se base en el respeto a la legalidad con un marcado acento

humanista, haciendo de México una nación dinámica, con liderazgo y con una

elevada calidad de vida.

211


DECÁLOGO DE LOS JUZGADORES (2)Del libro Deontología Jurídica, del Dr. Víctor Manuel Pérez Valera

Si en toda vida humana es recomendable el autoexamen y la autocrítica, estas

admoniciones son especialmente adecuadas para el juez. De tiempo en tiempo

debería preguntarse si se ha guiado por criterios extrajurídicos vanos: influen-

cias de amistades, de políticos o de ideologías partidistas, o por intereses personales.

Este examen debe descender a analizar la influencia que pudieran tener en las

sentencias su estado de ánimo y aun su estado de salud. A este propósito parece

oportuno transcribir, en primer lugar, un decálogo del juez, luego el cuestionario

que Calamandrei sugiere a los jueces y finalmente algunas de las recomendacio-

nes que Don Quijote dio a Sancho para gobernar en la ínsula Barataria. Estos

documentos se complementan y enriquecen y nos presentan una imagen ideal del

juez en la que honestamente él pueda mirarse como en un espejo:

Decálogo del juez, de Enrique Díaz Guijarro

1. Respeta al abogado.

2. Siente la peculiaridad de cada litigio y desconfía del precedente.

3. No presumas de erudito.


4. Sé claro y conciso.

5. Sé manso y reflexivo.

6. Sé humano.

7. Sigue el ritmo de la vida para la adecuada interpretación de la norma.

8. No busques la popularidad.

9. Preserva, a toda costa, la independencia y dignidad de tu magistratura.

10. Realiza la moral y el derecho al hacer justicia.

Cuestionario para un examen de conciencia de un funcionario judicial

que propone Piero Calamandrei

• ¿Nunca me ha ocurrido, mientras me parecía estar convencido de la

culpabilidad del imputado, darme cuenta de pronto que empezaba a

considerarlo inocente al saber de quién era hijo?

• ¿Nunca me ha ocurrido, al decidir una litis no poder apartar de mi mente las

opiniones políticas, o la fe religiosa, o los parentescos, o las amistades, de

la parte a la que luego se le dio la razón?

• ¿Nunca me ha ocurrido en la misma audiencia, para invitar a dos testigos

para que se sentaran delante de mí, emplear para cada uno de ellos una

fórmula distinta; para uno "tenga la bondad de tomar asiento", y para el otro

"siéntese"?

• ¿Nunca me ha ocurrido, al dictar una sentencia, pensar sin querer en las

consecuencias que de dictarla en esa forma y no en otra, podían seguirse

para mi ascenso o mi traslado?


Las recomendaciones de Don Quijote a Sancho son las siguientes:

• Nunca te guíes por la ley del encaje, que suele tener mucha cabida con los

ignorantes que presumen de agudos.

• Hallen en ti más compasión las lágrimas del pobre, pero no más justicia que

las informaciones del rico.

• Procura descubrir la verdad por entre las promesas y dádivas del rico como

por entre los sollozos e importunidades del pobre.

• Cuando pudiere y debiere tener lugar la equidad, no cargues todo el rigor de

la ley al delincuente; que no es menor la fama del juez riguroso que la del

compasivo.

• Si acaso doblares la vara de la justicia, no sea con el peso de la dádiva, sino

con el de la misericordia.

• Cuando te sucediere juzgar algún pleito de algún tu enemigo, aparta las mientes

de tu injuria y ponlas en la verdad del caso.

• No se ciegue la pasión propia en la causa ajena; que los yerros que en ella

hicieres las más veces serán sin remedio…

• Si alguna mujer hermosa viniera a pedirte justicia, quita los ojos de sus

lágrimas y tus oídos de sus gemidos, y considera despacio la sustancia de lo

que pide, si no quieres que se anegue tu corazón en su llanto y tu bondad en

sus suspiros.


