trabajo de grado. enero 2012

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UNIVERSIDAD CENTROCCIDENTAL LISANDRO ALVARADO DECANATO EXPERIMENTAL DE HUMANIDADES Y ARTES PROGRAMA LICENCIATURA EN PSICOLOGIA Relación entre los agentes involucrados en el bullying (victimas y agresores) con los niveles de depresión e ideación suicida en adolescentes del Edo Lara. Trabajo de grado presentado por: Yackeline ROMAN LEAL Ana D. SOSA PEREZ Profesor Guía: M. Auxiliadora DE POSADAS Barquisimeto, Enero 2012

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Page 1: Trabajo de Grado. Enero 2012

UNIVERSIDAD CENTROCCIDENTAL LISANDRO ALVARADO

DECANATO EXPERIMENTAL DE HUMANIDADES Y ARTES

PROGRAMA LICENCIATURA EN PSICOLOGIA

Relación entre los agentes involucrados en el bullying (victimas y agresores)

con los niveles de depresión e ideación suicida en adolescentes del Edo Lara.

Trabajo de grado presentado por:

Yackeline ROMAN LEAL

Ana D. SOSA PEREZ

Profesor Guía:

M. Auxiliadora DE POSADAS

Barquisimeto, Enero 2012

Page 2: Trabajo de Grado. Enero 2012

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INDICE Introducción ........................................................................................................................ 3

Marco Teórico ..................................................................................................................... 5

Violencia escolar ............................................................................................................. 6

Bullying .......................................................................................................................... 7

Agentes involucrados ...................................................................................................... 9

Niveles de depresión ..................................................................................................... 13

Niveles de Ideación suicida .......................................................................................... 18

Método .............................................................................................................................. 23

Planteamiento del problema .......................................................................................... 23

Objetivos ....................................................................................................................... 25

Objetivo general ........................................................................................................ 25

Objetivos específicos ................................................................................................. 25

Variables ....................................................................................................................... 25

Variable independiente ............................................................................................. 25

Tabla 1. Operacionalizacion del Cuestionario de Intimidación y Maltrato entre

Iguales (CIMEI) ........................................................................................................ 26

Variables dependientes ............................................................................................. 26

Tabla 2. Operacionalizacion del Inventario de Depresión Infantil (Kovacs, 1977). 27

Tabla 3. Operacionalizacion de la Escala de Ideación Suicida (Roberts, 1980). .... 27

Variables controladas .................................................................................................... 27

Tipo de investigación .................................................................................................... 28

Diseño de la investigación ............................................................................................ 28

Participantes .................................................................................................................. 29

Instrumentos .................................................................................................................. 29

Procedimiento ............................................................................................................... 33

Consideraciones éticas .................................................................................................. 34

Análisis de resultados ................................................................................................... 35

Hipótesis de investigación: ....................................................................................... 35

Prueba de comprobación de hipótesis ....................................................................... 35

Cronograma del plan de trabajo de la tesis de Grado.................................................... 37

Referencias ........................................................................................................................ 40

Page 3: Trabajo de Grado. Enero 2012

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Introducción

América latina es considerada “el continente más violento” por el Banco

Interamericano de Desarrollo y el Banco Mundial. Venezuela no escapa de esta

realidad, por el contrario según el “Observatorio Venezolano de Violencia”

dirigido por el psicólogo Roberto Briceño León, Venezuela es el país con más

homicidios en América del Sur, registrando aproximadamente 19.000 asesinatos

en el presente año. De hecho, no es de extrañar que la principal causa de muerte

en la juventud sean los accidentes, homicidios y suicidios.

La violencia se manifiesta de diferentes formas y en ámbitos diversos, son

numerosos los estudios que lo abordan e intentan comprender sus causas y sus

expresiones. En las últimas décadas, a nivel mundial, ha llamado la atención de

medios y profesionales, numerosos eventos violentos ocurridos dentro y en las

adyacencias de las instituciones educativas protagonizados por estudiantes

(Barrientos, 2007).

Actualmente, el CECODAP (Centro Comunitario de Aprendizaje),

organización que defiende los derechos de los niños y adolescentes señala que

existe un fenómeno nuevo, al menos en cuanto a las solicitudes de asesoría

presentadas ante dicha institución. Se trata del fenómeno del bullying, que

constituye una gran preocupación para la sociedad y de manera particular para la

escuela por sus consecuencias físicas y psicológicas sobre quienes participan de

alguna manera en él (Arellano, 2008).

Olweus (1978) y Lowenstein (1977) acuñaron el término de bullying, que

se ha extendido ampliamente y lo definieron como el acoso escolar hacia los

individuos más débiles en forma continua que se manifiesta en golpear, insultar,

amenazar, rechazar y excluir socialmente, etc. Estas conductas involucran a dos

agentes: la víctima y el agresor.

Es fundamental considerar las graves consecuencias de este fenómeno

tanto para la víctima como para el agresor. Como es bien conocido, los

adolescentes tienen entre sus tareas básicas la consolidación de la identidad y el

conocimiento propio y ajeno, para tal fin la convivencia con los pares es crucial

(Quintana, Montgomery y Malaver, 2009).

Page 4: Trabajo de Grado. Enero 2012

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De acuerdo a las investigaciones, los adolescentes que han sido víctimas

de acoso escolar comúnmente presentan problemas de sueño, disminución de la

autoestima, aislamiento social, depresión y dolores de cabeza o abdominales. Por

otra parte, el intimidador, sin duda tiene algunas características particulares, y su

conducta se asocia con conductas antisociales, síntomas de depresión y déficit de

atención e hiperactividad (Díaz-Atienza et al., 2004).

Asimismo, Arellano (2008) señala que la intimidación a largo plazo

produce altos niveles de ansiedad, angustia, hiperactividad e incluso cuadros

depresivos, este último relacionado estrechamente con conductas suicidas, por tal

motivo estos últimos casos son de interés de medios de comunicación masivos.

Además mientras la victima reprima la ira y la frustración que le causan tales

agravios, mayores serán las secuelas y las conductas autodestructivas.

En esta ocasión, se considerarán las variables depresión e ideación suicida

debido a su gran importancia e impacto en la sociedad, específicamente en los

adolescentes, ya que la situación en los planteles ha alcanzado los limites,

provocando muertes violentas y suicidios junto a un gran número de secuelas

físicas y psicológicas (Iriarte, 2008). A pesar de la situación previamente reseñada

y la preocupación pública por dichos episodios violentos, en Latinoamérica

existen escasos estudios del tema (Cajigas, Kajan, Luzardo, Najson, Ugo y

Zamalvide, 2006).

Considerando lo expuesto, la presente investigación pretende examinar la

relación entre los agentes involucrados en el bullying (victimas y agresores) con

los niveles de depresión e ideación suicida en adolescentes. Los resultados

podrían contribuir a la creación de programas preventivos para la depresión y el

suicidio, además de intervenciones para el mejoramiento del clima escolar.

Page 5: Trabajo de Grado. Enero 2012

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Marco Teórico

A continuación, en este apartado se presentarán los aspectos teóricos

relacionados con la investigación, así como antecedentes que sustentan el

desarrollo de la misma. Inicialmente se expondrán los conceptos y tipos de

violencia, centrándose la información posteriormente hacia el ámbito escolar. Se

desarrollarán los conceptos de violencia escolar y bullying, seguidos de

información relacionada con los agentes involucrados (victimas y agresores) y las

consecuencias que estos presentan. Seguidamente, se hará hincapié en los niveles

de depresión e ideación suicida en adolescentes, variables escogidas para la

presente investigación.

La Organización Mundial de la Salud (OMS,1996) define violencia como

“El uso intencional de la fuerza o el poder físico de hecho o como amenaza contra

uno mismo, otra persona o un grupo o comunidad, que cause o tenga muchas

probabilidades de causar lesiones, muerte, daños psicológicos, trastornos del

desarrollo o privaciones” pp.5.

Para Barbeito y Caireta, (2005) la violencia es una conducta que implica

una violación o privación de lo que es fundamental en la persona, entendiendo

como fundamental la integridad física, psíquica o moral, así como los derechos y

libertades que le corresponden al ser humano. Esta no debe ser sólo entendida

como el acto físico de agresión, pues implica también todo lo que dificulte el

desarrollo del sujeto hacia su autorrealización (Arellano, 2007).

Valadez (2008) plantea que la violencia es una conducta aprendida,

consciente o inconscientemente, para la defensa o la agresión a otra persona, ésta

se manifiesta de diversas maneras: física, verbal, psicológica y simbólica.

Al hacer referencia a la violencia física, esta se puede expresar en aquellos

actos dirigidos al cuerpo de la victima para producir daño o dolor, por ejemplo,

golpes, patadas, cachetadas, etc. Por otra parte, la violencia sexual se entiende

como cualquier acto obligado, perpetrado para satisfacer los deseos sexuales del

agresor. Por otro lado, la violencia o maltrato psicológico se refiere a cualquier

acción para controlar, aislar socialmente, desvalorizar, denigrar y humillar (Rey-

Anacona, 2009).

