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20REPORTAJEÁlvaro Ramírez/Corresponsalramirezalvaro@hotmail.com

Isabel Allende, presidenta del CDE del P

RI.

la derrotapactadaDEl PRI PoblAno

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21REPORTAJE

Álvaro Ramírez/Corresponsalramirezalvaro@hotmail.com

Con sospechas de un acuerdo entre los ope-radores políticos de los gobiernos federal y esta-tal para repartirse las 16 diputaciones federales

–con una suerte de “derrota pactada” de la mayoría de los candidatos priistas ante los panistas y sus aliados– los aspirantes a una curul federal en Puebla se preparan para la campaña que comenzará el próximo 5 de abril y llegará a su cita en las urnas el 7 de junio.

La elección intermedia de este sexenio en Puebla se da en un escenario inédito en el que el Partido Revolucionario Ins-titucional (PRI) llega con serias fracturas internas y evidente desbandada.

Por ejemplo, en el tricolor se ha dado ya una fuga de cuadros, principalmente juveniles, que se han sumado al proyecto morenovallista al aceptar candidaturas del Partido Nueva Alianza (Panal) con la meta de escindirlo aún más.

También hay abanderados de origen priista que se han sumado al proyecto del Partido de la Revolución Democrática (PRD), que en el estado de Puebla es alia-do incondicional del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas, a quien en alianza postuló para los comicios de 2010, en el que sacó al PRI de Casa Puebla luego de más de 80 años consecutivos en el poder.

Pero el PRI no es el único que sufre de conflictos internos, pues el Partido Acción Nacional (PAN) ha delatado ya su pros-

titución, servilismo y falta de identidad al postular a neopanistas y tránsfugas de otros partidos, incluido del PRI, despla-zando a los panistas de las familias custo-dia, fundadores y emblemáticos.

En las candidaturas de mayoría de los 16 distritos, y en las primeras posiciones de las listas plurinominales destinadas a Puebla, apenas puede verse a un par de panistas tradicionales, mientras que en las mejores posiciones resaltan persona-jes ligados directamente al mandatario poblano y con militancia anterior en otros partidos.

En la recolección de tránsfugas de otras instituciones partidistas, principal-mente del PRI, ni siquiera se salva el nuevo partido Movimiento Regeneración

puebla

Moreno Valle, gobernador de Puebla.

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2222 reportaje

Nacional (Morena), del ex candidato pre-sidencial Andrés Manuel López Obrador.

En su lista de abanderados, que al cie-rre de la edición aún sufrían cambios, se ven nombres como el del ex gobernador priista Manuel Bartlett Díaz, quien hoy es senador y coordinador de la fracción del Partido del Trabajo (PT) en la Cámara alta, y un fiel seguidor del tabasqueño.

Los tránsfugasLos nombres y el peso que tuvieron en el PRI los candidatos tránsfugas están a la vista en las postulaciones de otros parti-dos, en al menos nueve casos, que hasta el cierre de la edición amagaban con incre-mentarse.

Al Panal se ha sumado el nóvel ex priista Luis Tiffaine Álvarez, quien fueea “baluarte” de las juventudes tricolores, fundador de la asociación Fuerza Joven y cercano al ex gobernador Mario Plutarco Marín Torres.

Tiffaine se registró como abanderado del Panal para competir en el distrito 9, con cabecera en la capital poblana, justifi-cando su actitud con el argumento de que su ex partido no le brindó oportunidades electorales. Anunció que con él se va un centenar de cuadros nóveles del PRI, lo que anuncia una desbandada.

Otro militante joven del PRI, Luis Cobo Martínez, también cercano al ex mandatario Marín Torres, fue postulado por el Panal como abanderado en el Distri-to 15, con cabecera en Tehuacán, en donde la contienda será cerrada y muchos priis-tas han manifestado su descontento por la postulación, mediante coalición con el Partido Verde Ecologista de México, de la ex conductora de televisión, y actualmen-te diputada local con licencia, Geraldine González.

La suma de estos personajes al proyecto morenovallista, a través del Partido Nueva Alianza (Panal), anuncia una atomización del voto duro priista en esas demarcacio-nes federales.