• Al que has de castigar con obras no trates mal con palabras, pues le basta al

desdichado la pena del suplicio, sin la añadidura de las malas razones.

• Al culpado que cayera debajo de tu jurisdicción considérale hombre miserable,

sujeto a las condiciones de la depravada naturaleza nuestra, y en todo cuanto

fuere de tu parte, sin hacer agravio a la contraria, muéstratele piadoso y

clemente; porque aunque los atributos de Dios todos son iguales, más

resplandece y campea a nuestro ver el de la misericordia que el de la justicia.

Las Siete Partidas (III, IV, iii)

"Acuciosamente y con gran vehemencia debe ser catado que aquellos que fuesen

escogidos para ser jueces… que sean leales, y de buena fama, y sin mala codicia,

y que tengan sabiduría para juzgar los pleitos derechamente por su saber ó por uso

de luengo tiempo, y que sean mansos y de buena palabra a los que viniesen en

juicio ante ellos… y muestren en sí piedad y justicia".

215

1. ¿Son siempre "sin remedio" los yerros de la justicia?

2. ¿En qué consiste la "sabiduría para juzgar"?

3. Intenta elaborar tu propio "Decálogo" del juzgador.


217

ARISTÓTELES, Ética Nicomaquea, Ed. Porrúa, México, 2000.

ACEVEDO, ALEJANDRO, Aprender jugando. Dinámicas vivenciales, LIMUSA,

México, 2000.

DÍAZ ROMERO, JUAN, El ABC de la deontología judicial, SCJN, Serie Ética Judicial

No. 3, México, 2005.

DURKHEIM, EMILE, La educación moral, Colofón, México, 1991.

HIGUERA CORONA, JORGE, La ética conforme a la doctrina de Max Sheller, y la

prudencia como virtud cardinal en el juzgador, SCJN, Serie Ética Judicial No. 4,

México, 2005.

GARCÍA-MAYNEZ, EDUARDO, El problema de la objetividad de los valores,

El Colegio Nacional, México, 1969.

GARCÍA MORENTE, M., Lecciones preliminares de filosofía, Época, México, 1967.

BIBLIOGRAFÍA GENERAL


GUTIERREZ SÁENZ, RAÚL, Introducción a la ética, 10a. ed., Esfinge, México, 1978.

GUZMÁN VALDIVIA, ISAAC, Humanismo trascendental y desarrollo, 7a. ed., Limusa,

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LÓPEZ DE LLERGO, ANA TERESA, Valores, valoraciones y virtudes, CECSA, México,

2001.

MACINTYRE, ALASDAIR, Tras la virtud, crítica, Grijalbo, Barcelona, 1987.

ORTEGA Y GASSET, JOSÉ, Ideas y creencias, 7a. ed., Espasa Calpe, Madrid, 1964.

PÉREZ VALERA, VÍCTOR MANUEL, Deontología jurídica: ser y quehacer del abogado,

Oxford University Press, 2002.

SADA, RICARDO F., Curso de ética general, Minos, México, 1997.

SCJN, Serie Ética Judicial. No. 2, "Presentación del Código de Ética del Poder

Judicial de la Federación", México, 2005.

RUYER, RAYMOND, Filosofía del valor, Fondo de Cultura Económica, México, 1969.

APÉNDICE

CÓDIGO DE ÉTICADEL PODER JUDICIAL DE LA FEDERACIÓN

CÓDIGO DE ÉTICADEL PODER JUDICIAL DE LA FEDERACIÓNCONSEJO DE LA JUDICATURA FEDERAL

PRESENTACIÓN

I. En virtud de las innovadoras transformaciones que vive cada día la sociedad

mexicana, es natural que los juzgadores en su interrelación cotidiana, se

involucren en esta dinámica, como acontece en otros sectores, dando ocasión

a la generación de ligas de interés que podrían afectar su libre conciencia y

papel esencial en la impartición de justicia, por lo que resulta de gran utilidad

que existan referentes que identifiquen los valores y principios relativos al

ejercicio de la función jurisdiccional.

