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Rizoma 05 [ REVISTA DE CULTURA URBANA ] Julio-Septiembre 2007 ISSN EN TRÁMITE PARQUE FUNDIDORA Competitividad e imagen como sustento del desarrollo • Intervenciones al patrimonio industrial construido del Siglo XX: La historia, la ciudad y La Maestranza • SIMBOLISMO Y FUNCIONALIDAD Transformación de la Nave Lewis en Centro de Exposiciones • MUSEO DEL ACERO HORNO 3 Monumento Artístico de la Nación al servicio del conocimiento • PARQUE FUNDIDORA Un crisol socioeconómico y cultural de integración urbana • MURALES DE GERARDO CANTÚ Reflexión poética de lo cotidiano para la gente y el arte universal • “CABALLO” “Cabalagará” en Monterrey arte público de Botero • “LA LAGARTERA” Honrará al Paseo Santa Lucía la primera obra monumental del maestro Francisco Toledo • PARQUE LINEAL RÍO SANTA CATARINA Un esfuerzo sustentable de gran impacto en la imagen urbana • RUTA DEL ACERO Y DEL CEMENTO Identidad cultural que revela un sentido de pertenencia • “LA NUBE” DE JORGE ELIZONDO Aires de reflexión descienden en Ruta Escultórica La Imagen Urbana: forma, identidad y negocio Paseo Santa Lucía. Nueva imagen y expresión urbana para la Ciudad Museo del Noreste -MUNE-. Nuestro pasado a partir del presente El reto de acrecentar la competitividad a través del desarrollo urbano

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  • Rizoma 05[ REVISTA DE CULTURA URBANA ]

    Julio-Septiembre2007

    ISSN EN TRÁMITE

    PARQUE FUNDIDORA Competitividad e imagen como sustento del desarrollo • Intervenciones al patrimonio industrial construido del Siglo XX: La historia, la ciudad y La Maestranza • SIMBOLISMO Y FUNCIONALIDAD Transformación de la Nave Lewis en Centro de Exposiciones • MUSEO DEL ACERO HORNO 3 Monumento Artístico de la Nación al servicio del conocimiento • PARQUE FUNDIDORA Un crisol socioeconómico y cultural de integración urbana • MURALES DE GERARDO CANTÚ Reflexión poética de lo cotidiano para la gente y el arte universal • “CABALLO” “Cabalagará” en Monterrey arte público de Botero • “LA LAGARTERA” Honrará al Paseo Santa Lucía la primera obra monumental del maestro Francisco Toledo • PARQUE LINEAL RÍO SANTA CATARINA Un esfuerzo sustentable de gran impacto en la imagen urbana • RUTA DEL ACERO Y DEL CEMENTO Identidad cultural que revela un sentido de pertenencia • “LA NUBE” DE JORGE ELIZONDO Aires de reflexión descienden en Ruta Escultórica

    La Imagen Urbana: forma, identidad y negocioPaseo Santa Lucía. Nueva imagen y expresión urbana para la CiudadMuseo del Noreste -MUNE-. Nuestro pasado a partir del presente

    El reto de acrecentar la competitividad a través del desarrollo urbano

  • RizomaDIRECTORIO

    REVISTA TRIMESTRAL DE LA AGENCIA PARA LA PLANEACIÓN DEL DESARROLLO URBANO DE NUEVO LEÓN - JULIO-SEPTIEMBRE 2007

    DIRECTORLIC. LUIS DAVID ORTIZ SALINASPresidente Ejecutivo de la APDUNL

    COORDINADOR EDITORIALARQ. LISETTE CÓRDOVA ROBLESDirectora de Gestión y Fomento Urbano de la APDUNL

    COORDINACIÓN TÉCNICALIC. FELIPE E. ÁVILA RIVERA

    CONSEJEROSARQ. JUAN IGNACIO BARRAGÁNDirector General de Proyectos y Gestión Urbana

    ING. HUMBERTO LEAL GARCÍAPresidente del Consejo de Participación Ciudadana y la Obra Pública del Estado de Nuevo León

    ARQ. JUAN MANUEL CASASCatedrático de la Facultad de Arquitectura de la UANL

    ARQ. RENA PORSENCatedrática del Departamento de Arquitectura del ITESM

    DR. HERNÁN VILLARREAL RODRÍGUEZDirector Ejecutivo del Consejo Estatal de Transporte y Vialidad de Nuevo León

    ARQ. ROBERTO CHAPA GARZAMiembro de la Academia Nacional de Arquitectura Capítulo Monterrey

    DISEÑO Y EDICIÓ[email protected]

    Año 2 - Núm.5 - 2007. 5,000 ejemplares. Certificado de Licitud de Título en trámite; Certificado de Licitud de Contenido en trámite; Certificado de Derechos de Autor en trámite. Esta es una publicación de la Agencia para la Planeación del Desarrollo Ur-bano de Nuevo León, ubicada en Washington 648 Ote., Centro, 64000 Monterrey, N.L., México. Tel. +52(81)2020-6736. Impresa en Monterrey, Nuevo León.

    El contenido de los artículos y sus fotografías son responsabilidad exclusiva de los autores y Rizoma no acepta necesariamente como suyas las ideas de artículos fir-mados. Todos los derechos están reservados. Queda prohibida la reproducción par-cial o total del material publicado sin consentimiento por escrito de los editores. La información contenida ha sido obtenida de fuentes que se consideran fidedignas.

    Consúltela en línea en:http://www.nl.gob.mx

    PARQUE FUNDIDORACompetitividad e imagen como sustento del desarrolloPor: Arq. Juanita Barrientos Cavazos

    Intervenciones al patrimonio industrial construido del Siglo XX:La historia, la ciudad y La Maestranza Por: Arq. Javier Sánchez García / Arq. Héctor Domínguez del Peral

    SIMBOLISMO Y FUNCIONALIDADTransformación de la Nave Lewis en Centro de ExposicionesPor: Arq. Oscar Martínez Garza

    MUSEO DEL ACERO HORNO 3Monumento Artístico de la Nación al servicio del conocimientoPor: Arq. Elisa Rubalcava Cobo

    PARQUE FUNDIDORAUn crisol socioeconómico y cultural de integración urbanaPor: Arq. Fernando López Martínez

    TEMA CENTRALLa Imagen Urbana: forma, identidad y negocioPor: Dra. Celia Esther Arredondo Zambrano

    PASEO SANTA LUCÍANueva imagen y expresión urbana para la CiudadPor: Arq. Enrique Abaroa Castellanos

    MURALES DE GERARDO CANTÚReflexión poética de lo cotidiano para la gente y el arte universalPor: Rizoma / Staff

    MUSEO DEL NORESTE -MUNE-Nuestro pasado a partir del presentePor: Lic. Ofelia Martínez García

    “CABALLO” “Cabalagará” en Monterrey arte público de BoteroPor: Rizoma / Staff

    “LA LAGARTERA”Honrará al Paseo Santa Lucía la primera obra monumental del maestro Francisco ToledoPor: Rizoma / Staff

    PARQUE LINEAL RÍO SANTA CATARINAUn esfuerzo sustentable de gran impacto en la imagen urbanaPor: Arq. Eduardo Aguilar Valdéz

    RUTA DEL ACERO Y DEL CEMENTOIdentidad cultural que revela un sentido de pertenenciaPor: Arq. Víctor Pérez Pozos

    “LA NUBE” DE JORGE ELIZONDOAires de reflexión descienden en Ruta EscultóricaPor: Rizoma / Staff

    Noticias de la Agencia para la Planeación del Desarrollo Urbano de Nuevo León

    ÍNDICE

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    Hacia una ciudad intermedia de clase mundial, transformando la imagen urbana de Monterrey

    Editorial

    Desde el inicio de la presente administración estatal del Lic. José Natividad González Parás, uno de los proyectos estratégicos del Plan Estatal de Desarrollo contempla concretar una importante regeneración urbanística, que incluye la transformación del centro metropolitano de la ciudad, a través de la recuperación de zonas deteriora-das, apertura de espacios verdes, nuevos espacios de esparcimiento para la ciudadanía, así como una revitali-zación urbana de alto valor agregado.

    A 4 años de este estratégico proyecto, el Área Metro-politana de Monterrey ha vivido ya una transformación significativa en su imagen urbana, con la realización de proyectos públicos y privados de gran escala; particular-mente en las áreas centrales de la ciudad.

    El objetivo del Gobierno del Estado ha sido generar las condiciones propicias para detonar el centro urbano, mediante obras urbanísticas y emblemáticas que incre-menten su atracción, con la finalidad de estimular la eje-cución de proyectos privados como centros comerciales, edificios de oficinas y desarrollos verticales de vivienda, con resultados ya palpables en algunas áreas cercanas al centro de la ciudad.

    En la presente edición de Rizoma, hemos querido en-fatizar la trascendencia que en materia urbana ha tenido el conjunto de proyectos públicos emprendidos en la ciu-dad, esfuerzo de muchos actores que no terminaríamos de mencionar pero que se involucraron desde el desarro-llo de las ideas rectoras, hasta la ejecución de las obras finales, obras que han marcado una transformación inte-gral de la entidad y proyectado su desarrollo futuro.

    Destaca por su escala y calidad, el proyecto de Inte-gración Urbanística Paseo Santa Lucía-Parque Fundi-dora, obra que culmina una trayectoria de 24 años de proyectos urbanos en la zona, donde ideas de locales y foráneos fueron consideradas y que finalmente logra integrar la Macroplaza, iniciada en 1983, con el Parque Fundidora, iniciado en 1988, a través del Paseo Santa Lucía. Este proyecto es presentado con un artículo del Arq. Enrique Abaroa quien estuvo a cargo del paisajismo de la misma.

    Por su parte, el Arq. Eduardo Aguilar nos presenta el proyecto del Parque Lineal Río Santa Catarina. Este pro-yecto, que ya se ha ejecutado en su primera etapa, de 7.4 kilómetros, constará en su totalidad de 46 kilómetros y 770 hectáreas de parques e instalaciones deportivas, culturales y sociales, partiendo desde La Huasteca, en el municipio de Santa Catarina, hasta el corazón del muni-cipio de Juárez.

    Como componente temático básico en dicho parque, el Arq. Víctor Pérez Pozos nos describe la Ruta Escultórica del Acero y del Cemento, conjunto monumental que ade-reza el paisaje de la ciudad, y en particular el del Parque Lineal del Río Santa Catarina, con obras de escultores de primer rango internacional.

    Dentro del conjunto paisajístico y de equipamiento definido para el Parque Fundidora, se han concluido diversos trabajos de mejoramiento y rehabilitación de edificios que merecen una especial mención. El Arq. Fer-nando López nos habla del proyecto y ejecución del or-denamiento de los espacios abiertos del parque; el Arq. Oscar Martínez de la rehabilitación de la Nave Lewis; el Arq. Javier Sánchez García y el Arq. Héctor Domínguez del Peral presentan los proyectos de rehabilitación de La Maestranza y de la Nave Generadores. Por su parte, la Arq. Elisa Rubalcava nos habla de la magna obra de rehabilitación del Horno No. 3, y de la instalación en su interior del Museo del Acero y la Lic. Ofelia Martínez des-cribe la museografía instalada en el Museo de Culturas del Noreste, MUNE.

