subjetividad y resistencia en clave de poder y
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SUBJETIVIDAD Y RESISTENCIA EN CLAVE DE PODER Y REVERSIBILIDAD
DESDE LA EXPERIENCIA DE LA ATCC
Ivonne Paola Lara Rocha & Lucia Cardona Pareja,
Ricardo Rubio1.
Pontificia Universidad Javeriana - Facultad de Psicología.
Tesis de Grado.
Agosto, 2011.
1 Director Trabajo de Grado – P.U.J.
SUBJETIVIDAD Y RESISTENCIA EN CLAVE DE PODER Y REVERSIBILIDAD
DESDE LA EXPERIENCIA DE LA ATCC
Ivonne Paola Lara Rocha & Lucia Cardona Pareja,
Ricardo Rubio1.
Resumen
La presente investigación buscó develar el discurso de subjetividad y resistencia leído
en el horizonte entre poder y reversibilidad (o anti-poder), que permitió a los sujetos de
la Asociación de Trabajadores Campesinos del Carare (ATCC), desarrollar una
iniciativa de defensa de la vida, el territorio y la integridad de toda la comunidad. En
consecuencia, el análisis se basó en las categorías de: poder, resistencia, subjetividad y
reversibilidad. Partiendo desde el socioconstruccionismo como marco epistemológico y
del método narrativo como estrategia para estudiar la realidad desde las voces de
quienes la construyen. Se observó que la humanización fundamenta la emancipación de
la subjetividad y que con la palabra la resistencia encierra a la lógica del poder en su
propia circularidad.
Palabras Clave: Poder, Resistencia, Subjetividad, Reversibilidad, ATCC.
Abstract
This research was looking to revel the discourse of resistance and subjectivity read
between power and reversibility (or anti-power), which allowed the subjects of the
Asociación de Trabajadores Campesinos del Carare (ATCC); to develop a initiative, in
behalf life, territory and the integrity of the whole community. In consequence, the
analysis based on the categories of: power, resistance, subjectivity and reversibility.
Starting from the social construccionism as epistemological frame and using the
narrative method as strategy to study reality from the voices of the ones who create it. It
was seen that humanization founds the emancipation of subjectivity and that with the
word resistance contains the logic of power in its own circularity.
Keywords: Power (SC39840), Resistance (SC44087), Subjectivity (50450),
Reversibility (SC44515), ATCC (48310).
1 Director Trabajo de Grado – P.U.J.
“Hoy creo que sólo podemos hablar desde La Vida, sin recurrir a esquemas
prefabricados que lo único que hacen es matar nuestra creatividad y nuestra
humanidad”.
Carlos Eduardo Correa.
“En última instancia, son las personas las que deciden, ejecutan, respaldan, resisten,
sufren, disfrutan o simplemente sobrellevan lo que se hace o se deja de hacer en el
contexto de guerra”
Joaquín Samayoa.
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 3
TABLA DE CONTENIDO
0. INTRODUCCIÓN 4
1. PROBLEMA 5
2. OBJETIVOS 9
2.1. Objetivo General 9
2.2. Objetivos Específicos 9
3. REFERENTES TEÓRICOS 9
3.1. Referentes Conceptuales 26
4. MÉTODO 28
4.1. Diseño 28
4.2. Participantes 29
4.3. Criterios Éticos 30
4.4. Instrumento 30
4.5. Procedimiento 32
5. ANÁLISIS 33
5.1. Análisis Descriptivo 33
5.2. Análisis Axial 46
5.3. Discusión 48
6. CONCLUSIONES 57
REFERENCIAS 60
APÉNDICES 63
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 4
0. INTRODUCCIÓN
De acuerdo con Pécaut (2001), desde hace varias décadas Colombia oscila entre
dos tendencias: en la primera se destacan la democratización de la sociedad y la
consolidación de una cultura de la tolerancia, mientras en la segunda la fragmentación
de los intereses, el rechazo a toda forma de regulación institucional y la violencia
rigen la dinámica social. Actualmente, esta dicotomía no ha desparecido; frente a
quienes sólo creen en la guerra como estrategia para resolver los conflictos, hay otros
más numerosos, que buscan crear formas de sociabilidad pacíficas, que muchas veces
se convierten en la única alternativa de resistencia ante el conflicto armado. La
Asociación de Trabajadores Campesinos del Carare (ATCC) es un ejemplo de esta
realidad, pues se constituye como un espacio de resistencia no violenta ante el
conflicto armado en el que se encontraba inmersa la población campesina de la zona
de La India, en el Magdalena Medio.
Es esta historia, contada a través de uno de sus líderes, la que constituye el motor
de la presente investigación, que busca develar la lógica diferente al discurso
hegemónico del poder, la economía y el deseo, tejida por los campesinos de la región.
Para tal fin, se parte desde la perspectiva del socioconstruccionismo, reconociendo
que la construcción de la vida desborda los esquemas y desde el método de estudio de
caso que permite acercarse a la historia a través de las voces de quienes la han
construido. Sin embargo, esta no deja de ser una lectura más acerca de un proceso
humano lleno de aprendizajes y logros que aún falta descubrir y re-construir con sus
protagonistas.
El análisis de esta experiencia se realizó bajo el marco que ofrecen las teorías de
Foucault (1988) y Baudrillard (1978); teniendo en cuenta que para el primero el poder
se entiende como un espiral que permea todos los intersticios de lo social, mientras
que para el segundo, es visto desde la voluntad, que termina encubriendo un desafío
personal y posibilitando la resistencia, más que encarnando un desafío político de
enfrentamiento de fuerzas opresoras.
Así, la investigación se convierte en una invitación a pensar formas diferentes de
existir, que permitan transformar las impuestas por un poder que pretende ser
omnímodo; imperiosa necesidad en un contexto que presenta la salida armada como
principal respuesta a los conflictos. Es relevante para la Academia, en la medida que
da una lectura psicosocial fresca, aporta elementos de análisis respecto a la
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 5
construcción de subjetividades y procesos alternativos de paz, y es coherente con la
perspectiva crítica y ética y la misión social de la Facultad de Psicología de la
Pontificia Universidad Javeriana. Así mismo, representa un significativo aporte al
estudio de las alternativas no violentas que posibilitan la transformación del conflicto
armado en el que están inmersos tantos pueblos de Colombia y del mundo en general,
erigiéndose como una historia con claridades acerca de los mecanismos de la
subjetividad puestos en juego al resistir a la lógica de la violencia.
1. PROBLEMA
La lectura del conflicto armado como una relación lineal en la que fuerzas con
intereses opuestos se imponen entre sí usando la violencia, junto a los intentos por
transformar dicho conflicto a través de agentes externos que muchas veces ignoran las
lógicas de la población, han contribuido a la escalada del conflicto armado interno
que vive Colombia. En el marco de este conflicto, el principio de distinción, que
separa a la población civil de los actores armados, ha sido continuamente irrespetado
por los grupos armados legales e ilegales (Guerrero, 2011), dejando a la población en
un contexto de violencia indiscriminada.
El Corregimiento de La India, jurisdicción de Cimitarra, municipio ubicado al
Sur de Santander en el Magdalena Medio, ha sido desde la década de los setenta, una
clara expresión de esta realidad, pues se ha visto afectado por la constante
permanencia de los actores que hacen parte de la guerra colombiana (guerrilla,
paramilitares y ejercito). Esto se debe en parte, a la lucha que se libra por el poder de
la región, la posesión de tierras y extraíbles, el manejo de dineros y corredores viales
y la ubicación estratégica de una zona apta para la agricultura, rica en fauna, flora,
minerales y redes hídricas. Es un territorio caracterizado por ser de frontera interna al
reunir diversas corrientes de personas e influencias, debido a las oleadas campesinas
provenientes de otras zonas de Colombia en busca de tierras, oportunidades laborales
y refugio de la violencia acaecida en un conflicto de más de cincuenta años.
Pese a la gran variedad de riquezas, petróleo, agua, oro, tierras fértiles, gente
amable, pujante y trabajadora, el conflicto, y la violencia que de él se desprende,
afectó en gran manera los pobladores de ésta zona y en general a toda la región del
Magdalena Medio y caracterizó algunas formas de interacción-acción, al constituirse
en una actividad socio-culturalmente aprendida penetrada en todos los campos de la
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vida social e individual. En consecuencia, la búsqueda de cada grupo armado por el
control territorial, dejaba a la comunidad en el medio, sembraba la desconfianza como
base de las relaciones e imponía la “ley del silencio”; como lo plantea Correa (1991),
la población quedaba entre espada y espada, expuesta a las continuas violaciones de
derechos humanos cometidas por ejercito, paramilitares y guerrilla.
Entre tanto, los campesinos de la región enfrentaban, como lo afirma Lederach
(2003), un reto extraordinario: “resistir y sobrevivir a la perversa violencia de los
numerosos grupos armados que atravesaban sus tierras y les exigían lealtad”
(Lederach, 2003, p. 35). El escenario se empieza a recrudecer frente al incremento de
los combates, el predominio de masacres a gran escala y el ultimátum del ejército
colombiano que les ofrecía perdón a cambio de aceptar las armas y engrosar las filas
de las milicias o tomar alguna de las cuatro opciones que se les daba a los
campesinos: “se arman y se unen a nosotros, se pueden ir con los guerrilleros, pueden
dejar sus casas y el territorio, o se mueren” (Hernández, 2006, p. 129)
Es así, como en mayo de 1987, la población decide unirse y hacer frente a la
violencia a partir de la resistencia civil sin armas al conformar la Asociación de
Trabajadores Campesinos del Carare (La ATCC). La ATCC nace por la necesidad de
defender la vida sin tener clara ninguna estrategia diferente a la no violencia y poco a
poco se fortalece “tratando de alcanzar la pacificación y el desarrollo
socioeconómico” (Correa, 1991, p.17) de la región. Como lo afirman sus
protagonistas la Asociación fue la forma de inventar la propia paz (Correa, 1991); una
paz activa que logro transformar la dinámica de violencia y contribuir a la vida digna
de los pobladores, convirtiéndose en “una vivencia personal e institucional”
(Hernández, 2006, p. 149).
La primera acción que se lleva a cabo obedece a romper el código del silencio
que había sido impuesto; así, los campesinos realizan denuncias públicas manifiestas
en reuniones con los actores armados de la zona (durante el año de 1987, los días 18
de mayo con la guerrilla y el 25 del mismo mes con ejército y paramilitares), no sólo
explicitan los atropellos cometidos, sino que además, de acuerdo a sus narraciones,
dan a conocer las siguientes condiciones: “1) Ni un campesino más muerto por cuenta
de ustedes, 2) No les prestamos ni un servicio más (comida, medicinas, inteligencia,
etc.), 3) No más condiciones ni órdenes impuestas por ustedes, y 4) Ustedes: ¡COJAN
OFICIO!” (Hernández, 2006, p. 135).
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En consecuencia, se desarrollan formas de organización y participación abiertas a
cualquier persona, sin hacer distinciones de raza, etnia, género, edad, etc., y cuya
cuota de ingreso se limitaba a la apuesta por la vida, no a un aporte económico sino a
ser coherentes con la premisa de “primero muertos antes que matar” (Lederach, 2003,
p. 37). De esta manera, se desarrollan los siguientes principios entorno a los cuales
girarían todas las acciones:
1) Ante el individualismo, solidaridad.
2) Ante la ley del silencio y el secreto: hacer todo públicamente, hablar en alto y
no ocultar nunca nada.
3) Ante el miedo: sinceridad y disposición al diálogo. Tenemos que entender a
quienes no nos comprenden.
4) Ante la violencia: hablar y negociar con todo el mundo. No tenemos
enemigos.
5) Ante la exclusión: encontrar apoyo en los demás. Individualmente somos
débiles, pero unidos, somos fuertes.
6) Ante la necesidad de tener una estrategia: transparencia. Le diremos a cada
grupo armado exactamente sobre qué hemos hablado con otros grupos
armados. Y se lo diremos a la comunidad (García, 1996, p. 200).
Por tanto, es rota la lógica de contrarios, la lógica del enemigo, desde la promesa
de no involucrar armas en el proceso y no desvanecer en el intento del diálogo,
haciendo parte a todos los sectores de la comunidad sin importar su postura o bando.
De manera similar, se desencadenan acciones que expresan la importancia de
disminuir la violencia, preservar la vida y generar procesos de desarrollo que
garanticen una vida digna para todos los habitantes, donde las necesidades básicas
sean satisfechas y permitan el progreso conjunto, esto se refleja al dar cuenta del lema
de la asociación: “por el derecho a la vida, a la paz y al trabajo” (Hernández, 2006, p.
177).
Por la iniciativa de paz desarrollada, se reconoce, en 1991, a la ATCC con el
Premio Nobel de Paz Alternativo y en 1992, la ONU distingue al movimiento con el
Premio “Nosotros los Pueblos”. Sin embargo es importante mencionar que durante el
proceso varios líderes comunitarios fueron asesinados por sicarios no determinados,
pero su legado pervive aun en las mentes y los corazones de la población. Así:
“Nacida en el núcleo de la violencia, la ATCC introdujo un sentido de incertidumbre
en la lógica de la guerra: rompió el ciclo convencional de una violencia en espiral, y
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 8
desarrolló, mediante una demostración en vivo, la idea básica de que eran posibles las
soluciones sin violencia” (García, 1996, p. 313).
La inversión del conflicto desde adentro, partiendo de la iniciativa y la lógica de
la comunidad y no de la lógica del poder hegemónico, permitió construir un proceso
de resistencia civil no violenta, en el que las subjetividades se transformaron al
revertir la concepción del otro y las maneras de relacionamiento desde dinámicas de
poder.
Lo anterior permite aseverar, que desde el análisis de las subjetividades y los
ejercicios de resistencia realizados por la ATCC, se aporta a una conceptualización
más amplia y novedosa que posibilita entender las relaciones sistémicas dadas desde
la paz, en un mundo social por demás violento. En este orden de ideas, el carácter
crítico y político de este documento busca sentar un precedente acerca de la violenta
realidad colombiana en la que se encuentra inmersa la sociedad y cuyas
consecuencias directas sufren cientos de poblaciones en su mayoría rurales, que han
aprendido a vivir entre las continuas formas de poderes coercitivos.
Mediante el análisis, también se busca hacer posible recordar la experiencia, para
contribuir a la construcción de escenarios pacíficos. Todo esto, teniendo claro que el
saber no trae automáticamente paz y piedad, pero desde las comprensiones
investigativas, constituye un ingrediente movilizador de las conciencias que pueden
cimentar procesos alternativos de relacionamiento y otras miradas a las concepciones
del poder, al deconstruir las establecidas, contribuyendo al fortalecimiento de
procesos comunitarios de resistencia no violenta.
En esta medida, se hace pertinente desafiar formas de vida y realidades
dominantes, desde una investigación crítica que promueva la trasformación cultural,
generando nuevos lenguajes de comprensión, extensión de valores, expresión erudita,
etc., alrededor de los procesos comunitarios de paz (Gergen, 1996). Así, mediante la
deconstrucción, la democratización y la reconstrucción, se amplía el panorama y se
extienden explicaciones que de ninguna manera justifican el hecho de reconocer sólo
la versión de la guerra.
Decae entonces la ferviente idea de verdades absolutistas y se abre el camino a
redes y a entramados de sociedades y culturas que se subsanan en el interjuego del
diario vivir. En consecuencia, y con la convicción de la posibilidad de cambio y
restructuración, a partir de lo expuesto anteriormente, la presente investigación busca
dar cuenta de un proceso de creación y recreación de subjetividades y resistencias
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 9
diferentes. Por tanto, la historia de la ATCC leída desde el horizonte del poder y su
reversibilidad contribuye a la comprensión de la transformación social. Entendiendo
que no sólo es la realidad del conflicto armado la que se debe estudiar sino la lógica
en la que se le han buscado salidas.
Así, la pregunta de investigación, fundada en el interés genuino por otras formas
de construir sociedad y de entender al otro desde un lenguaje cercano, amistoso,
diverso y equitativo, es la siguiente: ¿Cómo se construye el discurso de subjetividad
y resistencia leído en el horizonte entre poder y reversibilidad (o anti-poder) que ha
permitido a los sujetos de la ATCC desarrollar una iniciativa de defensa de la vida, el
territorio y la integridad de toda la comunidad?
2. OBJETIVOS
2.1. Objetivo General
Develar e interpretar el discurso de subjetividad y resistencia leído en el
horizonte entre poder y reversibilidad (o anti-poder) que ha permitido a los sujetos de
la ATCC desarrollar una iniciativa de defensa de la vida, el territorio y la integridad
de toda la comunidad.
2.2. Objetivos Específicos
Comprender y visibilizar la manera en que se erigen las subjetividades que están
en lógicas de resistencia al margen de los juegos del poder hegemónico.
Identificar los matices que transitan del horizonte de poder al de reversibilidad en
el proceso de resistencia de la ATCC.
Analizar y documentar aspectos del proceso de resistencia de la ATCC desde el
relato de uno de sus líderes
3. REFERENTES TEÓRICOS
El análisis estructural de la subjetividad lleva, siguiendo a Foucault (1976), a
identificar al sujeto en una trama histórica en la que se entienden como dispositivos
de dominación los artefactos sociales que situados culturalmente en contexto,
producen efectos de verdad que construyen formas de estar en el mundo bajo
determinadas prácticas sociales. En este sentido, “la esencia humana no es una
extracción inherente a cada individuo en particular; en su realidad es el conjunto de
las relaciones sociales” (Marx y Engels, 1974, p. 667). Así lo social se establece como
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el carácter fundamental del ser humano; está constituido por la ubicación objetiva del
individuo en un punto concreto de la red de relaciones estructurales de una
determinada sociedad y por el proceso que el sujeto va realizando desde un punto de
partida establecido.
En ese sentido no se trata de considerar al ser humano como un producto
mecánico resultante de una confluencia de fuerzas sociales, son más bien los vínculos
del individuo con sus circunstancias y su medio social los que van estructurando la
concreción de su persona. En tal caso, la individualidad es dada por lo biológico, pero
la personalidad misma y la realidad humana como tal, son formadas históricamente
como encarnación de los influjos sociales, que de modo específico, influyen en la
individualidad (Martín- Baró, 1983).
En consecuencia, las individualidades pueden estar siempre constituidas a partir
de cómo se entiende el mundo y de la relación que se tiene con él; de esta forma, el
sujeto se construye desde dos significados: 1) el sujeto como sujeto a otro por control
y dependencia y 2) el sujeto como constreñido a su propia identidad, a la conciencia y
a su propio autoconocimiento (Foucault, 1988). Esta manera de constituirse, viene
dada desde dispositivos de dominación, por medio de los cuales se busca romper los
lazos con los otros, con la vida comunitaria, al forzar al individuo a volverse a sí
mismo y atarlo a su propia identidad de forma constrictiva. Hacen referencia al
gobierno de la individualización. Se encuentran sujetos a los efectos del poder ligados
al conocimiento, la competencia y la calificación, validados a partir del secreto, la
deformación y las representaciones mistificadas impuestas a la gente. Son
abstracciones de la violencia económica e ideológica que ignoran lo común y
fortalecen la inquisición científica y administrativa que determina quién es cada cual.
Obedecen, vienen dados y son construidos a partir de instituciones de poder, grupos
elites y clases. Por tanto, se entienden como formas de poder que emergen en la vida
cotidiana, categorizan al individuo y lo marcan por su propia individualidad, lo unen a
su propia identidad, le imponen una ley de verdad que él tiene que reconocer y que al
mismo tiempo otros deben reconocer en él (Foucault, 1988).
El proceso de socialización se ve concebido entonces, como un proceso de
construcción del sujeto que deriva de un contexto histórico y que opera a su vez,
como sujetación de dicho contexto; el contenido de la socialización es un
conocimiento de la vida cotidiana que determina un tipo de cosmovisión (Berger y
Luckmann, 1967), donde se considera el discurso sobre el mundo no como una
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 11
reflexión o mapa del mismo, sino como un dispositivo de intercambio social que
intenta ir más allá del empirismo y el racionalismo al ubicar el conocimiento dentro
del proceso del intercambio social (Gergen, 1985). En tanto, el poder ha pasado a
conceptualizarse como “un fenómeno inserto en el seno mismo del tejido social,
constantemente activo en su función de regular los aspectos más íntimos y privados
de la vida” (Ibáñez, 1983, p. 83).
La interacción entre el individuo y su mundo social permite que el sujeto se
construya en relación con su medio, el problema se da en el momento que los
dispositivos de dominación fluctúan en formas de poder que sojuzgan y constituyen al
sujeto al separarlo de aquello que él mismo produce, al atarlo a sí mismo y al
subsumirlo a otros, a partir de mecanismos que llevan a la sumisión de la
subjetividad. En esta medida, se puede decir que todos los tipos de sujeción son
fenómenos derivados de otros procesos económicos y sociales, fuerzas de producción,
luchas de clases, y estructura ideológica que determinan las formas de subjetividad.
En esta dinámica el Estado y el poder estatal, entendidos como una nueva
estructura política, son al mismo tiempo una forma individualizante y totalizante que
a partir de nuevas lógicas del poder pastoral, ata al individuo al presentarse como una
forma de poder que guía, que atiende a la comunidad en general y al individuo en
particular y que implica un conocimiento de la conciencia y la habilidad para dirigirla.
Se presenta una forma de poder orientada a la salvación (como opuesta al poder
político), oblativa (opuesta al principio de soberanía), individualizante (opuesta al
poder legal), coextensiva y continua a la vida, ligada a una producción de verdad (la
verdad del individuo mismo) que conjuga la salvación con significados de salud,
bienestar (riqueza suficiente, nivel de vida), seguridad y protección, cuyo poder se
ejerce por iniciativas privadas, sociedades de bienestar, benefactoras y filántropas
(Foucault, 1988).
Esto favorece el desarrollo del conocimiento humano alrededor de dos roles, uno
globalizante y cualitativo, concerniente a la población, y otro analítico, concerniente
al individuo, favoreciendo que la estructura sea diseminada por todo el cuerpo social
y que encuentre apoyo en una multiplicidad institucional (Foucault, 1988). “El poder
hace mucho más que imponerse al sujeto y modular sus conductas, el poder
constituye literalmente al sujeto” (Ibáñez, 1983, p. 84)
Es así, que las relaciones de poder están profundamente enraizadas en el nexo
social, no reconstituido sobre la sociedad como una estructura suplementaria que
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 12
desaparece de forma radical, sino como una estructura en donde vivir en sociedad, es
vivir de tal modo que la acción sobre las acciones de los otros sea posible. En esta
medida las subjetividades pueden ser leídas e instauradas desde el establecimiento de
ciertos puntos de las relaciones de poder: 1) el sistema de las diferenciaciones,
determinadas por la ley, las tradiciones de status y privilegio, la apropiación de
riquezas y recursos, los procesos de producción, las diferencias culturales y
lingüísticas en el saber hacer y la competencia, etc.; 2) los tipos de objetivos
impulsados, mantenimiento de los privilegios, la acumulación de beneficios, la puesta
en funcionamiento de la autoridad estatutaria y el ejercicio de una función o de un
comercio; 3) los medios de hacer existir las relaciones de poder, amenaza de las
armas, efectos de la palabra, disparidades económicas, medios más o menos
complejos de control, sistemas de vigilancia, reglas explícitas o no, fijas o
modificables; 4) formas de institucionalización; 5) grados de racionalización
(Foucault, 1988).
Lo que caracteriza las dinámicas hegemonizantes es que ponen en juego las
relaciones entre los individuos y los grupos; sólo se habla de estructuras o
mecanismos de poder en tanto se supone que ciertas personas ejercen el poder sobre
otros, para Foucault (1988), el termino poder designa los relacionamientos en un
entramado de acciones que inducen a otras acciones y que se concatenan entre sí. Se
trata de tres tipos de relacionamientos que se superponen, se mantienen
recíprocamente y se usan mutuamente como medios para un fin: 1) capacidades
objetivas (campo de cosas, técnicas perfeccionadas, de trabajo y transformación de lo
real), 2) relacionamientos de comunicación (campo de producción del significado), y
3) relaciones de poder (campo de la dominación, de los medios de sujeción, de la
desigualdad y la acción de los hombres sobre otros hombres). Estos tipos de
relacionamientos pueden constituirse en sistemas regulados y concertados o pueden
establecerse a sí mismos de acuerdo a un modelo específico, es decir, que el sujeto se
mueve en un entramado de capacidad-comunicación-poder.
En términos de estrategia (racionalidad orientada a un objetivo), las
subjetividades hegemonizadas pueden estar influenciadas por las maneras de
confrontación que buscan poner en funcionamiento la totalidad de los medios para
implementar o mantener el poder de forma efectiva. Para la relación de confrontación,
la fijación de una relación de poder se vuelve un objetivo, al mismo tiempo que su
cumplimiento y su suspensión, ya que dirige, de forma justa y constante y, con una
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 13
certeza razonable, la conducta de los otros (Foucault, 1976). En este punto, la
insubordinación se constituye en condición permanente en la existencia de las
relaciones de poder, pues no hay relaciones de poder sin medios posibles de
escapatoria o fuga; cada relación de poder implica en última instancia, una estrategia
de lucha en la que las fuerzas no están superimpuestas, sino que cada una constituye
un tipo de límite permanente, un punto de posible revés, que alcanza su término
cuando mecanismos estables reemplazan el libre juego de reacciones antagónicas
(Foucault, 1988).
Las relaciones de poder deben ser tomadas en la diversidad de sus secuencias
lógicas, sus habilidades y sus interrelaciones, ya que el ejercicio del poder es un modo
en que ciertas acciones modifican otras que sólo existe cuando es puesto en acción. El
poder actúa sobre las acciones existentes o sobre las que pueden generarse en el
presente o en el futuro, actúa sobre un cuerpo, fuerza, doblega, destruye y/o cierra
posibilidades. En consecuencia, una relación de poder sólo puede ser articulada en
base a dos elementos: “el otro” reconocido como la persona que actúa, y un campo de
respuestas, reacciones, resultados y posibles invenciones (Foucault, 1976). Desde ahí,
las relaciones de poder desencadenadas y leídas a través de operadores del mismo, en
tanto ejercicio, son una estructura total de acciones traídas para alimentar otras
posibles acciones; incitan, seducen, inducen, hacen más fácil o difícil, en el extremo
constriñen o prohíben absolutamente, son una forma de actuar sobre un sujeto o
sujetos en virtud de sus actuaciones o de su capacidad de actuación.
Por tanto, los operadores del poder, entendidos como un conjunto de relaciones,
símbolos y ejercicios, que tratan de construir una forma particular de vida social en un
sector territorial determinado; al operacionalizar las decisiones del poder político, se
instauran en el tejido social existente, minan la subjetividad y generan una sensación
de permanente vulnerabilidad al sujetar al paradigma hegemónico toda iniciativa
emancipadora. El tema general será la fabricación de los sujetos más que la génesis
del soberano; este desplazamiento a una teoría de la dominación en lugar de una
teoría de la soberanía, implica considerar básicamente dos aspectos metodológicos
fundamentales: a) en vez de partir del sujeto o sujetos, se trataría de partir de la
relación misma de poder, de la relación de dominación en lo que ésta tiene de fáctico.
No preguntar a los sujetos cómo, por qué y en nombre de qué derechos pueden
aceptar dejarse someter, sino mostrar cómo se constituyen los sujetos a partir de
relaciones de sometimiento concretas, y b) se trata de poner de manifiesto las
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 14
relaciones de dominación y dejarlas valer en su multiplicidad, su diferencia, su
especificidad o su reversibilidad; no buscar una soberanía que sea fuente de los
poderes o una gran matriz de poder, sino mostrar cómo los operadores se apoyan unos
en otros, remiten unos a los otros, se refuerzan y convergen, se niegan o tienden a
anularse (Foucault, 1976).
Se generan de esta forma, sociedades en cultura de control a través del terror,
donde el objetivo social del gobierno no es el de desarrollar la población, sino el de
controlarla con el fin de destruir el poder como capacidad de acción de la persona, a
través de la creación de una cultura personal de minimización, miedo, desesperanza y
cinismo. Esto es lo que Foucault (1988) denomina la habilidad de estructurar el
posible campo de las acciones de los otros o poder estructural, pues es el tipo de poder
que opera en cada uno y a través de los contextos humanos, al tener la capacidad de
establecer instituciones, normas culturales, visiones de hombre y mundo
hegemónicas, e ideologías, que determinan la distribución y dirección del poder al
posibilitar ciertos tipos de comportamiento congruentes con su estructura y al tender a
dificultar ciertos tipos de comportamientos contestatarios a su estructura.
