el barrero nº

AÑO 10Nº 50ABRIL 2012ESPIEL

EJEMPLAR GRATUITO

¡¡ Feliz Romería 2012 !!

Nº 50• ABRIL 2012

SumarioEditorialCartas al DirectorOpiniónCulturaObituarioNoticiasPersonajesEspecial BarreroRecuerdos Entrañables

Registro Civil

EditaPepe Ortiz

SubvencionaExcmo. Ayuntamiento de Espiel

PublicidadAvda. Ollerías, 49 - 1ºB

Telfs.: 957 48 36 69957 48 39 74

[email protected]

ImprimeDigital Asus

C/ Sor Ángela de la Cruz, 3Telf.: 957 27 02 00

[email protected]

Depósito LegalCO - 48 / 1996

Colaboradores

José Antonio Fernández RomeroJuan José Márquez

Antonio Giménez AzconaJuan Manuel López Márquez

Rafael de la Torre Alcalde (Cádiz)Juan Pedro Barbero

Sergio Cortés Pilar Bejarano Barbero

Pepe OrtizEstrella Doñas

Antonio Gómez de La TorreAntonio Bejarano MartínGloria Caballero García

Manuel Ángel Barbero AbrilInmaculada Manfredi Mayoral

José Manuel Ruiz SánchezMaripili del Rey Bejarano

Mª Luisa Pérez PinedaIsabel Ruiz Mañate

Ana Morales RamírezFrancisco Fidel Nuñez Sedano

Anabel Reyes OrtegaRafael Naranjo Frías

Grupo Espeleológico G-40María Barbero Ruiz

Antonio Vizuete RodriguezNoé Murillo

Rafael Caballero Ruiz-MayaJose Soriano Jiménez

María del Pilar GiménezMati Pérez TenaFrancisco RuizManuela Fiñana

Charito Arévalo de la TorreJose Manuel Cruz DueñasÁngel Nevado Mansilla

Jose María Martín GarcíaCarlos LópezAna Serrano

Rafael Caballero GonzálezManuel Reyes Calvo

Daniel Luque RamirezLola Frías

María Gavilán MartinezAntonia Gómez

Antonio Fuentes CejudoElena García

Manuel Caballero SánchezPaco Caro

Rafael MartinezAlfonso Blázquez Castellano

TELÉFONOS DE EMERGENCIA

POLICÍA LOCAL617 459 845 / 957 119 901

GUARDIA CIVIL957 363 021

MÉDICOS EMERGENCIA957 365 901

PROTECCIÓN CIVIL627 527 881

El Barrero no se hace responsable de los contenidos firmados por cada autor ni tiene que compartirlos. Queda autorizada la reproducción total o parcial, citando su procedencia.

Lectura en Internet de esta revista:http://penarroyalerumeur.blogspot.com

La Revista “El Barrero” se reserva el derecho de comprimir cualquier colaboración por razones de espacio. Recordemos que las mismas no deben superar dos folios a doble espacio o uno.AVISO

• NACIDOSAlma Fernández RamirezAroa Cortés AlcaldeFrancisco Rodriguez CaleroCarlos Sánchez CruzMateo Ramirez MoraHugo Romera SaldarriagaSalma Verdejo ReffakAitana Mateo TrigueroSaray Zárate ArizaAlejandro Zárate ArizaCarlos Gómez PereaÁlvaro Castetellano Ortiz (Huelva)• DEFUNCIONESAntonio Azcona VerdejoFidela Rodriguez GarcíaRafael de los Santos López RodriguezMontaña Guerrero Cobaleda (Madrid)Natalio Sánchez GonzálezAna Gómez RiveraJosefa Antonia Gil GarcíaRafael del Río SánchezAgustín Sinoga Romero (Hinojosa del Duque)Luciano Martín MuñozAna Cobos TenaJulia del Rey RiveraJulia del Rey VillanuevaPablo Crespo de la FuenteNatividad Ruiz CrespoMaría Dolores Arévalo BarberoNicolás Sánchez GarcíaMaría Jesús Rodriguez PereaAntonio Fuentes Molina (Barcelona)Eduardo Castillejo AgredanoRafaela Muñoz del ReyAntonio Ruiz Fernández (Bélgica)

07-12-201110-12-201117-01-201224-01-201226-01-201206-02-201221-02-201209-03-201226-03-201226-03-201210-04-201223-04-2012

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No se publicarán artículos bajo pseudónimos que la Dirección de la Revista no conozca su identidad.

28-08-201130-12-201105-01-201207-01-201214-01-201215-01-201206-02-201208-02-201215-02-201223-02-201227-02-201229-02-201202-03-201209-03-201210-03-201215-03-201224-03-201225-03-201202-04-201206-04-201207-04-201213-04-2012

El nuevo nº de cuenta es (Caja Sur):0237 - 0158 - 50 - 9151341854

• FE DE ERRATASEn la anterior revista,nº 49, apareció en MATRIMONIOS :Francisco Claudio Gómez Gómez con Rocío Rodríguez Bejarano casados el 30-11-2011 siendo lo correcto el 30-07-2011.

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Nº 50 • ABRIL 2012Editorial

Parece que fue ayer cuan-

do se inició la andadura de

esta Revista, que ha venido

a significar un elemento

más de nuestra vida social

y que, en muchos casos,

ha servido como ventana

abierta a nuestro presente y, sobre todo, a nuestro pa-

sado, ese pasado del que todos formamos parte, de una

u otra forma.

El mismo título de “El Barrero” así lo indica; como

todos deberíamos de saber, El Barrero es el nombre

popular que le dimos los espeleños a la zona donde

está ubicado nuestro paseo Ramón y Cajal, sitio de

encuentro, de intercambios, de idas, de venidas, de

paseos, de conversaciones, de convivencias, sitio de

….. espeleños y espeleñas, el sitio por excelencia, di-

ría yo; en aquel barrero nos encontrábamos y con este

Barrero lo recordamos. No es fácil mantener el interés

a lo largo de los años, pero creo que se ha conseguido

en todos y cada uno de los números que ésta nuestra

revista ha tenido. Por ello nos tenemos que felicitar

todos, cada uno desde el lugar que haya elegido, como

lector, como anunciante, como organizador, o como

colaborador con artículos o noticias. A veces, dema-

siadas veces, pensamos que no somos capaces de ha-

cer cosas, pero lo único que hace falta es poner manos

a la obra, crear, como en su día se hizo y aquí está ese

resultado final llamado El Barrero. Aquí hemos hecho

converger el pasado, el presente y, ojalá que el futuro

de nuestro Espiel.

Nada se hace sin esfuerzo, sin imaginación, sin

implicación y con el ánimo de solventar los problemas

que se vayan planteando; esos han sido y esos deberán

ser los pilares que jalonen el camino hacia nuestro Ba-

rrero. Que se debe de mejorar cierto; que no debemos

de repetir errores, necesario; si somos capaces de en-

tender esto, el futuro será más cierto y brillante.

Allí nos encontrábamos, aquí nos seguiremos en-

contrando; encuentro desde las letras y el respeto, en-

cuentro de la experiencia del pasado, la realidad del

presente y la ilusión y esperanza del futuro; palabras

experiencia e ilusión mezclan perfectamente en esta

coctelera que debe de seguir siendo El Barrero: Tu si-

tio, nuestro sitio, el sitio de todos.

Jose Antonio Fernández Romero

Editorial

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Cartas al DirectorNº 50 • ABRIL 2012

A LA FAMILIA DE ÁNGEL MARTINEZMi nombre es Isabel RUIZ MAÑETE, soy hija de An-tonio RUIZ FERNÁNDEZ natural de Espiel y conoci-do en el pueblo como Antonio “el Monaguillo”.En el 1946 mi padre se fue con su madre y su hermana Anita a trabajar a Asturias.

Allí conoció a mi madre, viuda con una hija de 9 años.Se casaron en noviembre del 1947 y nací en septiembre del 1948.

En marzo del 1953 nos ve-

nimos a Bélgica donde mi madre tenia dos hermanas y un hermano llegados con la colonia de los “Niños de la guerra” a finales del 1939.Los años transcurren y con ellos la nostalgia crece...Hace unos meses entré en Internet buscando informes sobre Espiel, pueblo tan añorado por mi padre.

Descubrí la existencia de la Revista EL BARRERO y en particular el relato de Doña Carmen MARTINEZ ALCALDE (n°46-diciembre 2010) donde habla de su

hermano Angel y de mi padre Antonio

“el Monaguillo”.A la lectura de este relato se me cayeron lágrimas de emoción recordando como si fuera ayer aquellas cartas que llegaban de Rusia. Me acordé de unas fotos que Angel MARTINEZ no había enviado y me puse a buscar en los documentos guardados por mi padre.Desde muy joven fui consciente de lo que mi padre hacía y en particular de las razones que motivaban su lucha.No tengo palabras para expresar lo que siento por el agradecimiento de Doña Carmen MARTINEZ AL-CALDE.¡Que feliz habría sido mi padre a la lectura de ese artícu-lo! pero aunque en vida con 93 años bien cumplidos,su mente ya no le acompaña. (Falleció 13-04-2012)En homenaje a la memoria de Angel MARTINEZ, y esperando que sus hijos y hermana lo puedan ver, en-vio a la Revista “El BARRERO” copia del final de una de las cartas que le escribió a mi padre así como una foto que nos dedicaba y donde aparece junto a su espo-sa Amparo y sus dos hijos Pepe y Angelin.

Isabel RUIZ MAÑETE

GLORIA CABALLERO GARCÍA

C/ Ramón y Cajal Nº3 - 14220 Espiel (Córdoba)Tlf.: 957 36 30 87

Expendeduría Nº3Papelería, artículos de regalo, informática y artículos del fumador.

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Nº 50 • ABRIL 2012Cartas al Director

CARTA ABIERTA A INMACULADAMANFREDI

Querida Inmaculada: Quiero felicitarte y darte la en-horabuena por el acuerdo que has tenido de publicar la poesia del ROMANCILLO DE LA NIÑA GUAPA escrita por tu padre cuando naciste.Es tan tierna ,tan bonita que me conmovió y me emocionó, solo un pa-

dre o una madre puede sentir de esa manera,es precio-sa.Felicidades querida Inmaculada te recuerdo cuando eras niña que eras amiga de mi hermana Blanquita. Un abrazo.

Maria Luisa Pérez Pineda

DIRECTOR DE LA REVISTA ELBARRERO DE ESPIEL

Quiero tener un recuerdo cariñoso para nuestra paisa-na DOLORES SÁNCHEZ SINOGA, que murió hace unos meses. Ella escribió muchas veces en nuestra re-vista haciendole poesías a Nuestra Patrona la Virgen de Estrella, que no faltaban en ninguna edición de la revista, así como algún verso y el recuerdo de su pue-

blo de Espiel y el de sus paisanos y lo hacía con mu-cho cariño. Recordémosla de la misma manera y de-seemos que la Virgen la haya acogido bajo su manto y que Dios la tenga en su gloria. DESCANSE EN PAZ.

Ma Luisa Pérez Pineda

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¡ Feliz Romería !

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Nº 50 • ABRIL 2012Cartas al Director

MI SINCERA RESPUESTA

EL PUENTE MONCARRA

Quiero responder al último escrito del cuál me sien-to aludida.-mentirosa , como se me acusa ... NO yo vivo aquí y quiero que mis vecinos entiendan lo si-guiente: Por mi parte no hay ni hubo mala fe, ni mala intención,sería de NECIOS utilizar a todo un pueblo y muchos amigos , con sus firmas, algo tan personal, para tan solo mentir. - El pedir ayuda de este modo,no es ilegal, si lo es re-tirar algunas plantillas de diferentes comercios, hecho que con impunidad ejecutaron en su momento.- Aclarados algunos puntos o dudas, quiero decir que en próximas ediciones de EL BARRERO, no voy a entrar ni a trapejos ni capotes, se diga , escriba, se lleve o traiga referente a este tema y que venga de ELLOS, tengo información fechada para aquel que quiera saber, desde su primer ingreso. “En la edad que tengo, (era su cantinela), nosotros queremos morirnos en nuestra casa, que para eso nos la hemos ganado con mucho trabajo”. Las facultades de ambos eran lúcidas. Hoy como a mi, se lo decían a muchas perso-nas, algunas hoy no les interesa ponerse de mi lado. - Despreocupada de mis padres NUNCA, evitar en-frentamientos SI .- Pero puestos a reproches, él vive a 10 minutos a pie y no iba a verla .- La denuncia, no es tal, es una petición que por ley, hay que derivar al USUFRUCTARIO. En una pri-mera citación según el entorno familiar ya no estaba bien y así lo alegaron, el acta de conciliación se lleva a cabo para evitar el deterioro de mi propiedad al 50%

con Fca. Fiñana Ramos. Pues tan solo hacían uso de la casa un mes al año, sin mas preocupaciones de todo lo que conlleva una casa cerrada, por lo tanto no hay denuncia pertinente a tal caso mi madre decidió irse a Barcelona y yo se lo respeté.- Un acto de conciliación es entre otros menesteres el evitar unas desagradables visitas al juzgado.- He de decir que esta familia no se ofende , ofende sin mesura.-El diálogo es imposible ya de costumbre y educación errónea, ni entre ellos lo llevan bien, todo por prepo-tencia singular ..yo..yo..-Responde a su pregunta de ¿ por algo será?. Ya le llegó la hora de descansar con su marido -10, 09 2011, la llaman SEÑORA MADRE , tiempo atrás trato despectivo e insultante.-La valoración fue correcta por los distintos departa-mentos sanitarios ,eso no lo pongo en duda .Yo quería lo que siempre pidió, yo lo sabía, yo lo intenté, ellos y aquellos NO .-De nuevo pido disculpas a todo el pueblo de Espiel, si con este intercambio de dires y diretes los he mo-lestado. Un amigo , un vecino , esa es la familia en numerosas ocasiones y para mi Espiel es mi gran familia muchas gracias por vuestro tiempo y atención GRACIAS FAMILIA .

Fdo. Manuela Fiñana

Querido amigo Pepe: Hace unos días he visto fotografías del Puente Mo-carra y realmente es un extraordinario vestigio histó-rico que se debería conservar a toda costa.Parece ser que ese puente formaba parte de una vía secundaria romana que servía como comunicación y transporte de los minerales procedentes de las zonas mineras de Villaviciosa, Espiel y Villanueva del Rey hacia la vía Mellaria, Antonino XI (once), hacia Eme-rita Augusta. También servía como medio de comuni-cación hacia Corduba, pasando por el Vacar y Cerro Muriano con el mismo objeto de transporte de mine-rales hacia el Guadalquivir y hacia la costa.El estado actual del puente es lamentable. Aunque no fuese su origen el que te comento, podría ser, tiene unas características únicas y merecería la pena reha-bilitarlo para formar parte del patrimonio de Espiel. Aunque hace muchísimo tiempo que no he visto la

zona creo recordar la existencia de algunos bloques de piedra en el arroyo que argumentarían la hipótesis romana, no obstante, para eso están los expertos.Somos los espeleños muy amantes de nuestras cosas y creo que si se hiciese un suscripción popular para la rehabilitación y conservación del puente y de su entorno, tendría éxito. Hombre y con alguna ayuda importante del Ayuntamiento, que no sé yo cómo se podría encauzar este tema. Si se llevase la empresa adelante yo me apunto con la cantidad que razonable-mente pueda.Supongo que el estudio por los expertos y la obra en sí tendrá un coste elevado si se hace con las garantías de monumento que no pierda su esencia , no obstante, si lleva el puente 2000 años ahí, por esperar un poco, no creo que se caiga, pero no mucho…Un fuerte abrazo para tí y mis paisanos. Pepe Soriano

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ESCRIBIR DE MAYORESHace años trabajé en Vitalia-Espiel guardo buenos re-cuerdos gracias a todo el personal que allí trabajaba entonces.También recuerdo que hubo un residente (Diego) que escribía muy bien, sobre todo poesía, hago alusión a él al leer los escritos de algunos residentes como el señor Segovia ¿Es posible que algo se guardara y lo pudiésemos editar para leerlo?.

Eran escritos muy buenos. Mis felicitaciones a los re-sidentes que aún escriben todo lo que pueden, como el señor Segovia pues es el que más se prodiga en sus escritos a la revista EL BARRERO. Gracias.

Manoli Fiñana.

UN VERANO MÁSUn año más quiero felicitar a mis “compis” de pisci-na, tanto a las de la mañana como a las de tarde, a sus correspondientes responsables de la actividad reali-zada, como estos dos años anteriores no he podido disfrutar de su compañía (fuerzas mayores, o maldita crisis), pero no por ello me olvido de ellas, por su simpatía ,chascarrillos y que os cuento, si todos las conocemos, pero esta ocasión la quiero aprovechar para ofrecerles una receta gastronómica, para que sus fuerzas y voluntad no flaqueen, demostrarles que las quiero mucho y las he echado de menos.

Allá va mi receta: − Aperitivo: altramuces (xoxos ) + agua a la tempe-ratura de la mañana (9:00 h.)

