el patrimonio como revalorizaciÓn de lo ruralcederul.unizar.es/revista/num10/11 martinez.pdf ·...

18
Revista de Desarrollo Rural y Cooperativismo Agrario (2006-2007), 10, 205-222 EL PATRIMONIO COMO REVALORIZACIÓN DE LO RURAL Antonio Martínez Valero 1. INTRODUCCIÓN El patrimonio, literalmente la herencia de nuestros padres o antecesores, y en concreto el pa- trimonio cultural, la herencia acumulada que es necesario conservar y restaurar y que forma par- te de la memoria colectiva de un pueblo, se ha convertido en las últimas décadas en un recurso estratégico de carácter económico. Es desde ése punto de vista como vamos a tratar el tema a continuación, obviando el aspec- to estético, o puramente didáctico o educativo. Nuestra reflexión pretende mostrar el patrimonio en el medio rural, como uno de los recur- sos económicos emergentes y de mayor rentabilidad a largo plazo para el sostenimiento de los nuevos usos de ese medio, en concreto los turísticos, que permiten mantener población y rentas contribuyendo al mismo tiempo al desarrollo de nuevos empleos. 2. ¿QUÉ MEDIO RURAL? El medio físico en el que vamos a tratar el tema del patrimonio cultural como recurso, tiene unas características concretas. Para hacerlo más comprensible, lo referiremos a un espacio que co- nocemos, al medio rural aragonés. ¿Cuáles son las características de dicho medio? De acuerdo con una definición técnica y tra- dicionalmente aceptada, se considera zona rural a la constituida por municipios con menos de 2.000 habitantes. En Aragón, de los 730 municipios existentes, en los que se incluyen 1.545 nú- cleos de población, existen 672 municipios a los que podemos considerar rurales. Es decir el 92,1% de los existentes, en los que viven 229.945 personas, esto es, el 18,4 % de la población. En nuestra región se da una circunstancia casi única en la Unión Europea, y es el hecho de concentrarse en una única capital, Zaragoza, más del 50% de la población total. Además, el tama- 205 Municipios Población Número Porcentaje Número Porcentaje Rural 1 672 92,1 229.945 18,4 Intermedia 2 46 6,3 168.994 13,5 Urbana 3 12 1,6 850.654 68,1 TOTAL 730 100 1.249.584 100 Cuadro 1. Distribución de la población por zonas. Aragón, 2004 Fuente: IAEST a partir de Nomenclátor a 1-1-2004. INE 1. Zona rural: constituida por municipios con menos de 2.000 habitantes. 2. Zona Intermedia: municipios de 2.001 a 10.000 habitantes. 3. Zona urbana: municipios de más de 10.000 habitantes.

Upload: truongphuc

Post on 06-Oct-2018

218 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Revista de Desarrollo Rural y Cooperativismo Agrario (2006-2007), 10, 205-222

EL PATRIMONIO COMO REVALORIZACIÓN DE LO RURAL

Antonio Martínez Valero

1. INTRODUCCIÓN

El patrimonio, literalmente la herencia de nuestros padres o antecesores, y en concreto el pa-

trimonio cultural, la herencia acumulada que es necesario conservar y restaurar y que forma par-

te de la memoria colectiva de un pueblo, se ha convertido en las últimas décadas en un recurso

estratégico de carácter económico.

Es desde ése punto de vista como vamos a tratar el tema a continuación, obviando el aspec-

to estético, o puramente didáctico o educativo.

Nuestra reflexión pretende mostrar el patrimonio en el medio rural, como uno de los recur-

sos económicos emergentes y de mayor rentabilidad a largo plazo para el sostenimiento de los

nuevos usos de ese medio, en concreto los turísticos, que permiten mantener población y rentas

contribuyendo al mismo tiempo al desarrollo de nuevos empleos.

2. ¿QUÉ MEDIO RURAL?

El medio físico en el que vamos a tratar el tema del patrimonio cultural como recurso, tiene

unas características concretas. Para hacerlo más comprensible, lo referiremos a un espacio que co-

nocemos, al medio rural aragonés.

¿Cuáles son las características de dicho medio? De acuerdo con una definición técnica y tra-

dicionalmente aceptada, se considera zona rural a la constituida por municipios con menos de

2.000 habitantes. En Aragón, de los 730 municipios existentes, en los que se incluyen 1.545 nú-

cleos de población, existen 672 municipios a los que podemos considerar rurales. Es decir el

92,1% de los existentes, en los que viven 229.945 personas, esto es, el 18,4 % de la población.

En nuestra región se da una circunstancia casi única en la Unión Europea, y es el hecho de

concentrarse en una única capital, Zaragoza, más del 50% de la población total. Además, el tama-

205

Municipios Población

Número Porcentaje Número Porcentaje

Rural1 672 92,1 229.945 18,4

Intermedia2 46 6,3 168.994 13,5

Urbana3 12 1,6 850.654 68,1

TOTAL 730 100 1.249.584 100

Cuadro 1. Distribución de la población por zonas. Aragón, 2004

Fuente: IAEST a partir de Nomenclátor a 1-1-2004. INE

1. Zona rural: constituida por municipios con menos de 2.000 habitantes.2. Zona Intermedia: municipios de 2.001 a 10.000 habitantes.3. Zona urbana: municipios de más de 10.000 habitantes.

A. MARTÍNEZ VALERO

ño de los municipios y su atomización hace que sea una de las más despobladas. Con casi el 10%

del territorio de España, sólo alberga al 3% de la población.

A esta caracterización de territorio despoblado, desequilibrado y con atomización de munici-

pios, se suma una más grave aún si cabe: el envejecimiento de la población. (Ver cuadro adjunto)

Si demográficamente se consideran municipios muy viejos a aquellos en los que la población

mayor de 65 años está entre el 25% y el 40% de su total, y municipios terminales a aquellos en

los que dicha población supera el 40%, vemos que en Aragón, aquellos a los que podemos consi-

derar muy viejos y terminales suman 693, el 85,05% del total, es lógico suponer que la totalidad

de los municipios de las zonas rurales, que hemos señalado que son 672, se encuentran entre

ellos, por lo que el declive demográfico es otra de las características más señaladas del medio ru-

ral aragonés.

