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Editorial

Carlos Manuel Rodríguez GascaDirector Editorial

Ángela Díaz, César Javier Falcón Sosa, José de Jesús Lechuga QuirozDiseñadores

BAFS, Cintli, Ivy, Swami, UlisesRedactores

Mireya Pablo RodríguezCoordinadora Editorial

Montserrat Mendieta CastilloColaboradora

Mayo, mes de los días sin clases

No podemos decir que sin trabajo, porque ni el 1 de mayo respetan. Ese jueves cometí el descuido de prender el televisor y encontré a unos conduc-tores asegurando que no hay mejor forma de pasar ese día que trabajando. Supongo que las personas con jornadas de 12 horas diarias (o hasta más) están completamente de acuerdo con ellos. No importa que el 1 de mayo se celebren los derechos de los trabajadores, la mejor forma de festejarlo es ignorando esos derechos.

Luego el día de las madres, el festival en las escuelas y los regalos. Nada mejor para aligerar las cadenas de mamá que hacerla trabajar 2 días antes en el traje que utilizará el niño para su recital, tabla rítmica, baile, obra teatral, lo que sea; o recibir una licuadora nueva, porque en su día no merece algo que le recuerde que sigue siendo una persona, es mamá y se amuela.

Terminamos con el día del maestro. Una profesión tan noble y tan poco valo-rada. Conozco muy pocos maestros que entran en la categoría de “buenos”, pero los conozco. Día con día se esfuerzan para cambiar el mundo un salón de clases a la vez. Son un ejemplo de integridad y calidad humana que transmiten a sus alumnos, más allá de la lección marcada en los libros de texto.

Y entre tantas celebraciones, llega este nuevo número. Esperamos que les guste y ¡viva mayo!

Equipo DES-sociales

Editorial 1

Tinta Joven Las bondades del trabajo 3 Ah! rythmic Cheo Feliciano 5

Peer-Reviewed Los habitantes de la Tierra 7

Portapholio El Recuerdo 11 Bifrontismo 18

Meta-Game Minecraft 19

Hojas comestibles Fahrenheit 451 21

K.O.taku La despedida del maestro 23

Política pelona Internet y su posible censura 25

Índice

TINTAJOVEN

Cuántos de nosotros trabajamos realmente por gusto?, ¿quién se

despierta en la mañana pen-sando “¡qué alegría, debo ir a trabajar!”? Creo que son muy pocos los afortunados. Ima-gina toda esa gente con un empleo que odian, pero no tienen la oportunidad de de-jarlo para buscar algo mejor por todas esas cuentas por pagar. Y así se le va la vida, trabajando a diario, comple-tando apenas sus pagos.La explotación laboral no co-mienza en las minas de car-bón donde los trabajadores pasan 18 horas diarias rom-piéndose la espalda; inicia en la oficina, donde tú pasas más de un tercio del día ha-ciendo que otro gane dinero. No te asustes por la palabra que usaré, pero nos acerca-mos al concepto de plusvalía. Un ejemplo simple: trabajas en una fábrica de zapatos. Te pagan $50.00 diarios. El pre-cio real de un par de zapa-tos (materiales desde la suela a las agujetas) es de $50.00, más tu salario, a tu patrón le cuesta $100.00 ese par. Re-sulta que son de la famosa

marca Androta, y su precio de venta es $500.00. La ga-nancia del patrón, quien en ningún momento intervino en la fabricación de los za-patos, es de $400.00. Pero es imposible que al día sólo fa-briques un par (te despiden por improductivo), haces 6 pares por día, cuyo costo no será de $100.00 porque tu día ya está pagado, ya sólo cos-tarán $50.00 los otros 5 pa-res, es decir, el gasto total de esos 6 pares es $350.00, que ya está cubierto desde el pri-mer par, y con ganancia de $50.00. Si vende un segundo par, su ganancia será de otros $450.00. Mientras más vende, más gana él; no tú. Ese dine-ro que ni ves y que es pura ganancia para el jefe, se lla-ma plusvalía.Ese tiempo que pasas en la oficina, se convierte en un “producto” y se traduce en ganancias para tu jefe (que todavía te descuenta medio día si llegas 10 minutos tar-de). Mientras tú pierdes ese producto (tiempo) que jamás podrás recuperar, tu jefe sigue ganando. Jamás recuperarás esas horas que pasas traba-

¿Carlos Manuel rodríguez gasCa

Las bondades del trabajo

Dicen que sólo hay una cosa peor que ser explotado, y es no poder serlo.