    Igualmente, el staff de Rizoma incluye diversas entre-vistas a algunos de los grandes artistas que están pre-sentes en estos espacios, como son Fernando Botero, quien detalló los pormenores de su obra “Caballo”; Fran-cisco Toledo, quien nos habló de su primera escultura monumental “La Lagartera”, así como los artistas regio-montano Jorge Elizondo, quien comentó acerca de su obra “La Nube”, que forma parte de la ruta escultórica, y Gerardo Cantú, quien detalló el proceso creativo para el desarrollo de los murales del Paseo Santa Lucía.

    En este contexto, Rizoma destaca las iniciativas que el Gobierno del Estado ha realizado, a través de sus di-versas dependencias, para renovar la imagen urbana y dejar un patrimonio de obras que sin duda vendrán a transformar la zona central, fortaleciendo la identidad ur-bana y generando un nuevo impulso para el desarrollo de Monterrey como una metrópoli intermedia de calidad mundial.

    Por lo anterior agradecemos y hacemos un recono-cimiento expreso al Ing. Lombardo Guajardo Guajardo, Secretario de Obras Públicas del Estado, principal res-ponsable de la ejecución de las obras, ya que con su apoyo, coordinación y esfuerzo se logró la concretización de estos proyectos.

    Lic. Luis David Ortiz SalinasPresidente Ejecutivo de la Agencia para la Planeación del Desarrollo Urbano de Nuevo León

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    Por: Arq. Juanita Barrientos Cavazos

    Al analizar las necesidades del Parque Fundidora para ser parte de las principales atracciones turísticas en México, se pensó en ofrecer en primer lugar un espacio segu-ro para sus visitantes, en el cual tuvieran la oportunidad de incrementar su formación social, cultural, deportiva y familiar. De la misma manera, el Parque, para poder ser competitivo y fomentar la economía de la ciudad, sumó atracciones donde se conjugaran los negocios, el hospe-daje y el entretenimiento, entre otras. De forma paralela, a principios del 2005, se anunció que Monterrey sería la sede del Forum Universal del las Culturas en el año 2007 y tiene al Parque Fundidora como el principal re-cinto de este importante evento. A partir de ese momen-to se conjuntaron los proyectos de desarrollo urbano ya establecidos y en apoyo de este evento.

    Dentro de esta planeación, uno de los principales obje-tivos fue la reutilización y activación de los antiguos edi-ficios de Fundidora Monterrey que se encontraban en un estado de deterioro avanzado. Así nacen dos de los prin-cipales proyectos del Parque: el primero, la restauración y rescate del Horno Alto No. 3, cuyo significado histórico tan relevante para la industria, motivó la planeación de un recinto que ayudara a las nuevas generaciones a inte-resarse por el tema del desarrollo industrial, en particular del acero, desde la perspectiva de su historia, las nuevas técnicas y el futuro que se visualiza para esta industria. Con esta visión nace el proyecto del Museo del Acero, el cual se inicia a través de la dirección del propio Parque Fundidora con el objetivo de formar un Asociación Civil, principalmente de industriales acereros, que pudieran hacerse cargo del desarrollo, construcción y operación

    Competitividad e imagen como sustento del desarrollo

    COMO PARTE DE LOS PROYECTOS DE DESARROLLO ESTABLECIDOS POR EL GOBIERNO DEL ESTADO, A TRAVÉS DE LA

    SECRETARÍA DE OBRAS PÚBLICAS Y LA AGENCIA PARA LA PLANEACIÓN DEL DESARROLLO URBANO, EL PARQUE FUNDIDORA

    HA REALIZADO UN IMPORTANTE DESARROLLO EN SU IMAGEN E INFRAESTRUCTURA, CON PROYECTOS QUE LE DARÁN GRAN

    TRASCENDENCIA COMO CENTRO COMUNITARIO Y QUE A SU VEZ ALBERGAN AL FORUM UNIVERSAL DE LAS CULTURAS.

    Arq. Juanita Barrientos Cavazos

    Arquitecta por la Universidad Autó-noma de Nuevo León.Directora de Planeación, Desarrollo y Control Arquitectónico Parque Fundidora O.P.D.Experiencia profesional: Anillo Vial Metropolitano (departa-mento de obras inducidas).Colaboración en el desarrollo de espacios e infraestructura del Parque Fundidora.Coordinación en el desarrollo y eje-cución del proyecto de la primera etapa del Parque.Desarrollo y adecuaciones de ins-talaciones en el Parque Fundidora para la Serie Cart.Desarrollo y adecuación de instala-ciones en el Parque Fundidora para evento de la ONU y la OEA.Restauración de edificios y estruc-turas de la antigua Fundidora.Proyecto de Integración Urbanística del Parque Fundidora-Macroplaza e instalaciones para la sede del Forum Universal de las Culturas.

    de este proyecto, lo cual se logra a finales del 2005. Cuatro temas ancla se establecieron y hoy son una rea-lidad: la historia, el jugar aprendiendo, la representación del horno funcionando y un mirador en las alturas que nos permita admirar los paisajes de nuestra Ciudad.

    El segundo importante proyecto fue el rescate de la Nave Lewis. Por las dimensiones y configuración de esta antigua estructura, en este lugar se planeó un centro de exposiciones versátil, el cual podrá alojar exposiciones culturales, comerciales, industriales y tecnológicas. Este proyecto se inició después de un análisis comparativo con otros parques del mundo como “Ciutat de les Arts i de les Ciències” en Valencia, España y el parque de “La Villette” en París, Francia, donde se observaban las dife-rentes áreas de oportunidad para dar un mejor servicio a la ciudad y sus visitantes. Para la realización de esta

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    obra el Parque contrató al arquitecto Oscar Martínez, res-taurador regiomontano, para llevar a cabo en conjunto el proyecto arquitectónico de este edificio.

    Igualmente, y en apoyo a la realización de este even-to mundial, se restauraron el resto de los edificios de la antigua Fundidora con el apoyo para su diseño de los ar-quitectos restauradores Javier Sánchez y Héctor Domín-guez, los cuales llevaron a cabo los proyectos de restau-ración del edificio Generadores, que será utilizado para dos exposiciones culturales del Forum, el pabellón Planta Eléctrica que se utilizará para teatro. Los pabellones del Almacén de Modelos, Carpintería, Ruedas, Gasolina y Ta-ller Eléctrico serán también utilizados para talleres y tea-tros informales durante el Forum. Asimismo, otros edifi-cios y estructuras de la antigua Fundidora se restauraron con proyectos realizados por el propio Parque.

    Para la integración urbanística con la Macroplaza tam-bién se realizó el proyecto de la extensión del Parque Fundidora en los terrenos del la antigua planta de Peño-les. Estos terrenos ya pertenecían al Parque y en conjun-to con la Secretaría de Obras Públicas se decidió que el Paseo Santa Lucía, que en los inicios del proyecto sólo llegaba hasta la avenida Félix U. Gómez, se prolonga-ra hasta los terrenos del actual Parque Fundidora. Esta ampliación involucró una serie de proyectos alternos, al-gunos ejecutados por el Parque Fundidora y otros por la Secretaría de Obras Públicas.

    En el proyecto de la extensión del Parque se buscó me-jorar los servicios que ofrece la zona actual, aquí nuestros visitantes encontrarán actividades a realizar para diferen-tes edades. Se cuenta ya con áreas para descanso o re-lajación, áreas de deporte informal para jóvenes, juegos infantiles en tres zonas para diferentes edades, áreas de

    picnic, áreas de deporte para adultos mayores y el prin-cipal atractivo es el Paseo Santa Lucía, el cual recorre por el centro del Parque toda su longitud. En el canal se cuenta con dos fuentes monumentales, una al inicio del paseo y representa a la Fundidora con una olla original de vaciado, mientras que la segunda está ubicada en el centro de la nueva área del Parque y representará un espectáculo de olas. Este proyecto se llevó a cabo con la colaboración del arquitecto Enrique Abaroa, quien tam-bién diseñó el Paseo Santa Lucía.

    En conjunto con este gran proyecto se llevaron a cabo otras importantes obras como lo es el estacionamien-to Fundidora para casi 3 mil vehículos, el cual auxiliará al flujo vehicular en la zona del Parque. Aunado a esto, la Secretaría de Obras Públicas desarrolló importantes obras viales como el complejo de avenida Revolución, el par vial Aramberri-Washington y el paso a desnivel de la avenida Félix U. Gómez.

    Como complemento a estos proyectos, el Parque reali-zó una remodelación para mejorar su conectividad entre los diferentes destinos ubicados en su interior, mejoran-do los servicios ofrecidos a nuestros visitantes y cons-truyendo una nueva imagen arquitectónica de su espa-cio, cuyo diseño estuvo a cargo del arquitecto Fernando López.

    Actualmente el parque representa un importante espa-cio de convivencia y el esparcimiento para los habitantes del estado, además de ser orgullosamente la sede del Forum Universal de las Culturas Monterrey 2007.

    La integración urbanística del Parque Fundidora con la Macroplaza incluyó importantes proyectos de reutilización y acti-vación de edificios antiguos.

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    Por: Arq. Javier Sánchez García / Arq. Héctor Domínguez del Peral

    A finales del Siglo XIX, la ciudad comenzó a experimen-tar un intenso proceso de industrialización, mismo que se acrecentó en el siguiente siglo.

    Para 1903 existían sólo en Monterrey, esto es sin in-cluir la industria textil ubicada en los municipios vecinos, más de 30 industrias con una inversión aproximada de 21 millones de pesos y ocupando 4,500 obreros. Para tener una idea de la expansión industrial de esta épo-ca enumeramos las principales industrias: Nuevo León Smelting and Manufacturing Company Limited, Compa-ñía Minera, Fundidora y Afinadora Monterrey (Peñoles), la Gran Fundición Nacional Mexicana, Cervecería Cuau-htémoc, Vidriera Monterrey, Cementos Hidalgo y Ladri-llera Monterrey, además de un buen número de peque-ñas industrias para manufactura de artículos metálicos, materiales para la construcción, productos alimenticios, jabón y cartón entre otros.

    Coincidiendo con el momento en que se iniciaba la expansión industrial empezaba también a operar la ban-ca, destacándose el Banco de Nuevo León y el Banco Mercantil de Monterrey, así como el resurgimiento del comercio reflejado en 1,100 casas comerciales, 7 me-sones y 18 hoteles.