El abandono del medio rural y de sus actividades económicas clásicas, viene siendo una cons-

tante desde hace décadas, sin que se rompa definitivamente ésa tendencia, que ha facilitado el en-

vejecimiento y la despoblación en el que hoy encontramos Aragón.

206

Huesca Teruel Zaragoza Aragón

Habitantes Número Habit. Número Habit. Número Habit. Número Habit.

Hasta 100 14 897 71 4.133 61 4.006 146 9.036

De 101 a 500 130 30.046 117 25.339 133 31.998 380 97.383

De 501 a 1.000 26 17.730 27 17.932 37 25.002 90 60.664

De 1.001 a 5.000 25 42.258 18 36.762 51 103.676 94 182.696

De 10.001 a 50.0000 5 104.329 2 47.284 4 60.233 11 211.846

Más de 50.000 0 0 0 0 1 638.799 1 638.799

TOTAL 202 212.901 236 139.333 292 897.350 730 1.249.584

Cuadro 2. La población de Aragón. Tamaño de los municipios, 2004

Fuente: IAEST a partir de la revisión del Padrón Municipal de Habitantes a 1-1-2004. INE.

Habitantes de 1991 1996 2001más de 65 años Munic. % Munic. % Munic. %

Menos viejos.Menos del 15% 19 2,6 12 1,6 2 0,27

Medio.Entre 15% y 20% 69 9,5 34 4,7 7 0,98

Viejos.Entre 20% y 25% 132 18,1 85 11,7 27 3,70

Muy viejos.Entre 25% y 40% 432 59,3 449 66,6 271 27,17

Terminales.Más del 40% 77 10,6 149 20,4 422 57,88

Cuadro 3. Tipología de los municipios aragoneses según su grado de envejecimiento

El patrimonio como revalorización de lo rural 207

Cuadro. 4. Los despoblados en Aragón

A. MARTÍNEZ VALERO

Muchas y complejas han sido las causas históricas de dicho abandono, del que se han ocu-

pado numerosos estudiosos. Entre las que destacan citaremos:

• La emigración hacia núcleos urbanos en los años 60 debida la necesidad de mano de obra que

planteaba la industrialización.

• La falta de infraestructuras y servicios en los pueblos (carreteras, electricidad, escuelas, asisten-

cia sanitaria, ocio...).

• La construcción de pantanos y embalses (expropiación de tierras y viviendas).

• El envejecimiento de la población (altas tasas de mortalidad y muy bajas de natalidad).

• El declive de la actividad tradicional agroganadera, y la disminución de la cabaña ganadera.

• El sistema hereditario de la montaña, en el que hereda toda la hacienda y el patrimonio sólo el

primogénito (el hereu).

• Revolución técnica: mecanización, motorización, nuevos abonos químicos, nuevos cultivos para

la industria, regadíos.

• Estructura de la propiedad de la tierra: minifundismo.

• Deseo de mejora de las condiciones de vida.

• Falta de oportunidades de progreso.

En ése desolado panorama, destacan los efectos de la despoblación en el abandono de los

pueblos, cuyo mayor número, paradójicamente, se encuentra en las zonas montañosas, actual-

mente las de mayor interés turístico. (Ver cuadro 4.)

3. LA ACTIVIDAD TURÍSTICA

Los cambios sufridos en el medio rural en las últimas décadas debido a la industrialización y

el progreso económico, han provocado que a los usos tradicionales de dicho medio, tales como

la producción de alimentos, la obtención de materias primas, la contribución a la ordenación del

territorio y la provisión del excedente de mano de obra para la industria, se hayan sumado, cuan-

do no sustituidos, otros que tienen que ver con economías emergentes relacionadas con el ocio y

la naturaleza, fundamentalmente, con la que es la principal industria de nuestro país: el turismo,

que supone el 12% del PIB del país.

Turismo, en todas sus vertientes: turismo rural, turismo deportivo, de nieve, de aventura, ci-

negético, turismo de salud... El medio rural, cada vez más en alza como ámbito a desarrollar to-

das esas actividades saludables para el cuerpo o el espíritu, el ocio activo o contemplativo, el

disfrute de la naturaleza, el regreso a los orígenes naturales, a lo sencillo y pausado frente a la ac-

tividad estresante de la ciudad, a sus horizontes limitados, al exceso de urbanización, de cemen-

to. Lo sencillo frente a la complejidad de la vida urbana, la sustitución periódica o esporádica del

ámbito de trabajo y vida cotidiana en la ciudad por el utópico de un medio cada vez más valora-

do y del que nos separan no más de dos generaciones, a aquellos que no siguen conservando sus

lazos familiares y de origen.

En nuestra región, la actividad turística ya supone el 8% del PIB, y en la provincia de

Huesca llega al 15%. Se reciben anualmente a 5 millones de turistas que realizan 18 millones

208

El patrimonio como revalorización de lo rural

de pernoctaciones. Los empleos directos que produce el turismo ascienden en Aragón a 33.000

puestos de trabajo.

Sin embargo, al amparo de las nuevas tendencias turísticas, se ha generado una política ur-

banística que contradice las razones primigenias que llevan a elegir el medio rural como ámbito

de descanso, con una excesiva edificación y urbanización de grandes áreas, bien como comple-

mento al turismo de nieve en los últimos 20 años, y al nuevo y emergente turismo practicante de

golf de los últimos cinco (Da la impresión de que agotado el modelo urbanístico ligado a la nie-

ve, era necesaria la búsqueda de otra actividad, deportiva por supuesto, que justificara el desa-

rrollo inmobiliario). No hay urbanización que se precie que no se anuncie ligada a uno de estos

campos, independientemente de la falta de usuarios reales, del consumo de agua necesario, y lo

que es más preocupante, al margen de las poblaciones locales que con la zanahoria de la revalo-

rización de sus viviendas, y de la creación de precarios empleos, ven desnaturalizados sus entor-

nos y replicados sus pueblos en una discutible copia no siempre afortunada de la tipología

constructiva del medio rural. Un reciente estudio de la Universidad de Zaragoza, indica que sólo

1 de cada 25 propietarios de éste tipo de viviendas en el medio rural llega a censarse en la loca-

lidad donde ha adquirido su segunda residencia, y que la media anual de utilización de las mis-

mas no supera los 15 días, por lo que las ventajas para los habitantes autóctonos de dichos núcleos

rurales, son relativas y escasas.

