el segundo franquismo (1959 - 1975) · los sectores más derechistas de la falange, ... las...

28
EL SEGUNDO FRANQUISMO (1959 - 1975)

Upload: ngohuong

Post on 29-Oct-2018

216 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

EL SEGUNDO FRANQUISMO (1959 - 1975)

Los años sesenta son un periodo crucial para las transformaciones del mundo actual. Algunos de estos acontecimientos tuvieron un papel importantísimo para España e influyeron directamente, tanto, en nuestra política interior, como, en la

exterior. En estos años :

● Se va consolidando la Europa Comunitaria

● Se produce el Concilio Vaticano II

● Se produce poco a poco la descolonización del 3º Mundo

● Intentos revolucionarios en Latinoamérica.

● Crisis del imperialismo americano (derrota de EE.UU en el sudeste asiático).

Durante este periodo España intenta, sin conseguirlo, integrarse plenamente en el área capitalista y en la Europa del Mercado Común. Con EE.UU la relación se mantiene, ser renuevan los pactos y acuerdos militares y económicos. Los hitos más destacados en política exterior fueron:

● Independencia de Guinea (1968)

● Continuidad del 'Pacto Ibérico' con Portugal.

● Relaciones amistosas con América Latina y con los países árabes.

● Intentos de solucionar los problemas con Gibraltar.

● Establecimiento de relaciones comerciales con la mayoría de los países socialistas e inicio de las relaciones diplomáticas con algunos de ellos.

I.- EVOLUCIÓN POLÍTICAA partir de los años 60, el régimen por las presiones internas, por la coyuntura internacional y por su propia dinámica sevió en la necesidad de adecuar su aparato de estado a las nuevas reformas económicas.

Intentó mejorar su imagen y demostrar su talante aperturista. En 1962 entraron en el gobierno ministros jóvenes: Manuel Fraga, Laureano López Rodó o Gregorio López Bravo. De este gobierno fue el primer plan de Desarrollo, la ley de Bases de la Seguridad Social, el programa de construcción de centros escolares, la Ley de Prensa de Fraga, que se vendió como un levantamiento definitivo de la censura en la prensa diaria, aunque la realidad es que la censura seguía actuando. Es cierto también, que el cine, el teatro.. experimentaron una mayor libertad.

En 1966 se aprueba la Ley Orgánica del Estado, aprobada en referendum (¿?). Con esta ley las esperanzas de liberalización y apertura se vinieron abajo, ya que se reafirma el autoritarismo de la estructura del Estado y del Gobierno. Desarrolla también esta ley, las bases del futuro político, centrado en la instauración de la monarquía. Este proceso acaba en 1969 cuando don Juan Carlos es proclamado Príncipe de España y sucesor a título de rey.

Seguía habiendo un único partido legalizado. El régimen intentaba modificar su imágen, pero en la práctica apenas evolucionó.

En 1969, se produjo otro cambio de gobierno. El estallido del caso MATESA, un caso de subvenciones a la exportación concedidas de forma fraudulenta salpicó a varios ministros. Ahora es Carrero Blanco quien recompone el gobierno: Fraga, Solís y varios ministros más salen del gobierno y se forma un gabinete compuesto exclusivamente por hombres del Opus Dei y militares. El nuevo ministros de Asuntos Exteriores, López Bravo, afronta un programa diplomático ambicioso: establecer relaciones con países del Este, firmó un acuerdo preferencial con la CEE y renovó los acuerdos con EE.UU. En política interior lo más importante fue la Ley de Educación de 1970 de Villar Palasí, que reformó el sistema educativo para acercarlo a los modelos europeos.

El debate real se paralizaba en torno a la continuidad de la dictadura, ante el ya evidente envejecimiento de Franco. Dentro del régimen se fue produciendo una ruptura entre los llamados 'aperturistas', partidarios de reformar elsistema para ir acercándolo progresivamente a un modelo parlamentario, y los sectores inmovilistas, que se organizaron en torno a Fuerza Nueva, dirigida por Blas Piñar, los sectores más derechistas de la Falange, encabezados por José Antonio Girón y Raimundo Fernández Cuesta.

