juan josé iglesias rodríguez rafael m. pérez garcía manuel...

18
Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel F. Fernández Chaves (eds.) COMERCIO Y CULTURA EN LA EDAD MODERNA Contiene los textos de las comunicaciones de la XIII Reunión Científica de la Fundación Española de Historia Moderna EDITORIAL UNIVERSIDAD DE SEVILLA

Upload: others

Post on 19-Jul-2020

0 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

Juan José Iglesias RodríguezRafael M. Pérez García

Manuel F. Fernández Chaves(eds.)

COMERCIO Y CULTURAEN LA EDAD MODERNA

Contiene los textos de las comunicacionesde la XIII Reunión Científica de la FundaciónEspañola de Historia Moderna

EDITORIAL UNIVERSIDAD DE SEVILLA

Page 2: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

COMERCIO YCULTURA EN LAEDAD MODERNA

Page 3: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

Juan José Iglesias RodríguezRafael M. Pérez GarcÍa

Manuel F. Fernández Chaves

(eds.)

COMERCIO YCULTURA EN LAEDAD MODERNA

COMUNICACIONES DE LA XIII REUNIÓNCIENTÍFICA DE LA FUNDACIÓN

ESPANOLA DE HISTORIA MODERNA

~~SIO"'C

Íl~)eusEditorial Universidad de Sevilla

Sevilla 2015

Page 4: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

Serie: Historia y GeografiaNÚlll.: 291

COMrrÉ EDITORIAL:

Antonio Caballos Rufino(Director de la Editorial Universidad de Sevilla)Eduardo FerreJ" Albelda(Subdirector)

Mannel Espejo y Lerdo de TejadaJnan José Iglesias RodríguezJnan Jim.énez-Castellanos BallesterosIsabel López CalderónJnan Montero DelgadoLourdes Mlmduate JacaJaime Navarro CasasM'- del Pópulo Pablo-Romero Gil-DelgadoAdoracióu Rueda RuedaRosario Villegas Sánchez

Reservados todos los derechos. Ni la totalidad ni parte de este libro pue­de reprodllCirse o transmitirse por ningún procedimiento electrónico omecánico, incluyendo fotocopia, grabación magnética o cualquier alma­cenamiento de infonnación y sistema de recuperación, sin penniso escritode la Editorial Universidad de Sevilla.

Obra editada en colaboración con la Fundación Espal.iola de Historia Modema

Motivo de cubierta: Vista de Sevilla el! el siglo xn, por A. Sánchez Coello

o Editorial Universidad de Sevilla 2015CI POIVenir. 27 - 41013 Sevilla.Tlfs.: 954 487 447; 954 487 451; Fax: 954 487 443Correo electrónico: [email protected]: <hllp://www.editoria1.us.es>

o POR LOS TEXTOS, SUS AUTORES 2015

O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL M. PÉREZGARCÍA Y MANUEL F. FERNÁNDEZ CHAVES (EDS.) 2015

Las comunicaciones presentadas en la XIII Reunióu Científica de la Fi.Ul­dación Espal.iola de Historia Moderna e incluidas en fonnato digital enla presente obra han sido sometidas a la evaluación de dos expertos,por el sistema de doble ciego, según el protocolo establecido por elcomité organizador del congreso.

Impreso en papel ecológicoImpreso en España-Printed in Spain

ISBN: 978-84-472-1746-5Depósito Legal: SE 929-2015Impresión: Kadmos

Page 5: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

COMITÉ C1EI'o'TIFICO DEL CONGRESO

Marí~ de los Ángeles Pérez SamperEliseo SeIT~no Martín

Mónica Bolufer PerugaVirgina León Sanz

Francisco Fernández IzquierdoFélix Labrador ArroyoIsidro Dubert Gucía

Francisco García GonzálezMiguel Luis López-Guadalupe Muñoz

M~ría José Pérez Álvarez

COMIIT ORGANIZADOR DEL CONGRESO

Juan José Iglesias Rodríguez(director de la XIII Reunión Científica)

Francisco Núñez RoldánCarlos Alberto González Sánchez

Juan Ignacio Carmona G-arcíaMercedes Gamero RojasJo!:lé Antonio Ollero PinaJosé Jaime García Bernal

Fernando Javier Campese G~llego

Raf~el M. Pérez García(secretaría científica)

Antonio González PolvilloManuel F. F ernández Chaves

(secretaría ejecutiva)Clara Bejarano Pellicer

Page 6: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

LA FUNCIÓ DE LAS JUSTAS POÉTICAS ELAS FIESTAS RELIGIOSAS DEL BARROC01

J. JAIME GARCÍA BERNAL

Universidad de Sevilla

Resumen: Las justas poéticas son tratadas en este estudio como ritual deintegración comunitaria de las élites letradas españolas de las primeras décadassiglo XVII. El concurso literario se inscribe en un ciclo festivo religioso quecomenzaba con el pregón y exposición del cartel anunciador de las justas yconcluia con la solemne función del certamen poético donde se distribuian lospremios entre los poetas-justadores. Esta comunicación utiliza diferentes rela­ciones de fiestas, publicadas en ocasión de la beatificación de Ignacio de Loyolay Teresa de Jesús, para analizar el papel que cumplió este concurso público en laarticulación de una fiesta urbana más amplia yen su plasmación escrita.

Palabras clave: Justas poéticas. Cultura barroca. Fiestas religiosas. Beatifi­caciones. Ignacio de Loyola. Teresa de Jesús. Sevilla. Córdoba. Salamanca.

