bbltk-m.a.o. e-005 vol iv fas 41 - lo inexplicado - ¿se puede fabricar un ovni - vicufo2

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  • VCL IVFAS.41

  • PI|\IIX?UCADOEL MUNDO DE LO EXTB,AO,INSOLITO Y MISTERIOSO

    itorial Delta, S.A,-Barcelonay comercializado en exclusiva PorDistribuidora Olimpia, S.A. - Barcelona

    Vol. lV - Fasc. 41

    Director: Jos Mas GodaYolJefe de Redaccin: Gerardo RomeroCoordinacineditorial: GloriaGutirrez

    Redactores y colaboradores:Prof. A. J. Ellison, Dr. J. Allen Hynek, Brian lnglis, Colin Wilson,Beatriz Podest. Jos Lorman.

    Editorial Manager: Clare BYattAsesor para la edicin espaola: Julio Peradejordi

    Realizacin grfica:Luis F. Balaguer, con la ayuda de C. Esteruelas

    llustracin: Orbis. Atlas y agenciasBedaccin y administracin:

    Provenza, 290, entl.o 1.u, Barcelona-8Tels.: (93) 21 5 1 0 32-215 10 50 - Tlex: 97848 EDLTE

    LO INEXPLICADO, EL MUNDO DE LO EXTRAO, INSLITO YMISTERIOSO se publica en forma de 120 fascculos de apari-cin semanal, encuadernables en diez volmenes. Cada fasccu-lo consta de 20 pginas interiores y sus correspondientes cubier-tas. Con el fascculo que completa cada uno de los diez volme-nes de que se compone la obra, se pondrn a la venta las tapaspara su encuadernacin. Adems, coleccionando la tercera ycuarta pginas de cubierta, se obtendr un interesante dossiersobre los MAESTROS DE LO INSOLITO.

    Para la edicin inglesa:Editorial Director:Editor:

    Brian lnnesPeter Brookesrnith

    El editor se reserva el derecho de modificar el precio de venta delfascculo en el transcurso de la obra, si las circunstancias delmercado as Io exigieran.

    Los fascculos atrasados podrn ser adquiridos, sin incrementoalguno en el precio de venta, en todos los quioscos y libreras.

    (0 1980 Orbis Publishing Ltd. LondonO 1981 Editorial Delta. S.A. BarcelonalsBN : 84-85822-35-8 (tomo) 84-85822-1 5-3

    (obra complela) 84-85822- 1 6-1 (f ascculo)Depsito legal: B-1263/1 982Fotocomposicin:

    Tecfa, S.A. Pedro lV, 160 - Barcelona-Slmpresin:

    Cayfosa, Santa Perpdtua de Mogoda (Barcelona) 23826lmpreso en Espaa - Printed in Spain junio 1982Comercializa en exclusiva para Argentina, Chile, Uruguay, Per,

    Bolivia y Paraguay: Viscontea lnternacional,S.A. Buenos Aires.

    Distribuye para Espaa: Marco lbrica, Distribucin de Edicio-nes, S.A., Carretera de lrn, km 13,350. Va-riante de Fuencarral, Madrid-34.

    Distribuye para Argentina: Viscontea Distribuidora, S.C.A. LaRioja 1134/56, Buenos Aires,

    Distribuye para Colombia: Distribuidora Meridiano, S.A. Carrera21, n.o 35-53, Bogot.

    Distribuye para Mxico: Distribuidora lntermex, S.A. Calzada Va-llejo n.o 1020, Mxico 16. D.F.

    Distribuye para Venezuela: Distribuidora Continental, S.A. Fe-rrenqun a Cruz de Candelaria, 178. Caracas ytodas sus sucursales en el interior del pas.

    fascculoH()MBRES.L()B()En todo el mundo, en todas las pocas, seha hablado de hombres que se conviertenen lobos. Puede un hecho tan universalser tan slo una leyenda?

    MTERI()S DE LA NATURALEZAPor qu algunos animales recorren en grupo distanciasinireibles y afrontan terribles peligros?

    MISTERI()S DE EGIPT()La figura geomtrica de la pirmide

    parece poseer unos poderes ocultos,Muchos han intentado descubrirlos y

    servirse de ellos.

    OVNIS TERRESTRESLos nazis ensayaron, poco antes del final de la segunda

    guerra mundial, un tipo de ingenio areo cuyo parecido conun OVNI resulta inquietante...

    KASPAR HAUSERCuando estaba a punto de resolverse el enigma

    de Kaspar Hauser, ste fue misteriosamenleasesinado. Porqu?

    :: t a]e-2 Sdme

  • Durante ms de 40 siglos, las pirmides que dominan elNilo han despertado la admiracin de muchas personas;pero, cmo y por qu se construyeron estosenigmticos monumentos?LAS rIRAMIDEs constituyen el verdadero smbo-1o de Egipto, cuya antigua civilizacin fueasombrosamente brillante y compleja. Frenteal solitario desierto se alzan estas majestuosasconstrucciones, cuyas formas, aun siendo enapariencia fciles de captar, son sin embargo Muchos egiptlogos modernosambivalentes, confusas y rnisteriosas. coinciden en afirmar que el

    Uno de los rasgos ms importantes de las mtodo ms factible que pudieronpirmides es su enorme tamao. Vista en un utilizarlosegipciosparasubirlosdiagrama o en una maqueta, la pirmide pare- bloques de piedra de la pirmidece sencilla: cuatro caras que se unen en un fue la construccin de una rampapunto, y una serie de pasadizos interiores que deadobequeascendaenes.piralconducen a una cmara. Sin embargo, si nos entornoal monumento. Estosituamos muy cerca de la pirmide y dirigimos dara como resultado unanuestra mirada hacia su punto ms alto, nos pirmideescalonadaparecidaadaremos cuenta de que ya no existen para no- la de Zoser (ver pgina siguiente);sotros ni caras ni cualquier otra parte de la despus, para completar elpirmide: parece como si medio mundo fuera trabajo,setransportaranbloquespiedra y la otra mitad cielo. Y si nos introduci- de piedra a la parte superior de lamos dentro de la pirmide e intentamos subir rampa y se iran colocando apor ei1a, los estrechos y hmedos pasadizos medidaqueseibadesmontandonos desorientarn en seguida. sta (Angus McBride).

    Las pirmides guardan srs propii.ecretos.Y. aunque nosotros podamos conjeiurar acer-ca de las razones por las cuales. los egipcioslevantaron Ias pirmides. y especufr acerca delas tcnicas de construccin que utilizaron, nopodremos encontrar unas respuestas concre-tas, ya que hasta ahora no se ha descubiertoninguna fuente del antiguo Egipto que lo acla-re. La nica explicacin real se encuentra enias mismas pirmides.

    Durante la Tercera Dinasta, alrededor delao 2650 a. C. , se construy la primera pirmi-de, la pirmide escalonada del rey Zoser. Di-cha pirmide domina el horizonte de Saqqra.

    La pirmide de Zoser empez con la cons-truccin de una tumba de piedra slida de unsolo piso, con cmara sepulcral excavada hastaunos 30 metros de profundidad. Entonces losconstructores se dispusieron a ampliar dichatumba, pero parece ser que antes de hacerlotuvieron una idea que inici la era de las pir-mides: aadieron tres capas ms para formaruna pirmide de cuatro escalones. Es posibleque esta pirmide escalonada representara laescalera que conducira al difunto rey hacia lasestrellas. Las posteriores versiones no escalo-nadas pueden haber sido creadas a imitacinde la piedra benben, emblema del dios-Sol,

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  • Misterios de Egipto

    que, colocada en 1o alto de una columna, pue-de haber dado pie tambin al obelisco.

    Las construcciones que se encuentran alre-dedor de la pirmide tambin plantean proble-mas de interpretacin. Eran aquellos edifi-cios y explanadas meros espacios ceremonialesutilizados mientras viva Zoser? Eran el lugarque ocupaban los sacerdotes y los peregrinosque le rendan culto despus de su mqe-rt9.?fBran qtiz el lugar donde el espritu del {i-funto rey poda obrar su magia? Las pirmidesposteriois fueron completadas con unas edifi-taciones bastante regulares que abarcaban lapropia pirmide, un templo mortuorio

    -o lq-gar donde se depositaban ofrendas- construi-o frente ala cara que miraba hacia el este, yun camino que 1o conectaba con una edifica-cin situada al borde de la llanura cultivadaque bordeaba el Nilo. Los sucesores de Zoserbandonaron en dos o tres ocasiones la cons-truccin de pirmides escalonadas, antes dedecidirse por primera vez a intentar construiruna verdadera pirmide con caras lisas; estosucedi en Meidum, lugar situado a unos 65kilmetros al sur de El Cairo. La pirmide deMeidum se halla hoy en ruinas. Su eje se elevaaproximadamente a unos 75 metros, y tienecomo base un montn de escombros que unavez form parte de la misma pirmide. Su for-

    Abajo: "Situmonos muy cerca

    de una prmide y elevemosnuestra mirada hacia el Puntoms alto. Entonces nos Parecerque la mitad del mundo es Piedray la otra mtad cielo." Estafotograf a de la Gran Pirmidemuestra claramente cmoestaban dispuestas las Piedras enuno de los ngulos (fotoHumphrey Evans).

    ma inicial era la de una pirmide escalonadacuyas caras fueron alisadas de modo que for-maran una pendiente continua. Desgraciada-mente, la base ampliada descansaba sobre are-na envez de sobre roca slida, y la pirmide sederrumb, posiblemente antes de su termi-nacin.

    Sin embargo. los constructores supieronaprender de esta experiencia. Snefru, el pri-mer rey de la Cuarta Dinasta (que dur apro-ximadamente desde el ao 2500 hasta el 2400a.C.), hizo construir dos slidas pirmides enDahur, al sur de Saqqra. Ms tarde se cons-truyeron las tres pirmides de Gizeh: la GranPirmide de Keops, cuyo nombre egipcio eraJnum-Jufui; su compaera, tambin de grantamao, construida por Kefrn o Jafra; y lapirmide ms pequea de Mikerinos o Men-kaur. La Gran Pirmide es nica en su estilo,ya que tiene pasadizo y aposentos en la partelta de su estructura. Tanto en sentido literalcomo figurado, la Gran Pirmide es tambin elpunto ms alto al que se ha llegado en la cons-iruccin de estos monumentos. En un princi-pio se elevaba a una altura de ms de 146 me-tros, sobre una base cuyos lados medan algomenos de 231 metros. Sin embargo, las piedraslisas del exterior sirvieron de material de cons-truccin para muchas edificaciones medievales

    de El Cairo y, en consecuencia, su altura ac-tual es de aproximadamente unos 137 metros'

    Los faraones de la Quinta y Sexta Dinastasconstruyeron pirmides en Saqqra y en.AbuSir. Inciuso e las que estaban mejor edifica-das se poda apreciar que las piedras del inte-rior ha6an sidb trabajadas toscamente. En lasque se construyeron posteriormente, el eje es-tba constituido por pequeas piedras unidascon barro del Nil. Las generaciones posterio-res extrajeron el revestimiento de pedracalizay, como consecuencia, el eje se derrumb. Ha-ia finales de la Sexta Dinasta, alrededor delao 2180 a.C., Egipto se haba dividido enprovincias. y la moda de crear enormes monu-*.ntos desapareci. Durante las dinastas xt yxu Egipto se unific una vez ms, y durante un

    Arriba: la primera pirmide real,erigida por el rey Zoser, que seconstruy en Saqqra alrededordel ao 2650 a.C. (foto SoniaHalliday).