− Primer plato: patatas en caldo (todas a remojo).− Segundo plato: bacalao al pil-pil (saltitos en el agua).− Postre: higos, brevas o cualquier fruta de tempora-da (melocotones, albarillos, sandia o melón, tetas, te-tillas, barriguitas y culones ) Todo regado por el gaz-nate con sorbos de agua de la piscina, con abundante cloro, para una buena digestión.Mujeres coraje, espero que os guste y nos de fuerzas para el próximo verano. Con esto os recuerdo que no olvidéis que os quiero mucho. Muchos besos, fuerza y a comer

Manoli Fiñana

OpiniónNº 50 • ABRIL 2012

CARNAVAL A veces, los recuerdos se conservan mejor en la dis-tancia, lejos de donde se produjeron. La ausencia de otros similares, de un refresco que los desfigure en la repetición, los hace más inmaculados. De no ser por las fotografías que llenan nuestros álbumes y nuestros muebles, ¿no recordaríamos mejor la imagen del ami-go que la nuestra propia? Estaba ilusionado por asistir a los carnavales de este 2012, tras treinta y siete años. Habíamos quedado con Michael y Pilar para encontrarnos en el Andalucía, y ya me adelantaron algo de lo que, después, me acaba-ría sorprendiendo. Llevé papel y bolígrafo, dispuesto a empaparme de pasado e imaginando ilusamente que éste haría, por sí solo, gran parte del trabajo. Pero ni siquiera los utilicé, y sobra decir que fue toda una des-ilusión. Después llegó la reflexión de que cada cosa tiene su momento, de que los carnavales de entonces eran de aquellos años y que son otros distintos los que pertenecen al presente. Tan sencillo y, sin embargo,

tan difícil de aceptar. Hoy, en un tren de cercanías que me lleva a Barcelo-na, comienzo las letras del artículo que no fui capaz ni de esbozar en la caseta municipal, porque estan-do tan cerca, estaba demasiado alejado de aquellos recuerdos. Sin embargo, asumiendo cierto grado de subjetividad y el paso de los años, una vez más sumé a los míos los de las personas que “siempre están ahí”, quiero decir, aquellas con las que siempre puedo contar: mis amigos de juventud. Mi gratitud a Luís, a Carmen, a Rafael, a Estrella, a José Antonio, a Mi-chael y a Pilar, parte de ese “grupo entrañable” que cada uno suele tener archivado como propio en sus adentros. Aquel mes purificador de lluvias y fríos era febrero. El febrero de las madrugadoras violetas y los blancos almendros, el “adolescente”, el mes que preludia las primaveras y los cumpleaños… sí, aquel era también el febrero de los carnavales prohibidos. Así pues, casi

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todo parecía normal en nuestro entorno: los mineros, las casas blancas y las cercas escarchadas, los gallos de la mañana, los campesinos con sus mulos, sus bu-rros y algún que otro presumido percherón, las hu-meantes brumas de estiércol, el mercado de abastos y las escuelas, las mujeres con sus perpetuos quehace-res y los bares de puertas abiertas, el puesto de jerin-gos esperando el próximo saure de Autotransportes López... Aquella debía ser la normalidad espeleña de los febreros en los años sesenta, porque en aquellos tiempos, como en tantos otros a lo largo de la historia, el carnaval también estaba prohibido. ¿Y por qué? La respuesta desde el punto de vista clerical podría ser: ¿Es de recibo que un tiempo vinculado a la cuaresma religiosa tenga un carácter tan festivo? ¿Tan lúdico y pagano? Y desde la oficialidad civil: ¿Acaso la imper-sonalidad no incita al delito al verse estimulada por una cierta impunidad? Como es normal, el sentido de la respuesta lo da la época. Unas veces, cara; otras, cruz. En aquellos años tocaban bastos para los atre-vidos, para los que se las ingeniaban intentando ser máscaras por un día, por una tarde o simplemente por una hora, para los que osaban continuar con una tra-dición proscrita. La primera imagen que guardo es la de una persona vestida como un fantoche, con una máscara grotesca y aterradora, que se me acercaba gritando: “¡Pero qué torpe, qué torpe que no me conoces!”. Sí, ese era mi primer bosquejo de una “máscara”: el del miedo. Se-guramente no sería su intención asustarme, y tal vez no llegara a saberlo por más que yo corriera hacia las faldas de mi madre para hundir allí la cabeza, cerrar los ojos y resguardarme así del peligro. Tampoco yo supe nunca quién se escondía tras aquel disfraz des-aliñado, entre otras razones porque ni sabría que lo era; debí de creerlo un sacamantecas, uno de aquellos seres malvados que jamás vimos pero que nos eran tan familiares por aquellos tiempos.Durante los siguientes años, en los mismos febreros, las imágenes que me aparecen son similares a aquella primera. Fantoches que furtivamente rondan las ca-lles, saltando de puerta en puerta, tal vez corriendo delante del municipal que cumple órdenes, y cruzan-do las plazas como fantasmas que no pueden exponer-se a una claridad permanente. Visten calzones viejos de pana, botas de goma alta, faldas largas desgasta-das, abrigos raídos, camisas antiguas, jerséis de lana apolillada, sombreros de paja y escobas de bruja… cualquier prenda que apenas sirva para otra cosa que no sea transformarse. Fantasmas que, ya con el miedo

abatido por el razonamiento, se agradecen un montón. —¿Y dices que está en el calabozo? —Allí lo tienen. Como lo cogieron vestido de más-cara… —Pues ya pueden ir soltándolo si quieren que ten-gamos pan… ¡o es que no saben que es el panadero! Se cuenta que, en tiempos, el carnaval era la posi-bilidad que ciertos amantes tenían para pasear juntos por las calles, para cogerse de la mano y mirarse sin ser vistos, para hacer lo que no podían a cara des-cubierta. Aunque la razón mayoritaria no sería otra que divertirse con la metamorfosis y el anonimato. ¡Cuántas veces no habremos querido desaparecer! Hacernos invisibles como el aire quieto, o transpa-rentes como la luz del sol, ser otro, no ser nadie… tal vez volar como un pájaro, o subir como el humo por encima de los tejados y los campanarios. Ahora, con otro retorno a un pasado de tolerancia, el disfraz se ha hecho más sofisticado, y podemos ser princesa, cowboy, marioneta, vampiro, geisha, cocodrilo o ave fénix… casi cualquier cosa que podamos imaginar. Me consta que nunca faltó ingenio y maña en Espiel a la hora de diseñar disfraces, y sin ir más lejos, las jóvenes y numeradas “Tortugas” de este último sába-do de piñata representaron una buena muestra de ello. Pero en los años sesenta, en las calles de nuestro pue-blo, la tradición cercana los abocaba a ser “máscara fantoche”, a tener la apariencia de los judas aunque no llevaran rellenos de paja y serrín. Cosa suficiente, sin embargo, para que los atrevidos supieran conver-tir la luz en las apetecidas sombras y las tinieblas del fetichismo en los albores de la ilusión. En definitiva, de fantoches, sólo las apariencias. —Ya no creo que se hagan las caretas como antes —me dice Estrella. —Las recortaban de cartón duro, ¿no? —pregunto. —¡Qué va! Las buenas, con papel de periódico mojado en agua con harina. ¡Vaya!, un pegamento ca-sero. —Ahora que lo dices… —Se cogía un globo inflado como molde y se le di-bujaban los agujeros. Luego, con cuidado de no tapar los orificios, se iban poniendo capas y capas de papel hasta que la vieras consistente, y cuando estaba seca, se pintaba. De color carne, normalmente. ¿Pero sabes lo mejor de estas caretas? —Que son baratas. —Que no se suda con ellas —rectifica Carmen—. Y se le podían poner verrugas si querías, para hacerla más fachosa.

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Porque Carmen es toda una experta en diseñar y ha-cer disfraces de carnaval. Su ingenio convierte a una lata en un lujoso florero, y a un retal de vieja tela en el que fuera nutrido uniforme del dictador Pinochet. Y si de ingenio hablamos, no digamos del de las murgas. Murgas, chirigotas, comparsas… absolutos sinónimos para los que no somos entendidos en la materia. Nos vendrá entonces a la memoria el nombre de un grandísimo conductor de murgas: César Bravo, “El Gasógeno”. O los nombres de los autores de mu-chas letras: Chacarrá, María Muñoz, su marido Paco el de Emilio, Virginia… —¿Virginia? —¿No te acuerdas de Virginia? —me pregunta Rafael, algo sorprendido por el olvido— Sí, hombre, que vivía al final de las casas baratas… Lo que pasa es que, en realidad, Virginia era una máscara muy fa-mosa, que hacía unos movimientos extraños y muy ágiles... muy personales. ¿No te acuerdas, todavía? La murga de “Los maletillas”, la de “Los betune-ros”…Ya tenemos lavadoray máquina de coser,la “Turmi” no la tenemos,me la tienes que comprar… Con sus pitos de caña y papel de fumar, sus platillos hechos de dos chapas y una cuerda y, acaso, poco más que un tambor como instrumento real… todo un arte que recorría la calle del Arroyo, la Coronel Jiménez Ruiz, empezando por la plaza donde estaba el bar de Ángel Maeras y llegando hasta la que albergaba la tienda de Olimpia, el bar de Enrique Redondo y, a to-car, la tienda de Paco Cabanillas. Allí giraba por la de San Sebastián, la calle por excelencia, con sus tien-das, sus bares y sus tres barberías (Vargas, Angelete y los hermanos Néstor), con el edificio de Correos y el Monte de Piedad y Caja de Ahorros de Córdoba. Luego, obviando el callejón que la une a Estrella, desembocaba en la otra arteria: Ramón y Cajal. Ese es el recorrido de mi memoria para aquella incansa-ble murga que, con sus animadas notas de sátira y color, repartía alegrías por donde pasaba. Pero detrás de lo visible, de lo que sería efímero en pocas horas, había todo un trabajo de dedicación y sacrificio. Es verdad que “sarna con gusto no pica”, pero si falla la ilusión el refrán suele irse a pique. —¿Y cuánto creéis que se ensayaba? —Unos dos o tres meses. Dos días a la semana y dos o tres horas por día— Rafael coge otro caracoli-

llo, antes de seguir— Creo que había un local con una puerta de chapa verde… me parece que al principio del Risquillo. —¿Cerca de aquella academia que pusieron un par de años? Por la herrería Reyes… —Por donde están las casas nuevas, las de la Urba-nización la Molina —precisa Luis. —Así que dos o tres meses. —¿Tú quieres precisar el tiempo exacto? —Luis también coge otro caracolillo— Pues yo te lo voy a decir: el tiempo que tardaban en aprendérselo. Desde que no se sabían nada, hasta que se lo sabían todo. ¡Eso es lo que necesitan! Rubén se ríe, porque la ocurrencia va acompañada del tono que le dan los que saben contar chistes. Pero la constatación de mi ignorancia carnavalesca la completa por teléfono José Antonio. —¿Cómo fue con la murga de “Ya viene doña Concha”? —Lo nuestro era un cuarteto. Asun, Juanele y An-tonio, de niñas, y yo de doña Concha. —Cuarteto… ¿porque erais cuatro? —Y porque se trata de parodiar.El público y las niñas cantamos este estribillo:¡Qué alegría, qué alboroto!¡Otro Perrito piloto! y entonces, Antonio, el hijo del “Perrito”, salía con un volante en la mano. Chirigotas, comparsas, coros, cuartetos… diferen-ciados por si sus letras son humorísticas, reivindicati-vas o sociales, si se hace o no parodia, por el tipo de instrumentos y el número de sus componentes… en fin, ¡que son otros tiempos! —Sí, es verdad, Antonio. Antes les decíamos a to-das “murgas”, pero desde que los carnavales de Cádiz se han hecho tan famosos, la cosa cambia —me co-menta, también por teléfono, Manuel Ángel— Yo le llamo un “cadicismo”. Y tenemos dos agrupaciones muy buenas: la de “El Cerrete” y la del “Lucky”. Entonces los imagino haciendo sus recorridos; bajando desde el Cerrete por Juana Martín, atrave-sando la calle Alta, la plazoleta de la Fuente… y así continúo hasta dejarlos de nuevo en el Paseo… pero, ¿acierto? Laura iba de mecánico con el grupo de sus amigos. A la caseta, el gran centro de actividad lúdica de las últimas décadas. De nuevo aparece la reflexión del paso del tiempo porque las formas externas han cam-biado. Pero es normal y eso es la evolución. Aunque

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ADELANTEQuiero manifestar públi-camente y con retraso en el primer caso mi gran felicitación, apoyo y ánimo a quienes promo-vieron e hicieron todo lo posible para que después de aproximadamente medio siglo, volviera a celebrarse la procesión de Jesucristo Resucitado y Nuestra Señora de la Nava, teniendo en cuen-ta que todas las cosas una vez realizadas son muy bonitas, pero siem-pre requieren su trabajo llevando sus complica-ciones.En el segundo caso, ade-más de mi felicitación, apoyo y ánimo a quie-nes también han promo-

vido y colaborado con la nueva procesión que hemos tenido este año en Semana Santa de Je-sucristo Amarrado a la Columna, recordándoles que nuestra fe católica aunque con religiosidad popular también es un camino para alcanzarla, mantenerla o aumentar-la, exigiéndonos algo más que sacar imágenes a la calle.Aunque la hermandad o hermandades hacen lo posible y lo imposible porque haya procesio-nes, sigue habiendo por cortedad, apatía u otras sinrazones, escasez de personas para portar las imágenes de Semana

Santa. Es triste y penoso estar pendientes de ver si viene alguien más para poder completar los suficien-tes portadores y así sacar y lucir nuestros preciados y queridos pasos. Por tanto, dende aquí quiero hacer un llamamiento en general a todos para que esto no ocurra sin mirar nada de nada. Demostremos lo que debemos ser y lo que somos……. ¡ ÁNIMO!

¡EL PATATÚM SE QUIERE Y SE SIENTE EN LA DISTANCIA!

Cualquier persona asidua a la lectura de nuestra revis-ta “El Barrero”, sabrá que una de las tradiciones más arraigadas a lo largo de la historia de nuestro pueblo es el baile del “patatum”.Tradición y manifestación popular que da lugar a que Espiel sea más querido y sentido y, por qué no decir-lo, añorado por todas aquellas personas que por cir-cunstancias de la vida tuvieron que emigrar años atrás a otras tierras, sobre todo al País Vasco, Cataluña y Asturias.Emigrantes que con el paso de los años se han preocu-

pado de seguir queriendo y sobre todo manteniendo en sus descendientes nuestras tradiciones y ese “espí-ritu” de arraigo y cariño a su tierra de origen.Ni que decir tiene, que si para los residentes en Es-piel cada vez que se baila “el patatum” con motivo de nuestra Romería de la Virgen de Estrella, es fuente de alegría y de arraigo a nuestro pueblo, ese arraigo se hace más patente y presente cuando dicho baile se lleva a cabo en otro lugar de España donde la presen-cia de espeleños es muy notable.El ejemplo más significativo de lo último que acabo

si se hurga un poco más, uno se da cuenta de que la esencia sigue siendo la misma. Lo que importa es pa-sarlo bien, aunque sea diferente. Reírse de los demás, minimizar los problemas sin dejar de criticarlos, sacar a relucir lo gracioso, exagerar lo cotidiano, volver a hacerse invisible, reírse de uno mismo… eso sí, con mucha más libertad que entonces. ¡Qué gran cambio! —No sé si sabes, Antonio, que lo que estuvo más tiempo prohibido fue taparse la cara… y lo de la cen-sura de letras, también —dice Luis, acabados ya los

caracolillos, con la cerveza sin alcohol en la mano. —Pero en recintos cerrados sí estaba permitido el carnaval… vamos, quiero decir en el Casino Espeleño. Pregúntaselo a tu padre, verás como él se acuerda —añade Rafael. —Lo haré, cuando regrese de la Semana Santa. … pero ya no me dio tiempo.

A mi padre.Antonio Fuentes Cejudo

A CRISTO

A Cristo crucificadole dedico esta poesía.

Me dolió cuando moríamas ahora resucitado,

¿Habrá mayor alegría?No lo habría.

Por siempre sacramentado,hasta un día la Parusía.

Recoger lo que sembramosGanar la Gloria Bendita.

Manuel Reyes Calvo

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de escribir fue la experiencia vivida el pasado otoño, con motivo de una boda celebrada en Eskoriatza.En estas tierras fuimos recibidos un grupo de espele-ños con los brazos abiertos por nuestros paisanos y fa-miliares que allí residen; tal fue así, que la si la estan-cia por aquellas tierras fue breve en cuanto al número de días que íbamos a estar, más breve se nos hizo a raíz del recibimiento y la estancia tan agradable que tuvimos.El motivo, tal y como he comentado anteriormente, fue la celebración eclesiástica de la unión matrimonial de Mari Mar y Fernando, pareja singular y peculiar donde las haya. Celebración muy bonita y sobre todo original en cuanto a su improvisación gracias a la complicidad existente entre los novios y el párroco que los casó. Momento a destacar en la celebración, y sobre todo para no olvidar por su gran emotividad, fue el momen-to en el que Mari Mar nombró con nombre y apelli-dos a los ausentes en dicha ceremonia. Ausentes físi-camente en el acto, pero en NUESTRO CORAZÓN siempre presentes. Al término de la ceremonia eclesiástica, la hermana de la novia y una amiga, ambas ataviadas con el traje regional vasco, bailaron en honor al nuevo matrimo-nio “el aurresku”. Momento muy emotivo para los allí presentes culminado por una gran cantidad de petardos y cohetes.Y el otro momento emotivo que tuvo el día fue la cele-bración del baile del “patatum” por todos los espeleños allí presentes en una plaza de Eskoriatza, justo antes del comienzo de la barra libre, porque luego se sabe lo

que puede ocurrir con las copitas….Fue precioso y difícil de olvidar el ver disfrutar a nues-tros paisanos del País Vasco con la celebración del “patatum” haciéndoles recordar su pueblo, sus fami-lias, sus raíces… en definitiva, su origen.Y en concreto, en lo que a mí me concierne no se me olvidará nunca, el encontrarme de casualidad en una tienda de ultramarinos de Eskoriatza (al lado de la iglesia donde fue la ceremonia) el cartel de la Virgen de Estrella de la Romería del año pasado….¡ se me pu-sieron los pelos de punta…!. Darle las gracias al paisa-no por toda su amabilidad y atención. Muchas gracias.En definitiva, fue una visita “fugaz” a aquella tierra; tierra que gracias a la hospitalidad de nuestros paisa-nos hicieron que nuestra estancia en la misma fuera como si estuviéramos en nuestra casa. Muchas gracias y ¡¡¡¡¡ que vivan los novios !!!!!.

José Manuel Cruz Dueñas

Querida Encarna, fuiste, allá por los años sesenta, una niña que, junto a tu hermano Andrés, vino a este pueblo para vivir con tus tíos Josefa y Leocadio, el zapatero, mientras tus padres quedaban en Madrid. Estuviste con nosotros hasta los veinte años. En esos años fuiste actriz en el grupo de teatro de Don Maria-no, murguista con Fernández, asidua bailonga de la Discoteca del Pollo, buena estudiante de la “Maes-tría” en Peñarroya y te fuiste a Madrid para ser una emigrante más de la gran urbe. Allí aprendiste con dolor lo que significa emigrar de tu pueblo, no eras de allí y cuando volvías parecía que tampoco de aquí. Ese desarraigo no te gustó nada y decidiste, sin re-

flexionar demasiado, como tú sueles, sentirte de aquí siempre, aunque estuvieras lejos, ser una espeleña que ocasionalmente vive fuera. Puede parecer una si-tuación imposible que, nos obstante, resuelves con la naturalidad con la que vives. Cuando estás con noso-tros, en tu pueblo, exprimes la situación al máximo, a veces a una ritmo tan alto que tenemos que decirte.-Encarna para, que vamos sin resuello. Aunque vengas poco tiempo lo aprovechas: visitas tus difuntos; a la Virgen de Estrella, tu hermana como la llamas; ayu-das a “la Luisa”, tú querida tía, ahora algo pachuchi-lla; disfrutas el tiempo que puedes con tus amigos de la manera más simple, con unas tapas en el Tala, pa-

CARTA PARA ENCARNA RUBIO, LA EMIGRANTE QUE NUNCA EMIGRÓ

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seando por “nuestro paseo” saludando a todo el mun-do; compartiendo un bocata del “Peliches”; con los chistes de Luis, que luego repites en tu trabajo; con el ron miel que te prepara Ana Marí en el Andalucía; te interesas por nuestras vidas y las vives con nosotros. Todo esto por supuesto es posible porque te casaste con “Jose”, ese saharaui (nació en El Aiún)-madrileño que, desde el principio, se apuntó a la “espieldepen-dencia” tanto como tú o más. En fin, querida amiga, queremos decirte, aunque sé que los sabes, que para

nosotros nunca te fuiste a los veinte, ni te vas ahora en esta época, estás aquí en tú pueblo, a veces por esa lejanía transitoria, sólo en el pensamiento y en el corazón pero siempre presente. Tus amigos queremos dedicarte estas letras, y hacerlas extensibles para to-dos aquellos espeleños/as que, como tú, están fuera y sin embargo siente que están aquí, sabiendo que la emoción que sentirás cuando las leas será la nuestra. Un besazo Encarna.

