curso de aromaterapia de

aromaterapiael poder terapéutico de los aceites esenciales

ÍndiceIntroducción

¿Qué es la aromaterapia?

La aromaterapia en la historia

Los aceites esenciales

Los aceites “base”

La importancia del cultivo ecológico en la aromaterapia

¿Cómo actúan los aceites esenciales en nuestro organismo?

Usos y métodos de aplicación

Observaciones y precauciones generales

Nuestros aceites esenciales ecológicos destacados

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Desde nuestra revista digital, elherbolario.com, hemos creado este monográfico acerca de la aromaterapia y los aceites esenciales para nuestros amigos

y lectores con el ánimo de informar sobre esta interesante terapia natural.

Explicaremos el mágico mundo de las plantas medicinales, haciendo un recorrido por una selección de aceites esenciales ecológicos y sus usos recomendados

que están a vuestra disposición en nuestra herboristería ecológica online, para que podáis comprar los mejores aceites esenciales y base sin moveros de casa y con

todas las garantías ecológicias.

Os deseamos que disfrutéis de esta información tanto como nosotros disfrutamos explicándoos estas nociones básicas del maravilloso mundo natural y la aromaterapia.

Hemos seleccionado los mejores aceites esenciales y los que tienen menos contraindicaciones, pero aun así, desde el herbolario.com os rogamos que prestéis especial atención a las

precauciones y recomendaciones con responsabilidad y que en caso de estar siguiendo un tratamiento farmacológico u homeopático o en caso de enfermedad grave, o duda de cualquier tipo consultéis

con vuestro médico, homeópata o especialista en aromaterapia.

Te recomendamos que no imprimas este documento, ya que está diseñado para poder ser leído directamente en tu ordenador, pero si lo imprimes puedes hacerlo reutilizando papel.

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¿Qué es la aromaterapia? Para explicar en qué consiste la aromaterapia debemos empezar explicando primero

qué es la fitoterapia. La fitoterapia es una ciencia milenaria que se basa en el estudio de las propiedades curativas de las plantas y su conocimiento y práctica se ha extendido

y evolucionado a lo largo de los siglos hasta nuestros días, dando lugar a otras muchas ciencias y estudios acerca de las propiedades terapéuticas de las plantas.

Una de estas ramas de estudio y práctica es la aromaterapia.

La aromaterapia es una forma muy efectiva, agradable y sencilla de utilizar los principios activos de las plantas para conseguir mejoras físicas o emocionales.

Se considera una terapia complementaria o alternativa a la medicina convencional occidental que se estudia y pone en práctica por infinidad de terapeutas por todo el mundo.

Está basada en tratamientos aplicados mediante los aceites esenciales puros de plantas. A pesar de su nombre, la aromaterapia no se basa exclusivamente en los aromas para obtener

sus efectos beneficiosos en el organismo, sino que también utiliza las propiedades químicas terapéuticas de cada planta y los efectos sensitivos que producen en nosotros.



Según estudios llevados a cabo durante el siglo XIX por médicos y científicos como Jean Valnet o Marguerite Maury, se desveló que el aceite

esencial puro, extraído directamente de la planta, tenía más y mejores efectos sobre el organismo que compuestos químicos

elaborados artificialmente con compuestos aislados de la misma planta. Es decir que descubrieron que, por ejemplo, el aceite esencial de canela o

clavo tiene mejores efectos que compuestos químicos artificiales que contienen eugenol, siendo el eugenol un compuesto que se

extrae del clavo o la canela, entre otras plantas.

A partir del siglo XIX y con la experiencia y referencias acumuladas, diversos estudios científicos, médicos, homeopáticos y farmacológicos han determinado que la aromaterapia actúa en el organismo a nivel

farmacológico o químico, físico y psicológico. De hecho, con unas nociones básicas pero imprescindibles, atendiendo a

las precauciones y con unos aceites esenciales de calidad, se pueden obtener resultados realmente efectivos y sorprendentes.

La aromaterapia en la historia En todas las civilizaciones y culturas se han utilizado los aromas, aceites esenciales

y perfumes tanto por sus aplicaciones estéticas, para rituales y ceremonias religiosas como para prevenir o curar todo tipo de enfermedades.