II. Cada día la sociedad busca estar informada y el Estado ha venido fortaleciendo

los canales de acceso a la información pública, condiciones que la hacen

cuestionar o emitir juicios que pueden trascender en la conciencia libre del

juzgador, en virtud de que sus actos judiciales son sometidos al escrutinio

público a través de los instrumentos de impacto social, lo que puede ocasionar

pérdida de confianza en los órganos de administración de justicia, si éstos

no actúan con independencia, imparcialidad, objetividad, profesionalismo y

transparencia.

221


III. Es un derecho de los justiciables que la administración de justicia sea impar-

tida por jueces con autoridad moral que garanticen una justicia accesible,

pronta, completa, imparcial y previsible, basada en la letra o la interpretación

jurídica de la ley y, a falta de ésta, en los principios generales del derecho,

sin que se privilegie cualquier otro interés.

IV. El incremento de los litigios en los órganos de administración de justicia del

Poder Judicial de la Federación, evidencia la judicialización de los diferendos

sociales, y hacen patente la confianza social depositada en los tribunales, así

como la importancia de la actividad jurisdiccional, lo que obliga a actualizar

los sistemas de trabajo y actitudes ante esas nuevas exigencias.

V. Sabedores de la alta responsabilidad social que tienen los impartidores

de justicia ante los justiciables y el Estado mexicano, la Suprema Corte de

Justicia de la Nación, el Consejo de la Judicatura Federal y la Sala Superior

del Tribunal Electoral, en su carácter de instancias orgánicamente superiores,

la primera y la tercera como sus depositarios y el segundo como órgano con

independencia técnica, de gestión y para emitir sus resoluciones; consideran

conveniente establecer principios rectores de ética judicial dirigidos a los

juzgadores que integran el Poder Judicial de la Federación para hacer patente

en todo momento la garantía constitucional prevista en el artículo 17 de la

Carta Magna, relativa a que toda persona tiene derecho a que se le administre

una justicia, pronta, completa e imparcial.

VI. Con el Código de Ética del Poder Judicial de la Federación se pretende contar

con un nuevo elemento que coadyuve a garantizar que la jurisdicción sea

realizada por personas en las que se sumen la confianza, la calidad técnica y

la ética.


Si bien la ética se traduce en un comportamiento humano que se caracteriza

en ser unilateral, inherente a la conciencia del sujeto y sólo imperativo para él,

resulta vital para la sana convivencia dentro de una colectividad, y particular-

mente importante en la función judicial por la trascendencia social que

adquiere, pues en este quehacer debe imperar en el juzgador un sentido ético

que equilibre el poder que el Estado deposita en su persona para que al

conocer de los procedimientos emita sus resoluciones conforme a la técnica

jurídica y los principios éticos, procurando ser justo desde el Derecho.

Este documento se formula con el propósito de ayudar a los juzgadores a

resolver los conflictos éticos que con motivo de su trabajo se les presentan.

Será exclusivamente la conciencia de cada uno de ellos, el intérprete y aplica-

dor del Código, en tanto que la sociedad será quien califique los aspectos

observables de su conducta.

VII. Nociones previas:

1.- Denominación.- Aunque la estructura de este documento no es pro-

piamente un "cuerpo de normas dispuestas según un plan metódico y

sistemático", que es la acepción que comúnmente se le da a la palabra

"código", se emplea este vocablo por ser la denominación preponderante

que se ha dado a documentos similares, existentes en otros países de

Iberoamérica. Además, desde el punto de vista gramatical, tal locución

es correcta, pues dicho término también puede emplearse en sentido

figurado, para denominar a "un conjunto de principios y reglas sobre

cualquier materia".

2.- Destinatarios.- Los principios, reglas y virtudes judiciales que se

contienen en este Código de Ética del Poder Judicial de la Federación,


tienen como destinatarios a los titulares de los órganos del Poder Judicial

de la Federación, así como a los demás integrantes de dichos órganos en

la medida en que tales principios, reglas y virtudes judiciales resulten

aplicables a la función que cada uno de ellos desempeña.

