opuestas para siempre nueva de la belleza - pazybien.orgpazybien.org/_antenaconventual_archivo/ac 38...

32
C onventual C onventual Antena Revista de la Familia Franciscana Conventual En busca de la Belleza siempre nueva Propuestas para jóvenes Nº 38. MARZO 2015

Upload: lykhue

Post on 07-Oct-2018

219 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

ConventualConventualAntena

Revista de la Familia Franciscana Conventual

En busca de la Belleza

siempre nueva Propuestas

para

jóvenes

Nº 38. marzo 2015

2 / Marzo 2015 ConventualAntena

La iglesia de San Juan de los Reyes, en Toledo, detrás de una escultura en forma

de mano.

eDITORIAL De Asís y de Ávila. 3eN FAMILIA Adiós entrañable a Fr. Enrique. Ángel M. Guzmán 4PROYeCTO PASTORAL Franciscana fecundidad. Juan Antonio Adánez 5eDuCACIóNLa belleza de la Paz. Francisco Cezón 6Letra y música por la Paz. Bernardino Román 7Apuesta por la calidad educativa. Francisco Cezón 8Canto a la solidaridad. Bernardino Román 8eNTRe COMILLAS Mindful… ¿qué? Asunta Utande 9FRANCISCANISMOAcompañar para vivir. Javier Ortega 10Martes de San Antonio. Mª Lourdes López 11Del Puente del Perdón a la Cascada del Purgatorio. César Euceda 12CONCOMITANCIAS Todos tenemos priones. Isabel Español 13CONVeNTuALeSRenovación de las Constituciones. Bernardino Hospital 14Primeros mártires conventuales en Perú. Redacción 15PASTORAL JuVeNIL VOCACIONAL ¡Tú, Belleza siempre nueva! Javier Ortega 16Ver, oír y tocar. Juan Cormenzana 20ASÍS DIReCTO Sucedió por mí. Abel García-Cezón 19HISTORIA Y VIDA Pietro Balestra, “héroe de la fundación” en España. Sergio Barredo 22MISIONeS La belleza de dar y recibir. Lola y Rosa Mari 24eNTRe LIbROS Vidas noveladas. Pepe Trívez 26De CINe Ida. Javier Gutiérrez 27DeSDe LA PALAbRA Camino de Emaús. Juan Miguel Vicente 28MIRADAS Rimas asonantes. César Marcos 29eN PRIMeRA PeRSONAHna. Sión: “Solo en Jesús y en la Iglesia está la plenitud”. 30

director: Luis E. Larra Lomas.

coNSeJo de redacciÓN: Bernardino Román • Sergio Barredo • Juan Miguel Vicente • Abel García-Cezón. coNSeJo aSeSor: Juan Antonio Adánez (Pastoral) • Bernardino Hos-pital (Formación) • Roberto Llorente (centros educativos) • Juan Luis Cormenzana (Pastoral Juve-nil Vocacional) • Jordi Alcaraz (Misiones-Justicia y Paz) • Antolín Mayo (orden Franciscana Seglar) • Gonzalo Fernández-Gallardo (Milicia de la inmaculada).

adMiNiStrador: Julián Pascual. diSeño y MaquetaciÓN: L. Diego Tapia.

redacciÓN y adMiNiStraciÓN: C./ El Greco 16 (Batán). 28011 Madrid.teléfono 91 526 71 61 - Fax 91 526 11 16correo electrónico: [email protected] - Pagina web: www.pazybien.org

La suscripción a la revista es gratuita, pero si desea colaborar puede enviar un giro o ingresar su donativo en el BANCO SANTANDER ES45 0049 4690 5026 9301 5633

ConventualConventualAntena

edita: Provincia Ntra. Sra. de Montserrat. Franciscanos Conventuales (España).

Revista de la Familia Franciscana Conventual

depósito legal: B-26306-05. imprime: Gráficas dehon. 28850 torrejón de ardoz (Madrid).© No se permite la reproducción total o parcial de artículos y fotografías sin una autorización expresa de la dirección de la revista, que se publica trimestralmente en marzo, junio, septiembre y diciembre.

eN PORTADAJóvenes del colegio San Buenaventura al final de una convivencia de Catequesis de Confirmación, en Tablaba (Madrid).

La iglesia de San Juan de los Reyes, en Toledo, detrás de una escultura en forma

de mano.

sumario

Conventual Antena

Marzo 2015 / 3

De Asís y de ÁvilaEl 28 de marzo se cumplen 500 años del nacimiento de santa Teresa de Jesús. La Orden franciscana se une a esta celebración por méritos propios. No en vano la Santa profesó una devoción especial a san Francisco y varios franciscanos ejercieron una no-table influencia en su actividad reformadora. “Da Nuestro Señor al alma algunas veces unos júbilos y oración extraña, que no sabe entender qué es… Es harto, estando con este ímpetu de alegría, que calle y pueda disimular. Esto debía sentir San Francisco, cuando le toparon los ladrones, que andaba por el campo dando voces, y les dijo que era pregonero del gran Rey” (Morada sexta).

En el elenco de hombres contemplativos, Teresa cita a Francisco en primer lugar: “Yo he mirado con cuidado, después que esto he entendido, de algunos santos, grandes contemplativos, y no iban por otro camino. San Francisco da muestra de ello en las llagas” (Vida, 22). Estas dos citas muestran claramente que la Santa de Ávila conocía de primera mano la vida del Santo de Asís. La imagen de Francisco como juglar de Dios y la impresión de las marcas de la Pasión son dos detalles que hablan a las claras de una familiaridad con las fuentes franciscanas.

Ese conocimiento íntimo llevó a la Santa a dedicar a san Francisco una de las ermitas que edificó para las monjas en el huerto del convento de San José de Ávila. Por si fuera poco, vistas de manera retrospectiva, las vidas de ambos santos, el peregrino de Asís y la andariega de Ávila, contienen notables semejanzas y sugerentes paralelismos. Los dos, que murieron en la misma fecha, 4 de octubre, son orantes y contemplativos, y ambos al-canzaron en vida la unión con Dios y la identificación con Cristo, él con la estigmatización, ella con la transverberación.

La devoción a san Francisco se convirtió en afecto y admiración de Teresa por los hermanos menores. A sus monjas propone co-mo modelo de oración eficaz al “santo Fray Diego (de Alcalá), que era lego, y no hacía más que servir”; sintió especial predilección por su consejero y confesor Pedro de Alcántara, de quien, refiriéndose a su “áspera penitencia”, dijo que era “un santo hombre, de gran es-píritu, no parecía sino hecho de raíces de árboles” (Vida, 27). Junto a este hombre santo y “muy afable”, autor del Tratado de la oración y meditación, también recomendó a sus monjas a otros escritores franciscanos, como Fr. Alonso de Madrid, Fr. Francisco de Osuna, Fr. Bernardino de Laredo y Fr. Antonio de Guevara.

Pues bien, han pasado cinco siglos y esta corriente francisca-no-teresiana sigue brotando y regando la huerta pastoral donde el gran Hacedor ha plantado a franciscanos conventuales y te-resianas, fundadas por san Enrique de Ossó. En tres presencias diferentes (Madrid, Pamplona y Zaragoza), la vida parroquial se ve enriquecida por la colaboración estrecha y eficaz de estos dos carismas que Dios ha dado a su Iglesia. Ellos y ellas, unidos a los laicos de las respectivas comunidades cristianas, contemplan juntos estos días la belleza del rostro crucificado de Cristo, a la espera de su gloriosa resurrección.

editorial

4 / Marzo 2015 ConventualAntena

Esta página está reservada a los lectores de la revista. Por eso pueden enviar sus cartas, comentarios o reflexiones a la dirección postal:

Antena Conventual. C/ El Greco, 16 (Batán). 28011 Madrid O al correo electrónico: [email protected]

Cartas de los

lectores

carácter bipolar le hacía pasar en cuestión de minutos de la euforia a la tristeza, del regocijo al enfado, del cabreo a pedir per-dón. Esto provocaba dificultades en la vida comunitaria, de las que él era consciente.

La ausencia de sus padres, hace ya al-gunos años, supuso para él un desgarro afectivo grande. Tantas veces le oímos de-cir que estaba deseando volver a reencon-trarse con ellos… Llevaba con dificultad su situación física, especialmente con dolores de espalda y de cadera, problemas para

conciliar el sueño, cierta ten-dencia a la depresión. Ante esto reclamaba como compensación pruebas de afecto y cariño.

En el columbario donde re-posan sus restos después de la incineración, junto a los de sus padres, como fue siempre su deseo, está escrita la frase del salmo 15: “Me enseñarás el sendero de la vida, me saciarás de gozo en tu presencia”. Es la ora-

ción de un creyente que experimenta la torpeza para seguir los caminos que nos llevan a la vida; por eso pide ser enseñado y conducido. Al final de su trayecto vital, pedimos que Fr. Enrique, por la miseri-cordia de Dios, haya sido llevado por el sendero de la vida a la Vida, y viva en plenitud el gozo de la presencia de Dios en el misterio de comunión trinitaria, en el reencuentro con los que ya han hecho este camino.

en familia

Adiós entrañable a

Fr. EnriqueÁNGEL M. GUZMÁN Madrid

Falleció en Madrid a los 72 años

Fr. Enrique conoció la Orden en el barrio de El Batán de Madrid, donde vivía con sus padres, mientras trabajaba como funcionario de Correos. A través de las actividades del grupo de jóvenes de la entonces parroquia de Santa Clara, siendo párroco el P. Castro, sintió la llamada a vivir como franciscano conven-tual. Otros hermanos también le fueron acompañando en este proceso: Fr. Juan Cebrián, Fr. Andrés Ginés, Fr. Arsenio Utrillas… hasta que decidió entrar como postulante en la fraternidad San Buenaventura.

La decisión, que suponía dejar la casa familiar y trasladar-se al convento, a pocos metros de distancia, no fue fácil en lo afectivo por la fuerte vinculación que le unía con sus pa-dres. Después de realizar el año de noviciado en Granollers y algunos cursos de formación en Madrid, Fr. Enrique retomó la actividad laboral en Correos, donde trabajó hasta su jubilación. Todo este tiempo estuvo de comunidad en la fraternidad San Buenaventura. Llegada la jubilación formó parte también de la fraterni-dad Nuestra Señora del Rosario.

Especialmente en esta última eta-pa de su vida, en el servicio de la portería de la parroquia Nuestra Señora del Rosario Fr. Enrique pudo ejercer sus dones de afabilidad y amabilidad con las perso-nas que venían a la parroquia. Hizo de este espacio un lugar de encuentro, donde quien llegaba se encontraba con una acogida cálida y una palabra oportuna y ocurrente que animaba y des-pertaba sonrisas.

Su presencia en los espacios lúdicos de encuentro, tanto pa-rroquiales como fraternos, no pasaba desapercibida: sus cantos y poesías se hicieron habituales en festivales, salidas parroquiales, fiestas de cumpleaños… Los hermanos que hemos convivido con él también sabemos de otros aspectos de su personalidad. Su

El pasado 10 de diciembre la hermana muerte se llevó a Fr. Enrique de la Fuente. Tenía 72 años. Aunque con ciertos achaques de salud, especialmente tras la operación de prótesis de cadera de hace unos años, el fallecimiento se produjo de manera rápida e imprevista.

Conventual Antena

Marzo 2015 / 5

Franciscana fecundidad

pastoralproyecto

El Papa Francisco ha propuesto para toda la Iglesia la celebración en 2015 del Año de la Vida Consagrada. Es un regalo único y una oportunidad preciosa para renovar nuestra entrega al Señor y el servicio a los hombres, y para vivir, en camino, nuestro servicio a la Iglesia en fidelidad a nuestro carisma.

