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 UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010

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UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Pioneros del Trabajo SocialUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros del Trabajo SocialUna apuesta por descubrirlosExposicin bibliogrfca(Escuela Universitaria de Trabajo Social)Abril 2004Organizada por la Biblioteca Universitaria de Huelva y el Departamento de Sociologa y Trabajo Social de la Universidad de HuelvaServiciodePublicaciones2004UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLCoordinacin generalAndrea Capilla PrezJos Carlos Villadniga GmezRedaccin y textosAndrea Capilla PrezM Josefa Vzquez LibreroBlanca Gonzlez CerezoBeln Ros VizcanoAna Galvn MorenoTrinidad Banda GallegoIns Portillo MayorgaFotografas, diseo y maquetacinCiceroDocumentacin, bibliografa y contacto con UniversidadesJos Carlos Villadniga GmezTeresa Contreras BarrancoJos Carlos Morillo MorenoImprimeIVC Cegar, S.L.Depsito legal: H-68-2004ISBN: 84-95089-63-7UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010ComISaRIa De La eXPoSICINAndrea Capilla PrezComIT oRGaNIZaDoRDepartamento de Sociologa y Trabajo SocialAndrea Capilla PrezProfesora Titular de Escuela Universitaria, rea de Trabajo SocialDirectora del Departamento de Sociologa y Trabajo Social, Universidad de HuelvaM Josefa Vzquez LibreroProfesora Titular de Escuela Universitaria, rea de Trabajo SocialSecretaria del Departamento de Sociologa y Trabajo Social, Universidad de HuelvaBlanca Gonzlez CerezoProfesora Titular de Escuela Universitaria, rea de Trabajo SocialSecretaria de la Escuela Universitaria de Trabajo Social, Universidad de HuelvaBeln Ros VizcanoProfesora Asociada, rea de Trabajo Social, Universidad de HuelvaAna Galvn MorenoProfesora Asociada, rea de Trabajo Social, Universidad de HuelvaBiblioteca UniversitariaJos Carlos Villadniga GmezEscala Facultativos Archivos, Bibliotecas y Museos, Universidad de HuelvaInformacin bibliogrfcaJos Carlos Morillo MorenoEscala Ayudantes Archivos, Bibliotecas y Museos, Universidad de HuelvaJefe de Seccin de Proceso TcnicoM Teresa Contreras BarrancoEscala Ayudantes Archivos, Bibliotecas y Museos, Universidad de HuelvaPrstamo interbibliotecarioUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLComIT CIeNTFICo De La eXPoSICINAndrea Capilla PrezM Josefa Vzquez LibreroBeln Ros VizcanoAna Galvn MorenoBlanca Gonzlez CerezoTrinidad Banda GallegoIns Portillo MayorgaCooRDINaCIN DeL CaTLoGoAndrea Capilla PrezJos Carlos Villadniga GmezCooRDINaCIN De meDIoS De ComUNICaCINBeln Ros VizcanoCooRDINaCIN LoGSTICa y DeL PeRSoNaL CoLaBoRaDoRAna Galvn MorenoBeln Ros VizcanoUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLPresentacin15Orgenes del Trabajo Social: contexto social, poltico, econmico e ideolgico23CaTLoGo De La eXPoSICINPrecedentes en la Historia de la accin Social53Isabel la Catlica55Juan Luis Vives57Vicente de Pal61Luisa de Marillac69Precursores de la accin Social organizada en espaa77Concepcin Arenal79Pioneros Precursores95Dorothea Lynde Dix97Octavia Hill107Henrietta y Samuel Barnett113Anna Laurens Dawes121Beatrice Potter Webb125Margaret Frances Byington135Pioneros Fundadores139Mary Ellen Richmond141Pioneros Innovadores153Jane Addams155Edward Thomas Devine173Eduard Christian Lindeman179Edith Abbott191UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Richard Henry Tawney201Jessie Taft207Virginia P. Robinson215Charlotte Towle221Saul Alinsky227Gordon Hamilton239Florence Hollis243mencin honorfca a otros pioneros sin obras en la exposicin249Josephine Shaw Lowell251Alice Salomon255Grace Abbott261ndicesndice de Ttulos de obras expuestas269ndice de redactores274ndice de Universidades y Entidades colaboradoras275UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010PRLoGoAntonio Ramrez de VergerRectores muy grato para m presentar el catlogo de una exposicin bi-bliogrfca organizada por la Escuela Universitaria de Trabajo Social y la Biblioteca Universitaria de Huelva. Se trata de una obra pionera en un doble sentido: en primer lugar, por su forma, porque aborda de manera novedosa y singular el acercamiento a fguras poco conocidas en el mbito espaol a travs de la exposicin de sus escritos ms re-presentativos; ensegundo lugar, por su materia, ya que su objeto es precisamente dar a conocer el pensamiento de los pioneros del trabajo social, aquellos que dieron los primeros pasos en la confguracin de una nueva disciplina y una nueva profesin.La novedad de la forma est clara. Acercar a la comunidad universita-ria, a los profesionales, a la sociedad entera, a los orgenes del trabajo social mediante la exposicin de las obras y escritos que recogen las ideas de las principales fguras del trabajo social es, sin lugar a dudas, original. Frmula que permite divulgar los fondos propios de nuestra Universidad y los de aquellas instituciones, acadmicas y religiosas, que gustosamente han prestado sus libros, y a las que desde aqu les doy encarecidamente las gracias.El ttulo de la exposicin Los Pioneros del Trabajo Social, una apuesta por descubrirlos, es bien expresivo de su fnalidad ltima. Se trata de indagar en los comienzos de una andadura, los inicios de una explo-racin de tierras poco conocidas; una incursin en la obra de unos profesionales que tratan de dar identidad a una prctica que surge de forma casi espontnea, impulsada por el desarrollo social y destinada a dar respuesta a los problemas que plantea la sociedad industrial.Las fguras del trabajo social que se presentan en esta muestra fue-ron intelectuales de primera lnea, en contacto con las principales corrientes flosfcas y cientfcas del momento. Impulsores tambin de un nuevo enfoque, de una nueva perspectiva, con la que abordar e interpretar una actividad que se desarrollaba desde haca mucho UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLtiempo. Erapreciso dotarde refexin, de fundamento terico, a una praxis de intervencin social que se mostraba cada vez ms necesaria para mitigar los desequilibrios sociales y econmicos producidos por un feroz capitalismo.La exposicin bibliogrfca quiere ser un momento de respiro, una parada en el camino, una apuesta para descubrir oredescubrir la obra de aquellos que nos precedieron y dotaron de sentido, de iden-tidad y de contenido a una profesin. Una apuesta necesaria porque como dira el insigne flsofo Jos Gaos el pasado no es una realidad acabada, completa, sino que van acabando,que van completando los sucesivos presentes. Por ello, el conocimiento de los pioneros del trabajo social (Arenal, Addams, Richmond, Lindeman...) no es ms que un primer paso en el largo camino de construccin delcorpus terico de esta disciplina. La tarea de los profesionales del presente y los del futuro ser contribuir a la consolidacin de este pasado, que no tiene signifcado por s mismo, si no es desde la interpretacin del hombre de hoy.UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010PReSeNTaCINAndrea Capilla PrezHaciendo memoria y con el gusto de compartir gratos recuerdos, diremos que la idea comenz una maana de noviembre de 2002, en la cafetera de la Escuela de Trabajo Social de la Universidad de Huelva, en las horas amables del desayuno, compartidas entre compaeras antes de iniciar la jornada matutina. Son las horas en las que no se pretende ni espera decidir nada, en las que no se es consciente del reto planteado. Agitadas ya con el propsito