Page 6: Trabajo de Grado. Enero 2012

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La OMS (1996) hace la siguiente clasificación:

Violencia auto infligida: comprende las conductas suicidas y las

autolesiones tales como pensamientos e intentos suicidas y suicidio

consumado, además de la automutilación.

Violencia interpersonal:

a) violencia familiar o de pareja: involucra a los miembros de la familia

o la pareja, por ejemplo el maltrato de menores y de personas

mayores.

b) violencia comunitaria: se da entre personas sin parentesco, conocidas

o no que conviven en una comunidad como por ejemplo, la violencia

juvenil, violación sexual, violencia escolar y laboral.

Violencia colectiva: puede ser social, política y económica.

Violencia escolar

En el presente trabajo, se resalta de modo particular la violencia escolar,

que es uno de los fenómenos que se ha estudiado desde los años 70 en países de

Europa y Estados Unidos. Se definía como violencia escolar a aquellos actos de

vandalismo leve y destrucción a la escuela, sin embargo este concepto ha ido

evolucionando, incluyendo además aquellas conductas agresivas tanto físicas

como verbales por parte de los alumnos hacia sus pares (Estévez, 2005).

Bronfenbrenner (1979) presentó un enfoque para analizar dicho fenómeno.

El autor describe diversas causas para conocer algunos factores que influyen en el

origen de la violencia escolar. Este modelo expone un enfoque ecológico que

incluye los siguientes factores:

1. Biológicos: características genéticas, y psicológicas propias de la persona.

2. Familiares: el clima familiar negativo, los problemas de comunicación

entre padres e hijos, la frecuencia de conflictos familiares, la utilización de

estrategias disfuncionales para su resolución y los estilos de socialización

parental autoritaria y negligente. Así mismo, es común que la familia no

tenga métodos de comunicación asertivos con los hijos y exista violencia

entre sus miembros.

3. Del entorno social: falta de recursos comunitarios en su zona de residencia

y el grado de violencia del barrio o comunidad, la agresividad visualizada

Page 7: Trabajo de Grado. Enero 2012

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en medios de comunicación y la tolerancia e impunidad de la violencia

como valor predominante de la sociedad.

Las conductas violentas perpetradas por niños o adolescentes se

consideran aquellos hechos que incumplen las reglas sociales y escolares para

romper con el clima de convivencia en los centros educativos mediante hechos

punitivos hacia los demás. (Marín, 1997).

Arellano (2008) define la violencia escolar como, aquellas conductas

agresivas realizadas de forma intencional y persistente, de escolares hacia

escolares, que buscan una relación de dominio ejerciendo poder para controlar al

más débil. Para esto, es perpetrada la intimidación y la violencia verbal, física y

psicológica, así como el hostigamiento, lo cual puede generar múltiples

consecuencias en ambos sujetos implicados.

En otro sentido desde la perspectiva de Olweus (2007) el término violencia

o comportamiento violento ha sido malinterpretado como sinónimo de agresión o

comportamiento agresivo. Así pues, dicho autor considera que la violencia debería

ser una clasificación de los comportamientos agresivos, que se ejerce para infligir

una lesión o daño a otro individuo mediante la utilización de su cuerpo o de un

objeto, por ejemplo: un arma. Por lo tanto, se infiere que la agresión o

comportamiento agresivo, es el término general que abarca la definición de acoso

escolar y violencia o comportamiento violento.

Asimismo, la violencia y el acoso escolar se conjugan cuando el acoso se

vuelve físico, por ejemplo, dar puñetazos o empujones. Resulta importante aclarar

que, de igual manera existe acoso sin violencia al realizar por ejemplo, gestos

irrespetuosos o exclusión social; del mismo modo se dan otros comportamientos

violentos que no se consideran dentro de la definición de acoso escolar, como es

el caso de una pelea ocasional durante el recreo (Olweus, 2007).

Bullying

Olweus, (1978) desarrolló los primeros criterios en relación a este término,

con la intención de diferenciar el bullying de otras manifestaciones propias de la

convivencia escolar, tales como: conductas disruptivas, juegos turbulentos,

bromas e incidentes puntuales. Así pues, el bullying se entiende como aquella

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acción agresiva dirigida a otro sujeto que no es capaz de defenderse por sí solo,

con la intención de intimidar, con la intención de intimidar, o victimizar.

Literalmente, del inglés “bully” significa matón o bravucón; en este

sentido, se trataría de conductas que se relacionen con la intimidación, la

tiranización, el aislamiento, la amenaza, los insultos, sobre una víctima o victimas

señaladas que ocupan ese papel, (Avilés, 2002). Así mismo para que la conducta

agresiva se considere como bullying debe cumplir con los siguientes criterios,

(Olweus, 1978):

a) La acción debe ser repetida y por un tiempo prolongado.

b) Una relación de indefensión y desequilibrio de poder social y

psicológico con dos agentes involucrados: victimas y agresores.

c) La agresión puede ser:

Física: referida a agresiones del cuerpo.

Verbal: referida a insultos, sobrenombres y burlas.

Psicológica: referida a aislamiento, rechazos y chantaje.

El abuso que se presenta con mayor frecuencia es el verbal (Riobó, 2005).

El acoso psicológico y el acoso social le siguen en porcentaje. Es importante

mencionar que, en los escolares de primaria dominan la violencia

reactiva/impulsiva; mientras que en los estudiantes de secundaria se observa más

la violencia instrumental de tipo psicológico y el ciber-acoso. (Carozzo, 2010).

Sullivan, Cleary y Sullivan (2003), definen el bullying como un evento o

cadena de eventos de intimidación de naturaleza agresiva o de manipulación

dirigida a un alumno por parte de uno o varios pares durante un tiempo. Este

fenómeno es ofensivo e implica un desbalance de poderes entre los implicados.

De acuerdo a estos autores, existen una serie de elementos involucrados en el

bullying:

El agresor tiene mayor poder que la victima

La conducta de bullying suele ser organizada, sistemática y oculta

Todos los actos de intimidación tienen una dimensión, bien sea

emocional o psicológica

Se produce a lo largo del tiempo

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Las víctimas suelen sufrir daños físicos, emocionales o

psicológicos

Sullivan et al., (2003) también realizan una clasificación del acoso entre

pares:

Acoso Físico: es el más común y asume un daño en la víctima al ser

arañada, escupida, mordida, pegada, pateada, halada por el cabello o a

causa de algún otro ataque físico.

Acoso no físico: conocido también como acoso social, que a su vez

tiene dos divisiones:

Verbal: el cual incluye llamadas telefónicas ofensivas, pedido de

dinero u objetos materiales mediante amenazas, asignación de

sobrenombres, insultos, comentarios crueles y burlas, difusión de rumores

falsos y malintencionados y uso de un lenguaje agresivo hacia la víctima.

No verbal: puede ser directo e incluye los gestos y caras de

desprecio que son utilizados para amedrentar y mantener la posición de

agresor ante la víctima. El acoso no verbal indirecto, implica el aislamiento,

exclusión, envío de notas ofensivas y manipulación.

Los actores más frecuentes del acoso son los varones y predominan las

agresiones físicas, mientras que las chicas recurren más a otras acciones

denigrantes de carácter no físico como los rumores, los chismes y la exclusión.

(Carozzo, 2007).

Agentes involucrados

La víctima y el agresor, son los agentes principales que intervienen en el

fenómeno del bullying, sin embargo, actualmente se entiende que los espectadores

son también partícipes de dicha dinámica. Los espectadores pueden ser testigos

directos, aquellos que presencian el hecho, e indirectos, formados por el personal,

las autoridades del colegio, la familia y la sociedad en general (Trautmann, 2008).

Avilés (2002) realiza una descripción de los perfiles psicosociales de los

principales agentes involucrados en el bullying pertinentes en la presente

investigación:

El agresor: de acuerdo a lo señalado por Olweus (1998), los agresores

tienen temperamento agresivo e impulsivo y cuentan con deficientes

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habilidades para expresar y negociar sus deseos. Asimismo, muestran falta

de control de la ira, son violentos y con bajo nivel de autoestima. En

relación a los aspectos físicos, los agresores son por lo general del sexo

masculino y poseen mayor fuerza física. En lo social, estos presentan un

desbalance en sus respuestas con una gran carga agresiva en sus relaciones

sociales.

Se pueden observar inmersos en grupos de alumnos repitientes por

ser mayores y su integración escolar es deficiente (Cerezo, 1997). Estos no

son tan populares en la escuela como los pares bien adaptados pero sí más

que las víctimas. Asimismo, los agresores suelen no tener lazos fuertes con

su familia y no estar muy interesados por la escuela y al persistir en las

conductas de bullying es muy probable que terminen involucrados en actos

de vandalismo, uso del alcohol y las drogas y porte de armas (Trautmann,

2008).

Las víctimas: por su parte, suelen ser débiles, inseguras, ansiosas,

sensibles, tranquilas, tímidas, con bajos niveles de autoestima y muchas de

ellas presenta de dos a a cuatro veces más problemas de salud somática

que aquellos individuos que no han sido victimizados (Farrigon, 1993).