Año de la Vida Consagrada

El logo y el lema escogido no pue-de ser ni más bonito, ni más teológico, ni más motivador: una paloma sostiene levemente sobre su ala un globo poliédri-co, mientras se posa sobre el fluir de las aguas, de las que se levantan tres estrellas, custodiadas por la otra ala. Y nos recuerda que tenemos que ser Evangelio, Profecía y Esperanza en nuestro mundo.

El Papa, en el documento programático Evangelii Gaudium, nos llama a todos los bautizados, pero especialmente a noso-tros, religiosos, a “recuperar la frescura del Evangelio”, para hacer brotar “nuevos ca-minos, métodos creativos, nuevas formas de expresión, signos más elocuentes, pa-labras llenas de renovación para el mundo actual”. ¿No es eso lo que quería Francisco de Asís para todos nosotros? ¿No es eso lo que esperáis vosotros, laicos, de nosotros, franciscanos conventuales, en nuestras presencias en parroquias, en colegios y allí donde estemos?

Frescura evangélicaLa frescura del Evangelio, si la vivimos de

verdad y a fondo, es un manantial de alegría. El mismo Papa nos lo ha recordado en la carta apostólica escrita con motivo del Año de la Vida Consagrada: “Donde hay religiosos, hay alegría”. Y es que nuestro mundo, nues-tra sociedad y nuestra Iglesia estarían más vacías y más pobres sin nuestro carisma. ¡Cuánta responsabilidad te-nemos los frailes en esta tarea maravillosa de poner calor y color a nuestras vidas y a las vuestras! Y precisamente vosotros nos tenéis que ayudar en esta labor.

Pero, sobre todo, se nos pide “mirar el pasado con gratitud, vivir el presente con pasión y abrazar el futuro con esperanza”. ¿Seremos capaces? Por favor, ayudadnos a agrandar nuestra vocación, a ser fieles y felices con nuestra vida franciscana. Ayudadnos a hacer que la voz de Francisco de Asís resuene en nuestras iglesias y en nuestras aulas, y allí donde vivimos.

Un año para dar gracias y vivir a fondo nuestra voca-ción, para ser, como nos recuerda el Papa, “una Iglesia en salida, que va a las periferias geográficas y existenciales”. Sin miedos, conscientes de que no estamos solo en este camino. Sintiendo que nos sostenéis en nuestra voca-ción. Pero, ante todo, sintiendo la presencia del Espíritu de Dios que anima nuestras vidas.

Ojalá vivamos con agradecimiento este don, para que nos ayudemos todos a hacer una Iglesia más profética y llena de franciscana fecundidad.

JUaN aNtoNio adÁNEZ Barcelona

6 / Marzo 2015 ConventualAntena

rodeando una gran paloma blanca, que destacaba en el centro.

Los padres de los alumnos también tuvieron la oportunidad de participar en otro mural coloca-do a la entrada de la iglesia conventual de Santa Clara, poniendo deseos y frases alusivas a la paz. Posteriormente se entregaron diplomas a los alumnos, elegidos por sus propios compañeros como merecedores del Premio Nobel de la Paz de cada clase, salvo en el caso de los más pequeños, que el diploma fue entregado a toda la clase.

Tras la lectura del Evangelio, su comentario y la oración final, el acto acabó con la interpre-tación de la canción “Paz, paz, paz”, de Juanes, con baile incluido de los pequeños, cogidos de las manos, mientras hacían tres corros, y con un gran grito al unísono de todos los presentes en el patio: “Queremos paz”.

Como otros años, se desarrolló un pequeño acto en el patio con los alumnos y profesores de todas las etapas. Por un momento, el colegio se convirtió en un instrumento para fomentar la paz y la solidaridad, bajo el lema “La belleza de la Paz”.

Tras el saludo e introducción de la jornada, se explicó el trabajo realizado por los alumnos en las tutorías motivadoras que hubo durante la semana previa: cuadros de la paz de Picasso, en Infantil y primer ciclo de Primaria; la tienda de la paz, en el segundo y tercer ciclo; decálogo de la paz e importancia del respeto al nombre de cada persona, en el primer ciclo de ESO; conflictos y guerras actuales en el mundo, en 3º y 4º de ESO; y sentido del perdón cristiano y reflexión sobre la belleza que irradia una persona pacífica, al mo-do de Jesús de Nazaret, en Bachillerato.

Durante las tutorías los alumnos trabajaron a partir de un variado material audiovisual. Así, 2º de ESO utilizó el videoclip “We are the world”, de Michael Jackson y Lionel Richie, mientras que 2º de Bachillerato lo hizo con el videoclip “No dudaría”, de Antonio Flores. En el acto se descol-gó desde la azotea del colegio un gran mural de seis metros de largo, que parecía querer volar con el viento. Fue confeccionado a modo de collage con los pequeños murales realizados por todos los alumnos en clase.

Corazones, palomas, olivos…Los alumnos de Infantil decoraron el suyo con corazones, los de 1º de Primaria con palomas de la paz, los de 2º con ramos de olivo, los de 3º con manos de la paz, los de 4º con velas o lámparas, los de 5º con armas rotas o tanques con flores, los de 6º con la palabra “paz” en diferentes idiomas.

Lo mismo hicieron los de 1º de ESO con fra-ses de la paz, los de 2º con imágenes de santos (constructores de paz), los de 3º con fotos de Premios Nobel de la Paz, los de 4º con nombres de tratados de paz, los de 1º de Bachillerato con fotos de gestos de Paz y los de 2º con fotos de lugares que inspiren paz (Asís, Belén…). Todos

educación

Colegio San Buenaventura de Madrid

El pasado 30 de enero se celebró en el colegio la Jornada escolar de la Paz y la No-violencia, coincidiendo con el aniversario del asesinato en 1948 de Gandhi, el mayor exponente del pacifismo mundial.

La belleza de la PazF. CEZÓN Madrid

Una gran pancarta a modo de collage cuelga en el patio del colegio durante la

celebración de la Jornada de la Paz.

Conventual Antena

Marzo 2015 / 7

se encontraban en la iglesia, se inició el acto cantando y danzando con la canción “Hacer un mundo nuevo”. Una vez finalizada se dio lectu-ra al manifiesto y se hizo el gesto. Mientras un representante leía un parte del manifiesto (ver debajo un extracto), otros miembros del mismo grupo se acercaban al árbol y colgaban de él una frondosa hoja sobre la que se había escrito la pa-labra “paz” en diferentes idiomas.

Una vez leído el manifiesto, en un ambiente de gran silencio y profundo respeto todos co-menzaron a cantar y danzar con gran sonoridad y mucha fuerza la canción “¿Quién quiere la paz?”. A su conclusión, un prolongado y fuerte aplauso fue el hermoso colofón y la maravillosa rúbrica de este solemne y emotivo acto, del que todos salieron fuerte y gratamente impactados.

La celebración estuvo precedida por una pre-paración los días previos a la fecha. Los alumnos de guardería, Educación Infantil y Primaria reali-zaron trabajos plásticos muy variados y ensayaron y aprendieron la canción “¿Quién quiere la paz?”, que interpretaron después durante el manifiesto que tuvo lugar en el patio del colegio el día 30.

Por su parte, los alumnos de Secundaria re-cibieron una tutoría, preparada por el equipo de Pastoral, sobre el tema de la paz, sus exigencias y postulados. Además, en la tutoría dibujaron en una cartulina un garabato que luego se esforzaron en transformar en un hermoso mensaje de paz, fraternidad y convivencia. El resultado se reflejó en unos carteles muy vistosos y llamativos que se colgaron en la iglesia parroquial durante la celebración por la paz. También aprendieron la canción “Hacer un mundo nuevo”, que todo el colegio cantó al principio del manifiesto.

El día 30, una vez que se colocaron en la iglesia los diferentes trabajos y carteles que habían rea-lizado los alumnos en clase, todos se trasladaron al templo (debido a las inclemencias del tiempo el acto no se pudo realizar en el patio) para tener la celebración de la paz, durante la cual se leyó un manifiesto.

Árbol frondoso En el presbiterio se colocó un frondoso y vis-toso árbol y sobre la pared se iban proyectando imágenes y textos. Cuando alumnos, profesores, miembros de la comunidad franciscana y padres

Colegio San Francisco de Asís de Valladolid

El colegio celebró el pasado 30 de enero la Jornada escolar de la Paz en una armónica y vistosa ceremonia en la que participaron todos los alumnos y profesores, un grupo de padres y la fraternidad franciscana.

Letra y música por la PazB. RoMÁN Valladolid

Soñamos... Con un planeta en paz y armonía. Con que llega ya el día en que por fin nos miramos unos a otros con respeto y cariño. Con el día en que no hagamos diferencias entre sexos y razas. Con el día en que los corazones de todos hayan superado los recelos, las envidias y las desconfianzas. Con el día en que todos los hogares sean un lugar lleno de ternura donde crezcamos con unos ojos limpios y un corazón fuerte. Con el día en que sea necesario borrar del diccionario palabras como terrorismo, violación, narcotráfico, esclavitud… porque, después de haber caído en desuso, carecen ya de significado.

8 / Marzo 2015 ConventualAntena

Asistieron a clase como unos alumnos más y fueron acogidos en las casas de varias familias del colegio. Pudieron aprender español, hacer amigos y conocer de primera mano el espíritu francisca-no que identifica al colegio. En marzo les tocó a los alumnos anfitriones viajar a París y Londres para vivir la misma experiencia.

Esta actividad se encuadra dentro de la apues-ta que se está realizando en el colegio desde hace ya varios años por el bilingüismo. Es una gran apuesta de futuro de la escuela franciscana, que responde así a las nuevas necesidades de la sociedad y al compromiso de servicio que el centro mantiene desde hace casi cincuenta años. Actualizándose constantemente y ofreciendo lo mejor de sí misma, la máxima calidad.

educación

Intercambio de alumnos en Madrid

Cena del hambre en Valladolid

A mediados de febrero el colegio San Buenaventura de Madrid acogió en sus aulas a un grupo de alumnos franceses procedentes del Licée Bossuet Notre Dame de París y a otro de alumnos ingleses del colegio Bishop Ramsey de Londres.

La parroquia San Francisco de Asís de Valladolid se sumó a la Campaña del Hambre de Manos Unidas que, junto a las demás parroquias del arciprestazgo, apoyó la financiación de un proyecto contra la trata de mujeres en la India.

Apuesta por la calidad educativa

Canto a la solidaridad

Con el este fin, en las dependencias del anti-guo seminario San Viator, que se encuentra en la demarcación de la parroquia, se celebró el 14 de febrero la Cena del Hambre, de honda tradición en la parroquia y en el barrio, pues ya hace la número 28. En ella participaron más de 400 personas.

En la cena reinó la alegría, la camaradería, la fraternidad y la solidaridad, y todos los asistentes salieron con hambre en el estómago, pero con sus corazones desbordantes de gozo y regocijo ante la acción que habían realizado. Sumando lo obtenido en la colecta de la parroquia, se recogieron más de 11.000 euros, una digna y meritoria cantidad, lo que pone de manifiesto el ejemplar espíritu solida-rio que reina entre nuestros feligreses.

F. CEZÓN Madrid

B. RoMÁN Valladolid

Entre comillas

Si digo “Mindfulness” seguro que algunos piensan: “Ah, sí, está muy de moda”. Y a otros

lo que les sale es preguntar: “Mindful… ¿qué?”. Para unos y para otros van estas líneas. Y para que nadie se retire de leerlas por usar términos en inglés, desde ya usaré su traducción al caste-llano: “Atención plena”. Y desde ya les diré tam-bién que no es nada raro o novedoso si tienen una madre como la mía.