3.- Finalidad.- En el Código se recogen los principios, reglas y virtudes judi-

ciales, que se consideran idóneos para constituir un referente deonto-

lógico, que pueda no sólo guiar la conducta de los juzgadores federales

y sus auxiliares, sino facilitar la reflexión ética sobre los diversos

aspectos de la función que desempeñan; consecuentemente, tales prin-

cipios y reglas no son elaborados con la finalidad de complementar o

reglamentar la legislación vigente en materia de cualquier tipo de res-

ponsabilidad jurídica de los miembros del propio Poder Judicial de la

Federación.

4.- Estructura.- El Código se divide en cinco capítulos. En los cuatro primeros

se definen los que se consideraron los cuatro principios rectores funda-

mentales de la ética judicial (independencia, imparcialidad, objetividad

y profesionalismo). Después de cada principio, se enunciaron algunas

reglas relacionadas con el mismo, que se estiman importantes. El listado

de estas últimas no es, por tanto, de carácter taxativo, pues se estima

que el Código de Ética debe ser un instrumento flexible, que constituya

un punto de partida para la reflexión ética personal de cada juzgador

y no un catálogo exhaustivo de deberes morales.

En el capítulo quinto no se recoge propiamente un principio rector de la

Ética Judicial, sino que bajo el rubro denominado "Excelencia", se pro-

ponen una serie de virtudes judiciales, que en su conjunto conforman el

perfil ideal de un buen juzgador.


5.- Contenido.- Los referidos cuatro principios que se desarrollan en sendos

capítulos del proyecto (independencia, imparcialidad, objetividad y profe-

sionalismo) y la excelencia judicial a que se refiere el último capítulo,

corresponden a los principios que, conforme al artículo 100, párrafo

séptimo de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos,

rigen a la carrera judicial. Esta coincidencia es deliberada, pues lo que

se pretende es recoger y desarrollar, en el aspecto ético, los principios

que, por contenerse en la Ley Fundamental, son reconocidos y acepta-

dos por los propios juzgadores y por la sociedad en general, como

directrices de la función jurisdiccional.

Los principios referidos se estructuran de manera coherente, tomando

como hilo conductor la independencia judicial en sentido lato (enten-

dida como la actitud que debe asumir el juzgador para ejercer la función

jurisdiccional, sólo desde la perspectiva del Derecho).

Los tres primeros principios (independencia judicial en sentido estricto,

imparcialidad y objetividad) son las tres manifestaciones de la indepen-

dencia judicial en sentido lato: La primera, se refiere a la actitud del

juzgador frente a influencias extrañas al Derecho, provenientes del siste-

ma social; la segunda, frente a influencias ajenas al Derecho provenientes

de las partes en los procesos sometidos a su potestad; y la tercera,

frente a influencias extrañas al Derecho provenientes del propio juzgador.

El cuarto principio (profesionalismo), se refiere al ejercicio responsable

y serio de la función jurisdiccional. Finalmente, la excelencia, se consi-

dera como un arquetipo al que deben aspirar los juzgadores, mediante

el cultivo de las virtudes judiciales que se definen en el Código.


Este Código de Ética proporciona una visión institucional de los valores y

virtudes que rigen el sistema de impartición de justicia de México y ayudará

a los servidores del Poder Judicial de la Federación a mejorar la efectividad

de nuestra institución, al mismo tiempo que constituirá un referente objetivo

para la valoración de la conducta personal de cada uno de quienes tenemos

el honor de servir a nuestra Patria en la judicatura.