El debate sobre el Estatuto de Asociaciones,es un tímido y frustrado intento de permitir lo que desde el régimen se llamaba 'contraste de pareceres', mostró hasta que punto había resistencia a los cambios.

Mientras tanto la oposición crecía. Las huelgas se multiplicaban en las grandes empresas y el ŕegimen solo sabía responder con represiń en las calles y con la aplicación indiscriminada de estados de excepción, interrogatorios y torturas por parte de la Brigada Social y enjuiciamientos en los Tribunales de Órden Púbico. Se restableció la Ley de Bandidaje y Terrorismo de 1960, que hizo que cualquier tipo de acto u oposición pasaran a la jurisdicción militar.

Con la Iglesia el distanciamiento cada vez fue mayor. En nuevo arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal, Enrique Tarancón, presidió en 1971, una Asamblea Conjunta de Obispos y Sacerdotes que emitió, una declaración exigiendo libertades políticas y sindicales, rechazando la división entre vencedores y vencidos y pidiendo disculpas por el papel que la Iglesia había tenido en la guerra civil y durante los años de la dictadura. La declaración hizo que los sectores más conservadores de la dictadura vieran en Tarancón a un enemigo, y el lema: Tarancón al paredón fue una de sus consignas.

En 1973 la situación de orden público llegó a ser explosiva. La represión se acentuó contra los dirigentes sindicales. Nació una nueva organización terrorista, el Frente Revolucionario Antifascista y Patriota, las FRAP. Miembros de las FRAP y de ETA fueron detenidos. En esta situación Franco decide formar un gobierno de 'franquistas puros' y de talante duro, como Arias Navarro, que ya había destacado por la dura represión ejercida durante su etapa en la Dirección General de Seguridad.

El objetivo era atajar las protestas de la calle e ir preparando el relevo en la Jefatura del Estado. El nuevo gobierno apenas tuvo tiempo de actuar. El 20 de diciembre de 1973 debía iniciarse el juicio contra 10 dirigentes de CC.OO, con Marcelino Camacho a la cabeza. Toda la policía estaba preparada para las manifestaciones y protestas organizadas por la oposición. Nada de eso ocurrió. A las 9,20 minutos de la mañana, Carrero Blanco fue víctima de un atentado de ETA. Este atentado fue un duro golpe para Franco, que perdió de este modo al hombre de su máxima confianza, en un momento en que su situación física era ya muy delicada.

Torcuato Fernandez Miranda, presidente en funciones parecía el hombre más idóneo para sustituirlo, pero los sectores más duros del régimen aprovecharon las dudas de Franco para incitarle a nombrar a Arias Navarro como nuevo presidente. Arias Navarro había sido el máximo responsable de la seguridad de Carrero Blanco, seguridad que había fallado. Arias Navarro formó un gobierno donde predominaron los franquistas puros, pero también incluyó a algunos ministros aperturistas, como Cabanillas.

El gobierno de Arias Navarro pronto enseñó su carácter represivopo y dió el visto bueno a la ejecución del anarquista catalán Salvador Puig Antich, en marzo de 1974. Este mismo mes el enfrentamiento con la Iglesia llegó a su punto culminante. Monseñor Añoveros, obispo de Bilbao, en una homilía aludió directamente a la personalidad distinta del País Vasco. El gobierno amenazó con expulsar al obispo y el Vaticano respondió con la amenaza de excomulgar a Franco. Así las cosas, Franco ordenó a Arias Navarro que cediera, pero la ruptura entre la Iglesia y el Estado era ya un hecho.

Algunos meses después Cabanillas y otros ministros abandonaron el gobierno por estar en desacuerdo con su línea inmovilista.

En julio de 1974 Franco fue hospitalizado y durante algunos días los poderes los tuvo el príncipe, se recuperó, pero que el final estaba cerca, era ya algo evidente.

