Nombre del trabajo:

“Ensayo sobre las bases filosóficas de la educación, doctrinas y escuelas teóricas”

Curso:

Filosofía y ciencias de la educación en la práctica educativa

Alumnos:

Julio César Caro Oseguera (A01303340)

Irma Gabriela Guerra González (A01305949)

Ángel Germán Heredia Caballero (A01317420)

Luz América Heredia Castellano (A01312489)

Pablo Antonio Prada Rodríguez (A01312308)

Profesor tutor:

Irma Perea Henze

22 de septiembre de 2013

Introducción

La práctica educativa ha acompañado a las ciencias a lo largo de la historia de la

humanidad, la educación como cualquier otra ciencia ha orientado desarrollo a partir las

principios filosóficos creados por los grandes pensadores de las diversas etapas de la

historia al buscar las respuestas a las grandes preguntas que buscan explicar la misma

existencia de la humanidad misma y de su entorno.

Para entender las bases filosóficas de la educación es necesario conocer las

grandes doctrinas filosóficas que se han permeado a nuestras sociedades a lo largo de la

historia, así como las nuevas teorías de las ciencias sociales que han influido

específicamente en la ciencia y filosofía de la educación.

Por lo anterior, en el presente trabajo revisaremos las características generales de

grandes doctrinas filosóficas como el materialismo, el realismo, el idealismo, el

empirismo, el racionalismo, el positivismo, la fenomenología y el positivismo lógico,

Así mismo describiremos las características generales de las teorías contemporáneas de

las ciencias sociales que influyen en la filosofía y en la ciencia de la educación; de las

teorías explicativas, revisaremos la teoría neofuncionalista, la teoría de los sistemas y las

teorías neomarxistas; y de las teorías interpretativas, el interaccionismo simbólico, la

etnometodología, la teoría constructivista de Piaget, la teoría sociohistórica y cultural de

Vygotsky y la teoría del aprendizaje significativo de Ausubel.

El presente trabajo no pretende profundizar en las doctrinas filosóficas

mencionadas, sin embargo muestra los rasgos más importantes de cada una de ellas, lo

2

cual permite al lector contar con una perspectiva general de cada una de ellas y es útil

como punto de partida buscar mayor conocimiento sobre cada una de ellas.

Desarrollo

Briones (2006) hace relación de 6 doctrinas filosóficas que fueron relevantes por

su manera de abordaje y relaciona el origen y la fuente del conocimiento.

Materialismo: su principio lo formuló Demócrito en 460 – 370 a. C. quien

explica: Todo lo que existe y rodea al hombre es materia y si no lo es, depende de ella

para su existencia. El materialismo se concibe como: doctrina netamente ontológica, la

composición atómica de los elementos es fundamental sin punto de discusión, aun

cuando son individuales e indivisibles; estas ideas generan posteriormente, el

materialismo científico y el dialectico, en el científico básicamente inclina su estudio a

la física y la química, buscando explicación a todo lo material. El materialismo

dialectico por su parte se dedicó a estudiar las reacciones en cadena que surgen del

mundo material, lo que se denomina causa – efecto relacionando estrechamente atributos

cualitativos y cuantitativos.

Realismo: se deriva de diferentes vertientes y expresiones dando inicio al

denominado realismo metafísico, que le da una connotación de realidad existencial, sin

tener en cuenta si estas ideas se piensan o no.

El realismo gnoseológico hace referencia a cosas que se pueden conocer fuera de

la mente a causa de precepciones humanas y que estas poseen a su vez características

independientes. Por su parte el realismo ingenuo sustenta que los conocimientos son

3

generados por la reproducción de objetos externos, mientras que el realismo crítico le da

mayor relevancia al raciocinio que fundamenta el conocimiento. Briones (2006)

enfatiza que en la actualidad, el realismo científico establece pruebas y métodos

tangibles para determinar la veracidad de las cosas desligado de factores religiosos,

místicos o culturales, los principales representantes del realismo crítico son: Mario

Bunge, Bertrand Russell y G.E. Moore, son los representantes.

El Idealismo por su parte se opone a los planteamientos del materialismo y el

realismo. Las principales vertientes surgen en el idealismo ontológico con Platón quien

desvincula la materia del conocimiento o mundo físico.