PREÁMBULO

Hay anhelos que son universales, como la búsqueda sempiterna de una sociedad

de hombres libres, que les garantice su desarrollo humanístico y los emancipe de

temores. Una de las más bellas expresiones de ese afán generoso, quedó brillante-

mente consagrado en la exposición de motivos de la Constitución Federal de 1824, la

primera del México independiente, cuyos postulados han sido igualmente inspira-

dores del presente Código de Ética, en cuanto a que "…sin justicia no hay libertad,

y la base de la justicia no puede ser otra que el equilibrio entre los derechos de los

demás con los nuestros.", en el anhelo de "… hacer reinar la igualdad ante la ley,

la libertad sin desorden, la paz sin opresión, la justicia sin rigor, la clemencia sin

debilidad; demarcar sus límites a las autoridades supremas de la nación, combinar

éstas de modo que su unión produzca siempre el bien y haga imposible el mal;

arreglar la marcha legislativa, poniéndola al abrigo de toda precipitación y extravío;

(…) asegurar al Poder Judicial una independencia tal que jamás cause inquietudes

a la inocencia ni menos preste seguridades al crimen…," y en la conciencia de que

"… el honor nacional está altamente comprometido en la conducta que observamos.

Si nos desviamos de la senda constitucional; si no tenemos como el más sagrado

de nuestros deberes mantener el orden y observar escrupulosamente las leyes que

comprende el nuevo Código; si no concurrimos a salvar este depósito y lo ponemos

a cubierto de los ataques de los malvados; mexicanos, seremos en adelante desgra-

ciados, sin haber sido antes más dichosos".


Estos pensamientos bien pueden expresar la tarea de la ética de nuestro tiempo: la

preocupación del hombre por el respeto y el reconocimiento a la dignidad de los

otros. Hablar hoy de ética equivale a hablar de justicia, pues las relaciones armónicas

entre las personas sólo pueden construirse cuando se respetan los derechos que a

cada uno le corresponden.

La labor del juzgador no sólo requiere el conocimiento de la ciencia jurídica, porque

hay espacios en los que su única directriz es su propia conciencia. Esta requiere

ser ilustrada a partir de patrones de conducta asumidos libremente, que tiendan a

hacer efectivos los valores que si bien están ínsitos en el propio quehacer del juez

y en el ordenamiento jurídico, es indispensable explicitar, pues debe tenerse presente

que lo callado, aunque obvio, se olvida, se disimula o se desdeña.

El presente Código de Ética del Poder Judicial de la Federación, pretende ser una

espiga de tan profundos pensamientos, trayendo a la reflexión a la conciencia y a

la práctica, los principios, reglas y virtudes inherentes a la función jurisdiccional,

que se encuentran compenetrados en el sentir de nuestra comunidad, que los juzga-

dores ilustres, desde antaño, han asumido como propios y que definen los principios

constitucionales de la carrera judicial cuyo punto nodal es la independencia del

juzgador.

Este Código aspira al reconocimiento de que la ética judicial sea la senda por la

que transiten cotidianamente los servidores públicos del Poder Judicial de la Fede-

ración; que sea un documento no sólo informativo, sino formativo a tal punto que

su práctica reiterada se convierta en la segunda naturaleza del juzgador, para que, a

través de su vida, dé contenido, claridad y sistematización a tales postulados;

porque el conocimiento de la ética no es innato, sino por el contrario, es adquirido:

lo innato es tan sólo la disposición para adquirirlo.


La aparición de este Código no obedece a que los juzgadores desconozcan o sean

ajenos a estos principios, sino a la necesidad de plasmar en un documento, de


incentivar y facilitar la reflexión crítica de cada juzgador sobre su conducta.

Por ello, la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el Consejo de la Judicatura

Federal y la Sala Superior del Tribunal Electoral, han considerado necesaria la

publicación del presente Código, como instrumento que fomentará la formación en

el conocimiento ético por parte de todos aquellos que se encuentran investidos

con la honrosa y trascendente responsabilidad de dirimir conflictos en el seno de

la sociedad.

CÓDIGO DE ÉTICA

DEL

PODER JUDICIAL DE LA FEDERACIÓN

CAPÍTULO I

INDEPENDENCIA


del sistema social. Consiste en juzgar desde la perspectiva del Derecho y no a

partir de presiones o intereses extraños a aquél. Por tanto, el juzgador:

1.1 Rechaza cualquier tipo de recomendación que tienda a influir en la tramitación

o resolución de los asuntos que se sometan a su potestad, incluso las que

pudieran provenir de servidores del Poder Judicial de la Federación.

