la educaciÓn y el principio de realidad
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Bruno Bettelheim, en su libro "Educación y vida moderna" realiza un análisis sobre el impacto que tiene el desarrollo de la moralidad del niño en la educación.TRANSCRIPT
PSICOPATOLOGÍA ESCOLAR
CATEDRÁTICA
DRA. MIRNA ISABEL SALDIVAR PAZ
ESCUELA DE CIENCIAS DE LA EDUCACIÓNMAESTRÍA EN PSICOPEDAGOGÍA
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
MORALIDADMEDIADOS DEL SIGLO PASADOPROPÓSITO:“SALVACIÓN ETERNA”
ACTUALIDAD“CARRERA HACIA EL ÉXITO”
VALORES
FAMILIA
IGLESIA
ESCUELA
COMUNIDAD
IGLESIA
FAMILIA
OTROS
COMUNIDAD
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
SISTEMA EDUCATIVOSISTEMA EDUCATIVO
• Descansa sobre una moralidad en la cual para sobrevivir el hombre, requiere de un conjunto de actitudes conocimientos y destrezas.
CUESTIÓN
• ¿De qué manera conseguirá el educador de hoy llegar a un joven que está convencido de que la sociedad tiene la obligación de mantenerle, ya sea por compensación por injusticia o por el carácter expansivo de nuestra opulenta sociedad moderna?
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
CONCEPTOS MODERNOS DE LA MORALIDAD
NIETZCHE
• “El miedo es la madre de la moralidad”
• “La moralidad es la racionalización del egoísmo”
DARWIN
• “La moralidad es relativa y surge de las condiciones concretas en las que uno se ha criado”.
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
MORALIDAD SEVERA Y ABSOLUTA
Era dada por Dios, Inmutable, Absoluta
Era la misma para todos (pequeños y adultos)
El individuo aprendía bien en la escuela y vivía con éxito siempre y cuando su educación empezara con una moralidad muy firme y rigurosa, basada en el
miedo.
FREUD, NIETZSCHE Y DARWINCRITICARON A LA MORALIDAD ABSOLUTA EN SU MADUREZ
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
ESCUELAS
Los métodos, procedimientos, materiales pedagógicos, tienen por centro al niño de clase media.
La moralidad que se inculca es calificada de puritana o clase media
MORALIDAD DE CLASE MEDIA: Convicción de aplazar un placer inmediato con el fin de obtener satisfacciones más duraderas en el futuro.
• “Anteponer el principio de realidad al principio del placer”.
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
MADUREZ DE JUICIO
“Hacer lo que conviene”
Antes de alcanzar la edad de la razón, la conciencia (o el superego) funciona sobre una base irracional, le dice al niño lo que debe y no debe hacer basado en el temor.
Más tarde el ego ya maduro, aplicará la razón a éstas órdenes y poco a poco someterá estas leyes a juicios críticos.
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
APRENDIZAJERazones: deseo de
satisfacer primero y modificar después el
superegoirracionalmente
exigente y transformarlo en algo
más razonable.
Si no hay un exceso de angustia del superegoque deba reducirse, faltará un motivo
importante para el aprendizaje
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
MORALIDAD
Moralidad refinada tiene que apoyarse en una creencia
rígida entre el bien y el mal, basada en el miedo a la
perdición, (condenado o perder el afecto) que no deje
espacio a la relatividad.
CLASE MEDIA
Si el niño tiene garantizado el afecto, haga lo que haga, no habrá miedo y habrá poca
moralidad.
La diligencia, la concentración y la
perseverancia nacen de una angustia irracional del
superego.
LA CONCIENCIA TIENE SU ORIGEN EN EL MIEDO
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
EDUCACIÓNSe basa en una MORALIDAD DE CLASE MEDIA, que haya su equivalente psicoanalítico en un principio de realidad, que insiste en que es preciso renunciar a gran parte del placer ahora para conseguir ganancias en el futuro.
Esta moralidad no se aprende sobre una base racional.
Llega a través de dos grupos de experiencias:
• La angustia inculcada por los padres
• El ejemplo de su comportamiento.
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
EJEMPLO DE COMPORTAMIENTOSi los padres no viven de acuerdo con una
moralidad rigurosa, y con el principio de realidad, tampoco los hijos serán capaces de hacerlo.
Ninguna moralidad fuerte, apoyará el proceso educativo y guiará sus pasos.
Los que crecen sin el ejemplo de los padres, un <superego > y un <ego>, viven obedeciendo a un
ego primitivo.
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
PRINCIPIO DEL PLACER Vs PRINCIPIO DE REALIDAD
• Los alumnos aprenden mucho y rápido, pero desisten cuando empieza a ser complejo.