Francisco Ruiz

ESPAÑOLES EN EL TITANIC El 15 de abril se cumplió el primer centenario de uno de los naufragios más importantes, y sobre todo conocidos, de la historia de la navegación: el hun-dimiento del R.M.S. Titanic. Son muchos los datos que conocemos de este nefasto acontecimiento, muy bien expuestos en la película homónima de James Cameron de 1998, como el nombre de muchos ricos y famosos que viajaban en él, el lujo de sus instala-ciones o las causas y consecuencias del mismo; pero hay algo que yo no he llegado a conocer hasta este mismo año y es la existencia de españoles entre sus pasajeros. En primera clase viajaba el matrimonio formado por Víctor Peñasco y Castellana, de 24 años, y María Josefa Pérez de Soto y Vallejo, de 22, acompañados de la criada de ambos Fermina Oliva y Ocaña.

Víctor Peñasco era hijo de un poderoso comer-ciante y sobrino de José Canalejas, ministro de Al-fonso XIII. María Josefa Pérez era nieta de uno de los grandes financieros de España. Este joven ma-trimonio se casó el 8 de diciembre de 1910 y desde

entonces disfrutaba de una larga luna de miel que les llevó al Casino de Montecarlo, la Ópera de Viena, el Covent Garden, el Orient Express, etc. Esta gira se calcula que costó unas 290.000 pesetas de 1912 (unos 670.000 € actuales). Se embarcaron en Cherburgo dejando en París a

un sirviente, Eulogio, que enviaba diariamente pos-tales firmadas a Madrid para que la madre de Víctor no sospechase que habían embarcado, ya que Doña Purificación tenía un “mal presentimiento” respecto a este viaje. Se cuenta que Víctor cedió su sitio en el bote salvavidas nº 8 a una mujer de tercera clase con una niña en sus brazos y ya no se volvió a saber de él. Josefa y Fermina sí consiguieron salvar la vida. Se cuenta también que, como no se podía declarar

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OpiniónNº 50• ABRIL 2012

muerta a una persona hasta los 20 años de su desapari-ción, la familia decidió comprar un cadáver que apare-ció flotando cerca del naufragio, al cual “reconoció” la doncella en el cementerio canadiense de Halifax para hacerlo pasar por Víctor y que su viuda pudiera dispo-ner de su herencia y volver a casarse. Josefa se casó de nuevo en 1918, tuvo tres hijos y murió en 1972. Fermi-na volvió a su oficio de modista y costurera y murió el 28 de marzo de 1969. Nunca volvió a viajar en barco. En segunda clase viajaban 5 españoles: las herma-nas Asunción y Florentina Duran Moné, de 30 y 34 años respectivamente; Juliá Padró Manent, de 26 años; Emilio Pallás Castelló y Encarnación Reinaldo de 28 años. Juliá Padró, natural de Lliça de Munt, estaba casado con Florentina Durán, natural de Lleida. Este matri-monio vendió su restaurante para irse a Cuba a “hacer las Américas” acompañados de Asunción Durán, her-mana de Florentina y de Emilio Pallás, amigo de la familia. Todos embarcaron en Cherburgo y su destino final era La Habana. Juliá llegó a ser propietario de una gran compañía de autobuses en Cuba. Emilio regresó a Lleida, se casó

y fue propietario de una panadería y, según su hijo, cojeó toda su vida por fracturarse la pierna al saltar por la borda desde el Titanic. Asunción y Florentina se salvaron en el bote nº 12.

Encarnación Reinaldo embarcó en Southampton. Es la más enigmática de las pasajeras españolas del Titanic pues se salvó pero no se sabe nada más de ella. El Titanic partió hacia Nueva York con 2.227 perso-nas a bordo y 1.517 nunca llegaron a su destino. María del Pilar Giménez

EL AÑO QUE FUI ROMERO DE LA VIRGEN DE CABEZA

No han sido muchos los años en que he podido dis-frutar de la romería de la Virgen de la Estrella, pues al cumplir yo los nueve me llevaron a estudiar a Cór-doba, y después vinieron la universidad, la mili, el trabajo… todo lo cual me impidió participar con la frecuencia deseable de ese día especial que los espe-leños dedicamos con singular devoción y alegría a la veneración de nuestra Santa Patrona. Ahora bien, no ha habido año en que desde la distancia no haya vivi-do con el corazón su fiesta, abandonado a la añoranza y también a los recuerdos gratos. Recuerdos que qui-zás saque a pasear algún día. Sin embargo, tuve una vez la oportunidad de acu-dir a la romería decana de España, es decir, la de la Virgen de la Cabeza –cuya celebración coincide en cuanto a la fecha con la nuestra--, oportunidad sin-gular que da pie a estas líneas y a la que me refiero a continuación. Sus circunstancias, nada frecuentes, me animan a hacerlo. Fue al principio de los años cincuenta del siglo pa-sado. Finalizaba yo en Córdoba el bachillerato. Me telefoneó mi padre para decirme que al día siguiente me recogerían para que acompañase a la familia a An-

dújar, a la romería. En el coche de ese trabajador in-fatigable que fue mi pariente Sánchez viajamos hacia allá mi tía Margarita, mi madre, mi padre y yo. ¿Pero por qué a la Virgen de la Cabeza en lugar de a Estre-lla? Porque se trataba de cumplir una promesa que en su día –un día perdido en el pasado, pero todavía muy vivo—se hizo por mis mayores a La Morenita, la Reina de Sierra Morena.Aproximó Sánchez el coche al santuario cuanto fue posible y lo aparcó. Tras visitar a la Virgen, los ro-meros de Espiel nos dividimos: Mi madre y mi tía se quedaron en el santuario para cumplir la parte prin-cipal de la promesa, consistente en rezar de rodillas ante la imagen los quince misterios del Rosario y dar una limosna, Sánchez y mi padre se fueron por un lado y yo me dediqué a visitar el monumento, en el que el recuerdo del capitán Cortés y los suyos era per-manente, y a disfrutar de sus alrededores y del paisaje espectacular que se abría a la vista. A la hora de comer nos volvimos a juntar. Y entonces mi tía Margarita contó la peculiar historia de la promesa que hoy se estaba cumpliendo, la cual trataré de resumir a con-tinuación.

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Debían de correr los años setenta del siglo diecinue-ve. Mi bisabuela Josefa Gavilán, ante una minusvalía que afectaba a su hija Josefita, la cual había nacido muda, invoca con mucha fe y perseverancia la inter-cesión de la Virgen de la Cabeza para que la cure. Al fin, cuando ya la niña había cumplido los cinco años, sus súplicas son atendidas. En efecto, la hermana de la mudita, mi abuela Eduvigis, entra muy alborozada en la sala donde su madre hacía primores con el enca-je de bolillos y le espeta:--¡Mamá, mamá Josefita ha hablado!Mi bisabuela, al borde del soponcio por la emoción, se olvidó de los bolillos y salió disparada adonde es-taba su otra hija, mientras inquiría ansiosa:--¡¿Y qué, y qué ha dicho mi niña del alma?!A lo que la pequeña Eduvigis, mi abuela, respondió con precisión notarial:--¡ La niña ha dicho coño!—Es posible que para algunos, particularmente si lo comparan con los balbucientes pa-pa., ma-ma, ta-ta., etc.,la forma que tuvo mi tía-abuela de irrumpir en el mundo de los hablantes les resulte un tanto ruda, pero para la familia no era momento de pararse en sutile-zas., pues el hecho cierto era que la mudita hablaba por fin. Por lo tanto, la promesa que se había hecho

debía ser cumplida. En consecuencia, mi bisabuela se dispuso a satis-facer su compromiso. Pero muere. Sin embargo, en el trance postrero, pide a su otra hija, mi abuela Edu-vigis, que cumpla la promesa en su nombre. Desgra-ciadamente, mi abuela, que tiene que sacar adelante una casa de siete hijos y no debía andar muy sobrada de tiempo, muere a los treinta y nueve años sin poder llevar a cabo la petición de su madre, por lo que es mi tía Margarita, nieta de quien hizo la promesa, la que se dispone a cumplirla. Y lo hace. Unos tres cuartos de siglo después, pero lo hace. Yo estaba siendo tes-tigo. Y si, como aseguran algunas piadosas creencias, las almas de quienes hicieron promesas no cumplidas aguardan en el Pulgatorio a que se cumplan, las almas de mi abuela y mi bisabuela podían gozar al fin de la paz eterna. Ahora, con la serenidad que da al pensamiento la distancia de los hechos, no sabe uno qué admirar más: Si que una niña desahuciada por la ciencia arrancase a hablar a la tardía edad de cinco años, o que una niña desahuciada por la ciencia se percatase ya a la tierna edad de cinco años de a qué mundo había venido a parar y lo saludase a tono.

Rafael de la Torre Alcalde

EN LA CALLE PORTANDO Por primera vez, este año hemos podido disfrutar de una nueva procesión en la noche del Lunes Santo, donde un nuevo grupo de jóvenes espeleños se han volcado hacia delante para llevar a costal la imagen de Jesucristo amarrado a la Columna. Dicha imagen procesionaba el Jueves Santo, junto con las imágenes del Nazareno y La Virgen de los Dolores. Tras la iniciativa de crear esta procesión, aparece

la necesidad de buscar y encontrar costaleros y costaleras que pudieran llevar esa noche nuestra preciada imagen y se consiguió. Una vez encontrada y no cerrada la cuadrilla (y decimos no cerrada porque cualquier per-sona puede pertenecer

a ella para que así siempre estemos de más y no de menos), llega la hora de los ensayos. Ensayos que han resultado duros, agradecidos, motivadores, alegres y positivos, nuestro infinitas gracias a nuestro capataz que ha sabido llevar , organizar y organizarnos. Creemos que ha resultado de gran admiración este movimiento acelerado y a la vez intermitente que he-

mos conseguido con nuestro esfuerzo. Desde aquí nuestro gran agradecimiento a la her-mandad por habernos dejado todo lo necesario para poder realizar nuestra primera estación de penitencia y le pedimos su venia para sucesivos años, a nosotros que no nos falte ánimo para poder seguir haciéndolo y a todos en general muestren sus opiniones sin ningún temor.

¡¡De parte de la cuadrilla del “Amarrao” le deseamos una Feliz Romeria!!

Anabel Reyes Ortega

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MATI PÉREZ TENA No sé si al hacer este escrito me sentiré mejor o peor, pero he decidido hacerlo. Todos los que vivís aquí o casi todos saben lo que me pasa o algo sucede y sí, os lo voy a decir. Tengo hace años una enfermedad, la cual he ocultado durante años hasta que mi cuerpo no ha podido más ni mi mente; habrá quien no la en-tienda pero quien lo haya padecido sabe bien lo que se llega a sufrir la persona que la tiene y las que viven con ella. Amigos soy una persona con la enfermedad de la anorexia nerviosa bulímica purgativa, lo cual a lo largo de los años se me ha complicado con fobias al salir a la calle, ir a comprar, viajar, estar con mucha gente, ansiedad, y como no una depresión horrible, he tenido tiempos mejores y ahora estoy en una de ellas en las cuales me hace llegar casi al suicidio, hacerme daño, etc.… es difícil de entender ¿verdad? Pues es así.Os digo todo esto porque para mí todo empezó como una tontería de que me decían gorda o me sentía in-ferior a las demás personas, hasta que sin darte cuen-ta caes en esa enfermedad que es difícil salir de ella, me queda mucho camino que recorrer y ahora con lo mal que estoy he decidido que voy a seguir luchando que no quiero volver a ver a mi familia como las he visto sufrir, y a mis dos niños tener que hablar con ellos y contarles por que ya se dan cuenta de todo, a los cuales a uno de ellos le dicen también gordo, al otro enano y por favor desde aquí pido que empece-mos a concienciar a los niños que cada uno es como es, que da igual sea bajo, alto, rico, pobre, gordo, fla-co, etc.… Si no que nos aceptemos como somos que no miremos a nadie si no a nosotros mismos, que no rechacemos a nadie ni critiquemos tanto porque no sabemos el daño que podemos hacer, yo ahora aun-que no tenga ganas de vivir, no me salga sonreír y

la tristeza me ahogue, he decidido luchar y no hacer caso a nadie que me critique, yo soy como soy. Sé que hay mucha gente que me quiere y desde aquí les mando un beso y que no les prometo nada, sino que les quiero demostrar hechos. Que es muy lenta la cu-ración, pero que pondré todo de mi parte, y a mi ma-dre, mi hermana y hermanos, mis sobrinos. Mi padre por supuesto, y toda mi familia que los quiero mucho y que espero que me perdonen por todo el daño que les estoy haciendo pasar, pero sobre todo a mi marido Manuel y mis dos hijos que ellos junto a mi madre con el teléfono hacen que me levante todas las maña-nas, AMIGOS Y FAMILIA, OS QUIERO MUCHO Y POR VOSOTROS LUCHARÉ CON TODAS MIS FUERZAS. NO DIGO “GRACIAS”, PERO SÍ QUE AGRADEZCO TODO LO QUE ESTAIS HACIEN-DO Y QUE ESTEIS AHÍ. Por cierto llevo ya casi dos años ingresada en un hospital de día al que voy 3 días en semana, para aprender a comer y hacer terapias, Aprender a estar, a volver a relacionarme con soltura, que ya no puedo borrar el pasado pero si empezar una etapa de mi vida que puede ser maravillosa, que aún teniendo ya mis huesos descalcificados puedo reto-mar mi vida y me quedan muchas cosas que hacer, solo sentir los abrazos y ver a todas esas personas que conozco me hace sentir feliz. Mil gracias a todos ellos y no me hace falta decir nombres porque todos sois fantásticos, que me alegro de darme cuenta de que vivo en un pueblo fantástico al que mis padres me trajeron desde muy pequeña y me considero espeleña por que aquí me he criado y con todos vosotros he crecido y formado una gran familia.

Fdo.: Mati Pérez Tena

ALTA PELUQUERÍA

FRANCISCO Y PILARSan Sebastián , 22 - 14220 Espiel (Córdoba)

Tlf.: 957 36 34 22

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SOBRE MEDIOS DE COMUNICACIÓNMuchas oímos hablar de libertad, libertad de expre-sión, libertad para votar, libertad para elegir una cosa u otra, libertad para “esto”, libertad para lo “otro”, etc.

Pero de unos años a esta parte, en lo que concierne al pueblo de Espiel, no tenemos la libertad para es-cuchar la emisora de radio que queramos, entre otras cosas porque solo oímos Radio Estrella o en su defec-to La Cope.

Me parece un gran acierto tener una emisora de ra-dio local, por las ventajas que todo esto conlleva. Lo que no me parece acertado es que se prive a los ciu-dadanos de Espiel de la libertad de oír por ejemplo, Canal Sur Radio, Cadena Ser, Onda Cero, R.N.E., Cuarenta Principales, Cadena Cien, Europa FM, Ca-dena Dial, etc., etc.…

Todo esto contribuiría a una mayor información na-cional, internacional, autonómica, cultural, de ocio, de denuncia social, de música, de deportes, concur-sos…, y de paso ampliaría nuestros conocimientos culturales y personales.

Espero que este comentario sirva para dar solución a lo anteriormente expuesto y no se quede en una sim-ple explicación banal. Sirva también de paso en decir que lo escrito no va en contra de nada ni de nadie, más bien a favor de todas las personas que deseamos escuchar a todos los profesionales que circulan por las ondas, Tom Martín Benítez, Olga Bertomeu, Jesús Vigorra, Carlos Francino, Gemma Nierga, Juan Ra-món Lucas, Carlos Herrera, Manu Carreño, Manolo Lama… y un amplio carrusel de nombres y progra-mas que deberíamos poder oír en casa sin necesidad de poner la “tele”, conectarse a internet o tener que salir de viaje para sintonizarlos en el coche.

Por cierto no iba a hablar del asunto de los perros, pero como es un tema interesante, que hasta el car-naval se ha hecho eco del asunto, diré que sigo ob-servando los mismos dueños con los mismos perros haciendo sus “necesidades” en las mismas esquinas. ¿o no?.

Rafael Caballero González.

EXVOTOS Mis primeros años de escuela los disfruté en la de Doña Concha, mi maes-tra, mi referente infantil que, aunque pueda parecer mentira, me ha servido en la madurez para seguir los estudios de mis hijos y mis nietos. Con ella aprendí mis primeras letras, la base de la disciplina a través del cariño y algo que en aquellos momentos no entendía muy bien pero que me parecía algo mágico: los favores de una Señora a la que podías pedirle cualquier cosa y te lo concedería, eso sí, siempre que hubiera sido buena y me hubiera portado bien. Su nombre: Estrella. Hasta el nombre era mágico ya que solo conocía a las del firmamento y esas no tenían cara, pero ésta sí. Aunque parecía seria debía ser amable porque el Niño que llevaba en brazos sonreía y además, hasta se parecía a mi hermano Ángel, o a mi me lo parecía.

Inmaculada Manfredi

C/ Coronel Gimenez Ruiz Nº21 - 14220 Espiel (Córdoba)Tlf.: 957 36 35 08

ANTONIO BEJARANO MARTÍNExpendeduria Nº1

Papeleria, articulos de regalo, informatica y articulos del fumador.

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Nº 50 • ABRIL 2012Cultura

EL CABALLO IBÉRICOSi tuviésemos que indicar cuál es la moneda más es-

pañola que ha existido posiblemente tendríamos que elegir el denario del jinete ibérico o denario del caba-llito.

En el anverso aparece una cabeza varonil con el pelo en rizos y la mayor parte de las veces imberbe. Se le ha identificado con un dios: Hércules, Hermes o Apolo.

En el reverso un caballo con su jinete, con diversos atributos; normalmente lleva una lanza, pero puede ser también una palma, una espada, un venablo, una hoz o incluso un ave de cetrería. La influencia griega es innegable.

