influencia de la relación médico paciente en el desarrollo...
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ESCUELA NACIONAL DE SALUD PBLICA
MAESTRA EN EDUCACIN MDICA
Influencia de la Relacin Mdico Paciente en el desarrollo de los
valores tico-profesionales de los estudiantes del Programa Nacional de Formacin de Medicina Integral Comunitaria.
Municipio Caron. Estado Bolvar. 2006.
Autor: Ariel Caldern Rodrguez
Especialista de Primer Grado en Medicina General Integral. Master en Psiquiatra Social.
Tutora: Maritza Alonso Gonzlez. Especialista de Segundo Grado en Histologa.
Profesora Auxiliar. Master en Ciencias de la Educacin Superior
TRABAJO PARA OPTAR POR EL TTULO DE MASTER EN EDUCACIN MDICA
Repblica Bolivariana de Venezuela
2007
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Dedico este trabajo a:
A mis Padres
Por su amor infinito y constituir mi apoyo y el mejor ejemplo de humanismo,
responsabilidad y solidaridad que conozco.
A mi familia,
Porque ilumina mi vida y da valor a lo que quiero.
A todos los mdicos de Barrio Adentro,
Porque con su incalculable esfuerzo han devenido en Brillantes Profesores.
A ti, Juana Duarte,
Por regalarme ese bello Milagro.
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AGRADECIMIENTOS
Agradezco a todos aquellos que han hecho posible la realizacin de este trabajo.
A mis queridos Profesores de la Maestra por ensearme tantas cosas valiosas,
por su dedicacin, esfuerzo y excelente preparacin.
A todos los estudiantes y profesores que contribuyeron con su precioso aporte,
tiempo y entrega para que esta investigacin se llevara a cabo.
A todos mis amigos y compaeros de trabajo, que han confiado en mi y me han
ayudado con su incondicional apoyo.
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La solidaridad se aprende a travs del contacto ms que de nociones
Juan Pablo II
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RESUMEN
Se realiz un estudio que responde a un proyecto de investigacin en el rea de
la enseanza de pregrado y tuvo la intencin de caracterizar la influencia de la relacin
mdico-paciente en el consultorio popular en el desarrollo de los valores tico-
profesionales de los estudiantes que cursan la asignatura de Morfofisiologa Humana III
del Programa Nacional de Formacin de Medicina Integral Comunitaria en el rea de
Salud Integral Comunitaria UD 291 del municipio Caron, estado Bolvar, entre los
meses de marzo a diciembre de 2006.
El desarrollo de la investigacin tuvo en cuenta modelos de investigacin
cuantitativos y cualitativos, considerando un sistema de mtodos integrados por,
mtodos tericos, mtodos empricos y procedimiento estadstico.
El universo de estudio estuvo integrado por los 36 estudiantes y los 23
profesores que formaban parte de dicha ASIC, se les aplic un cuestionario a cada
grupo, ambos compuestos por 6 y 8 preguntas cerradas respectivamente y una
entrevista a informantes clave constituidos por lderes estudiantiles.
La aplicacin de los anteriores mtodos permiti caracterizar la relacin mdico-
paciente en el contexto de la prctica docente de la asignatura Morfofisiologa Humana
III la cual result ser comprensiva, afectuosa, tolerante, amable, de confianza,
seguridad, y de respeto, con una empata y comunicacin establecida valorada de
excelente que cumpli sus tres funciones, de manera que todos los estudiantes
percibieron a sus profesores como ejemplos para su formacin tico-profesional y la
mayora de los profesores reconocieron la influencia que tiene la Relacin Mdico
Paciente que establecen en la formacin de sus estudiantes. Casi todos los profesores
identificaron un desarrollo ostensible en la formacin tico-profesional de los
estudiantes, siendo los valores humanismo y solidaridad los mas percibidos en ellos
desde que estn vinculados al Programa al mismo tiempo que estos ltimos tuvieron
una autopercepcin elevada de este desarrollo. No result de igual modo con el valor
responsabilidad que obtuvo niveles ms bajos de percepcin y desarrollo.
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NDICE
Introduccin 1
Marco Terico 7
Glosario 39
Objetivos 41
Diseo Metodolgico 42
Anlisis y Discusin de los Resultados 51
Conclusiones 77
Recomendaciones 78
Referencias Bibliogrficas 79
Anexos
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INTRODUCCIN
Las condiciones actuales de la Repblica Bolivariana de Venezuela han
constituido para la Educacin Superior un importante encargo social a lo cual ha
respondido con el Programa Nacional de Formacin de Medicina Integral Comunitaria
(PNFMIC) que parece pertinente, oportuno y eficaz, valorado por la necesidad
imperante de crear un recurso humano capaz de enfrentar las exigencias de atencin
mdica de la sociedad y aceptar los nuevos retos en la formacin universitaria a que se
exponen por la urgencia de la demanda y la calidad con que se requiere.
La formacin del estudiante de medicina en la mayora de los pases del mundo
responde a un viejo y tradicional concepto de preparacin tras los muros de la vieja
universidad, lo cual diferencia sustancialmente al PNFMIC por la vinculacin de sus
estudiantes a los escenarios profesionales desde sus comienzos. Este Programa se
inici la tarde del lunes 3 de octubre de 2005 cuando el presidente Hugo Chvez Fras
hizo su lanzamiento estando conciente de que estaba llevando a cabo un evento que
marcara la historia en la Repblica Bolivariana de Venezuela pues veinte mil
estudiantes venezolanos, otrora excluidos de la Educacin Superior ya estaban listos
para iniciar sus estudios de medicina con una visin integral y humanista del hombre,
con carcter preventivo que dejara atrs los paradigmas mercantilistas que por aos ha
contaminado a algunos sectores de esta noble profesin, sin desestimar su preparacin
para reparar la salud daada.
El mandatario nacional de Venezuela afirm en aquel acto: porque es uno de
esos das en que arranca, se evidencia con luminosidad extraordinaria y fuerza
gigantesca lo que significa una revolucin; los cambios que va inyectando y generando
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una revolucin, cambios histricos que impactan poderosamente a una sociedad, a un
mundo, a un tiempo, a una poca. Hoy arranca este programa masivo y de gran calidad
de formacin de una nueva oleada de mdicos y mdicas para Venezuela. Este es un
gran da en la historia venezolana (1)
De este modo comenz el PNFMIC en toda la Repblica Bolivariana de
Venezuela sin excluir al estado Bolvar donde ha estado presente por el nmero de
estudiantes incorporados al mismo. El municipio Caron, es el municipio ms
industrializado y habitado del estado, se caracteriza por una matrcula en el PNFMIC
superior a la del resto de los municipios. Profesores y estudiantes participan de los
mismos escenarios asistenciales donde adems se desarrolla el proceso docente y se
produce una transformacin gradual de los estudiantes, que tiene sus antecedentes
inmediatos en el desarrollo que ha alcanzado Cuba en materia de formacin de
recursos humanos en este campo. La experiencia y el ideario de ilustres personalidades
cubanas como Enrique Jos Varona, Jos de la Luz y Caballero, Flix Varela y los
maestros por excelencia de todos los tiempos: el insigne Comandante en Jefe Fidel
Castro y Jos Mart que se han destacado por su brillantez pedaggica y han dado
merecido reconocimiento en los tiempos actuales a la educacin cubana. Por su
influencia no puede dejar de mencionarse como ejemplo de mdico solidario e
internacionalista a Ernesto Che Guevara, que sin ser cubano est inseparablemente
unido a su historia. Todos ellos quedan fusionados en un paradigma de valores, entrega
y enseanza.
En Cuba se localizan un gran nmero de trabajos de meritoria importancia que
abordan temticas relacionadas.
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Entre los antecedentes de esta investigacin se encuentra la desarrollada por los
Doctores Radams Borroto y Reinoso, (2) llevada a cabo durante los aos 1989 y 1990
que estuvo dirigida a obtener la percepcin sobre la imagen ideal y real de la Relacin
Mdico Paciente (RMP) de distintos grupos, Los autores definieron como posiciones de
avanzada en cuanto a la percepcin de la RMP los conceptos que recogan una postura
armnica con el desarrollo de una nueva relacin mas pertinente a las necesidades de
la prctica mdica. Estas posiciones de avanzada constituyen la base inicial para el
desarrollo de un nuevo paradigma en la RMP.
Otra de las importantes investigaciones es la de la Doctora Maritza Alonso
Gonzlez y Oksana Kraftchenko Beoto,(3)quienes abordan la comunicacin mdico
paciente como parte de la formacin tico profesional de los estudiantes, partiendo que
la comunicacin es la base de cualquier relacin humana y que en esta se incluye la
RMP y fundamentan la necesidad de una adecuada comunicacin mdico-paciente
centrada en la funcin afectiva, para el logro de una asistencia mdica de calidad y
aporta que existe una contribucin limitada del proceso docente con el logro de una
comunicacin mdico-paciente adecuada en los estudiantes, lo que se considera
asociado a una insuficiente formacin tico-profesional.
De igual modo Maritza Alonso Gonzlez, y colaboradores (4) en otro trabajo
proponen un sistema de habilidades comunicativas que se definieron para el
cumplimiento de las funciones de la comunicacin, en la RMP, a partir de la
identificacin de la necesidad del desarrollo de dichas funciones.
El trabajo de Seijo Echevarra, Cardoso Prez, lvarez Vzquez, Valle Snchez,
y Muoz Rodrguez (5) igualmente resulta interesante para este estudio ya que estos
autores con el propsito de diagnosticar la interiorizacin de los valores ticos
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profesionales a los alumnos de medicina determinaron el Sistema de Valores ticos de
la profesin mdica en Camagey.
Otro estudio que merece mencin es el de Carmen Alonso Montes de Oca,
Jacqueline Legaoa Alonso, Maitee Lage Ugarte y Alberto Bujardon Mendoza(6) en el
que realizan una valoracin sobre como influir el sistema de valores tico-morales en
la futura profesin mdica de sus alumnos.
