El Tres y Cuatro de Noviembre de 1820 fue una lucha de muchas manos y muchas voluntades y en ese esfuerzo el concurso de algunos religiosos fue clave

para alcanzar el éxito. No solo fue el Cura Loyola, el de Chuquipata, que llegó con los refuerzos para enfrentarse a las fuerzas españolas, el protagonista del movimiento. Otros que colaboraron con su acción política, con su activismo y su oratoria. Cayetano Ramírez de La Fita, José Peñafiel, entre otros, prestaron su contingente y hay una historia sobre ellos que se aborda en el interior de estas páginas.

Lo propio se hace con el legado de los próceres que se expresa hoy a través del civismo, de los sím-bolos de la ciudad, que son su identidad: la bande-ra, el escudo y el estandarte de Cuenca, cada uno con su historia.

Dice el himno a Cuenca que la ciudad es cuna de sabios y egregios campeones y así lo confirmaron los hermanos Enderica, Nathaly Caldas, entre otros deportistas que insugieron a la élite de la natación e incluso llegaron a competir en los Juegos Olímpicos de Londres.

Cuenca además es tierra de artistas y Angel Pesántez Izquierdo lo ratifica con la composición de un pasillo en honor a la ciudad, cuna también de maestros emprendedores y creativos como Julio Tamayo, que por más de 40 años mantuvo un periódico para los niños: “Mi Escuelita”. A ellos estan dedicadas las siguientes páginas.

La historía, los símbolos y personajes de la cuencanidad

Los Curas del 3 de

Noviembre

Contribuyeron a la lucha con su palabra, otro fue activo luchador y algunos redactaron la Constitución de Cuenca.

En la historia de las luchas de la independencia, religiosos y sacerdotes tuvieron en toda América participación activa; igual ocurrió en Cuenca, especialmente en los momentos deci-sivos de la revolución.

Al menos dos intentos previos al 3 de Noviembre hicieron los inde-pendentistas cuencanos a fin de hacerse con el control de la ciudad y nombrar un gobierno propio: el primero fue la convocatoria a un cabil-do abierto en el que los ciudadanos decidan la forma de gobierno y, el segundo, una acción política del gobernador Antonio Díaz, a quien se convenció apoye a la causa; ambos intentos fallaron por la intervención de las tropas españolas que impidieron la reunión del cabildo y apresaron al gobernador.

Se buscó la intervención de dos líderes públicos que lideraran el movi-miento: Joaquín Salazar y José María Vázquez de Noboa, más entre los dos había un gran distanciamiento, pero gracias a la intermediación del cura de San Sebastián, José Peñafiel, se reconciliaron y se ganó dos cau-dillos para la causa autonomista.

Pero los líderes cuencanos advertían carecer de todo tipo medios para intentar un acto subversivo. En este contexto, había tenido éxito el movimiento de la emancipación política de Guayaquil, el 9 de Octubre de 1820 y fue otro religioso, Cayetano Ramírez de La Fita, quien se pres-tó para ir a solicitar ayuda en Guayaquil.

Pasaron los días y siguiendo un plan de Vázquez de Noboa, la mañana del 3 de noviembre, un funcionario escoltado por tropa armada, como

se estilaba en la época, daba lectura a ordenanzas del cabildo municipal; entonces, un grupo de comprometidos liderados

por Tomás Odóñez asaltaron a la escolta con intención de quitarles las armas, lo que consiguieron, aunque Ordóñez

resultara herido en una pierna, por un bayonetazo. Desde la parroquia El Valle vino más ayuda: unos

pocos medios proporcionados a Vázquez de Noboa, por el párroco, Fernández de Córdova.

Con todo esto, los rebeldes de refugiaron en San Sebastián mientras desde el cuartel, situado a un cos-tado del actual Parque Calderón, su comandante saca-ba las tropas y hacía colocar cañones y con continuas

descargas impedía toda aproximación de los revoltosos a la plaza central, en intento de tomarse el cuartel. En esa situación tan crítica en que, el poder de la orato-

ria del sacerdote Juan María Ormaza consiguió numerosos adherentes quienes armados cuanto pudieron se trasladaron a

El Vecino para asegurarse el acceso norte a la ciudad y poder desde ahí recibir cualquier auxilio.

