Reina de Segorbe-Castellón

hojaparroquial8 de septiembre de 2013Nº 2.684 SemaNario de la dióceSiS de Segorbe-caStellóN

2 // Hoja Parroquial

“El que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío”

Primera LecturaSab 9,13-18. ¿Qué hombre conoce el designio de Dios? ¿Quién comprende lo que Dios quiere? Los pensamien-tos de los mortales son mezquinos, y nuestros ra-zonamientos son falibles; porque el cuerpo mortal es lastre del alma, y la tienda terrestre abruma la mente que medita. Ape-nas conocemos las cosas terrenas y con trabajo encontramos lo que está a mano: pues, ¿quién ras-treará las cosas del cielo? ¿Quién conocerá tu de-signio, si tú no le das sa-biduría, enviando tu san-to espíritu desde el cielo? Sólo así fueron rectos los caminos de los terrestres, los hombres aprendieron lo que te agrada, y la sa-biduría los salvó. Palabra de Dios.

Salmo responsorialSal 89. R/. Señor, tú has sido nues-tro refugio de generación en generación.

Segunda LecturaFlm 9b-10.12-17. Querido hermano: Yo, Pablo, anciano y prisio-nero por Cristo Jesús, te recomiendo a Onésimo, mi hijo, a quien he en-gendrado en la prisión; te lo envío como algo de mis entrañas. Me hubiera gus-tado retenerlo junto a mi, para que me sirviera en tu lugar, en esta prisión que sufro por el Evangelio; pero no he querido rete-nerlo sin contar contigo; así me harás este favor, no a la fuerza, sino con liber-tad. Quizá se apartó de ti para que lo recobres ahora para siempre; y no como esclavo, sino mucho me-

jor: como hermano que-rido. Si yo lo quiero tan-to, cuánto más lo has de querer tú, como hombre y como cristiano. Si me consideras compañero tuyo, recíbelo a él como a mí mismo. Palabra de Dios.

EvangelioLc 14, 25-33. En aquel tiempo, mu-cha gente acompañaba a Jesús; él se volvió y les dijo: -«Si alguno se viene conmigo y no pospone a su padre y a su madre, y a su mujer y a sus hijos, y a sus hermanos y a sus hermanas, e incluso a sí mismo, no puede ser dis-cípulo mío. Quien no lle-ve su cruz detrás de mí no puede ser discípulo mío. Así, ¿quién de vosotros, si quiere construir una torre, no se sienta prime-

ro a calcular los gastos, a ver si tiene para termi-narla? No sea que, sí echa los cimientos y no puede acabarla, se pongan a bur-larse de él los que miran, diciendo: “Este hombre empezó a construir y no ha sido capaz de acabar.” ¿O qué rey, si va a dar la batalla a otro rey, no se sienta primero a deliberar si con diez mil hombres podrá salir al paso del que le ataca con veinte mil? Y si no, cuando el otro está todavía lejos, envía legados para pedir condi-ciones de paz. Lo mismo vosotros: el que no renun-cia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío.» Palabra del Señor.

Próxima semana: Éx 32,7-11.13-14 / Sal 50 / 1Tim 1,12-17 / Lc 15, 1-32

Natividad de la Virgen María (3ª Semana del Salterio)

El Evangelio del Domingo

Miércoles 11 de septiembre, 11h.Misa presidida por el Obispo

en el Santuario de la Cueva Santa

24-27 octubreInformación e inscripciones:

Tel. 964 220066

Fiesta de la Patrona de la Diócesis

Año de la FePeregrinación diocesana a Roma

Hoja Parroquial // 3

En el XXV Aniversario de la Coronación de la Virgen de la Cueva SantaQueridos diocesanos: Retomamos nuestra cita semanal y lo hacemos re-cordando la coronación canónica hace veinticinco años de la imagen de la Virgen de la Cueva Santa, Patrona de nuestra Diócesis de Segorbe-Castellón. Este domingo, festividad de la Natividad del Virgen Ma-ría, celebraremos una Misa en acción de gracias por este acto de hondo calado para nuestros antepasados en la fe y para nosotros pe-regrinos en esta vida.