La primera foto corresponde a un denario ibérico de Bolscan. La transcripción de sus leyendas en alfabeto ibero es:

Anverso: BO-N // Reverso: BO-L-S-CA-NEsta antigua ciudad es la actual Huesca. La grafía del

anverso es una abreviatura que corresponde a las letras primera y última del nombre completo.

Bolscan era de la tribu de los suessetanos; llegaron a la península con las invasiones célticas en el siglo VII aC.

La transcripción de la segunda es:Anverso: CA-TU // Reverso: TU-R-I-A-S-UTuriaso es la localidad zaragozana de TarazonaPertenecía a la etnia de los lusones, anteriores a las

invasiones célticas.

No siempre el caballo tiene jinete. Este es el caso del semis de Sekaisa de la foto. Sekaisa era de la etnia de los belos, que se asentaba también en lo que hoy es la provincia de Zaragoza, entre los ríos Jalón y Jiloca. Era la capital y tenía un poder económico basado en las riquezas mineras del Moncayo

Anverso: S // Reverso: S-E-KA-I-S-AEste tipo de moneda se emitió en numerosas ciuda-

des ibéricas: Tutia (Atienza), Alegrad (Ágreda), Segó-briga (Segorbe), Segisa (Ceheguín), Bolscan (Hues-ca), Bilbilis (Calatayud), Cese (Tarragona), Segontia (Sigüenza), Olontigi (Gibraleón), Segia (Egea de los Caballeros), etc.

También nos encontramos con nombres en monedas con el jinete ibérico con localidades desaparecidas o inciertas, como: Salvvie, Esera, Sesars, Arsa o Tzoum.

Analizando estas localidades se observa que son de la Hispania Citerior salvo excepción.

Pero aquí se está dando un caso significativo, y es el enorme parecido que se presenta en los peinados y en el jinete. La semejanza es tal que tiene que haber una “proximidad” entre las localidades expresadas en sus epígrafes. Pero claro, ya hemos hablado de ciu-dades que se sitúan en las provincias de Gerona, Ta-rragona, Zaragoza o Valencia por citar algunas, y la proximidad geográfica es absoluta y relativamente du-dosa. Una observación minuciosa nos lleva a afirmar que estas piezas podrían haber sido grabadas por un mismo maestro, o mejor dicho por un mismo taller o por una misma escuela. De esta forma llegaríamos a la conclusión de que la proximidad de las piezas del jinete ibérico de la que hablamos nada tiene que ver con la distancia, sino con el momento preciso en que se labraron estas monedas, y que hay que situarlo entre el 200 y el 50 años antes de Cristo; en todo caso estas piezas no traspasan la guerra de Sertorio.

Denario ibérico de BolscanBolscan es la actual Huesca

Denario ibérico de TuriasuTuriasu es la ciudad de Tarazona

Semis ibérico de SekaisaSekaisa hoy es Belmonte

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Incluso puede ser que fuesen labradas en el mismo taller piezas de localidades distantes, con lo que esta-ríamos diciendo que la localidad que aparece en una moneda no indica el lugar de fabricación sino otra información; por ejemplo, que indicase el nombre de la ciudad de donde se había recibido el impuesto. De hecho en una excavación se pueden encontrar juntas monedas de distintas localidades. En el caso de que una localidad centralizase la fabricación de moneda habría que pensar en CESE (Tarraco para los romanos y Tarragona para nosotros) pues era la capital de la provincia y sede del procónsul.

Tenemos aquí la oportunidad de contemplar la escri-tura del alfabeto ibérico, verdadero tesoro al que vol-veremos en otra ocasión. Su utilización por Roma nos induce a pensar que estas monedas se labraron para su uso por los indígenas, ya que no serían entendidas por las legiones.

El caballito ibérico fue copiado por Franco en sus perrasgordas de aluminio.

Este artículo está dedicado a los aficionados al caba-llo de Espiel

Juan Manuel López Márquez

ESPIEL Y LA ESPELEOLOGÍA (I)Rafael Bermúdez Cano(Miembro del Grupo Espeleológico G40)Julio Guijarro González(Miembro del Grupo Espeleológico G40)

Desde los inicios del Grupo Espeleológico G40 de Priego de Córdoba el campo de trabajo del mismo se ciñó al ámbito de las Sierras Subbéticas Cordobesas. A finales de 2009 se acuerda ampliar su ámbito de ac-tuación a toda la provincia de Córdoba y así se solicita como zona de exploración a la Federación Andaluza de Espeleología. Meses atrás se venía ideando un pro-yecto a través del cual realizar un estudio histórico de la espeleología cordobesa y sus cavidades. El acuerdo citado era imprescindible para el desarrollo posterior del mismo y le serviría como punto de partida. Así nace “Tras las Huellas de la Espeleología Cordobesa”.

Después de terminar los estudios de la Cueva del Fato, en Trassierra, nos planteamos otra zona de tra-bajo. Rebuscando entre la información a la que tenía-mos acceso, por la conjunción de diversas referencias, artículos e informes, nos resultó interesante las posi-bilidades que nos planteaba el Cerro del Castillo de Espiel. Un vaciado bibliográfico y entablar contacto con algunos veteranos del deporte subterráneo se plan-tean como tareas previas a las labores de campo que se inician en octubre de 2011.

Como objetivo la localización de las cuevas y simas del cerro para su posterior exploración y realización de un informe espeleo-histórico de las mismas. Para lo primero se contó con las referencias escritas por los miembros del GULMONT y las indagaciones realiza-das por Manuel Ángel Barbero vecino de la localidad donde se ubican. Ello se complementó con una pros-pección sobre el terreno.

Como resultado, al día de la fecha, se ha realizado el

(Interior Sima Las Goteras)estudio de 8 cavidades entre las que destacan la Cue-va de Peña Redonda, Sima del Spit Viejo, Cueva de las Palomas y Sima de las Goteras, que han engrosado el mapa espeleológico provincial que se viene reali-zando por el G40 a través del “Catálogo de Cavidades de Córdoba”. En los informes de las mismas a parte de los datos puramente espeleológicos (localización, ac-cesos, descripción, reportaje fotográfico, ficha técnica y topografía) se reflejan igualmente datos históricos, antropológicos, biológicos, arqueológicos y geológi-cos. Para ello se han invertido ¿? Salidas. ¿? Miem-bros del G40 han participado en las mismas. A ello debemos de sumar las horas de gabinete en las que se han procesado y plasmado los datos obtenidos durante los trabajos de campo.

Como resultado a destacar reseñar que en el trans-curso de los mismos se localizó un conjunto de pintu-ras rupestres de extraordinario interés. En diciembre

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del pasado año ya se dio cuenta de ellas por parte de Manuel Ángel Barbero en esta misma publicación. Una vez debidamente contrastadas y verificadas por especialistas en la materia en breve comenzará un es-tudio pormenorizado de las mismas. La ciencia con sus últimas innovaciones aplicada a la arqueología nos desvelará lo que hasta ahora el ojo humano sólo apre-cia en parte debido a lo desvaído de sus pigmentos. Cuatro serán los arqueólogos comprometidos con este proyecto, tres de los cuales son miembros de nuestro grupo.

El presente artículo pretende ser el primer de una se-rie que, a manera de catálogo, den a conocer la riqueza del subsuelo de Espiel, haciendo un recorrido por las diferentes cavidades que lo horadan. Se basarán en los estudios realizados por los miembros del Grupo Espe-leológico G40 de Priego de Córdoba.

Antes de introducirnos de lleno en cada una de los citados fenómenos espeleológicos convendría realizar un recorrido histórico donde enmarcarlos:

Las primeras referencias que hablan sobre cavidades en el Cerro del Castillo de Espiel las encontramos en la obra de Antonio Carbonell Trillo-Figueroa. Geólo-go, trabajador incansable y gran conocedor de la tie-rra cordobesa, nos dejó un amplio legado de escritos, relacionados sobre todo con la minería. Pero también realizó aportaciones al estudio de la Prehistoria cordo-besa, que se hallaba en pañales en los primeros años del siglo XX. Este interés por la Prehistoria y la mine-ría le llevaron a entrar en contacto con el mundo de las cavidades, al estar algunas de ellas directamente rela-cionadas con ambas disciplinas. De este modo, realizó los que se pueden considerar como primeros catálogos de cavidades dedicados específicamente a la provin-cia. En 1917 describe una relación de ellas en el “Se-manario Independiente Córdoba”. De la zona que nos ocupa dice textualmente: “Espiel. Cuevas del Castillo, atribuidas a restos de las antiguas cisternas de éste”. En 1922, en los boletines de la Real Academia habla sobre una cavidad arrasada por una cantera en una de sus “Contribuciones a la prehistoria cordobesa”, al hablar de una placa ídolo hallada en la citada cueva. En 1945 hace una relación más amplia en otro de los boletines: “Varias de ellas con interesantísimos restos eneolíticos se reconocieron en la cuerda del cerro del Castillo de Espiel”.

La espeleología, como disciplina que implica tanto la práctica deportiva como el estudio de diferentes aspec-tos de las cavidades, ya sean directa o indirectamente ligados a ésta, no surge en Córdoba hasta los principios de la década de los sesenta del pasado siglo. Previa-mente, en la década de los cincuenta, el grupo GAMA

de Doña Mencía había abierto éste camino realizando las primeras exploraciones. El Grupo Espeleológico Ambrosio de Morales de Córdoba (GEJAM), depen-diente del Frente de Juventudes al igual que la sección espeleológica de la OJE prieguense, el Grupo de Ex-ploraciones e Investigaciones Subterráneas del Grupo Universitario Laboral de Montaña (GULMONT), que nace en el seno de la Universidad Laboral Onésimo Redondo de Córdoba o el Grupo Espeleológico Cór-doba (GEC) que llegó a funcionar bajo el patrocino de la Diputación Provincial, operan de forma activa hasta principios de los setenta. A partir de dicho momento van disminuyendo poco a poco en sus actividades y trabajos hasta llegar a desaparecer por completo creán-dose a su vez nuevos grupos.

Según las referencias escritas a las que hemos te-nido acceso hasta el momento son los miembros del GULMONT los encargados de abrir el horizonte de la espeleología en Espiel. Atraídos en un principio por la verticalidad de las paredes del Cerro del Castillo, exploraron finalmente su subsuelo. Pero en la mejor de sus cavidades hasta ahora exploradas, la de las Gote-ras, encontramos en la sala final un panel donde, pinta-das a carburo se hallan las siglas de los nombres de los tres grupos antes citados con cede en Córdoba capital, que propiciaron, junto con otros de la provincia, los inicios de la espeleología cordobesa.

En el boletín interno del GULMONT y en va-rios artículos (publicados en el Diario Córdoba y en la revista Karst) quedaron reflejados sus trabajos de exploración, catalogación, descripción y topografía. En 1965 ya tenemos constancia escrita de la presen-cia de miembros del GULMONT en la Cueva de Peña Redonda, aunque su primer contacto con ella sería an-terior. Sus paredes sirvieron como espacio de instruc-ción en las técnicas de progresión por cuerda y escala, como lo siguen siendo en la actualidad para algunos escaladores. En ese año realizaron las primeras activi-dades espeleológicas en la zona que nos ocupa:

“El grupo de espeleología Gúlmont ha realizado en el curso 1965-66 una intensa actividad espeleoló-gica…En el mes de noviembre tuvo lugar la primera expedición de investigación subterránea a la zona de Espiel, en la provincia de Córdoba. El fin de la expe-dición era el estudio del terreno y la bajada a un pozo-mina de 25 metros que sirvió de entrenamiento para algunos principiantes” (GULMONT, 1966).

Durante los primeros meses de 1966 continúan con las campañas de exploración en el karst de Espiel. Se llegó incluso a organizar por la Delegación Pro-vincial de Espeleología de Córdoba el “Primer Cam-pamento Cordobés de Espeleología” en el Cerro del

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Castillo. Sus promotores serían el GULMONT y el GEC. Este campamento celebraría entre los días 6 y 8 de diciembre de 1969, aprovechando el fin de semana y la fiesta de la Inmaculada Concepción. Se realizaron actividades de espeleología y de escalada. No es de extrañar esta mezcla de disciplinas, hoy tan diferen-ciadas, ya que los inicios de la espeleología en Cór-doba estuvieron muy unidos a los grupos de Montaña, al igual que a la arqueología. En un primer momento, sin tener el apoyo de federación deportiva alguna, y posteriormente encuadrados en la Federación Españo-la de Montaña. La elección del lugar no fue aleatoria. En el Cerro del Castillo y alrededores se concentraban varias cavidades ya conocidas por los escaladores del GULMONT que lo visitaban con asiduidad para sus prácticas deportivas. En la provincia de Córdoba, al margen de las Sierras Subbéticas, quizás sea el lugar donde nos encontremos con mayor concentración de cavidades en un espacio reducido. Aunque varias de ellas habían sido ya exploradas, quedaban otras pen-dientes de ello y las características geológicas de la zona propiciaban el que pudieran localizarse alguna más, tras una prospección sistemática del terreno.

En el campamento participaron trece perso-nas, ocho de ellas espeleólogos y cinco escaladores, pertenecientes al GULMONT y al GEC. El sábado 6 fue empleado en el montaje del campamento, organi-zación de material y planteamiento de las salidas. El día 7 los integrantes de las actividades se dividieron en dos secciones, una de escalada y otra de espeleolo-gía. La de escalada tenía como jefe de grupo a Florián Iglesias. Su objetivo las paredes del Cerro del Castillo. Una “chimenea” de más de 30 metros de altura que culminaba en la zona alta de la cuerda montañosa. La de espeleología contó como jefe de grupo con J. A. Magariño, y exploró tres cavidades, según se indica en las memorias del mismo:

“La primera cavidad presentaba carácter geológico algo extraño. Su boca había sido originada por una disgregación de rocas calizas, dando lugar a una sima de 23 metros. En su interior pasadizos artificiales y grandes destrozos de sus galerías, debido a una mina de cuarzo cristalizado. Todo ello impresionaba a se-guir la búsqueda del término de la misma. Grandes bloques de piedra obstaculizaban el difícil acceso por sus galerías, dando lugar a fáciles derrumbamientos en su interior.

Más tarde, una segunda cueva, equidistante a 1500 metros de ésta, fue localizada gracias a la colabora-ción de un campesino de Espiel. Esta cueva, reconoci-da por el nombre de “Las Goteras”, presentaba en su boca una sima de 36 metros. En su interior se abría en dos salas con bellísimas formaciones litogénicas.

La tercera cueva junto a unos baños árabes está si-tuada en las ermitas del pueblo. Es de poco interés, debido a su escasa longitud y carencia en formaciones de tipo científico” (GEC-GULMONT, 1969).

El lunes día 8 se volvieron a plantear dos expe-diciones:

“El lunes, día de la Inmaculada, los escaladores prosiguieron la subida por una de las chimeneas de más de 30 metros de altura llegando a la cúspide del cerro.

El grupo de Espeleología siguió explorando las cin-co cavidades restantes que resultaron ser pequeños cobijos que no presentaban gran interés para nuestra afición” (GEC; GULMONT, 1969).

El grupo de Espeleología continuó explorando cavidades, aportando cinco más a las ya existentes, las cuales resultaron tener escaso interés espeleológico. El monitor José Antonio Magariño impartió lecciones de topografía, arqueología, karstología, técnica de subi-das y bajadas por escala, “rappel” y paso por lamina-dores y galerías, tanto en su aspecto científico como deportivo.

Manuel Ángel Barbero

ESPIEL EN LA REAL ACADEMIA DE CÓRDOBAHace unos meses, terminé un libro titulado “Breve

Historia de la Primera Guerra Mundial” de Norman Stone. Realmente la lectura fue interesante, pero bre-ve, por lo que me dirigí hacia la bibliografía utiliza-da, con la intención de ampliar algo los conocimien-tos sobre la Guerra menos conocida. Tras anotar las publicaciones más notorias, se citan una serie de di-

recciones de correo electrónico de las que reconoce el autor, los “resultados sensacionales” que se obtienen en Internet. Los tiempos cambian, ya no hay que ser ratón de biblioteca.

En este segundo artículo que, amablemente, Pepe Ortiz me invita a escribir y que continua con la apor-tación de datos para provocar a la investigación de la

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historia de Espiel, hago un resumen de las publica-ciones de la Real Academia de Córdoba que contienen temas sobre nuestro pueblo (www.racordoba.es) con-cretamente los Boletines de esta institución publicados entre 1.922 y 2.009 y recogidos en “www.repositorio.racordoba.es). La Academia, simplifica su Boletín de la Real Academia de Córdoba como BRAC seguido del número correspondiente. Aquí utilizaremos B.1 para referirnos al Boletín nº 1 seguido del año de pu-blicación, a fin de abreviar el texto.

Otro apartado merecen los académicos nacidos en Espiel, apartado que en otra ocasión trataré, ya que me ha sorprendido agradablemente que un pueblo tan pequeño como el nuestro haya tenido y tenga tantos miembros en la RAC.

Entrando en el tema que nos ocupa, ya en el B.1 de 1.922 aparece un extenso trabajo de Carbonell Tri-llo Figueroa sobre hallazgo de piezas neolíticas en la Huerta del Caño, en la ladera del Cerro del Castillo, donde muchos, de niños, cogíamos fósiles marinos y restos prehistóricos. Este tema, se repite de forma me-nos detallada en los Nº 3, 11, 13, 52, 53, 54, 55, 56, 58, 59, 63, 77, 87 y 101, saturando el rendimiento de estos hallazgos hasta niveles excesivos. En el B.55 habla de la existencia de dólmenes y en el B.58 de herramien-tas íberas en el Cerro del Castillo. En cualquier caso, interesante para conocer la antigüedad de los asenta-mientos en nuestro municipio, además de reafirmar la enorme importancia histórica que , durante siglos , ha tenido el maltratado Cerro del Castillo.

En 1.923 (B.3) dentro de la Historia del Movimiento Obrero Cordobés desde 1.870 a 1.874, Díaz del Mo-ral firma un interesante trabajo sobre los movimientos anarquistas (por entonces el socialismo, como ahora lo conocemos, no existía) y los problemas de consti-tución de la cédula de Espiel, en la que se recibían, de hecho, 50 ejemplares del boletín provincial, importan-te cantidad si se tiene en cuenta que a la capital solo se entregaban 300.

El B.9 de 1.923 inició una atractiva historia, que se completa en 1.926 con el B.17 narrando la parte cordo-besa de la historia entre 1.808 y 1.813. En lo que aquí nos trae , se cita como, el parte del alcalde de Mos-

toles, Andrés Torrejón, llamando al alzamiento contra los franceses, fue comunicado por el alcalde de Espiel al Corregidor de Córdoba, Agustín Guajardo Fajardo, y como Espiel, pasa a formar parte del distrito de Cór-doba, y con ello, del Depósito Militar de caballos, por orden del Gobernador General del Reino de Córdoba.