Las víctimas suelen tener una opinión muy negativa acerca de si mismas y

de su situación. En el ámbito familiar, pueden ser dependientes y apegadas

al hogar, pasando generalmente más tiempo en casa. Físicamente las

víctimas son más débiles, dóciles, lentas y con mayores niveles de

ansiedad e inseguridad. En cuanto a las relaciones sociales, por lo general

son alumnos rechazados y poco populares (Olweus, 1993).

En lo que respecta a las investigaciones, Avilés y Monjas (2005) se

propusieron conocer la incidencia del fenómeno del maltrato y sus formas más

frecuentes. Además, diferenciaron la incidencia de las variables de sexo y edad

entre las conductas de intimidación y victimización y las formas que adoptan.

Se aplicó el CIMEI (Cuestionario sobre Intimidación y Maltrato Entre Iguales,

Avilés, 1999) a una muestra de 496 alumnos entre 12 y 16 años y se concluyó lo

siguiente:

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Al menos uno de cada veinte alumnos fue víctima del bullying por parte

de sus compañeros y la misma proporción aproximadamente fue la de

agresores.

Se encontró más varones agresores que niñas.

A mayor edad menor victimización, mientras la intimidación ocurre

aproximadamente a partir de los 15 años.

Las victimas y los agresores actúan en presencia de testigos que en su gran

mayoría se quedan al margen. Un 81,6% reconoce que el maltrato convive

con ellos diariamente.

Los participantes perciben que existe más maltrato de tipo social y verbal

que de tipo físico, además se observa que los maltratos más elaborados

ocurren en las edades más avanzadas del curso escolar.

El bullying sucede la gran mayoría de las veces en el interior de la

institución educativa y lejos de la vista de los adultos.

Los agresores expresan que agreden debido a que son provocados, y las

victimas informan que son agredidos por el deseo del agresor de gastarles

una broma y molestarlos.

Recientemente, Lozano, Salas y Dovat, (2010) realizaron una investigación

descriptiva con el fin de conocer la prevalencia, las características y la relación del

bullying con el bienestar emocional y físico de los adolescentes. Se contó con una

muestra de 203 alumnos de 2do año de bachillerato, a quienes se les administró un

cuestionario que media las siguientes variables: tipo de participación en el

bullying (No participa, participa como víctima, como agresor, como víctima y

agresor, como espectador pasivo, como espectador activo), edad, sexo, frecuencia

de las agresiones sufridas e infringidas, las formas de agresión, los motivos, la

conducta ante las agresiones, los antecedentes médicos patológicos, consumo de

sustancias psicoactivas, tipo de rendimiento escolar, la existencia de disfunciones

familiares y la existencia de somatización.

Los datos mostraron que, el 65% de los participantes están involucrados en

el bullying (22,4% como agresores, 12% como víctimas y 30% como víctimas y

agresores). En relación con la tipología de la agresión, se determinó que la

mayoría 92% es de carácter psicológico. En cuanto a la motivación, los resultados

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reflejan que 50 % de los participantes lo hace sin ninguna motivación en especial,

además de 78% de los jóvenes que han presenciado el bullying solo 22% han

tomado acciones para intervenir.

Por último se determinó que, la edad de las víctimas y los agresores es de

aproximadamente 13 años y que el 46% de las niñas son acosadas frente a un 37%

de los varones. Es importante resaltar que, no se encontró una correlación

significativa entre el bullying y la situación familiar, sin embargo, se encontró que

existe relación con variables como enfermedades crónicas, consumo de alcohol y

trastornos psicosomáticos.

Evidentemente, existen diversas consecuencias del bullying tanto físicas como

psicológicas, reflejadas en la adolescencia o más adelante en la adultez. Las

victimas de bullying, según investigaciones, tienen más dificultades para

mantener amistades estables que aquellos que no lo son. Por otro lado es muy

probable que algunos individuos comiencen a acosar a otros en respuesta al acoso

del que ellos son víctimas, de esta manera se convierte el bullying en un círculo

vicioso donde cada vez más niños comienzan a ser acosados (Lund, Kragelund,

Hjorth, Kriegbaum, Molbo, Due y Christensen, 2008).

Schäfer, Korn, Smith, Hunter, Mora-Marchan, Singer y Maulen (2004) en su

investigación, aplicaron un cuestionario retrospectivo donde se indaga sobre

experiencias de victimización en la escuela, cuyos resultados arrojaron que el 28%

de los niños habían sido victimizados en la escuela y las consecuencias se

manifiestan de la siguiente manera: En cuanto a seguridad personal y

psicopatologías, el 5% expresó tener ideas recurrentes sobre las agresiones, lo

cual les producía trastornos de sueño, pérdida de apetito y ansiedad. La idea de

suicidio fue recurrente: 9% “Si, una vez”; 13% “si, mas de una vez”. En general

mostraron un auto concepto bajo y mayor vulnerabilidad para la depresión.

Por su parte, Fernández y Martín (2005) exponen también las

consecuencias del bullying tanto en la victima como en el agresor. En primer

lugar, en la víctima los efectos que se han observado con mayor frecuencia

apuntan hacia la sensación de soledad e infelicidad, dicen sentir temores y miedos

permanentes, niveles bajos de autoestima, problemas psicosomáticos y

emocionales, ansiedad y depresión, miedo de asistir a la escuela, problemas en los

Page 13: Trabajo de Grado. Enero 2012

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hábitos alimenticios y de sueño, ideas e intentos suicida. En segundo lugar, en el

agresor se puede predecir que a futuro podría estar involucrado en hechos

delictivos por la naturaleza de su comportamiento. Estos buscan alcanzar

aceptación y popularidad utilizando la violencia y sometiendo a sus pares a la

sumisión. La impunidad de sus acciones es reforzante para su intolerancia y falta

de autocontrol.

Igualmente Baeza, Vidrio, Martínez y Godoy (2010) describen las

consecuencias que el bullying puede tener para la víctima, afirmando que es

común que dichos individuos padezcan de ataques de ansiedad, gastritis, cefalea,

terrores nocturnos, fobias y miedo a ir a la escuela. Así mismo, sienten que sus

vidas se encuentran amenazadas sin saber cómo solucionar esta situación. Por otro

lado, en la adultez se pueden presentar problemas de ansiedad, comportamiento

antisocial y abuso de drogas y alcohol.

De igual manera, se asocia la victimización con alteraciones del sueño,

vómitos, dolores de cabeza y del cuerpo. Además, se relaciona con poca

aceptación de los pares, debilidad física, sentimientos de soledad y abandono. En

el ámbito escolar, presentan baja satisfacción y rendimiento escolar lo que puede

causar a largo plazo ausentismo y fobia al colegio. Finalmente se ha comprobado

que las victimas de bullying suelen presentar pensamientos e ideas suicidas

(Toledo, 2009).

Como se ha estudiado, las consecuencias en las victimas pueden ir desde la

pérdida de la capacidad de establecer relaciones interpersonales estables, de la

confianza en sí mismo y los demás hasta altos niveles de depresión que, en

ocasiones le lleva a desear la muerte, en otras acrecienta el deseo de venganza

como modo de escapar a las agresiones vividas (Cerezo, 2008).

Así pues, el bullying se ha asociado con diversas variables que son

consecuencia de su práctica. En esta investigación se tomarán en cuenta los

niveles de depresión y de ideación suicida por ser las de mayor gravedad y

competencia en la psicología.

Niveles de depresión

En 2002, la depresión se consideró como la 4ta enfermedad a nivel

mundial y se predijo que en 2030 alcanzaría el 2do lugar (López y Mathers,

Page 14: Trabajo de Grado. Enero 2012

14

2006). De hecho, las consecuencias sociales y personales de la depresión para el

individuo que la sufre son diversas, en particular los hombres experimentan un

déficit significativo en el ámbito laboral por otra parte las personas con depresión

tienen más probabilidades de morir principalmente por el suicidio (Lund et al.,

2008).

La APA (Asociación Americana de Psicología, 1994) define la depresión

como un trastorno caracterizado por sentimientos de tristeza, irritabilidad,

cambios en el apetito y en los patrones de sueño, baja autoestima y pensamientos

o actos suicidas.

Por su parte el DSM-IV (Manual Diagnostico y estadístico de los

Trastornos Mentales) clasifica la depresión como un trastorno del estado de

ánimo que incluye aquellos que tienen como característica principal una alteración

del humor, ésta clasificación se divide en:

1. Trastorno depresivo mayor.

2. Trastorno distímico.

3. Trastorno bipolar.

Visto de esta forma, se describirá a continuación los criterios para

identificar los episodios afectivos que están presentes en la depresión y así poder

diagnosticar un trastorno depresivo mayor.

Episodios afectivos

Criterios para el episodio depresivo mayor.

a. Presencia de cinco (o más) de los siguientes síntomas durante un

periodo de 2 semanas, que representan un cambio respecto a la

actividad previa; uno de los síntomas debe ser (1) estado de ánimo

depresivo o (2) perdida de interés o de la capacidad para el placer.

