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Año XXVII - n° 44 - Junio 2014

Año XXVII – nº 44 – junio 2014

Director:Alberto I. Ricica S. fms

Comité de Publicaciones:H. Antonio Ramalho, H. Alberto Ricica y Luiz Da Rosa

Traductores:EspañolH. Moisés PuenteH. Fernando SantamaríaSra. Marcela Quesada

FrancésH. Joannès FontanayH. Aimé MailletH. Fabricio GalianaH. Gilles HogueH. Adrien MercierH. Josep Roura

InglésH. Edward ClisbyH. John AllenSr. Roberto Clark

PortugésH. Aloísio KuhnH. Miro ReckziegelH. Rogério MateucciH. Manuel da SilvaSr. Ricardo TescaroloSra. Tereza Suassuna

Maqueta y fotolitos:TIPOCROM, s.r.l.Via A. Meucci 28,00012 GuidoniaRoma (Italia)

Redacción y Administración:Piazzale Marcelino Champagnat, 2.00144 ROMATel. (39) 06 54 51 71Fax (39) 06 54 517 217E-mail: [email protected]: www.champagnat.org

Editor: Instituto Hermanos Maristas

Impresor:C.S.C. GRAFICA, s.r.l.Via A. Meucci 28,00012 GuidoniaRoma (Italia)

Junio 2014

índiceSeñales de vitalidad del Instituto página 2H. Alberto RicicaCinco palabras para una Conferencia general página 3H. Emili Turú

1. HERMITAGE NOS ACOGE

n UNA VISIÓN DEL NUEVO HERMITAGE página 8El Hermitage nos acoge. Sentido de su renovación página 8Extractos de la carta del H. Seán Sammon “¡Reivindiquemos el espíritu del Hermitage!”Háblanos del Hermitage renovado página 11H. Michel MorelEl Hermitage, una llamada, una familia, una misión página 14Martha Eugenia Martínez

n EXPERIENCIA DEL HERMITAGE página 16La mística de ese lugar página 16H. João GutembergÁlbum de fotografías página 18

2. ORGANIZACIÓN DE LA CONFERENCIA GENERAL

Programa de la Conferencia General 2013 página 24Participantes de la Conferencia General página 26

3. PRIMERA SEMANA: EL HERMITAGE

Costruir una “nueva comunidad” página 30H. Michael De Waas

n FORTALEZAS Y DESAFÍOS página 32Situarse en el mundo y en lo que se irradia en cada provincia o región página 32H. Antonio Giménez de BagüésLos Hermanos jóvenes nos traen energía y entusiasmo página 34H. Josep WaltonLa reestructuración de la Provincia ha abierto nuevos horizontes y reorientado nuestra visión de la misión marista página 36H. Shanthi LiyanageNuevos brotes de vida y grandes desafíos página 38H. Antonio PeraltaLa nueva Provincia: una nueva identidad, una nueva corresponsabilidad, unas nuevas relaciones... página 40H. Jeffrey Crowe

4. SEGUNDA SEMANA: LA VALLA

¡El Señor construye la casa! La Valla: Inauguración de la Casa Champagnat página 44Arq. Joan Puig-PeyÁlbum de fotos de La Valla página 46De Palais a La Vallá: El camino desde la llamada hasta la concreción del proyecto página 52H. Luis Carlos Gutiérrez

5. TERCERA SEMANA: FOURVIÈRE

Líder marista hoy página 56H. Maurice Berquet

6. VIVENCIAS DE LA CONFERENCIA GENERAL 2013

Aurora de los tiempos nuevos página 60H. Bernard BeaudinLa vitalidad tiene que ver más con las raíces que con las hojas verdes página 62H. Óscar Martín VicarioUna vida significativa página 63H. Ben ConsigliPulsar de cerca el Instituto y su vitalidad página 64H Ricardo Uriel Reynozo RamírezConferencia general, visos de un esperado amanecer página 65H. Libardo Garzón D. Consolidar la unidad del Instituto yfavorecer los contactos directos página 66H. Wellington Mousinho de MedeirosRevivir la experiencia del P. Champagnat con la primera generación de hermanos página 67H. Valentin DjawuReflexión personal sobre la Conferencia General página 69H. Brendan GearyExperiencia significativa página 70H. Ambrosio AlonsoUn mensaje de libertad para nosotros página 71H. David McDonaldConectar con Champagnat y María de una manera profunda página 72H. Robert TeohUn hermano, místico y profeta, para el mundo de hoy página 73H. César RojasEl susurro y polifonía del agua del Gier página 75H. Javier EspinosaNuestro corazón ardía en el camino. La misión marista en el contexto de la Conferencia General página 77H. João Carlos do PradoFMSI a la Conferencia General página 80H. Mario MeutiInternacionalidad: una Nueva Aurora página 82H. Chris WillsSi se escucha atentamente, cambian las respuestas… página 84H. Josep Maria SoterasConferencia General: Nuestro viaje a la fuente de inspiración página 85H. Eugène KabangukaMi experiencia en la Conferencia General página 86H. Ernesto Sánchez

7. CAMINOS DE CONCLUSIÓN

Nube de palabras página 886 Áreas (Gráficas) página 90Álbum de fotos de la Conferencia general página 92

Señalesde vitalidad

del Instituto

E D I T O R I A L

M i participación en laConferencia General fueparcial, se ciñó a la ta-

rea de relator y fotógrafo. Peropude percibir fuertemente el es-píritu fraterno que unía lenguas,costumbres, visiones diferentesde la realidad, continentes… Allado de esta fraternidad tan re-marcada me impresionó la formacomo se vivieron los momentosde oración, tanto personalescomo comunitarios. Se respirabapaz y sosiego interior.

ITINERARIO DELA CONFRENCIA

El itinerario de la Conferenciageneral se desarrolló en tres se-manas. La primera semana cen-trada en el Hermitage, como“Casa madre” que nos acogió atodos. La temática de esta se-mana estuvo orientada por elcaminar del Instituto desde elCapítulo General, los contextosactuales en los que nos move-mos, los signos de los tiemposy sus llamadas. La segunda se-mana tuvo como referente LaValla, el origen del Instituto.Recordando nuestros orígenes,

y a partir de las intuiciones delCapítulo General y desde la clavede la internacionalidad, se dia-logó sobre cómo se desea serpercibido el Instituto en el fu-turo. La tercera semana fue de-dicada al icono de Fouvière, re-ferencia del compromiso. Aquíse analizaron las experiencias deliderazgo y sus perfiles, profun-dizando en el significado de es-tos dos lemas: “despertar la au-rora” y “profetas y místicos paranuestro tiempo”. Este número de FMS Mensajequiere ser un testimonio de lovivido durante estas tres sema-nas. Más que contenidos y te-máticas recoge las experienciasde vida de los participantes. Es-tas experiencias se presentancomo destellos o señales de vi-talidad del Instituto. De ahísurge la sistematización de talesvivencias del siguiente modo:La experiencia del Hermitage re-novado que acoge.El sentido de esta ConferenciaGeneral.– La vivencia de la primera se-

mana: El Hermitage.– La vivencia de la segunda se-

mana: La Valla y su remode-lación.

– La tercera semana: Fourvière,liderazgos y compromiso.

– Vivencias globales de la Con-ferencia general.

– Caminos de conclusión (Ca-minos abiertos. Algunas pis-tas de futuro).

LA FUERZA VITALDEL INSTITUTO ENEL FUTURO

El relato del desarrollo de la Confe-rencia viene intercalado con testi-monios. Estos responden a la soli-citud expresa de manifestar dóndese ponía la fuerza vital del Institutoen los futuros 10 a 20 años. Esta fuerza vital, que viene delDios de la vida, de su amorosa gra-tuidad que nos da energía y nossostiene. La energía con la cualnuestro Padre Fundador nos pensóy nos fundó sobre roca firme.

2 • FMS Mensaje 44

Director de Comunicaciones y Director revista FMS Mensaje

H. Alberto I. Ricica S.

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N uestra casa común de l’-Hermitage, renovada au-dazmente como un acto

de fe en el futuro, acogió unaConferencia general por primeravez en su historia. Y, como nopodía ser otra manera, tanto lacasa como el entorno marcaronprofundamente nuestra expe-riencia. Destaco a continuación cinco pa-labras vividas intensamente du-rante esos días.

UNIDAD

Reunidos en torno alP. Champagnat, laConferencia generalfue, ante todo,una vivencia y unaexpresión de launidad del Insti-tuto. Frecuente-mente, asumimosesa unidad comoalgo normal entrenosotros pero, dada ladiversidad y extensióndel Instituto, creo que ha-ríamos bien en gozarla y agra-decerla como un regalo perma-nente de María.

Durante tres semanas vivimosjuntos ese milagro de la unidad,formando una comunidad inter-nacional muy rica en su diversi-dad. La búsqueda común de lomejor para el Instituto nos aunómás allá de las diferencias, mos-trando de manera profética quees posible vivir como hermanosen el mundo de hoy, tan lace-rado por divisiones y guerras.

DISPONIBILIDADGLOBALEl XXI Capítulo general recono-ció entre nosotros “una concien-cia más clara de nuestra dimen-sión internacional”, pero noprofundizó en ella. Por eso qui-simos tomarnos tiempo, durantela Conferencia, para explorarjuntos el significado y las posi-bles consecuencias de esta “di-mensión internacional”.

Los participantes en la Confe-rencia no se limitaron a

constatar el crecimientode esa nueva concien-

cia, sino que se atre-vieron a soñar y aproponer mediosconcretos paradesarrollarla yponerla en ac-ción. Creo que vi-vimos, de manerapráctica, lo que

significa ejercer elliderazgo de manera

corresponsable en elInstituto, considerado

como un todo, más allá delas fronteras de nuestras pro-

vincias o distritos. Sentimos una fuerte llamada del

Superior General

H. Emili Turú

Cinco palabras para una

Conferencia GeneralUNIDAD•DISPONIBI

LIDAD

GLOBAL•FR

ONTERA•MISTICA

•COHERENCI

A•

H. Emili TurúCINCO PALABRAS PARA UNA CONFERENCIA GENERAL

Espíritu a vivir la fraternidad universal, manifestada por una dispo-nibilidad para la misión en cualquier parte del mundo donde se ne-cesite la presencia de un marista; se trata de una globalización al-ternativa a la que imponen los mercados financieros, donde losbeneficios son frecuentemente más importantes que las personas.

FRONTERA

Periferia, frontera, margen, son palabras que podemos usar comosinónimas, y que expresan una misma realidad: lejanía de loscentros de poder y de control; cercanía a las personas excluidaspor los sistemas sociales; lugar de riesgo, de experimentación, deaudacia… La vida marista que anhelamos construir está marcada por el signode la disponibilidad internacional para que el Instituto se siga ha-ciendo presente en las periferias geográficas y existenciales, dondedemasiados niños y jóvenes se ven privados todavía de sus derechosmás básicos. Se trata de reconocer las periferias no sólo en cada uno de los lu-gares donde estamos presentes, sino también a nivel global, parapoder reorientar y reenfocar nuestras presencias y esfuerzos. ¿Enqué lugares del mundo viven los niños y jóvenes en mayor situaciónde vulnerabilidad? Ahí es donde nos querría Champagnat, cerca de

los nuevos Montagne de hoy, y ahí es donde efectivamente que-remos estar.

MÍSTICA

La inauguración de las renovaciones hechas en la casa deLa Valla el día 16 de septiembre, nos permitió visitar

el subsuelo de la casa, puesto en evidencia graciasa los trabajos realizados. Allí descubrimos pe-

queños espacios, muy recogidos, que invitanal silencio y a la contemplación.

Quizás sea esto un símbolo del caminoque, como Instituto, estamos llamadosa recorrer: el redescubrimiento de la“vida interior”, ese espacio sagradode encuentro con el Misterio quenos habita. Tanto el piso de la misión, similaral “piso alto” de la primera comu-nidad cristiana, enviada por el Es-píritu el día de Pentecostés (Act

1,13), como el piso de la fraternidad,

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donde se encuentra la famosa mesa de los primeroshermanos, tienen su fundamento en ese espacioreducido de la mística, invisible pero esencial.

COHERENCIA

El penúltimo día de la Conferencia general recordéa todos los participantes aquel sueño impresio-nante del P. Champagnat relatado por el H. JuanBautista al inicio del libro “El buen Superior”: ungrupo de hombres “mitad Hermanos – mitad sol-dados”, se dirigen hacia la casa de l’Hermitage yempiezan a quitar piedras del edificio, hasta que,al final, la casa se viene abajo. Esos religiosos,calificados por Champagnat como “mundanos”, nosólo hunden la casa, sino que, con esas mismaspiedras atacan a los hermanos jóvenes que estabantrabajando en el exterior de la casa, causando lamuerte de muchos de ellos. El P. Champagnat in-terpreta el sueño diciendo que esos “mitad Her-manos – mitad soldados” son los malos superiores,que “abandonan a sus hermanos” y les dan “malosejemplos”. Como es fácil imaginar, la historia resonaba conespecial fuerza en el contexto mismo de la casade l’Hermitage. La recibimos como una invitaciónpersonal de nuestro fundador no sólo a no destruirnuestra casa común, sino a renovarla y adecuarlapara el futuro. Hicimos nuestras las palabras del

H. Francisco comunicando lamuerte del P. Champagnat:“Nos corresponde a nosotrosahora recoger y seguir conatención sus últimas y tan im-pactantes enseñanzas; hacerlasrevivir en cada uno de nosotros,imitando las virtudes que ad-miramos en él y, más quenunca, estrecharnos en torno anuestra buena y tierna Madre”. Sí, “nos corresponde a nosotrosahora”. El último día de la Con-ferencia general fuimos a Four-vière para renovar nuestro com-promiso a los pies de Nuestra

Señora, convencidos de que la renovación del Ins-tituto no es algo que planificamos para los demás,sino que nos compromete de manera personal acada uno de nosotros. Unidad, disponibilidad global, frontera, mística.Hermosas palabras que reclaman una quinta: co-herencia.

1. EL HERMITAGE NOS

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EXPERIENCIA DEL HERMITAGE

ACOGE

EL HERMITAGENOS ACOGE. SENTIDODE SU RENOVACIÓN

HÁBLANOSDEL HERMITAGERENOVADO

EL HERMITAGE,UNA LLAMADA, UNA FAMILIA,UNA MISIÓN

LA MÍSTICADE ESE LUGAR

ÁLBUMDE FOTOGRAFÍAS

UNA VISIÓN DEL NUEVO HERMITAGE


“ Desde el tiempo en que Marcelino consideró al Hermitage su“hogar”, hasta el día de hoy, la casa que construyó nuestro fun-

dador ha ocupado un lugar muy especial en nuestros corazones. Siempreque hemos visitado ese lugar, que conocemos afectuosamente como“casa madre”, o simplemente al leer el relato de aquella construcción ysu historia posterior, o al repasar las imágenes de sus sucesivas meta-morfosis, hemos tenido la sensación de vernos a nosotros mismos re-flejados en aquella sólida edificación de piedra, la tierra fecunda que larodea, y la sencillez que caracteriza a todo el entorno.Al construir el Hermitage, el fundador demostró un verdadero liderazgo,dio un paso hacia adelante, se arriesgó, dirigió su mirada hacia el fu-turo. […]

LA ESENCIA DEL PROYECTO

[…] Los lugares fundacionales juegan un papel importante en el de-sarrollo de los sentimientos y creencias religiosas. En tiempos de pro-fundos y rápidos cambios culturales, como los actuales, estos ámbitosson especialmente significativos, ya que sirven como punto de referen-cia esencial para que el grupo lleve a cabo la tarea de redescubrir ydefinir de manera renovada su espiritualidad e identidad.

En nuestra tradición marista, estos dos elementosadquirieron su forma carismática a través de larelación de Marcelino con los primeros hermanos,

y encontraron su expresión en la manera quetenían estos hombres de relacionarse con

Dios, con Jesús y con María, así comocon los niños y jóvenes pobres de su

tiempo.El hermano Francisco describía lahistórica construcción de NotreDame de l’Hermitage como “el reli-cario de nuestro bienaventuradofundador, donde todo habla de él”.

Esta definición no es menos cierta

El Hermitage nos acoge Sentido de su renovación

EXTRACTOSDE LA CARTA DEL

H. SAMMON“!REIVINDIQUEMOS

EL ESPIRITUDEL HERMITAGE!”