    A la izquierda: a lo largo del Nilose han contabilizado alrededor de40 pirmides imPortantes. Sinembargo, es especialmentedestacable el lugar donde estsituada la Gran Pirmide.Si trazamos un cuarto de crculotomndola como centro, veremosque circunscribe con granprecisin el delta del Nilo (ColinEdwards).

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  • perodo que dur desde el ao 2000 hasta 1750a.C., los reyes volvieron a levantar pirmides.Sus alturas nunca alcanzaron la mitad de laaltura de la Gran Pirmide, y su construccinsola ser deficiente. stas fueron las ltimaspirmides que se construyeron. Los reyes pos-teriores edificaron grandes templos para ponerde manifiesto su enorme podero mientras es-tabn vivos, y tumbas ocultas que les mantu-vieran a salvo cuando estuvieran muertos.

    Gizeh y la Gran Pirmide de Keops contie-nen en s mismas todos los misterios relaciona-dos con la construccin de las pirmides. Paraempezar, para qu se construy la Gran Pir-mide? Una respuesta bastante lgica sera lade que podra haber sido una tumba (de hechohay un sarcfago en lo que hoy llamamos laCmara Real). Sin embargo, no existe ningnindicio de que hubiera tenido lugar all ningnrito funerario. El ltimo pasadizo antes de 11e-gar a la Cmara Real lo constituye la GranGalera, que mide 47,5 m de largo por 8,5 dealto v 2 m de ancho. Dicha galera sube endireccin hacia el techo con una inclinacinque forma un ngulo de 26".

    En segundo lugar, por qu se construy laGran Pirmide en aquel lugar? Todas las tum-L,as reales

    -incluidas ias pirmides- eran edi-ficadas sobre la pendiente del Valle del Nilo,

    En la parte inferior: el grupo depirmides de Gizeh, con la GranPirmide al fondo (foto ZEFA).

    Abajo: un esquemarepresentativo de la GranPirmide trazado en 1864 porCharles Piazzi Smyth, astrnomoreal de Escocia y profesor deastronoma prctica de laUniversidad de Edimburgo.Smyth crea que la entradaestaba alineada con la posicinde la estrella alfa de laconstelacin del Dragn en el ao2170 a.C. En el diagrama puedentambin verse otros aspectos delanlisis que hizo Smyth de lageometra de la pirmide.

    Misterios de Egipto

    de la Tierra. El profesor Stecchini continadiciendo que, trabajando a una mayor escala,los egipcios aplicaron estos conocimientoscuando disearon su propio pas, colocandofronteras, ciudades y templos en puntos signi-ficativos en cuanto a la latitud y a la longitud, ydejando entre ellos distancias que se medanen nmeros redondos. As pues, Egipto enconjunto meda exactamente 1 500 000 cbitosreales de largo (un cbito era aproximadamen-te igual a la longitud del antebrazo de unhombre).

    La Gran Pirmide contiene otros detallesque merecen ser considerados. Stecchini, aligual que muchos otros, afirma que la relacinentre su altura y su base da el valor de pl, quees el resultado de la divisin de la longitud dela circunferencia por su dimetro. Asimismo,se dice que la pirmide contiene el nmerophi, (llamado tambin nmero areo o nmerode oro) que es la proporcin de una lnea divi-dida de forma tal, que la relacin entre la partems corta y la ms larga sea igual a la relacinde la parte ms larga con el conjunto. Siglosms tarde, el nmero de oro desempe unimportante papel en la arquitectura clsicagriega, ya que se pens que confera a los edifi-cios unas proporciones especialmente armo-niosas. En cualquier caso, queda tambin lacuestin de por qu las otras pirmides seconstruyeron con inclinaciones diferentes.

    Se ha calculado que la Gran Pirmide estcompuesta de 2 500 000 bloques de piedra ca-liza cuyo tamao medio es de 1,2 por 0,75 m, ycuyo peso es de 2,5 toneladas. Los bloquesms grandes llegan a pesar 15 toneladas. LaGran Pirmide contiene en total unos2 700 000 metros cbicos de piedra y pesaaproximadamente unos 6 millones de tonela-das (ms o menos el doble del peso del EmpireState Building de Nueva York).

    James Humphrey Cole fue el que realiz las

    . .: - -: ,rquello era el horizonte occidental.I -.:. \I:nfrs las siluetas de las pirmides se

    ,;:i:-:r:r.r arrntra la puesta de sol, y era con el> :

    - -. :- que estaba vinculado el destino de: :>r.r.i-! de los reyes fallecidos.! -

    = ::.:qo. ltimamente algunos tericos

    .: :-_.:r. j.r que las razones eran otras. En el^. :: ?::;r Tompkins titulado Secrets of the."-..:: :.-.:,.'.:J tLos secretos de la Gran Pir-'' -.

    . ": :::sor Lir.io Catullo Stecchini expli-- r :

    -: : :ill-iuoS egipcios tenan un conoci--- :.-' :

    -.-:-- ns avanzado de la geografa y-: : - ,:.. .:gr de io que se ha oensado siem-

    ,^ ^,,^ 1^ 'ri---- ^--jemplo. que la Tierra era: ::ll:i.:Jr alemplo. qUe la llerra era-

    li. .. .-:isisureron calcular las distancias

    791

  • Misterios de Egipto

    medidas ms exactas de la Gran Pirmide enL925, consiguiendo adems identificar la posi-cin original de las esquinas (aunque los blo-ques hayan desaparecido) y medir los ladoscon un margen de error inferior a 3,8 centme-tros. Public las siguientes dimensiones de ca-da una de las caras de la pirmide: la del norte,230,253 m; la del sur,230,454 m; la del este,230,391. m; y la del oeste, 230,357 m. Estos cl-culos hacan que la diferencia entre la cara mslarga y la ms corta fuera de slo 20,1 cm. Coledescubri que la cara (

  • A la derecha: este dibujo sirvecomo prueba documental paraapoyar la teora de que laspiedras para construir lasp rmides eran transportadassobre trineos de madera. Aqupodemos ver un grupo deaproximadamente 1 50 hombrestirando de una estatua gigante,que representa una figurasentada. Obsrvese, enpartcular, la persona que controlael tiempo, de pie sobre la rodillade la figura, y el hombre quevierte con un jarro una especie delquido lubricante por delante delos patines del trineo.

    I :aro: como alternativa a la teora: -: :ef iende la idea de una

    ':^.:a en espiral que rodeaba la: ':- :c en construccin, se ha:,:a' :a lue as piedras ser-: :- ::'una sola rampa, la, -2- .'2:'sanchaday reforzada

    = - =.

    .z::e iba a canzando- 1. :'1-:_- Srroio Briggs).

    decir, un balancn resistente apoyado sobreuna columna de aproximadamente dos metrosde alto. Colocando un bloque de piedra en e1brazo ms corto del balancn, que podra teneraproximadamente un metro de 1argo, y colgan-do unas piedras de contrapeso en el otro bra-zo, que podan tener hasta unos 4,5 m de lar-go, los trabajadores podran haber levantadola piedra por el aire y colocarla en un trineo oen cualquier otro soporte. El ingeniero navalnoruego Olaf Tellefsen haba apoyado la ver-sin del brazo en equilibrio, pero despus sugi-ri que grupos de 25 o 30 hombres podranhaber arrastrado los pesados trineos por unasgradas lubricadas, encajadas en la pendientede la pirmide.

    Muchas personas han apuntado que losegipcios arrastraron los bloques de piedra a lolargo de unas rampas hechas de adobe; y, dehecho, en una pintura de una tumba apareceuna rampa utilizada para erigir las columnasde los templos. Adems, se han encontradorestos de rampas en dos lugares donde se cons-truyeron pirmides. Se ha descubierto un papi-ro en el cual hay unos clculos anotados paradeterminar ei nmero de ladrillos necesariospara construir una rampa de 366 m de largo,27,5 m de ancho y 30,5 m de alto. Sin embar-

    go, existe una gran diferencia entre una mo-desta rampa de este tamao y otra muchsimoms larga, que sera la que se habra necesita-do para construir la Gran Pirmide. Algunaspersonas creen que los egipcios contaban conrampas auxiliares que daban vueltas alrededorde la pirmide, pero este sistema presenta elinconveniente de que dichas rampas propor-cionaran una base poco segura.

    Herodoto afirm que los egipcios utilizabanmquinas que levantaban los bloques de pie-dra poco a poco. Y, sin embargo, historiadoresrabes posteriores aseguraron a sus lectoresque los antiguos egipcios colocaban talismanesmgicos encima de las piedras, que entoncespodan transportarse fcilmente de un lado aotro. Por otro lado, sir Flinders Petrie sugirique las mquinas mencionadas por Herodotoeran tan rudimentarias que han desaparecidototalmente. Petrie pens que los egipcios po-dran haber utilizado en sus trabajos unos ba-lancines en forma de trineo con patines curvos.Los trabajadores colocaran un bloque de pie-dra en un balancn y entonces empezaran abalancearlo de un lado a otro. Despus, colo-caran unas tablas finas debajo de cada extre-mo alternativamente, a medida que empuja-ban la piedra para que continuara balancen-dose. De esta forma, poco a poco ira subien-do. John Fitchen, profesor de Bellas Artes dela Universidad de Colgate (Nueva York) per-feccion esta idea sugiriendo que los construc-tores convirtieron adrede parte de la cara de lapirmide inacabada en una escalera de piedragigante. Los grupos de trabaiadores podranentonces haber subido peldao a peldao.

    Pese a todas las teoras expuestas, lamenta-blemente hay que reconocer que, puesto queno se ha localizado en ninguna fuente egipciauna explicacin de cmo fueron construidaslas pirmides, el mtodo utilizado puede muybien convertirse en un secreto que ellas mis-mas estn destinadas a guardar.

    En la pdgina 813 se habla de los poderes msfi-cos y curativos de las pirmides egipcias.

    Misterios de Egipto

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    193

  • Los tneles det tienrpoeran una mezcla de caonazos, granadas,bombarderos en picado, lanchas de desembar-co y gritos humanosr. Agnes declar tambinque todos los sonidos parecan llegar desdemuy lejos, como en una transmisin por radiodesde Estados Unidos, por ejemplo, en incon-fundibles ondas de sonido".

    Mientras escuchaban los ruidos. las dosmujeres llegaron gradualmente a la conclusinde que el origen de stos deba ser paranor-mal. Para Dorothy 1as experiencias psquicasno eran nuevas; haba tenido varias anterior-mente, aunque slo una haba sido slo auditi-va. como sta. Haba ocurrido cinco das an-tes. Dorothy haba despertado a causa de unruido similar, pero ms dbil. 41 final-dijo- me pareci or hombres cantando.Los sonidos se acallaron cuando cant el gallo,y se volvi a dormir. Pero Agnes no haba odonada, y no despert.

