CERO CARIES EN TODOS LOS NIÑOS

PROPUESTA DESDE UN CAMBIO EN LA EDUCACIÓN

ODONTOLÓGICA

La educación preventivista y las perspectivas laborales en odontología

La educación y la práctica preventivista en odontología conducirán al cambio en las perspectivas

laborales, que pasarán a estar centradas en el mantenimiento de la salud bucal, lo cual demandará

un personal muy numeroso.

Distinto perfil profesional

Ese gran número de trabajadores de salud bucal tendrá un perfil profesional distinto del perfil del odontólogo actual, de manera que servirá para complementar el esquema de atención odontológica integral.

Competencias

Este personal estará preparado para: Servir a las personas, a la familia, a los grupos humanos y

comunidades. Actuar políticamente con la sociedad civil a favor de la salud. Comunicarse efectivamente con las personas, las familias con la

comunidad, con los organismos del Estado y con los medios de comunicación pública.

La atención clínica, trabajando institucionalmente en equipo y en programas interdisciplinarios y transectoriales

Ejercer la investigación y la docencia

Profesionalismo

No será un personal dependiente de otro profesional.

Antigüedad del concepto

El enfoque preventivo para el mantenimiento de la salud fue conocido desde la antigüedad

Aristóteles y otros filósofos griegos relacionaron la prevención con el cuidado del desarrollo mental y corporal.

La salud estuvo asociada al cultivo de los ejercicios corporales y destrezas atléticas.

La fortaleza física era sinónimo de salud y de resistencia a la enfermedad.

Atención continua

El enfoque preventivo en odontología comprende la atención de la mujer gestante, del niño desde su nacimiento y del adolescente mediante un sistema que asegure la atención continua, sostenida en la práctica de un enfoque de salud familiar

La necesidad de la atención periódica del individuo sano debe ser una convicción de profesionales de la salud y de la población adquirida desde la más temprana edad.

El sistema escolar es el más propicio para el seguimiento y mantenimiento de la salud bucal del niño y del adolescente.

Nueva educación

En este sentido, la educación y la escolaridad deberán “reconceptualizarse”.

El fin de la educación como sistema escolar es enseñar a vivir, más allá de la transmisión de contenidos factuales o del desarrollo de destrezas lingüísticas o matemáticas.

Enseñar a vivir comprende el desarrollo de la persona para el logro de la felicidad de si mismo y de la felicidad de los otros.

Comunidad y escuela

Enseñar a vivir comprende las relaciones entre la escuela y la comunidad a la cual sirve.

Es cuando la escuela y la comunidad participan a la par en el proceso de educación para la vida y el bienestar personal y colectivo.

Es cuando la escuela y la comunidad descubren que ambas tienen el mismo propósito: educar de cara a la realidad corporal y psíquica de la persona y la realidad del entorno natural y cultural.

Mantenimiento de la salud

Educar para la vida comprende educar para enfrentar los problemas de salud, comenzando por adquirir la disciplina que demanda el mantenimiento de la salud.

A ese ámbito pertenece el mantenimiento de la salud bucal, que se logra mediante hábitos personales y el servicio que se recibe de otras personas.

Tanto en el sistema de salud como en el sistema educativo la odontología es una práctica caracterizada por ser mano de obra intensiva.

El avance científico y tecnológico no hace sino aumentar la necesidad de un crecimiento cuantitativo y cualitativo del talento y de la calidad humana necesaria para la atención de las personas y las comunidades.

La prevención y el control de la infección de los tejidos duros y blandos de la boca requiere la intervención de un personal debidamente calificado para brindar una atención personalizada a los niños y grupal a sus familias y comunidades.

La atención odontológica es una actividad mano de obra intensiva

. El odontólogo tradicional por su formación y

número no puede cubrir las necesidades preventivas de toda la población, menos aún de la población de escasos recursos.

La enseñanza tradicional de la odontología está centrada en la atención de la enfermedad

Las autoridades, profesores y alumnos dedican poca atención a la prevención como formación profesional para el mantenimiento de la salud

La enseñanza de la prevención ha quedado focalizada en los cursos de odontopediatría y odontología preventiva y social. En los demás cursos se habla poco de prevención.

El mantenimiento de la salud bucal no puede quedar librado a la iniciativa individual o grupal.

Se requiere la intervención ordenadora, vigilante, de control y evaluación del Estado en cumplimiento de su deber frente a la salud como un derecho.

Participación del sistema escolar

La participación del sistema educativo del país es crucial para el mantenimiento de la salud de niños y adolescentes, y por extensión, de la madre y de la familia.

La preparación de este personal, incluyendo el personal para la organización y supervisión de un programa preventivo, necesitaría hacerse de forma acelerada al inicio para cubrir la demanda institucional en las instalaciones de salud y de educación.

La creación de sistemas preventivos para la población materno infantil requiere la preparación de un número elevado de personal dedicado a la higiene buco dental, educación nutricional y hábitos adecuados en el hogar y en la escuela entre otros aspectos.

Ubicación

Este personal técnico-odontológico como la higienista dental o los auxiliares de odontología deberá quedar ubicado orgánicamente en el sistema de salud del país.

El Estado no puede desentenderse del cuidado y mantenimiento de la salud de los

niños.

Propuesta

1 En la formación profesional El odontólogo debe ser educado con una mentalidad

centrada en la atención integral de la persona, la familia y la comunidad que privilegie la prevención dirigida al cuidado de la salud de la madre, los infantes, niños y adolescentes.

El profesional de higiene bucal debe ser preparado con el mismo enfoque para el dominio de las técnicas y el respeto a los protocolos establecidos para la atención individual, familiar y colectivo.

Propuesta

2 A nivel del Estado Establecer una política pública con apoyo legislativo destinada a la

creación de un sistema nacional de mantenimiento de la salud bucal que reglamente la atención integral centrada en la persona, la familia y la familia que privilegie la prevención y que establezca:

A La creación de servicios escolares de salud en todas las escuelas del país a fin de que los sistemas escolares de mantenimiento de salud bucal realicen el seguimiento del estado de salud desde el nivel pre escolar hasta la terminación de la secundaria con la participación de los padres de familia o tutores.

B La normatividad para que durante la atención prenatal se incluya la educación para la salud bucal y el control de la higiene bucal de las mujeres embarazadas.

Un sistema bien articulado y supervisado hará posible que Los escolares solo excepcionalmente necesiten atenciones restauradoras.

Este desarrollo simplificará la organización y logrará impacto positivo en el acceso efectivo de la poblacion a la atención clínica, disminuyendo los costos y aumentando el rendimiento de los servicios.

La estrecha participación del sistema escolar es fundamental. Conceptual y organizativamente el mantenimiento de la salud del niño

debe considerarse en el ámbito del sector educación.

La prevención de la infección crónica de los tejidos duros y blandos de la boca producirá un cambio histórico en la práctica odontológica, en los costos de la atención y en los indicadores de salud.

Se requerirá un enorme contingente de profesionales de salud bucal en el sector público.

Cero caries para toda la población es el gran reto para la odontología Latinoamericana del siglo XXI

Roberto J. BeltránProfesor Emérito

Universidad Peruana Cayetano Heredia www.robertojbeltran.com