VERANO

� I ANTOLOGÍA

#VERSATO

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Diseño y maquetación: Sandra García (SandraGgo)

Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional

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ÍNDICE

¿Quiénes somos?__________________________4

Juro que te dejo de hablar___________________6

El desconocido____________________________7

Parecía que se estuvieran quemando

las montañas______________________________8

Lluvia de verano__________________________11

(…) Puercoespín_________________________12

FOTOGRAFÍAS_________________________13

(…) Puercoespín_________________________14

(…) Sandraggo__________________________16

(…) María Blázquez (Hebe)________________17

CANCIONES DE UN VERANO____________18

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¿QUIÉNES SOMOS?

Con permiso de María Blázquez (Hebe):

“Hace un año que Versato, grupo de poetas pertenecientes a distintos lugares de España, se unió con el fin de difundir la poesía, de encontrar personas con las que compartir y hablar de éste género literario.

En este tiempo hemos compartido poesía, hemos hablado de ella, nos hemos aconsejado, hemos apoyado a nuestros compañeros leyendo aquello que escribimos y haciendo críticas constructivas de ello. Las calles y diferentes lugares de ciudades como Plasencia, Almería, Madrid, Valladolid, Jaén, incluso París, han sido envueltos por versos escritos en post-it. En las redes sociales, junto a una imagen, compartimos un poema que dicha fotografía nos haya inspirado, a ser posible, semanalmente.

Pero esto no es todo, de esta idea han surgido amistades muy grandes a pesar de vivir en lugares lejos unos de otros. Y, como habréis escuchado otras veces, lo que une la poesía, no lo separa nadie.

A quienes seguís los pasos de Versato, gracias de corazón por apoyar la poesía de esta forma, por mantenerla viva, por leernos y estar ahí a través de la pantalla.

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Mucho tiempo de vida poética a esta familia de versos, porque en ello nos hemos convertido compartiendo con vosotros.

¡Mucho sentimiento, que os abrace el verso y que la poesía llegue!”

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Juro que te dejo de hablar

* ¡No, no, no!, ¡como me tires a la piscina te juro que te dejo de hablar

Procuro en todo momento sostenerla en brazos sin hacerle daño, disimuladamente meticuloso. Paro al oír esas seis últimas palabras: “juro que te dejo de hablar”.

* No puedo tomarte en serio si no me miras a los ojos.

Me mira de forma entrecortada mientras llega a mí una voz entre cálida y temerosa.

* No me gusta nada que me tiren, de verdad. Lo paso muy mal.

* Bueno, vale.

Me lleno de ternura y la dejo en el suelo. Recapacito y no tardo ni dos minutos en sumergirla delicadamente en el agua… Y ahí está, levitando sin decir nada, esbozando una sonrisa. Hay gestos en los que sobran las palabras.

Quike Selva (28-7-2015)

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El Desconocido

Siempre te esquiva mi otro yo:

el desconocido.

Cuando cantas a la muerte,

afirmo no saber nada;

cuando canto a la vida,

pareces no estar,

y ''buscar'' deja de ser un verbo

para el desconocido.

Álvaro Ramírez Torres. 19 años. Jaén. versandolarealidad.blogspot.com

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Parecía que se estuvieran quemando las

montañas

Escribí esto después de haber paseado con el mar a la izquierda y las montañas a la derecha. Había gente a mi alrededor. Había aromas lejanos. Recuerdos. El mismo suelo que pisaba cuando tenía cinco años. El mismo viento.

Había estado jugando con el tiempo meses atrás y necesitaba la tranquilidad que solo dan los lugares de tu infancia. Había olvidado lo que era sentirse bien.

Había sido un año malo.

(Este Versato está dedicado a todos aquellos que, como yo, alguna vez habéis olvidado. Solo espero que también volváis a recordar y a respirar. Y, citando a Albert Espinosa, "para vivir hay que vivir".)

Había vivido como viven los que no son felices. Como un reloj antiguo al que hay que darle cuerda. Como cuando se tizna el cielo y hay noche sin estrellas.

Había vivido como los que se conjuran a la prisa. Como las noches que no ven pasar los días.

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Como las personas que no saben que son poesía. Había vivido como los que sienten que no se gasta el tiempo.

