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UNIVERSIDAD DE MATANZAS “CAMILO CIENFUEGOS”
ESTACIÓN EXPERIMENTAL DE PASTOS Y FORRAJES
"INDIO HATUEY”
Evaluación y selección de accesiones de gramíneas
introducidas de interés para fomentar sistemas de
alimentación ganadera.
TESIS PRESENTADA EN OPCIÓN AL GRADO ACADÉMICO
DE MÁSTER EN PASTOS Y FORRAJES
Autor: Lic. Lisset Castañeda Pimienta
Matanzas
2013
UNIVERSIDAD DE MATANZAS “CAMILO CIENFUEGOS”
ESTACIÓN EXPERIMENTAL DE PASTOS Y FORRAJES
“INDIO HATUEY”
Evaluación y selección de accesiones de gramíneas introducidas
de interés para fomentar sistemas de alimentación ganadera.
TESIS PRESENTADA EN OPCIÓN AL GRADO ACADÉMICO
DE MÁSTER EN PASTOS Y FORRAJES
Autor: Lic. Lisset Castañeda Pimienta
Tutores: Ing. Hilda Beatriz Wencomo Cárdenas Dr.C
Ing. Yuseika Olivera Castro MSc.
Matanzas
2013
Pensamiento
La naturaleza no cambia, pero sin embargo invariablemente
cambia con el tiempo la forma de mirarla. No importa la
época, la agricultura natural existe desde siempre como
fuente de la agricultura.
Masanobu Fukuoka
Agradecimientos
A la EEPF “Indio Hatuey” por darnos la posibilidad de la realización de esta Maestría.
A mis tutores, Dra. Hilda B Wencomo Cárdenas y a la MSc. Yuseika Olivera Castro, por
su atención y disposición para conmigo.
A mi familia por confiar en mí.
A la Dra. Marta Hernández, por su meritorio trabajo en la conducción de la maestría de
Pastos y Forrajes.
A todos los profesores que impartieron los cursos, que con su dedicación y sacrificio,
propiciaron que aumentaran nuestros conocimientos.
A los trabajadores de la EEPF Indio Hatuey, especialmente a Yohania Sanabria, Nancy
Altunaga, Lizandra Binent, Zacharys Hernández, Miguel A. Benítez, Julio Brunet, Niurkis
Delfín y a todos lo que de una forma u otra me brindaron su apoyo
A mis compañeros que siempre estuvieron a mi lado brindándome apoyo.
A todos muchas gracias
Dedicatoria
A mis familiares.
A mis Hijos, que me inspiran cada día a seguir adelante.
A mis amigos más allegados.
A mis compañeros de trabajo, por la confianza que me brindan.
A los que de una forma u otra pusieron su granito de arena en la consecución de
las investigaciones y la redacción de los resultados.
Síntesis
SÍNTESIS
Con el objetivo de determinar el espectro de variación de colecciones de especies de
Brachiaria, Panicum y Pennisetum, sobre la base de algunos indicadores cuantitativos
en la fase inicial del proceso de selección; identificar la existencia de individuos con
potencialidad de adaptación en este tipo de suelo y seleccionar los mejores individuos
de acuerdo con su comportamiento general. Para la realización de las mediciones y
estimaciones en la fase de establecimiento, se utilizó la Metodología propuesta por la
Estación Experimental de Pastos y Forrajes “Indio Hatuey”. Los resultados se
procesaron a través del paquete estadístico SPSS versión 11,5. Al analizar los
resultados del ACP, se pudo comprobar que la variabilidad total fue moderadamente
alta (79,35%) o alta (100%) en cualquiera de los períodos establecidos en función de
los indicadores medidos y/o estimados; los indicadores más variables y a la vez
coincidentes en cualquiera de los períodos, fueron la altura, hojosidad, cobertura y
rendimiento. La poca afectación por insectos potencialmente plaga y enfermedades en
algunos de los casos pudo permitir corroborar que las plantas de estas colecciones
fueron capaces de adaptarse a las condiciones estudiadas, sin riego y sin fertilización.
La evaluación de las colecciones de Brachiaria, Panicum y de Pennisetum, sin riego y
sin fertilización, mostraron la existencia de accesiones con sobresaliente capacidad de
adaptación, lo que permitió su selección en el trabajo de evaluación. Se seleccionaron
las accesiones Brachiaria decumbens, Brachiaria brizantha CIAT-16322, Panicum
maximum clave 0081, 0031, 0042 y Panicum antidotale CIAT-6039 y Pennisetum sp.
NH2 y MF-24, como promisorias para ser estudiadas en el fomento de nuevas áreas.
Se recomienda: continuar la evaluación de las mejores accesiones, en ensayos
replicados, bajo condiciones de pastoreo simulado, con vistas a seleccionar variedades
pre comerciales para incluirlas en los sistemas de alimentación animal; incluir estas
colecciones en otras condiciones edafoclimáticas contrastantes con el fin de completar
la información disponible y utilizar los aspectos metodológicos considerados en este
trabajo como pauta a seguir en investigaciones futuras con un perfil similar.
Índice de contenido
ÍNDICE DE CONTENIDO Página
INTRODUCCIÓN ............................................................................................................................. 1
CAPÍTULO 1. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA .................................................................................. 5
1.1 Consideraciones generales de los pastos y forrajes. ............................................................... 5
1 2.1 Ubicación taxonómica del género Brachiaria. ....................................................................... 9
1.2.2 Origen y adaptación ............................................................................................................... 9
1.2.3 Características botánicas ..................................................................................................... 11
1.2.4 Descripción botánica de las especies en estudio del género Brachiaria ............................ 12
1.2.4.1 Brachiaria decumbens (Nombres comunes: tanner, decumbens, pasto peludo) ............ 12
1.2.4.2 Brachiaria humidicola (humidicola, hierba de la señal del arrastramiento) ...................... 12
1.42.4.3 Brachiaria brizantha (estrella de África, pasto señal, zacate señal, pasto la libertad) .. 13
1.2.4.4 Brachiaria purpurascens (paraná, hierba del paral, hierba bruja) .................................... 14
1.2.5 Comportamiento productivo del género Brachiaria ............................................................. 15
1.3.1 Ubicación taxonómica del género Panicum ......................................................................... 19
1.3.2 Origen y adaptación ............................................................................................................. 19
1.3.3 Características botánicas del género Panicum ................................................................... 20
1.3.4 Descripción botánica de las especies en estudio del género Panicum .............................. 20
1.3.4.1 Panicum maximum (guinea) .............................................................................................. 20
1.3.4.2 Panicum repens (Pasto Torpedo (United States), cheno (India), limanota (Zambia),
muran (Iraq). .................................................................................................................................. 21
1.3.4.3 Panicum antidotale (panico azul) ...................................................................................... 22
1.3.5 Comportamiento productivo del género Panicum ................................................................ 22
1.4.1 Ubicación taxonómica del género Pennisetum .................................................................... 23
1.4.2 Origen y adaptación ............................................................................................................. 24
1.4.4 Descripción botánica de las especies en estudio del género Pennisetum ......................... 24
1.4.4.1 Pennisetum purpureum (Caña de azúcar forrajera, caña de uva, caña japonesa, pasto
panamá, pasto elefante). ............................................................................................................... 24
1.4.5 Comportamiento productivo del género Pennisetum .......................................................... 25
1.5 Metodologías de evaluación .................................................................................................... 28
CAPÍTULO 2. METODOLOGÌA EXPERIMENTAL ...................................................................... 32
2.1 Descripción del área ................................................................................................................ 32
2.1.1 Ubicación del área experimental .......................................................................................... 32
2.1.2 Características del clima ...................................................................................................... 32
2.1.3 Características del suelo ...................................................................................................... 33
2.2 Descripción de la investigación ............................................................................................... 34
2.2.1 Material vegetal utilizado ...................................................................................................... 34
2.2.2 Preparación de suelo y plantación ....................................................................................... 34
2.2.3 Procedimiento experimental ................................................................................................. 35
2.2.3.1 Evaluación agronómica ..................................................................................................... 35
2.3 Procesamiento estadístico ...................................................................................................... 38
CAPÍTULO 3. RESULTADOS Y DISCUSIÓN ............................................................................. 39
3.1 Evaluación de las accesiones de Brachiaria spp. ................................................................... 40
3.2 Evaluación de las accesiones de Panicum spp. ..................................................................... 50
3.3 Evaluación de las accesiones de Pennisetum sp. .................................................................. 58
CONCLUSIONES .......................................................................................................................... 67
RECOMENDACIONES ................................................................................................................. 68
NOVEDAD CIENTÍFICA................................................................................................................ 69
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS .................................................................................................
Índice de tablas
ÍNDICE DE TABLAS Página
Tabla 2.1 Comportamiento de las variables climatológicas durante el período experimental. .... 32
Tabla 2.2 Características químicas del suelo del área experimental. .......................................... 33
Tabla 2.3 Accesiones estudiadas .................................................................................................. 34
Tabla 3.1. Resultados del ACP y relación entre los indicadores evaluados en la época de lluvia
de las accesiones de Brachiaria ................................................................................. 41
Tabla 3.3. Resultados del ACP y relación entre los indicadores evaluados en la época de seca
de las accesiones de Brachiaria ................................................................................. 42
Tabla 3.2 Distribución de los individuos, media y desviación estándar según el Análisis de
Conglomerados de las accesiones de Brachiaria ...........................................................
Tabla 3.4 Distribución de los individuos, media y desviación estándar según el Análisis de
Conglomerados de las accesiones de Brachiaria ...........................................................
Tabla 3.5 Resultados del ACP y relación entre los indicadores evaluados en época de lluvia de
las accesiones de Panicum ......................................................................................... 52
Tabla 3.6 Distribución de los individuos, media y desviación estándar según el Análisis de
Conglomerados de las accesiones de Panicum .............................................................
Tabla 3.7. Resultados del ACP y relación entre los indicadores evaluados en la época de seca
de las accesiones de Panicum .................................................................................... 54
Tabla 3.8. Distribución de los individuos, media y desviación estándar según el Análisis de
Conglomerados de las accesiones de Panicum .............................................................
Tabla 3.9. Resultados del ACP y relación entre los indicadores evaluados en la época de lluvia
de las accesiones de Pennisetum ............................................................................... 59
Tabla 3.10 Distribución de los individuos, media y desviación estándar según el Análisis de
Conglomerados de las accesiones de Pennisetum ........................................................
Tabla 3.11 Resultados del ACP y relación entre los indicadores evaluados en la época de seca
de las accesiones de Pennisetum ............................................................................... 61
Tabla 3.12 Distribución de los individuos, media y desviación estándar según el Análisis de
Conglomerados de las accesiones de Pennisetum ........................................................
Introducción
1
INTRODUCCIÓN
En muchos países, incluyendo Cuba, la agricultura es planificada y por ello, en los
suelos fértiles se siembran los principales cultivos que sirven para la alimentación
humana como son la caña de azúcar, el arroz, los cítricos, las viandas y los vegetales.
De ahí, que los pastos pasan a ocupar en la mayoría de los casos, los suelos de más
difícil manejo en función a sus características como son los de mal drenaje, baja
fertilidad, moderada acidez, altos niveles de salinidad, pedregosidad, entre otras
(Hernández, 1981). Por esta razón, se hace necesario buscar especies o accesiones de
pastos adaptables a esas condiciones desfavorables que posean una aceptable
producción de biomasa, calidad y persistencia para ser aprovechadas por la masa
ganadera.
Según Reis y Melo (2005) las gramíneas tropicales presentan elevado potencial de
producción de materia seca a pesar de ese valor alimenticio no permite explotar el
potencial genético de los animales en pastoreo.
En este sentido es válido acotar que las especies tropicales se caracterizan por una
marcada estacionalidad en función de las condiciones climáticas. En las condiciones
particulares de Cuba, el clima no condiciona un comportamiento estacional de las
especies pratenses, lo cual ocasiona un desbalance de los alimentos forrajeros en la
época poco lluviosa, además de que predomine en las praderas las especies nativas
que presentan baja productividad, y no contribuyen a lograr un alto rendimiento de
materia seca como los que se necesitan para cubrir los requerimientos de nutrimento de
los animales.
Asimismo, esta estacionalidad cuantitativa y cualitativa observada a lo largo del año
motiva que los índices zootécnicos obtenidos sean inferiores al potencial productivo de
esas plantas.
2
Las gramíneas representan una extensa familia de plantas muy importantes desde el
punto de vista económico y ecológico según Marileo (2007). Todos los cereales
cultivados del mundo son gramíneas, por tanto, la importancia de ellas es que son una
familia de plantas herbáceas, o muy raramente leñosas, con más de 670 géneros y
cerca de 10 000 especies descritas (Romero y Romero, 2003).
Este gran género es la cuarta familia con mayor riqueza de especies luego de las
compuestas (Asteraceae), las orquídeas (Orchidaceae) y las leguminosas (Fabaceae);
pero, definitivamente, es la primera en importancia económica global. De hecho, la
mayor parte de la dieta de los seres humanos proviene de las gramíneas, tanto en
forma directa (granos de cereales y sus derivados, como harinas y aceites) o indirecta
(carne, leche y huevos que provienen del ganado y las aves de corral que se alimentan
de pastos o granos.
Es una familia cosmopolita, que ha conquistado la mayoría de los nichos ecológicos del
planeta, desde las zonas desérticas hasta los ecosistemas de agua salada, y desde las
zonas deprimidas y anegadizas hasta los sistemas montañosos más altos. Esta
incomparable capacidad de adaptación está sustentada en una enorme diversidad
morfológica, fisiológica y reproductiva y en varias asociaciones mutualísticas con otros
organismos, que convierten a las gramíneas en una fascinante familia, no solo por su
importancia económica, sino también por su relevancia biológica. Según refiere Judd
(2007), la familia fue reconocida por sistemas de clasificación modernos (como el
sistema de clasificación APG III establecida en el 2009 y el APWeb del 2001).
La familia de las gramíneas es probablemente la que mayor importancia tiene para la
economía humana. De hecho, alrededor del 70% de la superficie cultivable del mundo
está sembrada con gramíneas y el 50% de las calorías consumidas por la humanidad
proviene de las numerosas especies de gramíneas que son utilizadas directamente en
la alimentación, o bien, indirectamente como forrajes para los animales domésticos. En
términos de la producción global, los 4 cultivos más importantes son gramíneas: caña
3
de azúcar (Saccharum officinarum), trigo (Tripticum spp.), arroz (Oryza sativa) y maíz
(Zea mayz). La cebada (Hordeum vulgare) y el sorgo (Sorghum spp.) están entre los
primeros.
La producción mundial de cereales en el año 2000 fue de unos 2 057 millones de
toneladas y las especies más cultivadas fueron el arroz, el maíz, el trigo, la cebada y el
sorgo. El bienestar de la humanidad depende de estas pocas especies de gramíneas,
por lo que una deficiencia, incluso pequeña, de la cosecha de cualquiera de ellas puede
provocar hambruna e inestabilidad económica en zonas muy amplias.
Además, la familia aporta casi todo el azúcar del mundo. El bambú, otro miembro de la
familia, sirve como material de construcción y como fuente de alimento, y se usa
también en la fabricación de papel. La citronella, usada en perfumería y como repelente
de insectos, es una esencia destilada de las hojas de ciertas gramíneas. Asimismo, se
consideran la principal fuente de alimentación de los animales herbívoros domésticos y
salvajes, que pastan en praderas y comen heno y forraje cosechados en prados. La
superficie de suelo dedicada a estos cultivos es mayor que la reservada al conjunto de
todas las demás especies cultivadas (Marileo, 2007).
No todas las gramíneas son beneficiosas, y algunas se consideran plantas inverves;
casi todas éstas invaden los cultivos y reducen el rendimiento global, pues compiten
con la especie cultivada, dificultan la recolección o reducen por contaminación el valor
nutritivo, o de otro tipo, del producto. Algunas gramíneas tropicales forrajeras producen
en determinadas condiciones concentraciones mortales de ácido cianhídrico.
Se debe señalar además que para la introducción de nuevas especies o accesiones es
importante la adecuada caracterización, identificación y evaluación del material
mediante descriptores agromorfológicos o morfoagronómicos. No obstante, estos
rasgos son alterables por factores abióticos, como el ambiente, y bióticos como la edad
del cultivo.
4
Es válido acotar que un instrumento de trabajo indispensable de esta opción
multidisciplinaria es la evaluación sistemática de germoplasma mediante métodos
matemáticos adecuados que permiten arribar a similitudes y diferencias entre el
conjunto de especies estudiadas (Torres et al., 2006) El término evaluación es muy
amplio y debe adaptarse a la situación particular que se estudia.
Problema
Aún existen accesiones de gramíneas pratenses en el banco de germoplasma de
pastos introducidos de la Estación Experimental de Pastos y Forrajes Indio Hatuey, de
las que no se tienen conocimientos acerca de sus características agronómicas
aceptables para ser incluidas como promisorias en los sistemas de producción
ganadera que se deseen fomentar en el futuro cercano y a largo plazo.
