“Hoy el maestro de Emaús se acerca, toma la iniciativa, camina y acompaña, interroga y escucha, corrige e ilumina, evoca, explica y actualiza las Escrituras. Se hace

invitar a quedarse para permanecer con ellos, se sienta a la mesa y comparte, toma el pan y

bendice y se manifiesta y hace regresar no a la ciudad del

rechazo, del odio y de la muerte sino a la ciudad que revela y hace presente al otro, a la ciudad de la

misericordia, a la Bogotá Sin Indiferencia ”.

“que una cosa es la ciencia y otra son los saberes, y que la academia ciertamente es la casa de la ciencia pero al mismo tiempo tiene que ser el templo de la sabiduría, que la ciencia nos pone a nosotros en el camino de aclarar los objetos del conocimientoobjetos del conocimiento, que la ciencia

trabaja especialmente con los métodos, que los métodos son los métodos propios de las Ciencias Naturales, de las Ciencias Sociales y de las Ciencias Humanísticas y que los métodos y las ciencias son los que tienen que entrar en coincidencia con el Plan de Dios, que es un plan no

ajeno a las ciencias, nunca opuesto a las ciencias, sino que es convergente con ellas.

La modernidad termina si es que está terminando en esta tarda modernidad,

termina con un gran déficit de sentido de la vida, termina con un gran déficit de

sabiduría porque la escuela, la universidad no necesariamente nos

enseña a ser, no necesariamente nos enseña a ser libres, a ser en comunidad.

no necesariamente nos enseña a leer más allá de los textos que nos ofrece tan estrechos, no nos enseña a leer lo que hay que leer en la totalidad del

texto de la existencia, no nos enseña sobre todo a interpretar

tal vez nos enseña a leer en las estreches de textos pero no nos enseña realmente esa

forma de leer, de saber interpretar o no nos enseña por ejemplo toda la escritura

que no es simplemente la escritura esa usual, sino todo el asunto de la expresión humana como el escribir y el

escribirnos personal y colectivamente, son todos los saberes que ha puesto tan de manifiesto una persona como

Jean Francois Lyotar.

El hombre y la mujer no podemos ser simplemente repetidores de las cosas, de los elementos objetivos de afuera sino constructores

responsables de los conocimientos, de la dialéctica permanente del conocimiento y eso me parece que es lo que lleva a poner en el pedestal

que merece el sujeto productor de conocimiento.el sujeto productor de conocimiento.

para que la escuela nunca piense que ella es simplemente una transmisora objetiva de cosas

dadas, sino que es el taller permanente donde se crea, se recrea, se elabora y se reelabora

permanentemente el conocimiento

para salir de esas escuelas terriblemente fastidiosas que nunca innovan, nunca recrean, nunca reelaboran, nunca reformulan, nunca retrabajan,

nunca replantean, sino esos libros, lo mismo que se ha dicho en los libros de hace un año es lo mismo que se repite en los libros del otro año, pero

es una escuela que no acompaña realmente el proceso creativo de la gente.

... pero enseñanza religiosa qué cosa es, sino precisamente enseñar la condición humana porque el problema es que esa condición humana, se

enseña de todo menos el asunto de esa condición humana y hoy la urgencia no es tanto que el químico sea químico, sino que sea sea

verdaderamente humanoverdaderamente humano...

... el problema es que nosotros hemos educado especialmente en los asuntos de la intelección

pero no en los asuntos de la comprensión..

Los alemanes especialmente son los que distinguen muy bien el aclarar teóricamente datos, aclarar teóricamente teoremas, aclarar

teóricamente biologías o químicas, o físicas, aclarar teóricamente lo que sucede

fuera de mi pero otro asunto es el comprenderme con relación a unos

datos que yo tengo de biología.

El asunto no es que usted entienda la biología sino que usted se perciba como ser vivo, eso es lo que importa. El asunto no es que usted entienda matemática, el asunto es que usted se perciba como ser

corpóreo, como res extensa como decía el filósofo, eso lo fundamental, lo fundamental es que usted se perciba así mismo como peso y medida

eso es lo fundamental los otros son datos externos.

El asunto no es que yo me perciba unos datos religiosos, el asunto es que usted se perciba con relación al dato religioso, con relación al Evangelio. El asunto es ese. El asunto no es que Jesús deba ser

entendido, El no quiere ser entendido lo que quiere es ser El no quiere ser entendido lo que quiere es ser comprendidocomprendido.