La tarde del 3 y la mañana del 4 de noviembre fueron jornadas de encuentros armados entre los dos bandos, encuentros de resultado inde-ciso aunque los rebeldes sentían su movimiento perdido, hasta que llegó con auxilios de gente armada, desde la reciente parroquia de Chuquipata, el cura Francisco Javier Loyola y con esa unión y fuerza, tuvo al fin, éxito, la revuelta y pudieron dominar a las tropas realistas.

El 5 de noviembre se juró la independencia; el 15 quedó promulgada la Constitución de la República de Cuenca, redactada por asamblea consti-tuyente conformada por diputados de los pueblos y parroquias. El canó-nigo de la catedral, Andrés Beltrán de los Ríos celebró el primer solemne Te Deum y pronunció el discurso congratulatorio.

Esta asamblea que redactó la mencionada Constitución de la República de Cuenca, que intentó dar a Cuenca un gobierno propio, incluso con plena división de poderes, estuvo integrada también por algunos religiosos como Juan Antonio Aguilar, Miguel Custodio Vintimilla, Alejandro Rodríguez y el ya mencionado Andrés Beltrán.

Un aporte más del cura Loyola fue contribuir a formar una tropa que desplegada en Verdeloma, cerca de Biblián, mal armada e inexperta, ter-minó masacrada por las fuerzas españolas del coronel Francisco González, el 20 de diciembre de 1820. El coronel Tomás Guido, agente del general José de San Martín, recibió los fondos como pago de 1.000 fusiles pero se quedó con el dinero.

Curiosidad histórica

Texto: Angel VeraFoto: El Mercurio

2F especial Cuenca, sábado 3 de noviembre de 2012 • www.elmercurio.com.ec

Historia y documentos

En la Catedral

Un Concejo, muy católico

Cuenca, 1915: para la sociedad de la época las normas religiosas eran una cosa muy seria. Como no se tenía certeza de la fecha pre-cisa de la independencia, (se discutía si era el 3 o el 5 de noviem-bre), al presidente del Concejo Municipal, (alcalde), Octavio Cordero Palacios y a los concejales les atacaba una duda terrible: en qué día debían celebrar la misa solemne y el Te Deum que ofre-cería el obispo.

Todo se tradujo en un “conflicto, sumamente grave para la Corporación” municipal a la que el Concejo halló solución salomó-nica. Cordero consultó al obispo si estaría dispuesto a celebrar una misa campal, el día 3, al pie del monumento a los héroes y el solemne Te Deum, el día 5. Con las fiestas encima y la urgencia de enviar a la imprenta el programa de festejos, mediante oficio N. 376, fechado el 30 de octubre, en la consulta se solicitaba Al prela-do una contestación urgente.

“Trabajar en el Archivo de Historia de la Curia Arquidiocesana con sus documentos, es conocer lo que ha pasa-do en la ciudad y los lugares que abar-caba la diócesis. Sus virtudes, sus defectos; la valentía de los indígenas, la v ida dura de los mest izos. En el momento de la independencia, desde el 10 de Agosto se abre como un nuevo camino y todos los protagonistas toma-ron una posición.

Así como hubo sacerdotes que ayuda-ron a la causa independentista, a pesar de los riesgos que esto implicaba, otros estaban abiertamente con España y hasta unos terceros que tenían una opi-nión pero no la manifestaban abierta-mente porque no les convenía.

Se nota una insurgencia general que se nota en todas partes. Cuenca era muy importante: e l Obispado de Cuenca abarcaba desde la Costa Norte del Perú, el Oriente y hasta la Sierra Central, no era sólo la ciudad, pequeña en la época, sino toda la zona de influencia y por eso era importante el punto de vista de la iglesia. La iglesia como tal estaba con la corona pero entre los sacerdotes había división, sobre todo si trabajaban con indígenas o mestizos.

Acá, en el archivo, los documentos revelan cosas interesantes, todos ellos, ya sea por su contendido o por la manera como estaba escrita una carta, en lo que se nota una influencia france-sa.