Buscan experiencias que le son de
satisfacción inmediata y con objetivos a corto
plazo.
• Lo que se obtiene es la esperanza de conseguir una satisfacción mayor, más valiosa y más duradera mucho después.
Aprendizaje duradero se da cuando se basa
en el principio de realidad
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
¿CÓMO APRENDEMOS ENTONCES?
EGO: funciona bien, integra las exigencias del id y del
superego y las hace concordar con la realidad
Cuando la meta del aprendizaje encaja con los
valores de nuestro ego y superego, resulta más
atractiva porque apreciamos y admiramos al maestro.
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
¿CUÁNDO NO APRENDEMOS? Cuando el ego se ve
abrumado con preocupaciones
Estómago vacío
Dolor de muela
Agotamiento físico
Actos de violencia
El ego es demasiado débil para defender los objetivos a largo plazo y concentrarse en una actividad.
SUPEREGO=FUERTEELLO= SATISFECHOEGO= EQUILIBRADO
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
EL RESPETO A SI MISMO
Los niños tienen que haber aprendido a tener miedo antes de ingresar a la escuela ( miedo a perder el amor y el respeto de sus padres, maestros o a sí mismos)
El respeto de sí mismo es heredero de un respeto temprano y profundo del padre. Que proteja del dolor, necesidad y que admiramos.
Los que debido a experiencias infantiles no pueden respetar a un padre interiorizado, tiene la impresión de no valer nada, y la pasa mal cuando trata de adquirir conocimientos superiores.
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
¿QUÉ PODEMOS HACER POR LOS NIÑOS QUE NO HAN CAMBIADO EL PRINCIPIO DEL PLACER POR EL PRINCIPIO DE REALIDAD?
•Utilizar las experiencias educativas del niño con el fin de reorganizar su mundo interior y su personalidad, para que ello le permita adquirir las actitudes necesarias para convertirse en una persona bien educada a través de sus experiencias escolares.
•Si deseamos educar al niño necesitamos saber de dónde viene, quién es y adónde desea ir, primero tenemos que entender su existencia moral.
ÉXITO DE LA ESCUELA
EGO/PROCEDENCIA SOCIAL
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
LA ENSEÑANZA La enseñanza realista incluyendo la enseñanza de la
moralidad, exige que constatemos el grado en que el niño al ingresar a la escuela, ha hecho suyo el principio de realidad.
Debemos encaminar nuestros esfuerzos para ayudarle a aceptar e interiorizar que el principio de realidad es más válido que el principio del placer.
Capacidad de posponer
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
PIAGET
En la infancia hay dos moralidades
• Coacción: Se forma en el contexto de las relaciones de dirección única entre el niño como subordinado y el adulto como persona dominante.(padres muy convincentes, dominantes, excelentes proveedores).
• Cooperación: Es más moderada y refinada por el toma y daca espontáneo de la interacción entre iguales. (aprende las reglas del juego)
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
MORALIDAD DE COOPERACIÓN CON EL GRUPO DE IGUALES
Presenta una falta de conflictos entre el ego y superego y son idénticos en muchos aspectos allí donde el consenso social es elevado.
El ego y superego se encuentran en armonía y el ego recibe el refuerzo complementario de su éxito en la sociedad.
El individuo puede vivir de acuerdo con el principio de realidad.
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
RESUMEN
Cuanto más desarrolle el niño su personalidad basándose en
la moralidad del grupo de iguales, menos éxito tendrán las apelaciones del superego
del maestro.
La capacidad de aprendizaje del niño dependerá de que su
grupo de iguales apoye las demandas de la educación así
como la medida en que lo haga.
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
TAREA DE LAS ESCUELAS
Inculcar la MORALIDAD
Debemos tomar en cuenta que la personalidad del niño que padece privación cultural no es idéntica a la del niño de clase media.
Si queremos activar su interés por la educación, tenemos que apelar a él basándonos en las exigencias de la moralidad de su propio grupo y no en
las nuestras.
NO, A UNA MORALIDAD PERSONALIZADA
SI, A UNA MORALIDAD BASADA EN LA SUBCULTURA PARTICULAR DEL NIÑO Y EN LAS NORMAS DE LA MISMA
EDITH MELGAR MONDRAGÓN
MAESTRO
Cuando el maestro empiece a pensar en las presiones bajo las que se encuentran los niños y en lo que él puede hacer al respecto, en vez de preocuparse de la presión que él mismo siente, encontrará por sí mismo el modo de aliviar la que los niños ejercen sobre él y todo el mundo estará mejor.
EDITH MELGAR MONDRAGÓN