Hago un inciso para aclarar que soy bastan-te inmune a rarezas o novedades porque con la madre que tengo, en cuanto me intentan vender algo como “lo más”, a mí enseguida me salta el chip: “Pero si eso ya lo dice mi madre”.

Por mi trabajo y por mi curiosidad, tanto o más culpable que el trabajo, he leído (mucho) y he trabajado (un poco) el tema de la atención plena, de modo que me han preguntado a menudo qué es eso del mindfulness y qué me parece. Y les puedo asegurar que al responder a lo primero no me viene una definición de libro ni una cita, lo que me viene es la imagen de mi madre diciéndome: “Hija, tienes que estar a lo que estás”. Porque eso es la atención plena, estar a lo que se está.

Pero por si no tienen una madre como la mía, les explicaré un poco más de qué va todo esto. Va de atención y de conciencia. Se trata de una

práctica antigua y nueva a la vez. Tiene su ori-gen en el budismo, pero se trata de una versión moderna que no entra en el tema religioso. Nos propone vivir el momento presente y hacerlo de manera consciente, algo por otro lado bastante difícil. De ahí que sea necesario el trabajo de la meditación. Una meditación que no es un fin en sí misma, sino que ayuda a vivir la vida de manera más atenta y más plena.

Dicho esto, y contestando al qué, les diré que así de entrada no me parece mal, todo lo contra-rio, pero también les diré que me sorprende la fascinación de muchos con el tema. No acabo de entender que nos volvamos locos por libros en los que en esencia se nos dice que “es ne-cesario dejar de estar en el ayer y en el mañana, que solo tenemos el momento presente” y nos mostremos indiferentes ante el “no os preocu-péis por el mañana, que a cada día le basta su propio afán” de Jesús.

Y les diré también que me preocupa que crea-mos que esto de meditar nos coloca en un plano superior al resto. Si uno va a las fuentes en esto de la atención plena, y no se limita a una charla o un cursillo por correspondencia, se dará cuen-ta de que en la esencia de la meditación está la bondad, la compasión con uno mismo, con los demás y con el mundo. Y que hay gente que no necesita leer ni participar en un cursillo. Hay gen-te que sin saber lo que es lo practica a diario.

Permítanme que termine esta reflexión rei-vindicando a todas esas personas. Permítanme que les hable de C., una amiga de la parroquia a la que hace mucho tiempo que no veía y a la que me encontré hace poco mientras este escrito bullía en mi cabeza. C. me contaba cómo era su vida en estos momentos. Su vida no era fácil, pero ella estaba a lo que estaba, cuidando a uno, animando a otro, sin perder esa fe que siempre ha tenido en que hay algo más allá de nosotros que sabrá por qué ocurre lo que ocu-rre, que a nosotros lo que nos toca es afrontarlo. Al terminar de hablar con ella, me di cuenta de que C. medita con su vida, que C. es mindful-ness, aunque si ella lo estuviera leyendo me di-ría: Mindful… ¿qué?

Mindful... ¿qué?

asUNta UtaNdE

Conventual Antena

Marzo 2015 / 9

10 / Marzo 2015 ConventualAntena

Lo que conocemos con el nombre de Formación Permanente no es sino una más de las distintas herramientas que la Regla y las Constituciones de la Orden Franciscana Seglar (OFS) proponen para ayudar a los hermanos en el cumplimiento de esta misión específica durante toda su vida.

Partiendo de esta premisa, la OFS de España celebró en Madrid del 23 al 25 de enero el curso anual de Formación Permanente en el que, bajo el lema “Acompañar para vivir”, los participantes profundizaron en la importancia del acompaña-miento espiritual en la vida de fe. En la actuali-dad, cada día cobra más vigor la concepción de la persona como un todo dinámico, formado por los componentes de la personalidad, los cambios psicológicos y las influencias del entorno socio-cultural.

El conjunto de la existencia humana se entien-de como un proceso en el que el éxito conlleva su-perar no pocas dificultades. Además, nadie puede suplantar a la persona en la difícil y apasionante tarea de hacerse cargo de su vida. Como dejó claro el ponente principal del curso, Fr. Manuel Díaz Buiza, ofm, “ni siquiera el Espíritu Santo puede suplir a uno mismo en este ejercicio de libertad”.

Buscar salidasPartiendo de la aventura humana y espiritual de un creyente como Francisco de Asís, que tomó en serio su fe, pasando de una religión “asimilada y aseptizada al riesgo de vivir en autenticidad”, Fr. Manuel expuso cómo el acompañamiento espiritual puede ayudar a tomar conciencia y a buscar salidas, teniendo claro que solo el inte-resado puede responder desde sí mismo a su propia maduración, a la voluntad de Dios y a los retos que desde fuera le llegan: “Este cambio de enfoque en la dirección espiritual está avalado por múltiples estudios desde diferentes puntos de vista y por la experiencia eclesial de muchas personas y grupos”.

Curso de Formación de la OFS

Una vez realizada la profesión, los franciscanos seglares asumen de por vida el compromiso de actualizarse continuamente en las enseñanzas de la Iglesia y de confrontarse con la sociedad, en constante evolución, buscando una vida espiritual más rica e intensa.

Acompañar para vivirJ. oRtEGa Madrid

Más de 80 personas, entre franciscanos segla-res de las distintas Zonas de España y jóvenes de la Jufra, participaron en este encuentro al que asistieron también los franciscanos conventuales Fr. Antolín Mayo y Fr. Mariano Recio, asisten-tes espirituales a nivel nacional y de la Zona de Madrid, respectivamente, y en el que se aborda-ron además otros temas, como la elaboración de un itinerario formativo común, la importancia de la diferenciación de las etapas en la vida de los hermanos y la profundización en los encuentros de oración y la lectura orante de la Palabra.

franciscanismo

En septiembre pasado, Fr. Gonzalo Fernández, párroco, nos convocó para discernir juntos una misión evangelizadora-sanadora. Un nuevo reto, en un periodo de discernimiento evangeliza-dor. Partíamos de constataciones que no necesitan ninguna de-mostración: hoy andamos ago-biados, heridos, doloridos, solos y hacemos cualquier cosa para buscar una solución (curanderos, brujería, piedras sanadoras, amu-letos, experiencias orientales...). La Iglesia tiene la fuente de sana-ción y consolación verdadera que puede responder realmente a esa necesidad del hombre de hoy.

En la tradición franciscana los martes son días especialmente consagrados a san Antonio de Padua. Fue el martes después de su muerte cuando los restos del Santo fueron trasladado a la ciudad de Padua. Fue tal el número de prodigios de toda índole que obró en favor de los que imploraban su protección que se conservó en la tradición franciscana dedicarle los martes para implorarle por diferentes necesidades.

Rayos que salen de su manoEl primer martes de noviembre pasado empezamos esta anda-dura de ir a los hombres y mu-jeres de la calle para invitarles a acudir al que tiene el verdadero

poder de aliviar, sanar y liberar en profundidad. El lema bíblico adoptado, fuerza motora de esta propuesta, fue: “Tiene rayos que salen de su mano y allí se oculta su poder” (Habacuc 3,4).

Cada martes, a las 10 de la mañana se expone el Santísimo en la parroquia Mare de Déu de Montserrat y san Antonio de Padua. Mientras frailes, religiosas y seglares invitan en las calles o acogen en el tem-plo, se sucede durante más de una hora una continua oración de alabanza, ado-ración e intercesión por las necesidades que la gente ha depositado en el buzón de la calle y que se van desgranando y llevando al altar una tras otra, en un clima de oración y súplica.

Algunas personas van entrando tímidamente a lo lar-go de esa hora, estimuladas o al menos intrigadas por quienes les han parado en la calle. Es curioso, excepto alguna mujer, los “intrigados” se quedan en el último banco, en expecta-ción. Algunos aceptan escribir su oración y dejan que se lleve al altar. He constatado que mu-chos vuelven otros martes y se adentran más en el templo, y esta vez con su oración.

Dios conoce los frutos mejor que nosotros. Pero los que ya

vamos constatando nos esti-mulan a dar gloria a Dios por su poder. Os invitamos a uni-ros con vuestra oración, que es lo más necesario para esta sencilla actividad evangelizado-ra: Santísima Trinidad, te damos gracias por haber concedido a la Iglesia a san Antonio de Padua y porque en él has reflejado la ter-nura de tu paternidad, la gloria de la cruz y el esplendor del Espíritu de amor. Él, confiando total-mente en tu infinita misericor-dia y en la maternal intercesión

de María, nos ha mostrado una imagen viva de Jesús Buen Pastor, predicando, acogiendo, curando, perdonando... Concédenos, por su intercesión, y si es tu voluntad, que los martes en su honor sean días de gracia, de perdón, de in-tercesión, de sanación y de nueva evangelización. Para que tu amor redentor alcance a tantos herma-nos nuestros alejados, heridos y confundidos por el Maligno. A Ti, Trinidad Santa, todo el honor y la gloria por los siglos de los siglos. Amén.

Conventual Antena

Marzo 2015 / 11

Alabanza, adoración y sanación en Granollers

Antes de lanzarnos a la aventura de los Martes de San Antonio, el título nos sonaba a devociones de beatas. Pero nos dejamos conquistar por el empuje evangelizador de los franciscanos conventuales de Granollers.

Martes de San AntonioMª LoURdEs LÓPEZ Granollers (Barcelona)

12 / Marzo 2015 ConventualAntena

excursión en fraternidad a Rascafría, en la sierra de Madrid. Caminamos por un sendero. El recorrido era realmente es-pectacular, desde el inicio hasta el final. Comienza en el Puente del Perdón, frente al histórico monasterio de El Paular, y finaliza en uno de los parajes más bonitos de la Sierra de Guadarrama, la Cascada del Purgatorio, dos saltos de agua espectaculares que forma el arroyo del Aguilón.

El camino entre robledales y pinares hasta el momento en que se adentra en la ribera del arroyo está lleno de vegetación, pendientes, cerros. Qué gozada escuchar el agua que corre por los riachuelos, ver plasmada la huella de Dios en la creación y saber que el ser humano participa de la gloria de Dios.

Llegamos a una cima y después de una buena comida dedicamos un mo-mento a la oración en fraternidad. En el camino suceden muchas cosas, re-cuerda el pasaje de los discípulos de Emaús: sus corazo-nes ardían cuando el Señor les hablaba y les explicaba las Escrituras (Lc 24,32). Fue una excursión comunitaria e intercultural porque vivimos con hermanos de España (Fr. Bernardino, Fr. Jesús Mari, Fr. Miguel Ángel y Alejandro), de Perú (Fr. Saúl) y de Honduras (César). Nuestros corazones ardían en el camino y en la cons-trucción de la fraternidad con hechos concretos.

Buscamos y nos esforzamos por encontrar a alguien para estar alegres. Podemos asegurar que la vida religiosa es be-lleza, alegría y amor. Vale la pena arriesgarlo todo por alguien que te ama de verdad. ¿Hay momentos de dificultad? Sí. ¿Hay momentos de gloria? Sí. Los momentos de gloria y de difi-cultad vividos desde Cristo suponen experimentar la alegría, la belleza y el amor que nunca pasa.

En la Casa de Formación buscamos caminar con Cristo y, lógicamente, también de la mano de san Francisco. Que el Señor nos conceda la belleza de buscarle y encontrarle, y la alegría de caminar juntos con él.