Se nota también que las mujeres intervinieron, de manera indirecta, a través de terceras personas, su interés de contribuir con uno u otro bando, ya sea cocinando o confeccionando ban-deras. Así, pues, las mujeres también fueron partícipes de la causa”.

(Martha Maldonado, directora del Archivo de la Curia, quien proporcionó los documentos)

La catedral, (la Vieja), era por los días de la indepen-dencia un templo concurrido, pero el 3 y el 4 de noviembre, debido a la revolución, no hubo servicios religiosos.

En comparación, el 1 de noviembre, día de la fiesta de Todos Santos, hubo un bautizo; el 2 de noviembre, fies-ta de los fieles difuntos, hubo dos bautizos, uno de ellos celebrado por fray Vicente Solano (foto del acta origi-nal); más el 5 de noviembre, día del juramento de inde-pendencia, se bautizaron cuatro niños: Juan José Uyaguari Atariguana; María Vicenta Alvarez, Juan Vega García y José Antonio Barrera Ríos.

Templo y Plaza de San Sebastián, escenario de la lucha novembrina, con la firma del cura José Peñafiel, activista de la independencia, según las actas de bautismos de 1820.

3FSALUDOCuenca, sábado 3 de noviembre de 2012 • www.elmercurio.com.ec

4F ESPECIAL Cuenca, sábado 3 de noviembre de 2012 • www.elmercurio.com.ec

El Virrey Hurtado de Mendoza dio el escudo a Cuenca; la bandera tiene

los colores del pabellón español.

Texto y fotos: Anita Calle R.

Símbolos de la ciudad se fijaron en 1945

P arte de la identidad de un territorio está en su gente, pero también en sus símbo-los cívicos. No todos cono-

cen la historia de su bandera, escudo y estandarte, y no solo que pocos conocen la importancia de estos, sino que, incluso, a manera de mofa, sur-gió aquella expresión popular: “un saludo a la bandera”, en alusión a un acto que no tiene importancia.

Libros educativos antiguos daban gran espacio al estudio del Lugar Natal y al civismo; años atrás era obli-gación de los alumnos conocer sobre l a s fech a s c í v i c a s como l a Independencia y no solo de su ciu-dad.

Los tiempos han cambiado: el his-toriador cuencano Miguel Díaz Cueva, poseedor de una de las mayo-res bibliotecas privadas, lamenta el desconocimiento de la riqueza de la heráldica, ciencia que describe el sig-nificado de los emblemas como escu-dos y banderas.

“Creo que hay deficiencia en la educación en cuanto a estos asuntos, se ocupan de todas las otras cosas y

Miguel Díaz Cueva muestra su biblioteca particular en dondeguarda su patrimonio intelectual.

Los símbolos de la ciudad están registrados en El Libro Primero de Cabildos y data de 1945.

hacer un programa educativo”.Es partidario de que en escuelas y

colegios se propenda a restaurar el culto a la bandera, al escudo, a todos estos símbolos de Cuenca porque forman parte de su ident idad, Cuenca es una de las mayores ciuda-

des del Ecuador e históricamente una de las más importantes.

El libro “Sinópsis Histórica del Ecuador, Nación Soberana”, de Galo Román, detalla que el pabellón o bandera de cada república ameri-cana tiene su aparición en la época

Son parte de la identidad de la ciudad

estos aspectos de la ciudad les pare-cen muy pequeños; deben preocu-parse más. En la escuela de los Hermanos Crist ianos (La Sal le), donde estudié, nos enseñaban un poco más, sí había interés”, expresa.

Le apena saber que hayan jóvenes cuencanos que, estando en otro país, cuando le piden que diga algo de su ciudad “no saben qué expresar”. Es que “ahora domina el deporte, solo vea qué gentío va a los partidos de fútbol, se pelean incluso, pero en lo principal no saben de su ciudad”, señala.