Hipótesis de trabajo
Las accesiones de gramíneas introducidas al país poseen potencialidad productiva para
ser incluidas en los sistemas de producción animal, por ello, la evaluación y selección
de las mismas, permitirá encontrar nuevas plantas sobresalientes para dichos sistemas.
Objetivo general
Evaluar y seleccionar especies y accesiones de gramíneas sin riego y sin fertilización
para su uso en la alimentación animal.
Objetivos específicos
Evaluar el comportamiento agronómico de las especies y accesiones introducidas.
Determinar el material genético con mayor potencialidad de adaptación y
productividad para su implementación en sistemas de producción animal.
Capítulo 1. Revisión bibliográfica
5
CAPÍTULO 1. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA
1.1 Consideraciones generales de los pastos y forrajes.
Los pastos y los forrajes han ocupado un lugar cimero a nivel mundial como base de la
alimentación del ganado y constituyen el cultivo más extendido en la agricultura cubana
(Valdés y Planas, 1999; Molina et al., 2000) y contrario a otros cultivos que se explotan
en condiciones homogéneas y con prácticas agro y fitotécnicas muy similares, estas
plantas por su condición de cultivo permanente tienen que enfrentarse a una infinita
diversidad de condiciones que les impone el medio, la economía y el hombre (Paretas,
1990), las cuales determinan una alta variabilidad en su comportamiento individual.
De acuerdo con este último, las condiciones de suelo y clima que imperan en la
explotación resultan decisivas y cuando son adversas pueden limitar el crecimiento y
desarrollo de los pastizales, el que depende del grado de adaptación que presenten las
especies y variedades en uso a los cambios bruscos que ocurren dentro y entre zonas
ganaderas.
Es por ello, que en una ganadería basada en pastos y forrajes, el ecosistema de pastos
resulta el elemento más importante porque en él se integran todos los factores a los
cuales se enfrentan estos cultivos en el complejo interactivo suelo-planta-animal-
hombre.
En Cuba, y especialmente en la región oriental, la producción de pastos, está
influenciada por las condiciones climáticas existentes y principalmente por la
distribución anual de las precipitaciones que, unida a otros factores como la
temperatura y la radiación solar, hacen que los rendimientos de los pastos no sean
estables durante todo el año (Machado et al., 1978; Benítez et al., 2003).
La desigualdad en la distribución anual de las precipitaciones hace que la mayor
producción de pastos ocurra en el período lluvioso, que se extiende de mayo a octubre
y en el que cae el 80% de la precipitación promedio anual (1 300 mm) a nivel nacional,
6
además de presentarse altas temperaturas y radiaciones solares, lo cual favorece el
crecimiento de las plantas. En la época de seca, que abarca de noviembre a abril, cae
el 20% de las precipitaciones anuales y la producción de pasto se reduce drásticamente
(Hernández, 1996).
La media de producción de los pastos en Cuba en algunas especies es más baja que la
informada en otras zonas tropicales, lo que puede ser debido a las características
específicas del clima que presenta un promedio anual de 1 368 mm en las
precipitaciones, diferenciadas en dos épocas de 6 meses cada una, la lluviosa, donde
cae el 80% del total anual con temperaturas que oscilan entre 26,3 y 27°C y la poco
lluviosa, donde caen el 20% de las precipitaciones anuales como promedio con
temperaturas medias que varían en un rango de 22,5 a 25,5°C. En esta época las
temperaturas más bajas se producen en los meses de diciembre, enero y febrero,
cuando se puede afectar con más intensidad el crecimiento de las plantas (Hernández,
2006).
Los suelos destinados a la ganadería en Cuba, son extremadamente heterogéneos y,
en la mayoría de los casos, con más de una eficiencia que limita su productividad
(Alonso y Carrobello, 2002), estas características imponen la necesidad de hacer una
selección minuciosa y casuística de las especies y variedades que sean capaces de
adaptarse, producir y mantenerse bajo estas condiciones y acorde a los sistemas
agrotécnicos y de manejo que imponen las normas.
La adaptabilidad y estabilidad son características importantes en las plantas cuando se
requiere establecer una estructura de pastos para cada región en particular. Este
aspecto debe ser tomado en consideración para la creación de la estructura de los
pastizales en Cuba, sobre todo para las regiones denominadas como zonas problemas
(suelos bajos, salinos, ácidos, entre otros) en los que se necesitan cultivares con una
adaptación especifica (Seguí, 2002).
7
A pesar de que Cuba es un país más o menos uniforme, desde el punto de vista
climático se han observado amplias variaciones en el comportamiento de los pastos a
través de los ensayos regionales (Hernández et al., 1980; Machado y Olivera, 2004;
Olivera et al., 2007).
La evolución y adaptación de las plantas están estrechamente relacionadas con los
numerosos factores del hábitat de forma individual o de conjunto (Wilsis, 1990). Según
Seguí (1996) esto está dado por la incidencia de los factores ambientales y los efectos
de la selección natural de los grupos de plantas que se interrelacionan dentro del medio
que ocupan, determinando respuestas diferenciales de las especies y variedades;
asimismo, los factores climáticos, edáficos y bióticos son los elementos que influyen con
mayor intensidad en la distribución, adaptación, producción y grado de utilización de las
plantas cultivadas, aunque el nivel de exigencia de cada cultivo en particular tiende a
limitar la influencia de los mismos.
Por su parte, Paretas (1993) plantea que los pastos están definidos como la base
alimentaria de los bovinos en Cuba, tomando del suelo y el clima los elementos para
vivir y a su vez son la fuente de vida de los mismos. Por ello es muy importante poseer
un germoplasma en cantidad y calidad que se adapte adecuadamente a los diferentes
agrosistemas existentes y a los requerimientos y potencial de los animales.
El comportamiento relativo de los genotipos en los diferentes ambientes, ha sido objeto
de estudio en varias ocasiones (Estévez y Álvarez, 1987). Por ello, se plantea que el
potencial productivo y reproductivo de los pastos y los forrajes dependen de la
capacidad individual de las especies y variedades, así como de las labores
agrotécnicas, fitotécnicas y de manejo a las cuales son sometidas y sobre todo de las
condiciones climáticas y edáficas donde estas se desarrollan. En cuanto al suelo,
Paretas y Funes (1988) han señalado la marcada heterogeneidad existente tanto entre
grupos de suelos como entre los tipos existentes y entre las características que los
8
definen, los cuales en muchos casos, presentan más de una deficiencia que limita su
productividad (Hernández et al., 1996)
Tales diferencias también fueron señaladas por Hernández, et al. (2006).a partir de las
afectaciones porcentuales que cada limitante representa en los suelos ganaderos
cubanos. Todo ello, impone la necesidad de hacer una selección minuciosa y casuística
de las especies de manera que sean capaces de adaptarse, producir y mantenerse bajo
esas condiciones, acorde a los sistemas de explotación creados y desarrollados en las
empresas productoras (Seguí, 1996).
Asimismo, se indica que la adaptabilidad puede ser general o específica, dependiendo
la misma de las características genéticas particulares de las plantas. Un cultivo es
adaptado, cuando puede expresar todo su potencial genético en diferentes condiciones
ambientales, mientras que cuando solo expresa un potencial para ambientes
determinados su adaptabilidad es específica (Seguí, 1996). Las especies de
adaptabilidad específica son muy importantes para regiones con determinados
problemas (suelos bajos, salinos, ácidos, infértiles u otros).
En la literatura consultada, se señala la notable influencia del suelo en el crecimiento y
productividad de los pastos, ya que el mismo proporciona la humedad, nutrientes,
oxígeno y temperatura necesarios para su óptimo desarrollo, lo cual varía con el tipo y
la capacidad agroproductiva del mismo. En este sentido, en los resultados de Paretas
(1990) acerca del comportamiento de los pastos en los distintos suelos ganaderos, se
recomienda una clasificación subjetiva en la que se indica que los géneros Panicum y
Cynodon son los más adaptados a la gran variabilidad de estos suelos, mientras que en
Chloris y Brachiaria la manifestación de sus respectivos potenciales de producción de
fitomasa está limitada a suelos más específicos.
No obstante, de esta clasificación general, la manifestación del potencial forrajero de
cada especie varía en dependencia de las condiciones edafoclimáticas y de manejo
9
donde se desarrolle. La adaptabilidad y estabilidad son características importantes en
las plantas cuando se requiere establecer una estructura de pastos para cada región en
particular. Este aspecto debe ser tomado en consideración para la creación de la
estructura de los pastizales en Cuba, sobre todo para las regiones denominadas como
zonas problemas donde se necesitan cultivares con adaptación especifica (Seguí,
2002).
1.2 Género Brachiaria
1 2.1 Ubicación taxonómica del género Brachiaria.
Según Jardín Botánico Nacional (2012), el género en estudio se encuentra ubicado
taxonómicamente de la siguiente manera:
Reino Cormobionta
División Magnoliophyta
Clase Magnoliopsida
Subclase: Commelinidae
Orden Poales
Familia Poaceae
Subfamilia Panicoideae
Tribu Paniceae
Género Brachiaria
1.2.2 Origen y adaptación
En cuanto a la adaptación de las especies forrajeras a las condiciones edáficas, Paretas
y Funes (1988) han señalado la marcada heterogeneidad existente tanto entre grupos
de suelos como entre los tipos existentes y entre las características que los definen, los
cuales en muchos casos, presentan más de una deficiencia que limita su productividad.
Tales diferencias también fueron señaladas por Hernández et al. (1996) a partir de las
afectaciones porcentuales que cada limitante representa en los suelos ganaderos
cubanos. Todo ello impone la necesidad de hacer una selección minuciosa y casuística
de las especies de manera que sean capaces de adaptarse, producir y mantenerse bajo
10
esas condiciones, acorde a los sistemas de explotación creados y desarrollados en las
empresas productoras (Seguí, 1996).
Entre las especies del género Brachiaria se pueden apreciar algunas diferencias
marcadas en lo relacionado a su adaptación. Debido a ello se pueden encontrar
especies que tienen la capacidad de establecerse en los ambientes de más difícil
manejo hasta los que son completamente favorables.
La especie B. decumbens es originaria de África ecuatorial y crece de forma natural en
sabanas abiertas o con presencia de arbustivas. Esta gramínea se puede desarrollar en
suelos fértiles, ácidos (pH~4,2), así como en los que son calcáreos y pedregosos con
(pH~8,5). También se establece en clima moderadamente húmedo, pero no soporta
inundaciones prolongadas.
Esta especie se caracteriza por ser muy agresiva en pastoreo. Está entre las más
cultivadas en los sistemas de producción ganadera en el trópico bajo. Se adapta a
distintas condiciones agroecológicas, como puede ser en regiones con alturas desde el
nivel del mar hasta 2 200 metros sobre el nivel del mar y a la sequía, lo que le permite
establecerse en regiones tropicales donde predominen períodos secos de 4 a 5 meses.
Tolera altas precipitaciones, el pastoreo intensivo y los suelos ácidos y pobres.
Por su parte, B. dictyoneura es originaria de África tropical y se adapta bien a diversas
condiciones de suelo, como pueden ser los ácidos, los de baja fertilidad, los que tienen
una textura de franco a arcillosos, así como a los de buen drenaje, y crece bien en
regiones tropicales, B. brizantha es originaria de África tropical y se encuentra
distribuida en regiones con precipitaciones entre 800 y 1 500 mm por año; algunos
materiales de esta especie toleran suelos ácidos y de baja fertilidad. Sin embargo, de
acuerdo con Funes et al. (1996) la especie crece mejor en suelos con fertilidad media a
alta. También indicaron que la especie B. arrecta se desarrolla bien en suelos de alta
humedad, en los cuales se muestra muy agresiva.
11
B. purpurascens se desarrolla bien en suelos de fertilidad media, mal drenaje e
inundables o húmedos. También crece y se desarrolla bien en las orillas de los ríos,
lagunas y canales de riego, y resiste el encharcamiento.
La especie B. humidicola tiene su origen en África tropical oriental y suroriental,
especialmente en zonas con alta precipitación. Se cultiva en Brasil, Ecuador, Venezuela
y otros países de América tropical. Las accesiones de esta especie se adaptan a suelos
húmedos, aunque presenta un comportamiento muy similar en suelos bien drenados.
Es poco exigente a condiciones favorables, por lo que se adapta a suelos de baja
fertilidad y pH ácido.
También resiste climas extremos con estaciones secas rigurosas mientras que B.
ruziziensis se adaptan a condiciones de suelos francos y pesados, pero que no estén
sometidos a largos períodos de inundación.
1.2.3 Características botánicas
Las especies del género Brachiaria se caracterizan por ser gramíneas anuales o
perennes, de porte erecto, decumbentes, esparcidas o estoloníferas. Las cañas o
culmos a menudo son enraizadas en los nudos inferiores, y en las de tipo perenne
usualmente emergen de una base algo rizomático–anudada. La haz es plana, lineal o
lineal–lanceolada. Puede ser glabra o pilosa, con vainas foliares cercanas y
sobrepuestas. La lígula se presenta como una membrana estrecha que puede ser
vellosa o membranácea con borde ciliado (Watson y Dallwitz, 2008).
La inflorescencia es en panícula racemosa, cuyos raquis se ubican de forma alterna a lo
largo de un eje común. Las espículas, de dos flores, son desde ovadas hasta oblongas,
más o menos planoconvexas o biconvexas, solitarias, en pares o en grupos, y
generalmente en dos líneas a lo largo del raquis, excepto en B. brizantha. Estas se
desarticulan por debajo de las glumas y se caen enteramente al madurar. Las espículas
12
poseen pedúnculos cortos cuando son solitarias. Si son en pares uno es más grande
que el otro (Watson y Dallwitz, 2008).
El flósculo inferior es estéril o masculino. El lema inferior tiene 5–9 (11) nervios, con los
laterales algo alejados del nervio central. La palea, con dos nervios, es tan larga como
la lema o a veces reducida o atrofiada. El flósculo masculino presenta dos lodículas. El
flósculo superior es bisexual. El fruto es del tipo cariópside y puede ser ovado, con
contorno redondeado o allanado. El hilo secundario es puntiforme y el embrión posee
una longitud variable, desde la mitad hasta las tres cuartas partes de la cariópside.
1.2.4 Descripción botánica de las especies en estudio del género Brachiaria
1.2.4.1 Brachiaria decumbens (Nombres comunes: tanner, decumbens, pasto
peludo)
Es una planta herbácea, perenne, semirrecta a postrada de 30 a 100 cm de altura. Las
raíces son fuertes y duras, con presencia de pequeños rizomas. Los culmos son de
cilíndricos a ovados y pueden ser erectos o decumbentes, de color verde y algunas
veces con visos morados. Son glabros o pilosos, con la presencia de 6 a 16 internodios
de 18 a 28 cm de longitud. Las hojas miden entre 20 y 40 cm de largo y de 10 a 20 mm
de ancho y están cubiertas por tricomas. Presentan bordes duros y ásperos.
La inflorescencia es en forma de panícula racemosa, de 25 a 47 cm de longitud, y está
formada por 2 a 5 racimos de 4 a 10 cm de largo. Las espículas son oblongas–elípticas,
gruesas, de 3 a 4 mm de largo, alineadas en filas dobles y con pedúnculo corto. Las
semillas se reproducen a partir del mecanismo de la apomixis y algunas son fértiles, por
lo cual el pasto se propaga principalmente por medio de material vegetativo.
1.2.4.2 Brachiaria humidicola (humidicola, hierba de la señal del arrastramiento)
Es una gramínea perenne y estolonífera de hábito de crecimiento de semirrecto ha
postrado. Puede alcanzar de 38 a 60 cm de altura, con la presencia de estolones
13
fuertes, largos, de color púrpura, que pueden medir hasta 1,2 m de longitud, los cuales
presentan facilidad de producción de hijos en los nudos.
Los culmos son erectos, delgados, duros y glabros. Los internodios superiores miden de
8 a 10 cm de longitud y los inferiores de 2 a 3 cm. Estos son de color verde claro y sin
vellosidades. Los limbos son lineales, duros, bastos y estrechos, con una coloración de
verde a morado (principalmente en los bordes).
Es característico en esta especie que los ápices tiendan a doblarse por la nervadura
central, pareciendo unir los bordes en las horas de mucho calor o sequía. Estos poseen
una longitud de 10 a 30 cm y de 0,5 a 0,8 cm en su parte más ancha. Pueden ser
glabros o poco pilosos en la base y la lígula es densamente ciliada. La vaina, de 6 a 20
cm, es de color verde a morado y puede ser desde glabra hasta algo vellosa en los
bordes. Las hojas de los estolones son de 2,5 a 12,0 cm de largo y de 0,8 a 1,2 cm de
ancho. La inflorescencia es en panícula racemosa, corta, de 24 a 45 cm de longitud,
con 1 a 4 racimos de 3 a 5 cm de longitud. Espículas uniseriadas bifloras, alternadas a
lo largo del raquis de 5 a 6 cm con pedicelos cortos.