A pesar de éstas indeseables consecuencias, la actividad turística sigue en auge, y por lo

que respecta al turismo en el medio rural, o turismo de interior, se ha visto reforzado por va-

rios factores:

• El modelo turístico de masas, característico de los años 60, de sol playa y noche, se encuen-

tra agotado por pura saturación, y las nuevas tendencias apuntan con claridad al turismo cul-

tural, que incluye desde jubilados a estudiantes y desde profesionales urbanos a amantes de

la naturaleza.

Y está produciendo distintos efectos:

• Al mismo tiempo, el auge del turismo cultural, aparece como la principal esperanza de salva-

ción del patrimonio histórico y artístico de nuestro país, dependiendo en buena medida del au-

mento del turismo, la preservación del patrimonio cultural inmueble, en especial el emplazado

en pequeñas ciudades y pueblos.

Por otra parte, en 1998, en una reunión de expertos en Madrid, se dieron a conocer los da-

tos por los que la Organización Mundial del Turismo, (OMT), consideraba que nuestro país, po-

día perder en unos años su tercera posición mundial como potencia turística si no fomenta las

facetas culturales. Los otros países receptores de turistas por delante de España, son Estados

Unidos y Francia.

• ¿Cómo se define dicho turismo? Una de los enunciados más aplicados podría ser el que dice que

es «aquel cuya finalidad es conocer a fondo un lugar, su gente, sus costumbres, y en el que el

turista se dedica a visitar lugares históricos, monumentos, edificios, asistir a espectáculos espe-

cíficos de música, arte... y a disfrutar de la gastronomía...».

De momento nos sirve tal afirmación para seguir adelante.

209

A. MARTÍNEZ VALERO

4. EL PATRIMONIO CULTURAL

El patrimonio cultural se puede definir de muchas maneras. Elegiremos para nuestra exposi-

ción la definición que del mismo hace la Ley 3/1999 del Patrimonio Cultural Aragonés, que dice:

Es el conjunto de elementos naturales, o culturales, materiales e inmateriales, tanto hereda-

dos de nuestros antepasados como creados en el presente, en el cual los aragoneses reconocen sus

señas de identidad y que ha de ser conservado, conocido y transmitido a las generaciones veni-

deras, acrecentándolo.

La relación entre patrimonio y turismo no es un hecho reciente. Ha sido el primero o uno

de los primeros motivos de compra de los viajes turísticos antes del fenómeno turístico como lo

entendemos actualmente: París, Florencia, Los Alpes, Viajeros Románticos, etc...

Como recurso turístico, el patrimonio tiene unas cualidades muy específicas, que lo hacen

particularmente atractivo:

• Que es gratis.

• Que es de todos.

• Que confiere al destino turistico aires de distinción y respetabilidad.

• Y que no está sujeto a la estacionalidad.

Una de las primeras consecuencias, y no la de menos calado, es que al ser público, esto es, «de

todos» es el único recurso turístico que puede ser promocionado abiertamente por la Administración;

otra es que por la misma razón, puede ser asociado a la oferta de cualquier empresa privada.

Sin embargo, a pesar de ésta segunda consecuencia, en general, no existe un interés real en

el sector empresarial turístico por el patrimonio. La empresa turística puede aprovecharse de los

recursos patrimoniales, para vender sus servicios, pero difícilmente activará recursos patrimonia-

les para convertirlos en productos turísticos.

Tal vez, la falta de una mayor flexibilidad en el tratamiento del mecenazgo y en las conse-

cuencias fiscales del mismo esté en la raíz de ésa falta de compromiso de la empresa privada para

contribuir al mantenimiento y conservación del patrimonio público que asocia con su oferta pero

del que se olvida con facilidad si hay que concretar económicamente dicha contribución. «Si es de

todos, que paguen todos».

5. LOS DISTINTOS TIPOS DE PATRIMONIO CULTURAL

Sin pretender ser prolijos, relacionaremos a continuación algunos de los variados ejemplos

que componen el patrimonio cultural:

• El patrimonio arqueológico.

• El patrimonio artístico y monumental.

• Los centros urbanos y las ciudades históricas.

• Lugares relacionados con el turismo religioso.

• Los museos (y centros de interpretación).

• Los lugares históricos.

• Los alojamientos con encanto.

210

El patrimonio como revalorización de lo rural

• Los parques recreativos de temática cultural.

• El patrimonio vinculado al agua.

• Edificios y lugares relacionados con la industria y la minería.

• La arqueología industrial.

• Las casas de personas célebres.

• El patrimonio antropológico.

• El patrimonio rural.

• Los espacios protegidos y las curiosidades naturales.

• Los acontecimientos culturales programados.

• Las rutas temáticas y culturales.

• Etc.

Nuestro país, con una gran y variada historia, tiene, a pesar de la desidia y desinterés tradi-

cional por el patrimonio, así como por las agresiones urbanísticas e inmobiliarias que se han pro-

ducido desde el desarrollismo de los años 60, un enorme patrimonio histórico y artístico, del que

da cuenta las cifras que constan a continuación:

11.522 Bienes de Interés Cultural (que son aquellos incoados como tales con arreglo a la Ley

de Patrimonio de 1985 y que les otorga especial protección):

• 7.355 monumentos.

• 65 jardines históricos.

• 76 sitios históricos.

• 445 zonas arqueológicas.

• 638 conjuntos históricos.

• 2.943 castillos.

En nuestra región, algunas cifras son igualmente significativas:

• Cerca de 1.000 castillos.

• En Teruel, 900 edificios religiosos.

• 116 localidades aragonesas tienen Arte Mudéjar, declarado Patrimonio de la Humanidad.

