UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICOFacultad de Estudios Superiores Cuautitlán Campo 1

Departamento de Diseño y Comunicación Visual

Profesora: Huberta Márquez Villeda

Teoría del Arte II

UNIDAD IV. Introducción a la Teoría del Diseño4.3. Concepto de Comunicación visual

Exposición escrita para: Concurso de oposición

Mayo 21 de 2007.

Teoría del Arte II

UNIDAD IV: Introducción a la teoría del Diseño

4.3.- Concepto de Comunicación visual

ÍNDICE

Introducción

La comunicación visual es como el sonido silencioso para un sordomudo.La comunicación visual es un conjunto de gestos mudos.La comunicación visual, una realidad congelada.Comunicación visual… ¿Todo lo que vemos?Técnicas visuales para congelar el sonido, el gesto y el signo.Contenido, forma y elementos básicos de la comunicación visual.

Conclusiones

Bibliografía

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INTRODUCCION

La comunicación por medio de las imágenes es tan vieja como la misma civilización, cumpliendo no sólo la necesidad de comunicar, sino de reconocerse e identificarse; y mirando desde el aquí y el ahora veo una nueva convención de signos que de forma indiscriminada elige a su lector del mismo modo que elige al que la ejecuta.

Aquel hombre que plasmó desde una inconsciencia consciente la primer imagen por medio de medios técnicos primitivos, fue al mismo tiempo el primero y el último en crear un grafismo comunicativo auténtico; ese primer hombre hasta el día de hoy desconocido, pero al mismo tiempo con muchos rostros, dio inicio a la gran carrera de posibilidades y obstáculos en la irreversible búsqueda de la comunicación. Y propiamente a una comunicación visual.

Aproximarse al concepto de comunicación, más aún al concepto de comunicación visual, se muestra ante mis ojos como la posibilidad de construir un diálogo poético con los signos que componen a la misma comunicación visual. Eso implica que en esta posibilidad se logre conceptualizar nuestro objetivo; que con algunos principios se encamine a la construcción de la imagen que comunica, transcribiendo el lenguaje ordinario a un lenguaje armónico, con ritmo y significado. Con ello podríamos aproximarnos a lo espiritual de la imagen.

Pintura rupestre de la cueva de Lascaux, Francia, pintada hace mas de 5,000 años. P 23, "El hombre dos millones de años de historia", Selecciones del Reader's Digest, México, 1989.

Mirar hacía atrás ese origen fortuito de la historia que fundamenta y constata, es rehacer el camino del hombre que ha dejado la huella permanente de su propio andar e invaluable para él mismo; donde se registra paso a paso la incesante necesidad de comunicarse e identificarse.

La primera muestra de la evolución del hombre fue cuando paso de ser nómada a sedentario, es cuando descubre la agricultura y eso le permite establecerse. Crea objetos con la intención de la utilidad, objetos que con el tiempo cuentan historias, su historia, épocas, estadios, necesidades, avances, progresos, ideologías, ambiciones, luchas, vidas tatuadas, grabadas,

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semidibujadas, retratos casi perfectos de sí mismos, de tal modo que hoy día los consideramos el origen de la vida, son nuestra referencia.

Pensar en definir la comunicación visual es como el querer definir el arte, la muerte, la vida, el yo en cinco renglones. La comunicación no es un medio, es un fin, y para poder llegar a ese fin es necesario recurrir a ciertos elementos y ciertas circunstancias. Y cada uno de estos elementos son solo piezas de ajedrez que se mueven para poder perfeccionar el juego. Un juego donde cambian los jugadores y se generan nuevas jugadas, pero el fin esta ahí, siempre presente, podríamos esperar largo tiempo la tirada del jugador y cuando se cree que todo está dicho aparece la sorpresa, la jugada no esperada. El nuevo jugador ha creado otra posibilidad. La circunstancia le ha obligado a buscar opciones y sólo responde a ellas.

Y sin embargo, mientras en la comunicación se sigan sumando más posibilidades, percibo que más lejos estamos de la comunicación del hombre con el hombre, especulando que en tiempos futuros sólo seremos imágenes virtuales en la mente del otro.

La comunicación visual es como el sonido silencioso para un Sordomudo

La vista es una ventana que permite la entrada de destellos luminosos creando una sustitución de lo verdadero.

El sentido de la vista es dominante en el género humano. Es el sentido que por excelencia predomina y domina, y propiamente la vista es el conductor principal para el reconocimiento de las formas y las acciones. Por medio de la vista descubrimos el movimiento y el color, así como elementos primordiales para la identificación de las cosas, de tal modo que se formaliza un diálogo que fluye en los objetos dándoles una sensación diferente.

Si me doy la autorización para iniciar el diálogo; ya no, bajo el dominio de la vista, sino bajo la percepción total de los sentidos, la cosa se resignifica. La comunicación da inicio a partir de la contemplación y luego del razonamiento, no sólo necesito reconocer ciertos elementos, sino a partir de la lógica y de la capacidad potencial que la misma comunicación visual tiene, cuando los códigos son leídos a partir del conjunto de signos, éstos se leen de forma continua y cerrada, primero desde la transferencia de mensajes y luego desde el objeto mismo que informa y orienta.

