Nuevamente, El Artista, nos seduce con el lente de su cmara. Con estos Vitrales!; smbolos de un significante religioso, que se destacan en incontables arquitecturas gticas cuyos objetos invaluables reflejan la magnificencia, casi eterna, de los artistas encargados de forjarlos. Ms an, cuentan historias a travs de la combinacin de la belleza y la iluminacin. Para iniciar, el efecto encantador del vitral no viene del vidrio coloreado en s mismo, sino de la luz que lo atraviesa y de la posicin desde la cual uno percibe esa luz resultante. En efecto, el vitral es un muro de luz cambiante con resultados visuales verdaderamente mgicos y nicos, la experiencia de gozar un vitral jams ser igual de un instante a otro. Continuando, en el anlisis de un vitral siempre quedar algo escondido, que slo nos podra explicar aquel que lo hizo. Un vitral est vivo!, y uno puede ver los efectos orgnicos de la luz en la ventana con el paso del tiempo. Sus secretos permanecen en el pasado y le dan un carcter que seduce.

As, El Artista en su ms pura apreciacin esttica es como un vitral!, es una obra de arte que vara segn la luz que recibe y puede reflejar; tiene cambios de tonalidades a lo largo del da segn cambian las estaciones, la altura del sol o el color de la luz. Entonces, cuando hace sol el artista, hoy fotgrafo, encuentra su plenitud, y se puede filtrar todo su colorido; cuando esta nublado, puede darnos un aspecto de tristeza y nostalgia por el ocaso de los aos, los colores ascienden, decrecen y en la hora del crepsculo se encienden cual llama de incomparable muestra del contacto con su creador que le ha dicho: que nada le faltar.Finalmente, de esta manera podrn dejarse encandilar de este sentido singular del obturador que obedece una vez ms a la sensibilidad, ya mstica, de Mauro Martnez de Miraflores. Mauricio L. Martnez Olivares