Igualmente result valioso el trabajo de Mercedes Hernndez Gonzlez, Norma
Iglesias Morell, Blanca Seijo Echevarra, Carmen Rosa Hidalgo Garca, (7) pues aborda
la importante temtica de la preparacin pedaggica de los profesionales de la salud
cuando inician su funcin docente, para alejarse de una gestin emprica sustentada
fundamentalmente en la experiencia y asumir esa preparacin posterior puede
contribuir a fortalecer a la imagen positiva del profesor.
Los trabajos referidos en prrafos anteriores han servido de referente terico y
antecedentes para el estudio que se presenta en relacin con la temtica de la
formacin de valores en la relacin mdico paciente, objeto de estudio de la
investigacin que se defiende.
Un nuevo escenario el consultorio popular de Barrio Adentro, sirve de espacio
docente para la formacin de los estudiantes de medicina y para el desarrollo de
valores tico profesionales ya que en el mismo se relacionan el alumno, el profesor y
los pacientes y sirve de base para la accin en otros escenarios que se encuentran
enclavados en la comunidad.
Resulta totalmente novedoso el diseo que se aplica en PNFMIC donde cada
profesor acta con sus estudiantes en diferentes escenarios docentes, como el aula
multipropsito, el Centro de Diagnstico Integral Comunitario, la Sala de Rehabilitacin
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Integral y el Consultorio Popular. En el caso del Consultorio Popular este se erige como
el escenario docente donde confluyen y permanecen por ms tiempo en contacto
profesor, alumno y paciente. La conducta del profesor y la relacin que establece con
sus pacientes influye sobre la formacin del estudiante, donde este generalmente
asume las normas conductuales de sus profesores (7).
A travs del anlisis del informe trimestral de ncleos docentes del municipio
Caron y en particular del rea de Salud Integral Comunitaria (ASIC) UD 291 se ha
evidencia como se ha debatido el tema de la influencia de la relacin mdico paciente
en la formacin de valores tico profesionales, y en esos anlisis se hace un especial
nfasis en la imagen que ofrece el profesor cuando trata a sus pacientes, la forma en
que se comunica con ellos y en la importancia que esto tiene para el alumno que se
est formando a su semejanza, apreciando estas relaciones.
La importancia terica, prctica y social del presente estudio se evidencia en la
relevancia que se le confiere a las caractersticas de la relacin mdico paciente en la
formacin de valores tico profesionales en los estudiantes y que resulta un referente
terico importante para la accin y posterior perfeccionamiento del Programa que sirve
de marco a la formacin del nuevo mdico venezolano, que necesita ser educado en
principios solidarios, humanos y responsables para que finalmente responda al encargo
social que dio origen a este programa.
La novedad de este trabajo radica en que ser caracterizada por vez primera la
influencia que tiene la relacin que establece el profesor con sus pacientes en el
Consultorio Popular de Barrio Adentro en la formacin de valores tico-profesional en
los estudiantes de la ASIC UD 291 del municipio Caron, estado Bolvar.
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A partir de los argumentos antes expresados se plantea el siguiente problema
cientfico que distingue a la investigacin que se presenta y que se relaciona con el
hecho de que en el rea Salud Integral Comunitaria UD 291 del Municipio Caron en el
Estado Bolvar no se conoce cmo ha influido la relacin mdico-paciente que tiene
lugar en el consultorio popular en el desarrollo de los valores ticoprofesionales de los
estudiantes que cursan la asignatura de Morfofisiologa Humana III del Programa
Nacional de Formacin de Medicina Integral Comunitaria, a partir de un estudio
cientficamente argumentado.
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MARCO TERICO
La relacin mdico paciente es el pilar sobre el que descansa el nivel de
satisfaccin de la atencin mdica. (8) La misma ha sido considerada por muchos
autores como Crawshaw (9) el acto central de la actividad clnica y el escenario principal
de la medicina. Se comparte con este autor el criterio de que el acto mdico se
fundamenta en un acuerdo de familiaridad, amistad y confianza que exige al profesional
a ser competente y estar al servicio del bienestar de sus pacientes, sin embargo, este
convenio est amenazado por la creciente legitimacin social de intereses individuales
materiales, aunado a la presin de organizaciones de salud con nimo de lucro, que
han acrecentado en el mdico el rol de agente comercial, en pases capitalistas. Ello ha
contribuido a distorsionar la responsabilidad que tiene el mdico frente a su paciente
como dispensador de cuidado, apoyo y curacin en la salud y la enfermedad.
Obviamente que este criterio es relativo solamente a la realidad capitalista del mundo
contemporneo que utiliza, en gran medida, a la medicina como medio de lucro o
mercanca. (9)
Salomn(10) refiere que la gnesis de la capacidad para una actitud tica personal
y profesional data desde los albores mismos de la humanidad y presupone
responsabilidades, de este modo se establece una situacin paralela entre el mdico y
el paciente que estn en un contexto de asociacin, mutualidad, subjetividad
compartida e influencia recproca.(10) El autor de este trabajo tambin sostiene este
criterio ya que a travs de la experiencia se ha constatado que, en efecto, este tipo de
relacin pese a sus peculiaridades se enmarca en un tipo de intercambio tanto
cognoscitivo como afectivo, es un intercambio especial, una oportunidad nica de
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mostrar el verdadero lado humano de un personal altamente calificado que prefiere
ayudar a los dems con los conocimientos y habilidades adquiridas, queda en manos
del mdico la gran responsabilidad de llevar hasta un clmax una relacin de calidad
que es mutuamente interactiva.
Cabe pensar que esta relacin, como todo proceso en el cual se ha involucrado
el hombre ha tenido una evolucin histrica con la consecuente riqueza de
antecedentes y dismiles de condiciones que han condicionado devenir as como sus
caractersticas. En un artculo del Doctor Ricardo Gonzlez se puede apreciar como las
condiciones en que se desarrolla actualmente a nivel mundial la relacin mdico
paciente (RMP), son sustancialmente diferentes a las que sirvieron de marco a las
establecidas por el mdico de familia de fines del siglo XIX y principios del XX, poca
que se caracteriz por el desarrollo del humanismo, la espiritualidad y la tica en el
ejercicio de la medicina. (11)
El profesional de esos das se senta cada vez mas involucrado con la salud de
sus pacientes ya que la valoracin integral de los enfermos se facilitaba por el alto
caudal de interacciones personales implcito en la vida en pequeas comunidades, y las
gratificaciones morales derivadas de la satisfaccin del deber cumplido, determinaban
en el profesional un notable reforzamiento de su espiritualidad. (12)
Nez de Villavicencio comenta al respecto que los vnculos cognitivo-afectivos
establecidos entre el mdico de familia de entonces y sus pacientes, familiares y
usuarios sanos, eran recprocamente reforzados en la praxis cotidiana gracias a una
comunicacin que flua naturalmente de la convivencia en pequeos poblados, donde el
mdico sin proponrselo alcanzaba un status social con un profundo respeto,
admiracin y gratitud de sus usuarios que como miembros de la comunidad le
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otorgaban un rango similar al del maestro, el sacerdote y el alcalde, o sea que el
mdico gozaba de un status y desempeaba determinado rol en aquella sociedad de
otrora (13) Algo similar se percibe en estos momentos en la hermana Repblica
Bolivariana de Venezuela a travs de los mdicos cubanos de Barrio Adentro los cuales
son admirados por el pueblo lo cual ha sido la piedra angular para la implementacin
del PNFMIC que se propone la entrega a la sociedad venezolana de un mdico a la
imagen del que hoy le brinda sus servicios en Barrio Adentro. (1)
Con la llegada de la industrializacin y la consecuente migracin hacia las
grandes ciudades, el incremento sbito de la tecnificacin y la centralizacin de los
servicios mdicos, propiciaron que se al alejara el facultativo y sus usuarios y se
comenzara a subvalorar los recursos interpersonales y a enfatizar los aportados por una
tecnologa mal incorporada que opac significativamente los profundos fundamentos
humansticos del ejercicio mdico. Se produjo as, un trgico viraje donde la luna de
miel entre facultativo y usuarios devino luna de hiel, cambio trgico que matiz la
sombra etapa tecnicista donde se manifest la primera gran crisis humanstica en la
medicina moderna. (14)
Retrocediendo en el tiempo y de cara al resto del mundo Lan Entralgo (15)
comenta que la relacin mdico paciente histricamente en tensin entr en su crisis
ms evidente y profunda con la Modernidad, que cubri el perodo transcurrido entre los
siglos XV y XIX, del Renacimiento al Positivismo, la misma ha sido caracterizada por las
transformaciones revolucionarias que se dieron en los todos los ordenes de la vida
social dados tres elementos esenciales: la secularizacin de la vida civil, el poder del
desarrollo cientfico y tecnolgico y la transformacin poltica de los estados que
desembocaron en la revolucin industrial.(16) Sin embargo, en la Europa de finales del
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siglo XIX, a pesar de tantas revoluciones, las condiciones humanas de grandes masas
de poblacin era pauprrima y el desarrollo industrial y econmico lejos de permitirle
superar al individuo comn su condicin de pobreza, ignorancia y dependencia, las
acrecentaba(16), con ello queda demostrado, segn criterios del autor, que una
Formacin Socio-Econmica y Poltica determinada participa en el proceso de relacin
que se establece entre mdicos y pacientes y esta afirmacin tiene una expresin mas
acentuada en la realidad de los tiempos actuales, lo cual se observar mas adelante
cuando se analice en mas detalle la influencia del neoliberalismo en ella.