La comprensión ciertamente es la realidad de un sujeto que está ahí en el mundo, en la

historia, en la finitud, en la durabilidad, el sujeto real que es el que hay que educar, que

es el que hay que acompañar en todas sus circunstancias reales ahí, el ser ahíel ser ahí que

decía Heidegger, ese es el primer elemento de la comprensión

un sujeto necesariamente un sujeto necesariamente interroga por el sentidointerroga por el sentido, no interroga tanto por la verdad, la

verdad es siempre con relación a los objetos externos, claro que

también interroga por la verdad, pero hoy fundamentalmente hoy fundamentalmente interroga por el sentidointerroga por el sentido, cuál

es el sentido de mi existencia, cuál es el sentido de la temporalizad,

cuál es el sentido del mundo y de la historia, cuál es el sentido de mi finitud y de mi culpabilidad, cuál es el sentido de mi patología y de

mi morir, esos son los grandes interrogantes de la comprensión

y la respuesta no puede ser simplemente las verdades externas sino el acompañamientoacompañamiento en la dación de sentido al sujeto que interroga por el

sentido y hoy lo hemos dicho en todas partes la humanidad se va completamente cansado de ese cúmulo de verdades, de ese piélago de verdades que nosotros los maestros damos, verdades por todas partes,

pero que son verdades que no responden a los grandes interrogantes del sujeto.

Si yo le abro a la niña los horizontes de la religión y de la escritura no es

para que se aprenda datos religiosos, no es para que se aprenda fórmulas

religiosas, ni siquiera plegarias religiosa, sino que le abro la grande visión religiosa, bíblica y cristiana

para que sea un instrumento que le ayude a encontrar el sentido de su propia existencia, es ahí donde me

parece que se da el verdadero proceso educativo, esa es

verdaderamente la educación, lo otro es como dice Morin simplemente la

visión de doctrinas, simplemente indoctrinamiento, simplemente

meterle en la cabeza unos datos objetivos sea que sirvan o que no

sirvan.

Es que el haber convertido simplemente el Evangelio en doctrina es lo que nos ha hecho tanto mal y lo que nos

imposibilita tanto un verdadero proceso de educación de los sujetos.

Claro, ahora, una educación que se haga desde la contextualidadcontextualidad usando la textualidadtextualidad para la lectura del contexto, es lo que lo lleva a uno

necesariamente a esos pretextospretextos que acabo de decir, los pretextos de justicia, los pretextos de paz, los pretextos de intersubjetividad, de diálogo,

de encuentro y ese amarre que normalmente hemos propuesto siempre entre el sujeto que se llama un contexto, el textoun contexto, el texto al cual estamos

referidos y el pretexto de amor, de justicia, de derecho, que es la finalidad del comprender.

Ese me parece que es el Ese me parece que es el asunto de una asunto de una

verdadera pastoral verdadera pastoral educativa académica: el educativa académica: el acompañamientoacompañamiento de las

personas adolescentes, niños, jóvenes, que están en estado de interrogación en la escuela, ese me parece que

es el asunto, el acompañamiento. Y este

acompañamiento es el que decimos mira, esto muchas veces no lo da la familia, no lo da la parroquia, hay que hacerlo es en la escuela

que es el momento en el cual se perciben los grandes

interrogantes, las grandes preguntas por el ser, por el acontecer,

por la ciencia.

Los maestros todos tenemos que estar en este momento en un estado de crecimiento enorme porque claro que bien lo sabemos la escuela no es la escuela no es todo, pero sin la escuela la nación no se levantatodo, pero sin la escuela la nación no se levanta, , la nación no se encamina por un rumbo diferente a esto que hemos conocido tan terrible,

tan espantoso, tan frustrante en la existencia colombiana

la escuela tiene que enseñar nuevamente horizontes distintos y claro pues es la

capacidad que nosotros tengamos de hacerlo, esto por mas directrices que nos de el

Ministerio, por mas directrices que nos de la Conferencia Episcopal Colombiana benemérita,

por más directrices que nos den las cosas cambian. Eso nos toca a los colectivos de

maestros y de maestras en nuestros planteles educativos, querer hacer las cosas, enseñar, aventurarnos osadamente a ensayar

lo que no se ha hecho.

porque es más fácil quedarse en lo que ya sabemos, usted vaya dicte su clase, y listo, usted vaya más o menos de la

clase de Catequesis y ya, enseñe unos datos acerca de Jesús y una Parábola y

póngale a eso estrellitas y dibujitos animados y cosas de esas y ya, pero hoy lo que se nos reclama es esta esta

responsabilidad de fondoresponsabilidad de fondo que a mi si me parece que toca la esencia de la academia es que es la esencia de la

academia, la razón la epistemología, las ciencias, los saberes, las asignaturas, la

correlación de los textos con los contextos de vida y con los pretextos de

liberación, de justicia y de paz”.