    La población en 1900 era poco más de 62,000 ha-bitantes, alojados en 6,542 casas en su mayoría de un solo nivel. Para entonces los límites de la ciudad hacia el norte eran las vías del ferrocarril del Golfo y Nacional, en lo que actualmente es la avenida Colón, y al oriente en lo que hoy es la avenida Félix U. Gómez. La tendencia del

    Intervenciones al patrimonio industrial construido del Siglo XX:La historia, la ciudad y La Maestranza

    EL ORIGEN DE LA CONSERVACIÓN DEL PATRIMONIO INDUSTRIAL RECONOCE QUE EL VALOR DE LOS BIENES MUEBLES E

    INMUEBLES, PRODUCTO DE LA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL, EXPRESAN LA RELACIÓN HOMBRE-TECNOLOGÍA, INCIDIENDO EN

    LOS CAMBIOS Y TRANSFORMACIONES EN LOS CAMPOS DE LA ECONOMÍA, TECNOLOGÍA, SOCIEDAD Y POLÍTICA. ES EL CASO

    DE LAS ANTIGUAS INSTALACIONES DE FUNDIDORA, QUE CON UNA DEFINITIVA VOLUNTAD DE RESCATE, CONSERVACIÓN

    Y NEO-UTILIZACIÓN, HAN IDO INTEGRÁNDOSE CON ÉXITO AL TEJIDO URBANO CON SUS FUNCIONES Y DEMANDAS DE

    CONTEMPORABILIDAD.Arq. Javier Sánchez García / Arq. Héctor Domínguez del Peral Arquitectos por la Universidad Autó-noma de Nuevo León.Socios fundadores de Olinka Arquitectos, empresa dedicada a la conservación del patrimonio cultural construido.Han realizado obras, asesorías y colaboración en diversos estados de la República Mexicana.Han participado en los siguientes proyectos:Galería del Museo del Vidrio.Plan Maestro para el corredor histó-rico en Vidriera Monterrey.Cineteca de Nuevo León (Nave de Maquinaria / Fundidora de Monterrey).Proyecto de reuso de las Antiguas Salinas en la Isla El Carmen, en el Mar de Cortés, Baja California Sur.Centro de las Artes (Nave de Fundición y Vaciados / Fundidora de Monterrey) para el Consejo de la Cultura y las Artes de Nuevo León.Museo Industrial el Blanqueo.Pabellón Sopladores (Casa de Ingenios de Soplo / Fundidora Monterrey).Reutilización del Antiguo Edificio de la Industria Textil La Fama en Santa Catarina Nuevo León.Colegio Industrial Montemorelos, para el Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León.Taller para producción de Vidrio de Colección.Edificio para Exposiciones (Nave para Turbo Sopladores / Fundidora Monterrey).Naves de Antigua Planta Eléctrica, Carpintería, Oxígeno, Bronce y Ruedas y Almacenes de Aceite y Modelos para el Parque Fundidora Monterrey, entre otros.

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    crecimiento era más al norte cruzando las vías, donde se instalaban las nuevas fábricas y colonias para los traba-jadores, así, sobre el cauce y margen sur del río Santa Catarina se asentaba la población en su mayoría inmi-grante formando el barrio conocido como “San Luisito”, que a principios de siglo tenía de 8 a 10 mil habitantes.

    El área que hoy ocupa el Parque Fundidora ha sido parte protagónica en la fábrica de la ciudad desde hace poco más de un siglo. Localizada en la periferia oriental de la ciudad, donde a finales del Siglo XIX los terrenos eran para labores agrícolas, se funda y asienta con una inversión inicial de 10 millones de aquellos pesos la Compañía de Fierro y Acero de Monterrey el 5 de mayo de 1900.

    A lo largo de 86 años, como todo ente en constante evolución, en la vida de la Compañía Fundidora se pue-den reconocer varias etapas de crecimiento, comenzan-do con la primera fase que va de la fundación en 1900 a 1912, cuando el primer conjunto fabril, Alto Horno No.1, talleres, oficinas, hotel, colonia y escuela para obre-ros estaba urbanísticamente definido y conectado a la ciudad, al país y a los Estados Unidos, a través de un sistema de vías férreas para la importación de materias primas y exportación de productos. Fue hasta 1940 que se retornó el trabajo de construcción con la adición del segundo Alto Horno.

    Más tarde, potenciado por la demanda de acero ge-nerada por la segunda guerra mundial, la empresa inicia un proceso de expansión y modernización entre 1956 y 1960, donde quizá la construcción para alojar el Molino Lewis sea lo más destacado; luego una segunda fase se efectuó de 1964 a 1968 con la construcción del Alto

    Horno No. 3 y una última fase donde sobresalen los trabajos de modernización de los altos hornos y quizá lo más importante fue la introducción del proceso BOF (Basic Oxygen Furnace) en 1977.

    El 8 de mayo de 1986 en la Ciudad de México se de-claró y constituyó en estado de quiebra a la empresa Fundidora Monterrey S.A. Dos años después, el Gobier-no Federal decretó de utilidad pública la conservación y mejoramiento del área y se dio inicio a la construcción del Parque Fundidora a través de un fideicomiso promo-vido por el Gobierno del Estado de Nuevo León. Desde entonces las autoridades estatales y la comunidad en general no han dejado de invertir y apoyar el desarrollo del Parque y otros equipamientos urbanos como Cinter-mex, Arena Monterrey y Plaza Sésamo. Hoy día la am-pliación al poniente del parque, en los terrenos de lo que fue la siderúrgica Peñoles, la conclusión de los trabajos de restauración y reuso de las antiguas naves, edificios, estructuras industriales y su conexión con la Explanada de los Héroes a través del Paseo Santa Lucía, son es-pacios dedicados a la muestra, promoción y difusión del Forum Universal de las Culturas 2007.

    Por ahora, nos concentraremos en los proyectos arqui-tectónicos que hemos realizado para nueve inmuebles correspondientes a la etapa más antigua de la Fundido-ra. Desgraciadamente, la unidad del conjunto urbanísti-co de La Maestranza, como entonces se le conocía, se perdió, asunto que no abordaremos en este artículo, pero que debía ser investigado, analizado y evaluado para be-neficio de futuras intervenciones. Estos nueve inmue-bles se agrupan en dos áreas: la primera formada por los Talleres de Maquinaria, Fundición y Modelos, la fábrica

    El conjunto de espacios de La Maestranza, que aguardaba su momento para integrarse armónicamente al tejido urbano contempo-ráneo.

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    de Oxígeno, Bronce y Ruedas de Ferrocarril, la antigua Planta Eléctrica con la Bodega de Aceites y Almacén de Modelos, todos construidos entre 1900 y 1903 y la Planta Convertidora de Energía Eléctrica de 1912. La segunda área conformada por la Casa para los Ingenios de Soplo, ligada y colindante con las cinco estufas y el Alto Horno No. 1 construidos en 1903 y la Nueva Planta Eléctrica de 1923, incluyendo las extensiones para alo-jar las máquinas turbo sopladoras de 1968 y 1976.

    CONSIDERACIONES DEL CONCEPTO

    El origen de la conservación del patrimonio industrial se da en Inglaterra en 1950, donde por primera vez se reconoce que el valor de los bienes muebles e inmuebles producto de la revolución industrial expresan la relación hombre-tecnología, incidiendo en los cambios y trans-formaciones en los campos de la economía, tecnología, sociedad y política.

    En el cuidado del patrimonio cultural construido debe-mos considerar el significado de los términos preserva-ción, conservación, restauración, adecuación y reuso. En México utilizamos la palabra “conservación” para referir-nos en términos legales a la materia arquitectónica- his-tórica, en lo que en los Estados Unidos utilizan el término “preservación”. En México, restaurar es regresarle su es-tado original perdido, independientemente de la causa que haya motivado su pérdida. En Italia específicamente usan el término conservación para describir el pensa-miento proactivo, lo cual muestra los problemas antes de que ocurran; un ejemplo de esta medida es la creación de un programa gubernamental de apoyos económicos para el salvamento de un listado de propiedades con in-terés histórico arquitectónico.

    Para la civilización occidental, “preservar” una estruc-tura histórica usualmente ha significado retener todo lo posible de la fábrica original de los edificios antiguos, en Europa y América, hacemos todo lo posible para poder

    conservar los ladrillos, piedras, vidrios y maderas de los cuales estaban construidos nuestros sitios históricos, porque los procesos usados para fabricar estos materia-les ya no se practican o porque ya no existen sus fuentes en el mundo natural. Queremos que las cosas se vean antiguas y damos valor a las distorsiones y a la pátina como evidencia del transcurso del tiempo, como parte de la verdad del objeto. En la Acrópolis por ejemplo, el Partenón no se parece en nada al policromado original, sin embargo, veneramos sus ruinas fragmentadas y cal-cinadas por el sol.

    En Asia, donde la verisimilitud o apariencia de la ver-dad es importante, preservar significa retener la estética original de un monumento. En Japón y en China muchos monumentos importantes son periódicamente desman-telados y sus elementos deteriorados o maltratados son reemplazados para que estos edificios mantengan su ancestral apariencia, esta práctica ha mantenido las ar-tes y oficios de la tradición constructiva, lo cual es muy valioso ya que en el momento de un siniestro natural, es relativamente fácil reproducir artefactos con siglos de antigüedad, sin embargo, el visitante a algún templo o palacio que ha sido reensamblado no sabe hasta qué grado lo que observa llega a ser una puerta exacta al pasado.

    Como vemos, en términos generales hay diferentes en-foques en la manera como se plantea el tratamiento del patrimonio construido donde el arquitecto debe tomar una postura; situándose adelante y al mismo tiempo de-trás de la realidad presente. Adelante para dar una forma a las posibilidades y detrás para entender el continuo de ideas creativas.

    El progreso es un continuo camino que se beneficia tanto de la resistencia como de la estimulación al cam-bio, no debemos vivir siempre en un brillante y esplendo-roso futuro, pero tampoco debemos escondernos tras un cómodo pastiche del pasado. En este sentido parecería paradójico que aquellos que abogan por el mantenimien-

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    Resultado de una intervención planeada y profesional, elemen-tos de La Maestranza son hoy en día, parte fundamental de la imagen y funcionalidad del Parque Fundidora.

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    to de formas aceptadas sean incapaces de mirar hacia delante y aquellos que defienden un nuevo mundo, sien-tan miedo de mirar hacia atrás.

    LAS INTERVENCIONES

    Los trabajos de intervención, son sin duda un fenó-meno atractivo que debe ser tomado con una definitiva voluntad de rescate, conservación y neo-utilización, inte-grándose al tejido urbano con sus funciones y demandas de contemporabilidad. Para reinterpretar el nuevo uso de estos espacios se han considerado aspectos como la percepción del medio ambiente, los valores formales es-tilístico estético, la consideración de la maquinaria como objeto estético, los espacios arquitectónicos y el desa-rrollo en general.

    En nuestro caso el conjunto de edificaciones, ahora monumentos industriales del Siglo XX, de la Compañía de Fierro y Acero de Monterrey S.A., fueron reintegrados a su nuevo uso en un periodo de una década con dife-rentes costos, intenciones y enfoques de restauración y conservación. Esta diferencia evidencia las característi-cas de “obra final” en algunos casos u “obra en transi-ción” en otros, dependiendo de los programas arquitec-tónicos a resolver y los montos de inversión empleados.

