Tiempos de

Resistencia

JAVIER SALVADOR LÓPEZ

de rabia y amor

ENERO DE 2016

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PPRÓLOGORÓLOGO

PUTADA es que tu amor platónico no salga por televisión. Aquel que vestodos los días en persona y no a través de una pantalla. Aquel, el imposible.Vivo en un constante desamor del que no sé salir. Es cíclico, como todacrisis. Las dos mejores canciones de desamor que conozco las escribierondos maestros cantautores. 19 días y 500 noches de Joaquín Sabina y Ojaláde Silvio Rodríguez. Siempre he sido de escribir mi propio desamor. Dis-fruto arrancando ese dolor de mi cabeza y mi corazón para después plas-marlo en un papel o en una pantalla. El amor es una putada sí, pero es loúnico sobre lo que sé escribir. A veces la realidad está ahí para inspirarnos.Sólo sé contar historias de chicos a los que les ha dejado su novia. Sólo séhablar de desamor. ¿Basado en hechos reales? Puede, pero había que ca-nalizarlo de alguna forma. Algo bueno tenía que tener.Afortunadamente sé reírme de mis desgracias y es que la comedia es

fundamental en nuestras vidas. Sin embargo, ¿para ser cómico hay que serfeliz? Julius Henry Marx o, simplemente, Groucho Marx dijo: «Detrás deun gran hombre hay una gran mujer». Pues yo creo que detrás de un grancómico hay una gran mujer, o eso, o una gran tristeza. Lenny Bruce, JohnBelushi, Robin Williams. La maldición del payaso, dicen. John Cleese, JimCarrey, Hugh Laurie, Stephen Fry o Richard Pryor han reconocido susproblemas psicológicos. Buster Keaton y Charles Chaplin admitieron ensu día ser víctimas de insoportables bajones emocionales. Los ojos son elreflejo del alma y los de Keaton lo decían todo. «Para hacer reír de verdadtienes que ser capaz de coger tu dolor y jugar con él», reconoció Chaplin.«El humor nace del dolor» dijo Arsenio Hall.Soy un cómico o, más bien, un proyecto de cómico. No tengo a una

mujer al lado que me haga feliz. Tampoco soy triste, pero sé que me faltaalgo y la risa del público no me satisface. Llevo un tiempo buscando a al-guien que me haga reír a mí también. Busco mi media naranja y lo mismoya es un zumo.Somos tristes por naturaleza. La felicidad es un estado transitorio que

viene y que va. La buscamos, pero no siempre llega cuando queremos. Lafelicidad es la máxima aspiración del ser humano. Sin embargo, nos gustael dolor. Nos ahogamos en un vaso de agua, pero no sabemos vivir sin él.Buscamos el conflicto para sentirnos vivos, nos peleamos y nos enamora-

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mos constantemente, con las buenas y malas consecuencias que nos puedeacarrear eso. Nada es perfecto, por lo tanto, nada va a salir perfecto. Vivi-mos en una imperfección constante que define nuestra vida. La vida no esuna película, por eso decidí ser director de cine.Amor y resistencia son dos términos que van unidos de la mano. Son

tiempos de resistencia y es que hay que tener amor para resistir por algo.Sin amor, ¿merece la pena resistir? Hay que luchar por aquello que ama-mos, por nuestros principios, nuestros valores. Porque son nuestra esencia,son lo que nos hace ser como somos. Si perdemos nuestra esencia ¿quénos queda? Resistamos en estos tiempos en los que deciden por nosotros.Resistamos a todos los golpes, a los obstáculos que aparezcan en nuestrocamino porque «se hace camino al andar». Resistamos y rebelémonos antecualquier adversidad. Rebelémonos ante lo injusto, ante lo que sólo unospocos deciden que es justo. Rebelémonos con cabeza y con corazón, conmucho corazón. Rebelémonos en el amor, rebelémonos en la cama. Re-belémonos y reivindiquemos quiénes somos y qué hacemos aquí. Me han encargado que escriba y ensucie con esta aportación estos ma-

ravillosos y cuidados textos de mi amigo Javier Salvador. Os adentro en untúnel que recorre la mente y el corazón. Vagad y explorad todos los reco-vecos que se esconden en la cabeza de este joven y prometedor escritor.Pasen y lean, es necesario.