1. Estado de ánimo depresivo la mayor parte del día, casi cada día según

lo indica el propio sujeto (p. ej., se siente triste o vacio) o la

observación realizada por otros (p. ej., llanto). Nota: En los niños y

adolescentes el estado de ánimo puede ser irritable.

2. Disminución acusada del interés o de la capacidad para el placer en

todas o casi todas las actividades, la mayor parte del día, casi cada día

(según refiere el propio sujeto u observan los demás).

Page 15: Trabajo de Grado. Enero 2012

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3. Pérdida importante de peso sin hacer régimen o aumento de peso (p. ej.,

un cambio de más del 5% del peso corporal en 1 mes), o perdida o

aumento del apetito casi cada día. Nota: En los niños hay que valorar el

fracaso en lograr los aumentos de pero esperables.

4. Insomnio o hipersomnia casi cada día.

5. Agitación o enlentecimiento psicomotores casi cada día (observable por

los demás, no meras sensaciones de inquietud o de estar enlentecido).

6. Fatiga o pérdida de energía casi cada día.

7. Sentimiento de inutilidad o de culpa excesivos o inapropiados (que

pueden ser delirantes) casi cada día (no los simples autoreproches o

culpabilidad por el hecho de estar enfermo).

8. Disminución de la capacidad para pensar o concentrarse, o indecisión,

casi cada día (ya sea una atribución subjetiva o una observación ajena).

9. Pensamientos recurrentes de muerte (no solo temor a la muerte),

ideación suicida recurrente sin un plan especifico o una tentativa de

suicidio o un plan especifico para suicidarse.

b. Los síntomas no cumplen los criterios para un episodio mixto.

c. Los síntomas provocan malestar clínicamente significativo o deterioro

social, laboral o de otras áreas importantes de la actividad del individuo.

d. Los síntomas no son debido a los efectos fisiológicos directos de una

sustancia (p. ej., una droga, un medicamento) o una enfermedad medica

(p. ej., hipotiroidismo).

e. Los síntomas no se explican mejor por la presencia de un duelo (p. ej.,

después de la pérdida de un ser querido), los síntomas persisten durante

más de 2 meses o se caracterizan por una acusada incapacidad

funcional, preocupaciones mórbidas de inutilidad, ideación suicida,

síntomas psicóticos o enlentecimiento psicomotor.

Criterios para el diagnóstico de el trastorno depresivo mayor, episodio

único.

a. Presencia de un único episodio depresivo mayor.

b. El episodio depresivo mayor no se explica mejor por la presencia de un

trastorno esquizoafectivo y no esta superpuesto a una esquizofrenia, un

Page 16: Trabajo de Grado. Enero 2012

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trastorno esquizofreniforme, un trastorno delirante o un trastorno

psicótico no especificado.

c. Nunca se ha producido un episodio maniaco, un episodio mixto o un

episodio hipomaniaco.

Nota: Esta exclusión no es aplicable si todos los episodios similares a

la manía, a los episodios mixtos o ala hipomanía son inducidos por

sustancias o por tratamientos o si se deben a los efectos fisiológicos

directos de una enfermedad medica.

Debe señalarse que presuntamente hay factores biológicos y psicológicos

que causan la depresión, sin embargo, el fenómeno del bullying es un ejemplo de

un factor psicosocial prevenible que puede causar dicha enfermedad (Lund,

Kragelund, Hjorth, Kriegbaum, Molbo, Due y Christensen, 2008).

En el 2008, Lund et al., realizaron una investigación donde examinaron la

relación que existe entre el bullying, la depresión en la adultez y el estado de salud

mental de los padres como factor determinante para la depresión en hombres, ya

que se ha demostrado que puede ser la causa del desarrollo dicha enfermedad. Se

utilizó como muestra a 6096 hombres nacidos en el año 1953 y se aplicó el Major

Depression Inventory (MDI) para medir la depresión, basado en 12 ítems.

Además se realizaron preguntas como: ¿Algún doctor le ha dicho que ud sufre de

depresión? (si/no), seguidamente se pide que el sujeto especifique la edad en la

que fue diagnosticado teniendo la opción de responder lo siguiente: antes de los

20 años, 21-30 años, 31-40 años, después de los 41 años.

En segundo lugar para medir el bullying se realizaron preguntas como:

¿alguna vez fuiste acosado en la escuela? con la opción de responder lo siguiente:

1.No 2. Si, por un corto periodo de tiempo 3. Si, por mucho tiempo. Esta

información se utilizó para crear tres variables: a) prevalencia del bullying vs

ausencia b) intensidad del bullying c) duración. Dichas preguntas fueron

desarrolladas a partir de las investigaciones de Olweus (1989).

Para medir la variable relacionada con la salud mental de los padres se

utilizaron dos preguntas: ¿Su madre biológica sufrió alguna enfermedad mental?

(si/no/no lo sé/), ¿Su padre biológico sufrió alguna enfermedad mental? (si/no/no

lo sé). Esta información se utilizó para determinar lo siguiente: a) al menos uno de

Page 17: Trabajo de Grado. Enero 2012

17

los padres sufrió alguna enfermedad mental b) ninguno de los padres ha sufrido

una enfermedad mental c) al menos uno de los padres sufrió de alguna

enfermedad mental y no conozco si el otro sufrió de alguna enfermedad mental y

d) no conozco si mis padres sufrieron de alguna enfermedad mental.

Los resultados de dicho estudio, demuestran que los participantes que

fueron víctimas de bullying en la escuela tienen más probabilidades de ser

diagnosticados con depresión entre los 31 y los 51 años de edad o de presentar

síntomas severos a los 51 años. Los autores concluyen que ser víctima de

bullying, puede ser uno de los factores psicosociales más severos para el

desarrollo de la depresión en la edad adulta. Sin embargo, no se encontraron

evidencias acerca de una relación entre el bullying y la existencia de

enfermedades mentales en los padres (Lund et al., 2008).

Uba, Yaacob y Juhari (2009) examinaron los predictores de depresión en

la agresión entre pares utilizando como muestra 242 adolescentes entre 13 y 17

años. Se aplicó el Inventario de Depresión Infantil (Kovacs, 1985) para medir la

depresión en niños y adolescentes. Para evaluar el bullying, se contó con el

Cuestionario de agresión entre pares (Rigley y Slee, 1993) que contiene 3

subescalas que incluyen:

1. Subescala de bullying de 6 ítems para medir las conductas agresoras,

2. Subescala de 5 ítems para medir la tendencia a ser victimizado por

otros.

3. Subescala de 4 ítems para medir el comportamiento pro-social.

El estudio indicó que la depresión se relaciona significativamente con el

bullying (r=.296,p ≤.01) y la victimización (r = .432, p ≤ .01). Además se

demostró que, no existe una relación significativa entre el bullying y las conductas

prosociales coincidiendo con estudios previos que concluyeron que, el

comportamiento prosocial se relaciona con una buena salud mental. Por otro lado,

se encontró una diferencia considerable en relación con el género, ya que los

participantes del sexo masculino se inclinan más hacia las conductas de bullying

que las participantes del sexo femenino.

Por último, se demostró que existen predictores que relacionan a las

victimas con la depresión, y que los adolescentes con altos puntajes para el

Page 18: Trabajo de Grado. Enero 2012

18

bullying de igual manera indican altos puntajes para la depresión, sin embargo, no

se encontraron diferencias significativas entre el género en relación a la depresión.

Los resultados de dicha investigación confirman los hallazgos de estudios

anteriores sobre la agresión entre pares y su relación con la depresión

concluyendo que los agresores y las victimas presentan significativamente más

predictores de depresión que aquellos individuos que no están involucrados en

este fenómeno.

Niveles de Ideación suicida

Las investigaciones asocian la ideación suicida con la depresión,

pensamientos disfuncionales y eventos negativos de la vida (Adams y Adams,

1996), así como también se ha vinculado con la autoestima; siendo la depresión el

predictor más influyente en la conducta suicida.

Mundialmente el suicidio se considera como un problema de salud pública

que se ha incrementado con el pasar de los años reflejado en las cifras de suicidio

en la población adolescente entre los 15 y 19 años, p e., en Venezuela en el año

1981 la tasa de suicidio era 9,0 para llegar en 1989 a 10,6 (Robledo, 2007).

La adolescencia es un período de numerosos cambios, tanto físicos como

emocionales, llena de nuevos retos que impone la sociedad. Diversas vivencias

que ocurren durante la adolescencia, pueden ocasionar pensamientos suicidas en

el adolescente, aun cuando estos pensamientos pueden estar presentes desde la

niñez (Rosselló y Berríos, 2004)

Para profundizar acerca de este tema es esencial definir los siguientes

términos según Serfaty (1998):

Suicibilidad: conductas e impulsos que abarcan desde ideación,

planificación, intento suicida y suicidio consumado.

Suicidio: etimológicamente significa “muerte de sí mismo”, hecho que

una persona en forma voluntaria e intencional realiza caracterizado

por la fatalidad y la premeditación.

Intento de suicidio: Conductas que intencionalmente realiza un

individuo para dañarse a sí mismo para alcanzar la muerte sin lograr

su objetivo.