6 de junio del 2007http://www.champagnat.org/

400.php?a=6&n=814

Una visión del

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en nuestros días, ya que continúa siendo el lugardonde nos encontramos cara a cara con la expe-riencia fundante de Marcelino y sus discípulos. ElProyecto Hermitage aspira a ayudar a los hermanosy seglares a ver cumplida su esperanza de hacersuya esa misma experiencia fundacional. Porque siel Hermitage tiene algo verdaderamente único queofrecer, es esa presencia singular de Marcelino ysus primeros seguidores. El edificio y sus alrede-dores son, ciertamente, un reflejo excepcional desus vidas y trabajos. […]Al renovar los espacios de Notre Dame de l’Hermi-tage no tenemos intención de crear un museo enel que se expongan los logros del pasado. Lo quequeremos es dar un paso hacia adelante en elsueño que Marcelino tenía en la mente cuandoconstruyó aquella casa.Entonces, ¿a qué me refiero cuando utilizo la ex-presión “reivindicar el espíritu del Hermitage”?Pues nada más y nada menos que a entrar en unencuentro con Marcelino Champagnat y los que conél vivieron, y hacer nuestra la fe que ellos tuvieron,su visión, su valentía, su audacia para llevar lasideas a la acción. Este espíritu del Hermitage es, ydebe seguir siendo, la base de nuestra unidad, den-tro de la naturaleza cada vez más rica e interna-cional del Instituto y su misión. […]

NO SE TRATA DE NOSTALGIA

[…] La peregrinación a Notre Dame de l’Hermi-tage no es sino el primer paso de un recorridomucho más largo. Es una experiencia en un lugarde iniciación, que nos ayuda a conectar vital-mente con nuestros orígenes. De allí salimos ins-pirados y con energías renovadas para la tareaque tenemos por delante. Pero sólo Jesús es quienpuede encender nuestros corazones, abrir nues-tros ojos, y darnos una visión clara de nuestravida en común y nuestra misión de llevar a losniños y jóvenes desfavorecidos de nuestrotiempo. […]

LOS PROGRAMAS

[…] Muchas provincias y distritos están haciendoesfuerzos para impulsar la formación conjunta dehermanos y seglares a través de cursos que se im-parten en el Hermitage. Los que participan en ellosvuelven de esa experiencia con un redoblado inte-rés por profundizar en el carisma y la espiritualidadmarista. Muchos de los que tienen la fortuna de

efectuar la peregrinación a Notre Dame de l’Hermi-tage adquieren allí un conocimiento significativodel fundador y los primeros hermanos. A la luz detodas estas cosas, el Proyecto Hermitage contem-pla la elaboración de planes pensados para que eseaprendizaje se consolide y acreciente posterior-mente, cuando los visitantes han regresado a suscasas. […]

DESARROLLO ESPIRITUAL

[…] El carisma marista, por tanto, es un elementocatalizador de crecimiento humano y espiritual y,lo que es más importante, de toma de concienciade nuestro papel en la misión de Ahí está el ver-dadero significado y la finalidad del Proyecto Her-mitage. Todos esos itinerarios espirituales queforman una buena parte del Proyecto, así como la

nuevo Hermitage


experiencia compartida de tocar, sobre el terreno o a distancia, los lu-gares y rutas de nuestra historia fundacional, han de ser medios quenos ayuden a avanzar en el camino de fe en el que tantos de nosotrosestamos comprometidos, haciéndolo además con un peculiar estilomarista. […]

CENTRO QUE ACOGE A PEREGRINOSY VISITANTES MARISTAS

El espíritu de acogida, característica inherente al Proyecto Hermitage,será fundamental para llevar a la realidad lo que en él se encierra. Nadieha de tener la menor duda de que el Hermitage es un lugar donde todosson bien recibidos, como si hubieran llegado a casa. Sólo así podránlos peregrinos profundizar en la experiencia de la identidad y la espir-itualidad marista, y palpar el espíritu de familia que anida en el corazónde cada uno y encuentra su inspiración en las actitudes de María, madrede Jesús y esposa de José. […]

COMUNIDAD QUE ACOGEY ACOMPAÑA A LOS VISITANTES

Lo que queremos con este proyecto, por tanto, es crear un ámbito debienvenida y hospitalidad que facilite el encuentro con Marcelino y losprimeros hermanos. Para secundar este objetivo hay una comunidad queresponde de la acogida, acompañamiento y animación de los que lleganal centro.A la hora de marchar del Hermitage, todo visitante o peregrino debellevar dentro la convicción de que ha pasado un tiempo viviendo enuna comunidad cristiana, que es marista en el nombre y en los hechos.

Eso se traduce actualmente poruna comunidad que atiende a ladiversidad de nacionalidades,razas, culturas y estilos de vida. Ysignifica también que sus miem-bros están apasionados por la mi-sión. La experiencia de vivir en elHermitage nos tiene que conducira eso, a salir de allí con el corazónardiendo en deseos de llevar laBuena Noticia de Dios a los niñosy jóvenes necesitados. Dicho contoda sencillez, nos tiene que esti-mular a acercarnos a los niños,como Marcelino, para decirlescuánto los ama Jesús.” […]

H. Seán SammonEL HERMITAGE NOS ACOGE. SENTIDO DE SU RENOVACIÓN

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Háblanos del Hermitage renovado

E l proyecto Hermitage, en el pensamiento de sus promotores, com-prendía dos aspectos: la renovación total de los edificios y la ins-

talación de una nueva comunidad al servicio de la acogida.La renovación material está terminada desde marzo de 2010; por lo queatañe a la “comunidad nueva” es un tema que queda abierto.He tenido la suerte de estar asociado al estudio de la renovación mate-rial y asimismo de formar parte de la primera comunidad durante tresaños. Sin duda, por estos motivos se me ha solicitado mi testimonio de“la experiencia vivida” en el Hermitage renovado.

UN MAGNÍFICO INSTRUMENTOAL SERVICIO DE LA ACOGIDA

Personalmente, aprecio en gran manera los resultados de esta renova-ción. Los espacios de “descubrimiento” destacan a la vez, por una gransobriedad, una estética bien estudiada y una simbología evidente. Encuanto a los espacios de vivienda o de reunión son muy agradables ymuy funcionales. El conjunto se distingue por la luminosidad, la armoníade los materiales empleados y la sensación de espacios muy abiertos. Recuerdo con satisfacción la expresión utilizada por Joan Puig-Pey, ar-quitecto del proyecto, como hilo conductor en su realización: “El Her-mitage, un lugar que nos posee; una casa que habitamos”.En efecto, para vivir en el Hermitage, es preciso habitar el lugar y de-jarse poseer por él, en una especie de ósmosis para que los que acudanallí lo perciban como un lugar quetransmite vida. Con frecuencia, he tenido ocasiónde acompañar la visita de los dife-rentes espacios “escenográficos”con grupos muy variados. La mayo-ría de las veces con gran alegría yverdadera satisfacción. El “recorridomarista” de la planta baja permiteaproximaciones muy diversas: histó-rica, cultural, religiosa. Al final delrecorrido, al llegar al espacio quepresenta los aspectos esenciales dela vida del Hermano, a menudo seme ha ocurrido preguntar a los visi-tantes qué les motiva en su vida;

H. Michel Morel

Una visión del nuevo Hermitage

siempre, claro está, en función del público que se siente o no receptivoa este tipo de pregunta. Yo he apreciado mucho estos encuentros yestos intercambios. En ellos, he tenido la sensación de haber dado algoesencial de mí mismo e igualmente, de haber recibido mucho.

El espacio Champagnat suscita también en mímuchos sentimientos. La sensación de “en-cuentro” con M. Champagnat y el H. Franciscoestá bien reflejada en el efecto de transpa-rencia y transmisión que ofrecen los dos gran-des retratos sobre vidrio. Descubrimos aChampagnat en carne y hueso, gracias a losdiferentes objetos expuestos. Y sobre todo,el espacio “despacho-alcoba” lo hace máspresente, casi palpable: su cama, su sillón, sureclinatorio nos recuerdan las entrevistas quetenía con sus hermanos. Lugar apreciado de

forma individual o en grupo, en la penumbra del atardecer, con eloído mecido por el murmullo del Gier, con el corazón conmovido poralgunas palabras profundas de Marcelino. También aprecio la capilla grande y la sala de la primera comunidad,incluso si su nueva disposición continúa siendo fuente de polémica.El patio S. José, espacio admirable desde el punto de vista arquitec-tónico, es testigo de momentos importantes en la vida del Hermitage:grandes aglomeraciones de niños y jóvenes, celebración del 8 de di-ciembre, momentos de convivencia, mini-conciertos y otras veladasfestivas.Los testimonios de las personas acogidas en el Hermitage por un pe-riodo más o menos largo, subrayan frecuentemente su satisfacciónde estar acogidas en un lugar como éste que ofrece grandes posibi-lidades de animación.

H. Michel MorelHÁBLANOS DEL HERMITAGE RENOVADO


La vitalidad del instituto en el futuro ha de partir en la escucha contemplativa a Dios

y desde ahí responder a los jóvenes que carecen de lo esencial porqueellos son el centro de nuestra vida y misión.

H. Ambrosio Alonso - Provincia Ibérica

Hermitage: la grande capilla

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EN EL CORAZÓNDE LA CASA, UNA COMUNIDAD

Formar una “nueva” comunidad al servicio de la aco-gida de las personas y grupos venidos de todos lospaíses, era el segundo “aspecto” del proyecto Her-mitage. Aún se está llevando a cabo. Una primeracomunidad se constituyó en diciembre de 2009 y hafuncionado durante tres años, más o menos con lasmismas personas. Había 4 laicos, 1 padre marista y9 hermanos; en total, 13 personas de 9 nacionalida-des distintas representando los 5 continentes. Desdeenero de 2014, la comunidad está formada por 10personas (6 son nuevas): 4 laicos y 6 hermanos; sinolvidar la presencia de un sacerdote diocesano que,sin ser miembro de la comunidad, le es muy cercanoy es muy apreciado.He aquí algunas reflexiones a partir de mi experien-cia vivida en la primera comunidad. El comienzo fueun verdadero desafío, debido tanto a la diversidadde lenguas, de culturas y de mentalidades como a lanecesidad de poner en marcha el funcionamientoconcreto de la casa y del Centro de acogida: ¿cómoplanificar para que cada uno encontrara su lugar ydiera lo mejor de sí mismo?El Hermitage está situado en Francia. Los que vienende otro país deben aprender a vivir en un contextomuy diferente del que han conocido. Esto exige deellos mucha apertura y acogida, aunque provocatambién frustraciones e incomprensiones. Los fran-ceses, por su parte, deben armarse de paciencia, deatención y de humildad. ¿Qué testimonio da esta “nueva comunidad”? Corres-ponde a las personas acogidas el pronunciarse. Meparece que la mayoría han apreciado la calidad de laacogida, hecha de atención, de sencillez y de cor-dialidad. La presencia de una comunidad en el mismocorazón de esta casa es esencial. Son los miembrosde la comunidad quienes hacen que los lugares trans-mitan vida y manifiestan algo de la fraternidad que-rida y vivida por Marcelino y sus hermanos. Alencontrar a los “hermanos y hermanas laicos”, en-cuentran en cierta manera, a Marcelino y a los pri-meros hermanos. Perciben también sin duda, las limitaciones del tes-timonio dado por la comunidad. La vida de comuni-


Me traje de la Conferencia un futuro cargado de esperanzay también de optimismo.Optimismo porque percibí que

el Instituto se mueve, que hay voluntad de cambio y ganas de ensayar soluciones anuestros problemas, aunque algunas, quizás,puedan resultar erróneas. Y tambiénesperanza, una esperanza asentada en el compromiso de transitar más y mejor por los caminos del misticismo y la profecía.

H. Antonio Giménez de BagüésProvincia Mediterránea

dad no es un largo río tranquilo. El Gier, a veces cal-mado, a veces impetuoso, puede ofrecer a este res-pecto, una imagen muy sugestiva.La renovación, bastante rápida, de los miembros, lai-cos y hermanos, de esta comunidad internacional,constituye, en mi opinión, una cierta fragilidad, yaque una comunidad tiene necesidad de un tiempo paraformarse y las necesidades de la misión de acogida noesperan. Asimismo, la dimensión “memoria” del lugarcorre el riesgo de desvanecerse y en consecuencia latransmisión de casi dos siglos de historia. El principaldesafío para los miembros de la comunidad, es vivir

como hermanos y hermanas según el Evangelio y elespíritu de Marcelino. Al aceptar tal misión, cada unodebe estar animado por un gran deseo de buscar antetodo la voluntad de Dios con humildad, con un granespíritu de servicio. Cada uno debe estar convencido,como repetía con frecuencia Champagnat al realizarsu obra, de que “si el Señor no construye la casa, envano se afanan los albañiles”.A modo de conclusión, algunas palabras de JoanPuig-Pey dirigidas a los visitantes del Hermitage.“¡Abrid los ojos y mirad, dejaos tocar. Agudizad eloído: escuchad el silencio, el Gier. Tocad la piedra,las paredes, la madera. Hablad con las palabras queviven en lo más profundo de vosotros mismos.Comed: el Hermitage es un pan de vida!”.


A veces tengo la impresión de que todo lo que he vivido, conocidoy aprendido ha sido una preparación para estar aquí en el Her-

mitage. Cuando en la pastoral buscaba dar a conocer la vida y obra delPadre Champagnat, mi esfuerzo se centraba en que los niños y jóvenesse dieran cuenta de que un santo es alguien grandioso, que se atrevióa dar un sí a Dios. Por eso pensaba en el Hermitage como un gran san-tuario en el cual se guardaba un tesoro, un lugar que solamente podíanvisitar los hermanos, los laicos más cercanos, gente importante. Me pa-recía algo muy lejano, y no me hacía a la idea de que un día yo pudieraconocerlo y ser parte de la comunidad.Mi inquietud e interés por el Hermitage comenzó cuando un día llegóun hermano al colegio, buscando gente para la misión Ad Gentes. ¡Vayasorpresa que recibí! Después de un rato de plática, comprendí que laposibilidad de hacer una experiencia de comunidad en el Hermitage,podía ser una realidad para mí.

UNA CASA CONSTRUIDASOBRE ROCA FIRME

Ahora que estoy en el Hermitage siento que estoy en mi casa, una casaconstruida sobre roca firme, donde se percibe la fidelidad y entrega del P.Champagnat y de los primeros hermanos. Su deseo de llegar a “todas lasdiócesis del mundo” es realizado por todos los que llevamos dentro la llamamarista. Para mí la vida y la obra de Marcelino son una prueba del amorque Dios me tiene. Intento empaparme de su espiritualidad, vivir realmenteel espíritu de familia que nos dejó, desde la sencillez y el servicio de unavida compartida al estilo de María. Y bueno, aquí estoy, después de casi un año viviendo esta experiencia queme enriquece cada día y creo me hace mejor persona. Vine aquí pensandoconocer más de cerca a los hermanos, creí igualmente que en este tiempode “voluntariado” podría prestar algún servicio, profundizar mi espiritua-lidad marista y conocer gente de todo el mundo. Pero para mi sorpresa,además de eso, he encontrado algo más precioso: mi vocación como laicamarista. Mi presencia aquí está siendo una nueva respuesta a la llamadaque Jesús me hace a seguirle, a ser hermana, a ser cercana, desde la sen-cillez de una vida y misión compartida, en esta comunidad internacionalde hermanos y laicos. Esto es para mí un desafío y un regalo.La fraternidad como don ha sido todo un descubrimiento, sin duda es obradel Espíritu. En la diversidad descubro la riqueza de cada uno. Experimentoque somos complementarios, que sobre las dificultades que encontramos,existe aceptación y respeto mutuos. La complementariedad es para mí reto

El Hermitage, una llamada,una familia, una misión

Martha EugeniaMartínezLAICA DE LA COMUNIDADDEL HERMITAGE

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y riqueza, don del Espíritu que me ayuda a crecer ya ser yo misma. Ser y hacer comunidad es un don yuna tarea de cada día.No soy indiferente a las personas que llegan al Her-mitage. Quisiera que su paso por aquí sea un tiempode descubrir el sentido de la vida, de ser amadas porDios y saberse amadas por los demás, aceptadas talcual son. No cuesta nada dar felicidad, decía unaamiga mía… y vaya que no es fácil. Ser hermanaentre mis hermanos, construir fraternidad, es unatarea diaria, que comienza con el “bonjour”, con lospequeños detalles diarios, que hacen de nuestra co-munidad un espacio de intercambio, de disponibili-dad y de escucha.“No pretendo grandezas que superan mi capacidad”,pero sí construir un nuevo rostro de Iglesia, más fra-terno, más misericordioso, con una mirada llena deternura para que todas las personas sigan encon-trando un lugar donde seguir esperando. Una Iglesiamariana y como dice el H. Emili, una Iglesia del de-lantal.Trato de hacerle espacio a Dios. El silencio de la na-turaleza me lleva a Él. Aquí la creación es un regalotodo el año y hoy, con la nieve, todo me resultanuevo y más maravilloso. Quiero edificar mi proyecto personal sobre el pro-yecto de Jesús. Él es quien inspira mi nueva vida enel Hermitage, el mismo Jesús que inspiró a Marcelinoun proyecto de familia marista. Realmente el Hermi-tage es un lugar de esperanza, de fraternidad sinfronteras, de encuentro con Jesús.Me queda claro que los laicos podemos continuar laobra marista con un espíritu apostólico y mariano.Muchas veces pienso que el Hermitage es un lugarAd Gentes, porque personas de todo el mundo lleganaquí. Traspasan mares y continentes para venir a

mostrar su amor y gratitud al Padre Champagnat y lohacen de maneras tan diversas, con tanta riqueza deexpresión que me quedo admirada.Vine al Hermitage para servir y dar “mis cinco panesy dos peces” pero ahora me doy cuenta que esospanes y peces se han multiplicado y transformado entesoros que me enriquecen. Tan positiva ha sido estaexperiencia que al ser invitada para un segundo añome siento privilegiada por Dios.En Guadalajara, México, colaboré como animadora depastoral en el bachillerato marista. Pienso mucho enlos jóvenes, en mis compañeros de trabajo. Vine sa-biendo que era un paréntesis en mi vida laboral. Perocon gusto pago ese precio por vivir una año más la ex-periencia de comunidad y de misión en el Hermitage.Me gustaría que quienes vienen en peregrinación pu-dieran hacer esta misma experiencia de descubrir encada rostro, en cada cultura, el espíritu de familiaque anima el Hermitage.

Nuestro sueño nos lleva a enfocarnos decididamentesobre los maristas laicos y hermanos, atravesando

las barreras internacionales y culturales, y viviendo una vida llena de sentido en comunidades abiertas que llevan la Buena Nueva a los jóvenes pobres, en un espíritu de colaboración y disponibilidad,guiados por el Rostro Mariano de la Iglesia.

H. Chris Wills - Secretariado Marista de Colaboración Misionera Internacional - CMI



E l Hermitage, un valle radiante de encanto y de belleza. De él emanaluz que brilla en varios lugares de los muchos lugares de el am-

biente de la fraternidad y subraya que todos precisamos vivir en tornoa la Madre, en la casa de la Madre y bajo Su protección. Son los subs-tratos para vivir feliz de nuestra tan estimada fraternidad. Allí se en-cuentra la casa marista de Champagnat: bella, organizada, acogedora.Impresiona a las personas de los alrededores que, al bajar al valle ais-lado, quedan atónitas al descubrir allí tan bellas construcciones. Peromás bonito es su significado carismático, histórico, cultural y que tienedimensiones internacionales.Tuve el privilegio de visitar el Hermitage varias veces en la década del1990. Estancias semanales o de menor duración durante mi tiempo de for-mación en el Colegio Internacional y en el Curso de Formadores en Valpré.Pues sí, el Curso de Formadores Maristas tuvo lugar en una casa alquiladacerca de Lyon, puesto que el Hermitage no estaba en condiciones legales,ni preparada ni autorizada para acoger grupos de larga estancia.