Salud, amor y rebeldía.

Daniel Parra

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IINTRODUCCIÓNNTRODUCCIÓN

INVOLUNTARIAMENTE desatado del lujo del trabajo asalariado se ofrece antemí una musa llamada tiempo libre que hacía años que no saboreaba. Bienes sabido dentro del gremio periodístico que eso de «me gusta escribir»suena bonito cuando entras en la facultad. Cuando sales importa bien poco.Ahí fuera, en el día a día, no existen los recreos. El tiempo juega a contra-rreloj y el lujo de pararse a pensar cómo contar la realidad, o incluso depararse a pensar sobre la realidad misma, se considera ornamentación. Y aunque según me vayáis leyendo penséis de otra manera, lo cierto es

que de esa forma de trabajar también se disfruta. El periodismo es todoeso, aunque no te deje respirar. Aunque prefieras tener una semana parapreparar tu reportaje estrella, digno de Pulitzer, la realidad es que lo tienesque tener para dentro de seis horas. Olvídate de lujos. El periodismo, di-gamos, es tu pareja proponiéndote ir al cine cuando tú lo que quieres esno salir de la cama. Y ello no significa que la película sea mala. De hecho,puede ser un peliculón. Así pues, y cito a Pablo Iglesias por vez única enla decena de páginas que siguen: «No todo en la vida va a ser follar». Y aveces, hay que ir al cine. Me he dedicado durante todo el mes a apuntar las ideas que se me vie-

nen a la cabeza o los sueños con los que mi mente me ataca al dormir. Es-taba harto de que todos se fuesen a la basura de mi olvido, así que al menoslos conservo en papel; en la historia. Para este proyecto, que espero conti-nuar realizando asiduamente -incluso si un salario me ata con sus poderosascadenas-, quiero contar con mis amigos, por lo que será bastante comúnque aparezcan obras suyas, como el prólogo que precede a este escrito.Simplemente por pasar a la historia, como todo lo impreso.La intención es editar una publicación mensual. Si bien a veces la in-

tención no lo es todo. Las portadas variarán. Para esta primera edición, lacubierta cuenta con dos protagonistas de lujo: Ernesto Guevara y EduardoGaldeano, ambos incrustados en la primera hoja de este Tiempos de Re-sistencia, de rabia y amor por el maestro Daniel Parra.Corren tiempos duros, tiempos en los que nos intentarán machacar.

Como explica Garzón, hay abierto un nuevo proceso constituyente en nues-tro país con la intención de conformar un nuevo sistema español. Pero unnuevo sistema, ¿para qué? Para adaptar el país a las exigencias que propone

el capitalismo actual. Así se explica la reforma del Artículo 135 [que fijacomo prioridad el pago de la deuda por encima del interés común del Es-tado] de una Constitución Española del 78 que, curiosamente, es ultrajadapor los que más la defienden. Al fin y al cabo, como pasó en la Transición,la oligarquía trata de dejar todo bien atado. Si aquella época se cambió de nombre para mantener el fondo [los pri-

vilegios de las élites franquistas y la censura de determinadas manera depensar la sociedad], ahora están amparándose en el nombre [su querida,ejemplar e intocable Constitución del 78] para cambiar el fondo [adaptarEspaña a las exigencias del sistema capitalista]. Estamos en un momentohistórico en el que la lucha y la unidad popular es necesaria. Es tiempo deresistir, de luchar y de amar. Para más pronto que tarde, vencer.Galeano y Guevara son dos personajes históricos que casan con esa

idea. Galeano es un referente de las letras y de las pasiones: la política, elfútbol y el amor. El Ché Guevara, a palabras de mi peluquero, «es un loco».Un superhombre para mí. Un enero hace ya más de medio siglo consiguió,junto a sus compañeros, liberar Cuba de la dictadura de Batista. Diego, mientras me pasaba la máquina de pelar, se explicaba: «En Es-