Tal volumen patrimonial, que en la mayoría de las ocasiones se encuentra en el medio rural,

requiere importantes recursos para su conservación y mantenimiento. Como ejemplo, aportaremos

igualmente las cifras del patrimonio que se encuentra en el ámbito del Pirineo, ya que estamos

celebrando éstas jornadas en él.

Los datos fueron elaborados por el inventario de Patrimonio Arquitectónico de interés his-

tórico-artístico realizado por el Ministerio de Cultura en 1979,1981 y 1984. Se han quedado un

tanto obsoletos, pero son los que sirvieron para el encuentro hispano-francés celebrado en Jaca

los días 22 y 23 de Junio de 1989 bajo el título «Los Pirineos Montañas de Europa», y estable-

cían en el ámbito pirenaico las siguientes cifras respecto al patrimonio, declarado Bien de

Interés Cultural, excluyendo por tanto una infinidad de elementos patrimoniales que no tienen

dicha calificación:

862 elementos o inmuebles de uso diverso. 490 conjuntos o núcleos urbanos o rurales.

• 2 catedrales. • 476 iglesias. • 187 ermitas.

• 16 monasterios. • 38 castillos. • 18 torres.

211

A. MARTÍNEZ VALERO

• 2 murallas. • 8 palacios. • 58 casas monumentales.

• 24 puentes. • 1 acueducto. • 4 fuentes.

• 5 molinos.

Del estado de conservación de éste patrimonio, también se acompañaba una valoración que

determinaba que se encontraba,

• Bien conservado 33%

• Deficientemente conservado 41%

• En ruina inminente 7%

• En ruina parcial 8%

• En ruina total 8%

• Solo restos 3%

Si ésta era la situación del patrimonio protegido en 1989, sería interesante comprobar actual-

mente su evolución, y especialmente la del patrimonio que no había obtenido ninguna figura de

protección. Seguramente, aventuro que el resultado será de lo más deprimente.

6. LA PROTECCIÓN DEL PATRIMONIO

El patrimonio en Aragón, oficialmente, se encuentra amparado y protegido gracias a dos ins-

trumentos legales básicos:

• La ley de patrimonio estatal de 1985.

• La ley de patrimonio cultural aragonés de 1999.

Asimismo, un gran número de entidades e instituciones intervienen con mejor o peor fortuna

en su conservación, preservación y gestión, y van desde: la administración pública en todos sus

niveles (atentos a la novedad de competencias comarcales sobre la materia), incluyendo algunos

programas culturales de ámbito europeo de los que se beneficia nuestro patrimonio. Entre los es-

tatales habría que destacar la inversión por ley del 1% de las obras públicas en materia cultural,

que sin embargo está sujeto al arbitrio de la tendencia política del Ministerio de Fomento en cada

momento, y la vinculación igualmente política de los lugares donde se invierte, no existiendo unos

criterios razonables ni unas normas establecidas para su empleo e inversión. En nuestra región,

en unas ocasiones ha sido utilizado para la compra de varios cartones de diseño de tapices de

Goya, para acrecentar el patrimonio goyesco de la Comunidad Autónoma, y en otras para invertir

en la zona donde se había producido las obras públicas (y sus molestias), como la inversión en la

Iglesia de San Francisco de Monzón, convertida en escuela de música con una inversión de 6 mi-

llones de euros...

Tras la administración, las entidades financieras y especialmente las obras sociales y cultura-

les de las cajas de ahorro, son las que mayor presupuesto destinan a la preservación del patri-

monio, normalmente del patrimonio más monumental. A nivel estatal, Caja Duero, Caja Madrid y

la Caixa serían las más importantes, y en nuestra Comunidad, Ibercaja y CAI.

Tras la administración y las entidades de ahorro, la intervención del resto resulta escasa y vo-

luntarista, pues la falta de recursos económicos es palpable.

212

El patrimonio como revalorización de lo rural

Los centros de desarrollo ligados a los programas Leader o Proder de desarrollo rural están ejer-

ciendo un papel muy importante respecto a la intervención, y recuperación del pequeño patrimonio

rural, tan diseminado y numeroso, ya que en sus presupuestos, en los que participan fondos euro-

peos, estatales y autonómicos, existen partidas para dichas intervenciones que están salvando un pa-

trimonio cultural irrecuperable sin una rápida intervención. No obstante, no existen criterios

unificados ni razonados para ello, y podemos encontrar actuaciones de todo tipo, que van desde una

nula o escasa intervención, a programas de intervención cultural comarcal, es decir que abarcan todo

su territorio de actuación y comprometen y dan cohesión al territorio y a sus gentes, hasta actuacio-

nes unitarias pueblo a pueblo en un simple reparto de cuota y de presupuesto.

Otros intervinientes en la conservación y recuperación del patrimonio, vendrían a ser algunos

propietarios particulares, que a pesar de su coste y falta de recursos han hecho posible que un pa-

trimonio heredado, y que tiene carácter monumental, haya sido preservado no sin enormes esfuerzos

personales y económicos. Un ejemplo cercano en la zona donde estamos podría ser la casa torreada,

Casa Mur, en Aluján, Valle de la Fueva. El ejemplo contrario lo darían los propietarios del Palacio de

Morata, que han permitido su enorme deterioro en una operación de presión y especulación ante la

administración autonómica, o los propietarios del Castillo de la Venta de Ballerías, que recientemen-

te han derribado sin que la administración tuviera ningún tipo de conocimiento. Tras las lamentacio-

nes públicas, se desconoce que hayan realizado ningún tipo de expediente sancionador, ni mucho

menos que hayan señalado responsabilidades entre los funcionarios que deberían de velar por la con-

servación y vigilancia del patrimonio monumental.