El 15 de noviembre de 1.586 Luís de Góngora, recla-ma el diezmo del pan de la villa de Espiel. El artículo de José de la Torre, se incluye en el B.18 de 1.927.

Otro cordobés, Rafael Castejón, en el B.25 de 1.929 habla de la Iglesia de San Sebastián y de la Campana del Abad Sansón, hallada en el siglo XVI , en “el cam-po de Espiel”.

Juan Carandel, bajo el título de Población Humana de la Provincia de Córdoba, (B.41 de 1.934) nos narra la bajísima densidad de población en la zona de Es-piel, 26 habitantes por kilómetro cuadrado, frente a 49 hab/km2 de la media provincial. Cruzando datos con el Instituto Nacional de Estadística, Espiel contaba en 1.930 con 5.334 habitantes de hecho, situándose así entre los municipios de más baja densidad de Andalu-cía, con 12,22 hab/km2.

En 1.949, Rafael Castejón, en relación con Las Ex-cavaciones en Monasterios Mozárabes (B.61) cita por primera vez la “Basílica visigoda de Alcaracejos “. Ubicación errónea, que se mantiene incluso hasta, el B.91 de 1.971 ( en el extenso trabajo de Ulbert) . Yerra más Don Rafael , tras la citada ubicación, como situar la vía romana de Córdoba a Almadén, junto al Gua-dalbarbo. Esta vía, ciertamente, discurre junto a la Ba-sílica, sobre la linde de Espiel y Alcaracejos, pero no junto al Guadiato, río al que cruza aguas arriba. Ade-más se sitúa en otros estudios de la Academia, sobre la Córdoba – Almaden antigua

Luís María Ramírez de las Casas Deza, en Anales de la Ciudad de Córdoba ( B.65-1951) recuerda el oficio del Alcalde de Espiel, al Corregidor de Córdoba antes citado, y se extiende en el B.66, bajo el mismo título con el alzamiento de Riego el 1 de enero de 1.820, quien desde Sevilla, con una columna de más de 300 hombres, llega a la Venta de la Estrella el 8 de mar-zo, probablemente, por el camino árabe del Vacar al Guadiato, pasando allí la noche y llegando al día si-

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guiente a Espiel. Esto ocurría el mismo día en que el rey absolutista acataba la Constitución de 1.812 ( que después rechazó). El 25 de marzo de 1.834 las eleccio-nes provinciales a Procuradores a Cortes, hubieron de hacerse en Espiel, al estar la capital y los pueblos más próximos, bajo una fuerte epidemia de cólera.

En el B.71 de 1.954, Miguel Muñoz Vázquez, trans-cribe el repartimiento de tierras del reino de Córdoba. Tras la conquista de Córdoba en 1.236 por Fernando III de Castilla y León, pasó este a repartir las tierras tomadas “a los caballeros que le acompañaban en la reconquista de esta ciudad”. Los repartos se recogie-ron en el llamado Libro de las Tablas, maravilloso manuscrito que se encuentra en el archivo del Cabildo Catedral, terminado en 1.310. Si bien no se adjudica el término de Espiel, es la primera delimitación del mismo en época cristiana (en el B.88 Gómez Cres-po, consideró que se adjudicó a la Corona al aparecer esta como posterior propietaria en siglos más cerca-nos). Concretamente se recoge los límites de la eglia ( Iglesia) de Espiel, mencionándose, ya entonces, el nombre de nuestro pueblo. Los bordes territoriales, son dispersos, pero se asemejan en mucho a los que teníamos antes de la segregación de Villaviciosa. En el B.108 de 1.985, al hablar de la relación del rey Alfonso XI con Córdoba, Escobar Camacho recuerda como ya en 1.237, su padre Fernando III, incluye el termino de Espiel, como parte del alfoz del concejo de la capital. Interesante apunte bibliográfico de Rafal Castejón, en el B.82 de 1.961 a cerca de los estudios de Valverde Madrid, sobre temas tan diversos como “el Castillo de el Vacar”, “Rodríguez Marín y el Archivo de Protoco-los de Espiel”, “La Campana del Abad Sansón”, “El Aventurero Casanova” y “La Primera Delimitación de Espiel”, no todos publicados, por lo que supongo que serían comunicaciones en la Academia. Su estudio excede la intención de este trabajo, pero resulta muy recomendable su lectura.

Volvemos a Miguel Muñoz Vázquez en el B.88 de 1.968, quien al referirse a la fundación de La Carlota y sus poblaciones, cita como en Espiel, concretamen-te junto al Guadiato, se edifica la primera fábrica de papel de la provincia en 1.767. Posteriormente, relata

la lucha por la posesión del terreno denominado Las Gamonosas del término de Espiel,( 1770) terreno bal-dío que pertenecía a las Reales Caballerizas y del que se acabó apropiando el Teniente Caballerizo Juan de Melgarejo , lucrándose con el arrendamiento de sus pastos. Más tarde, estos baldíos dan lugar a pleitos que finalizan con su adjudicación a la capital, adjudica-ción a la que se niega el Alcalde de Espiel, apelando al Consejo de Castilla con el argumento fundado de su pertenencia a Espiel desde 1.472. Este jugoso boletín, continua con Capel Margarito, quien recogiendo las ideas de Olavide, se refiere a Espiel como un territorio yermo.

Mención a parte, merecen, dentro del mismo boletín, el trabajo de Gómez Crespo sobre “ Un Proyecto de Colonización de los Frailes Jerónimos Cordobeses en Espiel”. El baldío realengo se estima en 98.000 fane-gas, de las que 71.590 (casi las tres cuartas partes) se considera improductivas. La población estimada es de 435 “vecinos”, esto es, unos 1.740 habitantes, y siem-pre, contando con Villaviciosa. Esta escasa población se mantiene creciente , ya que en 1.587, contaba con tan solo 211 vecinos. En 1.640 la Corona vende a la vi-lla de Espiel, solo los aprovechamientos ( no la propie-dad) de 84.693 fanegas. Se aporta una larga referencia de fechas, aprovechamientos y calidad de las tierras. El trabajo, merece ser estudiado en su totalidad. Final-mente, el intento de los frailes jerónimos, se resume en crear un nuevo núcleo de población en el terreno de Espiel, con “ casas, iglesias, ayuntamiento, cárcel, posito, hornos y fuentes” en el sitio conocido como El Catalán. Esta cita se da en otros boletines como el B.130 de 1.996.

Gracia Boix , aporta “Notas sobre el Castillo de El Vacar” en un trabajo poco profundo y discutible.( B.89 de 1.969). ¡FELIZ ROMERÍA!

CONTINUARÁ...

Rafael Caballero Ruiz-Maya

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LOS TIEMPOS CAMBIAN

Cultura

“...Hoy, San Sebastián, Patrón de nuestro pueblo,se anuncia la visita pastoral;

el Obispo vendrá, como otras veces,pero sin despertar tanta curiosidad.

No es frecuente en el tiempo en que vivimosque salga a esperar la autoridad,pero aquí sí lo hizo esta mañana,

deseándole estancia feliz en el lugar.Por otra parte, la gente que salía,

aclamando al obispo sin cesar,recibe ahora la visita,

bien en el trabajo o en su hogar,niños, enfermos, impedidos,

trabajadores de aquí o más alláhan conocido al Obispo en este día,

porque él los fue a visitar.... “

A raíz de la última visita que hizo el Sr. Obispo, Monseñor Demetrio Fernández, a nuestro pueblo, na-ció un poema, del que escribo aquí parte de él y que sirve para comparar con visitas de otros tiempos.Voy a narrarles la que hizo a nuestro pueblo Monse-ñor Adolfo Pérez Muñoz en 1925, siguiendo al co-rresponsal del diario católico “El Defensor de Cór-doba” Sr. García Verdejo.

A las cinco de la tarde del día 14 de mayo, pro-cedente de Pya. Pueblonuevo, llegó el Sr. Obispo a nuestra localidad y fue recibido en el Paseo por auto-ridades civiles y militares, la Asociación del Sagrado Corazón de Jesús, las Hijas de María y el Patriarca San José, el clero local , los niños de las cuatro escue-las existentes, que portaban banderitas, y numeroso gentío.

Los niños, a su llegada, hondearon las banderitas, soltaron palomas y cantaron “¡Oh Padre!. Bendice a tu Grey...”

Después de los saludos de rigor, la comitiva se di-rigió a la Iglesia, a través de las calles San Sebastián y Basilio Manso. Desde las ventanas y balcones, que estaban adornadas con estandartes y colgaduras, se les arrojaban flores.

Durante el trayecto se habían levantado tres arcos vegetales. El primero dedicado por el Sr. Cura Re-gente, D Juan M. Jiménez Baena, y cuya dedicatoria , impresa en una banda roja y gualda, estaba en latín, por ello, nos dice el Corresponsal, no supo leerla. El segundo era ofrenda del Ayuntamiento y el tercero,

el más vistoso, lo ofrecían los “niños de bien” de la localidad, llamados los “ Caganíos”, con la leyenda “ los Caganíos a su Padre” , cosa que fue muy del agrado del Prelado.

El día 15 a las ocho y media, se celebró la Santa Misa con más de trescientas comuniones, panegírico del Sr. Obispo y canto de hombres y mujeres de “ El Amor de los Amores”. Seguidamente , a la nueve y treinta, se confirmó a dos grupos de personas. En el primero fueron padrinos en la ceremonia el Sr. Alcal-de, D.Guillermo Blanco, y su esposa, Da. Josefa Doc-tor. En el segundo lo fueron el Teniente de la Guardia Civil y su esposa .

El día 16, nueva Misa, a las ocho y media, y mu-chas comuniones, ya que el día anterior el Sr. Obispo y cuatro sacerdotes estuvieron confesando hasta las doce de la noche .

El 17 visitó Villaviciosa, regresando por la tarde a nuestro pueblo para seguir con su labor pastoral hasta el día 18, en el que partió para la capital, tras cinco días de estancia en nuestro pueblo. Quede constancia de la diferencia y de cómo cambian los tiempos.( El Defensor de Córdoba del día 19 de mayo de 1925.)

Antonio Giménez Azcona 2011

Fotografía colgada en Espiel en imágenes

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LAS GUERRAS Y EL ARMAMENTO EN EL TÉR-MINO DE ESPIEL DURANTE LOS SIGLOS XI-XIV

2º parte

Cultura

Ya desde la antigüedad cuando el hombre tenía que enfrentarse a un combate cuerpo a cuerpo, intentaba protegerse de alguna forma, primero con pieles de ani-males, luego con cuero, y por último con los metales, con las armaduras -conjunto de piezas utilizadas para la defensa, realizadas en ace-ro (o algún tipo de metal) - que cubrían todo el cuer-po. LAS ARMADURAS MEDIEVALES fueron un elemento esencial para los

caballeros de la edad media, resguardándoles ante las acometidas que pudieran sufrir con espadas u otras ar-mas (futura 3ª parte), intentando que les ocasionaran el menor daño posible.

Las primeras piezas que se realizaron para la protec-ción estaban destinadas a las zonas más débiles e inde-fensas del cuerpo, o para las partes donde una herida podía provocar más fácilmente la muerte del guerrero, como la cabeza y el tronco, que fue lo primero que pro-tegieron. Se comenzó usando los camisotes (una evo-lución de los cinturones) de piel de búfalo, que iban reforzados con escamas metálicas, algunos llegando hasta la cadera y otros más largos que llegaban hasta los pies. Algún caballero también utilizaba espinilleras con el fin de proteger la parte anterior de las piernas y aros de metal que cubrían los brazos. La zona de la cabeza y proximidades se empezó a proteger porque el escudo no la llegaba a cubrir. Cabe decir que el casco o yelmo era la pieza que antiguamente caracterizaba al caballero medieval, se usaban metales para realizarlo y se dibujaban adornos, para destacar entre los demás. A veces eran reforzados con bronce o se les colocaba colmillos de jabalí, ya que estos pesaban muy poco.

Las primeras evoluciones de importancia que se die-ron en las armaduras fue que desaparecieron las lo-rigas (ésta cubría el pecho, la espalda, el vientre, las caderas y los hombros) por lo que se sustituyeron por

la jacerina o cota de malla, esto tuvo lugar en toda Eu-ropa sobre el siglo XI. La jacerina está formada por anillos que van forjados y tienen un diámetro peque-ño. Se realizaba con una base de cuero reforzado con discos metálicos. Las únicas desventajas eran, por una parte que costaba bastante dinero, por eso la solían uti-lizar solo los nobles, y por otra que pesaba bastante, unos once Kilogramos.

También fue mejorando el metal hasta que se llegó al acero templado, más resistente y modulable. De este modo surgieron las armaduras de placas, que se rea-lizaban de forma artesanal por maestros armeros. La primera pieza completa metálica que se propagó fue el peto, aunque el guardabrazo también tuvo una gran evolución, al adaptársele láminas articuladas para faci-litar el movimiento, mientras que el rostro se protegía con el varaescudo y el cuello con la gola. El peto se hizo cada vez más corto para facilitar los movimientos del caballero mientras cabalgaba, lo que dejó el estó-mago al descubierto; pero esto se solucionó mediante unas piezas articuladas denominadas faldar. No obs-tante, las caderas quedaban también al descubierto, por lo que se inventó una pieza que las cubrían llama-da escarcela. La entrepierna, era una zona que también permanecía desprotegida, fue protegida por la caraje-ra. Para combatir el efecto del calor, y sobre todo como adorno, a partir de la segunda cruzada, empezó a usar-se una sobrevesta o cota de armas sin mangas a la que ceñía el talabarte, por donde pendía la espada. Pronto esta sobrevesta, al igual que el casco y el escudo, se adornó con signos, y que posteriormente tendría una significación heráldica (el escudo de armas). Se fueron introduciendo protecciones para zonas específicas, por ejemplo, los guantes de cuero se recubrían de malla o pequeñas piezas metálicas, también se realizaron me-dias y escarpines de mallas, codales y rodilleras, guar-dabrazos y quijotes, colocados sobre la cota. Vamos, todas las zonas visibles del caballero estaban tapadas con planchas de acero, salvo la parte inferior de los muslos y las nalgas, que quedaban protegidas por la silla y el cuerpo del caballo.

Una armadura de placas (siglo XIV) podía llegar a tener más de doscientas cincuenta piezas con un peso

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de unos 30 Kilogramos. La primera pieza que debía colocarse un caballero al ponerse una armadura me-dieval era la cota de malla. Las piezas se iban sujetan-do entre ellas por medio de correas, ganchos, tuercas y clavos. . Para montar toda la armadura el caballero necesitaba de un escudero que le ayudara a vestirse y desvestirse, y a colocarse en el caballo. Éstos además de ser sus compañeros asiduos eran sus sirvientes, y les limpiaban la armadura y las armas, y custodiaban sus bienes y pertenencias, e incluso llegaban a dormir en su puerta como guardián. También les curaban las heridas, y en el caso de que el caballero muriera ellos eran los encargados de hacerles un entierro apropiado.

Para combatir también se usaban caballos con arma-dura, para poder defenderse de los ataques de los com-batientes, en el siglo XII algunos caballos ya iban do-tados de armadura o barda. Las piezas utilizadas para la armadura del caballo eran de forma y aspecto muy parecido a la de los caballeros. Primero se empezó a usar el cuero, luego la malla y finalmente los metales. No podríamos hablar de todo esto sino hubieran exis-tido los armeros, las personas que realizaban el trabajo de crear las armaduras. Este oficio viene de años atrás, y tuvo mucha importancia en el Imperio Romano. Muchas familias completas se dedicaban a esta ocu-pación. Lo primero que se realizaba en el proceso de elaboración de las armaduras era la forja, después se pulían, se ensamblaban las piezas y se colocaban las correas, los forros y los rellenos, y en el caso de que lo llevara se grababa el escudo o emblema y se ador-naban, algunas de ellas con oro. El grabado era la for-

ma más tradicional de ataviar el metal, era un proceso complicado y trabajoso. También podríamos hablar de la heráldica, eran unas insignias o blasones que servían para distinguir a los caballeros en el campo de batalla. Cada noble tenía su propio blasón, y lo estampaba en el escudo, el abrigo o en su bandera. Cada insignia era única e individual. Así pues con las insignias los com-batientes podían distinguir a los enemigos. El uso de la armadura medieval fue cayendo en declive, ya que con el invento de la pólvora la armadura dejaba de tener la utilidad por la que se había creado, para los combates cuerpo a cuerpo. A principios del siglo XIV apareció la primera arma de pólvora, esta era un cañón que pro-yectaba lanzas, posteriormente se empezaron a utilizar balas de piedra y de hierro.

Se podrían mencionar algunas anécdotas sobre las armaduras por ejemplo que en algunos casos caba-lleros murieron por infartos o embolias, aunque tam-bién tendría que ver la alimentación tomada antes de la batalla. También habría que destacar que los caballos eran entrenados de una forma especial, solían ser más fuertes y ágiles de lo normal, pero que por el peso que tenían que soportar su movilidad era también más re-ducida.

Espeleños y Espeleñas despojémonos de nuestras armaduras físicas y mentales y, digamos todos juntos y con amor, un año más desde hace siglos:

¡¡¡VIVA LA VIRGEN DE ESTRELLA!!!

A.G.T.

RECORDANDO A MI AMIGA RAFIYo quisiera, me imagino que al igual que todas las demás amigas, dedicar en esta edición unas letras a mi tan querida amiga Rafi. Compartimos juntas nuestra infancia jugando en las plazue-las y calzadas de nuestro pue-blo a los juegos de entonces. Como es ley de vida ambas crecimos y cada una siguió su destino por separado, nos casa-mos, tuvimos nuestros hijos,…

Yo siempre preguntaba por ti a tus hermanas y me entristecí mucho al saber de tu enfermedad y cuál ha sido mi pena al conocer tu muerte ¡qué ingrata es la vida! Ahora te tocaba disfrutar de tus nietos como las demás abuelas pero Dios dispone de nuestras vidas ya que es dueño de ellas. Me siento orgullosa de que hayas formado parte de mi vida. Todos esos momentos los recuerdo con gran alegría. Tu sonrisa era algo que te caracterizaba. Estoy segura que a dónde hayas ido es un buen sitio. Descansa allí hasta que algún día volvamos a vernos para darnos un fuerte abrazo. Un beso grande de tu amiga:

Mari Barbero

Obituario

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Nº 50 • ABRIL 2012Obituario

THE OVNISEl que fue componente del conjunto músico-vocal “LOS OVNIS”, Rafael de los Santos LÓPEZ Rodrí-guez, nos ha abandonado recientemente a causa de una larga enfermedad. Más conocido por “López” era el bajista del grupo y también lo recordaremos por su buen humor, que siempre nos transmitía a todos los compañeros. Tenía 58 años y nos ha dejado una gran persona. Un abrazo estés donde estés, descansa en paz.