1.42.4.3 Brachiaria brizantha (estrella de África, pasto señal, zacate señal, pasto la
libertad)
Entre las accesiones de esta especie existen materiales de diferentes hábitos de
crecimiento, que pueden ser plantas erectas o rastreras. Las hojas pueden ser con o sin
vellosidades (glabras). Algunas plantas se propagan por rizomas y otras por estolones.
Es una especie perenne, que presenta macollas vigorosas, de hábito erecto o
semirrecto, con tallos que alcanzan hasta 2,0 m de altura.
Los rizomas horizontales son cortos, duros y curvos, cubiertos por escamas glabras de
color amarillo a púrpura. Las raíces son profundas, lo que le permite sobrevivir bien
durante períodos prolongados de sequía. Estas son de color blanco–amarillento y de
consistencia blanda. Los culmos erectos o suberectos son escasamente ramificados
14
con 6 a 14 internodios de 10 a 34 cm de longitud, cilíndricos, ovalados, de color verde o
morado y también son glabros. Los nudos pueden ser glabros o poco pilosos de color
morado. Los limbos son verdes y largos de 20 a 75 cm de longitud y de 0,8 a 2,4 cm en
la parte más ancha; estos pueden ser lineales o lanceolados, adelgazando hacia el
ápice, con los bordes de color blanco a morado y fuertemente dentados.
Se manifiestan glabros o pilosos generalmente hacia la base. La lígula es
membranácea–ciliada de 2 mm de longitud. La vaina, de 10 a 23 cm de longitud, es
más corta que los internodios y de color verde, ocasionalmente con tonalidades
moradas hacia los bordes, desde glabra hasta glabrescentes.
La inflorescencia, una de las de mayor longitud de las especies de este género, es en
forma de panícula racemosa de 34 a 87 cm de longitud, con el eje principal estriado,
glabro o piloso con 1 a 17 racimos solitarios, unilaterales y rectos, de 8 a 22 cm de
longitud.
1.2.4.4 Brachiaria purpurascens (paraná, hierba del paral, hierba bruja)
Esta especie se caracteriza por ser una planta robusta y sus estolones pueden alcanzar
una longitud de 2 a 6 m. Posee un abundante sistema radical con fuertes rizomas. Los
culmos son fuertes, ramificados y glabros, con un número indeterminado de nudos, con
vellos blancos, suaves y largos. Los internodios son de color verde claro, de 5 a 15 cm
de longitud. Las vainas foliares son de color verde mate, de 5 a 18 cm de longitud, de
igual o mayor tamaño que los internodios.
Son muy vellosas cerca de la base y ciliadas en los bordes. La lígula es densamente
ciliada de 1 a 1,2 mm de largo. Los limbos son lanceolados, planos, no muy largos y
anchos, de 15 a 20 cm de longitud y de 1,0 a 2,5 cm en la parte más ancha. Son
acuminados hacia el ápice, de color verde mate, glabros o ligeramente pilosos y con los
bordes finamente denticulados.
15
La inflorescencia se produce en determinados momentos del ciclo vegetativo, con poca
abundancia; es de color verde mate claro y en forma de panícula abierta de 15 a 20 cm
de longitud. Las espículas, de forma ovado-elípticas, son de color verde con visos
morados.
1.2.5 Comportamiento productivo del género Brachiaria
El comportamiento relativo de los genotipos en los diferentes ambientes, ha sido objeto
de estudio en varias ocasiones (Estévez y Álvarez, 1987). Por ello, se plantea que el
potencial productivo y reproductivo de los pastos y los forrajes depende de la capacidad
individual de las especies y variedades, así como de las labores agrotécnicas,
fitotécnicas y de manejo a las cuales son sometidas y sobre todo de las condiciones
climáticas y edáficas donde estas se desarrollan.
El género Brachiaria según refiere Catasús (1997) posee alrededor de 80 especies. De
estas algunas han sido muy poco estudiadas debido a que no se consideran de interés
para la alimentación de la masa ganadera y se consideran como invasoras o malezas
dentro de los pastizales, entre las que se pueden mencionar a B. plantaginea, B.
subcuadriparia y B. extensa.
Sin embargo, existe un grupo de especies que sí se consideran de interés debido a su
buen comportamiento y desarrollo cuando han sido estudiadas en diversas condiciones
de manejo. En este sentido se puede mencionar a B. purpurascens, B. decumbens, B.
humidicola, B. brizantha y B. dictyoneura (Olivera y Machado, 2004; Olivera et al.,
2007).
Uno de los indicadores más variables en el estudio de los pastos es la producción de
materia seca, debido a que puede ser afectada por las condiciones de manejo a que se
sometan las plantas: la utilización o no de riego y de fertilización, la frecuencia de corte
o pastoreo, la época del año y la edad de corte, entre otros. Debido a esta problemática,
16
a través los años se han realizado muchos y variados estudios, con el fin de obtener
una respuesta aceptable para los diferentes ambientes.
En este sentido, Machado, Gómez y Quesada (1978), al estudiar el comportamiento
inicial de un grupo de gramíneas en suelos de diferentes texturas (del tipo loam-
arenoso), encontraron que las especies que se destacaron por sus rendimientos fueron:
Cynodon barberi y B. ruziziensis, y esta última junto a Chloris gayana cv. Pioneer se
destacaron por ser las de mejor producción de materia comestible en la época de seca.
Estos rendimientos en B. ruziziensis concuerdan con los alcanzados por Funes (1974)
en suelos pardos de Holguín, así como los alcanzados por Yepes (1975) en suelos
rojos de Matanzas.
Por otra parte Gerardo y Oliva (1979), al evaluar 25 cultivares de gramíneas bajo
condiciones de riego y fertilización, mediante corte mecánico, observaron que por sus
rendimientos se destacaron, en la época de lluvia, B. decumbens, Panicum maximum
cv. Uganda y el cv. Makueni (19,5; 19,8 y 19,1 t MS/ha, respectivamente); mientras que
en la época de seca Chloris gayana cv. Rongai y B. decumbens resultaron las más
destacadas (ambas con 6,08 t MS/ha).
Gerardo y Oliva (1979), al estudiar un grupo de gramíneas introducidas en Cuba, bajo
condiciones de secano y con corte, indicaron que B. decumbens tuvo un rendimiento de
10,9 t MS/ha. Esta especie, al igual que Brachiaria sp., mostró perspectivas para estas
condiciones, sobre todo la primera. Por ello, concluyeron que la distribución anual del
rendimiento fue de 30 y 16% en seca para las condiciones de riego y secano,
respectivamente.
Por su parte, Hernández y Hernández (1980) hacen alusión a que en Australia, B.
decumbens fue superior en cuanto a los rendimientos en relación con la pangola y que
también se alcanzaron altos rendimientos de esta accesión en Colombia. En Fiji,
Patridge (citado por estos últimos autores), utilizando aproximadamente 250 kg
17
N/ha/año, encontró rendimientos que variaron entre 12,4 y 16,4 t MS/ha/año,
comportándose esta especie como una de las más destacadas al comparar 15
variedades de pasto. También Hernández y Hernández (1984), al evaluar 19 gramíneas
en un suelo Ferralítico Rojo catalogado como de mediana fertilidad, en parcelas
sencillas (3,0 x 1,0 m), con la utilización de 100-100-150 kg N-P-K/ha/año
respectivamente y sin riego, concluyeron que las accesiones B. humidicola IRI-409,
Andropogon gayanus CIAT-57475 y los cultivares del género Panicum, 6146, sp.1 y
sp.2 fueron los que se destacaron para estas condiciones.
Otros resultados al respecto fueron los expuestos por Ferrufino y Vallejos (1986),
quienes al estudiar 36 ecotipos del género Brachiaria en Bolivia sobre un suelo con
problemas de textura, bajo condiciones de corte mecánico, sin riego y sin fertilización,
determinaron que la producción de MS total en los ocho cortes varió entre 20 y 34
t/ha/año y las especies que se mostraron más productivas fueron B. humidicola con seis
accesiones, B. brizantha con tres accesiones y dos accesiones de B. decumbens y B.
nigropedata. Las de menor producción fueron los ecotipos B. arrecta CIAT 6020 y B.
ruziziensis.
Mientras que, Ramírez (1987) comprobó que B. dictyoneura tuvo un buen
comportamiento durante la adaptación a condiciones estresantes de Colombia (suelos
con pH~ 4,7). Otros estudios en esta temática fueron los realizados por da Silva, de
Lima y Mochiutti (1992) en Brasil, sobre un suelo Latosol con pH~5,8 y con la utilización
de 25-25-20 kg N-P-K/ha. Al comparar los rendimientos de MS por corte en las
diferentes especies: Andropogon gayanus CIAT-6209 (1,5 y 0,9 t/ha), 6207 (2,3 y 1,1
t/ha), 6053 (1,4 y 0,6 t/ha), B. brizantha (1,9 y 1,0 t/ha) y B. humidicola (1,5 y 1,1 t/ha),
para los períodos de máximas y mínimas precipitaciones, dichos autores argumentaron
que las especies tuvieron una producción estacional aceptable y que se podía plantear
que las especies de Brachiaria fueron las que presentaron una mejor distribución
estacional de producción de forraje.
18
De igual forma, en estudios realizados en Perú con las especies mencionadas
anteriormente, en un suelo Ultisol (según la clasificación Soil Taxonomy, 1975) con
pH~5,1, donde se aplicaron fertilizantes a razón de 100-100-150 kg de N-P-K/ha y no se
utilizó riego, Passoni, Rosemberg y Flores (1992) detectaron que en el período de
máximas precipitaciones no se observaron diferencias del rendimiento de MS en las
accesiones de P. maximum, B. decumbens CIAT-606, B. brizantha, A. gayanus CIAT-
621 y B. dictyoneura CIAT-6133. Sin embargo, en el período de mínimas
precipitaciones la especie de mejor comportamiento fue B. decumbens CIAT-606, que
produjo 28 tMS/ha.
Al compararlas con la especie P. maximum, demostraron que esta aguanta pastoreo
intensivo pero solo con el mantenimiento de la fertilidad del suelo y responde bien a
fertilización. Se recomienda retirar los animales de la pastura cuando ésta alcance 20
cm de altura. Bajo estas condiciones, Panicum soporta cargas de 2,5 a 4 animales /ha
durante las lluvias y 1,5 a 2 animales/ha en sequía.
En otros estudios de evaluación Moreno Ruiz y Silva (1993), al comparar accesiones de
la familia de las gramíneas, pero en un suelo Mollisol (según la clasificación Soil
Taxonomy, 1975) con pH~6,2 de Brasil, encontraron que en la época de pocas
precipitaciones las accesiones B. brizantha CIAT-6387 y P. maximum fueron las que
presentaron las mayores tasas diarias de producción de MS (131 y 129 kg/ha,
respectivamente).
Asimismo, Parra y Gómez-Carabalí (2000) al realizar un estudio del comportamiento de
accesiones de algunas especies de gramíneas, en un suelo con pH~ 6,5 de Colombia,
destacaron que las mejores accesiones para esas condiciones fueron B. dictyoneura
CIAT-6133 y B. brizantha CIAT-6780 por tener una producción de 2,4 y 3,3 t MS/ha,
respectivamente, las cuales superaron a todas las accesiones evaluadas. Estos autores
también observaron que B. dictyoneura CIAT-6133 garantizó una mejor cobertura del
suelo, en comparación con las demás gramíneas evaluadas (P. maximum y Cynodon
19
sp.), por lo que otro uso para esta especie sería como protectora de la capa arable del
suelo, lo que beneficiaría a la macrofauna y microfauna del suelo.
De la misma manera, afirmaron que produce entre 10 y 30 t de MS/ha por año; proteína
entre 10-14% y digestibilidad de 60-70%. El alto valor nutritivo de esta especie resulta
en alta productividad animal; las ganancias de peso en una pradera bien manejada
oscilan entre 700 g/animal/día durante época de lluvias y 170 g/animal/día en verano.
1.3 Género Panicum
1.3.1 Ubicación taxonómica del género Panicum
Según Jardín Botánico Nacional (2012), este género se encuentra ubicado
taxonómicamente de la siguiente manera:
Reino Cormobionta
División Magnoliophyta
Clase Magnoliopsida
Subclase: Commelinidae
Orden Poales
Familia Poaceae
Subfamilia Panicoideae
Tribu Paniceae
Género Panicum
1.3.2 Origen y adaptación
Las especies del género Panicum se adaptan a una amplia gama de suelo y clima, por
lo que comúnmente se le denominan que son cosmopolitas (Machado y Seguí, 1997).
Sin embargo, necesita suelos de media a alta fertilidad, bien drenados con pH de 5 a 8
y no tolera suelos inundables. Alturas entre 0–1 500 msnm y precipitación entre 1 000
mm y 3 500 mm por año, crece muy bien en temperaturas altas. Tiene menor tolerancia
a la sequía que las Brachiarias, tolera media sombra y crece bien bajo árboles. P.
20
maximun, es un importante pasto forrajero que ha sido ampliamente naturalizado; nativa
de África e introducida a todos los trópicos y subtrópicos.
P. reprens nativa de la India; introducida en todos los trópicos y P. antidotale nativa de
los trópicos y subtrópicos del Viejo Mundo, introducida desde el sur de los Estados
Unidos hasta Argentina. Pasto de forraje cultivado en potreros, escapado en orillas de
caminos, zona pacífica; 40–50 m.
1.3.3 Características botánicas del género Panicum
Este es un género de alrededor de 470 especies. Son pastos perennes, de 1 a 3 m de
altura (Machado et al., 2004). Las flores están en panículas bien desarrolladas,
frecuentemente de más de 60 cm de longitud con numerosas semillas, de 3 a 6 mm de
largo y 1 a 2 mm de ancho. Los frutos se desarrollan en racimos. Ambas glumas están
presentes y bien desarrolladas.
Son plantas anuales o perennes y rizomatosas. Hojas con limbo plano o plegado; vaina
pubescente; lígula membranosa, corta, truncada, largamente ciliada. Inflorescencia en
panícula laxa, muy ramificada. Espiguillas cortamente pedunculadas, con flor inferior
estéril o masculina y superior hermafrodita. Dos glumas, muy desiguales,
membranosas; la inferior mucho más corta que las flores; la superior tan larga como las
flores. Flor inferior con lema casi tan larga como la gluma superior, herbácea y pálea
membranosa, tan larga como la lema y con 2 quillas, o mucho más corta que ésta y sin
quillas. Flor superior con lema sin nervios aparentes y pálea tan larga como ésta,
coriácea. Cariopsis oblongo-ovoidea.
1.3.4 Descripción botánica de las especies en estudio del género Panicum
1.3.4.1 Panicum maximum (guinea)
Perennes cespitosas; tallos 50-300 cm de largo, erectos a geniculados, comprimidos,
infrecuentemente ramificados; entrenudos glabros, nudos glabros o pilosos. Vainas
glabras a papiloso-hirsutas, ciliadas, el cuello generalmente hirsuto; membrana ligular
21
0,5-1,7 mm de largo, los cilios 0,2-0,7 mm de largo; láminas lineares, 20-85 cm de largo
y 8-35 mm de ancho, aplanadas, densamente hirsutas por detrás de la lígula,
escabrosas, glabras a hirsutas.
Panículas 13-60 cm de largo, terminales, raramente axilares, ramas 8-35 cm de largo,
las inferiores verticiladas, escabriúsculas, ascendentes a patentes, los pulvínulos
pilosos, los pedicelos a veces con algunos tricomas largos; espiguillas oblongo-
elipsoides, 2,8-3,7 mm de largo, adpresas a ascendentes, solitarias, glabras o pilosas,
subagudas; gluma inferior 1-1,7 mm de largo, 1/3–1/2 del largo de la espiguilla, 3-
nervia, aguda, gluma superior ligeramente más corta que la lema inferior o tan larga
como la espiguilla, 5-9-nervia, subaguda; flósculo inferior estaminado; lema inferior tan
larga como la espiguilla, casi tan larga como el flósculo superior, 5-7-nervia, subaguda;
pálea inferior tan larga como la lema inferior; anteras 1,4-2,1 mm de largo; flósculo
superior 2,3-2,8 mm de largo y 0,9-1 mm de ancho, rugoso, opaco, diminutamente
puberulento en el ápice, subagudo, sésil; anteras 1,3-1,7 mm de largo.
1.3.4.2 Panicum repens (Pasto Torpedo (United States), cheno (India), limanota
(Zambia), muran (Iraq).
Perennes rizomatosas; tallos 19-40 cm de largo, erectos, simples o esparcidamente
ramificados desde los nudos medios e inferiores; entrenudos y nudos glabros. Vainas
esparcidamente pilosas a glabras; membrana ligular 0,4-0,5 mm de largo, los cilios 0,2-
0,5 mm de largo; láminas lineares, 3-17 cm de largo y 2-6 mm de ancho, angostadas en
la base, aplanadas, glabras a esparcidamente pilosas.