EL DERECHO DE RENOVARSE

Ahora la veo renovada. Pues, ¿no tiene también la casa el derecho derenovarse, de adaptarse a las realidades de los tiempos, de ser dinámicaen nuestra historia?¡Quédense embelesados! Los trabajos se hicieron. He aquí que el Her-mitage reluce. Está bonita, segura y sana. Tiene mejores condicionesde generar vida a aquellos a quien ella atrae buscando mayor significadoa sus búsquedas espirituales, vocacionales y misioneras maristas y ecle-siales.Vean cuanta belleza exterior, en el paisaje contemplado desde y baja

dinámico por los caminos verdeantes queel valle ofrece. El Gier continúa corriendo,siendo fuente de vida. ¡Qué bueno que lelibraron de las construcciones tardías deotra época condenándolo a un nivel sub-terráneo!Y hablemos de los paisajes que se vendesde dentro. Muchos espacios transparen-tes que nos permiten estar en medio de lanaturaleza, incluso protegidos en nuestros

La mística de ese lugar

H. João GutembergDISTRITO DE AMAZONIA

Experiencia

“Ser hermanos felices que habitan las fronteras de la contemplación y de la pobreza”.

H. Antonio PeraltaProvincia Santa María de los Andes

ambientes de trabajo o de convivencias: comedor,auditorios, corredores, y hasta en las habitaciones.La casa nos invita a mirar el ambiente, a admirarloy a cuidarlo. Es también la invitación a pensar enlo lejano, a partir de aquí, en los muchos lugaresdel mundo indicados por esa luz.

LO QUE FUE PRESERVADO DELA ANTIGUA CONSTRUCCIÓN

Pero, ¿y la memoria, dónde está? ¿La vieja casa, losdetalles de nuestra historia? Pues bien, me detuveapreciando, descubriendo cada día de esas tres se-manas de convivencias allí, lo que fue preservado dela antigua construcción, para nuestra contemplación.¡Qué detalles! Discretos, persistentes, presentes cua-les rayos x que resaltan los pormenores importantesde las fotografías: rocas, piedras angulares, partes depisos, techos, utensilios. Vean que arte: construcciónrenovada que supo dar valor a esas delicadezas queexplicitan marcas identitarias del propio Marcelinoy de acción de nuestros primeros Hermanos. Lacasa renovada, por tanto, parece servir de moldura

a detalles significativos que hoy nosrecuerdan los tiempos iniciales.

¡Qué alegría de encontrarme enel Hermitage con Hermanos

venidos de todos los conti-nentes! Y muy contentotambién por encontrar allí

una comunidad acoge-

dora y también internacional: Hermanos y laicas,que significan en nuestros tiempos la aurora detiempos nuevos.Tanta energía recogida del pasado, que nos energizóen esos días henchidos de esperanza y voluntad decontinuar a difundir el espíritu del Hermitage, el di-namismo de san Marcelino y de los primeros Her-manos a tantas nuevas generaciones de niños yjóvenes que necesitan integrar su proyecto de vidaa las fuentes más sublimes de nuestra existencia:aquellas que emanan del Dios de la Vida.Señora del Hermitage – y san Marce-lino nos acojan y nos orientensiempre en nuestro peregrinarpor todas las diócesis delmundo a donde somos envia-dos para transmitir el pro-yecto de vida cristiana aniños y jóvenes.

del Hermitage

Palabras para definir la fuerza vital del Instituto Marista: oración/intimidad/fraternidad/

comunidad/testimonio/misión.H. César Rojas

Director del Secretariado Hermanos Hoy

17

19

Experiencia del HermitageÁLBUM DE FOTOGRAFÍAS

21

ÁLBUM DE FOTOGRAFÍAS


22

2.ORGANIZACIÓN DE LA

24

LUNES

9SEPTIEMBRE

MARTES

10SEPTIEMBRE

MIÉRCOLES

11SEPTIEMBRE

JUEVES

12SEPTIEMBRE

VIERNES

13SEPTIEMBRE

LUNES

16SEPTIEMBRE

MARTES

17SEPTIEMBRE

MIÉRCOLES

18SEPTIEMBRE

JUEVES

19SEPTIEMBRE

VIERNES

20SEPTIEMBRE

Primera semana: Hermitagenuestre camino desde el Capítulo Generalnuestro mundo, nuestros contextos actualesuna clave: los signos de los tiempos y sus llamadas

Segunda semana: La Valla¿Cómo responder? ¿cómo quiere ser percibido nuestro Instituto?explorando las intuiciones del Capítulouna clave: la internacionalidad

Tercera semana: Fourvièreuna clave: liderazgo (experiencia compartidas y perfiles)despertar la auroraprofetas y místicos para nuestro tiempo

LUNES

23SEPTIEMBRE

Día temático:

otros puntos, evaluación del

Consejo General, etc.

MARTES

24SEPTIEMBRE

MIÉRCOLES

25SEPTIEMBRE

JUEVES

26SEPTIEMBRE

VIERNES

27SEPTIEMBRE

Conferencia General 2013D E S P E R T A R L A A U R O R APROFETAS Y MÍSTICOS PARA NUESTRO TIEMPO

CONFERENCIA GENERAL

Junio 2014 • 25

SABADO

14SEPTIEMBRE

Síntesis de la semana

SABADO

21SEPTIEMBRE

DOMINGO

22SEPTIEMBRE

Día de descanso, salidas, ocio, tiempo personal

Inauguración

Mañanatemática:

mandatos del

Capítulo General

SABADO

28SEPTIEMBRE

DOMINGO

15SEPTIEMBRE

DOMINGO

8SEPTIEMBRE

Día de descanso, salidas, ocio, tiempo personal

Marcelino escu

chó:

encuentro Montagne

Clausura

Part

icip

ante

s de

la C

onfe

renc

ia ge

nera

l

Emili TurúSuperior general

Joe Mc KeeVicario general

Michael de WaasConsejero general

Eugène KabangukaConsejero general

John KleinConsejero general

Victor M. PreciadoConsejero general

Antonio RamalhoConsejero general

Ernesto SánchezConsejero general

Josep Maria SoterasConsejero general

Joseph WaltonSouthern Africa

Valentin DjawuAfrique Centre Est

Luis Carlos GutiérrezAmérica Central

Wellington MedeirosBrasil Centro Norte

Joaquim SperandioBrasil Centro Sul

Bernard BeaudinCanadá

Óscar Martín VicarioCompostela

Horacio BustosCruz del Sur

Robert TeohEast Asia

Brendan GearyEurope Central West

Ambrosio AlonsoIbérica

Maurice BerquetL’Hermitage

Tomas RandrianantenainaMadagascar

Antonio GiménezMediterránea

Jeffrey CroweAustralia

Ricardo ReynozoMéxico Central


Organización de la

Conferencia General

João GutembergAmazonia

Ken McDonaldMelanesia

José María CustodiParaguay

Francis LukongWest Africa

Pere FerréL’Hermitage (vicario)

Libardo GarzónNorandina

Inácio EtgesRio Grande do Sul

Antonio PeraltaSanta Maria de los Andes

Eduardo NavarroMéxico Occidental

David McDonaldNew Zealand

Joachim EzetulugoNigeria

Shanthi LiyanageSouth Asia

Ben ConsigliUSA

Juan CastroDistrito de Asia

Seán SammonEx Superior General

César RojasSecretariado Hermanos Hoy

Javier EspinosaSecretariado Laicos

Chris WillsSecretariado CMI

João Carlos doPradoSecretariado Missão

Mario MeutiSecretariado FMSI

Jim JolleyDirector FMSI

Michael French, FSCFacilitator

Edmund Duffy, SMChaplain

Junio 2014 • 27

3. PRIMERA SEMANA: El Hermitage

28

Junio 2014 • 29

FORTALEZAS Y DESAFÍOS

SITUARSEEN EL MUNDOY EN LO QUESE IRRADIA EN CADAPROVINCIA O REGIÓN

LOS HERMANOSJÓVENES NOS TRAENENERGÍA Y ENTUSIASMO

LA REESTRUCTURACIÓNDE LA PROVINCIAHA ABIERTO NUEVOSHORIZONTES YRIEORIENTADONUESTRA VISIÓNDE LA MISIÓN MARISTA

NUEVOS BROTESDE VIDA YGRANDES DESAFÍOS

LA NUEVA PROVINCIA: UNA NUEVA IDENTIDAD,UNA NUEVACORRESPONSABILIDAD, UNAS NUEVASRELACIONES...


Construir una “nueva comunidad”

S iguiendo el tema general de la Conferencia – Despertar la Aurora,Profetas y Místicos- el punto principal de la primera semana fue

construir una “nueva comunidad”, como la base de nuestra experiencia,en las siguientes tres semanas en Notre Dame de L’Hermitage. Teniendoesta idea en mente, la primera semana estudiamos el ícono del Hermitagecomo símbolo de nuestro trabajo, que nos recuerda la importancia de cons-truir nuestra comunidad.Sabemos que el Hermitage es donde el Padre Champagnat construyó lacasa principal de nuestros primeros hermanos y es allí donde nació la co-munidad. Reconocimos entonces una conexión más significativa y rele-vante en nuestros esfuerzos por construir una nueva comunidadinternacional durante la conferencia. Nuestro objetivo de crear esta nuevacomunidad nos permitió explorar los retos de ser “profetas y místicos” en

este momento de nuestra historia.Los participantes a la Conferencia -los líderes del Instituto- vinieron

de diferentes lugares del mundo, trayendo consigo suficientes per-tenencias, ya que iban a estar varias semanas por fuera. Conociendoel rol de responsabilidad que tienen en sus unidades administrati-vas y en el Instituto, también trajeron otras “pertenencias” – ale-grías, ciertamente, pero también preocupaciones, ansiedad y

angustias relacionadas con su rol de líderes en nuestro Instituto. Porello adoptamos un enfoque sencillo, humano para comenzar a cons-

truir nuestra comunidad. Pasamos el día analizando “de dondeveníamos” a la Conferencia General. Las dinámicas de grupo

usadas nos ayudaron a compartir algunas de nuestras his-torias personales, lo cual nos permitió conectarnos unoscon otros y contemplar el tema, muy dinámico porcierto, de las tres semanas siguientes.El 10 y 11 de septiembre reflexionamos sobre las im-presiones que cada uno de nosotros tuvo de los lla-mados del XXI del Capítulo General. Empezamosanalizando algunas de nuestras historias personalescentrándonos en el llamado del Capítulo y en los treshorizontes que nos energizaban a nivel personal. Los

participantes se escucharon atenta-mente a unos y otros y reflexionaron sobre

los temas más significativos que nacían de nuestrocompartir. Las historias personales eran sagradas.

Se compartieron muchas experiencias que dan vida en

H. Michael De WaasCONSEJERO GENERAL

Junio 2014 • 31

un ambiente muy dinámico. Nos inspiró escuchar alos participantes hablar de sus esfuerzos, extraordi-narios y llenos de confianza, por centrar su vida enJesucristo. Este maravilloso compartir, la experienciade escuchar, con respeto y admiración, los pensa-mientos y sentimientos de los demás, nos guiaron adar un paso más, a explorar dónde habíamos centradonuestras energías en los últimos cuatro años, y a ana-lizar algunos de los desafíos que habíamos enfrentadoante las llamadas del Capítulo General y ante los treshorizontes, que como líderes, nos habían estadoorientando en ese momento. Una interesante varie-dad de actividades de grupo, nos permitieron tenerla “imagen completa” de Instituto Marista, sus des-afíos actuales y nuestra respuesta ante ellos.

LA INVITACIÓN QUE DIOSNOS HIZO EN ESTE MOMENTODE NUESTRA HISTORIA

El 12 y el 13 exploramos, más profundamente, algu-nas reflexiones, examinando el contexto de nuestravida y misión como Hermanos Maristas, teniendopresente que todos trabajamos en un nivel más am-plio que supera nuestros propios países y unidadesadministrativas. Es así que sentimos la importanciade prestar mucha atención a los llamados de la igle-sia, de nuestro Instituto y de los signos de los tiem-pos. Nuestro encuentro era justamente de esto: losparticipantes hicieron un esfuerzo conjunto para es-cuchar la invitación que Dios nos hizo en este mo-mento de nuestra historia. Hubo presentacionessobre la globalización, las actuales tendencias mun-diales, temas relacionados con la ecología y las cam-biantes condiciones climáticas, especialmente suimpacto en nuestra misión y en la nueva evangeli-zación. Fuimos igualmente confrontados con variassituaciones que los jóvenes están viviendo en elmundo entero y que nos animaron a examinar denuevo, nuestra vocación y misión como Hermanitosde María. Una presentación de las estadísticas delInstituto, comenzando en 1817, al igual que proyec-ciones de los próximos 10 años, nos ayudaron a verdónde estamos en cuanto al número de hermanos,las tendencias actuales de disminución de miembrosy el lugar que ocupa la pastoral vocacional en varias

regiones del Instituto. Esta fue una presentación quenos retó y ayudó a participar en diálogo fructíferode lo que estas tendencias nos dicen sobre nuestravida y misión en el futuro.El sábado 14 pasamos el día sintetizando nuestrasreflexiones sobre las experiencias significativas quetuvimos durante nuestra primera semana juntos.Empezamos el día de reflexión en Les Palais, a unosdiez kilómetros del Hermitage, donde Champagnatconoció a Jean Batiste Montagne. Esta fue una ex-periencia emocional para nosotros. El encontrarnosen un ambiente rural, tratando de imaginar lospensamientos y sentimientos del Padre Champag-nat mientras visitaba al joven en su lecho demuerte, y la inspiración y fortaleza que recibió delEspíritu Santo para fundar nuestro Instituto deHermanitos de María.Los eventos de toda la semana y nuestras reflexionesfueron fortalecidos y complementados por las diná-micas de oración personal y comunitaria, Eucaristíasmuy significativas, momentos marianos, dialogo ani-mado y deliciosas comidas que nos nutrieron y per-mitieron vivir plenamente las experiencias quetuvimos. Nuestros amables anfitriones - la comuni-dad de hermanos y laicos maristas del Hermitage-nos acompañaron increíblemente, asegurándose quetuviéramos todo lo que necesitábamos, para seguirnuestra segunda semana de conferencia y contem-plación de la vida del Padre Champagnat y de sutiempo en La Valla.

Primera semana: el Hermitage

Nuestra vitalidad como Instituto Marista pasa pornuestra fraternidad, vivida conalegría y sin impedimentos;

por nuestro contacto directo con los niños yjóvenes, siendo signos del amor misericordiosode Dios; por nuestro compromiso con un mundo más humano y solidario. Todo estoen la escuela de María, actualizando las intuiciones de Marcelino.

H. Antonio Ramalho - Consejero General


Fortalezas Situarse en el mundo

y en lo que se irradia en cada provincia o región

H. Antonio Giménez de BagüésPROVINCIA MEDITERRÁNEA

L’ Hermitage, La Valla y Fourvière fueron los tres pilares emblemáticossobre que se desarrollaron las actividades programadas para cada

una de las tres semanas que duró la Conferencia General. “Profetas y mís-ticos para nuestro tiempo” fue el lema que centró nuestras sesiones detrabajo. El acto de clausura tuvo lugar en Fouvière, donde renovamos lapromesa que en su día hicieron nuestros predecesores de la Sociedad deMaría y, como ellos y ante la misma imagen de la Virgen, nos comprome-timos a trabajar por una Iglesia de rostro mariano, desde siempre y porsiempre “aurora de los nuevos tiempos”. Durante la primera semana hicimos del Hermitage un lugar de parada, unalto en el camino que tanto el Instituto en su conjunto como cada unade sus provincias van transitando. Aprovechamos este “descanso” parasituarnos en el mundo de hoy y observar la realidad que nos toca vivirpara tratar de entenderla e interpretarla buscando, en primer lugar, lasclaves que generan esa realidad mediante una lectura adecuada de lossignos de los tiempos, no siempre fáciles de identificar. Tomamos tambiéncomo referencia las llamadas que nos hizo el XXI Capítulo General parapercibir los ecos suscitados y analizar objetivamente la calidad de nuestrarepuesta como Institución y como Provincia Mediterránea.Por otra parte, cada uno de nosotros hizo una mirada introspectiva parapreguntarse: cómo me encuentro, cuáles son mis sentimientos domi-nantes, qué equipaje suelo llevar... Se trataba también de entrever enestos espejos personales los reflejos que irradian actualmente en cada

una de nuestras respectivas provincias.Luego, compartimos nuestras vivenciaspara tratar de clarificar e iluminar tanto lasrealidades personales como las de losotros. La Provincia Mediterránea, en su III Capí-tulo Provincial, celebrado en diciembre de2009, hizo suyas las tres llamadas funda-mentales del XXI Capítulo General, con lapertinente adaptación y concreción anuestra propia realidad. El IV Capítulo Pro-

La vitalidad del Instituto Marista de aquí a 10-20 años dependerá en nuestra habilidad de trabajar en red y de fortalecer situaciones locales.

H. David McDonaldProvincia de Nueva Zelanda

y desafíos

vincial trató, asimismo, de profundizar en aquellaslíneas de actuación que consideramos prioritarias,como es, entre otras, la reorganización y revitali-zación de comunidades y la mejora de su calidadreligiosa. En otro orden de cosas, sustituimos elPlan Estratégico 2008-2013 por el actual 2013-2018 en el que aparecen contemplados los aspec-tos de educación, pastoral, solidaridad yeconomía. Además, hemos señalado para este trie-nio un nuevo “Itinerario provincial de animaciónvocacional de hermanos y laicos…”Hay una imagen que me impresionó mucho cuandola vi. Me refiero a aquella foto tantas veces repetidaen la web del Instituto durante las obras de remo-delación de l’Hermitage en la que aparece una “to-dopoderosa” excavadora diseñada paraderribar y retirar escombros con sufuerte brazo articulado. Esa imagenme produjo una mezcla de sensa-ciones: miedo, nostalgia, necesi-dad, desafío… pero tambiénesperanza. Para plasmar unnuevo proyecto previamentehabrá que derribar y retirar loque ya no sirve. Desde que quedó constituida,la Provincia Mediterránea,compleja en muchos aspectos,ha tratado de emular a la exca-vadora. Me gustaría recalcar trescompromisos que considero im-

portantes y que están en línea con lo que nos hamarcado el XXI Capítulo General. Les hemos dedi-cado muchas energías y el resultado y, en mi opi-nión, es bastante aceptable. Son éstos: – Unificar criterios de animación y gobierno en

una provincia geográfica y culturalmente di-versa.