Ángel Nevado

Arriba: José Luis-Peliches – Abajo: Luky-López-Manolo

HOMENAJE PÓSTUMO Querida Dolores Arévalo; Camarera Mayor de Nuestra Santísima Virgen de Estrella.

Ante todo , las que hemos compartido y convivido contigo en momentos tan gratificantes y felices como es el poder vestir y arreglar a Nuestra Querida Virgen , desearte un feliz viaje a este , tú nuevo destino don-de nos volveremos a reencontrar en el Reino de los Cielos.

Pues desde estas páginas de “El Barrero” queremos darte un homenaje póstumo, pues ya en su día se te dio en vida, por la dedicación plena que has tenido al servicio de Nuestra Señora, a pesar de que en la vida también hay adversidades en muchos momentos, tú nunca dejaste de estar ahí. Hemos admirado tu forma de ser que has tenido y la manera de haber sabido acercarnos a nosotras desde adolescentes a Ella y ha-bernos hecho cómplices de tu labor.

Gracias por todo lo que hemos aprendido de ti (ya

que tú nunca querías que le dijéramos de usted) a tus palabras y consejos que ahora en forma de recuerdo será lo que nos acompañe a continuar con la misma intensidad y fe que tu lo hacías.

Esperamos que de donde estés nos sigas ayudando y que Dios y La Santísima Virgen de Estrella te tengan en su lugar donde tú realmente te merecías.Q.E.P.D.

Las Camareras de Nuestra Señora La Virgen de Estrella

Maripili del Rey Bejarano

A CARMEN GÓMEZ BRAVO, MI ABUELAEl pasado mes de mayo de 2011, perdí sin más, a la persona que más amaba en este pueblo y de las más importantes en mi vida. Esta persona era y será siem-pre mi abuela. Sin duda muchos la conocereis, sobre todo los mayores.

En fin, que decir... Me resulta extraño llegar al pue-blo y no poder ir a verte, a darte un montón de besos y abrazarte, o a llevarte a tu biznieta, mi hija, que ya no podrá conocerte y disfrutar de tu sincero y desintere-sado cariño.

Eso, desinteresado cariño de quien lo daba todo y a todos sin esperar nada a cambio.

Mujer que la vida la trató muy injustamente, viuda muy joven con cuatro hijos a los que sacar adelante, trabajando toda su vida, pero eso si... dándolo todo y a todos.

Por eso, quiero dedicarte este pequeño homenaje, allí donde estés, que seguro estarás donde van las per-sonas buenas, las personas que saben respetar a todos y no hacer daño a nadie, las personas que se entregan y saben amar de verdad. Allí con tu Virgen de la Estrella.

Quiero que sepas abuela, que yo, tu nieto, nunca te olvidaré, que en mi corazón siempre tendrás un enor-me sitio.

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Arriba: José Luis-Peliches – Abajo: Luky-López-Manolo

ObituarioNº 50 • ABRIL 2012

Quiero que sepas, que siempre te amaré, que en mi mente siempre estará el recuerdo de tu mirada, limpia y sincera.

Pero siempre me quedará el consuelo de saber que al final de mis días, te volveré a ver, y sé que tu me esta-rás esperando, como siempre, con tus brazos abiertos. allí donde quieras que estes.

Tu nieto siempre:

Daniel Luque Ramirez

HOMENAJE PÓSTUMO Querido esposo, querido papa, querido abuelito,

querido suegro:Hoy te escribimos estas letras las cuales nunca ima-

ginamos que tendríamos que escribir. Tantos años vivímos a tu lado, tantos buenos y malos momentos, tantas peleas y nunca pensamos te echaríamos tanto de menos como hasta ahora. Maldito cinco de Enero, te separó de nuestro lado, te arrebató todos los sueños, todas tus ilusiones, todas tus ganas de vivir.

Fuiste hombre valiente, llegaste a bromear sobre tu enfermedad e intentaste vencerla y ella no te dio ni la más mínima oportunidad. Cuántas veces admiramos tu valentía, tus ganas de vivir, de seguir luchando, como llegamos a envidiarte por ser tan fuerte y no perder la esperanza de que algún día saldrías de ese pozo sin fondo.

Querido esposo, querido papá, querido suegro, mu-cho tiempo hemos perdido ¿verdad?. Tiempo que ya nunca podremos recuperar. Que injusta es la vida, hay gente que se quita la vida porque está cansada de vivir y hay gente que se muere luchando por vivir.

Como nos gustaría que en el cielo hubiera algo para recibir cartas y que nos pudieras escribir; sólo para que nos dijeras qué tal te encuentras, para saber que no estás sólo que eres tan feliz como aquí estando con nosotros, así nosotros podríamos dormir tranquilos y podríamos dejar de llorar, porque la fuente de nuestros ojos se esta secando de tanto dolor. ¿Sabes qué? No nos importaría perder un día nuestra vida para poder pasar un día contigo, para poder volver a abrazarte, poder besarte y decirte que a nuestro corazón le falta un pedacito que tú te llevaste al irte. Hoy le pedimos a Dios que te haya guardado un rinconcito y que ese rinconcito sea lo suficientemente grande como para

que algún día podamos volver a juntarnos, Querido espso, querido papa, querido suegro, esperamos que algún día nos volvamos a ver, cuando nos llegue la hora estaremos impacientes para volver a verte y todo el dolor que tenemos ahora desaparezca, porque otra vez volveremos a estar juntos.

PDT: La vida nos separó de ti y la vida nos volverá a juntar.

Querido esposo, querido papá, querido suegro: pro-tégenos y cuida de nosotros tú que estás en el reino de los cielos, nosotros desde aquí protegeremos y cui-daremos tu reino, ese reino que tanto trabajo te costó crear y al que entregaste toda tu vida “el reino de los maeros”. TE QUEREMOS Y NO TE OLVIDARE-MOS JAMÁS.

Tu esposa; Antonia, tus hijos; Rafael, Álvaro, Ma-rio, tu nieto Ismael, tus nueras: Balbina, Christelle y Yolanda.

Antonia Gómez

Carmen Gómez Bravo

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NoticiasNº 50 • ABRIL 2012

ESPERANDO EL MES DE FEBREROUn año más estaban esperando que llegara el mes

de febrero, tenían pensada la ida pero lo que no tenían claro era el día de la vuelta. Me estoy refiriendo a los amigos de la A´lameilla, que un año más han pasado su semana gastro-cinegética (como fue llamada en aquel número 1 del barrero de abril del 96)

Como cada año el grupo de amigos ha pasado su se-mana de convivencia, este año solamente han estado cuatro: Julio, Pedro, Mena y Manolo García, aunque como siempre con el ir y venir de los amigos e invita-dos que van a visitarlos y a ayudarles a comerse todo lo que llevan para estos días.

Aquí os dejo una fotito como homenaje a esa amis-tad para que siempre “perdure”. Ana Morales

AGRADECIMIENTOEl pasado domingo de Ramos, la Cofradía de “La

Borriquita” estrenaba nueva imagen realizada por el imaginero cordobés Enrique Ruiz Flores y portada por jóvenes costaleros.

Desde aquí, la Junta Directiva, quiere agradecer, en particular a la empresa FAESA, por la colaboración aportada a la Cofradía así como dar las gracias al Ex-cmo. Ayuntamiento de Espiel y, en general, a los es-peleños que participan de manera desinteresada en los actos que organizamos para recaudar fondos. La Junta Directiva estamos trabajando día a día en pos de que nuestra Semana Santa siga estando activa. Con la ayuda de todos lo conseguiremos.

Rafael Naranjo Frías

“AHORA CAIGO”Todo comenzó

un día que estaba en mi casa viendo el programa. Vi el número de teléfo-no para participar y sin esperar que me llamaran mar-qué el teléfono. Al

cabo de las dos semana fui seleccionado para el cas-ting, me citaron en un hotel conocido de Córdoba y después de 3 horas de casting, con diferentes pruebas, de los 100 participantes quedamos 4 de los cuales nos dijeron que nos llamarían. A las tres semanas sonó el teléfono que había sido seleccionado para concursar.

Se ocuparon del transporte, alojamiento etc.. Una vez allí los nervios empezaban a asomar. Llegó la hora, todos corriendo, nos llamaron para maquillaje, finali-zado el maquillaje, nos propusimos a entrar en plató y a comenzar a grabar. En mi caso fui el segundo ele-gido para concursar contra la oponente central. Varias preguntas acerté. Una de ellas, que no se me olvidará MECANO, me hizo caer por la trampilla. Eso suma-do a los nervios de mi primera vez en televisión, pero resumiendo una experiencia nueva que la recomiendo y próximamente estoy a la espera de concursar en nue-vos programas de televisión. También decir, que se me ha olvidado, que la caída es bastante divertida

Noé Murillo

“En el perdigón”

“La Borriquita”

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NoticiasNº 50 • ABRIL 2012

SENDERISMO POR ESPIELEl pasado día 11 de Marzo dentro del término de Es-piel se hizo una ruta de senderismo, Calatraveño-Río Guadalbarbo.

Fue organizado por el club de Senderismo Los Pe-droches, uniéndose de otros club de Córdoba, Bélmez, Los Pedroches y tres aficionados de aquí de Espiel , en total unas 100 personas aproximadamente.

Se inició con el ascenso al Cerro Sordo, donde es-tán situadas las antenas del Calatraveño (933m.) desde donde se ven vistas espectaculares divisando las llanu-ras de Los Pedroches y Sierra Morena, en esta zona hay bastantes ciervos y jabalíes, pero nosotros en esta expedición no vimos nada, muy normal, ya que estos animales al oír el jaleo huyen .

El descenso fue a través de cortafuegos hasta llegar al río Guadalbarbo desde donde comenzamos otra vez la subida hasta el punto de partida. Fue un circuito de

14 Km. de recorrido. Esperamos que sigan haciendo más rutas por nuestros terrenos de aquí de Espiel ya que tenemos uno de los términos más grandes de la provincia de Córdoba.

Mª del Pilar del Rey

PEÑA LOS 53El día 4 Marzo la peña Los 53 del Real Madrid de aquí de Espiel celebró una Comida de Hermandad. Fue un día de convivencia entre socios y acompañan-tes.El día fue muy cordial y ameno incluyendo algunas actividades y terminando como colofón viendo el partido, Real Madrid-Español.Esperamos seguir celebrándolo durante los próximos años.

CURSO DE RESTAURACIÓNHemos finalizado el curso que empezamos hace unos tres meses y en el que se han restaurado los sillones, sillas, sofás y mesas que había en el antiguo Ayunta-miento. Ha sido un trabajo laborioso pero que ha dado un resultado final inmejorable. Esperamos que a todos os guste cuando podáis ir a verlos al nuevo museo. Desde aquí dar las gracias a todas las compañeras y compañeros que durante este tiempo hemos comparti-do la tarea, los buenos ratos pasados, el café, las risas y todos los momentos que siempre llevaremos en el recuerdo y como no a Gema por enseñarnos y aguantar nuestras ganas de bromas ya que para nosotros ha sido un placer. Un beso para todos.

Ana Serrano

Paco Caro

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NoticiasRONDALLA CORAL ESPELEÑA

La Rondalla Coral Espeleña aprovecha esta edición especial (Nº 50), para invitarles a que nos acompañen en nuestras actuaciones que se celebrarán próxima-mente en las fechas siguientes:

Viernes, 27 de Abril – Como viene siendo habitual

en los últimos años esta Agrupación musical, cerrará el Premio Nacional de Poesía Acordes, que este año cumple 20 años. El repertorio elegido para esta edi-ción será repartido en dos bloques, donde en el primer apartado oiremos temas como: - CIELO ANDALUZ (Alfonso Jofre de Villegas y Carlos Castellanos) - ABRIL (Carlos cano) - HABANERAS DE CÁDIZ (Antonio Bur-gos y Carlos Cano)Y en el segundo bloque disfrutaremos de temas tan conocidos y esperados como nuestros himnos de la Romeria en honor a la Virgen de Estrella, patrona de Espiel: - PASACALLES DE LA ROMERIA - VIRGEN SANTA DE LA ESTRELLA - DESDE EL TRONO DE AMOR DONDE REINASViernes, 11 de Mayo – Con motivo del Festival de los Patios cordobeses, la Rondalla Coral Espeleña actuará en dos emblemáticas y típicas plazas de nues-tra ciudad de Córdoba, como son Plaza de San Basilio (junto a la iglesia de San Basilio) a las 21.30 h. aprox. Y Puerta de Almodovar a las 22.30 h. aprox. interpre-tando canciones a Córdoba como:SERENATA A LA MEZQUITA / CAMINO DEL

SANTUARIO / NOCHES DE MI RIBERA CORDOBESITA / YA VAN A LA CRUZ DE

MAYO / CANCION DEL PUENTE VIEJO….Todas estas obras del Cancionero cordobés, son del

“maestro” RAMÓN MEDINA ORTEGA (cantor del pueblo cordobés). Músico y compositor nacido en Brihuega (Guada-lajara) el 7 de junio de 1891 y fallecido en 1964. A título póstumo, recibió el reconocimiento de su ciudad adoptiva, siendo nombrado Hijo Adoptivo de Córdoba y conce-diéndosele el Potro de Oro. Además, se le dedicó un monu-mento en la plaza de San Agustín. Recordemos algunos fragmentos de sus letras:

Tradiciones populares cordobesas. Como los patios y las cruces. Recordemos la conocida “Cruz de Mayo”, donde tan bellamente canta al patio “castizo”. ¿Cómo se podría definir mejor lo que son las cruces?“tu Cruz de Mayo es un cielo, chiquitito que Dios hizo,

y lo puso en nuestro suelo…”La mujer cordobesa. Es para Ramón Medina el

prototipo de belleza, con su porte “gitano”, esa cordo-besa capaz de “desafiar al sol bello que al ver tus ojos se esconde”. ¿Hay algo más hermoso que ese pasaca-lle que titula Cordobesita y que hoy entonan nuestros tunos y que dice:

“por el Puerto de la Salve, cordobesita de rostro her-moso,

te dije, con la mirada, cordobesita que estoy celoso.El Sol que te está besando, cordobesita, lanza un sus-

piro, prefiero que esté nublado, cordobesita, cuando te

miro”.Sin más, esperemos contar con su presencia en estas

actuaciones y aprovechamos la ocasión para desearles feliz romería.

Ángel Nevado Mansilla

NOTA ACLARATORIA: En la anterior revista, nº 49, y en el artículo SENDERISMO ESPIEL-VILLAVICIOSA no se incluyó por omisión lo siguiente:

- Que Matilde Pérez y Carlos Caballero son dos senderistas que participaron en esa travesía.- Que Carlos Caballero fue premiado por ser el senderista más joven de los participantes al tener 9 años de edad. Manuel Caballero Sánchez

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SEMBLANZA DE UN BUEN AMIGOCualquiera de las personas conocidas puede ser un

amigo. No es cierto. En términos generales se suele crear un concepto. Decimos lo anterior porque a lo largo de nuestra dilatada vida lo hemos experimen-tado. La amistad verdadera es un vínculo que se va formando lentamente y esta situación es la que yo he conocido realmente. Fue durante nuestra juventud y a lo largo de nuestra vida permaneció sin altibajos hasta el final.

Esto es lo que me ha ocurrido a través de nuestras vidas entre Francisco Alcaide Gómez, fallecido hace poco tiempo, el 02-10-2011 (q.e.p.d.), y mi amistad con él. Nace ésta de una manera voluntaria viniendo su actuación desinteresada y su afán de solucionar las di-ferencias existentes en sus maneras de pensar y actuar. Siempre en nuestra juventud solucionó las “papeletas” de los diferentes actos en nuestro deporte preferido, “el fútbol”, juego en el que estábamos actuando un grupo de deportistas juveniles, a los que no he olvidado y que fueron también buenos amigos.

Antes de la guerra estuvo colocado en Telégrafos de Espiel y cesó al final de la contienda. Pasaba el tiempo y la hombría de Paco se iba forjando entre la de nuestros amigos deportivos siendo muy apreciado por ellos y existiendo una buena amistad entre todos. Siempre estuvo con el fútbol.

No fue motivo que yo tuviera que pasar en mis estudios tiempo fuera de Espiel pues la amistad siem-pre estuvo presente. La ocupación de Francisco como empleado de Telégrafos terminó con la iniciación de la guerra. Llegó una época difícil pero esto hizo que ter-minara de forjar nuestras vidas y principalmente la de nuestro querido amigo Paco, el cual fue incorporado a filas del ejército gubernamental hasta el fin de la con-tienda. Fue enviado a Marruecos a hacer el segundo servicio militar de su vida (éste con los nacionales). Su vida, no obstante, mantuvo sus maneras pacíficas y

así lo han reconocido por la mayoría de los espeleños. Terminado su último servicio militar fue licenciado y regresó a Espiel dónde atravesó una situación econó-mica difícil a la que se enfrentó trabajando intensa-mente para salir adelante con su familia hasta lograr situarse lo mejor posible consiguiendo un aprecio en Espiel durante toda su vida.

En varias ocasiones me ayudó con su prodigiosa memoria a aclararme conceptos de sucesos antiguos. Esta semblanza espera hacer constar que Francisco Alcaide Gómez fue “el amigo que yo conocía”. Era un “gran Francisco Alcaide Gómez” . Un hombre apa-rentemente normal pero con un fondo de grandeza en su vida a pesar de la adversidad en la que sin motivo suyo, la posguerra, lo hizo hasta que consiguió situarse en la vida, dónde no obstante Paco, que tenía un espí-ritu alegre, fue “letrista” de las Murgas en el Carnaval de Espiel. Era Paco, la persona dispuesta a ayudar con su consejo y acciones a sus amigos. Siempre estuvo pronto a aclararme cualquier dato que yo ignoraba. Su persona irradiaba una paz constante lo que hacía que todos confiáramos en él. A lo largo de nuestras vidas funcionó en muchas ocasiones la relación telepática debido a mis ausencias de Espiel por razón de mi tra-bajo. Fue una persona muy bien relacionada con su esposa, hijos y familiares por razón de su persona. Yo solo siento que no pude acompañarlo durante los últimos días de su vida por estar imposibilitado en el hospital de Córdoba pero quedándome con buenísimos recuerdos suyos.

Aprovecho esta ocasión para volver a manifestar-les el pésame a su esposa, hijos, hermanas y demás familia. Que Dios acoja tu alma en el cielo ¡PACO, GRAN AMIGO! Siempre estarás en nuestros recuer-dos (Q.E.P.D.)