Entonces, desde los diversos operadores y sus configuraciones resultantes sobre
los individuos, el ejercicio mismo del poder guía la posibilidad de conducta y pone en
orden sus efectos posibles; es más una cuestión de gobierno que de adversarios, al
considerar que con la palabra gobierno se designa la forma en que la conducta de los
individuos o de los grupos debería ser dirigida (Foucault, 1976). Así, no sólo se
cubren las formas legítimamente constituidas de sujeción política o económica, sino
también modalidades de acción considerables y calculadas orientadas a actuar sobre
las posibilidades de acción de los otros; modos de acción caracterizados como el
gobierno de los hombres por otros hombres (Foucault, 1988).
En consecuencia, el poder sólo se ejerce sobre sujetos libres, entendidos como
sujetos individuales o colectivos que están enfrentados a un campo de posibilidades
en el que diversas formas de comportarse pueden ser realizadas. La libertad puede
aparecer como la condición-precondición para ejercer el poder, ya que sin la
posibilidad de resistencia, el poder sería equivalente a la imposición física. En esta
medida, las subjetividades hegemónicas llevan implícitas el relacionamiento entre el
poder y el rechazo de la libertad al someterse desde la servidumbre voluntaria
(Foucault, 1988).
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 15
En efecto, dicha noción de libertad es la que sujeta pero también es la que
posibilita los puntos de insubordinación (medios de escapatoria) que permiten existir
a las relaciones de poder; debido en parte a que cada intensificación y/o extensión de
las relaciones de poder para hacer someter al insubordinado, puede solo resultar en los
límites del poder. El término se da, tanto en el tipo de acción que reduce al otro a la
impotencia total, como en la confrontación con aquellos que no gobierna y su
transformación en adversarios. Es decir que, como constitución subjetiva, totalizante e
individualizadora, las estrategias se convierten en los mecanismos utilizados en las
relaciones de poder, donde la confrontación y lucha constituyen modelos de acción
sobre posibles acciones. Lo que hace de la dominación un fenómeno central de la
historia, es entonces, el entrecruzamiento de las relaciones de poder con relaciones de
estrategias donde los resultados de sus interacciones se manifiestan en formas masivas
y universalizadas (Foucault, 1976).
No se trata de resistencia o de poder, se trata de un constitutivo de opuestos. Así,
el poder es algo que se intercambia, en el sentido que el poder se consuma según un
ciclo reversible de seducción, desafío y astucia. Y si el poder no puede cambiarse en
este sentido, desaparece pura y simplemente; el poder seduce por la reversibilidad que
lo habita y sobre la que se instala un ciclo simbólico mínimo desde el cual se consume
según una seducción circular. Nunca existe la unilateralidad de una relación de
fuerzas sobre la que se constituiría un movimiento perpetuo, lineal y final de la
tradicional visión del poder, en parte porque todo busca su propia muerte, todo quiere
intercambiarse, reversibilizarse, abolirse en un ciclo (Baudrillard, 1978).
Sin embargo, a pesar de la existencia del espacio de resistencia y la posibilidad de
la deconstrucción dada desde la reversibilidad, es necesario tener en cuenta que
constantemente y a través de procesos sociales, se naturalizan y se cosifican las
creaciones sociales que con el tiempo, entrañan el poder mismo, ya no como parte de
las relaciones que en éstas se dan, sino como característica interna del objeto; se le
desea, se idealiza, se vuelve abstracto, y en la abstracción se hace hegemónico como
el poder ideal, el que es correcto, y el que reproduce las lógicas de dominación y
opresión que han sido parte de la historia de las relaciones entre sujetos. Se permite la
acción, pero no la acción que se resiste, sino la acción que reproduce las lógicas del
poder opresor (Dinerstein, 2001), pues sólo se concede sentido, según el imaginario, a
lo que es irreversible: acumulación, progreso, crecimiento, producción, poder y deseo.
Es eso lo que asegura su autoridad mítica sobre los cuerpos, las sociedades y los
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 16
corazones, pero es eso también lo que constituye su fragilidad, es el proceso circular y
reversible, de desafío, lo que asigna su carácter de finitud. La irreversibilidad asegura
la autoridad sobre, mientras que la reversibilidad se constituye como desestabilizadora
de los sistemas. De ahí surge la posibilidad del sujeto de constituirse como sujeto
emancipado, de la tensión misma y la desestructuración del mismo mundo social y su
dinámica de operar (Baudrillard, 1978).
La tensión no se da entonces entre fuerzas de poder, sino entre lo irreversible y lo
reversible. Es inútil correr detrás del poder o discurrir sobre él al infinito, al igual que
de una estructura social en él fundamentada, pues ahora él también forma parte del
horizonte sagrado de las apariencias, también él sólo está presente para ocultar que no
existe, o más bien, “que habiendo sido franqueada la línea de apogeo de lo político es
la otra vertiente del ciclo la que comienza, la reversión del poder en su mismo
simulacro” (Baudrillard, 1978, p. 74). Ni instancia, ni estructura, ni sustancia, ni
relación de fuerzas en efecto, el poder y lo social son un desafío dado desde su
existencia para conjurar su ausencia. El sujeto emancipado viene entonces, desde el
momento mismo que supera en su movimiento irracional la tentativa de neutralizar en
una sociabilidad bien comedida, en una transparencia social ideal, el enfrentamiento
en profundidad, el desafío mortal a lo social mismo. Ya no solamente se enfrentan las
fuerzas sociales, sino que se enfrentan las formas y lo que está en juego es la muerte
de lo social: lo social mismo debe ser enfocado como modelo de simulación y forma a
abatir (Baudrillard, 1978).
Estas formas de desafío a los mecanismos de configuración hegemónica, han sido
camufladas por los poderes como relación de fuerzas (dominante/dominado,
explotador/ explotado) para drenar todas las resistencias hacia una relación frontal.
Porque en términos de relaciones de fuerzas, es el poder quien siempre gana, incluso
si cambia de manos en el transcurso de los movimientos emancipatorios. Cada sujeto
empieza a comprender entonces, que todo poder es un desafío personal, más que una
lucha de imposición de fuerzas, al que solamente se puede responder con un contra-
desafío que rompa la lógica del poder al encerrarla en una lógica circular. Es en ese
contra-desafío, no político, no dialéctico, no estratégico y de una fuerza histórica
incalculable que las dinámicas hegemonizantes de los dispositivos del poder
comienzan a desintegrarse. Así, el contra-desafío da la base a la emancipación, pues
tumba el poder político y su estrategia de dominación (Baudrillard, 1978).
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 17
Mientras que las relaciones de fuerza se dejan atrapar y desarmar por las astucias
de lo político, el desafío inverso, al carecer de un fin y ser indefinidamente reversible,
no lineal, no se acaba más que con el poder. Esta cara no política del poder, la de su
reversión simbólica, es la que actúa y triunfa sobre la definición política del mismo
(central, legislativo, policial), hace que éste aparezca como “una curvatura del espacio
social, la suma de partículas dispersas o la ramificación de azares en racimo”
(Baudrillard, 1978, p. 84). La construcción subjetiva emancipada surge desde que se
rompe con el discurso de lo político, cuando se comprende la indeterminación radical
de lo político, su inexistencia y su simulación. La cuestión se da al optar por la
inexistencia y la propia muerte que posibilitan la implosión súbita de los individuos y
grupos sociales, en lugar de buscar la expansión política y la hegemonía de clases; la
subjetividad se reconfigura en el momento que el poder no es más que un espacio con
una perspectiva de simulación, que si seduce es justamente porque es simulacro,
porque se inventa y transforma sobre signos. La resistencia no es pues una relación de
fuerzas, es dada desde la reversión de signos y se encuentra en la muerte misma del
poder (Baudrillard, 1978).
Lo que mantiene y asegura el telón de la existencia del poder es el efecto de
nostalgia (Baudrillard, 1978) que lo transforma en una especie de efecto del deseo en
los confines de lo social, una especie de efecto de estrategia en los confines de la
historia. Es aquí donde actúan los poderes, insertados en los cuerpos, en el trazado de
los discursos, al convertirse en una estrategia sutil y discursiva que aleja al poder de la
historia y lo acerca al deseo, al anhelo, a la seducción, a la fascinación universal por el
poder. Pero, al iniciarse el proceso emancipatorio y su consecuente desestabilización
del aparato dominante, la muerte inminente de los sistemas de referencia (religiosos,
sexual, político, legislativo, etc.) se traduce en una exacerbación de las formas de
violencia y de representación que los caracterizaban, reactivación violenta de un
poder que desespera de sus fundamentos racionales, reactivación violenta de lo social
en una sociedad que desespera de su propio fundamento racional y contractual. Eterna
simulación interna del poder, que nunca es ya más que el signo de lo que era
(Baudrillard, 1978).
En consecuencia, los contenidos de la socialización y el conocimiento que se
deriva de ésta, se enmarcan en la transmisión de una instancia ideológica dentro de los
procesos materiales, históricos y sociales en los cuales se dan (Berger y Luckmann,
1967). En tanto sujeto, el individuo se construye a partir de la interacción con los
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 18
otros y su inclusión en un mundo relacional que, mediante una dinámica dialéctica, le
asigna su carácter individual al configurar sus formas y maneras de ser y actuar. Todo
está construido y dado socialmente, identidades, pensamientos, conocimientos,
lenguajes, culturas, mundos, significados y modos de relacionarse.
En este punto, gracias a la construcción social, el poder como espirales infinitas
de innumerables redes y conexiones es incompleto e implica que en algún sentido la
resistencia y la transgresión son posibles. Si dentro de las relaciones de poder no hay
estados de completa dominación, se da cabida a espacios o intersticios de posibilidad
y en estos no-espacios de completa dominación se permite empujar hacia los límites
del poder, resistirlos, transgredirlos, pero sobre todo, cuestionarlos. En la posibilidad
de la acción, se encuentra la resistencia. Y en esta, la posibilidad de dar existencia al
poder, si bien no desde la dominación, sí desde nuevas formas de relación entre
sujetos (Dinerstein, 2001); El centro de gravedad se desplaza así, hacia una economía
inconsciente que da lugar a lo imaginario de la represión y de la liberación
(Baudrillard, 1978).
Es decir que el individuo en tanto ser social, tiene, frente a los mecanismos de
constitución de subjetividades hegemónicas analizadas desde las dinámicas
foucaultianas de poder, la posibilidad de reconstruir dicha subjetividad y convertirla
en modos de acción emancipatorios. El poder es convertido en “multiplicidad de
relaciones”, que parten en todas direcciones para acabar en el extremo terminal sobre
resistencias, tan ínfimas, hasta tal punto tenues, que poder y resistencia se confunden.
“El mismo fragmento de gesto, de cuerpo, de mirada, de discurso, encierra la
electricidad positiva del poder y la electricidad negativa de la resistencia”
(Baudrillard, 1978, p. 53). Más que una simulación de perspectivas, se trata de
relaciones de fuerza limitadas que hacen al poder reversible en su forma, porque de
uno y otro lado algo resiste a su ejercicio unilateral, al infinito del poder. Si el poder
fuera una infiltración magnética al infinito del campo social, hace mucho tiempo que
no encontraría resistencia alguna, se habría derrumbado bajo la presión de fuerzas
antagónicas.
En este orden de ideas, el poder se puede entender como constitutivo de
subjetividades, que se expresa de diferentes formas a través de la historia, y cuya
contracara es la resistencia (Dinerstein, 2001). La constitución de los sujetos se
desarrolla en la contradicción que se encuentra a la base de los límites y las
posibilidades ilimitadas, en las que el sujeto tiene la posibilidad de resistir y rechazar
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 19
los criterios de verdad que le acompañan en su sujetualidad. En Foucault, puede
decirse que el poder existe en y contra la dominación, existe en la contradicción, en la
posibilidad de no ser ni uno (el poder en la dominación) ni otro (el poder en contra de
la dominación), y abrir un campo infinito de posibilidades en cuanto a las relaciones
de poder se refiere (Dinerstein, 2001). Así, el poder configura varios tipos de
subjetividades en tanto permite formas de subjetivación ligadas a la resistencia o
ligadas a la norma, a la regla consensuada socialmente.
De esta forma se abre la posibilidad a la existencia de prácticas comunitarias que
pueden transformar las prácticas sociales hegemonizadas. Prácticas micropolíticas
basadas en la resistencia en sí misma y no en la búsqueda del poder. Memoria y redes
sociales versus leyes, persuasión, temor y miedo. Se abre otro capítulo al buscar
exponer “la reversibilidad táctica de los discursos” sostenida en la comprensión de
que “las prácticas discursivas constituyen fuerzas cuya dirección es modificable”
(Foucault, 1976). El mismo escenario donde el poder se despliega se convierte en un
espacio de resistencia al mismo, la acción encaminada desde la subjetividad
emancipada va a ser ahora la protagonista, al filtrarse constituyéndose como estrategia
de fuga ante la acción hegemonizada.
Desde esta perspectiva, el individuo no es visto sólo como una persona con sus
características particulares, más o menos compartidas por otras personas, sino ante
todo, como miembro de un grupo o clase social, del cual es una corporalización
concreta sin dejar por ello de ser una persona particular. En esta medida, “en el sujeto
se descubre una forma particular de cómo la realidad del grupo social se hace persona,
cómo los intereses y exigencias del grupo toman carne y voz, consciente o
inconscientemente en la persona” (Martín-Baró, 2001, p. 66) y se hacen notorias
experiencias comunes que abren las expectativas y tumban los mecanismos de acción
de los operadores de poder sobre las subjetividades.
En tanto, el Sujeto social se construye en el dinamismo de la participación social
a partir de movimientos portadores de subjetividad y de valores culturales propios.
Las lealtades sociales son entonces reconstruidas y se rompe la creación de lo
siniestro, pues la acción empieza a matizarse en su relación con el poder; no al hablar
desde su mismo lenguaje sino desde generalidades de fuga que configuran una
memoria colectiva (imperativo de acción). Al recuperar la contra-historia se
transforma el relato, pues se articulan las luchas con la memoria y se abren otras
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 20
alternativas que se perfilan como medio para transformar la historia hegemónica
impuesta por el discurso considerado verdadero (Foucault, 1976).
“La concepción histórico-política de este nuevo relato subvierte los términos de
las relaciones entre la fuerza y la verdad” (Foucault, 1976, p.8). La reactivación de los
saberes locales, saberes de la gente saberes sujetos que han sido sometidos,
marginados, ocultados por la historia hegemónica siendo llamados incompetentes o
insuficientemente elaborados, permite reconstruir la forma en que han llegado a
entronizarse construcciones hegemónicas y revelar la existencia de los efectos del
poder político en la vida de los individuos, así como la regulación social que se da
entre ellos como forma de replicar un sistema en el que han aprendido a relacionarse.
Pero también permite la construcción de un universo de significados consistente, dado
por una relación relativamente compartida que erige sujetos ante las circunstancias; se
erige el sujeto político en el entrelazado de la memoria al tener la oportunidad de
reflexionar sobre cuestiones éticas y políticas en torno a las relaciones sociales
(Foucault, 1976).
Con base a lo anterior, la memoria enfatiza su carácter emancipador y liberador al
reclamar la fidelidad de la vivencia común propia y de los otros. Esto se fundamenta
en “una verdad más “verdadera” que la verdad de la historia, la verdad de lo vivido y
de lo recordado” (Nora, 2002, p. 30, citado por Lythgoe, 2004), que permite
colocarse por encima de la historia y la justicia. El objetivo es romper con el abismo
de credibilidad que atraviesa a todos los sistemas de autoridad, para que el sujeto
logre generar un universo de significación compartida que desencadene en la acción,
en la manera que los actores sociales entran en contacto por múltiples propósitos,
coincidencias y desavenencias que permiten el movimiento y la transformación.
En tanto, la historia, con principal autonomía como ciencia humana, halla en su
epistemología al “conocimiento histórico captado en acción y al natural” (Ricoeur,
2004, p.180). Al ser la memoria la “representación de una cosa ausente ocurrida
antes” y comprendida desde su dimensión cognitiva (percepción) y desde su
dimensión pragmática (ejercicio-práctica), se entrelaza con la historia a través del
proceso historiográfico de investigación del hecho vivo, explicación y representación
del mismo en un contexto determinado.
Sin embargo, aunque respecto a la historia se plantee que “una vez expuesta y
luego inscrita, será una posesión”, que como verdad se materializa con un documento,
un “depósito muerto” (Ricoeur, 2004, p.187) como parte no interpelable de la
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 21
memoria, al mismo tiempo queda “la memoria viva” en el alma de quienes recuerdan,
esta memoria prevalece al estar atada al afecto, a las concepciones de lo justo e
injusto, del bien y el mal, etc., está también inscrita y es expuesta como “memoria
feliz”, “el discurso escrito a la imagen de lo que está vivo en la memoria, dotado de
un alma” (Ricoeur, 2004, p.188) y que se puede comprender como la parte del
discurso que trasciende al tiempo porque está vivo en sí mismo. “La historia es la vida
de la memoria” decía Cicerón (Ballesteros, 2011) y por tanto su muerte será la
ausencia o la falsa retórica de la historia.
Ahora bien, desde la antigua estética Kantiana se asociaba “el dominio del
espacio al del tiempo” (Ricoeur, 2004, p.193), una experiencia está viva en cuanto se
presenta en contexto, con un lugar, un tiempo y unos sujetos determinados; no hay un
aquí y un ahora absolutos. Se puede entender, entonces, que la historia se construye
en la relación espacio–tiempo, donde se plantea al espacio como un lugar “inherente
a la evocación del recuerdo” (Ricoeur, 2004, p.193). El cuerpo se establece como el
primer espacio, se habita el espacio corporal definido en relación al entorno,
entendido éste como “fragmento de tierra habitable” (Ricoeur, 2004, p.194) donde se
dan estrategias para sobrevivir tanto colectiva como individualmente. En ese sentido,
la capacidad de recordar es dada por un cuerpo ubicado en un entorno específico por
el cual se desplaza en un tiempo determinado. Se vincula el cuerpo con el entorno
para de esta forma tejer memorias tanto individuales como compartidas.
En consecuencia, la memoria se genera a través de una continuidad entre vivir el
espacio de forma práctica y percibirlo reflexionando al respecto de lo que le genera a
los sujetos el estar allí. La capacidad de reflexionar sobre el pasado permite construir
percepciones de diferentes lugares que al ser compartidas con otros, serán la base de
la memoria colectiva, así como el fundamento del “lugar de memoria” (Ricoeur,
2004, p.194). Así, con la memoria mediada por la tradición, se empieza a forjar la
memoria colectiva en el espacio que es determinado por el cuerpo, “el cuerpo, ese
aquí absoluto, es el punto de referencia del ahí” ubicado en un lugar específico “un
pedazo de tierra habitable”, el lugar requiere desplazamientos y es en “estas
alternancias de reposo y movimiento a donde transcurre la vida” (Ricoeur, 2004,
p.195). Al habitar un espacio se da el continuo proceso de: 1) prefiguración, a saber,
pensar un espacio para habitarlo según ciertas necesidades, 2) configuración,
construcción del espacio a habitar, y 3) reconfiguración, habitar desde la tradición el
espacio construido. Como lo afirma Ballesteros (2011), el giro lingüístico de la
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 22
historia, permite el paso de recordar los hechos verdaderos a recordar a los sujetos que
hicieron parte de estos, en un momento y lugar específicos.
El testimonio se establece así como institución natural (necesaria contradicción),
basada en el vínculo social que se configura al confiar en la palabra del otro; “el
crédito otorgado a la palabra del otro hace del mundo social un mundo
intersubjetivamente compartido” (Ricoeur, 2004, p. 216).
Al pasar de la forma oral para ser recogido por escrito el testimonio configura un
archivo que pasa a tener un lugar físico, uno espacial y uno social (Certeau, S.f.,
citado por Ricoeur, 2004), este acercamiento al archivo revela cómo el documento
remite a la huella y la huella al acontecimiento” (Ricoeur, 2004, p. 239) trascendiendo
así a la separación positivista del pasado muerto del presente vivo.
En este sentido, Epson y White (1993) afirman que todo conocimiento requiere
un acto de interpretación, cada nueva cosa que se conoce es ubicada dentro de nuestra
red de previas comprensiones, por tanto es necesario un acto de interpretación para
lograr la integración y construcción del nuevo significado. Al respecto, “la
comprensión que tenemos de un hecho, o el significado que le atribuimos a la
historia, está determinado y restringido por su contexto receptor; es decir, por la red
de premisas y supuestos que constituyen nuestros mapas del mundo” (Bateson, S.f.,
citado por. Epson y White, 1993, p. 54).
La dimensión temporal de la construcción de los significados, permite situar los
eventos en el tiempo; “es esencial para la percepción de la diferencia y la detección
del cambio en las historias” (Epson y White, 1993, p. 50). Esta dimensión de la
narrativa incluye la tridimensionalidad del tiempo, por lo que implica ventajas sobre
la ubicación de la parte en el todo, es decir la integración del nuevo significado en el
mapa de conocimientos y significados tejidos en el pasado, ya que “la estructura
narrativa tiene una ventaja sobre otros conceptos afines, como la metáfora o el
paradigma, porque destaca, el orden y la secuencia, en un sentido formal, y es más
adecuada para el estudio del cambio” (Epson y White, 1993, p. 45). A su vez, la
narrativa resalta el papel del sujeto en la construcción de la experiencia, trascendiendo
al hecho verdadero narrado mediante la historia; el eje está en cómo está experiencia
es interpretada e integrada a la red de significados y relaciones de cada sujeto, más no
en la experiencia en sí misma.
Ahora bien, “una manifestación del comportamiento se produce en el tiempo, de
modo tal que cuando se le presta atención ya no se está dando” (Epson y White,
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 23
1993, p. 50). Sin embargo, el significado trasciende para quedar en la triple dimensión
de pasado-presente-futuro, en la que se encuadran las narraciones y acciones. Narrar
permite trascender lo netamente expositivo, hallando nuevas comprensiones de la
experiencia organizada en relatos; “Con cada nueva versión, las personas reescriben
sus vidas, las personas dan sentido a sus vidas y relaciones relatando su experiencia”
(Epson y White, 1993, p. 54). Es así, que la posibilidad de historiar, organizar en
historias la experiencia, permite “establecer y aceptar su propio y personal historial
de lucha, e identificar alternativas a los conocimientos «unitarios» en los que se basan
sus vidas y relaciones” (Epson y White, 1993, p. 42).
En tanto, indagar “¿por qué las cosas ocurrieron así y no de otra manera?”,
permite comprender la historia entrelazándola en las escalas que ocurre, encontrando
la huella, entendida como “la raíz común al testimonio y al indicio” (Ricoeur, 2004,
p.230), en los hechos de una macro-escala que revela las continuidades de las
historias.
Interiorizar este objeto explicado es lo que permite comprenderlo de forma
narrativa. La discusión entre las dimensiones explicativa y comprensiva de la historia
se diluye al admitir que tanto la inteligibilidad narrativa como la explicativa son
necesarias. Entendiendo que el fin último del conocimiento histórico es representar el
pasado verdadero y que “la memoria es del pasado” (Ricoeur, 2004 p. 315), se puede
inferir que el objetivo de la historia, como ciencia que trasciende a la escritura del
pasado para buscar su comprensión, se ubica en la representancia o “capacidad del
discurso histórico para representar el pasado” (Ricoeur, 2004, p. 315). La narración,
entonces, trasciende la explicación del hecho ausente permitiendo su representación.
Se libera el poder representativo de la narración en tanto que “la representación en
cuanto narración no se dirige simplemente a las cosas acaecidas” (Ricoeur, 2004, p.
315), donde la pulsión referencial del relato histórico devela la complejidad que la
forma narrativa de la representación de la ausencia tiene en sí misma.
La representación de la historia usando figuras semejantes (tropología),
transforma el discurso alejándolo de lo que realmente sucedió, obstáculo que al ser
comprendido desde la relación representación–ficción deja ver el carácter retórico de
la representación. Sin embargo, para comprender la categoría narrativa de la historia,
hay que comenzar por entender que la narratividad, pese a la opuesta concepción
narrativista, “no constituye una solución a la explicación/comprensión” (Ricoeur,
2004, p. 316). No obstante, en el plano de la narratividad se construye la trama que
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 24
por su parte si aporta a la construcción de la historia al ser una suerte de explicación
final o causal de la misma.
En consecuencia, el acontecimiento individual de carácter singular y breve,
separado de la secuencia de sucesos, se establece como el fundamento del discurso
político. Por tanto, el relato, su primera forma de trasmisión, se vuelve secundario al
conocimiento histórico estableciéndose “como una forma primitiva de discurso”, así
“a un concepto pobre de acontecimiento corresponde uno pobre de relato” (Ricoeur,
2004, p. 317). Estos relatos sólo construyen una historia episódica, fraccionada que
será la base de la retórica del discurso político, historia que genera explosiones y se
opone al relato de larga duración construido por acontecimientos que no tienen causas
únicas, y que expanden el enfoque de la historia del eje político al eje social.
Desde este último eje, el relato se convierte en el carácter científico de la historia,
al ser tomado en cuenta desde su configuración y no desde su carácter episódico. Esto
es posible desde la perspectiva narrativista al entender que “comprender al relato
significa comprender los acontecimientos que integra y los hechos que relata”
(Ricoeur, 2004, p. 319), sin necesidad de que estos hechos y acontecimientos sean
desligados. El relato se constituye como un todo compuesto por los acontecimientos
relatados, así se establece como instrumento cognitivo, mediante el cual es posible
caracterizar la explicación histórica. Al ser el relato un todo, el historiador se ve
enfrentado a la contradicción entre la historia catalogada como universal y las
múltiples historias que se pueden narrar de cada acontecimiento. Así mismo, el
carácter subjetivo que le permite elegir un acontecimiento sobre otro para ordenar el
relato, pone también en entredicho el fin epistemológico que caracteriza a la historia
en su búsqueda de la verdad y resalta una vez más la aporía, contradicción desde la
cual la historia se asemeja a la ficción (Ricoeur, 2004).
La inteligibilidad narrativa se fundamenta en el plano de la semiótica del discurso
por lo que se basa en la coherencia narrativa, ésta parte de los rasgos prenarrativos
hacia las conexiones que dan pie a la explicación/comprensión del relato. Articula a
través de la trama los relatos de los acontecimientos y hechos vividos narrándolos con
lógica, haciéndolos probables, verosímiles para que sean asumidos como verdades y
para poder “inducir a creer en la coherencia narrativa de la historia narrada” (Ricoeur,
2004, p. 322). Esto implica, que el acontecimiento se caracteriza como una variable
de la trama la cual incluye a su vez a los sujetos “personajes que son los actuantes y
los sufrientes de la acción narrada”, e incluye además la implicación retórica de negar
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 25
en la trama algunos acontecimientos considerados “horribles, moralmente
inaceptables” (Ricoeur, 2004, p. 324), que lleva a reflexionar acerca de los límites
retóricos de la representación.
La articulación entre coherencia narrativa y conexión explicativa o final se
fundamenta en el vínculo entre el acontecimiento ocurrido y la narración, lo cual
implica la relación entre las diferentes escalas de la historia; pasar de la escala de la
microhistoria de las relaciones sociales (del pueblo, el grupo) a revelar el alcance que
tiene la macrohistoria, requiere de la explicación como medio para entender las
imbricaciones que los relatos tienen entre sí y poder develar la transición narrativa
“que opera a lo largo de esta vía descendente desde el plano superior de producción
de sentido al inferior de efectuación concreta, merced al olvido de la causa oculta en
sus hechos” (Ricoeur, 2004, p. 325). El acontecimiento pasa de ser un cambio en la
trama de la historia para revelar la relación que tiene la estructura narrativa con la
coyuntura que explica el relato; la explicación del acontecimiento se entrelaza con la
descripción de la trama y trasciende la pretensión del relato histórico de representar
la realidad con el fin de acercarse a la representancia o capacidad del discurso de
representar el pasado verdadero.
Sin embargo, la diversidad de análisis ha permitido ampliar la percepción que se
teje en torno a memoria-historia, su reconstrucción y veracidad. Es así, que la
metáfora cobra gran relevancia al ser entendida como el elemento que permite el
desplazamiento y la ampliación del sentido de las palabras, al constituirse en la
sustitución de una palabra por otra en su sentido figurado, dando un significado
impropio a la palabra, determinado por semejanza. Al respecto, Ricoeur (2001)
plantea que “la palabra como unidad de referencia” (Ricoeur, 2001, p. 9), unidad de
base con la cual la metáfora se ubica entre dos disciplinas: la retórica y la poética. A
través de la primera busca la persuasión con el discurso oral y mediante la segunda
pretende la mímesis, la representación de las acciones humanas en la poesía trágica
(Ricoeur, 2001, p. 16).