Si eso que no conozco decido dejarlo para una segunda lectura, es

porque la conexión de lo que veo y de lo que significa no ha sido suficiente para el inicio de la comunicación.

La vista percibe el intenso régimen del color en relación a la forma y procrea un código identificable a la mirada del hombre, y del mismo modo interviene en la experiencia total de sus sentidos. Descubro las formas a partir del color y la semejanza que haya entre la realidad y lo que se ve, entonces se produce una asociación de la idea del objeto y la utilidad del objeto en sí, construyendo un puente comunicativo entre el sujeto y objeto. El sentido de la vista es superficial, se queda por encima y engaña; sin embargo, es a este sentido al que se le confía la mayoría de los juicios y de las decisiones que determinan la vida del hombre.

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Hasta este momento, todo está en la mente del hombre, no hay nada de forma material, lo intangible domina, es la idea del color, la idea de la forma, la idea de la sensación. El hombre visualiza lo reconocido y se identifica en ello, crea una nueva realidad que le permite comunicar la idea de la cosa, sin ser ella la cosa misma. Luego se prevé la posibilidad de materializarla para lograr un mejor efecto.

El hombre busca en el modo visual, como leguaje que es, la construcción de un cuerpo que contenga datos que como el lenguaje, pueda componer y comprender mensajes situados a niveles distintos de utilidad y práctica, que bien, el modo puede exaltar toda práctica puramente funcional a experiencias elevadas a regiones de expresión artística, considerando además la facultad que tiene de crear y disponer. El hombre hace uso de medios que le otorgan el poder de jugar con ellos, pasa a planos tangibles todo aquello que ha captado por medio de la vista, siendo él el único con posibilidad para transcribir lo que ve.

Ve en la materia la posibilidad de construir el rayo luminoso y dar cuerpo a lo intangible, dar forma a lo efímero, dar movimiento a lo estático, darle sonido al silencio, hacer tangible lo intangible por medio de la materia, pasar al plano de lo real aquello que el sentido de la vista descubre, guarda y manipula, llevar al plano de lo real lo que no es real, resignificar lo que significa, dar valor a lo que carece de valor, dar valor a lo que tiene valor. Jugar con la forma-color-formato, es propiamente lo que la comunicación visual hace, con el fin propio de comunicar, hacer uso del destello luminoso que engaña, dar fuerza a la representación, sublevar la representación ante lo real, ofertar cualidades a los objetos, dar sentido a la palabra, jugar, construir, proponer, hacer, invitar, ordenar, informar.

"Los peces dioses del danubio", cabezas de piedra que recuerdan a los peces, 5000 a.C., Yugoslavia P 27, "El hombre, dos millones de años de historia", Selecciones del Reader's Digest, México, 1989.

La comunicación visual es un conjunto de gestos mudos

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Volvamos al sentido de la vista siendo este el conductor vital para la lectura de cualquier código comunicativo y démosle una vez más el crédito en este mundo totalmente visual.

La comunicación dio inicio en lo gestual. Los movimientos corporales son la muestra de poder generar un índice de comunicación, el movimiento de la cabeza, una mano, un juego de la mirada, la dirección, el color de la piel ruborizada, pálida y asustada, la negación de todo gesto, el caminar, la no palabra, el silencio, los monosílabos, un sí mirando hacia abajo, un no mirando de frente, la autorización, el rechazo, todos esos signos-señas-gestos el hombre tuvo que leerlos por la necesidad y la sobre vivencia, el temor lo llenó de sonidos. Creando una línea paralela entre el lenguaje hablado y el lenguaje gestual. El hombre se ha comunicado a través de su experiencia sensorial y es probable que el reconocimiento de estas señales le haya obligado a desarrollar su razonamiento y por lo tanto, un modo de comunicarse. El lenguaje corporal anuncia ante el hombre la conquista de la comunicación desde su propio cuerpo como medio comunicativo. La síntesis de la expresión en un gesto mudo permitiéndose la posibilidad de construir el código que lo lleve a transcribir la expresión de la idea el sonido en un gráfico, da forma a la caricia y toca la textura del miedo.

El comunicador visual se torna dentro del mundo que comunica, está inmerso en los gestos mudos del hombre civilizado, mecánico, vertiginoso y acelerado. El comunicador ha registrado gestos mudos dentro de la tormenta, la guerra y las revoluciones, casi siendo un testigo o más bien el fotógrafo de los hechos, o de igual forma el mensajero del diablo.

El hombre ha logrado transcribir a nivel simbólico y construir a base de signos con significado universal, signos preventivos, informativos y comunicativos, solo mirando y apropiándose de su gestualidad, haciendo de la comunicación misma, un gesto visual mudo.

La comunicación visual, una realidad congelada

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“Sepultura a los muertos", el hombre de Neanderthal, primer antecesor del hombre actual, Neander Alemania 70,000 a.C., p 18, "El hombre dos millones de años de

historia", Selecciones del Reader's Digest, México, 1989.

La mente tiene la capacidad de registrar un infinito mundo de impresiones, su capacidad de percepción la hace conservar más de una imagen por minuto. Haciendo de esto que el hombre pueda referirse a ellas cuantas veces le sea necesario, acumula impresiones sensoriales, que responden a un sin fin de experiencias, haciendo de cada una de ellas el medio inmediato de comunicación consigo mismo.