La referencia más antigua y destacable con la que contamos es la egipcia, ya que tenemos constancia, gracias a varios documentos encontrados, de que en el antiguo Egipto se utilizaban

esencias y aceites con fines terapéuticos, además de usarlos para los embalsamamientos, rituales religiosos y sexuales.

Otra referencia histórica es la de pueblo judío, que cuando tuvo que emigrar hacia Israel, llevó consigo recetas de infinidad de ungüentos y remedios elaborados con aceites esenciales,

así como la sabiduría y el conocimiento adquiridos a lo largo de su historia les permitía reconocer qué planta es buena para curar cada afección, que les hizo dominar y perfeccionar la ciencia de la fitoterapia.

Una muestra más de la importancia de algunas esencias en la antigüedad, la obtenemos de la Biblia, ya que según refleja, en el nacimiento de Jesús los magos orientales llevaron de regalo

incienso y mirra, que son esencias que provienen de resinas vegetales muy apreciadas y con infinidad de utilidades en culturas orientales.

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En la literatura védica de la India, se han encontrado infinidad de referencias de la utilización de aromas, aceites o especias, tanto en su uso terapéutico como espiritual.

Algo parecido ocurre en la medicina tradicional china, ya que se ha encontrado un manual que data de más de 2000 años antes de Cristo, El libro imperial amarillo de la

medicina, que describe el uso de aceites esenciales con fines rituales o curativos.

La alquimia, que estudió y practicó fitoterapia, medicina y física entre otras ramas, y que ha derivado en varias ciencias como la Química, se implantó durante siglos como

una forma de medicina práctica y eficaz en el Imperio Romano, el Imperio islámico, en Grecia, Persia, etc... hasta llegar a Europa en el siglo XIX y evolucionar hasta

nuestros días en las diferentes terapias naturales y ciencias con las que contamos.

Los aceites esenciales Los aceites esenciales puros se extraen de las plantas medicinales.

Son sustancias muy concentradas y aromáticas que contienen el principio activo natural de la planta en estado puro, donde residen sus propiedades aromáticas y terapeúticas.

El principio activo de una planta contiene su potencial curativo, único e indentificativo para cada planta, la composición química donde residen los ingredientes que la hacen efectiva para una enfermedad

o patología en concreto. Se extrae mediante distintos y delicados procesos y se utilizan para la elaboración de fármacos y para utilizar como aceite esencial en estado puro.

Como decimos, el aceite esencial, no solo tiene propiedades aromáticas, sino también terapéuticas, y por eso se utilizan tanto para cosmética, como para farmacología, homeopatía o diferentes terapias

complementarias como la aromaterapia.

Algunos aceites esenciales, dependiendo de las propiedades de la planta de la que proceda, pueden resultar tóxicos, tanto por su alta concentración como por su composición química singular, por eso,

estos aceites con principios activos peligroso, no se suelen vender para uso doméstico, sino para usos industriales o farmacológicos. No obstante, ante el uso doméstico de cualquier aceite esencial, es

importante asegurar su procedencia y conocer sus propiedades terapeúticas y observaciones.



Los aceites esenciales suelen nombrarse como la planta de la que proceden, por ejemplo, aceite esencial de rosa, de árbol de té, de lavanda, de limón, de menta....

y se puede extraer, dependiendo del tipo de planta y donde resida en mayor concentración su esencia, de las flores o frutos, de sus semillas, corteza o raíz.

A pesar de su nombre, no son sustancias aceitosas, sino volátiles, (se evaporan con facilidad), y su composición química es muy inestable, por lo que puede variar por una

exposición alta a la luz o al calor. Por todo esto, los aceites esenciales deben guardarse en frascos de cristal oscuro,

azul o verde, muy bien cerrados y en lugares frescos, que no fríos.

Para conservar todas las propiedades químicas intactas de la esencia de la planta, su extracción debe ser muy delicada y realizada por profesionales, ya que someterlos

a temperaturas extremas, por ejemplo, podría eliminar sus efectos beneficiosos. Existen varios métodos de extracción del aceite, y cada planta se somete a un tipo de

extracción recomendado, como la destilación por vapor, la enfleurage, o la presión en frío.

