avignon arte # 17 junio 2015

2
Motor de heladera, solo rumiando Noche de martes ausencia en mi vida, alguien jugando Milagro en la puerta rocío que moja, uno llorando tiempos de otoño hojas en blanco, nadie cantando Dedicado a la memoria de Marcelo P. Mundo en silencio ARTE Avignon un puente hacia otra forma de ver # 17 JUNIO 2015 Publicación mensual de distribución gratuita producida por: Taller de Artes Plásticas EL PORTÓN VERDE 1- Ribera. Xilografía. 2- Caminito de la Boca. Xilografía, 2010. 3- Barcas en reposo. Xilografía, 1961. Victor Luciano Rebuffo El hombre que habla bajito N ace en 1903 en Turín (Italia), pero se radica tempranamente en Buenos Aires (1906), ciudad donde fallece en 1983. Pintor y grabador. Estudió en la Academia Nacional de Bellas Artes y fue Director de Grabado del Instituto de Arte de la Universidad de Tucumán. Es un hombre que habla con una voz escasa y confidencial, cada vez más tenue y apretada a su cuerpo, cada vez más dé- bil y elusiva. Mira oblicuamente. Muestra apenas un ansioso perfil. De su figura se percibe solamente un escorzo, una sos- pechosa espiral. El hombre que habla bajito se dobla sobre sí mismo, se encoge, se retuerce; atrae a su interlocutor por medio de susurros, modulaciones y fantasías inaudibles, hasta que logra devorarlo. Dios, el mamboretá y la mosca. Thomas Moro Simpson por Walter Pugliese

Upload: avignon-arte-un-puente-hacia-otra-forma-de-ver

Post on 22-Jul-2016

215 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

Avignon ARTE un puente hacia otra forma de ver # 17 JUNIO 2015 revista de arte, dibujo, pintura y escultura en facebook: https://www.facebook.com/arte.avignon.5?ref=tn_tnmn email: [email protected] nuestro taller: www.tallerelportonverde.com.ar

TRANSCRIPT

Page 1: Avignon ARTE # 17 JUNIO 2015

Motor de heladera, solo

rumiando

Noche de martes

ausencia en mi vida, alguien

jugando

Milagro en la puerta

rocío que moja, uno

llorando

tiempos de otoño

hojas en blanco, nadie

cantando

Dedicado a la memoria de Marcelo P.

Mundo en silencio

ARTE

Avignonun puente hacia otra forma de ver

#17JUNIO 2015

Publicación mensual de distribución gratuita

producida por: Taller de Artes Plásticas

EL PORTÓN VERDE

1- Ribera. Xilografía.2- Caminito de la Boca. Xilografía, 2010.

3- Barcas en reposo. Xilografía, 1961.

Victor Luciano Rebuffo

El hombre que habla bajito

Nace en 1903 en Turín (Italia), pero se radica tempranamente en Buenos Aires (1906), ciudad donde fallece

en 1983. Pintor y grabador. Estudió en la Academia Nacional de Bellas Artes y fue Director de Grabado del Instituto de Arte de la Universidad de Tucumán.

Es un hombre que habla con una voz escasa y confidencial, cada vez más tenue y apretada a su cuerpo, cada vez más dé-bil y elusiva. Mira oblicuamente. Muestra apenas un ansioso perfil. De su figura se percibe solamente un escorzo, una sos-pechosa espiral. El hombre que habla bajito se dobla sobre sí mismo, se encoge, se retuerce; atrae a su interlocutor por medio de susurros, modulaciones y fantasías inaudibles, hasta que logra devorarlo.

Dios, el mamboretá y la mosca. Thomas Moro Simpson

por Walter Pugliese

Page 2: Avignon ARTE # 17 JUNIO 2015

Director Editorial:Walter Pugliese

Arte y diagramación: DG Malena Gaudio

Para suscribirse a la edición electrónica de Avignon

escríbanos a nuestro mail: [email protected]

o síganos en: http://issuu.com/revistaavignonarte

15-5226-5947

Sejofvia o Esteban Vicente

Segovia se ingiere inevitablemente con Acueducto, cochini-llo, ponche, Catedral y Alcázar. Nadie que se digne a mencionar su paso por esa ciudad pudo haber obviado alguno de estos platos fuertes. Pero para mí, Segovia pasó a ser un manjar cuando entré en el Museo de Arte Contemporáneo, y descubrí a un excelso pintor oriundo de allí: Esteban Vicente.

El Museo -antiguo Palacio de Enrique IV-, lleva su nombre como homenaje al que fue uno de los mejores artistas contemporá-neos, no sólo de España, sino del mundo.

Recorrimos la exposición alabando su modo de ser mostrada, pero, sobre todo, emocionándonos con la sensibilidad abstracta de la mayoría de las pinturas y collages. Por más que el edificio cuenta con un auditorio montado en la preciosa Capilla, no fue allí donde viví lo religioso, y sí en la sala principal de la muestra, rodeada de una vibración cromática pocas veces experimentada, que, como no podía ser de otra manera, me erizó la piel y humedeció mis ojos.

Eso es arte para mí. La profunda emoción que nos toma por entero y nos lleva sin escalas a lo religioso, provocada por la belleza resultante de lo creado por el hombre.