Cada uno tiene sus propias impresiones, no importando que se refiera al mismo objeto, ya que ese objeto es percibido de forma diferente por cada mente.

Cuando se está en contacto directo con la cosa, el objeto se comporta como ente independiente y autónomo, pero si este objeto está en relación a algo, de forma inmediata existe una asociación de objetos, llevando esto a una experiencia más particular si fuera el caso o a una experiencia colectiva si esta fuera la intención.

Cuando la experiencia va hacia lo colectivo, entonces dicha asociación de

objetos está planeada para ser vista desde la totalidad de los objetos, como la unidad, para referirse después a la particularidad propia de los objetos que sólo serán leídos de forma independiente considerando que la mente del hombre registra sus propias impresiones, y aunado a ello e independientemente de la impresión, esta asociación de objetos está construida bajo lineamientos legibles que hacen de la experiencia una impresión colectiva y semejante.

El intelecto, la sensación y la imaginación son los componentes básicos de la mente, denominados trinidad correspondiente (Robert Fludd1) y dependen propiamente de cada individuo.

Finalmente la realidad siempre es percibida de forma general, -llegamos a un sitio, miramos, hacemos un paneo y entonces elegimos el mejor lugar para sentarnos o para estar- esta forma de identificar a partir de la generalidad es inconsciente en primera instancia y después se vuelve un acto consciente del inconsciente.

Por ello, podemos congelar esa impresión con un gesto gráfico, todo

aquello que la mente trabaja es una imagen virtual que necesita en algún momento tomar forma y materializarse, de otro modo sólo se quedarán en impresiones sensibles que se repetirán cuantas veces se deseé. Pensando en que estas sólo serán la imitación de la impresión ya que ningún hecho es repetible.

Finalmente el hombre así registra su realidad, para después congelarla en un recuerdo perpetuo, guardando de ella sólo la impresión, misma que le será útil para referirse a cualquier representación visual que se encuentre en el mundo general de las imágenes, no importando el modo visual en el que se 1 P. 11, La mente, colección científica.

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encuentre. La comunicación entre el objeto y el hombre se da desde la primera impresión. La conducta individual está regida por nuestras impresiones y experiencias.

"Squeezangezoom-Zaum", de Gianni Toti, 1988,P. 153, El arte del video, José Ramón Pérez Ornia, Rtve/Serbal, España 1991.

Comunicación visual… ¿Todo lo que vemos?

Cuantos más aspectos conocemos de una misma “cosa”, más la apreciamos y mejor podemos comprender una realidad que antes se nos aparecía bajo un solo aspecto.2 Cuando miramos algo hacia el pasado, esto se muestra como una imagen vaga, en apariencia incolora y con dificultad de reconocer su forma en sí, sólo conservamos la esencia e impresión de ello y lo remitimos al recuerdo por medio de algún aroma, sonido o sabor, ya que para este entonces no depende propiamente del sentido de la vista, sino de la comunión que existe entre todos los sentidos.

Esa imagen vaga la miramos bajo el sentimiento de la nostalgia, por ello tiene una lectura; el pasado. La memoria trabaja para conservar, entender y contextualizar, pensando en que la mente no almacena, sino desecha aquello que no necesita, ella es quien controla, imagina, siente y significa ciertos estadios que se convergen en los signos no tangibles. Y, ¿qué sucederá si a esta imagen del pasado se le transcribe a un grafismo o en tal caso se construye una pintura o se realiza una cinta cinematográfica? La nostalgia se transforma, se da la posibilidad de contemplarla bajo el plano de una imagen tangible, una imagen con sentido comunicativo. Es la realidad representada. Ahora hay tiempo de contemplarla y por tal, de leerla con otros argumentos; la imagen del recuerdo ha pasado al plano de lo visible al lenguaje visual, donde todo tiene forma, color, ritmo, contraste y contenido, que funciona en otro contexto hasta identificar a quienes tengan la oportunidad de contemplarla.

Eso que parecía que conocíamos ahora es un conjunto de elementos asociados que se armonizan con un solo fin. Ser testigos –los elementos- de conservar una imagen pura en la mente. Lo abrevio y en realidad no era una imagen vaga, sino más bien nítida y clara que se había quedado bajo una sola lectura en un instante congelado, conservado por el valor sentimental que se le había otorgado, ya que en su momento no logró atravesar las capas protectoras

2 P. 78, Diseño de la comunicación visual, Bruno Munari.

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de la comunicación. Ahora ha pasado a ser una imagen que logró atravesar el ojo para ofrecer información nueva.

Existen imágenes tangibles e intangibles, todo lo que vemos puede llevarse al plano que uno deseé, pero una a una están conectadas la mente, la visión, la creación. Todas juntas se congregan y juegan a comunicar, buscan una relación estrecha para con el otro, donde lo intangible toma forma para la expresión clara y precisa donde diariamente nos comunicamos con todo lo que nos rodea y eleva su valor sumándose al plano del significado, lo útil y ordinario es sublevado por el mundo de la comunicación.

