DECLARACIÓN PÚBLICAEl actual escenario político social de Chile está en crisis.

Nos resulta evidente que el modelo político y la estructura de poder actual no permiten –efectivamente- la participación ciudadana en la toma de decisiones; que es el ámbito donde se ejerce el poder.

Así mismo, el modelo económico neoliberal, instalado a la fuerza por la dictadura y, posteriormente, institucionalizado en una constitución política antidemocrática; modelo que fue administrado y profundizado, con absoluta eficiencia, por los gobiernos concertacionistas, favoreció la concentración de la riqueza en pocas manos, aumentando las desigualdades estructurales que vulneran, día a día, los derechos de las personas y la preservación del medio ambiente.

La institucionalidad del Estado se encuentra capturada por los poderes económicos. El vínculo del aparato estatal con los ciudadanos, el rol garante que dicho aparato debe cumplir respecto de los derechos más básicos de las personas, se ha perdido. Hoy, esa institucionalidad, es dominada por los intereses económicos, financieros y especulativos de una minoría que no tiene límites éticos ni legales, por unos poderes fácticos plenipotenciarios; por las cúpulas de partidos políticos atrincherados en sus oficinas ejecutivas, legislativas y municipales; incapaces de entender la política profunda, de leer los nuevos signos de la voluntad transformadora de una sociedad civil cansada de tanto engaño y manipulación

Todo lo anterior, nos plantea -en tanto ciudadanos- la necesidad de salir a ejercer nuestros derechos, a subvertir el orden que nos ha impuesto la anquilosada y deslegitimada clase política; la necesidad de generar los espacios para levantar las propuestas de la comunidad organizada, para recuperar nuestras capacidades de imaginar una vida mejor, de soñar con nuevas formas de

Invitamos a todas las personas y o r g a n i z a c i o n e s q u e d e s e e n s e r protagonistas de los cambios que vienen, a sumarse a esta plataforma surgida del Proyecto Valpoh: Poder Ciudadano.

Caravana Ahimsa por la Tierra

Centro Cultural Playa Ancha,

Colectivo de Izquierda Autónoma

Colectivo Punto de Partida

Colectivo 19 de Noviembre

Confederación de Gente de Mar (CONGEMAR)

Centro de Desarrollo Puerto Valparaíso

Movimiento Asamblea Constituyente V Región

Partido Ecologista-Verde Valparaíso

Partido Humanista

Revolución de la Cuchara

Sindicato de Artesanos de Valparaíso

Sindicato Interempresa de Trabajadores de Valparaíso SINTRAVAL

Sindicato Nª 1 de Trabajadores de la PUCV

Sindicato Interempresas Nacional de Trabajadores de Lanchas (SINATRAL).

E l m ó d e l o e c o n ó m i c o neoliberal, instalado a la fuerza por la dictadura y, p o s t e r i o r m e n t e , institucionalizado en una c o n s t i t u c i ó n p o l í t i c a antidemocrática; modelo que f u e a d m i n i s t r a d o y profundizado, con absoluta eficiencia, por los gobiernos concertacionistas, favoreció la concentración de la riqueza e n p o c a s m a n o s , a u m e n t a n d o l a s desigualdades estructurales que vulneran, día a día, los derechos de las personas y la preservación del medio ambiente.

Hace más de 20 años que en nuestro país el malestar

social no se manifestaba como en los últimos meses.HidroAysén destapó la olla de los conflictos medioambientales; luego, los universitarios, inauguraron el conflicto que hoy se extiende a todo el sistema educacional.

Ahora es el sector del comercio exterior (portuarios, aduaneros, camioneros) el que se moviliza a lo largo del país demandando la derogación, por parte del ejecutivo, de 6 puntos que pondrían la lápida a todos quienes, en dicho sector, no son parte del duopolio Von Appen / Claro.

Y el malestar suma y sigue. En agosto es el turno de la salud, paro incluido.

No obstante, lo verdaderamente novedoso y trascendente de estas movilizaciones, es que los distintos sectores en conflicto extienden sus demandas más allá de lo que un ministro del área puede resolver.