La Casa de Formación, de senderismo

Según la belleza que haya en tu interior, así será la alegría que brote al exterior. La belleza de amar al hermano que está a nuestro lado hace que estemos alegres.

Del Puente del Perdón a la Cascada del PurgatorioCÉsaR EUCEda Madrid

Como hermanos, los miembros de la Casa de Formación de Madrid, sita en Puerta de Hierro, fuimos de

franciscanismo

Conventual Antena

Marzo 2015 / 13

Concomitancias

No sabía que existían los priones hasta lo de las vacas locas, aquella epidemia que sur-

gió en el Reino Unido a finales del siglo XX, una variante de la cual se extendió a humanos que habían consumido carne de animales infectados. La causa era el prión, una proteína que se en-cuentra de forma natural en todos los mamíferos y que ayuda a la plasticidad del sistema nervioso cuando se presenta en una configuración “bue-na”. Sin embargo, cuando está mal plegada, pro-voca enfermedad. En esta configuración “mala”, esta proteína actúa sobre las proteínas prión nor-males y consigue que estas cambien también su estructura. Poco a poco, el prión alterado provo-ca “agujeros” en las neuronas. Visto al microsco-pio, el tejido cerebral adquiere la apariencia de una esponja.

Al parecer, a los científicos les pilló por sor-presa que una proteína pudiera ser un agente infeccioso y que este pudiera saltarse la barrera de la especie. Los anticuerpos suelen detectar cuerpos extraños, pero en este caso fueron bur-lados porque, en definitiva, el propio prión había estampado su forma letal a un tejido del propio cuerpo. Aquello fue, por decirlo así, una traición al sistema inmunitario, que no vigiló bien.

Los misterios de la ciencia pueden pare-cernos insondables, pero no por ello dejan de sugerir en nosotros multitud de sentidos figura-dos. Así, los fascinantes cuantos –esos saltos que experimenta la energía de un corpúsculo cuando absorbe o emite radiación– a una per-sona con fantasía fácilmente pueden sugerirle imágenes del subsuelo deshelándose bajo la tundra cubierta de musgos, líquenes y arbustos. Contrariamente a lo que se cree, el lenguaje científico está lleno de metáforas, pues no deja de reproducir la belleza la creación; por eso tam-bién sus metáforas son trasladables al ámbito de la poesía y la espiritualidad.

En los pliegues y recovecos de nuestra alma se almacena también tejido atrofiado que ha perdido elasticidad y tersura, capacidad de oxi-genar y regenerar, sin que nos demos cuenta de ello, pues de entrada uno no desconfía de lo que lleva dentro. Pero las enfermedades del alma también pueden ser degenerativas. Tam-

bién se contagian y matan, a nosotros mismos y a los que tenemos al lado.

Aparte de las variedades clásicas (como el rencor, la envidia, el orgullo), existen otras más difíciles de detectar porque pertenecen al sig-no de los tiempos que nos ha tocado vivir a los habitantes del mundo “civilizado”: el exceso de interconexión permanente nos nivela y hace que sea más difícil que surjan individuos singu-lares dispuestos a cambiar algo; la impaciencia por “estar bien” y no sufrir, recurriendo indis-criminadamente a píldoras, o sea, atajando los síntomas, no las causas (véase los alarmantes datos del consumo de Ibuprofeno en España entre gente supuestamente sana, por no men-cionar los ansiolíticos y antidepresivos); la falta de tiempo y espacio para forjarse un alma, para

representarse ante uno mismo la propia histo-ria, para constituirse personalmente situándose ante la realidad y ante el prójimo tomando a Dios como referencia.

Sin una vida de fe –que debería hacerse vi-sible también en el uso de un lenguaje y gestos piadosos en la vida cotidiana– es difícil construir-se a sí mismo, discernir la vida de quién estamos viviendo, según qué patrones y estereotipos, y, por supuesto, ver la viga en el propio ojo.

Todos tenemos priones

isaBEL EsPañoL

La Casa de Formación, de senderismo

14 / Marzo 2015 ConventualAntena

mañanas presentó el camino recorrido por la Orden en los úl-timos años y los aspectos más característicos de la identidad franciscana conventual.

En la eucaristía del primer día, Fr. Antonio Royo recibió el ministerio del lectorado y del acolitado de manos del vicario provincial, Fr. Ángel Mariano Guzmán. El pasado 11 de ene-ro, fiesta del Bautismo de Señor, fue ordenado diácono en Granollers, de manos del obispo auxiliar de Terrassa, Mons. Salvador Cristau, a cuya diócesis pertenece la parroquia Nuestra Señora de Montserrat y San Antonio de Padua.

Por las tardes el ritmo fue distinto: iniciamos la primera jornada con un retiro y la segunda la dedicamos a un mo-mento contemplativo y de adoración eucarística, coordinado por Fr. Antonio Royo, que concluyó al final del día con un cinefórum, guiado, como en otras ocasiones, por Fr. Francisco Pesquera. Este año se proyectó la película Cartas al Padre Jacob, que ya se trabajó en las parroquias y comunidades.

El clima de convivencia y de colaboración en la marcha del encuentro, en el que también participó Fr. Joaquín Agesta, asistente general del área mediterránea de la Orden, fue exce-lente. Agradecemos a Fr. Julián Pascual la entrega y servicia-lidad con que siempre nos acoge en la Casa de Espiritualidad Rivotorto, en Los Molinos (Madrid).

conventuales

Formación Permanente

Un año más, un buen número de frailes de la Provincia participó en el cursillo de Formación Permanente de diciembre, como ya viene siendo habitual entre la fiesta de Navidad y fin de año.

Renovación de las ConstitucionesB. HosPitaL Madrid

Del 26 al 28 de diciembre nos acompañó este año Fr. Valentín Redondo, que coordina el equi-po general que está revisando las Constituciones de la Orden. Por las

Grupo de frailes participantes en el encuentro de formación permanente, en la Casa de Espiritualidad Rivotorto.

Conventual Antena

Marzo 2015 / 15

Una fe que toca la historiaA Sendero Luminoso no le convenía que el pueblo mejorase sus condiciones de vida, necesitaba “exacerbar las contradicciones”, según la clásica teoría marxista, de modo que pudiesen alimentarse el resentimiento y la respuesta violenta. tampoco podían aceptar que la fe tocase las circunstancias históricas concretas, que solo podían interpretarse a la luz de la ideología. Fue así como los dos conventuales polacos se vieron colocados en el punto de mira de la guerrilla.

el propio líder de Sendero, abimael Guzmán, reconoció posteriormente en una conversación en la cárcel con el entonces obispo de chimbote, Mons. Luis Bambarén, que los misioneros habían sido “ejecutados” porque con su actividad caritativa y su predicación impedían a los jóvenes sumarse a la causa de la revolución. esta declaración, aportada a la investigación de la causa, ha resultado decisiva para el reconocimiento de que fueron asesinados “por odio a la fe”.

estos misioneros construían comunidad, ayudaban a los pobres, sostenían su esperanza, revivían la tradición cristiana como hecho vivo y presente. Por eso eran más peligrosos que el ejército y la Policía, porque hacían evidente la mentira de la violencia revolucionaria. cuando algunos sienten nostalgia de la utopía revolucionaria conviene hacer memoria de estos hechos. Preciosos para la iglesia, iluminadores para toda la sociedad. José Luis Restán

dad de testimonio desde el seminario, ambos fueron envia-dos como misioneros a Pariacoto, en la diócesis de Chimbote, tras una breve experiencia pastoral en su país.

Pronto estuvieron en el punto de mira de Sendero Luminoso a causa de su trabajo pastoral entre los habitantes de la cordi-llera andina, a los que visitaban en las numerosas aldeas de la parroquia, así como por su asistencia a los más necesitados en una zona cada vez más controlada por el grupo rebelde.

En agosto de 1991, los guerrilleros incrementaron la violen-cia contra la Iglesia, como reacción al testimonio de solidari-dad de ésta hacia los más desfavorecidos, y amenazaron con matar cada semana a un sacerdote de la diócesis. El 9 de agos-to les llegó el turno a los dos conventuales polacos, que fueron sacados de la iglesia al final de la celebración eucarística de la tarde y, tras un juicio sumarísimo, fueron matados cerca del cementerio, a las afueras del pueblo, junto con el alcalde.

Miguel y Zbigniew, polacos, fueron asesinados en 1991

El Papa Francisco autorizó el pasado 3 de febrero a la Congregación de la Causa de los Santos a publicar el decreto del martirio de Miguel Tomaszek y Zbigniew Strzałkowski, franciscanos conventuales polacos asesinados el 9 de agosto de 1991 por Sendero Luminoso en Pariacoto (Perú). La beatificación tendrá lugar el 5 de diciembre próximo en Chimbote.

Primeros mártires conventuales en PerúREdaCCiÓN Madrid

Miguel y Zbigniew, conventuales de la Provincia de Cracovia (Polonia), estaban en Perú desde hacía dos años como miembros del primer grupo misionero de la Orden. Nacidos en 1960 y 1958, respectivamente, du-rante el periodo de su formación re-ligiosa inicial Miguel era de un curso inferior a Zbigniew. Dada su capaci-

16 / Marzo 2015 ConventualAntena

En su tercera edición, esta propuesta clave en la Pastoral Juvenil y Vocacional (PJV) de la Provincia franciscana conventual de España acogió en Tablada, en plena sierra de Guadarrama, en Madrid, del 20 al 22 de febrero, a cerca de 50 jóvenes que qui-sieron volver a experimentar en algunos casos, o descubrir en otros, la alegría de la fe compar-tida en fraternidad y de un en-cuentro íntimo y profundo con Dios y consigo mismos.

Conscientes de que el mundo tiene necesidad de la belleza de Dios para no caer en la deses-peranza, tras los pasos de dos “gigantes” de la fe como san Agustín y san Francisco, en esta ocasión nos dejamos envolver por la Belleza siempre nueva en

Un año más, el final del mes de febrero trajo consigo una cita que ya muchos esperaban con expectación: el Encuentro Tau.

JaViER oRtEGa Madrid

la cual únicamente encuentra paz el corazón del hombre. Ello fue posible gracias, una vez más, al trabajo de los frailes con-ventuales con la ayuda de Sor Cristina Murru, clarisa francis-cana misionera del Santísimo Sacramento, que forma parte de la Comisión de PJV de la Provincia junto a otros herma-nos y laicos, y a la labor de las agustinas del Monasterio de la Conversión, representadas esta vez por Patricia, Lucía y Francis.

Como cada año, con su tes-timonio de vida y de fe estas hermanas, llegadas desde Sotillo de la Adrada (Ávila), conectaron

enseguida con los participan-tes y nos ofrecieron distintas claves con las que confrontar la vida. Así pudimos descubrir el proyecto amoroso salido de las manos de Dios en la creación, donde experimentamos el éxodo del Padre que viene a nuestro encuentro. Dios se derrama en lo creado y nosotros nos embria-gamos de su presencia, pero sin quedarnos en lo externo, en lo que es aparentemente bello.

Lo que hay detrásEsa mañana descubrimos que la belleza de la creación no radica en lo meramente estético y sub-

III Encuentro Tau¡Tú, Belleza siempre nueva!

Conventual Antena

Marzo 2015 / 17

jetivo, sino en lo que hay detrás. Como en la tarjeta que suele acompañar un ramo de rosas, la clave no la encontramos en las flores, sino en el mensaje: Dios nos ama infinitamente y nos ofrece este regalo pensado para cada uno de nosotros: “¡Es para ti!”, nos dice. Así lo pudimos experimentar en el paseo con-templativo que realizamos por la Sierra de Guadarrama.