La tensión política continuó aumentando a la vez que los atentados de ETA. La oposición iba organizándose y estableciendo contactos, que llegaban a personas vinculadas con el régimen y al propio Ejército. En el Ejército se formó la Unión Militar Democrática, que fue descubierta y desarticulada en la primavera de 1975.

Tras el verano de 1975 los hechos se precipitaron, varios miembros de ETA y del FRAP fueron juzgados y condenados a muerte, el 27 de septiembre cinco de los condenados fueron ejecutados. Las protestas internacionales no fueron escuchadas, ni el Vaticano. El régimen respondió con una gran concentración el 1 de octubre en la Plaza de Oriente.

Fanco cayó enfermo el 13 de octubre.

En el Sahara aumentaba la tensión. Hassan II amenazó con invadir el territorio español si el gobierno español no cedía el Sahara al reino marroquí. La Marcha Verde puso al ejército español en un estado de máxima tensión y obligó al príncipe, de nuevo jefe del Estado en funciones, a realizar un viaje relámpago al Sahara. El 18 de noviembre el gobierno capituló: el Acuerdo Tripartito de Madrid significó la entrega del Sahara español a Marruecos y Mauritania, violando el compromiso y mandato de la ONU,que había encargado a España la tutela del territorio hasta su independencia.

Dos días después, el 20 de noviembre, Franco murió, tras mes y medio de larga agonía. Tanto él como sus partidarios estaban convencidos de que todo quedaba 'atado y bien atado', y de que el rey Juan Carlos, continuaría aferrado a las líneas políticas del 18 de julio.

Salvador Puig

Mons. Añóveros

II.- EVOLUCIÓN SOCIO-ECONÓMICA

El Plan de EstabilizaciónFueron una serie de medidas liberalizadoras destinadas a lograr un desarrollo económico interior equilibrado y una mayor facilidad para los intercambios internacionales. Se abandona el nacionalismo económico y España se abre al capitalismo occidental y a las inversiones extranjeras. El Plan desmanteló las principales instituciones autárquicas, pero conservó sus presupuestos de base: concentración del capital bancario y fusión de éste con el industrial.

SE trataba de liberalizar la economía mediante la supresión de trabas burocráticas, la reducción de salarios y del dinero en circulación, el recorte del gasto público y la apertura de la economía española a las inversiones y al comercio internacional. El objetivo era crear las bases para un relanzamiento económico que permitiera fuertes ritmos de crecimiento, una rápida industrialización y la entrada de la economía española en la economía internacional.

Entre las medidas que se tomaron estaba la limitación del gasto presupuestario; la subida de precios de servicios públicos; la subida de los tipos de interés, la restricción de los créditos bancarios al sector privado; la liberalización de los precios protegidos; y la supresión de organismos burocráticos. Se fijó un nuevo tipo de cambio de la peseta frente al dólar: 60 pesetas/dólar, lo que significó una devaluación de hecho. SE liberalizaron las inversiones extranjeras, se permitió hasta el 50% de participación extranjera en las empresas españolas. Masivamente, llegaron capitales de las multinacionales a España sobre todo en el sector energético.

Entre 1959 y 1960 se produjo como se preveía un parón económico: caída de precios, de salarios y del consumo. Se inicia el proceso de migración buscando trabajo. Se consiguieron los objetivos marcados: reducción drástica del deficit y los capitales extranjeros llegaron de forma masiva. La economía comienza a salir a flote a partir de 1961.

La economía en los años sesenta se sitúa en una situación de despegue y se intenta encauzar la expansión económica por medio de una planificación indicativa.

Planes de Desarrollo

Nacen en 1962 y son cuatrienales y sus objetivos eran:

● Marcar las orientaciones indicativas para los sectores económicos privados.

● Establecer las norma de obligado cumplimiento para el sector público.

● Crear polos de desarrollo en las regiones más deprimidas o faltas de industrialización.

El resultado esta política fue desigual. Las inversiones públicas no siempre fueron las deseadas y la iniciativa privada apenas se ajustó a los planes. Hubo un olvido de la política agraria, lo que hizo que se acentuase las diferencias económicas entre unas regiones y otras.