de acometer la tarea de organizar el prximo Congreso desde nuestra Escuela, aparece la idea despus de encontrar las fotos de algunos autores para mostrar a los alumnos, mientras en clase se hablaba de ellos. Lindeman, Alinsky, los Barnett, Konopka eran algunos de ellos. De aqu y sin saber cmo, se desencadenan una sucesin de ideas que una tras otra marcan el sendero que lleva a lo que en este catlogo presentamos: la Exposicin Bibliogrfca sobre los Pioneros del Trabajo Social. Mirar a los orgenes y descubrir nuevamente a estos autores resulta ser tan seductor para las contertulianas de los desayunos, que pronto los tentculos de la idea atrapan a otros y otras. Nada formal como puede apreciarse, y de pronto, surge una tarea a la que nos hemos afanado durante meses, con esfuerzo pero tambin con propinas de satisfaccin y entusiasmo.La exposicin bibliogrfca que presentamos lleva por ttulo Los Pio-neros del Trabajo Social, una apuesta por descubrirlos, y surge, ya en su etapa de racionalidad, para satisfacer una doble aspiracin.En primer lugar, presentar una recopilacin bibliogrfca de obras de trabajo social que pueden ser consideradas precursoras, fundacionales e innovadoras en la disciplina, y cuyas fechas de publicacin se sitan entre 1880 y 1950. Dadas las caractersticas del evento se procura que todas las obras expuestas sean primeras ediciones o, al menos, edicio-nes cercanas al momento en que se gestan las ideas que contienen. En segunda instancia, iniciar la creacin de una coleccin facticia en la Biblioteca de la Universidad de Huelva, especfca sobre dicha temtica y cuyos fondos deben responder a dos criterios: obras antiguas en pri-UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLmera o segunda edicin de los precursores, pioneros e innovadores del trabajo social pertenecientes a fnales del XIX y primera mitad del siglo XX; y tambin, publicaciones actuales que aborden temas relativos a las aportaciones de estos autores en sus obras.En relacin con el ttulo elegido para nombrar el evento y su adecuacin con la temtica sobre la que versa, resulta conveniente hacer algunas aclaraciones de importancia notable. La denominacin de la muestra bibliogrfca hace referencia a los pioneros aunque en puridad habra que incluir tambin la alusin a precursores e innovadores del trabajo social, ya que las fguras en torno a las que se organiza la exposicin, responden dada la naturaleza de su aportacin a esta clasifcacin. Sin embargo, la operacin de titular precisa de claridad y concisin en el mensaje, es este el motivo de la eleccin del trmino pionero, el cualadquiere un sentido global que representa de igual modo a:Aquellos que con su refexin y accin pionera aportaron las bases precursoras para la profesin y disciplina del trabajo social.Tambin aquellos otros cuya aportacin innovadora resultan pio-neras por dotar de nuevas perspectivas al trabajo social.Y, por supuesto, es pionera aquella a la que pueden atribuirse las obras fundacionales de la disciplina y profesin del trabajo social.Es pues ste y no otro, el sentido amplio que adquiere el trmino pionero incluido en la denominacin de la exposicin.La incorporacin de obras de Juan Luis Vives, Vicente de Pal y Luisa de Marillac se contemplan en la exposicin no en el sentido de pioneros, sino como precedentes signifcativos para el trabajo social dentro de la historia de la accin social. De igual modo sealamos la obra social de Concepcin Arenal, precedente destacado por su contribucin a la accin social organizada en Espaa.La muestra bibliogrfca est inscrita y vinculada al V Congreso Estatal de Escuelas de Trabajo Social celebrado en la Universidad de Huelva en Abril de 2004, y la condicin que adquiere la misma, en el conjunto de este acontecimiento, es la de ser una actividad complementaria destinada a incrementar el sentido, inters y atractivo del Congreso. UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Si atendemos al aporte de sentido, podemos sealar que resulta adecuado mirar, en un primer momento, al pasado cuando el lema del Congreso plantea el interrogante es posible otro mundo?. Una conciencia clara del pasado es necesaria para poder analizar el presente y hacer una proyeccin planifcada del futuro. La exposicin aporta, por tanto, un punto de referencia singular y apropiado en la dotacin de sentido para el lema planteado en el congreso.En lo referente a incremento de inters y atractivo, hay que des-tacar que la exposicin es una nota singular y destacada, por ser novedadenelconjuntodeeventosrelacionadosconeltrabajo social en Espaa. La acumulacin de obras de precursores, fun-dadoreseinnovadores,procedentesdebibliotecasespaolas yextranjeras,ofreceunaoportunidadprivilegiadaparacurio-sos,interesadosyestudiososquepuedanvisitarlaexposicin. Las obras que se presentan en este catlogo y en la exposicin jams estuvieron reunidas en Espaa y puede afrmarse que no hay ninguna biblioteca europea que disponga de esta coleccin completa. Para muchos de los visitantes de la exposicin, ser la oportunidad de ver por primera vez, obras que slo conocen por referencia en alguna que otra publicacin, y por ello les auguramos momentos de disfrute e incluso de emocin durante su estancia en la muestra. Hay que destacar la exhibicin de la primera edicin de la obra de M.E. Rich-mond, Social diagnosis (1917), considerada para muchos la primera obra de Trabajo Social. Nos cabe el orgullo de poseer un ejemplar de la primera edicin en la Universidad de Huelva, nico en bibliotecas universitarias espaolas si nos atenemos a los fondos reunidos en el catlogo Rebiun.Los especialistas que visiten la exposicin pueden advertir algunas ausencias signifcativas en relacin a autores y a obras. Respecto a los autores, en algunos casos se debe a que sus contribuciones no fueron recogidas en obras concretas y por tanto su aportacin est dispersa en conferencias y escritos incluidos en otras publicaciones o revistas de la poca; en otros casos no hemos conseguido ni primera, ni segunda, ni tercera edicin de sus obras. La idea de exposicin bibliogrfca da protagonismo a los libros sobre el trabajo social y a los autores de los mismos y, por tanto, todo aquello que no est incluido en libros no es objeto de esta muestra. En cambio lo referente a obras ausentes, est claro que han sido varios los intentos de conseguirlas, mediante PresenTacinUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLprstamo o adquisicin, pero no ha sido posible.Otra cuestin interesante a sealar es el anecdotario de vicisitudes harto extenso que se acumula tras la experiencia de emprender una odisea de esta envergadura. Sealamos algunos ejemplos para mos-trar lo complicado de montar un evento de este tipo sin contar con un fondo propio sufcientemente amplio. Hemos recibido por com-pra obras que no corresponden ni al autor ni al ttulo solicitado; en otros casos, las bibliotecas dispuestas a prestar exigen cumplimentar un formulario tan exhaustivo que el hecho de recopilar esos datos resultaba casi imposible; es tambin interesante sealar que algunos libreros de antiguo que mostraban en su sitio web obras en las que estbamos interesados, tras la peticin y el pago, nos contestaban que no encontraban las obras en los estantes. Y, todo ello sin olvidar que, muchas bibliotecas ni siquiera contestaron a nuestra peticin, no son las canadienses por cierto, ya que gracias a su generosidad y disponibilidad contamos con gran parte de las obras expuestas en prstamo.Volviendo a los autores, la seleccin se hizo considerando las aporta-ciones ms signifcativas, pero la fortuna no nos ofreci la oportunidad de mostrar obras de todos. Por tanto, algunos han quedado fuera de la muestra y, en aquellos casos que hemos considerado oportuno, mostramos notas sobre vida y obra, pero no ejemplares de sus libros. Los autores que disponen de espacio especfco en la exposicin se relacionan a continuacin clasifcados por secciones:I.