Al analizar la metáfora se hace pertinente una apuesta por recuperar la retórica en
su integralidad compuesta por argumentación, elocución y composición, dada la
ausencia de una historia vigente de la metáfora que nació de la retórica comprendida
hoy como una ciencia muerta y mutilada (Ricoeur, 2001, p. 9). La elocución hizo de
la palabra un arma pública, un arma para persuadir mediante el discurso. En ese
sentido, “hubo retórica porque hubo elocuencia, elocuencia pública” (Ricoeur, 2001,
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 26
p. 16). La retórica al ser la técnica del discurso, talento que según Cicerón es un don
innato (1858, Silvia), le permitió hacerse consciente de sí mismo y de sus
posibilidades de persuadir mediante una estrategia determinada.
El lenguaje se constituye entonces, en aspecto contenedor y proveedor de
significados, y por tanto, en factor que suministra y hace posible el desarrollo de la
cultura política. La expresión de los sentidos político-culturales que se mueven en
contexto, se explicitan a partir y gracias al lenguaje, por lo cual éste mismo está
tocado por los sentidos políticos del discurso social (Bruner, 1991). Parte del
reconocimiento de la multiplicidad de las identidades dentro de los relatos y la
elaboraciones discursivas, contempla la interdependencia de los contrarios y la
recursividad de los fenómenos, al implicar una mirada del individuo en su contexto
social e histórico, constituido en el escenario mismo de la construcción de sentido, sin
el cual no es posible asumirse como sujeto dentro de la historia (Sacipa y Tovar,
2004). “El ser humano no es un territorio aislado y solitario, es el producto de un
proceso de socialización y construcción colectiva, de la interacción de todos los seres
vivos y la comprensión de su contexto” (Terre des Homes-Italia, 2004, p. 19).
3.1. Referentes Conceptuales
A partir de la revisión teórica planteada, se desprenden los siguientes referentes
conceptuales que guiaron el proceso investigativo:
3.1.1. Poder: Elemento constitutivo de la subjetividad, que mediante
artefactos sociales situados histórica y culturalmente, produce
efectos de verdad, construye formas de estar en el mundo bajo
determinadas prácticas sociales y guía los ejercicios de resistencia
desde acciones que reproducen las lógicas hegemónicas (Foucault,
1988). El poder es, de acuerdo a los planteamientos de Foucault
(1988), el término que designa los relacionamientos en un
entramado de acciones que inducen a otras acciones y que se
concatenan entre sí en un conjunto de relaciones, símbolos y
ejercicios, que tratan de construir una forma particular de vida
social en un sector territorial determinado, al operacionalizar las
decisiones del poder político.
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 27
3.1.1.1. Subjetividad: Se refiere a la manera en que los sujetos se
constituyen desde formas de poder que emergen en la vida
cotidiana, categorizan al individuo y lo marcan por su propia
individualidad, lo unen a su propia identidad, le imponen una
ley de verdad que él tiene que reconocer y que al mismo tiempo
otros deben reconocer en él, con el fin de obedecer, operar y
desear lógicas de relacionamiento desde las estructuras de
poder (Foucault, 1988). En consecuencia, el mundo y la
relación que se tiene con él se da desde dos significados
específicos: 1) el sujeto como sujeto a otro por control y
dependencia y 2) el sujeto como constreñido a su propia
identidad, a la conciencia y a su propio autoconocimiento
(Foucault, 1988).
3.1.1.2. Resistencia: Es entendida como puntos de insubordinación
(medios de escapatoria) que permiten existir a las relaciones de
poder, en la medida que desde estrategias, se convierten en los
mecanismos utilizados en las relaciones donde la confrontación
y lucha forma modelos de acción sobre posibles acciones. Es,
en última instancia una estrategia de lucha en la que las fuerzas
no están superimpuestas, sino que cada una constituye un tipo
de límite permanente, un punto de posible revés, que alcanza su
término cuando mecanismos estables reemplazan el libre juego
de reacciones antagónicas dentro de una misma lógica de
relacionamiento; de la acción que reproduce lógicas del poder
opresor (Foucault, 1988).
3.1.2. Reversibilidad: Expresa la posibilidad del sujeto de constituirse en
resistencia sin encarnar o perpetuar el poder, en donde cada sujeto
empieza a comprender entonces que ésta voluntad de poder termina
encubriendo un desafío personal más que una lucha política, a la
que solo se puede responder con un contra-desafío no político, no
dialéctico, no estratégico y de una fuerza histórica incalculable,
donde las dinámicas hegemonizantes de los dispositivos del poder
comienzan a desintegrarse desde una forma distinta de resistencia
(Baudrillard, 1978).
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 28
3.1.2.1. Subjetividad: Esta surge cuando se rompe con el discurso de lo
político y se comprende la indeterminación radical del mismo,
su inexistencia y su simulación. La subjetividad del individuo
se construye a partir de la interacción con los otros y su
inclusión en un mundo relacional, que mediante una dinámica
dialéctica, le asigna un carácter individual al configurar las
formas y maneras de ser y actuar desde la posibilidad de lo
reversible. Así, el individuo se constituye como sujeto
emancipado en la tensión misma y la desestructuración del
mundo social y su dinámica de operar (Baudrillard, 1978).
3.1.2.2. Resistencia: Hace referencia al contra-desafío que tumba el
poder político y su estrategia de dominación y da la base de la
emancipación. Desde Baudrillard (1978) la resistencia es dada
desde la reversión de signos y se encuentra en la muerte misma
del poder, que al iniciar el proceso emancipatorio y su
consecuente desestabilización del aparato dominante, trae como
consecuencia la muerte inminente de los sistemas de referencia.
La resistencia no es pues una relación de fuerzas, es dada desde
la reversión de signos y se encuentra en la muerte misma del
poder.
4. MÉTODO
4.1. Diseño
La siguiente es una investigación descriptiva y exploratoria, con un diseño
muestral de carácter estructural, que a partir de la utilización del método de estudio de
casos, con un enfoque socioconstruccionista, en función de la aplicación de la
entrevista abierta, busca las nociones e ideas compartidas que dan sentido al
comportamiento social y permiten entender, al tener en cuenta sus dinámicas y
propiedades, el fenómeno social como un todo (Bonilla y Rodríguez, 1997).
Las características propias del estudio de caso, permiten indagar a profundidad
sobre temas como la postura particular y única que tienen los sujetos participantes en
relación con la construcción de la subjetividad y los procesos de resistencia, así como
también permite comprender el contexto particular en el que se encuentra el individuo
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 29
y por consiguiente, interpretar las formas como se percibe y construye. Por
consiguiente, el estudio de caso puede ser definido como “una narración que
proporciona información contextualizada sobre un determinado sujeto, realidad,
acontecimiento o hecho” (Stake, 1988, p. 23), y tiene como finalidad implicar al
individuo en el estudio de un asunto con el fin de llegar a elaborar una descripción-
diagnóstico, a identificar problemas y a elaborar propuestas de decisiones (Stake,
1988).
Con base a lo anterior, las narraciones son entendidas entonces, como la
posibilidad en que se organiza en historias la experiencia, al establecer y aceptar el
propio y personal historial de lucha, e identificar alternativas a los conocimientos
«unitarios» en los que se basan las vidas y relaciones (Epson y White, 1993). En este
sentido la narración, tomada desde el estudio de caso, permite que la investigación
resalte el papel del sujeto en la construcción de la experiencia, trascendiendo al hecho
verdadero narrado mediante la historia. De esta forma, para las investigadoras narrar
permite trascender lo netamente expositivo, hallando nuevas comprensiones de la
experiencia organizada en relatos; o como lo afirman Epson y White (1993), la
estructura narrativa destaca, el orden y la secuencia, en un sentido formal, y es más
adecuada para el estudio del cambio.
La escogencia del método se basa en la posibilidad que este brinda, para captar el
significado y las interpretaciones que los individuos tienen en común sobre la realidad
social que se estudia y su definición como producto histórico, es decir validada y
transformada por ellos mismos (Bonilla y Rodríguez, 1997).
En consecuencia, tanto el enfoque como el método se hacen pertinentes en la
medida que coadyuvan a abogar por: 1) una democracia del conocimiento como
contexto del desarrollo humano constituido desde una base importante del poder, la
resistencia y la política, 2) la concepción del significado como un derivado del uso
social, y 3) la constitución del individuo a partir de la interacción con los otros y su
inclusión en un mundo relacional, que mediante una dinámica dialéctica, le asigna su
carácter individual al configurar sus formas y maneras de ser y actuar (Gergen, 1996).
4.2. Participantes
La investigación contó con la participación de un líder comunitario de la
Asociación de Trabajadores Campesinos de Carare, el cual hizo parte del proceso de
resistencia pacífica durante el tiempo transcurrido entre 1992 y 2002. Se cree que su
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 30
experiencia, primero como campesino de la región y luego como presidente de la
asociación, permite llenar el horizonte discursivo y dar cuenta de otras formas de
existencia diferentes a la de la encarnación del poder en las que se determina si es
posible o no transformar la realidad sin necesidad de tomar o hacer parte de las
lógicas y relaciones del mismo, pues su voz representa una voz colectiva que recoge
las ideas y expectativas de la comunidad.
Como se mencionó anteriormente, el presente es un diseño muestral de carácter
estructural que supuso una selección de acuerdo al interés propio de las
investigadoras, cumpliendo particularmente con los parámetros de vivencia y
contexto que se pretenden observar e interpretar en concordancia con el estudio y
enfoque establecidos.
4.3. Criterios Éticos
El trabajo investigativo busca respetar los principios éticos de la investigación en
psicología, al tener en cuenta la fidelidad de los resultados y la verosimilitud de los
datos desde el cuidado y el respeto por el otro, mediante: 1) contar con el
consentimiento sobre la confidencialidad de los relatos y el anonimato del estudio, 2)
la participación voluntaria de los sujetos, explicitando que no se recibirá ningún
beneficio o remuneración por hacer parte del mismo, 3) dar a conocer de manera clara
y explícita el objetivo de la investigación, 4) el respeto por la integridad de cada uno
de los participantes, y 5) mantener una relación simétrica entre investigadoras y
participantes. Todo lo anterior enmarcado en los planteamientos de la Ley 1090 de
2006.
4.4. Instrumento
Se empleó como instrumento la entrevista a profundidad, por medio de la cual se
buscó hacer explícito no solo lo que el individuo piensa sobre el asunto que se
investiga sino los discursos que evidencian la huella de lo social sobre la construcción
del sujeto. La entrevista fue pensada como la mínima expresión de un sistema
comunicacional que se retroalimenta y fue entendida, como el producto de una
circularidad interaccional cuyos resultados dependieron de la organización concreta y
sucesiva de las secuencias comunicativas (Delgado y Gutiérrez 1999); como lo
afirman Delgado y Gutiérrez (1990) todo intercambio de mensajes manifiestos va
retroalimentando el contexto interpersonal y marca los límites sobre la interacción
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 31
posterior. De esta manera, la entrevista se estableció como un juego de lenguaje con
efectos previstos e imprevistos que remitieron fundamentalmente a un juego de
poderes (Alonso, S.f., citado por Delgado y Gutiérrez, 1999).
En tanto, y siguiendo los planteamientos anteriores, se utilizó la entrevista a
profundidad como el instrumento que guió el acercamiento a la figura del individuo
como actor que incorpora y ejemplifica factores sociales del grupo de referencia. La
entrevista generó compresiones de la individualidad socializada (Alonso, S.f., citado
por Delgado y Gutiérrez, 1999) a partir de tres niveles relacionales que determinaron
el sentido del discurso: 1) el nivel del contrato comunicativo, 2) de la interacción
verbal y 3) del universo social de referencia.
Con el primero de los tres niveles, se busco facilitar el funcionamiento del
dispositivo (al remitir el uso de la información y la comunicación al contexto de la
investigación misma) por medio de un contrato constituido por unos parámetros que
representaron los saberes mínimos compartidos por los interlocutores sobre lo que hay
en juego y los objetivos del diálogo; saberes comprendidos desde saberes implícitos
capaces de crear una situación potencialmente comunicativa (códigos lingüísticos y
culturales, reglas sociales y modelos de intercambio oral) y saberes explícitos que
constituyeron en la base común de los intercambios entrevistador-entrevistado y se
fundaron en los objetivos de la investigación, del cómo, por qué y quién la realiza
(Alonso, S.f., citado por Delgado y Gutiérrez, 1999).
El segundo de los niveles se encontró en el hecho mismo de la situación de
interacción comunicacional, siempre regulada por un marco de creación de territorios
lingüísticos, espaciales y sociales, que dieron un carácter de verosimilitud y
normalidad a la interacción interpersonal, fundamentada en la apertura de los sujetos a
la comunicación y a la aceptación de reglas. El objetivo fue crear una relación
dinámica, que por su propia lógica comunicativa, potenciará temas de acuerdo con el
tipo de sujeto entrevistado y lo invitara a la confidencia (Alonso, S.f., citado por
Delgado y Gutiérrez, 1999). Para ello se desplegaron resortes comunicativos como la
complementación, la interpretación, preguntas sobre el contenido y la actitud, el eco,
y el reflejo, con el fin de poner en práctica capacidades de reflexión y decisión sobre
el trabajo realizado.
Lo anterior implicó el siguiente guión temático o guía general de contenido, que
recoge los objetivos de la investigación y focaliza la interacción; es importante
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 32
mencionar que dicho guión no fue una estructura fija, organizada y/o estructurada,
sino que obedeció al carácter flexible de la entrevista abierta:
1. Presentación de quienes participaron de la entrevista.
2. Introducción al instrumento. En donde se llevó a cabo la descripción general
del proyecto de investigación, el propósito, el motivo y la utilización de los
datos obtenidos.
3. Características de la entrevistas. Mediante las cuales se explicitó la
confidencialidad, se agradeció la participación y disponibilidad para la misma
y se explicó la dinámica en la cual se daría su desarrollo.
4. Preguntas. Estas giraron en torno a develar el discurso de subjetividad y
resistencia leído en el horizonte entre poder y reversibilidad (o anti-poder).
Las preguntas fueron encaminadas de la generalidad a la complejidad o
especificidad, dependiendo de la narrativa del entrevistado.
Finalmente, el tercer nivel de la entrevista, se encaminó a leer la forma social
dentro de la construcción individual de las subjetividades y los condicionamientos
ideológicos de los procesos motivacionales. Se buscó producir la expresión de la
individualidad socializada por una mentalidad cotidiana, vista desde hábitos
lingüísticos y estilos de vida en cuanto que formaciones y validaciones específicas de
la conducta realizadas dentro de los grupos sociales. Las interpretaciones surgieron
entonces, de los modos habituales que giran en torno a los modelos sociales, gracias
en parte a la capacidad que la entrevista tuvo para dar cuenta de la vivencia individual
del informante del sistema de “marcadores sociales” que encuadran la vida social del
individuo específico (Alonso, S.f., citado por Delgado y Gutiérrez, 1999).
4.5. Procedimiento
Etapa 1: A partir de la inquietud sobre la manera en que se da la construcción del
sujeto, en tanto sujeto político, desde lógicas diferentes a las del poder hegemónico y
las formas de relacionamiento del mismo, la investigación inició con la revisión y
apropiación de los contenidos teóricos. Esto se hizo con el fin de develar
comprensiones no solo en torno al proceso de la ATCC, sino además de las diversas
posturas en que el individuo crea subjetividades y las ancla a procesos de resistencia
pacífica o no. Lo anterior permitió estructurar las categorías de análisis bajo las cuales
se leyeron las dinámicas de relacionamiento y construcción, y aclarar el panorama
metodológico a seguir durante la indagación.
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 33
Etapa 2: Se llevó a cabo la búsqueda y ubicación del participante de la
investigación luego de una indagación general desde las redes de apoyo institucional
y académicas. Este ejercicio giró en torno a los criterios de vivencia y contexto
desglosados desde la revisión bibliográfica y al planteamiento del estudio y del
enfoque. Una vez realizado el primer contacto, se explicita el contrato comunicativo,
presentando el interés del estudio, su objetivo, el fin que va a tener la conversación y
los parámetros éticos-normativos a los cuales se obedece. Con posterioridad, se
planea y lleva a cabo el encuentro en el que es aplicada la entrevista (la conversación
es registrada en un archivo de audio y luego es transcrita, ver apéndice A), durante el
cual se firma un consentimiento informado con el fin de corroborar condiciones éticas
del proceso de entrevista (Ley 1090 de 2006) y se convoca a una nueva reunión que
tiene como objetivo nutrir el relato a partir de la verificación de los datos. Este último
encuentro se realiza una vez se tienen los resultados y el análisis de los mismos.
Etapa 3: Se lleva a cabo el análisis de los resultados obtenidos en la entrevista a
partir de: 1) la transcripción del archivo de audio de la misma, 2) la lectura cuidadosa
de los datos consignados por escrito, 3) la clasificación del relato por categorías de
estudios, 4) el esclarecimiento de los diversos significados de la narración y la
interpretación desde la construcción de subjetividades y procesos de resistencia en
clave de poder y reversibilidad. Finalmente, se socializa al participante los resultados
encontrados para corroborar, eliminar o aceptar la información consignada en el
trabajo escritural de la investigación.
5. ANÁLISIS
A partir de las narrativas obtenidas, fue posible observar elementos significativos
que hicieron manifiestas las diferentes formas en que emergen la subjetividad y la
resistencia en clave de poder o reversibilidad, desde la interpretación de la experiencia
de vida de uno de los líderes de la ATCC. Durante la obtención de los resultados, se
tuvo en cuenta la triangulación de la observación de las investigadoras, en tanto
observadoras participantes de la conversación, y se privilegió la escritura textual del
relato resaltando la verosimilitud de las narraciones del participante.
5.1.1. Análisis Descriptivo
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 34
Poder
El relato del participante devela la presencia del poder en las formas de relación
provenientes de los actores armados presentes en la región. Esto se muestra como un
enfrentamiento lineal en el que se busca imponer el propio interés negando el del otro,
en sus palabras “joder al otro”.
Así, se da cuenta de la polarización que atraviesa los mecanismos del poder,
refiriéndose específicamente al poder estatal, económico y eclesiástico, que juegan
dentro de la lógica de: 1) hacer del otro un enemigo: “el santandereano peleador no…
subestima a su enemigo ¿si entiendes? Ó sea lo respeta, lo respeta. Ó sea, para nada lo
minimiza, lo respeta” 2) estructurar ordenamientos institucionales desde fuerzas de
poder diferentes (Juntas directivas, asamblea de delegados, comités de conciliadores,
Asojuntas, etc.): “entonces son como anillos que hay alrededor de la junta directiva,
son como esos anillos… hay una asamblea de delegados, hay… comités de
conciliadores, de negociadores, pero son anillos que hay alrededor de la junta
directiva”, 3) manipulaciones con cuotas de manejo social y dineros en épocas de
campaña: “de hecho durante toda la historia de la ATCC ha habido invitaciones de
diversos tipos y cheques así, puestos ahí”, y 4) amenazas y amedrentamientos por
medio de la imposición de fuerza, que busca poner al sujeto frente su descrédito como
un ciudadano “útil y correcto” para la comunidad, desplazar a la comunidad de
manera forzada de los territorios, y atentar o poner en riesgo la vida de los pobladores,
sus familiares y allegados: “ es inaguantable ver morir tus amigos, tus vecinos, tu
familia y ni siquiera poder recogerlos y… luego que te estén atropellando… que te
atropella éste, que te atropella el otro, que el mismo Estado que es el que tiene que
garantizar tus derechos te jode, te maltrata, eh… te señala”.
En tanto, se reconocen formas de poder opresor que se enmarcan en lógicas de
corrupción, violencia y muerte, y que tienden hacia el control territorial, la
desestructuración de las redes sociales, la manipulación del bienestar comunitario, y
la operacionalización del poder político. El poder se entiende, entonces, como
realidad y fin en sí mismo al habitar el contexto del que se hace parte y al aceptar
algunas de las lógicas de relacionamiento que éste impone: “y en esos momentos lo
único que uno puede hacer es aceptar la ley del silencio que te exige violencia”.
Subjetividad
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 35
Son pocos los relatos que evidencia la subjetividad construida desde lógicas de
poder, sin embargo, dentro de la vivencia del participante se expresan narrativas que
dan indicios de categorizaciones movidas desde la individualidad e identidad, como
por ejemplo: “yo fui muy renuente al comienzo a meterme a esas vainas, en esos
temas de, de lo comunitario y toda esa vaina porque a mí nunca me llamó la
atención”, o “yo me fui en realidad porque escuché que por allá en esa región había
esmeraldas y yo estaba mamado de trabajar por acá y cumpliéndole órdenes a todo el
mundo y dije no… no cumplo más órdenes". En otras palabras, la acción del sujeto
obedece a lógicas egocéntricas que explicitan renuencia hacia temas comunitarios.
Ahora bien, la subjetividad se muestra en maneras de relacionamiento dadas
desde la rabia, la venganza y la retaliación, desencadenadas por los abusos cometidos
por parte de los actores armados del conflicto: “inclusive… Josué lo dijo… Josué dice
“mira un líder me dice, hombre Josué nosotros debiéramos conformar un grupo pa
defendernos de éstos manes”.
Tales comportamientos también pueden deberse, a imaginarios sociales creados
en torno al ser santandereano, recio, valiente y peleador, en palabras del participante:
“el santandereano peleador no… subestima a su enemigo ¿si entiendes?” “yo creo que
también las características del santandereano tiene mucho que ver con eso. Mira el
santandereano… esa región está ubicada muy cerca en realidad de Puente Nacional,
La Sabana, Vélez, en donde hubo grandes bandoleros, Efraín González nada más ó
sea, y muchos como ese que todavía están vivos y que no son bandoleros pero que es
gente que hijueputa”. A partir de lo anterior, la valentía del individuo se mide en la
capacidad que éste posee para enfrentarse a otro, haciendo uso de los mismos medios
que utiliza ese otro considerado como enemigo: “Josué era un man que tenia cojones,
para mí de los hombres, de los líderes más valientes y más verracos, ese era Josué, era
un hijueputa que no se le echaba para atrás a nadie, y antes del proceso de paz a tres
cuatro guerrilleros con fusil y él cargaba su pistola, su revólver también, y decía
abrase hijueputa y nos damos y no hay problema”.
Por otra parte, se observan: a) residuos del poder eclesial impuestos al proceso de
paz, en la medida que la comunidad se relaciona de manera tangencial desde el rótulo
del bien y el mal: “hablan de las bondades de un proceso de paz como una mierda
engendrada por el espíritu santo y por la necesidad de ser buenos o ser malos”; b)
desconcierto expreso ante la atención prestada a la comunidad por parte de los grupos
armados, dado desde la magnificación del enemigo: “hoy algo se sabe por ahí de lo
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 36
que pasa, maquilladamente nos dan a conocer las cosas, en esos tiempos la gente
moría y nadie sabía nada, en un tiempo como ese, en un territorio como ese, si es
bastante curioso que los grupos armados le atienda a uno”; c) dinámicas mediante las
cuales el poder no se reconoce como legítimo porque, en parte, obedece a lógicas
bélicas y económicas que solo reconocen a unos pocos: tu pones plata y pones fuerza
militar para hacerte al poder y te haces, y no hay ningún poder legítimo”; d)
percepciones en torno al estudio de la guerra como un medio social y un regalo a las
comunidades, con el fin de erigir posturas con nociones infundadas que más que
contribuir y construir, atacan y destruyen: “con tanto intelectual, con tanta gente que
sabe tanto de los conflictos, por qué no hemos podido hacer nada que valga la pena en
este país, ¿no?”.
En consecuencia, la subjetividad se limita al análisis de la guerra y el conflicto
desde la circularidad de la violencia: “pero ahí hay cosas que son de las subjetividades
de los procesos sociales que no han sido estudiadas en este país, en este país la puta
guerra está lo suficientemente estudiada, la paz no, la paz no”.
Resistencia
Bajo la lógica del poder, la resistencia se entiende como una posibilidad de
defensa de la vida y del territorio mediante posturas bélicas; es el medio que permite
insubordinarse al poder de los grupos armados. Desde ésta lógica lineal
(oprimidos/opresores, amigos/ enemigos), el campesino en resistencia se convierte en
agente replicador del poder que lo oprime, busca los mismos fines, por los mismos
medios. La relación que confronta al otro se entiende como la posibilidad de defensa
mediada por las armas y la organización para acabar al enemigo. El relato da cuenta
de la contemplación de esta lógica: “si nos toca darnos candela con el ejército, con la
policía, con la guerrilla, nos damos” “darse plomo con el que toque, esa era una de las
alternativas que había”. Así mismo el participante recupera en su narración un
testimonio del primer presidente de la Asociación, en el que expresa: “y Josué ya
había tenido la sensación, ya había armado un artefacto, un explosivo pa matar
guerrilleros…”
Ahora bien, la polarización, planteada desde el horizonte de poder, rige la
posibilidad de resistencia: “si uno solo de ellos nos hubiera respetado seguramente
con ese nos hubiéramos unido”, la estrategia de insubordinación era ir en contra del
que hacía daño replicando sus prácticas y ejercicios. Se evidencian estrategias de
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 37
confrontación y lucha como modelos de acción, que aportan al juego de reacciones
antagónicas dentro de la misma lógica de relacionamiento de los actores armados
“que te dice pues hermano si nos toca darnos candela con el ejército, con la policía,
con la guerrilla, nos damos, ¿sí?”, “esas fueron varias opciones que se consideraron
antes de tomar el paso. Y conformar una autodefensa campesina de verdad era una de
las ideas que había. Aunque yo decía no… y darnos plomo con el que toque, esa era
una de las alternativas que había”.
También se menciona y explicita un juego estratégico de cooptación y
manipulación que busca encaminar las acciones desplegadas desde la organización
social. Así: es manifiesta la supervivencia de las Asojuntas a partir de favores
conseguidos en campañas políticas, que resuelven las necesidades comunitarias de
manera inmediatista, “las juntas comunales, las Asojuntas… las Asojuntas
generalmente en la ciudad y en otras regiones están mirando a ver cómo a través de
los candidatos consiguen cositas, y mangueras y cemento y cosas para resolver esos
problemas pero… de manera inmediatista”; se evidencia la existencia de un plan de
desarrollo dado desde intereses comunitarios que para su mantenimiento y existencia
debe entrar en la lógica de la “pelea política”: “el plan de desarrollo,… que se ha
construido de manera concertada con los campesinos. Que no es como los planes de
desarrollo que, que se inventan los alcaldes, sino un plan de desarrollo yendo al
territorio, conociendo lo que la gente quiere, escuchando lo que ellos plantean y ahora
sí dar la pelea política para tratar de que eso de verdad se cumpla”; y se reconocen las
dificultades del proceso dentro de los métodos del sistema de poder hegemónico,
expresadas desde la falta de responsabilidad estatal (cuota de desarrollo social,
deficiencia en el sistema educativo, condiciones económicas desfavorables y
financiación): “los proyectos que nosotros tenemos no son perfectos, también tienen
problemas, tienen muchos problemas porque nosotros logramos, logramos bajar
digamos como la intensidad del conflicto, logramos establecer un proceso de
discusión política y de negociación, pero los que tenían que poner la cuota de
condiciones para el desarrollo social no lo han cumplido, entonces tenemos un
problema ahora mismo con los jóvenes sobre todo, porque es una región que no tiene
oportunidades para que los pelaos accedan a la educación superior, para que accedan
a oportunidades laborales, entonces hay un éxodo preocupante de los pelaos, aquí hay
muchos, muchos”.
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 38
Reversibilidad
La reversibilidad se hace evidente en la forma que, desde el relato, se reconoce a
la ATCC como la materialización de una salida no violenta que revierte el poder en la
región del Carare: “ yo siempre digo que el proceso de la ATCC, de alguna manera se
debe a la manera como se, a la manera como, como se… transforma la lógica de
poder regional, y se transforma porque en una región de actores armados, donde el
que manda es el gatillo, de alguna manera hay que ponerse a la altura de él y de estar
por encima de esas cosas, y digo hay una transformación de esa lógica de poder, que
se sustenta para mí en la acción social colectiva primero que todo, que se fundamenta
y que se argumenta de manera pues innegociable sobre un valor también innegociable
que es la vida, ahí, ahí, para mí es eso Mm… el digamos, la humanización de la gente,
de la ATCC”.
El proceso de organización social, que estructura a su vez la vida individual, se
constituye en maneras de acción que no encarnan o perpetúan el poder gracias, en
parte, a que el sujeto reconoce que la voluntad de poder se da desde el desafío
personal que tiende al bienestar común. Así, el proyecto de paz obedece a fines
diferentes que responden al poder de las armas con un contradesafío dado desde el
poder de la palabra, como se expresa en uno de los relatos, “si logramos, por eso yo
creo en la palabra, ¿sí? Una palabra que te ayude a desmontar todos esos rollos que
tienes construidos en la cabeza, que me ayude también a mí, ¿sí?, que me permita
hundirme contigo y con tu esencia para no matar, porque me mato, ¿sí?, para no
joderte porque me estoy jodiendo a mí”.