– Mentalizar y motivar para el cambio, especial-mente a los hermanos. Ante una realidad dis-tinta y sometida a rápidas dinámicas deinnovación, pretender seguir igual resultaríasuicida. Sólo lo que evoluciona subsiste, y laevolución más flexible es la que tiene más ga-rantías de subsistencia.

– Formar equipos, de forma que las personas, aunsiendo todas necesarias, ninguna resulte im-prescindible.

“Conectando con más fuerza la energía existente entre todos los que vibramos con el carisma Champagnat,¡generemos nueva vida!”

H. Ernesto Sánchez - Consejero General

Junio 2014 • 33

E mpecé mi mandato como Provincial casi un año después delXXI Capítulo General, ¡qué buen momento para comenzar! Los

tres horizontes de ese capítulo fueron para mí enfoques claros hacíalos cuales debíamos trabajar, y dos de ellos describirían la fortalezade la Provincia de África Austral “un nuevo modo de ser hermano” y“una presencia fuertemente significativa entre los niños y jóvenespobres”.En África Austral tenemos vocaciones en el estilo de vida marista. LaProvincia es joven y tiene un promedio de edad de 45 años. Hay vi-talidad, tenemos sueños nuevos y una gran esperanza en el futuro.Podemos planear con optimismo porque sabemos que hay futuro. Loshermanos jóvenes traen consigo su energía y entusiasmo a la provin-cia, y a veces cuestionan la manera en la que algunos hermanos ma-yores ven las cosas. Los cuestionamientos son sanos para unaprovincia ya que nos ayudan a ver el modo en que somos hermanosen este momento y a nuestra edad. Estamos, poco a poco, convir-tiéndonos en el rostro mariano de la iglesia, mediante el estilo deadministración llevado por los hermanos y los laicos que dirigen co-munidades y escuelas.

UNA MAYOR CONSCIENCIASOBRE LOS POBRES

Trabajar con y a favor de los niños más desfavorecidos no es muydifícil en África, ya que hay pobres alrededor de nosotros, indepen-dientemente de donde vivamos. Hemos hecho un esfuerzo consciente y hemos despertado una mayorconsciencia sobre los pobres, lo que nos ha permitido identificarnos

con ellos de diferentes maneras. Yo creo que como Provincia,estamos aprendiendo de los pobres que noscircundan, ellos nos obligan a cuestionarnossobre nuestro estilo de vida, por sencillo que

ya sea.La Provincia es ya bastante internacional debido a que

cuenta con seis diferentes países, ello sin contar a los her-manos misioneros de otras partes del mundo. La acogidaque los hermanos han reservado a los diferentes grupos es


Los hermanos jóvenes traen consigo

energía y entusiasmo

H. Joseph WaltonPROVINCIADE ÁFRICA AUSTRAL

Junio 2014 • 35

realmente calurosa y abierta. El hecho que los her-manos estén con otros grupos nacionales en elpostulantado, noviciado y escolasticado ayudan atener un mejor entendimiento y aceptación decada uno dentro de la provincia.

UNA NUEVA RELACIÓNENTRE HERMANOS Y LAICOSMARISTAS

El tercer horizonte del Capítulo General “unanueva relación entre hermanos y laicos maristas”constituye nuestro mayor desafío y en este as-pecto estamos atrasados con respecto a otras pro-vincias. El problema puede ser que como unidadhay una falta de comprensión de la vocación laicamarista. Algunos no han todavía entendido que elcarisma marista es un don del Espíritu Santo paratodos. A pesar de ello, estamos empezando a cre-cer en esta vocación.Otro gran desafío es la falta de recursos financie-ros para poder desarrollar las buenas iniciativasque deseamos implementar. Entre ellas contamoslas que hemos presentado en las varias comisionesinternacionales del Instituto. Existe la necesidadde tener más encuentros para que podamos com-partir el carisma marista con nuestros profesoresy laicos. Las comisiones necesitan reunirse paraque puedan entender mejor y desarrollar las pro-

puestas que tenemos frente a nosotros. Necesita-mos atraer a los jóvenes para fortalecer nuestrapastoral vocacional.

Fortalezas y desafíos

Definir la fuerza vital del Instituto Marista de aquí a 10 - 20 años:

• Capacidad de “formar” nuevos maristas:orientados hacia la vocación,comprometidos; hermanos y laicos.

• Seguir adelante con los seis elementos de “un nuevo amanecer”, identificados en la conferencia.

• El Instituto Marista tendrá el Instituto de los hermanos y algún otro tipo de estructura (¿nuestra asociación?) que incluya a los laicos.

• Acompañamiento para jóvenes adultos.

H. Jeffrey CroweProvincia de Australia

L a restructuración de la Provincia de Sri Lanka en la Provincia deAsia del Sur ha abierto nuevos horizontes y ha centrado nuestra

visión de la misión marista en esta parte del mundo. La diversidadcultural y religiosa que caracteriza a los tres países que la componen:Sri Lanka, India y Pakistán, la vasta experiencia de la dominacióncolonial, la lucha post independentista por reconstruir la identidadnacional y los conflictos étnicos son, entre otros, la experiencia fun-dacional que los maristas tuvieron que enfrentar en misión. La pre-sencia marista en este contexto ha tomado un nuevo rostro con unasensibilidad renovada ante las necesidades regionales, y ha tratadode responder al llamado en una variedad de apostolados. Todo ellorequiere de mucha energía, celo y, sobre todo, de voluntad para con-vertirnos, al igual que humildad para aceptarnos unos a otros.

FORTALEZASLas estadísticas demuestran que la edad promedio de los hermanos en laProvincia es lo suficientemente joven y prometedora. Este hecho permite

que los hermanos se aventuren en áreas y actividades que no habíansido exploradas hasta ahora. Las mentes jóvenes tienen la visióny el entusiasmo de aventurarse en nuevas formas de apostoladoque responden a las necesidades reales de la región. Las ini-ciativas tomadas por estos jóvenes hermanos, el dirigir pro-yectos para asistir a las familias socialmente marginadas

(proyecto “Rainbow” en India) su activa participación enprogramas de justicia social y su disponibilidad para trabajar

en misiones nuevas, son signos claros de crecimiento en la re-gión.

Los hermanos en la región están comenzando a aceptar, gradual-mente, a colaboradores laicos en nuestro apostolado. Existe tam-

bién el creciente deseo que sienten los laicos que trabajanjunto a los hermanos, de identificar su rol en nuestra misión

marista, con el fin de colaborar más efectivamente ennuestro apostolado.

Hay una tendencia positiva entre los hermanos de co-laborar con la iglesia local, especialmente en los es-

fuerzos que hacen por educar a los niños pobresy olvidados, particularmente en las áreas rurales.


La restructuración de la Provincia nuevos horizontes y ha

nuestra visión de la misión marista

H. Shanthi LiyanagePROVINCIA DE ASIA DEL SUR

Junio 2014 • 37

La restructuración de la provincia terminó con lasbarreras culturales y lingüísticas entre hermanos.Es por eso que en Jaffna, al norte de la provinciade Sri Lanka, hay una comunidad mixta de herma-nos paquistaníes, tamil y cingaleses trabajandojuntos.

DESAFÍOSEl número de hermanos en apostolados activos haido decreciendo ininterrumpidamente desde hacealgún tiempo. Muy pocos jóvenes han entrado enprogramas de formación en los últimos años. El en-tusiasmo por reclutar a nuevos jóvenes se ha idodesvaneciendo. Los hermanos, en general, sienten la necesidad deinvolucrar mucho más a los laicos maristas en susapostolados. Pero al hacerlo, sienten una falta deentusiasmo y muestran reticencia a compartir res-ponsabilidades con los ellos.Una estructura fuertemente jerárquica en la iglesiay en la sociedad y el poco entendimiento del rolde los hermanos religiosos en la iglesia, son algu-

nos de los obstáculos que encontramos al quereratraer a los jóvenes a la vida marista. Actualmente, la Provincia también enfrenta dificul-tades financieras en la región. La falta de fondos,sumada a una mala administración por inexperien-cia, obstaculiza nuestros programas de formación.Tendencia a tomar roles administrativos, de prefe-rencia, en el apostolado educativo; se da más rele-vancia a un apostolado activo que a la vida deoración. Todo ello ha erosionado la esencia denuestro compromiso, desviándonos de nuestro ca-mino hacia la nueva tierra que queremos descubriren la nueva Provincia.Estamos empezando a descubrir que necesitamosser hermanos de niños de una gran variedad de cul-turas, religiones, grupos étnicos y estatus social.


ha abierto centrado nuevamente Me gustaría identificar

al Instituto como “la fuerza de lo pequeño”. De otra forma, “la sencillez

de una vida centrada en el evangelio”, transmitida de forma transparente, por sus miembros.

H. Javier EspinosaDirector del Secretariado de laicos

E l llamado del XXI Capítulo general “Salgan con María deprisa auna nueva tierra”, encontró buena acogida en nuestro Consejo

provincial, que durante casi dos años se afanó en la elaboración delProyecto Provincial 2011-2017, inspirado en los tres horizontes delXXI Capítulo general e iluminado por ellos. El proceso vivido, ademásde mucho trabajo, diálogo y discernimiento, aportó buenas dosis desatisfacción: pudimos colocar nombre a nuestros sueños, priorizamosdesafíos y orientamos la Provincia hacia la “nueva tierra”.De momento la semilla está sembrada con cariño y esperanza y cadadía intentamos cuidarla. Soñamos que con la ayuda del Espíritu lacosecha pueda ser abundante para la construcción del Reino. Con lamirada del corazón percibimos que ya despuntan pequeños brotesque nos permiten soñar los frutos:

n Promovemos el nuevo modo de ser hermanos y comunidadessencillas, abiertas y acogedoras que estén al servicio de la mi-sión. Nos sentimos contentos y agradecidos del camino defraternidad que están haciendo las doce comunidades com-partidas de hermanos y laicos.

n Vivimos una Asamblea provincial muy bella en julio del 2013,con participación de muchos hermanos, laicas y laicos, para com-partir nuestros caminos vocacionales y crecer en una nueva rela-ción entre nosotros, basada en la comunión. Nos comprometimosen cuidarnos mutuamente y cuidar nuestras respectivas vocacio-nes, para que se haga realidad en nosotros el sueño de Dios.


Nuevos brotes de vida y grandes desafíos

H. Antonio PeraltaPROVINCIASANTA MARÍA DE LOS ANDES


Junio 2014 • 39

n Ofrecemos y acompañamos itinerarios es-pirituales y vocacionales a un buen númerode laicas y laicos que les ayuden a crecercomo discípulos y discípulas de Jesucristo, alestilo de María. Casi 150 laicos y laicasestán viviendo con mucho gozo y espe-ranza estos itinerarios.

n La solidaridad se está convirtiendo en un ejearticulador de la formación y educación ma-rista en nuestras diferentes obras. La defensay promoción de los derechos de los niños se haposicionado en la provincia como “clave” y re-ferente de compromiso y vitalidad. Así mismo elvoluntariado social se está consolidando comoun tema importante en nuestra misión.

n Construimos un nuevo estilo de relación quepromueve la fraternidad, la sencillez y la comu-nión. Para ello hemos creado nuevas estructu-ras y diseñado un nuevo estilo carismáticomarista de animación y gobierno.

n El Consejo provincial tiene muy avanzado unmodelo de evangelización, desde la educaciónmarista, que nos permita acompañar las bús-quedas de sentido y de Dios de las personasque servimos en nuestra misión. Queremosque nuestras obras sean reconocidas por serescuelas de evangelización, en donde seanuncia la buena noticia de Jesús.

n Estamos intentando planificar la gestióneconómica de modo que promueva el uso

evangélico de los bienes y estén más alservicio de una mayor justicia y fraterni-dad en nuestro mundo.

Y junto a nuestras pequeñas siembras y cosechas,siguen nuestros grandes desafíos:

o Crecer en mística y profecía: y para ello viviren pobreza y contemplación y cuidar nuestrascomunidades compartidas, como espacios de co-munión y vida.

o Ser más misioneros y menos gestores. Tomarnosen serio lo de ver el mundo con los ojos de losniños pobres y estar más presentes entre ellos.

o Crecer en integración provincial e internacio-nalidad.

Palabras para definir la fuerzavital del Instituto Marista:Simientes, plantas, flores y frutos de vitalidad que embellecen la vida

de muchísimos niños y jóvenes de las másvariadas culturas.

H. João Gutemberg - Distrito Amazonia


La nueva Provincia:una nueva identidad,

una nueva corresponsabilidad, unas nuevas relaciones...

H. Jeffrey CrowePROVINCIA DE AUSTRALIA

E l símbolo de “tierra nueva” nos ha acompañado desde 2009.Somos ahora una nueva Provincia en Australia y estamos traba-

jando interdependientemente con nuestros vecinos en Oceanía en unmodo que el Instituto desconocía - cada uno de los dos distritostiene su propio superior mayor.Cuando las Provincias de Melbourne y Sídney formalmente terminaronllegó el final de una época, de un modo de ser hermano en Australia.La nueva Provincia no es solamente la fusión de dos Provincias.Hemos tratado, conscientemente, de empezar un nuevo camino, nue-vas relaciones, nueva identidad de los hermanos en apostolados ma-ristas, nuevos contactos a lo largo y ancho de Australia y en dos denuestras presencias extraterritoriales: Timor Este y Camboya. Lo realmente “nuevo” no se ha dado solamente dentro de la Provinciacomo comunidad de hermanos. Existen cientos de mujeres, hombresy sacerdotes que se identifican como maristas en el estilo de Marce-lino. Cuando la nueva Provincia fue inaugurada afinales de 2012, lo presentamos como el primercumpleaños de la comunidad marista austra-liana – un nuevo idioma para una nueva rela-ción que es fundacional para el futuro demaristas en nuestro país.A finales de 1993 tuvimos programas de forma-ción para nuestros colegas maristas. El equipo demisión y formación de vida, laicos y hermanos,ofrece una serie de programas a nivel na-cional y local. Las personas se inscriben rá-pidamente para poder reservarse un cupo!Somos muy afortunados ya que en Aus-

tralia los costos de participaciónestán cubiertos por las es-cuelas y por otros centrosde empleo.

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CREAR UNA ASOCIACIÓNDE MARISTAS: HERMANOS,LAICOS Y SACERDOTESLa corresponsabilidad ha hecho también parte detodos los apostolados por 30 años. Ya es una reali-dad provincial. El Consejo Provincial ha formalmentedelegado casi todas las responsabilidades de losapostolados maristas al Consejo de Misión, com-puesto por maristas, hermanos y laicos. Este Consejoes también el foro de discusión para seguir cre-ciendo como maristas comprometidos con el futuro.Sabemos que debemos desarrollar una estructura depertenencia para los laicos maristas orientados a lavocación y una estructura para la vitalidad futura yla viabilidad de las obras maristas. Estamos en elproceso de crear una asociación de maristas - her-manos, laicos y sacerdotes- que tenga un estatuscanónico y civil, una asociación que sea primero yprincipalmente para la gente. Tenemos un equipo depastoral en el terreno, acompañando a personas ygrupos a nivel local. Tenemos una fuerza especialhaciendo la reflexión y la planeación.Tenemos pocos hermanos de menos de 50 años.Cuando tenemos candidatos son uno o dos, y ellonos genera muchas preguntas sobre la formacióninicial y el acompañamiento en la comunidad y enlos apostolados. Hemos visto que la “internacio-nalidad” juega un papel preponderante en susvidas. Estamos en el proceso de comenzar una casade discernimiento para los jóvenes interesados enestar juntos por un tiempo, como un modo de ani-

mar a los jóvenes para que profundicen en su dis-cernimiento vocacional, sin necesidad de hacerningún tipo de compromiso formal.Australia ha sido descrita como uno de los paísesmás seculares del planeta. La evangelización denuestra cultura es un gran desafío. A pesar dehaber aumentado la integración de nuestros servi-cios (escuelas, bienestar, pastoral juvenil, solida-ridad, protección) esperamos brindar a los jóvenesla experiencia de ser cristiano. Este es lo que másnecesitamos en un contexto de una iglesia humi-llada por las revelaciones de abuso infantil.Para los hermanos, se ha producido un enormecambio cultural en las últimas décadas. Esta se-guirá siendo nuestra realidad. Puede llegar a serdolorosa la experiencia de crear algo nuevo.


La fuerza vital del Institutoreside en la sinceridad de nuestro corazón: respondercada día a la voluntad de Dios.Resumiría con el lema

de la II Asamblea Internacional de la Misión Marista “Maristas nuevos en misión”.

H. João Carlos do PradoDirector del Secretariado de Misión

4. SEGUNDA SEMANA: LA VALLA

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¡EL SEÑORCONSTRUYE LA CASA! LA VALLA: INAUGURACIÓNDE LA CASACHAMPAGNAT

ÁLBUM DE FOTOSDE LA LALLA

DE LES PALAISA LA VALLA: EL CAMINODESDE LA LLAMADAHASTALA CONCRECIÓNDEL PROYECTO

Estas palabras del Hermano Lorenzo me han acompañado toda laobra. ¿Cómo las vivió? ¿Es posible que se den hoy, 2013, con la fuerzade antaño? Hoy lunes 16 de setiembre hemos “entregado” la obra,un acto sencillo y entrañable. Punto final de un trabajo apasionanteen el que, como me ocurrió en el Hermitage, he viajado a través deltiempo a la búsqueda de un momento. En mi mochila, lápiz y papel. Ordenador

y teléfono. Siglo XIX, siglo XXI.“Habla Señor que tu siervo escu-cha”. Hoy estas palabras dellibro de Samuel han abierto elperegrinaje del grupo presenteen Le Palais, donde acontecióel episodio de Jean BaptisteMontagne y arrancó todo.Champagnat habitó la casa de La

Valla un corto periodo de tiempo,desde de 1817 hasta 1824, mo-mento que la incipiente comunidadse trasladó a l’Hermitage. Entreestas cuatro paredes aconteció unfenómeno singular: el nacimientode un grupo humano cuya razón deser se concretaba en acciones direc-

tas muy concretas, con un lide-razgo preciso y unos referentes

centrales, Jesús y María. Estos jó-venes experimentaron un senti-miento tan poderoso de pertenenciay vinculación entre ellos mismos,que su legado alumbró una obra

cuyo legado perdura hasta hoy. ¿Qué aconteció,qué energía brotó entre estas paredes?