    TALLER DE MAQUINARIA Y TALLER DE FUNDICIÓN

    El proceso de reciclo a la vida activa de este conjun-to de inmuebles, inicialmente dedicados a la producción industrial, se inició en 1997 en el edificio de Maquinaria con la intención de restaurar el inmueble y adecuarlo para la instalación de la Fototeca / Cineteca de Nuevo León . El presupuesto aplicado a través del Consejo para la Cultura de Nuevo León fue una colaboración entre el Gobierno Estatal, el Gobierno Federal y la Iniciativa Pri-vada de Monterrey, aunque austero, fue suficiente para iniciar actividades en 1998, instalándose hasta meses más tarde la tienda y librería, elevador y otros elementos del programa arquitectónico inicial.

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    La Nave de Fundición, edificio gemelo de la Nave de Maquinaria, con mayor deterioro y agregados no desea-bles a su estructura original, se restaura con la intención de instalar la Pinacoteca de Nuevo León, con la misma estructura de inversión tripartita a través de Conarte, dando inicio en 1999 con un nuevo gobierno, iniciando actividades en el año 2000 para dotarlo ya en funciones de la mecánica teatral e instalaciones para resolver la acústica del teatro de artes escénicas.

    PLANTA CONVERTIDORA DE ENERGÍA ELÉCTRICA

    Este inmueble es restaurado y adecuado para la ins-talación del Sistema Intermunicipal de Transporte en el Área Metropolitana, proyecto que es auspiciado por el Gobierno del Estado y concesionado a SEMEX con la intención de mostrar el funcionamiento del control del tráfico vehicular.

    ANTIGUA PLANTA ELÉCTRICA Y ALMACÉN DE ACEITES

    FÁBRICA DE OXÍGENO, BRONCE Y RUEDAS DE FERROCARRIL

    TALLER DE MODELOS Y CARPINTERÍA

    ALMACÉN DE MODELOS

    Estos inmuebles integrantes también de La Maestran-za se han intervenido con un criterio diferente por parte de la administración actual, con un presupuesto apenas suficiente para poder darles uso, habilitándolos y dotán-dolos de cierto tipo de confort, pero sin llegar al término de un proceso que por ahora los reintegre por completo a una actividad determinada. Podría considerarse que se les ha estabilizado para en un futuro poder dar fin a este proceso. Estos trabajos dieron inicio en 2007 y serán utilizados en diversas actividades relacionadas con la cultura.

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    CASA PARA LOS INGENIOS DE SOPLO

    Esta nave dedicada a albergar una máquina inyectora de oxígeno al Horno No. 1 se restauró en el año de 2001, dedicándose a actividades sociales. Su presupuesto fue exclusivo del Gobierno del Estado y es administrado ac-tualmente por el Fideicomiso del Parque Fundidora.

    NUEVA PLANTA ELÉCTRICA Y EDIFICIO DE TURBOSOPLADORES (GENERADORES)

    Estas instalaciones industriales de construcción pro-gresiva durante varias décadas (1923-1976), también con sus muros en gran estado de deterioro, pero incluso así manteniendo su estructura en buen estado, fueron planeados en su reuso para dar albergue y exposicio-nes teatrales dentro del Forum Universal de las Cultu-ras, siendo estos usos los que determinaron el programa arquitectónico. Esto es; en el caso de la Nueva Planta Eléctrica un lugar para espectadores, espacio de escena, bodega y sanitario y en el caso de generadores, espacios para exposiciones de arte contemporáneo en 2 niveles. Es importante mencionar que en este caso se dotó al inmueble con una “doble piel” para hacerlo compatible con las temperaturas de la región y producir un ambiente adecuado para el montaje de la obra artística; así tam-bién para que su apariencia exterior dialogara desde el punto de vista de la forma con su vecino el Alto Horno No. 3, ahora Museo del Acero.

    LA ARQUITECTURA PARA LA PRODUCCIÓN DE LA MAESTRANZA

    Todos los inmuebles, con excepción del Almacén de Modelos y las extensiones en los años 1968 y 1975 de la Nave Generadores, mantienen un patrón de construc-ción en común: zapatas, pedestales, trabes y muros de contención de concreto armado, estructuras portantes (columnas “I” y armaduras tipo Fink o Pratt) fabricados a base de placa y ángulos remachados en caliente, poline-ría con ángulos de fierro o madera y cubiertas de lámina de zinc.

    Los pisos se fabricaban a base de cemento pulido o enladrillados, y la envoltura o cerramiento de los edifi-cios se construían con muros de ladrillo rojo desplanta-dos sobre contracimientos de “piedra azul del Topo” con corte almohadillado, resolviendo el claro de los vanos con arcos rebajados y de medio punto apoyados sobre pilastras. Finalmente la escasa ornamentación para for-mar tímpanos y frontones se logra a base del escarpe y relieve en la superficie de los muros.

    Al fin edificios dedicados a la manufactura acerera, el espacio interior es unitario, lineal y de gran escala, pro-porcionados al equipamiento, maquinaria, almacenaje y servicios requeridos por las diversas líneas de produc-ción. Los arreglos espaciales más sofisticados son los de las naves de maquinaria y fundición, que en su interior nos remiten a las antiguas basílicas romanas.

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    AAun cuando sabemos poco de los ingenieros y arqui-tectos, autores de los proyectos, el estilo edificatorio es el adoptado en la revolución industrial por las sociedades anglosajonas. Las superficies de ladrillo rojo, el ángulo de cubiertas y la casi imperceptible influencia neoclásica evidencia esta hipótesis.

    El único edificio sobreviviente de construcción ver-nácula, es el Almacén de Modelos. Desplantado medio nivel abajo del terreno natural, se cimienta con bloques de “piedra azul del Topo” de 45 centímetros de espesor, para luego continuarse en un muro de sillar, recibiendo las cargas de la viguería. El almacén tiene un entrepiso y cubierta resueltos a base de tableta y viguería, solven-tándose el claro de 14.56 metros de anchura con pares de trabes y columnas de madera.

    Este conjunto de intervenciones al patrimonio indus-trial de la ciudad han regresado el protagonismo a las instalaciones de Fundidora, que de ser un centro neurál-gico fabril, ahora resurge con una nueva vocación urbana orientada al desarrollo integral de la comunidad.

    Bibliografía

    * Vizcaya Canales Isidro; Los Orígenes de la Industria-lización de Monterrey (1867-1920). Editorial: Librería Tecnológico, S. A. Monterrey, Nuevo León. 1971.

    * Guerra Marcela y Trejo Alma; Crisol del Temple. Fundi-dora de Fierro y Acero de Monterrey. Editorial: Grafo Print Editores, S.A. Monterrey, Nuevo León. México. 2000.

    * Covarrubias Mijares Rosana, Casas García Juan Ma-nuel y Cavazos Pérez Víctor Alejandro; Tierra, fuego, aire, agua… Un estudio sobre el devenir urbanístico y arquitectónico de la Fundidora de Monterrey. Edito-rial: Grafo Print Editores, S. A. Monterrey, Nuevo León. 2000.

    * Nierman Daniel; Fundidora con raíces de Acero. Edito-rial: Grupo Azabache. Distrito Federal, México. 1991.

    * Carozzi Gigliola; La Arqueología Industrial. Editorial: Universidad Iberoamericana. Distrito Federal, México. 1991.

    * Tung, Andrew M. Preserving the World´s Greatest Ci-ties: The Destruction and Renewal of the Historic Me-tropolis. Ed. Three Rivers Press. N.Y. 2001.

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    Por: Arq. Oscar Martínez Garza

    La adaptación de antiguos espacios industriales para usos diferentes a los que fueron planeados, requiere siempre de un análisis muy cuidadoso. Más si este es-pacio en particular, como es el caso de las estructuras del viejo Molino de Combinación Lewis en la antigua Fundidora, fue desmantelado y seccionado tiempo des-pués del cierre de la fábrica. Aun cuando los planos del proyecto fechados en 1953 -la nave fue construida en 1955- indicaban una estructura de 300 metros de lon-gitud y algunas edificaciones adicionales, sabemos que recibió diferentes adecuaciones que la fueron transfor-mando desde los años sesenta principalmente.

    El Molino Lewis, en su momento, formó parte de los esfuerzos de actualización y modernización de Fundido-ra Monterrey.

    Después del abatimiento de la mayor parte de los ele-mentos con los que llegó a contar como naves trans-versales, pasos elevados, chimeneas y edificaciones de concreto, la monumental estructura fue reducida prácti-camente a su cuerpo central, al edificio llamado Motores y a una sección de la cubierta norte; más baja que la nave central y de una sola agua. La longitud remanente de la estructura quedó comprimida a 235 metros.

    PROYECTO CONCEPTUAL

    Al dar inicio el estudio del proyecto para un centro de exposiciones en la nave, los elementos estructurales y la disposición de espacios que aún permanecían en pie, aunque eran un tanto inusuales, ofrecían cualidades que consideramos muy especiales. Una estructura alargada

    Transformación de la Nave Lewis en Centro de Exposiciones

    EL PROYECTO ARQUITECTÓNICO DE TRANSFORMACIÓN DE LA NAVE LEWIS EN UN IMPORTANTE CENTRO DE EXPOSICIONES

    EN EL PARQUE FUNDIDORA, CONJUGA EL TESTIMONIO LEGÍTIMO E INVALUABLE DE LOS ELEMENTOS HISTÓRICOS DEL

    RECINTO, ASÍ COMO UNA VISIÓN MODERNA Y FUNCIONAL QUE LE PERMITE INTEGRARSE CON ÉXITO A SU NUEVA VOCACIÓN

    Y CONTEXTO ACTUAL.

    Arq. Oscar Martínez Garza

    Arquitecto por la Universidad de Texas en Austin.Miembro de Número de la Acade-mia Nacional de Arquitectura.Primer delegado del INAH en el Noreste de México en la rama de Monumentos Coloniales.Restauración del Antiguo Palacio Municipal de Monterrey, Museo del Vidrio y Hotel Fiesta Americana Centro.Proyecto arquitectónico del Centro de Exposiciones Nave Lewis para el Parque Fundidora, como sede del Forum Universal de las Culturas Monterrey 2007.Coordinador de la Primera Reunión de Arqueología e Historia del Noreste.Autor y coordinador del libro En-cuentro con el Barrio Antiguo.Autor de la sección de arquitectura y urbanismo para la Enciclopedia de Monterrey 1996.Investigación y diagnostico urbano para el Barrio Antiguo Segunda Etapa, El Plan Rector de Desarrollo para el Norte del Estado y la Eva-luación del CEFACIL. Realizó y dirigió el Catálogo Estra-tégico de Edificios, Monumentos y Sitios para la APDUNL y ha sido catedrático del ITESM.Actualmente, finalizó su participa-ción como arquitecto y diseñador del Centro de Exposiciones Nave Lewis.Actualmente, publica la serie Testimonios de la Arquitectura de Monterrey, y concluyó su nueva aportación en la sección de arquitectura y urbanismo para la Enciclopedia de Monterrey 2007 con el titulo de Monterrey 1996-2007, El Principio del Futuro.

    sin muros perimetrales delimitada por una serie de co-lumnas equidistantes y un sistema de cubierta de gran amplitud vertical, a dos aguas, con variantes de altura a cada dos columnas, parecían favorables para crear un espacio de exposiciones -con las limitaciones que estos mismos elementos establecían-. Esto mismo, y la decla-ratoria de salvaguardar y poner en valor las estructuras como parte del Museo de Sitio de Arqueología Industrial que ostenta Fundidora, marcaron un camino a seguir en la propuesta que se presentó al Parque desde finales de 2004.