1.2 Preserva el recto ejercicio de su función denunciando cualquier acto que

tienda a vulnerar su independencia.


1.3 Evita involucrarse en actividades o situaciones que puedan directa o

indirectamente afectar su independencia.

1.4 Se abstiene de recomendar, insinuar o sugerir, con un fin ilegítimo, el sentido

en que deban emitir los demás juzgadores cualquier determinación judicial

que tenga efecto sobre la resolución de un asunto.

CAPÍTULO II

IMPARCIALIDAD


de las partes en los procesos sometidos a su potestad. Consiste en juzgar, con

ausencia absoluta de designio anticipado o de prevención a favor o en contra de

alguno de los justiciables. Por tanto, el juzgador:

2.1 Evita conceder ventajas o privilegios ilegales a cualquiera de las partes.

2.2 Rechaza cualquier dádiva que provenga de alguna de las partes o de terceros.

2.3 Evita hacer o aceptar invitaciones en las que el propio juzgador considere

que se verá comprometida su imparcialidad.

2.4 Se abstiene de citar a las partes o personas vinculadas con ellas, fuera de las

oficinas del órgano jurisdiccional en el que ejerza su función.

2.5 Se abstiene de emitir cualquier opinión que implique prejuzgar sobre un

asunto.


CAPÍTULO III

OBJETIVIDAD


de sí mismo. Consiste en emitir sus fallos, por las razones que el Derecho le

suministra y no por las que se deriven de su modo personal de pensar o de sentir.

Por tanto, el juzgador:

3.1 Al emitir una resolución, no busca reconocimiento alguno.

3.2 Al tomar sus decisiones en forma individual o colegiada, buscará siempre la

realización del derecho frente a cualquier beneficio o ventaja personal.

3.3 Si es integrante de un órgano jurisdiccional colegiado, trata con respeto a

sus pares y escucha con atención y apertura de entendimiento sus plan-

teamientos y dialoga con razones y tolerancia.

3.4 Procura actuar con serenidad de ánimo y equilibrio interno, a fin de que sus

decisiones estén desprovistas de aprensiones y prejuicios.

CAPÍTULO IV

PROFESIONALISMO

4. Es la disposición para ejercer de manera responsable y seria la función

jurisdiccional, con relevante capacidad y aplicación. Por tanto, el juzgador:

4.1 Se abstiene de cualquier acto que pueda mermar la respetabilidad propia de

su cargo, tanto en el ámbito público como en el privado.


4.2 Actualiza permanentemente sus conocimientos jurídicos estudiando los

precedentes y jurisprudencia, los textos legales, sus reformas y la doctrina

relativa.

4.3 Procura acrecentar su cultura en las ciencias auxiliares del Derecho.

4.4 Estudia con acuciosidad los expedientes y proyectos en los que deba intervenir.

4.5 Funda y motiva sus resoluciones, evitando las afirmaciones dogmáticas.

4.6 Dedica el tiempo necesario para el despacho expedito de los asuntos de su

juzgado o tribunal.

4.7 Asume responsable y valerosamente las consecuencias de sus decisiones.

4.8 Acepta sus errores y aprende de ellos para mejorar su desempeño.

4.9 Guarda celosamente el secreto profesional.

4.10 Lleva a cabo por sí mismo las funciones inherentes e indelegables de su

cargo

4.11 Trata con respeto y consideración a sus subalternos.

4.12 Escucha con atención y respeto los alegatos verbales que le formulen las

partes.

4.13 Trata con amabilidad y respeto a los justiciables.


4.14 Administra con diligencia, esmero y eficacia el órgano jurisdiccional a su

cargo.