Mientras más conozcamos las imágenes tangibles e intangibles que nos rodean, más ampliamos la posibilidad de contactos con la realidad, con ello comprendemos y vemos más.

Cita Don Juan: “Ver no es una fuerza, sino más bien un modo de atravesar cosas” 3 y argumenta que sólo un hombre de conocimientos es capaz de ver, porque él percibe al mundo con todos sus sentimientos y con su voluntad y también con su propio ver, por más fuerza de voluntad que se tenga no significa que se sea capaz de ver.

Por ello, el sentido de la vista debe de comprender todos los sentidos, ir más allá de la superficie. Estar en vínculo con la realidad y lo cotidiano debe ser no un recorrido monótono, sino de actualización constante de lo cotidiano. Mirar la cotidianidad es mirar mi propio yo desde afuera, mirarme en la ventana, en la ropa, en el vestir del otro, en un disco, una silla, un espacio, un vacío, un libro, unos zapatos, huaraches, botines, pantalón, una sonrisa, el aire fresco, el calor insoportable, la multitud, el sudor, el olor, la cosa, el objeto, lo otro, aquello, el color, la forma, la textura, el sonido, etc., en todas las cosas me encuentro y me descubro, mirar desde el ángulo contrario ofrece a nuestro imaginario una posibilidad de descubrir sus características visuales, primero superficiales, pasando por la materia prima, luego por la estructura y al final por su contenido. Donde la metáfora sería el lenguaje para transcribir en poético lo ordinario.

Elevar lo común al plano de lo artístico, a lo comunicativo, persuadir a partir de lo conocido, a partir de su significado, a partir de la totalidad llevándolo al gesto gráfico, simple y concreto. Estamos inmersos en lo visual, pero no todo lo que vemos comunica, más bien todo lo que vemos dentro de nuestra cotidianidad es factor indispensable para la comunicación y entonces si, todo lo que vemos comunica. El comunicador hace uso de su propia experiencia para apoderarse de los elementos y elevarlos al plano de: elementos comunicativos.

En este momento recuerdo a un grupo llamado “Zovec”4 , este grupo divulgaba que eran de la cultura del Infonavit y las alacenas llenas de figurillas de cerámica, motivos que consideraron como el factor más importante en su estilo de diseñar, agregaron el espectáculo de la lucha libre e hicieron un juego

3 P. 172, Una realidad aparte, Carlos Castaneda.

4 Ciclo de conferencias Diseño sin apellido, IMP-PEX, Museo de la Ciudad de Querétaro, abril, 2005. En estas conferencias se encontraron diversos grupos de diseñadores, arquitectos industriales y de modas, con el fin de compartir su experiencia, la mayoría de ellos diseñan a partir de su contexto, basados en un estudio de mercado donde tiene perfectamente definido a su consumidor.

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visual armónico que nos remite a la Cultura Kitsch, diseñaron y comunicaron a partir de su concepto y de su experiencia previa -una imagen vaga en su mente-.

Técnicas visuales para congelar el sonido, el gesto y el signo

Primero aparentemente no hay nada, después parece existir todo, la energía, los vapores, la fuerza, Dios, el papel, el lenguaje, la madera, la piel, la escritura, la piedra, el grabado, la superficie blanca y pulcra intervenida por un gesto que se congela gráficamente, a veces jugando con el significado propio de la materia prima, el color, la forma y el signo lingüístico descontextualizado, el significado, un mundo de colores, un mundo de formas, líneas, planos, puntos y manchas, contrastes y grises, el significante, la comunicación, lo concreto, el mensaje claro y seductor, la máquina, illustrator, photo shop, el láser, el arte, el juego, el diseño, el engaño, la ilusión, el simulacro, el espectáculo, la comunicación, y todo esto se transcribe en un lenguaje visual donde lo más importante es la manera, el estilo, el uso de la técnica y los medios para dar carácter a la información comunicativa.

El sonido, el gesto y el signo se vuelven dinámicos y legibles bajo la pluma de un escribano, convirtiendo en más que un soporte la hoja blanca, siendo ella la concubina de la tinta jugando a quererse y a odiarse transformándose en solo entes abstractos y narrativos; aparece la palabra escrita extraviada entre la prosa y la rima, como signo comunicativo.

El sonido, el gesto y el signo se vuelven dinámicos y legibles, tienen movimiento bajo la traza de un dibujante, juega con la línea, el gesto, la actitud. Transforma el significado del papel, se crea un diálogo entre la herramienta, el dibujante y la superficie, experimentando continuamente entre lo sólido y lo líquido, entre pigmentos, blancos y negros.

“El dibujo siempre será un conjunto de signos o imágenes que alude a tal o cual realidad denominada realidad dibujada y que se destina a un espacio determinado vital para él”5. Y es así como el dibujo es útil para cualquier propósito humano, por su cantidad e importancia comunicativa. Además que por historia el dibujo, más que artístico, es comunicativo o/lingüístico, siendo él un conjunto de imágenes que porta un mensaje acentuando a uno de los tres planos comunicativos o los tres, pero de forma categórica.

Si atiende el plano semántico, se refiere a esa relación existente entre la realidad representada y la realidad figurada, esa analogía con lo que veo y lo que creo que veo, mientras por otro lado, nos encontramos el plano sintáctico; siendo ésta la relación existente entre los signos comunicativos, o bien, la composición armónica con sus ritmos y simetrías, sin olvidar las proporciones y dimensiones.