Es así que, Lavín -por ejemplo- no puede resolver en su mesa de negociación la demanda de una Asamblea Constituyente o la renacionalización del cobre. Lo que no significa –como afirma el ministro- que la crisis del sistema educativo en Chile, no tenga relación alguna con la Constitución vigente o con las divisas que la venta del cobre genera para el presupuesto nacional. La tiene, y de manera muy íntima; en una relación de contenido a continente.Lo que hacen los sectores demandantes es ir al fondo del problema; atacar a la madre de los corderos, al modelo económico impuesto por la dictadura y profundizado por todos los gobiernos de la Concertación (dos tercios de las privatizaciones en Chile, ocurrieron bajo los gobiernos del arco iris); modelo que se encuentra protegido por una constitución absolutamente antidemocrática, a pesar del blanqueo impuesto por la Concertación a través de un conjunto de reformas que no tocan la médula de dicha carta en lo que al modelo económico se refiere.

El cuestionamiento al modelo neoliberal, que implica consecuentemente el cuestionamiento a la Constitución que ha permitido su desarrollo; sumado esto a la crisis de representatividad que afecta al conjunto de los partidos que se mueven dentro de la institucionalidad, partido comunista incluido; resulta en una ecuación indeterminada.Lo que está en juego, simultáneamente a la constitución del movimiento social en Chile, es la capacidad de los movilizados de pasar del cuestionamiento a la institucionalidad, a provocar su crisis.

¿Qué Hacer?

Aries: Su planeta regente se encuentra en conjunción con Venus. Este es un momento propicio para la acción, dele no más Aries. Arme su barricada ahora, antes que se acaben las bancas de la plaza.

Tauro: No se deje torear por políticos tradicionales que solo quieren darle la estocada. Momento es de embestir con fuerza contra todo aquello que le oprime.

Géminis: Usted que se caracteriza por tener buen ojo, no muestre la hilacha manteniendose aún en la concerta Geminis, tiene que puro atinar, especialmente este mes cuando sus astros estan en conjunción para un vuelco en su vida; Verdes horizontes le esperan.

Cáncer: Este es su mes cancer, aprovechelo, dejese de wevear con su actitud cortopunzante; los demas no tienen la culpa. Canalice su energía negativa de manera positiva.

Leo: Cuidado Leo, no pierda la estabilidad que tiene solo por un deseo canal, procure que sean al menos diez.

Virgo: Este mes es importante que piense antes de hablar Virgo, su planeta mercurio, nos dice que debe ser cauteloso este mes, pero como ya sabemos...su planeta miente!

Libra: Se balanza anda revuelta por estos dias Libra, se parece mas bien a la justicia chilena...modere sus desequilibrios, corre el peligro de terminar en el PC, lo cual seria su Perdición Constante.

Escorpión: Sabemos que usted es caliente, no se haga el tonto Scorpio; relájese y aproveche.... Plutón, su planeta regente, se encuentra en el zenit de su posición, momento indicado para probar unas nuevas.

Sagitario: Usted jura que las cacha todas Sagitario, ¿entonces que wea' hace en el PC??, acaso no se enteró del Proyecto Valpoh? O cree que es puro weveo el PODER CIUDADANO?

Capricornio: Este mes sus emociones andaran un poco revueltas Caprocornio; sus cabras andaran un poco sueltas. No se preocupes, libere esas emociones contenidas, un buen megafono será de utilidad para esos efectos.

Acuario: Aproveche sus dotes de comunicador y diga lo que tiene que decir. Sus pares no lo molestaran por jugoso, existe la gran posibilidad de que le crean y se convierta en el líder que siempre quizo ser. Cúidese Acuario que el poder corrompe.

Piscis: Ya que usted es ta creativo Piscis; organícese y movilícese, pero tenga cuidado con su natural amor a los animales, lo podran poner en riesgo, especialemente guanacos y zorrillos, que se encuentran en época de apareamiento.