    Como parte de las premisas del proyecto, observamos que debíamos implantar una funcionalidad muy eficiente en el partido arquitectónico del conjunto, debido princi-palmente a la longitud de la nave. Así, establecimos el acceso principal casi a mediación de la estructura por el lado sur y, simultáneamente, propusimos ingresar a las áreas oriente y poniente desde los extremos del edifi-cio, justamente frente al bulevard Acero y La Maestranza respectivamente. Esta propuesta también nos permitió ofrecerle a los espacios interiores mayor flexibilidad, lo cual consideramos indispensable para el futuro opera-tivo del centro de exposiciones, pudiendo dividir la nave en tres grandes áreas. De la misma forma, basándonos en los datos y documentos del acervo histórico de Fundi-dora, propusimos la reconstrucción del alerón norte de la nave que, necesariamente, se pretendía para la recrea-ción del proyecto original y podría regresar al edificio su antigua planta y su fachada norte.

    Sin embargo, aun y cuando estas decisiones nos per-mitieron recuperar en gran medida la arquitectura ori-

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    S I M B O L I S M O Y F U N C I O N A L I D A D

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    ginal del edificio, el reto al que nos enfrentamos fue el de conciliar estos espacios industriales con sus nuevas funciones y darles balance arquitectónico. La visión con-ceptual del conjunto se ideó como un juego arquitectó-nico de elementos que acentúan la presencia de la es-tructura original y le dan proporción y escala estética al edificio. En casi todos los casos, estos elementos tienen una doble misión, la primera es puramente funcional y la segunda es simbólica, como un lenguaje de expresión que enlaza el pasado industrial y la contemporaneidad del conjunto. Primeramente, señalamos la necesidad de envolver el edificio con cristal para preservar lo más posible el efecto visual que originalmente presentaba la estructura, es decir, sin muros perimetrales y con sólo las columnas soportando la techumbre. Cuatro esclusas monumentales señalan los accesos al edificio. Éstas, más bajas que el alero de la nave central, definen desde el exterior las posibilidades de acceder al conjunto con un lenguaje arquitectónico armónico pero distinto al ori-ginal de la nave, respetando así la arquitectura histórica.

    El agua se utilizó como un solvente visual del proyecto. Este elemento tradicionalmente ligado al proceso de fa-bricación del acero y a la vieja fábrica, fue ideal para en-fatizar, por ejemplo, la apariencia flotante de la cubierta, que parecía estar suspendida sobre el horizonte. De esta forma, propusimos los espejos de agua en el área sur junto al acceso principal. Precisamente, en este acceso, se simuló un puente peatonal al deprimir ambos lados del andador de entrada. Estas áreas deprimidas de for-ma rectangular cuentan con caídas de agua simultáneas en sus cuatro costados. Simbólicamente, apreciamos que este acceso podía establecer una experiencia de transición para el visitante al ingresar al edificio.

    Tomamos en cuenta también que los elementos adicio-nales, como todo el conjunto, debían ser monumentales siguiendo las bastas proporciones de la nave. La presen-cia arquitectónica de estos elementos debía acompañar, sin competir espacialmente, a la estructura antigua. El auditorio digital es, justamente, el agregado más sobre-saliente. Fue pensado como un elemento que le brin-daría mejores oportunidades de supervivencia operativa al edificio, pero es también un elemento escultórico y punto central de la fachada norte pudiendo observarse desde el área vestibular interior. Su altura total se igua-ló con la cumbrera de la nave de aproximadamente 20 metros de altura y su desplante nace también de una zona deprimida, de tal forma que adquiere un carácter casi ceremonial en el conjunto, respetando igualmente, el horizonte del paisaje natural del parque y el edificio. Por otra parte, junto al puente del acceso principal co-locamos otro elemento escultórico en forma de esfera que se eleva hasta la altura del alero del cuerpo princi-pal. Su ubicación y diseño se especificaron no sólo para acompañar el acceso más importante del conjunto, sino para permitir un descanso visual en los casi 250 metros lineales de longitud de la estructura.

    Al conjugar todos estos factores y premisas logramos establecer lo que fue el esquema conceptual del proyec-to. Aun cuando este se fundamentó en la restauración y puesta en valor del cuerpo central del edificio al mo-mento de su concepción arquitectónica en 1953, cree-mos que el diálogo arquitectónico y de paisaje que se materializó con los elementos agregados, el simbolismo de estos y su funcionalidad, le permiten al edificio una contemporaneidad muy genuina sin menoscabar su es-tructura histórica.

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    Respetando su arquitectura histórica, la Nave Lewis cobra vida como un moderno centro de exposiciones de calidad internacional.

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    RESTAURACIÓN Y ARQUITECTURA FUNCIONAL

    El registro y documentación de los elementos origina-les de la nave que aún permanecían en sitio, nos per-mitió la catalogación de piezas históricamente valiosas que pueden observarse todavía donde funcionaron origi-nalmente. Tuberías, válvulas antiguas, registros eléctricos antiguos, la grúa viajera, una parte del andador elevado y por supuesto, las estructuras de columnas y cabrillas forman parte del legado único del edificio. El proyecto arquitectónico incorporó la mayor parte de estos ele-mentos históricos como muestra del testimonio legítimo de la nave. La reconstrucción del ala norte se apoyó en planos y fotografías que obtuvimos del archivo históri-co del Parque, su recuperación era indispensable para el funcionamiento operativo y presencia arquitectónica de la nave. De la misma forma, la porción de la nave transversal en la sala poniente se desplantó apartir de las cimentaciones originales que fueron localizadas en el lugar y también fue rediseñada con base a fotografías antiguas. Los sótanos bajo el edificio de Motores no fue-ron intervenidos en esta fase del proyecto y su restaura-ción quedará pendiente para una etapa posterior.

    La concepción arquitectónica definitiva sufrió varios ajustes en su evolución que fueron delineando no sólo las premisas anteriormente propuestas sino las expectativas del Parque y del Foro Universal de las Culturas sobre el edificio. Aproximadamente 10 mil metros cuadrados para exposiciones se agruparon en tres áreas del conjunto, cada una con particularidades especiales. Al oriente y poniente colocamos dos grandes salas de exposiciones con posibilidades de acceso directo desde el exterior por La Maestranza y el bulevard Acero. Esto mismo les permite a estos espacios tener una vida independiente del resto del conjunto si así se desea o integrarse a un recorrido total de la nave a través del vestíbulo principal. En estas áreas se logró mantener la altura completa del

    edificio respetando la calidad espacial del viejo molino. También aprovechamos la existencia de una porción del andador elevado para completarlo como estuvo origi-nalmente y convertirlo en un paso perimetral en ambos espacios, aunque el nivel de los andadores originales es más bajo que el propuesto. Frente al acceso principal, se encuentra la tercera zona de exposiciones compuesta por el vestíbulo de entrada y dos mezanines a los que se llega por escaleras eléctricas. Este espacio fue diseñado para albergar una mayor cantidad de variantes de utili-zación, funciona igualmente como un distribuidor para el Centro de Exposiciones. Desde ahí se puede llegar a las dos grandes salas, al auditorio digital, a la planta alta y a los diversos servicios del conjunto como la tienda y el restaurante. Visualmente, cuidamos que únicamente los servicios sanitarios y las taquillas interrumpieran la pers-pectiva interior de la nave bajo las áreas de mezanine, respetando así la limpieza de la perspectiva interior.

    Para dar cabida a las áreas administrativas que ope-raran el Centro, utilizamos y adaptamos el edificio que originalmente le llamaban Motores, único elemento en pie adicional a la nave. Edificado en concreto y mam-postería, se le confeccionó un entrepiso respetando los materiales originales y las vigas de acero que soportan la cubierta. Todos los servicios de apoyo administrativo y atención al público se instalaron en este edificio, permi-tiendo que la estructura de la nave conservara su limpie-za visual y operativa.

    Como sucede en los grandes centros de exposiciones, las bodegas y áreas de almacenaje, incluyendo las de alta seguridad, requieren de casi una tercera parte de los metros cuadrados de exposición, es decir, más de 3 mil metros cuadrados en nuestro caso. Por esta razón y bus-cando no crear un impacto visual negativo en el Parque o la nave, propusimos ubicar estas bodegas en un sótano junto al área del auditorio al cual se tiene acceso por montacargas o escaleras peatonales. En este espacio se

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    Instalaciones fabriles de la Nave Lewis como parte de Fundidora Monterrey.

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    guardarán las piezas más valiosas de las muestras y la bodega tiene una sección con control de temperatura y de humedad. Ahí mismo podrán llevarse a cabo labo-res de mantenimiento de la museografía, restauraciones menores y, como hemos dicho, el almacenaje y empaque de alta seguridad.

    PREMISAS DE INGENIERÍA

    Desde el principio del análisis del proyecto se pidió a los asesores de ingeniería que consideraran que las tuberías y líneas de conducción en la nave serían ex-puestas o bajo el piso. Esto reforzaría la idea del pro-yecto conceptual de respetar el ambiente industrial del conjunto sin disfrazar su origen o sus nuevas funciones. El edificio, al no contar con muros, nos obligaba a un orden muy cuidadoso en la selección de trayectorias y de materiales, texturas y colores de todas las instalacio-nes de ingeniería. Además, siguiendo los requerimientos para un centro de exposiciones de este tipo, se buscó en el proyecto contar con una flexibilidad y adaptabilidad de instalaciones suficientes para asegurar un óptimo funcionamiento. El destino del edificio en cuanto a sus posibilidades de recibir cualquier tipo de exposiciones en el futuro se aseguró con estas premisas.

    Propusimos un sistema de salidas de instalaciones múltiples bajo el firme para permitir diferentes tipos de conexiones. Estas se ubican a todo lo largo de la nave, precisamente en los ejes que marcan las columnas del edificio. Desde las cabrillas, que fueron reforzadas para soportar un mayor peso, corren las instalaciones de aire acondicionado y conducciones electromecánicas. Parti-cularmente, se cuidó la ubicación y trayectorias de todas las tuberías y conductos aéreos alineándolos para que se respetara un orden visual. Justamente, se utilizó el sótano de la nave para ubicar ahí maquinaria y equipo que alimenta el funcionamiento de todos los sistemas

    instalados. Aire acondicionado, sistemas de seguridad, diferentes tipos de iluminación, equipo contra incendios, todas las instalaciones están expuestas o son subterrá-neas en el edificio. Se proyectó también que el centro contara con sistemas de conexión directa y digitales previendo que la tecnología inalámbrica es cada vez más accesible.