Abstract: Poetic Justas became a factor of civic integration in Hispanicbaroque culture in the first two decades of the XVII century. The religiousfestival began with the promenade of the authorities holding the placard thatannounced the feats and the Justas, and finished with the poetic meeting wherethe prizes were distributed. This paper will analyze the role of the Justas insidethe wider culture of invention that framed both popular and academic culturein baroque Spanish festivals. The focus will be on the poetic session as a culturalcommentary on the entire feast and the ideals ofthe community that supportedit. The paper will stress the importance of the rich relaciones de fiestas for ourunderstanding of the writing-iconic ambivalence of this culture.

Key words: Poetic Ju.stas. Baroque culture. Religious Festivals. Beatifica­tion. Ignacio de Loyola. Teresa de Jesús. Sevilla. Córdoba. Salamanca.

F rancisco de Luque Fajardo, presbítero sevillano, manifestaba en su Rela­ción de las fiestas que la cofradía San Pedro celebró a la Purísima Con­

cepción (1616), la intención de sus hermanos cofrades de "cerrar el esquadrón

1. Una primera versión de esta comunicación fue presentada como pand paper ydiscutida en el marco del Annual Meeting de la Renaissance Society of America, celebradoen San Diego en 2013, dentro de la sesión "Performative Literary Culture II: Performance,Liturgy and Lay Religion".

Page 7: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

247O 1. JAIME GARCÍA BERNAL - Unwsrsidfld d. S.,;illn

de tantas solemnidades, y Octavarios... [a el mayor servicio de esta sagradaSacerdotal ReynaJ.. siendo solos Sacerdotes los que por si la celebren".2 Atal fin dispusieron un último octavario de sermones donde predicaron loscofrades de la congregación mariana y una justa poética presidida por tresmiembros de la cofradia y tres personalidades de los principales tribunales dela ciudad, en la que convocaban a los ingenios sevillanos a rendir su tributopoético a la pureza proclamada de la Virgen María. El certamen coronaba loscultos de la exclusiva hermandad de sacerdotes de la Parroquia de San Pedro,corporación que se había distinguido en la promoción de la nueva opiniónpía, y considerada en conjunto, las fiestas de San Pedro culminaban, a su vez,un ciclo de celebraciones más amplio que había tenido en puja durante mesesa conventos, parroquias y cofradías sevillanas por la defensa del misterio dela Inmaculada3.

El licenciado Fajardo era muy consciente de la función epilogal quecumplia el certamen poético que organizó la Cofradía de San Pedro en elconjunto de manifestaciones de adhesión a la causa inmaculista que se habíansucedido en la ciudad. En la prefación de su discurso hace memoria de losnovenarios y fiestas que habían organizado otras corporaciones, sin olvidar lasmanifestaciones de pía devoción de vecinos y feligreses "que salían ya con laymagen de la virgen, luzes y ministriles, ya con estandartes y guiones en quese escrivían Rótulos, y divinos motes en alabanza deste esclarecido misterio":'La unanimidad de la opinión se demostraba especialmente en estas expresio­nes de supuesta espontaneidad que formaban parte de una retórica calculadaque trataba de presentar la uniformidad del sentimiento popular como prue­ba de certeza de la causa inmaculista frente a la objeción de los dominicos.5

Al seIYicio de esta retórica acumulativa, Fajardo recuerda los "concursos de

2. Francisco Luque Fajardo, RELACION DE LAS FIESTAS QVE LACOFRADIA DE Sacerdotes de San Pedro ad Vmoula celebro en su Paroquial Yglesia deSeuilla a la Purissima Concepcion de la Virgen Maria nuestra Senora. Con el estaPuJo dedifender su inmunidad, y limpieza, Sevilla, Alonso Rodríguez Gamara, 1616, fol. 9ro.

3. María Jesús Sanz Serrano, Fiestas sevillanas de la Inmaoulada Concepoión en el sigloXVII: el sentido de la celebración y su repercusión exterior, Sevilla, Universidad de Sevilla,2008. Aurora Domínguez Guzmán, lJs libro~ lecturas y fiestas en la Sevilla aúrea, Sevilla,Universidad de Sevilla, 2012. J. Jaime García Bernal, "Imagen y palabra: el misterio de laInmaculada y las solemnidades festivas en Andalucía (siglo XVlI)", en Manuel Peña y RaúlMalina (eds.), Poder y Cultura festiva en la Andalucía Moderna, Córdoba, Universidadde Córdoba, 2006, pp. 79-114. Jorge Jiménez Barrientos y Manuel J. Gómez Lara, "Laocupación del espacio urbano cmo instrumento propagandístico: ornatos efmeros en lasfiestas inmaculadistas barrocas de Sevilla", St.J'listica, 5 (1997-98), pp. 119-138.

4. Francisco Luque Fajardo,RELACION DE LAS FIESTAS. .. , fol. 2ro.5. José Antonio Ollero Pina, "Sine Labe Concepta: conflictos eclesiásticos e ideológicos

en la Sevilla de principios del siglo XVII", en Carlos A González y Enriqueta Vila Vilar(comp.), Grq/ías del imaginario. Representaoiones oulturales en E.spaiía y América (siglosXVI-XVII), México, FCE, 2003, p. 315

Page 8: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

LA FUNC1ÓN DE LAS JUSTAS POÉTICAS EN LAS FIESTAS RELIGIOSAS DEL BARROCO 2471

gente" que salían de las iglesias de la ciudad cantando alabanzas a la Vir­gen, las "cosas notables" que sucedieron en las cofradías de disciplina queal endurecer sus penitencias despertaban "la universal aclamación en pala­bras, en cánticos y en escritos", las luminarias y máscaras que organizaronlas parroquias de los barrios más lejanos como San Gil, San Vicente, Om­nium Sactorum... "y otras muchas que han celebrado innumerables fiestas".y hasta la propia impresión de pliegos sueltos se convierte en instrumentode confirmación del sentir inquebrantable en torno a la Madre preservada delpecado cuando el autor señala la generosidad del convento franciscano decuyo solemne octavario circulaban nada menos que trece pliegos. Las fiestaspropias de la cofradía de los sacerdotes venía a abrochar, de este modo, elabanico desplegado por las manifestaciones de devoción anteriores mediantela exhibición del arte oratorio de sus congregantes, empeño al que se unió, enparalelo, la vocación de los poetas.