Como quien malgasta los suspiros y muere lentamente en un silencioso grito. Como aquellos supuestos sabios que al final de la vida siguen buscando un sentido.

Había vivido así, como viven los ingenuos, durante, quizá, demasiado tiempo. Así como no debería vivir nadie: como el columpio que se para cuando no quedan niños en el parque.

Pero hoy he salido a respirar el mar. He visto palmeras más altas que mis sueños. He escuchado a las olas cantar. He escuchado el sonido del silencio.

El olor de la sal. La música del viento...

He mirado más allá y he observado bien el cielo. Parecía que se estuvieran quemando las montañas. Se dibujaban sus siluetas oscuras con formas hermosas y extrañas.

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Hoy, he caminado como hace años por lugares que me daban los buenos días cada mañana. La niña que era antes me sonreía a lo lejos como una vieja amiga sonríe a una hermana. Me ha recordado que antes vivía como viven los niños, como vive la infancia, transparentes y tranquilos, como el color de su alma.

Hoy, he vuelto a vivir, tibia y serena, como vive el agua.

Nuria Ortega Riba

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Lluvia de verano

Lluvia de verano. Tregua de los días muertos. Aceras mojadas llevándose la arena del desierto.

Frente a mi balcón, pasan las nubes, pasan las hojas, pasa el viento. Mueve las ramas de los árboles, se lleva algunos dolores inciertos. Otros los deja para que sigan doliendo. Sé que nunca se irán, que hay un agujero en el fondo de mi pecho, que la soledad tiene forma, y es la forma de mi cuerpo.

Lo sé, y me resigno. Pero ahora está lloviendo.

Lluvia de verano. Hileras de agua llevándose recuerdos...

Nuria Ortega Riba

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Me gustaría tocar estas teclas como si de un piano fuesen, para amenizar con música nuestras tardes de verano.

Con música hecha de letras, que en lugar de encandilarnos, diera un soplo de aire fresco a estos viejos corazones.

Y es que el Sol me ha traicionado este agosto; al abrazarte de noche, o al quitarte el frío de madrugada. Pues siempre había sido yo quien alegraba tus mañanas.

¿A ver cómo compito ahora con los rayos traicioneros, que se cuelan entre los pelos de tu melena ondulada, y hacen mejor poesía que la de esta artista retirada?

Puercoespín

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Atardecer en Mozuelos de Sedano (Puercoespín)

Campo de Inglaterra (SandraGgo)

14

En mi verano no entrabas. No entraba tu risa, tu canto, tus locas ansias de comerme a besos… Simplemente, no entraban.

Yo sólo buscaba un día tranquilo, un desierto florado, un sol con viento fresco; no quería los excesos de los que haces gala, no buscaba tus caricias sueltas, ni tu olor amargo…

¡No! En mi verano no entrabas.

Tú, que revuelves mi mundo de los pies a la cabeza, que recorres descalza mis más ocultos secretos, y a hurtadillas te cuelas en todos mis sueños.

Tú, que con tan solo un beso derretirías mi pecho cubierto de escarcha.

No, en mi verano no entrabas.

15

Pero al llegar el otoño levanté la mirada, y, sin saber muy bien cómo, despertaba en tu cama.

Puercoespín

16

Me encanta

viajar para perderme. Porque muchas veces

perderse

es necesario

para encontrarse.

Sandra García (SandraGgo)

17

Soy la noche eterna,

lluvia de estrellas fugaces

vistas desde lo más alto del pueblo,

eclipse lunar en una noche de concierto,

cuerpo mojado de paz al salir del agua,

arena y césped sobre el pelo,

brisa marina que te eriza la piel,

sol en calma dando vida.

Soy tarde con amigos,

las noches con la familia lejana,

meses de reencuentro,

amor inesperado.

Soy día de verano,

soy alegría.

María Blázquez (Hebe)

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CANCIONES DE UN VERANO

Kodaline

- One day - Honest - The one - Love like this - All I want - Talk

Lana Del Rey - Summertime Sadness

Fréro Delavega – Le chant des sirènes

Charlotte Church – Crazy Chick

Eminem, Rihanna – The Monster

Mi Capitán – Es Suave la Voz

Rufus T. Firefly – El problemático Winston Smith

Bare Knuckle Parade – Star of Dundee

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