    Ms tarde, los crticos que no aceptaron laexperiencia de las dos mujeres como paranor-mal llamaron la atencin sobre un punto. Do-rothy y Agnes tenan a su disposicin una guaque contena un breve relato de la desastrosaincursin sobre Dieppe que haban realizadolas fuerzas aliadas el 19 de agosto de 1942.Ambas mujeres admitieron ante los investiga-dores que conocan la existencia del relato dela gua, pero no 1o haban ledo antes de aque-lla noche. Los crticos sealaron que haca ms

    Qu eran los inquietantes ruidos que escucharon dosinglesas en Puys en 1951? Seran, como creyeron ellas,un replay de la desastrosa ncursin sobre Dieppedurante la segunda guerra mundal?AL coMENZAR EL sIGLo, dos damas inglesas, las Arriba: el Belvedere, uno de losseoritas Jourdain y Moberley, se vieron en- edificiosornamentalesde losvueltas en una aventura en el Pequeo Tria- terrenos del Pequeo Triann, ennn, en Versalles, donde creyeron sufrir una Versalles, construido en tiempoprolongada alucinacin sobre la vida en el pa- de Mara Antonieta. Los crticoslacete en la poca de su apogeo. Fue un caso del presuntolapsustemporalpoco corriente y, sin embargo, exactamente experimentadoporlasseoritasmedio siglo despus, otra pareja de inglesas, a Moberley y Jourdain hanlas que llamaremos Dorothy Norton y Agnes supuesto que, de hecho, ste eraNorton para guardar su anonimato, experi- el kiosco que describan. Peromentaron una alucinacin similar. cuando volvi a Versalles en

    Ellas tambin estaban de vacaciones en 1902, la seorita JourdainFrancia. en Puys, un pueblecito cercano a descartestateora.ObservelDieppe. A las 5 y 20 de la madrugada del 5 de Belvdre, pero insisti en que noagosto de 1951, Agnes se despert y pregunt se trataba del mismo kiosco (fotoa Dorothy: Oyes ese ruido?, Dorothy 1o RobertHuntLibrary).oa; de hecho 1o haba estado escuchando des-de haca unos veinte minutos, segn el rela-to que escribi despus. Las dos mujeres sequedaron despiertas y escucharon los extraor-dinarios ruidos que parecan provenir de laplaya. Dorothy los describi despus como"un rugido que disminua y aumentaba". Fi-nalmente, encendieron la luz y salieron al bal-cn, pero no pudieron ver la costa ni descubrirla fuente de los sonidos.

    Los ruidos eran cada vez ms fuertes. Lasdos mujeres pudieron distinguir diferentes ti-pos. Dorothy identific gritos, caonazos ybombarderos en picado", adems de un bom-bardeo ocasional: segn Agnes, los sonidos

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  • de una semana que estaban en Puys cuandoocurri su experiencia; era raro que no hubie-sen sentido curiosidad por la incursin, cuyoescenario estaba muy cerca de su hotel.

    Mientras estaban en el balcn, a 1o largo detres horas, ambas tomaron nota detallada delos momentos en que escuchaban diferentestipos de sonidos. Al da siguiente escribieronrelatos separados. en los que aparecen peque-as varianles: por ejemplo: aunque ambas di-cen que la primera serie de ruidos ces a las4,50,-Agnes afirm que la segunda serie habaempezao a las 5,07,. mientras Dorothy dijoqu fue a las 5.05. Cada una tena su proqlor-eloj , pero admitieron que el de Agnes solaser mi exacto, ya que el de Dorothy atrasabaalgo.

    Existe un hecho que puede explicar peque-as discrepancias como sta. Durante la se-

    Saltos en eltiempo

    gunda guerra mundial, Agnes haba sidomiembro del Women's Royal Naval Service(WRNS). Como resultado de su entrenamien-to, pudo haber tenido un mayor conocimientode las tcnicas de observacin y registro que sucompaera.

    Los investigadores G.W. Lambert y K. Gay,de la Society for Psychical Research (SPR),establecieron un cuadro detallado en el quecomparaban el relato y las observaciones delas dos mujeres con lo sucedido durante la in-cursin sobre Dieppe. Los acontecimientos del19 de agosto de 1942 comenzaron a las 3,47 dela madrugada. La hora cero para el desembar-co de cairos de combate en Puys y Bernevaltendra que haber sido a las 4,50, pero se pro-dujo una demora. La primera ola de barcazaslleg a Puys a las 5,07, y a las 5,12 los destruc-tores haban empezado a bombardear Dieppe.Lafierza principal desembarc a las 5,20. Losedificios de la costa ya estaban siendo atacadospor los Hurricane de la RAF, que llegaron aias 5,15. A las 5,40 termin el bombardeo.Exactamente 10 minutos despus llegaron 48aviones ms de la RAF y se unieron a labatalla.

    Estos detalles cronolgicos fueron tomadospor Lambert y Gay de un relato de la incursintotalmente desconocido por las dos mujeres.

    "Un ruido indescriptibleEn septiembre de 1968, el seor R.A. Eadesinform a la SPR de unas vacaciones que habapasado en Francia con su familia, a fines degosto de 1951. En el curso de estas vacacio-ns, una noche que se hallaban acampados aleste de Dieppe fueron despertados por unruido indescriptible, que continu durantevarias horas. La familia Eades discuti lo queoa y compar el ruido con un zoolgico enlo-quecidor, una feria, *el recreo de una escue-la amplificado y distante. Sin embargo. esta-ban convencidos de que no se trataba de nin-guna de estas cosas, y al da siguiente se ente-raron en la ciudad de que una draga haba es-tado trabajando en la baha. La mquina se-gua all, ahora inactiva.

    Despus de una prolongada corresponden-cia acrca del caso, ste fue reexaminado porun investigador independiente en 1969. Revistodos los detalles con cuidado; puso en dudaalgunos de los principales puntos del relato, ypuso de relieve otros, como por ejemplo lacoincidencia con el aniversario del salto tem-poral de Versalles. Todo ello evidenci que lahistoria de la incursin a Dieppe, tal como lacontaron Agnes y Dorothy, contiene algunasinexactitudes. Pero lo mismo sucedi con laversin Moberley-Jourdain de Versalles.

    Las experiencias paranormales extendidascasi nunca coinciden totalmente con los hechosconocidos. Esto puede suceder porque mien-tras est presente un elemento paranormal

    -osea, que se recibe informacin a travs defuentes extrasensoriales- las fuentes sensoria-les tambin estn transmitiendo informacin.,nofmalr.

    Pero la cuestin sigue en pie: las dos expe-

    A la izquierda: imgenes de laincursin que las fuerzas aliadasrealizaron sobre DiepPe durantela segunda guerra mundial, el l9de agosto de 1942. La incursin,que no alcanz sus objetivosmlitares, caus grandesdestrozos en la costa deNormanda (arriba, muestra delestado en que qued el balneariode Dieppe). Casi 50 aos justosdespus de los hechos deVersalles, Agnes Y DorothyNorton dijeron que susvacaciones en Francia tambinfueron interrumPidas Por elpasado, esta vez Por los

    "inconfundibles, ruidos de laincursin aliada. Como suexperiencia fue exclusivamenteauditiva, se proPusieron variasexplicaciones naturales. Peronadie puede estar seguro de quelas Norton no escucharan losruidos de una batalla que habatenido lugar nueve aos antes(fotos Robert Hunt LibrarY).

    195

  • Saltos en eltiempo

    riencias, la de Moberley y Jourdain y la de lasNorton, fueron genuinamente paranormales?Lo cierto es que, a pesar de sus puntos comu-nes, ambas experiencias tuvieron caractersti-cas diferentes. La de Moberley y Jourdain fueauditiva y visual, mientras la de las Norton fueslo auditiva. Adems, en Versalles las dosmujeres no slo hablaron a las personas quevieron, sino que recibieron respuestas (del ca-ballero que les indic la casa, por ejemplo, rdel lacayo que se ofreci a ensearles el cami-no). Agnes y Dorothy Norton, en cambio,eran simplemente un pblico; no desempea-ron ningn papel activo en el drama invisibleque se representaba ms all de su balcn.

    Moberley y Jourdain no parecan tener unaidea clara de 1o que encontraran en el Peque-o Triann. Posean un conocimiento generalde la historia de Francia en el siglo xvur y de lavida de Mara Antonieta en Versalles, pero suvisita al castillo de la reina fue sugerida princi-palmente por la posibilidad de dar un agrada-ble paseo por los jardines en una tarde tibia.

    En cuanto se acercaron al Pequeo Triann,la excursin perdi todo el encanto. Las dosmujeres se sintieron deprimidas y desorienta-das. Tuvieron dificultades para encontrar elcamino por los bosques y los senderos. Lo ex-trao de la gente que encontraron

    -el hombredel kiosco. los corredores invisibles. el caballe-ro, el lacayo, la dama con el fich- las inquie-taron. Su reiato de los acontecimientos de esatarde, aunque fue escrito tres meses despus,

    Vsta de la costa de Dieppe (en laregin de Normanda), puerto queconstituy el principal blanco delataque aliado del 1 9 de agosto de1942,ta|como aparece en laactualidad (foto Oficina deTurismo del Gobierno francs).

    respiraba todava esa inquietud. Si hubierantenido la intencin de engaar, de inventaruna historia plausible o de perpetrar un fraudedeliberado, seguramente hubiesen cuidadoms los detalles de su relato.

    En cuanto a la experiencia de Agnes y Do-rothy Norton en Puys: ellas posean tambinun conocimiento meramente general de la his-toria de \a zona. Sin embargo, estuvieron treshoras en su balcn escuchando los ruidos deuna batalla invisible que se desarrollaba en laplaya de Dieppe, cuyos detalles coincidan engeneral con otros relatos de la famosa incur-sin de 1942. Su experiencia no es nica: otrosobservadores se han encontrado con represen-taciones de batallas de otros tiempos (vasepgina 476).

    Un tema delicadoLos crticos dieron mucha importancia a lasdiscrepancias entre las declaraciones de Agnesy Dorothy. Pese a eso, hay que subrayar dosdetalles en defensa de estos relatos. Primero:Dorothy, y no Agnes, era una dotada recono-cida. Agnes puede haber actuado como me-dium, y puede haber respondido con ms lenti-tud al estmulo de los sonidos. Segundo, nohay dos personas que vivan de la misma mane-ra un hecho idntico, particularmente cuandose trata de calcular tiempos. Los relatos de dostestigos de un mismo acontecimiento raramen-te coinciden.

    No obstante, existen objeciones ms serias a

    ,-96

  • la afirmacin que hicieron las Northon de quesu experiencia fue paranormal. Los crticoshan sugerido varias explicaciones naturales pa-ra los ruidos que oyeron. La draga que tra-bajaba en la baha, por ejemplo: el ruido deuna draga es inconfundible; es un sonido regu-lar y fluctuante, a mitad de camino entre ungruido y un zumbido. Pero no es un rugido,como dijo Dorothy, y ninguna draga podra re-producir los ruidos de una batalla. El ruido deun bombardeo en picado no se olvida cuandose ha odo una vez. Pero, lanchas de desem-barco? Qu ruido pueden producir que seaidentificable a distancia? Este detalle parecipoco plausible a los crticos, pero es posibleque aquel ruido resultara familiar a Agnes, acausa de su trabajo como WRNS durante laguerra. El ruido de aviones: habr sido sim-plemente el de los vuelos regulares que pasa-ban sobre Puys?