El presente siglo presenta un cuadro heterogneo en cuanto a las polticas de
salud adoptadas de manera individual en cada pas pero de manera general el
neoliberalismo marca la pauta en la mayora de los pases del mundo donde los
avasallantes adelantos cientficos y tecnolgicos han llevado a la especializacin y
super especializacin del mdico. Incapaz de manejar tan abrumadora informacin,
delimita su accionar en "partes" de ese gran todo que es el hombre, deshumanizando el
acto mdico. En igual contexto, el paciente, con acceso creciente a la informacin a
travs de los distintos medios de comunicacin participa y/o cuestiona sobre decisiones
clnicas, expresando su insatisfaccin si del producto del acto mdico no surgen
siempre exmenes complementarios y/o indicaciones farmacolgicas.(16)
El sistema de globalizacin econmico-industrial, con el creciente aumento de las
"empresas de salud" han llevado a la insercin del profesional en ese sistema que
regula y limita su accionar En el polo opuesto de la relacin, el paciente experimenta
este conflicto en la limitacin que ofrece la obra social, prepaga o sistema mdico sea
pblico o privado en la eleccin del profesional a quien confiar el cuidado de su salud,
as como a la restriccin drstica de estudios o teraputicas oportunas.
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Desgraciadamente en un marco de descontento, desconfianza y presiones externas se
desenvuelve hoy la RMP en estos pases dominados por el neoliberalismo. (16)
Oyarzn(17) comenta como la mirada al paciente como objeto, su trato
cosificado, deshumaniza y esta es la esencia de la crisis actual de la relacin mdico
paciente. El trmino deshumanizacin seala el deterioro de los valores y atributos en la
actitud y trato deseables en el sistema de salud. Deshumanizacin es des-
personalizacin. Dicha des-personalizacin de la medicina se ha explicado como un
producto del desarrollo cientfico y tecnolgico, que al impulsar un pensamiento
racionalista con una actitud operativa y eficiente, reduce la relacin mdico paciente a
una interaccin tcnica instrumental, en ello ha sido determinante, la aplicacin de
polticas neoliberales en la estructura de los sistemas de salud (17) O sea que el grado
de relacin queda reducido o expresado para este autor como una despersonalizacin
por lo inhumano que tienen lugar los estrechos nexos que deben existir entre el
paciente y el mdico para que la medicina ocupe su lugar humano y de preferencia por
el bienestar, hecho que se contradice en si mismo cuando se analiza la finalidad y el
campo de accin de la medicina, toda la riqueza de una relacin que puede llegar a ser,
incluso, espiritual queda encuadrada en algo fro e instrumental.
Segn Falasco(18) el temor al juicio de mala praxis, en la sociedad capitalista,
fomentado por abogados al acecho, tecnifica an ms la relacin, la encarece, a veces
con solicitudes exageradas, repetitivas y otras con conductas irracionales o
desmedidas. Sin embargo, muchos de estos juicios no responden a un mal desempeo
tcnico profesional, sino a una RMP no satisfecha. (18) y en lo particular el autor
comparte esta opinin pues, a menos que haya sido muy malo el desempeo de un
galeno si este acta con cario y dedicacin con su paciente, ste quedar
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comprometido afectivamente con su mdico y evitara una querella legal por tal de
proteger a su mdico amigo.
Segn Pellegrino al hablar de la relacin mdico-paciente se est enfocando a la
medicina desde un especial tipo de relacin humana: en la naturaleza del encuentro
entre el mdico y el paciente.(19)Coincidiendo con Kunyk y Olson quienes adems
sealan que en esta intimidad han sido reveladas diferentes conceptualizaciones de
empata, y dentro de ellas, la empata como trato humano y la profesional son las que
ms se ponen de manifiesto en la relacin mdico-paciente. (20)
El autor coincide con Zyzansk (21) y colaboradores quienes sostienen que la
comunicacin eficaz mdico-paciente tambin se relaciona positivamente con la calidad
de la atencin, la satisfaccin de los pacientes y mdicos y los resultados de salud. Esto
guarda relacin con un estudio en el que se comprob que los mdicos con mejor
comunicacin centrada en el paciente, solicitaron menos pruebas complementarias y
estos ltimos perciban una mejora de su salud mucho ms inmediata. (22)
Aunque en cada cultura ha tenido diferentes modalidades y manifestaciones, el
rasgo esencial de la relacin mdico paciente es el encuentro entre el que busca ayuda
y el que puede proporcionrsela (23) Las acciones especficamente mdicas son
diagnosticar, pronosticar y tratar, (24) cada una de ellas es compleja y son el resultado
de un largo aprendizaje terico, prctico y vivencial. Como encuentro entre dos
personas la RMP implica una interaccin comunicativa que est destinada a permitir,
facilitar y mediar el proceso de diagnstico y teraputico, pero adems que promueva
un proceso de transformacin y desarrollo humano. Para lograr este fin se requiere que
dicha comunicacin vaya ms all de un simple intercambio de informacin y se
constituya en una recproca y fructfera interaccin personal: que surja amistad lo cual
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se desarrolla cuando existen dos condiciones: el amor desinteresado que se prodiga a
otro ser humano desconocido y la confidencia, que se da cuando la relacin
interpersonal consiste en infundir hacia el otro, lo que en la propia persona es ms
ntimo, ms propio.(25) El dilogo ha sido reconocido desde la antigedad como
proceso fundamental de la comunicacin humana que amplia el conocimiento de otras
personas, del mundo, pero sobre todo de uno mismo. Para Duffy(26) este es una
interaccin creativa en el curso de la cual surgen emociones, pensamientos y se
generan nuevas actitudes, que pueden determinar cambios significativos en las persona
y en el caso de la atencin mdica, influir trascendentalmente sobre el estado de salud,
(26) como relacin humana se produce una transferencia e intercambio de criterios y
afecto, las emociones tienen una expresin franca en cuanto a su expresin y grado de
comunicacin.
Si bien se espera que las habilidades comunicativas maduren con la experiencia
clnica, se considera fundamental entrenarlas en los ambientes formativos del pregrado
universitario y por ello hacen parte del currculo mdico en Norteamrica, (27)(28)
Australia, (29) y otros pases desarrollados.
En Cuba constituye un objetivo importante para lograr lo propuesto en el perfil de
salida de los egresados en la carrera de medicina, contar con una adecuada formacin
para establecer una relacin mdico paciente eficiente y efectiva. Se han llevado a cabo
importantes investigaciones que han emprendido esta temtica de la comunicacin
reflejando la importancia que la misma reviste, ejemplo de ello es el trabajo de la
Doctora Maritza Alonso (3) en la cual abordan la comunicacin mdico paciente como
parte de la formacin tico profesional de los estudiantes, fundamenta la necesidad de
una adecuada comunicacin mdico-paciente centrada en la funcin afectiva, para el
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logro de una asistencia mdica de calidad y aporta que existe una contribucin limitada
del proceso docente para el logro de una comunicacin mdico-paciente adecuada en
los estudiantes, lo que se considera asociado a una insuficiente formacin tico-
profesional.
Cuba constituye en la actualidad una verdadera potencia mdica mundial, con
logros que se deben en gran medida a los valores de sus mdicos que en su actuar
expresan un alto inters por los pacientes y evidencian en su prctica una gran
espiritualidad como valor supremo del ser humano. (30)
El autor de este trabajo considera al humanismo, la solidaridad y la
responsabilidad como los valores tico profesionales ms importantes de un mdico,
expresin de una maduracin profunda y culminante de un proceso tanto personal
como social donde el compromiso, el afecto y la entrega al ser humano se producen en
un mbito de enriquecimiento espiritual.
Bellon afirma que los procesos de comunicacin condicionan la calidad de la
relacin mdico-paciente. Las habilidades fundamentales que se deben formar en un
mdico, como son las de diagnosticar, tratar y prevenir, estn muy relacionadas con su
calidad en la comunicacin que establece. Las habilidades comunicativas en la RMP,
influyen en mejores resultados en la salud fsica, mental, funcional y subjetiva, en el
nivel de satisfaccin de pacientes y familiares, en el cumplimiento de los tratamientos,
en la eficiencia clnica y en la disminucin del nmero de complementarios (31) y resulta
obvio si se tiene como referencia que el desarrollo de interaccin se hace mucho mas
rico en la medida que utilice mejores tcnicas de comunicacin y propicie un verdadero
intercambio.
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Para Gonzlez Rey El proceso de comunicacin es una va esencial del
desarrollo de la personalidad, que tiene su especificidad con relacin a la actividad
objetal concreta, tanto por sus caractersticas como por la forma en que el hombre se
incluye en calidad de sujeto en uno u otro proceso. La significacin de la comunicacin
depende de los sujetos implicados en ella; a su vez, las caractersticas de los sujetos
determinan el proceso de comunicacin, (32) ello asume la importancia desde el punto
de vista psicolgico que tiene la comunicacin como proceso. La relacin mdico-
paciente es una relacin humana y por lo tanto se sostiene en la interaccin que se
logre en el contexto de la atencin en salud que se brinda.
Heinemman (33) define a la comunicacin como Proceso dinmico entre
individuos y/o grupos, que mediante un intercambio informativo sirve para establecer la
comprensin o un estado de comunidad. La estructura de este proceso es expresin de
las relaciones que median entre los participantes de la comunicacin.(33) Mientras que
para Mnica Sorn "Comunicacin es todo proceso de interaccin social por medio de
smbolos y sistemas de mensajes. Incluye todo proceso en el cual la conducta de un ser
humano acta como estmulo de la conducta de otro ser humano. Puede ser verbal, o
no verbal, interindividual o intergrupal" (34) En el caso de la RMP esta interaccin se
sostiene, entre otros valores profesionales, en el trato humano, solidario y responsable
del mdico hacia sus pacientes.