Panículas 4-15 cm de largo, terminales, ramas 2-11 cm de largo, generalmente
solitarias, escabrosas, ascendentes a patentes; espiguillas elipsoides, 2,4-2,7 mm de
largo, solitarias, adpresas, agudas, glabras; gluma inferior 0.5–1 mm de largo, 1/5–2/5
del largo de la espiguilla, débilmente 3-5-nervia, truncada a aguda, gluma superior
ligeramente más corta que la lema inferior a tan larga como ella, 7-9-nervia, aguda;
flósculo inferior generalmente estaminado; lema inferior tan larga como la espiguilla, 7-9
22
nervia, aguda; pálea inferior 1/2 del largo del flósculo inferior; anteras 1,7-2,2 mm de
largo; flósculo superior 2,6-2,7 mm de largo y 1-1,3 mm de ancho, liso, brillante, glabro,
agudo, sésil; anteras 1,7 mm de largo.
1.3.4.3 Panicum antidotale (panico azul)
Perennes rizomatosas con las vainas del rizoma densamente adpreso pilosas; tallos 50-
200 cm de largo, erectos a decumbentes, generalmente ramificados; entrenudos
pruinosos, generalmente aplanados, nudos glabros o pilosos. Vainas glabras;
membrana ligular de 1 mm de largo, los cilios de 1 mm de largo; láminas lineares, 10-50
cm de largo y 4-20 mm de ancho, aplanadas, glabras.
Panículas 10-45 cm de largo, terminales, ramas 4-12 cm de largo, solitarias,
escabrosas, patentes; espiguillas elipsoide-lanceoloides, 2,5-3,1 mm de largo, en pares
desigualmente pedicelados en la base, solitarias hacia la punta, adpresas, agudas,
glabras; gluma inferior 1,4-1,7 mm de largo, ca 1/2 del largo de la espiguilla, 3-5-nervia,
aguda, gluma superior tan larga como la espiguilla o ligeramente más corta que ella, 5-
7-nervia, aguda; flósculo inferior estaminado; lema inferior tan larga como la espiguilla,
5-7-nervia, hialina en los márgenes, obtusa; pálea inferior casi tan larga como la lema
inferior; anteras ca 1.4 mm de largo; flósculo superior 1,8-2,8 m de largo y 0,7-1,2 mm
de ancho, liso, brillante, glabro, agudo, sésil; anteras ca 1,6 mm de largo.
1.3.5 Comportamiento productivo del género Panicum
P. maximum produce semilla durante todo el año, con mayor producción en la época
seca. La producción de semilla se dificulta por diferentes grados de desarrollo de las
espigas, dando como resultado cosechas de semilla inmadura, con un porcentaje de
germinación bajo. La germinación de semilla recién cosechada es de 5%, aumentando
con el tiempo de almacenamiento, con la mejor germinación a los 160-190 días
después de la cosecha. Los rendimientos oscilan entre 250 y 350 kg/ha.
23
Otro resultado fue el reportado por Machado y Olivera (2004) quienes estudiaron en un
suelo Ferralítico Rojo de baja fertilidad un total de 20 genotipos de P. maximum,
producto de la introducción y la mejora genética, fueron sometidos a pastoreo simulado
en condiciones de sombra y ausencia de riego y fertilización, con el fin de seleccionar
los más sobresalientes en términos de varios indicadores medidos y/o estimados en el
pasto. Para ello se utilizó un diseño de bloques al azar con tres repeticiones y análisis
de clasificación automática. La disponibilidad detectada fue aceptable en estas
condiciones (superior a las 2,0 tMS/ha/rotación), así como la composición química del
pasto; mientras que el grado de utilización estuvo influenciado por la estructura de los
genotipos y los peores valores se observaron en los tipos gigantes de hoja ancha.
El porcentaje de malezas se redujo con las rotaciones, lo que estuvo relacionado con la
sombra y la especie utilizada, aunque la SIH-127 mostró los mayores porcentajes y el
mayor grado de depauperación, asociado con su alto consumo. CIH-25 presentó un
comportamiento similar, pero resultó mejor que la anterior. En el primer año se formaron
ocho clases; los mejores tratamientos fueron K-193, T-62, SN-27, K-249, K-213 y T-92 y
la disponibilidad tuvo el mayor peso. En el segundo año se formaron 10 clases y
sobresalieron K-183, K-237, CTIH-5, CTIH-6 y T-62. Estos autores concluyeron que fue
posible determinar genotipos con un comportamiento adecuado, entre los que se
perfilan K-183, K-237, CTIH-5, CTIH-6 y CIH-25 como alternativas para futuras
evaluaciones en sistemas de producción en los que se utilicen arbóreas en condiciones
de secano y sin fertilización.
1.4 Género Pennisetum
1.4.1 Ubicación taxonómica del género Pennisetum
Según Jardín Botánico Nacional (2012), el género en estudio se encuentra ubicado
taxonómicamente de la siguiente manera:
Reino Cormobionta
División Magnoliophyta
Clase Magnoliopsida
24
Subclase: Commelinidae
Orden Poales
Familia Poaceae
Subfamilia Panicoideae
Tribu Paniceae
Género Pennisetum
1.4.2 Origen y adaptación
Paretas (1990) plantea que todos los P. purpureum se adaptan a un amplio rango de
suelos (latosólicos, no calcarios y momtmorilloniticos), se desarrolla en suelos con pH
entre ligeramente ácidos y neutros con buen drenaje y poco erosionados, requiere altas
temperaturas y precipitaciones anuales no menores de 1 000 mm. En Cuba, el king
grass (P. purpureum) es todavía una de las especies forrajeras más extendida por su
buen comportamiento en los diferentes ecosistemas.
También, Tergas (1984) planteó que esta especie es una gramínea forrajera con
vocación de corte adaptada a condiciones tropicales y hasta alturas de 1 000 a 1 500
msnm, con un rango amplio de distribución de lluvias y de fertilidad de suelos,
incluyendo suelos ácidos de baja fertilidad natural.
1.4.4 Descripción botánica de las especies en estudio del género Pennisetum
1.4.4.1 Pennisetum purpureum (Caña de azúcar forrajera, caña de uva, caña
japonesa, pasto panamá, pasto elefante).
Especie perenne, alta, con tallos de 2 a 4 cm de diámetro que alcanzan alturas entre 1 y
4 m. las hojas tiene de 2 a 3 cm de ancho y de 30 a 70 cm de largo. la panícula es
parecida a una espiga cilíndrica y densamente pubescente, de 30 cm de largo, muy
florecida.
Paretas et al. (1989), en estudios realizados sobre esta especie, plantean que esta es
una planta perenne de crecimiento erecto y de porte alto, su tallo puede alcanzar de 13
25
a 15 mm de diámetro, con abundantes yemas basales, hojas lanceoladas, anchas y
largas. Presenta inflorescencia en forma de espiga y florece de diciembre-febrero, es de
tipo amacollada, perenne que llega a crecer hasta de 2 a 3 m de altura y puede ser
utilizado en pastoreo y bajo corte.
Martínez et al. (1998) plantean que se puede observar el aspecto hojoso de esta
variedad. Su carácter genético le hace acortar el largo del entrenudo a medida que
envejece; sin embargo, esto no afecta el largo de las vainas y las hojas, por lo que
aumenta considerablemente su proporción de hojas. Roche y Hernández (1993)
plantean que varios cultivares de hierba elefante, P. purpureum han sido explotados por
nuestros ganaderos desde hace varias décadas, entre ellos Napier, Candelaria, King
grass, Merkejan y actualmente Craggz 65, Taiwán A-140 y 801-4, estos últimos de
reciente aprobación para la estructura varietal en áreas forrajeras.
Estos cultivares son perennes, erectos y de gran talla, con buen ahijamiento basal y
muestran gran vigor en sus rebrotes al ser cosechados, lo que les confiere buenas
características para ser utilizados como forraje en la mayoría de los países donde se
han cultivado. Los rendimientos anuales han estado por encima de los obtenidos en
otras gramíneas (Roche y Hernández ,1993).
El king grass ha tenido acogida en tierras altas y bajas, con suelos pobres y
moderadamente ácidos, y con períodos secos prolongados (Cordoví et al., 1980).
1.4.5 Comportamiento productivo del género Pennisetum
Los pennisetum han sido señalados como una de las especies de mayor potencial de
producción de biomasa en el trópico. Varios cultivares de este se han utilizado en Cuba
desde hace varias décadas, entre ellos el Napier, Candelaria y el King grass (Roche y
Hernández, 1993).
26
Según reportes de Catasús (1997), el cruzamieno entre P. purpureum x P thyphoide,
dio origen al cv king grass. Nombres comunes: Caña de azúcar forrajera, caña de uva,
caña japonesa, pasto panamá, Pennisetum híbrido (Mejía, 1984).
En otros estudios realizados sobre P. purpureum, se expresa que esta es una planta
perenne de crecimiento erecto y de porte alto, su tallo puede alcanzar de 13 a 15 mm
de diámetro con abundantes yemas basales, hojas lanceoladas anchas y largas.
Presenta inflorescencia en forma de espiga y florece desde diciembre a febrero, es de
tipo amacollado perenne que llega a crecer hasta de dos a tres m de altura y puede ser
utilizado en pastoreo y bajo corte.
El king grass puede producir hasta 26,3 t de materia seca (MS) con cortes cada 75 días
sin fertilizar, y hasta 37,7 t de MS fertilizado con 200 kg.ha-1 de N (Pinzón y González,
1978). En Cuba se han obtenido rendimientos de 47,3 a 52,8 t MS.ha-1 con cortes cada
60 días a una altura de 10 a 25 cm del suelo (Cordoví et al., 1980). Si el crecimiento del
pasto no es interrumpido por bajas temperaturas y si el N y el agua no son limitantes, se
obtienen altas producciones cortando el pasto a una altura de 0 a 15 cm del suelo cada
45 a 60 días (Mendoza y Stanley, 1987). En los estudios de la composición química, y
los informes así lo demuestran (Cáceres y González, 2000), se ha encontrado que la
calidad nutritiva del king grass es variable.
Como resultado de los primeros estudios del mejoramiento del P. purpureum en Cuba,
se han generado diferentes clones, algunos de los cuales han manifestado la
estabilidad genética necesaria para ser considerados como variedades, el CT-115 y el
Cuba CT-169, las cuales se consideran entre las más destacadas para el pastoreo, la
primera, y para el corte, la segunda.
El CT-115, como es conocido entre los ganaderos, es una planta forrajera obtenida a
partir del king grass en los laboratorios del Instituto de Ciencia Animal de La Habana por
el método de cultivo de tejidos, entre cuyas características se destacan, según Martínez
27
et al. (1994): una mayor número de hijos/plantón, mayor contenido de azúcares, un
porte bajo al disminuir progresivamente el tamaño de los entrenudos, mayor relación
hoja/tallo al acortarse los nudos, muy poco florecimiento y buena respuesta al pastoreo.
De la revisión efectuada al respecto, se puede resumir que el contenido promedio de
proteína cruda es de 8,3%, variando entre 4,7 y 5,3% en los tallos, y de 8,8 y 9,5% en
las hojas (Hernández et al., 1989). Con estos valores se puede asumir que es una
gramínea de gran potencial forrajero dado sus rendimientos en biomasa y, por ende, en
nutrientes.
Los suelos dedicados a la producción de pastos son muy diversos y se diferencian por
las variadas condiciones de fertilidad y factores limitantes que presentan para el
desarrollo y explotación de los mismos. Paretas (1990) publicó los resultados del
programa de regionalización que define las mejores relaciones de adaptación de los
pastos y forrajes en los suelos de Cuba, lo que constituye una herramienta de trabajo
para la agrotecnia y el manejo de los pastos en los ecosistemas ganaderos.
Su escasa floración permite dejarlo en el campo desde finales de la primavera hasta el
inicio de la seca, sin que se afecte su calidad, lo que sumado a su buena proporción de
hojas y capacidad de rebrote, le confieren a diferencia del king grass que le dio origen,
características favorables para el pastoreo (Machado et al., 1979). Si se utiliza como
reserva hay que dejarlo en el campo desde junio-agosto hasta diciembre-enero. El
pastoreo frecuente se podría hacer, pero así no se cumpliría el objetivo principal de la
misma que es almacenar comida para la seca. Similar a todos los Pennisetum, el Cuba
CT-115 crece acumulando biomasa hasta los 5-6 meses, pero lo hace a una altura
considerablemente menor que otros (1,40 m) (Herrera, 2005).
Si se deja en pie, después de 6 meses ya no acumula más biomasa. Experiencias de
varios años en el ICA, han indicado que si se suma 6 cortes en un año, a dos meses
cada uno, la suma de todos los cortes no superaría las 90 t de forraje/ha/año. Sin
28
embargo, en dos cortes en el año (de 6 meses cada uno) el total del forraje puede ser a
las 200 t.ha-1.
1.5 Metodologías de evaluación
La selección de las variedades de pastos y forrajes como base de la estructura de los
agroecosistemas productivos y como elemento esencial de las tecnologías que
sustentan estos sistemas, es una labor compleja particularmente para los países en
desarrollo, según lo planteado por Machado (1997) y Machado y Seguí (1997).
En Australia se ha producido un fuerte desarrollo de las investigaciones en evaluación
de plantas. Así, en la fase de selección inicial, según informes de la CSIRO (1980), se
han estudiado varias especies de gramíneas (P. maximum, B. decumbens y Saccharum
officinarum) y leguminosas herbáceas (Desmodium spp., Trifolium spp.). En estos se ha
trabajado con parcelas pequeñas (3 y 6 m2), utilizando frecuencias de corte fijas para
las épocas de seca y lluvia, respectivamente. Además, se realizaron estudios en lo
referente a la estabilidad y la composición del pastizal y la relación suelo-planta-animal.
También se desarrollaron estudios más profundos en esta temática, en los cuales se
establecieron las asociaciones de plantas, con la inclusión de leguminosas herbáceas
como Macroptilium atropurpureum y Centrosema spp., así como estudios con la
utilización de los animales.
Según la CSIRO (1981) en la fase inicial de evaluación existen diversos criterios para el
desarrollo de estos trabajos en lo referente a: la cantidad de especies a evaluar, el
tamaño de las parcelas a utilizar, la frecuencia de observación de los indicadores, entre
otros; los cuales se deben establecer de acuerdo con los objetivos que se persiguen en
la misión de investigación.
Sin embargo, existe un consenso generalizado en relación a las evaluaciones
preliminares. De esta forma, las primeras evaluaciones que se realizaron en Cuba
abarcaron amplios grupos de géneros y especies, no así amplios grupos de accesiones
29
de estos últimos, lo cual limitó en cierto modo la certeza de obtener la mejor accesión
específica para cada ambiente en particular.
En este sentido, cabe hacer alusión a los trabajos desarrollados por Hernández et al.
(1981), quienes evaluaron 17 gramíneas de diferentes géneros en los que se
encontraban accesiones de Brachiaria, Cynodon, Cenchrus, Chloris, Digitaria, Panicum
y Pennisetum, y por Machado y Pedraza (1981), en los cuales se estudió el
comportamiento de 38 variedades, de ellas 30 gramíneas y 8 leguminosas, de varios
géneros para ambas familias.
Es importante destacar que en la fase inicial las evaluaciones deben realizarse en
parcelas pequeñas (que no excedan 4 m2), debido a que el objetivo principal de esta
fase es obtener una ponderación del comportamiento general de las accesiones y
realizar una selección de las mejores, que después formarán parte de los experimentos
en la otra fase subsiguiente de evaluación. También en esta primera fase hay
divergencia de criterio en cuanto a la utilización de réplicas, ya que con ello lo que se
persigue es buscar el máximo de homogeneización del área en la cual se está
trabajando.
En este sentido, Roche et al. (1995) estudiaron, en fase inicial, una colección de 73
accesiones de Brachiaria spp., para lo cual utilizaron parcelas sencillas de 3,0 x 2,5 m,
sin réplicas. También el criterio de utilizar parcelas pequeñas en los estudios primarios
fue empleado por Álvarez, Martínez, Hernández, Vega y Quintana (1998), quienes
estudiaron una colección de Canavalia spp y para ello utilizaron parcelas de 3 x 1 m.
Estos criterios de evaluación planteados con anterioridad han permanecido vigentes
con el transcurso del tiempo, lo que se puso de manifiesto con los resultados publicados
por la CSIRO a principios de la década de los 90´ (CSIRO, 1990). También esos
criterios se mantienen en los trabajos realizados por Álvarez y Lasa (1994); Appa Rao,
Mengesha, Gopal Reddy y Prasada Rao (1998); Agboire, Wada y Ishaq (2000); Ojeda,
30
Coirini, Cosiansi, Zapata y Zygadlo (2001) y Silveri, Dalla Ragione, Porfiri, Torricelli,
Tosti y Veronesi (2002), al estudiar colecciones de maíz, sorgo, caña de azúcar,
peperina y leguminosas forrajeras, respectivamente; en los que utilizaron amplios
grupos de accesiones dentro de un mismo género y parcelas simples que variaron en
dependencia de la especie a estudiar.