“Desde la racionalidad política emergente, esto es: una mirada desde un nuevo paradigma, desde otra concepción de poder, que es la antítesis del poder dominante; un concepto que instala las relaciones horizontales, que respeta las autonomías y promueve la diversidad, desde esa mirada, no podemos sino estar a favor de subvertir la institucionalidad vigente, de apoyar todas las demandas que apuntan al corazón del sistema capitalista”.

La derecha gobernante, así como la Concertación y sus aliados electorales, saben el riesgo que implica que los movilizados persistan en traspasar los límites de las demandas sectoriales.

Lo que no saben aquellos, de ocurrir ese paso, es dónde terminará resolviéndose el conflicto.Lo complejo de esta ecuación es que nosotros, los que somos parte de los movilizados, podemos intuir, podemos incluso trabajar para que se resuelva de acuerdo a nuestros planes y/o deseos, pero nada garantiza que así sea.

¿Qué hacer, entonces?Desde la racionalidad política emergente, esto es: una mirada desde un nuevo paradigma, desde otra concepción de poder, que es la antítesis del poder dominante; un concepto que instala las relaciones horizontales, que respeta las autonomías y promueve la diversidad, desde esa mirada, no podemos sino estar a favor de subvertir la institucionalidad vigente, de apoyar todas las demandas que apuntan al corazón del sistema capitalista. Sin embargo, algo más hace falta.

Quizá la única certeza que podemos proclamar, es la necesidad de instalar propuestas, el superar también el ámbito de las meras demandas.

Esto, porque las demandas tienen como interlocutor, como destinatario, a los representantes del poder político que estamos cuestionando, y ello implica –en gran medida- un contrasentido. En cambio, las propuestas tienen como destinatario a la ciudadanía toda.

La clase dominante, cada vez que puede, atenta contra los derechos de los ciudadanos. Con ello gana –a lo menos- dos cosas: 1. Incrementar sus capitales y su poder, y 2. Hacer que las organizaciones ciudadanas, de base, populares, se desgasten en la recuperación de los derechos perdidos.

El paso que debemos dar para crear la crisis institucional, debe ser un paso firme, decidido, pero también responsable. Hoy, más que la conducción o canalización del movimiento político social, lo que está en juego es quien o quienes colocan en la agenda de la política nacional, las mejores propuestas.

El campo de la política –ya se sabe- es la disputa por el poder. Las movilizaciones sociales que empiezan a devenir en movimientos, están pobladas de juventud. Es esta juventud, desprovista de las experiencias traumáticas de la dictadura, lo suficientemente liberada de las lógicas de la vieja política; la que siembra los temas sustantivos, que ojalá, a corto plazo, nos permitan cosechar los cambios radicales que el país necesita.

Roberto Córdova Pacheco

Colectivo Punto de Partida

relacionarnos entre nosotros y con el medio ambiente; la necesidad de ejercer nuestra soberanía. En definitiva, la necesidad de construir poder ciudadano diversos planos, por este sistema poítico y su modelo económico.

Un proyecto tal, se configura como la antítesis del proyecto neoliberal representado políticamente por la Alianza por Chile y la Concertación, lo que significa que debemos constituirnos en una plataforma política capaz de enfrentar a estas coaliciones neoliberales y de levantar propuestas políticas que apunten a los cambios estructurales que se requieren; entendiendo que eso implica una nueva constitución, que por primera vez en nuestra historia como nación, surja de las decisiones del conjunto de la ciudadanía; o sea, una Asamblea Constituyente.

En definitiva, un proyecto alternativo que promueva los derechos humanos y medioambientales, que promueva la asociación y la democracia participativa desde la diversidad y respetando las autonomías haciendo efectivo el ejercicio soberano de la ciudadanía. Un proyecto que dé cuenta de las transformaciones políticas, sociales, económicas y culturales que han tenido como resultado la reconfiguración de las clases sociales en nuestro país.