- Precedentes en la Historia de la Accin Social:0. Isabel la Catlica (1451-1504)1. Juan Luis Vives (1492-1540)2. Vicente de Pal (1581-1660)3. Luisa de Marillac (1591-1660)II. - Precedente en la Accin Social organizada en Espaa:4. Concepcin Arenal (1820-1893)UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010III.- Precursores del Trabajo Social5. Dorothea L. Dix (1802-1887)6. Octavia Hill (1838-1912)7. Samuel A. Barnett (1844-1913) y Henrietta O. Barnett (1851-1936)8. Anna L. Dawes (1851-1938)9. Beatrice P. Webb (1858 - 1943)10. Margaret F. Byington (1857-1952)IV.- Fundadores del Trabajo Social11. Mary E. Richmond (1861-1928)V.- Innovadores en Trabajo Social12. Jane Addams (1860-1935)13. Edward Thomas Devine (1867-1948) 14. Eduard C. Lindeman (1885-1953)15. Edith Abbott (1876-1957)16. Richard Henry Tawney (1880-1962) 17. Jessie Taft (1882-1960)18. Virginia P. Robinson (1883-1977)19. Charlotte Towle (1896-1966)20. Saul Alinsky (1909-1972)21. Gordon Hamilton (1892-1967)22. Florence Hollis (1907-1987)VI.- Mencin Honorfca23. Josephine Shaw Lowel (1843-1905)24. Alice Salomon (1872-1948)25. Grace Abbott (1878-1939)PresenTacinUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLDe 190 obras propuestas inicialmente, el catlogo recoge defnitiva-mente 115, y de 30 autores hemos quedado en 22. Es ms que nada, pero mucho menos de lo que desebamos. Si consideramos que las difcultades sorteadas no han sido pocas, podemos decir que la ex-posicin lograda no es tan poco como parece a quien imagin mucho ms de lo conseguido. Es importante destacar, por tanto, que las obras que presentamos no constituyen en s una seleccin, es ms bien lo hallado tras una tarea tediosa de bsqueda, peticin y compra, en la que no todas las respuestas a nuestra demanda fueron atendidas afrmativamente. Un buen equipo compuesto por bibliotecarios de la Universidad de Huelva y profesoras del Departamento de Sociologa y Trabajo Social, aportando trabajo e ilusin a la vez, con reuniones de jueves a jueves, han organizado lo que aqu se presenta y esperamos sea cuando menos curioso, interesante y emotivo.UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Sin el inters y apoyo recibido por parte de nuestro Excmo. Sr. Rector D. Antonio Ramrez de Verger Jan no hubiera sido posible esta expos-icin. Su buena disposicin permiti resolver cuestiones operativas de primer orden, sus ofrecimientos siempre fueron generosos en extremo, queremos por tanto sealar nuestra gratitud por toda su ayuda.El Ilmo. Sr. Director de la Escuela Universitaria de Trabajo Social y Presi-dente del V Congreso Estatal de Escuelas de Trabajo Social Don Octavio Vzquez Aguado, tambin merece mencin. Siempre conf en la idea y en el buen resultado que tendra, incluso cuando el desnimo y las dudas secuestraban a quin escribe. Su apoyo y entusiasmo siempre nos ayud.La Biblioteca Universitaria tambin es objeto de nuestra gratitud, ya que en sus profesionales hemos encontrado apoyo tcnico y diligen-cia en cuantas tareas han sido necesarias y una astucia sorprendente para encontrar lo que desebamos, sin su esfuerzo y buen criterio la Exposicin no hubiera sido posible.Tambin nuestro ms sincero agradecimiento al conjunto de biblio-tecas colaboradoras, sus prstamos han hecho posible la muestra de obras de nuestros pioneros.Un reconocimiento especial a los profesores del rea de Sociologa por la generosidad mostrada al permitir la contribucin econmica del Departamento en la Exposicin.Al equipo de traductores de correspondencia todos ellos amigos, familiares y compaeros, gracias por vuestro generoso trabajo.A las Hijas de la Caridad de San Vicente de Pal de Sevilla y Huelva por cedernos muy generosamente los tesoros bibliogr-fcos de sus fundadores, San Vicente de Pal y Santa Luisa de Marillac.aGRaDeCImIeNToSUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010oRGeNeS DeL TRaBaJo SoCIaLM Josefa Vzquez LibreroContextualizar las obras de los pioneros del trabajo social es una tarea compleja. Por una parte, sin aparentes difcultades porque el momento histrico, en el que los trabajadores sociales situamos la aparicin de nuestros actos conscientes, ha sido objeto de estudios y anlisis por-menorizados, desde distintas disciplinas, entre las que se encuentra el propio trabajo social. Por otra, se convierte en una tarea sometida a dilemas, porque supone seleccionar entre los numerossimos datos que se brindan en la literatura acerca de este periodo de la historia contempornea occidental.Es por ello que nos planteamos qu criterios deban orientar tal se-leccin, para tratar de ajustarnos, rigurosamente, al objetivo de este espacio. As, entendemos que, no son objeto de esta introduccin, todas aquellas variables, presentes en el contexto geoespacial y tem-poral, por muy signifcadas que stas pudieran ser y su reconocimiento consensuado, sino presentar una panormica genrica de los aspec-tos que mejor pudieran caracterizar la accin de los pioneros, en sus inicios (ideologa, objetivos, estrategias, flosofa), como lanzadera posterior que terminar confgurando una disciplina y profesin: el Trabajo Social.Querramos resaltar, no obstante, y en primer lugar una cuestin: el papel y la importancia de la mujer en estos primeros momentos. Sea de identidad que se mantiene en el tiempo. As, y si tenemos en cuen-ta, el contexto temporal en el que nos movemos, podemos asegurar con gran satisfaccin, a la par que reconocimiento que, a pesar de las trabas sociales que se imponan a las mujeres, y an dentro de deter-minados lmites que ms tenan que ver con la ideologa dominante y sus elaboraciones, las mujeres que se consideran pioneras del trabajo social, fueron activas, conscientes, plenamente integradas en su siglo, innovadoras, utpicas, realizadoras. Y esto nos llena de orgullo, como trabajadoras sociales y como mujeres. Las fguras consideradas pioneras, refrindose este trmino a lo esta-blecido por la profesora Capilla en la presentacin de este Catlogo, contexto social, poltico, econmico e ideolgicoUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLsurgen en el contexto anglosajn de principios del siglo XIX. Es por ello que, contextualizar este Catlogo, preparado con motivo del 5 Congreso Nacional de Escuelas de Trabajo Social implica, en primer lugar, esbozar ese escenario geoespacial y temporal.As pues, se van a resaltar indicadores, dentro de las coordenadas que se consideran representativas para la delimitacin de las acciones so-ciales. Aquellos pivotes que emergieron con fuerza en el tratamiento de las problemticas de los considerados personas con necesidades sociales. Sector de poblacin afectada negativamente por la prolife-racin de medidas econmicas y polticas del periodo que abarca el siglo XIX y primera mitad del siglo XX.La evolucin de las condiciones de vida durante la revolucin indus-trial ha sido objeto de una densa polmica durante ms de un siglo. Optimistas y pesimistas han ido aportando argumentos en uno y otro sentido. No obstante, el anlisis del reparto de la renta no concluye ms que en el