    La ingeniería estructural fue propuesta para que for-malmente armonizara con el sistema de cabrillas de la techumbre y las columnas de soporte. Las vigas abiertas del tipo “joist” se agruparon en secciones con vigas “I” para conformar los espacios entre columnas del entre-piso y se aumentó la capacidad de carga de las cabrillas originales. Las esclusas también fueron propuestas con estructuras de acero aparente siguiendo el lenguaje vi-sual de la nave, mientras que las áreas reconstruidas, el ala norte y la nave transversal, fueron estructuralmente adaptadas en lo posible a los elementos originales.

    Quizá la decisión más comprometedora fue la de utilizar una estructura auxiliar para el perímetro de cristal de la nave, ya que no queríamos romper el ritmo estructural de las columnas originales. Se propuso la instalación de un sistema de postes que van desde el firme hasta la viga que hace de carril para la grúa viajera. Estas piezas auxi-liares se propusieron en acero, respetando el lenguaje de materiales de la nave. Decidimos conservar el ritmo exterior estructural colocando el cristal directamente en el alma de la columnas originales, de tal forma que parte de estas quedaran expuestas hacia el exterior, mientras que los postes auxiliares se ubicaron en el interior de la nave, separados por una grapa del cristal para distanciar aún más la diferencia de los dos sistemas.

    A partir de la viga carril, se colocó un panel aislante hasta la altura de las charolas del primer volado de la nave. La decisión del uso de estos paneles se apoyó en las mamparas que originalmente se utilizaban en la es-tructura para salvaguardar el proceso de fabricación.

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    Paso a la modernidad. La Nave Lewis en su nueva vocación como centro cultural.

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    ARQUITECTURA Y DIÁLOGO DE ELEMENTOS

    El esquema conceptual que presentamos originalmen-te, aunque tiene algunas variantes, se ha llevado a cabo siguiendo siempre las premisas originales. El cuerpo central de la nave se rescató y es la base arquitectó-nica del conjunto. Su longitud al concluir el proyecto es de 250 metros sin incluir las esclusas monumentales. También se logró la reconstrucción del ala norte restau-rando así el momento histórico plasmado en el plano de 1953. Igualmente, se desplantó una sección de una nave transversal hasta el andador Mineros, agregada proba-blemente a fines de los cincuenta, que se ubica junto a La Maestranza. Las esclusas monumentales señalan perfectamente los accesos y ayudan a darle proporción y escala al edificio.

    Todos estos elementos se integran al paisaje exterior diseñado específicamente para exaltar las cualidades de la estructura histórica y proponer un diálogo arquitectó-nico con el edificio. El espejo de agua sur, cuenta con una plataforma que recorre en paralelo a la nave para rematar con una fuente elevada. El agua, como hemos señalado, fue utilizada como un solvente visual que le da unidad a todos los elementos en juego. Precisamente el acceso principal, que se distingue por el puente simulado y las dos áreas de cascadas simultáneas, es el marco de referencia que habíamos pretendido para crear una

    especie de tránsito hacia un sitio distintivo en el Centro de Exposiciones. A un costado del puente ubicamos la esfera de 12 metros de altura la cual, después de evo-lucionar en sus materiales, es de acero y representa un globo terráqueo.

    En la fachada norte también aportamos varios elemen-tos interesantes a este diálogo de volúmenes y formas. El auditorio digital para 230 personas es el de mayor presencia. La esfera está posada en una pirámide esca-lonada de agua, su diámetro es de 23 metros y se ubica justamente en alineación con el centro del vestíbulo de entrada. Los dos accesos al auditorio se desprenden de la esclusa norte, única diseñada a dos aguas, a manera de túneles que se incrustan en la esfera. La zona ajardi-nada alrededor de la pirámide de agua se encuentra en un nivel inferior a las explanadas para permitir el desarro-llo completo de la pirámide.

    Se proyectó otra fuente en la parte nororiente con un andador central elevado que tiene la intención de permitir una óptica distinta al observador. El andador se eleva por encima de un platón de agua ofreciendo una perspectiva diferente. Finalmente, en la explanada norponiente, pro-yectamos una estructura a dos aguas que tiene varias funciones: por una parte señala la entrada al andén y a los montacargas y, por otra, aloja los enfriadores del sistema y otros equipos electromecánicos.

    En el interior del conjunto, se logró conservar la pers-pectiva ininterrumpida de las estructuras, uno de nues-tros principales retos. A pesar de que algunas especi-ficaciones de instalaciones hubieron de cambiarse por motivos económicos, el arreglo y disposición de la mayor parte de las instalaciones permite una visión ordenada de los espacios. Los colores seleccionados, grises y ta-bacos, admiten diferenciar algunos elementos originales de los contemporáneos como las estructuras y colum-nas de la nave. La versatilidad en el manejo de las áreas de exposiciones se logró también en seguimiento a las premisas conceptuales. Las tres áreas independientes, pueden ahora comunicarse desde el interior. Diseñamos especialmente unas divisiones o compuertas interiores que podrán habilitarse en cualquier momento para limitar incluso el sonido desde un área a la otra.

    En síntesis, en este proyecto buscamos ofrecer como arquitectos una visión más completa para salvaguardar las viejas estructuras. Ésta tendría que ir más allá de la restauración física del inmueble tomando en cuenta las particularidades del caso específico. Una cubierta, sin muros y prácticamente desmantelada.

    Intentamos de esta manera integrar el rescate de estas estructuras con su nueva función. Los elementos agre-gados forman parte de la visión que hemos propuesto para que la nave tenga una expresión emblemática y contemporánea y que, como sucede con algunos edifi-cios antiguos en sus procesos de adaptación, logre esta-blecerse con éxito en su nueva vida funcional.

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    Diálogo de épocas. Arquitectura y exposiciones provocan la integración de la historia con su presente.

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    Por: Arq. Elisa Rubalcava Cobo Debido al gran esfuerzo que se realizó en el rescate, restauración y reutilización como centro de ciencia y tecnología de este icono de la industria regiomontana, el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), después de evaluar el expediente del Inmueble, ha decidido otorgar al Horno 3 la declaratoria de “Monumento Artístico de la Nación”.

    Con este nombramiento se asegura la conservación de este enorme edificio para que las nuevas generaciones conozcan y disfruten de su patrimonio y aprendan a va-lorar el pasado industrial de nuestra ciudad, ya que no se puede conservar lo que no se valora, y no se valora lo que no se conoce.

    ¿Qué es el Museo del Acero Horno 3?

    El Museo del Acero Horno 3 es una organización no lucrativa autosustentable dedicada a la conservación de un sitio histórico de arqueología Industrial, además de promover el conocimiento a través de la inspiración, la interpretación y programas para mejorar la apreciación y aprendizaje del público hacia este sector industrial, así como cultivar entre los visitantes el interés hacia su le-gado industrial.

    Monumento Artístico de la Nación al servicio del conocimiento

    EL ESFUERZO EMPRENDIDO POR EL GOBIERNO DEL ESTADO Y LA INICIATIVA PRIVADA PARA RESCATAR, RESTAURAR Y

    REUTILIZAR EL ANTIGUO ALTO HORNO NO. 3 DE FUNDIDORA MONTERREY ES HOY UNA REALIDAD QUE SE MATERIALIZA

    COMO EL MUSEO DEL ACERO HORNO 3, UN CENTRO DE CIENCIA Y TECNOLOGÍA QUE A ESCASOS DÍAS DE INAUGURADO HA

    SIDO YA RECONOCIDO POR EL INSTITUTO NACIONAL DE BELLAS ARTES COMO PATRIMONIO ARTÍSTICO DE MÉXICO.

    M U S E O D E L A C E RO H O R N O 3

    Arq. Elisa Rubalcava Cobo Arquitecta por la Universidad La Salle Cuernavaca, con estudios doctorales en Restauración y Rehabilitación Arquitectónica de la Universidad Politécnica de Catalu-ña, con el tema de tesis “Análisis de la influencia de los sismos en las modificaciones formales de la ar-quitectura de los templos barrocos en México”.Actualmente coordina los trabajos de restauración de la estructura del Horno Alto No. 3 para el Museo del Acero.Ha Colaborado con el INAH dirigiendo obras de restauración de templos y conventos coloniales en Morelos, México.Consultora en restauración y reha-bilitación de edificios en el Parque Fundidora de Monterrey y para la empresa PAYSA S.A. en Barcelona, España.Participación en la Bienal de Restauración 2000 en Barcelona España, en cursos de restauración artística y de mobiliario.

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    NA Las metas del Museo del Acero Horno 3 son:

    • Restaurar y conservar de manera sostenible el Alto Horno No. 3.

    • Ser un lugar inspirador y divertido para aprender.• Contribuir a construir una ciudad basada en el cono-

    cimiento.• Introducir a los visitantes a la ciencia y tecnología.• Transmitir la historia de la industria del acero en Mon-

    terrey y México.• Promover e incrementar la integración familiar.• Alentar a los niños y jóvenes a seguir su educación,

    potencialmente en el ramo de las ciencias.

    PROYECTO ARQUITECTÓNICO

    El Alto Horno No. 3, y su familia inmediata de estufas, colectores de polvos, tuberías, armaduras y pasarelas, conforman una poderosa e icónica reliquia de la impor-tante época de expansión industrial en Monterrey entre

    los años 1960-1980. A pesar de sólo tener algunas dé-cadas de antigüedad, es un monumento muy apreciado y considerado como importante, histórica y culturalmente para la región.

    Después del cierre de la planta acerera en 1986, se dio un período de limpieza y desmantelamiento en el si-tio, durante el cual cientos de toneladas de acero y otros metales fueron retirados del Horno No. 3, ya fuera en tuberías, ductos, montantes estructurales, válvulas y otro tipo de elementos. Particularmente notables fueron el re-tiro de los 20 tubos de soplo en la base del horno, por los

    que llegaba el aire calentado previamente en las estufas, así como el retiro de los tubos y cajas de agua de cobre del sistema de enfriamiento de la coraza.

    El equipo de diseño conformado por Grimshaw Archi-tects y Oficina de Arquitectura colaboró estrechamente con el personal del Museo del Acero Horno 3, con un comité técnico formado por ex-trabajadores de la plan-ta e ingenieros especialistas en siderurgia y con Aldrich Pears, firma encargada del diseño museográfico, para en conjunto desarrollar las estrategias apropiadas para priorizar los elementos originales del Horno No. 3, en términos de sus características históricas, estéticas, es-tructurales y prácticas.

    Era esencial conservar el carácter educativo e histórico, así como el valor arquitectónico del Horno No. 3, de una manera que permitiera a los futuros visitantes apreciar los componentes primarios y entender el funcionamiento de esta enorme máquina.