La construcción de poder ciudadano es un proceso que requiere la generación de nuevos espacios y formas de participación que den cuenta y potencien la diversidad que nos caracteriza; la elaboración de un diagnóstico que emerja desde los ciudadanos, para lo cual es fundamental escuchar la voz de las organizaciones territoriales y temáticas; requiere –sobre todo- de la voluntad y esfuerzo de los individuos para organizarse, para recuperar los espacios comunitarios, para construir la unidad de la inmensa mayoría que nos hemos visto perjudicados, en los más diversos planos, por este sistema político y su modelo económico.

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Horóscopo de Poder... Ciudadano

Por el maestro Cuchufleta Doctor en Ciencias Ocultas

Contacto:

poderciudadanovalpo@gmail.com

Dice la canción: “No crezca mi niño, no crezca jamás, los “grandes” al MUNDO le hacen mucho mal”.

¿Cuántos hemos pensado parecido al compañero Facundo Cabral al ver todo lo que ocurre en el mundo?

Que sabias palabras han transmitido nuestros ancestros, que sord@s hemos sido. Si decidiéramos perder el miedo y dedicáramos tan solo un minuto de nuestra vida ha observar nuestro entorno, nuestras acciones y las ACCIONES de l@s demás, podríamos comprender cuanta humanidad hemos perdido y cuanta humanidad y naturalidad necesitamos recuperar. De alguna manera hemos conspirado contra nuestra madre y padre. De muchas maneras tod@s hemos viralizado nuestras acciones cotidianas y hemos aportado en el deterioro de este fascinante ser vivo que llamamos TIERRA al propagar una enfermedad que denominamos neoliberalismo. Algunos diagnósticos dicen que se trata de un modelo económico sustentable, sin embargo “la patología” trasciende toda frontera y mercado, de hecho lo practicamos cotidianamente en nuestras actitudes individualistas y consumistas, por dar solo dos ejemplos.

La cultura de la propiedad privada compra, vende y violenta las conciencias humanas en todo el mundo. Nos subordinamos a la decisión de los grupos económicos nacionales y transnacionales que, premeditadamente, educan, reclutan, contratan y controlan a l@s representantes del pueblo para ser honorables y eficientes patrones de fundo al cuidado y fomento de sus inversiones. Algun@s son propietarios de extensas plantaciones agrícolas o forestales pensadas para la exportación, financiadas con dineros fiscales, regadas con aguas usurpadas y altamente demandantes en agrotóxicos. Otr@s construyen redes de contactos, aprovechando su trabajo en poderosas empresas, y luego, envestid@s como autoridad, facilitan la aprobación de megaproyectos y políticas públicas apropiadas para la inversión extranjera, sin importar los efectos perjudiciales a la salud, al ambiente o a la economía local. En resumen la decisión final es política, carente de humanidad y represiva pues si la gente no acepta la imposición se le oculta y criminaliza.

Las prácticas y políticas neoliberales, concretadas por la concertación y la derecha, son una expresión de la ilegitima constitución que hoy tenemos. Es evidente que necesitamos, con extrema urgencia, una Asamblea Constituyente donde las organizaciones sociales estén realmente presentes para construir en forma colectiva una nueva constitución que represente la plurinacionalidad existente en Chile.

Cuando vemos, sentimos y vivimos los efectos del neoliberalismo podríamos intentar que nuestr@s hij@s y niet@s no lo sufran, refugiándolos en una burbuja y fomentando así la pasividad social. Cuando vemos los efectos de la crisis planetaria, que es también una crisis del modelo económico, deberíamos comprender que l@s niñ@s son parte del presente y es necesario que sean participe en la construcción de la sociedad donde tendrán que crecer.

No tod@s l@s grandes estamos de acuerdo con este ecocidio. Much@s hemos decidido movilizarnos para generar, de alguna manera, los cambios que consideramos necesarios y vitales. Los conflictos socioambientales son propios del modelo económico existente. Debemos comprender que los conflictos mega mineros, la usurpación del agua, la privatización de la vida contenida en las semillas, los efectos nocivos de los agrotóxicos, las mega represas, el endeudamiento y la privatización de la salud y la educación, tienen como origen común un modelo económico cimentado en una constitución ilegitima que debemos cambiar.