Kant quien fue uno de los representantes destacados de esta vertiente expuso que:

la razón se genera de la concepción de las cosas por lo que no acepta su existencia fuera

del ser, debido a que el individuo asume las cosas con una manera única y particular

basado en su manera de razonar guiado por los criterios ya establecidos en su

conciencia. Teniendo en cuenta este orden de ideas Briones (2006) anota que se puede

concluir que el idealismo otorga relevancia al pensamiento, al sujeto, a las ideas y al ser,

que son los entes relevantes para construir el conocimiento.

Posteriormente las doctrinas empírica y racionalistas basaron sus postulados en

que el origen del conocimiento es la experiencia humana sobre el mismo, donde solo la

experiencia lo genera y lo valida por medio de la razón, por lo que conduce a concluir

que el empirismo no da lugar a la metafísica descartando porque no tiene objeto de ser

en la experiencia del conocimiento. Los principales exponentes de estas doctrinas fueron

los ingleses Locke, Berkeley, Hume y J.S. Mill.

4

Por último el Positivismo rechaza rotundamente la metafísica dando relevancia a

los hechos y niega cualquier tipo de realidad que no esté basado en ellos, es decir, no

determina la causa de las cosas por el contrario, da mayor relevancia a organizar y

coordinar los hechos, aparta el que y por qué, centrándose en el cómo. Para Comte,

observar fundamenta el conocimiento y ofrece la certeza de él y a su vez por la certeza

metódica, es decir, que la fiabilidad del conocimiento científico garantiza la unidad del

método que se utiliza.

Las características específicas de las ciencias sociales y de las corrientes

filosóficas en que se basa su estudio, análisis y desarrollo, se originan en la dificultad

para la aplicación del método científico. Heredia y Sánchez (2012), sintetizan el ciclo de

la ciencia de la siguiente manera: observar la realidad o enfrentarse a un problema

práctico, hacer preguntas, realizar observaciones sistemáticas, proponer algunas

explicaciones, establecer hipótesis de las explicaciones dadas, realizar procedimientos

para probar las hipótesis, comparar los resultados de la prueba de hipótesis con la

explicación inicial y realizar nuevas investigaciones que aporten datos y enriquezcan o

refuten la teoría. Como puede apreciarse, cada uno de estos pasos plantean problemas

especiales cuando se  aplican en el estudio de los hechos sociales. Para complicar más

los estudios sociológicos, se presentan controversias que dividen a los estudiosos del

hecho social: la naturaleza de la sociedad y la mejor manera de conocerla, la manera más

justa de resolver los problemas y a que autor seguir cuando se estudia este tipo de

problemas (Bunge 2002). Por todo lo anterior podemos afirmar que la argumentación

filosófica es de gran importancia para entender el estudio de los fenómenos  sociales y el

enfoque particular que tienen .Según Briones (2006), las siguientes escuelas filosóficas

5

se utilizan como bases últimas del cimiento de las bases sociales: la fenomenología, la

filosofía del lenguaje y el positivismo lógico.

La fenomenología

En su concepción moderna considera a la ciencia en crisis por la tendencia del

positivismo a considerar todo conocimiento como científico, excluyendo los temas de

más trascendencia para el ser humano. Propone una lógica pura que no dependa en

absoluto de la experiencia y trata de encontrar en las esencias, los elementos ideales de

una teoría, ubicando a tales esencias en la conciencia, la cual tiene intencionalidad, es

decir, siempre tiene relación con un objeto y para lograrlo realiza dos acciones de

reducción: la reducción eidética y la reducción trascendental o fenomenológica. En la

primera coloca fuera de juego todo lo que tiene de individual un fenómeno para captar

sólo la esencia. En la segunda lo que deja fuera de juego son todas las concepciones del

mundo y de la misma persona que conoce, concluidas ambas lo que permanece es la

conciencia pura.

La filosofía del lenguaje de Wittgenstein

Briones (2006) la describe con  fuertes tintes empiristas, desdeñando las

concepciones éticas y metafísicas, tiene como objetivo en un primer momento,

establecer los límites de aquello que puede expresarse con significado ya que el lenguaje

tiene como finalidad establecer y describir hechos, para lo cual requiere una

correspondencia entre lo real y lo lingüístico, de tal manera que la totalidad de las cosas

no configura al mundo sino la totalidad de los hechos. El segundo momento lo expresa

6

manifestando como su  única finalidad la descripción del  fenómeno del lenguaje

afirmando que  el significado de las palabras se define por su uso.