Page 19: Trabajo de Grado. Enero 2012

19

Ideación suicida: pensamientos relacionados con la muerte expresados

en ideas como “no quiero seguir viviendo” estas expresiones pueden o

no contener la planificación del suicidio. Se pueden clasificar en:

i. Leves: solo ganas de morir.

ii. Moderadas: ganas de morir con esbozo de clasificación.

iii. Graves: decisión de morir con planificación exhaustiva para su

concreción.

Pagán, Parrilla y Parrilla, (1990) igualmente afirman que el comportamiento

suicida implica una serie de conductas manifestadas por ideas, amenazas, intentos

y la consumación del suicidio. La idea, hace referencia a aquellos pensamientos

concurrentes que tiene el sujeto acerca del deseo de matarse o morir. La amenaza,

es por su parte la expresión de ese deseo, bien sea de forma oral o escrita, y que

puede estar acompañada por algún daño auto infligido o la muerte. Finalmente, el

intento es toda aquella acción realizada con el objetivo de causarse un daño o

quitarse la vida.

Se ha evidenciado que los eventos de vida negativos contribuyen en el

desarrollo de síntomas depresivos (Kwon y Oei, 1992). A pesar de no estar

justificado el suicido por causa alguna, ciertos sucesos pueden colocar en una

situación de vulnerabilidad caracterizada por desesperanza extrema y desaliento,

lo cual predispone al adolescente a cometer una conducta suicida. Algunos de

estos sucesos suelen estar relacionados a los cambios físicos, las relaciones con

los pares, los conflictos filosóficos y espirituales y la influencia familiar (Kirk,

1993).

Roland (2002) estudió los síntomas depresivos y pensamientos suicidas en los

agresores, las victimas y los alumnos no involucrados en el bullying, en una

muestra de 2.088 niños de 8vo grado. Los resultados revelaron que tanto los

agresores como las víctimas tenían puntuaciones significativamente más altas de

síntomas depresivos y pensamientos suicidas que los alumnos no involucrados en

el bullying. Asimismo, las víctimas tenían una puntuación media

significativamente mayor en depresión que los agresores, observándose en los

agresores puntuaciones más altas en pensamientos suicidas que las víctimas

Page 20: Trabajo de Grado. Enero 2012

20

Díaz-Atienza et al. (2004) realizaron un estudio con una muestra de 410

estudiantes entre 12 y 17 años de edad cuyo objetivo era conocer la relación entre

ser agresor o victima de bullying con la depresión e ideación suicida. El

instrumento para conocer la incidencia del bullying fue el Cuestionario sobre las

Relaciones entre Compañeros de clase (Fernández, 1998) donde se definen como

victimas aquellos participantes que sufren la intimidación (abusos, amenazas o

malos tratos) con una frecuencia mayor de cuatro veces desde que empezó el

curso escolar, así pues, los agresores fueron aquellos individuos que respondieron

que en lo que llevaban de año escolar habían acosado a algún compañero por más

de cuatro veces.

Se utilizó el Inventario de Depresión Infantil (Kovacs, 1980) donde se

incluyeron preguntas sobre ideación e intentos suicida. Las preguntas de ideación

suicida valoraron lo siguiente: 1) Autoestima, 2) Ideación, 3) Ganas de vivir, 4)

Esperanza, 5) Deseo de muerte, 6) Ilusión de vida, 7) Intentos de autolisis o

autolesiones voluntarias.

En consonancia con los resultados, los autores concluyeron que las víctimas y

los agresores presentan más síntomas depresivos que los adolescentes que no se

encuentran expuestos a este tipo de comportamiento. Además, la investigación

arrojó datos que demuestran que los agresores presentan más síntomas depresivos

y las victimas reflejan mayor deseo de muerte. Por otro lado, se constató que el

mayor número de víctimas y agresores se encuentran en los grupos de más de 13

años (Díaz- Atienza et al., 2004).

Fekkes, Pijpers y Verloove-Vanhorick (2004) realizaron un estudio transversal

a una muestra de 2.766 niños de primaria de 9 años a 12 años. Les fue aplicado un

cuestionario sobre el comportamiento de intimidación y problemas de salud. El

objetivo de dicha investigación fue evaluar la asociación entre el comportamiento

de intimidación y una gran variedad de problemas de salud psicosomáticos y la

depresión. En los resultados se obtuvo que, las victimas de bullying mostraban

mayores posibilidades de padecer depresión y síntomas psicosomáticos en

comparación con niños que no participan en el comportamiento de intimidación.

Por su parte, Brunstein et al. (2007) plantearon como objetivo en su

investigación, evaluar la asociación entre la conducta de intimidación y la

Page 21: Trabajo de Grado. Enero 2012

21

depresión, ideación e intento suicida en los adolescentes. Utilizaron una encuesta

de auto informe en una muestra de 2342 alumnos obteniendo como resultados

que, aproximadamente el 9% de la muestra manifestó ser víctima frecuentemente

y el 13% informó haber intimidado a sus pares. Asimismo, constataron que la

exposición frecuente a la victimización estaba relacionada con un alto riesgo de

depresión, ideación e intentos de suicidio en comparación con los adolescentes no

involucrados en este fenómeno. Igualmente, en los agresores se encontraron

resultados similares, especialmente entre las niñas

Brunstein, Sourander, Kumpulainen, Piha, Tamminen, Moilanen, Almqvist

y Gould (2008) en un estudio que buscaba conocer, la relación predictiva entre la

conducta de acoso infantil con la depresión y la ideación suicida a los 18 años,

aplicaron una prueba psicológica a 2348 niños nacidos en 1981 para un examen

del servicio militar. Los jóvenes escogidos, habían sufrido de acoso escolar a la

edad de 8 años. Los resultados de la investigación reflejan que, los niños que

fueron intimidadores con frecuencia eran más propensos a sufrir una depresión

grave e ideación suicida, en comparación con niños que no eran intimidadores.

Los niños que fueron víctimas a su vez, eran más propensos a estar deprimidos y

presentar ideación suicida a los 18 años, concluyendo que el acoso escolar en la

niñez es un factor de riesgo para la depresión e ideación suicida posterior.

Por su parte, Flemings y Jacobsen (2009) se propusieron establecer una

relación entre el bullying y los síntomas depresivos en 8131 adolescentes,

aplicaron una encuesta de salud y los resultados revelaron que 47% de los

estudiantes habían sido víctimas del bullying y 30% de ellos reportaban haberse

sentido tristes y desesperanzados por 2 o más semanas en el último año. Los

estudiantes de noveno año de secundaria reportaron niveles más altos de soledad,

problemas del sueño e ideación suicida. Las niñas evidenciaron más síntomas de

depresión, desesperanza, soledad, problemas del sueño y pensamiento suicidas

que los niños. Además demostraron que ser acosado por un largo periodo de

tiempo suele relacionarse con un aumento estadísticamente significativo para la

depresión.

Page 22: Trabajo de Grado. Enero 2012

22

Luego de haber realizado la revisión bibliográfica, resulta de interés

relacionar el bullying con la depresión e ideación suicida en adolescentes

venezolanos, debido a la ausencia de investigaciones en el país.

Por otro lado, como manifestó Menéndez (2004) la mayoría de las

investigaciones están enfocadas en describir los efectos negativos sobre la

víctima, dejando de lado al agresor quien también presenta características

relevantes. Mayormente, en los agresores han sido evaluados los predictores de

conducta antisocial, ignorando que estos al igual que las victimas pudieran

presentar rasgos de depresión e ideación suicida. Es por esto que se realizará un

estudio de los dos principales agentes involucrados en el fenómeno del bullying

considerando la relación entre las variables seleccionadas.

Page 23: Trabajo de Grado. Enero 2012

23

Método

Planteamiento del problema

Actualmente la sociedad está invadida por hechos violentos que se reflejan

diariamente en la prensa, la televisión y en la vida cotidiana de los ciudadanos del

mundo. Dichos eventos generan un clima de incertidumbre y desesperanza por la

imposibilidad de convivir en paz y tranquilidad. Es alarmante comprobar que una

gran cantidad de jóvenes han escogido el camino de la violencia, actuando

muchos de ellos dentro de los planteles de educación (Arellano, 2007).

Organismos internacionales como la UNESCO y la UNICEF junto a

profesores, psicólogos y personas involucradas en el ramo, han visto con

preocupación este fenómeno debido al aumento de las cifras de las conductas

agresivas de adolescentes, lo que dificulta el desarrollo normal del aprendizaje

(Fernández, 2011).

Recientemente, el 5 de Octubre de 2011, el diario Tal Cual publicó un

artículo acerca de las cifras que manejan las instituciones pertenecientes a la “Red

por la Convivencia Pacífica” (CECODAP, el Instituto de Investigaciones Jurídicas

de la UCAB, la Fundación TAAB, Fe y Alegría, la fundación Luz de vida, el

Observatorio Venezolano de Violencia Escolar, el centro Gumilla y la Cátedra de

Prevención de Violencia Escolar). Ellos registraron entre el 2009 y el 2010 un

número de 339 casos de violencia escolar.