jando, te las cambiaron por un sueldo que no genera ganancias para ti, sino que te mantie-ne atado a ese trabajo, necesitando venderte (suena feo, pero así es) para seguir recibien-do dinero que apenas alcanza para sobrevi-vir, para que comas, bebas, duermas, veas te-le, en fin, para que vivas un día más (que pa-sarás de nuevo en la oficina).Y sólo hay algo peor que ser estafados de es-ta forma: que no nos estafen. Un desemplea-do sueña con poder trabajar, no importa los horarios injustos ni los sueldos bajos, no im-porta si le quitan la hora de comida o si tiene que llevarse trabajo a casa (ese tiempo ni si-quiera se lo pagarán), no importa si debe pa-sar todo el día bajo el sol buscando la venta (si

le da cáncer de piel, ya se amo-ló pues no le dieron seguro mé-dico) o si lo asaltan cuando es-taba en el mostrador (si no re-cibe el balazo, lo matará que le descuenten el valor de las cosas que se llevó el ratero), necesita dinero porque sin él no vivirá otro día para ser explotado.Lo anterior no lo escribo por el día del trabajo, sino en res-puesta a la pregunta de un ami-go “¿qué tiene de malo que me quiten media hora de comida? De todas formas me pagan lo que trabajo”.

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Tinta joven

TINTAJOVEN

Cuántos de nosotros trabajamos realmente por gusto?, ¿quién se

despierta en la mañana pen-sando “¡qué alegría, debo ir a trabajar!”? Creo que son muy pocos los afortunados. Ima-gina toda esa gente con un empleo que odian, pero no tienen la oportunidad de de-jarlo para buscar algo mejor por todas esas cuentas por pagar. Y así se le va la vida, trabajando a diario, comple-tando apenas sus pagos.La explotación laboral no co-mienza en las minas de car-bón donde los trabajadores pasan 18 horas diarias rom-piéndose la espalda; inicia en la oficina, donde tú pasas más de un tercio del día ha-ciendo que otro gane dinero. No te asustes por la palabra que usaré, pero nos acerca-mos al concepto de plusvalía. Un ejemplo simple: trabajas en una fábrica de zapatos. Te pagan $50.00 diarios. El pre-cio real de un par de zapa-tos (materiales desde la suela a las agujetas) es de $50.00, más tu salario, a tu patrón le cuesta $100.00 ese par. Re-sulta que son de la famosa

marca Androta, y su precio de venta es $500.00. La ga-nancia del patrón, quien en ningún momento intervino en la fabricación de los za-patos, es de $400.00. Pero es imposible que al día sólo fa-briques un par (te despiden por improductivo), haces 6 pares por día, cuyo costo no será de $100.00 porque tu día ya está pagado, ya sólo cos-tarán $50.00 los otros 5 pa-res, es decir, el gasto total de esos 6 pares es $350.00, que ya está cubierto desde el pri-mer par, y con ganancia de $50.00. Si vende un segundo par, su ganancia será de otros $450.00. Mientras más vende, más gana él; no tú. Ese dine-ro que ni ves y que es pura ganancia para el jefe, se lla-ma plusvalía.Ese tiempo que pasas en la oficina, se convierte en un “producto” y se traduce en ganancias para tu jefe (que todavía te descuenta medio día si llegas 10 minutos tar-de). Mientras tú pierdes ese producto (tiempo) que jamás podrás recuperar, tu jefe sigue ganando. Jamás recuperarás esas horas que pasas traba-

¿Carlos Manuel rodríguez gasCa

Las bondades del trabajo

Dicen que sólo hay una cosa peor que ser explotado, y es no poder serlo.

jando, te las cambiaron por un sueldo que no genera ganancias para ti, sino que te mantie-ne atado a ese trabajo, necesitando venderte (suena feo, pero así es) para seguir recibien-do dinero que apenas alcanza para sobrevi-vir, para que comas, bebas, duermas, veas te-le, en fin, para que vivas un día más (que pa-sarás de nuevo en la oficina).Y sólo hay algo peor que ser estafados de es-ta forma: que no nos estafen. Un desemplea-do sueña con poder trabajar, no importa los horarios injustos ni los sueldos bajos, no im-porta si le quitan la hora de comida o si tiene que llevarse trabajo a casa (ese tiempo ni si-quiera se lo pagarán), no importa si debe pa-sar todo el día bajo el sol buscando la venta (si

le da cáncer de piel, ya se amo-ló pues no le dieron seguro mé-dico) o si lo asaltan cuando es-taba en el mostrador (si no re-cibe el balazo, lo matará que le descuenten el valor de las cosas que se llevó el ratero), necesita dinero porque sin él no vivirá otro día para ser explotado.Lo anterior no lo escribo por el día del trabajo, sino en res-puesta a la pregunta de un ami-go “¿qué tiene de malo que me quiten media hora de comida? De todas formas me pagan lo que trabajo”.