Gerardo Martínez Espinoza, autor de cuatro l ibros, uno de el los, “Historias de Cuenca”, y que ha dedicado gran parte de su vida a rea-lizar tareas cívicas y ha desempeña-do varios cargos públicos como sub-secretario de Educación, también advierte: “sería un pena que se pier-da la Cívica, no está reñida con la actualidad, al contrario, el civismo y las ideas cívicas si se usan adecuada-mente, dejando la política de lado, pueden perfectamente servir para

Bandera, escudo, estandarte bastón de mando del alcalde

“Cuenca ha sido una ciudad noble, consta en la historia colonial y durante la República”, mani-fiesta Gerardo Martínez al subrayar: “fue un ayuntamiento, un municipio de mucha importan-cia”.

Cuando se reinstalaron las alcaldías en el año 1945, se nombró alcalde a Luis Moreno Mora, his-toriador y hombre de letras y en ese entonces estaba como director de publicaciones del Municipio, Víctor Manuel Albornoz. Martínez, quien, en ese entonces tenía 20 años, ejercía el cargo de nuevo secretario municipal.

“Bajo la dirección del Alcalde, nosotros mira-mos que era necesaria una bandera para la ciu-dad, tomamos los colores de la bandera espa-ñola, rojo y gualda (amarillo oro) e hicimos la bandera…era la moda de hacer banderas de dos colores y tuvimos que sujetarnos a esa ten-dencia”, recuerda.

Pero, no solamente eso, era necesario además darle un estandarte a la ciudad. “Los libros de historia, (El Libro Primero de Cabildos), hablaban de un estandarte con el escudo de Cuenca, y que era de color carmesí, (con la leyenda “Muy Noble y Muy Leal, Ciudad de Cuenca”), nos costó mucho trabajo encontrar una seda de color carmesí, pero al final la conseguimos y ahí se hizo bordar el Escudo de Cuenca”, cuenta,

Luego, también se mandó confeccionar la insignia de mando de un alcalde, que es el bas-tón y se lo mandó a hacer con los orfebres loca-les: uno, con puño de oro.

De esta manera, describe Martínez, enlazába-mos el acta de la Fundación de Cuenca y el acta de la Independencia que no son contradic-torias, al contrario, son sucesivas, la una es la consecuencia de la otra.

Esos símbolos, que el 12 de abril de 1946 se pre-sentaron en un acto solemne, hoy deberían estar guardados y bien conservados: la bande-ra, en la versión original de seda y el Escudo de Armas con el estandarte, en el Municipio; y, el bastón y las llaves de la ciudad, en el Museo, precisa Martínez.

La bandera original debería estar en el Municipio y presidir la sesión del Concejo Cantonal, señala.

de las guerras de Independencia, consolidándose definitivamente al constituirse estas en repúblicas y estados autónomos y soberanos, adoptando su respectiva bandera como símbolo de “libertad y rebel-día”.

5FSALUDOCuenca, sábado 3 de noviembre de 2012 • www.elmercurio.com.ec

6F AVISO Cuenca, sábado 3 de noviembre de 2012 • www.elmercurio.com.ec

7FSALUDOCuenca, sábado 3 de noviembre de 2012 • www.elmercurio.com.ec

Un periódico educativo circuló por 46 años en las

aulas escolares, mentalizado por un

maestro de vocación: Julio Tamayo González.

Keyla y María Paz, de 12 y 7 años, estudiantes de la escuela Tres de Noviembre, no conocieron el periódico escolar, ahora, por primera vez, lo leerán y pintarán.

Un recuerdo de diversas épocas, con las portadas del “Periódico Educativo Mensual”

Ante la vieja máquina de escribir, con el ambiente del jardín de su casa, fue por décadas el sitio de trabajo del profesor Tamayo.

“¿Qué lleva ahí, señor Tamayo?”, le preguntaron hace más de 50 años un grupo de escolares de Chaucha y Molleturo al entonces supervisor

Julio César Tamayo Gallegos, que en sus visitas por las escuelas cargaba en su maletín ejemplares de “El Mercurio” y “El Tiempo”, para leerlos en sus recesos.

“Los periódicos” respondió el supervi-sor y los mostró. Sorprendidos, los chicos tomaron los periódicos y expresaron “¡Qué grandote ha sido! Préstenos para leer”. Y se los di, recuerda el maestro que, a sus 95 años, mantiene viva la imagen de los escolares que dejaron el libro de lectu-ra, para tomar el periódico y fascinarse con las imágenes y textos.