Otro aspecto metodológico que ha tenido variación en los trabajos de mejora y
selección, es el referente al diseño experimental y el uso de la fertilización y el riego. En
los trabajos de evaluación agronómica ha predominado la utilización de un diseño
totalmente aleatorizado y en los de mejora genética se han utilizado diseños como el
Carolina del Norte (Seguí, Fundora y García, 1995) y látice cuadrado de 4 x 4 (Seguí,
Machado y Blanco, 1992; Seguí y Machado, 1992).
En Cuba las primeras investigaciones realizadas en la temática de evaluación fueron,
en la mayoría de los casos, ensayos y experimentos desarrollados en ambientes
favorables. En ellos se utilizó riego y fertilización (con una dosis media de 150 kg/ha) o,
al menos, esta última aplicada durante la época de lluvia. Ya a partir de los años 90´
este criterio varió, debido a que en el país se han presentado graves problemas con la
importación de fertilizantes, lo que ha sugerido que se debe realizar dichos estudios sin
la utilización de fertilizantes inorgánicos o con dosis mínimas y/o con la inclusión de los
orgánicos (cachaza, humus, entre otros). Además en estos ensayos y/o experimentos
se abarcaban amplios grupos de géneros y especies.
Por esta razón, la filosofía actual de investigación, desde las primeras fases del flujo
varietal, debe estar dirigida hacia la búsqueda de accesiones (futuras variedades
comerciales) con adaptación específica a ambientes desfavorables, sobre la base de la
evaluación de amplias colecciones de una especie, o de varias especies afines del
mismo género, en dichos ambientes y su inserción posterior en el flujo varietal y en los
sistemas de producción (Machado y Seguí, 1997).
31
A través de los años de experiencia, en la Estación Experimental de Pastos y Forrajes
“Indio Hatuey” se concibió y se creó una metodología de evaluación de especies
herbáceas (Machado, Seguí y Alonso, 1997), la cual está acorde con los criterios
mundialmente aceptados para dichos estudios. Esta metodología está encaminada a
apoyar y sustentar el trabajo a desarrollar en términos de introducción, evaluación y
selección del material obtenido por las diferentes vías (colecta nacional, introducción
foránea, mejora genética o biotecnológica) dentro del flujo varietal. Todo ello organizado
y estructurado, de forma tal que se gane tiempo y no se pierda calidad en la
determinación del material realmente promisorio para los ambientes en los cuales se
estudien las plantas, con lo que es posible alcanzar resultados relevantes y confiables.
En este sentido se puede mencionar algunos trabajos realizados siguiendo la secuencia
de trabajo de dicha metodología, como los de Seguí y Mendoza (1999), al estudiar 240
accesiones de Panicum maximum en un suelo de mediana fertilidad, y los que llevaron
a cabo Seguí et al. (2001); Olivera et al. (2007), quienes estudiaron una colección de 69
accesiones del género Centrosema en un suelo ácido y una colección del género
Brachiaria en un suelo bajo (con problemas de encharcamiento parcial). En estos no se
utilizó riego ni fertilización, y las parcelas empleadas tuvieron un área de 3 m2 (3 x 1 m)
y sin réplicas, primando así los conceptos y estrategias expuestos.
Capítulo 2. Metodología experimental
32
CAPÍTULO 2. METODOLOGÌA EXPERIMENTAL
2.1 Descripción del área
2.1.1 Ubicación del área experimental
El estudio se realizó durante un año, en las áreas de la Estación Experimental de
Pastos y Forrajes "Indio Hatuey", la cual se encuentra ubicada en los 22º 48’ y 7’’ de
latitud Norte y los 79º 32’ y 2’’ de longitud Oeste, a una altitud de 19,9 msnm, en el
municipio de Perico, provincia de Matanzas, Cuba (Academia de Ciencias de Cuba,
1989).
2.1.2 Características del clima
El comportamiento de las variables climatológicas más importantes (tabla 2.1) fue
tomado de los registros mensuales de la Estación Meteorológica ubicada en las áreas
de la Institución.
Tabla 2.1 Comportamiento de las variables climatológicas durante el período experimental.
Año Época Precipitación
(mm) Temperatura mínima (°C)
Temperatura media (°C)
Temperatura máxima (°C)
Humedad relativa (%)
1 PLL 1 349,1 21,1 25,2 32,8 83,2 PPLL 415,8 16,5 22,7 29,9 78,7
** PLL 1 035,5 20,7 26,0 32,1 83,1 PPLL 263,9 16,0 22,1 29,7 80,8
* Promedio de las variables climatológicas del período experimental ** Promedio de las variables climatológicas en los últimos 15 años
Como se observa, en ambos período poco lluvioso (PPLL) y lluvioso (PLL) con relación
al volumen de lluvias fue superior a la media de los 15 años anteriores al período de
investigación.
Los demás indicadores las temperaturas máximas, mínimas media y humedad relativa
mostraron valores muy similares, en correspondencia con los períodos y fluctuaron en
un rango muy estrecho alrededor de la media de los 15 años anteriores al período
experimental.
33
2.1.3 Características del suelo
El experimento se llevó a cabo en un suelo de topografía llana, con pendiente de 0,5 a
1,0% y clasificado por Hernández et al. (2003) como Ferralítico Rojo lixiviado, de rápida
desecación, arcilloso y profundo sobre calizas. Este tipo es equivalente al grupo de los
Ferrosoles, en el sistema de clasificación de la FAO-UNESCO (Alonso, 2003). La
profundidad promedio hasta la caliza es de 150 cm. Los resultados de su composición
química del suelo se muestran en la tabla 2.2.
Tabla 2.2 Características químicas del suelo del área experimental.
Indicador Valor medio
Método analítico
pH (H2O) 6,34 Potenciométrico Materia orgánica (%) 5,42 Oniani Nitrógeno total (%) 0,22 Kjeldahl (citado por Jackson, 1958) P2O5 (mg/100g suelo) 3,75 Walkley-Black (citado por Paneque, 2001) K+ (meq/100g de suelo) 0,19 Maslova (citado por Dinchev, 1972) Ca++ (meq/100g de suelo) 17,1 Maslova (citado por Dinchev, 1972) Mg++ (meq/100g de suelo) 2,30 Maslova (citado por Dinchev, 1972) Na+ (meq/100g de suelo) 0,19 Maslova (citado por Dinchev, 1972)
De acuerdo con dichos indicadores, el suelo de esta área tiende a ser ligeramente
ácido, mientras que el contenido de materia orgánica es alto, superior a lo señalado por
Hernández (2000), que es de 2 a 3%. Los valores del contenido de nitrógeno total son
considerados medios; tiene bajos tenores de fósforo disponible y las bases
intercambiables (K, Ca, Mg) muestran valores de moderados a altos. En función de
estas características puede considerarse un suelo de mediana fertilidad.
Presenta baja densidad aparente, alta porosidad total y estructura granular media,
condiciones que favorecen el buen desarrollo radical, la aireación y el movimiento del
agua. La retención de agua es baja, lo cual puede acentuar los problemas derivados de
la sequía estacional (Hernández et al., 2003).
34
2.2 Descripción de la investigación
2.2.1 Material vegetal utilizado
En la tabla 2.3 se muestran las accesiones introducidas estudiadas. Todas se
caracterizaron en condiciones de campo.
Tabla 2.3 Accesiones estudiadas
Género Cantidad de
especies Cantidad de accesiones
Nombre
Panicum 3 12
P. maximum, P. maximum (CIAT-6653, 673, 16061, 3600, 1600). (clave 0081, 0031, 0042)
P. repens (CIAT-26264)
P. antidotale (CIAT-6039, M/70/395)
Brachiaria 4 6
B. decumbens
B. brizantha (insurgente, CIAT-16322, 26646)
B. purperascens
B. humidicola
Pennisetum 1 4 P. spp (NH2, MF-24, hibrido-31, No2121.2)
2.2.2 Preparación de suelo y plantación
Para la preparación de suelo se empleó el método convencional consistente en arado,
pase de grada y surcado. La plantación se realizó en surcos separados a 0,70 m con
una distancia de 0,60 m entre plantas. Para efectuar esta se utilizaron porciones de
macollas conformadas por 8-10 vástagos, con una longitud aproximada de 15,0 a 20,0
cm. Se emplearon parcelas de 3,0 x 1,0 m sin réplica, con separación entre las calles
de 1,50 m. Durante el periodo experimental no se utilizó ni riego ni fertilización. El
experimento tuvo una duración de un año después del período de establecimiento.
35
2.2.3 Procedimiento experimental
Para la realización de las mediciones y/o estimaciones, se tuvo en cuenta la
metodología propuesta por Machado, Seguí y Alonso (1997)
2.2.3.1 Evaluación agronómica
Durante la etapa de explotación se tuvieron en cuenta los siguientes indicadores.
Altura de la planta. Se determinó en cuatro plantas o puntos por parcelas, en
dependencia del hábito de crecimiento de la especie o accesión en estudio utilizando
una regla graduada (cm), la posición de la misma fue siempre perpendicular al suelo,
entonces se tomó la longitud desde este hasta el valor medio del mayor conglomerado
de hojas suspendidas en la mano para las especies macollosas; y para las rastreras se
tomó la altura media del césped.
Hojosidad
1= Pésima: abundancia de tallos con entrenudos largos, hojas cortas y/o muy angostas
(< 50% de hojas)
2= Baja: abundancia de tallos con entrenudos cortos y hojas medianas y/o estrechas
(51-60% de hojas)
3= Regular: apreciación de tallos con entrenudos cortos y hojas largas y/o anchas
(61-70% de hojas)
4= Buena: abundancia de hojas con relación a los tallos y presencia de entrenudos
cortos y hojas largas y/o anchas (71-81% de hojas)
5= Excelente: predominio de las hojas sobre los tallos, entrenudos muy cortos y hojas
muy largas y/o anchas (>80% de hojas)
Cobertura
1= 10-20% de área cubierta (muy poco cubierta)
2= 21-40% de área cubierta (poco cubierta)
3= 41-60% de área cubierta (parcialmente cubierta)
36
4= 61-80% de área cubierta (cubierta)
5= > 80% de área cubierta (bien cubierta)
Vigor
1= Pésimo (a, b, c, y d son extremadamente negativos)
2= Bajo (al menos 2 elementos son positivos y el resto muy negativo)
3= Regular (al menos 2 elementos son muy positivos)
4= Bueno (solo un elemento es negativo y el resto positivo)
5= Excelente (todos los elementos son muy positivos)
a: predominio de hojas sobre tallos
b: coloración de las plantas
c: lesiones o síntomas causados por plagas y enfermedades respectivamente
d: estrés (marchites, poco desarrollo de vástagos o rebrotes, debilidad, necrosis, entre
otros)
Daños causados por plagas
0= 0-1% de área afectada (inmune)
1= 2-10% de área afectada (resistencia)
2= 11-20% de área afectada (tolerante)
3= >20% de área afectada (susceptible)
Obtenido el rango de lesiones, se asentó en la planilla de campo el valor del grado
correspondiente, para cada planta o marco. Posteriormente se determinó el valor del
grado de lesiones para cada accesión mediante la siguiente formula:
GM= Σ (n * v)
37
Leyenda:
N GM: Grado medio de lesiones
n: número de plantas o marcos en cada grado
v: valor del grado, según el rango de daño predominante
N: número total de plantas o marcos muestreados
Síntomas causados por enfermedades y clorosis
0= 0% (de plantas, partes de estas o área afectada)
1= 1% (de plantas, partes de estas o área afectada)
2= 5% (de plantas, partes de estas o área afectada)
3= 10% (de plantas, partes de estas o área afectada)
4= 25% (de plantas, partes de estas o área afectada)
5= 50% (de plantas, partes de estas o área afectada)
6= 100% (de plantas, partes de estas o área afectada)
Obtenido el grado de afectaciones predominante en cada observación, se asentó en la
planilla de campo el valor del grado correspondiente, para cada planta o marco.
Posteriormente se determinó el valor del índice de infestación para cada accesión
mediante la fórmula siguiente:
I I (%) = Σ (n * v) x 100
Leyenda:
(i* N) I I= índice de infestación (%)
n= número de plantas, partes de estas o áreas en cada
grado
v= valor del grado según el rango predominante en las
plantas, parte de esta o área
i= máximo valor de la escala
resistente
tolerante
susceptible
imune
38
N= número total de plantas, parte de esta o áreas
muestreadas
Para estimar las afectaciones por clorosis y necrosis se utilizó el mismo procedimiento
que para los síntomas por enfermedades. Estas mediciones se realizaron con una
frecuencia de 15 días durante todo el año de evaluación.
Rendimiento de biomasa. Para la realización de esta estimación se hizo un corte de
homogenización a los 30y 50 días, y con posterioridad el corte de evaluación en cada
una de las épocas (lluviosa y poco lluviosa). Para esta actividad se utilizó un marco de
0,25 m2.
2.3 Procesamiento estadístico
Los resultados se procesaron mediante el análisis de componentes principales (ACP)
(Morrison, 1967), en el cual se tomó como criterio de análisis aquellas componentes
principales que presentaron valores propios superiores a 1 y factores de suma o de
preponderancia mayor que 0,70.
Se aplicó el análisis de conglomerados para la agrupación y selección de las
accesiones utilizando como criterio la distancia euclidiana, a partir de lo obtenido en el
ACP (Torres et al., 2006). De esta forma se dispuso de grupos de especies que
permitieron hacer un análisis más sencillo y objetivo de su comportamiento.
Todos los análisis mencionados anteriormente se realizaron a través del programa
estadístico SPSS® versión 11,5 para Microsoft® Windows® (Visuata, 1998).
Capítulo 3. Resultados y Discusión
39
CAPÍTULO 3. RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Para que el desarrollo ganadero de un país o de una región esté garantizado, es
necesario efectuar estudios encaminados a discernir cuáles son los géneros, especies y
accesiones de pastos que mejor se adaptan a sus factores agroclimáticos y de suelo,
donde la productividad, el valor nutritivo, la resistencia y/o tolerancia a los factores
estresantes (como son la afectación de insectos potencialmente plaga, la afectación por
enfermedades y los efectos de la sequía), la velocidad de establecimiento, la
persistencia de las especies frente al animal y la factibilidad de introducirlas en las
explotaciones, desempeñan un papel determinante para decidir cuáles son las más
adecuadas (Machado, Machado, Seguí, Olivera, Toral y Wencomo, 2006).
La adaptación del germoplasma a las condiciones de clima, suelo, afectaciones por
agentes estresantes (insectos fitófagos y microorganismos patógenos) de una región,
área o localidad es el punto de partida lógico de cualquier programa de investigación en
pastos. En Cuba, al igual que en otros países, en la primera etapa de investigación
(Hernández, 1998), se enfatizó en la introducción de nuevas especies y variedades de
pastos procedentes de otros lugares. Por esta vía, se han logrado algunas variedades
comerciales, especialmente de gramíneas, de un mayor potencial en producción, valor
nutritivo, adaptación al medio, y otros rasgos en los que superan a los pastos naturales
y mejorados que se empleaban anteriormente.
La evaluación del material introducido o colectado de interés investigativo, constituye un
elemento vital en la primera fase de evaluación del preflujo varietal. El objetivo que
persigue esta fase es realizar una discriminación y selección amplia de estos
fitorrecursos o primera selección. Esta evaluación se realiza, casuísticamente, en
cualquiera de las condiciones edafoclimáticas que se estime conveniente y para un fin o
fines investigativos determinados acorde con la política trazada por las instituciones
encargadas de llevar a cabo esta importante labor.
40
En Cuba, a través de los años, se han realizado disimiles investigaciones en varias
zonas del país, en las cuales se han evaluado colecciones de diferentes géneros y
especies, pero con el decursar de los años estos estudios se fueron perfilando a
colecciones de una misma especie y en lugares característicos de zonas ganaderas,
según Machado et al. (2006); sin embargo, es de mucha importancia conocer las
potencialidades productivas de todo material que se introduzca.
3.1 Evaluación de las accesiones de Brachiaria spp.
En la tabla 3.1 se muestran los resultados del Análisis de Componentes Principales
(ACP) en la época de lluvia. Se detectó una varianza acumulada de 90,51% en las tres
primeras componentes. Las variables que mejor explicaron la varianza en la primera
componente (43,91%) fueron la altura, el rendimiento y la afectación por enfermedades
(de forma negativa); por su parte, la segunda componente extrajo un 27,33% de la
varianza; explicada principalmente por los indicadores hojosidad y clorosis; mientras
que la tercera componente extrajo una varianza de 19,26%, la que estuvo explicada por
la cobertura y de forma negativa por la afectación por insectos potencialmente plaga.
Puede observarse que la variable vigor no se incluye en ninguna de las tres
componentes, debido al valor que posee su factor de suma o de preponderancia (0,691,
ya que es inferior a 0,70), por lo que se pudiera prescindir de ella a la hora de realizar
otras evaluaciones en circunstancias semejantes a esta investigación en estas
condiciones.
Mediante el análisis de conglomerados sobre la base de los resultados del ACP, se
formaron cuatro grupos (anexo 1). En la tabla 3.2 se muestran las accesiones
pertenecientes a cada uno de los grupos formados con sus medias y desviaciones
estándar.