Resumiendo podemos decir que los factores del crecimiento de los años sesenta fueron:

Las inversiones extranjeras, las remesas de divisas enviadas por los emigrantes españoles, las divisas llegadas del turismo.

Entre 1959 y 1960 se produjo como se preveía un parón económico: caída de precios, de salarios y del consumo. Se inicia el proceso de migración buscando trabajo. Se consiguieron los objetivos marcados: reducción drástica del deficit y los capitales extranjeros llegaron de forma masiva. La economía comienza a salir a flote a partir de 1961.

La economía en los años sesenta se sitúa en una situación de despegue y se intenta encauzar la expansión económica por medio de una planificación indicativa.

Planes de Desarrollo

Nacen en 1962 y son cuatrienales y sus objetivos eran:

● Marcar las orientaciones indicativas para los sectores económicos privados.

● Establecer las norma de obligado cumplimiento para el sector público.

● Crear polos de desarrollo en las regiones más deprimidas o faltas de industrialización.

El resultado esta política fue desigual. Las inversiones públicas no siempre fueron las deseadas y la iniciativa privada apenas se ajustó a los planes. Hubo un olvido de la política agraria, lo que hizo que se acentuasen las diferencias económicas entre unas regiones y otras.

Resumiendo podemos decir que los factores del crecimiento de los años sesenta fueron:

Las inversiones extranjeras, las remesas de divisas enviadas por los emigrantes españoles, las divisas llegadas del turismo.

El resultado fue una fuerte expansión en todos los sectores productivos, con un notable incremento del Producto Nacional Bruto y de la renta 'per cápita'. Todo esto hizo que aumentara el nivel de vida.

Este desarrollo se hizo de forma desigual. El ritmo de crecimiento de los diferentes sectores fue algo muy dispar, el desarrollo se concentró en unas zonas, dejando otras marginadas, esto dió lugar a fuertes desequilibrios regionales, que aún hoy sufrimos. Otras consecuencias fueron la degradación medioambiental, que se dio sobre todo en las zonas turísticas e industriales, por la falta de control y ordenación.

El III Plan de Desarrollo no pudo cumplir sus objetivos al verse afectada España, como el resto del mundo, por la crisis del petróleo (octubre 1973).

La apertura económica al exterior: inversión extranjera, turismo, la emigración

Con el plan de estabilización, la autarquía tocaba a su fin, se giraba hacia la economía de mercado. España ingresó en el FMI y en el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento, entró en la OECE (Organización Europea para la Cooperación Económica) en 1959.

La apertura de los años cincuenta trajo consigo el conceder más facilidades al capital extranjero, pues se estaba seguro que repercutiría de forma muy beneficiosa en el país. Con las inversiones extranjeras se consiguió inyectar una fuerte cantidad de dinero que contribuyó al desarrollo económico, y a equilibrar la balanza de pagos. . Además el capital extranjero muchos veces iba unido a nuevas técnicas, que elevaba la productividad y aumentaba la capacidad de exportación del país.

● El turismo es otro de los pilares de la nueva economía. Desde mediados de los años cinquenta, la combinación de clima, playas, bajos precios, progresiva liberalización de la economía y la ubicación propia de la P.I, cercana a los lugares emisores de turistas, hi cieron posible que nuestro país se convirtiera en una zona de llegada masiva de turistas. En 1955 vinieron a España 2,5 millones de turistas, en 1960 ya eran 6 millones los que nos visitaban. En 1975 esta cifra subía hasta los treinta millones de turistas.

Las aportaciones de este sector eran muy voluminosas, pasando de 300 millones de dólares en 1960 a 3.404 en 1975.