En entrevista con buzos, Luis Tiffaine Álvarez reconoció que se sumarán a esta causa muchos tricolores, aunque afirmó que la principal tarea de dividir al PRI “ya la realiza con mucha eficiencia Ana Isabel

Allende Cano”, la presidenta del Comité Directivo Estatal de este partido en Puebla.

El cobijo del PRD y PANTambién las postulaciones del PRD y PAN tienen un tufo a priismo. En el PRD, la corriente hegemónica en el país, Nueva Izquierda, coloquialmente conocida como Los Chuchos, logró imponer a los ex priís-tas Carlos Talavera Pérez en el distrito 5, con cabecera en San Martín Texmelucan; Isidro Camarillo Mirón en Ciudad Serdán, distrito 8, y Jacobo Aguilar Sánchez en Te-huacán, distrito 15.

El caso de Talavera Pérez es especial-mente delicado porque el ex priista estuvo en la cárcel en 2013 por el delito de ho-micidio en exceso de legítima defensa y el proceso no está concluido.

Talavera ha sido impugnado incluso por la presidenta estatal del PRD, Soco-rro Quezada Tiempo, quien advirtió que el también empresario es un potencial “nuevo Abarca”, en clara referencia al ex alcalde de Iguala, preso por su presunta responsabilidad en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotizinapa.

Quezada denunció recientemente que Talavera la ha amenazado con mandarla a golpear, en respuesta a las acusaciones públicas que ha hecho en su contra.

Camarillo Mirón fue alcalde del mu-nicipio de Quecholac durante el trienio 2005-2008, puesto al que llegó bajo las siglas del PRI, y es padre de Néstor Ca-marillo Medina, actual alcalde priista de la misma localidad.

Aguilar Sánchez fue el presidente del PRI en el municipio de Tehuacán, pero en fechas recientes se cambió al PRD.

La lista de tránsfugas del PRI, postula-dos ahora por el perredismo, se comple-menta con las ex diputadas locales Elvia Suárez, quien va por el distrito 2, de Zacat-lán, Concepción Contreras Bretón; por el distrito 7, con cabecera en Tepeaca, y el ex abanderado a diputado local y derrotado en la anterior contienda estatal, Gabriel Reyes Cardoso, quien competirá en el dis-trito 3 de Teziutlán.

Carlos Talavera Pérez, candidato del PRD, estuvo en la cárcel en 2013 por el delito de homicidio en exceso de legítima defensa y ese proceso todavía no está concluido.

Al Panal se ha sumado el expriista Luis Tiffaine Álvarez, fundador de la asociación Fuerza Joven y cercano al exgobernador Mario Plutarco Marín Torres.

Juan Pablo Piña Kurczyn ex secretario general de la Fundación Colosio del PRI e hijo del exgo-bernador Mariano Piña olaya.

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2323reportaje

Acción Nacional también ha echado mano de las fugas priistas. Su candidato en el distrito 3 es el ex secretario general de la Fundación Colosio del PRI e hijo del ex gobernador Mariano Piña Olaya, también priista, Juan Pablo Piña Kurczyn, quien hasta hace unas semanas era el jefe de la Oficina del Gobernador.

Desestabilización y soberbiaMientras la presidenta del CDE del PRI, la diputada federal Ana Isabel Allen-de Cano, desestima la desbandada de priistas y ve en ésta un ánimo de deses-tabilizar al tricolor poblano, fuentes que pidieron el anonimato la acusaron de ne-garse al diálogo con los militantes de su partido que tienen arraigo y que fueron desplazados de las candidaturas.

En sincronía con la versión del ex priista y hoy panalista Luis Tiffaine Ál-varez, quien acusó a Allende de no to-mar las llamadas y de evidenciar sober-bia, hay priistas que aseguran que ella intenta imponer a todos los suplentes en los 16 distritos, de ser sectaria y negar-se a sumar a los cuadros representativos a las labores electorales de la próxima contienda.