41
Tabla 3.1. Resultados del ACP y relación entre los indicadores evaluados en la época de
lluvia de las accesiones de Brachiaria
Indicador Componentes principales
CP1 CP2 CP3
Altura 0,809 0,485 -0,101
Plagas 0,464 0,289 -0,708
Enfermedades -0,953 -0,145 0,018
Hojosidad 0,532 0,766 0,233
Cobertura 0,310 0,088 0,856
Vigor 0,691 0,598 0,388
Clorosis -0,127 0,934 -0,247
Rendimiento 0,929 -0,148 0,174
Valor propio 3,51 2,18 1,54
Varianza (%) 43,91 27,33 19,26
Acumulado (%) 43,91 71,25 90,51
Al realizar el análisis de componentes principales para la época de seca se obtuvieron
tres componentes, la cuales explicaron el 91,69% de la variación total (tabla 3.3). En
esta componente todos los indicadores contribuyeron a expresar la varianza extraída.
Con este análisis se corroboró la estrecha relación entre los indicadores.
Tabla 3.2 Distribución de los individuos, media y desviación estándar según el Análisis de Conglomerados de las accesiones
de Brachiaria
Indicador Grupo I Grupo II Grupo III Grupo IV
X DS X DS X DS X DS
Altura 53,95 12,23 51,90 - 27,0 - 65,2 65,2 Plagas 0,00 0,00 0,00 - 0,00 - 0,00 0,00 Enfermedades 0,09 0,06 0,14 - 0,20 - 0,07 0,07 Hojosidad 0,04 0,00 0,04 - 0,03 - 0,04 0,04 Cobertura 0,04 0,00 0,03 - 0,03 - 0,03 0,03 Vigor 0,03 0,00 0,04 - 0,02 - 0,03 0,03 Clorosis 0,00 0,00 0,02 - 0,00 - 0,01 0,01 Rendimiento 2,53 0,05 1,67 - 1,56 - 2,42 2,42
Grupo Cantidad Accesiones
I 2 Brachiaria decumbens, Brachiaria brizantha (CIAT-16322)
II 1 Brachiaria brizantha (ins)
III 1 Brachiaria purpurascens
IV 2 Brachiaria brizantha (CIAT-26646) Brachiaria humidicola
42
Tabla 3.3. Resultados del ACP y relación entre los indicadores evaluados en la época de
seca de las accesiones de Brachiaria
Indicador Componente principal
CP1 CP2 CP3
Altura 0,786 0,542 0,297
Plagas -0,563 0,158 0,755
Enfermedades -0,198 -0,770 -0,177
Hojosidad 0,971 -0,222 -0,070
Cobertura 0,901 0,298 -0,037
Vigor 0,982 0,115 -0,037
Clorosis 0,173 0,068 0,976
Rendimiento -0,059 0,944 -0,019
Valor propio 3,72 1,95 1,65
Varianza (%) Acumulado (%)
46,58 24,48 20,62
46,58 71,06 91,69
La primera componente explicó el 46,58% de la varianza total y estuvo conformada
fundamentalmente por la altura, la hojosidad, la cobertura y el vigor. Por su parte, la
segunda componente explicó el 24,48% de variabilidad, y en la misma influyeron el
rendimiento y las enfermedades (de forma negativa); mientras que la tercera
componente extrajo el 20,62% de la varianza acumulada, explicada por la afectación de
insectos potencialmente plaga y la clorosis.
La variabilidad mostrada a través de los indicadores en ambas épocas, puede que se
deba a la alta relación que existió entre estos en la etapa evaluada, aspecto que
permite la agrupación de las accesiones y su posterior selección en función de ellos. El
alto porcentaje de la variación explicada por las componentes, sugiere que esta
contiene indicadores que pueden discriminar bien las accesiones en estudio. Por ello,
pudiera plantearse que la variabilidad estuvo relacionada con el contraste en el
43
comportamiento de estas especies y accesiones, y no con el hábito de crecimiento que
las caracteriza.
El comportamiento de las accesiones para ambas épocas de la expresión de la
variabilidad adquiere notable trascendencia, ya que se relacionó, fundamentalmente,
con variables tan importantes como la altura de la planta, la hojosidad, el rendimiento, la
clorosis, la cobertura, entre otros, los cuales tienen valores propios superiores a 1; este
índice puede considerarse aceptable (Philippeau, 1986) en el momento de seleccionar
cualquiera de las variables para futuros análisis.
Según plantea el autor anteriormente mencionado, el valor propio debe ser 1 o mayor,
para que la variabilidad correspondiente a cada indicador esté mejor relacionada con
cada eje en correspondencia con este tipo de análisis. Ello se pudo comprobar en el
presente trabajo, en el que la variabilidad estuvo bien distribuida, ya que dicho indicador
en todos los casos fue superior a 1. Por tal razón, todos los indicadores evaluados,
excepto el vigor, se incluyeron en la agrupación de estas accesiones.
Al respecto, Seguí et al. (1989) plantearon la gran importancia que tiene el conocimiento
de las asociaciones de indicadores en el proceso de selección y demostraron que estas
pueden ser ventajosas o no, ya que cuando se selecciona para un indicador
determinado, este puede estar asociado a otro deseable o no deseable.
La variabilidad hallada puede relacionarse, entre otros factores, con la respuesta
individual de las accesiones al clima y al manejo y con la heterogeneidad del material.
Machado y Núñez (1993) obtuvieron similar comportamiento al estudiar una colección
del género Centrosema, entre las que se incluían las especies C. plumieri, C. schottii, C.
schiedianum y C. brasilianum, en asociación con la bermuda 68.
Por ello, independientemente de que se conocen las diferencias que en este sentido
existen entre las especies y las accesiones y entre las gramíneas y las leguminosas, se
44
considera que estos resultados pudieran revelar, como elementos trascendentes, que
en esta colección fue posible encontrar una sensible diferenciación, lo que debe
constituir un elemento alentador para dar continuidad al trabajo evaluativo y selectivo en
etapas posteriores, e igualmente permitiría conocer el comportamiento de cada
accesión en función de los indicadores evaluados.
Ello pudiera indicar que, independientemente de las condiciones edafoclimáticas
existentes, las poblaciones, y en particular las accesiones de las especies del género
Brachiaria, pudieron expresar una marcada variación entre individuos para algunos
indicadores y agruparse en función de esas variables, lo que puede representar un
elemento positivo en el trabajo de caracterización y evaluación. En ello pudo influir, la
variabilidad inter e intraespecífica existente en la muestra estudiada, ya que está
conformada por diferentes especies con sus respectivas accesiones, las cuales varían
de forma marcada desde el punto de vista morfológico.
El análisis de conglomerados sobre la base de los resultados del ACP (anexo 2)
durante esta etapa, permitió la formación de tres grupos. Las accesiones pertenecientes
a cada uno de ellos se muestran en la tabla 3.4, al igual que la media y la desviación
estándar de cada uno de los grupos formados.
Atendiendo a los resultados de esta tabla, se puede deducir que las accesiones
Brachiaria decumbens, Brachiaria brizanthan (ins), Brachiaria brizantha (CIAT-16322),
pertenecientes al grupo I, se caracterizaron por ser las plantas de mayor altura, con
mayor hojosidad, cobertura, vigorosas y de más rendimiento, con respecto a las
accesiones pertenecientes a los grupos II y III, excepto para la afectación de insectos
potencialmente plaga y para la clorosis (a diferencia del grupo III).
Tabla 3.4 Distribución de los individuos, media y desviación estándar según el Análisis de Conglomerados de las accesiones
de Brachiaria
Indicador Grupo I Grupo II Grupo III
X DS X DS X DS
Altura 41,23 2,20 29,50 4,38 19,00 - Plagas 0,11 0,05 0,34 0,08 0,08 - Enfermedades 4,57 1,98 5,59 1,30 8,32 - Hojosidad 3,71 0,32 2,94 0,28 3,20 - Cobertura 3,47 0,50 2,32 0,25 2,40 - Vigor 3,36 0,31 2,46 0,06 2,60 - Clorosis 0,96 0,20 1,20 0,11 0,28 - Rendimiento 0,66 0,14 0,64 0,25 0,53 -
Grupos Cantidad Accesiones
I 3 Brachiaria decumbens, Brachiaria brizantha (ins), Brachiaria brizantha (CIAT-16322)
II 2 Brachiaria purpurascens, Brachiaria brizantha (CIAT-26646)
III 1 Brachiaria humidicola
45
Es válido resaltar que las accesiones que conformaron el grupo I en esta etapa no
fueron las mismas que se agruparon en la época de lluvia, por lo que pudiera plantearse
que las mismas deben ser fuertemente monitoreadas, de manera tal que sea posible
verificar si mantienen la posición ventajosa o no en relación con las accesiones
evaluadas, o si por el contrario, son superadas por otras que mantuvieron un
comportamiento menos sobresaliente en la dicha época.
En estos resultados se muestra el comportamiento diferenciado de las accesiones que
pertenecen al grupo I, con respecto a las pertenecientes a los demás grupos. Ello
pudiera revelar que en las poblaciones de las especies de este género, se pueden
hallar individuos capaces de mostrar o no mejor un comportamiento en suelos como el
estudiado; lo que pudiese estar asociado a la posibilidad que posee el genoma
individual de responder o no al medio circundante (Hidalgo 2003).
De manera general los resultados del análisis de componentes principales (ACP)
realizado, en ambas épocas para todas las accesiones, pueden considerarse altas, ya
que para todos los casos esa varianza acumulada fue superior al 75%, porcentaje que
se considera aceptable para este tipo de análisis. Esto puede que se deba
fundamentalmente a la estrecha correlación que existió entre las variables estudiadas,
específicamente para los indicadores altura, la hojosidad, afectación por insectos
potencialmente plaga, enfermedades, el vigor y en varios casos el rendimiento, los que
fueron coincidentes en alguna de las épocas; aspectos que contribuyeron
decididamente en la agrupación de las accesiones estudiadas y su posterior selección.
Resultados similares se han reportado en varios estudios con especies de gramíneas y
leguminosas en diferentes condiciones ambientales, como son los realizados por
Olivera et al. (2007) en una colección de 36 accesiones de B. brizantha; Wencomo
(2008) al estudiar una colección de 23 accesiones de Leucaena spp y Steven (229) al
evaluar una colección de accesiones de P. maximun; estos autores encontraron una
varianza de más del 75% y casi siempre la misma se extraía en las tres primeras
46
componentes, cuando utilizaron indicadores similares a los de este trabajo durante el
período de explotación, los cuales estuvieron positivamente relacionados y
contribuyeron fuertemente a la agrupación posterior de las accesiones estudiadas.
Ello pudiera indicar que independientemente de las condiciones edafoclimáticas, y las
poblaciones, las especies y accesiones pueden expresar una variación marcada entre
individuos para algunos indicadores y agruparse en función de esas variables, lo que
representa un elemento positivo en el trabajo de evaluación (Franco e Hidalgo, 2003).
Es importante destacar que los valores obtenidos en esta investigación revelan un
marcado grado de similitud para accesiones muy diferentes desde el punto de vista
morfológico; en ellas se incluyen tipos procumbentes, decumbentes y erectos, lo que es
un indicador del amplio espectro de adaptación ambiental que presentan la mayoría de
las accesiones que conforman este germoplasma. Estos resultados son similares a los
obtenidos por Bascur y Tay (2005).
Durante el período que abarcó la investigación las condiciones climáticas mantuvieron
sus indicadores de temperatura y de precipitación media aceptables, los cuales según
investigaciones realizadas por Bascur y Tay (2005), se consideran óptimos para que las
accesiones de estas especies puedan aprovechar de manera eficiente la luz solar y
expresar su potencial de crecimiento. Es por eso, que la expresión cuantitativa de los
indicadores tomados en consideración pudo no estar limitada por estos factores, sino
que pudieron estar influenciadas por la capacidad genética del material investigado y
del manejo a que fue sometido.
Los estudios demostraron que la mayoría de las accesiones se adaptan, en mayor o
menor grado, a las condiciones en la que se llevó a cabo la investigación, pero además
toleraron el régimen de manejo a que fueron sometidos, a pesar de las diferencias
botánicas halladas.
47
De hecho quedó demostrado que algunas de estas accesiones presentaron capacidad
para adaptarse a diferentes condiciones, lo que ratifica que poseen la propiedad de
aprovechar bien su metabolismo y las sustancias de reserva que utilizan para persistir
(Bascur y Tay, 2005)).
Es importante acotar, que en el caso de estas especies, tienen además mecanismos
morfológicos que favorecen su establecimiento, como es poseer un profundo sistema
radical con raíces adventicias que les permiten absorber los nutrientes, y una
disposición de las hojas que contribuye a hacer un uso mayor de la radiación solar (Da
Costa, Pereyra, Pociornik, Rodríguez de Abreu, 2002).
Según diferentes investigadores (Cardona et al., 2006) B. decumbens y B. humidicola
han sido seleccionadas por su adaptación y persistencia en suelos ácidos de baja
fertilidad natural y han mostrado una persistencia alta, una calidad nutritiva intermedia y
una respuesta moderada a la aplicación de fertilizantes.
En términos generales, las afectaciones ocasionadas por insectos potencialmente plaga
y enfermedades, durante el primer año, no ocasionaron daños de importancia al área
foliar en la mayoría de las accesiones, excepto en B. brizantha CIAT-26110, la que
mostró afectaciones en el orden de 39% y B. humidicola CIAT-16871 con 92%; por ello
se considera que estas incidencias negativas no influyeron en el desarrollo de las
plantas y que no deprimieron los rendimientos y el comportamiento general,
particularmente en B. brizantha CIAT-26556 y B. híbrido CIAT-1737, que no mostraron
síntoma alguno.
Un comportamiento similar lo obtuvieron Cardona et al. (2006) cuando estudiaron un
grupo de gramíneas en las que fueron incluidas las especies B. brizantha, B.
decumbens, B. dictyoneura, y B. humidicola, e indicaron que estas plantas no se
afectaron de forma marcada por el ataque de plagas y enfermedades. Estos resultados
revisten una particular importancia, ya que los efectos ocasionados por cualquier tipo de
48
estrés pueden originar cuantiosas pérdidas en términos cuantitativos y cualitativos de la
biomasa, y su determinación constituye la base de selección de numerosas
investigaciones con germoplasma de Brachiaria spp y de otras especies de gramíneas.
La cobertura con la que se comenzaron las investigaciones no rebasó el 53% para las
accesiones más ventajosas, que en este caso fueron las del grupo I, y solo en el
segundo año se logró un mayor cubrimiento, en correspondencia con el manejo
aplicado. Es conocida la tendencia de las especies de este género a cubrir el suelo,
particularmente en los tipos procumbentes y decumbentes, a partir de rizomas y falsos
estolones o con el incremento del número de vástagos en los tipos erectos (Olivera,
2004).
Las accesiones evaluadas mostraron un amplio rango de variación entre ellas en los
indicadores medidos y estimados, lo que influyó en las respuestas halladas y al analizar
los dos años se constató que no todas presentaron el mismo desarrollo y crecimiento.
Los resultados obtenidos en los dos períodos demostraron que los rendimientos y el
porcentaje de hojas de las mejores accesiones, en ocasiones, duplicaron los
alcanzados por las de inferior comportamiento.
En ese sentido, Lascano et al. (1982) consideran que las especies de Brachiaria se
dividen en dos grupos de calidad bien diferenciados; un primer grupo de calidad alta,
que incluye B. brizantha, B. decumbens y B. ruziziensis; y un grupo de calidad baja, que
comprende B. dictyoneura cv. Llanero y B. humidicola y que las diferencias entre estos
dos grupos están determinados, en lo fundamental, por el contenido de proteína. Estas
diferencias se atribuyen a que varias accesiones tienden a presentar dificultades en la
nitrificación, sobre todo en condiciones de suelos ácidos, como es el caso de la región
donde se efectuó esta investigación (Lascano y Euclides, 1996).
49
Por tanto, los resultados y el alcance del análisis permitieron constatar la capacidad
adaptativa de un numeroso grupo de accesiones de las especies de este género en los
suelos marcadamente ácidos, con aceptables respuestas en términos de producción de
biomasa y comportamiento general y se demostró que existen germoplasmas que
pueden ser explotados en este tipo de suelo, sin insumos, como elementos importantes
de la sostenibilidad que deben identificar los sistemas actuales y futuros.
50
3.2 Evaluación de las accesiones de Panicum spp.
A pesar de que Cuba cuenta en su flora con 25 tribus de la familia de las gramíneas,
representadas por 105 géneros y 400 especies, y que las condiciones de este país son
favorables para su cultivo, muy pocas tienen adecuado valor para la explotación
intensiva. A partir de la clasificación utilizada por Tzvelov, quien dividió las gramíneas
en dos grandes subfamilias: Bambusoideae (Nees.) y Pooideae (A. Br.), se comprueba
que la primera posee cinco tribus (Bambuseae, Chusqueae, Arthrostylideae, Phareeae
y Olyreae), con ocho géneros y 17 especies, ninguna de las cuales resulta de
importancia para su utilización en la producción de pastos o forrajes.