Ascendiendo en silencio, atra-vesamos parajes cubiertos aún por el manto blanco de la nieve caída recientemente y cruzamos numerosos riachuelos nacidos del deshielo. ¿Cómo no admirar-nos y agradecer tales regalos? El hermano sol y el hermano vien-to se hicieron presentes cuando llegamos a nuestra meta, la peña del Arcipreste de Hita, por don-de hace cerca de 700 años pasó el autor del Libro del buen amor. Allí rompimos el silencio con la proclamación del Cántico de las Criaturas de san Francisco, a la que siguió una batalla campal con bolas de nieve.

Participantes en el III Encuentro Tau poco antes de partir hacia

sus lugares de origen.

La segunda clave, por la tar-de, nos trasladó a la frustración del designio divino al vernos insertos en la fealdad. Dios, que nos creó bellos, a su imagen y semejanza, contempla cómo el hombre no responde a sus pla-nes, recibiendo por el pecado el salario de la muerte. Desde una visión seria y profunda de la fi-gura del Padre como Arquitecto perfecto de la creación y de la respuesta del hombre que se aleja de Él por el mal, reflexio-namos sobre nuestra libertad y nuestra felicidad, con sus luces y sus sombras.

Después experimentamos en vivo cómo, creados por Él y para Él, al igual que todo lo que sale de sus manos, somos seres ca-pacitados para lo bello. En un ta-ller de dibujo, con más o menos maña, pusimos a prueba nues-tras dotes artísticas trabajando por parejas la técnica del retrato, lo que nos permitió fijar los ojos

en el otro en detalle, de una for-ma poco habitual, admirando lo bello de él como obra de Dios.

Frente a frenteLa noche del sábado trajo uno de los momentos más hermo-sos y emotivos: la vigilia de adoración. En un ambiente de recogimiento, al que contribuyó en gran medida la labor de am-bientación de los postulantes Alejandro y César, la capilla de la casa se convirtió en un pe-queño Tabor. En ese momento, junto al “Este es mi Hijo ama-do”, cada uno de los presentes pudimos escuchar un mensaje personalizado dirigido a nues-tros corazones: “Tú también eres mi hijo amado”.

Allí, reconociendo en una humilde forma de Pan al mismo Jesús que recorrió toda Galilea sanando a los enfermos o al que pidió agua en el pozo a la samaritana, nos pusimos fren-te a frente, contemplando al más hermoso de los hombres. Velamos hasta la madrugada y

18 / Marzo 2015 ConventualAntena

tuvimos la oportunidad de aco-ger la invitación a la conversión a la que se nos llama en este tiempo, experimentando la gra-cia del sacramento de la recon-ciliación.

En el primer domingo de Cuaresma, la última clave de reflexión completó el puzzle que habíamos comenzado la jorna-da anterior y que, de alguna manera, había quedado cojo al estancarnos en la fealdad por el pecado. Con el título “¡Tú eres Belleza! La paradoja cristiana”, nos emocionamos al dar sentido a la belleza en el rostro de un ser sufriente y dolorido como el de Jesús. “Sin figura, sin belleza. Lo vimos sin aspecto atrayen-te, despreciado y evitado de los hombres, como un hombre de dolores”, dice el profeta Isaías. Y sin embargo, Él es para nosotros

“el más bello de los hombres” (Salmo 44).

¿Somos masoquistas? No. No es una contradicción, es una pa-radoja. ¡La paradoja del amor! No es bella la sangre, es bello saber por qué la derramó; no es bella la corona de espinas, es bello saber por quién la sufrió; no es bella en sí la cruz sino el sentido que le da el saber por quienes Cristo murió en ella.

Jesús viene al mundo como ofrenda del Padre para salvarnos, abraza nuestra fealdad adquirida por el pecado y la transforma en belleza por el triunfo de la Vida. Esta belleza es palpable en el testimonio de los santos y en nuestro día a día, en media-ciones como la liturgia. Por eso es tan importante que la cele-bremos con la importancia que tiene. ¿Hay algo más grande que recordar al que dio su vida por nosotros?

Memoria de JesúsCon ese convencimiento cele-bramos la eucaristía, con la que pusimos fin al encuentro, re-cordando la memoria de Jesús, actualizándola y apuntando ha-cia el futuro con los ojos fijos en la belleza que anunciamos cada vez que proclamamos su resu-rrección pidiéndole: ¡Ven, Señor Jesús!

El vicario provincial, Fr. Ángel Mariano Guzmán, quiso hacer-se presente en esta celebración que estuvo presidida por Fr. Juan Cormenzana, responsable de la PJV, y concelebrada también por el resto de hermanos que com-partieron estos días de gracia con los jóvenes: Fr. Ábel, Fr. Jesús Mari, Fr. Jordi y Fr. Miguel Ángel. Volvimos a nuestras casas dis-tintos de cuando llegamos y con una certeza clara: ¡La Belleza con mayúsculas es la que salvará el mundo!

Marcha por la Sierra de Guadarrama hacia la peña del Arcipreste de Hita. Al lado, un momento celebrativo del encuentro.

Conventual Antena

Marzo 2015 / 19

Asís directo

¿Cómo vivía san Francisco la Semana San-ta? Es una pregunta que quizás nos ha-

yamos hecho en alguna ocasión, con el fin de aprender del Pobrecillo (¡a pesar de la distancia!) a “entrar” en los grandes Misterios de nuestra fe que nos han dado y nos dan la Vida nueva y la salvación.

Sabemos por las Fuentes Francisca-nas que el Santo de Asís vivía los días de la semana más importante del año litúrgico, especialmente el Triduo Pascual, con una gran intensidad espiritual, preparándose a conciencia durante toda la Cuaresma. Baste recordar, como ejemplo, el llamado Oficio de la Pasión del Señor (aunque podríamos citar

otros textos del santo), con el que parece que Francisco quisiera res-ponder a la siguiente pregunta: ¿cómo acer-carse al misterio del Señor Altísimo que se abaja hasta el punto de lavar los pies de sus discípulos y de aceptar el suplicio de la cruz por nosotros, para nuestro bien?

La respuesta la en-contramos precisamen-te en ese entretejido de textos que es el Oficio de la Pasión, un verda-dero mosaico compues-to con versículos de di-ferentes salmos, citas del Nuevo Testamento y no pocos añadidos per-sonales. Leyendo entre líneas, podemos atisbar de qué manera Francis-

co vivía la Pascua de su Señor, ¡que era su misma Pascua!: con los sentimientos del Hijo en su diálogo con el Padre (¡salvando siempre lo que hay de Misterio en esta relación!), con profunda gratitud, con sobrecogimiento, con

reverencia, con espíritu de adoración, con ale-gría desbordante.

A santa Clara no le pasó inadvertido este precioso mosaico que Francisco había ido componiendo poco a poco, al paso de su propio camino de fe, hasta el punto de “aprender de memoria el Oficio de la cruz, tal como lo había compuesto el amante de la cruz Francisco, y lo recitaba frecuente-mente con afecto devoto como él”, leemos en su Leyenda.

Francisco nos enseña a vivir desde dentro estos días santos, dejando que resuenen en nuestro corazón estas palabras: “Aquello su-cedió por mí”. No para caer en la culpabilidad, sino para dejar que emerja el asombro, el agradecimiento y, al final, caigamos rendidos en adoración humilde: Sí, fue “por mí” y “por el mundo entero”. Por eso te adoramos, Se-ñor Jesucristo, aquí y en todas las iglesias. Esta es la clave. El sentido de la Semana Santa es entender que aquello sucedió por mí y que desde aquella hora todo es distinto, nuevo, definitivo, porque ya nada ni nadie po-drán separarnos del amor de Cristo.

Francisco rompía en lágrimas al recono-cer que misteriosamente el mundo, y cada uno con él, estaba siendo salvado a través de un Amor que se dejaba crucificar. Por eso dirá a un campesino que un día lo encontró sollozando por los alrededores de Santa Ma-ría de la Porciúncula: “Lloro la pasión de mi Señor, por quien no debería avergonzarme de ir gimiendo en alta voz por todo el mun-do”. Lágrimas sanadoras, podríamos llamar-las, muy propias de los hombres y mujeres que han alcanzado una gran familiaridad con Cristo.

Que en estos días nos veamos absoluta-mente implicados en primera persona en el Misterio de amor que vamos a celebrar, para que podamos revivir en la fe lo que aconteció en la historia: Cristo, crucificado por nosotros y resucitado para nuestra esperanza. “¿Por qué nos has amado tanto, Señor? ¿Por qué?”.

aBEL GaRCía-CEZÓN

Sucedió por mí

20 / Marzo 2015 ConventualAntena

verEn el santuario japonés de Toshogu, ubicado en la ciudad de Nikko, al norte de Tokio, existe una escultura particular. En ella aparecen tres monos, llamados Monos Sabios, representados en tres posiciones diferentes.

Pastoral Ju

venil

y Vocacional

JUaN CoRMENZaNa Madrid

El primero aparece con las manos tapándose los oídos, indicando que no quiere escuchar maldades. El segundo, tapándose la boca con las manos, indicando que no quiere hablar mal. El tercero, con las manos tapándose los ojos, porque no desea ver maldades.

Pese a vivir a miles de kilómetros de Nikko, esta imagen es más habitual de lo que se podría pensar. A diario vemos personas escuchando música con unos cascos enormes. No dudo que la calidad del sonido sea excelente, pero también el aislamiento del mundo al que se someten. Me entristece ver a los jóvenes que van con sus padres en el coche con los cascos puestos, abortando así cualquier intento de comunicación. Me entristece ver a mis alumnos poniéndose los cascos cuando subimos al autocar para hacer una visita.

En las convivencias me entristece ver a los chicos escuchando música con los

a lo suyo, no te metas donde no te llaman, mira para otra parte, haz la vista gorda, mantente callado y haz como si no hubieras visto ni oído nada. Es curioso cómo en la época de las comunicaciones nos cerramos en nuestro pequeño mundo sin dejarnos afectar por la realidad que nos rodea.

Estamos tan a gusto en nuestro mundo virtual que nos despreocupamos de los demás, no nos interesan sus problemas, ni sus sufrimientos ni las injusticias que padecen.

y tocar

cascos en lugar de relacionarse con el resto de sus compañeros. Cada día en el metro vemos personas enganchadas a su pantalla de whatsapp, incapaces de levantar la mirada y ceder el asiento a una persona mayor o a una mujer embarazada.

Combatir la indiferenciaLos tres monos sabios bien podrían ser una metáfora del mundo en el que vivimos. Del no oír, no ver y no hablar maldades hemos pasado al no te compliques la vida, cada uno

oír

Conventual Antena

Marzo 2015 / 21

JUaN CoRMENZaNa Madrid

Esta actitud egoísta ha alcanzado hoy una dimensión mundial, hasta tal punto de que el Papa Francisco en su mensaje para la Cuaresma de este año habla de globalización de la indiferencia.

Estoy convencido de que la mayoría de nosotros nos situamos en la indiferencia no por opción personal sino más bien porque el ritmo frenético en el que vivimos nos impide contemplar de modo sereno la realidad. De ahí que la primera invitación sea parar o, al menos, reducir el ritmo intenso de nuestro día a día para estar más atentos a todo lo que nos rodea.