Ahora bien, el proceso de negociación llevado a cabo desde la premisa del
diálogo entre iguales se vale de las lógicas del poder para reversar, desde el desafío
personal que imponen el bienestar y la defensa a la vida, las formas violentas de lucha
política: “la ATCC tiene digamos, primero que todo, el legado y el compromiso
indeclinable de defender la vida por encima de todo, por eso nuestro lema es por el
derecho a la vida, la paz y el trabajo. Osea defender la vida pero tratar de garantizar la
vida en paz, la vida tranquila, la vida de armonía, de convivencia, teniendo unas
condiciones para resolver, eh, como la vida diaria, la vida social ¿no?, eso es… yo
creo que en el lema de la ATCC se resume lo que es ese proyecto”.
El proceso, al no obedecer a contradesafíos políticos, dialécticos y/o estratégicos,
cobra una gran fuerza histórica desde su ser social, pues permite la humanización y la
negociación horizontal como herramientas que rompen los vínculos con propuestas
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 39
violentas y la creación de nuevas pautas de relacionamiento con los otros: “es poder
hacer un balance, todo un proceso de memoria que permita publicar las cosas que, que
aparentemente están enterradas ahí, y es todos los lutos, todos los odios, los
resentimientos, los deseos de venganza, todos los atropellos que se cometieron, y
comenzar a, a valorar eso y a tratar de otorgarle un significado distinto a esas
situaciones de la vida, para poder partir de verdad con, con un discurso que sea
coherente y que nos ayude a generar condiciones de paz. Un trabajo al interior de la
comunidad que es muy fuerte. Que transita fundamentalmente a través de hablar”.
El poder ya no es el fin y el medio, sino que el fin se centra en la defensa a “la
vida, el territorio y el trabajo” y el medio es la palabra, una palabra que hace del otro
parte del individuo, que rompe con la lógica del enemigo y que no replica las
prácticas violentas de los actores armados, como lo afirma el participante: “si
aprendemos a hablar, a dialogar, a negociar, a reconocernos, a humanizarnos, si hay
posibilidades de hacer cosas diferentes”.
Subjetividad
En el relato del participante se evidencia que la subjetividad, expresada en clave
de reversibilidad, emerge en el momento que se rompe con las lógicas individualistas
atadas a las dinámicas de poder desde el sentir colectivo: “y luego ya pues comienzo a
conocer como cual es el pensamiento de la región, toda la historia, todo esto,
comienzo a meterme en las juntas comunales y ahí entonces eh, como que va uno
vinculándose un poco más con el sentido de, de la comunidad”. Es decir, que se
cambia la lógica de perseguir un bienestar individual dado desde el modelo
económico, por un sentido de vida orientado al bienestar común “y pues yo creo que
la riqueza que encontré no fueron las esmeraldas, pero sí es digamos como un legado
y una cosa que puedo convertirla en mi estilo de vida y en mi razón de ser, ¿no?, y en
el sentido que tengo para vivir, que es digamos el tema de construcción de paz y es lo
que, pues lo que todavía seguimos ahí trabajando”.
De esta manera:
1) Surge una inquietud existencial que modifica los lógicas comprender el
mundo: “tiene que ver como con esas búsquedas que uno tiene muy hondas, muy
hondamente arraigadas. Yo he sido pues desde muy pequeño muy sensible a muchas
cosas, no un sujeto político pues declarado desde muy joven, pero sí muy sensible a
muchas situaciones. Con una búsqueda muy grande por lo que es el sentido de la vida
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 40
y el pa qué carajos estamos aquí, si es solamente, si es solamente ir trabajar, tener
mujer, tirar, tener hijos, eh, me parece que es lo funcional de la vida y no me siento
conforme con eso”, “es la obligación de uno hablar de esto, pero no hablar del lado
oscuro de la vida, ni del lado gris y del luto y de la tragedia y de la guerra, sino de la
posibilidad que tiene el ser humano y que tiene este país de, de, de hacerse a una
realidad distinta y para mí es eso”
2) Se des-estructura el mundo social y su dinámica de operar: “ eso tiene que ver
con la construcción, y eso tiene que ver con el modelo de sociedad que tenemos, la
manera como nos enseñaron a asumir la relación de pareja, de amigos, cierto; las
relaciones de compañeros, las nociones del bien y del mal, eso es, lo que pasa es que
son discusiones que no damos por que hay maneras técnicas de construir la paz, y no
podrá construirse la paz a menos que yo pase por debates como estos… si yo sigo
pensando que jueputa tengo arrechera, como dicen los santandereanos, ¿no? Si yo
sigo pensando que la prevalencia pues es para el hombre y que el hombre es la
prioridad, si yo sigo pensando que tengo que sacrificarme en nombre del amor y de la
bondad y del bien y del cielo, eso es lo que tenemos y hace parte de toda esa
construcción que tenemos”, “El día que este país tenga, o este mundo, tenga gente
construida, construida, ahí, ahí, desde lo humano, y con el otro metido en el alma pero
en libertad, sin, sin martirio y sin nada de eso, porque esa es otra, y si a uno le cuesta,
le cuesta al otro y no se mortifique tanto por salvar la humanidad ¿no? Ese día tu no
necesitas ni siquiera leyes para que te digan que hay que hacer con el otro y que es lo
que no hay que hacer, tu lo haces, lo haces porque lo que estás haciendo por él, lo
haces por ti, ¿sí?”.
3) Se da la inclusión dentro del mundo relacional: “esas maneras que tiene la
gente para reunirse y para construirse como comunidad, te envuelven y resultas
siendo parte de ellos ¿sí?, y terminas siendo parte de ese proyecto de vida y de
comunidad y de ese proyecto político”
4) Se revierte la lógica relacional, cuando se enfrenta el poder hegemónico desde
su contracara: “para mí la gente que es capaz de tomar decisiones en entorno, en torno
a la paz es capaz de tomarla en torno a la guerra”.
5) El sujeto apropia la paz como su nuevo sentido de vida y modifica actitudes y
comportamientos que ahora giran en torno a la defensa a la vida, a una vida digna,
propia y de los otros: “yo no creo que sea una cosa de intereses, en este país los unos
se están metiendo a los paras y los otros a esos SMAD que llaman, y así
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 41
sucesivamente, y obviamente ahí juega el tema de los intereses; a mí me parece que la
gente necesitaba mantenerse en su territorio, la gente necesitaba producir en una
región que se destruyó totalmente porque la gente ya no cultivaba, en una de las
tierras más ricas que tiene este país, más óptimas, necesitaban garantizar la
permanencia del territorio, la vida, la seguridad de la gente, eso… eso era.”, “hay un
discurso que es convincente, hay una postura que es convincente, ¿no? Y esa es la
determinación del pueblo la que se está poniendo en esa palabra, pero reconociendo,
primero que todo reconociendo lo eh… digamos, el, como la existencia de lo humano
y tratar de hablar de humano a humano”
6) Se rompe con las lógicas del poder eclesiástico al des-estructuran la lógica del
bien y el mal: “yo no pienso pues en él, en las enseñanzas pues del señor redentor o
Mesías, no, yo no soy mesiánico, yo necesito vivir, necesito vivir bien y no joder a
nadie, necesito si no dejarme joder de nadie, necesito que la gente sea bonita y que
crezca, pero que crezca libre”, “yo vivo todo el tiempo en esas, en ese debate y en esa
búsqueda, y no es la búsqueda de ser bueno, no me interesa ser bueno, ¿sí?, pero si es
mi apuesta a seguir hablando de esto y a ayudar a construir pues como una noción
distinta de la vida y de la comunidad y de la paz y de esa vaina que llaman ustedes
amor, que para mí tiene muchas discusiones, claro eso, eso digamos que es eh,
también los aprendizajes de una historia, no solamente de la ATCC, pero que si me
obliga de verdad”.
7) Se rompe con el discurso de lo político: “yo a la política no la concibo no, no
la concibo así; ó sea para mí, algún día me preguntaba una de las, de las jefas en la
Secretaría de Cultura ¿por qué eres tan exitoso en el trabajo de la comunidad? Y le
dije por una razón muy simple, porque mi apuesta política no es como la de ustedes,
mi apuesta política es por la construcción de un ser humano distinto, diferente, bonito
porque para mí esa es la base de la política ¿sí?, entonces por eso, yo voto claro, como
todos los huevones de este país a ver quién sale así como bonito, pa, pa votar por él.
Pero no es mi opción ó sea no, no es mi opción”, “yo no creo en la agitación de
masas, yo no creo en el partido comunista, ni en el marxismo, ni en ni mierda de eso,
yo no creo en eso, yo no creo en las putas marchas esas, que no son proyectos
colectivos sino montonera de gente, para mí eso no es proyecto. Yo creo que es una
obligación tuya y mía darle palabra bonita a la gente, decirle que la vida tiene un lado
bonito pero que tienes que encontrarlo y que para encontrarlo tienes que buscarlo en ti
mismo, así, así…”
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 42
8) La concepción del otro cambia, por tanto se equilibran las relaciones desde
intercambios horizontales que reconocen a ese otro como un igual, como un individuo
que hace parte la sociedad y del contexto y no como un enemigo con el que no se
puede coexistir: “me parece que la comunidad logró construir al otro de una manera
distinta y eso le permite moverse así”, “otra cosa, es que en ese tiempo, bueno como
ahora, pues es que los guerrilleros eran la misma familia de los campesinos, eran los
hijos, los vecinos, los amigos, los familiares, los de los masetos también, los de los
paras también ¿no?, entonces todo ese tipo de cosas yo digo que contribuyeron y un
discurso muy firme, muy firme”, “después de haberme hecho lo que me has hecho,
mira yo no te considero enemiga mía, yo no me considero el enemigo de nadie, a mí
me duelen tanto mis muertos como los tuyos, los tuyos y los tuyos”, pero es libertad
no retórica, “me duelen porque son los niños de nuestra región, son hijos de esta tierra
también, son hijos de este país también”, “esto es el reflejo de la gente de todos los
colores y de todas las ideas ahí, ahí, planteado así”, “para mí, si eres mujer, linda, fea,
eres un ser humano que merece oportunidad, las mismas oportunidades, y que
necesitas crecer como yo necesito crecer”, “y ¿qué se necesita para que haya mejores
modelos de relación entre la gente? Mira yo no me aparto y no me apartaré nunca,
nunca de que si conseguimos humanizarnos un poquitico más y mirarnos por encima
del verraco estrato y de la universidad en la que estudies y del barrio donde vives,
mira eso está hecho, ¿si entiendes?”.
9) Se da un diálogo donde lo individual no rompe con lo colectivo y viceversa:
“yo no pierdo mi interés particular, no, yo soy el que está nombrando esa vida y esta
historia, yo soy el que necesita vivir y crecer para que ese proyecto crezca, y todos los
líderes necesitan crecer para que su proyecto crezca”, “mira el ser humano que tiene
al otro incorporado ahí porque es su existencia también, no tiene necesidad de
sacrificar para ayudar, pa dar la mano, pa querer; aquí estamos luchando por amar,
estamos desesperados por aprender a amar, no mira lo primero que hay que construir
es al otro de una manera distinta, aquí (señalando el pecho) sea quien sea, y si lo
consigues no sufras más, descansa”.
Así, la identificación de las posibilidades que tiene el sujeto, ante el desafío que
implica defender la vida, permite entender que si bien su realidad esta mediada por la
cultura, la historia y la expresión del poder estructural en la región, existen otras
posibilidades para existir: “es un discurso humano pero no es el discurso pues, el
discurso de Gandhi de hijueputa venga y me sigue dando en la jeta, sino no, no los
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 43
vamos a joder, pero no nos vamos a dejar joder de ustedes, ese es como un principio
que he aprendido del pensamiento Muisca, “no hagas daño, no te hagas daño, pero no
permitas que te hagan daño”, ¿no?”.
Entender la realidad desde un punto de vista ajeno al que establece el poder
político que atraviesa su vida social, permite encontrarle otros sentidos y ver otras
posibilidades respecto a la construcción de la realidad al margen del discurso político:
“Yo creo que… que ahí hay una jugada muy inteligente de los líderes, y es mapear su
realidad, Poder ver su realidad y sus… y cuáles son las posibilidades que hay… mira
cualquiera se hubiera metido al ejército, a los paras o a la guerrilla, si no supieran que
en cualquiera de los tres estaban perdidos. Te metes al ejército pero tú buscas en el
campo y el ejército está en el pueblo. Y cuando estés en medio de cincuenta o cien
estás segura pero cuando vuelvan a tu casa te joden. Si te vas a la guerrilla igual,
¿entonces?; el poder interpretar eso, el poder leer eso, el poder mapear la realidad que
se está viviendo dice no, ni una cosa ni la otra porque de todas maneras estamos
perdidos. Vamos a modelar problemas para nosotros pero también para nuestra
familia y nos jodemos, nos jodemos, tenemos muchos hijos, la gente allá tiene
muchos hijos, no podemos”.
En consecuencia, la indeterminación radical de la acción política se hace
evidente, así como la inexistencia de lo político “el imperativo es yo tengo que vivir,
pero también para mí es la manera como uno logra construir la sociedad dentro de
uno, como logra construir al otro dentro de uno y ese otro es una obligación para uno
por encima del hijueputa derecho humano, del derecho internacional, y del deber ser
buen amigo o buen vecino, si para mi es una obligación natural que tenemos todos los
seres humanos, y es una obligación y la obligación es construirme en colectivo y
permitir que el otro se construya así; así, de la manera más animal y con menos
elaboración, y por encima de esos discursos que todo el mundo pasa”.
Esta visión crítica de la realidad que des-estructura el discurso político como
factor determinante de la misma, es la que permite observar un panorama diferente en
el que es posible construir subjetividades emancipadas que transforman lo social
mismo.
Resistencia
Al tener en cuenta el poder analizado desde la categoría de reversibilidad, es
posible ver cómo dentro del relato del participante se encuentran creencias que
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 44
sustentan una visión distinta de poder, en la cual no se busca la contestación violenta
sino el diálogo y la desestabilización de los aparatos de poder, y de los actores que
sustentan dichos aparatos. Esto se hace evidente en un apartado de la entrevista del
participante cuando, haciendo referencia a las conversaciones realizadas con actores
armados, líderes de la comunidad toman la vocería para exigir condiciones diferentes
y sobre todo el respeto a la vida. Así, el participante dice: “en una de las primeras
reuniones cuando ellos dijeron: “ustedes son los que obedecen, nosotros somos los
que mandamos” y los líderes les dijeron: “no venimos a que ustedes nos digan qué es
lo que hay que hacer, venimos a poner nuestras condiciones, así como se los estoy
diciendo, a poner nuestras condiciones, porque ustedes han cometido muchos
atropellos en contra de esta comunidad y nosotros tomamos la decisión de romper los
vínculos que tenemos con, con su propuesta y a declararnos como una comunidad
soberana que es capaz de atender sus cosas”.
A partir de lo anterior, puede decirse entonces que la búsqueda de diálogo y de
formas no violentas de negociación debe pasar por la eliminación simbólica de los
sistemas de referencia que oprimen a la comunidad, construyendo así nuevos
referentes relacionados con la movilización dinámica de la comunidad: “el trabajo se
da para generar como una mentalidad de paz en la gente, digamos en los unos y en los
otros. Y por otro lado, pues todas las alternativas de desarrollo que necesita cualquier
región del país para subsistir; hay un plan de desarrollo, que se ha construido de
manera concertada con los campesinos, que no es como los planes de desarrollo que,
que se inventan los alcaldes, sino un plan de desarrollo yendo al territorio, conociendo
lo que la gente quiere, escuchando lo que ellos plantean”. De la misma manera, la
movilización de la comunidad debe pasar por la apropiación de los procesos, por la
eliminación de intermediarios que reproducen los mismos sistemas de poder: “la
ATCC no se metió ni con el señor este comisionado de paz, ¿no?, ni con el personero,
ni con el presidente de la república, nada la comunidad se hizo dueña ¿no?, aquí no ha
habido instituciones de por medio”.
Desde el relato del participante, es posible identificar no sólo la configuración de
un sujeto político que se apropia de los procesos organizativos de su región sino
también cómo empieza a considerar que las formas de hacer paz y las maneras de
entender la participación en un proceso de paz no implican el poder contestatario sino
el poder desde la acción no violenta, desde la resistencia a partir de la consideración
de los actores armados como iguales, con los cuáles, a través del diálogo, pueden
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 45
mediarse condiciones de vida mejores: “a nadie se saca, ni a la guerrilla la sacamos, a
la guerrilla nunca se le dijo ustedes se van de aquí, se les dijo ustedes no joden aquí,
nadie se destierra por no parecerse a nosotros y si hay que salvarle la vida se le salva
la vida, independientemente si es afiliado a la asociación o no, es la vida”.
Además de lo anterior, en el relato del participante puede verse el tránsito entre la
creencia de vivir la vida según los intereses individuales y vivir esa misma vida desde
las redes comunitarias. Para el participante, en la región donde se empezó a
desenvolver, la única forma posible de vivir es “vivir en comunidad” porque esa “es
como la naturaleza de uno”, no porque sea una demanda obligatoria impuesta por
actores armados o violentos sino porque los otros iguales (vecinos) constituyen parte
importante de las situaciones cotidianas de la vida, pues todos, como vecinos intentan
“luchar para construir mejores condiciones”.
La emergencia de la resistencia se hace posible para el participante a través de la
palabra: “yo siento que la, que una de las cosas bellísimas que tiene el proceso
campesino y pues particularmente el proceso de nosotros es el… es como transitar a
través de la palabra, el pensamiento, el legado, el encargo, como transita, como se
repite, como ¿no? Y la manera como la gente desde lo que hace, desde su… manera
simple de vivir están reproduciendo ese, ese tipo de cosas”. Y es entonces una palabra
que vive, que moviliza, que entiende que las formas de lograr procesos de paz no
pasan por la tenencia de un arma sino por la comprensión de la palabra y el diálogo
como herramientas a través de las cuáles se puede conseguir “negociar con los actores
y bajarle pues al tema de la violencia”. La palabra que transita es una palabra que
nace no para convencer sino para encontrar-se, una palabra que ha vivido el dolor que
implica estar bajo el mando de actores armados pero al mismo tiempo se emancipa y
busca formas diferentes de vida.
Al tomar en cuenta el poder que el participante le da a la palabra, es posible
entender también el valor que desde la ATCC se le da a la vida, al trabajo y a la paz
humanas. El poder que se le da a la palabra es un poder que incluye, un poder
creativo: “nosotros somos palabreros, eh, por, por naturaleza… es lo que ha permitido
que el proceso, que camine, que el proceso camine, ó sea es palabra humana, palabra
que humaniza, es palabra que devuelve la existencia, es palabra que te permite eh, que
te concede la palabra también”. Es precisamente a través de la palabra como puede
buscarse la emancipación, una liberación que posibilite la construcción de relaciones,
la emergencia de nuevas posibilidades.
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 46
La palabra vive en cada integrante de la comunidad, pero es también única según
el contexto en el que nace, pues, según lo que plantea el participante, un proceso de
paz que tiene sus bases en la palabra como herramienta de resistencia: “no se puede
replicar porque simplemente no es una elaboración técnica, esa es una respuesta
espontánea de un grupo de gente a una situación concreta, en una región concreta, en
un tiempo concreto. No se puede replicar, lo que sí creo es que el proceso puede dar
claves para generar otros procesos, si las claves están ahí” y son esas claves las que
marcan los procesos de resistencia como procesos comunitarios, no violentos y sobre
todo, reales”.
5.1.2. Análisis Axial
La narrativa del entrevistado, da cuenta de un proceso social en el que surge un
movimiento multicausal, de discusiones de tu a tu (Herreros, 2008), que a través del
contagio por el amor a la vida, la permanencia en el territorio y el trabajo digno,
generan una voz pública, otra representación y un nuevo sujeto que deviene en actor
social y pacífico, “para mí otra cosa es tener la palabra que de verdad genera cosas,
osea para mi es palabra creativa, si ves una, palabra que es decreto, una palabra que es
un conjuro, una palabra que es sincera, hijueputa, y que produce hechos políticos,
sociales y eso, lo demás, lo demás es retórica, pura mierda, para mí; y mira que esa
comunidad tiene eso, esa es una de las cosas bonitas que yo me encontré en el Carare,
como eso transita a través de todo”.
El contra-desafío que la comunidad le plantea a los actores armados que
operacionalizan el poder hegemónico, sólo es posible a partir del movimiento frente a
su concepción ontológica; redefinen cómo comprenden al mundo y su rol en él, a
partir de vivencias dadas desde la necesidad (de defensa, de protección, de bienestar),
que luego y constantemente son resignificadas y construidas desde la subjetividad que
teje la base de la emancipación: el recurso está en ti, el recurso para enamorar, el
recurso para mover, el recurso para movilizar está ahí, no en lo que hace lo técnico,
no es que tenga una pelea con lo técnico porque me muevo también dentro de ese
formato, pero me parece que muchas veces lo técnico y toda esa mierda teórica
desplaza lo humano que es lo que tiene fuerza, si tienes fuerza como humano moverás
el mundo, te juró que moverás el mundo, algo pasa cuando hablas, algo pasa cuando
actúas pero eso no se queda impune, como dicen”.
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 47
El contexto hostil se convierte en factor de resistencia que refleja la existencia del
poder y su muerte en el límite; se da cuenta de la cercanía del horizonte de poder y
reversibilidad, así como de la transformación de las apuestas violentas enmarcadas en
y hacía el poder, en posibilidades orientadas hacia la ausencia del poder como
realidad y punto de referencia. De esta forma la construcción de subjetividades
emancipadas permite desestabilizar el aparato dominante generando simultáneamente
un proceso de resistencia que encierra al poder en una lógica circular en la que su
final esta luego de su clímax y su linealidad se desestabiliza.
El relato muestra la posibilidad de un proceso de resistencia que trasciende a la
relación de fuerzas (enmarcada desde el poder), para construirse desde la subjetividad
emancipada de una comunidad al límite; “parece que lo que nos moviliza siempre son
las situaciones límite”.
En la desestabilización desde poder como realidad intervienen varios factores 1)
la memoria; la resignificación de la historia de violencia que ha vivido la comunidad
se establece como herramienta para transformar la misma, 2) la cultura; el relato
aprendido de la “verraquera” característica del santandereano se desplaza desde ser un
recurso para enfrentar y limitar al otro opresor, para pasar a ser el impulso de la
defensa de la vida sobre todas las cosas, 3) el hogar; desde el cual se transforma la
polarización, ya que el que a muchas familias pertenecieran diferentes actores
armados permitió mediar y dejar de comprenderlos como el enemigo.
Se observa cómo la posibilidad de resistir desde el significado de la humanidad
hace posible trascender al choque de fuerzas donde quien tiene el poder es siempre
quien gana. Estos factores son resaltados en el relato, sin embargo no se determinan
como los únicos que posibilitaron la construcción de un proceso de resistencia en el
horizonte de la reversibilidad: “ ya no sería un movimiento armado, entonces vamos a
hablar, entonces vamos a obligarlos a hablar, nosotros teníamos los argumentos,
nosotros teníamos la historia, nosotros teníamos la memoria, nosotros teníamos el
proyecto de esta región, y así es que se genera, digamos… un proceso interesante de,
una relación de, muy horizontal como te digo, no mirando hacia arriba, ni suplicando,
ni diciendo por favor dennos, déjennos vivir tranquilos”.
La resistencia en el marco de la reversibilidad es entendida por el participante
como proyecto colectivo, más que como enfrentamiento de fuerzas antagónicas. Esta
iniciativa engloba a toda la comunidad “la comunidad se construye, el poder de la
comunidad se construye ahí”, y es entendida como una forma alternativa de poder: el
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 48
poder popular, “nosotros tuvimos que encarar el poder con el poder popular”, desde
el cual es posible transformar la realidad ejerciendo la resistencia a través de la paz
activa.
5.2. Discusión
“…yo no me aparto y no me apartaré nunca, nunca de que si conseguimos
humanizarnos un poquitico más y mirarnos por encima del verraco estrato y de la
universidad en la que estudies y del barrio donde vives, mira eso está hecho”
Líder Comunitario, Expresidente ATCC.
(Ver Apéndice A)
Abordar el análisis del relato que recupera la experiencia de haber hecho parte de
la Asociación de Trabajadores Campesinos del Carare (ATCC), desde la apuesta por
develar el discurso de la subjetividad y la resistencia, leído en el horizonte entre poder
y reversibilidad (o anti-poder); permite dar cuenta de la ATCC como una asociación
de resistencia civil no violenta, enmarcada en la reversibilidad del poder. Desde este
panorama la subjetividad emancipada (humanizada), se convierte en el fundamento de
la resistencia y, ésta a su vez se construye con el fin de alcanzar la paz y el bienestar,
más no el poder. En consecuencia, se puede dar cuenta de una comunidad que logra
transformar el relato aprendido de la violencia como principal medio para resolver los
conflictos, a partir de la búsqueda de sus propias posibilidades y recursos.
La interpretación comprensiva de los significados de subjetividad y resistencia
puestos en juego en la narración del relato de esta realidad, permite entender que
como lo afirma Correa (1991), la vida desborda los esquemas.
La India es como muchos pueblos colombianos un territorio con diversas
riquezas naturales; la madera, la minería, el petróleo, la vasta hidrografía que rodea la
región, la ubicación estratégica que ofrece para el accionar de los grupos armados,
junto a la ausencia de la presencia estatal; fueron factores desencadenantes de la
continua y creciente violencia que en este territorio se vivió desde los años sesenta
(Lederach, 2003). La apuesta de los diferentes actores armados por controlar el
territorio transformó la dinámica de la comunidad. Como lo afirman varios
pobladores en el relato de Correa (1991), primero fue la guerrilla, luego el ejército y
luego los paramilitares con el Movimiento Anti Secuestro.
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 49
Siguiendo a Lederach (2003), se da cuenta que la presencia de todos los actores
involucrados en el conflicto armado interno hizo de la región un caldo de cultivo de
múltiples expresiones de violencia estructural. La comunidad quedó entre espada y
espada, debido a la anulación del principio de distinción en la práctica de la guerra y
la estrategia del Gobierno norteamericano de “Quitarle el agua al pez” (García, 1996),
donde el pez se entiende como el comunista generalmente perteneciente a los grupos
armados revolucionarios (principalmente FARC-EP y ELN en el caso colombiano), y
el agua como la comunidad que en concordancia con Guerrero (2011), se traduce en
el medio en el que subsiste el pez; cobijaba a todos los guerrilleros bajo el título de
comunistas y etiquetaba a todos los campesinos como guerrilleros, por su contacto
con los grupos armados revolucionarios; por tanto la comunidad de La India al igual
que muchos otros pueblos sufrió las consecuencias directas de violencia física y
psicológica generada por el ejército al buscar quitarle el agua a la guerrilla
colombiana. Al respecto, García (1996; p.89) plantea “los estrategas orientaron sus
operativos no tanto a perseguir a los guerrilleros (el pez) como a presionar a la
población civil (el agua)”. Mientras tanto, la comunidad se veía en medio del fuego
cruzado, entre ejército y grupos al margen de la ley que buscaban el control territorial,
el cual incluía obtener la lealtad y colaboración de la población.
Esta historia de luchas llevó al santandereano a aprender un relato identitario
basado en la lógica del enfrentamiento. Al respecto el participante afirma “yo creo
que también las características del santandereano tiene mucho que ver con eso. Mira
el santandereano… esa región está ubicada muy cerca en realidad de Puente
Nacional, La Sabana, Vélez, en donde hubo grandes bandoleros, Efraín González
nada más ó sea, y muchos como ese que todavía están vivos y que no son bandoleros
pero que es gente que hijueputa, que te dice pues hermano si nos toca darnos candela
con el ejército, con la policía, con la guerrilla, nos damos, ¿sí?, es una región que
tiene una historia de luchas… no solamente de luchas políticas sino de disputas
también territoriales y… de otros, de otros tipos” (Ver Apéndice A).
Disputas que implican la dinámica del poder; bajo la cual las formas de relación
provenientes de los actores armados presentes en la región fueron interiorizadas y
replicadas como principal medio para resolver los conflictos y/o única salida para
sobrevivir (Correa, 1991). Esta lógica se refleja en un enfrentamiento lineal en el que
se busca imponer el propio interés negando el del otro, en sus palabras “joder al otro”
(Ver Apéndice A).