Porque ¿qué significa haber coronado a la Virgen de la Cueva Santa? Con este gesto proclamamos a la Virgen María como nuestra Reina. Y lo hacemos porque reconocemos en ella a la Madre del Rey mesiánico, Jesús, el Hijo de Dios, cuyo reino no tendrá fin (cfr. Lc 1, 33). A María la llamados Reina, porque, ella, la llena de gracia de Dios, fue uni-da íntimamente a Cristo y asociada a la obra redentora de su Hijo, y así nos lleva a la fuente de la Gracia (cfr. Jn 19, 26-27). Y, finalmen-

te, a María la pro-clamamos Reina, porque ya participa plenamente de la gloria de su Hijo en cuerpo y alma: ella ha recibido ya la co-rona merecida (cfr. 2Tm 4,8), la corona de gloria que no se marchita. María se ha convertido así en esperanza nuestra (cfr. 1Pe 5, 4).

María es la Madre de Dios y también Madre nuestra, la Madre de la Igle-sia y la Madre de todos los creyentes; ella es la buena Madre, que nos acompaña con su protección maternal a los creyentes de todos los tiempos en nuestro peregri-naje por los caminos de la historia. Generación tras ge-neración, los creyentes expe-rimentamos su protección maternal; por ello la invoca-mos con confianza, la llama-mos bendita entre todas las mujeres y la proclamamos Reina. Pero no podemos separar a María de su Hijo. Su grandeza y realeza radi-can en ser la criatura elegida

por Dios para ser Madre de su Uni-génito, el Mesías y Rey: Ella nos da y nos lleva en todo momento a Cristo.

Al proclamar Reina a la Virgen de la Cueva Santa que-remos que ella reine en nuestro corazón, en nuestras fami-

lias, en nuestras comunida-des parroquiales, en nuestra Iglesia diocesana. Y ella nos invita a volver nuestra mira-da Dios, a Jesucristo, el Re-dentor y Salvador de todos los hombres, el único que tiene palabras de vida eter-na: él es nuestra Esperanza. Acudimos a María porque ella brilla en nuestro cami-no, como signo de consue-lo y de esperanza. Todo su gozo está en darnos a Cristo, en llevarnos hasta Jesús. En el fondo no acudimos a Ma-ría si no es para encontrar en Ella a Jesús y su salvación. Quien se acerca a María que nos da a Jesús, fruto bendito de su vientre, se acerca tam-bién al Salvador. Es preciso que cada uno de los cristia-

nos demos un gran paso y por medio de Maria nos en-contremos con Jesucristo, lo conozcamos, lo acojamos en nuestra vida, lo amemos, lo sigamos y demos testimonio de Él.

Como María, abramos de par en par nuestro cora-zón a Cristo. El, verdadero Dios y verdadero hombre, es el Señor del universo y de nuestra historia. El camino de la necesaria renovación de nuestra Iglesia, de nues-tras comunidades, de nues-tras familias y de cada uno de nosotros no puede ser otro que Cristo y nuestra conversión a Él y a su Evan-gelio. La Virgen de la Cueva Santa será de verdad Reina nuestra si como ella nuestro pensar, sentir y actuar es se-gún Dios. Volvamos nuestra mirada a Aquella que nos entregó como regalo a su propio Hijo. A ella le de-cimos: Virgen de la Cueva Santa, guárdanos siempre en el camino de la fe.

Con mi afecto y bendi-ción,(*) ObispO de segOrbe-Castellón

pOr Juan Manuel gil

El Papa Francisco y su amor por la Mamá del CieloEn el tiempo en que estoy redactando estas líneas, ya llevamos dos largos meses del Ponti-ficado del Papa Francisco. A estas alturas ya he-mos conocido sin duda alguna no pocas de las predilecciones de su espiritualidad. Pero hay una señal muy clara de que entre sus predi-lecciones está el amor filial y delicadísimo a la Mamá del Cielo. El Pontífice visitó la basílica de Santa María la Mayor de Roma el sábado 4 de mayo por la tarde, donde rezó el Santo Ro-sario. Una multitud de gente le acogió en esta su segunda visita a la Santus Populi Romani. La primera fue al día siguiente de su elección a la Cátedra de Pedro, en la casa de la Mamá de Roma, como la definió el Papa.

Al llegar, el Santo Padre Francisco besó el crucifijo que le presentó el Cardenal español Santos Abril, Arcipreste de la basílica, acompa-ñado por el Cardenal Agostino Vallini, Vicario General para la diócesis de Roma. En la casa

de María, la Madre que vela desde hace siglos por el pueblo romano, el Papa renovó su en-trega a la Virgen y puso bajo su protección su pontificado. El icono de la Salus Populi Roma-ni conservado habitualmente en la capilla pau-lina estaba ubicado a un costado el altar mayor.