En la actualidad, este tipo de conductas violentas entre escolares se entiende

como bullying. Trautman (2008), señala que es un comportamiento agresivo hacia

un individuo más débil escogido y, no al azar, con el fin de causar atropellos

repetidamente.

Avilés y Monjas (2005), quienes hicieron una investigación sobre el tema,

concluyeron que de veinte alumnos, más de uno ha sufrido de violencia escolar

por parte de sus pares, lo que es similar en cantidad, a los alumnos que son

agresores de forma continua.

Es hora de aceptar que, el bullying es una realidad en los colegios y liceos

del país y que se han venido contemplando como conductas normales en los

adolescentes, encubriendo lo que verdaderamente implica este tipo de violencia.

Page 24: Trabajo de Grado. Enero 2012

24

Así pues, resulta necesario tomar en cuenta las consecuencias de las

conductas de bullying en los escolares. Menéndez (2004), afirma que a la víctima

se le ha relacionado con diversas variables tales como: fracaso escolar, ansiedad y

ausentismo escolar. Por su parte, el intimidador se asocia con: conductas

antisociales, depresión, déficit de atención e hiperactividad (Díaz-Atienza et al.,

2004).

Los estudios sobre el bullying y la ideación suicida son bastante nuevos,

así como su asociación con el malestar depresivo. Sin embargo, estas variables se

han convertido en objeto de estudio probablemente porque su aparición hace

referencia al tabú que ha representado por mucho tiempo este tema (González-

Forteza, Ramos, Vignau y Ramírez, 2001). En relación a esto, es importante

resaltar que el suicidio es la tercera causa de mortalidad más común en jóvenes de

15 a 29 años (Fréitez, 2008).

Haciendo hincapié en las últimas dos variables mencionadas, se resalta la

investigación realizada por Uba, Yacoob y Juhari (2010) quienes a través de su

estudio obtuvieron como resultado una correlación significativamente positiva

entre el bullying y la depresión en adolescentes.

Brunstein, Marroco, Kleinman, Schonfeld y Gould (2007) determinaron

que la condición a largo plazo de ser víctima o agresor se relaciona con la

depresión e ideación suicida en comparación con aquellos adolescentes que no

están involucrados en conductas agresoras ni de victimización.

Por su parte Mills, Guerin, Lynch, Daly y Fitzpatrick (2004) concluyeron

en su estudio que ser víctima de bullying, está significativamente asociado con la

depresión y pensamientos e intentos suicidas.

Los antecedentes hasta aquí expuestos, permiten dimensionar el fenómeno

para entender su importancia, pues, como se ha demostrado este no sólo puede

marcar para siempre a las personas involucradas si no traer la muerte como

consecuencia de su práctica (Iriarte, 2008).

Al considerar las repercusiones físicas y psicológicas de estos actos

violentos entre pares, en las escuelas y liceos, es lamentable que en América

Latina se hayan empleado únicamente encuestas con base en lo antropológico y

sociológico, obviando la importancia de los procesos psicológicos. Por otro lado,

Page 25: Trabajo de Grado. Enero 2012

25

como se mencionó anteriormente, las primeras investigaciones estaban enfocadas

en describir los efectos negativos sobre la víctima, dejando de lado al agresor

quien también presenta características relevantes (Menéndez, 2004). Asimismo,

las variables estudiadas en la presente investigación no han sido relacionadas

anteriormente en Venezuela a pesar del impacto de la violencia escolar en los

adolescentes del país (CECODAP, 2009, 2010).

Por otro lado, cuando el bullying está presente en la adolescencia podría

considerarse como un factor de riesgo para padecer depresión e intentar suicidarse

por lo que su prevención podría disminuir significativamente ambos riesgos.

De acuerdo a lo planteado, se formulan las siguientes interrogantes:

¿Existe una diferencia significativa entre los niveles de depresión e ideación

suicida en victimas y agresores del bullying?

Objetivos

Objetivo general

Examinar la relación entre los agentes involucrados del bullying (victimas y

agresores) con los niveles de depresión e ideación suicida en adolescentes.

Objetivos específicos

Identificar adolescentes víctimas y agresores del bullying.

Determinar los niveles de depresión en adolescentes víctimas y

agresores del bullying.

Determinar la presencia de ideación suicida en adolescentes

víctimas y agresores del bullying.

Establecer la diferencia entre los niveles de depresión e ideación

suicida en victimas y agresores del bullying.

Variables

Variable independiente

Agentes involucrados en el bullying:

Definición conceptual: alumnos involucrados en conductas basadas en el daño

físico y psicológico, donde existe una relación de dominio-sumisión en la cual se

Page 26: Trabajo de Grado. Enero 2012

26

figuran dos perfiles: el agresor quien se dirige de forma repetitiva a hacia otro

compañero que toma el papel de víctima (Olweus, 1978; Avilés, 2005).

Definición operacional: puntaje obtenido para identificar víctimas y agresores

del bullying mediante la aplicación del Cuestionario de Intimidación y Maltrato

entre Iguales CIMEI para (Avilés, 1999).

Tabla 1. Operacionalización del Cuestionario de Intimidación y Maltrato entre Iguales

(CIMEI) (Avilés, 1999).

Variable Dimensión Definición Perfiles Ítems

Agentes

involucrados

Cognitivo -

conductual

Alumnos percibidos

como inseguros,

físicamente más débiles

y con pocas habilidades

sociales, sometidos a

constantes episodios de intimidación por parte de

sus pares.

Alumnos considerados

físicamente más fuertes

que sus pares, dominantes e impulsivos,

que ejercen conductas

agresivas, por lo general violentas, con aquellos

pares que consideran

más débiles.

Victimas

Agresores

10, 11, 12, 13

y 18.

19, 20, 21 y

24.

Variables dependientes

Niveles de depresión

Definición conceptual: síndrome o agrupación de síntomas en el que predominan

los síntomas afectivos (tristeza patológica, decaimiento, irritabilidad, sensación

subjetiva de malestar e impotencia frente a las exigencias de la vida) aunque, en

mayor o menor grado, también están presentes síntomas de tipo cognitivo,

volitivo o incluso somático, por lo que podría hablarse de una afectación global de

la vida psíquica, haciendo especial énfasis en la esfera afectiva.

El modelo teórico propuesto por Beck sobre la base del cual se desarrolló el

Inventario de Depresión infantil de Kovacs, señala que los eventos negativos

producidos en edades tempranas forman un estilo de pensamiento con esquemas

cognitivos inadecuados acerca de uno mismo, el mundo y el futuro. Estos

esquemas se mantienen latentes en la persona y se activan cuando surge algún

acontecimiento análogo a la experiencia que les dio origen (Ramírez, 2009)

Page 27: Trabajo de Grado. Enero 2012

27

Definición operacional: puntaje obtenido en el Inventario de Depresión

Infantil (Kovacs, 1977) con el requerimiento de presentar los síntomas depresivos

por al menos 2 semanas.

Tabla 2. Operacionalización del Inventario de Depresión Infantil (Kovacs, 1977).

Variable Dimensión Definición Escalas Ítems

Depresión Cognitiva-

Conductual

Eventos negativos

producidos en edades

tempranas que forman un

estilo de pensamiento

con esquemas cognitivos

inadecuados acerca de

uno mismo, el mundo y

el futuro. Estos esquemas

se mantienen latentes en

la persona y se activan

cuando surge algún

acontecimiento análogo a

la experiencia que les dio

origen.

Disforia

Autoestima

2, 3, 6, 11,

13, 14, 15,

19, 23,

24 y 26.

1, 4, 5, 7, 8,

9, 10, 12,

16, 17, 18,

20, 21, 22,

25 y 27

Niveles de ideación Suicida:

Definición conceptual: ideas sobre la posibilidad de hacerse daño a sí mismo y

de producirse la propia muerte (Roberts, 1980).

Definición operacional: Puntaje obtenido en la Escala de Ideación Suicida

(Roberts, 1980).

Tabla 3. Operacionalizacion de la Escala de Ideación Suicida (Roberts, 1980).

Variable Dimensión Definición Ítems

Ideación

suicida Cognitiva.

Ideas sobre la posibilidad de

hacerse daño a sí mismo y de

producirse la propia muerte.

1,2,3 y 4

Variables controladas

Ramos y cols. (2004) hacen una clasificación de las variables extrañas de

acuerdo a su procedencia. Nos basaremos en los conceptos de estos autores para el

desarrollo de esta investigación:

Page 28: Trabajo de Grado. Enero 2012

28

Variables extrañas originadas por los participantes: para el control de la

variable edad y sexo se seleccionarán alumnos entre un rango reducido

de 14 y 16 años que se registrarán por medio de una ficha de datos y se

seleccionaran muestras donde hayan igual número de hembras y varones.

En relación a al control de las variables socio-demográficas y de nivel

socioeconómico, se utilizaran los alumnos que pertenezcan a dos liceos en

zonas de clase media-baja.

Variables extrañas originadas por la situación: Para controlar ciertas

variables como la iluminación y la contaminación sónica se examinarán

previamente los salones donde se aplicarán los instrumentos para constatar

que se encuentren en el estado requerido y se aplicará la prueba en el

mismo lugar para todos los alumnos. Asimismo, las investigadoras al

momento de aplicar las pruebas vestirán de forma neutral y utilizarán las

mismas instrucciones hacia todos los participantes.