paña hace falta un loco. Un loco como el Ché Guevara». Dijo 'loco', no'hombre'. «¿Por qué loco, Diego?», pregunté. Mientras cambiaba a las tije-ras me explicó que él consideraba al Ché Guevara un loco necesario parael progreso de un pueblo. Catalogaba de loco al guerrillero argentino nosolo por unirse a la guerrilla para liberar la isla sino más bien por renunciara la comodidad de la que podía haber disfrutado después. Prosiguió: «Hizola revolución en Cuba y podría haberse quedado allí a vivir como un Dios:recogiendo méritos, comiendo, bebiendo, fumando puros y follando conmiles de cubanas que lo mirarían como a un ídolo. Pero no, él siguió via-jando para ayudar a más revoluciones, porque quería cambiar el mundo,no le bastaba solo con Cuba... hasta que en una de esas lo asesinaron». Visto así, qué vivan los locos.

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HACE cuarenta años Argentina sufrió un golpe de Estado militar. Se impusola dictadura fascista de Jorge Rafael Videla. Durante aquellos años se suce-dieron los asesinatos y la represión contra los disidentes. Como en Chile oEspaña, aún hoy, enero de 2016, siguen existiendo miles de personas de-saparecidas. Esta historia parte de los hechos reales relatados por el grupoDesastre en la canción ‘Carta a Clara’, basada en la carta que escribió MaríaIsabel “Chicha” Chorobik a su nieta Clara Anahí.

I. LI. LASAS VIDASVIDAS QUEQUE NOSNOS DEBENDEBEN

Te escribo ahora esta carta a punto de marcharme, juntarme con tus padres en un rincón del cielo.

Todo mi anhelo es poder abrazarte, buscarme en tu mirada, que tú no digas nada, fue el régimen culpable.

Era noviembre, del 76 cuando entraron en casa, mataron a la mama y me dijeron que habías muerto en la balacera.Yo sabía que estabas viva y ahora tienes 34.

Querida Clara, compara las miradas, busca por los cajones recuerdos de la infancia, respuestas sin palabras.

Que somos muchas en la Plaza de Mayo las que andamos buscando personas como Clara, una vida marcada.

Quiero contarte que papá era licenciao y también lo asesinaron por no pensar igual.

Quiero decirte que había muchos iguales, personas con honor gritan por su nación.

Querida Clara, despido ahora esta carta a punto de marcharme, juntarme con tus padres,en un rincón del cielo.

Querida Clara:

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Carta a Clara [versión de Desastre]

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Carta a la yaya [por Javier Salvador]Querida yaya:Me tardó en llegar tu cartaya sé que te respondo tarde,dale un beso a mis padresen aquel rincón del cielo.

Ya solo deseopoder agradecertecomo no saben mis palabrasque escribieras esas letras.Fue el régimen culpable.

Pasaron ya 40 añosdesde ese invierno,que vio morir la paz,con mi papá y mi mamá.A mí me esquivó la bala,Pero eso tú ya lo sabías.

Querida yaya,comparé esas miradasbusqué en todos los rinconesesos recuerdos de la infanciay no encontré nada.

Me acerqué con todasallá a la Plaza de Mayo,seis años investigando.Me encontré con muchas, rodeada de mil Claras.

Quiero contarte,que quiero ser licenciácomo lo es papá,como muchos otros que acabaron igual.

Quiero decirte,que voy a gritarlo que te hicieron pasar:te raparon el pelo,te prohibieron soñar.

Querida yaya, despido ahora este pliego,no lo guardo en el sobrepara que llegue al cielo.Dale un beso a mis padres.