Recojo algunas de las frases del discurso que pronunció en aquella ocasión. “Esta tar-de nos encontramos aquí ante María. Hemos rezado bajo su guía maternal para que nos conduzca a estar cada vez más unidos a su Hijo Jesús. Le hemos traído nuestras alegrías y nuestros sufrimientos, nuestras esperanzas y dificultades, la hemos invocado con la hermo-sa advocación Salus Populi Romani, pidiendo para todos nosotros, para Roma, para todo el mundo, que nos conceda la salud. Sí, porque María nos da la salud, en nuestra salud. Pienso sobretodo en tres aspectos: nos ayuda a crecer, nos ayuda a afrontar la vida, a ser libres. Una

mamá ayuda a sus hijos a crecer, y quiere que crezcan bien, por eso los educa para que no se dejen llevar por la pereza, para que no ce-dan a una vida cómoda, que se conforma solo con tener cosas. La mamá se preocupa de que sus hijos sigan creciendo más, crezcan fuertes, capaces de asumir responsabilidades y com-promisos en la vida, de proponerse grandes ideales.

La Virgen María hace eso mismo en no-sotros: nos ayuda a crecer humanamente y en la fe, a ser fuertes, y a no ceder a la tentación de ser superficiales como hombres y como cristianos, sino a vivir con responsabilidad, a ir siempre más allá. Es nuestra Madre. Enco-mendémonos a Ella porque Ella nos protege como una buena mamá”.

Tener que terminar hoy me cuesta mu-cho… Es una delicia lo que resta de esta pre-cioas alocución papal. Gracias Santo Padre.

MOns. CasiMirO lópez llOrente *

Tribuna

4 // Hoja Parroquial

La Virgen de la Cueva Santa, Reina de Segorbe-CastellónMonserrat Escario e Isa-bel Martínez, un ma-trimonio de Altura, per-dieron todo a causa de la enfermedad. Obligados a dejar su casa, recurrieron a la Virgen de la Cueva Santa, y, después de lavar-se con agua de la Cueva, Monserrat fue sanado de la lepra y pudieron retomar su vida. Era el año 1574, y fue uno de los milagros más sonados atribuidos a la imagen recientemente encontrada por un pastor. A través de los siglos, la fe del pueblo ha encontrado muchas veces respuesta en la Blanca Paloma, y así la Virgen de la Cueva Santa ha llegado a ser reina de los corazones de muchos fieles y, también, de la Diócesis de Segorbe-Castellón.

Este fin de semana, el Obispo, mons. Casimiro López Llorente, presidirá una solemne celebración aniversario de los XXV años de la Coronación de la imagen de la Cueva San-ta. Es una ocasión de seguir confiando a la Virgen los gozos y tristezas de los ma-trimonios y familias de hoy, así como la familia diocesa-na que forman los católicos de Segorbe-Castellón.

Manolo Portolés era en 1988 el responsable del santuario. Recuerda que se tuvo que organizar un equipo de voluntarios para acondicionar la explana-da del Pozo y que la gente pudiera sentarse: “Mucho trabajo, pero fue maravi-lloso”, evoca con nostalgia. Era Año Santo Mariano, y la crónica del Boletín Ofi-cial del Obispado certifica que participaron unos diez mil fieles: “La policía de tráfico, según dicen, con-troló la llegada de 2.200 coches particulares y 49

autobuses. Ello dará idea de la multitud congregada en torno a la Virgen de la Cueva Santa”.

Al final de la jornada, el obispo José María Ca-sas declaraba: “Muchos actos solemnes he vivido en este Santuario de la Cueva Santa, pero como éste, ninguno.” Veinticinco años después, Portolés está convencido que es bueno recordarlo para “refrescar la memoria y no dejar que se apague la fe de los creyen-tes”.

Seguro que Manolita Zarzoso lo vivirá con la misma intensidad. Aquel doce de junio, junto a la Virgen, había seis camare-ras. Una de ellas era Julia Díaz de Brito, como Ca-marera Honorifica, por ser hija del matrimonio valenciano que después de la guerra del 36 ofreció la Imagen de nuestra Madre que sustituyó la desapareci-da. Otra de las camareras, elegida por sorteo, era Ma-nolita: “Al oír mi nombre en la iglesia tuve mucha emoción y alegría, y lloré”. Entonces tenía 42 años. Ahora, con 67, asegura que tiene la misma emoción de volver a recordarlo.