Tipo de investigación

El presente estudio se enmarca dentro de lo denominado, investigación no

experimental de campo, es considerada no experimental, por la no manipulación

de las variables de estudio, pues estas variables están presentes como una

característica de la población estudiada (Kelinger y Lee, 2002), por otro lado se

considera de campo puesto que los datos de los sujetos serán recolectados

directamente y en su ambiente natural. Así mismo, las variables serán observada y

evaluadas en situaciones ya existentes y no construidas por el investigador, sin

ejercer influencia sobre las mismas (Arias, 2006). Los objetivos del estudio son de

tipo descriptivo (Ramos et al. 2004).

Diseño de la investigación

Para la investigación se utilizará un diseño cuasi experimental de dos

grupos independientes, donde no se manipularan las variables y los sujetos de

investigación; estos no serán elegidos al azar si no que serán escogidos por una

característica propia de los participantes. La muestra será seleccionada, de

acuerdo al puntaje obtenido a través del CIMEI, formando dos grupos: agresores y

victimas. Por otro lado, la investigación es de corte transversal, pues los datos

Page 29: Trabajo de Grado. Enero 2012

29

serán seleccionados en un solo momento para cumplir los objetivos de la

investigación (Hernández, Fernández y Baptista, 2001).

Participantes

La población estará compuesta por alumnos de ambos sexos cursantes de

9no

grado, 4to y 5to año de bachillerato de los liceos “Federico Carmona” y

“Ambrosio Perera”, ubicados en zonas de clase media-baja, de la ciudad de

Barquisimeto, Estado Lara.

La muestra no probabilística, será seleccionada a conveniencia (Peña,

2009) y estará conformada por los participantes que tengan edades comprendidas

entre 14 y 16 años y que cumplan con los requisitos de agresores o víctimas,

según los resultados de la prueba que se aplicará para evaluar tales perfiles

(CIMEI). Por lo tanto, la muestra se reducirá a un número aproximado de 50 en

cada grupo, haciendo un total de 100 alumnos.

Instrumentos

Con el objetivo de evaluar las variables en estudio, se aplicarán tres pruebas:

1. Cuestionario sobre Intimidación y Maltrato Entre Iguales (CIMEI):

El cual consta de 32 ítems de opción múltiple, más un ítem de respuesta

abierta. Los participantes deben marcar con una cruz, la opción que mejor

describa su comportamiento, en la hoja especial para respuestas. La prueba será

aplicada de forma anónima, aunque el último ítem brinda, al alumnado, la

oportunidad de identificarse si así lo desea. La prueba consta de una hoja de

instrucciones (Avilés y Monjas, 2005).

El cuestionario está concebido considerando seis dimensiones teóricas que

exploran:

Aspectos situacionales del alumnado (7 items)

Condiciones del perfil de las victimas (7 items)

Aspectos situacionales de las intimidaciones (5 items)

Condiciones del perfil de los agresores y de las agresoras (7 items)

Condiciones del perfil de los espectadores y de las espectadoras (4 items)

Propuestas de solución (3 items)

Page 30: Trabajo de Grado. Enero 2012

30

Este instrumento está basado en los elaborados, previamente, por Ortega,

Mora y Mora-Merchán (1995) y por Fernández y Ortega (1998). Sin embargo,

todos ellos son modificaciones del concebido por Olweus (1983). Este último ha

tenido amplia repercusión en el ámbito científico y ha sido utilizado en múltiples

investigaciones sobre la intimidación y el maltrato entre iguales en Europa

(Byrne, 1994; Fonzi et al., 1999; O´Moore, Kirkham y Smith, 1997; Pereira et al.,

1996, y otros).

El análisis estadístico de la validez (cada ítem en forma aislada) se efectuó

mediante la Lambda y Tau de Goodman y Kruskal. Se utilizó el método de

escalamiento óptimo de componentes principales no lineales (Princalps) y los de

validez por juicio de expertos, este último, por su mejor accesibilidad y mayor

contacto con la realidad del aula y la práctica docente. La validez de contenido

obtenida entre los jueces fue alta (8.612). Por su parte, la validez del constructo se

comprobó mediante la coincidencia de las dimensiones del planteamiento teórico

previo y los resultados obtenidos con el escalamiento óptimo de componentes no

lineales “Princalps”.

El análisis de consistencia interna del instrumento se efectuó mediante el alfa

de Cronbach que permitió valorar los coeficientes de fiabilidad de las variables

integradas en cada uno de los ítems, el resultado fue de 0.8278. Luego se asigna a

cada sujeto una puntuación en cada factor, y se practica una comparación de

medias a través de pruebas no paramétricas, finalmente se obtienen baremos para

cada uno de los nueve factores y para el total de la escala.

Las respuestas de los sujetos, se interpretan a partir de los baremos obtenidos

del análisis factorial aplicado a la muestra, que permite situar al sujeto en cada

uno de los factores y en la escala global de riesgo de ocurrencia de maltrato.

2. El Inventario de Depresión infantil (CDI) de Kovacs (1977):

Es un instrumento compuesto por 27 ítems. Fue creado para sujetos entre 8 y

17 años. El tiempo de aplicación es, aproximadamente, entre 10 y 20 minutos.

Cada uno de los ítems consta de tres opciones con el fin de medir intensidad y/o

frecuencia de síntomas depresivos en el niño o el adolescente en una escala tipo

Likert. Las respuestas obtienen puntuaciones desde “cero” (ausencia del síntoma)

hasta “dos” (forma más severa del síntoma) (Polaino-Lorente y Ascaso, 1998).

Page 31: Trabajo de Grado. Enero 2012

31

El contenido de los ítems del CDI cubre la mayor parte de los criterios para el

diagnóstico de la depresión:

Autoestima negativa

Problemas interpersonales

Sentimientos de inutilidad

Anhedonia

Baja autoestima

Los resultados obtenidos de las contestaciones al cuestionario aportan

datos sobre depresión total en el niño o adolescente. La puntuación total puede

oscilar entre 0 y 54 puntos. Según Kovacs (1982), las puntuaciones iguales o

superiores a 19, corresponden al perfil 90 en poblaciones no psiquiátricas. Para

considerar un síntoma depresivo, debe tener una duración de por lo menos dos

semanas (Polaino-Lorente y Ascaso, 1998).

Confiabilidad y consistencia interna: Se han realizado diversas

investigaciones entre 1978 y 2003 en distintos países de Europa y los Estados

Unidos que indican que el inventario es fiable con un Alfa de Cronbach entre 0,70

y 0,94 (Kovacs, 2004). En América latina, se hizo un estudio con población

Peruana donde Raffo (1991) obtuvo un puntaje elevado de 0.81 para la

consistencia interna (Ramirez, 2009).

Validez: A) Validez de contenido: se encontró una validez de contenido

por encima del 80% en todos los ítems de acuerdo al criterio de los jueces en la

investigación de Raffo (1991). B) Validez de criterio: se han realizado diversos

estudios entre 1980 y 2001 para correlacionar los puntajes del instrumentos con

otras escalas de depresión más utilizados como: el Reynold Adolescent

Depression Scale (Reynolds, 1989) cuyos puntajes con el Inventario de Depresión

Infantil (Kovacs, 1977) varían entre 0,56 y 9, 94 (Ramirez, 2009). C) Validez de

constructo: en las investigaciones realizadas entre 1980 y 2001 se utilizaron varias

pruebas que miden constructos relacionados con la depresión en niños y se

obtuvieron correlaciones positivas con aquellos que miden ansiedad, estilo

atribucional, miedo, ira, agresividad, eventos de vida etc. La ansiedad obtuvo el

mayor grado de correlacion con un puntaje de 0,81 evidenciando una estrecha

relación entre la depresión infantil con la ansiedad (Ramírez, 2009).

Page 32: Trabajo de Grado. Enero 2012

32

3. La Escala de Ideación Suicida (Roberts, 1980):

Se utilizará la adaptación hecha por Mariño, Medina, Chaparro y

González (1993) de la Escala de Ideación Suicida de Roberts (1980). Este

instrumento consta de 4 reactivos:

«No podía seguir adelante»,

«Tenía pensamientos sobre la muerte»,

«Sentía que mi familia estaría mejor si yo estuviera muerto »

«Pensé en matarme».

Las opciones de respuesta permiten conocer la presencia de los síntomas

en la última semana y por días en una escala de razón con las siguientes opciones

de respuesta: 1= 0 días; 2= 1-2 días; 3= 3-4 días, y 4= 5-7 días.

En un estudio reciente, Sánchez-Sosa, Villarreal-González, Musitu y

Martínez-Ferrer (2010), reportaron que el índice de adecuación de la muestra de

Káiser-Meyer-Olkin toma un valor mayor a .70 (MSA=.786) y el test de

esfericidad de Bartlett (χ2(6)=1725 p=.000) rechaza la hipótesis nula de variables

independientes, encontrando una estructura unifactorial que explica el 64.49% de

varianza.