Los aceites “base”Los aceites esenciales tienen una alta concentración y pureza, por lo que para

algunos usos y aplicaciones se diluyen en otros aceites neutros, de aromas suaves que combinan bien con otros aromas más intensos y cuyos efectos terapeúticos

no interfieren con otros efectos terapeúticos.

Estos aceites “base” también se conocen como aceites de masaje, ya que se utilizan comunmente para esta función. Todos se caracterizan porque tienen un alto poder hidratante y nutritivo, son oleosos

y suavizan la piel dejándola tersa y manteniéndola joven y sana.

Los aceites base más utilizados y que os recomendamos son el aceite de almendras dulces, muy delicado e hidratante idea para pieles infantiles o sensibles,

el aceite de coco, que suaviza e hidrata la piel y el cabello, aceite de jojoba, nutritivo y recomendado para pieles grasas o acnéicas, y el aceite de germen de trigo, especialmente recomendado para pieles

maduras ya que por su poder antioxidante y nutritivo ayuda a disminuir las arrugas. El aceite de rosa de mosqueta tiene un espectacular poder antioxidante, cicatrizante, hidratante

y nutritivo, por lo que aunque se puede utilizar como aceite base, comunmente se utiliza en su estado puro para eliminar cicatrices, estrías o hidratar en profundidad.


Cultivo Ecológico y aromaterapiaLa agricultura ecológica promueve, practica y certifica una forma de cultivo respetuosa con el medio

ambiente, evitando la explotación indiscriminada de la tierra, respetando los ciclos naturales de siempre y recolección y prescindiendo de la utilización de sustancias químicas perjudiciales

para el medio ambiente y el organismo. De este modo la agricultura ecológica evita el uso de pesticidas (insecticidas, herbicidas, plaguicidas, funguicidas...) y fertilizantes o abonos de síntesis.

Los pesticidas y fertilizantes, alteran o destruyen no solo todo el entorno natural del cultivo, flora y fauna, sino también la composición química natural de la planta, afectando a

su concentración y cantidad de aceite esencial y principio activo, y disminuyendo así su potencial terapeútico.

Es muy importante la pureza y calidad de los aceites esenciales y los aceites base, puesto que, al igual que su principio activo penetra en la piel y llega directamente al torrente sanguíneo, si este aceite o la

planta de la que proviene ha sido cultivada con pesticidas o fertilizantes, contendrá residuos químicos tóxicos, en muchos casos metales, que también van a penetrar en nuestra sangre

y nuestro sistema respiratorio.

Como siempre, os recomendamos utilizar este tipo de productos naturales de producción ecológica certificada, pero en este caso es realmente importante asegurar la calidad del aceite con el fin de

asegurar su efecto terapéutico y sobre todo asegurar que no contienen productos químicos ajenos a la naturaleza de la planta, que pueden resultar, en mayor o menor medida y dependiendo de cada

organismo, perjudiciales para la salud.


¿Cómo actúan los aceites esenciales en nuestro organismo?Los aceites esenciales actúan en nuestro organismo a nivel químico, físico y psicológico.

Despiertan sensaciones a través del tacto y el olfato, se introducen en nuestro torrente sanguíneo a través de la piel o ingiriéndolos, y así el principio activo de la esencia provoca alteraciones beneficiosas en nuestra

composición química. También nuestro cerebro responde a los estímulos olfativos y químicos, y los aromas y las fricciones tienen efectos beneficiososo y significativos para nuestro estado anímico.

Los aceites esenciales son sustancias volátiles, lo que significa que sus moléculas, se introducen en nuestras vías respiratorias llegando a nuestros pulmones, y desde ahí a través de los alveolos a nuestro torrente sanguíneo.

A su vez, las señales olfativas estimulan nuestro sistema nervioso provocando reacciones físicas o emocionales. El masaje sobre la piel también despierta y estimula los sentidos, a la vez que genera un aumento de temperatura

muy beneficioso para mejorar la circulación sanguínea y relajar nuestro cuerpo y mente.

Con unos aceites esenciales de calidad y un poco de dedicación, todo nuestro organismo se verá inhundado del aroma y las propiedades naturales beneficiosas de la esencia, a la vez que

obtendremos sensaciones muy agradables y estimulantes.