hecho de que se produce una profundizacin de las des-igualdades. La tendencia en la distribucin de la riqueza que sugieren las estadsticas compiladas antes y durante la industrializacin es la de un incremento de las diferencias, de acuerdo con la curva en U. As, la primera mitad del siglo XIX supondra el aumento de las distancias entre ricos y pobres (el 10% de la poblacin de mayores rentas dispone de ms del 50% de la riqueza)1 .Si empezamos por los aspectos de demografa diremos que la po-blacin experiment un fuerte crecimiento durante el siglo XIX que le llev a cuadruplicar su poblacin. Este crecimiento de poblacin se concentr en las ciudades, algunas tpicamente industriales. El forecimiento de los grandes ncleos corri parejo a las imgenes y situaciones productos de una industrializacin sin control. El crecimien-to econmico no escap o al decir verdad se factur sobre paisajes urbanos de chimeneas humeantes y de polucin. En cuanto a la estructura fsica de las ciudades, es decir, sus aspectos urbansticos, se resalta, el rpido crecimiento y sobre todo, la inexis-tencia o insufciencia de polticas reguladoras. Las ciudades tenan numerosas defciencias en infraestructura e higiene, razones, por las cuales, la mortalidad en ellas era ms elevada que en el medio rural. A esto haba que aadir, como derivada, las caractersticas de las vivien-das, en lo referido a su habitabilidad y salubridad. Las condiciones de UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010alojamiento de la poblacin trabajadora urbana eran muy malas. Por lo general, se agrupaban en los centros urbanos degradados (de los que hua la poblacin acomodada) y se ocupaban casas carentes de espacio y de ventilacin. La iniciativa privada, a quin se conf, casi exclusivamente, la construccin de viviendas durante el periodo, no se preocup por un sector de la poblacin con escasos recursos, por lo que bastantes trabajadores urbanos tuvieron que residir en stanos (un quinto de poblacin) y buhardillas o compartir pisos de alquiler con otras familias con el consiguiente problema de hacinamiento, contagio de enfermedades y tasas elevadas de mortalidad, con una media de ms de seis personas por vivienda. Solamente en el mejor de los casos pudieron habitar viviendas de nueva, pero precaria cons-truccin, adosadas en la parte trasera de otras viviendas, sin espacio sufciente para la ventilacin.Frente a esta situacin se plantearon desde distintos frentes medi-das correctoras, o al menos, paliativas. Las psimas condiciones de higiene y vivienda y sus consecuencias negativas sobre la poblacin trabajadoras que las sufra eran innegables. No obstante, en muchas ocasiones, se atribua tales condiciones a la amoralidad de la pobla-cin. Por ello las peticiones de intervencin de los poderes pblicos se fundamentaron, a un tiempo, en trminos sanitarios y morales, algo nada extrao en una poca en la que se consideraba que pobreza y vicio andaban de la mano.Pero no slo estaba sometida la clase obrera a psimas condiciones de vivienda, la historia nos demuestra que sobre la salud de este sector de poblacin incidan de forma permanente las malas condiciones de trabajo: bajos salarios, jornada laboral interminable, inseguridad... en suma desproteccin y desregularizacin, e incluso una regulacin a favor del laissez faire patronal. A esto haba que aadir la calidad de los productos alimentarios a los que podan acceder. Respecto, a esto ltimo era habitual la adulteracin de los alimentos (arena en el azcar, agua en la leche, yeso en la harina o cido sulfrico en el vino). Todas estas circunstancias de vida vieron la luz recogidas sistemticamente en numerosos informes de la poca, entre los que podramos citar, entre otros, los de E. Chadwick 2 o en las denuncias de F. Engels, al respecto.Esta conjugacin de factores era retroalimentada por una determinado visin de la pobreza y de los pobres. Alguna nota, ya se ha indicado orgenes deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLcon anterioridad y de ella se derivaban estrategias de acciones sociales que se conjugaban y/o enfrentaban con la poltica social pblica del momento. La pobreza adquiere en el mundo que surge de la revolu-cin industrial unas caractersticas masivas y constituye una amenaza que planea sobre el conjunto de la poblacin trabajadora. El sistema tradicional de asistencia a los pobres vlidos para una sociedad pater-nalista y esttica, resulta inapropiado para la nueva sociedad en la que se impone la flosofa liberal y en la que la concentracin de poblacin trabajadora desborda los marcos institucionales de las antiguas leyes de pobres. Resultaba contraproducente y caro. Contraproducente porque distorsionaba las leyes del mercado al asegurar a los pobres en cada parroquia la asistencia, lo que se entenda, desincentivaba la bsqueda de trabajo y favoreca la reduccin de los salarios ofrecidos por los patronos. Caro porque el mantenimiento de esta poblacin pobre corra a cargo de los contribuyentes. Una poblacin que, si nos atenemos a los datos que ofrecan a fnales del XIX y principios de XX, Charles Booth 3 o Rowntree 4 se situaba en torno al 30% de la pobla-cin de Londres que caa por debajo del umbral de pobreza. Aunque es un dato conocido, diremos que Charles Booth, en 1892 establece como causas, de la pobreza en el East End (la zona Este de Londres, lugar donde, Samuel y Herietta Barnett y otros ponen en marcha los settlements y donde Octavia Hill desarroll su gerencia de viviendas), en gran medida, no en la conducta de quienes la sufren, sino a las circunstancias laborales y familiares de las que no eran responsables. Es uno de los estudios que contravienen el sentir generalizado y se constituye en un revulsivo para parte de la poblacin, alentando me-didas de accin correctora en todos los estamentos de la sociedad, entre los ms concienciados.Para el tema que nos ocupa y en atencin a lo que se sostiene en esta introduccin, la importancia de la presencia de las mujeres en la emergencia de nuestra profesin, nos lleva a atender este sector de poblacin. Podemos decir que uno de los grandes movimientos de estos siglos es el inicio de la salida de la mujer de la oscuridad de la historia. La situacin inicial pareca reproducir incluso un reforzamien-to del estatus y del papel de la mujer en la sociedad. En las primeras dcadas del siglo XIX fue entendindose entre la clase media y con ms difcultad en las restantes, un ideal de feminidad que supona la UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010exclusin de la mujer de la esfera pblica y laboral. Los distintos roles de hombres y mujeres descansaban en la creencia de aptitudes dife-rentes en unos y otras. Diferencia que se quera fundamentar en las particularidades biolgicas. Una generacin antes, el infuyente crtico y terico del arte John Ruskin 5 haba sealado que las funciones de la mujer como ngel del hogar era complacer, alimentar, vestira quines viviese en l. Podemos ver como, despus, este pensamiento no fue bice para que se uniera al movimiento reformador y fuera un importante contribuyente a la labor que Octavia Hill inici en el terreno de la administracin de alquileres para obreros. Una de las pocas actividades independientes de la mujer fuera del hogar consi-derada como propia de su papelera la visita a familias pobres para ejercer la caridad. La visita a hogares pobres para entregar donativos fue una actividad usual entre las mujeres de clase media, en la que las madres solan introducir a sus