Vigotsky considera en su obra que los seres humanos se desarrollan en una
formacin histrica cultural dada, creada por la propia actividad de produccin y
transformacin de su realidad y es a travs de la actividad humana que se produce el
desarrollo de los procesos psquicos y la consiguiente apropiacin de la cultura, por lo
que la actividad humana es siempre social e implica por tanto la relacin con otras
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personas, la comunicacin entre ellas, siendo en esa interaccin con otros que surge el
mundo espiritual de cada uno, su personalidad. (35)
De este modo se sustentan los juicios de Sainz Leyva al establecer que el
anlisis de la comunicacin y su influencia en el desarrollo de la personalidad
representan un principio metodolgico de las ciencias humanistas y sociales como la
psicologa o la propia pedagoga y a juicio del autor las Ciencias Mdicas tambin. (36)
Se coincide con la Doctora Amayuela en que para formar a las nuevas
generaciones en las condiciones actuales se precisa de un proceso docente educativo
que se caracterice por una comunicacin educativa donde se evidencien las
potencialidades de las relaciones entre las funciones informativa-afectiva y reguladora
de la comunicacin en su dinmica.(37) De este modo el proceso pedaggico podemos
afirmar que est mediado por el proceso de la comunicacin, siendo este el nexo, no
solo en entre la relacin mdico-paciente sino en la dinmica docente.
La formacin del estudiante en el contexto universitario como afirma Amayuela(38)
se favorece partir de los sustentos siguientes:
La personalidad se forma y desarrolla en el sistema de relaciones que establece
el sujeto en la actividad que realiza y en el proceso de comunicacin.
La prctica docente se concibe como un proceso eminentemente comunicativo.
El alumno como centro del proceso formativo y con un alto nivel de
responsabilidad en el mismo.
En estos puntos queda resumido el principio de la comunicacin y su fundamento
activo en el papel transformador de la realidad al formar parte ya no solo del proceso de
intercambio entre le mdico y el paciente, que el autor abordaba al principio, sino de
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algo tambin importante que es la prctica docente. De este modo el autor establece un
binomio: relacin mdico-paciente y prctica docente, procesos cuyo denominador
comn es la comunicacin en la cual se cumplen una serie de funciones y que
posibilitan la concepcin de una imagen formativa que contribuye no solo a la
transmisin de conocimientos, sino tambin a la formacin de valores en el educando.
En este sentido Lomov plantea: la actividad educativa es una actividad
comunicativa por excelencia, en la que se manifiestan todas las funciones que le son
inherentes a esta ltima: informativa, afectiva y reguladora de la conducta (39)
La comunicacin como proceso cumple con estas tres funciones, entre otras, las
cuales son altamente reconocida y que constituyen tambin los pilares de una
adecuada relacin mdico paciente pero que en el proceso docente para que sea una
actividad educativa de calidad igualmente deben estar presentes. (40)
La funcin informativa se concibe no slo como transmisin de ideas, conceptos,
conocimientos, sino que incluye tambin los intereses, estados de nimo, sentimientos
y actitudes que se producen entre las personas durante la actividad conjunta. O sea, es
un fenmeno bidireccional y no de una mera transmisin en una sola direccin. De ah
el carcter activo de cada uno de los interlocutores de la comunicacin. (39)
La comprensin mutua representa el aspecto afectivo de la comunicacin:
determina los estados emocionales del hombre en su relacin con otros y el nivel de
tensin emocional de la comunicacin interpersonal. (40)
La funcin regulativa de la comunicacin destaca la interaccin, el intercambio de
acciones entre los interlocutores y la influencia que ejerce uno sobre otro en la
organizacin de su actividad conjunta. (40)
17
-
En el proceso de la comunicacin los hombres no slo intercambian informacin
sino que organizan su actividad comn, se influyen y regulan sus acciones mutuamente.
(40)
Si anteriormente se hablaba de una adecuada relacin mdico paciente en el
marco de una adecuada comunicacin que cumpla las funciones esenciales de la
misma, al hablar de un excelente profesor no pueden estar ajenas estas funciones
tampoco.
Se podra separar didcticamente al mdico y al profesor para facilitar su
comprensin pero en la realidad son tan indisolubles como uno solo coincidiendo en la
persona del mdico la del profesor que lleva a cabo el proceso docente y sostiene sobre
si la grave responsabilidad de formar al estudiante de Medicina Integral Comunitaria.
Fernndez Prez (41) con quien est totalmente de acuerdo el autor, plantea: Un buen
profesor no es sino un incansable buscador de codificaciones ptimas para la
comunicacin de lo que desea que sus alumnos aprendan y si a esto se aade la
condicin de mdico que se relaciona con sus pacientes y dialoga al mismo tiempo con
sus alumnos y su imagen es la que estn utilizando los estudiantes como sustrato y
ejemplo para su formacin se concuerda entonces con Olivia Fernndez (42)al definir
que el profesor tiene como rol conducir el proceso enseanza aprendizaje y en este
nuevo siglo no le es suficiente poseer una alta preparacin cientfico-tcnica, es decir
tener dominio de los contenidos de la enseanza, sino que requiere dominar los
elementos fundamentales de la comunicacin y desarrollar capacidades pedaggicas y
psicolgicas, donde la utilizacin del dialogo deviene como elemento esencial de la
labor educativa. Un gran reto este de transformar la prctica metanarrativa por la
participacin activa de los estudiantes en la construccin de su propio aprendizaje. (42)
18
-
O sea que el proceso de enseanza aprendizaje va mas all de propiciar los
conocimientos relativos a la instruccin de un tema, asignatura o programa, mas bien
tiene como norma enriquecer una dinmica y controversial fuente de interaccin en la
que su papel se abre sin lmites al intercambio y a moldear con su propia imagen la del
estudiante.
La conceptualizacin de la eficacia docente ha evolucionado desde la
consideracin del buen profesor como aqul que posea una serie de caractersticas de
personalidad, a considerar al profesor eficaz como el que conoce una serie de
competencias y adems es capaz de utilizarlas de forma adecuada en los momentos
precisos, (43) pudindose afirmar que entre esas competencias, en primer lugar, tiene
que estar la habilidad para comunicar de manera inexorable porque el docente es ante
todo un excelente comunicador cuya idoneidad lo lleva a exponer no solo lo mas
relevante del conocimiento sino tambin lo mejor de si convirtindolo en ejemplo ante el
discpulo.
En la enseanza superior, segn Lpez y colaboradores, la relacin adecuada
profesor-estudiante se da precisamente al establecerse entre ellos un alto nivel de
comunicacin, basado esencialmente en el respeto y confianza dado de forma
bidireccional. Este respeto tiene entre sus bases el reconocimiento de los estudiantes
del dominio del contenido de enseanza por el profesor y el aprecio por su desempeo
profesional y profesoral, convirtindose en su modelo, en alguien a quien quisiera
parecerse, es entonces cuando le dice maestro. (44) El autor comparte este punto de
vista ya que en esta afirmacin est presente todo el devenir del profesorado convertido
en mucho mas que un educador en el momento en que su imagen trasciende para
convertirse en la entrega misma, no solo de sus conocimientos sino tambin de sus
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rasgos mas positivos y admirados por quienes estn a su cargo en el proceso docente
que realiza.
El proceso comunicativo entrelaza al alumno, al paciente y al mdico-profesor en
un escenario donde interactan mutuamente.
La comunicacin en el sentido pedaggico no puede reducirse a un proceso de
mera transmisin de informacin, las definiciones ms recientes destacan el papel de la
interaccin, de la elaboracin conjunta de significados entre los participantes como
caracterstica esencial del proceso docente. (36) Aqu Sainz Leyva habla de lo que
medularmente se podara considerar que se trata de una verdadera interaccin donde
lo psicolgico abre paso al camino pedaggico para ofrecer mas de lo que podra
brindar un simple intercambio de ndole emocional, es una situacin de prdigo y
nutrido intercambio.
El anlisis de las relaciones que se establecen entre el profesor y los alumnos
cuenta con una dilatada historia en la que se manifiestan, a menudo de forma
entrelazada, una amplia gama de intereses e intenciones: caracterizar el "profesor
ideal" dar cuenta del clima socio-emocional de la clase, identificar estilos de enseanza
y sus repercusiones sobre al aprendizaje y determinar los comportamientos del profesor
que definen una enseanza eficaz. Este estado de cosas se debe, sin lugar a dudas, a
numerosas causas, entre las que destaca la propia evolucin de la psicologa, del
anlisis emprico de la enseanza y de los paradigmas tericos y metodolgicos que se
han ido sucediendo en ambos campos desde principios de siglo. (45)
Segn Carrasco (46) el profesor debera mantenerse en la bsqueda de las
alternativas pedaggicas que permitan que los alumnos, a pesar de sus dificultades, se
involucren provechosamente en el proceso educativo. Esta actitud es la que con
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frecuencia algunos educadores aoran, llamndola vocacin o mstica docente. La
recuperacin de esta disposicin ante el trabajo docente no es, en ningn caso, una
decisin meramente individual dejada a la conciencia o al corazn de cada profesor. En
buena medida, esta actitud se fortalece en un contexto escolar que la aprecie y la
apoye y, por otra parte, en una sociedad que reconozca el valor del trabajo docente y
despeje el camino a aquellas personas que naturalmente muestran esta disposicin. (46)
En este punto el autor manifiesta su unidad de criterios, pero considera que le falt
definir con mas precisin lo que llama vocacin o mstica docente atribuyendo con
demasiado nfasis el componente vocativo del magisterio dejando a un lado la
capacidad formativa del docente, sin mencionar la principal cualidad del profesor en su
afn de conseguir ser buen ejemplo, que es la de contar con las adecuadas
herramientas de la comunicacin. A su juicio considerar la aptitud y la vocacin
nicamente, como en este ejemplo, para el ejercicio de la docencia reduce a un grado
considerable el papel auto instructivo en la preparacin docente.
Sin embargo, para Gonzlez Rey la base de la educacin es precisamente la
comunicacin. A travs de la comunicacin se brinda la enseanza y a su vez se ejerce
una influencia educativa sobre el escolar en un medio participativo(47) Este autor
analiza que no siempre el resultado del proceso interactivo se puede apreciar en el
mbito actual de la relacin en que este se produce. La experiencia interactiva produce
emociones, interrogantes y reflexiones que permiten en el sujeto una continuidad activa
y reflexiva sobre un momento pasado y gracias al papel activo que el sujeto asume en
la continuacin de una interaccin que le result fructfera, se produce un momento
posterior activo de construccin o reconstruccin del conocimiento. Este autor deja
claramente explcito un proceso rico dialcticamente y estable en la capacidad de
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cambio dinmico al reconocer las fases interactivas de un desarrollo que es continuo y
ascendente.