Antonio Vizuete Rodriguez

MERCEDES RIVERA RODRIGUEZEspeleña de adopción,

pero nacida en Fuente Obejuna el 15 de abril de 1922, nos dejó el 25 de septiembre de 2001.

Destacó siempre como persona emprendedora e imaginativa, con un pro-fundo sentido del deber y de la responsabilidad tanto de sus obligaciones laborales como familia-res.

Se incorporó al mundo laboral, en el Hotel Gran Ca-pitán, de Córdoba, cuando sus hijas ya eran mayores y pese a la escasez de tiempo por el trabajo fuera de casa, siguió escribiendo, incansablemente.

La mayor parte de su obra poética permanece aún inédita y, de su obra publicada, destaca el poemario “Entre el oleaje de mi corazón”, un volumen de setenta y nueve páginas, editado por El Paisaje en 1981 y con el que obtuvo el premio especial de poesia de Arangu-ren (Vizcaya). Otro de sus poemas premiados fue “Me arrebata por vivir”.

Además sus versos han sido recogidos en la revista que anualmente publicó la Asociación Literaria Walla-

Personajes

Pregonera en 1990

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Personajesda, de la que fue secretaria, entre 1982 y 1987 junto a otras poetas como Africa Pedraza, Amelia Márquez, Araceli Linares, Lola Peña, Rafaela Sánchez... coordi-nadas por Joaquín Criado Costa.

Podemos encontrar versos de Mercedes Rivera tam-bién en el volumen “Estirpe en femenino, 28 poetas cordobesas” publicado por la Diputación de Córdoba, bajo la tutela de la también poeta Pilar Sanabria y en “El poeta a su tierra” editado en este caso por el Ex-cmo. Ayuntamiento de Fuente Obejuna y coordinado por el también poeta mellariense, Manuel Gahete, así como en revistas del género como Gemma, Acentor, Atalaya, Caliope, Polinia, Clarín, Eleria y Promesas o Córdoba en Mayo, en “El Barrero” nº 2, publicó la poesía “Camino de ermita de Estrella”...

Su obra poética ocupó la mayor parte de su actividad creativa, si bién también dejó escritos algunos cuentos y narraciones breves.

Destacó, igualmente, como pregonera de la Semana Santa de Fuente Obejuna, en un acto que tuvo lugar el 7 de abril de 1990 y que la convirtió en la primera mujer que pregonara la semana de pasión mellariense.

Fue pionera en muchas cuestiones, tales como la for-mación de la mujer, su implicación en la sociedad, su desarrollo en el mundo laboral, independencia econó-mica... que en aquellos años llevó a cabo por conven-

cimiento y que posteriormente han sido bandera de las reivindicaciones de colectivos feministas. De hecho, dentro de los actos programados por el Área de la Mu-jer del Ayuntamiento de Fuente Obejuna, con motivo de la semana de la mujer trabajadora de 2011, fue ho-menajeada por parte del club de lectura de este muni-cipio que exaltó su obra literaria y biográfica.

También fue premiada por el Instituto Andaluz de la Mujer, en el día de Andalucía de 2001, acto en que se destacó su aportación profesional, cultural y humana a lo largo del siglo XX.

De ella escribió en el Diario Córdoba el intelectual cordobés, Rafael Castejón y Martinez de Arizala: “La poesía florece entre nosotros por generación espontá-nea, y donde menos se espera nos brinda sus frutos. Acabamos de leer varios cuadernos de poesía inéditos, escritos por doña Mercedes Rivera, nacida en fuente Obejuna y convecina nuestra hace muchos años. Sus veros floridos, cantando los temas clásicos de la fe y leyendas religiosas, el amor y sus avatares, las bellezas bernáculas y hogareñas, y cuanto hace estremecer de lirismo un alma apasionada y emotiva. Bien merece la pena que tan encantadores poemas, de corte clásico, puedan ser impresos algún día”.

Fdo.: José Maria Martín. Periodista, nieto de Merce-des Rivera.

Debo agradecer a Carlos López (Hijo) la gentileza para con “El Barrero” al haber facilitado la biorafía de Doña Eustoquia escrita por su padre y recogida en las BIOGRAFÍAS DE PERSONAJES ILUSTRES

III DE ESPIEL.Nació en la villa de Espiel, Provincia y obispado

de Córdoba, en el día treinta y uno de octubre de mil ochocientos cincuenta y tres. (P. de b). Ejerció en su pueblo natal y en Bujalance como maestra elemental; opositó y obtuvo plaza como profesora a la Escuela Normal Superior de Maestras del Distrito Universita-rio de Granada (1.882; por permuta, pasó a desempe-ñar igual cargo en el Distrito de Zaragoza, donde des-tacó por su gran labor pedagógica. Está en posesión, entre otras condecoraciones, de las medallas de Oro de los Sitios de Zaragoza y la de Oro de dicha ciudad. Murió en 1.931, después de 58 años ininterrumpidos a la enseñanza.

PreliminarSi a mí, hace poco tiempo, me hubiesen preguntado

quien era doña Eustoquia Caballero Castillejos, ten-dría que contestar negativamente, y como yo la mayo-ría del pueblo, mejor dicho, todo el pueblo a excepción de una familia, que resultó ser, al parecer, una hermana de D. Antonio Olmo de la Torre, que vivió en ella una larga temporada con la intención de hacerse Maestra Nacional. Pero que más tarde, no se supo nada del re-ferido familiar, aunque sí a través de una relación epis-tolar con lo Sres. Olmo – a quién para mí no llegó a

conocer-, si bien estas relaciones se mantuvieron hasta un mes antes del fallecimiento de Dª Eustoquia ya que obra en mi poder fotocopia de la carta que dirigió di-cha señora a la familia Olmo con motivo de la muerte de una de sus hijas (7 de agosto de 1.930). Con esto y con la ayuda de distintos organismos, muy particu-larmente del Rector de la Universidad de Zaragoza, hemos podido hilvanar – no llega a pespuntear – esta parte de su vida.

Lo que si siente uno es rabia de que tus antepasados que lograron niveles encumbrados, no solamente de categoría local sino que deberían haber brillado, por lo menos para los espeleños, en la categoría nacional (en este caso tal vez ella tuvo la culpa por su aislamiento), que no tiene más remedio que recordar aquellos versos maravilloso de Bécquer: “¡Ay!, pensé cuántas veces el genio/ así duerme en el fondo del alma,/ y una voz como Lázaro espera/ que le diga “Levántate y anda”.

Y es cierto, nadie se acordaba de aquella maestrita de escuela, que guardó muy pocas relaciones con sus familiares y gentes del pueblo y salió del mismo casi a escondidas, para que, nada menos que a los, aproxi-madamente, ciento treinta año, nos enteremos ahora de parte de su vida, precisamente la profesional que para mí es la que me interesa puntualizar con más detalle, por haber sido colega de ella: Maestro Nacional.

Recuerdo ahora que cuando yo estudiaba Magiste-rio, coincidí con una compañera de ascendencia ara-gonesa, que tenía una vocación grandísima hacia la

EUSTOQUIA CABALLERO CASTILLEJOS

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enseñanza, y le preguntaba de donde le venía a ella aquella propensión que le arrastraba camino de la pro-fesión más sacrificada – y peor remunerada – de las profesiones. Me vienen a la memoria que me contaba, entre otras cosas, la historia que su abuela, que había estudiado Magisterio en Zaragoza, tuvo la suerte (para muchos desgracia) de haber tenido una profesora que, más tarde llegó a ser Directora de la Escuela Normal Superior del Distrito Universitario de Zaragoza, que supo seleccionar entre sus alumnas las que verdadera-mente sentían amor hacia aquella la enseñanza. Aho-ra, al conocer, más o menos, la carrera profesional de aquella señora en que los dos sin saberlo estábamos encartados, por casualidad, en la semblanza de Dª Eus-toquia, que presidió más de 125 tribunales para ingreso en la Escuela de Magisterio del Distrito de Zaragoza y de las 2.587 alumnas que ingresaron en el Estableci-miento durante su mandato. Por estos motivos pienso que, tal vez, la vocación de aquella maestrita podría provenir de la que le inculcó nuestra protagonista. Más tarde, después de sacar las oposiciones, ella se fue para su tierra y al separarnos no pudimos hablar de los antecedentes profesionales de su abuela y que, a lo mejor, yo guardaría mentalmente algún dato de la pre-existencia de Dª Eustoquia. De esta forma hubiésemos podido ahora sacar consecuencias casi directas de la labor pedagógica desarrollada por nuestra paisana. Me consta, esto sí, que las Maestras aragonesas han tenido siempre acreditada fama de su elevada preparación, y sobre todo, por su vocación profesional. Tal vez de es-tos diálogos hubiera salido algún tema relacionado con Sra. en cuestión que ahora me hubiese servido para conocer con más detalles su vida privada, que si bien algo se desprende de lo que dejó escrito en cuanto a su vida profesional, no deja entrever ni un ápice en cuanto a la segunda. Menos mal que bien dice el re-frán que “quien busca encuentra” y yo, de una manera casual, he encontrado a unos amigos, que incluso la visitaron en Zaragoza, a quienes he podido sacar algo muy superficial de los que recuerdan de su vida de una manera sui géneri.

No puedo dejar en este preliminar de hacer una can-tata a la profesión de Maestro Nacional, tal vez la más degradada y peor remunerada, repito, de las profe-siones, sin darse cuenta el inmenso papel que aquel Maestro o Maestra estaban desempeñando dentro de la sociedad. Aún están en mi memoria las veces que, en aquellos pueblecitos, donde te calificaban como “se-ñor”, tuve que intervenir en múltiples profesiones (es-cribano, albacea, testamentario, topógrafo, pacificador familiar, futbolista, etc., etc.). Por eso durante mis años de ejercicio nunca permití que por mis alumnos se me cambiara el título de “Maestro” por otro más altiso-

nante y, al parecer, de mayor prestigio y sapiencia. Por otro lado yo pensaba para mis adentros: “Cuando en todas las profesiones se lucha por alcanzar la categoría máxima para ser “Maestro”, desde el peón de albañil, al médico, al literato más ilustres, al herrero, etc. ; a nosotros que se nos ha dado ese título, por la gracia de Dios, conocido en la Tierra por “El Maestro”, cua-tro cursilones y un Ministro, que no sabían, al parecer, el significado ni la labor que encierra ser Maestro de Escuela, se nos priva de él y se nos da otro que, sí, es más pomposo –viste actualmente-, pero que no abarca plenamente el cometido para que fue creado el título “Maestro”.

La labor del Maestro no termina en la escuela sino que trasciende a la familia, a la sociedad, influyendo en ambas de una manera notoria, tanto es así que estoy por afirmar que esta juventud que actualmente sube, de los muchos defectos de que adolece, procedan del sistema educativo que se les ha impuesto. Antes todo era la relación niño-maestro-familia (sociedad); ahora todo se fundamenta, en libro-Profesor-Consejos Esco-lares, de tal forma que el niño pasa a un segundo térmi-no, para dar preferencia al “pequeño universitario”. Da pena ver a los niños de seis, siete y sucesivos años con una mochila a la espalda llena de libros, que parecen escaladores más que ir a la escuela.

Por esto, y por larga vida transcurrida, toda ella rela-cionada con la enseñanza (algo más e 58 años), tan rica en acontecimientos que, ampliados con un gran núme-ro de datos, opiniones y documentos, propios unos y llegados los otros por generosa donación del Departa-mento de Didáctica de las Lenguas y de las Ciencias Humanas y Sociales de la Universidad de Zaragoza, así como de los Archivos, tanto municipal como pro-vincial, me han permitido el atrevimiento de relatar y, a veces, formar juicio de tan insigne señora.

Con los antecedentes que he podido encontrar, no podemos duda que Dña. Eustoquia dedicó toda su vida a la enseñanza, desde el nivel ínfimo, si es que en esta profesión puede admitirse este calificativo, hasta el nivel máximo. Con todo ello no he querido resal-tar solamente su labor pedagógica, que no fue poca por cierto, sino su vocación profesional que es según Julián Marías “esta llamada que hacia un tipo de vida sentimos, esta voz o grito imperativo que asciende de nuestro más radical fondo”. Este es el mérito de nues-tro personaje, cuyo ambiente tuvo que serle muy difí-cil en su juventud, pero que gracias a esa “voz o grito”. La enseñanza no perdió, no solamente a una maestra prodigiosa, sino que ganó una experta pedagoga que influyó de una manera nacional en la modernización de la enseñanza.

Continuará...Pepe Ortiz

Personajes

SOBRE EL BARREROSu revista me parece perfecta. Fue una iniciativa muy buena su creación para el pueblo espeleño y sobre todo su continuidad en tiempos de crisis en la que muchas revistas gratuitas como el caso de “El Barrero” cierran

temporalmente por no poder hacer frente a su alto cos-te y no obtener beneficio por ello. Sin ir más lejos, le pongo el ejemplo de la revista taurina “La Montera“ en la que colaboro una de las más prestigiosas del pano-

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POSITIVO-CRÍTICA Nº 50 BARREROPositivo:• El hacer los Barreros desde hace unos pocos núme-ros en color ha mejorado la revista haciéndola más atractiva y vistosa.• No cobrar nada por la revista, y más en los tiempos que vivimos.• Acercar los tiempos pasados a las nuevas generacio-nes.• Cada vez participan más personas en su elaboración.• Gracias a la revista conseguimos acercar la cultura del Pueblo a otros lugares de España y a otros espele-ños que están fuera, y añoran nuestra tierra.•El hecho de ponerla en Internet ha posibilitado que accedan más personas a ella. Y puedan descargarse números que de otra forma no sería posible.

• Tener imágenes de los acontecimientos del pueblo.• Incluir la lista de nacimientos, defunciones y matri-monios.• Dejar abierta la posibilidad de que participe quien así lo quiera. Crítica:• A pesar de ser unos 3 números por año, ha habido ocasiones en las que las fechas de entrega han sido muy justas.• Ha habido ocasiones en las que se han reducido escritos, o incluso no se han incluido. Y eso no está bien visto al suponer una criba.

Antonio Gómez de la Torre

ENHORABUENA BARREROMe piden para este especial nº 50 de la Revista el

Barrero que haga una valoración, opinión, del paso de ella por todas y todos los espeleños. Qué decir?, que esta revista a todos y cada uno de nosotros nos llena de alegría en el momento que llega a nuestras casas, que todos, tanto los que viven en el pueblo, como los que estamos fuera de él, nos gusta leer cada una de sus páginas para ver qué o quién ha hecho su colaboración en cada número, qué fotos han puesto, quienes son los que salen en esas fotos, qué dice éste o aquél de los que sucedía antes o de lo que está más actual en nuestro pueblo. Nos gusta que apa-rezcan los datos del registro civil, que haya siempre algún artículo histórico de nuestro pueblo, etc. Mi conclusión es que pienso que a todo el mundo le gusta “casi” todo lo que sale en ella. Es verdad que a veces tiene alguna que otra crítica, cuando en ella salen cosas que pueden verse no del

todo apropiadas para la gente del pueblo, pero el editor como su significado dice es la persona o empresa que publica libros o revistas, y tenemos que contar con ello cuando la Revista El Barrero llega a nuestras manos. Por lo tanto, felicitar a la Revista El Barrero y a Pepe Ortiz por su constancia y trabajo en que esto siga ade-lante, decirle desde aquí a todos y cada uno de los que la lean que las colaboraciones son muy escasas y que se echan en falta las de algunas personas del pueblo que seguro, seguro tendrían mucho que contarnos, a los jóvenes por jóven es, a los mayores por mayores y pensando que en un futuro serán leídos y recordados por los que son ahora nuestros niños. Con la colabora-ción de cada uno de nosotros, llegaremos no solo a du-plicar el número de Barreros que llevamos hasta ahora, sino a muchos más. Enhorabuena por lo pasado y ánimo para seguir ade-lante. Ana Mª Morales Ramírez

Especial Barrero 50

COMENTARIO SOBRE EL BARREROCoincidiendo con el nº 50 de la revista “El Barrero” y aunque voy a hacer algún comentario negativo, quiero que prevalezca siempre lo positivo. Porque bien po-sitivo es que en un pueblo pequeño como el nuestro,

rama taurino cordobés. Dejó de publicarse temporal-mente hace dos temporadas, debido a la crisis porque no podía hacer frente a sus altos costes. Está pendiente de volver a publicar. Por eso valoro mucho el esfuer-zo que usted hace por seguir manteniendo la revista y además mejorando “edición a edición” . Recuerdo las primeras ediciones , eran en blanco y negro y en la actualidad es a todo color. Además del gran progreso en cuanto a contenidos se refiere , tratando todo tipo de los mismos desde la actualidad, cultura, deportes, di-chos populares- una de las secciones que más me gus-

tan por cierto-, nacimientos, defunciones, matrimonios espeleños. Sinceramente la revista es muy completa y creo que no le falta de nada.

Desde aquí, quisiera agradecerle el querer contar conmigo para dar mi opinión . Es para mi un honor el poder colaborar en la revista de mi pueblo y seguiré haciéndolo siempre que usted lo requiera.Sin más un abrazo y ENHORABUENA por la revista y a seguir con esas ganas y cuento conmigo para lo que necesite en su revista. Un abrazo.

Francisco Fidel Nuñez del Rey

tengamos el privilegio de poder disfrutar tres veces al año de esta magnífica revista en Espiel, España y el mundo. Y digo mundo, recordando a todos los que un día tuvieron que dejar su lugar (no pudiendo ver reali-

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EL VIEJO BARRERO“Para todos aquellos que han vivido nuestro

pueblo a través de las páginas de El Barrero”

Las máquinas estaban avisadas. Mañana, a estas ho-ras la casa sería un solar, un sitio vacío lleno de re-cuerdos. Pero antes de que redujesen a escombros el hogar de cinco generaciones de Garcías, Elviro García quiso re-correr, a sus 80 años y por última vez, la casa de su niñez, el hogar de sus vacaciones adolescentes y de sus escapadas veinteañeras cuando el pueblo le recondujo una vida que marchaba sobre raíles no paralelos. Qui-so respirar, por última vez, el sitio donde, también, sus hijas aprendieron a querer el pueblo.