4.15 Cumple puntualmente con el deber de asistir a su tribunal o juzgado.

4.16 Sabe llevar el cumplimiento de su beber hasta el límite de sus posibilidades,

y separarse de su cargo, cuando su estado de salud u otros motivos persona-

les, no le permitan desempeñar eficientemente sus funciones.

4.17 Se abstiene de emitir opiniones sobre la conducta de sus pares.

4.18 Cumple con sus deberes de manera ejemplar para que los servidores públicos

a su cargo lo hagan de la misma manera en los que les correspondan.

4.19 Busca con afán que sus acciones reflejen la credibilidad y confianza propias

de su investidura.

CAPÍTULO V

EXCELENCIA


judiciales:

5.1 Humanismo: En cada momento de su quehacer está consciente de que las

leyes se hicieron para servir al hombre, de modo tal que la persona constituye

el motivo primordial de sus afanes.

5.2 Justicia: En cada uno de los asuntos sometidos a su potestad, se esfuerza

por dar a cada quien lo que le es debido.


5.3 Prudencia: En su trabajo jurisdiccional y en las relaciones con sus colabo-

radores, recoge la información a su alcance, con criterios rectos y objetivos;

consulta detenidamente las normas del caso, pondera las consecuencias

favorables y desfavorables que puedan producirse por su decisión, y luego

toma ésta y actúa conforme a lo decidido.

5.4 Responsabilidad: Asume plenamente las consecuencias de sus actos, resultado

de las decisiones que tome, procurando que sus subordinados hagan lo

mismo.

5.5 Fortaleza: En situaciones adversas, resiste las influencias nocivas, soporta

las molestias y se entrega con valentía para vencer las dificultades y cumplir

con su función jurisdiccional.

5.6 Patriotismo: Tributa al Estado Mexicano el honor y servicio debidos, defen-

diendo el conjunto de valores que, como juzgador federal del Estado Mexicano,

representa.

5.7 Compromiso social: Tiene presentes las condiciones de iniquidad que han

afectado a una gran parte de la sociedad a lo largo de nuestra historia, y advierte

que la confianza y el respeto sociales que merezca serán el resultado de un

trabajo dedicado, responsable y honesto.

5.8 Lealtad: Acepta los vínculos implícitos en su adhesión a la Institución a la

que pertenece, de tal modo que refuerza y protege, en su trabajo cotidiano, el

conjunto de valores que aquélla representa.

5.9 Orden: Mantiene la adecuada organización y planificación en el trabajo a su

cargo.


5.10 Respeto: Se abstiene de lesionar los derechos y dignidad de los demás.

5.11 Decoro: Cuida que su comportamiento habitual tanto en su vida pública como

privada, esté en concordancia con el cargo y función que desempeña.

5.12 Laboriosidad: Cumple diligentemente sus obligaciones de juzgador.

5.13 Perseverancia: Una vez tomada una decisión, lleva a cabo los actos necesarios

para su cumplimiento, aunque surjan dificultades externas o internas.

5.14 Humildad: Es sabedor de sus insuficiencias, para poder superarlas, y también

reconoce sus cualidades y capacidades que aprovecha para emitir de la mejor

manera posible sus resoluciones, sin pretender llamar la atención ni esperar

reconocimientos.

5.15 Sencillez: Evita actitudes que denoten alarde de poder.

5.16 Sobriedad: Guarda el justo medio entre los externos y evita actos de osten-

tación que vayan en demérito de la respetabilidad de su cargo.

5.17 Honestidad: Observa un comportamiento probo, recto y honrado.

Esta obra se terminó de imprimir y encuadernaren abril de 2006 en los talleres de EdicionesCorunda, S.A. de C.V., Tlaxcala núm. 17, Col.San Francisco, Delegación MagdalenaContreras, C.P. 10500, México, D.F. Se utili-zaron tipos IQE Hlv Cond en 11.5, 12, 13,13.5, y 15 puntos. La edición consta de 1,000ejemplares impresos en papel bond de 75 grs.

la compilación y redacción de texto estuvo a cargo de la...

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