¡El Señor construye La Valla: Inauguración de la

Joan Puig-PeyARQUITECTO

Lo que más me impresionó cuando entré en esta santa casaes la caridad que el Venerable había sabido inspirar a todos

los miembros de la comunidad. Nos queríamos realmente, peroeste amor venía de un sentimiento del todo sobrenatural,nos queríamos en Dios y para conducirnos a Dios”.

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Estos años he tenido numerosas ocasiones para es-cuchar y percibir entre los huracanes una brisasuave! Un susurro, un indicio, que me ha ayudadoa descubrir el camino a seguir, primero en el diseñoglobal de los espacios, luego en la elección de ma-teriales, en la definición de los detalles, en el tra-tamiento de la luz y, ¡cómo no!, en la manera detratar a las personas. La inspiración llega inespera-damente, pero siempre en un contexto temporal,de paciente búsqueda y reiterada escucha. “¡Re-quiere tiempo!”, digo cuando me piden solucionesinmediatas a un problema difícil. He aquí el reto. Porque la perspectiva temporal la pierdo fácilmentea causa del desasosiego de lo que se me echa en-cima a diario y debo resolver sin pensármelomucho. Champagnat y sus jóvenes hermanos, acertaron avivir esta doble dimensión temporal. Un tiempo delargo alcance cuya referencia era Dios, yuxtapuestoa un tiempo cotidiano, vinculado al ciclo corto y laacción rápida, cuyos actores eran ellos. Esta inser-ción permitía dar lo mejor de cada uno de ellos. Untiempo llevaba al otro. En nuestra obra de rehabi-litación, siglo XXI, se ha dado también esta inser-ción hasta las últimas consecuencias. En la primera reunión de obra expliqué a todos losreunidos, donde nos encontrábamos y qué se pre-tendía. Cuál había sido el motor de lo que allí pasó200 años atrás. Nuestro proyecto constructivo re-solvía las necesidades de una casa que se encon-traba al borde del colapso. Pero la puesta en obraexigía lo mejor de cada uno. Era preciso tomar con-ciencia que no construíamos sólo para nosotros: re-cibíamos el legado de Champagnat (la mayoría nohabía oído nunca a hablar de él) y debíamos entre-garlo mejorado, para el futuro. Además, en misobras no se grita ni se insulta: todos debíamosvelar para que nuestras relaciones humanas fueranlas mejores. Presentar a Marcelino y apelar al fu-turo, significaba para mí una misión añadida,

“mirar” como miró Marcelino, aceptar el valor su-premo de cada persona tanto como el de su periciaprofesional o artesana. La opción era de alto riesgo,pues donde hay dinero siempre hay puñaladas yuno debe defenderse.La obra de reconstrucción de La Valla ha combinadolo antiguo con lo actual. Los espacios “en bruto”,con otros dotados de la tecnología moderna de hoy.Lo oculto con lo que se manifiesta, lo sombrío, conlo luminoso. La iconografía con el vacío. Propor-ciones y alturas calculadas. Arquitectura intimistay comedida. Todo ello desarrollado en medio deunas condiciones climatológicas muy duras. Ha sidopreciso exigir, lo que no ha supuesto faltar al res-peto. Durante la obra, cada uno, hermanos maris-tas, técnicos y obreros, ha dado lo mejor de símismo, a menudo por encima del cálculo especula-tivo. Y con sorpresa, percibíamos que se abría “otradimensión”, más allá de la profesional o mercantil:la de una humanidad transfigurada. Es fuerte. Loque el hermano Lorenzo testifica diciendo “nos que-ríamos realmente”, yo lo confirmo con otras pala-bras, más adecuadas a mi equipo de trabajo y a larudeza de la obra; pero que significan lo mismo:“En esta obra, nos hemos compenetrado”. La po-tencia de este verbo, su imagen sugerente, sobre-coge. Pero así ha sido. Por ello puedo decir que enLa Valla, la inspiración original de Champagnatsigue allí, viva, atenta a quien la quiera recibir. Yola he visto y la he tocado con mis manos. Y comoya me sucedió en el Hermitage, sé que lo que se daen primicia a unos pocos, se derrama a manos lle-nas sobre los que vienen detrás.Es significativa esta renovación en el contextomundial del 2013. Mirando a los pioneros entre“sus” paredes, vemos que sus certezas las constru-yeron en el vientre de un ciclo histórico que fue in-terpretado por la voz profética de Marcelino. Hoy,ante tantas incertidumbres, resulta difícil encontrarvoces autorizadas para interpretar con sosiego losacontecimientos y acompañar personas. ¿Dóndehay líderes que acierten a leer los ”signos de lostiempos”? ¿Quién alumbrará la luz que nos dirija ala salida del túnel? En la noche, La Valla es hoy unfoco potente que nos orienta, y que, como reza ellema de la Conferencia General, nos impulsa a des-pertar la aurora!

la casa!Casa Champagnat

Segunda semana: La Valla

Segunda semana: La VallaÁLBUM DE FOTOGRAFÍAS

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L a segunda semana de la Conferencia general inició simbólicamenteen Les Palais. Champagnat sintió dentro de sí una intensa moción,

movido por la compasión y por su profunda convicción cristiana, pararesponder no sólo al joven Montagne sino a todos los demás niños yjóvenes que vivían en similares condiciones. Como Hermanos, quisimosrecorrer la senda que siguió nuestro Fundador desde la casa del jovenhasta La Vallá. En ese tiempo de reflexión, Champagnat pensó, oró ydecidió crear una Congregación para atender esta misión. Mientras re-corríamos los senderos, bosques y campos, tratamos de adentrarnos enel corazón de Marcelino, abierto a las necesidades de su tiempo y a sudeterminación religiosa y humana. La llegada a La Vallá nos ayudó aadentrarnos en la fuerza extraordinaria de la decisión que llevó al Fun-dador a concretar su llamada personal y compartirla con una comunidad.La reinauguración de la casa fundacional, con sus tres niveles nos re-cordó elementos simbólicos de nuestra vida: el sótano como espacio deintimidad y espiritualidad, el primer piso como experiencia de comuni-dad en torno a la misma mesa, y el segundo nivel amplio, abierto y lu-minoso como proyección de la misión en todas sus dimensiones. Allí,celebramos la eucaristía y nos comprometimos sobre una imagen mo-dernizada de Champagnat, con nuestra firma, a continuar desarrollandola intuición original de nuestro carisma y nuestra misión actualizándolay recreándolo hoy.Esta experiencia, como portón de entrada, nos ayudó a centrar nuestrareflexión: Explorar la intuición del Capítulo general como instituto in-

ternacional. Para ello, nos preguntamos: ¿Cómo quiere ser per-cibido el Instituto marista en el mundo y en las comunidades

locales en el 2020? ¿Estamos funcionando como un Instituto in-ternacional o no? ¿Qué ha funcionado? ¿Qué se puede mejorar?¿Cómo analizarlo y visualizarlo a nivel central, continental, regio-nal y provincial?

Tanto el trabajo personal, como las reflexiones grupales, nos ayudarona concretar elementos importantes. En el centro enmarcamos la llamada

del Capítulo general, la internacional, nuestro aporte para una iglesia ma-riana y la realidad de los Montagne hoy. Con esta particular atención, lle-gamos a integrar seis temas a partir de nuestras percepciones:


De Les Palais a La Valla

El camino desde la llamada hasta la concreción del proyecto

H. Luis Carlos GutiérrezPROVINCIAAMÉRICA CENTRAL

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n la atención a los más vulnerables, n la disponibilidad global, n la animación de comunidades

internacionales maristas, n la profundización en una vida

significativa como hermanos, n la evangelización-misión, y por último, n las nuevas perspectivas en el gobierno

del instituto.

Cada grupo aportó sus ideas prácticas y criterios.Luego fueron posteriormente enriquecidas con elanálisis de los otros grupos. En una actitud de es-cucha, discernimiento y confianza, se fueron iden-tificando actuaciones concretas. Siendo la interna-cionalidad una clave interpretativa, cada tema seiluminó desde una visión de comunión y sinergiaen el Instituto, y con la convicción que este caminode mayor integración, intercambio y crecimiento esuna llamada de Dios en este momento. Con el consenso sobre las propuestas de los seistemas, iniciamos la reflexión por regiones del Insti-tuto. Allí tuvimos oportunidad de dialogar sobre loqué podía significar todo esto en nuestras provin-cias y regiones. Nos concentramos en dos preguntasorientadoras: ¿Cuáles serían las implicaciones paramí, para mi consejo provincial y para mi región?¿Cómo podemos apoyarnos mutuamente? Esto nosayudó a entresacar lo que valoramos y lo que suscitaen nosotros y en nuestra región. Una llamada fun-damental a la comunión y la esperanza emergió en

la Conferencia. Junto a ella, también una necesidadde comunicar e implicar, de avanzar y de ser gene-rosos, de crecer y de innovar. Con el realismo de loque tenemos como tarea de cara al futuro, un her-mano recalcó un mensaje a mi modo de ver impor-tante: “Hay mucha alegría en los proyectos. No hayque tener miedos, no hay que dejarse vencer por elpesimismo. Hay que confiar, creer, seguir adelante.Hay que pensar en la vitalidad del Instituto...” Conesta reflexión, colocada en nuestro corazón, espera-mos avanzar hacia una visión construida en común.Una visión llena de retos y llena de esperanza. Finalmente, la semana concluyó con informacionesdiversas sobre la Casa general, las Finanzas del Ins-tituto, la renovación de las Constituciones, la ce-lebración del Bicentenario, la reflexión sobre laasociación laical, las políticas de protección de losniños, la evolución-ampliación de FMSI, la evalua-ción de la Administración general, la Secretaría ge-neral con los sistemas de Kosmos y Archivum, elCurso Carisma y principios educativos maristas y lapropuesta de los nuevos modelos de animación,gestión o gobierno.La semana fue intensa en reflexión y en comunión.El núcleo de la internacionalidad, visto desde pers-pectivas diversas, en cada uno de los 6 temas re-flexionados, nos llevó a crear ideas y perspectivas.Confiamos en nuestra Buena Madre para orientarla vida y acción del Instituto y las Unidades admi-nistrativas para trasladar en acciones y signos loque soñamos durante este tiempo de gracia.

Segunda semana: La Valla

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5. TERCERA SEMANA: FOURVIÈRE

LÍDER MARISTAHOY

C omo preparación a la Conferencia general, el Hermano Superiorgeneral pidió a cada Provincial que visitara a otro Provincial

para aprender cómo ejercía el liderazgo en su Provincia. No se tratabatanto de ver qué estructuras de gobierno y de animación existían sinomás bien de percibir las iniciativas positivas puestas en marcha pordicho Hermano en el ejercicio de su cargo. A lo largo de la Conferencia,una dinámica nos permitió “diseñar” este líder ideal, indicando entorno a una silueta las cualidades que habíamos advertido. Las palabraso expresiones señaladas con más frecuencia eran, por orden de impor-tancia: visión de futuro, sentido del humor, capacidad de escucha, sen-tido de la colegialidad, organizador que sabe delegar, hombre de fe yde esperanza, hombre atento, afectuoso, constante… Cada una de estas cualidades merecerían un comentario; no obstante,me limitaré a dos de ellas: visión de futuro y trabajo en equipo.

UNA MIRADA DE FE

El lema de la Conferencia general era: “profetas y místicos para nuestrotiempo”. En una Provincia del primer mundo, donde la media de edad eselevada y las nuevas vocaciones muy raras, ¿cómo un Provincial puedeser profeta? ¿Se trata de anunciar a sus hermanos días mejores, paraestar más tranquilo y olvidar las dificultades del presente? En mi opinión,ser profeta implica la capacidad de leer los signos de los tiempos difíciles

que vivimos dentro del misterio de la pasión y de la resu-rrección del Señor. Este misterio nos enseña que debemospasar por la muerte para renacer a una vida nueva…Concretamente, debemos morir a lo que nos ata, a nuestrasseguridades; debemos dejar, abandonar lo que tenemospara arriesgarnos a lo desconocido… Si podemos com-

prender esta llamada a nivel individual, como una ascesispersonal para renovar nuestra vida consagrada, no ocurrelo mismo cuando se trata de un grupo de personas, porejemplo, un Instituto o una Provincia.Cuando se dice que el Superior debe ser un hombre devisión, se le supone en primer lugar, ser un místicoque ve a Dios en todas las cosas y en todos los acon-tecimientos. No se puede fundamentar o desarrollaruna Provincia o un Instituto contando solo con técni-cas, aunque sean profesionales. Siempre habrá algo, o


Líder marista hoy

H. Maurice BerquetPROVINCIA DEL HERMITAGE

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mejor, Alguien que se nos sustrae, Alguien a quien nopodemos proponer ningún modelo: el Espíritu Santo,del que dice la Escritura que sopla donde quiere. Pormi parte, aprecié en gran manera que el programa dela Conferencia general ofreciera cada día momentospara la meditación y la reflexión personales. En labase de todo ejercicio de Superior y de cada uno delos hermanos, debe existir este deseo de “cumplir conla voluntad de Dios”, a ejemplo de Jesús. En la con-templación del misterio de Cristo y de Cristo en cruz,como gusta subrayar el papa Francisco, podemos oírlo que Dios nos propone como vida, los caminos pararecorrer, las rupturas para realizar. En este ejercicio decontemplación que se nos ofrece, está la fuerza parallevar a cabo todos estos cambios difíciles y que nosdan miedo. Un Provincial sabe bien lo que suponendecisiones como: clausura de comunidad, desplaza-miento de hermanos, nueva orientación de las obras,envío de hermanos a otras Provincias… que van asuscitar, cada vez, incomprensiones y resistencias. Hoy día, nuestra responsabilidad de profetas, hermanosy laicos, consiste precisamente en poner todo nuestroempeño para ayudar a nacer el futuro que Dios nosdepara, nacimiento que implica muchas rupturas. Porejemplo, ser profeta para mí, significa apoyar la lla-mada sentida por algunos de mis hermanos para mar-char a la misión Ad Gentes. Es un sacrificio, pues setrata de hermanos con grandes posibilidades y quepodrían ser muy útiles en la misión de la Provincia.Sin embargo, de un modo misterioso, solo la fe puedeayudarme a comprender, como dice Jesús, que lo queofrecemos nos será devuelto… centuplicado.

COLEGIALIDAD

Con ocasión del último Capítulo general, se introdujoel método de búsqueda del consenso. Yo formabaparte del equipo preparatorio y luego de la comisióncentral. Confieso que este método, atractivo sobre el

papel, me produjo con frecuencia sudores fríos en surealización. Era imposible programar el Capítulo ensu conjunto ya que no se sabía adónde llegaría laasamblea en la misma tarde. Era preciso pues,adaptarse cada día y, cuando se desea mucho tenerlas cosas programadas de antemano, resulta unejercicio fastidioso. Sin embargo, debo decir queeste método, que deja mucho margen a la discusióny sobre todo a la escucha, y a la escucha de laminoría, tuvo el mérito de llevarnos a votacionescasi unánimes, aun cuando el sondeo inicial poníaen evidencia grandes disparidades entre nosotros.Habíamos podido acercar nuestros puntos de vistade manera espectacular y, al final, no había ni gana-dores ni perdedores. Se había “perdido” tiempo en ladiscusión pero se había ganado en eficacia puestodos se sentían partícipes de la decisión final.He quedado sorprendido al ver cómo nuestras Cons-tituciones sitúan el lugar de las decisiones ennuestros Consejos: general y provinciales. Vale lapena releer el artículo 150 de las Constituciones quetratan sobre las diferentes maneras de decidir en elseno del Consejo provincial. El Hermano provincialdebe pedir el parecer de su Consejo… (150.1) enseis casos particulares. El Hermano provincial nopuede actuar sin el consentimiento de su Consejo…(150.2) en veinte situaciones especiales. El Hermanoprovincial actúa colegiadamente con su Consejo…(150.3) en otros cinco casos. De estos artículos cabe deducir que el discernimientose fundamenta más en el grupo de consejeros queen la persona del Provincial. Personalmente, piensoque se trata de una norma muy prudente que da unagran libertad al superior en el momento de llevaralgo a cabo. Se comprende pues el interés para unConsejo general, provincial o local, o para cualquierotro grupo, en tener un funcionamiento colegiadoque sea sano; un funcionamiento en el que cadamiembro encuentra su lugar, sabe escuchar y sesiente solidario con las decisiones tomadas.Estar orientado hacia Dios (la mística) y orientadohacia los demás (la colegialidad) es tal vez, lallamada más apremiante que Dios nos hace hoy atodos nosotros maristas, hermanos y laicos. Es sinduda, uno de los caminos de vida por el que Diosnos conduce hacia esta tierra nueva de la que hablanuestro último Capítulo general.

Tercera semana: Fourvière

6.VIVENCIAS DELA CONFERENCIAGENERAL 2013

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Aurora de los tiempos nuevosDe una casa a otra… para la misma misión, como profetas y

místicos que quieren “despertar la aurora” mediante unanueva forma de ser Hermanos y Laicos de Champagnat.¿Por qué razón haber visitado dos veces los lugares donde se levantabala casa de Jean-Baptiste Montagne? ¿Por qué todos los participantesen la Conferencia general recorrieron a pie la montaña del Pilat durantetres horas para llegar a la otra casa, la Cuna de La Valla? Yo llegué aexperimentar en mi cuerpo lo cierta que es la reflexión de Marcelino:“Si hubiese podido recoger todos los sudores ocasionados por idas yvenidas por estas montañas, habría suficiente para tomar un buenbaño”. Sin embargo, más allá del sentimiento físico, hemos compren-dido la grandeza de alma del Fundador, el primer despertador de auro-ras.En La Valla, fuimos los dichosos peregrinos en admirar la renovaciónde la Cuna del Instituto. La casa “Bonnair” hace honor a su nombre.¡Qué “buen aire” emana del lugar! ¡Un aire de familia! Los arquitec-tos han logrado una coordinación excepcional entre el estado de lacasa de la época de Marcelino y la de hoy, abierta simbólicamente aun mundo global totalmente transformado. Al abandonar este lugartan querido por todos nosotros, maristasde Champagnat, hermanos y laicos,llegamos a comprender cuán grandeera la confianza del joven vicarioen Dios, en la Buena Madre y tam-bién en sus primeros discípulos,adolescentes y jóvenes adultos,tan ansiosos por ayudar al buenPadre en hacer realidad el sueño decontar con Hermanitos de María “entodas las diócesis del mundo”.