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 50
Así, se da cuenta de la polarización que atraviesa los mecanismos del poder,
refiriéndose específicamente al poder estatal, económico y eclesiástico, que juegan
dentro de la lógica de: hacer del otro un enemigo: “el santandereano peleador no…
subestima a su enemigo ¿si entiendes? Osea lo respeta, lo respeta. Osea, para nada lo
minimiza, lo respeta” (Ver Apéndice A). La interacción social mediada por la lógica
del poder hace que la construcción de la subjetividad del santandereano se viva como
la expresión de verraquera. De esta forma, se evidencian estrategias de confrontación
y lucha como modelos de acción que aportan al juego de reacciones antagónicas
dentro de la misma lógica de relacionamiento de los actores armados. El poder se
entiende, entonces, como realidad y fin en sí mismo al habitar el contexto del que se
hace parte y al aceptar algunas de las lógicas de relacionamiento que éste impone: “y
en esos momentos lo único que uno puede hacer es aceptar la ley del silencio que te
exige violencia” (Ver Apéndice A).
La exacerbación de este contexto de violencia en los años ochenta llevó a la
comunidad al límite; como lo afirma el relato de Lederach (2003; p.36) “cada vez
había más combates y empezaron a predominar las masacres a gran escala” sumado a
esto la vida civil dejó de ser una opción en el territorio ya que la población se vio
enfrentada a tener que escoger bando (Lederach, 2003), esta opción quedó clara
cuando el capitán del ejército planteo “se arman y se unen a nosotros, se pueden ir con
los guerrilleros, pueden dejar sus casas y el territorio, o se mueren” (Hernández, 2006,
p. 129) ”
“…ninguno nos respetó, todos nos atropellaron, ¿con quién nos íbamos a ir?”
(Ver Apéndice A) expresa el participante en su relato, dejando claro que la
comunidad dejó de ver la confrontación armada como una opción, al darse cuenta que
al engrosar las filas de estos actores sólo pondrían en riesgo sus vidas y las de sus
numerosas familias. “Entonces vamos a conformar un movimiento distinto donde nos
respetemos y donde nos hagamos respetar”. En este punto se empieza a transformar la
lógica de la comunidad; dejan de estar ligados al poder externo para pasar a buscar
otras posibilidades; sin embargo, como lo afirma el entrevistado, esto sólo es posible
por el “contexto hostil” en el que sobrevivían, al respecto expone
“Desafortunadamente, parece que lo que nos moviliza siempre son las situaciones
límite” (Ver Apéndice A).
Así pues, la Asociación se establece como un mecanismo estable que transforma
el juego de poderes, erigiéndose como un punto de posible revés que surge desde la
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 51
lectura de posibilidades que los líderes campesinos hacen ante una situación
inaguantable. Se observa, en concordancia con Baudrillard (1978), que es en el límite
donde se gesta la posibilidad de revertir el poder; fue lo insostenible, lo inaguantable
lo que resaltó el vacío del poder y movilizó a la comunidad a mapear su realidad. En
este sentido, el proceso de resistencia no obedece al poder Eclesiástico ni al poder
Estatal, planteados por Foucault, por el contrario, se rige por la lógica diferencial del
poder popular que engloba un proyecto colectivo con el que toda la comunidad se
siente identificada. Siguiendo el relato del participante, se observa que el proyecto
colectivo, fundamentado en la humanidad y en la posibilidad de recoger las ideas de
todos y todas, fue el que permitió trascender las lógicas del poder hegemónico.
Lederach (2003, p. 37) plantea: “La clave según comentarios de la gente era que
había que hallar la manera de toparse con el ser humano, la persona de carne y hueso”
(Lederach, 2003, p. 36) “nunca se cerraba la puerta”. De esta forma empezaron a
funcionar bajo estructuras de poder tradicionales con un fin diferente, un fin de
reversibilidad en el que la lógica de confrontación del poder se empezaba a
transformar. Al respecto se plantea: “las estructuras que la comunidad tiene
establecidas comienzan pues, obviamente, desde las Juntas Comunales es lo mismo
que hay en todas parte pero con fines diferentes. Y todas esas pequeñas estructuras
funcionan al servicio de un proyecto regional que es el proyecto de construcción de
paz” (Ver Apéndice A).
Siguiendo a Baudrillard (1978), se reconoce que el poder se instaura bajo un
mecanismo de seducción que encubre su ausencia y hace posible su existencia, su
seducción recae en la posibilidad de que deje de existir; cuando se entiende al poder
como la única realidad el sujeto busca alcanzarlo; sin embargo, cuando el poder deja
de seducir deja de ser deseado, ya que se puede dar cuenta de su inexistencia y de la
emergencia de lógicas diferentes a las que éste impone haciéndose posible revertirlo.
Es esto lo que ocurrió en la comunidad de La India y se materializó en la Asociación
de Campesinos Trabajadores del Carare (ATCC), quienes se organizaron ante la
necesidad de vivir y posteriormente se encauzaron hacia la posibilidad de construir
desarrollo sostenible en su territorio bajo sus propias dinámicas. El deseo de poder fue
transformado por el reconocimiento de otras posibilidades cuando se hiso evidente la
ausencia de la necesidad del poder del otro y el reconocimiento de los propios
recursos.
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 52
Al entender que la posibilidad de existencia y de reversión del poder existe en su
seducción es posible comprender que los campesinos de La India lograrán hacer
realidad esta iniciativa transformadora de su realidad, porque no deseaban el poder de
los otros y no buscaron enraizarse en una lucha lineal donde el poder siempre es el
que gana (Baudrillard, 1978). En ese sentido el poder seduce y reprime y es en la
posibilidad de dejar de ser reprimido que está la liberación, no de otro sino de la
lógica que el poder, como tal, instaura mediante sus operadores.
Se observa cómo el poder de los actores armados era una ilusión de realidad
reversible y vacía. Al respecto, cabe recordar la comprensión del miedo que el
participante encuentra detrás del poder que daban las armas a los actores armados
presentes en la región del Carare “yo siento que los actores armados, la gente que
tiene las armas, son los que se mueven desde un miedo más hijueputa que el que uno
tiene, pa empezar, una zozobra la verraca, nosotros no necesitamos escondernos de
nadie ¿sí?, para empezar” (Ver Apéndice A).
De esta forma, se hizo posible buscar salidas creativas que trascendieran a la
lógica lineal del poder; desde la cual, la resistencia se enmarcaba como la posibilidad
de eliminar al otro escapando a su opresión pero no a su lógica. Cabe recordar que
bajo la lógica del poder, la resistencia se entiende como una posibilidad de defensa de
la vida y del territorio mediante posturas bélicas; es el medio que permite
insubordinarse al poder de los grupos armados.
Sin mecanismo de seducción, el hacer parte de uno u otro actor armado
reconociendo al otro como el enemigo no tenía sentido, esto llevó a los campesinos a
pensar reacciones no violentas que al ir más allá de los ataques, y en general de la
lógica lineal del poder, fueron materializadas en la acción colectiva no violenta en la
cual se resaltaban la participación de toda la comunidad y la inclusión de todo quien
defendiera de la vida. Así la ATCC se construyó como un proyecto colectivo que
como lo afirma el participante “…recoge a todo el mundo, que reconoce a todo el
mundo independientemente de sí se parece a ti en lo ideológico, en lo religioso, en el
color, en lo que sea, que recoge por encima de todas esas consideraciones… para mí
un proyecto colectivo es el proyecto que sí recoge las expectativas y las voces de la
gente, un proyecto colectivo es la gente, es toda esa gente, no es lo que a mí me
parece que es más bonito. El proyecto colectivo es el reflejo de la gente de todos los
colores y de todas las ideas ahí, ahí, planteado así”
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 53
La inclusión de todos y todas transformo la lógica de choque de trenes del poder,
así pues, el poder, entendido como factor que produce una realidad específica
mediante sus operadores; se devela como un factor ilusorio que no determina a los
sujetos ni los imposibilita a transformar su realidad. Cuando el poder como elemento
real y la lógica de la violencia como su medio de operar, dejan de seducir a la
comunidad son transformados por la construcción de la paz activa (Hernández, 2006)
que trasciende al choque de fuerzas, de esta forma cambia la lógica lineal y el poder
queda encerrado en un ciclo en el que éste se hace reversible (Baudrillard, 1978). El
poder seduce por la reversibilidad que lo habita, sobre la que se instala un ciclo
simbólico mínimo desde el cual se consume según una seducción circular. Nunca
existe la unilateralidad de una relación de fuerzas sobre la que se constituiría un
movimiento perpetuo, lineal y final de la tradicional visión del poder, en parte porque
todo busca su propia muerte, todo quiere intercambiarse, reversibilizarse, abolirse en
un ciclo (Baudrillard, 1978).
El poder entonces trasciende a la relación de fuerzas, como Baudrillard expresa
“El poder es un desafío “el desafío a lo social mismo” (1978, p. 77)”. Es un desafío
personal. Fue esta comprensión la que posibilitó a la comunidad de la ATCC la
reversión del poder; al permitir que este se perdiera en su propio vacío, reflejado en la
apariencia de las relaciones que engendra; relaciones de fuerza y deseo que no son las
únicas en la lógica de lo social. Trascender la relación de fuerzas en la que “el poder
siempre gana aún si cambia de manos” (Baudrillard, 1978; P. 78) fue lo que sustentó
la apuesta de la ATCC por la vida; se puso en juego la vida misma de lo social,
mediante un contra-desafío personal que dio la base a la emancipación, al tumbar el
poder político y su estrategia de dominación (Baudrillard, 1978).
Actuar bajo una lógica diferente a la del poder hegemónico posibilitó a la ATCC
transformar este juego social; la población respondió con el contra desafío que rompió
la lógica del poder al basarse, como lo afirman sus líderes e integrantes, en la unión y
la no violencia sin tener más estrategias planeadas. El “poder popular” (Ver Apéndice
A) desestructuró al poder hegemónico al transformar su lógica y hacer evidente que,
contrario a lo que afirma Foucault, sí existen intersticios en la lógica de lo social que
transforman al poder estructural y permiten nuevas formas de existencia y de
emergencia de subjetividades emancipadas. Las prácticas de la comunidad se
transformaron al movilizar la lógica de sus relaciones hacia el diálogo, de esta forma
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 54
fue posible la reversibilidad mediante la construcción de una paz activa que
trascendiera a la ausencia de guerra (Hernández, 2006).
En este sentido, Baudrillard (1978) recuerda que mientras las relaciones de fuerza
se dejan atrapar y desarmar por las astucias de lo político, el desafío inverso, al
carecer de un fin y ser indefinidamente reversible, no lineal, no se acaba más que con
el poder. La experiencia de la ATCC da cuenta de que la construcción social del
poder como espirales infinitas de innumerables redes y conexiones es incompleta e
implica que en algún sentido la resistencia y la transgresión son posibles. Si dentro de
las relaciones de poder no hay estados de completa dominación, se da cabida a
espacios o intersticios de posibilidad y en estos no-espacios de completa dominación
se permite empujar hacia los límites del poder, resistirlos, transgredirlos, pero sobre
todo, cuestionarlos.
En este sentido se puede afirmar que la resistencia no es pues una relación de
fuerzas, sino que es dada desde la reversión de signos y se encuentra en la muerte
misma del poder (Baudrillard, 1978). En la posibilidad de la acción se encuentra la
resistencia y en ésta la posibilidad de dar existencia al poder, si bien no desde la
dominación, sí desde nuevas formas de relación entre sujetos (Dinerstein, 2001); el
centro de gravedad se desplaza así hacia una economía inconsciente que da lugar a lo
imaginario de la represión y de la liberación (Baudrillard, 1978). Donde el sujeto que
construye su subjetividad ligada a su humanidad y por tanto emancipada del orden
social que impone a la violencia como lógica social, no deviene como sujeto a otro
por control y dependencia, de la misma forma que no está constreñido a su propia
identidad, a la conciencia y a su propio autoconocimiento (Foucault, 1988).
El espacio de resistencia civil de la ATCC permite, entonces, reconstruir los lazos
con los otros y con la vida comunitaria al romper la individualización y fortalecer la
unión del individuo con su propia identidad sin que ésta sea constrictiva, es decir,
permitiendo trascender al gobierno de la individualización de los cuerpos y las
relaciones. Los efectos del poder son entonces transformados: la búsqueda del
conocimiento, la competencia y la calificación, son reemplazadas por la búsqueda de
la humanidad, la interiorización del otro, la solidaridad, la desprivatización del
sufrimiento y la negociación; factores mediados por la palabra, por el diálogo
incluyente (Ver Apéndice A).
Así, la determinación de la subjetividad se ve transgredida ya que se recupera lo
común y se re-construye el mundo social y el rol de cada quien en él. En ese sentido
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 55
los campesinos constructores del “proyecto colectivo” (Ver Apéndice A) que encarna
la ATCC logran transformar las abstracciones de las violencias económica e
ideológica que emergen en la vida cotidiana y regular sus relaciones mediante la
desestructuración de la lógica individualizante y totalizante de sujeción. Esto les
permitió ir más allá de las decisiones científicas y administrativas que determinan a la
comunidad y a cada sujeto como oprimido, perteneciente a cierta clase social y
dependiente de las decisiones de las instituciones que encarnan el poder, (grupos
elites y clases sociales).
Siguiendo a Berger y Luckmann (1967), el contenido de la socialización es un
conocimiento de la vida cotidiana que determina un tipo de cosmovisión (donde se
considera el discurso sobre el mundo no como una reflexión o mapa del mismo, sino
como un dispositivo social que intenta ir más allá del empirismo y el racionalismo al
ubicar el conocimiento dentro del proceso del intercambio social (Gergen, 1985). En
consecuencia, el hecho social de la resistencia de la ATCC sólo es posible cuando los
sujetos dejan de estar determinados por los operadores del poder que emergen en su
cotidianidad y, de esta forma trascienden a la lectura del mundo para ponerse en el
lugar de sujetos constructores de su propia realidad en la que la socialización no es un
mapa dado que hay que conocer sino un tejido cotidiano que es posible transformar.
Al respecto cabe recordar, el Sujeto social se construye en el dinamismo de la
participación social a partir de movimientos portadores de subjetividad y de valores
culturales propios. Las lealtades sociales son entonces reconstruidas y se rompe la
creación de lo siniestro, pues la acción empieza a matizarse en su relación con el
poder; no al hablar desde su mismo lenguaje sino desde generalidades de fuga que
configuran una memoria colectiva (imperativo de acción). Al recuperar la contra-
historia se transforma el relato, pues se articulan las luchas con la memoria y se abren
otras alternativas que se perfilan como medio para transformar la historia hegemónica
impuesta por el discurso considerado verdadero (Foucault, 1976).
Así, la transformación de la subjetividad de los campesinos de la ATCC
posibilitó la re-construcción de lo que cada sujeto era; en consecuencia, al margen de
la sujeción derivada de los procesos económicos y sociales, de las fuerzas de
producción, las luchas de clases, y la estructura ideológica establecida fue posible
construir la subjetividad emancipada que como se planteó surge desde que se rompe
con el discurso de lo político; cuando se comprende la indeterminación radical de lo
político, su inexistencia y su simulación, un claro reflejo de la ruptura de esta lógica
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 56
se da al construir otra opción para resistir a través de otras apuestas que rescatan lo
que une a la comunidad: “porque mi apuesta política no es como la de ustedes, mi
apuesta política es por la construcción de un ser humano distinto, diferente, bonito
porque para mí esa es la base de la política”. Esta apuesta por la paz y el desarrollo
sostenible cimenta la construcción de la subjetividad emancipada, al permitir a los
sujetos ver diferentes posibilidades en su realidad, moverse de la hiperrealidad
construida por la verdad instaurada por el poder y sus operadores. Allí donde el sujeto
logra transformar su realidad al descentrarse del poder como única verdad y entender
el discurso hegemónico desde una perspectiva crítica e identificar otras posibilidades
a partir de lo que el entrevistado expresa como “mapear la realidad” (Ver Apéndice
A) se está construyendo la emancipación de la subjetividad.
El sujeto que se construye al margen del poder no es un agente replicador del
mismo ya que no lo desea, por tanto no busca enfrentarse a su fuerza, la deslegitima y
sabe que no la necesita. Así, reconoce a los actores armados que actúan en el
territorio, como operadores del poder que generan efectos directos, que a su vez se
expresan en la vida de la comunidad, transformando las relaciones y construyendo
subjetividades regidas bajo preceptos implícitos en el nexo social. El orden del mundo
se vuelve principio de orientación de conductas basadas en conjuntos de operaciones,
símbolos y ejercicios que tejen subjetividades específicas, mientras tratan de construir
una particular forma de vida en un territorio; el sujeto emancipado lejos de esta
lógica, busca construirse mediante la no violencia al margen de la dinámica del poder
hegemónico. El sujeto emancipado viene entonces, desde el momento mismo que
supera en su movimiento irracional la tentativa de neutralizar en una sociabilidad bien
comedida, en una transparencia social ideal, el enfrentamiento en profundidad, el
desafío mortal a lo social mismo (Baudrillard, 1978).
Esta experiencia evidencia dicha reversión del poder hegemónico mediante el
poder popular, como lo afirma el líder entrevistado; el poder popular ejercido desde
un proyecto colectivo del que la comunidad es pionera, se convierte en la forma de
trascender al poder hegemónico, al ser ejercido bajo una lógica diferente a la de la
violencia y un fin ajeno a controlar y poseer el poder. En este punto cobra sentido la
afirmación de Baudrillard (1978), según la cual “se le escapa a Foucault que el poder
está minado por una reversión, trabajado por una reversibilidad” (1978, p. 56). Por
tanto, al llegar a su clímax el poder sólo puede empezar a descender. Se hace evidente
que el poder fábrica lo real, por tanto, lo que se entiende como real es una
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 57
construcción sustentada por un discurso de verdad que actúa mediante diversos
operadores (Estado, ejército, escuela) produciendo efectos específicos en las vidas y
en las subjetividades.
El análisis permite afirmar que el proceso de la ATCC se orienta a la
reversibilidad del poder como lógica establecida; el poder entendido desde la
voluntad, termina encubriendo un desafío personal y posibilitando la resistencia, más
que encarnando un desafío político de enfrentamiento de fuerzas opresoras. Encierra
la dinámica violenta, que rige las formas de resolver conflictos en la comunidad, en
una lógica circular en la que ésta se deslegitima haciendo posible propender por la
construcción de la paz activa al tener un objetivo claro y una idea de no violencia que
guie el accionar.
En consecuencia, la desestabilización de los aparatos de poder deviene mediante
la reversión simbólica de las lógicas del mismo por medio de la palabra; así ante la
imposición de las armas, la reversión de la palabra. De esta forma “Nacida en el
núcleo de la violencia, la ATCC introdujo un sentido de incertidumbre en la lógica de
la guerra; rompió el ciclo convencional de una violencia en espiral, y desarrolló,
mediante una demostración en vivo, la idea básica de que eran posibles las soluciones
sin violencia” (García, 1996; p. 313. cit. Lederach, 2003; p. 39). Recordar y re-
construir su historia, teniendo en cuenta que “cuando uno habla, que cuando uno
cuenta esta historia también va encontrando significados nuevos, interpretaciones y va
entendiendo, nosotros nunca tuvimos tiempo de sentarnos a entender lo que pasó,
porque nos movimos siempre en la necesidad de producir respuestas espontáneas en
medio de un conflicto complicado ¿sí? entonces ahorita, cuando uno, digamos en el
caso mío que estoy lejos de la región, eso me permite sentarme a tratar de desentrañar
qué es lo qué paso ahí” ” (Ver Apéndice A).
Así pues, la historia de la ATCC permite rescatar que “la paz es un concepto pero
la paz hay que hacerla” (Correa,1991; p. 127). Así mismo, resalta “la potencialidad de
los grupos locales para desarrollar y construir capacidades para la resistencia civil
como clave para la construcción de una paz permanente” (Lederach, 2003; p. 37)
abordada desde esta perspectiva de la construcción de la paz mediante la
reversibilidad del poder.
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 58
6. CONCLUSIONES
La apuesta que abordó esta investigación se basó en develar el discurso de la
subjetividad emancipada que permite gestar resistencias en el horizonte que va del
poder a la reversibilidad, con el fin de encontrar los matices que marcan el proceso de
construcción de paz de la Asociación de Trabajadores Campesinos del Carare
(ATCC); todo esto a través de la voz colectiva recogida en el relato de uno de sus
líderes.
De esta forma, desde el marco del construccionismo social, se dio cuenta de una
salida concreta al conflicto armado; fenómeno social que en la actualidad sujeta a
miles de personas de Colombia y del mundo. Así mismo, mediante el método de
estudio de caso fue posible conocer la postura particular y única del participante, así
como comprender las nociones e ideas compartidas que dan sentido al
comportamiento social y que permiten entender el fenómeno de la resistencia desde el
marco de la reversibilidad del poder.
Desentrañar las prácticas, ejercicios y relaciones que tejen la resistencia permite
comprender a la subjetividad emancipada (humanizada), como el fundamento de los
espacios de no – poder, en los que el individuo no está dependiendo de otro ni atado
de forma constrictiva a su propia identidad. En últimas, son espacios de creatividad en
los que sin una estrategia específica se pone en juego la vida misma de lo social al
asumir el desafío por construir una dinámica más apropiada al contexto y a las
necesidades. De esta forma, el deseo de poder es transformado por el reconocimiento
de otras posibilidades cuando se hace evidente el vacío de la lógica del poder y del
poder en sí mismo, así como la existencia del propio potencial.
Así, comprender el poder desde una lógica circular en la que es posible su
reversión abre la posibilidad a pensar nuevas lógicas de existir que permitan
trascender a la dinámica impuesta implícitamente por los operadores del poder
hegemónico. Como se expresó al introducir al lector, este documento no le apostaba a
generalizar alguna tesis objetivada; por el contrario, con la investigación se buscó dar
cuenta de algunos factores que atraviesan la construcción de subjetividades
emancipadas, entendiendo a éstas como la base de la resistencia no violenta y de las
alternativas de revertir el poder. Teniendo en cuenta que esta sólo es una historia más
que narra una salida creativa y sorprendente en la que aún hay mucho por explorar.
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 59
Finalmente, para todo lector, queda la invitación de propender en su espacio cotidiano
por re-construir y crear La Vida.
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 60
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APÉNDICES
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 63
APÉNDICE A
Transcripción protocolar. Participante: Líder Comunitario, Expresidente ATCC
E1: Bueno, pues primero que todo es darte las gracias por aceptar participar, pues
del proyecto de investigación.
E2: Pues, eh, pues no sé, nos gustaría empezar como preguntándote, osea…
¿cómo ha sido tu experiencia dentro de la ATCC?, pues quisiéramos que nos contarás
desde ¿cómo llegas tu ahí?
P: Pues yo llego a Cimitarra, digamos a la región, yo llego en el noventa y dos
(92), en realidad fue una cuestión muy, pues yo diría que muy coincidencial, de la
vida ¿no? porque, yo nací en esta región, yo nací aquí en Cundinamarca, eh, trabajé
como empleado… me cansé de trabajar de empleado y… y me dispuse a, a caminar, a
buscar como otra cosa. Entonces llegué por accidente, en realidad, llegue a Santander,
y ahí me encontré pues con que había un proceso pues del que no tenía ni idea pero
que tampoco era como lo mío porque nunca fui como de meterme en las juntas, ni en
las reuniones, ni en la política ni en nada de eso pero, cuando llego a la región me
encuentro con que la gente, todo el mundo habla de un proceso de paz de unas reglas
para vivir en la región, de un no sé, proceso de organización comunitaria en lo que
pues inevitablemente uno va cayendo ¿no? pues porque está viviendo es una región
que tiene esas características. Entonces llego y me encuentro con eso ¿no? Y luego ya
pues comienzo a conocer como cual es el pensamiento de la región, toda la historia,
todo esto, comienzo a meterme en las juntas comunales y ahí entonces eh, como que
va uno vinculándose un poco más con el sentido de, de la comunidad. Digamos que
esa es la manera como que aterrizo en un, en una experiencia de este tipo…. Es, es un
poco así. Ya les decía la, como función que tendríamos esta semana que allí, las
miráramos, como las estructuras que la comunidad tiene establecidas, comienzan pues
obviamente desde las juntas comunales es lo mismo que hay en todas partes pero con
fines diferentes. Y todas esas pequeñas estructuras funcionan al servicio de un
servicio proyecto regional que es el proyecto de construcción de paz. Esa es casi
brevemente como la manera para… de, de llegar allá. Yo me fui en realidad porque
escuché que por allá en esa región había esmeraldas y yo estaba mamado de trabajar
por acá y cumpliéndole órdenes a todo el mundo y dije no… no cumplo más órdenes,
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 64
me voy, voy a estar unos días por allá, guaqueando y… y regreso… pero ya. En
realidad yo nunca tuve la intención de ir a quedarme en la región. Y pues yo creo que
la riqueza que encontré no fueron las esmeraldas pero sí es digamos como un legado y
una cosa como que puedo convertirlo en mi estilo de vida y en mi razón de ser ¿no? y
en mi sentido que es para vivir, que digamos que es como un tema de construcción de
paz y es lo que, pues lo que todavía seguimos ahí trabajando.
E1: ¿Que te motivó desde un comienzo a entrar a hacer parte de, como de ese
proceso en esa región a la que tu llegas?
P: Pues mira lo que te digo, yo creo que son varias cosas, mira yo creo que
primero tiene que ver como con esas búsquedas que uno tiene muy hondas, muy
hondamente arraigadas. Yo he sido pues desde muy pequeño muy sensible a muchas
cosas, no un sujeto político pues declarado desde muy joven, pero sí muy sensible a
muchas situaciones. Con una búsqueda muy grande por lo que es el sentido de la vida
y el pa’ qué carajos estamos aquí, si es solamente si es solamente ir, trabajar, tener
mujer, tirar, tener hijos, eh, me parece que es lo funcional de la vida y no me siento
conforme con eso. Entonces yo creo que primero que todo un poco es eso ¿no? Es
como la naturaleza de uno… luego pues… eh, es que en una región que tiene unas
dinámicas como las que hay allá, ¿cierto? Donde de todas maneras la única alternativa
que tienes es vivir en comunidad, porque no es como la ciudad…. En la ciudad uno
puede vivir… y no vio a los vecinos, y no sabe quién es el vecino. En la región, el
vecino es el paso obligado, y es la alternativa obligada para poder tranzar y resolver
las situaciones de la vida, en una región difícil como esa. ¿Sí?, entonces es un poco,
es un poco esa, esa como la motivación. Yo fui muy renuente al comienzo a meterme
a esas vainas. En esos temas de, de lo comunitario y toda esa vaina porque a mí nunca
me llamó la atención, pero luego cuando uno comienza a socializar con la gente se da
cuenta de, digamos como de lo que está pasando ahí y de esa historia tan dura, tan
triste y tan sangrienta. Y ve uno una cantidad de gente que está tratando de luchar
para construir mejores condiciones. Obviamente, pues cuando yo llegué la violencia
pues había bajado pues mucho el tono, pero había que mantener eso…
E2: ¿En qué año llegas tú allá?
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 65
P: En el noventa y dos (92). Yo llegué en el noventa y dos. Tenía la
organización… tenía cinco años de haberse conformado. Ya hacía dos años habían
matado a Josué Vargas y a los demás compañeros. Y… y de todas manera eh, un
proceso así necesita, Hm... constantemente, permanentemente, estar como… como
decimos nosotros, tapando las goteras para que la casa no se nos caiga. Entonces ahí
la lucha es (no se entiende palabra). Entonces pues, comienza… pues comenzó…
comenzamos ya como a socializar con la gente porque yo llegué a trabajar en una
vereda en el campo, y por cierto casi me mata el acostumbrarme a trabajar en el
campo pero yo dije… me enamore además por allá de una mujer… y entonces eh,
dije, me quedaré aquí algún tiempo. Entonces ese… esas maneras que tiene la gente
para reunirse y para construirse como comunidad, te envuelven y resultas siendo parte
de ellos ¿sí? Y terminas siendo parte de ese proyecto de vida y de comunidad y de ese
proyecto político ¿sí? Es inevitable. Es inevitable, yo siento que la, que una de las
cosas bellísimas que tiene el proceso campesino y pues particularmente el proceso de
nosotros es el… es como transita a través de la palabra, el pensamiento, el legado, el
encargo, como transita, como se repite, como ¿no? Y la manera como la gente desde
lo que hace, desde su… manera simple de vivir están reproduciendo ese, ese tipo de
cosas.
E2: Tú nos hablabas eh, de que la ATCC tenía otro sentido y que funcionaba así
como las juntas de acción comunal de muchos municipios, de muchos pueblos pero
tenía una sentido diferente. ¿Cuál es para ti ese sentido de la ATCC?