La insistencia del escritor en la jerarquía, orden y concierto que presidióel desarrollo del evento -que contrasta con la desordenada explosión de fervorde las fiestas precedentes- forma parte asimismo de su visión de la ciudadconvertida a la opinión mariana y, en consecuencia, rearmada con sólidosprincipios morales cuya expresión visible es la armonía de las procesiones yde los cultos que promueve la ilustre cofradía. El paso del cortejo formadopor los graves sacerdotes se describe como una catequesis viva a la que noson insensibles los conventos y colegios que salen a recibirlo. Y durante elrecorrido se prohibió expresamente "cualquier aclamación de las comunes",permitiéndose exclusivamente himnos, motetes y villancicos marianos. En elmismo sentido hemos de comprender el pasaje que dedica el autor a las vaci­laciones que tuvo el Arzobispo de Sevilla antes de dar su aprobación al actolitúrgico (tal vez debido a los alborotos y desórdenes que habían provocadolas efusiones anteriores). Reserva inicial que una vez salvada se interpreta enel relato como testimonio adicional del respeto que acompañó las funcionesreligiosas y de la solemnidad del acto de juramento de la pureza de María (elimpreso lo incorpora literalmente) que servirá de ejemplo para los cleros deJerez, Écija y Utrera, ciudades de la diócesis hispalense que, según Fajardo,aguardaban la licencia del ordinario para formar sus propias congregaciones.

La fiesta de los sacerdotes de San Pedro reviste así una función medularen un tiempo litúrgico que transforma para siempre el tiempo secular. Deun lado -como hemos visto- es la desembocadura esperada de los festejosprecedentes pero, ahora también, fija mediante el gesto del juramento unaobligación que compromete al clero de toda la provincia eclesiástica de Sevi­lla. Los sacerdotes son así "el fin y colmo de tan santa deuoción que de nueuodan princi pio a la mayor firmeza y perpetuydad della, en otras santas Con­gregaciones". Pero también aquellos próceres que "combidan y obligan conla presente Justa y premios a los más curiosos y deuotos ingenios de nuestra

Page 9: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

2472 1. JAIME GARCÍA BERNAL - Unwsrsidfld d. S.,;illn

República". Estos últimos, los poetas, constituyen para el autor los impres­cindibles voceros que avivan la fervorosa devoción con el aliento de sus vocesy acentos, si bien de acuerdo a unas reglas definidas (las leyes del certamen)que repiten el sentido piramidal que ha seguido el discurso festivo: un trans­currir de las expresiones generales a las más particulares hasta concluir en elelogio de la propia cofradía de San Pedro.

Si examinarnos la distribución temática de los diez certámenes que for­maron las justas de 1616 apreciaremos la asociación recurrente, formuladacon metros distintos, entre el misterio de la limpieza de María, la nobleza dela cofradía que la sustenta y la lealtad expresada en el voto solemne. Simbo­lismo que anudaba los sentidos que se daban fragmentados en los homenajespúblicos de la primera parte de la relación. De este modo: el certamen segun­do (el primero puede interpretarse como un exordio o llamada a los justado­res) desafiaba a quien cantase en versos heroicos latinos "la soberana ImperialMajestad de la que fue predestinada con milagrosa limpieza". Tema que sedesplegaba, en los siguientes, alternando la honesta estirpe de la Virgen (enepigramas), con la nobleza del voto (en una glosa), o bien, la heroicidad delclero que la defendía (en soneto), con los divinos atributos que cifraban sumisterio (en octavas). La cadenas y el vínculo de San Pedro, advocación dela congregación, permitía el juego de conceptos con la Virgen María que fuelibre de las cadenas del pecado, ni conoció el vínculo del mal. Para concluir,el argumento de la unanimidad que ya salió en la descripción de las procesio­nes, regresa en el certamen IX y X que demostraban la pureza de María, nocon pruebas doctrinales, sino por su efecto en los corazones. En conjunto, lossignificados dispersos en las jornadas festivas quedaban recogidos y glosadosen el festival de la palabra poética, abriendo nuevos caminos de recreaciónpara ellector.6

El modelo narrativo que presentaba en 1616 el licenciado Francisco deLuque Fajardo no era, sin embargo, totalmente original. Ya en 1610 la propiaCompañía de Jesús había encomendado al padre jesuita la compilación delas justas poéticas que celebró su colegio de San Hermenegildo con motivo

6. La bibliografía sobre academias y justas literarias en el mundo hispánico es muyamplia. Un esfuerzo de síntesis en: Juan Delgado, "Bibliografía sobre justas poéticas", Edadde Oro 7 (1988), pp. 197-207. Algunos trabajos recientes que han sido de utilidad a la horade redactar estas líneas: Luis Manuel Godoy Gómez,Lasjustaspoéticas en la SeviUa del Siglode Oro, Sevilla, Diputación Provincial, 2005. Francisco J. Á1varez, Ignacio GarcÍa Aguilar eInmaculada Osuna, "Seventeenth-Century Academies in the City ofGranada: A ComparatistApproach", en AIjan van Dixjoorn and Susie Speakman Sutch, The Reach qf The Republicqf Letters. Litemry and Learned Sooieties in Late Medieval and Ear{y Modern Europe,London/Boston, Brill, 2008, vol. n, pp. 309-336. Pascual Mas i Usó, Academias y justasliterarias en la Válencia barroca: teoría y práctica de una convención, Kasel, Reichberger,1996.