Desde su fe sencilla y profunda, Manolita Zar-zoso explica que cuando va a rezar a la Virgen mira lo pequeña que es la imagen, y no deja de sorprenderse cómo a pesar de su senci-llez la Cueva Santa es como “estar en el Cielo”. Los responsables del Santuario siguen afirmando lo que cuentan las crónicas desde el tiempo de Monserrat e Isabel: Este lugar es un ho-gar sencillo y abierto a los enfermos, a los que sufren de soledad, a los que bus-can, donde se encuentra consuelo y salud de cuerpo y alma. Es el Cielo.

Reportaje

G. FARRÉ. altUra.

Fotografías de la Coronación de la Virgen de la Cueva

Santa en 1988

Hoja Parroquial // 5

La Virgen de la Cueva Santa, Reina de Segorbe-CastellónOración por el XXV Aniversario

de la Coronación de la Virgen de la Cueva Santa

Te encomendamos y te consagramos,Virgen de de la Cueva Santa,las esperanzas y anhelos de este pueblo fiel.Sus familias y seres queridos para que crezcan en santidad y alegría,a todos los jóvenes para que encuentren la plenitud de su vocación,humana y cristiana,en una sociedad que cultive sin desfallecimientolos valores del espíritu.

Te encomendamos a todos los que sufren,a los pobres, a los enfermos, a los marginados;a los que fueron separados para siempre de nuestra compañía,pero permanecen presentes ante el Señor de la historiay son hijos tuyos, Virgen de la Cueva Santa, Madre de la Vida.

Haz que todos los peregrinos que caminan bajo tu presencia,sean fieles a la FE recibida,y abran de par en par su corazóna Cristo, el Redentor y la Esperanza de la humanidad.

¡Que la Santa Madre de Dios, la Blanca Paloma, nos escuchey nos ayude a imitarla en la humildad y en la fe en Cristo Resucitado!

6 // Hoja Parroquial

Segorbe-Castellón se unió a la JMJ de Brasil con el Papa FranciscoEl último día de la Jorna-da Mundial de la Juventud (JMJ) en Brasil con el Papa Francisco, el Obispo de Segorbe-Castellón, presidió una eucaristía de acción de gracias con numerosos fie-les de la Diócesis. Entre los participantes estaban Kiara y Raquel, de 19 años. En la JMJ de Madrid fueron voluntarias, y estos días ex-plican que han revivido las mismas emociones. Tam-bién han acogido las pala-bras del Papa, y sobretodo se acuerdan la de “armar lío en las parroquias”. El Obis-po, en la homilía también

animó a los jóvenes al “lío”.Las dos jóvenes de Cas-

tellón aseguran que el En-cuentro del 2011 fue una experiencia extraordinaria: “Estábamos al servicio de los peregrinos, y cuanto más dábamos más recibía-mos”. No han podido ir a Río, pero la han seguido

con mucha atención y de alguna manera sienten que también han participado de sus mismas gracias. Se-gún Mons. López Llorente, desde aquí también se ha podido experimentar la ale-gría de ser una iglesia joven, unida y comprometido en la evangelización.

En su homilía recordó tres actitudes fundamenta-les que han ido resonando en Brasil: la alegría de ser cristianos, la unión con Cristo y el Padre a través de la oración y los sacramen-tos, y la misión para com-partir con los otros jóvenes, en todos los ambientes, el amor de Dios. Mons. Ló-pez Llorente insistió en que la Iglesia está abierta y aco-gedora hacia los jóvenes, y retomando las palabras del Papa Francisco, los animó a “armar lío en sus parro-quias”, en comunión con el sacerdote y obispo, pero sin miedo a la novedad y la creatividad.

Mons. Casimiro López Llo-rente, Obispo de Segorbe-Castellón, con fecha 31 de julio ha realizado los siguien-tes nombramientos:•D. Yago Gallo Martínez,

Párroco de San Vicente Fe-rrer de Castellón.

•D. José Manuel Beltrán Albalat, Párroco de San Bartolomé de Vilanova de Alcolea.

•D. Carlos Mauricio Cas-telló Escrig, Párroco de San Bartolomé de Sierra Engar-cerán, y Cura Encargado Nuestra Señora de los Des-amparados de Los Ibarzos y Los Rosildos.

•D. Joaquín Bernado Teje-do Arnau, Párroco de San Miguel Arcángel de Caste-llón.

•D. Joaquín Zarzoso Ba-denas, Párroco del Salvador de Eslida y Cura Encargado de San Miguel Arcángel de Ahín.

•D. Luis Oliver Xuclá, Pá-rroco de Santo Tomás de Villanueva de Benicasim.

•D. Ignasi del Villar San-taella, Párroco de La Sagra-da Familia de Villavieja.