De las 20 tribus restantes (subfamilia Pooideae), sólo tienen algún valor, 3 de los 16
géneros de la tribu Chlorideae; 9 de los 26 géneros de Andropogoneae; 12 de los 32
géneros de Paniceae y el único género de la tribu Sporoboleae (Sporobolus), ninguno
de los cuales son endémicos. De ahí la importancia actual y futura de continuar la
introducción de estos taxones, especialmente de aquellos que se consideran
importantes sobre la base de la experiencia existente (Machado et al., 2006).
La estructura ha cobrado especial atención en el trabajo de los investigadores que en
las últimas tres décadas se han dedicado al establecimiento, cultivo y explotación de los
pastos y forrajes como base alimentaria para la producción ganadera. La relación hoja
tallo de las especies pratenses tiene marcada importancia para el empleo correcto del
pasto y es considerada tan importante como su calidad nutritiva para la producción
animal (Stobbs, 1978). De hecho ambas fracciones estructurales guardan una relación
directa con el valor nutritivo del pastizal, en función de lo cual poseen diferencias
evidentes en el consumo que los animales hacen de las mismas (Laredo y Minson.
1973).
Se mencionan como elementos más importantes dentro de la estructura: la densidad
que se expresa en kg de MS y hoja/ha/cm, la cantidad de hojas y la disposición y
accesibilidad de esta para el animal (García-Trujillo, 1980). Estudios realizados en
51
Australia evidencian la estrecha relación que guardan la densidad y los contenidos de
las distintas fracciones estructurales (hojas y tallos) con el tamaño del bocado que
hacen las vacas cuando pastan directamente (Stobbs, 1975), lo que provoca diferencias
y notables en el tiempo que los animales emplean en consumir los nutrimentos que
requieren.
La especie Panicum maximum se cuenta entre los pastos tropicales que poseen una
estructura más ventajosa puesto que tiene alrededor del 80% de hojas según
Hernández y García-Trujillo (1978), aunque hay informes de investigadores que han
encontrado más del 90% de hojas en guinea común de Cuba (Gerardo y Oliva, 1979;
Hernández, Machado y Gómez, 1981).
Debido a las ventajas que aporta desde el punto de vista económico el uso de los
pastos para la producción de leche, cada vez se hace mayor la presencia de los
mismos en los sistemas para su producción. En los países templados, desde la década
del 50, se viene insistiendo en las posibilidades de los sistemas a base de pastos
(Barker, 1957), así como en la forma de aumentar su productividad para hacer, a su
vez, más eficiente su utilización partiendo de las posibilidades fisiológicas de los
rumiantes para aprovechar este tipo de alimento (Swain, 1971). Mott (1960) y
McMeekan y Walshe (1963) aportaron líneas para incrementar la utilización de los
pastos y la intensificación de los sistemas de producción de leche en las áreas
templadas.
Al realizar el análisis de componentes principales se obtuvieron tres componentes, las
cuales explican el 79,35% de la variación total (tabla 3.5). En esta componente todos
los indicadores contribuyeron a expresar la varianza extraída, excepto la clorosis. Con
este análisis se corroboró la estrecha relación entre los indicadores.
52
Tabla 3.5 Resultados del ACP y relación entre los indicadores evaluados en época de lluvia
de las accesiones de Panicum
Indicador Componente principal
CP1 CP2 CP3
Altura 0,841 0,248 0,223
Plagas -0,151 -0,065 0,893
Enfermedades 0,779 -0,260 -0,047
Hojosidad -0,179 0,904 0,025
Cobertura 0,748 0,175 -0,553
Vigor 0,139 0,790 -0,432
Clorosis 0,655 -0,012 -0,228
Rendimiento 0,226 0,743 0,607
Valor propio 2,42 2,15 1,76
Varianza (%) 30,35 26,95 22,03
Acumulado (%) 30,35 57,31 79,35
Se detectó una varianza acumulada de 79,35% en las tres primeras componentes. Las
variables que mejor explicaron la varianza en la primera componente (30,35%) fueron la
altura, la afectación por enfermedades y la cobertura, las cuales estuvieron
positivamente relacionadas entre sí; por su parte la segunda componente extrajo el
26,95% de la varianza, explicada por la hojosidad, el vigor y el rendimiento; mientras
que la tercera componente extrajo una varianza de 22,03%, la que estuvo explicada
principalmente por la afectación de insectos potencialmente plaga.
Con este análisis se corroboró la estrecha relación entre los indicadores. Puede
observarse que la variable clorosis no se incluye en ninguna de las tres componentes,
debido al valor que posee su factor de suma o de preponderancia (inferior a 0,70), por
lo que se pudiera prescindir de ella a la hora de realizar otras evaluaciones similares a
la de esta investigación.
53
Mediante el análisis de conglomerados sobre la base de los resultados del ACP, se
formaron cinco grupos (anexo 3). En la tabla 3.6 se muestran las accesiones
pertenecientes a cada uno de los grupos formados con sus medias y desviaciones
estándar.
Es válido resaltar que en este caso fue difícil seleccionar el mejor de los grupos en
función de los indicadores, debido a que en los grupos III, IV y V, se encuentran con la
misma cantidad de valores en los mismos. No obstante, considerando que uno de los
indicadores de mayor relevancia en la alimentación a base de pastos y forrajes es el
rendimiento, el grupo III, conformado por las especies Panicum maximum (CIAT-673),
Panicum maximum (CIAT-36000), Panicum maximum (CIAT-6653), Panicum maximum
(CIAT-16061): Se decide seleccionar el grupo anteriormente señalado como el de mejor
comportamiento, a pesar de que las accesiones pertenecientes al grupo I tuvieron
menor incidencia o afectación por enfermedades e insectos potencialmente plaga con
respecto al ya mencionado.
Este comportamiento pudiera ser atribuido a la capacidad genética de las accesiones
de poder expresar su potencial de producción en función de las condiciones
edafoclimáticas en las que se evalúan, incluso unas con más posibilidades que otras.
Estos resultados corroboran los resultados obtenidos por Hidalgo (2003).
Tabla 3.6 Distribución de los individuos, media y desviación estándar según el Análisis de Conglomerados de las accesiones
de Panicum
Indicador Grupo I Grupo II Grupo III Grupo IV Grupo V
X DS X DS X DS X DS X DS
Altura 59,90 21,28 36,90 - 101,87 25,63 59,90 - 153,50 -
Plagas 0,09 0,06 0,00 - 0,07 0,08 0,09 - 0,00 -
Enfermedades 10,49 2,96 0,00 - 10,26 4,58 10,49 - 30,10 -
Hojosidad 4,29 0,13 4,50 - 4,77 0,15 4,29 - 4,00 -
Cobertura 3,75 0,38 2,00 - 3,75 0,70 3,75 - 4,25 -
Vigor 3,80 0,38 4,00 - 4,17 0,22 3,80 - 3,75 -
Clorosis 2,11 0,35 0,00 - 1,72 0,77 2,11 - 1,55 -
Rendimiento 1,68 0,54 1,51 - 4,12 0,63 1,68 - 2,44 -
Grupos Cantidad Accesiones
I 5 Panicum maximum (0081), Panicum maximum (0031), Panicum antidotale (CIAT-6039), Panicum maximum (0042), Panicum maximum
II 1 Panicum repens (CIAT-26264)
III 4 Panicum maximum (CIAT-673), Panicum maximum (CIAT-36000), Panicum maximum (CIAT-6653), Panicum maximum (CIAT-16061)
IV 1 Panicum maximum (CIAT-16006)
V 1 Panicum antidotale (M70395)
54
Al realizar el análisis de componentes principales para la época de seca se obtuvieron
tres componentes, la cuales explicaron el 91,69% de la variación total (tabla 3.7). En
esta componente todos los indicadores contribuyeron a expresar la varianza extraída.
Con este análisis se corroboró la estrecha relación entre los indicadores.
Al analizar los resultados del ACP, se comprobó que la variabilidad total, en función de
los indicadores medidos durante este período, fue alta (85,84%), la primera componente
explicó un 34,28% de la varianza y los indicadores que influyeron en su formación
fueron la altura, la hojosidad, la cobertura y el vigor. Por su parte, la segunda
componente explicó un 25,98% de la varianza acumulada y las variables más
relacionadas con esta fueron las afectaciones por insectos potencialmente plaga y las
enfermedades; mientras que la tercera componente presentó un 25,57% de la varianza
acumulada y en su formación contribuyeron fundamentalmente los síntomas causados
por la clorosis y el rendimiento.
Tabla 3.7. Resultados del ACP y relación entre los indicadores evaluados en la época de
seca de las accesiones de Panicum
Indicador Componentes principales
CP1 CP2 CP3
Altura 0,736 0,156 0,460
Plagas 0,026 0,988 0,087
Enfermedades 0,081 0,972 0,161
Hojosidad 0,830 -0,032 0,329
Cobertura 0,873 -0,124 -0,227
Vigor 0,862 0,292 -0,266
Clorosis -0,017 0,173 0,806
Rendimiento 0,026 0,050 0,959
Valor propio 2,74 2,07 2,04
Varianza (%) 34,28 25,98 25,57
Acumulado (%) 34,28 60,27 85,84
55
Mediante el análisis de conglomerados sobre la base de los resultados del ACP, se
formaron tres grupos (anexo 4). En la tabla 3.8 se muestran las accesiones
pertenecientes a cada uno de los grupos formados con sus medias y desviaciones
estándar.
La accesión Panicum antidotale (M70395) perteneciente al grupo IV se caracterizó por
tener el mejor comportamiento en función del rendimiento, y la resistencia o tolerancia a
la afectación de enfermedades e insectos potencialmente plaga; seguidas de las
accesiones Panicum maximum (CIAT-673), Panicum maximum, Panicum maximum
(CIAT-6653), Panicum maximum (CIAT-36000), Panicum maximum (CIAT-16061),
pertenecientes al grupo II.
Estos resultados se pueden considerar de aceptables, considerando que en Cuba, en
los últimos años se han realizado pocos estudios en función de gramíneas y
leguminosas herbáceas; a diferencia de los primeros 30 años de fundada la Estación
Experimental de Pastos y Forrajes “Indio Hatuey”, los cuales fueron dedicados a la
introducción y selección de germoplasma forrajero y se acumularon y difundieron
resultados atendiendo a la lógica del llamado “modelo genocéntrico”. Sobre la base de
ese modelo, en el que se consideraba a las especies y a las variedades como eje
fundamental para la adopción de las estrategias de investigación, se estudiaron cientos
de campos de introducción o evaluación a lo largo y ancho del país en una gran
diversidad de suelos (Machado, 2006).
Tabla 3.8. Distribución de los individuos, media y desviación estándar según el Análisis de Conglomerados de las
accesiones de Panicum
Indicador Grupo I Grupo II Grupo III Grupo IV
X DS X DS X DS X DS
Altura 36,30 13,04 56,00 10,03 46,70 - 35,40 - Plagas 0,20 0,09 0,11 0,18 0,79 - 0,00 - Enfermedades 3,11 1,55 2,72 2,89 15,20 - 0,00 - Hojosidad 3,03 0,38 3,73 0,25 3,50 - 3,00 - Cobertura 2,58 0,41 3,08 0,18 1,83 - 1,00 - Vigor 2,89 0,10 3,16 0,36 3,00 - 1,85 - Clorosis 0,79 0,62 1,64 0,59 1,83 - 1,80 - Rendimiento 0,48 ,167 1,14 0,27 1,37 - 1,80 -
Grupo Cantidad Accesiones
I 5 Panicum maximum (0081), Panicum repens (CIAT-26264), Panicum maximum (0031), Panicum maximum (0042), Panicum antidotale (CIAT-6039)
II 5 Panicum maximum (CIAT-673), Panicum maximum, Panicum maximum (CIAT-6653), Panicum maximum (CIAT-36000), Panicum maximum (CIAT-16061)
III 1 Panicum maximum (CIAT-16006)
IV 1 Panicum antidotale (M70395)
56
Sin embargo, en los últimos 10 años el enfoque empleado para la selección de
germoplasma forrajero en Cuba, se ha dirigido hacia la búsqueda de accesiones con
adaptación a ambientes específicos de forma casuística (Olivera y Machado, 2004;
Olivera et al., 2007). Entre las estrategias de trabajo asumidas se incluye la
preselección, a partir de un alto número de accesiones para esos ambientes y, en
particular para aquellos en los que prevalecen condiciones desfavorables, sobre todo
las de tipo edáfico, ya que esta constituye uno de los factores determinantes en el
comportamiento general del material vegetal, incluida la calidad y la productividad.
Es un hecho demostrado que el 65% de los suelos cubanos se diagnostican como
categoría III y IV. Ello implica que están afectados por uno u otro factor limitante que
hace que su rendimiento potencial esté por debajo de 50% (Seguí et al., 1999). De esta
forma, un 44, 8% posee baja fertilidad; 37,3% baja retención de humedad; 43,3%,
erosión media; 40,3% posee pH 6 (en KCl) y 12,2% posee pH 4,6; mientras que un
69,6% presentan muy bajo contenido de materia orgánica (Instituto de Suelos-
MINAGRI, 2001). En el caso particular de los dedicados a la ganadería se manifiestan
deficiencias físico-químicas que limitan el buen establecimiento de los pastos (Paretas
et al., 1989). Así, el 25% son ácidos (Paretas, 1990) y más del 19 % poseen baja
fertilidad (Hernández, 1996).
En las condiciones antes descritas las gramíneas, y en especial las accesiones de la
especie Panicum maximum, aunque se caracterizan por una alta plasticidad, no
siempre muestran la mejor adaptabilidad y un buen comportamiento, particularmente
cuando existen determinadas condiciones edáficas y de manejo específicas.
Machado y Olivera, (2004), al evaluar varios ecotipos de esta especie en suelos de
mediana fertilidad bajo condiciones de sombra, sin riego y sin fertilización, concluyeron
que todos los genotipos crecieron y se desarrollaron bien; pero se detectaron marcadas
diferencias entre los tratamientos en términos de disponibilidad de biomasa y la
presencia de clorosis para muchos de los tratamientos estudiados.
57
Esos resultados, así como otros obtenidos en el país, evidencian que se debe continuar
trabajando con accesiones de P. maximum y en particular en condiciones de pastoreo;
debido a las excelentes características de esta especie para ser explotada con animales
(Hernández et al., 1978); considerando además que se justifica la búsqueda de nuevos
materiales, con un mayor potencial que causen un impacto a mediano plazo en el
desarrollo de la ganadería, aspecto también señalado con anterioridad por Costa y
Oliveira (1994).
58
3.3 Evaluación de las accesiones de Pennisetum sp.
Los Pennisetum han sido señalados como una de las especies de mayor potencial de
producción de biomasa en el trópico. Varios cultivares de Pennisetum se han utilizados
en Cuba desde hace varias décadas, entre ellos el Napier, Candelaria y el King grass
(Roche y Hernández, 1993).
La literatura nacional informó que el king grass era un híbrido y no es hasta mediados
de la década del 80 que surge la necesidad de establecer la veracidad sobre la
naturaleza del king grass, debido a los estudios realizados en este pasto, mediante el
cultivo de tejidos y otras técnicas mutagénicas desarrolladas en el Instituto de Ciencia
Animal. Monzote et al. (1989) determinaron que el número de cromosomas del king
grass era 2n=28, mientras que el híbrido posee 21 cromosomas. En el género
Pennisetum, la especie P. purpureum es la que presenta 28 cromosomas, lo que
concuerda con lo señalado por Pinzón y González (1978).
El king grass es una gramínea forrajera con vocación de corte adaptada a condiciones
tropicales y hasta alturas de 1 000 a 1 500 msnm, con un rango amplio de distribución
de lluvias y de fertilidad de suelos, incluyendo suelos ácidos de baja fertilidad natural
(Herrera, 2005).
Al realizar el análisis de componentes principales se obtuvieron tres componentes, la
cual explica el 100% de la variación total (tabla 3.9). Con este análisis se corroboró la
estrecha relación entre los indicadores.
59
Tabla 3.9. Resultados del ACP y relación entre los indicadores evaluados en la época de
lluvia de las accesiones de Pennisetum
Indicador Componente principal
CP 1 CP 2 CP 3
Altura de la planta (cm) 0,039 0,824 0,565 Plagas 0,688 0,210 0,694 Enfermedades 0,569 0,392 0,723 Hojosidad 0,989 0,144 0,027 Cobertura -0,293 -0,123 0,948 Vigor Clorosis Rendimiento
0,075 -0,666 0,996
0,995 -0,745 0,037
-0,069 0,038 -0,075
Valor propio 3,30 2,46 2,23 Varianza (%) 41,30 30,75 27,94 Acumulado (%) 41,30 72,05 100,00
A través de dicho análisis se detectó que la varianza total acumulada fue alta (100%) y
se distribuyó en tres componentes principales. En la CP1 los indicadores que mejor
explicaron la varianza extraída (41,30%) fueron la hojosidad y el rendimiento lo cual
estuvieron relacionados positivamente entre sí. La segunda componente extrajo un
(30,75%) y en su formación contribuyó principalmente la altura y el vigor de forma
estrecha y la clorosis (de forma negativa). En la CP3 los indicadores que influyeron
positivamente fueron la enfermedad y la cobertura con una varianza extraída (27,94%).
