TRANSFORMANDO REALIDADES:

Una reflexión en torno a mis prácticas pedagógicas

POR:

César Humberto Aristizábal

La sociedad en general cada día enfrenta nuevos retos, dada la situación económica, política, social y cultural en la que tiene que moverse para poder hacerle frente a las demandas de la globalización. En ese sentido, son muchos los constantes cambios que se dan en el interior de las ciudades haciendo que la educación tenga que ser cada día más activa, pues ésta es el ente transformador de la sociedad.

Es por esto que la formación de los docentes debe estar en concordancia con dichas exigencias, pues es con unas bases conceptuales claras como el docente puede, de alguna manera contribuir a la transformación que la sociedad requiere.

Es así, como los fines de la Educación Colombiana, de conformidad con el artículo 67 de la Constitución Política, enfatizan que la educación debe estar orientada al mejoramiento de la cultura y la calidad de vida de la población, a la participación en la búsqueda de alternativas de solución a los problemas y al progreso social y económico del país (Ley 115, art. 5).

Si tenemos en cuenta lo anterior, podríamos decir que la Práctica Pedagógica se entiende como “un proceso formativo en espacios reales y concretos, que permite un aprendizaje significativo en cuanto involucra al estudiante en la identificación de habilidades y actitudes profesionales”1. En ese sentido, durante las tres practica pedagógicas que he realizado durante mi carrera de Licenciatura en Educación Básica con énfasis en Matemáticas, he tenido la oportunidad de integrar los elementos teórico-prácticos a la cotidianidad del aula, lo que ha hecho posible que mi desempeño profesional sea más cualificado.

Durante las dos primeras prácticas tuve la oportunidad de interactuar en ambientes de aprendizajes reales, enmarcados dentro de proyectos de aulas diseñados para ejecutarlos dentro de un ambiente de aprendizaje determinado. En la primera, con un grupo de estudiantes de la Institución Educativa Camilo C. Restrepo de la ciudad de Medellín, donde trabajé un semillero de matemática que reforzaba los aprendizajes de los estudiantes con dificultades en dicha área.

La experiencia de Práctica I, fue mi primer acercamiento a la ejecución concreta de la labor pedagógica, convirtiéndose en el campo de acción de un

1 CASTAÑO, Adriana. Documento: Seminario práctica en Instituciones escolares. Funlam, 2007

maestro que se proyecta a un contexto social, llevando una maleta cargada de saberes, de construcciones y de momentos significativos que permiten continuar y nunca dejar de investigar, para sentir el placer de ser maestro.

En la segunda Práctica, trabajé con un grupo de estudiantes del Centro Técnico del municipio de Caldas, en el marco de los que se constituyó en un proyecto denominado “Mi Escuela de Matemáticas” 2 En ese sentido,” Mi escuela de Matemáticas” busca brindar un punto de encuentro de servicio a la comunidad caldense, que permee en aquellos espacios de la sociedad más desprotegida que por su situación socioeconómica, no tienen los recursos para subsidiar un apoyo educativo por fuera de las aulas escolares de las que forman parte.

Desde esa instancia, el proyecto de Práctica II tomó importancia para la Institución, porque me brindó la posibilidad de proyección social a la comunidad, prestando un servicio a un grupo específico de la sociedad que no tiene acceso a una educación de calidad, por su situación económica no privilegiada. Para los estudiantes participantes cobró importancia, ya que se convirtió en una oportunidad, tal vez única, de ser formados en un área específica que les permitiera no sólo ser mejores ciudadanos, sino desarrollar sus facultades de pensamiento lógico, precisión y visión espacial. Para mí como maestro, porque me permitió prestar un servicio social a una comunidad desprotegida y necesitada, en la cual estaban involucrados además de los estudiantes, los padres de familia, como primeros formadores de los niños y niñas.

Ya para la Práctica III, y dándole continuidad a “La Escuela de Matemáticas” y a las prácticas educativas con la FUNLAM, se ha desarrollado un proyecto dentro de La Escuela de Matemáticas que se ha denominado “Proyecto de Familia: las tareas escolares”, con el cual se pretende aportar a la problemática de la falta de formación de los padres de familia en conocimientos académicos en áreas básicas y así puedan ayudar a sus hijos con sus tareas escolares; se propuso entonces, un espacio con estrategias metodológicas para los padres de familia, donde éstos fueran formados no solo en conocimientos académicos de áreas básicas, sino también en el desarrollo armónico de la familia y de los alumnos, que haga de este un proyecto de vida colectivo desde la familia.

Desarrollar este proyecto de padres, ha sido de gran valor personal y profesional, ya que hemos visto como se han fortalecido las familias en la autoestima y las relaciones interpersonales, cómo estos hogares se han 2 Nace como iniciativa de tres docentes de la Institución CETECISCA, para atender estudiantes de escasos recursos económicos de forma gratuita y que tenían problemas de aprendizaje en matemáticas.

convertido en un espacios de convivencia integral para todos sus miembros, y los ha proyectado como seres humanos útiles dentro de su espacio social.

A mi juicio, creo que es ahí donde precisamente debe estar el valor de estas prácticas. Que cada uno de nosotros como profesionales, podamos generar desarrollo en los procesos de pensamiento, tanto de nosotros mismos como de las personas involucradas en cada proyecto, al ponernos al servicio de las diferentes instituciones, lo que debe dar como resultado la transformación de las diferentes realidades sociales en un contexto determinado.