Page 10: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

LA FUNC1ÓN DE LAS JUSTAS POÉTICAS EN LAS FIESTAS RELIGIOSAS DEL BARROCO 2473

de la beatificación del fundador de la orden San Ignacio de Loyola. Y Fa­jardo recurrió entonces por primera vez a la idea de inscribir la memoria delcertamen poético en la estructura más amplia de las jornadas festivas que loprecedían en el orden compositivo y servían de reclamo para el lector desdela propia portada del impreso que pregonaba la Relación de la fiesta que sehizo en Sevilla a la beatificación del glorioso San Ignacio. De forma similar,los festejos granadinos, impulsados por el colegio jesuita de aquella ciudad,siguen la pauta de asociar los discursos festivos a las poesías del certamen yel esquema se repite para las fiestas ignacianas de Salamanca con la particu­laridad, en este caso, de que las poesías se insertaban entre la relación festivay los sermones.

Los tres libros conmemorativos de Sevilla, Granada y Salamanca com­parten, con ligeras variantes, un concepto integrado de fiesta religiosa que sedesarrolla alrededor de los ocho días de cultos al fundador y dentro del cualla justa es el nexo formal que mediante la palabra poética liga las partes quecomponían ese todo. La función de la concesión de los premios a las poesíasganadoras del certamen tenía lugar después de la última jornada litúrgica yera un acto social muy concurrido. Considerado aisladamente respondía alprotocolo ritual de las convocatorias poéticas que ya contaban con larga tra­dición en las ciudades españolas. Sin embargo, lo que se dilucidaba en aquellasesión vespertina, en el contexto de los grandes festivales religiosos de laEspaña del Barroco, era mucho más que un reparto de regalos a los mejoresingenios de la ciudad. Todos los homenajes festivos de gremios, cofradías yparticulares desfilaban por el tribunal de los jueces y recibían su recompensa.El protocolo del acto con sus discursos y lecturas poéticas servía de reca­pitulación sobre las jornadas que habían vivido los mismos que ahora con­currían a su rememoración. Y este comentario social tenía lugar delante deuna escenografía que presidía la imagen del santo, destinatario de los elogiospoéticos. Era el mismo espacio que había sido frecuentado por las visitas delos devotos, amenizado por las voces de la capilla de cantores y autorizadodesde el púlpito por la doctrina de los predicadores. Así pues, en términosde negociación ritual, la función de la justa poética subrayaba un momentoritual intenso, en un espacio especialmente connotado, que daba coherenciaa las experiencias fragmentadas de los participantes a lo largo de las jornadasfestivas. A mayor abundamiento: facilitaba el diálogo entre las prácticas deuna cultura popular, de tradición escénica y callejera, por un lado, y en elotro extremo, los ejercicios oratorios o poéticos propios de una cultura aca­démica, erudita y conceptuosa.

El cartel de la justa poética contribuía a dar significación festiva al lugarde la ceremonia. Quedaba colocado junto al altar de cultos desde las vísperasy allí permanecía durante toda la octava recordando a los asistentes el desafíode los poetas. La exposición del carte[ de convocatoria en el templo y otros

Page 11: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

2474 1. JAIME GARCÍA BERNAL - Unwsrsidfld d. S.,;illn

lugares principales de la ciudad era un acto solemne y festivo que marcabael inicio de las fiestas, definiendo un espacio ritual preciso (el recorrido porel cortejo) y un tiempo singular, el tiempo festivo del triunfo del santo, quequedaba establecido desde el momento en que los pliegos impresos con lasreglas del certamen y los plazos de entrega de las poesías, eran estampadossobre estandartes en los lugares previamente convenidos. La nobleza localtrataba de monopolizar esta ceremonia de la solemne publicación y paseo deldesqfío, en pugilato con la propia orden religiosa que promovía la causa comosucedió en Córdoba en ocasión de la beatificación de Santa Teresa en 1615.El mantenedor, don Gonzalo Manuel, caballero del hábito de Calatrava, en­tró en la iglesia en medio "del ruydo de una gran tropa de caballos y co­ches... acompañado de muchos caballeros y pages con vistosas libreas". Rezóante la santa y enarboló el pendón con el cartel antes de formar la comitiva.Le cortejaban los principales linajes de la ciudad, don Fernando Fernándezde Córdoba y don Martín de Córdoba, que portaban insignias alusivas a lafundadora de las carmelitas descalzas y así caminaron hasta la iglesia mayordonde fijaron uno de los pliegos impresos bajo un dosel. Lo propio hicieronen las casas del Cabildo de la ciudad y en el convento de San José. Ellicen­ciado Juan Páez de Valenzuela autor de la relación que da cuenta de estoshechos apostilla que en los días sucesivos se repartieron otros carteles entrepersonas de respeto y calidad, adivinándose un segundo circuito de difusiónprivado que debió contribuir a crear un clima de expectativa sobre la fiestaque en palabras del autor se aguardaba "con iguales esperanzas, aunque conjuyzios desiguales, por hazerlo cada uno en favor o de sus poesías o de susinvenciones".