La organización, coordinación y movilización social es parte de nuestro legítimo derecho a decidir que sociedad queremos heredar a nuestr@s hij@s. Nosotros somos los únicos que debemos autorizar nuestros actos y formas de movilización. Ninguna “autoridad” tiene el derecho a decidir por nosotr@s.

Ningún mal gobierno nos dirá que tenemos que hacer o aceptar. Aún tenemos dignidad.

“Yo tengo dos enemigos pues dos puntas tiene el mal,el hombre que pisa a otr@ y el que se deja pisar”

Facundo tu muerte no sabrá que hacer con tanta VIDA

POR UN MEJOR VIVIR..

Queremos Decidir....

L a s m o v i l i z a c i o n e s

estudiantiles de las últimas semanas han permitido posicionar en el debate público el hecho que la educación superior y la educación, en un sentido sistémico, se encuentra en una grave crisis. Han dejado claro que desde el 2006, año del último gran estallido social por la educación conducido por los secundarios, los políticos y los empresarios nada han resuelto y avanzado en este tema, profundizando así las desigualdades y la segregación social que genera el sistema educativo chileno. Además de lo anterior, los estudiantes han instalado con éxito las propuestas para superar esta crisis, las cuales han concitado amplias simpatías y altos grados de identificación ciudadana.

Es precisamente el alto grado de identificación o cercanía que tiene la gente común y corriente a las demandas de los estudiantes, uno de los elementos distintos de esta movilización universitaria, cuestión que no había pasado anteriormente. Esto se ha producido por el carácter amplio y social de las demandas, las problemáticas del endeudamiento estudiantil, el lucro en educación o la falta de democracia en las universidades, son los conflictos que hoy en el día a día viven y sufren las mayorías. Dicho de otra manera, los problemas estudiantiles son expresiones concretas de los nuevos y pujantes conflictos del Ch i l e pos t P inoche t , con f l i c tos transversales que se han incubado en las últimas dos décadas fruto de las transformaciones sociales y culturales neoliberales que ha tenido nuestro país.

La existencia de demandas socialmente amplias también se explica por el hecho que nuevas franjas de la población, que antes no se movilizaban, han comenzado hacerlo. En efecto, las anteriores movilizaciones estudiantiles, sin quitarles su importancia dentro del proceso de acumulación histórico-social, sólo se c i rcunscr ib ían a l campo de las universidades tradicionales con demandas preferentemente gremiales. Hoy el ingreso masivo de estudiantes de universidades privadas y educación técnica, incluso todo u n s e c t o r p e r t e n e c i e n t e a l a s universidades tradicionales, (académicos, trabajadores, incluso estudiantes) que antes no se movilizaban, le han dado materialmente al movimiento una masividad nunca antes vista una vez instaurados los gobiernos civiles de la concertación.

También, el carácter amplio y transversal de las demandas ha permitido derribar el mito que decía que el estudiante universitario era un sujeto privilegiado en la sociedad y que tenía un status diferente al resto, ya que ese estudiante se encuentra igual de endeudado y precarizado como cualquier otro chileno.