H. Bernard BeaudinPROVINCIA DE CANADÁ

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Esta visita fue el primer momento del gran discer-nimiento de la segunda semana:Nuestra casa, como deseaba Marcelino, ¿es una«FRATERNIDAD UNIVERSAL»?

n La media de edad del Instituto es de 61,2 años.

n En África, la edad media es de 46,2 años.

n En América, 63,8 años.

n En Asia, 49,8 años.

n En Europa, 69,5 años.

n En Oceanía, 67,8 años.

Con fecha del 9 de septiembre de 2013, somos 3380hermanos. En 1965, el Instituto presentaba la ciframás elevada, 9752 hermanos. Estábamos en estegrupo, lo recordamos. Pero, ¿por qué este inventariode cifras y de medias? Sencillamente, para que nospermita creer que aún es posible continuar el caminotrazado por Marcelino, hacia la tierra nueva del Ins-tituto y de cada uno de sus miembros, hermanos ylaicos, llamados a seguir sus pasos. ¿Cómo se podráhacer? Con un gran acto de fe y de confianza en Diosy en Aquélla “que ha hecho todo entre nosotros yque es nuestro gran tesoro”. Esta convicción nos im-

pulsa a un proceso “internacional” para reavivar lasolidaridad aunando nuestros recursos y nuestrasfuerzas y dar así una respuesta generosa a las llama-das del 21 Capítulo General. Esto se puede hacer sindolor, sin miedo y sin dinero. He aquí el desafío.Simplificando el contenido de largas horas de discer-nimiento entre nosotros y con Dios en la plegariapersonal y comunitaria, hemos identificado seis as-pectos fundamentales de nuestra vida y de nuestramisión.

n Nuestro compromiso con los más vulnerablesentre los niños del mundo.

n La disponibilidad global pedida al conjunto de hermanos con 50 años omenos, particularmente (¡Nos libramos!)

n La fundación de comunidades internacionalesde hermanos y de laicos (Todas las edades, ¡no nos libramos!)

n El testimonio significativo de la vitalidadespiritual de los hermanos y de un estilo de vida sencillo (¡También nos afecta!)

n La evangelización asumida y garantizada por la revitalización de las estrategias en la educación y en la comunicación (¡aún podemos…!)

n El gobierno y las reestructuraciones regionalesmejor definidas. La gestión financieratransparente y solidaria (¡También estamos en ello!)

CONCLUSIÓN ¿Qué van a aportar estas intuiciones? Un cambioradical de las mentalidades. Y sobre todo, una CON-VERSION PERSONAL Y RADICAL A JESÚS, CENTRODE NUESTRA VIDA. Creo que es la tierra nueva denuestro corazón de Hermanito de María que debe-mos cultivar. Según la buena y antigua fórmula teo-lógica tradicional, nuestros compromisos seresumen en tres palabras: pobreza, castidad, obe-diencia. Según el espíritu de la Conferencia general de2013, una única respuesta resume el compromisodeseado: Aurora de los tiempos nuevos.

Vivencias de la Conferencia General 2013


La vitalidad tiene que ver más con las raíces que con las hojas verdes

H. Óscar Martín VicarioPROVINCIA COMPOSTELA

Nuestro Capítulo General lo dijo muy bien, cuando hablóde recuperar la esencia de nuestro “ser hermanos”. Y la re-

ciente conferencia general lo ha traducido en esa expre-sión hermosa y a la vez interpelante: ser vigías, serserenos, ser testigos y, aún más, ser despertadores oparteros de la aurora.

Los maristas del futuro podremos ser conocidos,ojalá, como un Instituto internacional de exper-tos en fraternidad, defensores y educadores delos jóvenes necesitados, y constructores de unaIglesia marial. Y todo ello desde la pequeñezde los auténticos hermanitos, menos numérica-

mente quizá y sobre todo más sencillos… perocon valentía profética y hondura mística.

Eso es de verdad, creo yo, futuro y vida en abundancia. Re-nacimiento.

“María, centrados en Jesús y atentos a las necesidades

de los niños”.

José María Custodi - Distrito de Paraguay

Desde mi punto de vista, la vitalidad siempre tiene que ver más quever con las raíces que con las hojas verdes. Y es cierto que hay mu-

chas hojas verdes en nuestro Instituto (una excelente misión entre los niñosy jóvenes, un fecundo camino de comunión de hermanos y laicos, iniciativasvalientes en la defensa de la infancia, comunidades que abren nuevos ca-minos…) Pero, sin infravalorar toda esta vitalidad, la pregunta de fondoha de ser ¿cómo están nuestras raíces? ¿en qué roca firme, como Cham-pagnat, nos cimentamos? ¿de dónde nace el agua viva?La vitalidad marista en los próximos años tiene que ver con nuestro ser. Y,por eso, los grandes indicativos a los que mirar conectan con lo más hondode cada uno de nosotros: la profunda humanidad que sabe a evangelio, laespiritualidad renovada y renovadora, la fraternidad acrisolada, la compa-sión y el servicio a los niños más pobres…

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Una vidasignificativa

H. Ben ConsigliPROVINCIA USA


Una de las imágenes más poderosas que siguen resonando dentrode mí fue la de la recientemente renovada casa de La Valla.

La casa ahora cuenta con tres niveles diferentes que pueden ser visitadospor los peregrinos—el sótano, donde los historiadores maristas creenque Marcelino vivió durante los primeros años de fundación; el salón dela comunidad donde se encuentra la icónica mesa de comedor y dondevivieron algunos de los primeros hermanos y la “sala de misión”, un áreausada como dormitorio cuando la comunidad empezó a crecer.

TODOS POR EL BIEN DE LA MISIÓN

La casa fue renovada con la siguiente idea en mente: espiritualidad, dartestimonio radical de los valores del Evangelio, sencillez de vida y frater-nidad – todos por el bien de la misión. El sótano donde vivió Marcelino,representa la necesidad de profundizar nuestra relación personal con Jesús.Es aquí donde Marcelino contempló el amor incondicional de Dios por él.La sala de la comunidad representa la sencillez de vida, un testimoniocomún del Evangelio y de una fraternidad vibrante. La sala de misión re-presenta el dinamismo que fluye tanto de nuestra relación personal conJesús como de nuestra vida comunitaria. El Hermano Emili repitió las pa-labras del Papa Francisco: como Maristas estamos llamados a vivir, cultivary transmitir la dimensión contemplativa de nuestras vidas a nuestros her-manos en comunidad y al mundo que nos rodea. ¿Qué pasaría si tomáramoseste llamado seriamente? Para mí esta es la pregunta más significativa,mientras analizamos el futuro y vitalidad de nuestra vida y misión marista.


Pulsar de cerca el Instituto

y su vitalidadH. Ricardo Uriel Reynozo RamírezPROVINCIA DEMÉXICO CENTRAL

E n el Hermitage, pude tocar la roca cortada, donde todavía brota agua,como también pude pulsar de cerca el Instituto y su vitalidad, en toda

su diversidad unificada en un horizonte, donde María de la visitación muestrael camino. Aquí, el Padre Champagnat conformó una comunidad con las per-sonas de las aldeas vecinas y en la conferencia él mismo, tan vivo como en-tonces, amalgamó a los provinciales de la aldea global y nos invitó a hacerlo mismo entre las provincias.En La Vallá, pude introducirme en la meditación silenciosa del oratorio delsótano. Convivimos en la sobria estancia que albergó a la primera comuni-dad, donde “la Mesa” fue el centro. Y firmamos el nuevo comienzo en lagran sala superior, donde una gran ventana vertical, permite ver el cielo sindejar de ver la tierra. Todo este conjunto nos mostró simbólicamente el pro-yecto de la conferencia: “SER MÍSTICOS Y PROFETAS PARA NUESTRO TIEMPO”.A Fourvière, volvimos los ojos para consagrar a María, la disposición quehará nacer la auroray expresamos elcompromiso de cadaregión del instituto,surgiendo así el pri-mer rayo de la au-rora que dará nuevobrillo a los ojos delos niños y jóvenesmás desatendidos.

Conferencia General,visos de un esperado amanecerL a Conferencia General vivida en el Hermitage fue una gracia de

Dios para quienes tuvimos la oportunidad de participar en ella.Una excelente manera de entrar en contacto con el Superior General ysu Consejo, con los Coordinadores de los diferentes Secretariados, asícomo con los demás Provinciales y Superiores de Distrito del Instituto. Los iconos del Hermitage, La Valla y Fourvière, inspiraron el itinerariode nuestra Conferencia. Estos nos permitieron tomar contacto con lasfuentes mismas de nuestros orígenes, de nuestra espiritualidad yevocaron la experiencia vivida por nuestro padre Fundador, invitándonosa un nuevo inicio del Instituto Marista. Este nuevo amanecer marista,lleno de sueños y esperanzas de futuro se ve perfilado por una vidacada vez más centrada en Jesús y su evangelio, siendo significativos,en comunidades fraternas, al lado de los mas pobres y favoreciendo lainterculturalidad y la internacionalidad. Así mismo, la comunidad deacogida y los espacios renovados del Hermitage y La Valla, noshicieron sentir realmente en familia.

SER SIGNOS DE ESPERANZA

Finalmente, la Conferencia General nos invita a abrir nuestroshorizontes, a salir de nuestras propias fronteras, a trabajarcada vez más en comunión como Provincias, como Regionese Instituto, guiados por la fuerza del Espíritu para sersignos de esperanza y rostro mariano de la Iglesia. Todos estamos invitados a caminar en esta dirección. Elcamino es largo y prometedor. Confiamos en la presenciaamorosa de Dios, la protección maternal de María y en lafuerza viva de nuestro Padre Fundador y de todos los her-manos y laicos que han hecho posible este sueñohasta nuestros días.

H. Libardo Garzón D. PROVINCIA NORANDINA


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Consolidar la unidad del Instituto y

favorecer los contactos directos

L a Conferencia General fue para mí un momento para “Consolidar la uni-dad del Instituto y favorecer los contactos directos de los Superiores

entre sí y con el Hermano Superior General y los miembros de su Consejo”(C 137.11.1). Me sentí hermano entre hermanos. La metodología de las tressemanas proporcionó un buen ambiente, fraterno, un diálogo abierto yorante. Los iconos de cada semana ilustraban y favorecían el enfoque, eranel hilo conductor para que los procesos alcanzasen los objetivos deseados.El lema: "Despertar la aurora - Profetas y místicos para nuestro tiempo",hasta el día de hoy está alimentando mi día a día y motivando mi conver-sión personal. Creo que la Conferencia General ha traído una fuerte moti-vación para vivir la misión apostólica de la animación y del gobiernoprovincial. La dimensión orante ha sustentado mi fe.En la carta abierta redactada por los Hermanos Provinciales de Brasil yadaptada para cada Provincia se encuentran los principales retos que ema-nan de la Conferencia General para el conocimiento de los Hermanos y delos Formandos de la Provincia:

1. El reto de la fidelidad vocacional

2. El reto de la vida comunitaria auténtica y atractiva;

3. El reto de la renovación en la misión

4. El reto de la internacionalidad

5. El reto de la asociación y trabajo compartido entre hermanos y laicos/as;

6. El reto de ir a los más pobres.

La peregrinación desde Les Palais hasta La Valla fue notable. El ambientedel Hermitage fue también muy significativo. Las presencias: de Nuestra

Buena Madre, de nuestro Padre Fundador y de la primera generaciónde Hermanos, nos proporcionaron a todos un ambiente propicio

para un buen caminar hacia el Bicentenario.

H. WellingtonMousinho de MedeirosPROVINCIA DEBRASIL CENTRO NORTE

“Vitalidad: Esperanza para el futuro.

H. Joe Walton - África Austral

Como Hermano Marista, la experiencia más significativa de la ConferenciaGeneral fue poder vivirla en el Hermitage junto a todos los animadores

del Instituto, y revivir la experiencia del Padre Champagnat con la primerageneración de hermanos. La historia me dice que fue desde el Hermitagedonde el Padre Champagnat envió a los primeros hermanos en misión. Esgracias a estos hermanos, y a las generaciones que les siguieron, que entréen contacto con el carisma del Padre Champagnat, que me hice depositariodel mismo, aceptando la responsabilidad de transmitirlo a otras generaciones.Si lo comparamos con el tiempo de Jesús y de sus apóstoles, yo me sentícomo un apóstol de la juventud invitado a entrar en el Hermitage paradescansar y volver a las raíces (Cfr Marcos 6, 31). Al final de cada misión losapóstoles volvían a reunirse con Jesús. “Yo sentía resonar la palabra deJesús dentro de mí “no se alegren, sin embargo, de que los espíritus se lessometan; alégrense más bien de que sus nombres estén escritos en el cielo”(Lc 10,20). Yo sentí un gran orgullo de ser un Hermano Marista, hijo deChampagnat. En otras palabras, mi nombre está inscrito en el cielo no por elmérito de lo que hago, sino porque Dios me amó primero y me llamó ahacerme Hermano Marista. Esta experiencia motivó mi participación activaen todas las actividades de la Conferencia General.En el camino entre Les Palais y La Valla, yo traté de imaginar en qué pensabael Padre Champagnat después de haber encontrado al joven moribundo,Jean Baptiste Montagne. Para mí el encuentro entre Champagnat y JeanBaptiste Montagne fue la experiencia base de la fundación de nuestroInstituto. Experiencia a partir de la cual el Padre Champagnatescuchó la voz de Dios a través de la ignorancia espiritual de lajuventud de su tempo. Como dice San Pedro “Porque ningunaprofecía ha sido anunciada por voluntad humana, sino que loshombres han hablado de parte de Dios, impulsados por elEspíritu Santo" (2 Pe 1,21). En esta experiencia, yo veo elaspecto profético de la acción del Padre Champagnat. Él viouna necesidad, él escuchó la voz de Dios en el acontecimientode Montagne y, sin demora, como María, Lucas 1,39, él se puso enmarcha, él actuó. De Les Palais a La Valla me imagino como MarcelinoChampagnat “cúantos Montagne hay en las diócesis y en las diócesis delmundo” que yo asocio con “todas las diócesis entran en nuestros planes”.Lo que me motivó mucho durante la conferencia fue poder compartirnuestras experiencias de vida comunitaria donde, con frecuencia,enfrentamos la dificultad de vivir como hermanos, sin que haya conflictos

H. Valentin DjawuPROVINCIAÁFRICA CENTRO-ESTE


Revivir la experiencia delPadre Champagnat con la primera generación

de hermanos

Junio 2014 • 67


culturales o de creencias. Aprendí aconsiderar lo esencial, el por quéestamos juntos. Profundizar en elsentido de privilegiar lo que une enlugar de lo que nos diferencia. Estodespertó en mí el sentido de perte-nencia a una gran familia, rica deculturas diferentes y complementa-rias. Es por ello que esta familiapuede comparase a mi provincia,región e Instituto, donde debemosestar atentos a las necesidades dela misión marista en la comple-mentariedad y solidaridad. Este modode ver las cosas me han conducidoa hacer mía la historia fundadorade nuestro Instituto: de Les Palaisa La Valla.Como las partes de un órgano vivo,he aprendido a considerar cada uni-dad administrativa como un miembrode este cuerpo que es el Instituto,donde debemos cuidarnos los unosa los otros por la perennidad de lamisión marista, que consiste enque niños y jóvenes conozcan yamen a Jesús. Esta experiencia mi-sionera no puede vivirse si no seestá en comunión con Jesucristo, aquien debemos imitar día tras día,como el Padre Champagnat hizojunto a las primeras generacionesde hermanos.

Cambiar el modo en que nos vemos a nosotros mismos y al mundo, es el llamado a ser profetas y místicos que seguirá resonando en los próximos

10-20 años. Nuestra vitalidad dependerá justamente de cómo respondamos a este llamado:1. La fortaleza no radica en los números ni en las grandes

estructuras, sino en lo que significamos para la sociedady la iglesia. La Conferencia General nos recordó que, siamamos a Dios, no deberíamos empezar ningún proyectosin confiarlo primero a Él. Dios sigue siendo el constructory protector de nuestra casa “Nisi Dominus…”

2. Ya no somos los mejores y debemos resistirnos a la tentación de ¡serlo! Debemos renunciar a la culturacompetitiva que nos ha acompañado por años – que seopone a la recomendación de M. Champagnat de seguirsiendo “hermanitos de María” – y abrazar una culturacooperativa. Hubo un tiempo en que tuvimos las mejoresescuelas, las mejores instalaciones deportivas, los mejoresclubs, las mejores organizaciones filantrópicas… Gracias a Dios la realidad actual nos lleva de regreso anuestra sencillez original.

3. Como María, es después de haber acogido la palabra deDios y de haberla asimilado en nuestro corazón, quevamos de prisa hacia nuestra misión para traer nueva vidae invitar a nuevos miembros a que se unan a nosotros.

H. Eugène Kabanguka - Consejero General

H. Valentin DjawuREVIVIR LA EXPERIENCIA DEL PADRE CHAMPAGNAT CON LA PRIMERA GENERACIÓN DE HERMANOS

Reflexión personalsobre la

Conferencia GeneralL a Conferencia General fue una experiencia intensa para los partici-

pantes y un evento significativo para el Instituto Marista. Muchos delos participantes ya se habían reunido, a lo largo de los años, en variosencuentros. El fruto de estas oportunidades para encontrarse y trabajarjuntos se hizo evidente en la facilidad con la que este gran grupo pudoformar comunidad ya en la primera semana.

CUATRO CONCEPTOS CLAVES

Al presentar la Conferencia General a los Hermanos de la Provincia de EuropaCentro-Oeste me valí de los cuatro conceptos claves: internacionalidad, for-mación, contemplación, el rostro de los pobres. La Provincia de Europa CentroOeste enfrenta un tiempo de disminución, pero existen maneras de apoyar lainternacionalidad en el Instituto. Todos nosotros podemos renovarnuestro compromiso de oración personal y de contemplación y bus-car maneras de estar al servicio de los pobres, tanto en la Provinciacomo en otras partes del mundo marista. La vitalidad del InstitutoMarista en el futuro vendrá del espíritu y de la práctica de la dis-ponibilidad internacional, teniendo un enfoque claro en la misiónjunto a los pobres, que está profundamente arraigada en la con-templación como valor y práctica en las comunidades maristas.