hijas. Se entenda que la sensibilidad de la mujer estaba especialmente indicada para desempear una labor caritativa, que en algunos casos alcanz niveles de dedicacin semiprofesional.6 Entre la poblacin trabajadora este ideal femenino result de ms difcil implantacin. Chocaba con la realidad de un entorno de escasez que hacia necesaria la contribucin de la mujer al salario familiar. No obstante se produjeron presiones de carcter institucional e ideolgico a favor de la reduccin de la presencia de la mujer en las actividades pblicas y en el trabajo, as como a la regularizacin de las pautas de conducta en materia moral (descendieron los nacimientos ilegtimos, los matrimonios no ofcializados, discriminados en la obtencin de ayudas a la pobreza.)A pesar de algunos esfuerzos aislados para mejorar la enseanza de las nias de las clases media, sta fue muy defciente hasta mediados del siglo XIX. Las hijas de las clases acomodadas reciban educacin en su propio domicilio. Los colegios de pago a los que asistan las hijas de familias de clase media con menores recursos solan ser pequeos locales carentes de personal capacitado en los que se enseaba una cultura muy bsica y una serie de habilidades para manejarse en el futuro como amas de casa. Desde mediados del siglo XIX, la intro-duccin de centros de enseanza secundaria para mujeres, permiti la formacin de una primera generacin de maestras. Supuso un cambio importante en la calidad de la formacin femenina. Entre la orgenes deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLpoblacin trabajadora, la situacin tard ms en mejorar; antes de la implantacin de la generalizacin de la enseanza, las posibilidades se reducan a las escuelas dominicales de orientacin religiosa (Sunday Schools), las ms utilizadas por las nias porque sus padres preferan mantenerlas en casa en cometidos domsticos o enviarlas al trabajo, las escuelas mantenidas por grupos religiosos (Monitorial Schools) y, para quienes podan pagrselas, las escuelas privadas baratas o Damen Schools. El economista y pensador britnico John Stuart Mill 7 (1806-1873) fue uno de los primeros en defender la igualdad de derechos de la mujer, una causa en cuyo empeo le apoy su esposa Harriet Taylor (1807-1858).aGeNTeS ImPLICaDoS eN La aCCIN SoCIaL: NaTURaLeZa.LNeaSDePeNSamIeNToyDeaCCINVIGeNTeS. aCCIoNeS.Podemos decir qu corrientes de pensamiento laicas y religiosas infuyeron en el movimiento de reforma social, en sentido amplio. Entre ellas y por su estrecho contacto con los pioneros, algunos de los cuales participaron de manera activa en estos movimientos y as se refejar en cada una de las glosas que de los pioneros se recogen en este Catlogo hablaremos de las corrientes disidentes de la iglesia anglicana. Posteriormente esbozaremos las acciones ms relevantes de los idealistas cristianos, de los reformadores sociales y el fabianismo, del cartismo, el feminismo y el movimiento de caridad organizada. Pasemos a ocuparnos, de lo ms signifcativo de sus aportaciones en el terreno de la accin social. La religin fue uno de los valores ms slidos de la poca en un esta-do confesional en el que la Reina de Inglaterra ocupaba la cabeza de la Iglesia Anglicana. La vida de las personas en tanto que individuos particulares y tambin como ciudadanos resultaba infuenciada por esta caracterstica. Adems de la Iglesia ofcial o establecida, otros credos religiosos competan por abrirse paso, son las iglesias disi-dentes, iglesias protestantes separadas en diversos momentos de la iglesia anglicana y la catlica. As mismo, debemos recoger el hecho de que paulatinamente se va abriendo paso un importante proceso de secularizacin. Si atendemos a la clasifcacin de los grupos religiosos vemos que junto a las tres grandes divisiones, anglicanismo, disidencia y catolicismo, aparecen corrientes dentro de cada bloque. La iglesia anglicana fue perdiendo ascendiente entre la poblacin debido a su UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010alineamiento en defensa de los intereses de los privilegiados y a la inadecuacin de su trama parroquial a las necesidades surgidas con la nueva geografa de la industrializacin. Tambin es cierto que el des-censo de la prctica religiosa en los medios urbanos fue en aumento, sobre todo debido al alejamiento de la poblacin trabajadora. ste hecho no implica que esta clase social no fuera objeto de atencin y llamada de las esferas laicas cercanas al plano religioso o de las nuevas formas de prcticas religiosas, que trataron de atraerla con nuevas iniciativas de accin, no revolucionarias, pero s en clara competencia con los enfoques propiamente salidos de la clase obrera, tales como el socialismo y los comunitarismos.En el universo de lo religioso y a estos esfuerzos debemos aadir el activo movimiento Quaker. Fundado en Inglaterra en el siglo XVII, la Sociedad de Amigos fue una secta protestante radical que hunde sus races en el perodo de la revolucin inglesa. Las actividades flantr-picas ququeras, de los primeros momentos, consistieron en visitas a mujeres y hombres presos y en trabajos con delincuentes juveniles, desarrolladas por Elizabeth Gurney Fry8 , una de sus miembros ms destacada, para el momento a que nos referimos. La abolicin de la esclavitud estuvo tambin entre las acciones ms relevantes. Ya en el siglo XIX, debemos resaltar, a Seebohm Rowntree. Alentado en el trabajo al que su padre Joseph Rowntree haba dedicado su vida, cre-y que era su deber ayudar al pobre. l mismo dedicaba el domingo a ensear en la Escuela de Adultos de York y visit a los estudiantes en sus hogares de donde obtuvo un conocimiento de primera mano de sus problemas. Inspirado por los trabajos de su padre acerca de la pobreza, decide realizar sus propias investigaciones en este terreno. Los resultados fueron publicados en 1901 en la obra Poverty, a Study of Town Life. En l, distingue entre las familias que sufran de pobreza primaria y secundaria. La primera categora recoga a aquellas familias que carecan de las ganancias sufcientes para obtener incluso las necesidades mnimas, mientras que en la segunda se incluan a las familias que tenan ganancias sufcientes pero el dinero era gastado en otras cosas. As defna a las primeras como tiles y a las segundas como derrochadoras. Con independencia de esta clasifcacin ideolo-gizada, el estudio proporcion abundantes datos estadsticos acerca de los salarios, horas de trabajo, necesidades alimenticias, la salud y la vivienda. Ilustr los fallos del capitalismo y plante que las reformas orgenes deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLsociales eran necesarias para superar los problemas del desempleo, de la vejez y de la mala salud. Abog posteriormente basndose en numerosos estudios por la necesidad de salarios decentes, subsidios familiares, por la democracia industrial. En 1897, Rowntree padre em-pez a ensear en la escuela de adultos de York. Visitaba los hogares de sus estudiantes y obtuvo el conocimiento de primera mano de sus problemas. Y en 1901 compr terrenos para construir casa para las familias de ingresos bajos.La nueva disidencia y especialmente el metodismo, en sus diversas ra-mas, experimentaron un fuerte crecimiento, al amparo del dinamismo que les aportaba una espiritualidad ms emotiva y una organizacin ms participativa. El metodismo naci en Inglaterra en el siglo XVIII en una poca de marcada frialdad racionalista y de formalismo ritual en la vida de la Iglesia Anglicana, y de gran decadencia moral en el