Otros participantes en la preservación del patrimonio cultural son: las Escuelas Taller del INEM,

acertada propuesta del ingeniero y dibujante Peridis, numerosas Asociaciones y Fundaciones sin áni-

mo de lucro entre las que destaca como pionera y modelo, así como por el número y la calidad de

sus intervenciones la veterana Asociación de Amigos del Serrablo, y otros Centros de Estudios Co-

marcales y Asociaciones Culturales Locales, en las que se encuentran involucrados personas vincula-

das al lugar donde se encuentra el patrimonio, lo que confiere a sus actuaciones un valor añadido

que difícilmente lo puede aportar empresas ajenas al territorio o burócratas que deciden desde des-

pachos sin contemplar ni siquiera una foto del bien sobre el que deciden su futuro o su ruina.

Entre las asociaciones, merece un lugar destacado APUDEPA, (Asociación para la defensa del

patrimonio aragonés) que ejerce una crítica constante y viene advirtiendo y actuando en defensa

del patrimonio de todo tipo, a pesar del desagrado de la administración por su actuación. Como

es habitual en nuestra región, es preferible «matar al mensajero» que nos señala nuestros «defec-

tos», en lugar de asumirlos y corregirlos.

Pero si bueno es nombrar a quienes se preocupan por la conservación y preservación de nues-

tro patrimonio, también merecen alguna mención aquellos que sistemáticamente lo agreden. Y no

nos referimos exclusivamente a los especuladores inmobiliarios y a quienes los amparan en aras

de un malentendido interés por el progreso y el desarrollo cuando no por un beneficio directo en

las operaciones especulativas. Queremos referirnos expresamente a dos grandes corporaciones

empresariales: las empresas eléctricas y las de telefonía por cable. Un simple paseo por cualquier

calle de nuestras ciudades o de nuestros pueblos, incluso los más monumentales, nos revelará una

maraña de cables clavados de cualquier forma sobre paredes de edificios monumentales, ventanas

góticas, adornos pétreos, dovelas, que atraviesan el espacio de las calles sin ningún respeto ni con-

213

A. MARTÍNEZ VALERO

sideración hacia el patrimonio, haciendo en ocasiones imposible la contemplación sin dejar de ver

el desaguisado y el enrollado del cableado de distintos tamaños, colores, con diferentes anclajes

(normalmente ni se molestan en quitar los antiguos al colocar cableado nuevo). Al parecer, el so-

terramiento, aunque no fuera más que para no dañar aquellos bienes más evidentemente monu-

mentales, es algo que no contemplan estas compañías, que en numerosas ocasiones financian

actividades culturales por un supuesto interés que desmiente su actividad diaria. No deja de pro-

ducir una sana envidia el contemplar en numerosos pueblos de nuestros vecinos franceses, cómo

se han enmascarado y soterrado los cables eléctricos para que no sufran los inmuebles, sin que

se vea por ello perjudicado el suministro. ¿Será que efectivamente, Europa termina en los Pirineos?

7. LOS NUEVOS YACIMIENTOS DEL EMPLEO Y OTRAS VENTAJAS DE LAUTILIZACIÓN Y CORRECTA GESTIÓN DEL PATRIMONIO

Al margen del interés estético, ético, identitario, sociológico, etc... del patrimonio, existe otra

utilidad del mismo, económica y social, que se ha hecho patente en las últimas décadas, con es-

pecial incidencia en el mundo rural: es una nueva fuente de empleos o dicho de una manera más

a la moda, el patrimonio es el origen de nuevos nichos o yacimientos de empleo.

Además de aquellos relacionados con el alojamiento y hospedaje, sea en viviendas de turis-

mo rural o en pequeños hoteles rurales, así como con la restauración y la gastronomía, otros em-

pleos vinculados al uso y gestión del patrimonio, se han incorporado al benéfico listado:

De forma directa,

• Guía-intérprete del patrimonio.

• Guía de turismo.

• Gestor cultural.

• Guía de museo.

• Informador turístico en hoteles y admon.

• Monitor de actividades culturales.

• Gestor de desarrollo rural.

• Monitor de turismo E.T.

• Gestor de turismo.

Indirecta,

• Restauración (demanda de artesanos cualificados).

• Creación de centros culturales (artistas, conservadores).

• Difusión de la cultura (acogida, guias, ciéntificos, técnicos, editores).

• Oferta cotidiana y mantenimiento (vigilantes, gestores de flujos turísticos).

• Potenciación de la cultura popular.

Asimismo, nuevos usos del patrimonio han aparecido, potenciándolo de forma directa y no

sólo como lugar de destino. Entre ellos, podemos citar como más novedosos,

• Museos locales.

• Centros de interpretación temáticos.

• Recreaciones históricas.

• Recreaciones literarias.

214

El patrimonio como revalorización de lo rural

• Teatralizaciones.

• Mercados medievales.

• Rutas temáticas.

• Rutas de leyenda.

• Parques temáticos.

• El mundo mágico y legendario: templarios y brujas

De todos ellos, las teatralizaciones o las recreaciones históricas, resultan haberse convertido

en un fenómeno de masas en muy poco tiempo, con la participación de buen grado, de muchos

habitantes de no pocos de nuestros pueblos del medio rural. Este fenómeno, que tiene casi cien

años en Europa y EE.UU., especialmente el de las recreaciones históricas, de batallas y eventos,

de trascendencia (identitaria), para aquellos que las recrean, se extiende con éxito de participa-

ción y público por numerosos lugares. A las manifestaciones festivas de Moros y Cristianos (lo más

parecido hasta ahora a las recreaciones de las que nos queremos ocupar) y alguna representación

teatral popular, La Pasión de Esparraguera, y cómo no, las procesiones de Semana Santa e inclu-

so la ofrenda de flores de las Fiestas del Pilar con 300.000 personas disfrazadas, ¿de época?, se

han venido sumando numerosas actividades que requieren teatralización y participación popular.

Por citar algunos ejemplos, estos irían desde La Festa Da Prehistoria de Mos (Pontevedra), las

Bodas de Aníbal e Hímilce, de romanos y cartagineses de Cartagena con desembarco naval incluido,

la recreación de las Guerras Cántabras contra los romanos en La Puebla de Buelna, el desembarco

Vikingo (y etílico) en Catoira (Pontevedra), pasando por las representaciones teatrales populares

como la del Alcalde de Zalamea, en la localidad del mismo nombre, y las recreaciones militares his-

tóricas, especialmente las vinculadas a la Guerra de la Independencia, como en Bailén, con más de

medio millar de figurantes implicados.