•D. Jaime Arenós Ripolles, Párroco de San Bartolomé de Alfondeguilla y Cura Encargado de Santa Ana de

Chovar.•D. Juan Bautista Miralles

Agost, Párroco Santos Jua-nes de Almenara.

•D. Vicente Pascual Esteller Costa, Cura párroco de Je-sús Obrero de Vall d’Uixó.

•D. Juan Manuel Enrich Marín, Vicario Parroquial de San Vicente Ferrer de Castellón y Encargado de la Capilla de Nuestra Señora del Pilar de Benadresa

•D. Juan Francisco Forca-da Moity, Cura Encargado de San Miguel Arcángel de Soneja y San Francisco de Villatorcas.

•D. Juan Antonio Albiol

Caballer, Adscrito a la pa-rroquia de Santa María de Castellón.

•D. Federico Caude Fe-rrandis, Arcipreste de Se-gorbe

•D. Jesús Vilar Vilar, Canó-nigo del Cabildo Catedral de Segorbe

•D. Juan Carlos Vizoso, Confesor del Seminario Mayor Mater Dei

•D. Marc Estela Pujals, Confesor del Seminario Mayor Mater Dei

•D. Piero Salvatore, Confe-sor del Seminario Diocesa-no Misionero Internacional Redemptoris Mater.

Un curso más, la Dióce-sis organiza los encuentros de Seminario Menor en Familia en vistas de la rea-pertura del Seminario Me-nor. Estas sesiones están dirigidas a chicos desde 5º de primaria hasta 2º de Bachillerato, y consisten en un fin de semana en el Mater Dei desde las 16:00 del sábado hasta las 14:00

del Domingo. El calenda-rio previsto es el siguiente: 14 y 15 Septiembre, 19 y 20 Octubre, 16 y 17 de noviembre, 14 y 15 de Di-ciembre, 11 y 12 de Ene-ro, 15 y 16 de Febrero, 15 y 16 de Marzo, 12 y 13 de Abril, los fines de semana del 3-4 y 24-25 de Mayo. Para contacto: Tlf. 626 649 154.

REDACCIÓN. beNicaSim.

Nombramientos en la Diócesis de Segorbe-Castellón

Encuentros Seminario Menor en Familia

Vida Diocesana

Hoja Parroquial // 7

Después de varias déca-das sin un órgano a la altu-ra de la dignidad de la Ba-sílica Catedral de Segorbe, el 27 de julio se bendijo e inauguró el nuevo instru-mento en una ceremonia presidida por el Obispo, mons. Casimiro López Llorente, que estuvo segui-da por un concierto inau-gural a cargo del organista Juan Manuel Lloret Fras-quet y la mezzosoprano Nadya Kashaeva. Este lo-gro ha sido posible gracias a la donación de los canó-nigos eméritos José y Jesús Blasco Aguilar, que presen-taron el proyecto al cabildo catedralicio en 2010.

El Obispo diocesano expresó su alegría por este acontecimiento que des-cribía como un evento “singular para Segorbe y para nuestra Iglesia Dioce-

sana”, ya que permite que la “sagrada Liturgia en esta S.I. Catedral se vea enri-quecida y embellecida por las notas de este nuevo ór-gano”, de modo que “viva-

mos con toda intensidad y profundidad la riqueza de la oración y de la liturgia para que de este modo nos dejemos atrapar por al ver-dad que destella a través de la belleza de la música”.

Pedro Saborit, Deán de la Catedral, así como el alcalde de la ciudad, Ra-fael Calvo, también han manifestado la alegría por esta adquisición y el agra-decimiento a los donantes. El órgano cuenta con 32 registros, dos teclados ma-nuales y un pedalero. En la Misa Crismal de este año, los asistentes ya pudie-ron advertir el sonido del instrumento que ahora se bendice e inaugura solem-nemente.

Recientemente se ha pu-blicado la obra ganadora del premio de investi-gación “María de Luna” 2012, del historiador Fran-cisco José Guerrero Carot. El volumen, que lleva por título Un cruzado contra el Liberalismo, está dedi-cado al que fue obispo de Segorbe de 1880 a 1899: Francisco de Asís Aguilar y Serrat. En la introducción, el autor se sitúa en la opi-nión de otros historiadores de que es imprescindible considerar la aportación de la Iglesia para com-prender la formación de la sociedad contemporánea. En este sentido, “la figu-ra de Aguilar se presenta como una oportunidad de reflexión (…) en un ám-bito mucho mayor que el

protagonismo que le había otorgado su condición de episcopado segorbino”.