pueblo ingls. En 1729, un grupo de jvenes en la Universidad de Oxford se propuso buscar, seriamente, la santidad cristiana. Se distinguieron por sus prcticas metdicas de piedad religiosa y de caridad a los presos y necesitados. Aglutinador de este grupo, fue el joven docente universitario, John Wesley 9 presbtero de la Iglesia Anglicana. Este movimiento alcanz un grado de importancia muy signifcativo. Su incidencia se entendi ms all del nmero de afliados, a travs de las escuelas dominicales y sobre todo porque ofreci una opcin no slo religiosa, sino tambin social.El gran movimiento metodista, sin embargo, no comenz sino despus que Wesley dejara su residencia en Oxford para ir a Norteamrica como misionero y regresara a establecerse en Londres. La fe que Wesley no haba podido comunicar efcazmente antes de su experiencia en Al-dersgate, ahora se expresaba con conviccin y poder. En este punto, es necesario sealar que Wesley insisti siempre en la fe como expe-riencia. No como experiencia emocional sino como experiencia de vida, es decir, la manera en que uno vive. Este fue el comienzo de las Sociedades Unidas, las que impulsadas con extraordinaria energa por J. Wesley, comenzaron a multiplicarse rpidamente en Gran Bretaa.As lleg el metodismo a constituirse en un movimiento poderoso, transformador de la vida toda de Inglaterra. En el siglo XIX una mayo-ra de los metodistas ingleses eran gente de origen campesino y de obreros industriales en su mayor parte, imbuidos por su fe evanglica UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010que les proporcionaba un nuevo sentido de la dignidad humana, y el consecuente derecho a la igualdad de oportunidades para una vida plenamente humana, trabajaron pacfcamente por las reformas legislativas conducentes a una mayor justicia social. El East End 10 era la segunda capilla del metodismo en Londres. De Gran Bretaa el metodismo pas a las colonias inglesas en Nor-teamrica, empezando en 1765, por la migracin de miembros de las Sociedades, estableciendo puntos de predicacin y organizando sociedades que luego formaban en circuitos. En la nueva nacin ameri-cana el metodismo logr un desarrollo extraordinario, cubriendo todo el territorio. Junto con su crecimiento dentro del pas, el ao 1819 la Iglesia Metodista de los Estados Unidos inici un formidable programa de accin misionera al extranjero, que habra de llevar al metodismo americano a ms de 50 pases en todos los continentes.Un aspecto distintivo de los primeros momentos del metodismo era su preocupacin por el aumento del nmero de pobres. A travs de su vida Wesley se identifc hasta tal punto con ellos que llegar a decir: amor de y por los pobres; en muchos de ellos encuentro la tolerancia, puras puros, genuinos, la locura y la afectacin y no la corrupcin espiritual que la abundancia material trae. Wesley exigi que sus seguidores visitaran al enfermo y al indigente y dedicaran sus esfuerzos a aliviarlos. La preocupacin social del metodismo fue ms all de socorrer con limosna. Se anim a la gente ms favorecida a dar prstamos y empleos. El metodismo tambin trabaj activamente en la fundacin de dispensarios, de orfanatos y en proporcionar caridad mdica. El visitar de la prisin era otra parte importante, particular-mente a los condenados a muerte.Muchas capillas metodistas, antes de fn de siglo tenan escuelas dominicales asociadas a ellas, en un momento en que la disposicin del estado para la educacin era inexistente. El logro de metodismo era an ms impresionante cuando se considera el hecho de que la mayora de sus miembros pertenecan a las capas ms bajas de la sociedad. El gran nfasis fue puesto en la educacin, les llev en 1838 a establecer un Comit de educacin para supervisar la poltica nacional en la iglesia. Entre 1886 y 1900 en ausencia de un sistema de bienestar del Estado, este movimiento religioso hicieron mucho para aliviar los peores efectos de la pobreza. orgenes deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLEn el plano del sector laico, los cristianos socialistas, entre los que podemos resaltar a F. Denison Maurice 11 y a Robert Owen 12 pro-curaron conferir a la religin cristiana un tinte socialista. Presentan el cristianismo como defensor de los intereses de los trabajadores y como medio de liberacin de todas las calamidades sociales. Surgieron en las dcadas 1830 y 1840. Su misin consista en luchar contra el movimiento revolucionario, conciliando a las clases enfrentadas. Se encuentra estrechamente vinculado al reformismo. En sus escritos F. Denison Maurice declara que la poltica y la religin son inseparables y propone la incorporacin de las ideas de Robert Owen a la educacin. De hecho fue la reforma de la educacin en las que este socialista cristiano concentr todos sus esfuerzos.Por su parte, la Fabian Society se funda en Londres en 1884, y llega a aglutinar elementos de distinta procedencia socialista. Como se conoce por numerosos estudios, el adjetivo fabiano hace referencia a Quinto Fabio Massimo, basndose en la hipottica analoga entre la actitud del general y hombre poltico romano y las del grupo: paciente espera de los momentos oportunos para la realizacin de la meta. La Fabian Society es considerada, en primer lugar, un movimiento in-telectual, que en el ao de su creacin incorpor a personalidades de la poca de la talla de George Bernard Shaw (1856-1950), por entonces al principio de su carrera como escritor y periodista y a Sidney Webb (1858-1947), funcionario del Ministerio britnico de las Colonias. Shaw y sobre todo S. Webb y Beatriz Potter (1858-1943), con la cual se casar Webb en 1892; por la relevancia de sus aportaciones intelectuales y por la dedicacin a la causa fabianista, detentarn prcticamente su liderazgo hasta 1940. Desde el principio la Sociedad emprende una intensa labor propagan-dstica mediante conferencias y otras actividades, mientras se perflan las seas de identidad del socialismo. Defnitivamente la defnicin de sus ideas tiene lugar en 1889. Los fabianistas presentaban al socialismo como fundado no sobre las especulaciones de un flsofo alemn, sino sobre la natural evolucin de las ciencias econmicas y as era enseada por los profesores ingleses ms acreditados. El socialismo no era ms que la siguiente fase del desarrollo de la sociedad, fase a su vez inevitable dados los cambios subsiguientes a la revolucin industrial del siglo XVIII. UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los fabianistas, se consideraban herederos del radicalismo britnico. Entendan que del utilitarismo de Jeremy Bentham (1718-1832) 13 y de James Mill (1773-1836) se llegara a las propuestas de John Stuart Mill (1806-1873). Vean en el utilitarismo, (por su creencia en la utilidad individual, su crtica a los conceptos del derecho natural, sus vnculos histricos y las obligaciones polticas, su lucha contra la propiedad privada, y su apuesta por la revalorizacin del papel del Estado), un promotor de bienestar pblico. Segn Sidney Webb: () los fabianis-tas no estamos a la espera de repentinos palingnesis imaginados por los utpicos y por los revolucionarios sino que (...) impulsan solamente la adopcin creciente de un principio de organizacin social que el mundo descubri como el desenlace inevitable de la democracia y de la revolucin industrial. De hecho una primera faceta social que llam su atencin fue el tema de la extensin de la pobreza. Atribuyeron una particular importan-cia a la municipalizacin, entendidas como formas ms fexibles de administracin de la realidad cotidiana y perflan la fsonoma de la instruccin pblica inglesa. En 1895 a iniciativa de S. Webb se dota de un instituto parauniversitario, la London School of Economics and Social Sciences. En el periodo de entre guerra, lo que se considera la segunda generacin de fabianos cuenta entre sus miembros con R..H. Tawney 14 entre otros importantes escritores, que tuvieron una gran in-fuencia en el pensamiento social democrtico. La victoria laborista de 1945 entrega a los fabianistas importantes responsabilidades polticas. En 1951 la fsonoma, del Welfare State britnico est, prcticamente, defnida o en vas de realizacin: poltica de pleno empleo, control de los alquileres y los precios, amplios poderes de expropiacin por utilidad pblica, ensanchamiento de los servicios sociales y reforma de la instruccin pblica entre otros. 