En casas viejas, deshabitadas, donde el viento no arrebate ni maltrate el papel, ahí, niñas y niños leían, recuerda.

Esa idea dejó inquieto a Julio Tamayo, (graduado de maestro en el Normal Manuel J. Cal le, en 1938), y por la inquietud de familiarizar a los niños con la información, fundó el periódico esco-lar “Mi Escuelita”, dedicado a ellos, con orientación pedagógica para los maes-tros.

Humberto Toral le aconsejó el nombre de “Mi Escuelita”, atractivo para niños, maestros, padres. “Él me dijo, cuidado vaya a publicar su foto, nada de eso, tiene que poner su nombre como autor del periódico”, explica.

Cuando llegó al magisterio, con 20 años de edad, Tamayo se trazó como misión formar alumnos con sentido moral, cívico y defender los principios de vida, “porque un alumno educado es un ciudadano libre”. Con esos principios formó un periódico mensual, del tamaño de un cua-derno, con ocho páginas y contenido educativo.

Un empastado azul recoge las primeras ediciones del periódico. El primer ejem-plar muestra el gran encabezado “Mi

Escuelita”, “Órgano Mensual del Centro Pedagógico de Paute. Editor: Jul io Tamayo G. Año I, Domingo 28 de octu-bre de 1962, N°1”. El periódico se lanzó con el apoyo del entonces ministro de Educación Gonzalo Abad y de Saúl Mora, director Provincial de Educación.

Sólo 350 ejemplares se imprimieron en la primera edición, cada periódico costó 5 centavos de sucre, “un medio”, como se le llamaba a la antigua moneda. La acep-tación por el periódico creció y 20 años después se imprimieron hasta 80.000 ejemplares, con temas instructivos y ame-nos:

Chistes escolares, que Tamayo obtenía preguntado y leyendo; adivinanzas, unir una secuencia de puntos que daban forma a una figura, ilustraciones que él mismo dibujaba; la “Lectura para todos”; los datos de las fechas cívicas; ejercicios de completación de conceptos; “Las siete diferencias”, entre otros.

Hoy, guirnaldas de ejemplares, libros de historia, geografía, gramática, ciencias naturales, empastados del periódico esco-lar, pliegos de papel periódico y la máqui-na de escribir Underwood, reposan en la oficina del profesor.

“En la casa nunca faltó el papel”, todos los hijos colaborábamos en hacer los paquetes para entregar”, dice Eulalia Tamayo, la hija del maestro, que heredó el compromiso de seguir la obra.

Las imágenes para ilustrar los temas se obtenían de periódicos o revistas. La dia-gramación era obra Julio Tamayo. Hacer cada ejemplar tomaba un mes. Aún hoy, entre los empastados, reposan pedazos amarillentos de papel escritos a máquina, contenidos que luego pasaban a las matri-ces de la imprenta.

De las 600 publ icaciones de “Mi Escuelita”, unas pocas fueron a color rojo, verde o azul, pero siempre tuvo el blanco y negro, con el propósito que los

niños coloreen, pongan elementos deco-rativos y al terminar el año lectivo cada uno haga una pequeña colección.

No fue fácil el recorrido del pequeño periódico, al inicio unos maestros creían que era negociado del supervisor pero todo se logró por el apoyo de maestros y maestras como Enrique Vimos, Cornelio Mosquera, Nel ly León, sor Isabel Vázquez, Gladis Astudil lo, Rómulo Astudillo, maestros que trabajaban por la zona de Paute, pero sobre todo el apoyo de los padres de familia.

Desde 5 centavos de sucre, hasta 5 cen-tavos de dólar costó “Mi Escuelita” a lo largo de su historia, hasta que dejó de cir-cular para los planteles en el año 2007, ante la disposición gubernamental de no pedir aportes a estudiantes ni padres de familia, desde entonces mantiene una cir-culación mensual gratuita con Diario “La Tarde”.