H. Brendan GearyPROVINCIAEUROPA CENTRO OESTE


Somos una comunidad marista dinámica, de hermanos y laicos,con una integración

internacional activa, capaz dellevar el mensaje del evangelio concompromiso, esperanza y pasión,a los niños y jóvenes y a los Montagnes de hoy.

H. Luis Carlos GutiérrezProvincia América Central

Junio 2014 • 69


Experienciasignificativa

H. AmbrosioAlonsoPROVINCIA IBÉRICA

Cada día el Señor nos regala espacios, encuentros y acontecimientosque llenan el corazón y le hacen vibrar. El participar de la Conferencia

general ha sido un tiempo y una experiencia significativa y de gracia insti-tucional y también a nivel personal. Han sido unos días intensos y ricossobre todo por la vivencia de comunión con los hermanos y con el Instituto,vividos desde la escucha, una mirada amplia desde lo profundo del corazóny la experiencia del encuentro y compartir fraterno.La vivencia que a lo largo de la conferencia ha sido significativa, de sentidoy que he vivido con gozo ha sido el momento de oración personal al que es-tábamos invitados al iniciar cada jornada. “Habitar el Misterio” y sentirmehabitado por él, de experimentar su presencia, su fuerza y energía, de sen-

tirme querido por Dios al inicio de cada díay gozar de su paz junto a los hermanos. Un espacio de encuentro personal con Jesús,de confiar y contemplar, de sensibilidad yapertura atenta a sus propuestas, tambiénpara dar gracias y ofrecer las vivencias devida marista que el nuevo día me va a pro-porcionar. Acabada la Conferencia es algoque sigo empeñado en vivir cada día, ha-ciendo de Él la fuente y razón del sentido deldía nuevo, de mi vida y misión cotidiana.

Maristas, testigos del amor de Dios, viviendo la fraternidad,al lado de los niños y jóvenes pobres.

H. Libardo Garzón D. - Provincia Norandina

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L a contribución más significativa a la Conferencia General fue hechapor el Hno. Philip Pinto cuando habló franca y honestamente de

los problemas que había tenido que enfrentar, y cuando reflexionó sobrela declaración de las Hermanas brasileras “[Nosotras]… ya no somoslas mejores profesoras, ni las mejores enfermeras, ni las mejores traba-jadoras sociales, ni las mejores agentes de pastoral, ni las mejores fi-lántropas…este es el rol que [nosotras] estamosdejando ir”. Yo creo que fue un mensaje de libertadpara todos nosotros, si fuimos lo suficientemente va-lientes para reconocerlo.

H. David McDonaldPROVINCIADE NUEVA ZELANDIA


¿ Vitalidad del Instituto de aquí a 10-20 años ?

• La internacionalidad: somos “hermanos sin fronteras”.

• La fraternidad como característica de nuestro ser: establecemos relaciones de servicio, no de poder.

• El servicio a los niños y jóvenes, en particular a los más pobres… mediante la defensa y la promoción de sus derechos.

• Rostros del Dios de la ternura, como María, para todos losseres, especialmente para los niños y jóvenes.

• Somos místicos cuya vida está centrada en Cristo.

H. Maurice BerquetProvincia del Hermitage

Unmensaje de libertad para nosotros

H. Philip Pinto,Superior General deChristian Brothers


Conectar conChampagnat y María

de manera profundaVivir tres semanas juntos en el Hermitage es como hacer un viaje es-

piritual hacia lo más profundo de sí, para luego regresar con unaperspectiva diferente. Yo no caminé solo sino que lo hice junto a María,Champagnat y mis hermanos. La oportunidad de contemplar y rezar en lu-gares maristas tan significativos como Le Palais, La Valla, L’Hermitage y laFouvière, me ayudaron a conectarme con Champagnat y María en un modomuy profundo. Cómo quisiera que todos los hermanos de mi Provincia tu-

vieran esta experiencia transformadora y seconvirtieran en el Champagnat de hoy, con-tinuando la misión que él nos confió. Por-que si uno no se hace un hombre de Dios¿cómo puede hablar a otros de Dios?

H. Robert TeohPROVINCIA ASIA DEL ESTE

Nuestra fuerza vital se halla en la aceptaciónhumilde de nuestra fragilidadinstitucional y desde allí

elevarnos buscando lo esencial de nuestra vida marista que se halla sólo en el seguimiento radical de Jesús, asumiendo el reto de empezar de nuevo, de provocar una revisión y cambio profundo de nuestras estructuras y estilos de vida que ya no nos sirven para acoger la novedad permanente que viene a nosotros desde el futuro.

H. Horacio BustosProvincia Cruz del Sur

Un hermano, místico y profeta,

para el mundo dehoyH. César RojasDIRECTOR DEL SECRETARIADOHERMANOS HOY


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L a invitación a promover la mística y la profecía, que la ConferenciaGeneral hizo llegar a todo el Instituto, es la traducción de lo que

ya el XXI Capítulo General había señalado en los horizontes de futuro. ElCapítulo nos interpeló a vivir la novedad en nuestra opción como con-sagrados, arraigados firmemente en el Evangelio y promoviendo unanueva manera de ser hermano.Ciertamente a lo largo del mundo marista, vamos vislumbrando reflejosde la nueva aurora. Poseemos una hermosa riqueza carismática quetraspasa barreras geográficas, lingüísticas y culturales, y que aparece ennuestros días en un gran número de laicos, laicas, jóvenes, que sientencomo propio el carisma de Champagnat y que junto a los hermanos laencarnan en formas nuevas y variadas.La dimensión mística de nuestra vida nos posibilita disfrutar de lapresencia amorosa y gratuita del creador, del Padre amoroso y bueno quea diario viene a nuestro encuentro. Me maravillo al ver tan variadasexpresiones de ese encuentro íntimo con el Señor que se están cultivando

en muchas de nuestras comunidades, grupos delaicos, fraternidades, movimientos juveniles…

Puede ser que en algunos ambientes existaun cierto escepticismo frente a la oración,pero por otro lado, va apareciendo el con-vencimiento de que la auténtica conversiónpersonal y la renovación institucional, nos

exigen crecer en interioridad, introducir es-pacios de silencio en nuestra vida y dejar ha-bitar al Señor en nuestro corazón.

Ciertamente los maristas somos muy recono-cidos por toda esa fuerza y energía pastoral


que desarrollamos de manera muy efectiva. La sociedad nos valora por labella labor educativa y evangelizadora que realizamos. En ambientesreligiosos se nos reconoce por la calidad de las diversas obras que llevamosadelante, pero no somos tan conocidos por ser hombres de oración, hombresde Dios. Pero, sin duda, que muchos de nuestros hermanos mayores dan unbello ejemplo de constancia, fidelidad y entrega a Dios; su oración, tantopersonal como comunitaria, es muestra de ello. Percibo entonces que la invitación a ser místicos, no será otra cosa quegozar de esos espacios y momentos donde leemos el paso salvífico yamoroso de Dios por nuestras vidas. Espacios que disponen nuestroscorazones para escuchar la voz del Señor, y como sucedió a María, nosinvitan a salir de prisa, para anunciar su Evangelio a los niños y jóvenes. Y si bien la mística nos convoca al encuentro personal con el Señor, laprofecía nos envía al encuentro gratuito con los demás, para convertirnos enrostro amoroso de Dios para sus vidas. Algo muy hermoso que vamospercibiendo en el Instituto es todo el potencial de vida que hemos idogenerando a través de nuestra actividad apostólica y que hoy se sigue trans-formando en semillas del Reino para toda la humanidad. El profeta marista es aquel hombre o mujerque, inspirado en el Padre Champagnat y ennuestros primeros hermanos, se convierte entestigo de la fraternidad en medio de unmundo que cada vez divide y separa más alser humano por condicionamientos de tiposocial, racial, cultural, religioso o económico.Vivimos un cambio de época que nos desafíaa salir de nosotros mismos y de nuestras se-guridades, que nos interpela a explorar la ri-queza de la internacionalidad y nos invita acultivar un corazón nuevo que testimonia laconversión a Jesucristo en una vida de amorincondicional y disponibilidad radical.Desde el Secretariado Hermanos hoy continuamos en la búsqueda de todosesos elementos que generen mucha más vida e ilusión en nuestra opción porel seguimiento de Jesús y nos conviertan en anunciadores y testigos delevangelio. Todo ello de alguna manera será un anuncio vocacional carismáticopara que muchos jóvenes, laicos y laicas, sientan como propio este llamadoy decidan encarnar desde las diversas vocaciones la opción por el seguimiento

de Cristo al estilo marista. Inspirados en el Dios de la Vida y con Maríacomo compañera de camino, pidamos la luz y lafuerza para seguir encarnando con autenticidadlos valores de nuestra bella tradición maristacomo son la sencillez, la fraternidad, la luchapor justicia, la solidaridad, la devoción mariana.Nuestra vida y nuestra acción apostólica seconvertirán nuevamente en anuncio liberadorde un Reino de Dios que ya es posible.

H. César RojasUN HERMANO, MÍSTICO Y PROFETA, PARA EL MUNDO DE HOY

La fuerza vital del InstitutoMarista de aquí a 10 - 20 años:

« Vivir en la esperanza, creyendo en los planes de Dios. »

H. Shanthi Liyanage - Provincia Asia del Sur

Junio 2014 • 75

El susurro ypolifonía

del agua del GierH. Javier EspinosaDIRECTOR DELSECRETARIADO DE LAICOS


A sumo sin mucha dificultad que una fortaleza ha sido la reafirmacióngeneral de los tres horizontes del Capítulo, junto con la dimensión

de internacionalidad. Reafirmación que ha surgido más del corazón que dela cabeza, más de la acción del Espíritu que de planteamientos estratégicos. Los ecos de la Conferencia siguen fortaleciendo en mí la urgencia de “lanueva relación de hermanos y laicos, basada en la comunión, buscandojuntos una mayor vitalidad del carisma marista en el mundo de hoy”, quepropuso el XXI Capítulo General y que busca promover el Secretariado delaicos. Estas semanas en el Hermitage han supuesto hablar de comunióndesde una mayor autonomía laical, como condición para situarse al mismonivel en el diálogo carismático con los hermanos, aunque con identidadesvocacionales diversas. Más, se intuyó que el rostro laical del carisma maristalleva consigo que laicos y laicas estén organizados, reconocidos, con ex-presiones de vinculación y pertenencia al carisma o a la misma Institución. Esta visión común del segundo horizonte del Capítulo por parte de losmiembros de la Conferencia, ha comportado relacionarla naturalmente conla nueva vida consagrada, con la forma nueva de ser her-mano, del primer horizonte capitular. Se ha intuido quela comunión ayuda a identificar mejor las propias voca-ciones, que la nueva relación hace crecer el sentido decomplementariedad, tanto para vivir los valores del evan-gelio como para desarrollar las potencialidades del ca-risma. Ninguna vocación agota el evangelio ni elcarisma. Pero juntas sí pueden ofrecer la totalidad.He sentido como fortaleza el convencimiento de creer, confuerza interior, lo que habíamos escrito tiempo atrás. Creointuir que hay ganas de comenzar con experiencias consis-tentes que ofrezcan caminos denovedad para la vocación ma-rista, sea laical o de hermano,y para la misma expresión delcarisma. Promover bro-tes de vida, cuidarlosy acompañarlos, pa-rece ser más viabley motivador paranuestros proyectos.


Desde lo escuchado y vivido en la Conferencia me confirmo en el conven-cimiento de que la comunión hermanos – laicos es uno de los ejes trans-versales que debe recorrer los programas formativos, tanto de formacióninicial como permanente, la constitución de comunidades, los proyectos demisión, la presencia entre los más pobres, los modelos de gestión, nuestra es-piritualidad, la pastoral vocacional, las respuestas nuevas al mundo de hoy…Los horizontes del Capitulo han encontrado una nueva plataforma de lan-zamiento desde la propuesta del h. Philip Pinto sobre una nueva culturainstitucional. La entendimos como una nueva forma de ser como Instituto,que supera el sentirnos en vanguardia de todo, el ser los mejores, el pro-mover grandes acontecimientos que impacten. La nueva cultura institu-cional suena a refundación evangélica de la vida religiosa, a refundaciónde nuestra vocación de hermano. La nueva cultura es esencialidad, conta-gio, perfume, mística, ojos abiertos, escucha, humanización, misterio deDios, transparencia sin máscaras, verdad… La nueva cultura modela unanueva forma de ser, con nuevos significados que transmiten más evangelioque gerencia empresarial, ansiosa, ocupada y competitiva. Modela unanueva forma de ver las cosas, más humana, más profunda, más de Dios.

COMUNIÓN FRATERNA, CARISMÁTICA Y TAMBIÉN JURÍDICA

Esta nueva cultura institucional tendrá en cuenta a los hermanos y a loslaicos. Nos introduciría así en la nueva época para el carisma marista denuestro último Capítulo, donde se hará más palpable la comunión. Co-munión fraterna, carismática y también jurídica.En esta nueva cultura se aprenderá la práctica contemplativa, que “es

aprender lo que necesitamos para vivir de unamanera verdadera, honesta y amorosa” (Arzo-bispo de Canterbury en el Sínodo). La Confe-rencia fue muy consciente de esta dimensiónmística y contemplativa. Yo la relaciono conla Iglesia del delantal, con Jesús que se abaja,con Jesús que se pone el mandil y lava lospies. Con Jesús que acompaña y no se poneen el centro. Es un camino de profunda nove-dad en relación a lo que vivimos, que toca lopequeño, que se ahonda en lo profundo, quees anticultural y profético. Resulta “una cues-tión profundamente revolucionaria”, en expre-sión del H. Philip.Estos ecos los sentí durante las semanas de laConferencia y me suenan a polifonía, a susu-rro del agua del Gier, a corazones despiertos,a exclamaciones que surgen de las sorpresasde Dios, a silencios sonoros que provienen decreernos lo que tantas veces hemos escrito.

H. Javier EspinosaEL SUSURRO Y POLIFONÍA DEL AGUA DEL GIER

Para conseguir una vitalidad de la misión marista, debemos estar preparados para vivir en contradicción

con nuestras culturas, con nuestroscontemporáneos. Esto solo puede ser posiblesiendo hombres de oración cuya vida denuncia el mal en nuestrasociedad, para recrear una nueva. “Pues si su proyecto o su actuar procede delos hombres, se destruirá por sí mismo; pero siviene de Dios, no podréis destruirlo” (Hechos, 5 38b-39a).

H. Valentin DjawuProvincia Africa Centro-Este

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Nuestro corazón ardía en el camino

La misión marista en el contexto de

la Conferencia GeneralH. João Carlos do PradoDIRECTOR SECRETARIADODE MISIÓN


L a Conferencia General celebrada en el Hermitage podría traducirsecomo experiencia del corazón. Fue pisar en suelo sagrado, despo-

jarse para escuchar al Señor que habló tan hondo y de tantas manerasdiferentes. También ayudó a lanzar las antenas en el contexto actual yhacia los desafíos y horizontes de futuro de nuestro mundo, de los niñosy jóvenes, de la Iglesia y del propio Instituto. Puede ser sintetizadacomo una “provocación del Espíritu” en la mente y en el corazón maristaque nos ayudó a ver con más claridad los llamamientos que Él mismonos propuso en el 21° Capítulo General.Algunos aspectos importantes pueden ser destacados para la misiónmarista a la luz del itinerario vivido en la Conferencia. Podemos tratarlosdentro de dos dimensiones: lo que significa o como comprendemos lamisión marista hoy y las fuerzas y desafíos que tocan a la misión maristaen todos los niveles del Instituto.A lo largo de los últimos Capítulos y escritos de nuestro Institutovolvemos con mucha frecuencia a la definición o comprensión de lamisión. No quiere decir que la misión como tradicionalmente ladefinimos “hacer que Jesucristo sea conocido y amado por losniños y jóvenes” no haya sido clara, haya perdidosu valor o queramos buscar algo diferente. No.


H. João Carlos do PradoNUESTRO CORAZÓN ARDÍA EN EL CAMINO

Lo que queremos, cuando volvemos al significado de la misión marista,es traducirla, en fidelidad a nuestro carisma, para el día de hoy.Dios nos confía el servicio de los niños y jóvenes. Él quiere que en mediode ellos, nuestro corazón y esfuerzos estén con los más pobres, conaquellos que se encuentran en las periferias de nuestro mundo. Estamosllamados a una “nueva tierra”, a un desplazamiento del centro hacia laperiferia. Para eso es necesario tener un corazón y una mente itinerantecapaz de escuchar los gritos de Dios en los más pobres y juntos aprendera leer y a pronunciar el mundo como parte de la obra creadora ylibertadora de Dios.

UNA RESPUESTA PERSONAL,COMUNITARIA, ECLESIAL

Nuestra misión, en realidad, consiste en la misión de Dios que quieretambién contar con nosotros. Es por tanto una respuesta personal, co-munitaria, eclesial. Participar en la misión marista es participar en lamisión de Dios al servicio de los niños y jóvenes pobres de nuestromundo. ¿Qué llevamos o compartimos? El don que hemos recibido: Je-sucristo y su mensaje. ¿Cuál es ese mensaje? “Que todos tengan vida yla tengan en abundancia” (Jn 10, 10). Es en el calor y en el silenciodel corazón de Cristo que escuchamos y entendemos lo que realmente

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significa evangelizar.La misión marista esfecunda y verdadera amedida que nuestrarespuesta brota de laexperiencia profunday amorosa de Dios yse traduce como ex-presión de su volun-tad para la humani-dad. Es un don

gratuito, un tesoro precioso del cual todos nosotroscompartimos en comunión y somos llamados a di-vidir con el mundo.El Capítulo subrayó fuerzas para la misión marista.Podríamos decir que las fuerzas son también nues-tros desafíos para el futuro. Ellas mantienen nuestrocorazón siempre dispuesto, abierto y desafiado alos llamamientos de Dios. Hermanos, laicos y laicasencontramos sentido y significado a la vocaciónmarista en torno de la mesa de la misión. Alrededorde esa mesa los niños y los jóvenes pobres de nues-tro mundo tienen la preferencia. Junto a ellos esta-mos llamados a vivir y dar testimonio de nuestrafraternidad. Con ellos nos presentamos como frágilesvasijas portadoras de vida y comunión. Con ellosnos alimentamos y nos fortalecemos mutuamente.