Cómo se puede observar el indicador plaga no se incluyó en ninguna de las tres
componente por tener un valor de suma o preponderancia menor que 0,70.
La variabilidad mostrada a través de los indicadores puede que se deba a la alta
relación que existió entre los indicadores en esta etapa, aspecto que permite la
agrupación de las accesiones y su posterior selección en función de ellos. El alto
porcentaje de la variación explicada por la componente, sugiere que esta contiene
indicadores que pueden discriminar bien las accesiones en estudio. Por ello, pudiera
plantearse que la variabilidad estuvo relacionada con el contraste en el comportamiento
de estas especies y accesiones, y no con el hábito de crecimiento que las caracteriza.
60
Ello pudiera indicar que, independientemente de las condiciones edafoclimáticas
existentes, las poblaciones, y en particular las accesiones de las especies del género
Pennisetum, pudieron expresar una marcada variación entre individuos para algunos
indicadores y agruparse en función de esas variables, lo que puede representar un
elemento positivo en el trabajo de caracterización y evaluación. En ello pudo influir, la
variabilidad inter e intraespecífica existente en la muestra estudiada, ya que está
conformada por varias especies con sus respectivas accesiones, las cuales varían de
forma marcada desde el punto de vista morfológico.
Asimismo, puede plantearse que a pesar de que en el establecimiento especies
vegetales, debe considerarse un grupo de indicadores que relacionen los conceptos de
crecimiento y desarrollo; también se debe hacer énfasis en las características biológicas
de las especies, de forma tal que permita sentar las bases sobre las cuales deben
apoyarse los trabajos futuros de evaluación y caracterización (Pezo e Ibrahim, 1999 y
Murgueitio, 2003).
En correspondencia con el alto valor alcanzado por la varianza acumulada y el valor
propio de las componentes, es posible asumir que la variabilidad fenotípica fue
suficientemente propicia para que estos indicadores fuesen incluidos, en su totalidad,
en el análisis de conglomerados, y de esta forma determinar la diferenciación o similitud
entre las especies y accesiones.
El análisis de conglomerados sobre la base de los resultados del ACP (anexo 5)
durante esta etapa, permitió la formación de dos grupos. Las accesiones pertenecientes
a cada uno de ellos se muestran en la tabla 3.10, al igual que la media y la desviación
estándar de cada uno de los grupos formados.
Tabla 3.10 Distribución de los individuos, media y desviación estándar según el Análisis de Conglomerados de las
accesiones de Pennisetum
Indicador Grupo I Grupo II
X DS X DS
Altura 98,90 19,51 105,15 19,02 Plagas 0,07 0,07 0,57 0,07 Enfermedades 1,90 1,82 8,08 0,32 Hojosidad 3,66 0,26 4,27 0,07 Cobertura 3,37 0,21 3,55 0,00 Vigor 3,37 0,21 3,60 0,23 Clorosis 1,83 0,25 2,82 0,14 Rendimiento 0,90 0,33 3,40 1,31
Grupos Cantidad Accesiones
I 3 Pennisetum sp (NH2), Pennisetumsp (MF-24), Pennisetum sp.(NO2121.2)0.88
II 1 Pennisetum (Hibrido-31)
61
Atendiendo a los resultados de esta tabla, se puede deducir que la accesión
Pennisetum (Hibrido-31), pertenecientes al grupo II, se caracterizó por ser la planta más
alta, más hojosa, de mayor cobertura, mayor vigor y de mayor rendimiento, con
respecto a las accesiones pertenecientes al grupo I.
En estos resultados se muestra el comportamiento diferenciado de la accesión que
pertenece al grupo II, con respecto a las pertenecientes al I. Ello pudiera revelar que en
las poblaciones de las especies de este género, se pueden hallar individuos capaces de
mostrar o no mejor un comportamiento en suelos como el estudiado; se conoce que, en
general, estas especies poseen la capacidad de adaptación a este tipo de suelo (Díaz,
2007), lo que pudiese estar asociado a la posibilidad que posee el genoma individual de
responder o no al medio circundante (Hidalgo, 2003).
Al realizar el ACP de la época de seca, se obtuvieron dos componentes, la cuales
explican el 94,42% de la variación total (tabla 3.11); todos los indicadores contribuyeron
a expresar la varianza acumulada.
Tabla 3.11 Resultados del ACP y relación entre los indicadores evaluados en la época de
seca de las accesiones de Pennisetum
Indicador Componente
principal
CP 1 CP 2
Altura de la planta (cm) 0,335 0,939 Plagas 0,775 -0,005 Enfermedades 0,970 -0,205 Hojosidad -0,123 0,992 Cobertura -0,907 0,332 Vigor Clorosis Rendimiento
0,334 0,875 0,724
-0,930 0,271 -0,686
Valor propio 4,14 3,40 Varianza (%) 51,83 42,58 Acumulado (%) 51,83 94,42
62
Se detectó que la varianza total acumulada fue de un 94,42% en las dos componentes.
La primera componente explicó una variabilidad de 51,83% y los indicadores que
conformaron la misma fueron la altura de la planta, la hojosidad, la cobertura y la
clorosis (de forma negativa). La segunda componente, extrajo el 42,58% de la varianza,
y la misma está explicada fundamentalmente por la afectación por insectos
potencialmente plaga, las enfermedades, el rendimiento y el vigor (de forma negativa).
La variabilidad mostrada a través de los indicadores puede que se deba a la alta
relación que existió entre estos en la etapa, o a la dinámica de crecimiento de cada
accesión en particular (Hidalgo, 2003), lo cual puede estar relacionado con la reserva
acumulada por las plantas y con la capacidad de utilización de ésta, y es expresión de
la potencialidad genética particular de las especies de este género.
Es importante enfatizar lo señalado por Seguí et al. (1989), quienes plantearon que el
conocimiento de las relaciones entre los caracteres de interés agronómico desempeña
un papel significativo en el proceso de selección e indicaron que pueden ser ventajosas
o no (relaciones deseables o no deseables). De esta forma, las accesiones que
combinen caracteres deseables, como aceptable longitud de los rebrotes y número de
rebrotes, se convierten en un material a considerar para los fines de explotación en los
sistemas silvopastoriles en los que coexisten animales y plantas.
El análisis de conglomerados sobre la base de los resultados del ACP durante esta
etapa permitió la formación de tres grupos (anexo 6), los cuales se presentan en la tabla
3.12, al igual que sus medias y desviaciones estándar.
Atendiendo a los resultados de esta tabla, se puede deducir que las accesiones
Pennisetum sp (NH2), Pennisetum sp (MF-24), Pennisetum sp (Hibrido-31),
pertenecientes al grupo I, se caracterizaron por ser las plantas de mejor
comportamiento en la mayoría de los indicadores con respecto al grupo II, excepto para
los indicadores altura, vigor y rendimiento.
Tabla 3.12 Distribución de los individuos, media y desviación estándar según el Análisis de Conglomerados de las
accesiones de Pennisetum
Indicador Grupo I Grupo II
X DS X DS
Altura 98,90 19,51 100,10 - Plagas 0,07 0,07 0,35 - Enfermedades 1,90 1,82 15,40 - Hojosidad 3,66 0,26 3,50 - Cobertura 3,37 0,21 2,87 - Vigor 3,37 0,21 3,57 - Clorosis 1,83 0,26 2,14 - Rendimiento 0,91 0,33 1,80 -
Grupos Cantidad Accesiones
I 3 Pennisetum sp (NH2), Pennisetum sp (MF-24), Pennisetum sp (Hibrido-31)
II 1 Pennisetum sp ( NO2121.2) 0.88
63
La introducción de especies de pastos surge como una necesidad de reemplazar
ecotipos de bajo valor nutritivo y productividad (Guillot et al., 2002). Sin embargo, en la
explotación racional y estable de las áreas que se dedican al cultivo de los pastos se
impone lograr un nivel adecuado de adaptación de nuevas y mejores especies que las
que actualmente predominan en los ecosistemas ganaderos, considerando que no
todas tienen el mismo nivel de exigencia sobre los recursos ni el mismo grado de
tolerancia a los agentes adversos que impone el ambiente.
En correspondencia con lo anterior, se han encaminado en Cuba esfuerzos en la
obtención de nuevas variedades de Pennisetum con resistencia a condiciones de
sequía (Herrera et al., 2003), y en la actualidad resulta de vital importancia la valoración
y estudio de los factores que influyen en su adaptación y en los procesos de
establecimiento, producción, utilización y mantenimiento.
Por otra parte, se conoce que durante el período de seca en Cuba, que coincide con la
etapa media y final en esta prueba de establecimiento, se produce un descenso de las
temperaturas y de la intensidad luminosa y, por lo general, no se alcanzan los valores
más favorables para el establecimiento de estas gramíneas que utilizan el sendero C4
de fijación de CO2 en la fotosíntesis y que, según Sarroca et al. (1981), en king grass
fluctúan entre 30 y 40°C, de 15 a 16 000 lux de intensidad luminosa y abundantes
precipitaciones.
En este sentido, Padilla (2003) coincidió en señalar estas demandas en otras
gramíneas tropicales. No obstante, en los valores de variables climáticas de la zona de
estudio se aprecia que el déficit de humedad fue una de las de mayor importancia
durante el establecimiento, propicio para encontrar una primera respuesta de estas
variedades a las condiciones de sequía.
Además, se observa que existe un amplio rango entre los diferentes géneros y entre las
especies. Este resultado posee relevante interés ya que esa variabilidad puede
64
constituir un basamento importante a la hora de realizar estudios posteriores de mejora
de estas accesiones para las condiciones de Cuba. Por lo que, se puede plantear que
se cuenta con una riqueza botánica variable, en la que se consiguen identificar tipos
adecuados para diversos usos en la ganadería, tanto para pastoreo como para corte y
acarreo, además que son especies que se pueden explotar como portadores de
hojarasca y protectoras del suelo.
Las investigaciones realizadas en áreas tropicales con la familia de las gramíneas
señalan que los géneros Brachiaria, Panicum y Cenchrus sobresalen por su buen
comportamiento durante el período de mínimas precipitaciones (Plazas, 2006). Ello está
asociado a que las especies de estos géneros presentan características
morfofisiológicas, abundante sistema radical y follaje, que les permiten hacer un mejor
aprovechamiento y uso de las condiciones del clima imperantes en esa época del año
(Seguí et al., 2000; Rao et al., 2006), aun cuando tales períodos no son muy
pronunciados en la zona en la cual se realizó esta investigación.
A partir de algunas consideraciones generales sobre la base de los resultados
expuestos, se deduce que en sentido general las épocas y el año tuvieron un efecto
determinante en la expresión de estos cambios en los indicadores analizados,
condicionado por la influencia ejercida por el clima; a idénticas conclusiones arribó
Machado (2006).
En esta investigación, se comprobó que los elementos del clima fueron más influyentes
que los factores edáficos, lo cual corrobora los resultados de Da Silva et al. (1992). Los
profundos cambios estacionales observados en el crecimiento y el desarrollo de los
cultivares eran de esperar, ya que estas funciones del pasto varían como producto de la
influencia que ejerce el clima (particularmente las precipitaciones y la temperatura). En
este sentido, el mencionado autor plantea que el crecimiento y el desarrollo se
incrementan bajo las condiciones ambientales existentes, en las que las precipitaciones
y temperaturas crecientes juegan un papel fundamental en el desarrollo de los pastos.
65
En términos generales, este estudio demostró la importancia que puede tener el
conocimiento de los factores físicos del ambiente en los estudios de selección de
variedades. Tales aspectos, de ser manejados de una forma científica e inteligente,
permiten contribuir, junto con otras disciplinas del saber, a la eficaz selección de las
variedades y las localidades.
Por tanto, los resultados y el alcance del análisis permitieron constatar la capacidad
adaptativa de un numeroso grupo de accesiones de las especies de los géneros
evaluados, con aceptables respuestas en términos de producción de biomasa y
comportamiento general y se demostró que existen germoplasmas que pueden ser
manejados sin insumos (fertilizantes y riego), como elementos importantes de la
sostenibilidad que deben identificar los sistemas actuales y futuros.
Con ello se demuestra que todas estas accesiones se adaptan en mayor o menor grado
a estas condiciones y que fueron tolerantes, de acuerdo con el manejo utilizado. Tales
aspectos se reafirman si se parte del hecho del tipo de suelo y de que durante el
período de explotación no se utilizó fertilización ni riego, por cuanto es factible asumir
que en este las accesiones pudieron adaptarse y producir forraje, gracias a su cualidad
de desarrollarse en suelos deficientes de estos elementos.
Estos resultados se corresponden con el principio de que “uno de los pasos más
importantes e imprescindibles en un programa de investigación en pastos y forrajes lo
constituye la introducción, caracterización, evaluación y selección de nuevas especies y
accesiones que mejoren cuantitativa y cualitativamente las ya existentes, bien sean
nativas, naturalizadas o introducidas”; además de poder incrementar la cantidad de
ellas a utilizar en los sistemas pecuarios, por el consiguiente peligro que existe del
ataque de un determinado insecto potencialmente plaga o enfermedad. La relevancia y
el enfoque de lo que hasta aquí se plantea, relacionado con evaluar y seleccionar
especies y accesiones de gramíneas en suelos de baja fertilidad, sin riego y sin
66
fertilización para su uso en la alimentación animal, están implícitamente en la hipótesis
y en el objetivo de esta tesis.
La continuidad de un trabajo más profundo en el cual se consideren aspectos que no
fueron objeto de estudio de esta investigación, que faciliten un análisis más integral con
otras evaluaciones, pudiera formar parte de estas soluciones, entre los que pueden
mencionarse: el estudio de las interrelaciones entre las especies arbóreas y las plantas
asociadas (sean leguminosas herbáceas o gramíneas o ambas), los beneficios que se
le aportan al suelo, las diversas formas de incorporar las gramíneas a los sistemas
ganaderos.
Conclusiones
67
CONCLUSIONES
1. La evaluación de las colecciones de Brachiaria, Panicum y de Pennisetum, sin
riego y sin fertilización, mostraron la existencia de accesiones con sobresaliente
capacidad de adaptación, lo que permitió su selección en el trabajo de
evaluación.
2. Los indicadores más variables, dependieron de las accesiones de los diferentes
géneros y de las épocas de evaluación: entre ellas se destacaron la altura de la
planta, la hojosidad, el vigor, la cobertura y el rendimiento, los que contribuyeron
en la posterior agrupación y selección de las accesiones sobresalientes.
3. Se seleccionaron las accesiones Brachiaria decumbens, Brachiaria brizantha
CIAT-16322, Panicum maximum clave 0081, 0031, 0042 y Panicum antidotale
CIAT-6039 y Pennisetum sp. NH2 y MF-24, como promisorias para ser
estudiadas en el fomento de nuevas áreas.
Recomendaciones
68
RECOMENDACIONES
Continuar la evaluación de las mejores accesiones en ensayos replicados bajo
condiciones de pastoreo con el propósito de seleccionar variedades precomerciales.
Incluir estas colecciones en otras condiciones edafoclimáticas contrastantes con el
fin de completar la información disponible.
Utilizar los resultados obtenidos en el proceso investigación-transferencia de
tecnología como pauta y método de trabajo para la transformación de la base
alimentaria en las fincas ganaderas existentes en esta región.
Utilizar los resultados mostrados en este documento como material didáctico en la
enseñanza pre y posgraduado, escuelas de capacitación, proyectos vinculados a la
capacitación de productores, así como para uso general de consulta de los
trabajadores a fines con la ganadería vacuna.
69
NOVEDAD CIENTÍFICA
Se retoma el estudio y la evaluación de gramíneas con potencial para condiciones de
áreas de producción animal bajo estas condiciones de estudio.
Se ofrece información novedosa sobre el comportamiento de nuevos híbridos o
accesiones de Brachiaria, Panicum y Pennisetum tanto en la época de lluvia como en
la de seca.
Se demuestra que las nuevas accesiones de las colecciones de Brachiaria, Panicum
y Pennisetum pueden ser utilizadas para la alimentación animal por el potencial de
adaptación que presentan en las condiciones en las que fueron evaluadas (sin riego
y sin fertilización).
Referencias bibliográficas
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Anexos
Anexo 1
Agrupación de las accesiones de Brachiaria en la época de lluvia
Anexo 2
Agrupación de las accesiones de Brachiaria en la época de seca
Anexo 3
Agrupación de las accesiones de Panicum en la época de lluvia
Anexo 4
Agrupación de las accesiones de Panicum en la época de seca
Anexo 5
Agrupación de las accesiones de Pennisetum en la época de lluvia
Anexo 6
Agrupación de las accesiones de Pennisetum en la época de seca