El periódico se imprimió en “El Tiempo” y en las imprentas “Las Américas” y “Molina”. Mano de obra familiar: su esposa, Esthela Sigüenza y sus cuatro hijos hacían paquetes de 40, 45, 50, o de mas de cien ejemplares; un taxista los entregaba, el hombre conocía la ruta de las escuelas.

Julio Tamayo se jubiló del magisterio en 1981; mientras era supervisor, tenía un poco de recelo, pero fuera de las funcio-nes se dedicó por completo a producir “Mi Escuelita” que llegó a circular en Cañar, El Oro, parte de Guayas, Morona Santiago, Manabí, Carchi e Imbabura.

“Todo ha sido por mi amor para la edu-cación. Siempre en este cuarto que da al jardín, para diseñar “Mi Escuelita”, lleno de papeles. Ya voy a morir; ahora hago paquetes para que mis hijos los regalen a los niños, porque este periódico ha mere-cido la confianza, el apoyo, la felicidad y sonrisa de la gente”, exclama su mentali-zador.

Los años dejados en “Mi Escuelita”

8F especial Cuenca, sábado 3 de noviembre de 2012 • www.elmercurio.com.ec

Texto: Brígida San Martín Fotos: Franco Salinas y Luis Cobos

n El Concejo Cantonal reconoció a Julio Tamayo, en 1985, con una mención de honor y en 1989, le otorgó la presea Hermano Miguel.

n E l p e r i ó d i c o M i Escuel ita fue un aporte para la educación de niños y n iñas. Tenía un pensamiento crít ico con los segmentos “Lectura para todos”, las fechas cívicas, los dibujos y orto-grafía ayudaban a estu-diantes, dice la maestra Carmen Maruri.

n Diego Escandón es médico, conserva en su biblioteca algunas colec-ciones de “Mi Escuelita” y en ellas muestra cómo le gustaba colorear las imáge-nes que allí se publicaban.

n Eduardo Bermeo se e d u c ó e n l a e s c u e l a Nicolás Corral, de El Pan y hasta a l lá l legaba “Mi Escuelita”. “Cuando veía a mis hijos con el periódico volvía a vivir mi infancia”, dice.

n “Puedo pedir un favor, si puedo. Si alguien quiere ejemplares, les mando a obsequiar, pero que no los boten, sino que lo lean y los pongan en su bibliote-ca”, señala Tamayo.

Detalles

9FSALUDOCuenca, sábado 3 de noviembre de 2012 • www.elmercurio.com.ec

El compositor y poeta Angel Pesántez Izquierdo espera que esta melodía se convierta en otro ícono de la cuencanidad.

“ De la colina, baja cantando/ alegre cruza, el retamal/ una cholita, her-mosa y/ bella,/ bella y hermosa, como la flor”; reza la primera estrofa

del poema hecho canción, Niña Cholita, Lavanderita, compuesta por Ángel Pesántez, un cuencano que ama su tierra.

Don Ángel, quien mañana cumplirá 81 años de edad, sostiene que primero escribió el poema y de este tomó los extractos princi-pales para hacer la canción, la cual espera se convierta en un nuevo ícono de la cuencani-dad.

Compuesta con ritmo de pasillo, hace cerca de dos años, Niña Cholita, Lavanderita es una inédita canción que resume la admiración del poeta y músico por su tierra, “porque yo soy cuencano, todito yo”, dice con la alegría pro-pia de los artistas que gustan expresar sus sen-timientos a través de sus creaciones.

“Desde el año 1970 estuve fuera de mi ciu-dad, porque viajé a los Estados Unidos y

regresé hace cerca de cuatro años”, recuerda, tiempo durante el cual muchos de sus ami-gos y seres queridos dejaron esta existencia, lo cual, conmovió al artista y de esta sensibi-lidad surgieron nuevos poemas que hablan de la añoranza y el amor a la tierra que le vio nacer.

Entre sus composiciones se pueden men-cionar: el bolero “Cuando estemos viejos”; el vals “Cuando llora un hombre”; otro bolero, “Mi novia”; y el vals “Aniversario”, que se encuentran recopilados en un escrito de Carlos Mosquera, quien rinde de esta manera un homenaje al músico y poeta cuencano quien le ha encomendado interpretar sus creaciones. El lo asume como un gran desa-fío.