Usos y métodos de aplicación Los aceites esenciales, al estar muy concentrados, deben utilizarse con precaución y siempre

controlando la cantidad que aplicamos, que se debe contar en gotas. Cada aceite esencial tiene su composición específica y cada afección requerirá de una concentración y cantidad mayor o menor.

Aplicación interna: No todos los aceites esenciales se pueden ingerir, de hecho se recomienda no ingerir ningún aceite esencial

en su uso doméstico ya que muchos pueden resultar tóxicos. Sólo se deben ingerir los aceites esencialesque específicamente necesiten de una aplicación interna, como por ejemplo los digestivos, y aún así deberán

administrarse disueltos ya sea agua, zumo, yogur o miel y mejor bajo la supervisión de un profesional.Algunos aceites que se pueden ingerir en pequeñas cantidades son por ejemplo

el de canela, manzanilla, melisa, mandarina, limón, romero o menta.

Aplicación externa: La mayoría de los aceites esenciales se deben administrar por vía externa en su uso domético, ya que a través

del contacto con la piel también podemos hacer llegar su principio activo a nuestro torrente sanguíneo. Todos se pueden aplicar directamente sobre la piel en pequeñas dosis, y dependiendo de la gravedad de la

afección y del tipo de aceite será recomendable o no diluir el aceite esencial en lo que llamamos aceite base.Un aceite base es un aceite nutritivo e hidratante con un principio activo muy suave, por lo que se puede aplicar en

mayor cantidad. Los aceites de almendras dulces, coco, jojoba o germen de trigo, tienen un aroma suave y son hidratantes y nutritivos para la piel, por lo que combinan perfectamente con otros aceites esenciales más fuertes.



La proporción recomendada para la mezcla de un aceite esencial con un aceite base será de 3 a 7 gotas de aceite esencial por cada 2 ó 3 cucharadas de

aceite base. Esta es una proporción aproximada que podrá variar depenediendo de la naturaleza del aceite esencial.

Así por ejemplo, podremos masajear nuestras piernas cansadas para mejorar su circulación, aplicar aceite esencial en alguna herida, forúnculo, quemadura o picadura

o frotar nuestro pecho para descongestionarlo o aliviar la tos, el dolor de cabeza o la ansiedad.

Si decidimos utilizar nuestro aceite esencial diluido, podemos usar compresas frías o calientes húmedas con 3 o 4 gotas de aceite esencial para reforzar su acción

y colocarlas sobre la zona a tratar durante 5-10 min., o utilizar el método de vaporización fría, inhalando vahos o rociando con unas gotas el agua del baño.

Nunca se deben usar quemadores, ya que el aceite, al quemarse o calentarse en exceso pierde propiedades aromáticas y terapéuticas.

Existen en el mercado difusores especialmente diseñados para aromaterapia.

Muchos aceites esenciales también están recomendados para aplicar directamente en su estado puro sobre el cabello, las uñas, dientes, encías o yagas en la boca.

En el caso especial de los bebés o niños, los aceites esenciales recomendados para sus pieles y organismos delicados, son la mandarina, lavanda o eucalipto, y se aplican

mediante masajes con aceite base (almendras dulces) o leche corporal neutra. También se suele aromatizar la ropa del niño o su habitación.

Observaciones y precauciones generalesNo se aconseja ingerir un aceite esencial si no se encuentra bajo la supervisión de un profesional.

El aceite esencial se debe mantener siempre en un frasco de cristal oscuro y aislado de la luz directa y el calor o frío extremo.

Los aceites esenciales deben mantenerse fuera del alcance de los niños, ya que su ingesta podría resultar peligrosa.

En caso de hipersensibilidad cutánea o frecuentes reacciones alérgicas, se recomienda realizar una prueba previa administrando una pequeña dosis de aceite en una pequeña zona de la piel.

Si se está realizando algún tratamiento médico o farmacológico, o en caso de padecer alguna enfermedad grave o crónica se debe consultar con el terapeuta o médico habitual.

Se debe tener especial precaución con los aceites que pueden provocar toxicidad en altas cantidades, algunos de estos son: almendra amarga, alcanfor, ajedrea, árnica, meliloto, tuya, tanaceto, ruda, o santolina.

En caso de embarazo, los aceites esenciales se utilizarán siempre por vía externa, en pequeñas dosis y diluidos en aceites base, alcohol, cremas o pomadas.