En nuestra región, la representación de La Morisma de Aínsa, que se celebra cada dos años

con enorme éxito de público, y en la que participan 300 actores aficionados vecinos de la locali-

dad, podría considerarse uno de los eventos de éste tipo más veteranos. Mucho más moderna,

pero ya consolidada es la representación de las Bodas de Diego e Isabel, los Amantes de Teruel,

que se ha convertido en un auténtico fenómeno de participación popular, donde colaboran cien-

tos de vecinos de Teruel y que atrae cada año a un mayor número de visitantes. El Bajo Aragón

está representando por la «rompida» en la que en numerosas localidades, miles de personas ar-

mados con los bombos típicos de la zona, y vestidos de «nazarenos» hacen su particular repre-

sentación de Semana Santa, golpeando sin cesar sus instrumentos. Las guerras napoleónicas

también tienen su representación histórica tanto en Perdiguera y Leciñena con su representación

anual de la batalla del Llano contra las tropas francesas, así como en la ciudad de Zaragoza a tra-

vés de la Asociación de Amigos de los Sitios, cuyos miembros, con uniformes de época, están pre-

sentes en las calles de la ciudad en cada aniversario.

La afición al disfraz, por el uso de instrumentos, etc. se acompaña de una creciente moda y

afición de la sociedad en general por lo medieval (templarios, Grial) e incluso lo esotérico y lo le-

gendario. Pocas son las localidades de importancia que no incorporan en sus fiestas o eventos

principales la representación de un mercado medieval, normalmente en período estival, que sue-

le tener gran aceptación. Por último, un nuevo interés turístico cultural están teniendo aquellos

lugares relacionados con escenarios bélicos en general, y con los de la Guerra Civil española en

215

A. MARTÍNEZ VALERO

particular, (La Ruta de Orwell en los Monegros, las de la Batalla del Ebro en Gandesa, sin olvidar

la más veterana, la de los restos de la batalla de Belchite, la ruta de la Barcelona Anarquista,... En

relación con todo ello, y especialmente con la puesta en valor del patrimonio legendario y bélico,

apenas se ha comenzado a trabajar. En próximos años, supondrá, bien gestionado y mejor repre-

sentado un enorme aliciente turístico cultural y un importante recurso económico.

8. UNA NUEVA ENFERMEDAD RURAL, RELACIONADA CON EL USO DELPATRIMONIO: LA CENTROINTERPRETIONITIS

En los últimos años, una nueva patología ha sacudido nuestras comarcas. Una enfermedad in-

fecciosa e inflamatoria de las meninges de preclaros servidores públicos. La hemos dado en lla-

mar Centrointerpretionitis: exceso de Centros de Interpretación. Dicha enfermedad tiene unos

síntomas muy evidentes por los que se puede reconocer enseguida:

• Suele evidenciarse por la falta de ideas originales por parte de quienes nos administran y a

veces incluso de los administrados. También suele ocurrir que a las voces que disienten no se

las escuche, debido a una sordera crónica hacia todo lo que suene a crítica, no se le haya ocu-

rrido a los enfermos, o por desprecio a las minorías, pues ya se sabe, que sólo es bueno lo que

les gusta a muchos.

• También tiene que ver con la envidia ¿sana?. Querer en nuestro pueblo, lo mismo que en el de

al lado, aunque no nos haga falta.

• El exceso de recursos, unido a la falta de ideas, suele llevar igualmente al centro de interpre-

tación. No saber dónde gastar aquello que nos ha llegado sin pedirlo. (1% cultural de las obras

públicas, recursos de los programas Leader y Proder que no tienen solicitudes y que se trans-

fieren –legalmente, por supuesto– a otras medidas subvencionables...).

• Mirarse el ombligo considerando que determinada actividad que se realiza o realizaba en nues-

tra localidad tiene un interés general y no sólo el que le damos nosotros... (en los años 70 y 80

proliferaron los museos etnológicos locales, y es normal comprobar, sobre todo en una misma

comarca, que aquello que se muestra en una localidad, tiene su réplica en la siguiente, y en la

otra: los mismos trillos, las mismas forcas, los mismos instrumentos..., haciendo poco interesante

su visita, pues una vez visto el primero.

• Ande o no ande. Lo peor de está proliferación de centros de interpretación es su propia con-

cepción. No se planifica (en muchos de ellos), previamente el día a día, sus dimensiones, el gas-

to posterior de mantenimiento, y a menudo, tras su inauguración y foto, se cierran o se deben

de visitar en contados días, o hay que buscar la llave en casa de un vecino, o acaban siendo des-

tinados a otras actividades, como cuartel de la Guardia Civil, sede de asociaciones, incluso es-

cuela municipal.

Para que nos hagamos idea de la importancia de la «enfermedad» en Aragón, daremos las si-

guientes cifras que creo que son ilustrativas:

• 225 centros de interpretacion o museos locales.

– 53 de arte (25 de arte sacro o parroquiales).

– 25 paleontología/arqueología.

216

El patrimonio como revalorización de lo rural

– 28 de naturaleza.

– 64 etnológicos.

– 55 varios.

27 en las capitales de provincia.

Resto en el medio rural: 198.

Para tratar la enfermedad, sería suficiente, conociendo los síntomas como los conocemos,

aplicar remedios tan sencillos como:

• Imaginación.

• Diseño apropiado y riguroso (sencillez y didactismo).

• Planificación del uso y gasto (pensar en el dia de después).

• Innovación.

• Gestión de los recursos.

9. ASPECTOS NEGATIVOS EN LA UTILIZACIÓN DEL PATRIMONIO COMORECURSO

Pretendiendo realizar una crítica constructiva, aunque moleste, llegados a éste punto, creo ne-

cesario señalar las deficiencias más llamativas observadas para un correcto uso del patrimonio en

nuestra región. Muchas de deficiencias que se indican, podrían extrapolarse a otras comunidades

y lugares turísticos:

• Falta de objetivos claros en el uso del patrimonio, a veces, incluso se comienzan restaura-

ciones muy costosas sin tener clara la utilización posterior.