“Todos mis poemas están cargados de vivencias, añoranzas y recuerdos de mis fami-liares y amigos”, explica, sentires que se hicie-ron más fuertes cuando estuvo lejos de su tie-rra, como un emigrante más que viajó en

busca del sueño americano, que le permitiera mantener a su familia, “porque tenía seis hijos y la música no da para comer”, asegura.

Sus primeros acordes los aprendió en la calle, con sus amigos, pues la situación econó-mica no le permitió acceder al Conservatorio de Música, sin embargo, su afición a las melo-días le impulsó a autoformarse hasta ser parte de importantes agrupaciones locales. Tal el caso del quinteto del compositor y músico de origen lojano, Pepe Luna, quien fuera forma-dor de varias generaciones de cuencanos, en escuelas como la Hernán Cordero Crespo y en su estudio particular.

Este quinteto estaba formado por los músi-cos: Dimas Quezada, Mario Robles, Arturo Sack, Pepe Luna y Ángel Pesántez, cuyos talentos y voces causaban admiración, espe-cialmente entre las féminas, a quienes iban dirigidas muchas de sus serenatas nocturnas, que eran contratadas por enamorados cora-zones.

Por Jorge Alvarez E.

Al ritmo del pasillo surgeuna canciónpara Cuenca

Cuencanosaplaudieronen 1915 unpoema de M. Hidalgo

Angel Pesántez y Carlos Mosquera ensayan a dúo una de las canciones escritas por el músico cuencano. PSR

La partitura del pasillo Niña Cholita, Lavanderita es parte de las más apreciadas creaciones de Ángel Pesántez. PSR

10F ESPECIAL Cuenca, sábado 3 de noviembre de 2012 • www.elmercurio.com.ec

A Matilde Hidalgo de Prócel se la recuerda como la primera mujer ecuatoriana que obtuvo el título de doctora en medici-na y como una gran activista por los derechos de sus congé-neres, logrando que puedan ejercer su derecho al voto en las elecciones.

Pero, además de doctora y activista femenina, la ilustre lojana también manifestó un talento literario, que le llevó a escribir una poesía intitulada “A Cuenca”, cuyas primeras estro-fas dicen: “En trono de zafiro y coralinas,/ ceñida de laureles de alta frente/ y perlas opalinas/ contemplo a una bellísima sul-tana/ de rostro afable y célica sonrisa/ velada por querubes,/ rodeada por los silfos y la brisa,/ que, habitando en mag-n í f ico pa l ac io/ que e l Tomebamba inquieto y romo-roso/ en su ondas azules la con-vida,/ es cual perla o estrella desprendida/ del astro- rey que brilla en el espacio.

Los versos, según el médico Saúl Chalco, fueron recogidos del libro del también médico César Hermida Piedra, en el que reseña que Hidalgo hizo gran parte de sus estudios de medicina en Cuenca, en 1915 y que en ese año, en el aniversa-rio de la Independencia de Cuenca, intervino con la poesía de su autoría. Una publicación de la Revista Universidad del Azuay de 1916, que cita Hermida Piedra, dice: “La Señorita Hidalgo fue continua-mente interrumpida en la decla-mación de su hermosa poesía, y al descender de la tribuna, los aplausos se convirtieron en estruendosos “Vivas”, a Loja.

11FESPECIALCuenca, sábado 3 de noviembre de 2012 • www.elmercurio.com.ec

Aspiraciones de los nadadores

El gran objetivo de los seis nadadores es

clasificar a los XXXI Juegos Olímpicos de Río

de Janeiro.

Co n l a l l e g a d a d e Sa ma nt ha A réva lo a Cuenca, ya no ex isten dudas de que la élite de la

natación del Ecuador se prepara en la altura, teniendo como base de entrenamiento a la piscina ol ímpica del Batán de cara a l nuevo ciclo olímpico con destino a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.