La segunda invitación será hacer lo contrario de lo que hacen los tres monos sabios, es decir, oír, mirar y hablar. Como cristianos empezaremos a oír, mirar y hablar con Dios. Nuestro Dios nunca es indiferente, está interesado en cada una de sus criaturas, escucha nuestros gritos, nos cuida y nos busca cuando lo dejamos. Pero también oír, mirar y hablar con el hermano que tenemos cerca. Acercarnos al otro, lejos de complicarnos la vida, nos ayuda a construir nuestra identidad, nos devuelve lo que somos y nos ayuda a ser felices. Oír, mirar y hablar se convierte en un buen remedio para combatir la indiferencia.

Campamento urbano en Barcelona. La Sagrada Familia, el Mediterráneo, el barrio gótico, la montaña de Montserrat, el Cotolengo, el Raval... son algunas realidades a las que nos acercaremos. Una oportunidad para abrir los ojos y el corazón, para descubrir la huella que Dios ha dejado en lo que nos rodea y que tantas veces nos pasa inadvertida.

A finales de julio celebraremos en Palencia una nueva edición del Taller Bíblico Porciúncula. Este año profundizaremos, escucharemos y oraremos con el Evangelio. En estos días descubriremos cómo Jesús no permaneció indiferente ante el dolor y el sufrimiento humano, proponiéndonos la belleza del Evangelio como fuerza para cambiar nuestras vidas.

Y a principios de agosto, la Experiencia Huellas. Este año, tras Lourdes y Santiago, nos esperan Asís y Roma. Del 1 al 10 de agosto, jóvenes de todo el mundo se darán cita en la ciudad de san Francisco y santa Clara para vivir una gran fiesta de la fe. En Roma tendremos la oportunidad de encontrarnos con el Papa Francisco, que nos recordará que con Cristo nace y renace siempre la belleza, la alegría y la esperanza.

Tiempos reciosDesde la Pastoral Juvenil Vocacional somos conscientes de que vivimos tiempos recios y de que nuestras propuestas son unas más entre las miles con las que nuestros jóvenes son bombardeados. Por eso necesitamos la ayuda de todos: padres, familias, educadores, profesores, catequistas y religiosos.

y tocar Ilusionarnos con la realidadDesde la Comisión de Pastoral Juvenil proponemos una serie de actividades que no solo buscan superar la indiferencia sino ilusionarnos con la realidad que tenemos a nuestro alcance. Queremos acercarnos, ver, oír, hablar, oler y tocar la realidad que nos circunda, descubriendo la presencia de Dios en todo, convencidos de que la experiencia es un buena antídoto para superar la indiferencia. Este año lo haremos de manos de la belleza, conscientes de su capacidad única para sacarnos del letargo.

La primera propuesta es la Pascua Juvenil Urbana en Madrid, del 1 al 5 de abril. Con el lema “No hay mayor belleza”, por la mañana nos acercaremos a los más vulnerables de nuestro mundo mediante distintas experiencia de servicio: discapacitados, menores, cárcel, mayores, comedores sociales, etc. Por la tarde viviremos intensamente las celebraciones pascuales descubriendo que la fealdad del mal no tiene la última palabra y que en la Cruz resplandece la belleza del amor de Dios.

En esta misma línea, proponemos para el verano (12-19 de julio) un

22 / Marzo 2015 ConventualAntena

Historia y vida

Pinceladas biográficasPietro nació en Molini di Triora el 11 de sep-tiembre de 1879. A los trece años entra en la Orden. Se traslada a San Miniato, emitiendo los votos temporales en 1896. Cursa Filosofía en Bagnoregio y Teología en la Universidad Gregoriana de Roma –donde se doctora–, re-sidiendo en el Colegio internacional San Teo-doro; emite la profesión solemne en 1899 y se ordena sacerdote en 1904. Después de trabajar en Granollers durante casi una década, en tres etapas, regresa definitivamente a Italia y desempeña relevantes tareas en la Provincia de Génova y en otros conventos de Italia.

sERGio BaRREdo GaRCía Barcelona

El P. Pietro Balestra es un franciscano conventual italiano por desgracia poco conocido. Buena persona, a quien el P. Ángel Salvador, restaurador con su tío de la Orden en España, le considera pilar heroico de la consolidación en Granollers. Y es que cuando más falta hacía, llegó a Cataluña este joven genovés, generoso en la entrega y enamorado de la “viña” que el Señor le encomendaba lejos de su tierra.

Pietro Balestra, sentado, tercero a la derecha. En la otra página, arriba,

primero a la izquierda, y los altares de San Antonio y del Santo Cristo.

Pietro Balestra,“héroe de la fundación” en España

Al tratarse de una persona muy válida y disponible, la Or-den le reclama con frecuencia para trabajar en la formación y evangelización. Cabe mencionar que trabajó en el seminario de Bagnoregio en dos etapas, de Susa, fue párroco y guardián de Génova-Albaro, de Génova-Bocadasse, y párroco y ecónomo en Asís; director espiritual de algún centro ajeno. Asistió en esta ciudad, en condición de custodio de Génova, al Capítulo General de 1931. Fue capellán militar en la Primera guerra mundial en el hospital de Susa, ciudad en la que pasó sus últimos años: ines-peradamente aquí falleció el 3 de junio de 1932 con tan solo 52 años, a consecuencia de haber tenido una parálisis cerebral tres días antes mientras celebraba la Misa.

Tres etapas en GranollersEn efecto, Fr. Pietro residió en el convento de Granollers en tres etapas: de 1906 a 1909, de 1910 a 1912 y de 1920 a 1923; y en 1928 volvió a España acompañando al ministro general, P. Orlich, permaneciendo un mes escaso. Proveniente de Asís, pisó por primera vez suelo hispano el 2 de enero de 1906, por man-

Conventual Antena

Marzo 2015 / 23

dato del general de la Orden, Domenico Reuter; vino con Fr. Francesco Tenaglia, quien regresó a su patria en 1908 habiendo desempeñado el oficio de cocinero. Pasados tres años, le salió al camino de la vida la primera gran prueba: la Se-mana Trágica de Barcelona (finales de julio de 1909), que le obligó –junto a dos frailes más– a huir a Italia pasando a pie a Francia, camuflado de obrero.

El 4 de enero de 1910 regresa a Granollers. Uno de sus numerosos oficios fue el de maes-tro del novicio Fr. Pedro Melero. Durante toda su permanencia en Granollers fue capellán de las Hermanas de San José de Cluny con una entrega y fidelidad ejemplares; aquí celebraba los días laborables, y los festivos en el convento. Al regresar a casa el 27 de julio de 1909, tras la Misa, pudo contemplar estupefacto que la actual plaza del ayuntamiento estaba inusual-

mente abarrotada de gente y llegó a oír que iban a quemar a los frailes. Efectivamente, abandonan el convento por insistencia de los hermanos terciarios y se dirigen, por diversos caminos, a la rectoría de Llerona.

Siempre estuvo cercano a los enfermos y a los feligreses, y a algunas parroquias del Vallés Oriental, de modo que al partir para Italia la prensa granollerense escribe que era “conegut de tot Granollers”. En su segunda etapa imparte clases en el co-legio de Segunda Enseñanza de Granollers. En 1920 la Curia

General iba a enviar un visitador, el P. Mileta, con la secreta intención de clausurar la presencia en España, no siem-pre bien valorada desde Roma. El P. Balestra, entonces en Italia, mueve los hilos y logra que el visitador sea otro, el P. Francesco Dall’Olio, y que él sea su acompañante; en efecto, la visita resultó positiva y además el P. Ba-lestra se quedará un trienio en Granollers. Renunció a ser guardián y desempeñó con humildad el cargo de vicario.

Una persona cualificada y necesariaSu amor a la presencia en Granollers se refleja en la solicitud reiterada para que envíen frailes des-de Italia; en la petición de ayuda económica para abrir un seminario; en la atención a los alumnos de Segunda Enseñanza; en el interés por la es-cuela nocturna para obreros; en la docencia del Latín a algunas vocaciones tardías; en el apo-yo a la apertura de un convento en Barcelona;

en el fomento del contacto con la colonia italiana de Barcelona, que ofrecía la posibilidad de atender una capilla e impartir Latín y Catequesis.

Todas estas inquietudes se evidencian, además, en varias cartas dirigidas a la Curia General, aureoladas por el aprecio, el respeto y la sinceridad. El epíteto (“la ovejuela de Dios”) con que llamaba al joven y futuro beato Fr. Francisco Remón Játiva rati-fica su semblanza humana y creyente. En una autoconfesión de 1907 afirma que está en armonía con todos, que goza de buena salud, que está discretamente contento y muy ocupado. Alguna vez insinuó que podía ir a Brasil, a Asís…

Entre sus dotes figuraba la de artista, arquitecto, escultor y pintor: de hecho, colabora en la reconstrucción de la iglesia du-rante los ratos libres. A él se deben el altar del Santo Crucifijo (actual capilla de San Antonio), de mármol y de estilo gótico; el altar de San Antonio (que entonces ocupaba el actual altar mayor), gótico y de tres cuerpos; también pintó algunas paredes, todo ello en armonía con el resto del templo.

Creo sea justo agradecer a nuestros hermanos de Italia y a la Provincia de Génova el servicio que un hijo suyo, Pietro Ba-lestra, prestó competente y generosamente en el primer tercio del siglo XX a la presencia de la Orden en España; sin olvidar a la Provincia de Cerdeña, a la que pertenecía el convento de Granollers a partir de 1913 y que colaboraba generosamente.

Pietro Balestra, sentado, tercero a la derecha. En la otra página, arriba,

primero a la izquierda, y los altares de San Antonio y del Santo Cristo.

24 / Marzo 2015 ConventualAntena

misiones

Cuando llegamos a Corozal nos encontramos con que era periodo de vacaciones y aún no estaban en marcha todas las ac-tividades. Las dos primeras se-manas nos sirvieron para to-mar contacto con la cultura, las familias de los niños apadrina-dos, el funcionamiento del co-medor… Ya llevábamos una idea preconcebida. Sin embargo, una vez allí los planes cambian y te amoldas a la realidad, a las ne-cesidades, al día a día. Nosotras encantadas: cuanto más apren-diéramos, más valiosa y enri-quecedora sería la experiencia.

Hemos estado alojadas en el convento Santa Clara, convi-viendo con cuatro frailes con-ventuales colombianos que día a día trabajan para que la realidad de este lugar y de las personas que viven en él sea menos dura. Nos han acogido con gran cariño y cercanía, tanto que han hecho que lleguemos a sentirnos par-te de la fraternidad. Es algo que siempre quedará en nosotras.

Después de haberlo experi-mentado, solo puedes sonreír y llorar a la vez, al recordar to-dos los momentos vividos con

Experiencia misionera en Colombia

Con grandes dosis de ilusión, bastantes interrogantes y algunos miedos, recibimos la propuesta de poder visitar y conocer

La belleza

LoLa Y Rosa MaRi Barcelona

aquellas personas tan humanas, tan buenas y con tantas ganas de vivir con que nos hemos en-contrado. Le hemos puesto ros-tro a lo que hasta ahora había si-do algo lejano. Ancianos y ni-ños pequeños que veíamos en fotos y que ahora habían cre-cido… Al abrazarlos nos pare-cía que los conociéramos desde siempre, como abrazar a un her-mano al que hace tiempo que no ves, pero que siempre ha si-do algo tuyo.

Al principio no teníamos muy claro si nuestro trabajo allí era útil o no, si tenía sentido o no. Pero, a raíz de hablar con los frailes y el día a día con los ni-ños y ancianos, estando jun-to a ellos, vimos que realmente era un apoyo útil. Podemos de-cir que muy útil, porque nuestro trabajo no acaba ahora, empieza con nuestro regreso.