A pesar de los beneficios obtenidos, la política turística española no se caracterizaba por estar muy apoyada o dirigida desde el Estado. Los planes del turismo elaborados en los años cincuenta pronto quedaron desfasados, en los años 60 tampoco se hizo mucho más. No hubo una planificación adecuada de la zonas turísticas, en gran medida se desaprovechó el potencial turístico del país, excepto en lugares muy puntuales como la Costa del Sol. De hecho la Costa del Sol fue la única zona que contó con un plan de ordenación turístico, plan que apareció en 1971

Otro de los hechos claves del momento fue la emigración hacia Europa. Entre 1951 y 1961 salieron del país casi medio millón de españoles. Europa atravesaba una fuerte coyuntura económica y necesitaba mucha mano de obra.

Eran años en los que España tenía un gran Crecimiento Vegetativo, superando incluso el 12 por mil. La emigración actuó como regulador de este crecimiento interno.

La emigración con destino a Europa afectó a los sectores sociales con rentas más bajas,principalmente a varones adultos, agricultores, artesanos y obreros industriales, procedentes de las zonas rurales más subdesarrolladas de Andalucía, Castilla y Galicia. Mäs de 1.500.000 españoles dejaron España con direcció a Alemania, el 45% del total de los emigrantes. A Suiza llegaron el 25% al igual que a Francia.

La emigración ocultó las grandes limitaciones que tenía nuestra economía para crear empleo, evitaba que las tasas de paro superaran el 2%.

● Son los años de la expansió económica, fruto de : los ingresos del turismo, las divisas de los emigrantes y de la inversión extranjera que aumentó la producción. A pesar de todo nuestra balanza comercial era deficitaria.

España entra en la era del consumo de masas sin crear un sector público suficiente y riguroso, capaz de corregir los efectos de funcionamiento de la economía de mercado por la que se había optado en 1959. Por lo tanto muchos sectores muy importantes para el bienestar nacinal no estuvieron bien atendidos, como la educación, la justicia, la sanidad o el urbanismo.

Crecimiento de la industria y el sector terciario

A partir de los años cincuenta el crecimiento de la industria fue relativamente elevado, en torno a un 5% anual entre 1949 y 1959. Las industrias que más crecieron fueron la del hierro y acero, la química, de bienes de equipo, electricidad... Su crecimiento iba acompañado de un gran aumento de la importación de los bienes de equipo para las propias industrias que se desarrollaban. Difícilmente España podía soportar este ritmo.

Como hemos dicho anteriormente se tomaron nuevas medidas a partir de 1959. Desde 1960 tuvo lugar otra etapa de desarrollo y hasta 1975 la industria creció un 9% anual acumulativo. Fueron años de un gran crecimiento, acompañados de un porcentaje progresivo de personas que encontraban un puesto de trabajo en la industria.

Las migraciones interiores hicieron posible que las zonas más industrializadas tuvieran el personal suficiente. La política económica más aperturista dio posibilidades a numerosos empresarios para que aumentaran sus exportaciones. La mayoría de la producción industrial estaba en manos de pequeñas o medianas empresas. Esta dimensión condicionaba las posibilidades de la propia industria, respecto a las innovaciones tecnológicas, investigación, organización...

● Era necesario hablar de concentración de empresas y esta posibilidad comenzó a plasmarse con la reforma tributaria de 1957. El INI no paró de invertir.

El índice del producto industrial bruto pasó de 100 en 1960 a 277 en 1975 y la demanda energética pasó de 100 a 288. Espectacularmente creció la producción de energía, incluyendo la energía nuclear. De forma espectacular también creció la industria química, se desarrolló la petroquímica con importantes complejos en Puertollano y Tarragona. Muchas firmas internacionales se dedicaron a la producción de ácido sulfúrico, cloro, fosfatos, sosa... exponentes claros de una economía en pleno desarrollo. También crecieron la industria del automóvil y de aparatos electrodomésticos.

En 1950 se constituye la Seat, con licencia de la Fiat italiana y con una participación mayoritaria del iNI.

El sector servicios también sufrió un despegue, comercio, administraciones públicas.... El comercio era sobre todo tradicional de pequeñas dimensiones, las grandes superficies o supermercados a España llegaron muy tarde de mano de Galerias Preciados o el Corte Inglés.