15 El movimiento cartista britnico nace en 1832 aglutinando dos expe-riencias organizativas de la clase obrera: la Gran Liga del Norte y la Asociacin Obrera de Londres fundadas por W. Lovett 16 . Entre sus aspiraciones teleolgicas se resalta la emancipacin poltica del prole-tariado. Al tiempo de su creacin sus postulados quedaron recogidos en lo que se conoci como Carta del pueblo de ah la denominacin del movimiento. Como puede deducirse de sus planteamientos sus esfuerzos estaban dirigidos, fundamentalmente, a la remocin de las difcultades polticas con que se obstaculizaba el acceso a la poltica orgenes deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLde los obreros, la presencia del sufragio restringido a los censos de fortuna para los candidatos al Parlamento. Despus de intentos fallidos, en julio de 1840 el movimiento acab confgurndose como un ver-dadero partido poltico obrero. Para la cuestin que aqu nos convoca diremos que el cartismo, a pesar de su derrota relativa logr mantener sus esfuerzos en lo relativo a reformas de carcter laboral: reduccin de la jornada de trabajo sin aceptar una disminucin de salario y su empeo en organizar sindicatos de defensa de sus reivindicaciones. Despus de 1848 el movimiento obrero ingls se redujo a esta lucha sindical, a las tradeuniones y el mutualismo como forma de ayuda mutua para hacer efectiva la confrontacin con la patronal y hacer frente a las contingencias laborales totalmente desprotegidas.El desarrollo del movimiento feminista, en lo que respecta a sus esfuerzos por el voto femenino fue fruto de lo que la mayora de los historiadores denominan segunda revolucin industrial en la dcada de 1870. Es decir los cambios polticos econmicos y sociales en los pases ms desarrollados. En Gran Bretaa a principios del siglo XX aproximadamente un 70% de las mujeres solteras, entre 20 y 45 aos tena un trabajo remunerado. Otro elemento clave lo constituy la incorporacin de la mujer, como fuerza de trabajo, sustitutiva durante la Primera Guerra Mundial. La conciencia de su valor social alent sus reivindicaciones del derecho al sufragio. Entre sus principales objetivos se resaltan: el derecho al voto, la mejora de la educacin, la capaci-tacin profesional y la apertura de nuevos horizontes. Se entenda que la clave para superar la subordinacin femenina era el acceso a la educacin. No obstante, los movimientos feministas y sufragistas estuvieron integrados por mujeres de procedencia burguesa. A pesar de que sus planteamientos eran interclasistas, sus ideas no lograron tener una amplia repercusin en los ambientes obreros, incluso los pro-pios idelogos del primer movimiento obrero mantuvieron posturas contradictorias respectos a la igualdad de derechos de la mujer. Por su parte, el movimiento feminista en Estados Unidos se consolid rpidamente en consonancia con las condiciones socio polticas y econmicas que les eran propias. Partiendo de un sistema poltico te-ricamente democrtico, el feminismo naci ligado a los movimientos protestantes de reforma religiosa que propugnaban una regeneracin moral de la sociedad y a la abolicin de todo tipo de esclavismo. La importante participacin femenina en los movimientos humanitarios UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010ayud a la rpida concienciacin de las analogas entre los esclavos sin derechos y las mujeres. Las prcticas protestantes promovan la lectura favoreciendo el acceso de las mujeres a niveles de alfabetizacin. El primer documento colectivo del feminismo norteamericano recono-cido lo fue en una capilla metodista del estado de Nueva York.No podemos fnalizar este recorrido por el plano de las estructuras laicas sin hacer referencia a los movimientos de caridad organizada, aparecidas en el contexto anglosajn como una alternativa al sistema de caridad imperante en este momento histrico, derivado de las estructuras de accin social prescritas por las normas legales al uso. Nos estamos refriendo, como es bien sabido a la Charity Organizacin Society. Fuente reconocida de eclosin de un pensar y sobre todo un hacer social claramente precursor del trabajo social. Espacio de referencia directo o indirecto de sus primeras manifestaciones profe-sionales y disciplinares.No pretendemos realizar un anlisis exhaustivo de la caridad anglo-sajona. Sirva, para el caso que nos ocupa, decir que este movimiento se presenta, en origen, como heterogneo, en su composicin, objetivos y miembros y asistemtico en sus actuaciones, activista y flantrpi-co/caritativo, en su flosofa. Todo esto es fruto del fermento inoculado por la riqueza ideolgica del momento y al pairo de la poltica tradi-cional de pobres inglesa. De entre estos esfuerzos surge, con fuerza innovadora en las formas, la COS, donde el trabajo social descubre el eje axilar de su ramifcacin posterior. Por su especifcidad histrica y sus aportaciones singulares pasamos a tomarla como referencia, en lo que sigue. Rescataremos lo que supuso como confguradora terica de la disciplina y sistematizadora de metodologas para la prctica del trabajo social en ciernes.Los precursores, de la disciplina, destacaron por sus esfuerzos en la aplicacin, de las teoras de Thomas Chalmers 17 .El profesor Manuel Moix (1991) 18 en sus importantes esfuerzos re-copiladores nos informa de que en el origen de los planteamientos de T. Chalmers est la ayuda vecinal puesta en prctica a principios del diecinueve. Se caracteriz por intentar organizar el socorro de los necesitados, mediante la individualizacin del problema de la pobreza y la coordinacin sistemtica de esfuerzos y recursos, y sobre la base de su administracin austera y efcaz, combinando todo ello, con la orgenes deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLcreencia, propia de la poca, de que se conseguira tambin mejorar el carcter de los benefciarios Para ello, consideraba que la atencin de los pobres requera de un proceso de dos pasos: a) indagar cuida-dosamente sobre la situacin de pobreza, y b) motivar a los vecinos y familia para hacerse cargo del pobre si no fuera posible su autono-ma, de ser necesario acudir a las familias ricas, para el sustento de los pobres y, como ltima solucin, buscar la ayuda de los feles. As, una forma organizada de atencin a las necesidades, comienza a elaborar sus principios axiolgicos, tericos y metodolgicos.Sus ejes axiolgicos los podemos resumir en los siguientes: a) ninguna obra de caridad es completa, si no coloca a la persona benefciaria en una situacin de autodependencia; b) haba que ejercer todos los medios de presin posibles sobre el individuo, para forzarles a ser autodependientes. Las