El positivismo lógico o empirismo lógico

Fundamentado en el positivismo, en el empirismo, en el método científico, en la

lógica matemática, en Wittgenstein y en la sociología positiva, tiene una valoración muy

alta de la ciencia y un rotundo rechazo a la metafísica, de tal manera que se considera su

tarea principal reconocer las proposiciones científicas y distinguirlas de las que no lo

son, basándose en el principio de verificación o criterio empirista del significado

cognoscitivo, contrastándolo con la experiencia (Briones, 2006).

Teorías explicativas

Teoría neofuncionalista

La teoría neofuncionalista explica a la sociedad como un sistema compuesto por

diversas partes que interactúan entre sí, sin que exista en esta relación una determinación

monocausal de una de ellas sobre las otras. La integración o equilibrio entre los

elementos del sistema no es necesariamente una constante ya que existen de manera

normal desviaciones en las pautas culturales institucionalizadas al interior de una

sociedad, por lo que existe una constante tensión en los individuos y en las instituciones

que se traduce en cambios y en consecuentes expresiones de control social. Por lo

anterior existe una constante diferenciación social, ya que el proceso cambio social es

apoyado o rechazado por los grupos y organizaciones que conforman la sociedad

(Briones, 2006).

7

Teoría de los sistemas

La teoría de los sistemas es una teoría desarrollada por Luhmann ambiciosa

propuesta para analiza la sociedad desde un nivel científico adecuado y que permita

encontrar solución a los problemas que se presentan en ella. La teoría sostiene que el

sistema social se constituye en un proceso de distinción en relación al entorno que

consiste en la comprensión y en la reducción de la complejidad del mundo circundante,

siendo los sistemas culturales como la familia, las escuelas, las empresas, los sindicatos,

etc. los que están funcionalmente especializados para reducir la complejidad y el entorno

se convierte en un factor constituyente de estos sistemas.

Asimismo la autorreferencia  que propugna Lehmann en su teoría de los

sistemas, es un planteamiento estructuralista funcional que refiere al concepto de

autopoiesis, tomado de los biólogos Maturana y Varela y que Luhmann entiende

aplicado a un sistema, como la representación de algo autónomo donde los elementos

que lo conforman  y que pueden participar en su reproducción sistémica  reuniendo

además,  las características necesarias para autonombrarse y autoobservarse , en otras

palabras es la operación de un sistema autorreferencial o autopoiético que  le permite

crear sus propias unidades y estructura, con la condición de que  posean una serie de

códigos que generan su distinción con otros sistemas y el entorno ( Muñoz,  2009)

Teorías neomarxistas

Son teorías surgidas a partir del Marxismo y después de la caída del socialismo

en Europa. Briones (2006) considera como las más características el neomarxismo

analítico y el neomarxismo funcional.

8

El neomarxismo analítico es un intento por expresar las ideas centrales de Marx.

Este neomarxismo es considerado como analítico ya que rechaza a la dialéctica como

forma de explicación por la apelación al uso de modernos enfoques metodológicos y

técnicos (Briones, 2006).

El neomarxismo posmoderno sostiene que no son los intereses materiales los que

explican el comportamiento social, sino las ideas que las personas se hacen de dichos

intereses, por lo que se da importancia a la lingüística y al análisis del discurso. Esta

teoría niega la posibilidad de reducción del mundo social a su base económica y

productiva (Briones, 2006).

Teorías interpretativas

De acuerdo con Briones (2006), las teorías interpretativas tienen sus raíces

cognitivas basadas en diferentes corrientes fenomenológicas, formas hermenéuticas y en

ellas se enfatiza el carácter propio de los hechos culturales y sociales correspondientes al

paradigma teórico propuesto por Weber.

El desarrollo de estas teorías se ha llevado a cabo en el contexto microsocial, esto

es, en instancias específicas de grupos pequeños donde se pretende captar el significado

de la interacción de los actores.