    Pero algunas cuestiones quedan sin respues-ta. Las Norton dijeron que mientras escucha-ban los ruidos de la batalla en la playa, tenanconciencia de que se trataba de una experien-cia paranormal. Esto es muy raro. Uno de losrasgos ms caractersticos de las experienciaspsiquicas es que quienes las experimentan po-cas \ eces las reconocen como tales hasta des-us, Los sujetos suelen sentir asombro e inco-:]urdidad mientras ocurre, pero eso se explica:Lrrque estn recibiendo informacin simult-n: de dos orgenes distintos: los sentidos,,-nfinados en ei tiempo cronolgico, y una

    Se conocen varios casos depersonas que se han encontradosbitamente en medio de lasimgenes o de los sonidos de unabatalla, igual que les sucedi a lasNorton con el desembarco deDieppe (foto Mary Evans P.L.).

    Saltos en eltiempo

    fuente paranormal, que no experimenta esasrestricciones. Adems. el comienzo de una ex-periencia psquica con frecuencia aparece aso-ciado con la emisin de ondas alfa, el puntomuerto del cerebro, cuando el sujeto no seest concentrando en nada de particular. Elacto de concentrarse en una experiencia para-normal generalmente hace que las ondas alfasean reemplazadas por otras, que sacan alsujeto del estado en que puede experimentarfenmenos psquicos. Si Agnes y DorothyNorton notaron que lo que escuchaban tenauna fuente paranormal, es raro que no hayanemergido, inmediatamente de la experiencia.

    La experiencia de las seoritas Moberley yJourdain en Versalles s parece tener todos losrasgos de un error del tiempo retrocognitivo.El paisaje traspuesto, la presencia de gente deotra poca, los intercambios entre las dosmujeres del siglo xx y la gente que encontra-ron mientras recorran bosques y senderos, to-do sugiere que el tiempo se haba dislocado.

    El caso de Dieppe es menos claro. Lo quesuscita mayores dudas son, curiosamente, losdetalles adicionales proporcionados por Ag-nes, pese a que la psquica era Dorothy.

    Ser posible alguna vez probar sin ningngnero de duda que una experiencia en la quese revive el pasado es paranormal? Parece queno, porque an cuando varios testigos confir-man un relato detallado de la experiencia,nunca falta quien aduce alucinacin o tele-pata.

    79'7

  • En 1 908, una vasta extensin deSi beria resu lt arrasada. Losrboles, abrasados, se vi nieronabaio y la piel de los animales quedcubierta de costras. Pudo ellodeberse a una explosin nuclear?r,N Le uaaN, del 30 de junio de 1908, elgranjero S. B. Semenov estaba sentado en elporche de la aislada factora de Vanavara. a750 kilmetros al noroeste del lago Baikal, enSiberia. Eran solamente las 7.15 de la maana,pero el da estaba ya muy avanzado. pues enesas latitudes septentrionales el sol, en plenoverano, se levanta pronto. El vecino de Seme-nov, P. P. Kosalopov, estaba arrancando cla-vos del marco de una ventana. con unas tena-zas. Ninguno de los dos hombres poda sospe-char el drama que iban a contemplar.

    De pronto, Semenov se sobresalt al ver,hacia el noroeste, una brillante bola de fuegoque .cubra una parte enorme del cielo". Se-menov se estremeci de dolor, pues tuvo laimpresin de que el calor de la bola gnea que-

    maba su camisa. En la puerta contigua, Kosa-lopov dej caer las tenazas y se llev las manosa los odos, ya que tuvo la sensacin de que susorejas ardan. Mir primero hacia su tejado,pensando que se haba declarado un incendio,y despus se dirig a Semenov.

    -Has visto eso? -pregunt.-Cmo iba a dejar de verlo? -replic elasustado Semenov, al que todava le escocan

    sus quemaduras.Unos segundos ms tarde, la bola de fuego,

    de un cegador color azul y arrastrando tras des una columna de polvo, explot a 65 kilme-fros de Vanavara, con tal fuerza que Semenovfue derribado y permaneci unos segundos in-

    consciente. A1 volver en s. not en el suelounos temblores que estremecan toda la casa yque acabaron por romper la puerta del establoy astillar las ventanas. En la casa de Kosalopovcay tierra del techo, y una puerta derrib laestufa. Se oa una especie de truenos.

    La gran bola de fuego siberiana de 1908 fueun acontecimiento tan excepcional que suscituna controversia que todava prosigue. Las ex-plicaciones al respecto entran en el reino de loextrao, incluida la notable hiptesis segn lacual el fenmeno fue causado nada menos quepor un aferrizale de emergencia de una naveespacial movida por energa nuclear, tal vez deorigen extraterrestre.

    Las secuelas de la explosin, el30 de junio de 1 908, de unaenorme bola de fuego sobreTunguska, Siberia (recuadro delmapa) debieron de presentar unaspecto similar al de un incendioforestal (arriba), ya que en unradio de 30 kilmetros los rbolesfueron abatidos y el intenso calorincendi el bosque (ColinEdwards & Partners).

    Trece aos despus de laexplosin de Tunguska, elminerlogo sovitico Leonid Kulik(arriba) dirigi una expedicin aaquel lugar, viajando en trineostirados por caballos y en barca (ala derecha). Su ruta quedaindicada en el mapa (en la pginasiguiente). Kulik encontr pruebasdramticas del suceso: bosquesenteros de rboles calcinados ydesarraigados (a la izquierda),pero no hall ningn rastro demateriales meteorticos [fotosSovfotol.

  • IHffiffi,';

    La zona en la que cay el objeto. en el valledel ro Tunguska Pedregoso, estaba escasa-mente poblada por los tunguses. pueblo nma-da de origen mongol dedicado al pastoreo derenos. Cerca del centro de la explosin, al nor-te de Vanavara, varios tunguses fueron lanza-dos al aire por la explosin, y sus tiendas fue-ron arrebatadas por un viento violentsimo. Asu alrededor, el bosque empez a arder.

    Cuando los asombrados tunguses inspeccio-naron cautelosamente el lugar de la explosin,encontraron escenas de terrible devastacin.En un crculo de 30 kilmetros, los rboleshaban sido derribados como cerillas de made-ra y el calor intenso producido por la explosinhaba fundido objetos metlicos, destruido al-macenes y reducido varios renos a cenizas. No

    1t g,+ E :.*i s.' ;."

    Explosin de Tunguska

    quedaba en aquella zona ningn animal vivo,pero, milagrosamente, ningn ser humanomuri a consecuencias del desastre. Se dijotambin que haba cado en aquellos lugaresuna misteriosa lluvia negra.

    Los efectos de la explosin de Tunguskafueron vistos y sentidos en un radio de ms demll kilmetros. Informes procedentes del dis-trito de Kansk, a 600 kilmetros del punto enque se produjo el estallido, describieron suce-sos tales como barqueros precipitados al aguay caballos derribados por la onda expansiva,mientras las casas temblaban y los objetos deloza se rompan en sus estantes. E,l conductordel Transiberiano detuvo su tren temiendo undescarrilamiento, al notar que vibraban los va-gones y los rales.

    Otros efectos fueron percibidos en lugaresmuy distantes del globo, pero su causa perma-neci ignorada durante largo tiempo, ya que lanoticia de la bola de fuego y de su explosin nolleg a odos del gran pblico hasta pasadosvarios aos. En toda Europa se registraron on-das ssmicas parecidas a las de un terremoto,as como diversos trastornos en el campo mag-ntico terrestre. Ms tarde. los meteorlososhallaron en los registros de sus microbarg"ra-fos que las ondas atmosfricas producidas porla detonacin haban dado dos veces la vueltaa la Tierra.

    Ecos de la lejana SiberiaEn gran parte de Europa y Asia occidental lanoche qued extraamente iluminada despusde la cada de la bola. Informes procedentes deestos lugares hablan de noches cien veces msluminosas de lo normal, y de unas tonalidadescarmeses en el cielo, semejantes al resplandorde un incendio, hacia el norte. Estas extraasluces no titilaban ni formaban arcos, comoocurre con las auroras boreales; eran semejan-tes a las que se produjeron tras la explosin delvolcn Krakatoa, que inyect inmensas nubesde polvo en la atmsfera. Cuando tuvo lugar elfenmeno de Tunguska, en Rusia se iniciabaun perodo de grandes inquietudes polticas, yla prensa nacional no dio ningn relieve a loque se consider como un hecho sin importan-cia en un lugar remoto del imperio. A pesar dela naturaleza excepcional del suceso de Tun-guska, las noticias sobre el mismo permanecie-ron enterradas en las redacciones de los diarioslocales siberianos hasta 13 aos despus, cuan-do recibi noticias de lo sucedido el minerlo-go sovitico Leonid Kulik.

    Kulik senta especial inters por los meteori-tos debido en especial a la rica fuente de hierro,que podan representar stos para la industria.Lleg a convencerse de que el objeto que ha-ba cado el 30 de junio de 1908 en el valle delro Tunguska era un meteorito todava msgrande que el que form el enorme crter deBarringer en Arizona, hace unos 25 000 aos.Despus de varios aos de planificacin, Kulikparti en 1927 con una expedicin hacia elpunto del impacto de Tunguska. Desde la esta-cin ferroviaria de Taishet, Kulik y su equipoatravesaron 600 kilmetros de taiga helada so-

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    799

  • Explosin de Tunguska

    bre trineos tirados por caballos, hasta llegar aVanavara. l]na vez all escucharon las extraor-dinarias historias de los habitantes, con lo queKulik acab de convencerse de que segua lapista de un meteorito gigantesco.

    Una nevada repentina detuvo la expedicindurante ms de una semana. El 8 de abril.Kulik, un colega suyo y un gua local partierona caballo para realizar la ltima etapa delviaje. Avanzaron hacia el norte a travs deescenas de creciente devastacin, pues abedu-les y pinos yacan en el suelo, desarraigadospor la fuerza de la onda expansiva que los ha-ba abatido 19 aos antes. Muchos de estosrboles haban quedado chamuscados e inclu-so abrasados debido al intenssimo calor.

    Despus de contemplar la zona de la explo-sin desde un risco. Kulik escribi:

    Desde nuestro punto de observacin no seven seales de bosque, ya que todo hasido devastado e incendiado, y alrededordel borde de esta zona muerta la jovenvegetacin forestal de los ltimos veinteaos ha avanzado impetuosamente, enbusca de luz solar y de vida. Se experi-menta una extraa sensacin al contem-plar estos rboles gigantescos, de 50 a 7-5centmetros de dimetro, quebrados co-mo si fuesen ramitas. y sus copas proyec-tadas a muchos metros de distancia en di-reccin sur.

    La visita del dios del fuegoKulik quiso recorrer los pocos kilmetros quetodava le separaban del foco del estallido, pe-ro los guas tunguses eran supersticiosos. vaque sus leyendas decan que el lugar haba sidovisitado por el dios del fuego, y se negaron aseguir adelante. Kulik tuvo que regresar a Va-navara para reclutar nuevos guas, y pas otromes antes de que llegara de nuevo a la zonadevastada y finalmente alcanzara el centro dela explosin... para descubrir el gran enigmade Tunguska.