Un lugar muy ricoCuando pensamos ir a Colombia, lo primero que nos vino a la ca-beza fue que nos dirigíamos a un país pobre y había que estar preparadas para ello. Tal vez nos preocupaba más nuestra seguri-

y recibirde dar

los proyectos sociales de los franciscanos conventuales en Colombia, con los que nuestro grupo misionero de Barcelona viene colaborando desde hace años.

Conventual Antena

Marzo 2015 / 25

El vicario provincial con Lola y Rosa Mari rodeados de un grupo de niños colombianos. En las otras imágenes, niños del Proyecto Corozal.

dad. No se viene preparada pa-ra encontrar un lugar muy rico en términos de cultura, huma-nidad, medio ambiente, acogida y amabilidad. Esto es lo que nos desarma y nos hace dar un giro de 180 grados.

La experiencia ha sido muy enriquecedora y consideramos que el Proyecto Corozal es muy interesante, está perfectamente organizado y parte de las nece-sidades reales del pueblo, ya que los frailes responsables conocen muy bien la zona. Es impresio-nante el nivel de compromiso y

la eucaristía. En estas personas se observa una fe arraigada que se expresa a corazón abierto, con naturalidad y alegría, percibien-do que en ello les va la vida. Una liturgia tejida de gestos con sa-bor a bienaventuranzas. Allí se construye el Evangelio día a día, con el testimonio de vida.

La experiencia ha sido inolvi-dable y entrañable. Destacamos la fuerza que tienen las muje-res para seguir adelante con sus familias, la entrega de los frai-les y colaboradores del Proyecto Corozal con los niños y ancia-

nos, y la riqueza cultural, pai-sajística y humana de Corozal, que nunca olvidaremos. A todos los que quedan por aquí, gracias por dejarnos aprender de voso-tros. Y nosotras, a digerir todo lo que hemos vivido y a trans-mitirlo con esa fuerza e ilusión que nos han dado.

Jóvenes con inquietudesLos seis últimos días de nuestro viaje los hemos dedicado a visi-tar las fraternidades de Medellín y Bogotá. En las parroquias Hermano Francisco (Medellín) y San Luis de Tolosa (Bogotá), donde tenemos niños apadrina-dos, hemos vivido con sus fa-milias y los hermanos francis-canos la realidad que allí existe, compartiendo y celebrando la fe. A veces nos hemos sentido mal por tanto agradecimiento, por-que en verdad ha sido más reci-bir que dar. Nos sorprende con satisfacción ver la dedicación y cariño de los frailes con las per-sonas de su entorno.

También hemos estado en la fraternidad San Maximiliano Kolbe, Casa de Formación-Postulantado (Medellín) y en la fraternidad San Antonio de Padua, sede de la Custodia y Seminario (Bogotá). Aquí ha si-do como abrir una ventana y que entrara la brisa del Paraíso… ¡Cuántos jóvenes! Jóvenes con muchas inquietudes, mucha fe y grandes dosis de alegría; o sea, futuros franciscanos conventua-les. Nos hemos sentido acogi-das con gran cariño por todos los frailes de estas dos fraternidades.

En nuestro viaje a Colombia hemos ido dejando trocitos de nuestro corazón. Nos sentimos más libres y hemos aprendi-do que el amor no es un senti-miento, es una actitud. Nos han enseñado a amar de otra forma.

cariño con que la gente echa una mano aquí.

Destaca la cercanía y la ge-nerosidad de todos, pues están siempre dispuestos a compartir con una sonrisa lo poco que tie-nen. Una cura de humildad pa-ra los que venimos a “salvar el mundo”. Ahora sabemos lo que es el agradecimiento, la gene-rosidad, la pobreza, la injusti-cia social…

Hemos podido participar también de la liturgia y de las celebraciones, especialmente de

entre libros

El 4 de abril de 1968 James Earl Ray dispara desde un motel cercano a Martin Luther King acabando con su vida. Así comienza una huida que le llevará a pasar diez días en Lisboa. El primer día de enero de 1987 un jovencísimo Antonio Muñoz Molina viajará por primera vez a la misma ciudad para encontrar los paisajes y los estímulos necesarios para terminar la que será su primera novela de éxito, El invierno en Lisboa. Un asesino en fuga, una ciudad desconocida, una investigación obsesiva que acaba ocupando la mente y la vida del novelista que, a un tiempo, reflexiona sobre su propia vida.El veterano académico, el novelista introvertido, comprometido y discreto ha regresado con Como la sombra que se va al univer-so de sus recuerdos y obsesiones. Pero esta vez sin autoconten-ción, sin medida, sin límites prefijados y definidos entre la vida y la ficción. Su fascinación por Lisboa, la atracción por James Earl Ray, el extraño y desconocido asesino de Luther King y la conexión entre am-bas han dado a luz una novela en la que Muñoz Molina ha dejado sobre la mesilla la timidez y el pudor y ha con-vertido el relato en confesión íntima.

Muñoz Molina siempre había “saca-do” de su propia biografía datos, paisa-jes, sensaciones, pero nunca de forma tan explícita. Sus años como funcio-nario en el Ayuntamiento de Granada, su primer matrimonio, su primer hijo, su primer éxito repentino, la aparición del amor, la angustia, la incoherencia, la sensación de vivir una vida “falsa”, incompleta, se cuelan en las pesqui-sas del paso del asesino de King por Lisboa.

La reflexión se eleva, se humaniza y se sincera hasta acercarse de tal modo a la autobiografía que roza lo increíble. Muñoz Molina se muestra sincero, humilde, en constante búsqueda, abrumado a veces por la realidad, enamorado de la literatura y la vida. La paternidad y la familia –tal vez atípica, o quizás no tanto– se constituye en ancla y cimiento y llena los vacíos que la razón no es capaz de llenar.

Muñoz Molina elabora sus novelas con la paciencia de un arte-sano, la curiosidad de un investigador y el arrojo de un espía. En esta novela se confronta a un hombre con un terrible pasado, el asesino de Luther King, y a su propio pasado. Una novela que nos arrastra entre obsesiones y reflexiones de la edad madura. Una historia que hemos de leer.

26 / Marzo 2015 ConventualAntena

¿Por qué leer?

Porque la historia nos atrapa, nos envuelve, nos seduce, igual que Lisboa lo hizo con el autor en su juventud. Porque es un magnífico thriller que revela sus cartas, que no esconde los nudos con los que está tejido, que los exhibe y los reutiliza para acompañar al autor en una mirada “autocrítica” y comprensiva hacia su propia vida. Porque la edad madura conlleva la necesidad de releer el pasado, de explicar nuestra propia historia, de ajustar cuentas con el tiempo. Porque en esta novela Muñoz Molina lo hace con honestidad y valor. Sin tibieza. Porque la visión de una vida desnuda con sus incoherencias y pasiones, con sus motivos y excusas, nos reconforta en nuestras propias miserias e inconsistencias.Porque en su “autobiografía” novelada Muñoz Molina esconde una mirada a la historia reciente de nuestro país. Una de las miradas más lúcidas en estos momentos convulsos. Una mirada crítica pero misericorde. Una mirada de amor que sufre nuestra historia… y la suya.

Como la sombra que se vaAntonio Muñoz MolinaSeix Barral, 2014

Vidas noveladasPEPE tRíVEZ

Conventual Antena

Marzo 2015 / 27

de cine

Con el título original de “Ida (Sister of Mercy)” podemos disfrutar de una de las joyas de la cinematografía europea produ-cida en Polonia mediante un acuerdo de coproducción italo-dane-sa. Se trata de una de las películas más premiadas del momento y acreedora del Goya del presente año a la mejor película europea y del Oscar a la mejor película de habla no inglesa. Sus ochenta minutos de duración están colmados de una inusual calidad en el cine del momento.

Su director, Pawel Pawlikowski, cuida cada detalle del plano, cada encuadre, opta por un formato clásico de tres por cuatro y por la película en blanco y negro para narrar una historia contemporánea a la antigua usanza mediante un guión propio escrito con la colaboración de Rebecca Len-kiewicz, las sugerentes partituras de Kristian Selin Eidnes Andersen para la banda sonora y la dirección de fotografía a cargo de Lukasz Zal y Ryszard Lenczewski. Cuenta con la parti-cipación protagonista de Agata Kulesza y Aga-ta Trzebuchowska.

Narra la historia de Anna, una joven novi-cia que durante los años sesenta, a punto de consagrarse a la vida monacal, descubre un oscuro secreto de familia que data de la terri-ble época de la ocupación nazi. Se pondrá en contacto con su hermana, cuya personalidad y vida se encuentra en las antípodas de la suya, experimentando un viaje iniciático desde su voluntario aislamiento conventual hacia la comedida aceptación de los usos y costumbres sociales que co-mienza a descubrir.

A lo largo de la película se nos muestran conceptos cuya fron-tera se desdibuja y que ahora componen una realidad más acor-de con los personajes que los habitan, tales como la tolerancia, las normas de comportamiento, la fidelidad, la autenticidad de los

IdaPawel PawlikowskiGoya a la mejor película europea.Oscar a la película de habla no inglesa.

Idaprincipios o la traición. Ambas hermanas ostentan suficientes motivos para mante-ner sus propias convicciones a pesar de la diferencia abismal de sus caracteres: la elección inicial del ascetismo y la vida de renuncia de Anna contrasta notablemente con la amplia liberalidad y alternancia en las relaciones sociales de su hermana, cu-yas costumbres resultan difíciles de asu-mir para la recién arribada a la descono-cida urbe.

El descubrimiento del genuino senti-miento amoroso y el relato en ocasiones desesperado y otras veces pleno de ver-dad de su primogénita, arropado por las circunstancias personales y las vivencias narradas en torno a la difícil superviven-cia en su propio país tras la recuperación desde la posguerra, junto a la aparición e intervención de regímenes próximos a la autarquía, propiciaran el cuestionamiento de todo un sistema de valores que parecía

plenamente consolidado.Las dos actrices principales,

en un estado de gracia cons-tante, potencian sus respecti-vas e insólitas interpretaciones, con un elevado nivel actoral difícil de mantener en la gran pantalla en cada secuencia, al menos en la mayor parte de las producciones del momen-to, evocando en nuestra me-moria el recuerdo perenne de la mejor filmografía polaca de la época de Andrei Vajda, Zu-lawski o Zanussi, pero también de lo mejor de la cinematogra-fía nórdica clásica, como la del

sueco Ingmar Bergman o del danés Carl Theodore Dreyer.

JaViER GUtiÉRREZ

28 / dicieMBre 2014 ConventualAntena

En los relatos evangélicos el encuentro con Jesús Resucitado es siempre una ex-periencia de transformación. Los relatos de apariciones subrayan el cambio que se pro-duce en las personas tras el encuentro con el Resucitado. Por eso se indica siempre la situación inicial de esas personas: el miedo de los discípulos encerrados en el cenáculo (Jn 20,19), el desencanto de los de Emaús (Lc 24,21), la tristeza y las lágrimas de María Magdalena (Jn 20,11.13), la incredulidad de Tomás (Jn 20,25), el fracaso de la pesca in-

JUaN MiGUEL ViCENtE romaDesde la Palabra

Nuestro texto describe muy bien la transformación que se va a producir en el corazón de los dos discípulos: el paso de la tristeza a la alegría, que es a la vez un tránsito de la ignorancia al conocimiento. Al inicio del relato se subraya la tristeza de los discípulos (24,17) y sus esperanzas frustradas por la muerte de Jesús (24,21). Al final descubrirán, en cambio, que su corazón ardía (24,32) y volverán llenos de gozo a Jerusalén, para com-partir allí con los demás discípulos la buena noticia de la que han sido testigos (24,33). Esta es la primera transformación.