Éxodo rural y proceso de urbanización

El éxodo rural es fruto del 'milagro español', es uno de los resultados de la industrialización. Millones de campesinos se dirigieron hacia las ciudades o lugares donde había una gran concentración industrial, como Madrid, Barcelona, País Vasco, Valencia.... De 1964 a 1982 el número de campesinos pasó de 4,3 millones a 2,2 millones. Del 50% de población activa que se ocupaba en el sector primario se pasó a un 21% en 1975.

Este éxodo rural provocó problemas humanos: dificultad para adaptarse a las nuevas condiciones de trabajo, salarios bajos, desclasamiento social... Y también dio lugar a problemas urbanísticos, ya que las ciudades carecían de las infraestructuras necesarias para la nueva población. No estaban preparadas con las suficientes viviendas, centros sanitarios, educativos... El principal de todos los problemas fue el de la vivienda, por ello se urbanizaron los terrenos próximos a los grandes centros industriales, naciendo así las ciudades dormitorio, que por la propia rapidez de su construcción generalmente estaban mal dotadas.

La mujer poco a poco se fue incorporando al trabajo, esto tuvo una gran repercusión en el ámbito familiar y en el cambio de los comportamientos y esquemas sociales: la educación de los hijos, y las tareas en el hogar poco a poco se fueron compartiendo.

El nivel cultural también fue aumentando, la ley de Villar Palasí hizo obligatoria la educación hasta los 14 años.

Inicios de la crisis económica de 1973

A finales de 1973 hay una crisis fruto de la subida imprevista de los precios del petróleo decidida por la OPEP. El precio del barril de petróleo pasó de 3 a 12 dólares en menos de seis meses.

En españa esta crisis económica coincide con una etapa de incertidumbre política a causa del fin del régimen franquista, presentó una especial gravedad y duración por diversos motivos:

● Gran dependencia energética exterior de España, el 67% de la energía consumidad eera de origen petroquímico e importada. Esto hacía que nuestra economía fuera muy vulnerable al impacto de la subida de los precios.

● Disminuyeron los turistas, esto implicó menos ingresos.

● Descenso de las exportaciones,ya que la depresión internacional frenó la demanda de artículos y productos españoles.

● Regreso desde Europa de miles de emigrantes, esto hizo que el desempleo aumentara, a la vez que disminuyeron las divisas entrantes.

La crisis afectó al sector siderúrgico, a la industria textil y a la del calzado, al sector naviero, a la construcción y a la banca. Descendió el PIB, el paro subió, aumentó la inflación, el déficit público..

El gobierno intentó retrasar las repercusión de la crisis, debido a la situación política por la que el país pasaba, con un dictador al borde de la defunción.

Se mantuvieron los precios internos de la energía subvencionando con dinero público las compras exteriores de petróleo, de esta forma los nuevos precios no se trasladaron a los consumidores. El gasto del estado se disparó. Las consecuencias fueron terribles. Una vez, muerto el dictador el nuevo gobierno se enfrentó a muchos problemas, entre ellos, se encontró con una economía rota y casi en quiebra.

OPOSICIÓN POLÍTICA AL RÉGIMEN

Desde finales de los cincuenta comenzaron a aparecer síntomas de agitación. Se inicia un proceso de distanciamiento de la Iglesia. Muchos sectores de la jerarquía comenzaban a denunciar la situación de los trabajadores y a insistir más en la labor de apostolado social y ayuda a los necesitados, que en reforzar los viejos valores del nacional – catolicismo.

El primado Pla y Deniel respondió con fuerza, defendiendo el derecho de la Iglesia a organizar sus propias asociaciones, cuando desde el gobierno se acusó a las asociaciones católicas de base de 'infiltración marxista' por defender determinados colectivos obreros.