La casa había sido desnudada casi por completo. Casi por completo, los muebles habían sido vendidos a un anticuario que seguramente no tendría ningún pro-blema en revender aquellos enseres de finales del siglo XX tan venerados en la actualidad. Pese a su desnu-dez, las habitaciones seguían desprendiendo olores y sabores conocidos; tan reconocidos que, a medida que iba pisando las estancias, su mente le relampagueaba recuerdos en forma de imágenes claras. En la pulcra, otrora, cocina se vio ayudando a su abuela Virginia a liar y empanar flamenquines que sus padres se lleva-rían cual tesoro a Zaragoza, cuando las vacaciones ter-minasen. En el patio volvió a acariciar a Lince, el gato del abuelo que le dejó marcada su zarpa en la mejilla cuando lo levantó por el rabo. En su habitación, la más fresca de la casa, la que daba a la cerca de atrás, la que iluminaba el primer sol de la mañana, se rompió mo-mentáneamente la magia. Su cabeza se concentró en unos cuantos trastos inservibles: un arcaico reproduc-

tor de blu-ray, un extraño aparato circular del que salía un tubo naranja de goma, algunos marcos electrónicos de segunda generación y una caja de cartón de la que asomaban papeles alcahuetes.

Elviro había dedicado los últimos veinte años a tra-bajar en una fundación que pretendía recuperar los li-bros en papel, extintos hacia 2040. Esta atracción por el papel condujo sus pasos hacia la caja. Empezó a ex-plorar su contenido y al momento se encontró con una revista en sus manos que le transportó a la primavera de 2012. Era el Barrero, la edición especial que se rea-lizó con motivo del número 50. Los recuerdos brota-ron inmediatos e incesantes en su cabeza. Recordó la pasión con la que sus padres esperaban, en la capital de Aragón, cada romería, cada feria, cada navidad para recibir por correo y saborear aquellos papeles hipnó-ticos que ataban a los que estaban lejos a sus raíces y los hacían reencontrarse con el pueblo en la distancia. Esperaban impacientes para devorar cada una de sus páginas que revivían, por momentos, los olores y sa-bores de la sierra y hablaban de costumbres, de fiestas, de sentimientos, de historias que hilvanadas, formaban la historia escrita de un pueblo.

La abrió y releyó algunos de los escritos que habla-ban del Titánic, de Eustoquia Caballero, de las cuevas del castillo, de la visita de un Obispo… Se le empezó a anudar la garganta, a pesar de tragar saliva balsámi-ca. Se le empezaron a saltar las lágrimas y empapó las hojas, acartonadas por el tiempo, cuando sus ojos se detuvieron en una foto en la que se veían, debajo de un chaparro, a las tres generaciones de Garcías que lo precedieron. Era la romería. Eran felices.

Manuel Ángel Barbero Abril

Especial Barrero 50zada la frase de mi padre: “ Lo mejor de Espiel, vivir en él”), pero al menos pueden deleitarse de los aconte-cimientos espeleños a través de las nuevas tecnologías. ¡ENHORABUENA BARRERO!.

Teniendo en cuenta y con todos mis respetos a su excelente director, me gustaría que de algún modo y tal vez con alguna ayuda del ayuntamiento, juzgado e Iglesia, fuesen más completas las inscripciones de nacimientos, enlaces matrimoniales y defunciones.

También, a veces, ha habido artículos sin nombre del

titular que han intentado subsanarlo en el nº siguiente. Y alguna vez no se han publicado artículos o foto-

grafías sin ser anónimas.Esto es lo único negativo que encuentro restándole

toda la importancia que pudiera tener, es decir, que son cosas que pasan y que no lo debemos de dar importan-cia, téngaseme en cuenta a mí que solamente lo digo con intención de mejorar lo mejor.Así que a seguir “ PALANTE”

Anabel Reyes Ortega.

EL BARREROSi hay una cosa que suele caracterizar a muchas re-

vistas como la nuestra de “El Barrero” es el fracaso temporal: a unos cuantos números de su inicio, acaban por perderse. Y a saber cuál de las múltiples causas que pueden condenarle fue la que provocó el cierre de

la última. Revistas que sin duda alguna nacieron de la ilusión, del empeño de unos poco que creyeron en el proyecto, que probablemente contaron con algún apo-yo institucional, y que incluso gozaron de cierta tirada. Y sin embargo, muchas de ellas, apenas llegaron a los

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OPINIÓN SOBRE EL BARREROMi opinión sobre la revista es inmejorable, y, sobre todo, de su director, opinando que, si no fuera por tu constan-cia y esfuerzo, según mi opinión, la revista habría desaparecido hace tiempo, ya que los espeleños, por lo general, somos bastantes inconstantes. Por otra parte no encuentro ningún asunto que se pudiese mejorar. Hay cada vez más participación y mejor. Antonio Giménez Azcona

¡BARRERO, GRACIAS POR EXISTIR!Queridos paisanos, es un honor para mí poder cola-

borar en esta edición especial de “El Barrero” alcumplir su número 50.

Hace ya tiempo que esta revista ha visto la luz y so-mos muchos los que hemos aprovechado sus páginas para acercarnos a vosotros y poder contaros nuestras vivencias, sentimientos y comentarios.

Como este número es especial me gustaría colaborar con él con unas fotos que considero también son muy especiales.

Son once fotos antiguas de nuesto pueblo y al lado os adjunto la misma imagen en la actualidad. De esta forma podreis apreciar la evolución de nuestro pue-

blo, yo creo que en la inmensa mayoría de los casos la evolución ha sido muy favorable, pero evidentemente también sé que para muchos de vosotros, sobre todo los más mayores muchas de estas fotos os traerán re-cuerdos nostálgicos, de cuando érais niños y os veréis jugando por nuestras antiguas calles,ojalá disfrutéis viendo las fotos.

Mi mayor deseo en esta ocasión es que nuestra re-vista pueda celebrar no sólo su número 50, sino su cincuentenario, o sea, cincuenta años de vida y que podamos seguir leyéndola y disfrutando de ella como hemos hecho hasta ahora.¡ BARRERO, GRACIAS POR EXISTIR”.

Estrella Doñas

Especial Barrero 50dos dígitos en sus números. Por eso, echando la vista atrás, podemos decir que “El Barrero” se nos ha hecho mayor. Mayor, sí, pero no viejo, porque ni lo es, ni metafóricamente quisiera acercarlo a un final que ojalá ande muy lejano.

Grosso modo podría decir que, atendiendo a lo tem-poral, “El Barrero” es el paso y el presente, letras e imágenes que nos muestran como fuimos y como so-mos. Bueno es saber de dónde venimos, y con ello aprender para avanzar, para intentar no recaer en las caídas, para enorgullecernos de lo que fuimos, para elegir lo que somos y para seguir cimentando lo que seremos.

Su primer número salió en Enero de 1996. Ya ha llo-vido desde entonces. Dieciséis años desde que Pepe Ortiz y Matilde Cabello plasmaran la idea de esta re-vista espeleña, seguramene, una ilusión hecha reali-dad. Hoy tenemos en las manos el número 50.Matanzas, taxis, retratos de feria y el inicio de grupos musicales, caballitos y veladores, el banco de las sue-gras, carrozas de romería, mulos y cortijos, vestidos de sevillana y sombreros cordobeses... fotografías que nos recuerdan, que nos hacen presentes a los que se-guimos estando y, sobre todo, a los que ya se fueron.

Su portada es una ventana abierta al recuerdo y a la meditación, una ventana que huele a Espiel.

Al abrir su primera página, aparecen los nombres de la edición, de la subvención y la imprenta, de la publi-cidad y colaboración. Luego, en la sección editorial, la bienvenida de nuestros alcalde. Cartas al director, opi-nión, cultura, noticias, personajes, deporte o recuer-dos entrañables suelen ser secciones habituales. En la contraportada, SECOBA y BARBERO, materiales de construcción y fabricación de embutidos que ayuda-ran como otros (PASTELERÍA TALA, Expendedurías de ANTONIO BEJARANO y GLORIA CABALLE-RO, la Alta peluquería FRANCISCO Y PILAR...) a la aportación financiera del Ayuntamiento. ¿Quien podrá dudar de que estas páginas huelen a nuestro pueblo? Es por eso que resulta enriquecedor... porque se nos hace propio.

Quiero acabar estas líneas de congratulación y agra-decimiento animando a continuar a todos los que ha-cen posible que, tres veces por año, sigamos viendo la portada que nos felicita la fiesta inmediata. Y con-fiemos en que la próxima edición especial sea la de la centena. ¡Enhorabuena Pepe!

Antonio Fuentes Cejudo

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Ayuntamiento de Espiel

Actual C/ AndalucíaAntigua C/ Jose Antonio

Cuesta de la iglesia

Especial Barrero 50

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Antiguo altar iglesia de S. Sebastián Actual altar iglesia de S. Sebastián

Calle San Isidro

Antigua casa de telégrafos La misma casa en la actualidad

Calle Ramón y Cajal

Especial Barrero 50

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Paseo Ramón y Cajal

Actual casa de la cultura

Actual plaza de la LibertadAntiguo Paseo Viejo

Antiguo cuartel de la guardia civil

Antigua vista del “Banco de la suegra” La misma vista en la actualidad

Especial Barrero 50

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Nº 50 ¿QUÉ NOS DICE ESTE NÚMERO? Este número nos dice que ya van CINCUENTA ejemplares de nuestra revista “El Barrero” desde que salió el número cero.

Nos parecía que Espiel no tenía leyenda ni historia y, también hay que decirlo, que no llegaría a este núme-ro. Hay muchísimas personas que han escrito en ella sobre las costumbres, orígenes, leyendas, historias y vivencias del día a día. Se ha escrito sobre visitas im-portantes que han pasado por aquí, acontecimientos, uno de ellos la Cruz de los Jóvenes y junto a ella el Icono de La Virgen que ha ido visitando todo el con-tinente. Cada número trae algo nuevo y que todos esperamos con anhelo para leer sus escritos y ver sus fotografías,

la mayoría de ellas sacadas del álbum de antaño y que gracias a ellas hemos vuelto a recordar y comentar unos y otros lo plasmado en ellas.

Y poniendo punto y final a este escrito no he podido olvidar a su director por este trabajo buscando entre otras cosas artículos de personas que pasaron por aquí para que nosotros pudiéramos conocer sus historias.Ánimo que sigas con esta labor y ¡felicidades! por tu 50 revista que sin director, no existiría.

Un saludo a todos los lectores y que paséis una feliz Romería.

Pilar Bejarano Barbero

Especial Barrero 50

FELICIDADES BARREROAllá por el año 1995 cayó en mis manos una SAETA editada en el 1959. Conocía su existencia y sabía que solía salir por la feria y en la que participaban muchos espeleños. Por los motivos que fuesen no hubo conti-nuidad y desapareció. Pensé en retomar aquella idea y al momento empecé a emperejilar “El Barrero”.

Esbocé el proyecto y me puse en contacto con per-sonas que sabían y tenían más experiencia que yo en estos menesteres para exponerlo y me dieran su opi-nión. Fue Matilde Cabello la primera persona que supo de mi inquietud. Don Antonio Vizuete, la segunda. La idea les pareció muy interesante por lo que decidimos hacerle la sugerencia al Alcalde, José Antonio Fernán-dez y que su publicación se hiciese a través del Ayun-tamiento. Después de varios encuentros entre Matil-de, don Antonio y yo para ir perfilando el proyecto y teniendo más o menos decidido el cómo nacería “El Barrero” nos citamos una mañana de otoño de 1995 en el bar “El Barril” para tomar un café con José Anto-nio Fernández, el Alcalde, y exponerle la idea. Desde el primer momento a José Antonio le pareció genial y nos dio su aprobación para presentarlo al Pleno del

Ayuntamiento.Así fue como, a grandes rasgos, nació la revista.

Dirigida por Matilde Cabello y Pepe Ortiz y subven-cionada por el Excmo. Ayuntamiento de Espiel. Co-laboraron en el número cero, que se publicó en enero de 1996, José Antonio Fernández, ZITRO, Ana Mora-les, Matilde Cabello, SAVAN, AMPA del C.P. Antonio Valderrama, Pepe Ortiz, Julio Morales, Luis Navas, Paco Juárez y C.P. Antonio Valderrama. Salió con 16 páginas y sin publicidad. Del número cero destacaría la Editorial firmada por José Antonio Fernández Ro-mero, el Alcalde, en la que marcó 5 objetivos que con la publicación del ejemplar número 50 creo que se han cumplido en demasía:

1.- “…que Espiel tenga su propia revista porque creemos que la información es la base de convivencia ciudadana y en la cultura el elemento imprescindible para un pueblo…” La revista nos da más libertad para expresar nuestras opiniones y lo hemos cumplido.

2.- Se bautizó con el nombre de “El Barrero” por-que “…desde siempre ha sido y sigue siendo el lugar de encuentro por excelencia de los espeleños y espe-

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Especial Barrero 50leñas…” La tradición continua y lo hemos cumplido.

3.- Animaba José Antonio a que “… todos los es-peleños nos uniéramos entorno al “Barrero” y ex-perimentar el orgullo de ser espeleño y la alegría de hacer algo nuestro…” El objetivo se ha cumplido y con creces.

4.- “… que “El Barrero” sirva de nexo de unión y poder sentir Espiel a través de la revista en aquellos espeleños que tuvieron que emigrar para que su ida no sea definitiva…” Este objetivo también está más que superado.

5.- El último objetivo: “CADA PUEBLO SERÁ LO QUE SUS VECINOS QUIERAN QUE SEA” y aquí está nuestro “Barrero” celebrando su 50º edición gra-cias a la colaboración y participación de todos los es-peleños que han apostado por mantenerlo durante 16 años y espero que sigan haciéndolo para su continui-dad. El objetivo está cumplido pues así lo ha querido el pueblo.Quiero expresar mi gratitud a todas las personas que

con su colaboración y participación hacen posible este proyecto así como los ánimos que me hacen llegar para mantener su continuidad y de forma muy espe-cial a: Sergio Cortés “SECOBA” , Juan Pedro Barbero “SUPERMERCADO” , Pilar Bejarano “ESTANCO” , Francisco y Pilar “ALTA PELUQUERIA” , Juan José Márquez “PASTELERIA TALA” , Gloria Caballero “EXPENDIDURIA Nº 3” y Antonio Bejarano “EX-PENDIDURIA Nº 1” por su fidelidad y tradición en la inserción de su publicidad.

Aunque “El Barrero” número cero salió en enero de 1996, el número 1, lo hizo en abril de ese mismo año coincidiendo con el mes por excelencia de nuestra Pa-trona, la Virgen de Estrella, por lo que pienso que no es casualidad que la número 50 la celebremos en abril de 2012 después de 16 años de andadura. Estoy seguro que Ella “…nos iluminó el camino.”

¡¡ FELIZ ROMERÍA!!Pepe Ortiz

COMENTARIO DEL BARRERO

Amigo Pepe: La revista El Barrero tiene una buena calidad. Podría

ser mejor pero no hay que olvidar que estamos ante una revista de carácter local.¿Qué me gusta de ella en particular?- Las fotos que aparecen, sobre todo si son antiguas.- La calidad del papel e impresión en general, que dista ya mucho de aquella “Saeta” que conocimos en nues-tros años jóvenes- Y sobre todo la cohesión que logra con los espeleños, tanto si viven en la localidad o fuera de ella. Estoy se-guro que muchos de ellos esperan su llegada.

¿Qué me gustaría?- Sobre todo que apareciesen nuevos autores. Cuando yo empecé pensaba que escribiría tres o cuatro artícu-los, y ya he perdido la cuenta. Y aguantaré todo lo que aguante el cuerpo. Con esto lo que quiero decirte es que estoy seguro que muchos espeleños están capaci-tados para participar en ella. Sería cuestión de animar-los y que se decidiesen a escribir sus vivencias.A mí, por ejemplo, me encanta leer artículos escritos por espeleños que viven fuera

Juan Manel López Márquez

Recuerdos entrañablesNº 50 • ABRIL 2012

Día de “Judas.”

Día de “Judas.”

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Romeria

Familia Gómez López.

Año aprox 1971.

Con la virgen en la puerta de la iglesia.

Gloria Gómez López y

Aquilino García Muñoz.

Año aprox 1963.

Grupo de amigos en Estrella.

Arriba el 2º por la izquierda Miguel Gómez López, el 4º José Gómez López.

Año aprox1967

Hermanos de la Virgen

Hermanos de la Virgen

Con la Virgen en la puerta de la Iglesia. Gloria Gómez López

y Aquilino García Muñoz. (1963)

Familia Naranjo

Niños de Romería

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De izq a dcha Rafael Abril, Antonio Nevado, Antonio

Nevado, desconocido, Paquito Doñas, Fco Nevado hijo,

Fco Nevado. (año 50).

Hermanos de la Virgen Rosi Arana Martínez, Eugenio Sedano, Ana

Mari Nevado Sandoval, María Martínez, Vir-

túdez Gómez García, Ana Serrano Arévalo, Se-

bastián y María del Carmen Martínez Muñoz.

Celebración de la Jubilación de Dña. Fernanda Baena

López

Charito, Amelia y Conchi

Boda de Alfonso Blázquez Castellano (Cartero en Espiel

durante 7 años) con Antonia Sánchez Barbero (1964).

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Ángel, Marcelina, Pilar, Ángela. Ángel, Ricardo, María

y Ricardo del Rey

Familia de Sergio Cortés en la Romería.

Charito Arévalo, Manoli Caballero, Lourdes Mayoral, Amelia

Fernández y Elvirita Arévalo. (25-04-1960)

Charito Arévalo y Elvirita Arévalo

Familia Sánchez Pérez en la Romería De izquierda a derecha; María Gavilán Martínez, Eugenia Gil

Olmedo, Milagros Ledesma, Isabel Cejudo, Carmen Cazorla,

¿?, ¿?. (1959)

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Niños en la Romería

Amigos en la Romería

Pareja en Burro


Familia en la Romería

Amigos de Romería

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Familia Muñóz del ReyFamilia Muñóz en la Romería

Eugenia Gil Olmedo (25-04-1958)

De izquierda a derecha; Alfonsina Fernández Zamora-

no, Isable Cejudo, Prudencio Barbero, Daniel Giménez,

Mercedes Caballero, María Juárez, Eugenia Gil, Antonio

Ledesma, Emilia Alcalde, Francisco Juárez, Juan de la

Torre, Juanin Abril y .... (25-04-1958)

De izquierda a derecha; Isabel Cejudo, María Gavilán,

Rafi Caballero y Eugenia Gil.

De izquierda a derecha; Ángela María Olmo y Paquita Zafra,

Francisco Fernández y Eugenia Gil, Cristino y ¿?, Manuel

Barbero Abril, ¿?, Manolo Barbero Dueñas, ¿? y ¿?,¿?.

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Miguel, Dionisia y Antonia Ramírez Ruiz junto a Juan

Clemente Muñoz

José “el de Elvira” con la Virgen

Familia Fernández Sánchez


De izquierda a derecha; Pepe Ortíz, Antoñita Clemente,

Paqui Serna, Beni Serna, Maricarmen Ortíz y Maricarmen

Sánchez Familia de Romería

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