El texto describe también el paso de la ignorancia al cono-cimiento: al inicio los discípulos caminan con Jesús sin reco-nocerlo (24,16), y el relato alcanza su clímax cuando se abren los ojos de los discípulos y reconocen al Resucitado al compar-tir el pan (24,31). Este momento del reconocimiento coincide además con el paso de la tristeza a la alegría: los discípulos recobran el gozo de vivir porque reconocen al Resucitado. Este Jesús Resucitado que comparte el pan con los discípulos de Emaús ilustra, de un modo sorprendente e inesperado, que la comunión de vida entre él y los suyos ha sobrevivido a su muer-te. La “fracción del pan” que la comunidad cristiana comenzará a celebrar en seguida tiene la misma finalidad: celebrar la pre-sencia del Resucitado en la comunidad de sus discípulos.

El relato de Emaús sigue un esquema muy similar al de una liturgia. Y las dos partes de esa liturgia corresponden a las de una Eucaristía: una “liturgia de la Palabra”, en primer lugar, y una “liturgia del Pan” después. En la primera parte del relato, Jesús camina con los dos discípulos y les explica las Escritu-ras. A esa larga “liturgia de la Palabra”, celebrada y realizada durante el camino, sigue en la segunda parte de nuestro rela-to la “liturgia del Pan”: los protagonistas, sentados a la mesa, comparten el pan. Cristo Resucitado acompaña a los discípu-los por los caminos del mundo. Él sigue vivo y presente en la comunión fraterna, en la escucha de la Palabra y en la fracción del pan. Estos son los “lugares” en los que podemos percibir su presencia.

Camino de Emaús

La “fracción del pan” que la comunidad cristiana celebrará en seguida tiene la misma finalidad: celebrar la presencia del Resucitado en la comunidad de sus discípulos.

fructuosa de los discípulos durante la noche (Jn 21,3).

Una de las narraciones más sugestivas y elocuentes es, sin duda alguna, la aparición del Resucitado a los discípulos de Emaús (Lc 24,13-35). Esos dos discípulos que, tras los acontecimientos de la Pascua, abandonan Jerusalén y se dirigen a Emaús son una viva imagen del desencanto más profundo. Con la muerte de Jesús, todas sus expectativas, ilusiones y esperanzas se han venido abajo: “¡Nosotros esperábamos que iba a ser él el li-berador de Israel!” (24,21). Ahora todo parece irremediablemente perdido. Ésa fue la amarga experiencia de los discípulos en la tarde del Viernes Santo.

Pero la historia no ha acabado definitiva-mente con la piedra que selló la tumba en la que fue colocado el cuerpo del Crucificado.

Conventual Antena

Marzo 2015 / 29

Miradas

CÉsaR MaRCos

¿No os ha pasado estar de viaje lejos, ver a alguien y pensar: “¡Uy!, ese se parece a uno

que conozco, pero no puede ser”, y es que quizás llevan algo de él. Las palabras tienen rima, tal vez también las personas. Y diría más: ese “se da un aire”, dígase eco, aroma o guiño, también se da entre las historias. Por eso contaré algunos rela-tos no salvajes. Sencillas anécdotas que llevan algo de sal, de esa que da sabor. Relatos que no esperan premios, porque ya son Premium, son tan agraciados en sí mismos que son una riqueza.

Jaume Marsé vivía en la calle hasta que pasó a vivir en un piso de la Fundación Arrels. Explicó que “cuando vives en la calle, eres in-visible. La gente te ve en la calle, eres un sin-techo, no se preguntan de donde has salido, y la gente no nace en la calle”. Fue en el pro-grama “El convidat”, de TV3, donde el presen-

tador pasa un fin de semana como invitado acompañando a algún personaje famoso. En esta ocasión fue diferente, un representante de los que “acampan” entre nosotros. Casi al final dice: “¡Al menos, he vivido!”. ¡Ay, esa sed de vivir! ¿Sed o no sed?, esa es la cuestión. Me vienen rimas con “estuve en la calle y me acogiste” (Mt 25,35).

Nuria Carrera ha regresado de Sierra Leona, tras trabajar con Médicos Sin Fronteras en un centro de tratamiento de ébola. En el periódico La Vanguardia encontré su foto con el traje de protección abrazando a Ibrahim, un niño de 18 meses que llegó al hospital solo y con ébola. Se ha curado y eso es para celebrarlo. Todos los que la conocemos damos gracias también

por ella, por enfrentarse a los dragones y cui-dar la rosa, por ser como el Principito (que tan-to le gusta), que sin hacer ruido se acerca a otros mundos a los que nadie quiere ir, y los transforma y se transforma. En su gesto hay tanta belleza que ni Miguel Ángel en todo su esplendor podría esculpir. Será que prefiero más la esperanza que las piedades. Antiguas palabras se hacen reales, esa que dice “estuve enfermo y me abrazaste” (Mt 25,39).

Oriol Vall, que se ocupa de los recién naci-dos en un hospital de Barcelona, dice que el primer gesto humano es el abrazo. Y el escritor Eduardo Galeano añade una bonita reflexión: “Después de salir al mundo, al principio de sus días, los bebés manotean, como buscando a alguien. Otros médicos, que se ocupan de los ya vividos, dicen que los viejos, al fin de sus días, mueren queriendo alzar los brazos. Y así es la cosa, por muchas vueltas que le demos al asunto, y por muchas palabras que le ponga-mos. A eso, así de simple, se reduce todo: entre dos aleteos, sin más explicación, transcurre el viaje”. No solo curan las medicinas, que de ser tocados con compasión más de uno se ha cu-rado (Mt 20,34).

Carmen Martínez, 85 años, fue desahuciada de su piso en Vallecas tras avalar la deuda de su hijo. Se levantó una ola de solidaridad, por la que el Rayo Vallecano recaudó 21.000€euros para ayudarla, pero no acaba aquí la cosa. Como una cadena de favores, Carmen ha decidido ceder parte del dinero a un enfermo de origen nige-riano con cáncer para que puedan viajar a Es-paña sus hijos y acompañarle en la enfermedad. “Hacer cosas buenas es lo más bonito que hay, y más con los pobres”, dicen que añadió esta viu-da, y rima con “ella, en su pobreza, ha dado todo lo que tenía para vivir” (Mc 12,44).

“Premium”, dice la chaqueta de un hombre que amanece acurrucado mientras sale el sol para justos e injustos. Y aunque la vida nos su-surra “tú eres mi hijo amado”, ¿será que preferi-mos que la dignidad y el valor sea un mérito que conseguimos y no un regalo? Quizá él sabe que es Premium por ser. “Danos hoy nuestro pan de cada día”, el que nos hace vivir, el que nos hace vibrar. Dánosle hoy envuelto en Buenas Noticias. ¡Todos somos Premium!

Rimas asonantes

30 / Marzo 2015 ConventualAntena

me en el corazón. El hori-zonte parecía cerrarse. La desesperanza y la tristeza se apoderaban de mí has-ta sentir que morían los deseos más verdaderos.

Gritaba a Dios, pero ha-bía momentos en que solo experimentaba el silencio.

Hasta que un día, a los 18 años, irrumpió en mi vida; puso ante mis ojos la verda-dera Vida, la realidad más bella que ha-bía visto nunca. Dios, en su maravillosa providencia, se las ingenió para llevarme al monasterio de las clarisas de Lerma, en Burgos, que después de muchos años es ahora el Instituto Iesu Communio. Vi mujeres consagradas, radiantes, felices por haber recibido un don tan inmenso.

Jamás me había planteado la vocación, pero, al tenerlas delante, aunque no me atrevía ni a soñarlo, se me hizo evidente lo que había estado buscando siempre sin saberlo. Todo aquello por lo que clamaba mi corazón con tanta fuerza se escondía en esos rostros, detrás de unas rejas. Me sobrepasaba, no entendía nada, era un don absolutamente desbordante, pero lo deseaba con todo mi corazón. No sé ni cómo me atreví a pedirlo, pero se me concedió entrar, después de un discernimiento y ¡han pasado ya 15 años!

He sido y soy inmensamente feliz, y no puedo más que dar gracias a Dios por todo el bien que ha derramado en mí y en mi comunidad, el mayor regalo que he recibido. He experimentado que solo en Jesucristo y en la Iglesia está la Vida, la plenitud; solo en Él está el descanso del corazón, la madurez; solo Él explica la vida.

Nuestro único deseo es amar a Jesús, vivir una relación esponsal con Él y, en comunión, entregarnos para que nin-guno de sus hijos se pierda. Rogad por nosotras, para que perseveremos hasta el fin, dando la vida, en este carisma y en la Iglesia Madre de quien hemos recibido todo.

¿Por qué a mí, poverella? ¡Por puro amor! No hay más explicaciones.

Así de sencillo es resumir la historia de mi vida.

Recibí la fe de mis abuelos y fue cre-ciendo en el colegio San Buenaventura de Madrid, donde estudié. La presen-cia de Jesús me acompañó y sostuvo siempre, de una forma muy sencilla, y sin saber cómo me fue enamorando. Participaba activamente en la Eucaristía, en el coro, en los grupos de catequesis y de oración, en Jufra, en las convivencias, en todo lo que oliera a Dios. Se me hacía irresistible, creía que a todo el mundo le pasaba lo mismo, no me daba cuenta de lo especialísimo que Jesús era para mí.

Vivía como una joven normal, salía con mis amigos, iba de fiesta. Intentaba entregarme a todo lo que se me ofrecía, rozan-do demasiados límites, pero siempre me sentía defraudada. Eso me hacía perder dignidad como persona, como mujer. La amis-tad, el amor limpio, los sueños de niña se desvanecían. Aun así,

Hna. Sión “Solo en Jesús y

en la Iglesia está

la plenitud”

seguía en la parroquia y me rompía por mi falta de coherencia, por no encontrar algo que verdaderamente diera sentido a mi vida, algo por lo que mereciera la pena entregarse entera.

Hacía voluntariado con discapacitados psíquicos, y fue una experiencia maravillosa. Me habían inculcado desde niña que “hay más dicha en dar que en recibir” (Hch 20, 35), y pude com-probarlo. En realidad, recibía infinitamente más de lo que podía dar. Me sentía profundamente amada, aceptada por lo que era, nadie exigía de mí nada diferente.

Disfrutaba lo indecible, pero a la vez tenía un sentimiento de impotencia enorme. No podía llegar hasta las heridas hon-das de su corazón, y eso ponía de manifiesto mi incapacidad para llegar al fondo de mí misma. Se abría un abismo de do-lor profundo, de soledad, de incomprensión, y se me hacía infranqueable, aunque lo deseara con todas mis fuerzas. Era muy sensible al sufrimiento, quería ser médico para ir a las misiones, pero esa impotencia para llegar a los demás me hizo perder la ilusión. Mi vida también decaía, sentía un peso enor-

en primera persona

Domicilia tu aportación o envía tus donativos mediante giro postal, talón bancario o transferencia a:caja Madrid: ES07 2038 1879 1060 0005 2726caixa catalunya: ES92 2013 0016 6202 0073 0337

Jornadas de Animación MisioneraMisiones Franciscanas Conventuales

Cuentan contigo

Y recuerda que tu aportación puede ser desgravada en la declaración de la renta de las personas físicas (Ley 49/2002 de 23 de diciembre).

Para más información, ponte en contacto con:Fr. Jordi alcaraz cuencac./ echavacoiz, 2c - 31009 PaMPLoNa tel.: 948 25 37 17 e-mail: [email protected]