5 P. 32, Teoría del dibujo, Juan Acha.

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"Un miembro de la tribu Batak, Sumatra, 1880". P 22, Las grandes épocas de la humanidad, el siglo XX, Joel Colton, Time-life, México, 1978.

Al final aparece el pragmático. Es el efecto de los signos en el receptor, reacción existente entre lo representado y la percepción del receptor. El dibujo finalmente atiende los tres niveles, pero de forma especial se detiene con mayor interés en el plano sintáctico y pragmático, ya que dentro de sus funciones primarias se encuentra servir de canal, no importando a qué imagen o qué fin; otra función, fungir de medio en cualquier otra manifestación artística, un trabajo que ha venido realizando desde siempre, al final como producto artístico.

La impronta línea que se desliza sobre la superficie para anunciar la cruel matanza de los judíos, el dibujo de Honoré Doumier, que se burla de forma pura del sistema, el dibujo de incisión directa sobre la placa de metal, netamente comunicativos, funcionales en la educación y la cultura. El dibujo como la premisa comunicativa entre el emisor y el receptor, entre la simplicidad y la complejidad en un proceso análogo de la línea y el plano.

El sonido, el gesto y el signo se vuelven dinámicos y legibles, contienen estímulos en el pincel del pintor, utilizando el color como la sensación que percibe por medio de su piel y sin embargo, no es tangible. El color primero como materia prima, después como color y al final, el color mismo como materia y contenido. No sólo para construir formas, sino para comunicar por la percepción del color.

Primero el color como elemento que sustituye una realidad, luego la función del color en la psicología del hombre, después como estímulo vertiginoso ante la mente del hombre, donde el rojo es rojo, el amarillo es amarillo, el azul es azul y aparecen como la base original del conocimiento de las formas, fuego, sol, cielo, árbol.

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“La vida en las barracas", Terezin era una fortaleza checa, con capacidad para 7,000

Personas. En 1941, los alemanes la convirtieron en campo de concentración alojando

a 85,000 prisioneros. P102, Las grandes épicas de la humanidad, el siglo XX,

Joel Colton, Time-life, México 1978.

Y no es sólo el pintor quien juega con ello, sino todo aquel que se vincula con la masa primordial, amorfa, indefinida, abstracta y burda, transcribiéndola en una creación que concluirá en un cuadro, en una pintura. Al arte y propiamente al arte de la pintura se le ha instituido el poder de persuadir, cuando el pintor construye una estructura totalmente plástica y expresiva; la pintura logra crear sensaciones alusivas a una realidad, otorgándole a la forma y a la energía de la pincelada el poder potencial que se encuentra en espera latente, hasta el momento preciso en que la obra pictórica tenga contacto con un espectador, que finalmente es la necesidad del pintor. Pero cuando el pintor ha concluido su obra, esta se separa de toda propiedad del pintor para un camino arduo. La función de la obra como la obra misma, ya en el mundo de las imágenes que dentro de un contexto determinado funciona como mediadora y comunicadora.

Fundamentalmente la pintura fungió como aquel encuentro con la realidad inmediata hallando en ella actividad y pasividad, pero al mismo tiempo realismo y distorsión, coherencia y variación, según intereses propios de la época; sin embargo, de igual forma que el dibujo, logra una autonomía que -de sí- desprende la libertad de la pincelada donde el cuerpo del color es vital, ya no como medio sino como fin mismo de expresión. Las cualidades propias del color son puestas en la imagen con fines específicos.

Para el artista pintor la forma tiene un valor superior, se habla de la forma y la no-forma, siendo éste el elemento esencial para la construcción de la pieza del pintor; organiza los elementos de tal forma que se unifiquen para su lectura precisa, no es fortuita la organización de los elementos en el lenguaje pictórico, es una selección y una distribución de los mismos, aunque el pintor deseé transcribir su estado emocional de ese instante en el cual tiene la necesidad de pintar; él tendrá que despojarse de esa primera intención y de ese modo poder ejecutar la melodía objetiva en ese lienzo. De igual modo no es aleatoria la selección de su superficie, esta es propia de la comunicación, los materiales se dejan a la vista y se compensan en relación unos con otros, no hay material aislado, cada elemento agregado al plano bidimensional es propio del lenguaje pictórico.

El sonido, el gesto y el signo se vuelven dinámicos y legibles; son la mirada congelada en el ojo de la cámara del fotógrafo, quien nace dentro de la obligación absurda de representar fielmente la realidad y de forma mimética retratar la realidad. No es culpa de ella, es sólo su capacidad de congelar el tiempo de forma inmediata donde la mirada se detiene con el lente mágico de la cámara. La lente congela, no sólo la imagen, congela la fibra sensible del hombre cuando le toca ser testigo de la guerra, del poder y la ambición. Por tal se relacionó estrechamente con intereses militares y en una labor social y cultural constante.

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El hecho de que podamos contemplar rostros calcinados y autoritarios de la guerra, o que se pueda casi caminar entre las grandes filas de soldados rusos, alemanes, ingleses, no es propiamente un regalo de la fotografía, es más significativa; es el no olvidar jamás que la mirada tiene un potencial de registro latente en la total percepción del espectador.