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Si alguno no lo sabe, el día que falleció el premio nobel de lit-eratura, Gabriel García Márquez, también la salsa sufrió una gran pérdida: el maravilloso intérprete puertorriqueño, Cheo Feliciano.

José Luis Feliciano Vega nació en Puerto Rico el 3 de Julio de 1935, cantante y compositor reconocido como uno de los más destacados en la segunda mitad del siglo XX. Entre los ritmos que tocaba se en-cuentran los tropicales del son, la guaracha, boleros y románticas.

Sus primeros coqueteos con la música fueron en su barrio, con amigos que crearon instrumentos de lata. Llamaron a la orquesta El Combo de Lata, contaba con apenas 10 años. Después de la secundaria, colaboró con Ciro Rimac’s Review, Marianaxi de Luis Cruz y Kako y su Trabuco, y la orquesta de Tito Rod-ríguez.

Como la mayoría de los famosos, y quienes no lo son tanto, se vio en-

vuelto en problemas de drogadic-ción, lo que detuvo su carrera por un tiempo. Otras fuentes cuentan que él dirigió una protesta contra Estados Unidos y la guerra con Vi-etnam, lo que provocó que dejara de tocar un rato. Regresó a mostrar todo lo que este gran hombre es y a representar su estilo único de salsa (que tenía cercanía con otros rit-mos musicales como el son, el gua-guancó, el merengue y la guaracha).

Murió el jueves 17 de abril a los 78 años, en un accidente automov-ilístico. Su esencia se queda con todos aquellos amantes de la salsa y, sobretodo, en cada uno de sus fans. Así lo demostraron familiares y amigos en su funeral, donde se le rindió tributo a través de boleros y salseros como la agrupación La

Selecta Raphy Leavitt, Samy Mar-rero, Gilberto Santa Rosa, Billy Van, el músico Roberto Roena. Claro que el tributo fue al son de la música, ¿qué mejor manera de agradecer sus enseñanza, su espíritu y su arte que con lo mismo que él brindó?

Entre sus temas y discos más con-ocidos se encuentran: • Anacaona • Cheo • Cheo Feliciano with a little

help from my friend • Felicidades • Looking for love • The Singer • Mi tierra y yo • Estampa • Cheo Feliciano y la Rondalla

Venezolana

Su música vivirá en el ritmo, en los pies, en los intérpretes y en los amantes de la música para siempre.

Por: Mireya Pablo Rodríguez

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Portapholio

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Portapholio

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Mireya Pablo Rodríguez

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Portapholio

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PortapholioBifrontismoSerie

Una persona ignorante no es sinónimo de idiota; pero cuando se rechaza la oportunidad, negándose a dejar de serlo, no sólo es idiota, se vuelve un ser mediocre.

Montserrat Mendieta Castillo

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Minecraft salió en mayo de 2009, con un simple poner y quitar bloques de piedra y hierba. Desde entonces no ha dejado de actualizarse para dar mejor experiencia, tanto en jugabilidad como en estabilidad. Se preguntarán “¿por qué este juego de cubos con gráficos simples y sin objetivos claros?” Sin limitaciones de ningún tipo… un mundo abierto libre de exploración, construcción y aventura donde tú pones tus pro-pios objetivos.

La primera vez que juegas y entras en tu mundo, la música profunda al caminar por el terreno y la ausencia de rastro alguno de alguien seme-jante a ti, te envuelven en un sen-timiento de soledad, donde ningún tipo tutorial te hará llegar a los si-guientes días… si sobrevives a la primera noche.

Si descubres cómo conseguir co-

Juego de Cavernas fue el primer nombre que tuvo este gran juego, inicialmente indie, desarrollado en Java por Markus Persson (alias “Notch”). Incluso cuando el lenguaje de pro-gramación de Java no es famoso por conseguir juegos esta-bles, Notch lo utilizó. ¿Por qué hacerlo en Java y no en otro lenguaje? La respuesta es simple: Notch sólo sabe programar bien en Java.

mida, refugio y una fuente de luz para las oscuras noches, entonces prepara tus armas para enfrentarte a las criaturas de la noche: muertos vivientes, esqueletos fríos, grandes arañas patonas y uno que otro er-ror de código que da forma a una criatura bastante volátil (Creeper).