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II. PII. PERDEDORESERDEDORES

MARÍA acababa de terminar su primer año en la escuela Primaria. A dife-rencia de Claudia, su hermana mayor, ella conoció la educación junto alos niños, buenos y malos. Era sábado de playa. A la orilla vio a su profesorde Lengua, el señor Abad, quién en un solo año le dio a conocer una infi-nidad de amigos que llegaron a su corazón a través de sus nuevos libros.La biblioteca de la escuela permitió que la joven accediera a un mundo alque su familia, de padre carpintero y madre costurera, jamás le había po-dido abrir las puertas. El de la cultura.El maestro testeaba la temperatura del agua que a duras penas llegaba a

sus dedos tras morir en el rompeolas. Serio, pensativo, mirando al hori-zonte. Tendemos a pensar que en el horizonte nuestros problemas pierdenla trascendencia que la tierra les otorga. «¡Maestro!». Y el grito rompió eltrance. Percatarse de la presencia de María le hizo esbozar una sonrisa conesencia de felicidad.Al caer la noche el horizonte desapareció. Y con él, la esperanza. El in-

fierno subió a la guerra armado de ignorancia y fusiles. El primer golpe secombatió. Y llegó la Guerra. Para María, el verano se convirtió en el peorinvierno de su vida. Cambió los cuadernillos de ortografía por otra tareapara la que no estaba formada: sobrevivir. Cáscaras de naranja, sopa y pan.Papá se marchó con un beso en la frente. Mamá lloraba.Las vacaciones de verano se alargaron durante tres años, en los que

Claudia se encargó de su educación en los ratos libres que no servía en lacosturería. Era septiembre de 1939 cuando la niña volvió a su escuela.«Cara al sol con la camisa nueva...», cantó al entrar en casa. Lo que habíaaprendido en su nuevo primer día de escuela. Mamá lloró. «¿Por qué nohan entrao hoy los niños a la clase?», preguntó. Tardó unos pocos días másen darse cuenta de que don Abad no estaba en la escuela. De hecho, nuncavolvería a estar. «Está enfermo», le explicó Claudia. «¿Cuándo vienepapá?». Nadie respondió. María comprendió que había preguntas que eramejor no hacer. La nueva educación. La convivencia.La noche traía consigo una orquesta de llantos procedentes del resto de

habitaciones de la casa; de la suya y de los vecinos. Las calles dormían, elpueblo lloraba. Mientras tanto, María se hacía mujer. Sin padre. Sin maes-tro. Sin cultura. Sin preguntas. Sin horizonte. Sin esperanza.

III. IIII. INCONFORMISMONCONFORMISMO

ACABO de descubrir por qué no soy feliz: soy un inconformista. No unocualquiera. Simplemente, no puedo aceptar que, como humano, sea con-vertido en cifra. Es una de las características del capitalismo, la deshuma-nización de la persona y de la sociedad en aras de la producción del capital.No puedo conformarme con ser una cifra. Aspiro a mucho más, a ser

humano. Quizá eso sea lo que haga que entre mis amigos y, en general, enel trato privado con demás humanos, me sienta cómodo. Sin embargo, enlos demás ámbitos -laboral, estudiantil- no me siento tanto. Quizá por ello,en mi trabajo, siempre he priorizado mostrar el lado humano de la realidad.La persona antes que el deportista o el artista.Me horrorizan las listas de seres humanos con las que todos contamos.

Listas de amigos, de amantes, de compañeros de clase, de compañeros decurro, de la bolsa de trabajo... Especial asco me da el llamado mercado detrabajo, donde nuestros DNIs deambulan deshumanizados a más no poderen la máxima expresión del sistema.Todas estas listas me horrorizan y son parte de mi infelicidad. Sin in-

tención de ser soberbio, no soy capaz de conformarme con ser 'uno másde la lista'. Es entonces cuando la realidad choca conmigo para hacermever que sí, que en realidad soy uno más de esas listas y que eso no voy apoder cambiarlo nunca. Esa impotencia es la raíz de mi desilusión, creohoy. Mañana quién sabe.Claro que puedo ser especial en determinadas listas. Para determinadas

personas soy algo más que una cifra. Para algunas, incluso mucho más. Esaes mi alegría.