En Toledo la celebración del certamen poético por la santidad de Teresade Jesús se decidió a última hora, cuando ya avanzaban las fiestas principalesdel convento. Se imprimió entonces un certamen, contra la voluntad de lasmonjas, que por modestia se resistían al gusto de la nobleza toledana "perofue tan grande la conmoción de la ciudad, y Caualleros, y su resolución, quefuera tratar de impedirlo con efeto, querer detener la corriente del Tajo"?Así que las religiosas condescendieron y llegado el día los caballeros se jun­taron en la casa del Marqués de Malpica, saliendo en procesión con lindosjaeces. Portaba el cartel el regidor don Diego de Mesa y se fijaron copias enel monasterio de las monjas carmelitas, en las casas capitulares y en un lugarllamado "de las quatro calles". La comunidad de los calzados (casa matriz dela orden) recibió el último pliego "con acompañamiento muy grande... exce­lente música y algunas danzas". El compilador de este relato, fray Diego de

7. Fray Diego de San José, Compendio de las Solemnes Fiestas que rm toda EJ}'aií4 sehicieron en la Beatificaoion de N. B. M. Teresa de Jesus, fundadora de la Rifbrmaoion deDescalzosy Descalzas de N. S del Carmen, Madrid, Viuda de Alonso Martín, 1615, p. 29

Page 12: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

LA FUNC1ÓN DE LAS JUSTAS POÉTICAS EN LAS FIESTAS RELIGIOSAS DEL BARROCO 2475

San José, que reunió noticias sobre certámenes poéticos venidas de toda lageografía española, concluye diciendo que así se dio materia a los aventajadospoetas para componer sus versos, subrayando que en la ceremonia de entregade premios estuvo en la iglesia "todo lo graue de la ciudad", leyéndose losversos y poesías más escogidos que él mismo incorpora al final de la relaciónescrita.

En ambos ejemplos, Córdoba y Toledo, el cartel impreso es el objetoritual que marca la tensión del tiempo narrativo, construido sobre la per­cepción de que el triunfo religioso es un desafio abierto para los talentose ingenios de la ciudad que rivalizan en sus gestos de acción de gracias. Laconvocatoria a los poetas prevalece sobre otras creaciones que también mani­fiestan la adhesión a la causa (sermones, invenciones, altares efímeros) pero nolas anula, más bien las asimila y armoniza en un todo coherente. Fue habitualque formando parte del cartel de la justa poética, o bien en pliego indepen­diente, se imprimiese la propia convocatoria de cultos con el nombre de lospredicadores que platicarían cada día. A veces se dan detalles de la procesiónque se hacía el primer y el último domingo del octavario. Y no es raro que seincluya la invitación a los vecinos para que erigiesen altares efímeros al pasode dicha procesión, así como máscaras, danzas y otras invenciones. o se hanconservado, salvo raras excepciones, los originales de estos carteles de convo­catoria pero las relaciones de fiestas suelen referirse a ellos al dar cuenta delpregón solemne que recorre las calles y plazas de la ciudad. El dominico frayVicente Gómez en sus Sermones y fiestas que la ciudad de l'álencia hizo...por San Luis Bertrán (1609) dice que "en el pregón se publicaron las fiestasque la Ciudad ordenó", aunque no especifica si por medio de carteles, yaña­de que se anunciaron los premios "para los Altares más curiosos, y de mejorinuención..., a la mejor colgadura..., al Officio que junto a su Bandera lleuassemejor inuención".8 Y en las Grandiosa,s fiestas por otro beato valenciano,el Arzobispo Tomás de Villanueva, ejecutadas en 1620, se dictaron hastatres pregones públicos donde se exhortaba a los vecinos a lucir banderas yestandartes, bailes, máscaras e invenciones de fuego "ofreciendo a las mayoresgrandes premios". Poco después, añade el cronista Jerónimo Martínez de laVega, presbítero valenciano, "salió, de parte de la Ciudad, un cartel impresode justa literaria, i poética, por todas las esquinas, i lugares públicos de ella".9

8. Fray Vicente Gómez, LOS SERMONES Y FIES'E4S QVE LA CIUDAD/de Valencia hizo por la Beatifioaoion/ del g/orioJ'() padre san LUJ's/ Bertran, Valencia, luanChrysostomo Garris, 1609, p. 9.

9. Gerónimo MartÍnez de la Vega, SOLENE~ / I GR.AN"DIOSAS/ Fiestas, que lanoble, I leal Ciu/ dad de valencia a echo por la/ Beatifioacion de su Santo/ Pastor, i Padre!D. 7bmas de ViUanueva... Con un disourJ'() de los Obispos, i Ar/ zobispO.f, desde el dia desu roquista por/ el R'Y don Iayme, i otras cosas/ memorables, Valencia, Felipe Mey, 1620,pp. 14-17.

Page 13: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

2476 1. JAIME GARCÍA BERNAL - Unwsrsidfld d. S.,;illn

Las relaciones sevillanas de esta misma etapa aportan otros detalles so­bre el rito de publicación del cartel de las fiestas, sermones y poesías. El yacitado Luque Fajardo describe el cortejo bien nutrido de estudiantes quese formó en el espacioso lugar de la Alameda para dirigirse hasta el Colegiode San Hermenegildo de la Compañía de Jesus donde se expondría el carteloriginal de la fiesta de san Ignacio. Pero "otros tantos muy bizarros carteleso certámenes de Ivsta literaria" iban portados por apuestos justadores sobreocho astas de plata que causaban admiración en la concurrencia. Una vezcolocados en los lugares señalados de Sevilla "auía después grandes aprietosa leerlos para más enterarse del intento y nueua causa".lO