El escenario político de Chile está en crisis, y esto resulta tan evidente que cualquier argumento que intente probarlo se torna irrelevante. Ya se han hecho repetidamente todos los diagnósticos y más allá de describir una situación puntual, jamás se ha logrado mucho más que el aplauso de los amigos. Hoy nos dejamos de describir el presente y recordar con nostalgia el pasado, hoy nos arrojamos a construir el futuro. Durante este año la ciudadanía se hizo escuchar fuerte por sus demandas en defensa del medioambiente, ellos no sólo perseguían el honorable objetivo de defender a la madre Tierra, sino que también buscaban la construcción de una democracia efectiva, donde las decisiones que perjudiquen o favorezcan a la población sean tomadas por los ciudadanos. Además de un país donde sus recursos naturales sean explotados responsablemente siempre en su beneficio y el de su gente. Aquel movimiento se generó y sustentó sobre el descontento de la ciudadanía organizada y se llevó a cabo sin seguir las directrices de la clase política tradicional. Un sendero semejante ha recorrido el gran movimiento estudiantil que ha llegado a aglomerar a los más diversos sectores del sistema educacional. En él se aúnan las fuerzas de los estudiantes universitarios y secundarios, así como también las del colegio de p r o f e s o r e s . A q u e l m o v i m i e n t o d e m a n d a , principalmente, una educación pública, de calidad y gratuita. Ellos lo han concentrado en una sola consigna: ¡fin al lucro! En ella simplemente queda claro lo fundamental, la educación debe dejar de ser una mercancía, un servicio, para convertirse en un derecho, un derecho que todos poseamos por el simple hecho de ser ciudadanos de este país. Aunque en su dirigencia claramente existe la presencia de militantes, las decisiones de dicho movimiento responden a las bases estudiantiles que lo componen, siendo una vez más la democracia participativa y ciudadana no comprometida con la clase política la que lo sustenta. Hoy nos vemos convocados por las demandas de aquellos ciudadanos que en su diario vivir se ven directamente vinculados al puerto. Ellos se han congregado y coordinado con las demás ciudades-puerto de Chile, iniciando así la primera gran movilización de trabajadores de nuestro país en este tiempo. Por fin son los trabajadores, los hombres que producen la riqueza, quienes se unen a las anteriores demandas y buscan develar y profundizar la evidente crisis en que nuestro país se encuentra. Ellos se han reunido como ciudadanos que son, como trabajadores que son, sin vincularse a través de otra militancia que la de su propia ciudadanía y su trabajo. Reunidos todos y solidarios con la gente que habita las ciudades donde sus puertos se ubican, buscan parar las

BALANCE Y DESAFÍOS DE LA MOVILIZACIÓN ESTUDIANTIL:

Movimiento por una Asamblea Constituyente le habla al Porteñazo:

medidas monopolizadoras y centralizadoras, así como también la ya tan característica avidez de privatización lamentablemente tan común en nuestro país.Estos movimientos ciudadanos tienen, por supuesto, grandes cosas en común. Y sólo se dirá aquí lo fundamental. Es necesario mostrar que lo que está por debajo de las demandas de los ambientalistas, de los estudiantes y profesores, así como también de las de quienes trabajan en los puertos, es un cambio que va mucho más allá de un simple arreglo cosmético, sino que se interna en lo más profundo del ordenamiento de nuestra sociedad. Una democracia participativa, tal como la que sustenta a estos tres grupos; la regulación de la explotación de nuestros recursos naturales; el reconocimiento de la educación como un derecho son claramente algo que debe consagrarse y regularse en nuestra carta magna. Así como también lo referente al fin del lucro, lo cual sólo puede resolverse terminando con una constitución que consagra el principio de subsidiariedad, algo inédito en las constituciones, el fijar un modelo económico particular. El fin de la monopolización, la descentralización efectiva y el término de las políticas privatizadoras también son materia de nuestra constitución.

Es evidente que lo que subyace a toda las demandas del movimiento social, amplio y ciudadano, que hoy nos convoca es el llamado a terminar con el régimen de nuestra actual constitución con el fin de elaborar una nueva. Esa nueva constitución debe ser elaborada por una asamblea constituyente formada por la ciudadanía de nuestro país. Dicho proceso constituyente debe ser llevado a cabo por los ciudadanos, pero sólo en el marco de un proceso de empoderamiento ciudadano, como el que vivimos hoy, tal que cambie el centro de gravedad del poder. A eso nos referimos con dicha expresión, en pocas palabras, buscamos dejar claro que dicha asamblea debe ser constituida por la gente y no por los partidos que hoy forman la c lase pol í t ica. Aquel proceso de empoderamiento ciudadano es el motor de la refundación de nuestro país. Sólo transformando nuestro país en la práctica, lograremos que luego dicho cambio real pueda consagrarse en una constitución que, por fin, fije en sus leyes la estructura de un país donde todos puedan vivir en paz, justicia y libertad. De esta forma hoy los ambientalistas, los estudiantes y profesores, así como también los trabajadores de los puertos, se levantan y forman un sólo cuerpo, un movimiento social que, como un tridente, avanza a clavarse en el corazón del capitalismo. Y el movimiento por una Asamblea constituyente está con ellos, forma parte de dicha ciudadanía, porque no somos vanguardia ni partido, sino que vamos junto a la gente porque somos, ante todo, ciudadanos. Y que la gente lo sepa y lo grite, construir poder ciudadano es construir poder constituyente.