• Política errática de las administraciones. Hemos pasado de una treintena de declaraciones de

Bien de Interés Cultural en los 15 años de autonomía anteriores, a casi 400 en los últimos años.

La Ley del péndulo prima en la actividad de la administración, en función de los directores ge-

nerales de patrimonio que se encuentren ejerciendo.

• Demora en las intervenciones. Hay veces ya no existe el bien sobre el que habría que ac-

tuar o han aparecido nuevas patologías que son necesarias tratar, y lo que es peor, presu-

puestar de nuevo.

• Dispersión de las intervenciones.

• Prioridades monumentales frente al patrimonio olvidado. El pequeño patrimonio etnológi-

co rural, languidece y desaparece frente a las actuaciones «estrella», de posterior utilización me-

diática, que además acaparan los recursos económicos.

• Deterioro progresivo del patrimonio. No hay un plan director ni se plantea la vigilancia pre-

ventiva sobre el mismo. Cuando ya no se puede más (que suele ser cuando se cae la cubierta),

se actúa y se apaña, y si no, ¡qué le vamos a hacer! ¡hay tanto, que no podemos llegar a todo!

Crónica de unas muertes anunciadas, en la mayoría de los casos.

Sobre las que vienen a continuación, se documentan con los ejemplos concretos que referiré

más tarde.

• Actuaciones de rehabilitación erróneas.

217

A. MARTÍNEZ VALERO

• Agresiones contínuas sobre el patrimonio (como ejemplo me remito a lo dicho sobre las com-

pañías eléctricas y de telefonía).

• No se aplican las medidas legislativas de protección.

• Falta de señalización adecuada y homogénea. Ahora encima, cada comarca la suya, si la hay.

• Falta de información.

• Falta de guías de interpretación del patrimonio.

• Abuso de centros de interpretación que no interpretan.

• Nula planificación posterior de la gestión de los centros y museos.

• Información deficiente acerca de los horarios.

• Falta de infraestructuras básicas.

• Falta de infraestructuras hoteleras.

• Publicitadas rutas temáticas que no son tales. La ruta del Grial, a pesar de haber un núme-

ro de localidades altoaragonesas relacionadas con su presencia legendaria, se publicita una ruta,

¡a caballo! Entre Jaca y Valencia que prescinde de aquellas.

• Ausencia de implicación de la población local. Suele ser la más grave y dónde tropiezan to-

das las administraciones. El administrado, oír, ver y votar.

Como ejemplos de muchos de los aspectos negativos citados, valgan a continuación las si-

guientes referencias concretas:

• El uso en las iglesias del encendido o música mediante pago: Catedral de Jaca, Siresa, Exco-

legiata de Aínsa. No parece de recibo que tras las enormes cantidades de dinero público (Sirena,

Aínsa) o privado (iluminación de la catedral de Jaca), sea necesario echar monedas en una nue-

va hucha recaudatoria para poder apreciar el resultado de la rehabilitación efectuada. En oca-

siones, dicho pago se realiza tras el de la entrada, con la excusa de ambientar musicalmente la

visita. Cutre.

• Serrablo. No hay guías ni puede visitarse la ruta mozárabe. Tras el inmenso trabajo realizado

por la Asociación de amigos del Serrablo, las iglesias restauradas se encuentran cerradas y es

imposible su visita, salvo en algunos períodos estivales en los que se han publicitado visitas que

no han tenido continuidad en años posteriores.

• San Miguel de Foces, San Juan de Toledo de La Nata, hay que pedir la llave. Dos de los monu-

mentos que albergan las probablemente más espectaculares pinturas góticas de la región, hay

que visitarlos pidiendo la llave al vecino de turno, en la confianza de que se encuentre en casa.

A menudo, una vez conseguida la llave, la visita se realiza sin ningún tipo de vigilancia, con gra-

ve riesgo para dichas pinturas.

• Canfranc. Estación. Sin comentarios. 35 años después de su cierre, se ha comenzado su rehabi-

litación (por supuesto primero se ha dejado deteriorar sin mover un solo dedo). Rehabilitación

que se ha venido postergando, y que al fin ha comenzado, como no podía ser de otra manera,

polémicamente.

• Castillo de Montearagón. Propiedad de patrimonio del Estado, su rehabilitación es como la yen-

ka, un año sí, otro no, ahora éste muro mañana ya veremos. Construido en 1096 para la toma

218

El patrimonio como revalorización de lo rural

de Huesca, a escasos 3 Km. de la capital, sus ruinas recuerdan diariamente la desidia de quie-

nes deberían de velar por el patrimonio.

• San Victorián en el Sobrarbe. El que pasa por ser el monasterio más antiguo de España, ha su-

frido en sus muros la misma dejadez que muchos de los restos históricos que se encuentran en

el medio rural. Tras décadas de abandono y expolio (la cubierta fue desmontada y vendida por

orden del Arzobispo de Zaragoza, monseñor Cantero Cuadrado), se inició una rehabilitación que

tras reponer con planchas de cobre la cubierta, hubo que repetir tras arrancarla un golpe de

viento. La rehabilitación interior no puede apreciarse, pues tras colocar una nueva puerta de en-

trada, se ha perdido la llave (sic).

• Muro de Roda. Esta tenencia eclesiástica amurallada del Valle de la Fueva, va siendo restaura-

da, pero su uso posterior ha quedado condicionado. Al tiempo que se reparaban sus ruinas y

se comentaba la posibilidad de convertirlo en algún tipo de parador turístico, se alzaban las vo-

ces eclesiales reclamando su propiedad, y por tanto su derecho a decidir su uso. Hasta que sea

así, la restauración avanza lentamente.

• Belchite. Plan de Consolidación. Cíclicamente se menciona desde hace una decena de años la

aplicación del Plan de conservación realizado por la Escuela de Arquitectos Técnicos de Madrid.

La realidad es que siguen desapareciendo las ruinas, y las únicas intervenciones son para apun-

talar muros.