Contemplar la masa pigmentada en medio de la sordidez de la nada no es gratuita; la fotografía ha tomado la tarea precisa de ser algo más que el registro del momento inmediato, su tarea es inhumana-histórica y terrorífica. Construir los hechos para ser recapturados en la impronta fotográfica que permite mirarme y borrarme, más que comunicativa se torna como el simulacro, la repetición de los hechos reales.

Hombres de una división de la Wehrmacht avanzan de a diez hacia el recinto

de un campo de prisioneros de los Estados Unidos, tras rendirse en el norte de

Alemania el 27 de abril de 1945; P. 149, La Segunda Guerra Mundial, Victoria en

Europa II, Time-life, Barcelona, 1995.

La fotografía es la máquina que revolucionó al dibujo; si embargo, no sustituye a ningún medio, ni plástico ni comunicativo, tiene sus propias cualidades, por ello es capaz de crear imágenes artísticas, y del mismo modo es la herramienta idónea para alcanzar la creación de la imagen que comunica, siendo ella una construcción armonizada y estética.

El sonido, el gesto y el signo se vuelven dinámicos y legibles, son más que vibraciones luminosas en el haz de luz proyectada en un nuevo lienzo, etéreo, casi efímero “de la misma manera que el collage sustituye al óleo, el tubo de rayos catódicos sustituye al lienzo”, palabras dichas por Paik.6 Sin embargo, dicho antes, nada sustituye a nadie, cada medio tiene sus propias cualidades y son ellas las que lo hacen único y con otras posibilidades comunicativas. Por ello no se trata de comparar, sino de mirar con los nuevos ojos del nuevo hombre la potencialidad plástica de la imagen electrónica, encontrar esas cualidades únicas del cine, la televisión y el video donde se relaciona con la genialidad de grandes maestros como su primer origen.

6 P.66, El arte del video, José Ramón Pérez Ornia.

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El trabajar con rayos luminosos que se transcriben en imágenes da opción de transformar la misma realidad; de tal modo que se modifica el grado de iconicidad, al mismo tiempo alterando parámetros de fidelidad y realidad. La narrativa desaparece y aparece, se juega con el tiempo, el aquí y el ahora son fundamentales para la creación del concepto. Se controla, se verifica se modifica en el tiempo real. Se puede negar y aceptar al mismo tiempo. Se desvanece y florece. La luz es el factor vital para congelar la imagen, el sonido y el color. La tecnología favorece la manipulación de los elementos propios del lenguaje videográfico, tramas, texturas, yuxtaposición, solo por una finalidad estética, nada que ver con el tiempo.

El grado comunicativo es superior, la cercanía con la imagen recreada es el factor vital, la comunicación es más que inmediata, se construye con la palabra un conjunto de imágenes y por tal el mensaje comunicativo. La palabra misma como portadora de imágenes luminosas proyectadas en el lienzo virtual y la palabra inmersa en el lenguaje mismo del color, el sonido y el movimiento proyectado, la imagen hecha palabra logrando el equilibrio entre ambos elementos, al grado de lograr con la palabra la representación misma del objeto y con la imagen, la proyección de la palabra.

El sonido, el gesto y el signo se vuelven dinámicos y legibles que cumplen caprichos y gustos perceptivos del comunicador, vitalizando y valorizando sobre cualquier necesidad comunicativa, siendo esta más una necesidad del que ejecuta que del que recibe. El surgimiento del ordenador vino a modificar o a transformar el dibujo bidimensional a un resultado tridimensional, el conjunto de caracteres hizo más atractiva y funcional la comunicación gráfica.

La creación de programas que apoyan la creación de imágenes hizo que la construcción misma de mensajes se convirtiera en un trabajo accesible para una mayoría, teniendo de esta herramienta la solución técnica que ayuda a la mejor distribución de elementos comunicativos. Es erróneo pensar que el ordenador puede solucionarlo todo, el hecho de que sea inmediato en su solución técnica no significa que tenga la capacidad libre de concluir, distribuir y significar los elementos propios de la comunicación, de igual modo no reconoce por sí mismo los elementos plásticos y estéticos.

El ordenador es capaz de controlar multiproyecciones audiovisuales en una sincronía con la música, la imagen y la palabra para un mismo fin. Se logra visualizar la fracción sonora y crea las imágenes simuladas.

Esta herramienta debe valorarse de forma positiva, debe mirarse como la otra forma de construir que puede abrir puertas para las posibilidades creativas. Teniendo tantas facultades, se ha llegado a un interés masivo por la comunicación audiovisual y más en el campo del diseño gráfico. La percepción ante este nuevo modo de comunicación visual dejó de lado aspectos estéticos-formales7, convirtiéndose esto en un requisito para diseñar alejándose del fin propio. Lo que había venido siendo una comunicación gráfica estética se vuelve una comunicación directa y dinámica, donde la audacia comunicativa se vuelve un factor vital.