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IV. ¿TIV. ¿TEE DUELEDUELE??

ÉRASE UNA VEZ, en cualquier barra de bar.— Es duro.— Aún te duele.— Te equivocas.— Es normal. Es algo que le pasa a todas las personas.— La costumbre me ha hecho tolerante al dolor. La tolerancia a los golpesque recibimos es la que marca el dolor que sentimos. Pasa como con laguerra.— ¿La guerra?— No nos cansamos de ver imágenes de bombardeos, peleas, sangre ymuerte por televisión. Literalmente, no nos cansamos. De hecho, a la so-ciedad postmoderna le gusta. Leemos tantas noticias de guerras, de viola-ciones, de asesinatos... que deshumanizamos a las víctimas. Y morimosnosotros. Nos deshumanizamos a nosotros mismos. No sentimos nada ycada muerte inocente nos debería hacer retorcernos del dolor.— El amor no es la guerra. Es un sentimiento individual. Pertenece al ám-bito privado.— En la deshumanización de los individuos influye la sociedad. Pero la to-lerancia de éstos al dolor es algo privado. Lo que a mí me puede tumbar,a ti puede no significarte nada. Y viceversa.— Interesante. ¿Ya no te duele nada?— No he dicho eso. Lo importante no es la caída, sino el aterrizaje. La se-gunda vez que me caí aterricé mejor que la primera. Y la tercera, mejoraún. Así se aprende a aterrizar. Vivimos obsesionados en evitar la caída; yaque eso nos alivia el dolor posterior. Pero en cuanto caemos, no hacemosmás que repetirnos: “estamos cayendo, estamos cayendo”. Esto no es másque un esfuerzo psíquico que nos vendría mejor emplear en encontrar lamanera más favorable de aterrizar.

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V. SV. SUEÑOUEÑO DEDE INVIERNOINVIERNO

Me despierta el calor de verano, la ventana tiene vistas a la playa.Estuve perdío, hoy no.Me encuentro besando tu nuca,bajando al culo por tu espalda.

Me despierta el frío de enero,sin voz mi garganta.¿Fue realidad o un sueño?No quiero subir la persiana.Perdío, busco mi almohada.

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VI. NVI. NOO CONMIGOCONMIGO

No va conmigo su sol,ni va conmigo su luna, ni sus días ni sus noches,ni el faro de sus ojos,ni esa tontería suya.

No van conmigo los camposque despierta en primavera.Sí van todos los sueñosque mis noches sueñan,que yo ya soñé por dos.

No van conmigo los cielos,donde nada se refugia,donde nadie nos espera.No va conmigo el infierno,que no es más que un invento,que tanto nos impidió.

No van conmigo los mares de agosto,Ni la nieve de diciembre.No van conmigo esos impasibles rostrosDe los que viven esperando al viernes

No va conmigo el amor,ese que amas y no quieres.Y más amas y más quieres.Y más sufres y más quieres.Y más quieres querer.

No va conmigo.Y sólo no olvidoeste mundo tan feo.HAY QUE CAMBIARLO.

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VII. EVII. ELL CAMBIOCAMBIO

Mi estrategia antisistema,pa derrocar al capitalismo,es bucear entre tus piernasdelante de mil antidisturbios.

¿Y si así llega el cambio?

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IX IX

Quise tener el arengo de Lorca,gritando: “¡Jaleo, jaleo!”,dejando sin corona a la paloma.Echando al Borbón.

Quise ser la lágrima en los ojosdel gran poeta del pueblo,compañero Miguel Hernández.Pa renacerlo después de muerto:«que una gota del valor nuestrovale más que un océano cobarde».

Quise ser un guerrillero chilenopa vengar la lengua de Jara,y un agricultor esclavo,pa unirme a Ernesto Guevara.Soñar junto a Luther King,creer con Nelson Mandela,repensar como Antoine Gramsci,defender a Allende en La Moneda.