Nuestra selección de aceites esenciales recomendadosEn elherbolario.com hemos seleccionado los mejores aceites

esenciales y base de cultvo ecológico certificado, prestando especial atención a sus múltiples efectos beneficiosos para el organismo

y su escasa peligrosidad.

En nuestra tienda online podrás comprar todas las esencias que aparecen en este dosier, así como los mejores aceites base, de almendras dulces,

de coco, jojoba, germen de trigo y rosa de mosqueta (todos ellos de cultivo ecológico), para que desde tu casa puedas realizar

la selección que mejor se ajuste a tus necesidades y recibir todo en la dirección que nos facilites, a la mayor brevedad posible.



Aceite esencial de Árbol de té Es uno de los mejores bactericidas y desinfectantes naturales; está indicado para purificar la piel y curar forúnculos y granos,

cicatrizar y desinflamar. También actúa sobre virus y hongos.

Se puede aplicar una gotita directamente en un grano o forúnculo que queramos curar, o podemos mezclarlo con un aceite base de jojoba, ya que

que est está indicado para pieles grasas y con tendencia a padecer acné.

El aceite de árbol de té se suele aplicar en su estado puro, pero se puede diluir cuando queramos actuar sobre una zona amplia de piel o cualdo existe

posibilidad de sensibilidad cutánea.


Aceite esencial de BergamotaTiene un aroma cítrico muy agradable, mezcla de naranja y limón.

Desinfecta y purifica la piel, por lo que se suele utilizar en casos de acné o heridas. También favorece la digestión y alivia los gases y cólicos.

Al aplicar en la piel, se recomienda hacerlo mezclando 2 ó 3 gotas en 1 ó 2 cucharadas soperas de otro aceite base, crema o agua.

Si se utiliza por sus propiedades digestivas, se suele ingerir diluyendo 1ó 3 gotas en una en la bebida, por ejemplo en una infusión de manzani-

lla, té o hierba luisa o junto con una cucharada sopera de miel.

No se debe aplicar sobre la piel si seguidamente se va a estar expuesto al sol.


Aceite esencial de CiprésEstá indicado en caso de pieles grasas, transpiración excesiva y para

mejora la circulación sanguínea, por lo que se suele utilizar por vía cutánea en casos de varices, hemorroides, celulitis o cansancio muscular.

Es repelente de algunos insectos.

También tiene propiedades relajantes, por lo que alivia la tos nerviosa o problemas derivados del estrés.

No es tóxico ni irritante, se puede utilizar directamente administrando 2 ó 3 gotas sobre la piel para realizar friegas, pero suele mezclar con algún

aceite base, como por ejemplo el de coco, para masajear zonas grandes en casos de dolor muscular.

Para casos de pieles grasas, si se va a utilizar diluido se debe elegir un aceite base poco graso o recomendado para pieles grasas, como es el caso

del aceite de jojoba.


Aceite esencial de EucaliptoEs un magnífico expectorante y broncodilatador, por lo que está

indicado en casos de asma, bronquitis o catarro. También alivia ligeramente los dolores de las articulaciones, desinfecta

y es repelente de algunos insectos. No se recomienda su ingesta porque puede resultar tóxico.

Se administra sobre todo para mejorar el funcionamiento del aparato respiratorio, por lo que se suelen realizar masajes directamente sobre el

pecho y cuello con 2 ó 3 gotas de esencia o diluyéndolas en otro aceite base, como por ejemplo el de coco.

También se realizan vahos, vertiendo 3 ó 4 gotas en 1 litro de agua caliente o se pueden verter unas gotas en un paño húmedo caliente

y se deja sobre el pecho hasta que se enfríe para aliviar la congestión.


Aceite esencial de HisopoExpectorante, alivia los problemas bronquiales y el asma.

También tiene propiedades cicatrizantes, diuréticas y digestivas. Regula la tensión nerviosa por lo que se usa también para aliviar

problemas de ansiedad o histeria.

Su uso más común es para mejorar los problemas respiratorios en casos de congestión, catarro o bronquitis, por lo que se administra igual que el

aceite de eucalipto, es decir, se suelen realizar masajes directamente sobre el pecho y cuello con 2 ó 3 gotas de esencia o diluyéndolas en

otro aceite base, como por ejemplo el de coco.