En todos estos casos, el cartel se ha convertido en el icono que ordena elespacio y marca los tiempos de la solemnidad. La estética del cortejo resultaun híbrido de las cabalgadas ecuestres de la nobleza y de la gravedad de lasprocesiones eclesiásticas, con la incorporación además del componente joco­so y desenfadado propio de las fiestas estudiantiles (muy notable, por ejem­plo, en Salamanca). Pero más importante aún que la forma visible del cortejoes el significado simbólico que se negocia en este acto público. Pues la con­vocatoria de la ciudad de las letras, escriturada en el cartel, tiende a asimilarel resto del contenido de las honras religiosas, es decir, los sermones, adornose invenciones, en un espacio tipográfico (el pliego) que interpreta el espaciofísico de la fiesta y sus creaciones. Esta tendencia es más evidente conformeavanza el siglo XVII de tal modo que en los carteles de cultos marianos de latercera década de la centuria, estos sí conservados en una interesante serie dela Real Academia de la Historia, el afiche cumple las funciones de manifiestoen desagravio, anuncio de los predicadores y convocatoria a los poetas.1l Enel cartel de convocatoria de la cofradía de San Pedro de Sevilla que volvió asalir en defensa de la causa Inmaculista, en 1638, para desagraviar los sacri­legios del príncipe de Nasau perpetrados en los Países Bajos, se detalla hastael recorrido de la procesión en el faldón del impreso.12

Lo cierto es que la cultura del impreso parece haber penetrado en lasprácticas festivas de las ciudades españolas durante la primera mitad del siglo

10. Francisco Luque Fajardo, RELACION DE LA FIES'E4 QVE/ se hizo enScuilla a la Beatifieacion del Glorioso/ S. IGNACIO fundador de la Compaiíía de I8.fVs,Sevilla, Luis Estupiñán, 1610, fol. 3ro.

11. J. Jaime GarcÍa Bernal, "El cartel de fiestas en la configuración de la comunidadurbana del Barroco: ritualización del impreso y escrituración de la fiesta", en Antonio Castilloy James S. Amelang (dirs.) y Carmen Serrano Sánchez (ed.), Opinión pública y espaoio urbanoen la Edad Moderna, Gijón, Trea, 2010, pp. 106-116.

12. LA MAGES7YOSA, y REAL/ Prinoesa de los más encumbrados Seraphine.s...[Sevilla, 1638]. Cartel de convocatoria a la procesión en desagravio que la cofradía de sanPedro de Sevilla, establecida en la parroquia de San Lorenzo, celebró el 12 de septiembre de1638. Real Academia de la Historia, Jesuitas, tomo 119, nO 101.

Page 14: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

LA FUNC1ÓN DE LAS JUSTAS POÉTICAS EN LAS FIESTAS RELIGIOSAS DEL BARROCO 2477

XVII. Y el cartel festivo es en sí mismo un indicador del avance de esteproceso de mestizaje entre las formas lúdicas tradicionales (Ios paseos de lanobleza o las danzas de los gremios) y los ejercicios literarios de una culturaletrada y académica que, en todo caso, evidencia unos acusados rasgos deoralidad y es sensible a la fuerza de una cultura predominantemente visual.

o en vano la écfrasis virgiliana dicta la poética de las relaciones de fiestas.y los pocos carteles de convocatoria de fiestas que nos han llegado incluyengrabados con imágenes religiosas y con armas o escudos de las institucionespromotoras. El cartel impreso adquiere el mismo estatus que la imagen pin­tada en los pregones solemnes que hemos mencionado antes. En las fiestas car­melitas de Córdoba el pendón "con una figura a pincel de la santa" desfilabaal lado del estandarte con la convocatoria de la justa poética. Al llegar a laiglesia el primero fue colocado en el lado de la Epístola y el cartel en el ladodel Evangelio.13

En este espacio sacralizado tendrá lugar, precisamente, la segunda partedel ritual literario que ha inaugurado el paseo público del cartel: el acto delectura de las poesías premiadas y la entrega de los obsequios a los justadores.El lugar y el momento (que corona ocho días de misas y sermones) evidenciaun concepto unitario de la liturgia que integra el arte efímero, la música, ladoctrina de los predicadores y también el homenaje de los poetas. El certa­men poético cierra el octavario y lo epiloga pues, como vimos para las fiestasde inmaculistas de 1616, la invención de los poetas se puso al seIYicio de pro­pia experiencia festiva, rememorando sus grandezas. Pero también significasu culminación ritual, el momento en que se alcanza el clímax de la fiesta quelos testigos identifican (de acuerdo a los relatos conseIYados) con la propiaepifanía del santo: su entrada en la gloria.

En este sentido, la solemne función del certamen poético puede inter­pretarse como un ritual de afirmación de la comunidad en su conjunto quese identifica con el héroe en virtudes espirituales que ha sido su paisano osu compatriota (así en los santos españoles beatificados en las dos primerasdécadas del siglo XVII que hemos repasado). En esta fiesta de participación,como en la liturgia sacramental, todos los ciudadanos comulgan, en algúngrado, de los dones de gracia del santo protector por intermediación de losglosadores. Porque son los poetas locales premiados, justadores de la palabra,los únicos facultados, gracias a su arte de la agudeza verbal, para adentrarsepor la senda del misterio cuya última esencia permanecerá en todo caso in­descifrable. Una extendida opinión atribuía a los poetas barrocos esta función

13. Juan Páez de Valenzuela, Relaoión brevel de lasfiestas que en la oiudad del Cordouase celebraron ti la Beatificaeion de la gloriosa Patriar- I cha SMlta Theresa de IESUS,fundadora de la rqorma- I cion de De.scalfosy Descalyas Carmelistas. Qm la I justa Literariaque en eOa uvo, Córdoba, Viudad de Andrés Barrera, 1615, fol. 4vo.

Page 15: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

2478 1. JAIME GARCÍA BERNAL - Unwsrsidfld d. S.,;illn

mágica o demiúrgica, como mediadores de la comunidad en el desciframien­to de los misterios de la fe.\4 En el contexto del certamen poético religiosolos méritos del escritor que ha conseguido infundir alma al aparato materialde la fiesta adquieren especial resonancia pública porque a través de ellosse reparte la misma gracia divina sustanciada en las finezas que reciben losvencedores (una joya, un paño de seda, unos guantes de ámbar) a todos losconcurrentes sin excepción.