CON LAS PUERTAS ABIERTAS

La misión marista en un mundo nuevo, en un siglonuevo, en vísperas de un nuevo centenario de lafundación, exige que estemos con las puertas abier-tas de nuestro Instituto para la novedad de Dios.Nos hace descubrir la fuerza, las oportunidades ylas implicaciones de rescatar nuestra identidad in-ternacional. Nos reta a fortalecer nuestra solidari-dad y cooperación interna y externa. A ir adelanteen nuestro trabajo en red en todos los niveles yáreas, a ejemplo de las redes de Universidades yEditoras Maristas, de las comisiones y subcomisio-nes continentales de misión y de tantas iniciativasinterprovinciales y regionales ya en marcha. Nosinvita a mirar nuestras organizaciones y estructurasde animación, gobierno y gestión de manera a fa-vorecer la vitalidad de nuestra vida y misión. Im-

Creo que la vitalidad del Instituto Marista en el futuro dependerá, en gran medida,

de la conciencia y decisión de cada hermano de examinar detenidamente su relación con Dios. Hasta que no nos acerquemos a Él y seamos transformados por su Espíritu, no podremos darlo a conocer ni hacerlo y amar.

H. Robert Teoh - Provincia Asia del Este

Por fin, no menos importantes que los temas cita-dos hasta ahora, fueron los ritmos y la dinámicavivida en la Conferencia. Más que favorecer una experiencia de vida intensadurante tres semanas, nos invita a recapacitar nues-tros ritmos de vida y de misión. Ser maristas parael mundo de hoy requiere también mayor equilibrioentre nuestra vida comunitaria, espiritual, misión,descanso, amigos, familia, formación. Los jóvenesde hoy no quieren ser superhéroes. Desean Herma-nos, laicas y laicos místicos y profetas para nuestrotiempo. Personas normales dispuestas a caminar ycrecer juntas con ellos en la fe y en todas las di-mensiones de la vida humana.

plica estar con el corazón y la mente abierta paraacoger lo nuevo que nace y con lo cual estamosllamados a caminar.Los servicios educativos que prestamos a travésde nuestras escuelas, universidades, obras sociales,editoras y en tantos proyectos de educación infor-mal es un medio precioso para la realización de lamisión. Nuestra acción evangelizadora en esos es-pacios, parroquias y otros campos es algo que de-bemos profundizar y fortalecer. La Pastoral JuvenilMarista (PJM) es una gran oportunidad para ga-rantizar juntos el trabajo evangelizador con losjóvenes en todas nuestras presencias y ayudarlesa sentirse también agentes de la misión marista.


FMSI a laConferencia GeneralL a Conferencia General de Provinciales viene a ser una experiencia sig-

nificativa. Cuatro años después del último Capítulo General es unabuena ocasión para una visión conjunta del Instituto marista. Y ha sidoprecisamente ésta su principal fortaleza: contemplar el rostro de Cham-pagnat hoy, en sus más diversas expresiones: era suficiente, de hecho, uncoloquio, aunque informal, con cualquiera de los presentes para entrar enun mundo diferente al propio y ver la realidad marista desde múltiplesperspectivas: desde las Islas del Pacífico a la Argentina, desde Europa aSudáfrica, desde Canadá a Camboya... En todos los presentes había un ob-jetivo común: estudiar juntos cómo ser una presencia significativa entrelos niños y los jóvenes de hoy, especialmente en relación con las emer-gencias educativas y sociales de nuestra civilización actual y cómo poten-ciar la internacionalidad y la comunión de los Hermanos / Laicos maristas,características emergentes de la experiencia actual.Y luego estar allí en La Valla, en el Hermitage, a lo largo de los caminos re-corridos por Marcelino en los Montes del Pilat, donde todo comenzó, ha sidouna emoción poderosa, un gran impulso a nivel personal e institucionalhacia aquel “nuevo comienzo - a new beginning”, repetido con tanta fre-

cuencia en los lemas, en los discursos y en las oraciones comunitarias.En esta ocasión, todos los líderes maristas se han reunido no para

discutir problemas, ni escribir documentos, ni elegir a alguien...sino para “mirar” el mundo marista hoy y “soñar juntos” elmañana con el corazón y los ojos de Marcelino Champagnat.Pero no es un mañana abstracto, sino más bien el con-creto que se está formando en los próximos años, con ci-fras, estadísticas, encuestas sobre las expectativas de los

jóvenes hermanos, de los laicos más cercanos a nos-otros, de los jóvenes que estamos educando en losmás diversos entornos geográficos y humanos...La presencia de FMSI en este contexto no tenía unpapel especialmente importante, pero fue unacontribución desde el punto de vista de la soli-daridad Instituto Marista en su conjunto y enparticular sobre la puesta en marcha de la pro-moción de los derechos del niño a partir denuestros ambientes educativos y de trabajos.Sin conferencias, por lo tanto, sin interven-ciones formales, pero con la aportación deideas y puntos de vista en el debate general,

H. Mario MeutiFMSI


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en los trabajos en grupo y enlos diálogos individuales con losparticipantes.Este último aspecto ha sido par-ticularmente útil y productivopara la Fundación. Tuvimos unaserie de reuniones informales conlos responsables principales delas unidades administrativas detodos los países en los cuales sedesarrollan nuestros proyectos:oportunidades para pedir infor-maciones, actualizaciones, acla-raciones, desbloquear algunasituación difícil y ver juntoscómo superar las inevitables di-ficultades relacionadas con pro-yectos en curso...

UN COORDINADORPARA LOS DERECHOSDE LOS NIÑOS YLOS JÓVENESIgual ventaja para la oficina de Ginebra de FMSI :una oportunidad única para tener un eco claro yobjetivo sobre los cursos de formación realizadosen todas las grandes "regiones" del Instituto ytambién en algunas Provincias sobre temas rela-cionados con promoción de los derechos de losniños y sobre los mecanismos de las Naciones Uni-das. En particular, se ha trabajado para aumentarla conciencia de los líderes sobre la necesidad deestablecer en un futuro próximo un coordinador(enlace) para los derechos de los niños y los jóve-nes, no sólo en cada Provincia, sino en cada paíscon presencia marista. El trabajo de preparaciónde informes sobre las condiciones de la infancia enlos Estados individuales, objeto del Examen Perió-dico Universal, de acuerdo a los mecanismos de laONU para el control de los derechos humanos, seestá revelando como un instrumento lento peroeficaz, para promover nuevas políticas en todaspartes, más atentas a los derechos de los niños yadolescentes. Y este es un objetivo explícito de lamisión marista en los últimos años, según lo indi-cado por el XXI Capítulo General desde 20091.

Otras oportunidades interesantes: el haber tenidoa la vez a las unidades administrativas provincialesdel Cono Sur (Argentina, Uruguay, Chile, Bolivia,Perú y Paraguay) permitió formalizar y firmar elacuerdo para el establecimiento de una nueva ofi-cina regional de FMSI que se ubicará (por lomenos durante los primeros 3 años) en Santiagode Chile, y trabajará por los derechos de los niñosy para coordinar las iniciativas de solidaridad enestos países, en estrecha colaboración con las ofi-cinas FMSI en Ginebra y Roma.Importantes encuentros se llevaron a cabo tam-bién con los Provinciales de Asia (Asia del Sur, Asiadel Este y el Distrito Marista de Asia) para confir-mar y fortalecer la naciente oficina de FMSI enBangkok, considerada por ellos mismos como unimportante punto de referencia para seguir decerca las operaciones de recaudación de fondos,tener un soporte en la protección de los niñoscontra los posibles abusos y promover la formacióny el interés en el tema más general de los derechosdel niño.


1 “Nos sentimos impulsados a desafiar las políticas so-ciales, económicas, culturales y religiosas que oprimena los niños y jóvenes. Ahora es el momento para todosnosotros de unirnos a los esfuerzos de la Fundación Ma-rista para la Solidaridad Internacional (FMSI).”. (Docu-mento del XXI Capítulo general– versión española p. 23)


Internacionalidad:una Nueva Aurora

H. Chris WillsSECRETARIADO DECOLABORACIÓN MISIONERAINTERNACIONAL

Cuando durante la Conferencia General los líderes y animadores delmundo marista fuimos invitados a soñar sobre el futuro del Instituto

y la promoción del carisma, vivimos un momento emocionante.Se nos plantearon dos preguntas guía y ambas resultaron muy relevantespara el enfoque internacional del Secretariado de Colaboración Misionera.

1. ¿Cómo quiere ser percibido el Instituto Marista en el mundo y enlas comunidades locales en el año 2020?

2. ¿Estamos trabajando como un Instituto internacional?

Se organizaron seis grupos de reflexión para indicar lo que nos gustaríaver en el Instituto marista en 2020 respecto a las áreas siguientes:

• Los más vulnerables• Disponibilidad global• Comunidades internacionales• Vida significativa• Evangelización• Gobierno

Desde la perspectiva de la colaboración misionerainternacional, las respuestas fueron inspiradoras yestimulantes. Muchos de los sueños fueron luegosometidos a una “prueba de realidad”, pero hubomucha energía en el compartir la visión y las gran-des posibilidades de futuro por parte de los líderesmaristas.

¿Qué es lo que “vimos” mientras “despertábamos laaurora”?

• Nos hemos visto en un renovado compromisopor servir a los jóvenes más vulnerables y mar-ginados mediante la creación de nuevas pre-sencias internacionales en las zonas más pobresdel planeta.

• Nos hemos visto disponibles como “Maristaspara el mundo”, enfocando nuestras energíashacia una visión global de la formación, pre-parados para participar en la misión interna-cional a través de comunidades multiculturales,enfatizando particularmente – como místicosy profetas – nuestra vida comunitaria vital ytestimonial.

• Nos hemos visto en comunidades internacio-nales compuestas por maristas laicos y herma-nos, cultivando una espiritualidad del serviciohacia los Montagne de hoy, allí donde se en-cuentren.

• Nos hemos visto en el esfuerzo de potenciaruna vida significativa que sea sencilla, com-partida y desprendida, disponibles para ser en-viados, y abriendo nuestras puertas al rostroMariano de la Iglesia, el cual incluye atodos los seguidores de Marcelino,laicos y hermanos, que deseencompartir la vida de esa ma-nera.

• Hemos visto nuestro serviciode evangelización – dar aconocer a Jesucristo y ha-cerlo amar – expresado através de redes de mi-sión renovadas, y tam-bién nos hemos visto

transformados por nuestro compromiso comoapóstoles de los jóvenes.

• Hemos visto un estilo de liderazgo y gobiernoque es colaborativo y promueve el diálogo fra-terno entre las Unidades Administrativas Ma-ristas, la Administración General, los maristaslaicos y hermanos, los maristas jóvenes, e in-cluye una evaluación de las estructuras regio-nales.

• Hemos visto que el término “internacional” ysus sinónimos – interprovincial, intercultural,global, colaborativo – se repetía una y otravez para indicar una nueva forma de responderal llamado de ir hacia nuevas tierras y hastalos confines del mundo.

• Hemos visto este despertar con los ojos de losniños y de los jóvenes.

Para evaluar la Administración General se nos pidióque indicáramos cuál era el mensaje que nos estaballegando desde el Consejo General. Señalamos cuatroelementos. Más del 75% de los hermanos indicó la in-ternacionalidad como mensaje central, el cual está enlínea con el llamado fundamental de ir a toda prisa,con María, hacia una Nueva Tierra. Dicha opinión estáen sincronía con los sueños que habíamos expresado

frente al carisma de San Marce-lino. Este soñar es místico y

profético, y la Nueva Tierraverdaderamente capturanuestra imaginación, unaNueva Tierra que está en

el corazón, en elalma y también

en una geogra-fía concreta.


Junio 2014 • 83

Si se escuchaatentamente,

cambian las respuestas...H. Josep MariaSoterasCONSEJERO GENERAL P ara mí, la experiencia más significativa ha sido la de “pararse”. A mitad

recorrido, hacer un alto supone darse la oportunidad de alcanzar apren-dizajes sobre lo vivido que de otra forma no se darían y, fácilmente, unopuede convertirse en “turista” de la vida, transitando agitadamente por lasuperficie de la misma sin nunca atreverse a descender y perforar lo vivido.Esto que podría hacerse en cualquier retiro, no es lo mismo si se compartecon los hermanos que intentan servir a una porción del Instituto desde lamisión de animación y gobierno. Esta vivencia es fundamental para enfocarlos cuatro próximos años, bien centrados en lo esencial.

Algo que me ha hecho reflexionares el percibir los cambios profun-dos que se están dando en nues-tro mundo y en nuestro Instituto.Sin embargo, esa percepción con-trasta con la de muchos que, su-mergidos en lo cotidiano, diríanque casi nada cambia y repiteninercias año tras año. Recuerdo elcomentario de un hermano queenvidiaba a las Provincias que sehabían vuelto internacionales ycomplejas porque, a pesar de lasdificultades, notaba un hálito devitalidad y frescor que no veía en

su entorno, prisionero de los fantasmas de siempre. Observaba que las rutinasy dificultades aparentemente insalvables que había compartido con esos her-manos seguían vigentes en su realidad pero, en cambio, se habían vuelto“viejo pasado” para quienes se enfrentaron a nuevos desafíos y, al hacerlo,

les había visto crecer, y mucho.Observaciones de este tipo, de origen ajeno, pueden pasar ante

uno con total indiferencia, seguro de las propias verdades, opuedo darles una oportunidad y dejarme interrogar. Es así quepuedo ir más allá de mi propio límite y acoger al Dios que mellama a salir de mi “propia tierra”. Para mí, la Conferencia hasido un ejercitarse diariamente en esto para que se conviertauna actitud básica con la que afrontar el futuro.


Conferencia general: Nuestro viaje a lafuente de inspiración

H. Eugène KabangukaCONSEJERO GENERAL


Vivimos el tema de la Conferencia General “Profetas y místicos denuestro tiempo” en un viaje de fe tras las huellas de M. Champagnat.

De todas las provincias llegamos al Hermitage, de allí a La Valla y finalmentea Fourvière buscando la fuente de la que M. Champagnat bebió y recibióinspiración. Encontramos la fuente: la confianza en Dios y la convicciónde que el amor de María nunca nos fallará. Este colmó a Champagnat depasión por Dios y de compasión por todos, especialmente por los niñosmás desfavorecidos.En respuesta al XXI Capítulo General que nos llama a “una nueva vida paraun nuevo mundo” nuestro compartir y actitudes, durante estas 3 semanas,giraron en torno a un nuevo comienzo. Como Nicodemo, me sentí invitado“nacer desde arriba” para poder co-crear y vivir la nueva cultura marista.Me queda claro que solo una relación íntima con Jesús dará sentido a misrelaciones humanas y a mi misión, de lo contrario es como si pertenecieraa una ONG! En Fourvière prometimos también seguir el proceso de conversión personale institucional y construir una iglesia mariana, sencilla y atenta a las nece-sidades de todos, sin importar los riesgos. La internacionalidad y la inter-

culturalidad nos acompañaron, obviamente,debido a nuestros diferentes orígenes y

fuimos iluminados durante nuestrascelebraciones litúrgicas.

Junio 2014 • 85


Mi experiencia en la Conferencia

A lo largo de la Conferencia General, fui experimentando un reen-cuentro con el corazón de Champagnat, tanto por el contacto

con los lugares de nuestros orígenes Maristas, como por el proceso vi-vido con el grupo participante.La Conferencia me ha ofrecido la ocasión de vivir un re-encanto voca-cional. Marcelino se hizo presente y tangible a través de la fraternidad,

H. Ernesto SánchezCONSEJERO GENERAL

Junio 2014 • 87

del diálogo, de la oración, del contacto con eljoven “Montagne”, de la internacionalidad. La re-flexión conjunta durante tres semanas nos ayudóa sentirnos corresponsables y co-creadores del ca-risma marista para nuestros días, de cara al tercercentenario que estamos por iniciar.

VIVIR UN NUEVO COMIENZO

Es apasionante la invitación a vivir un nuevo co-mienzo. Resuena con fuerza en mi interior la lla-mada a vivir la mística y la profecía como un estilode vida que manifieste de manera más visible y cre-íble los valores maristas que intento proclamar.Nos pide reconocer y aceptar nuestra fragilidad, y,desde ahí, intentar un movimiento de transforma-ción, personal y colectiva, comenzando por quie-nes prestamos un servicio de liderazgo en elInstituto. Un movimiento que genere mayor cerca-nía y compromiso con los “Montagne” de hoy, asícomo una revitalización de nuestra vida espiritual

y fraterna. Un movimientoque nos lleve a ser creati-vos para generar las ade-cuadas estructuras deanimación y, a la vez, a sa-bernos desprender de todoaquello que deberá quedaratrás, o que incluso debemorir.

ES UN TIEMPOFAVORABLE

Creo que se va gestandoalgo nuevo, con María, muypresente a nuestro lado.Pienso que es un tiempo fa-vorable para conectar conmás fuerza la energía exis-tente entre todos los quevibramos con el carisma deChampagnat, de maneraque juntos generemosnueva vida. Un tiempo fa-vorable para mantenernosfuertes en la esperanza delinicio de esta nueva aurora,en la cual creemos, y a lacual queremos ayudar anacer.


General

7.CAMINOS DE CONCLUSIÓN

88

6 ÁREAS(GRÁFICAS)

ÁLBUMDE FOTOSDE LACONFERENCIAGENERAL

6Ár

eas

Cam

inos

de

Con

clus

ión


1.

2.

3.

Derechos de los niños

Centrosinternacionalesde formación

inicial

Interconectadoscon otras

congregaciones

Hermanosmenores de

50 años

Hermanosy laicos

Hermanos

Significativamentecomprometidos

Concentrarnosen

algunas regiones

......

......

......

Los másvulnerables

Disponibilidadglobal

internacionalesmaristas

Comunidades

Junio 2014 • 91

4.

5.

6.

Espiritualidad

Testimonio radical

Estilo de vidasencillo

......

Vidasignaficativa

Educación

PJM

Trabajo en red

......

Evangelización

Estructurasregionales

Finanzas

Administración

......

Gobierno

Conferencia generalÁLBUM DE FOTOGRAFÍAS

92


94

Destaco a continuación cinco palabras vividas intensamente durante esos días:unidad, disponibilidad global, frontera, mística; hermosas palabras que reclaman una quinta: coherencia.

H. Emili Turú, S.G.

año xxvii - n°44 - junio 2014...y nos fundó sobre roca firme. 2 † fms mensaje 44 director de...

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