Y es que junto a Samantha, oriunda de Cuenca son parte del proceso Diana Chang, quiteña de nacimiento, pero federada por Azuay y Esteban y Sant iago Enderica, bajo las órdenes del estratega Juan Fernando Enderica y Miguel Armijos e Iván Enderica, dirigidos por David Martínez.

Todos, incluso el más joven Miguel Armijos, dueño de un potencial enorme se someten a una exigente carga horaria que varía entre seis a siete horas dia-rias que inclusive les impide a algunos retomar su formación aca-démica.

Para el profesor Juan Fernando, el mantenerse al más alto nivel e x i g e m u c h o s a c r i f i c i o . “Definitivamente no es para todos, porque hay que estar imbuidos un 100%, y dejar a un lado a los seres queridos”, apuntó.

Al tiempo dijo es un reto y una responsabilidad enorme adiestrar a un grupo tan talentoso, lo que le obliga a preparar planes por sepa-rado.

Enderica, subrayó además que los objet ivos de cierre de año son

Textos y fotos: Danilo Ochoa

Élite de la natación ecuatoriana reside y se entrena en Cuenca

específ icos, ya que Samantha y Esteban están enfocados para el Campeonato Mundial de Turquía, en piscina de 25 metros del 12 al 16 de diciembre.

Diana, que a pesar de bajar en tres segundos su marca y estar a diez centésimas del récord nacional en los 200 metros espalda no fue consi-derada para el mundial turco acudi-rá a un torneo en Argent ina o Estados Unidos.

De su lado, Iván, a quien ni el cansancio acumulado de más de 30 horas de viaje le impidió este jueves que hiciera historia en representa-

ción del Ecuador dentro de la pri-mera ed ic ión de los Juegos Bolivarianos de Playa Lima 2012.

Y que se convirtió en el primer medallista del multievento, al impo-nerse en los 5 kilómetros de las aguas abiertas en la laguna Bujama con un registro de 56 minutos 42 segundos.

Su primo Santiago se ubicó cuarto con un tiempo de 57 minutos. En damas, la coterránea Nataly Caldas obtuvo la medalla de plata con un registro de una hora, cuatro minu-tos y 20 segundos.

Los cuatro representantes tienen

planificado asistir a un campo de entrenamiento en Sierra Nevada, España desde el 28 de noviembre hasta el 10 de diciembre.

“A mi regreso me someteré a una operación de hipertrofia de cornetes en la nariz que la he venido aplazan-do, y que de a poco me coarta la res-piración”, apuntó el campeón.

Iván, quien estuvo en los pasados Juegos Olímpicos de Londres, junto a Samantha y Esteban señaló que entrenar a la par de sus compañeros es muy posit ivo, porque todos meten presión que les obliga a mejo-rar en sus áreas.

n Asimismo, hizo una peti-ción para que los dirigentes del Ministerio del Deporte, FENA y COE, ponga en pri-mera persona al deportista. “Nosotros buscamos resulta-dos para el país, el resto no nos debería importar, pero esta situación nos afecta”, agregó.

n De su lado, Samantha Arévalo, quien hace un mes ganó nada menos que once preseas de oro en los III Juegos Nacionales de Ibarra subrayó que es lamentable que tengan que preocuparse por asuntos extra deportivos.

n “Al margen de esta situa-ción quiero agradecer a la gente de acá por el cariño. Siento que tomé una excelente decisión, no solo en lo depor-tivo, sino en todos los aspec-tos, porque senci l lamente estoy con los mejores”, adjun-tó.

n La esbelta nadadora, junto a Nataly Caldas, Diana Chang y los primos Enderica tienen planificado asistir a un campamento de entrenamien-to en Sierra Nevada, Estados Unidos del 28 de noviembre al 10 de diciembre. Dos días después, junto a Esteban par-tirán para el mundial turco, la cita d cierre de temporada.

Iván Enderica logró oro en 5 Km de aguas abiertas en los Bolivarianos.

Esteban (Derecha), y Santiago Enderica, Samantha Arévalo y Diana Chang reciben las instrucciones del profesor Juan Fernando Enderica.

12F saludo Cuenca, sábado 3 de noviembre de 2012 • www.elmercurio.com.ec