Afirman Fernndez y lvarez que la relacin profesor-alumno debe ser fuente de
experiencias significativas en el desarrollo individual y la influencia positiva que se
derive de la misma, est en dependencia, por una parte, de las condiciones personales
y profesionales del profesor que dirige esta interaccin atendiendo a objetivos
pedaggicos y por la otra, las caractersticas del alumno las cuales condicionan el modo
peculiar con el que se percibe la figura del profesor y el lugar que ocupa en el sistema
de relaciones de la vida del alumno.(48) As se enuncia de una manera ms valiosa un
punto sobre el cual se ha estado versando y que viene a dar un toque cardinal en esta
exposicin al poner sobre relieve la importancia del proceso interactivo que se
establece entre el discpulo y el profesor.
De este modo los psiclogos y pedagogos de orientacin humanista enfatizan la
necesidad de personalizar el proceso de enseanza, de evitar los procedimientos
generales dentro del proceso, tratando de diferenciar la accin del profesor en base a
las caractersticas del alumno, desarrollar la interaccin comunicativa, sana y
personalizada entre alumnos y profesores, enfatizando el desarrollo de motivaciones
hacia la autonoma, la auto realizacin y la creatividad en los alumnos. (49)
Para obtener logros en el desarrollo de la personalidad de los educandos es
esencial el papel activo y creativo del maestro, orientado a adecuar el material que debe
impartir a las particularidades de los alumnos que tiene frente a s, procurando la
comunicacin con estos y desarrollando las actividades de enseanza en un marco de
participacin que estimule la duda, a reflexin y la participacin,(49) de esta manera
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queda cerrado el cerco para un procedimiento docente donde estn presentes todas las
aristas de un proceso de excelencia.
El autor se une al discernimiento de Crdenas Rodrguez, Borroto Mrques y
Martn Romero (50) al sostener que en la Educacin Mdica Superior, lo fundamental es
preparar al hombre-educando para realizar su actividad laboral, en cierto contexto
social, es decir prepararlo para la vida por ello la actividad laboral en los servicios de
salud sirve de vehculo fundamentalmente para formar los profesionales de la salud;
caracterizndose los mismos por ser cada da ms complejos, interdisciplinarios,
interdependientes, profundos por introducir rpidamente los logros del desarrollo
cientfico-tcnico de la poca y por utilizar la ciencia como instrumento de eficiencia y
fuente de permanente perfeccionamiento. De ah que el proceso docente educativo,
tenga que ser laboral y cientfico, si quieres reflejar los intereses y necesidades de la
sociedad. (50)
Para lograr estos objetivos, el proceso docente-educativo debe ser motivador,
participativo, problmico, productivo, cientfico, creativo, comprometido con la realidad
social y eminentemente investigativo integrador y debe funcionar como un sistema.
Proceso docente educativo de excelencia. (50) Objetivamente este planteamiento
rene todas las aspiraciones que tiene la Educacin Superior en sociedad cubana y
especialmente en la formacin de los mdicos integrales comunitarios que se lleva a
cabo en la hermana Repblica Bolivariana de Venezuela pues el proceso docente
deviene en pertinencia pues el egresado responder no solo a las exigencias cientfico-
tcnicas imperantes en el mundo moderno, sino al encargo social que lleva implcito en
su preparacin, respondiendo a cada una de las exigencias ms intimas del ser humano
y convirtindose, a travs del proceso valorativo de su propia formacin, en un ser de
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mayor espiritualidad y entrega, en otro ejemplo para la formacin de futuras
generaciones.
Es por ello que para Garca Galano el profesor debe estar a la altura de las
necesidades actuales de su sociedad, debe ofrecerle a los estudiantes, por medio de
una enseanza activa, la posibilidad de participar y construir su propio aprendizaje, para
adquirir las herramientas que van a necesitar, tanto durante el proceso formativo, como
en su desempeo profesional una vez graduados. (51)
Se considera que este autor dej implcito en sus palabras algo que es de
trascendental importancia en el proceso de formacin y es lo relativo a la formacin de
valores, la tica y la moral cuando afirma que el estudiante quedar dotado de
herramientas que necesitar en su desempeo profesional, pues nada hay tan
importante en la formacin de un profesional como la asimilacin de los profundos
valores ticos-morales en la medida que se va consolidando su preparacin como
profesional. Si importante es un profesional preparado cientficamente, imprescindible
es que lleve en si la conjugacin de todos los valores humanos posibles que
caracterizan a la sociedad donde ocurre su formacin y donde se desempear.
Sus palabras pudieran tener una argumentacin mas clara y relevante con los
criterios de las profesoras Natacha Rivera, e Ileana Barrios (52) con la cual el autor
coincide plenamente, al sostener que el estudiante de Ciencias Mdicas no puede
recibir una formacin tico-reflexiva slo a travs de las asignaturas socio-mdicas que
estn presentes en su carrera, sino que tiene que constatar que los profesores ()
conciben una visin integral de su formacin. En la explicacin de hiptesis, teoras,
frmulas, pesos y medidas, y en la relacin con el paciente en las distintas modalidades
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de la educacin en el trabajo, tiene que estar presente la expresin tico-reflexiva de la
carrera que cursa. Esto es un principio metodolgico de la pedagoga mdica en Cuba.
Desde esta perspectiva, las aspiraciones u objetivos que el estudiante debe
alcanzar en el marco de su profesin, deben hacer explcito cual es la dimensin
profesional que se prev. Por ello el lenguaje de los objetivos esta comprometido con el
lenguaje de esa actuacin, donde la precisin del sistema de habilidades a lograr por el
alumno pasa a ser un requerimiento importante en el proceso enseanza-aprendizaje.
(52)
La personalidad profesional que exige la sociedad a la Educacin Superior no
nace con el ser humano, sino que su desarrollo constituye una consecuencia del
proceso de asimilacin de la experiencia histrico-social. Por tanto resulta indispensable
tener en cuenta la relacin social existente entre los hombres y especficamente la
actividad que en esa interrelacin se lleva a cabo para lograr las transformaciones
cualitativas que la sociedad reclama en el tipo de profesional que la misma exige. A
punto de partida de estos argumentos, resulta esencial el papel del profesor, que tiene
la mxima responsabilidad en la formacin de un recurso humano que tiene que portar
una elevada calificacin cientfico-tcnica y las cualidades morales, acorde con el
desarrollo social en que vive.
De esta forma resulta fundamental considerar que el proceso docente educativo
se subordina al encargo social y responde a l, por lo que el mismo tiene que
desplegarse con un enfoque sistmico y dinmico. (52)
En el mbito escolar, afirma Kaplun,(53) profesores y alumnos son los principales
protagonistas de estas relaciones entre educacin y comunicacin y segn la estrategia
que se utilice para la organizacin del proceso pedaggico, se manifiestan formas y
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concepciones diferentes con respecto a la educacin como proceso comunicativo(53) y
en este caso se puede interrelacionar un nuevo componente que dinamiza aun mas
esta relacin y se trata del sustrato relacin mdico-paciente, papel que juega el mismo
profesor, o sea que el profesor cumple una dualidad de papeles, por una parte es el
mdico que se relaciona con los pacientes estableciendo los nexos y las caractersticas
comunicativas ya abordadas y de otra parte es el profesor que se relaciona con el
estudiante y lleva a cabo un proceso docente activo, dinmico y renovador. Es por ello
que se hace especial nfasis en ese modo y caractersticas de relacin que se
establece entre ellos porque de all ha de derivar el resultado final en la formacin del
estudiante de medicina como futuro profesional pues se tiene el encargo de formarlo a
la imagen del galeno cubano como paradigma de mdico. (54)
Los Doctores Borroto Cruz, Lemus Lago y Aneiros-Riba (54) a travs de una
brillante exposicin confirman el anterior planteamiento: El proceso de formacin de re-
cursos humanos para la salud en general y, en especial, para la prctica de la Medicina
Familiar debe jerarquizar la dimensin interpersonal de la prctica mdica como uno de
los ejes principales en el diseo y ejecucin curricular, pues la necesidad de formar ha-
bilidades para la comunicacin individual, social y el desarrollo del mtodo de interven-
cin socio-psicolgica contribuye decisivamente a una prctica mdica que catalice la
transformacin del paradigma vigente hacia uno emergente cada vez ms pertinente a
las actuales necesidades de salud en el marco de la utilizacin de la estrategia global
de atencin primaria de salud orientada a la satisfaccin de las crecientes necesidades
de salud del prximo milenio (54)
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Del mismo modo en un mensaje a la Universidad Catlica del Sagrado Corazn
en Miln, el fallecido Papa Juan Pablo II citaba La solidaridad se aprende a travs del
contacto ms que de nociones. Cuando la experiencia directa toca el corazn, la
mente se puede sentir desafiada a cambiar. La implicacin personal en el sufrimiento
inocente, en la injusticia que otros sufren, es el catalizador para la solidaridad que abre
el camino a la bsqueda intelectual y a la reflexin moral (55)
Realmente con esta frase se pode argumentar la importancia del buen ejemplo
para la formacin del recurso humano para la salud que en la hermana Repblica
Bolivariana de Venezuela se est llevando a cabo, se necesita de una formacin de
calidad inspirada en los mas nobles ideales, donde el ejemplo y la dedicacin sean las
bases slidas que junto a la preparacin innegable de los profesores el joven galeno se
forme impregnado de valores y cientficamente probado en sus conocimientos.
El tipo de servicio que podrn prestar a la sociedad como estudiantes y la
manera concreta de ejercerlo; y el acompaamiento que se les suministrar para
garantizar su xito. Igualmente, los indicadores de logros en el proceso formativo.