Y si hubo un lugar donde no sentí lo religioso en absoluto, por la obvia e impúdica manipulación en la intención de provocarlo, fue en la Catedral. Lejos de parecerse a las entrañables Ermitas y pequeñas Iglesias sorianas, donde la tosca piedra absorbe los soni-dos y nos devuelve silencio, en la majestuosa Catedral todo es eco rebotando desde los oros y las pulidas maderas, desde los parlantes sonando con música sacra, los costosísimos mármoles y mosaicos, y los miles de turistas que recorren cada uno de sus recovecos.

Pero a las cigüeñas les da igual una Ermita o una Catedral. Ellas buscan las campanas, las agujas y las alturas. Son las reinas del cielo de Castilla. Y son hermosas.

*Arquitecta (UBA), dibujante y pintora. Formada con los maestros José Mar-chi, Juan López Taetzel y Eduardo Faradje, y como escritora, publicó reciente-mente su primer libro Velocidad crucero.

Daneri

Sobre la Avenida Pedro de Mendoza, dos enormes edifi-cios rivalizan sus ideologías: el Museo Benito Quinquela Martín, y PROA. Tan marcada es la diferencia entre ambos como mi extremismo a la hora de hablar sobre ellos.

Tanto en sus respectivas arquitecturas como en las obras que albergan puede notarse la evidente contraposición entre lo genuino y lo forzado; entre la calidez y la frialdad; entre el arte expresivo y el arte intelectual. Obviamente existen las excepciones: no todo lo expuesto en el Quinquela Martín me pa-rece maravilloso. Ni tampoco todo lo que sucede en PROA me resulta deleznable.

Pero en el Quinquela se huele la fuerza de ese grupo extraor-dinario de pintores trabajadores y modestos, descendientes de italianos, que supieron expresar sus mundos no con el motor de la soberbia o de la mente, sino con el de la emotiva relación con el paisaje que los rodeaba, tanto externo como interno. Imbuidos de la herencia europea, lograron aprovecharla para hablar de su lugar, La Boca, a través del lenguaje propio de la pintura, sin necesidad de explicaciones complementarias. Desde mi modesta visión, creo que han sido generadores de la más auténtica y expresiva pintura de Buenos Aires.

A la hora de las preferencias, destaco a Eugenio Daneri. El vigor de sus pinceladas es sabiamente compensado por una estudiada estructura y por los tierras y ocres dominantes; y la materia resultante, cada tanto resaltada por algún color bri-llante, es de una vibración altamente emotiva. Sus pinturas son manifestaciones melancólicas de sucesivos diálogos con el sencillo universo que lo circunda, realizadas con la entrega y la honestidad de quien sabe relacionarse en términos no utili-tarios con este mundo, lo que nos brinda un encuentro garan-tizado con aquél otro tan enigmático: el del arte.

Taller de Artes Plásticas

EL PORTÓN VERDE

Si querés participar de una experiencia distinta

DIBUJO - PINTURA - ESCULTURAwww.tallerelportonverde.com.arinfo@tallerelportonverde.com.ar

15-5226-5947

Para suscribirse a la edición electrónica de Avignon,

escribanos a nuestro mail [email protected]

o por teléfono al 15-5226-5947.

Para ver los números anteriores publicados en la web ingrese a:

http://issuu.com/revistaavignonarte

ARTE

Avignonun puente hacia otra forma de ver

#17JUNIO 2015

Para suscribirse a la edición electrónica de Avignon

escríbanos a nuestro mail: [email protected]

o síganos en: http://issuu.com/revistaavignonarte

15-5226-5947

Director Editorial:Walter Pugliese

Arte y diagramación: DG Malena Gaudio

Avignon es una publicación mensual

de distribución gratuita, producida por:

Taller de Artes Plásticas EL PORTÓN VERDE

Vincent Van GoGhCartas a Théo

Es cierto que se puede llegar, estudiando las leyes de los colores, a com-prender por qué se encuentra bello lo que se encuentra bello, en lugar de te-ner una fe instintiva en los grandes maestros; y esto es ahora muy necesario cuando se piensa cómo son los juicios arbitrarios y superficiales.

No hace falta tratar de arrancarme el pesimismo respecto del comercio de cuadros; porque de aquí no resulta necesariamente el descorazonamiento. Por mi parte, yo razono de esta manera: supón que tengo razón de identifi-car más y más el singular barullo de los precios en pintura con una especie de comercio del género de los tulipanes. Suponte, pues, que como el trafico de los tulipanes al final del último siglo, el comercio de cuadros –y otras ramas de esta especulación- desapareciera al final de este siglo, tal como ocurrió, es decir, bastante rápidamente. Desaparece, pues, el comercio de tulipanes; el cultivo de flores queda. Por mi parte, me siento feliz de ser un pequeño jardinero, más o menos bueno o malo, pero que tiene mucho amor por su plantel.

Nuenen, noviembre de 1885.

Escritos sobre arte

por Laura Vacs*

tinta sobre papel.

óleo sobre cartulina.

“EN REALIDAD, LOS HOMBRES NO HAN CAÍDO TAN BAJO COMO TEMÍAMOS, PORQUE TAMPOCO SE HABÍAN ELEVADO TANTO COMO NOS FIGURÁBAMOS.”

EL MALESTAR EN LA CULTURA, SIGMUND FREUD.