Esta dimensión trascendente que canaliza el verbo poético se expresapor medio de un despliegue de recursos escénicos que regalan los cinco sen­tidos. Lujosos reposteros, música armoniosa, flores aromatizadas... definen laatmósfera envolvente de este acto social. Sirva de botón de muestra la des­cripción del aparato que se orquestó para el reparto de los premios en lasfiestas cordobesas que narra el padre Valenzuela:

Dio final de la fiesta la distribución de los premios señalados a los Poetas...Mas al altar mayor... se tra<Jó un aparador hecho de hermosísimas pie<Jas de plata,en lo alto un dosel de brocado azul con guarnición de oro, y en aparador, enfuentes y salvillas doradas repartidos, y dispuestos los premios con gran majes­tad: pero de modo que todos se pudiesen ver desde lo más apartado. Por remateen lo alto estaua vn cartel de tafetán pajizo con imagen de la Santa... Cerca delpúlpito en la segunda naue estaua el charo de la música que constaua de realejos,ministriles de vozes diferentes, citolas, harpas y vihuelas, que tocadas diestra­mente en charos diuersos, entretuvieron regaladamente la parte de tarde quese tardaron los señores Iuezes, bien que el adere<Jo de los altares y fragancia deolores la hizieron de mucha recreación..Y

Sobre esta escenografía era habitual disponer sillas para los jueces y unatril desde donde el relator daba lectura a los premios. El orden de la ceremo­nia incluía, asimismo, un discurso introductorio sobre el asunto del certamenque en las fiestas ignacianas de Sevilla que describe Fajardo corrió a cargode un estudiante de teología que leyó un poema heroico del triunfo y beati­ficación del fundador de la Compañía. Apunta el presbítero que al terminarla alocución se levantó, junto con la música, un gran aplauso "no solo de losque entendieron la lengua [el latín], más de todos que gozaron de la gracia yexpedición del decir".16 Debemos imaginar que este público urbano, dondeentraba el rústico y el letrado, aún gozaría más del coloquio en tono burlesco

14. Aurora Egida, <fLope de Vega, Ravisio Textor y la creación del mundo como obrade arte", en: FronJeras de la poesía. en el Siglo de Oro, Barcelona, Crítica, 1990, pp. 198-215.

15. J. Páez de Valenzuela, Relación breve/ de lasfie.stas que en la mUdad del Cordouase celebraron... ) fol. 3vo.

16. F. Luque Fajardo, RELACION DE LA FIESTA QVE / se hizo en SeuiOa,

Page 16: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

LA FUNC1ÓN DE LAS JUSTAS POÉTICAS EN LAS FIESTAS RELIGIOSAS DEL BARROCO 2479

O Memorial epistólico que hizo el bachiller Pedro Miguel tras del cual se pro­cedió a la distribución de los premios.

El recurso a la actuación dialogada fue muy habitual en las justas poé­ticas del tardo-humanismo y del primer barroco. Sin dejar Sevilla, las querecoge Fray Diego de San José en su ci tado Compendio de las fiestas a SantaTeresa de Jesús (1615) nos informan de que fueron dos estudiantes los encar­gados de referir en voz alta y buen tono las poesías que habían merecido pre­mio desde dos púlpitos que se habían levantado a cada lado del altar mayor.El resultado fue una lectura dramatizada que se basaba en la retórica forense:"asignáronseles en cierta forma de juicio formando una averiguación comoprocessal en que auía sus demandas y respuestas de ciertas personas que allíse fingían, y concluyendo fallaban que debían premiar y premiauan". Lo cualdecían "con estilo gracioso" e intercalando pausas en que tocaban las chiri­mías.!? En las fiestas por la canonización de san Ignacio y san Francisco Javierdel Colegio Imperial de Madrid los niños representaron un breve coloquio deLope de Vega "en que Gui puzcua, avarra y la India Oriental [tierra nataly misión de los santos] daban cuenta a España de las grandezas de Ignacio yJavier y agradecían a los poetas la honra que les han dado con sus plumas".Pero en seguida "para quitar el encogimiento que tanta majestad causaba"vino el contrapunto del poeta Medrana que divirtió a la concurrencia convarias cédulas jocosas.1 8

El recurso a los lenguajes jurídicos y el contrapunto humorístico, queentronca con al vejamen de academia, se completa ocasionalmente con elsermón o la comedia. Junto a la variedad de metros y rimas que gastaban losjustadores del certamen, ilustra acerca de una función poética integradora delenguajes y construida para dar espectáculo a un público no necesariamen­te académico. Un festival de las letras seglares que irrumpían en el templocuando aún no se habían apagado los ecos de los religiosas oraciones. Dicede nuevo el padre San José: "fueron sin número las tarjetas, Geroglíficos,Epigramas, sonetos, otauas, Iyras, tercetos, redondillas, romances, Hebreas,Griegas, Latinas, Toscanas, Francesas, Castellanas, Vizcaínas, Portuguesas,Sayaguesas, Guineas y otros graciosos estilos a diuersos passos de la vida denuestra Madre". Letrillas que se repartían entre los zaguanes, patios y altaresdel convento, antes de proceder al dictamen de los jueces. La exposición ala vista de pliegos, billetes y cedulillas despertaba lógicamente la codicia dela concurrencia que las arrancaba para llevárselas como recuerdo. Pero la

17. Fr. D. San José, Compendio de las Solemnes Fie.stas... , foL 151vo.18. Fernando de Monforte y Herrera, RELACIONI DE LAS FIESTASI QVE'

HA HECHO EL COLEGIOI Imperial de la Compañía de Iesus del Madrid en lacanonizaoion de San I Ignaoio de Layola, y S. Fran- I oisw Xauier..., Madrid, Luis Sánchez,1622, foL 71vo.