7 P. 153, Historia de la comunicación visual, A. Dondis

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La comunicación se transforma en una industria siempre con la mirada hacia adelante, perfeccionándose la ciencia, la investigación, el arte, la política, la economía y la publicidad se mueven en un mismo plano, sólo que la intención es diferente. La imagen se acompaña de sonido estéreo, mejora su color, su definición y su alcance comunicativo. Y se extiende la comunicación vía satélite8

alcanzando la comunicación de masa que se expande hasta devenir en una comunicación universal.

Contenido, forma y elementos básicos de la comunicación visual

El contenido es fundamentalmente lo que está expresado de forma directa e indirecta, es el mensaje en sí. Y este se compone con el fin de: decir, expresar, explicar, dirigir, aceptar, siempre con intenciones expresivas. El contenido y la forma son los componentes básicos de todos los medios, el dibujo, la fotografía, la pintura, el video, la televisión, el ordenador, no pueden prescindir de ellos, siendo éstos quienes forman el significado del mensaje que está propiamente en el ojo del observador como en el talento del creador, el entendimiento del contenido se da por la asociación de partes. Dar orden a los elementos que intervienen en esta comunicación, un orden categórico, donde se decide quién es el protagónico y quién el antagónico, atendiendo el equilibrio de los opuestos, la transparencia y la opacidad o la coherencia y la variación.

Los elementos ordenados en ciertas circunstancias son la sustancia básica de lo que vemos,9 ellos dan la fuerza y carácter de eso que conocemos, son los medios gráficos para poder construir el diálogo de eso que se parece “a” o es igual “a”, sólo que estos elementos están presentados en una composición selectiva. Es una construcción que tiene la capacidad de reconocerse sobre un plano, y se pueden reconocer de forma aislada o en su totalidad, siguiendo una dirección donde los elementos constituyen un todo, gracias al efecto que genera ante nuestra percepción, es así cómo desde la primera mirada se puede deconstruir para después construir el todo.

Forma y contenido son absolutos, se necesitan para poder emitir el mensaje. Éste se construye, se estructura y se genera una composición, ésta es la que condensa el total del mensaje, así que el mayor poder del lenguaje visual estriba en su inmediatez, en su evidencia espontánea.10 Las estrategias compositivas, las soluciones a problemas de belleza y funcionalidad y de equilibrio son el sostén mutuo de la forma y el contenido.

Anotaré los elementos básicos de la comunicación, como elementos visuales independientemente de su intención estructural, donde el punto tiene otras dimensiones y van propiamente hacia el nivel comunicativo. Tanto el punto como la línea pueden ser aplicados en un plano o superficie como elementos simples y concretos para la representación de la forma. Los tres tienen la cualidad de que tienen dos dimensiones y son los elementos gráficos mínimamente representados. El punto como el centro de la cosa con la capacidad de expandirse o de repetirse y concretar una forma cerrada otorgándole tridimensionalidad. El punto como referencia mirando hacia la distancia o en una multitud.

8 P. 162, Idem9 P. 53, Sintaxis de la imagen, D.A. Dondis10 P. 38, Idem.

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Y por otro lado está la línea como la justificación de límites y contornos donde bien podemos acercarnos ella para referirnos a todas las cosas, la representación a nivel de línea como la síntesis de las formas, como la categorización de valores, jugar con líneas anchas y delgadas, curvas y rectas, continuas y discontinuas todas ellas con la facultad de representar a diferentes niveles comunicativos. La línea dotada de toda capacidad para construir cuerpos tridimensionales.

El plano visto como una superficie que sostiene a la cosa o que ubica a las formas de igual forma representado por un conjunto de líneas que define sus características. Estos bordes pueden ser geométricos, donde su carácter visual es rígido y exacto, de igual modo los encontramos rectilíneos y curvos, se tornan espontáneos y libres, dan la apariencia de movimiento, cuerpo y volumen, también los hay gestuales, son aquellos contornos que se refieren a representaciones con ciertos procesos expresivos y libres de técnica. Cuando el punto da inicio y después de ello se desplaza en el plano, jugando con direcciones paralelas de línea determinando así el plano tenemos como resultado el volumen.

Para poder dar cuerpo tridimensional a estos conceptos se les suman: la dimensión, el color, el valor, la textura; así se habla entonces de ocho elementos básicos de configuración formal. La dimensión es una prefiguración de la realidad, bien sabemos que lo representado no es real, es ficticia ya que el referente tiene mayor dimensión, por lo tanto, es fundamental relacionar las proporciones y la escala para cuando la cosa vaya a ser representada, sea representada bajo esta visión. Dicho antes, el color cumple una función importante, ya que a través de la vista se formaliza la asociación de los objetos del mundo visual que lo rodea. En relación al valor es aquella luminosidad dada por los objetos y representada en las formas donde se da valor a partir de la gradación de colores para llegar a una experiencia visual controlada y equilibrada.11

Relativo a la textura, vemos que los sentidos por separado son capaces de reconocer formas desde su característica propia. El tacto es sensible a toda textura, él puede reconocerla sin la premisa de la vista. Y por tanto, generar una visualización mental de lo que se experimenta de forma táctil es la forma de reconocer las formas a partir del objeto, donde la textura es sólo la superficie del objeto o cosa. Y a nivel de representación, esta superficie es la que determina en sí misma la representación visual de la textura para poder acercarse a la actual representación de la forma y, con ello, conjuntar los ocho elementos básicos de la comunicación visual.