Interaccíonismo simbólico

Blumer, según Briones (2006) dio origen al término de interaccionismo

simbólico, basado en la obra de Meadhizo, dando una aportación personal a la teoría

determinándolos como principios básicos. Como base de la teoría se encuentra el

concepto del “yo”, como un reflejo del mundo social y viceversa. Propone tres tipos de

9

objetos; los físicos, como una silla;  los sociales, como un amigo, y los objetos

abstractos, como los principios éticos y morales. Las personas logran aprenden el

significado de los objetos en un proceso de interacción, sin embargo les pueden dar

diversas definiciones. En dicho proceso de interacción se logra aprender símbolos que

representan cosas de manera consensual. El propio lenguaje es un ejemplo de símbolos.

La etnometodología

De acuerdo con Briones (2006) se define como el estudio de los conocimientos

del sentido común y  de los métodos y procedimientos que las personas utilizan para

darle sentido a las situaciones en las cuales se encuentran, encontrar el camino que

deben seguir y por lo tanto, actuar en consecuencia. Da una gran importancia a las

explicaciones que dan las personas a las cuestiones explicativas, es decir a los procesos

como la descripción, la crítica y la idealización de situaciones determinadas. También

esta teoría se desarrolla en contextos micro, como el hogar, la escuela, etc. Plantea un

par de principios: el de indexicalidad, donde las proposiciones que se utilizan en la vida

cotidiana tienen diversos significados de acuerdo al contexto en el cual se apliquen. 

Otro principio es el denominado etcétera, en el que las personas no establecen claridad

en diversas situaciones en las cuales participan, teniendo la esperanza explícita o

implícita de que las cosas se aclararán más tarde. 

Finalmente para concluir este ensayo es relevante considerar las posturas de tres

grandes psicólogos del siglo XX como son Jean Piaget, Lev Vygotsky y David Ausubel,

cada uno de ellos aborda una postura definida desde su perspectiva sobre, el

aprendizaje, la inteligencia y el conocimiento.

Según Briones (2006) Piaget y Vygotsky tuvieron notorias diferencias, partiendo

10

de las diferentes concepciones filosóficas que le s sirvieron de base para sus respectivas

teorías sobre el aprendizaje y desarrollo cognitivo de la persona. En lo relacionado con

las  fuentes epistemológicas, Vigotsky se basa en  la filosofía de la dialéctica marxista,

mientras que Piaget tiene como base filosófica del idealismo objetivo con influencia

hegeliana. 

Vigotsky consideró que dialécticamente hay una correspondencia entre el

desarrollo cognitivo de la persona y el contexto social del cual se es aprendiz, siendo

esto último lo que va a determinar el desarrollo. Entre estos aspectos (desarrollo-

aprendizaje) hay una actividad interrelacionadora y a su vez interpenetradora.

Según Briones (2006) Piaget se apoya en el constructivismo para tratar de

describir y explicar las diferentes formas o estructuras del pensamiento, cómo cada un

de ellas contribuye de manera más o menos sofisticada, a la adaptación de la realidad del

ser humano. Es así como él buscaba a partir del estudio psicológico del desarrollo de la

inteligencia, constituir el enlace entre su formación biológica y sus inquietudes

filosóficas y epistemológicas.

Por su lado el psicólogo ruso Lev Vygotsky propone en su teoría del desarrollo

del pensamiento y del aprendizaje, que la actividad mental es la característica que

distingue al hombre como ser humano y que es el resultado de un aprendizaje

sociocultural, el cual implica la interiorización de elementos culturales, para Vygotsky

las funciones mentales tienen origen en la vida social Briones (2006). Otro concepto que

vale la pena resaltar de su teoría es la zona de desarrollo próximo, donde expone que el

niño puede lograr un aprendizaje con la ayuda de otras personas y que él define como

“la distancia entre el nivel real de desarrollo, determinado por la capacidad de resolver

11

independientemente un problema y un nivel de desarrollo potencial, determinado por

medio de la resolución de un problema bajo la guía de un adulto o en colaboración de

otro compañero capaz” Briones (2006). Este psicólogo también afirma que la pedagogía,

debe crear procesos educativos que puedan incitar el desarrollo mental del alumno, y

esto se logra en la zona de desarrollo próximo.

El tercer y último autor que analizamos fue David Ausubel y su teoría del

aprendizaje significativo, a través de la cual enuncia que el niño construye a partir de su

propio contexto, conceptos básicos previos formados o descubiertos por el mismo

entorno. Para esto se apoya en los postulados de Nicolás Malebranche  y su relación

entre la sensación, la percepción y las emociones, en Foucault y su hermenéutica del

sujeto la cual permite visualizar la interacción de lo conocido con la realidad crítica del

pensamiento; con los productos de la mente y las diversas interacciones con la realidad

sentida y asimilada.