P: Yo decía que la… eh, digamos, las juntas comunales, las Asojuntas son eh,
digamos eh, como instancias como de gobierno local eh, iguales que las que hay en
todo el país pero tiene otro sentido. Las juntas comunales, las Asojuntas. Las
Asojuntas generalmente en la ciudad y en otras regiones están mirando e ver cómo a
través de los candidatos consiguen cositas, y mangueras y cemento y cosas para
resolver esos problemas pero… de manera inmediatista de los que tiene la comunidad.
Allá se trabaja para resolver eso, ¿sí? pero se trabaja también al servicio de un
proyecto de paz. ¿Sí? entonces son como anillos que hay alrededor de la juntas
directiva, son como esos anillos… hay una asamblea de delegados, hay… comités de
conciliadores, de negociadores, pero son anillos que hay alrededor de la junta
directiva y que todos están aportando a reproducir esa idea, a defender esa idea y a
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 66
garantizar que se sostenga en el tiempo ¿no? Y que se lleguen respuestas también
hacia la comunidad, que en últimas es la que estamos representado.
E1: ¿De qué se trata ese proyecto de paz?
P: Pues primero, eh, nosotros últimamente eh, estamos redefiniendo lo que es
digamos como la ATCC porque eh, nosotros decíamos... “aquí hay un proceso de paz,
y cuando logramos el proceso de paz en el 87” y los diálogos y el Premio Nobel
Alternativo y hablábamos de un, de un, un proceso de paz construido, porque
logramos como negociar con los actores y bajarle pues al tema de la violencia.
Nosotros hoy pensamos, por lo menos desde la interpretación que estamos haciendo
desde la corporación, de ese proceso es que hay un momento… o unas condiciones
para comenzar a generar eh, eh…procesos de paz reales ¿no? Eso es un poco como lo
de la ATCC. Ó sea la ATCC tiene digamos primero que todo, el legado y el
compromiso inevitable de defender la vida por encima de todo. Por eso nuestro lema
es por el derecho a la vida, la paz y el trabajo. Ó sea defender la vida pero tratar de
garantizar la vida en paz, la vida tranquila, la vida de armonía, de convivencia…
teniendo unas condiciones para poder eh, resolver como la vida diaria, la vida social
¿no? Eso es… yo creo que en el lema de la ATCC se resumen lo que es ese proyecto.
E1: ¿Cuáles son esos medios o esos mecanismos que se utilizan precisamente
para defender la vida?
P: Pues hay varias cosas… hay varias cosas. Eh, ha habido que hacer un trabajo
muy fuerte digamos, primero que todo al interior de la comunidad. Primero que todo
es poder hacer un balance, todo un proceso de memoria que permita publicar las cosas
que, que aparentemente están enterradas ahí, eh… todos los lutos, todos los odios, los
resentimientos, los deseos de venganza, todos los atropellos que se cometieron, y
comenzar a, a valorar eso y a tratar de otorgarle un significado distinto a esas
situaciones de la vida, para poder partir de verdad con, con un discurso que sea
diferente y que nos ayude a generar condiciones de paz. Un trabajo al interior de la
comunidad que es muy fuerte. Que transita fundamentalmente a través de hablar ¿no?
Nosotros somos palabreros, eh, por, por naturaleza, y después es chévere que lo
hablemos. Es lo que ha permitido que el proceso, que camine, que el proceso camine,
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 67
ó sea es palabra humana, palabra que humaniza, es palabra que devuelve la existencia.
Es palabra que te permite eh, que te concede la palabra también ¿sí? y luego todo un
trabajo de negociación con los actores armados, pero, pero negociar también desde
una posición muy horizontal. No negociar con ellos de que yo estoy aquí abajo y
usted está allá arriba. A ellos se les dijo cuándo, que en una de las primeras reuniones
cuando ellos dijeron: “Ustedes son los que obedecen, nosotros somos los que
mandamos” y los líderes les dijeron: “no venimos a que ustedes nos digan qué es lo
que hay que hacer” “venimos a poner nuestras condiciones, así como se los estoy
diciendo, a poner nuestras condiciones. Porque ustedes han cometido muchos
atropellos en contra de esta comunidad y nosotros tomamos la decisión de romper los
vínculos que tenemos con, con su propuesta y a declararnos como una comunidad
soberana que es capaz de atender sus cosas”…
Así cuando, cuando se consiga el material, este, ahí encontrarán todos los
testimonios, ese, digamos, ese trabajo, eh, digamos como para tratar de generar una,
una mentalidad de paz en la gente, digamos en los unos y en los otros. Y por otro
lado pues todas las alternativas de desarrollo que necesita cualquier región del país
para subsistir, hay un plan de desarrollo,… que se ha construido de manera concertada
con los campesinos. Que no es como los planes de desarrollo que, que se inventan los
alcaldes, sino un plan de desarrollo yendo al territorio, conociendo lo que la gente
quiere, escuchando lo que ellos plantean y ahora sí la pelea política para tratar de que
eso de verdad se cumpla. Entonces eso ha sido un camino largo y será todavía un
camino largo. Nos hace falta muchísimas cosas para poder decir que… la región del
Carare es de verdad, de verdad, un proceso de paz construido. Y no… llega un
momento propicio, allá puede llegar el alcalde y el gobernador, y el presidente
Uribe… y todo el mundo, y pueden ir allá, pueden entrar sin el temor de que les
corten la cabeza. Eso no ocurría hasta 1987, no ocurría. Allá ha llegado todo, todo,
toda esta gente que se dicen importantes, allá han podido ir. Y han tomado cerveza
allá y guarapo y toda esa vaina. Entonces… hay unas condiciones… creo que hay una
puerta abierta para que la gente pueda sentarse ahí a dialogar con la gente, a buscar las
soluciones y a aprender… a aprender cómo se negocia, a aprender cómo, cómo se
organiza la comunidad y cómo se construye un proyecto.
E1: ¿cuáles son esos factores que tú crees que les permitieron a ustedes como
líderes sentar eh, como las condiciones ante, ante ese entorno tan hostil?
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 68
P: Pues lo primero para mí, eh… el contexto hostil. Para mí es lo primero.
Desafortunadamente, parece que lo que nos moviliza siempre son las situaciones
límite, me parece. Primero que todo eso, ó sea porque es insostenible. Es inaguantable
ver morir tus amigos, tus vecinos, tu familia y ni siquiera poder recogerlos y… luego
que te estés atropellando… que te atropella este, que te atropella el otro, que el mismo
Estado que es el que tiene que garantizar tus derechos te jode, te maltrata, eh… te
señala. Eh…. eso yo en el momento cuando… eh… en una comunidad como esa, yo
creo que también las características del santandereano tiene mucho que ver con eso.
Mira el santandereano… esta región está ubicada muy cerca en realidad de Puente
Nacional, La Sabana, Vélez, en donde uuu… muy grande bandoleros, Efraín
González nada más ó sea, y muchos como ese que todavía están vivos y que no son
bandoleros pero que es gente que hijueputa que dice pues hermano si nos toca darnos
candela con el ejército, con la policía, con la guerrilla, nos damos. ¿Sí? Es una región
que tiene una historia de luchas… No solamente de luchas políticas sino de disputas
también territoriales y… de otros, de otros tipos. Yo creo que también todo eso tiene
que ver. Pero luego yo siento que hay, hay, hay como varios chips que se fueron
activando para ir, para ir consolidando un proceso. Yo creo que por una parte él, la, el
hogar que, tantos actores con tantas maneras de ver el mundo la religión adventista
allá es súper fuerte, y obviamente pues la religión católica y otras, ¿cierto? Poder
juntar a todos, a todas y coincidir en que al margen del problema de si Dios existe o
no, hay una cosa que si existe acá y hay una necesidad para nosotros que… es
plantear la vida… el poder generar esa cohesión, yo creo que permitió generar
digamos consensos en torno a la idea de paz. Luego yo creo que hubo y existe todavía
un respeto profundo por la palabra ¿no? Y la palabra de respeto al otro… mira el
santandereano peleador no… subestima a su enemigo ¿si entiendes? Ó sea lo respeta,
lo respeta. Ó sea, para nada lo minimiza, lo respeta. Y para mí la gente que es capaz
de tomar decisiones en entorno, en torno a la paz es capaz de tomarla en torno a la
guerra. Esas fueron varias opciones que se consideraron antes de tomar el paso. Y
conformar una autodefensa campesina de verdad era una de las ideas que había.
Aunque yo decía no… y darnos plomo con el que toque, esa era una de las
alternativas que había.
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 69
E2: ¿Qué transformó esa lógica? Ó sea ¿por qué se movieron de la lógica de la
violencia?
P: Yo creo que… que ahí hay una jugada muy inteligente de los líderes, y es
mapear su realidad, Poder ver su realidad y sus… y cuáles son las posibilidades que
hay… mira cualquiera se hubiera metido al ejército, a los paras o a la guerrilla, si no
supieran que en cualquiera de los tres estaban perdidos. Te metes al ejército pero tú
buscas en el campo y el ejército está en el pueblo. Y cuando estés en medio de
cincuenta o cien estás segura pero cuando vuelvan a tu casa te joden. Si te vas a la
guerrilla, igual... entonces el poder interpretar eso, el poder leer eso, el poder mapear
la realidad que se está viviendo dice no, ni una cosa ni la otra porque de todas
maneras estamos perdidos. Vamos a modelar problemas para nosotros pero también
para nuestra familia y nos jodemos, nos jodemos, tenemos muchos hijos, la gente allá
tiene muchos hijos, no podemos. Entonces todo ese debate, porque eso fueron años
inclusive… Josué lo dijo… Josué dice mira “un líder me dice, hombre Josué nosotros
debiéramos conformar un grupo pa’ defendernos de éstos manes”, y él dice “eso he
estado pensando desde hace doce años” y Josué ya había tenido la sensación, ya había
armado un artefacto, un explosivo pa’ matar guerrilleros y no lo hizo cuando escuchó
llorar a un niño, y dijo “no puedo”, y entonces surge ahí una máxima de él que dice
morir antes que matar… no, entonces, todas esas cosas son las que los hacen a ellos
desistir y optar por, por una cosa distinta, una alternativa distinta. Todos les habían
hecho daño, el ejército había hecho daño y ellos dicen, si uno sólo de ellos nos
hubiera respetado seguramente con ese nos hubiéramos unido, con ese nos hubiera
ido… Pero ninguno nos respetó, todos nos atropellaron, ¿con quién nos íbamos a ir?
Entonces vamos a conformar un movimiento distinto donde nos respetemos y donde
nos hagamos respetar ¿sí? Pero la gente, mira no yo a veces… yo fui de… yo soy
de… hemos tenido discusiones con algunas líderes, porque hablan de las bondades de
un proceso de paz como una mierda engendrada por el espíritu santo y por la
necesidad de ser buenos o ser malos. El campesino cuando está en una situación
como esas no piensa si es hijo de Dios o del diablo o de quien sea. Ó sea… por lo
menos esa es mi postura, mi punto de vista. Ó sea uno no piensa en que tiene que ser
bueno o malo, ni agradar a Dios ni, ni mierda. Ó sea uno necesita garantizar que no lo
maten y poder estar con su familia y estar en su territorio. Eso es. Eso no es una cosa
que se… que se fundamenta sobre ninguna consideración moral, como el proceso en
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 70
Mogotes, y muchos que son… han sido impulsados desde la iglesia. Nosotros no.
Josué estuvo en un seminario pero cuando lean a Josué van a encontrar que era un
hijueputa a toda carrera, es “máteme hijueputa de una vez, si me va a matar máteme
pero no me joda”.
E1: ¿Crees tú que los intereses que tenían ustedes, particulares de la comunidad,
eh, les permitieron no hacer parte de ninguna institución? Institución, con institución
me refiero yo a iglesia, Estado, actores armados, o ¿qué fue lo que hizo que ustedes
no se unieran a ninguno de estos grupos?
P: Primero que todo… primero que todo hubiese sido muy difícil que la iglesia
hubiese podido impulsar proceso en esa región, porque el predominio en esa región en
ese tiempo, era de la iglesia Adventista. Osea, para comenzar de ahí. Y segundo, es
que yo no creo que sea una cosa de intereses, en este país los unos se están metiendo a
los paras y los otros a esos SMAD que llaman, y así sucesivamente, y obviamente ahí
juega el tema de los intereses; a mí me parece que la gente necesitaba mantenerse en
su territorio, la gente necesitaba producir, en una región que se destruyó totalmente
porque la gente ya no cultivaba, en una de las tierras más ricas que tiene este país,
más óptimas, necesitaban garantizar la permanencia del territorio, la vida, la
seguridad de la gente, eso… eso era. ¿Por qué no se metían a otros grupos a este o a
aquel? Y precisamente por poder leer su realidad, por poder analizar los pro y los
contras de cada cosa, y decir no me sirve meterme allá, primero porque ese me ha
jodido, ese otro también, ese otro también, por eso yo te digo si uno solo nos hubiera
tratado bien con seguramente con ese nos metemos, pero segundo también era decir
que en cualquiera que nos metamos estamos jodidos, entonces hay toda una serie de
debates, de elaboraciones, de propuestas, que pasaron por las alternativas que yo ya
les cuento, y que terminaron diciendo no, un movimiento distinto, pero entonces ya
no sería un movimiento armado, entonces vamos a hablar, entonces vamos a
obligarlos a hablar, nosotros teníamos los argumentos, nosotros teníamos la historia,
nosotros teníamos la memoria, nosotros teníamos el proyecto de esta región, y así es
que se genera, digamos… un proceso interesante de, una relación de, muy horizontal
como te digo, no mirando hacia arriba, ni suplicando, ni diciendo por favor denos,
déjenos vivir tranquilos.
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 71
E1: ¿Cómo describes esa lógica de poder que ves dentro de la ATCC? ¿Cómo la
vives tú?
P: Yo siempre digo que el proceso de la ATCC, de alguna manera se debe a la
manera como se, a la manera como, como se… transforma la lógica de poder
regional, y se transforma porque en una región de actores armados, donde el que
manda es el gatillo, de alguna manera hay que ponerse a la altura de él y de estar por
encima de esas cosas, y digo hay una transformación de esa lógica de poder, que se
sustenta para mí en la acción social colectiva primero que todo, que se fundamenta y
que se argumenta de manera pues innegociable sobre un valor también innegociable
que es la vida, ahí , ahí, para mí es eso Mm… el digamos, la humanización de la
gente, de la ATCC. La ATCC se presenta digamos con un discurso muy humano, se
presenta con un discurso que es capaz de decirte “después de haberme hecho lo que
me has hecho, mira yo no te considero enemiga mía, yo no me considero el enemigo
de nadie, a mí me duelen tanto mis muertos como los tuyos, los tuyos y los tuyos”,
pero es libertad no retórica, “me duelen porque son los niños de nuestra región, son
hijos de esta tierra también, son hijos de este país también”, es un discurso muy
humano, y es un discurso humano pero no es el discurso pues, el discurso de Gandhi
de hijueputa venga y me sigue dando en la geta, sino no, no los vamos a joder, pero
no nos vamos a dejar joder de ustedes, ese es como un principio que he aprendido del
pensamiento Muisca, “ no hagas daño, no te hagas daño, pero no permitas que te
hagan daño”, ¿no?.
E2: A mí me queda la curiosidad de, ¿por qué los actores armados aceptaron este
compromiso cuando el que mandaba era el gatillo y ellos lo tenían finalmente?
P: Esa pregunta me la hacen a donde quiera que voy a hablar yo y siempre me
corchan (risas), les advierto. Uno puede digamos tener lecturas de eso, leer digamos,
porque hay comportamientos de la gente que uno no entiende, ¿cierto?, eh… en una
época cuando, hoy algo se sabe por ahí de lo que pasa, maquilladamente nos dan a
conocer las cosas, en esos tiempos la gente moría y nadie sabía nada, en un tiempo
como ese, en un territorio como ese, si es bastante curioso que los grupos armados le
atienda a uno, digamos la interpretación de eso puede ser como, como varias cosas:
una es que no es fácil, yo siento que los actores armados, la gente que tiene las armas,
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 72
son los que se mueven desde un miedo más hijueputa que el que uno tiene, pa´
empezar, una zozobra la verraca, nosotros no necesitamos escondernos de nadie ¿sí?
Para empezar. Yo creo que el sentir que hay un proyecto consolidado, el llegar a esa
vereda, a la otra, a las veintiocho veredas, a los corregimientos y escuchar a la gente
hablando de un proyecto de paz ¿no? Realmente convencidos, ó sea no es una mierda
que ¿no? La decisión de trabajar por la construcción, dos mil personas reunidas frente
a, por allá estuvo un comandante que por ahí dicen que disque ya lo mataron, pero a
ese no lo matan todavía, allá tuvo que ir el hombre, de los muy importantes ¿sí? Y
escuchar a una comunidad completa, una región entera, en la montaña decirles hasta
aquí llegamos con ustedes, eso, eso es verraco, ó sea si yo fuera comandante no se qué
haría ahí. Podría ocurrir que después de eso comenzaran a coger uno por uno y a
joderlos para ir desbaratando las organizaciones, pero también yo pienso que hay un
juego, un juego estratégico que los manes se cranean y dicen bueno, “estos manes
están rebotados, vamos a darles vía libre para ver y después los cooptamos”, de hecho
durante toda la historia de la ATCC ha habido invitaciones de diversos tipos y
cheques así, puestos ahí, a los líderes, ¿sí? Pudo haber sido una cosa así u otra cosa.
Una tercera cosa es que esa zona, es una zona que es muy estratégica, pero también
tiene que ver con que el acceso a la región no es fácil, los campesinos eran los que les
llevaban alimento, las medicinas, el combustible, eh todo, y cuando la gente les dice
“ni mierda hermanos, ni mierda, ó sea ya no hay más de esto” son como tensiones que
uno dice que pueden haber motivado, motivado decisiones en el sentido de que… otra
cosa es que la ATCC no se metió ni con el señor este comisionado de paz, ¿no?, ni
con el personero, ni con el presidente de la república, nada, la comunidad se hizo
dueña ¿no?, aquí no ha habido instituciones de por medio, había podido ir unos
masetos ahí metidos también en esa reunión ¿no? Y cuando ellos dijeron hay que
cogerlos dijo Josué “no señor, si los van a detener a esos manes acabemos esta vaina
de una vez y digamos como es la pelea“¿sí? Entonces porque es que…
E2: Ider perdón, es que yo tengo tan claro el término masetos.
P: El MAS, es que cuando iniciaron, se llamó ya no se llaman así, las
Autodefensas Unidas de Colombia cuando entraron allá eran el MAS, ¿sí? Los que
aparecieron allá eran los masetos ¿no? Y allá se metieron y no les pasó nada, se
recogieron sus revólveres y después les dijeron: tomen aquí tienen sus revólveres y
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 73
miren a ver qué hacen con ellos, porque aquí la cosa no es así, ¿sí? ¿Ves?... pero la
guerrilla no pudo detenerlos, ni ajusticiarlos. Para mí es el poder popular, pero el
poder popular promovido no desde las instituciones del Estado, ni desde de la iglesia,
ni desde las ONGs, es una iniciativa totalmente campesina, totalmente silvestre, ¿no?
Y otra cosa, es que en ese tiempo, bueno como ahora , pues es que los guerrilleros
eran la misma familia de los campesinos, eran los hijos, los vecinos, los amigos, los
familiares, los de los masetos también, los de los paras también ¿no?, entonces todo
ese tipo de cosas yo digo que contribuyeron y un discurso muy firma, muy firme, a
esos manes se les dijo rotundamente, “pero no es que aquí venimos a ver si me dejas
ser, no, nosotros hemos tomado las decisiones de romper todo vínculo con ustedes y
de colaborar con actividades, y se les numeraron, no se nos vuelven a meter a las
casas de los campesinos, no les volvemos a subir provisión, medicinas, rifles, ni les
vamos a colaborar con información y ni un muerto más en esta región por parte de
ustedes, cojan oficio”, ¿si ves?, entonces para mí es eso para mí, es que además hay
un discurso que es convincente hay una postura que es convincente, ¿no? Y esa es la
determinación del pueblo la que se está poniendo en esa palabra, pero reconociendo,
primero que todo reconociendo lo eh digamos él, como la existencia de lo humano y
tratar de hablar de humano a humano. Yo creo que ahí hay muchas cosas, muchas
cosas que son complejas y que convendría analizar ¿no?, analizar el diálogo y toda el
mundo aquí habla de diálogo y no pasa nada, pero ahí hay cosas que son de las
subjetividades de los procesos sociales que no han sido estudiadas en este país, en este
país la puta guerra está lo suficientemente estudiada, la paz no, la paz no, y uno mira
la iniciativa de los gobiernos y de las organizaciones que trabajan por los derechos
humanos y lo primero que se mira desde el gobierno es quién es el que jode pa
acabarlo no qué es lo que necesitamos hacer para tratar de transformar la realidad y
los defensores de derechos humanos lo que primero hacen es ver en qué no estoy de
acuerdo pa poder joder al Estado y todo el mundo y joderse entre ellos. Los que
somos más proclives a entrenarnos pa guerrear y pa joder y pa proponer procesos, en
La India lo que la gente dijo fue lo que vamos a hacer es esto y esto y no les vamos a
preguntar qué, creo que ahí hay una cosa que rompe digamos toda la temporalidad
como uno la conoce, nosotros no nos entrenamos en esta vaina, no nos subimos el
hijueputa pa hacer el taller y pa ver a ver, no, nada, creo que por eso es una historia
que no tiene mucha memoria digamos en el papel, ó sea nosotros no escribimos, hasta
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 74
ahora es que voy a ponerme a escribir esa vaina, nosotros no escribimos, nosotros
tenemos la palabra, es la oralidad y eso también es un problema.
E2: Hay un factor que me tiene rondando en la cabeza y es como esta ausencia
del miedo a la muerte, casi puede más la búsqueda de la vida digna, en condiciones de
dignidad y en su territorio, sobre el miedo al gatillo del otro ¿cómo vives tu eso ahí?
P: Yo digo que no es la pérdida del miedo, Josué era un man que tenia cojones,
para mí de los hombres, de los líderes más valientes y más verracos, ese era Josué, era
un hijueputa que no se le echaba para atrás a nadie, y antes del proceso de paz tres,
cuatro guerrilleros con fusil y él cargaba su pistola, su revólver también, y decía
abrase hijueputa y nos damos y no hay problema; pero él reconocía que vivía cagado
del miedo. Para mí no hay tal desaparición del miedo, yo siento que lo que sí ocurre
es que hay un, yo creo que hay una, una, hay un impulso, primero que todo es la
necesidad de uno vivir, y cuando tu sabes que ya no tienes nada que perder dar el
paso, ó sea, igual te da, y no es que no tengas miedo. A mí me parece que uno
traspasa una barrera y te pones en otro sitio, pero para mí no es ausencia de miedo, es
una transformación de una emoción en un impulso para defender la vida, y para mi es
eso ¿no? Porque se da todo el tiempo, este es un proceso que se ha venido generando
y donde uno vive cagado del susto todo el tiempo. A nosotros nos tocó muchas veces
situaciones muy hijueputas donde uno vive, y eso se siente feo, y uno está en esas y se
siente y uno dice hijueputa, pero se hace, se hace por que hay un imperativo y el
imperativo es yo tengo que vivir, pero también para mí es la manera como uno logra
construir la sociedad dentro de uno, como logra construir al otro dentro de uno y ese
otro es una obligación para uno por encima del hijueputa derecho humano, del
derecho internacional, y del deber ser buen amigo o buen vecino; sí, para mi es una
obligación natural que tenemos todos los seres humanos, y es una obligación y la
obligación es construirme en colectivo y permitir que el otro se construya así; así, de
la manera más animal y con menos elaboración, y por encima de esos discursos que
todo el mundo pasa, ¿sí? Me parece que la comunidad logró construir al otro de una
manera distinta y eso le permite moverse así.
E1: ¿En qué gira tu proyecto de vida ahora? Con toda esa experiencia que tuviste
desde la ATCC ¿cómo te construyes ahora tú? ¿Qué te planteas? ¿Cómo te mueves?
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 75
P: No, yo me muevo en medio de una controversia diaria, diaria, porque yo siento
que esta palabra es una mierda muy complicada. Esta palabra, cada vez que tú la
pronuncias te impone una obligación, y uno no se puede hacer el pendejo y el ah el
discurso es pa los de allá, no, al primero que me compromete es a mí y no puedo
evadirlo, entonces es un complique y es un reto y es una posibilidad también. Porque,
yo vivo todo el tiempo en esas, en ese debate y en esa búsqueda, y no es la búsqueda
de ser bueno, no me interesa ser bueno, ¿sí?, pero sí es mi apuesta a seguir hablando
de esto y a ayudar a construir pues como una noción distinta de la vida y de la
comunidad y de la paz y de esa vaina que llaman ustedes amor, que para mí tiene
muchas discusiones, claro; eso, eso digamos que es eh, también los aprendizajes de
una historia, no solamente de la ATCC, pero que sí me obliga de verdad, yo le decía a
un profe de la Autónoma hace unos días, hablando de esto con los estudiantes, le
decía que es la obligación de uno hablar de esto, pero no hablar del lado oscuro de la
vida, ni del lado gris y del luto y de la tragedia y de la guerra, sino de la posibilidad
que tiene el ser humano y que tiene este país de, de, de hacerse a una realidad distinta
y para mí es eso, eso, estamos arrancando con la Corporación Diálogos para el
Desarrollo y la Paz que es esa herencia de la ATCC, para demostrarles que sí
aprendemos a hablar, a dialogar, a negociar, a reconocernos, a humanizarnos, sí hay
posibilidades de hacer cosas.
E1: ¿Por qué tu interés colectivo supera tus intereses personales? ¿Por qué no
optar por una candidatura en un partido o…?
P: Por dos razones, la primera, la primera cosa, es que yo no pierdo mi interés
particular, no, yo soy el que está nombrando esa vida y esta historia, yo soy el que
necesita vivir y crecer para que ese proyecto crezca, y todos los líderes necesitan
crecer para que su proyecto crezca, ó sea yo no pienso pues en él, en las enseñanzas
pues del señor redentor o Mesías, no, yo no soy mesiánico, yo necesito vivir, necesito
vivir bien y no joder a nadie, necesito si no dejarme joder de nadie, necesito que la
gente sea bonita y que crezca, pero que crezca libre, ¿si ves? Y que crezca libre, entre
otras cosas para responder la segunda pregunta de eso que tu llamas la política y los
puestos de la política, porque yo a la política no la concibo no, no la concibo así; ó sea
para mí, algún día me preguntaba una de las, de las jefas en la Secretaría de Cultura
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 76
¿por qué eres tan exitoso en el trabajo de la comunidad? Y le dije por una razón muy
simple, porque mi apuesta política no es como la de ustedes, mi apuesta política es
por la construcción de un ser humano distinto, diferente, bonito porque para mí esa es
la base de la política ¿sí?, entonces por eso, yo voto claro, como todos los huevones
de este país a ver quién sale así como bonito, pa, pa votar por él. Pero no es mi opción
ó sea no, no es mi opción yo creo que, que lo que si hay que hacer es con una o con
dos o con tres personas, el papayaso que la vida te dé de encontrarte con alguien
trabájale la cabeza y siémbrale esa palabra, esa semilla con la esperanza de que dentro
de unos años las generaciones sean distintas, ¿sí?
De lo contrario mira no, estamos jodidos, yo no creo en la agitación de masas, yo
no creo en el partido comunista, ni en el marxismo, ni en ni mierda de eso, yo no creo
en eso, yo no creo en las putas marchas esas, que no son proyectos colectivos sino
montonera de gente, para mí eso no es proyecto. Yo creo que es una obligación tuya y
mía darle palabra bonita a la gente, decirle que la vida tiene un lado bonito pero que
tienes que encontrarlo y que para encontrarlo tienes que buscarlo en ti mismo, así,
así…
E1: ¿Cómo describes un proyecto colectivo?
P: Primero que todo, para mí un proyecto colectivo es el que recoge a todo el
mundo, que reconoce a todo el mundo independientemente de sí se parece a ti en lo
ideológico, en lo religioso, en el color, en lo que sea, que recoge por encima de todas
esas consideraciones, por ejemplo aquí se nos lleno esto de políticas públicas, que la
mujer y los hombres, y están ahondando la brecha y la fragmentación de la sociedad.
Pa mí no hay, pa mí no, y represento un discurso como ese, uno es de la Alcaldía,
pero, para mí no, para mí, si eres mujer linda, fea, eres un ser humano que merece
oportunidad, las mismas oportunidades y que necesitas crecer como yo necesito
crecer.
Para mí un proyecto colectivo es el proyecto que si recoge las expectativas y las
voces de la gente, un proyecto colectivo es la gente, es toda esa gente, no es lo que a
mí me parece que es más bonito. El proyecto colectivo es el reflejo de la gente de
todos los colores y de todas las ideas ahí, ahí, planteado así.