Quise jugar como Messi,escribir como Galeano,pensar como Lenin,y luchar como Espartaco.Dormir abrigado a tu lado, pelear contra su Estado,como una miliciana apuntando a la nuca de Francisco Franco.

Quiero pelear la libertadcomo una Brigada Internacional,sin nunca perder la ternura,estudiando a Pablo Neruda.

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Repartir amor sin jamás olvidarlas lecciones de Karlos Marx.

Bañarme en el río, para romper la corriente,como Galileo Galileiamenazado de muerte,«eppur si muove».

Revolucionar un octubre,gobernar un diciembre,y por fin tomar Berlín.Avanzar entre la nieve,con una estrella roja en mi frente,dirección: liberar Auschwitz.

Deseé vivir la utopía en igualdad,matar el día en que las sometimos.Aprender con Simone de Beauvoir,combatir con Angela al Ku Kux Klan,que sus enemigos también sean los míos.

Criarme en la villa con Olmo Dalcó,aprender del trabajo y odiar al fascismo.Construir en la Tierra el paraísoy colgar a Mussolini en el 45.

Volar con Benedetti a otra realidad,quererte «porque tu boca grita libertad». Que no tengo más patria ni más bandera,que tu puño buscando el cielo en mi tierra.

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X. NX. NOSOS VANVAN AA DARDAR , , PEROPERO BIENBIEN ......

HOY es un día grande para España. Tenemos la exclusiva, chavales. La EX-CLUSIVA. Quiero que todo salga perfecto. El que la cague puede irse a suputa casa y no volver, ¿entendido? Abrimos con el video de la zorra catalufaen el aeropuerto y conectamos con Miguel Ángel que está en Barajas.Venga, un último ensayo, repetid: «Tenemos las pruebas que muestran larelación entre Podemos, ETA, el independentismo catalán y el chavismo».Nos quedamos cortos, pero esto es televisión, me cago en la puta. Conci-sión. Tenemos más días para cargarnos al Partido Comunista, los republi-canos, los ateos, los animalistas, las feminazis, los maricones y a la putamadre de Bambi. Nos van a dar, pero bien... ¿Que has dicho, Sandra? No, nada. Repítelo.

Que las hordas perroflautas del coletas se nos van a echar encima. Ya estánllegando comentarios en redes sociales y me ponen de asquerosa paraarriba. Sandrita, te lo voy a explicar, que parece que no te has enterado:¿Quién pone esos mensajes? Nuestra audiencia, jefe. Unos piojosos, ¿quédicen los mercados? ¿Los mercados? No sé, verá, es que los mercados nousan Twit... ¡Pues entonces, Sandrita! Cuando los mercados nos insulten,ya nos preocuparemos. Hasta entonces, lo que me digas me importa unamierda. Que después de tanto tiempo te tenga que enseñar esto. Me entranganas de mandarte a tu puta casa, ¿pero a ti qué te han enseñado en la fa-cultad? Lo siento, no volverá a ocurrir. Eso espero. Ahora ve a por MiguelÁngel, que lleva en el aeropuerto desde 2014 y tendrá ganas de ver a sumadre.Coño, Sandra, ¡qué alegría verte! Ya pensaba que os habíais olvidado

de mí. Fuf, cuánto tiempo sin vernos... Desde que te enviaron a Barajas,Miguel Ángel. Cierto, recuerdo ese día como si fuera ayer. «Miguel Ángel,tenemos un chivatazo. Varios sujetos sospechosos van a subir a un avión.En ese sobre tienes sus datos personales y fotografías. Recuerda una cosa:graba todo, nunca dejes de grabar. Por España». Y entonces pillé a la delflequillo fumando, ¡vaya bomba! De eso hace dos años, Miguel. ¿Dos añosya? Pues se me han pasado volando eh. Ya sabes lo que dicen, que si tutrabajo te gusta, no es trabajo. Y hoy por fin habéis conectado conmigo...Cuando me llamaron esta tarde de producción no me lo podía ni creer.Imagina Sandra, ¡el mejor día de mi vida!