Aprendizaje con abstracción, recepción, funcionalismo, intelectualidad y

procesos inductivos y Emmanuel Kant quien a partir de las tres críticas, de la razón pura,

del juicio y la crítica de la razón práctica, fundamenta muy bien el sentido de aquello

que puede el ser humano hacer viable a partir de la crítica, del análisis y ante todo las

posibilidades que tiene de interpretar y consolidar conocimiento.

12

Conclusiones

Podemos concluir que existe una diversidad de hipótesis filosóficas que se basan

en supuestos ontológicos y gnoseológicos con relación a la naturaleza de los objetos y

los conocimientos que de su estudio se derivan, el que ha tenido como objeto establecer

el origen del conocimiento y la estrecha relación entre el sujeto que conoce y el objeto

que se conoce. En el análisis de las diferentes doctrinas se evidencia la evolución y las

diferentes variantes, el materialismo sostiene que todo lo que existe es materia o

depende de ella para su existencia, el realismo plantea, por su parte que las ideas

universales tienen existencia real con independencia de ser pensadas o no, el idealismo

se opone al materialismo y al realismo y plantea que todo lo que existe fue primero idea

del hombre, con el empirismo que sostiene que el origen de todo conocimiento es la

experiencia, el realismo sugiere que la razón es la causa principal del conocimiento y el

positivismo establece una propuesta basada en la observación, aplicando la certeza

metódica.

Las ciencias sociales, tienen características propias que les hacen requerir, para

su estudio, de metodologías que deben fundamentarse en doctrinas filosóficas. Este

hecho, junto a la diversidad de postulados con respecto al abordaje, extensión, finalidad

y forma de resolver los problemas sociales, ha dado lugar a lo largo de la historia en

este terreno del conocimiento, a corrientes filosóficas que sirven de base y desarrollo de

los estudios sociales, de los cuales el positivismo lógico es el que destaca por su apego

al método científico.

13

Las teorías explicativas de las ciencias sociales dan cuenta de la preocupación de

los grandes pensadores por describir la estructura y dinámica de la sociedad social para

facilitar el estudio de los fenómenos que en ella acontecen, por lo tanto, considerando

que la educación históricamente ha sido uno de los motores del desarrollo de las

sociedades, es importante conocer cada una de estas teorías a fin de contar con las bases

que nos permitan, como profesionales de la educación, realizar investigación

encaminada mejorar nuestros sistemas educativos.

Al respecto, las teorías interpretativas, basadas en el paradigma teórico propuesto

por Weber que trata de encontrar equilibrio entre las ideas positivistas e idealistas de las

ciencias sociales, se han producido en el plano micro social; siendo estos escenarios

específicos donde se de la interacción, con la intención de lograr captar y explicar el

significado de los individuos.

A partir del analisis de las teorias propuestas por los psicologos más relevantes

del siglo XX, Piaget, Vygotsky y Ausubel, queda en evidencia la importancia de las

bases filosóficas que subyacen en la labor académica, en muchas ocasiones cobra

especial relevancia la aplicabilidad de una u otra teoria pedagógica, pero se pasa

desapercibido el trasfondo que da sustento a las teorias de estos psicólogos.

14

Referencias

Briones, G. (2006). Teorías de las ciencias sociales y de la educación: Epistemología. México, Editorial Trillas.

Bunge, M. (1985). Epistemología. Barcelona, Ediciones Ariel.

Bunge, M. (2002). Las ciencias sociales en discusión (eBook). Argentina. Editorial sudamericana.

Heredia, E.Y. y Sánchez, A.A.L. (2012). Teorías del aprendizaje en el contexto educativo (eBook). Monterrey, México: Editorial Digital Tecnológico de Monterrey.

Muñóz, G.,D.A. (2009). Anotaciones conceptuales iniciales sobre los aportes sistémicos de Niklas Luhmann a las ciencias sociales: debates en torno  a las teorías de la acción y sistemas. Red Revista Latinoamericana de Ciencias Sociales, Niñez y Juventud.8 (2), 1-16.

15