Así como el lenguaje lingüístico tiene sus reglas para una mejor creación de escritura y para una apropiada lectura, la comunicación visual tiene su principio de orden y organización, donde los elementos básicos por sí solos nos llevan a la representación de cosas y objetos en primera instancia, pero, si estas representaciones llevan un contenido, falta entonces relacionarlas con otros elementos para que la comunicación se cierre en un proceso gráfico.

11 P. 209, Estudio del Diseño, Guillermo González Ruiz

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Estos otros elementos son: la conexión para la formación y configuración de formas, donde el equilibrio, la escala, la posición, la dirección, el espacio, finalmente son los que relacionan y concluyen el producto visual, sin ellos no habría la totalidad y la coherencia. Donde el equilibrio prevé la compensación visual de los elementos básicos que deben de tener relación con la comunidad a la que comunica, compensados siempre con la escala, ya que los elementos se modifican en relación a otros elementos que componen el cuadro. El recurso de la figura humana como elemento a escala y todo lo demás en relación a él, es un ejemplo muy recurrido por el diseñador, el arquitecto y el artista.

“El hombre inventor". El Shaduf, máquina de irrigar primitiva, se usa todavía en algunas partes de Egipto 3,250 años después de la pintura al fresco. P.310, "El hombre dos millones de años de historia", Selecciones del Reader's Digest, México, 1989.

De igual forma, la importancia que tiene la posición de los elementos involucrados en un campo visual es determinante, la distribución y su sentido morfológico dentro de la totalidad es necesario para la atinada congruencia de los mismos, se puede recurrir a la simetría en busca del equilibrio, que es básico. Este orden o distribución de elementos no es azaroso, más bien tiene un fin funcional-práctico y un significado implícito, de tal forma que esta distribución categórica da sentido a elementos formales y de contenido en la construcción de la imagen.

La conexión que existe entre dirección y plano ayuda a vincular la relación para con el espacio; un espacio que no está totalmente determinado por el plano, un espacio que está determinado por nuestra percepción sensorial y sobre todo por la vista12, y por la dirección de las formas: hacia arriba, abajo,

12 P. 237, Idem

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atrás, adelante, hacia el centro o hacia afuera, considerando como apoyo las cualidades de la línea horizontal, vertical, diagonal y curva.

En la disposición del espacio se consideran importantes el total de elementos básicos y de conexión, ya que si no se determina el espacio desde el origen de la creación de la imagen puede que no se distribuya correctamente y las formas no se compensen, de igual modo el peso visual salga del plano a modo de que se rompa el equilibrio y la posición de elementos morfológicos no se encuentren en el cuadro de forma armónica. Se debe considerar el espacio como una unidad bi y tridimensional, asunto que el hombre en su vida práctica no debería olvidar, considerando su propio cuerpo como medición del espacio.

Consideremos el espacio como un ente que vive cerca de nosotros, para una mejor relación con los demás y de esa forma poder descubrir la especialidad de los mensajes comunicativos.

Conclusión

El modo más funcional para la comunicación en la sociedad desde siempre, no importando el país, la ideología, los principios morales, la afinidad política etc., es la comunicación visual, y así como es de funcional, puede ser impropia si los medios no son utilizados desde su propiedad, ya que en el mundo nos podemos encontrar con diversas formas de llegar al objetivo, desde los medios técnicos hasta los medios visuales, pasando por el uso del lenguaje en diferentes direcciones.

Sólo hay que encontrar a aquellos que de forma objetiva tomen las herramientas para la construcción de la misma comunicación, el arte, el diseño y la tecnología, van caminando juntos y por ello es válido mirar a cada uno como elemento fundamental para la creación de un todo para un fin. Lo demás ya no depende de ellos, sino de aquel que recibe la información. La necesidad básica ya no es comunicar, sino que el receptor pueda leer aquello que le comunican.

Creo que por ahí va la necesidad constante de la búsqueda de nuevos medios de comunicación, que cumplan con la finalidad propia de la comunicación, y más aún que vayan de acuerdo al tiempo en el que se vive y si se puede mirar más allá, es mucho mejor.

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Bibliografía

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Dondis, D. A. “La sintaxis de la imagen”, Gustavo Gili, Barcelona, 1976.

González Ruiz, Guillermo. “Estudio de diseño”, Emecé, editores, Buenos Aires Argentina, 2002.

Pérez Ornia, José Ramón. “El arte del video”, RTVE-Serbal, Barcelona, 1991.

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Miller Brockmann, Josef. “Historia de la comunicación visual”, Gustavo Gili, Barcelona, 1985.

Munari, Bruno. “Diseño y comunicación visual”, Gustavo Gili, Barcelona, 1985.

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Bibliografía complementaria

Barlow, Orase, Blakemore, Collin, Weston-Smith, Miranda “Imagen y conocimiento”, Crítica, Barcelona, 1994.

Rowan Wilson, John, Colección científica “la mente”, TIME-LIFE, México, 1979. Gubert, Román, “El Eros electrónico”, Taurus, México, 2000. Castaneda, Carlos, “Una realidad aparte”, Fondo de Cultura Económica, México, 1974.

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