    Para poder conservar la estructura, era inevitable que sufriera un cambio de uso -de ser una planta industrial para convertirse en un museo-, por lo que se practicaron algunas modificaciones en ciertas áreas para permitir su funcionamiento efectivo como centro de ciencia y tecno-logía, para lo que se construyeron dos nuevos espacios para albergar los servicios generales y servicios a los vi-sitantes conocidos como Pabellón de Acceso y la Gale-ría del Acero. Algunas áreas de la estructura, tales como pasillos de mantenimiento, puentes y pasos de gato con daño extremo por corrosión, así como remanentes de salientes en equipos, conductos eléctricos, losas de con-creto calcinadas y muros de mampostería agrietados y muy deteriorados, fueron cuidadosamente removidos y en algunos casos sustituidos.

    PABELLÓN DE ACCESO

    Este nuevo espacio contiene los servicios sanitarios, el salón de grupos escolares, un salón de usos múltiples y otros servicios como: enfermería, cuarto de seguridad y guardarropa. El concepto del pabellón es el de un edi-ficio sobrio, con materiales modernos que denotan la época en la que fue construido, los colores van en la gama de los grises al negro carbón y algunos elemen-tos son de acero inoxidable. Cabe destacar que después del cerramiento de multipanel se colocaron paneles de rejilla o louvers con el propósito de evitar la incidencia de rayos de sol directamente sobre la fachada, evitando que el calor irradie al interior, reduciendo así la cantidad de energía que se necesita para la climatización de lugar. Estas políticas de sustentabilidad son parte fundamental del diseño arquitectónico, agregando mayor valor al pro-yecto, ya que los espacios que se integraron al edificio original se construyeron pensando en proteger el medio ambiente.

    GALERÍA DEL ACERO

    El patio de escoria se encontraba al lado poniente del edificio original y estaba delimitado por dos grandes mu-ros de concreto en los extremos y un muro formado por rieles que dividían al contenedor en dos. Al crearse el Parque Fundidora en el 2001, los diseñadores del pai-

    Conservando su imponente figura, el Alto Horno No. 3 funde en la actualidad el conocimiento y la historia.

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    saje optaron por rellenar este patio con tierra, formando un talud de pasto muy apreciado por los visitantes del parque. Desgraciadamente, el talud estaba afectando la estructura de la parte baja del horno, ya que no se prote-gieron debidamente los muros y la humedad permeaba al interior del edificio, provocaba corrosión en el acero y debilitaba la estructura.

    El diseño arquitectónico retomó la configuración del jardín del parque para mantener un espacio verde para el público. Aprovechando la idea del talud original, se propuso un espacio debajo de una cubierta verde para que la nueva construcción no afectara la visión del con-junto y no compitiera con el edificio original. Lejos de competir, el diseño de la cubierta, única en el mundo y formada con placas de acero y cubierta de verde, armo-niza con el entorno y resalta las bondades del acero en la construcción, haciendo aún más interesante el conjunto arquitectónico.

    EL HORNO

    Indudablemente el horno es la pieza central del proyec-to, había permanecido en su mayor parte intacto, aparen-temente se encontraba en buena condición estructural, aunque desafortunadamente, en los trabajos de limpieza de la planta antes de comenzar con el rescate del edi-ficio, se retiraron algunas tuberías de su base y de la mayor parte del sistema de enfriamiento de la coraza, en su mayoría hecho de cobre.

    Se logró con el Parque Fundidora la posibilidad de re-gresar nueve de los 20 tubos de soplo a sus posiciones originales, ya que durante el show del horno se explica el funcionamiento y los procesos que en este horno tenían

    lugar, por lo que el papel de estos tubos alimentadores de aire caliente es de gran importancia, siendo sumamente benéfica la reinstalación de los tubos originales para que el horno tuviera un aspecto más cercano al original.

    El horno se encontraba embancado con aproximada-mente 425 toneladas de coque altamente combustible, siendo necesaria su extracción del interior, por lo que fue necesario abrir el horno en la parte posterior, en el nivel del piso de vaciados, para poder sacar el material, de la misma manera cómo se hacían las reparaciones cuando el horno aún funcionaba. Debido a que el interior de nin-gún horno en el mundo es accesible al público, el Museo del Acero Horno 3, junto con los comités y el equipo de diseño, decidió aprovechar esta oportunidad única de conservar el espacio y adaptarlo para que pudiera ser parte del recorrido de interpretación para los visitantes.

    EL PISO DE VACIADOS

    Como ya se ha mencionado, la losa del piso de vacia-dos se encontraba en mal estado, y debido a los requeri-mientos originales del horno, contaba con pendientes di-versas, incluso escalonadas en algunas zonas. Para que el piso pudiera utilizarse, se remplazó con una nueva es-trategia que priorizaba los elementos originales del Hor-no No. 3 en términos de sus características históricas, estéticas, estructurales y prácticas, pero aprovechando al máximo el espacio, haciendo menos visible la coloca-ción de las instalaciones que el espacio requería.

    La estructura de acero en esa zona se encontraba en muy buenas condiciones, pero aun así fue necesario retirar la carga muerta que ejercían sobre esta losa de concreto reforzado calcinada por las altas temperatu-

    Los recorridos interactivos permi-ten al visitante adentrarse en el mundo de la ciencia y tecnología.

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    ras, así como las capas de refractario y arena sílica que formaban el desnivel. El espacio que se formó entre el nivel superior de los patines de las vigas de la estructura original en el entrepiso, y el nivel de piso original del área de vaciados, se aprovechó para pasar las instalaciones eléctricas, hidráulicas y contra incendio, así como los ductos del aire acondicionado que inyectan el aire frío al piso del show del horno por el piso con el sistema de ventilación por desplazamiento, sistema que es una solu-ción óptima ya que la altura de la nave es considerable y de esta forma se logra climatizar sólo la zona de confort de los visitantes.

    La lámina corrugada y la lámina lisa de los revestimien-tos de los muros externos de la galería principal presen-taban un avanzado estado de corrosión y requerían ser reemplazadas. La intención arquitectónica en esta parte consistió en diseñar un sistema de revestimiento en fa-chada de acero con louvers operables al exterior, que permitieran flexibilidad en las condiciones de iluminación del espacio interior. Esta estrategia requeriría una piel interior de paneles sólidos, que pudiera permitir el con-trol ambiental en el interior (por ejemplo, calefacción en invierno y aire acondicionado en verano), al tiempo que mantuviera un carácter de acero, industrial.

    Las placas de acero de la techumbre de la nave princi-pal, presentaban corrosión y prácticamente era imposible su reutilización como se pensó en un principio, por lo que la envolvente del techo requirió reconstrucción con ma-terial aislante, y las membranas de impermeabilización necesarias. El reto más grande del proyecto en esta zona fue el de aislar completamente este espacio del exterior, ya que cuando el horno se encontraba en operación, la cubierta distaba mucho de ser hermética, prácticamente sólo cubría el área de la lluvia y del sol. Ahora con las ne-cesidades del museo fue necesario sellar completamen-

    te todo el revestimiento y la cubierta del edificio, a fin de lograr las condiciones de absorción acústica, aislamiento térmico, impermeabilidad y apariencia industrial.

    LAS ESTUFAS, COLECTOR DE POLVOS Y LAVADORES

    El cuerpo de las tres estufas, colector de polvos y la-vadores también se encontraban en buenas condiciones estructurales. Su restauración se realizó mediante lim-pieza manual mecánica, para posteriormente aplicar pin-tura epóxica de color negro. La losa original de concreto armado del nivel 518 se encontraba calcinada y con el acero de refuerzo expuesto y muy deteriorado, por lo que se sustituyó por andadores de rejilla tipo Irving y placa antiderrapante para aligerar la carga y permitir el paso de luz natural hasta el nivel más bajo de los equipos, bus-cando que los visitantes puedan apreciar el conjunto y entender mejor su funcionamiento, ya que con la vista se pueden seguir las tuberías que van de un nivel a otro.

    LOS CUARTOS DE CONTROL Y EL CUARTO DEL MALACATE

    En estas instalaciones, se encontraban los controles e indicadores de todo el proceso, desde aquí se medía la presión de horno, se controlaba la temperatura de las estufas, los gases, la temperatura del horno, la carga del horno, el malacate que subía los materiales al tragante y el sistema de válvulas de todo el conjunto.

    Estos cuartos se rehabilitaron. El primero como la ca-fetería del museo y el segundo con servicios sanitarios y área de empleados en el primer piso y en los dos si-guientes niveles como oficinas administrativas del mu-seo. Estos cuartos prácticamente conservaron la memo-

    El viaje a la cima del horno es uno de los principales atractivos del recinto.

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    ria volumétrica de la estructura existente, al tiempo que elementos de cerramiento de vidrio y acero ofrecen la calidad de acabado y apariencia requeridos para estos espacios. El café cuenta con una terraza adyacente, que ofrece excelentes vistas al paisaje sur de la ciudad, y al Cerro de la Silla y la Sierra Madre. Sin embargo, aun-que el interior sufrió modificaciones importantes por la necesidad de acondicionar estas áreas al nuevo uso e instalaciones especiales, se puede observar el carácter industrial de estos dos espacios y se adivina su forma y función gracias a la estructura que quedó expuesta en su interior. Los paneles de control que se encontraban en este lugar, fueron recuperados y restaurados para ubicarlos en la antigua Casa de Malacates específica-mente en el corredor debajo de las oficinas, con el fin de mostrar el avance tecnológico en la forma de controlar y operar un alto horno.

    La idea principal de Grimshaw para esta zona al sur del Horno No. 3 consistió en que las áreas de nueva incor-poración deberían ser inserciones elegantes y moder-nas, enmarcadas en la estructura antigua. Tal es el caso de la escalera exterior de oficinas, la escalera interior de oficias, la terraza del café y el cubo del elevador.

    DISCURSO MUSEOGRÁFICO

    Este proyecto tiene por objetivo proporcionar a nues-tro país un centro interactivo para impulsar la educación científica y tecnológica, conmemorar la historia de la contribución del acero al desarrollo industrial de México y recrear el espectacular proceso siderúrgico en el co-razón mismo de uno de los mayores iconos industriales del país.

    Para la concepción de la obra se ha conformado un equipo multidisciplinario con vasta experiencia en este

    tipo de espacios y que está integrado por Aldrich Pears Associates, de Vancouver, Canadá, encargados de la conceptualización, guión y diseño museográfico. Ade-más, se han conformado un Comité de Historia, un Co-mité Técnico con especialistas de nuestra comunidad, con el fin de garantizar el adecuado desarrollo de los contenidos.

    OBJETIVOS INTERPRETATIVOS

    • Utilizar entornos de inmersión, materiales de archivo (incluyendo fotografías y películas) y piezas históricas para comunicar la vida económica, cultura e industrial del acero en México.

    • Mostrar a los visitantes las etapas de la producción del acero, desde la extracción del mineral hasta la obtención de productos terminados.

    • Demostrar la ciencia del acero utilizando principios científicos básicos y experimentos científicos interac-tivos y simples.

    • Demostrar la tecnología y la ciencia aplicada al acero, utilizando ejemplos basados en prácticas industria-les.

    • Introducir a los niños a una variedad diversa de opor-tunidades profesionales, la educación y el entreteni-miento técnico requerido.

    • Mostrar el futuro del acero a través de productos, la ciencia y las profesiones.