La construcción es un punto fuerte en este juego. Con la cantidad de materiales en bloques podrás dar libertad a tu imaginación para crearte un simple refugio, una casa en el bosque, una residencia en la planicie cerca de un rio o hasta una mansión en lo alto de una montaña con vista al mundo que te queda por descubrir. Además, Notch nos trae el poderoso polvo de piedra roja, que nos dará mucho más juego,

¿Un juego indie?

permitiendo dar energía positiva y negativa, logrando circuitos como luces que prenden y apagan, gran-jas automáticas de trigo, granjas de experiencia, etc. Muchos usuarios logran hacer mini-juegos, mapas de aventuras y hasta bloques de me-moria para guardar información. Sí, memorias.

En el mundo de Minecraft estamos solos. Bueno, ni tan solos; en pun-tos aleatorios existen aldeas que al-bergan a seres con los que puedes comerciar y aliviar tu ermitofo-bia… Aunque cuídense en la noche, porque las villas comúnmente son atacadas por oleadas zombis.

Teniendo un mundo entero por explorar, podrías creer que tendrás suficiente; pues te comento que no es así, ya que tenemos dos por-tales que nos llevan a dimensiones diferentes con nuevos bloques y

enemigos más peligrosos, donde cualquier paso puede ser el fin de tu aventura.

Minecraft empezó como juego in-die y su fama fue creciendo gracias a internet, de voz en voz en foros, con gameplays en plataformas como Youtube o Twitch y sin re-stricciones reales a descargas no le-gales. Mojang dejó jugar libremente y darle unos cuantos lujos a quienes pagaban el juego; con esta táctica vendió miles y miles de copias, los usuarios rentaban servidores para jugar con amigos y gente de todo el mundo, haciendo una comunidad donde compartían su experiencia, logros y construcciones.

Minecraft te dará cientos de ho-ras de entretenimiento. Uno mismo pone sus propios objetivos, levanta sus monumentos, construye su ho-gar y sobrevive a la soledad en un mundo... de cubos.

Por: Swami Jiménez

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Política pelona

A más de un año de gobierno de Enrique Peña Nieto, las esferas de poder se han ido debilitando cada vez más, quedando las políticas y reformas del presidente aprobadas sin que nadie las detenga.

Los partidos que en un momento parecieron opositores a él, ahora son le abren las puertas a sus refor-mas. El representante del Partido Acción Nacional en el congreso, toda vez vota a favor de estas políti-cas sin pero alguno, y los aún más debilitados partidos de izquierda no tienen ni la fuerza ni la valentía para oponerse a éstas.

Una de estas reformas afecta el único medio donde la ciudadana podía expresar su desagrado por el presidente, donde todavía pueden abrirse mesas de debate y expre-sarse libremente sin ninguna ame-naza y/o restricción: internet.

La reforma actúa en contra de la libertad, perjudica a todas las per-sonas, tanto reporteros como col-umnistas, incluso a aquellos que sólo quieren expresar su sentir político en un país donde los demás medios, sean televisivos o escritos, están del lado del presidente.

Las noticas están manipuladas, es fácil verlo en este caso de la censura a internet. Los medios convencion-ales sólo pasan a los secretarios y apoderados del congreso que están a favor y salen beneficiados de es-tas políticas y reformas.

Es una aberración subyugar este medio, dando prioridad a poder quitar y hasta investigar publica-ciones o noticias que detectan en contra de su gobierno.

Otro punto de esta política es que dentro de una marcha, donde la

Por: Ulises Espino

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y su posible censura

ciudadanía tiene el derecho de libre expresión, se crearán zonas cero donde no se puedan mandar fo-tos, videos y/o comentarios de las posibles brutalidades que la fuer-za pública ejerza sobre los mani-festantes. Ya se han dado casos donde se exponen a policías agredi-endo y arrestando a quienes se les pongan enfrente, sean o no estos detonantes de caos.

Es así como en tan sólo un año las acciones y políticas de este presi-dente autodestructivo atentan con-tra la propia ciudadanía, disfrazan-do todo con una supuesta mejoría que sucederá a largo plazo. Éste es el “nuevo” PRI y los nuevos gob-ernantes “demócratas”, como se hacen llamar.

Ya basta de todo este atentado ter-

rorista que está sucediendo de gob-ernantes hacia ciudadanía, es mo-mento de empezar a abrir los ojos y no ser hijos del medio, medio que el gobierno controla y manipula con sus medios.

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