Pero quizs lo ms importante es desplegar ante los estudiantes amplios
horizontes de realizacin cientfica, social y humana, a travs de un pensamiento
inspirador y que motive a alcanzar grandes y nobles ideales. (56) Para el mejoramiento
de la comunicacin pedaggica sin dudas es imprescindible que el profesor posea
claridad conceptual sobre este importante proceso humano, especialmente en lo que
concierne a la esfera educativa. Pero no bastara con el conocimiento profundo de estas
cuestiones tericamente, sino que se hace ms importante an el dominio prctico de
vas de comunicacin por parte del docente para llegar a sus alumnos de forma
adecuada. (56)
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Adems, segn Sainz Leyva,(36) es imprescindible la constante reflexin auto
valorativa acerca de cmo se establece la comunicacin con el estudiante y grupo en
general. El auto conocimiento de las propias cualidades personales que pueden
favorecer u obstaculizar el proceso comunicativo en la educacin, contribuira a la
erradicacin de los principales errores que pueden cometerse y, asimismo, permitira
desarrollar las cualidades que lo favorecen.
El mejoramiento permanente de la comunicacin pedaggica sin dudas
redundar en la obtencin de resultados educativos de ms alta calidad, como exige la
poca actual, (36) posteriormente, en el plano del ejercicio profesional dar lo mejor de
si y recordar a sus profesores como paradigma de formacin.
Es por ello que no se discrepa con lvarez Vzquez (57) cuando sostiene que el
docente universitario debe ser un modelo educativo para sus estudiantes. En la medida
que el docente exprese en su actuacin profesional y en sus relaciones con los
estudiantes valores tales como la responsabilidad, el amor a la patria y a la profesin, la
honestidad, la justicia entre otros propiciar su formacin como motivo de actuacin en
los estudiantes (57) o sea que la preparacin va mas all del suministro de
conocimientos, el profesor debe ser un modelo, un paradigma, la imagen viva de lo que
se quiere educar, solo as se estar satisfecho con el fruto que se espera obtener con el
transcurso docente.
Para lvarez Vzquez son imprescindibles los espacios de reflexin en el
proceso formativo, en los que el estudiante aprenda a valorar, argumentar sus puntos
de vista, defenderlos ante los que se oponen a ellos, en los que el estudiante tenga
libertad para expresar sus criterios, para discrepar, para plantear iniciativas, para
escuchar y comprender a los dems, para enfrentarse a problemas con seguridad e
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independencia, para esforzarse por lograr sus propsitos, espacios en los que sean los
docentes universitarios guas de sus estudiantes, modelos de profesionales, ejemplos a
imitar, slo en estas condiciones se estar contribuyendo a la educacin de valores del
estudiante universitario. (57) Segn este investigador la educacin en la formacin de los
recursos humanos debe estar saturada de valores para complementar la potencialidad
humana que se requiere en este tipo de profesionales.
El profesor, a travs de su actuacin, debe proyectar una imagen y estatura tica
conscientemente asumidas, que sugiera en s misma, su asuncin como modelo por los
educandos, en los diferentes eventos de la vida presente y futura.(57) Depender de sus
profesores, en gran medida, que ese estudiante que se est formando quede dotado de
las herramientas necesarias para reaccionar con humanismo, dedicacin,
responsabilidad y entrega ante los acontecimientos en los que se involucre y su relacin
con los pacientes est llena de afecto y compromiso alejando de si todo afn de lucro y
creciendo en su espiritualidad.
Arturo Snchez (58) manifiesta que en la vida cotidiana se interacta con un
sinnmero de objetos, procesos o fenmenos portadores de propiedades con
significacin positiva o negativa para la satisfaccin de necesidades normales de
nuestra especie y para la actividad practica con ellas relacionadas, por lo que estos
objetos son portadores de valores o antivalores de diferentes zonas o dominios
axiolgicos: artstico estticos, cientfico tecnolgicos, histricos, teraputicos,
pedaggicos, etc. Los valores tico-profesionales se ponen de manifiesto en la
orientacin del ser humano con relacin a estas propiedades y en su interaccin con
ellas, y es en esa orientacin e interaccin que nuestra conducta adquiere una
connotacin tica. (58)
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Los valores tico-profesionales constituyen las armas a utilizar por el profesor y
el recurso paralelo con que cuenta para dotar a sus discpulos y que segn el mismo
autor anterior lo define como aquellas propiedades funcionales de elementos de la
conciencia social previamente internalizados, as como de la conciencia individual y del
subconsciente, que tienen una significacin positiva para la dignidad humana, en el
sentido de que contribuyen a la adaptacin social de agentes sociales por medio de una
influencia directa en la autorregulacin de la conducta.(59 )
En todos los sistemas de relacin del ser humano se conforman valores. Y
existen tantos valores tico-morales como formas de relacionarse el ser humano con
cada objeto, proceso o fenmeno de la realidad social. Y siendo la cantidad de objetos,
procesos o fenmenos de la realidad social, as como las formas de relacionarse el ser
humano con ellos, casi infinitas, casi infinito tambin es el nmero de valores tico-
morales.(59)
Cabe entonces pensar al analizar las afirmaciones anteriores en el papel tan
crucial que juega el profesor en la formacin de esos valores en sus alumnos y como el
actuar de ste influir de algn modo en la formacin de sus estudiantes pues este
proceso es de intercambio, producto de relaciones humanas, un fenmeno ineludible de
la realidad social como afirma Snchez Hernndez(58) en su definicin.
Es consideracin del autor que los valores tico-morales constituyen cimientos
importantsimos en la preparacin del profesional que se tiene a cargo y hay que tener
un especial cuidado en ello ya que como se vio anteriormente en todo sistema de
relacin se produce este intercambio. El profesor en su actuar, en la forma de
relacionarse y concebir su interaccin con los pacientes, en la medida que se relacione
con los estudiantes debe brindar una adecuada atencin a estos aspectos que no los
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puede concebir tampoco como un elemento aislado y separado en la dinmica de la
formacin pedaggica sino en si mismo como sus caractersticas mas esenciales y que
devienen para todos de un proceso histrico cultural basado en la emancipacin y la
expresin de lo mas digno del ser humano. La sociedad cubana por ser socialista lleva
implcito todo ese alto grado de humanismo pues se centra en el ser humano.
Pieiro Surez (60) confiere una trascendental importancia a la intencionalidad
como una de las caractersticas de las interacciones humanas detallndola como la
orientacin hacia el otro. Desde dicha perspectiva, los valores, en tanto jerarqua de
bienes tangibles o no, estimables como medio y fin de la conducta personal, son un
componente de las interacciones. Dicho de otra forma: toda interaccin es tambin
interaccin valorativa. Esto refuerza lo que se planteaba anteriormente donde este
proceso provoca que el intercambio y la proyeccin de la imagen del profesor tendr un
efecto inevitable sobre el educando.
A travs de ese concepto la Universidad como institucin cultural formadora de
profesionales con slidos conocimientos cientficos se convierte, de hecho, en el
espacio de maduracin del ethos personal y la consolidacin del ethos colectivo a
travs de la prctica de los valores, la misma, indisolublemente ligada a la integralidad
de la persona, debe incluir el ejercicio profesional.(60) Es lo que tan excepcionalmente el
Doctor Ricardo Gonzlez (30) ha llamado espiritualidad o lo espiritual en el concepto
humano, redimensionando el concepto del hombre como ser que se inserta en una
formacin social determinada, encontrando su expresin mxima en la sociedad
socialista donde prima el hombre como principal recurso.
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Hoy da se necesitan cambios en la educacin, que el viejo paradigma sea
superado por uno nuevo, ms en concordancia con la complejidad del mundo
contemporneo. (61) Estos cambios son los que dan respuestas al encargo social de
cada nacin y mientras no se produzcan la universidad continuar estando ajena a las
necesidades sociales y sus egresados de ningn modo armonizarn con el espritu de
las clases pobres sin que para ellos se haya diseado las respuestas de la instruccin y
mucho menos dominarn en sus claustros los valores si la educacin no da respuesta a
este encargo que lleva implcito el cambio en la educacin como consecuencia en
principio dialctico entrando en consonancia con el Profesor Salas Perea (62) al sostener
que uno de los retos que se han planteado en muchos pases en los ltimos aos lo
representa la calidad de la formacin y superacin de los recursos humanos. Este
proceso ha estado vinculado directamente a los cambios polticos, econmicos y
sociales que se han generado en los diferentes pases, donde el desarrollo social, de la
ciencia, la tcnica, la prctica y la investigacin, han obligado a aplicar -- no en el
discurso, sino en la prctica efectiva los conceptos de eficiencia, calidad y exigencia
en los procesos educativos que realizan las universidades, cada vez ms
comprometidas y en interaccin con la sociedad.
En el mbito de la docencia universitaria, la formacin tradicional, basada en la
prevalencia de un flujo de informacin unidireccional desde el profesor a los
estudiantes, resulta actualmente insuficiente. Tanto desde el punto de vista de la
emisin como de la recepcin de la informacin, las clases basadas en el empleo de
mtodos fundamentalmente expositivos, que reconocen solo como emisor y ente
pensante al docente, no estn acordes con la formacin que se necesita brindar
actualmente a un futuro egresado de la educacin superior.
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Las concepciones educativas actuales conciben el proceso docente-educativo
como un proceso comunicativo dialgico, donde deben prevalecer las relaciones
horizontales entre docentes y discentes, y donde el alumno asume un papel activo y
protagnico ante su propio desarrollo. En este proceso de intercambio se implica la
personalidad de los sujetos en su integridad, es decir, se manifiesta la unidad de lo
cognitivo y lo afectivo, lo ejecutor y lo inductor.(37) as sucede con el novedoso sistema
de enseanza que se aplica en el Programa de Formacin de Medicina Integral
Comunitaria y donde se hace especial nfasis en las caractersticas personales del
profesor, su tica, valores, morales y consagracin a la profesin por constituir parte
esencial del mismo proceso formativo.