¡QUE SE VAYAN TODOS! ¡ASAMBLEA CONSTITUYENTE YA!

“Las prácticas y políticas neoliberales, concretadas por la concertación y la derecha, son una expresión de la ilegitima constitución que hoy tenemos”

Esto, a su vez, nos permite derribar un segundo mito, propio del campo de la izquierda, que niega el carácter de sujeto revolucionario de este sector de la población, reduciendo su posición a la de facilitador de las luchas de otros. Hoy esta franja masiva de la población, que día a día ve reflejado en si misma las contradicciones del modelo económico, ha comenzando a tomar conciencia de su potencial y su lugar dentro del proceso transformador de largo aliento.

Todo lo anterior permite afirmar, sin miedo a equivocarse, que el movimiento social chileno, expresado hoy en lo universitario o educacional, ha comenzado a transitar el camino hacia un nuevo despertar, hacia un nuevo comienzo. Sin embargo, para superar el peso de la noche del pacto de la transición de a fines de los 80, que propició en términos políticos la exclusión de los sectores populares de los espacios de decisión del país, no es suficiente todo lo anterior.

Hasta ahora el movimiento social ha sido capaz de develar ciudadanamente la existencia de una profunda crisis social en educación, proponiendo diversas medidas para su transformación, pero no ha erguido y perfilado una demanda política, es decir, un quehacer que permita alterar, romper o desquebrajar la democracia antipopular diseñada por los bloques hegemónicos y que posibilite el ingreso de las mayorías a las correlaciones centrales de fuerzas, en definitiva al espacio donde se toman las decisiones. Si el movimiento social, que ha demostrado en esta movilización que puede superar todo tipo de fronteras, no es capaz de construir un relato en este sentido, dejará llano el camino para que los políticos y los empresarios nuevamente terminen decidiendo por todos, coartando la efervescencia social, la tal cual sucedió el año 2006 en educación con la ley general de educación.

En consecuencia, el desafío que tenemos los estudiantes en este momento de la movilización es tomar la iniciativa para construir una demanda política unificada o común, en conjunto a todos los otros sectores movilizados de la sociedad (profesores, ambientalistas, trabajadores del cobre, etc.), sin sectarismo y mesianismos, la cual permita interpelar a la clase política, incidir en la mecánica de resolución de los conflictos sociales y generar los espacios para que sean las mayorías las que democráticamente decidan que es lo que quiere en educación. Es en sentido y bajo estos paradigmas que la idea de convocar a un plebiscito nacional en educación puede ser la expresión de esta demanda política común, ya que de esta manera también estaremos creando una nueva democracia para nuestro país.

Sólo Chile puede definir lo que es para Chile y su futuro.

“Si el movimiento social, que ha demostrado en esta movilización que puede superar todo tipo de fronteras, no es capaz de construir un relato en este sentido, dejará llano el camino para que los políticos y los empresarios nuevamente terminen decidiendo por todos, coartando la efervescencia social, la tal cual sucedió el año 2006 en educación con la ley general de educación.”

Desde los cerros de Valparaíso y desde pequeños miramos al Puerto como parte nuestra existencia, para quienes nacimos y nos criamos en esta ciudad, el puerto era nuestro, pero con la llegada de la Concertación al Gobierno el escenario cambio radicalmente, ya que esos políticos en el año 1999 convencieron a la ciudadanía de que serian mayores los beneficios que los costos de las Licitaciones Portuarias, el tiempo nos ha demostrado todo lo contrario, los costos que hemos tenido que asumir por vender lo que era de todos los chilenos a los grupos económicos dominantes en el sector portuario, han sido catastróficos y la cesantía es el mejor reflejo.