E2: Finalmente ¿en qué está la ATCC ahorita? ¿Para dónde va?
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 77
P: En problemas (risas), hay bastantes problemas. Cuando, por eso a mí no me
gusta constar la historia de los procesos de paz que llaman, como procesos que son
redonditos y que son tan… no, no, los procesos de paz tienen sus caras feas como
nosotros, como nosotros, porque son juegos de poder ¿sí me entiendes? Y nosotros
tuvimos que encarar el poder con el poder popular, y ahí uno tiene que hacer sus
movimientos, sus jugadas ¿sí?, nosotros para dialogar con la guerrilla o con los paras
¿qué teníamos que hacer? Tener el contacto, sí, poder sentarnos con ellos a tomar
cerveza y a hablar mierda también, y decirles ustedes nos ayudan a localizar a estos
manes porque necesitamos ir a hablar con ellos y cosas así, y sí, se necesita también
tener gente torcida en la organización, también se necesita, y saber que el man es
torcido y todo pero, ó sea saber cómo utilizarlo, por decirlo de la manera más
perversa.
Los proyectos que nosotros tenemos no son perfectos, también tienen problemas,
tienen muchos problemas porque nosotros logramos, logramos bajar digamos como la
intensidad del conflicto, logramos establecer un proceso de discusión política y de
negociación, pero los que tenían que poner la cuota de condiciones para el desarrollo
social no lo han cumplido, entonces tenemos un problema ahora mismo con los
jóvenes sobre todo, porque es una región que no tiene oportunidades para que los
pelaos accedan a la educación superior, para que accedan a oportunidades laborales,
entonces hay un éxodo preocupante de los pelaos, aquí hay muchos, muchos, chévere
que pudiéramos lograr que hablaran con alguno de ellos, pelaos si es lo que hay acá.
Entonces esa, esa es una situación que preocupa ¿sí? Porque entonces, nos
preocupa el relevo, nos preocupa la continuidad del proyecto, ¿no?… Hay pelados
que, que se quedan, que se enganchan, que trabajan; pero las condiciones de un
proyecto como este… son muy jodidas porque nadie financia un proyecto de estos. Te
financian un proyecto productivo pero que tú vayas a hablar del tema de la paz, que tú
hagas esas vainas difícilmente te van a sostener para que eso ocurra. Entonces lo que
pasa con la mayoría de los líderes es que acaban con lo que tienen para servir a la
comunidad ¿sí? Entonces ahí hay mucho problemas, ahí hay problemas, tenemos unos
brotes de descomposición que son complicados, y eso es digamos como lo que nos
ocupa hoy, hoy día el problema ya no es los paras ni la guerrilla, ni el Estado, hoy en
día lo que estamos trabajando duro es en los problemas internos, además porque se
descuidó, lo que pasa es que cuando tú tienes que resolver problemas de muertos y de
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 78
torturas y de pistolas y de que amarraron y de que jodieron, te olvidas de que hay un
trabajo que no se puede interrumpir adentro y es el trabajo con la familia y con la
comunidad, entonces en este momento el trabajo está centrado fundamentalmente ahí.
Ahí estamos tratando de hacer, precisamente el día que estuvimos, estábamos
hablando para mirar cómo con la Universidad intercultural logramos generar unas
alianzas que permitan que los pelaos tengan oportunidades y que se sigan cultivando
para la construcción de la paz. Es un poco como eso.
E1: A mi me surge la inquietud de eso que acabas de decir y es ¿en qué
diferenciarías ese poder popular del que hablas y el poder general con el que
habitamos o nos enfrentamos todos los días?
P: Pues yo sí creo que hay bastante diferencia, grandecita, porque es que me
parece que, el poder político de hoy, primero que todo no es legítimo, nunca, nunca ha
sido legítimo, y no ha sido legítimo porque es un poder que se ha logrado a pistola, en
alguno de los casos, caso Uribe, a pistola total, porque de eso si tengo yo evidencia
en nuestra región, el poder económico, ah… tu pones plata y pones fuerza militar
para hacerte al poder y te haces, y no hay ningún poder legítimo, para mí esa es la
diferencia, o una de las grandes diferencias, es que no es un poder legítimo, no es un
poder que reconozca a toda la gente, para mí no, si hay poder claro, pero para mí no
es legítimo, y el poder de la comunidad es un poder legítimo. Esa pequeñita diferencia
es la que se me ocurre mencionar.
E1: ¿Cómo legitima la comunidad este poder?
P: Yo creo que mira, en el asunto del poder, en el tema del poder, tu no reconoces
nada que no te otorga poder a ti, que no te incluya, ¿sí?, la comunidad se construye, el
poder de la comunidad se construye ahí. Si yo logro, si yo puedo hacer parte de ese
poder, ahí está, ¿sí?, pero porque estoy dentro, porque hago parte de esa propuesta,
porque tengo voz, porque tengo voto, porque tengo capacidad y disponibilidad de
posición en lo que se piense hacer o dejar de hacer, para mí eso se legitima así, y se
construye así, se construye con los que quieren estar adentro, porque todos en la
región no pertenecieron y hay mucha gente que no pertenece al proceso, gente que
hace otras cosas, ¿sí? pero tampoco a nadie se saca, ni a la guerrilla la sacamos, a la
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 79
guerrilla nunca se le dijo ustedes se van de aquí, se les dijo ustedes no joden aquí,
nadie se destierra por no parecerse a nosotros y si hay que salvarle la vida se le salva
la vida, independientemente si es afiliado a la asociación o no, es la vida.
E2: ¿Qué se necesitaría para que éste proyecto de la ATCC, como esta iniciativa
de poder popular, como tú la llamas, se pudiera replicar en alguna otra comunidad?
P: Ninguna, ninguna, yo no creo que esto se pueda replicar, pues tristemente, yo
no creo que esto se pueda repetir, y es que a mí me parece que lo que se puede repetir
son las cosas que han sido producto de un proceso de planificación estratégica que
llaman, ¿no?, se planifica y entonces así como hacemos esta estación de Transmilenio
allí, después venimos y la hacemos por allá en otro lado, este proceso no es de
replicar, no se puede replicar porque simplemente no es una elaboración técnica, esa
es una respuesta espontánea de un grupo de gente a una situación concreta, en una
región concreta, en un tiempo concreto. No se puede replicar, lo que sí creo es que el
proceso puede dar claves para generar otros procesos, si las claves están ahí. Y ¿qué
se necesita para que haya mejores modelos de relación entre la gente? Mira yo no me
aparto y no me apartaré nunca, nunca de que si conseguimos humanizarnos un
poquitico más y mirarnos por encima del verraco estrato y de la universidad en la que
estudies y del barrio donde vives, mira eso está hecho, ¿si entiendes? Mira el ser
humano que tiene al otro incorporado ahí porque es su existencia también, no tiene
necesidad de sacrificar para ayudar, pa dar la mano, pa querer; aquí estamos luchando
por amar, estamos desesperados por aprender a amar, no mira lo primero que hay que
construir es al otro de una manera distinta, aquí (señalando el pecho) sea quien sea, y
si lo consigues no sufras más descansa, porque no tienes que preguntarte qué, cuál es
la voluntad de Dios, no, ya esa es, si logramos, por eso yo creo en la palabra, ¿sí? Una
palabra que te ayude a desmontar todos esos rollos que tienes construidos en la
cabeza, que me ayude también a mí, ¿sí?, que me permita hundirme contigo y con tu
esencia para no matar, porque me mato, ¿sí?, para no joderte porque me estoy
jodiendo a mí. Eso es lo que se necesita, pero para mí es palabra, todo el tiempo la
palabra, mira este país perdió la palabra y yo escucho mucha gente que habla mucha
mierda, y escucho el mito y una vez en la Universidad Nacional me invitaron a hablar
de paz, juepucha y estaba el doctor Leopoldo Munera y otros señores ahí, duros,
entendidos en el tema de la paz, y dije con tanto intelectual, con tanta gente que sabe
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 80
tanto de los conflictos, por qué no hemos podido hacer nada que valga la pena en este
país, ¿no?, hay gente que sabe mucho, y uno dice ni mierda, pero porque es que
perdimos la palabra, para mí una cosa es balbucear cosas, ¿sí?, y para mí otra cosa es
tener la palabra que de verdad genera cosas, ó sea para mi es palabra creativa, si ves
una, palabra que es decreto, una palabra que es un conjuro, una palabra que es sincera
hijueputa y que produce hechos políticos, sociales y eso, lo demás, lo demás es
retórica, pura mierda, para mí; y mira que esa comunidad tiene eso, esa es una de las
cosas bonitas que yo me encontré en el Carare, como eso transita a través de todo, y
es una cuestión muy indígena, ¿no?, la oralidad es muy de nuestros indios, y yo digo
que, que funciona, yo digo que funciona, pero tienes que usarla todo el tiempo, con
los niños, con todos, lávales el coco porque nosotros somos información histórica que
es necesario comenzar a contrarrestar, tratando de recuperar lo humano todo el
tiempo. Así si se puede hacer un proceso de paz en otra parte, ¿sí?, para mí es eso.
Mira uno puede romperse la cabeza pensando, leyendo, yo he visto muchas cartillas
de manejo de conflictos y de metodologías, pero para mí no, yo soy la metodología,
el campesino es la metodología, tú eres la metodología, porque entonces comienzas a
ver la hijueputa cartilla y te olvidas de ti, y el recurso está en ti, el recurso para
enamorar, el recurso para mover, el recurso para movilizar está ahí, no en lo que hace
lo técnico, no es que tenga una pelea con lo técnico porque me muevo también dentro
de ese formato, pero me parece que muchas veces lo técnico y toda esa mierda teórica
desplaza lo humano que es lo que tiene fuerza, si tienes fuerza como humano moverás
el mundo, te juró que moverás el mundo, algo pasa cuando hablas, algo pasa cuando
actúas pero eso no se queda impune, como dicen, ¿si ves?, pero es así, es así, pero hay
que trabajar mucho, y es cuando hablan de educación política y de formación política
yo digo que tristeza ¿no?, perder el tiempo hablándole a la gente del señor fulano de
tal, del voto popular, de los… bonito formar a la gente políticamente pero primero
trabajar en esas preguntitas que tenemos que hacernos todos, ¿si ves?. Todos cuando
hablamos de política tenemos preguntas muy serias, y retos muy grandes y
confrontaciones muy grandes y cuestionamientos muy grandes que hacernos a
nosotros mismos cuando hablamos de política, lo que pasa es que eso es verraco, es
jodido, aquí es más fácil soltarle el discurso al otro que cuestionarse uno y decir “Ey
¿yo qué clase de ser humano soy?” ¿No?, a que cuando llegue a la JAL, a la Junta de
Acción Comunal no me vuelva loco ni me asuste el poder ¿sí? El día que este país
tenga, o este mundo, tenga gente construida, construida, ahí, ahí, desde lo humano, y
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 81
con el otro metido en el alma pero en libertad, sin, sin martirio y sin nada de eso,
porque esa es otra, y si a uno le cuesta, le cuesta al otro y no se mortifique tanto por
salvar la humanidad ¿no? Ese día tu no necesitas ni siquiera leyes para que te digan
que hay que hacer con el otro y que es lo que no hay que hacer, tu lo haces, lo haces
porque lo que estás haciendo por él, lo haces por ti, ¿sí? Teníamos una discusión
acerca de la solidaridad con una compañera mía que es de la Santo Tomás, y yo le
decía mujer la solidaridad para mí, no es entregarle un pan a un niño que está debajo
de un puente porque pobrecito, me parece que ese pobrecito es una cosa que yo tengo
metida aquí adentro, y pobrecito no es él, ese pobrecito es un reclamo a una necesidad
profunda que yo tengo, ó sea la solidaridad para mí no está allá, es la pregunta, el
cuestionamiento, yo podría pasar por el lado de ese man e importarme un carajo, pero
el problema es que me importa ¿sí?, porque siempre nos movemos así, con el
pobrecito y la lastima y ¿no?, lastima de nosotros mismos si nos olvidamos de los
demás, y es así, ¿sí? Son cosas que cuando se habla de construcción de paz hay que
ponerlas en discusión, cuando hablemos de construcción de paz, que ojalá hablemos
mucha carreta, yo siento que ahí tendrá que salir ese tema, o lo que se llama el amor
según nos enseñaron ¿si ves? Porque es que tenemos una formación muy jodida, muy
complicada, yo le digo a la gente “marica pa que se enamora, pa esclavizarse, pa
sufrir ¿pa que se enamora?” ¿no? y le dicen a uno que hay que amar, que el amor es
sufrido, ¿quién dijo que uno ama pa sufrir o pa joderte?, si, si no hay una relación que
permita volar jueputa, si no hay una persona que te prepare el cielo pa que te vayas,
pa que seas libre, pa que seas feliz, seguimos hablando mierda, amor es quédate
conmigo, amor es amarrarte a la pata de la cama, y yo digo no, y eso tiene que ver con
la construcción, y eso tiene que ver con el modelo de sociedad que tenemos, la
manera como nos enseñaron a asumir la relación de pareja, de amigos cierto, las
relaciones de compañeros las nociones del bien y del mal, eso es, lo que pasa es que
son discusiones que no damos por que hay maneras técnicas de construir la paz, y no
podrá construirse la paz a menos que yo pase por debates como estos, ¿si ves?, si yo
sigo pensando que jueputa tengo arrechera, como dicen los santandereanos, ¿no? Si
yo sigo pensando que la prevalencia pues es para el hombre y que el hombre es la
prioridad, si yo sigo pensando que tengo que sacrificarme en nombre del amor y de la
bondad y del bien y del cielo, eso es lo que tenemos y hace parte de toda esa
construcción que tenemos. Yo personalmente tengo compañeros que son muy
cristianos, y otros son católicos y otros son adventistas y otros son evangélicos, yo, yo
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 82
no juego con eso porque me parece que de alguna manera eso, primero me pone en
pugna con la humanidad, el defender esa verdad, y yo no quiero defender nada, ni a
nadie le digo es que tienes que ser bueno o tienes que ser malo, yo creo que la
naturaleza nos da un legado que hay que entender, que hay que encontrar, que hay que
incorporar ahí, para no estar todo el tiempo tratando de ver el catecismo y mirar como
lo ponemos en práctica.
E2: Pues muchísimas gracias la verdad este relato ha sido de mucha ayuda para
nosotras, ha sido una visión que pues por lo menos para mí ha ido más allá de lo que
esperaba encontrar, como que ha trascendido a lo que es la ATCC en tu vida para
permitirnos conocer un poco de ese Ider y de cómo esos intereses personales han
hecho parte de lo que es la ATCC, y creo que hemos pasado del discurso de la
organización como tal a que son seres humanos, y precisamente hacia allá vamos con
nuestra pretensión de la investigación, entonces mil gracias.
P: No, ahí hay muchas cosas, muchas cosas, yo les decía en la Autónoma que
cuando uno habla, que cuando uno cuenta esta historia también va encontrando
significados nuevos, interpretaciones y va entendiendo, nosotros nunca tuvimos
tiempo de sentarnos a entender lo que pasó, porque nos movimos siempre en la
necesidad de producir respuestas espontáneas en medio de un conflicto complicado
¿sí? entonces ahorita, cuando uno, digamos en el caso mío que estoy lejos de la
región, eso me permite sentarme a tratar de desentrañar que es lo que paso ahí, porque
la gente vive la historia y la cuenta pero no puede hacer nada, y luego pues que,
porque ¿qué?, la gente dice uy jueputa que cosa tan dura, a otros les da como lastima,
pero eso no sirve pa nada, no sirve pa nada si nosotros no encontramos las claves del
proceso para poder seguir enseñando a este país que si hay por donde ¿no?, que si
hay esperanza, que aquí nos pasamos hablando de guerra y guerras, desplazados y
desapariciones y toda esa vaina y hay que decirle a este país o sugerir por lo menos
cosas que pudieran ayudar, y si no pues pa que sirve haber jodido tanto y hacer
luchado tanto, ¿cierto? Y no proponer. Este proyecto nunca se pensó como un
proyecto nacional, esto no se pensó nunca como un proyecto grande, se pensó como
un proyecto ahí, con la necesidad de resolver ahí, porque lo que conocíamos era eso,
pero eso le da a uno, pues a mí y creo que a muchos líderes, le va dando a uno una
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 83
mirada más amplia del asunto y yo digo si esto sirvió aquí, algo de lo que yo diga
tiene que servir para ayudar a construir un país.
E1: En serio muchas gracias.
P: No cuando quieran seguimos echando carreta.
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 84
APENDICE B
Matriz de Textualidad Interna
CATEGORÍA SUBCATEGORÍA
O DESCRIPTOR
TEXTUALIDAD INTERNA
PODER RESISTENCIA
“ya hacía dos años habían matado a Josué Vargas y a
los demás compañeros. Y… y de todas manera eh, un
proceso así necesita, constantemente,
permanentemente, estar como… como decimos
nosotros, tapando las goteras para que la casa no se
nos caiga. Entonces ahí la lucha es así”
“las juntas comunales, las Asojuntas… las Asojuntas
generalmente en la ciudad y en otras regiones están
mirando a ver cómo a través de los candidatos
consiguen cositas, y mangueras y cemento y cosas
para resolver esos problemas pero… de manera
inmediatista”
“se trabaja también al servicio de un proyecto de paz.
¿Sí? entonces son como anillos que hay alrededor de
la juntas directiva, son como esos anillos… hay una
asamblea de delegados, hay… comités de
conciliadores, de negociadores, pero son anillos que
hay alrededor de la junta directiva y que todos está
aportando a reproducir esa idea, a defender esa idea y
a garantizar que se sostenga en el tiempo ¿no? Y que,
se genere respuestas también hacia la comunidad que
en últimas es la que estamos representado”
“plan de desarrollo,… que se ha construido de
manera concertada con los campesinos. Que no es
como los planes de desarrollo que, que se inventan
los alcaldes, sino un plan de desarrollo yendo al
territorio, conociendo lo que la gente quiere,
escuchando lo que ellos plantean y ahora sí dar la
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 85
pelea política para tratar de que eso de verdad se
cumpla”
“esas fueron varias opciones que se consideraron
antes de tomar el paso. Y conformar una autodefensa
campesina de verdad era una de las ideas que había.
Aunque yo decía no… y darnos plomo con el que
toque, esa era una de las alternativas que había”
“inclusive… Josué lo dijo… Josué dice “mira un
líder me dice, hombre Josué nosotros debiéramos
conformar un grupo pa defendernos de éstos manes”,
y él dice “eso he estado pensando desde hace doce
años””
“todos les habían hecho daño, el ejército había hecho
daño, y ellos dicen “si uno sólo de ellos nos hubiera
respetado seguramente con ese nos hubiéramos
unido, con ese nos hubiéramos ido… pero ninguno
nos respetó, todos nos atropellaron, ¿con quién nos
íbamos a ir?, entonces vamos a conformar un
movimiento distinto donde nos respetemos y donde
nos hagamos respetar””
“es máteme hijueputa de una vez, si me va a matar
máteme pero no me joda”
“y decir no me sirve meterme allá, primero porque
ese me ha jodido, ese otro también, ese otro también,
por eso yo te digo si uno solo nos hubiera tratado
bien seguramente con ese nos metemos”
“podría ocurrir que después de eso comenzaran a
coger uno por uno y a joderlos para ir desbaratando
las organizaciones, pero también yo pienso que hay
un juego, un juego estratégico que los manes se
cranean y dicen bueno, “estos manes están rebotados,
vamos a darles vía libre para ver y después los
cooptamos”, de hecho durante toda la historia de la
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 86
ATCC ha habido invitaciones de diversos tipos y
cheques así, puestos ahí, a los líderes, ¿sí? Pudo
haber sido una cosa así u otra cosa”
“los proyectos que nosotros tenemos no son
perfectos, también tienen problemas, tienen muchos
problemas porque nosotros logramos, logramos bajar
digamos como la intensidad del conflicto, logramos
establecer un proceso de discusión política y de
negociación, pero los que tenían que poner la cuota
de condiciones para el desarrollo social no lo han
cumplido, entonces tenemos un problema ahora
mismo con los jóvenes sobre todo, porque es una
región que no tiene oportunidades para que los
pelaos accedan a la educación superior, para que
accedan a oportunidades laborales, entonces hay un
éxodo preocupante de los pelaos, aquí hay muchos,
muchos”
“hay pelados que, que se quedan, que se enganchan,
que trabajan; pero las condiciones de un proyecto
como este… son muy jodidas porque nadie financia
un proyecto de estos. Te financian un proyecto
productivo pero que tú vayas a hablar del tema de la
paz, que tú hagas esas vainas difícilmente te van a
sostener para que eso ocurra. Entonces lo que pasa
con la mayoría de los líderes es que acaban con lo
que tienen para servir a la comunidad ¿sí?”
“a mí me parece que lo que se puede repetir son las
cosas que han sido producto de un proceso de
planificación estratégica que llaman, ¿no?, se
planifica y entonces así como hacemos esta estación
de Transmilenio allí, después venimos y la hacemos
por allá en otro lado, el proceso de resistencia, no ”
SUBJETIVIDAD
“yo me fui en realidad porque escuché que por allá
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 87
en esa región había esmeraldas y yo estaba mamado
de trabajar por acá y cumpliéndole órdenes a todo el
mundo y dije no… no cumplo más órdenes, me voy,
voy a estar unos días por allá, guaqueando y… y
regreso… pero ya”
“porque no es como la ciudad…. en la ciudad uno
puede vivir… y no vio a los vecinos, y no sabe quién
es el vecino”
“yo fui muy renuente al comienzo a meterme a esas
vainas. En esos temas de, de lo comunitario y toda
esa vaina porque a mí nunca me llamó la atención”
“ es inaguantable ver morir tus amigos, tus vecinos,
tu familia y ni siquiera poder recogerlos y… luego
que te estén atropellando… que te atropella éste, que
te atropella el otro, que el mismo Estado que es el
que tiene que garantizar tus derechos te jode, te
maltrata, eh… te señala”
“yo creo que también las características del
santandereano tiene mucho que ver con eso. Mira el
santandereano… esa región está ubicada muy cerca en
realidad de Puente Nacional, La Sabana, Vélez, en
donde hubo grandes bandoleros, Efraín González nada
más ó sea, y muchos como ese que todavía están
vivos y que no son bandoleros pero que es gente que
hijueputa, que te dice pues hermano si nos toca
darnos candela con el ejército, con la policía, con la
guerrilla, nos damos, ¿sí?, es una región que tiene
una historia de luchas… no solamente de luchas
políticas sino de disputas también territoriales y… de
otros, de otros tipos”
“el santandereano peleador no… subestima a su
enemigo ¿si entiendes? Ó sea lo respeta, lo respeta. Ó
sea, para nada lo minimiza, lo respeta”
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 88
“hemos tenido discusiones con algunos líderes,
porque hablan de las bondades de un proceso de paz
como un mierda engendrada por el espíritu santo y
por la necesidad de ser buenos o ser malos”
“hoy algo se sabe por ahí de lo que pasa,
maquilladamente nos dan a conocer las cosas, en
esos tiempos la gente moría y nadie sabía nada, en un
tiempo como ese, en un territorio como ese, si es
bastante curioso que los grupos armados le atienda a
uno”
“pero ahí hay cosas que son de las subjetividades de
los procesos sociales que no han sido estudiadas en
este país, en este país la puta guerra está lo
suficientemente estudiada, la paz no, la paz no, y uno
mira la iniciativa de los gobiernos y de las
organizaciones que trabajan por los derechos
humanos y lo primero que se mira desde el gobierno
es quién es el que jode pa acabarlo no qué es lo que
necesitamos hacer para tratar de transformar la
realidad y los defensores de derechos humanos lo
que primero hacen es ver en qué no estoy de acuerdo
pa poder joder al Estado y todo el mundo y joderse
entre ellos”
“Josué era un man que tenia cojones, para mí de los
hombres, de los líderes más valientes y más verracos,
ese era Josué, era un hijueputa que no se le echaba
para atrás a nadie, y antes del proceso de paz tres
cuatro guerrilleros con fusil y el cargaba su pistola,
su revólver también, y decía abrase hijueputa y nos
damos y no hay problema, pero el reconocía que
vivía cagado del miedo”
“el poder político de hoy, primero que todo no es
legítimo, nunca, nunca ha sido legítimo, y no ha sido
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 89
legítimo porque es un poder que se ha logrado a
pistola, en alguno de los casos, caso Uribe, a pistola
total, porque de eso si tengo yo evidencia en nuestra
región, el poder económico, ah… tu pones plata y
pones fuerza militar para hacerte al poder y te haces,
y no hay ningún poder legítimo, para mí esa es la
diferencia, o una de las grandes diferencias, es que
no es un poder legítimo, no es un poder que
reconozca a toda la gente, para mí no, si hay poder
claro, pero para mí no es legítimo, y el poder de la
comunidad es un poder legítimo”
“con tanto intelectual, con tanta gente que sabe tanto
de los conflictos, por qué no hemos podido hacer
nada que valga la pena en este país, ¿no?”
REVERSIBILIDAD RESISTENCIA
“ahí me encontré pues con que había un proceso pues
del que no tenía ni idea pero que tampoco era como
lo mío porque nunca fui como de meterme en las
juntas, ni en las reuniones, ni en la política ni en nada
de eso pero, cuando llego a la región me encuentro
con que la gente, todo el mundo habla de un proceso
de paz de unas reglas para vivir en la región, de un
no sé, proceso de organización comunitaria en lo que
pues inevitablemente uno va cayendo ¿no? pues
porque está viviendo es una región que tiene esas
características”
“digamos que como que las estructuras que la
comunidad tiene establecidas, comienzan pues
obviamente desde las juntas comunales, luego, eh, es
lo mismo que hay en todas parte pero con fines
diferentes. Y todas esas pequeñas estructuras
funcionan al servicio de un proyecto regional que es
el proceso de construcción de paz”
“luego cuando uno comienza a socializar con la
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 90
gente se da cuenta de, digamos como de lo que está
pasando ahí y de esa historia tan dura, tan triste y tan
sangrienta. Y ve uno una cantidad de gente que está
tratando de luchar para construir mejores
condiciones”
“yo siento que la, que una de las cosas bellísimas que
tiene el proceso campesino y pues particularmente el
proceso de nosotros es el… es como transita a través
de la palabra, el pensamiento, el legado, el encargo,
como transita, como se repite, como ¿no? Y la
manera como la gente desde lo que hace, desde su…
manera simple de vivir están reproduciendo ese, ese
tipo de cosas”
“porque logramos como negociar con los actores y
bajarle pues al tema de la violencia”
“la ATCC tiene digamos, primero que todo, el legado
y el compromiso indeclinable de defender la vida por
encima de todo, por eso nuestro lema es por el
derecho a la vida, la paz y el trabajo. Ósea defender
la vida pero tratar de garantizar la vida en paz, la
vida tranquila, la vida de armonía, de convivencia,
teniendo unas condiciones para resolver, eh, como la
vida diaria, la vida social ¿no?, eso es… yo creo que
en el lema de la ATCC se resume lo que es ese
proyecto”
“es poder hacer un balance, todo un proceso de
memoria que permita publicar las cosas que, que
aparentemente están enterradas ahí, y es todos los
lutos, todos los odios, los resentimientos, los deseos
de venganza, todos los atropellos que se cometieron,
y comenzar a, a valorar eso y a tratar de otorgarle un
significado distinto a esas situaciones de la vida, para
poder partir de
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 91
ayude a generar condiciones de paz. Un trabajo al
interior de la comunidad que es muy fuerte. Que
transita fundamentalmente a través de hablar”
“nosotros somos palabreros, eh, por, por
naturaleza… es lo que ha permitido que el proceso,
que camine, que el proceso camine, ó sea es palabra
humana, palabra que humaniza, es palabra que
devuelve la existencia, es palabra que te permite eh,
que te concede la palabra también”
“y luego todo un trabajo de negociación con los
actores armados, pero, pero negociar también desde
una posición muy horizontal. No negociar con ellos
de que yo estoy aquí abajo y usted está allá arriba”
“en una de las primeras reuniones cuando ellos
dijeron: “ustedes son los que obedecen, nosotros
somos los que mandamos” y los líderes les dijeron:
“no venimos a que ustedes nos digan qué es lo que
hay que hacer, venimos a poner nuestras condiciones,
así como se los estoy diciendo, a poner nuestras
condiciones, porque ustedes han cometido muchos
atropellos en contra de esta comunidad y nosotros
tomamos la decisión de romper los vínculos que
tenemos con, con su propuesta y a declararnos como
una comunidad soberana que es capaz de atender sus
cosas”
“el trabajo se da para generar como una mentalidad
de paz en la gente, digamos en los unos y en los
otros. Y por otro lado, pues todas las alternativas de
desarrollo que necesita cualquier región del país para
subsistir; hay un plan de desarrollo, que se ha
construido de manera concertada con los campesinos,
que no es como los planes de desarrollo que, que se
inventan los alcaldes, sino un plan de desarrollo
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 92
yendo al territorio, conociendo lo que la gente quiere,
escuchando lo que ellos plantean”
“pero también tiene que ver con que el acceso a la
región no es fácil, los campesinos eran los que les
llevaban alimento, las medicinas, el combustible, eh
todo, y cuando la gente les dice “ni mierda hermanos,
ni mierda, ó sea ya no hay más de esto” son como
tensiones que uno dice que pueden haber motivado,
motivado decisiones en el sentido de que…”
“allá ha llegado todo, todo, toda esta gente que se
dicen importantes, allá han podido ir. Y han tomado
cerveza allá y guarapo y toda esa vaina. Entonces…
hay unas condiciones… creo que hay una puerta
abierta para que la gente pueda sentarse ahí a
dialogar con la gente, a buscar las soluciones y a
aprender… a aprender cómo se negocia, a aprender
cómo, cómo se organiza la comunidad y cómo se
construye un proyecto”
“parece que lo que nos moviliza siempre son las
situaciones límite, me parece”
“el lograr que, tantos actores con tantas maneras de
ver el mundo, la religión adventista allá es súper
fuerte, y obviamente pues la religión católica y otras,
¿cierto?, el poder juntar a todos esos, y coincidir, al
margen del problema de si Dios existe o no, hay una
cosa que si existe acá y hay una necesidad para
nosotros que es defender la vida, el poder generar esa
cohesión, yo creo que permitió generar digamos
consensos en torno a la idea de paz”
“entonces hay toda una serie de debates, de
elaboraciones, de propuestas, que pasaron por las
alternativas que yo ya les cuento, y que terminaron
diciendo no, un movimiento distinto, pero entonces
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 93
ya no sería un movimiento armado, entonces vamos a
hablar, entonces vamos a obligarlos a hablar,
nosotros teníamos los argumentos, nosotros teníamos
la historia, nosotros teníamos la memoria, nosotros
teníamos el proyecto de esta región, y así es que se
genera, digamos… un proceso interesante de, una
relación de, muy horizontal como te digo, no
mirando hacia arriba, ni suplicando, ni diciendo por
favor denos, sino déjenos vivir tranquilos”
“ yo siempre digo que el proceso de la ATCC, de
alguna manera se debe a la manera como se, a la
manera como, como se… transforma la lógica de
poder regional, y se transforma porque en una región
de actores armados, donde el que manda es el gatillo,
de alguna manera hay que ponerse a la altura de él y
de estar por encima de esas cosas, y digo hay una
transformación de esa lógica de poder, que se
sustenta para mí en la acción social colectiva primero
que todo, que se fundamenta y que se argumenta de
manera pues innegociable sobre un valor también
innegociable que es la vida, ahí , ahí, para mí es eso
Mm… el digamos, la humanización de la gente, de
la ATCC”
“yo creo que el sentir que hay un proyecto
consolidado, el llegar a esa vereda, a la otra, a las
veintiocho veredas, a los corregimientos y escuchar
a la gente hablando de un proyecto de paz ¿no?,
realmente convencidos, ó sea ¿no?, es una mierda
que ¿no?”