Page 17: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

2480 1. JAIME GARCÍA BERNAL - Unwsrsidfld d. S.,;illn

representación del alboroto y el desorden, como la de la jerarquía y el orden,son dimensiones complementarias en la narrativa de la fiesta barroca y ambasadjetivan la grandeza del acontecimiento.

Las justas poéticas constituían la clave de bóveda de este sistema narra­tivo. La diversidad de estilos y soportes que describe el cronista dominicodemostraba la universalidad de la devoción a la santa y hasta las poesías másatípicas, llamadas aventureras por estar escritas en lenguas inusuales, consti­tuían una prueba adicional de su imperio. Semejante lógica preside las fiestascolegiales jesuitas, como la que organizaron los padres de Salamanca quedecidieron incluir jeroglíficos y tarjetas al lado de las rimas "porque los ojostengan también en qué emplear su gusto demás de los buenos conceptos".19Se ponía punto final, así, al homenaje de las naciones que había sido el temarecurrente a lo largo de los ocho días de fiesta. Del mismo modo, en Valla­dolid, el último certamen dedicado a Teresa de Jesús acogía, sin conocerfrontera, los versos más extemporáneos, convocando "a las que destas obrasfuessen con mayores ventajas buenas, o con mayor ingenio o artificio malas...,graciosas o ridículas". Esta diversidad de registros lingüísticos era para el cro­nista la prueba indubitable de la dimensión universal que adquiría la reciénbeatificada. Por eso concluía: "se celebró la solemníssima fiesta de nuestrasancta virgen, a quien las naciones más remotas respetan, obedecen y llamana boca llena Madre".2°

Expresiones como las citadas se encuentran con frecuencia en las rela­ciones de fiestas de las primeras décadas del siglo XVII. El certamen poéticoes, en todas ellas, el motivo que clausura y explica el sentido global de la ce­lebración, cuando ha sido también su puerta de apertura mediante el rito deproclamación o pregón de la fiesta. En medio quedan las demás actividadesfestivas que describen los relatos: altares efímeros, procesiones, juegos caba­llerescos, danzas y máscaras, regocijos populares. La diferencia dentro de laconcordia, la porfía al seIYicio de la causa común, presiden su discurso. Perose reúnen, al final, en la cita de las letras que integra los niveles de experienciahasta entonces fragmentados. Quizás por eso, una generación después de lasfiestas aquí descritas, en 1659, el cronista cordobés de las fiestas a Santo To­más de Villanueva, confiesa que había sido necesario convocar un certamenpara que las fiestas se considerasen "grandes". Y que hubo que esperar a queterminara la octava para colocar el aparato preciso en la iglesia.

19. Alonso de Salazar, Fie.stasl que hizol si insigne CoUegio de lal Companía de Jesuslde Sala11Zt1nca, I A la Beatificaoion del g/orioso Patriarchal S. Ignacio de LO:;'ola. Con lossermones y poesias, que wvo en alaban;a dd santo, Salamanca, Viuda de Artus Taberniel,1610, Certamen poético.

20. Manuel de los Ríos Hevia Cerón, Fie.stasl que hizol la insigne dudad de Valladolid,0071 Poesiasy Sermones en la Beatifica- I cion de la Santa Madre Teressa de Iesus, Valladolid,Francisco Abarca de Angulo, 1615, fol. 121vo.

Page 18: Juan José Iglesias Rodríguez Rafael M. Pérez García Manuel ...digital.csic.es/bitstream/10261/191561/1/XIII R.Científica_Sevilla... · O JUAN JOSÉ IGLESIAS RODRÍGUEZ, RAFAEL

LA FUNC1ÓN DE LAS JUSTAS POÉTICAS EN LAS FIESTAS RELIGIOSAS DEL BARROCO 2481

CO CLUSIONES

La justas poéticas dedicadas a santos constituyen un fenómeno culturalde primera magnitud en la España del siglo XVII. Los estudios filológicos sehan venido ocupando de definir los rasgos fundamentales del género conside­rando sus relaciones con la oralidad, con la emblemática y con las academiasliterarias de los medios locales. Sin embargo, además de una actividad propiadel mundo letrado, el certamen poético fue un acto social de gran repercu­sión pública que formó parte de las fiestas religiosas de carácter extraordina­rio que jalonaron la vida de las ciudades españolas del Barroco.

El ritual de las justas poéticas implicaba a los principales agentes de laciudad, las élites gobernantes y las élites eclesiásticas, en un ejercicio de exhi­bición de poder y de liberalidad que se proyecta en el conjunto de la comu­nidad. Ambos grupos protagonizan el ritual del pregón del certamen por else convocaba a los poetas locales. Asimismo presiden el tribunal que concedelos premios en la solemne función que pone fin a las fiestas.

Estos dos actos constituyen la puerta de entrada y el broche de cierredel ciclo festivo en honor del santo. Un programa de fiestas que se prolongadurante una semana de cultos solemnes en la iglesia mayor de la ciudad. El ri­tual de las letras delimita, por tanto, la secuencia general de las celebracioneslitúrgicas y para-litúrgicas (torneos caballerescos, máscaras, danzas, fuegos yregocijos populares). Y las composiciones poéticas que concurren al desafíosirven para resumir, o ampliar, el sentido de las invenciones que se han idodesarrollando a lo largo de toda la octava.

El rito final de lectura de las poesías galardonadas y entrega de premiospuede interpretarse como un acto de afirmación colectiva y de hermandadpara todos los ciudadanos y participantes en las fiestas. Las aspiraciones delos vecinos se identifican con el triunfo de los poetas que, a su vez, reciben delos jueces del certamen los dones espirituales de que es merecedor el héroe­santo, ya glorificado.