    • Permitir una exploración práctica de nuevas ideas, permitiendo que los niños realicen sus propios inven-tos.

    • Mostrar como la industria del acero avanza en rela-ción a su sostenimiento y responsabilidad por el me-dio ambiente.

    El horno vuelve a la vida usando sonido, luz y efectos especiales.

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    NA GALERÍA DE HISTORIA

    Esta galería ofrece tomas dramáticas de eventos claves en la historia entrelazada del mundo, México y su indus-tria del acero, vista a través de los ojos de las personas cuyas vidas fueron tocadas y transformadas por ellos.

    Sus exhibiciones interactivas permanentes se enfoca-rán en la historia social, desde las condiciones que expli-can el surgimiento de la industria del acero en México en el año de 1900 hasta la actualidad. También se destaca el papel que ha jugado la producción del acero en la modernización de México, así como su correlación con acontecimientos locales, nacionales e internacionales, así como la presencia del acero en nuestra vida diaria.

    GALERÍA DEL ACERO

    El enfoque de esta galería es la producción de hierro y acero, pero no está restringido a esta historia, ya que es un catalizador para explorar otros temas tanto científicos como humanos.

    Sus 99 exhibiciones interactivas permanentes ofrecen a los visitantes un recorrido en donde “vivirán” lo que es un proceso productivo industrial, a través de medios es-cenográficos, mecánicos y electrónicos para demostrar los principios científicos que explican la transformación de materias primas en bienes de utilidad social. Además, cuenta con un núcleo científico en donde se realizan de-mostraciones científicas y tecnológicas periódicamente.

    SHOW DEL HORNO

    Cuenta la historia del Horno 3 con los emotivos testi-monios de varios de los hombres que realmente traba-jaron en este horno de fundición. Esta historia se apoya

    con fotografías y videos históricos, para crear una am-biente inmersivo. La experiencia de que el horno vuel-ve a la vida usando sonido, luz y efectos especiales con flamas, chispas y humo, muestra al público el funciona-miento del mismo, aprovechando los canales originales de arrabio, brindando al visitante la oportunidad de cono-cer la atmósfera que se generaba en este espacio que luce y se escucha como si el horno aún se encontrara en operación.

    Después de este despertar donde se cuenta su historia y funcionamiento, los visitantes pueden disfrutar de un show de luz con una pieza orquestal completa donde la enorme máquina se convierte en escultura.

    Un show repleto de efectos especiales en donde los visitantes pueden observar el rugiente despertar del Alto Horno No. 3 y sentir el calor del suelo mientras el acero candente fluye por los canales originales existentes.

    VIAJE A LA CIMA DEL HORNO

    Al salir al paseo de interpretación por las estufas, el visitante es invitado a un viaje de aventura que es único en el mundo, pocas personas tienen la oportunidad de experimentar tal viaje en una cabina que se desliza por el cubo original por donde subían los carritos skip para alimentar de materiales el horno. Una vez en la cima, el visitante puede explorar la garganta del horno y experi-mentar perspectivas de vértigo del Horno 3, el Parque Fundidora y Monterrey -pasado y presente-. Paneles gráficos le brindan una interpretación de las vistas, así como una explicación de las partes del horno y cómo operaban.

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    Por: Arq. Fernando López Martínez

    El Parque Fundidora es visitado anualmente por más de un millón de personas, entre ellos se incluyen vecinos del sitio, grupos diversos de deportistas, asistentes a even-tos temporales, de fin de semana y magnos eventos que concentran en sólo un día hasta 100 mil visitantes. Hoy el parque ha sido adoptado y pertenece a la ciudad.

    Tomando como base los elementos urbanos y de equi-pamiento preexistentes desarrollados en varios períodos desde el año 1988, así como en ocasión de ser designa-do como sede del Forum Universal de las Culturas Mon-terrey 2007, se ha planteado el Plan Maestro Parque Fundidora edición 2007.

    A partir de una “lectura” de las actividades y experien-cias extraídas de la vida misma del parque, se detectaron necesidades tales como: establecer nuevos elementos de enlace entre el parque y la ciudad, mejorar identidad y claridad de sus accesos, incrementar la oferta de acti-vidades y tiempo de estancia, incorporar al interior ele-mentos de enlace entre las edificaciones e instituciones recreativas y culturales, crear nuevas áreas de encuentro y de eventos temporales, dotar al parque de un siste-ma integrado de recorridos y paseos que incrementen su conocimiento y disfrute, así como de elementos que actúen como herramientas de ubicación y orientación al visitante.

    La presente edición del Plan Maestro contempla lo si-guiente:- Un plano regulador que asigna la vocación de usos de

    suelo destinados a las actividades de tipo ferial y cul-tural, áreas de estancia, recreativas y áreas verdes.

    - Un nuevo esquema de accesos y conectividad urba-nística de este museo de sitio de arqueología indus-trial, en su carácter de parque urbano con respecto a la ciudad.

    Un crisol socioeconómico y cultural de integración urbana

    EL FUTURO DE LAS CIUDADES ESTARÁ SUSTENTADO EN LA CALIDAD DE VIDA QUE LE OTORGAN A SUS HABITANTES,

    POR LO QUE ESPACIOS COMO EL PARQUE FUNDIDORA SON DE GRAN RELEVANCIA COMO AGENTES DE INTERACCIÓN Y

    SOCIALIZACIÓN, QUE ENLAZADOS POR MEDIO DE PARQUES LINEALES Y BULEVARES A LUGRES PÚBLICOS COMUNITARIOS

    Y DE PRESERVACIÓN ECOLÓGICA, SE CONVIERTEN EN UN GRAN PATRIMONIO SOCIAL Y EN ELEMENTOS DE IDENTIDAD

    CIUDADANA.

    Arq. Fernando López Martínez Arquitecto por la Universidad Autó-noma de Nuevo León. Miembro de Número de la Aca-demia Nacional de Arquitectura, Capítulo Monterrey.International Member of American Society of Landscape Architects.Professional Advisor of Landscape Architecture Master Degree at Louisiana State University.Co-desarrollador de un programa de Maestría en Arquitectura de Paisaje para la UANL en conjunto con Harvard University, Graduate School of Design.Profesor en la Facultad de Arqui-tectura UANL.Profesor de Cátedra carrera de Arquitectura, ITESM Campus Monterrey.Jefe de Taller de Proyectos en el municipio de Garza García, N.L.Director de FERNANDO LOPEZ, arquitectos.Autor de proyectos residenciales, oficinas, edificaciones industria-les, comerciales e institucionales, diseño urbano, espacios abiertos y desarrollos inmobiliarios.Premio en la Bienal de Arquitectura CANL Monterrey en; 1987, 1989, 1991, 1993, 1995, 1997, 1999, y 2003.Distinguido en el 2º Salón de Ar-quitectura de la Nueva Generación del Instituto Nacional de Bellas Artes en México D.F. en 1987. Mención Honorífica Premio Obras Cemex 1999 y Obra Finalista Premio Obras Cemex 2002.Miembro del Jurado del Premio Obras Cemex en ediciones 2005, 2006 y 2007.

    - La integración urbanística con el Paseo Santa Lucía, el Parque Fundidora II (Peñoles) y el Parque Lineal Río Santa Catarina.

    - Un esquema de mayor conectividad con relación a las edificaciones preexistentes y en proceso de de-sarrollo como son la Nave Lewis, el Horno 3 (Museo del Acero), los edificios de Generadores y Mistubishi, el Aviario (Casa de los Loros) y el Paseo de la Mujer, entre otros.

    - La ampliación de un sistema de vestibulaciones, nodos, lugares de descanso y recorridos.

    - Nuevos espacios a manera de plazas pergoladas des-tinadas a actividades y exposiciones temporales al aire libre.

    - Nuevas plazas y lugares de encuentro.- La peatonalización interna del parque.- Un nuevo orden de elementos paisajísticos y la recu-

    peración del área verde (conocida como contrapista) para actividades recreativas y de deporte informal.

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    En el plano regulador se incluyen diversos proyectos puntuales entre los que destacan:

    ACCESOS

    Se han replanteado los accesos existentes e incorpo-rado nuevos, estos son dotados de una “plaza a la ciu-dad” como elementos de enlace parque-ciudad, estacio-nes de apeo de visitantes, casetas de control, vigilancia y amplias plazas de vestibulación interior acorde a la di-mensión y escala de los magnos eventos en el parque.

    Entre estos nuevos accesos destaca uno al norte (Ave. Francisco I. Madero) que enlaza al Parque con la esta-ción del Metro (“Y” griega) que une al parque con diver-sos y lejanos sectores de la ciudad. Otro acceso impor-tante se localiza al sur (Ave. Constitución) que enlaza al parque con el nuevo Parque Lineal Río Santa Catarina, cabe destacar que este nuevo sistema lineal de más de 14 kms. es un elemento que integra peatonalmente los municipios de Santa Catarina, San Pedro, Monterrey y Guadalupe, por ello habrá de ser un acceso fluido, se

    establece también como un “paradero” de autobuses y apeo masivo de visitantes.

    SISTEMA DE RECORRIDOS (CONECTIVIDAD INTERIOR)

    A partir de los accesos, se ha ampliado el trazado de recorridos, incrementando la oferta de paseos, activida-des y tiempo de estancia a los visitantes, a su vez se en-lazan por medio de plazas y nodos de vestibulación. Los accesos y recorridos establecen un sistema norte-sur y oriente-poniente que provee mayor fluidez, identificación y sentido de ubicación al visitante.

    PLAZAS PERGOLADAS

    Mediante la reutilización de espacios antes destinados a estacionamientos internos, los mismos se replantean como plazas pergoladas, que estarán destinadas como lugares de encuentro, descanso y en especial a eventos temporales al aire libre, como son ferias, exposiciones, eventos cívicos y sociales. Destaca la plaza de enlace Parque Fundidora-Paseo Santa Lucía, y con ello la inte-gración urbanística Parque Fundidora-Gran Plaza (Ma-croplaza).

    PLAZAS

    Como lugares de encuentro, descanso y orientación al visitante se incorporan la Plaza de los Gigantes, la Plaza de la Olla y la Gran Plaza de la Grúa Portal (vestíbulo-explanada), la cual está destinada al encuentro masivo, a eventos de carácter cívico y cultural al aire libre, además de que el vestigio de esta gran estructura se acentúa en contraste con el paisaje natural de la ciudad (Cerro de la Silla y Sierra Madre).

    Elementos de enlace parque-ciu-dad y un eficiente sistema de co-nectividad interior, dan al Parque Fundidora un sentido utilitario y accesible para el visitante.

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    APUENTE (MUELLE) DEL LAGO

    Como un elemento de recorrido y enlace con el nuevo acceso Metro-Parque Fundidora, en el Lago de Acera-ción se incorpora un puente (muelle), en conjunción con este gran cuerpo (espejo) de agua se enfatizan la pre-sencia de edificaciones, chimeneas y el paisaje natural (Cerro de la Silla), como singular escenario propicio para eventos sociales y culturales.

    PAISAJE NATURAL Y ARBORIZACIÓN

    Por medio del