Las distintas autoridades de los gobiernos regionales, como también en la Alcaldía de Valparaíso, jamás han exigido el cumplimiento del mandato que le hizo la Cámara de Diputados al Ejecutivo en el año 1997 de un Estudio de Impacto Social a los Gobiernos y que aún no se hace. Todas las políticas portuarias que se han tomado a nombre nuestro, han sido un rotundo fracaso, ahí están las consecuencias de la privatización con su secuela de cesantía. Es urgente y razonable que las ciudades puertos abran el debate a la ciudadanía, para que desde allí emane una voluntad unívoca respecto del futuro del puerto. Durante los últimos 37 años los ciudadanos nos hemos visto anulados en nuestro sentir, primero fueron los 17 años de la Dictadura, luego los 19 años de los “Gobiernos de la Concertación” y ahora uno de Derecha que representa a los Empresarios, lo que no está ayudando a la salud cívica en el amplio sentido del término, por lo que se hace necesario revisar ciertos comportamientos de cúpulas o élites que se arrogan la representatividad de nuestros anhelos.

Los hechos pasados y presentes, nos muestran como nuestras ciudades han perdido recursos valiosos por no aunar voluntades y defender su patrimonio, y dentro de estos, el más valioso que tienen ¡sus Puertos!

La realidad que viven los trabajadores portuarios es bastante precaria por decir lo menos, si bien existe un marco regulador llamado Código del Trabajo, hecho en dictadura quienes realizaron la más brutal reforma laboral, haciendo pebre las normas laborales y por ende los derechos de los trabajadores, modificado por los Gobiernos de la Concertación más en la forma que el fondo, sin permitirle a los trabajadores tener una participación real en la construcción de una norma laboral, más acorde con un país en vías de desarrollo, donde nos encontramos con meros retoques hechos donde lo avanzado ha sido evidentemente insuficiente respecto a lo retrocedido, donde lo mínimo que existe la mayoría de los empleadores no lo respeta, vulnerando el estado de derecho y generando un tarea de los últimos veinte años de las organizaciones sindicales por alcanzar el piso establecido, para que soñar en lograr superar el piso establecido por el legislador, cosa que se ve reflejada en los bajos ingresos de los trabajadores donde la diferencia ha ido a aumentar las arcas de las empresas del sector, ya que la precarización del empleo genera mejores resultados en los balances de dichas empresas.

Las riquezas generadas por el sector portuario no quedan en las ciudades puertos, todo lo contrario, van a parar a las grandes potencias económicas y además hemos tenido que construirles accesos portuarios para la entrada y salida de carga por camiones, con plata de todos los chilenos y nosotros hemos tenido que asumir el flagelo de la pobreza que se vive en las calles, viendo desde los cerros como la riqueza portuaria termina en manos de extranjeros que no conocen esta ciudad.

Los Gobiernos de la Concertación le regalaron los puertos a los grupos económicos del sector portuario y a los ciudadanos una tremenda cesantía que lidera todas las encuentras del país, eso es una realidad y lo peor que lo hicieron supuestamente representándonos a nosotros.

Recuperemos el puerto para los ciudadanos, el “Puerto es Nuestro”

Alvaro Lagos FuentesPresidente

Sindicato Interempresa de Trabajadores de ValparaísoSINTRAVAL

Los Gobiernos de la Concertación le regalaron los puertos a los grupos económicos del sector portuario y a los ciudadanos una tremenda cesantía que lidera todas las encuentras del país, eso es una realidad y lo peor que lo hicieron supuestamente representándonos a nosotros. Recuperemos el puerto para los ciudadanos, el “Puerto es Nuestro”

El Puerto es Nuestro

Freddy Cortez V.

Caravana Ahimsa por la Tierra Red Socioambiental de Valparaíso

Izquierda Autónoma

Jorge Sharp

José Pedro Cornejo

Movimiento Asamblea Constituyente V Región