También se realizan vahos, vertiendo 3 ó 4 gotas en 1 litro de agua caliente o se pueden verter unas gotas en un paño húmedo caliente y se

deja sobre el pecho hasta que se enfríe para aliviar la congestión. En caso de embarazo, hipertensión o epilepsia se recomienda

consultar con el especialista o médico habitual.


Aceite esencial de LavandaSu olor es muy agradable y se suele utilizar para aromatizar cremas,

jabones, la ropa o directamente como perfume sobre la piel o el cabello.

Su uso terapéutico principal está basado en su efecto relajante y calmante del sistema nervioso, por lo que está indicado en casos de

tensión, insomnio, estrés, depresión o ansiedad.

También tiene propiedades antiespasmódicas, antisépticas y diuréticas. No es tóxico y no irrita la piel, pero se suele utilizar mezclado en aceite

base de masaje, por ejemplo en aceite de almendras dulces, para masajear toda la piel después de la ducha o antes de dormir, y así relajar

cuerpo y mente para descansar mejor. Se pueden utilizar hasta 10 ó 15 gotas disueltas en 2 ó 3 cucharadas de

aceite base o leche corporal (sin aroma) para masajear todo el cuerpo.


Aceite esencial de LimónContiene gran cantidad de vitaminas A, B y C, por lo que es muy

nutritivo además de un cítrico astringente natural muy potente.

Se utiliza para la piel con exceso de grasa y brillo o en casos de acné, herpes, úlceras bucales, picaduras o uñas quebradizas.

También para casos de sudoración excesiva y mal olor. Es desinfectante y bactericida.

No se debe utilizar sobre la piel si se va a estar expuesto al sol.

Se puede aplicar directamente sobre las uñas o algún forúnculo, herpes o zona infectada, pero si se quiere aplicar sobre zonas

amplias para casos de sudoración excesiva o mal olor, se recomienda diluir en alcohol o agua (5 ó 6 gotas de esencia

por un vaso de agua o 3 cucharadas de alcohol).


Aceite esencial de MandarinaEs la esencia infantil por excelencia.

Su olor es relajante y estimulante a la vez, no es tóxico y tiene un aroma muy agradable, fresco y dulce.

Es ideal para mezclar 4 ó 5 gotas con la dosis común (la dosis que se utilice normalmente para masajear el cuerpo del niño o bebé) de leche

corporal o aceite de almendras dulces para aplicar masajes a los bebés o niños pequeños.

También se suele utilizar para aromatizar la ropita infantil y las habitaciones.

Tiene propiedades relajantes, que ayudan a reducir el nerviosismo y a conciliar el sueño.


Aceite esencial de MentaSu mentol descongestiona las vías respiratorias por lo que es ideal para

casos de gripe o bronquitis. El mentol también produce un frescor inmediato, bajando la temperatura del cuerpo obteniendo así un efecto

tónico que mejora la circulación de la sangre, por eso es genial para aliviar las piernas cansadas o inflamadas y el dolor de cabeza nervioso.

Para aliviar la tos o descongestionar las vías respiratorias se pueden dar unas friegas directamente sobre el pecho con 2 ó 3 gotas, o bien diluyéndolas en otro

aceite base (almendras dulces por ejemplo). Para el dolor de cabeza, se administra directamente sobre la piel, aplicando una

gota en la sien y otra gota en cada muñeca por su parte interna. También es relajante intestinal y alivia los gases.

Aunque se suele utilizar en forma de friegas sobre la piel, también se puede ingerir para sus usos internos, diluyendo 3 ó 4 de gotas de menta en una infusión

de manzanilla templada, por ejemplo.


Aceite esencial de RomeroTiene una importante acción tonificante, relaja y alivia la carga muscular y mejora la

circulación, por eso se utiliza comúnmente para masajear las piernas cansadas o el cuerpo después del ejercicio. También está indicado en problemas degenerativos, reuma o artrosis.

Por su elevado contenido en hierro previene la alopecia y regula el exceso de grasa en el cuero cabelludo. Al ser tonificante y calmante, alivia los golpes de tos nerviosa

y los espasmos intestinales.