Guerrero Carot ha te-nido que hacer frente a la escasa documentación que se ha conservado, ya que el archivo personal del obispo se perdió. Por eso afirma que “el retra-to esbozado es el de un hombre al que nunca se ha conocido”, y confiesa que “al principio de este exten-so estudio, los obstáculos parecían verdaderamente insuperables”. Con todo, gracias a la convicción que “Aguilar no tiene el reco-nocimiento que se mere-ce”, ha podido trazar los trazos de personaje que a través de su itinerario vital, con diversos escenarios, muestra una complejidad y valor remarcables.

Biografía del Obispo de Segorbe Aguilar y Serrat,premio de investigación “María de Luna” 2012

REDACCIÓN. Segorbe.

REDACCIÓN. Segorbe.

El Obispo bendice el nuevo órgano de la Catedral de Segorbe

Vida Diocesana

Gracia Blasco, colaboradora del Santuario de la Cueva Santa

dep. legal: cS 97-1960Suplemento del b.o. del obispado

edita: Obispado de Segorbe-Castellón director: Juan Manuel Gil coordinador: Josep Miquel Francés redacción: Guillem Farré.Oficina de Prensa: teléfono 964 222 819 / Fax: 964 722 018 / mcssegorbecastellon@planalfa.es / hpsegorbecastellon@hotmail.com / www.obsegorbecastellon.es

impresión y reparto: Gràfiques Color Imprés, s.l.u. Pol. ind. Fadrell, nave 75. 12005 castellón / teléfono 964 255 100

hojaparroquial

“La enfermedad y la fe de sanar con el agua de la Cueva Santa siguen siendo muy importantes”Gracia Blasco (Altura, 1975) ha vivido siempre cerca de la Cueva Santa, pero desde que en 2010 comenzó a colaborar más estrechamente con el San-tuario, ha descubierto una nueva presencia de la Vir-gen. Está encargada de la página web, de las redes sociales y del archivo foto-gráfico, aunque su impli-cación es para lo que sea en cuanto se necesite. Sabe que en la Cueva Santa las personas encuentran algo del consuelo de Dios y de la Madre.

¿Qué significado tiene este aniversario de la coro-nación de la Virgen de la Cueva Santa?Creo que es un momento tan importante como el de hace XXV años para seguir demostrando el amor y la devoción que se tiene a la Virgen de la Cueva. Enton-ces yo era muy joven, pero lo recuerdo como un día alegre y de fiesta grande. Es curioso que lo que más se me quedó en la memo-ria es que se hicieron unas camisetas grabadas, pero al

mismo tiempo es impor-tante porque puedo decir: “Tengo una camiseta de aquel día”.

Ahora, colaborando desde dentro, ¿cómo lo vives?Toda la vida he venido a visitar la Virgen con mis ve-cinos o familiares. Era algo muy curioso. Pero es ahora que veo que el Santuario es mucho más: llega a mucha más gente, están las oracio-nes hechas con dolor, las lágrimas en los ojos cuando acaba una celebración…

En definitiva, el amor y la devoción que tienen a la Virgen. Eso me ha sorpren-dido mucho, porque es lo que más veo y lo más im-portante.

¿Qué sigue diciendo y aportando la Virgen a los fieles que peregrinan ac-tualmente?La gente le pide todo a la Virgen. Aunque me siguen impresionando las ora-ciones cuando hay dolor: cogen el agua de la pared, y se hacen una friega en la

dolencia que tienen con fe de sanar. La dimensión de la enfermedad y la fe de sa-nar con el agua de la Cueva Santa siguen siendo muy importantes. A veces te cae encima una gota de agua, y oyes los fieles que dicen: “Deja, no me importa que me esté mojando”. Es que sigue habiendo la esperanza de que te purifique, te sane, te salve.

¿Cómo se da a conocer el Santuario?Hay la acogida, el plan rec-tor para acondicionar el espacio, y también estamos trabajando con las redes sociales, que han abierto mucho las posibilidades de conocerlo. También están creciendo las rutas turísticas que ofrecen visitas a la Cue-va Santa, sobretodo en in-vierno. Pueden ser trescien-tas personas por semana.

¿Qué dicen cuando visitan este lugar?Les impresiona que dentro de la cueva pueda haber una capilla y una Virgen tan pe-queña. Pero ahí está la clave: lo sencilla que es la Blanca Paloma, y la fe y devoción que transmite.

G. F. altUra.