La llegada de Juan XXIII y el Concilio Vaticano II hizo que el régimen y la Iglesia se distanciaran aún más, llegando casi a la ruptura en 1970.

comenzaron a surgir tensiones nacionalistas. En 1959 nace ETA (Euskadi Ta Askatasuna, Patria y libertad), como una escisión del PNV y que va a optar por la lucha armada como táctica para lograr la liberación nacional vasca. En 1960, 330 curas vascos firman una carta protestando por la represión y exigiendo libertades públicas. Ese mismo año son detenidos algunos catalanistas, entre ellos Jordi Puyol

Desde 1961 los conflictos laborales también se multiplicaron. Hubo numerosas huelgas sobre todo en los sectores punta del crecimiento industrial, como la minería, siderometalúrgica y la construcción. En un principio estas huelgas se hacían por motivos laborales, más tarde la solidaridad, la denuncia de la falta de libertades sindicales y políticas eran sus motivos.

Ante esta situación, el ministro de Trabajo, José Solis, permitió cierto margen de negociación colectiva directa y la libre elección de jurados de empresa y enlaces sindicales.. Esta posibilidad fue aprovechada a partir de 1963 por los miembros de CC.OO, sindicato clandestino de predominio comunista, para infiltrarse completamente en los sindicatos verticales. Los partidos políticos poco a poco fueron reconstruyéndose.

En 1962, semanas después de que España pidiera entablar negociaciones de adhesión a la CEE, 118 españoles se reunían en Munich, en el marco del cuarto Congreso del Movimiento Europeo, y aprobaban una declaración recomendando la no admisión de España en tnato no se restauraran las libertades. Fue lo que se denominó 'el contubernio de Munich'. Había dirigentes liberales, monárquicos, demócratas – cristianos. Entre ellos se encontraban, Alvarez de Miranda, Iñigo Cavero, Satrústegui.. El régimen actuó descalificando la declaración y se multiplicaron las detenciones de dirigentes de la oposición de todo signo. En 1963 se detuvo, torturó y ejecutó al dirigente comunista Julián Grimau, en medio de un gran escándalo internacional. Tierno Galván, López Aranguren y Agustín García Calvo fueron expulsados de sus cátedras en la Universidad.

La oposición crecía en fábricas y universidades. Fue muy importante en el País Vasco, donde las acciones de ETA eran respondidas con una gran represión policial, generando alrededor de la banda armada un apoyo popular que fue radicalizando el clima.

En 1968 se cerró la Facultad de Ciencias Políticas de Madrid, al año siguiente se cerró la Unversidad de Barcelona. En 1969, en enero, un estudiante, Enrique Ruano, murió tras ser detenido por la policía. La década va a terminar en medio de una gran agitación, con el llamado proceso de Burgos, en diciembre de 1970, contra dieciséis miembros de ETA, nuevo de ellos son condenados a muerte. Las protestas en la calle, el secuestro de ETA del cónsul alemán en Bilbao, con la amenaza de matarle si se ejecutaban las condenas, y la presión internacional hicieron claudicar a Franco, que conmutó las penas por cadena perpetua.

Los partidos políticos todos estaban muy activos, pero su falta de organización y coordinación hizo que su eficacia fuera menor. Socialdemócratas, democrata-cristianos, socialistas, comunistas, nacionalistas... todos estuvieron actuando y organizándose y esperando de forma ansiosa la muerte del dictador.

En 1974 se forma la Junta Democrática, liderada por Santiago Carrillo que integró al partido socialista popular de Tierno Galván, a CC.OO y a otros partidos minoritarios. Podo después se crea la plataforma para la convergencia democrática, liderada por el PSOE, en ella se integra el PNV, algunos partidos regionalistas, la Izquierda Democrática y la Unión Social Demócrata del antiguo falangista Dionisio Ridruejo. Las reivindicaciones de la plataforma y de la junta democrática eran las mismas, la diferencia es que la plataforma era más federalista y sus reivindicaciones nacionalistas eran más profundas. Al final ambas se unieron. Aunque no dio tiempo a nada porque Franco murió.

El espíritu de consenso va a presidir la siguiente etapa de la historia de España, prueba de ellos son los 'Pactos de la Moncloa' o la Constitución de 1978.

La transición va a estar marcada por el diálogo, el consenso, el respeto y las ganas de construir un futuro democrático y en unidad.