El rango de puntuaciones de la escala varía entre 4 y 16. Todos los

reactivos están redactados en sentido directo y la puntuación en la escala se

obtiene por la suma simple de reactivos. Se suman todos los ítems y su recorrido

es de 4 a 16 puntos. A mayor puntaje mayor ideación suicida. Es de

administración individual y dura aproximadamente de 3 a 4 minutos

Se ha evaluado la consistencia interna en adolescentes mexicanos,

variando de α=.81 a α=.88 (González-Forteza, 1996, González-Forteza, et al.

1998, Mariño, Medina-Mora, Chaparro y González-Forteza, 1993, Sánchez-Sosa

et al., 2010). La validez concurrente de la escala se correlaciona

significativamente con valores positivos y medio altos con sintomatología

depresiva (r=.509; p=.000), intento suicida (r=.430; p=.000) dificultad para

identificar y expresar emociones (r=.399; p=.000) además, se correlaciona

significativamente con valores negativos y medios y con medidas de autoestima

general (r=-.344; p=.000) y familiar (r= -.365; p=.000). (Sánchez-Sosa, et al.

2010).

Page 33: Trabajo de Grado. Enero 2012

33

Procedimiento

Para llevar a cabo la presente investigación, se efectuará una primera

reunión con los directivos de las instituciones elegidas, con el fin de explicar el

propósito y los alcances de la investigación. Luego de la aprobación de la

dirección del plantel, se acordará el día y la hora convenientes para la aplicación

de las pruebas a los respectivos participantes.

El día pautado para realizar la aplicación de los instrumentos, las

investigadoras asistirán al plantel vestidas uniformemente y capacitadas para

cumplir con los objetivos. Se presentarán en el aula de cada una de las secciones

que conforman 9no, 4to y 5to año de bachillerato para establecer contacto con los

alumnos, expresando lo siguiente:

“Buenos días, en primer lugar nos permitimos presentarnos, somos

estudiantes de la Licenciatura en Psicología de la Universidad Centroccidental

Lisandro Alvarado y estamos cursando actualmente el décimo semestre.

Nos encontramos aquí con el fin de recolectar datos para un trabajo de

investigación sobre un tema en el que estamos muy interesadas por lo cual

solicitamos de su colaboración para su desarrollo.

Se aplicarán tres pruebas a cada uno de ustedes, las cuales pedimos sean

respondidas de forma honesta, pues de esa manera los resultados que

obtengamos tendrán una mayor confiabilidad.”

Luego de repartir la batería de prueba a cada uno de los alumnos se

expresa lo siguiente: “Las pruebas que tienen en sus manos serán respondidas

individual, no es necesario colocar tu nombre y apellido, sólo deben colocar su

edad y sexo en los espacios destinados para eso.”

Una de las investigadoras toma una batería de prueba y muestra el primer

instrumento a responder e indica lo siguiente “Al comienzo de cada prueba se

encuentran las instrucciones” y se procede a leerlas en voz alta. “En el caso de

que tengan alguna pregunta pueden levantar la mano y nos dirigiremos a su

pupitre para responder las dudas. Tendrán un tiempo máximo de 60 minutos para

responder las tres pruebas, sin embargo es muy probable que muchos las

contesten en menos tiempo, si terminan antes del tiempo estimado pueden

entregar el material y esperar sentados hasta que todos culminen. Gracias de

antemano”.

Page 34: Trabajo de Grado. Enero 2012

34

Posteriormente, serán recolectadas las pruebas en sobres de manila para su

respectivo análisis.

Consideraciones éticas

Para la siguiente investigación serán tomados en cuenta los artículos del

Código de Ética profesional del Psicólogo en Venezuela referidos a la

investigación, la cual deberá ser realizada y supervisada por personas

técnicamente entrenadas y científicamente calificadas como expone el Art. 30 de

esta ley.

Por otro lado es importante considerar el contenido del Art.31. cuyo texto

expresa que la investigación deberá ser precedida de una evaluación cuidadosa de

los riesgos y los beneficios y debe un contrato claro y justo entre el investigado y

el sujeto de la investigación, que delimite las responsabilidades de cada uno. En la

investigación se tomo en cuenta cada uno de los puntos expuestos en este artículo.

La población elegida no será coaccionada ni obligada a participar en la

investigación, por lo cual tienen plena libertad para retirar su consentimiento y

suspender su participación en cualquier momento, sin que esto les acarree

perjuicio alguno (Art. 32).

Del mismo modo, como señala el Art. 35, se deberá respetar el derecho del

individuo a su intimidad, para lo que se tomarán las debidas precauciones. Por

tanto, se garantizará el anonimato de los sujetos y la confidencialidad de la

información obtenida de ellos.

En cuanto a la comunicación en materia de investigación, se tendrá en

cuenta que si los resultados de la investigación no son los esperados por los

investigadores, no será razón admisible para silenciar la publicación. Asimismo,

al publicar los resultados de la investigación, los autores se comprometen a

preservar la veracidad de los mismos y a dar crédito a las instituciones y personas

que hayan colaborado para su realización (Art. 42).

Al hacer referencia a la aplicación de los instrumentos a utilizar para la

medición de las variables en estudio, se debe explicar a los sujetos de

investigación la naturaleza, propósitos y resultados de la prueba en lenguaje

comprensible, siendo los resultados de las pruebas expuestos al finalizar la

investigación en este caso (Art. 59).

Page 35: Trabajo de Grado. Enero 2012

35

Análisis de resultados

Como se ha señalado anteriormente el objetivo de dicha investigación es

examinar la relación entre los agentes involucrados en el bullying (víctimas y

agresores) con los niveles de depresión e ideación suicida en adolescentes del

Estado Lara. El cumplimiento del mismo se llevará a cabo a través de la

contrastación de las siguientes hipótesis estadísticas:

Hipótesis de investigación:

1. Variable dependiente: niveles de depresión.

Ho: Mv=MA

Es decir, el nivel de depresión de las victimas es igual al de los agresores.

HA: Mv≠MA

Es decir, el nivel de depresión de las victimas es diferente al de los

agresores.

2. Variable dependiente: niveles de ideación suicida.

Se utilizará la misma estrategia para contrastar las hipótesis de la variable

niveles de ideación suicida.

Prueba de comprobación de hipótesis

Para contrastar dichas hipótesis de investigación, en primer lugar se

describirán los datos y puntuaciones obtenidas para cada variable a través de una

distribución de frecuencia, donde se reflejarán las puntuaciones ordenadas en sus

respectivas dimensiones.

Posteriormente se utilizará la prueba estadística t de Student para grupos

independientes. Esta es una prueba para evaluar si dos grupos difieren entre sí de

manera significativa respecto a sus medias (Peña, 2009) la selección de esta

prueba estadística, se debe a que el objetivo de la investigación se basa en

examinar la relación entre los agentes involucrados en el bullying (victimas y

agresores) con los niveles de depresión e ideación suicida, buscando contrastar la

hipótesis alternativa que señala que los niveles de depresión e ideación suicida

difieren en victimas y agresores de bullying.

Para ello se utilizará un nivel de significancia (α) de 0,05.

Previamente se habrán comprobado los supuestos de homogeneidad de la

varianza.

Page 36: Trabajo de Grado. Enero 2012

36

Para determinar en qué medida están relacionadas las variables se

calculará el tamaño del efecto de Cohen.

El procedimiento estadístico se realizará utilizando en paquete estadístico

SPSS 18.0, que facilitará el procesamiento y el posterior análisis de los resultados.

Page 37: Trabajo de Grado. Enero 2012

Cronograma del plan de trabajo de la tesis de Grado

Control de Actividades MESES

CAPÍTULO N° ACTIVIDAD OCT NOV DIC ENE FEB MAR ABR MAY JUN JUL

EL PROBLEMA

1 Revisión de

literatura X

2

Selección del

problema de

investigación

X

3

Redacción de la

Introducción y el

planteamiento del

problema

X

4

Revisión del tutor y

profesor de la

materia

X

MARCO TEORICO

5

Selección de los

aspectos a

desarrollar en el

marco teórico

X

6 Elaboración del

Marco teórico X

7 Revisión y

corrección X

Page 38: Trabajo de Grado. Enero 2012

38

MARCO

METODOLÓGICO

8

Formulación de los

objetivos de

investigación

X

9 Diseño de la

investigación X

10 Selección de los

participantes X

11

Búsqueda y

selección de

instrumentos

X

12 Redacción del

Marco metodológico X

13 Revisión y

corrección X

ANÁLISIS DE

RESULTADOS

14

Elaboración de

hipótesis de

investigación

X

15 Aplicación de

instrumentos X X

16 Análisis de datos X

17 Tutoría X

Page 39: Trabajo de Grado. Enero 2012

39

CONCLUSIONES Y

RECOMENDACIONES

18 Elaboración de

conclusiones X

19 Elaboración de

recomendaciones X

20 Tutoría

X

21 Revisión y

corrección final X

DEFENSA DE TESIS

DE GRADO

22 Entrega final de tesis X

23 Defensa de tesis de

grado X

Page 40: Trabajo de Grado. Enero 2012

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