Para Alczar Cano (63) la tarea de educar presupone en quien la ejercita un
mnimo de cualidades personales de competencia, actitudes, ilusin profesional e
inters por mejorar de continuo la propia formacin, junto a la madurez personal y el
equilibrio emocional indispensables en quien debe orientar a otros. Por otra parte, como
en cualquier relacin personal, el empeo por cuidar habitualmente los pequeos
detalles de delicadeza en el trato, la sonrisa habitual, el modo de vestir y de expresarse,
los pormenores que reflejan tono humano, facilitan el clima de profesionalidad y
confianza mutua necesaria para que se pueda producir un verdadero dilogo personal.
Para desempear bien esta tarea no es preciso ser una persona excepcional,
pero s resultan imprescindibles el empeo eficaz para formarse y el espritu de servicio
para atender a cada familia y a cada alumno como si fueran los nicos. Estas
cualidades estn acompaadas en cada persona por los defectos y errores normales de
cualquier ser humano, que no desdicen de la figura del profesor. (63) Se coincide con
sus criterios ya que al hablar constantemente de imagen, paradigma y valores, tal vez
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se est imaginando un profesor ideal difcil de alcanzar, pero a juicio del autor, ese
profesor o maestro es alguien capaz de construirse, es palpable en la realidad y
tangible en esencia, no es una persona forzada a desdoblarse en un actuar, es alguien
concreto que vive, siente y piensa y en su actividad cotidiana, es capaz de transmitir y
transferir no solo conocimientos, sino tambin sus propias convicciones e ideales mas
profundos as como los valores elementales en su actividad profesoral.
El profesor en la Educacin Mdica Superior contribuye a la formacin de la
personalidad de los estudiantes, en funcin del modelo de profesional y de hombre que
necesita la sociedad, a travs del trabajo educativo con los educandos. Donde el
profesor debe impartir los conocimientos sobre la base de la lgica de los
razonamientos, que no se quede algo por darle explicacin cientfica, que no quede
nada oculto y oscuro en las explicaciones, convencer a los estudiantes en el carcter
real, objetivo y dialctico de los fenmenos, contribuir a la formacin de valores morales
y ticos acorde a las necesidades del sistema de salud. Analizar valores como la
solidaridad y el humanismo que son cualidades del trabajador de la salud y vincularlos a
los contenidos de la asignatura, inculcar el respeto hacia el hombre que crea los valores
materiales y espirituales en la sociedad, insistir en los principios de la tica mdica,
cumplir los principios de la tica pedaggica en las clases y ser ejemplo en ese sentido,
combatir conductas irrespetuosas, la ostentacin, el ausentismo y la negligencia,
fomentar el colectivismo y la ayuda entre los estudiantes, combatir el fraude y tomar
medidas que lo eviten, combatir el maltrato a la propiedad social y fomentar el sentido
de permanencia mediante el orden y limpieza del aula. Nunca impartir las actividades
donde haya suciedad y desorden. Analizar el contenido y poner ejemplos prcticos al
explicar la teora, vincular los conocimientos con el perfil del egresado. (64)
34
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Al analizar los planteamientos de Lugones Botell, Garca Hernndez, y Pichs
Garca, (65) se aprecia como tienen una notable vigencia en la realidad de la sociedad
venezolana donde la formacin de los nuevos mdicos en la Universidad Barrio Adentro
tiene lugar en los consultorios mdicos populares como principal escenario de
educacin y formacin de valores: La educacin en el trabajo es la forma de
organizacin fundamental de la enseanza mdica y el trabajo en la comunidad (),
hoy las reas de atencin primaria son los escenarios estudiantiles de la carrera de
Medicina con el gran aporte de la enseanza tutelar y el concurso de profesores que
tienen ante s una tarea de gigantes. Transformar el consultorio mdico en una clula
bsica de la enseanza tutelar. (65) Lo que ellos llaman educacin en el trabajo para el
contexto del PNFMIC constituye la prctica docente, no existen contradicciones en
cuanto a la finalidad de la misma ya que es el espacio de mayor permanencia y
estancia del estudiante donde la actividad de su profesor, tendr una influencia decisiva
en la formacin de ese discpulo, pues la integracin de los contenidos orientados tiene
lugar en el ejercicio profesional. (66)
El Programa Nacional para la Formacin del Mdico Integral Comunitario de la
Repblica Bolivariana de Venezuela (66) sintetiza de una manera exacta muchos de los
planteamientos aqu abordados por el autor cuando plantea: "Se requiere iniciar una
profunda transformacin de la formacin de los profesionales del sector salud, que
puedan hacer frente a los retos que le demanda la sociedad, la constitucin de la
Repblica Bolivariana de Venezuela y el nuevo sistema pblico nacional de salud" (66)
"Los procesos de aprendizaje y enseanza estarn basados en el aprender a
aprender, la creatividad, innovacin y solidaridad como ejes de los cambios y
transformaciones que articulan la docencia, la investigacin formativa y la insercin
35
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social, la interdisciplinaridad, transdisciplinaridad, interrelacin e interdependencia, y en
todo momento la formacin ciudadana como norte de la transformacin del pas para
impulsar y dar celeridad a la nueva Repblica, ya que sin ella no se podr consolidar el
sistema pblico nacional de salud" mas adelante ofrece la Caracterizacin de El Mdico
Integral Comunitario definindolo como "un mdico con competencias diagnsticas y
teraputicas, capaz de brindar atencin mdica integral, a travs de acciones de
promocin, prevencin, curacin y rehabilitacin del individuo, la familia, la comunidad y
el medio ambiente; con el empleo de los mtodos clnico y epidemiolgico; un profundo
enfoque social, portador de valores ticos, humansticos, solidarios y de actitud
ciudadana; llamados a transformar la situacin de salud, en correspondencia con las
exigencias de la sociedad actual de la Repblica Bolivariana de Venezuela." (66)
Adems el perfil del egresado de este Programa afirma "El Mdico Integral
Comunitario en funcin del individuo, las familias, la comunidad y el medio ambiente,
ser un profesional que desempear mltiples tareas en los servicios de atencin
mdica y en la comunidad, en beneficio de la colectividad y el individuo, para lo cual
ser capaz de: () Evidenciar, mediante su comportamiento ciudadano, social y
profesional, sus convicciones personales basadas en los principios de la tica profesional,
comportarse y manejar a los pacientes y sus familiares con comprensin, conforme a las
exigencias de la sociedad y del propio enfermo"(66)
La estrategia docente de este Programa esta basada en la formacin integral de
los estudiantes en su propia comunidad , el proceso de enseanza - aprendizaje se
fundamenta en lo esencial en el conocimiento cientfico tcnico de los contenidos segn
las disciplinas y las unidades curriculares organizadas en cada ao acadmico y
basadas en los principales problemas de salud , a partir de los cuales se ira dirigiendo
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el proceso formativo de forma tal que cada componente tribute a dar solucin a este
problema .La premisa fundamental es aprender interactuando con la comunidad con
creatividad, sentido de pertinencia , y de dar solucin a los problemas de salud, con
independencia. (66)
Los componentes personales del proceso sern en primer lugar el estudiante de
MIC y el profesor que en este caso es el medico de BARRIO ADENTRO que desde su
consultorio y con el anlisis de la situacin de salud contribuir a la ejecucin del PLAN
DE ESTUDIO en cada uno de los aos acadmicos en que esta organizada la carrera.
(66)
Las formas organizativas que se utilizaran son, orientacin del nuevo contenido,
consolidacin, evaluacin y prctica docente. Impartindose cada una de ellas mediante
mtodos activos de aprendizajes y medios de enseanza tales como computadora,
modelos anatmicos y videos conferencias. (66)
Estarn en los consultorios populares donde a partir de los contenidos
recibidos segn el plan temtica de la asignatura o de la unidad cunicular que se esta
impartiendo se vinculara con los problemas de salud y dar solucin aprendiendo a
hacer. (66)
La Morfofisiologa Humana III es una de las unidades curriculares que se
desarrollan en el Primer ao de estudio y tiene como objetivo Interpretar la estructura
funcin del organismo humano como una unidad dialctica de eventos morfofuncionales
que garantizan el equilibrio del organismo y su interrelacin con el medio ambiente. (66)
El vnculo indisoluble que se establece entre el profesor, el estudiante del
PNFMIC y el paciente constituye un pilar importante para la propia formacin del
estudiante que toma esta relacin como modelo para s mismo, es por ello que el autor
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coincide con Borroto Cruz, Lemus Lago y Aneiros-Riba (54) cuando aseveran que los
estudiantes son particularmente crticos en su percepcin de la RMP real. Ellos no
tienen an un compromiso profesional con las actividades de salud, por lo cual puede
esperarse que emitan un juicio ms desprejuiciado, que los acerca ms al juicio de la
poblacin; pero al mismo tiempo, la influencia de la educacin, la experiencia y el con-
tacto directo con las tareas mdicas los aproxima a los profesores y los mdicos de fa-
milia en su visin ideal de la RMP (54)
De este modo el sustento terico hasta aqu abordado queda resumido en una
frase de Jos de la Luz y Caballero (67) que ha trascendido a travs del tiempo y que en
Cuba constituye ms que todo una mxima de la pedagoga: "Instruir puede cualquiera,
pero educar, slo aquel que sea un evangelio vivo."
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GLOSARIO
Relacin Mdico Paciente (RMP): Interaccin que se lleva a cabo entre el mdico y
el paciente. Constituye una de las variedades de relaciones humanasen la que
deben cumplirse las mismas funciones de la comunicacin para que sea exitosa y
efectiva. Tiene la particularidad de ser el pilar sobre el que descansa el nivel de
satisfaccin de la atencin mdica. (8) La misma ha sido considerada por muchos
autores como (9) el acto central de la actividad clnica y el escenario principal de la
medicina.