El pasado 11 de marzo, militantes del tricolor en la capital poblana demanda-ron su renuncia por considerar que con ella a la cabeza el PRI poblano “va di-recto a la derrota”.

En conferencia de prensa Vicente Pa-tricio Pineda, quien encabezó la denun-cia, dijo que Ana Isabel Allende solapó la imposición de candidatos, principal-mente en los cuatro distritos electorales de la capital poblana.

Hay más: a principios de marzo, la Corriente Crítica del PRI, liderada por Gerardo Morales Rentería, aseveró que el tricolor navega sin identidad ni rum-bo en el actual proceso electoral y dejó sobre la mesa la exigencia de que Ana Isabel Allende deje el cargo.

En respuesta, la nóvel política, pri-mera mujer en la historia de Puebla en dirigir al PRI, desestima los llamados de

alerta y asegura que se trata de intencio-nes “desestabilizadoras”.

En entrevista, dijo que se trata de un proceso “natural”: “en cada elección se ha venido dando el mismo tema. Final-mente muchos de los que hoy están en otros partidos y que han sido postulados, algunos han ganado, muchos otros han perdido”.

“En el PRI -agregó- tenemos cuadros muy valiosos, y esto permite que se va-yan dando este tipo de situaciones; pero no es algo nuevo, es un tema que vemos proceso tras proceso, es un tema natu-ral. No nos preocupa la salida de algunas personas, es parte de una estrategia para generar una percepción de división del partido, pero quien está aquí tiene la fir-meza y convicción para participar”.

El escenarioEn el papel y en la numeralia histórica, el PRI parece llevar ventaja por su abundan-te voto en el interior de la entidad, mucho del cual corresponde al Sector Campesi-no, mientras en los análisis el PAN apa-rece invencible en los cuatro distritos de la capital poblana, pero tanto uno como el otro tienen por primera vez la sombra del Movimiento Regeneración Nacional, cuya primera participación en una elec-ción resulta aún impredecible.

Con candidatos prácticamente defini-dos en los 16 distritos, aunque al cierre de esta edición aún se daban los últimos cambios, el tradicional bipartidismo de la entidad, con triunfos siempre para PAN y PRI, parece reeditarse, pero las sospechas de la existencia de un acuerdo o pacto en los altos círculos del poder para que el primero resulte con más curules federales que el segundo son cada más evidentes.

En corto, los priistas muestran mucha preocupación y los escenarios más posi-tivos les muestran que apenas unos seis de los 16 distritos se pintarían de tricolor, en tanto que el resto serían para el PAN y los partidos afines al mandatario poblano.

Se da por descontado, por ejemplo, que los distritos 16 y 13, con cabeceras

en Ajalpan y Atlixco, respectivamente, serán para el tricolor, pues ahí los aban-derados son integrantes del Movimiento Antorchista, organización con alto pres-tigio y trabajo en esas regiones poblanas.

En tanto el distrito 14, con cabecera en Izúcar de Matamoros, se ha acomo-dado para una victoria sencilla del ex director del Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros para quien fuera secretario de Finanzas del PRI nacional durante la campaña de Peña Nieto a la Presidencia de la República, el poblano Jorge Charbel Estefan Chidiac, a quien su partido siempre ha reservado posiciones legislativas de alta responsabilidad y te-mas económicos.

Su llegada a San Lázaro, aseguran fuentes cercanas al abanderado, es una necesidad en el proyecto del presidente Peña y está en “el paquete de la negocia-ción” entre los habitantes de Los Pinos y Casa Puebla.

Fuera de esos tres distritos, que se ven seguros para el tricolor, hay otros en los que ex miembros del gabinete moreno-vallista compiten con todo el respaldo del Gobierno estatal, con la chequera al tope y los apoyos clientelares operando a su favor; mientras que a algunos aban-derados priistas su propio partido les ha cerrado el financiamiento y abandonado a su suerte.

La elección en Puebla huele a pacto, sabe a pacto y se ve como pacto. Un pacto para la derrota del PRI.

Militantes priístas de la capital poblana demandaron la renuncia de la presi-

denta estatal, Ana Isabel Allende Cano