• Villanueva de Sijena. Convenio de 400 millones de las antiguas pesetas. Igualmente, éste convenio

firmado con Caja Madrid, viene apareciendo en cada legislatura nueva. Llevamos varias en las que

el nuevo consejero de cultura de turno se hace una foto para la prensa con los responsables de la

Obra Social de la entidad de ahorro. La rehabilitación del monasterio, esperando.

• Cartuja de Las Fuentes. Propiedad particular, hubo recientemente que imponer la obligación le-

gal de que pueda visitarse los fines de semana. A pesar de que las propietarias han reparado

cubiertas y muros, corre un peligro inminente el deterioro de los más de 2.000 m2 de pinturas

murales que contiene, realizados en el siglo XVIII por Manuel Bayeu, monje en dicha cartuja, y

cuñado de Francisco de Goya.

• Roda de Isábena, visita en grupos. Imposible ver la colegiata de forma individual y detenién-

dose donde a cada uno le apetezca. O es gregariamente, o no se ve.

• La Seo de Zaragoza, restricciones de uso para su visita en los horarios de culto. Tras una inver-

sión pública multimillonaria durante 17 años de trabajos.

• Camino de Santiago. Si las necesidades inmobiliarias lo demandan, no hay problema al parecer

en modificar su trazado, por la vía de que no está claro que lo fuera, o inventándose documentos

que nadie puede comprobar. De la falta de albergues, señalización adecuada y reparación del

camino a lo largo del trazado aragonés, no hablamos. No toca.

10. ALGUNAS REFLEXIONES SOBRE EL PATRIMONIO Y SU UTILIZACIÓNCOMO VALORIZACIÓN DE LO RURAL

Tras lo expuesto hasta este momento, considero necesario hacer un alto para reflejar una se-

rie de reflexiones que espero compartir con ustedes:

219

A. MARTÍNEZ VALERO

• Se empieza a producir un fenómeno social de masíficacion y consumo de nuestro patrimo-

nio histórico artístico.

• En nuestro entorno inmediato europeo el patrimonio cultural forma parte de una oferta tu-

rística ya consolidada suponiendo mas que una carga una fuente de ingresos.

• El patrimonio en nuestro país esta llamado a ser uno de los principales impulsores de su

desarrollo sostenible. Ya lo denominamos «bien (útil y provechoso) cultural».

• El turismo cultural aparece hoy como la principal esperanza de salvación del patrimonio

histórico y artístico.

• El turismo cultural impulsa las inversiones privadas y mantiene la población.

• Según la OMT la tendencia turística obliga a potenciar las facetas culturales de la misma.

• El patrimonio cultural, especialmente en el medio rural, pese a actuaciones concretas reali-

zadas últimamente, sigue estando en situacion precaria en Aragón.

• La intervención en bienes culturales es cara y requiere grandes inversiones.

• La intervención escasa de la iniciativa privada tiene un enfoque dirigido al marketing co-

mercial, faltando criterios de racionalidad.

• Necesidad de mejorar la ley de mecenazgo y establecer mejores condiciones fiscales y exen-

ciones a las intervenciones privadas.

• Estudiar la posibilidad de hacer confluir los esfuerzos públicos y privados.

Junto a estas reflexiones, que no pretenden otra cosa que expresar en voz alta unas opiniones

personales, me gustaría proponer cómo abordar el tema de la gestión y utilización del patrimonio en

los núcleos rurales redactando un plan director o plan de actuación de forma íntegra que contiene

aquellas cuestiones que la experiencia, la observación y el uso, me han hecho considerar:

Plan de actuacion en nucleos rurales

• Inventariar el patrimonio, indicando situación y calidad del mismo.

• Ubicación de la localidad: accesibilidad, paisaje, potencialidad turística.

• Servicios básicos: comunicaciones, sanidad, alojamientos, restauración.

• Adecuacion del entorno y mejora de la imagen: soterramiento de líneas telefónicas y eléctricas,

utilización de materiales tradicionales, integración del mobiliario urbano, señalizaciones.

• Embellecimiento de las localidades.

• Plan global de ordenación con participación de la población y agentes socioeconómicos que

incluya actuación respecto al patrimonio abandonado: fomento de la construcción de vi-

viendas de alquiler, relocalización de actividades comerciales o servicios a la población...

• Renovación y valorización del pequeño patrimonio rural desprotegido: peirones, hornos,

neveras, herrerias, palomares, pozos, fuentes, lavaderos, etc.

• Plan director de costos de cada actuación y forma de financiación.

• Arropar y promocionar los proyectos a través de fórmulas asociativas. Crear tejido social.

Y puestos a dar consejos (que se siguen si se quiere), un decálogo de algunos aspectos que

hay que corregir en los núcleos rurales si queremos seguir atrayendo a visitantes:

220

El patrimonio como revalorización de lo rural

• Mejorar la limpieza de las calles y recogida de basura.

• Los animales sueltos... en el monte.

• Adecentar y ornamentar con sencillez.

• Enmascarar los elementos urbanos «modernos» o ruralizarlos.

• Soterrar las líneas eléctricas y telefónicas.

• Plan de sustitución progresiva de los elementos arquitectónicos indeseables: uralita, pvc, etc.

• Señalizar correctamente los elementos patrimoniales.

• Garantizar la visita (si es posible guiada) a dichos elementos.

• No sangrar al turista (tampoco al autóctono). Moderación en los precios de la hostelería y

en los comercios.

• Calidad de los servicios turísticos.

Estos consejos son también consecuencia de dos sencillas preguntas que debemos hacernos.

• ¿Se puede pretender atraer a nuevos visitantes o incluso a nuevos residentes, sin mejorar la

imagen de los pueblos?

• ¿De que sirve invertir en alojamientos, en estructuras de animación, en campañas de pro-

moción centradas en la calidad de la acogida o en la calidad de vida si no se cuidan los

pueblos?

Para terminar, no se me ocurre mejor manera que con un refrán anónimo español, un poco

retocado por mí:

Las obras maestras del arte (y del patrimonio) tienen a los ricos como esposos, pero a

lo pobres como amantes.

221