    No haba seal alguna del crter gigantescoque 1 haba esperado ver all. En cambio, en-contr un pantano helado y una curiosa forma-cin de rboles, que, a pesar de hallarse en elcentro de la explosin, haban escapado a losefectos de aquel desastre monstruoso que ha-ba arrasado todo cuanto les rodeaba. Cual-quiera que fuese el objeto causante de la ex-plosin, no haba llegado a tocar el suelo.Aunque en aos sucesivos regres al lugar conexpediciones ms numerosas. Kulik nunca pu-do encontrar ningn fragmento de hierro me-terico.

    Por tanto, si la explosin de Tunguska nofue causada por el impacto de un meteorito dehierro. cul fue su causa'l En 1930, el meteo-rlogo Francis J. W. Whipple, subdirector delServicio Meteorolgico britnico. sugiri queel fenmeno haba sido causado por el choquede la Tierra con un pequeo cometa. hiptesisque apoy el astrnomo sovitico A. S. Asta-povich.

    La visin popular de un cometa consiste enuna gigantesca y brillante bola de polvo v gas

    Abajo: miembros de la tributungs, que fueron los msdirectamente afectados por laexplosin de Tunguska.Explicaron que, despus delestallido, muchos de sus renosquedaron cubiertos de costras,hecho que ha inducido a algunoscientficos a pensar que estaslesiones demuestran unaexistencia de radiaciones, lo queequivale a sugerir que se produjouna explosin nuclear (fotoPopperfoto).

    que arrastra una cola de miliones de ir.:..-tros, tal como apareci el espectacular cJ::.:.Halley en 1910. Sin embargo. los comet"s :: -llantes son la excepcin ms que la regla. C::.ao. los astrnomos localizan ms de una c. -cena de cometas, pero muy pocos. por no decr:ninguno, son detectables a simple vista. En s..mayora, los cometas son ms pequeos r d:una luminosidad mucho ms dbil de lo quelos representan los libros de astronomal algu-nos de ellos, en particular los que son mu\viejos, pueden incluso carecer de cola.

    Segn la teora ms pou]ar, un com,eta seasemeja a una especie de bola de nieve forma-da por gas y polvo helados. Los cometas anti-guos pierden el gas hasta convertirse simple-mente en unas bolsas de rocas de baja densi-dad. Semejante objeto bien puede convertirseen una bola ardiente a causa de la friccin queexperimenta al penetrar a gran velocidad en laatmsfera terrestre, hasta disgregarse median-te una explosin cuando la fuerza de esta ac-

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    A la derecha: la zona devastadade Tunguska, con el foco de laexplosin y la direccin de losrboles cados. Las lneas depuntos indican tres sugerenciasdiferentes de la trayectoriaseguida por la bola de fuego. Ladireccin sealada por la flecharoja de trazo continuo fuepropuesta por los cientficos K. P.Florensky y V. G. Konenkin, y sela considera hoy, generalmente,como la correcta (Colin Edwards& Partners).

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  • Abajo: algunas de las pruebas deuna destruccin a gran escala, talcomo fueron halladas por Kulik ysu equipo diecinueve aosdespus de la explosin (fotosSovfoto).

    cin de frenado supera su propia cohesin. Laexplosin en pleno aire de este objeto explica-ra la ausencia de crter y de fragmentos me-tericos en Tunguska. Sin embargo, los crti-cos de la teora del cometa argumentan que,antes de la explosin de Tunguska, nadie-ha-ba detectado cometa alguno en el firma-mento.

    Se han ofrecido numerosas explicaciones al-ternativas, incluida la curiosa sugerencia deque lo ocurrido en Siberia fue el impacto de unpequeo agujero negro. De acuerdo con lateora astronmica, los minigujeros negros,con la masa de un asteroide comprimida astaalcanzar el tamao de una partcula atmica.pudieron haberse formado en el torbellino quesigui a la gigantesca explosin que, de acur-do con la hiptesis del Big Bang, se produjocomo origen del Universo. Segn A. A. Jack-son y Michael Ryan, fsicos de la Universidadde Texas, el paso de un miniagujero negro atravs de la Tierra habra producido todos los

    Explosin de Tunguskaefectos observados en el fenmeno de Tungus-ka... con la excepcin de que el agujero ngrohabra atravesado toda la Tierra y salido poi elAtlntico Norte, con unos efectos espectacula-res muy semejantes al partir. Desgraciada-mente para esta teora, no hubo tales efectos.

    Nave espacial marciana?Entre todas las teoras que han pretendido ex-plicar la explosin de Tunguska, la ms discu-tida fue la planteada en 1946 por AlexanderKazantsev, escritor sovitico de ciencia-ficcin.Disfrazando su teoa en forma de cuento. Ka-zantsev sugiri que la explosin sobre Siberiahaba sido causada por el incendio de una as-tronave movida por energa nuclear, fal vezprocedente de Marte. Kasantsev especulabaque los extraterrestres haban venido paraaprovisionarse de agua en el lago Baikal, quees el mayor volumen de agua dulce existeteen el planeta. Al descender su nave a travs dela atmsfera, la friccin la calent hasta hacerestallar sus motores, producindose en el aireuna explosin como la de la bomba de Hi-roshima.

    Los uflogos soviticos Felix Zigel y AlexeiZolofov han apoyado esta idea de la explosinde una astronave nuclear. Zigellleg incluso aproponer la idea de que la nave realiz unamaniobra en zigzag al intentar desesperada-mente un aterrtzaje, aunque en realidad nin-guno de los testigos manifest haber visto cam-bios de rumbo en la bola de fueso.

    Otro escritor de ciencia-ficci"n, John Bax-ter, en su libro The fire came by, publicado en1976, sigui la teora de Kazantsev al compa-rar los efectos de la explosin de Tunguska conlos de la bomba de Hiroshima: el fogonazocegador y el intenso calor, la corriente ascen-dente de aire caliente que origin una columnaardiente, y el caracterstico grupo de rbolesque permanecieron de pie en el centro de lasdevastaciones de Tunguska, tal como habaocurrido en el punto de explosin de la bombade Hiroshima.

    Hubo incluso rumores de radiaciones mort-feras en el lugar. Uno de los personajes delcuento de Alexander Kazantsev habla de unhombre que, poco despus de examinar la zo-na devastada de Tunguska, muri entre terri-bles dolores, como si lo consumiera un fuegoinvisible. Slo poda tratarse de radiactivi-dad, explica el personaje de la obra. En reali-dad, no existe ningn informe segn el cualalguien muriese a consecuencia de la explosinde Tunguska, pero los tunguses explicaron quelos renos de aquella zona presentaron costrasen su piel, cosa que ciertos escritores moder-nos, como Baxter, han atribuido a quemadu-ras causadas por radiacin.

    Las expediciones al lugar del fenmeno ob-servaron un crecimiento acelerado de la vege-tacin alrededor del punto de la explosin,atribuido tambin por algunos a unos trastor-nos genticos ocasionados por las radiaciones.

    Vea en pgina 846 nuevasel misterio de Tunguska.

    A la derecha: la trayectoria areade la bola de fuego de Tunguskaen la zona que rodea el punto deimpacto, reconstruida por eluflogo sovitico Felix Zigel apartir del estudio de los daoscausados por la onda atmosfricay de los informes obtenidos devarios relatos de testigosoculares. Las flechas negrasindican la direccin en Ia que,desde cada punto. pareca viajarel objeto (Colin Edwards &Partners).

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    Las tecnotogas ms avanzadas det mundo se enfrentan **i'.T:,,'""',"ifl:Hili:"ffi'::x1i,:T,TJ;a diario por vencer en la carfefa espacial. Sin embargo, ofrece mayores posib-ilidades. Esto.es 1o queen un rincn de Espaaz en Anteqera.(Mlasa), Ia :. .^ :Hli:'.on[atf;]"t:":];"',::',?,::Tff,sagacidad, la capacidad de observacl y la voluntad.de qjl r* a..ado varios ads de su victa a dise-un ingeniero aficionado han hecho posible una mquina u. ,rru original mquina producrora deasombrosamente parecida a un OVNI... energa,..

    A partir de la observacin de fenmenos es-SE HA DISCUTTD9 r\{ucHo sobre la naturaleza de Laformayel funcionamientode paciales extraos-Antequera es unazona es-los OVNIS; se ha especulado mucho acerca de los OVNIS han sido siempre pecialmente frecuentada por los OVNIS, se-las fuentes de energa con que cuentan, as co- objeto de elucubraciones y de gn rezan las estadsticas- y sacando conclu-mo de su funcionmiento. E incluso se han teoras. Algunos han querido siones de numerosos relatos de testigos pre-realizado varios intentos de construir 1o que, llevaralaprcticaestasteoras, senciales y de hechos histricos, el seor Sn-mediando un considerable avance tecnolgico, construyendo algo muy parecido chez-Garrido dedujo cul podra ser el princi-podran llegar a ser los

    "OVNIS terrestiesr. aesosmsteriososaparatos(enla piodefuncionamientodeunOVNI,yconside-i-Iuy qu" rJcordar, por ejemplo, el proyecto foto,dibujocreadoparala r que, a diferencia de lo que se suele asegu-,.Orin", promocionado po. il fsico nortea- produccin de El imperio rar, la tecnologa actual est perfectamente ca-mericano F.".un Dyson, quien, en 1958, di- contraataca,deGeorgeLucas) pacitada para fabricar vehculos espacialesse una nave espacil de piopulsin nuclear. [foto Lucasfilm Ltd./Vendrell]. muy parecidos a 1os OVNIS.Ms tarde, fueron las empresas aeronuticas La idea bsica consisti en la invencin delas que tomaron cartas en l asunto;el resulta- un mecanismo capaz de autoabastecerse dedo sL materializ en varios proyectos, patentes energa elctrica. Esto significa que nicamen-e incluso modelos de aronaves fturistas te se requiere una aportacin de energa ini-(vase pgina 97 y siguientes). Y no hay que cial para su puesta en marcha, ya que poste-otriauriu1poco ls ivestigaiones llevadai a iormente la propia._mquina recicla y distri-cabo por cibrtos gobiernos--por ejemplo, el buye la enega que ella misma_crea- A partir dede los Estados Un"idos-, qu" han prmitido la este mecanismo, el seor Snchez-Garridoconstruccin de verdaderoi prototipos de OV- abord la construccin de un complejo vehcu-NIS (vase pgita 822). lo capaz de viajar por el espacio con una triptt-

    Pero no sol los grandes empresas, el esta- lacin ms o menos numerosa.blishment cientfico los estads ms podero- El empeo del seor Snchez-Garrido hasos estn capacitados para investigar en esta conseguido, por.el momento, que su inventodireccin. Bsta con dsviarnos un poco de la ya est patentado: el proyecto, acompaadovisin ortodoxa de la historia, y con desconfiar de planos y de una memoria descriptiva, fuede las explicaciones ms simplistas y raciona- presentado_en noviembre de 1978 (nmero delesr, par atisbar lo que se encuentra ms all iegistro 415 287, clasificacin internacionale toi OVN1S. HOZK), y en febrero de 19'791e fue concedida

    802

  • la patente de invencin. Por otra parte, existeuna maqueta de la mquina, ya construida y enfuncionamiento, que confirma la viabilidad delproyecto (como consta en el documento oficialque reproducimos en pgina 804) y garantiza1as posibilidades de explotacin de esta empre-sa. Sin embargo, la construccin de un prototi-po manejable a escala humana presenta, comoes lgico, numerosas dificultades tratndosede una iniciativa privada.