“La decisión de trabajar por la construcción, dos mil
personas reunidas frente a, por allá estuvo un
comandante que por ahí dicen que disque ya lo
mataron, pero a ese no lo matan todavía, allá tuvo
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 94
que ir el hombre, de los muy importantes ¿si? Y
escuchar a una comunidad completa, una región
entera, en la montaña decirles hasta aquí llegamos
con ustedes, eso, eso es verraco, ó sea si yo fuera
comandante no se qué haría ahí”
“la ATCC no se metió ni con el señor este
comisionado de paz, ¿no?, ni con el personero, ni con
el presidente de la república, nada la comunidad se
hizo dueña ¿no?, aquí no ha habido instituciones de
por medio”
“y allá se metieron y no les paso nada, se recogieron
sus revólveres y después les dijeron tomen aquí
tienen sus revólveres y miren a ver que hacen con
ellos, porque aquí la cosa no es así, ¿sí?, ¿ves?... pero
la guerrilla no pudo detenerlos, ni ajusticiarlos. Para
mí es el poder popular, pero el poder popular
promovido no desde las instituciones del Estado, ni
desde de la iglesia, ni desde las ONGs, es una
iniciativa totalmente campesina, totalmente silvestre”
“a esos manes se les dijo rotundamente, “pero no es
que aquí venimos a ver si me dejas ser, no, nosotros
hemos tomado las decisiones de romper todo vínculo
con ustedes y de colaborar con actividades, y se les
numeraron, no se nos vuelven a meter a las casas de
los campesinos, no les volvemos a subir provisión,
medicinas, rifles, ni les vamos a colaborar con
información y ni un muerto más en esta región por
parte de ustedes, cojan oficio”, si ves, entonces para
mí es eso, para mí”
“yo creo que, que lo que si hay que hacer es con una
o con dos o con tres personas, el papayaso que la
vida te dé de encontrarte con alguien trabájale la
cabeza y siémbrale esa palabra, esa semilla con la
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 95
esperanza de que dentro de unos años las
generaciones sean distintas, ¿sí?, de lo contrario mira
no, estamos jodidos”
“los procesos de paz tienen sus caras feas como
nosotros, como nosotros, porque son juegos de poder
¿si me entiendes? Y nosotros tuvimos que encarar el
poder con el poder popular, y ahí uno tiene que hacer
sus movimientos, sus jugadas ¿sí?, nosotros para
dialogar con la guerrilla o con los paras ¿qué
teníamos que hacer? Tener el contacto, si, poder
sentarnos con ellos a tomar cerveza y a hablar mierda
también, y decirles ustedes nos ayudan a localizar a
estos manes porque necesitamos ir a hablar con ellos
y cosas así, y si, se necesita también tener gente
torcida en la organización, también se necesita, y
saber que el man es torcido y todo pero, ó sea saber
cómo utilizarlo, por decirlo de la manera más
perversa”
“hoy día el problema ya no es los paras ni la
guerrilla, ni el Estado, hoy en día lo que estamos
trabajando duro es en los problemas internos, además
porque se descuidó, lo que pasa es que cuando tú
tienes que resolver problemas de muertos y de
torturas y de pistolas y de que amarraron y de que
jodieron, te olvidas de que hay un trabajo que no se
puede interrumpir adentro y es el trabajo con la
familia y con la comunidad, entonces en este
momento el trabajo está centrado fundamentalmente
ahí”
“a nadie se saca, ni a la guerrilla la sacamos, a la
guerrilla nunca se le dijo ustedes se van de aquí, se
les dijo ustedes no joden aquí, nadie se destierra por
no parecerse a nosotros y si hay que salvarle la vida
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 96
se le salva la vida, independientemente si es afiliado
a la asociación o no, es la vida”
“este proceso no es de replicar, no se puede replicar
porque simplemente no es una elaboración técnica,
esa es una respuesta espontánea de un grupo de gente
a una situación concreta, en una región concreta, en
un tiempo concreto. No se puede replicar, lo que sí
creo es que el proceso puede dar claves para generar
otros procesos, si las claves están ahí”
“la gente vive la historia y la cuenta pero no puede
hacer nada, y luego pues que, porque ¿qué?, la gente
dice uy jueputa que cosa tan dura, a otros les da
como lastima, pero eso no sirve pa nada, no sirve pa
nada si nosotros no encontramos las claves del
proceso para poder seguir enseñando a este país que
si hay por donde ¿no?, que si hay esperanza, que aquí
nos pasamos hablando de guerra y guerras,
desplazados y desapariciones y toda esa vaina y hay
que decirle a este país o sugerir por lo menos cosas
que pudieran ayudar, y si no pues pa que sirve haber
jodido tanto y hacer luchado tanto, ¿cierto? Y no
proponer”
“Este proyecto nunca se pensó como un proyecto
nacional, esto no se pensó nunca como un proyecto
grande, se pensó como un proyecto ahí, con la
necesidad de resolver ahí, porque lo que conocíamos
era eso, pero eso le da a uno, pues a mí y creo que a
muchos líderes, le va dando a uno una mirada más
amplia del asunto y yo digo si esto sirvió aquí, algo
de lo que yo diga tiene que servir para ayudar a
construir un país”
SUBJETIVIDAD “y luego ya pues comienzo a conocer como cual es el
pensamiento de la región, toda la historia, todo esto,
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 97
comienzo a meterme en las juntas comunales y ahí
entonces eh, como que va uno vinculándose un poco
más con el sentido de, de la comunidad”
“y pues yo creo que la riqueza que encontré no
fueron las esmeraldas, pero sí es digamos como un
legado y una cosa que puedo convertirla en mi estilo
de vida y en mi razón de ser, ¿no?, y en el sentido
que tengo para vivir, que es digamos el tema de
construcción de paz y es lo que, pues lo que todavía
seguimos ahí trabajando”
“tiene que ver como con esas búsquedas que uno
tiene muy hondas, muy hondamente arraigadas. Yo
he sido pues desde muy pequeño muy sensible a
muchas cosas, no un sujeto político pues declarado
desde muy joven, pero sí muy sensible a muchas
situaciones. Con una búsqueda muy grande por lo
que es el sentido de la vida y el pa qué carajos
estamos aquí, si es solamente, si es solamente ir
trabajar, tener mujer, tirar, tener hijos, eh, me parece
que es lo funcional de la vida y no me siento
conforme con eso”
“es como la naturaleza de uno… luego pues… eh, es
que en una región que tiene unas dinámicas como las
que hay allá, ¿cierto?, donde de todas maneras la
única alternativa que tienes es vivir en comunidad,
porque no es como la ciudad…. en la ciudad uno
puede vivir… y no vio a los vecinos, y no sabe quién
es el vecino; en la región, el vecino es el del paso
obligado, y es la alternativa obligada para poder
tranzar y resolver las situaciones de la vida en una
región difícil como esa, ¿sí?, entonces es un poco, es
un poco esa, esa como la motivación”
“esas maneras que tiene la gente para reunirse y para
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 98
construirse como comunidad, te envuelven y resultas
siendo parte de ellos ¿sí?, y terminas siendo parte de
ese proyecto de vida y de comunidad y de ese
proyecto político”
“yo creo que hubo y existe todavía un respeto
profundo por la palabra ¿no?, y la palabra de respeto
al otro”
“para mí la gente que es capaz de tomar decisiones
en entorno, en torno a la paz es capaz de tomarla en
torno a la guerra”
“¿por qué se movieron de la lógica de la violencia?...
Yo creo que… que ahí hay una jugada muy
inteligente de los líderes, y es mapear su realidad,
Poder ver su realidad y sus… y cuáles son las
posibilidades que hay… mira cualquiera se hubiera
metido al ejército, a los paras o a la guerrilla, si no
supieran que en cualquiera de los tres estaban
perdidos. Te metes al ejército pero tú buscas en el
campo y el ejército está en el pueblo. Y cuando estés
en medio de cincuenta o cien estás segura pero
cuando vuelvan a tu casa te joden. Si te vas a la
guerrilla igual, ¿entonces?; el poder interpretar eso, el
poder leer eso, el poder mapear la realidad que se
está viviendo dice no, ni una cosa ni la otra porque
de todas maneras estamos perdidos. Vamos a
modelar problemas para nosotros pero también para
nuestra familia y nos jodemos, nos jodemos, tenemos
muchos hijos, la gente allá tiene muchos hijos, no
podemos”
“Josué ya había tenido la sensación, ya había armado
un artefacto, un explosivo pa matar guerrilleros y no
lo hizo cuando escuchó llorar a un niño, y dijo “no
puedo”, y entonces surge ahí una máxima de él que
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 99
dice morir antes que matar… no, entonces, todas esas
cosas son las que los hacen a ellos desistir y optar
por, por una cosa distinta, una alternativa distinta”
“el campesino cuando está en una situación como
esas no piensa si es hijo de Dios o del diablo o de
quien sea. Ó sea, por lo menos esa es mi postura, mi
punto de vista. Ó sea uno no piensa en que tiene que
ser bueno o malo, ni agradar a Dios ni, ni mierda. Ó
sea uno necesita garantizar que no lo maten y poder
estar con su familia y estar en su territorio. Eso es.
Eso no es una cosa que se… que se fundamenta
sobre ninguna consideración moral, como el proceso
en Mojotes, y muchos que son… han sido
impulsados desde la iglesia. Nosotros no”
“yo no creo que sea una cosa de intereses, en este
país los unos se están metiendo a los paras y los otros
a esos SMAD que llaman, y así sucesivamente, y
obviamente ahí juega el tema de los intereses; a mí
me parece que la gente necesitaba mantenerse en su
territorio, la gente necesitaba producir, en una región
que se destruyó totalmente porque la gente ya no
cultivaba, en una de las tierras más ricas que tiene
este país, más óptimas, necesitaban garantizar la
permanencia del territorio, la vida, la seguridad de la
gente, eso… eso era. ¿Por qué no se metían a otros
grupos a este o a aquel? Y precisamente por poder
leer su realidad, por poder analizar los pro y los
contras de cada cosa”
“La ATCC se presenta digamos con un discurso muy
humano, se presenta con un discurso que es capaz de
decirte “después de haberme hecho lo que me has
hecho, mira yo no te considero enemiga mía, yo no
me considero el enemigo de nadie, a mí me duelen
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 100
tanto mis muertos como los tuyos, los tuyos y los
tuyos”, pero es libertad no retórica, “me duelen
porque son los niños de nuestra región, son hijos de
esta tierra también, son hijos de este país también”,
es un discurso muy humano”
“es un discurso humano pero no es el discurso pues,
el discurso de Gandhi de hijueputa venga y me sigue
dando en la geta, sino no, no los vamos a joder, pero
no nos vamos a dejar joder de ustedes, ese es como
un principio que he aprendido del pensamiento
Muisca, “no hagas daño, no te hagas daño, pero no
permitas que te hagan daño”, ¿no?”
“no es fácil, yo siento que los actores armados, la
gente que tiene las armas, son los que se mueven
desde un miedo más hijueputa que el que uno tiene,
pa empezar, una zozobra la verraca, nosotros no
necesitamos escondernos de nadie ¿sí?, para
empezar”
“y cuando ellos dijeron hay que cogerlos dijo Josué
“no señor, si los van a detener a esos manes
acabemos esta vaina de una vez y digamos como es
la pelea“”
“otra cosa, es que en ese tiempo, bueno como ahora ,
pues es que los guerrilleros eran la misma familia de
los campesinos, eran los hijos, los vecinos, los
amigos, los familiares, los de los masetos también,
los de los paras también ¿no?, entonces todo ese tipo
de cosas yo digo que contribuyeron y un discurso
muy firme, muy firme”
“hay un discurso que es convincente hay una postura
que es convincente, ¿no? Y esa es la determinación
del pueblo la que se está poniendo en esa palabra,
pero reconociendo, primero que todo reconociendo lo
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 101
eh digamos, el, como la existencia de lo humano y
tratar de hablar de humano a humano”
“en La India lo que la gente dijo fue lo que vamos a
hacer es esto y esto y no les vamos a preguntar qué,
creo que ahí hay una cosa que rompe digamos toda la
temporalidad como uno la conoce”
“nosotros no escribimos, nosotros tenemos la
palabra, es la oralidad y eso también es un problema”
“yo siento que lo que si ocurre es que hay un, yo creo
que hay una, una, hay un impulso, primero que todo
es la necesidad de uno vivir, y cuando tu sabes que
ya no tienes nada que perder dar el paso, ó sea, igual
te da, y no es que no tengas miedo. A mí me parece
que uno traspasa una barrera y te pones en otro sitio,
pero para mí no es ausencia de miedo, es una
transformación de una emoción en un impulso para
defender la vida, y para mi es eso”
“a nosotros nos tocó muchas veces situaciones muy
hijueputas donde uno vive, y eso se siente feo, y uno
está en esas y se siente y uno dice hijueputa, pero se
hace, se hace por que hay un imperativo y el
imperativo es yo tengo que vivir”
“también para mí es la manera como uno logra
construir la sociedad dentro de uno, como logra
construir al otro dentro de uno y ese otro es una
obligación para uno por encima del hijueputa derecho
humano, del derecho internacional, y del deber ser
buen amigo o buen vecino, si para mi es una
obligación natural que tenemos todos los seres
humanos, y es una obligación y la obligación es
construirme en colectivo y permitir que el otro se
construya así; así, de la manera más animal y con
menos elaboración, y por encima de esos discursos
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 102
que todo el mundo pasa, ¿sí?”
“me parece que la comunidad logró construir al otro
de una manera distinta y eso le permite moverse así”
“yo me muevo en medio de una controversia diaria,
diaria, porque yo siento que esta palabra es una
mierda muy complicada, esta palabra cada vez que tú
la pronuncias te impone una obligación, y uno no se
puede hacer el pendejo y el “ah el discurso es pa los
de allá”, no, al primero que me compromete es a mí y
no puedo evadirlo, entonces es un complique y es un
reto y es una posibilidad también.”
“yo vivo todo el tiempo en esas, en ese debate y en
esa búsqueda, y no es la búsqueda de ser bueno, no
me interesa ser bueno, ¿sí?, pero si es mi apuesta a
seguir hablando de esto y a ayudar a construir pues
como una noción distinta de la vida y de la
comunidad y de la paz y de esa vaina que llaman
ustedes amor, que para mí tiene muchas discusiones,
claro eso, eso digamos que es eh, también los
aprendizajes de una historia, no solamente de la
ATCC, pero que si me obliga de verdad”
“es la obligación de uno hablar de esto, pero no
hablar del lado oscuro de la vida, ni del lado gris y
del luto y de la tragedia y de la guerra, sino de la
posibilidad que tiene el ser humano y que tiene este
país de, de, de hacerse a una realidad distinta y para
mí es eso”
“demostrarles que si aprendemos a hablar, a dialogar,
a negociar, a reconocernos, a humanizarnos, si hay
posibilidades de hacer cosas diferentes”
“yo no pierdo mi interés particular, no, yo soy el que
está nombrando esa vida y esta historia, yo soy el que
necesita vivir y crecer para que ese proyecto crezca,
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 103
y todos los líderes necesitan crecer para que su
proyecto crezca”
“yo no pienso pues en el, en las enseñanzas pues del
señor redentor o Mesías, no, yo no soy mesiánico, yo
necesito vivir, necesito vivir bien y no joder a nadie,
necesito si no dejarme joder de nadie, necesito que la
gente sea bonita y que crezca, pero que crezca libre”
“yo a la política no la concibo no, no la concibo así; ó
sea para mí, algún día me preguntaba una de las, de
las jefas en la Secretaría de Cultura ¿por qué eres tan
exitoso en el trabajo de la comunidad? Y le dije por
una razón muy simple, porque mi apuesta política no
es como la de ustedes, mi apuesta política es por la
construcción de un ser humano distinto, diferente,
bonito porque para mí esa es la base de la política
¿sí?, entonces por eso, yo voto claro, como todos los
huevones de este país a ver quién sale así como
bonito, pa, pa votar por él. Pero no es mi opción ó sea
no, no es mi opción”
“yo no creo en la agitación de masas, yo no creo en el
partido comunista, ni en el marxismo, ni en ni mierda
de eso, yo no creo en eso, yo no creo en las putas
marchas esas, que no son proyectos colectivos sino
montonera de gente, para mí eso no es proyecto. Yo
creo que es una obligación tuya y mía darle palabra
bonita a la gente, decirle que la vida tiene un lado
bonito pero que tienes que encontrarlo y que para
encontrarlo tienes que buscarlo en ti mismo, así,
así…”
“para mí un proyecto colectivo es el que recoge a
todo el mundo, que reconoce a todo el mundo
independientemente de sí se parece a ti en lo
ideológico, en lo religioso, en el color, en lo que sea,
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 104
que recoge por encima de todas esas
consideraciones… para mí un proyecto colectivo es
el proyecto que si recoge las expectativas y las voces
de la gente, un proyecto colectivo es la gente, es toda
esa gente, no es lo que a mí me parece que es más
bonito. El proyecto colectivo es el reflejo de la gente
de todos los colores y de todas las ideas ahí, ahí,
planteado así”
“para mí, si eres mujer, linda, fea, eres un ser
humano que merece oportunidad, las mismas
oportunidades, y que necesitas crecer como yo
necesito crecer”
“en el asunto del poder, en el tema del poder, tú no
reconoces nada que no te otorga poder a ti, que no te
incluya, ¿sí?, la comunidad se construye, el poder de
la comunidad se construye ahí. Si yo logro, si yo
puedo hacer parte de ese poder, ahí está, ¿sí?, pero
porque estoy dentro, porque hago parte de esa
propuesta, porque tengo voz, porque tengo voto,
porque tengo capacidad y disponibilidad de posición
en lo que se piense hacer o dejar de hacer, para mí
eso se legitima así, y se construye así, se construye
con los que quieren estar adentro, porque todos en la
región no pertenecieron y hay mucha gente que no
pertenece al proceso, gente que hace otras cosas”
“y ¿qué se necesita para que haya mejores modelos
de relación entre la gente? Mira yo no me aparto y no
me apartaré nunca, nunca de que si conseguimos
humanizarnos un poquitico más y mirarnos por
encima del verraco estrato y de la universidad en la
que estudies y del barrio donde vives, mira eso está
hecho, ¿si entiendes?”
“Mira el ser humano que tiene al otro incorporado ahí
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 105
porque es su existencia también, no tiene necesidad
de sacrificar para ayudar, pa dar la mano, pa querer;
aquí estamos luchando por amar, estamos
desesperados por aprender a amar, no mira lo
primero que hay que construir es al otro de una
manera distinta, aquí (señalando el pecho) sea quien
sea, y si lo consigues no sufras más descansa, porque
no tienes que preguntarte qué, cuál es la voluntad de
Dios, no, ya esa es”
“si logramos, por eso yo creo en la palabra, ¿sí? Una
palabra que te ayude a desmontar todos esos rollos
que tienes construidos en la cabeza, que me ayude
también a mí, ¿sí?, que me permita hundirme contigo
y con tu esencia para no matar, porque me mato, ¿sí?,
para no joderte porque me estoy jodiendo a mí. Eso
es lo que se necesita, pero para mí es palabra, todo el
tiempo la palabra, mira este país perdió la palabra”
“perdimos la palabra, para mí una cosa es balbucear
cosas, ¿sí?, y para mí otra cosa es tener la palabra que
de verdad genera cosas, ósea para mi es palabra
creativa, si ves una, palabra que es decreto, una
palabra que es un conjuro, una palabra que es sincera
hijueputa y que produce hechos políticos, sociales y
eso, lo demás, lo demás es retórica, pura mierda,
para mí; y mira que esa comunidad tiene eso, esa es
una de las cosas bonitas que yo me encontré en el
Carare, como eso transita a través de todo, y es una
cuestión muy indígena, ¿no?, la oralidad es muy de
nuestros indios, y yo digo que, que funciona, yo digo
que funciona, pero tienes que usarla todo el tiempo,
con los niños, con todos, lávales el coco porque
nosotros somos información histórica que es
necesario comenzar a contrarrestar, tratando de
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 106
recuperar lo humano todo el tiempo. Así si se puede
hacer un proceso de paz en otra parte”
“mira uno puede romperse la cabeza pensando,
leyendo, yo he visto muchas cartillas de manejo de
conflictos y de metodologías, pero para mí no, yo soy
la metodología, el campesino es la metodología, tú
eres la metodología, porque entonces comienzas a
ver la hijueputa cartilla y te olvidas de ti, y el recurso
está en ti, el recurso para enamorar, el recurso para
mover, el recurso para movilizar está ahí, no en lo
que hace lo técnico, no es que tenga una pelea con lo
técnico porque me muevo también dentro de ese
formato, pero me parece que muchas veces lo técnico
y toda esa mierda teórica desplaza lo humano que es
lo que tiene fuerza, si tienes fuerza como humano
moverás el mundo, te juró que moverás el mundo,
algo pasa cuando hablas, algo pasa cuando actúas
pero eso no se queda impune, como dicen”
“Todos cuando hablamos de política tenemos
preguntas muy serias, y retos muy grandes y
confrontaciones muy grandes y cuestionamientos
muy grandes que hacernos a nosotros mismos cuando
hablamos de política, lo que pasa es que eso es
verraco, es jodido, aquí es más fácil soltarle el
discurso al otro que cuestionarse uno y decir “ey ¿yo
qué clase de ser humano soy?”, ¿no?, pa que cuando
llegue a la JAL, a la Junta de Acción Comunal no me
vuelva loco ni me asuste el poder ¿sí?. El día que este
país tenga, o este mundo, tenga gente construida,
construida, ahí, ahí, desde lo humano, y con el otro
metido en el alma pero en libertad, sin, sin martirio y
sin nada de eso, porque esa es otra, y si a uno le
cuesta, le cuesta al otro y no se mortifique tanto por
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 107
salvar la humanidad ¿no? Ese día tu no necesitas ni
siquiera leyes para que te digan que hay que hacer
con el otro y que es lo que no hay que hacer, tu lo
haces, lo haces porque lo que estás haciendo por él,
lo haces por ti, ¿sí?”
“y yo le decía: “mujer la solidaridad para mí, no es
entregarle un pan a un niño que está debajo de un
puente porque pobrecito, me parece que ese
pobrecito es una cosa que yo tengo metida aquí
adentro, y pobrecito no es él, ese pobrecito es un
reclamo a una necesidad profunda que yo tengo”, ó
sea la solidaridad para mí no está allá, es la pregunta,
el cuestionamiento, yo podría pasar por el lado de ese
man e importarme un carajo, pero el problema es que
me importa ¿sí?, porque siempre nos movemos así,
con el pobrecito y la lastima y ¿no?, lastima de
nosotros mismos si nos olvidamos de los demás, y es
así, ¿sí?”
“y yo digo no, y eso tiene que ver con la
construcción, y eso tiene que ver con el modelo de
sociedad que tenemos, la manera como nos
enseñaron a asumir la relación de pareja, de amigos
cierto, las relaciones de compañeros las nociones del
bien y del mal, eso es, lo que pasa es que son
discusiones que no damos por que hay maneras
técnicas de construir la paz, y no podrá construirse la
paz a menos que yo pase por debates como estos… si
yo sigo pensando que jueputa tengo arrechera, como
dicen los santandereanos, ¿no? Si yo sigo pensando
que la prevalencia pues es para el hombre y que el
hombre es la prioridad, si yo sigo pensando que
tengo que sacrificarme en nombre del amor y de la
bondad y del bien y del cielo, eso es lo que tenemos y
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 108
hace parte de toda esa construcción que tenemos”
“yo personalmente tengo compañeros que son muy
cristianos, y otros son católicos y otros son
adventistas y otros son evangélicos, yo, yo no juego
con eso porque me parece que de alguna manera eso,
primero me pone en pugna con la humanidad, el
defender esa verdad, y yo no quiero defender nada, ni
a nadie le digo es que tienes que ser bueno o tienes
que ser malo, yo creo que la naturaleza nos da un
legado que hay que entender, que hay que encontrar,
que hay que incorporar ahí, para no estar todo el
tiempo tratando de ver el catecismo y mirar como lo
ponemos en práctica“
“yo les decía en la Autónoma que cuando uno habla,
que cuando uno cuenta esta historia también va
encontrando significados nuevos, interpretaciones y
va entendiendo, nosotros nunca tuvimos tiempo de
sentarnos a entender lo que pasó, porque nos
movimos siempre en la necesidad de producir
respuestas espontáneas en medio de un conflicto
complicado ¿sí? entonces ahorita, cuando uno,
digamos en el caso mío que estoy lejos de la región,
eso me permite sentarme a tratar de desentrañar que
es lo que paso ahí”
Subjetividad y Resistencia en clave de Poder y Reversibilidad 109
APÉNDICE C
PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
Edad: ________ Genero: _______
DECLARACIÓN DE CONSENTIMIENTO INFORMADO
Doy mi consentimiento informado para participar en este estudio sobre
“Subjetividad y resistencia, en clave de poder y reversibilidad desde la
experiencia de la ATCC”. Consiento la publicación de los resultados del estudio
siempre que la información sea anónima y disfrazada de modo que no pueda
llevarse a cabo identificación alguna. Entiendo que, aunque se guardará un registro
de mi participación en la investigación, todos los datos recogidos en la
investigación, estarán identificados de forma anónima.
1. He sido informado de que mi participación en esta investigación no implica
ningún riesgo o molestia conocidos o esperados.
2. He sido informado de que el investigador responderá gustosamente a cualquier
pregunta respecto a la investigación.
3. He sido informado de que soy libre de parar la entrevista en cualquier momento
sin penalización de ningún tipo.
_____________________
Participante
Fecha: _________________