En Reino Unido el romero se considera una planta ideal para estados carenciales o depresivos, ya que muchos estudios han confirmado sus efectos positivos para mejorar el tono muscular y el ánimo en

momentos de debilidad general. Siempre se ha considerado una planta mágica por sus múltiples propieda-des, incluso en la Edad Media se consideraba que el aceite de romero tenía la cualidad de ahuyentar los

malos espíritus, a la vez que lo utilizaban para purificar el aire en salas donde se trataban a los enfermos.

Se puede ingerir diluido, 2 ó 3 gotas en una infusión digestiva o en una cucharada de miel. Para su aplicación externa se suele diluir en alcohol o en aceite base de masaje, como el de coco,

hasta 8 ó 10 gotas de esencia por 3 ó 4 cucharadas de aceite base. Para aplicar sobre el cuero cabelludo se puede hacer directamente o diluido en alcohol

o en un champú natural neutro. En caso de embarazo, hipertensión o epilepsia se recomienda consultar con el

especialista o médico habitual.


Aceite esencial de Salvia OfficinalisLa salvia ha sido una planta muy apreciada en diferentes épocas y culturas,

incluso se ha llegado a considerar una planta sagrada.

Constituye uno de los mejores bactericidas naturales. Desinfecta y ayuda a cicatrizar. Comúnmente se utiliza sobre todo para curar inflamaciones en la boca, o lengua, como

yagas, y para los desórdenes o dolores menstruales y digestivos. También actúa como relajante muscular.

No debe ingerirse si no es bajo supervisión de un profesional.

Su aceite esencial se suele administrar diluido, 4 ó 5 gotas en un vaso de agua para enjuagues bucales, o directamente una pequeña gota en una yaga o infección.

Para lo demás se utiliza externamente, masajeando la zona dolorida o con problemas, 3 ó 4 gotas directamente sobre la piel o mezcladas en 2 ó 3 cucharadas

de aceite base como el de coco, germen de trigo o almendras.


Aceite esencial de VetiverTiene un aroma penetrante e intenso que recuerda a la madera y

emocionamlmente provoca que nos sintamos más arraigados a la tierra y seguros de nosotros mismos.

Tiene propiedades antifúngicas y antisépticas por lo que se utiliza para tratar pieles grasas o con acné y para tratar infecciones por hongos.

También posee propiedades relajantes, tanto es así que en la India se conoce como “aceite de la tranquilidad”.

Se suele utilizar en casos de depresión porque ayuda a conseguir la calma y a mejorar el ánimo.

Se administra sobre la piel para realizar masajes relajantes 4 ó 5 gotas directamente o diluidas en aceite base para conseguir más cantidad. Para tratar forúnculos, picaduras

o zonas infectadas por hongos, se puede administrar un par de gotas directamente.

Por su especial aroma es un aceite tradicionalmente masculino y muy apreciado por las marcas cosméticas para hombres, tanto es así que un perfume

muy comercial lleva su nombre.


Aceite esencial de Ylang ylangSu aroma es muy dulce y agradable además de ser reconocido

terapeuticamente por su efecto sedante y a la vez tónico y estimulante. Por este motivo es el aceite esencial más recomendado y utilizado en

casos de ansiedad, tristeza o depresión.

Su aroma es muy estimulante y ayuda a subir el ánimo a la vez que relaja. Tiene efectos afrodisíacos y también ayuda a bajar la tensión.

Tradicionalmente en culturas asiáticas se ha utilizado para bajar la fiebre y tratar las infecciones, así como para aliviar las picaduras de los insectos, pero su uso más

frecuente hoy por hoy es con fines afrodisíacos y para combatir la tristeza.

Se puede ingerir mezclando de 2 a 4 gotas en un zumo o una infusión para aliviar las molestias de la cistitis, bajar la fiebre o combatir alguna infección interna.

Para su uso externo se administra sobre la piel para realizar masajes relajantes 4 ó 5 gotas directamente o diluidas en aceite base para conseguir más

cantidad o para suavizar su aroma.


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Este dosier es un ejemplar gratuito de distribución limitada y escogida por elherbolario.com, por lo que sus contenidos no podrán ser distribuídos previo pago ni podrán ser reproducidos en otras publicaciones sin permiso expreso de su autor.



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