    No obstante. el seor Snchez-Garrido haestablecido ya numeiosos contactos de cara ala explotacin industrial de su aparato; son va-rias las personas, e incluso los organismos na-cionales e internacionales. interesados en este

    -para producir la consiguiente propulsin ha-cia arriba- afecta a toda la estructura de lamquina. El casquete se halla sujeto al eje,adems, por medio de unas guas que anulantodo movimiento lateral y por tanto todo roceentre el casquete y la base que pudiera dese-quilibrar el aparato. El motor est superpuestoa una dinamo o alternador (5), el cual reposa asu vez sobre una torreta de sustentacin (7)apoyada sobre la placa soporte. El casqueteest forrado interiormente por multitud determinales elctricos (8, 13) cargados negativa-mente, dispuestos en capas y distribuidos conregularidad sobre un segundo casquete inte-rior (9). Este, junto con los terminales, queda

    Tecnologa OVNI

    Rafael Snchez-Garrido (abajo)ha inventadouna

    "mquina-OVNI productorade energa, capaz de llevar acabo viajes interplanetarios.Hasta el momenlo, ha patentadolos planos del futuro aparato y haconstruido una maqueta delmismo (izquierda), pero sonmuchas las personas yorganismos nteresados en laconstruccin de un prototipo(fotos R. Snchez. Garrido).

    proyecto. Por ejemplo, una entidad bancariase ha brindado a conceder una subvencin pa-ra la construccin del primer ejemplar (los tr-mites ya han sido iniciados), y tambin la firmasuiza Rolex, a travs de su departamento deayudas y premios, est interesada en cooperaren la construccin del prototipo. A1 parecer,es slo cuestin de tiempo; en cuanto los me-dios sean suficientes, ser posible verificar lasposibilidades de esta asombrosa mquina.

    Pero, en qu consiste este proyecto? Cn-les son los ingeniosos principios en que se ba-sa? La mquina productora de energa, comopodr apreciarse en los planos adjuntos (vasepgina 805), consta esencialmente de un cas-quete metlico en forma de semiesfera (1),atravesado por un eje (2) que le une con unmotor elctrico central (3) y con una placa-soporte circular (a). De esta manera el movi-miento de rotacin que produce el motor

    aislado del resto del aparato mediante una c-mara de refrigeracin (10) que permite mante-ner en todo momento la temperatura deseadaen el interior de la mquina.

    Por otra parte, entre estos terminales se hancolocado unos paneles (12,14). La reaccin en-tre los terminales (cargados negativamente) ylos casquetes exterior e interior (con fuertecarga positiva) produce constantemente grancantidad de energa, que en parte es captadapor los paneles, los cuales la convierten enenerga elctrica y la canalizan, a travs de unregulador de corriente, hacia el motor. Laenerga dispersa, por su parte, aparece en for-ma de intenssimas luces Ce diferentes longitu-des de onda, visibles en la parte inferior de lamquina (por el intersticio que existe entre elcasquete exterior y la plataforma de la base) ypor los numerosos orificios practicados en elcasquete exterior. Estas luces hacen que la m-

    803

  • Tecnologa OVNI

    quina en s resulte invisible cuando est en fun-cionamiento: el resultado, desde el exterior yde lejos, consistir seguramente en una intensaluz flotante, o en una enorme acumulacin deluces de colores (se producen millones de fo-gonazos luminosos por segundo) que quedanreflejadas en el plato por su parte inferior. Elcolor de las luces, as como su intensidad, de-pender del voltaje general del plato, de susdimensiones y de las materias con que estconstruido. Este espectacular despliegue lumi-noso tiene un motivo vital: sin este sistema deescape>> energtico, la mquina correra peli-gro de desintegracin, a causa de la gran inten-sidad que puede alcanzar la corriente elctrica.

    804

    A la izquierda: este documento daconstancia de las posibilidades deexplotacin de la

    "mquina-OVNI, de Antequera (Cortesa R.Snchez-Ganido).

    Abajo a la izquierda: patente deinvencin internacional de lamquina productora de energa,registrada en el Ministerio delndustria (Cortesa R. Snchez-Garrido).

    Al mismo tiempo, este mecanisn >.:.: :i::repeler cualquier objeto Que Se dJ;:: -r -: - .siado al aparato (aerolitos. por ete:r:.: .que la energa se desprende en foma :.

    -

    -

    tntes chorros.As pues, los medios de propulsin de ia :.'-

    quina son alimentados de forma ininterui:::.-da por corriente elctrica. La velocidad d: .mquina depender de la cantidad de enest"elctrica que reciba el motor, y sta, a su vez.de la mayor o menor carga positivo-nesati\ adel conjunto.

    En cuanto a las condiciones del interior delaparato, es decir, a las repercusiones del siste-ma de propulsin y de reciclaje energtico: laforma circular de la mquina hace que todoslos puntos de sta reciban la misma intensidadelctrca, crendose espontneamente un ais-Iamiento que impide la deshidratacin de los

    tejidos vivos (y, quiz, incluso su envejeci-miento). Por la misma razn, los tripulantes,vestidos con trajes exteriormente metalizados,pueden trasladarse sin problemas de un extre-mo a otro del aparato, ya que nunca sernatrados por las paredes (cargadas positiva-mente).

    Al estar basado todo el funcionamiento dela mquina en el nmero de revoluciones quese imprime al plato a travs de la dinamo, re-sulta facilsimo controlar todos los aspectos dedicho funcionamiento: la intensidad del campocreado en el interior, el voltaje elctrico, laemisin de luces, el desgaste del casquete, etc.

    La estabilidad interior tampoco se ver afec-

    Arriba: el sistema de suspensin,con vistas a una estabilizacinhorizontal de la nave, estperfectamente estudiado yelaborado, como demuestra esteplano (Cortesa R. Snchez-Garrido).

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    Puds cmpobrs br crc'rrcb .n rr tbric. ralL:r, lobofrtoo ee sqejairDftr,, . c4 s.,iq.tr.qap!r./ ltd]!r.gJ, p..cqrolJ\"T" ,. Is!.} E.J.i ofl.gacrped vdE d ssriona. Atooinie cnricd dr hqitero d h D,sqa.rdnda rod!na qu 2iDcd. para a.rdftr h .aseicr de Mdios.coh a dc,sf,edd n.B,a, Bn a oticrn de toinler, fii depnveqio de exprlad. ctado en r retrici3.

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    "BOUINA IRODSCAOM ' 'NRGA"

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    DO! BN.MO UGRIA COIBUN!

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    TRTPUL^NIE, PESO Kss

    1 Kgs.= 1e POSIfIVO

    MAYOR GRADO POSITIVAMEN@ GRADO TgTIVO + /t30e PASIT IVAS

    +1t8tp.BA SCULA

    421! p + + 1t8!p.

    * t,os: p.

    0 + 500!p =fi&p

    i33!P,

    132t p.

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    +

    EJEMPLO:

    GRADO DE ESTABILIDAD DE LA MAQUINAGRAOUADA A 5OO! POSITIVAS

  • S';,;.,{r'r6+;" "d@]eii]ffi

    ir. *rr* *r.o*0"**iimsI N?QU&tg'ie)

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    reEnrUEFEFEN. a?BoDUCfe DrussL

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    AUOUIdA PRODLCTO4

    rorojo, 15-1" a. - NrEouth (rasa).

    1 solicitante, d nacioaliiad eslaola.

    -

  • tada por los giros, que se producen de la formasieuiente: se invierte la relacin de fuerzas po-tivo-negativo en los extremos de la base, demanera que el empuje se produzca de formalateral, y el vehculo gira en ngulo recto.

    El proyecto de mquina productora de ener-ga tiene tambin en cuenta las condiciones dehabitabilidad, segn se desprende, en parte,de todo lo dicho. El interior de la mquina.queda comunicado visualmente con el exteriorpor medio de un sistema de periscopios (yaque los orificios del casq'uete sirven exclusiva-mente a fines tcnicos). Las caractersticas fsi-cas del ambiente, por otra parte, son perfecta-mente controlables (nivel

    _cero de deshidrata-cin, etc.). Es ms: el sistema de suspensin-hablando en trminos automovilsticos- delhabitculo reservado a los tripulantes consisteen una distribucin de la base en varias bs-

    ). \1,^ t'.1c, t, 4LT gp l.l I D a Pd\

    culas>>, cada una de las cuales equilibra auto-mticamente el peso que le corresponde, porlo que no es preciso tomar precauciones encuanto a la distribucin de la tripulacin y dela carga, y el equilibrio en horizontal necesariopara el funcionamiento de la mquina quedapreservado (vase esquema pgina 804).

    Existen muchos otros detalles en la mquinaproductora de energa del seor Snchez-Ga-rrido que mereceran ser comentados, aunqueslo la construccin efectiva de un prototipodara realmente la medida del proyecto. Pro-bablemente surgiran dificultades que obliga-ran a hacer modificaciones; quiz lo ms com-plicado sera la eleccin de materiales y el per-feccionamiento de los sistemas antidesgaste.Pero hasta que esto se convierta en un hecho,todo son conjeturas.

    Sin embargo, hay que insistir en un detalleque resulta curioso, y en el que insiste el pro-pio inventor: si se observa la seccin longitudi-nal del casquete esfrico, se ver que las es-tructuras contenidas en l se hallan dispuestassegn una forma piramidal, aunque con plantaredonda. Del mismo modo, el esquema simpli-ficado del funcionamiento de la mquina, quemuestra la triple direccin de la energa, sugie-re tambin la forma de una pirmide.

    Es bien sabido que se atribuye a las pirmi-des unos poderes especiales. Es ms, se ha lle-gado a afirmar que la construccin de las pir-

    Abajo: plano explicativo en el quefiguran los diferentes elementosestructurales y funcionales quecomponen la mquina-OVNIproductora de energa (CortesaR, Snchez-Garrido).

    Tecnologa OVNImides se debi a las enseanzas de seres extra-ferrestres que descendieron a la Tierra e hicie-ron construir aquellos monumentos como pun-tos de referencia espaciales. En esta construc-cin intervenan los propios extraterrestres, faque los medios tecnolgicos de aquellas pocasremotas resultaban insuficientes para labrarlos enormes bloques de piedra, as como paratransportarlos a kilmetros de distancia. EnAmrica

    -donde abunda este tipo de monu-mentos- y concretamente en la misteriosa zo-na de Tiahuanaco (Bolivia), existen leyendasautctonas que hablan de un

    "plafo voladorque emita una potentsima luz". Este habraaparecido sobre el lago Titicaca, cuna, segnotra leyenda, del fundador de la dinasta de losincas, Manco Cpac. De la nave

    -prosigue elrelato-, descendieron unos seres de gran es-tatura a los que los indios tomaron por dioses(como, siglos ms tarde, tomaran tambin pordioses a los primeros conquistadores espao-les). Fueron ellos quienes les ensearon losmtodos de construccin que han asombradoal mundo. Cuando estos seres se marcharon,permaneci la leyenda de los

    "Hijos del Sol,como vestigio de aquella visita decisiva; y aspermanece en el folklore andino.