Funciones de la Comunicacin: Caractersticas que debe reunir la comunicacin
interpersonal para que la misma constituya un vnculo estrecho entre los implicados
en ella. Se reconocen varias, pero en lo concerniente tanto a la RMP como al
proceso pedaggico las mas importantes son la afectiva, la regulativa y la
informativa, siendo la primera la que garantiza la entrega y el intercambio
afectivo.(40)
Valores ticos-profesionales: Son aquellas propiedades funcionales de elementos de
la conciencia social previamente internalizados, as como de la conciencia individual
y del subconsciente, que tienen una significacin positiva para la dignidad humana,
en el sentido de que contribuyen a la adaptacin social de agentes sociales por
medio de una influencia directa en la autorregulacin de la conducta (58)
rea de Salud Integral Comunitaria: Espacio geogrfico que enmarca una o varias
comunidades a las que se le brindan atencin mdica Integral y servicios de salud a
travs de las distintas Instituciones de Salud all presentes quedando enclavadas en
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ellas los espacios docentes y asistenciales que sirven de escenarios para la
formacin de los estudiantes del PNFMIC
Consultorio Popular: Institucin de Salud que brinda atencin mdica integral al
individuo, la familia y la comunidad, a travs de la Misin Barrio Adentro.
Centro de Diagnstico Integral (CDI): Institucin de Salud que brinda atencin
mdica Integral, constituye otra puerta de entrada a los servicios de salud con
caractersticas de atencin especficas, al proporcional a los pacientes e individuos
supuestamente sanos estudios imprescindibles para el diagnostico y pesquisa de
enfermedades o certificar un estado de salud determinado.
Centro de Rehabilitacin Integral (CRI): Institucin de Salud que brinda atencin
mdica Integral, constituyendo otra puerta de entrada a los servicios de salud que
contribuye fundamentalmente a la rehabilitacin fsica del individuo a la comunidad.
Aula Multipropsito: Espacio fsico donde se llevan a cabo algunos de las Formas de
Organizacin de la enseanza de las diferentes disciplinas del PNFMIC.
Ncleo Docente: estructura organizativa y funcional que conforman estudiantes,
profesores, aula multipropsito, escenarios profesionales y la comunidad, donde
ms de uno de estos elementos puede pertenecer a mas de un Ncleo Docente
excepto los estudiantes.
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OBJETIVOS
Objetivo General
Caracterizar la influencia de la relacin mdico-paciente en el consultorio popular en el
desarrollo de los valores tico-profesionales de los estudiantes que cursan la asignatura
de Morfofisiologa Humana III del Programa Nacional de Formacin de Medicina Integral
Comunitaria en el rea de Salud Integral Comunitaria UD 291 del municipio Caron,
estado Bolvar.
Objetivos especficos
1. Describir la relacin mdico-paciente en el consultorio popular en el contexto de la
prctica docente de la asignatura Morfofisiologa Humana III.
2. Identificar el desarrollo de los valores humanismo, solidaridad y responsabilidad en
los estudiantes objeto de estudio.
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DISEO METODOLGICO
Se realiz un estudio que responde a un proyecto de investigacin en el rea de
la enseanza de pregrado y tuvo la intencin de caracterizar la influencia de la relacin
mdico-paciente en el consultorio popular en el desarrollo de los valores tico-
profesionales de los estudiantes que cursan la asignatura de Morfofisiologa Humana III
del Programa Nacional de Formacin de Medicina Integral Comunitaria en el rea de
Salud Integral Comunitaria UD 291 del municipio Caron, estado Bolvar, entre los
meses de marzo a diciembre de 2006. Fue elegida la ASIC UD 291 para este trabajo
por formar parte del escenario de trabajo del autor.
El desarrollo de la investigacin tuvo en cuenta modelos de investigacin
cuantitativos y cualitativos, considerando un sistema de mtodos integrados por,
mtodos tericos, mtodos empricos y procedimiento estadstico.
Los mtodos tericos permitieron la revisin documental de fuentes
bibliogrficas relacionadas con: el Programa de Formacin de Medicina Integral
Comunitaria en lo concerniente al perfil del egresado y a la formacin de valores.
Valores, valores tico profesionales y su formacin. El desarrollo histrico de la
Relacin Mdico Paciente, las caractersticas de sta, tanto en el mbito internacional
como nacional y su influencia en la formacin de valores en los estudiantes.
Metodologa de la investigacin educacional y otras fuentes de inters para el autor.
Fueron utilizados tambin mtodos empricos como la encuesta mediante la
aplicacin de dos cuestionarios y la entrevista a profundidad. Se consideraron
procedimientos estadsticos como nmeros absolutos y por cientos para resumir la
informacin y tablas para su resultado.
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Para la aplicacin del primer cuestionario (Anexo 1) se tuvo en cuenta un
universo integrado por los 36 estudiantes que forman parte de los dos ncleos docentes
de la ASIC UD 291. Este cuestionario estuvo integrado por 6 preguntas cerradas. El
propsito fue obtener informacin acerca de la percepcin que tienen los estudiantes
del tipo de relacin que establece su profesor con sus pacientes en la consulta del
consultorio popular en cuanto a la comunicacin, particularidades de la relacin mdico
paciente, empata en la relacin mdico paciente, cualidades de la relacin mdico
paciente, as como la calidad de la misma y cmo esta relacin ha influido en su
formacin tico-profesional. El cuestionario se les aplic en un tiempo promedio de 30
minutos.
Para la aplicacin del segundo cuestionario (Anexo 2) se consider un universo
de los 23 profesores de la ASIC UD 291. La aplicacin de este cuestionario tuvo la
intencin de indagar sobre la percepcin que los mismos tienen sobre los principales
valores tico-profesionales: humanismo, solidaridad y responsabilidad presentes en sus
estudiantes, la percepcin que tienen sobre la evolucin de los valores estudiados
desde que ingresaron en el Programa hasta el desarrollo de la asignatura
Morfofisiologa Humana III, as como la influencia que ha tenido en los estudiantes la
relacin que establecen con sus pacientes. El instrumento est compuesto por 8
preguntas cerradas y fue contestado individualmente por los profesores, en un tiempo
promedio de 30 minutos.
Los cuestionarios se precedieron de un texto explicativo que caracteriz el
consentimiento informado y el anonimato en la informacin brindada, ambos validados
por Maritza Alonso (3) en estudios realizados con anterioridad y que fueron modificados
y contextualizados al mbito de estos estudiantes y profesores del PNFMIC. Las
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modificaciones realizadas al instrumento fueron concebidas por criterio experto y
consistieron en la eliminacin de las dos ltimas preguntas al cuestionario 1 y la
sustitucin de la forma de preguntar de mucho, bastante, poco, casi nada o nada por
siempre, casi siempre, a veces, casi nunca o nunca en aquellos casos en que se
aplica, tenindose en cuenta la operacionalizacin de las variables como a continuacin
se relaciona:
Calidad de la comunicacin predominante en la RMP de los profesores. Se evala
en una escala de Excelente, Buena, Regular y Mala.
Excelente: Se cumplen las tres funciones principales de la comunicacin en la
RMP: afectiva, informativa y regulativa, con predominio de la primera. Segn
criterios del encuestado. En la suma de las respuestas de las preguntas 1 y 2 del
cuestionario 1 obtiene entre 53 y 65 puntos.
Buena: Se cumplen las tres funciones principales de la comunicacin en la RMP:
afectiva, informativa y regulativa, tambin con predominio de la afectiva, pero en
menor cuanta que la anterior. Segn criterios del encuestado. En la suma de las
respuestas de las preguntas 1 y 2 del cuestionario 1 obtiene entre 40 y 52
puntos.
Regular: En la suma de las respuestas de las preguntas 1 y 2 del cuestionario 1
obtiene entre 27 y 39 puntos, por lo que no hay una rica expresin del
cumplimiento de las tres funciones principales de la comunicacin en la RMP,
segn criterios del encuestado.
Mala: No se cumplen las tres funciones principales de la comunicacin en la
RMP: afectiva, informativa ni regulativa. En la suma de las respuestas de las
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preguntas 1 y 2 del cuestionario 1 obtiene entre 13 y 26 puntos. Segn criterios
del encuestado.
Empata mdico-paciente. Se evala en una escala de Excelente, Buena, Regular y
Mala.
Excelente: Mecanismo de la percepcin comunicativa que se da en la relacin
medico paciente. Cuando todas los tems que marca en la pregunta 3 del
cuestionario 1 estn entre Siempre y Casi Siempre con predominio de
Siempre, por lo que es una relacin basada en el respeto, formal, de
preocupacin por el paciente, afectuosa, comprensiva, tolerante, amable, de
confianza y de seguridad en su mxima expresin, constituyendo estos los
indicadores para medirlos, segn criterios del encuestado.
Buena: No es la mxima expresin como el anterior pero sus resultados quedan
expresados al marcar todos los tems de la pregunta 3 del cuestionario 1 entre
Casi Siempre y Siempre con predominio de Casi Siempre o predominio de
Siempre con al menos un A Veces, segn criterios del encuestado.
Regular: Los tems de la pregunta 3 del cuestionario 1 quedan marcados con
predominio de A Veces predominio de Siempre con al menos un Casi
Nunca dos A Veces; predominio de Casi Siempre con al menos dos A
Veces un Casi Nunca. El criterio se aleja del excelente. Segn criterios del
encuestado.
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Mala: Cuando dos o ms tems de la pregunta 3 del cuestionario 1 son marcados
con Casi Nunca o Nunca. Expresa una relacin que tiende hacia el extremo
opuesto del criterio Excelente. Segn criterios del encuestado.
Apreciacin del nivel de desarrollo del valor humanismo en los estudiantes. Se
evala en una escala de Nivel Alto, Nivel Medio y nivel bajo.
Nivel Alto: Segn criterios del encuestado. Se evala a travs de las respuestas
ofrecidas en la pregunta 1 incisos a, d y e, en la pregunta 2 incisos e, f, g, h, i y
pregunta 5 incisos c, d, h, del cuestionario 2. La suma de la puntuacin obtenida
oscila entre 45 y 55
Nivel medio: Segn criterios del encuestado. Se evala a travs de las
respuestas ofrecidas en la pregunta 1 incisos