    Esta conexin con el misterioso mundo delas pirmides enlaza con las posibles implica-ciones prcticas de la mquina. El seor Sn-chez-Garrido sostiene que el proyecto y cons-truccin de su mquina productora de energa

    **.r*.ffir,t *lwEne-oEfw|AMF5'rcStrtvd

    pueden representar la salvacin de la humani-dad, amenazada hoy por una catstrofe inmi-nente. Lo mismo han asegurado muchas otrasveces premonitorias, desde san Malaquas yNostradamus hasta los profetas y cientficosheterodoxos ms modernos.

    En pgina 842: al parecer, la Tierra est aboca-da a sufrir un cataclismo debido a cambios gra-vitacionales en todo el Sistema Solar.

    c^,? AEPoUTA

    Aniba: esquema de la mquinaen funcionamiento. En l quedanevidenciadas las condicionesambientals interiores en que sehallarin los tripulantes durante elviaje (Cortesa R. Snchez-Ganido).

    IqAJE METALIZAAA

    805

  • "ffi" ffi W& .,$ 3 '4 "ffi#ffiffiffi ffi'HH.Hffi,.3trffi,ro d H fu3 ptm &, q$i # 4 P?

    Cules la causa del fenmenofsico de los estigmas? Es,como creen muchos cristianos, elresultado de !a meditacin sobrelos sufrimientos de Cristo,plasmado en un elegido? O esuna condicin clnica?EL cuRroso FENoMENo de los estigmas

    -la mis-teriosa aparicin de heridas parecidas a las quesufri Cristo durante la Pasin- ocurre casiexclusivamente a personas integrantes de laIglesia Catlica. Por lo tanto, los archivos delVaticano deben de contener la informacinesencial para una investigacin sobre este fe-nmeno. Pero resulta curioso que la Iglesiaconsidere la existencia de estigmas divinos yestigmas diablicos, que dependen, en teo-ra, de la santidad del afectado o de su perver-sidad.

    Con frecuencia, la lnea divisoria entre am-bas categoras responde a razones polticas,pero hubo un criterio que se ha aplicado deforma sistemtica: quienes explotan sus heri-das para obtener fama o riquezas son, eviden-temente. diablicos. En cambio, los verda-deros estigmatizados

    -considera la Iglesia-son personas en las cuales a los estigmas seaaden otras cualidades inequvocas que indi-can santidad (entre ellas, la de la humildad).

    Si la exhibicin ostentosa es un factor paradeterminar el origen divino" o diablico delos estigmas, el caso de Elisabeth de Herken-rode debi haber sido condenado hace mucho.Esta monja del siglo xrrr pas la mayor partede su vida en un continuo trance, representan-

    806

  • A la izquierda: George Marasco,estigmatizado durante la SemanaSanta de 1 923, ensea lasheridas en sus manos y costado(fotos Mary Evans P.L./HarryPrice Collection).

    Abajo a la derecha: "Mortado", el

    actor de music-hall que seanunciaba como el

    "nicohombre con las marcas de lacrucifixin". El origen de susestigmas era oscuro, peroactualmente su imagen nosrecuerda ms a un seguidor de laq{

    "punk" que a un autnticoestigmatizado (foto BBC HultonPicture Library).

    Abalo: la estigmatizada inglesaEthel Chapman, fallecida a finesde los aos setenta, ensea lasheridas de sus manos. PorPascua, durante muchos aos,senta que le clavaban clavos enlas manos y en ellas aparecanaguleros rojos (foto Syndicationlnternational).

    do la totalidad de la Pasin cada 24 horas, ydesempeando alternativamente el papel deCristo y el de varios de sus verdugos. El padreThurston, historiador catlico que ha profun-dizado en el tema de los estigmatizados y enotros paralelos, describe una escena tomadade relatos contemporneos:

    Cogiendo la pechera de su vestido con lamano derecha, se empujaba hacia la dere-cha y despus, con la mano izquierda, searrastraba en la direccin opuesta. Enotro momento, estirando el brazo y ce-rrando el puo de forma amenazadora sepropin un violento puetazo en la man-dbula, tan fuerte que todo su cuerpo pa-reci estremecerse y vacilar bajo elimpacto.

    Aparentemente, Elisabeth de Herkenrode es-taba representando escenas y acciones conoci-das durante sus visiones y, en el momentoapropiado, se abran en su cuerpo y sangrabanlas marcas de los azotes, los de la corona deespinas y los estigmas.

    De forma similar, Domenica Lazarri (quemuri en 18a8) y la estigmatizada inglesa Tere-sa Higginson (cuya bendita muerte lleg 50aos despus) se golpeaban sin piedad con lospuos. Los golpes que se infliga Domenicaeran tan fuertes que se oan desde la calle, yTeresa crea firmemente que esas palizas se lasadministraba el mismo Diablo. La veneradamstica y estigmatizada santa Mara Magdale-na de Pazzi estaba motivada, sin duda, por launin exttica con Dios que inspiraba sus es-critos, pero la fruicin con que exhortaba a sussuperiores a azofarla y con que azotaba a susnovicias no era muy edificante. Uno se solida-riza con la perplejidad del padre Thurstoncuando escribe:

    Hay muchas clases de estigmas en las quela impostura puede ser descartada, peroen las que muchos de los detalles registra-dos sugieren ms una enfermedad que laexhibicin de atributos divinos que aso-ciamos con la idea del milagro.

    En un punto de vista opuesto se sitan loshombres de ciencia escpticos que, sin investi-gar, prefieren ignorar estas historias y sus irre-prochables testigos, considerando que han si-do engaados, o que han padecido alucinacio-nes o ilusiones pticas.

    Sin embargo, muchos creen que el

  • Estigmatizados

    histeria no explica, los estigmas, como pare-cen temer muchos apologistas cristianos, peropuede describir el mecanismo de este curiosofenm,eno.

    Sin embargo, la mayor parte de los catlicossigue considerando la explicacin histricade los estigmas como un insulto y una blasfe-mia. Sealan que estigmticos como santaGemma Galgani, el padre Po o santa Teresade Avila eran humildes, tranquilos y nada ex-citables, o sea en absoluto histricos. Pero unestudio ms detallado de las vidas de esos es-tigmatizados revela una historia llena de enfer-medades misteriosas y una sensibilidad anor-mal. Padecieron una cantidad de enfermeda-des inexplicables que incluan desmayos, ata-ques, parlisis, ceguera, etc. Muchos fueronvctimas de la tuberculosis, que aumenta la su-gestibilidad. Y, 1o que es ms interesante, lasvisiones que provocaron la aparicin de susestigmas marcaron el final de sus muchas mis-teriosas dolencias.

    Casos de shamanismo?Muchos estigmticos desarrollan el tipo deconducta que se asocia con la del shamn ohechicero de las sociedades ms primitivas:caen en trances, tienen visiones, pueden curar,levitar, profetizar o ser inmunes al fuego. Mu-chos de ellos tambin revelaron personalida-des mltiples, como Teresa Higginson, Cons-tante Maria Castreca (monja italiana del sigloxvrr), la madre Beatriz Mara de Jess y TeresaNeumann, quien tambin hablaba en lenguas(vase pgina 448). Puede ser que los estigma-tizados sean los equivalentes catlicos de losshamanes, pero, an as, la personalidad ml-tiple se considera en la actualidad un sntomahistrico y podra ser que muchos de sus otrosdones, incluidos los estigmas, tengan la mis-ma base.

    Otra clave de la base histrica de los estig-mas est en el componente de la sugestibili-dad. Las heridas de santa Vernica Giuliani(que muri en 1727) se abran y sangrabancuando su confesor lo ordenaba, y la estigmati-zada belga Louise Lateau, entre otros, podavolver instantneamente de sus elevados xta-sis ante una orden de sus superiores. La heridadel costado de Anne Catherine Emmerich separeca a un curioso crucifijo en forma de Yque estaba en la iglesia de Coesfeld, en Ale-mania, donde sola rezar de pequea. Y lasmarcas de azotes de santa Gemma Galvani pa-recan reproducir con exactitud las de su cruci-fijo favorito.

    El elemento subjetivo en la forma de losestigmas y la gran variedad de formas queadoptan, tambin parece apoyar su origen his-trico. Las heridas varan entre simples man-chas rojas, fisuras en forma de cruz y agujerosredondos, ovalados o cuadrados en las manos;las cabezas de clavos, han aparecido en eldorso o en la palma de la mano, en pies iz-quierdos o derechos (y hasta en la planta); lasheridas del costado muestran variaciones simi-lares, a la derecha o a la izquierda, segn laforma en que el afectado imagina que fue cru-

    rt08

    Arriba: Louise Lateau, la belgaque afirmaba haber sidoestigmatizada durante una visinen enero de 1 868, cuando tena1 8 aos. Sus heridas fueronvisibles durante 15 aos, hasta sumuerte. Durante ese tiempo fueexaminada de forma cuidadosa

    -y con frecuencia dolorosa- pormuchos mdicos, quienesllegaron a la conclusin de quesus heridas eran genuinamente"milagrosas" (foto Roger-Viollet).

    A la derecha: una mujer llorasangre. Se trata de un fenmenomuy poco frecuente,estrechamente vinculado con losverdaderos estigmas, eigualmente misterioso (fotoMansell Collection).

    cificado Cristo. Ouiz sea significalr'.!r.--. :se conozcan ejemplos de heridas en l: :i: .-cas. el lugar sugerido por.quienes in,, es:is,:::el sudario de Turn (vase pgina 111i. P;:ahora que los fieles conocen este detalle. i,.sfuturos estigmatizados bien podrn exhibir he-ridas en las muecas.

    Se ha intentado muchas veces reproducir es-tigmas por medio de la hipnosis, pero 1os ni-cos resultados han sido un breve enrojecimien-to de la piel o prdidas espordicas de sangre.Esto es muy poco en comparacin con las dra-mticas heridas y las copiosas hemorragias delos estigmatizados genuinos, que han desafia-do los procesos normales de cicatrizacin 1conservado sus estigmas durante la mayor par-te de su vida. Pero no se puede ignorar queexiste una elevada correlacin entre el fen-meno de los estigmas y algunos sntomas de lahisteria clnica; la diferencia es slo de grado yde contexto.

    Fuera del contexto religioso, donde no exis-te la necesidad de que los estigmas adoptenlas formas que indica la crucifixin de Cristo,existen muchas clases de fenmenos paranor-males y hasta psicolgicos en los que se produ-cen lesiones o deformaciones espontneas enla piel. Uno de esos casos fue el de EleonoreZtgun, una famosa vctima poltergeist, estu-diada por Harry Price en los aos veinte, cuyapiel mostraba verdugones, marcas de morde-duras y hasta inscripciones cuando crea queera atacada por un demonio que slo ella po-da ver.

    E,n muchos, si no en todos, los casos de es-tigmas stos parecen surgir de la mente sub-consciente del estigmatizado. Si pudiramoscomprender el proceso de causa y efecto quetiene lugar, quiz podramos entender tambinotros muchos fenmenos misteriosos.

  • Mosdr.lo

    Jnsolfu) ,; I \\

    uTodas mis historias -escribaLovecraft-, aun cuando no

    tengan ninguna relacin entres, remiten a una tradicin, auna leyenda fundamental, se-gn la cual este mundo estuvopoblado en otro empo por se-res de otra raza. Eran adeptos ala magia negra, pero perdieronsu dominio sobre este universoy fueron expulsados de 1. Sinembargo, siguen viendo fuera,y estn siempre dispuestos a re-cuperar el dominio de la Tierra."

    Este tema central en la obrade Lovecraft, el maestro deProvidence,, nacido en 1890 yrnuerto en 7937, fascin a loslectores, pero tambin a losamigos y corresponsales de sucreador, innumerables autoresde relatos fantscos, que reto-maron por su cuenta lo que seha denominade olos mitos deCthulhu, (esta expresin dio t-tulo a una fanlosa recopilacinde relatos publicada por AlianzaEditorial). La originalidad y po-tencia de la obra de Lovecraft,la creacin de una toponimiaimaginaria (Arkham, Dunwich),de libros mgicos como el mti-co Necronomicon y de todo unpanten demonaco (con Cthul-hu, uel que vendr de los abis-mos del ocano,), ejercieronuna profunda influencia en es-tos escritores, que recogieron al-gunos de los temas, los modula-

    Arriba: August Derleth.A la derecha: dibujos de Csernuspara Zothique de C. A. Smith (a laizquierda) y Los adoradores deCthulhu, de cuatro miembros delcrculo de Lovecraft (Le Masquefantastigue).

    A. DERLETHY EL CIRCULO DE LOVECRAFT

    ron, los ampliaron, profundiza-ron en ellos. Estos continuado-res del mito

    -hecho bastantesingular en la historia de la lite-ratura- fueron reagrupados,por razones de comodidad y demanera puramente arbiharia,bajo el nombre de ucrculo deLovecraft, o ncrculo lovecraftia-no. Actualmenle ya son tres lasgeneraciones de uadoradores deCthulhu, que se han sucedidodesde la muete de Lovecraft.Pero el crculo de Lovecraft nohubiera existido de no ser porAugust Derleth...

    Derleth naci en 1909, y pu-blic su primer relato a los quin-ce aos de edad. Su tesis uni-versitaria vers sobre el cuentofantstico en lengua inglesa, loque demuestra su profunda in-clinacin por este gnero. Muypronto estableci correspon-dencia con Lovecraft. a quienexpres su admiracin y dequien lleg a ser amigo. En elao 1939, es decir, dos aosdespus de la muerte del maes-tro, fund junto con DonaldWandrei la empresa ArkhamHouse, bautizada con el topni-

    mo mtico de Lovecraft: estaeditorial, muy modesta en suscomienzos, se propona dar aconocer la obra de Lovecraft,que'hasta entonces se hallabadispersa en revistas.

    En ese tiempo Derleth tenatreinta aos y Wandrei treinta yuno. Los dos jvenes admirado-res editaron prcticamente todala obra de Lovecraft, pero tam-bin la de los ms grandes auto-res de literatura fantstica: Ma-chen, Lod Dunsany, Hodgson,Blackwood y los autores con-temporneos herederos del mi-to de Cthulhu.

    La actividad de Derleth fueconsiderable; su obra escrita,como autor y antologista, es ex-tenssima. Public ms de 125

    Los adoradoresde Cthulhu

    volmenes de todas clases: poli-cacos, histricos y ensayos deotros tipos; biografas, poemas ysobre todo relatos fantsticosque sola firmar con el pseud-nimo uStephen Grendon,, yque se publicaron casi siempreen [a revista Weird Tales. Ade-ms complet algunas obrasinditas que Lovecraft habadejado inconclusas: La sombraque vino del espacio y El queacech en el umbral. Tambinescribi dos pastiches, de Lo-vecraft: La mscara de Cthulhug La huella de Cthulhu. Murlenl97l, y a su muerte Wandreise hizo cargo de la empresa yasumi la direccin y continui-dad de Arkham House.

    Donald Wandrei haba naci-do en 1908, y muy pronto sesinti atrado por lo fantstico.Escribi y public precozmente;muy pronto form parte del cr-culo de Lovecraft, junto a jve-nes autores de obras fantsticascomo Robert Bloch, FrankBelknap Long, C. AsthonSmith, Robert E. Howard, D. H.Keller o Henry Kuttner. Fue co-fundador, junto con Derleth, deArkham House, y fue l quientom la iniciativa de publicar lacorrespondencia de Lovecraft,que haba tenido centenares decorresponsales: durante aos sededicaron a reunir cartas, atranscribirlas, a clasificarlas, aarchivarlas. Este trabajo gigan-tesco no sali a la luz en EstadosUnidos hasta el ao 1965.

    Entre sus obras ms conoci-das figuran la novela Cemente-rio del espanto y su coleccin decuentos El ojo y el dedo.

    Su novela est dedicada a

  • LA F]IJELIA DEutjLF]

    August Dedcth

    IA FONTANA. LITERARIA

    Ferviente admirador y amigo oeLovecraft, y fundadoi de lJempresa editorial que publico lamayor parte de sus obras. Derlethfue tambin autor de numerososrelatos fantsticos.A la izquierda: una recoplacinde relatos escritos encolaboracin por Lovecraft yDerleth (Alianza Editorial,cubierta de Daniel Gil), y una delas novelas dl ciclo de Cthulhuescritas por A. Derleth (EdicionesFelmar).te con el objevo de adquirir unsombro saber: ese libro es eiNecronomicon, que de mito seha convertido en realidad, y quecontiene la frase enigmtica yomnipresente.

    oNo hay muerto que puedaeternamente yacer; con el co-rrer del empo tambin lamuerte puede raoir.

    Lovecraft invent tambin losManuscritos pnakticos, el Tex-to de R'Lyeh y el Libro deDzyan. Lo miembros del crculocompletaron esta bibliotecamaldita: El libro de Eibon, de C.A. Smith, UnaussprechtlichenKulten de Von JunL, que inve'n-t Howard, De Vermis Mysteriisde Ludvig Prinn, creado porRobert Bloch, Fragmentos deCelaeno y Culte des goules delconde d'Erlette,, que imaginAugust Derleth, etc.

    Como vemos, los GrandesAntiguos, en el centro de lacreacin de Lovecraft, sigunobsesionando a los autores deficcin fantsca. Ya hay tresgeneraciones de adeptos aCthulhu... Se estar preparan-do una cuarta? Lovecraft no hadejado de morir y resucitar; latradicin afirma que oPh'ngluimglw'nafh Cthulhu R'Lyehwgahnag lhtagn". Lo cual, natu-ralmente, significa: oEn su mo-rada de R'Lyeh, la ciudadmuefta, Cthulhu aguarda sumi-do en sus sueos.

    Alianza Editorial, Luis de Caralt yBrugura han publicado diversas re-copilaciones del crculo de Love-craft. Ediciones Felmar ha editaidoLa huella de Cthulhu y La mscarade Cthulhu de A. Derleth, y Edaf Zot-hique e Hyperborea de C. AshtonSmith.

    Crditos rle ilustracin: Le Masquefantastique-Csernus, Arch. Ed.Atlas/col. Truchaud.

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    HLovecraft, y acusa una gran in-fluencia de 1, lo que no le impi-de ser profundamente original:una misteriosa estatuilla verdees el detonador que pone enmarcha una serie de episodiosextraos en los que intervienenel Guardin del Sello, una co-lumna verdosa {fuente de miste-riosas energas) y una raza detitanes cuyo regreso a la Tieraes inminente. Wandrei recono-ce como maestros a Poe, a Bier-ce, a Lovecraft

    -por supues-to-, a Hodgson, y a C. AshtonSmith, otro autor enigmtico.

    Este ltimo naci en 1893 ymuri en 1961. Junto con Ro-bert Bloch y Robert E. Howard,conspicuos seguidores de Love-craft, es uno de los autores deliteratura fantsca ms impor-tantes de nuestro siglo. Love-craft le tena en muy alta estima.Smith pas la mayor parte de suvida en California, y antes dededicarse a la literatura fantsti-ca y de ciencia-ficcin, sobre to-do de 7920 a 1930, fue poeta.Tambin fue pintor y escultor:sus impresionantes esculturasfantsticas representan sobre to-do a seres imaginarios de la cos-mogona lovecraftiana.

    Arkham House public suspoemas y sus cuentos fantsti-

    cos. En Espaa han aparecidodos libros suyos Zothique e Hy-perborea, pero en general,Smith sigue siendo un descono-cido. El universo de Smith esuno de los ms extraos y fasci-nantes que imaginarse pueda:continentes desaparecidos, em-brujos, sortilegios, amoresmonshuosos, necromancia, ma-gia. Su estilo refinado, casi de-cadente. da relieve a su imagi-nacin y a su concepcin visio-narias, transmiendo acertada-mente la atmsfera malsana ymorbosa de muchos de sus rela-tos. Tan ninspirado, como Lo-vecraft o Howard, a Smith lefascina la muerte, la belleza dela agona, el horror oculto ylatente.

    En la actualidad, existen yamuchas recopilaciones en caste-llano de esta dinasta de narra-dores. Pero la ms significativasigue siendo la primera, Los mi-tos de Cthulhu, publicada en7969. En ella, adems de lasfuentes del mito

    -lord Dunsa-ny, Bierce, Chambers, Machen,Blackwood y el propio I ove-craft- encontramos una cuida-da seleccin de los mejores rela-tos de la cosmogona lovecraf-lana: Los penos de Tndalos deF. Belknap Long, Estipe de la

    cripta de C. Ashton Smith, Lasratas del cementerio de H. Kutt-ner, El vampiro estelar de R.Bloch... Adems, descubrimoslas obras de algunos interesan-tes epgonos de este momien-to, entre ellos el cataln JoanPerucho.

    En el panten demonacoque imagin Lovecraft, junto aYog-Sothoth y a Nyarlathotep,el ncaos reptante. ocupa un si-tio de privilegio Cthulhu, diosdel mar y de los horrores queste esconde en su seno; aada-mos a Azathot, Hashtur, Shub-Niggurath... Posteriormente,otros seres malficos enrique-cieron ese panten, gracias a lafrtil imaginacin de los ndevo-tos, de Cthulhu, como porejemplo Los perros de Tndalosy Chaugnar Faugn de F. B.Long; Nygotha de Henry Kut-ter; Tsathoggua y Atlach-Nachade C. A. Smith; Los Lloigors,Zhar, elpueblo Tcho-tcho, Itacay Cthuga de A. Derleth; Glaakiy Daoloth de Ramsey Camp-bell; Yibb-TsIl y Shudde-M ellede Brian Lumley, y los parsitosdel espritu de Colin Wilson.

    Para enriquecer el mito, Lo-vecraft haba imaginado un li-bro malfico, que sus perso-najes consultan incansablemen-