armas que deban usarse eran, entre otras: el miedo a la extrema pobreza, el sentimiento de vergenza, la infuencia de los parientes, la amenaza de perder el derecho al voto si se reciba socorro; c) el cuidado de los jvenes y de los ancianos, la ayuda en la enfermedad y en la difcultad deba ser soportadas, en lo posible, por la familia; d) el socorro, para producir cura debera ser adecuado en calidad y cantidad19 .Pero, la flosofa de la organizacin inglesa no slo tena una connota-cin moral, sino tambin una idea poltica; entenda el intervencionis-mo estatal como pervertidor ya que inhiba la capacidad de la persona para hacerse a s misma. En esta lnea, se opona a que se extendiera la benefcencia pblica y apoyaba la idea de que deba reducirse la cantidad que el gobierno inverta en ayudar a los pobres. Alentaba, por el contrario, el crecimiento de las instituciones privadas de caridad, ella misma se presentaba como una organizacin privada, fundada y sostenida con fondos privados. La fnalidad de la COS era persuadir a las organizaciones caritativas que concentraran sus esfuerzos en aque-llos pobres que consideraran en mejor disposicin de aprovechar los recursos de la caridad: ayudar slo a aquellos que podan llegar algn da a mantenerse por s mismos, ya que para el resto ya estaba la dura disciplina carcelaria de las casas de trabajo o workhouses. Sin embargo, la evidencia de que, las causas de la pobreza no podan situarse en el individuo, de forma arbitraria, provoc una fuerte crtica acerca de sus actividades. Coinciden en esta opinin, entre otros, Teresa Rossell 20 y Maza Zorrilla,21 . No obstante, a pesar de ser una organizacin UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010conservadora, desarrolla grandes innovaciones, en el sentido de un acercamiento ms cientfco y profesional a los problemas de pobreza de la poca. Aunque su deseo nunca estuvo en cuestionar el sistema, s destin grandes esfuerzos para la mejora de las condiciones de vida de los trabajadores y de los pobres. Tenemos que enclavar su visin terica, dentro de una corriente, que se acerca ms, al darwinismo social22 que a las propuestas que, cuestionan el papel de la sociedad en las contingencias humanas. La Organizacin se sum a la corriente que visualizaba el objeto de forma dicotmica, as, distingua entre pobres merecedores y los no merecedores. Segn el profesor Manuel Moix (1991) 23 esto empez, tan pronto como se cre la sociedad; empero, diez aos ms tarde la discusin era todava acalorada. Esta manifesta incapacidad para decidir lo que constitua una causa merecedora fue en gran medida responsable de la tremenda diversidad que se dio en la aplicacin de tal concepto. Con la tecnifcacin y organizacin de la ayuda que se pretende fundamentada cientfcamente, fueron apareciendo agentes que prefguraron lo que ms tarde seran los trabajadores sociales. Los visitadores amistosos llamados, en origen, charity workers y friendly visitors. Es comn, en la literatura que recoge, tanto el perfl, como las actitudes iniciales de estos profesionales pioneros, que se resalte por una parte, el predominio del sexo femenino. Las tareas fundamentales de las primeras intervenciones, educacin, la moralidad, el mbito fa-miliar, se entendan ms controlable por las fguras sociales que tenan reservado, el espacio privado para su desenvolvimiento, se ajustaban de manera natural a los papeles que la sociedad del novecento tena adjudicada a las mujeres. No obstante, esta primera proyeccin social, vena dada por la propia dinmica femenina, que iniciaba sus esfuerzos por encontrar un espacio propio en el escenario pblico, y lo hicieron, como veremos, con fuerza. Empero lo anterior, de la lectura de la li-teratura americana se desprende una visin ms equilibrada de este rasgo, que se dice masivo. Podra decirse que los pioneros del trabajo social americano eran tanto hombres como mujeres coincidentes en la necesidad de movilizar el entramado social desigual.Por otra parte, si lo femenino caracterizaba, con matices, los rasgos de una profesin en ciernes, tres cualidades parecen resaltables en orgenes deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLestas profesionales: La sensibilidad social, el rigor en sus tareas y la creatividad en la bsqueda de estrategias para afrontar las situacio-nes de necesidad. El contar con un esquema interventivo ordenado y riguroso les llev a no subestimar la importancia de su trabajo; ello se hace patente en sus anlisis de los problemas. El contacto con la realidad analizada y conocida, les llev a tener clara conciencia de los elementos estructurales que confguraban la desigualdad radical. De las hiptesis explicativas de estos hechos devinieron sus estrategias. La polarizacin social se explicaba desde una segregacin espacial, unos y otros vivan fsicamente y cualitativamente separados. Se vi-sualizaba una ruptura abismal entre un universo a otro; dos culturas, dos cosmovisiones radicalmente opuestas. Iniciaron, pues, la puesta en prctica de una alternativa de reorganizacin comunitaria y se plantearon los settlements, que con el tiempo haban de convertirse en una fuente del trabajo social de grupo.Un segundo elemento revulsivo, de impacto concienciador, les llev a un cambio radical, que les incit a iniciar movimientos de cambio so-cial: la degradacin moral que acompaaba a la pobreza en la mayora de los casos. Citando a Beatrice Webb, Moix lo seala as: los barrios bajos de las grandes ciudades, charcas estancadas de hombres y mu-jeres deteriorados... desmoralizando a sus nios y a todos los recin llegados, y arrastrndose perpetuamente unos a otros hacia abajo... Estos planteamientos establecan un tipo de relacin entre ayudador y ayudado, que a juicio de la profesora Molina Snchez 24 , se sustentaba en la creencia de que, la ayuda debe benefciar ms a quien la recibe que al que la da. Esta mxima de la organizacin tuvo importantsimas repercusiones para la consideracin del objeto de conocimiento y la metodologa de intervencin y le llev a la racionalidad cientfca y humanista de la ayuda. As, se introdujo la racionalidad organizativa. La cooperacin de todos los rganos de benefcencia locales, por medio de una Junta formada por sus representantes que llevara a la sustitucin de los mltiples do-nativos indiscriminados por la incorporacin de un mtodo de trabajo. La metodologa implementada estaba constituida por siguientes ejes: a) La investigacin. En la COS, se codifcaban las tcnicas y guardaban relaciones escritas de los casos; con lo cual se estaba actuando de acuer-do con la fe en el mtodo cientfco en su aplicacin al conocimiento de las condiciones sociales de cada solicitante, a fn de determinar la UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010necesidad y las medidas individuales que se necesitaban en cada caso; b) La programacin de un plan de ayuda con la participacin activa de la persona afectada; c) La adecuacin de la ayuda a la contingencia. La ayuda se entenda como prestacin adecuada y sufciente. La apuesta por la racionalidad y la educacin del pobre, les lleva a negar la ayu-da en el caso de que el objetivo no fuera alcanzable. Deban ayudar a las familias con ropa, alimentos y dinero; pero el mayor inters se concentraba en la infuencia moral que deban ejercer sobre ellos y que se supona deba cambiar la forma de vida del indigente. Para cada caso, se movilizaban los recursos, separadamente, en lugar de atender todos lo casos con un fondo previamente reunido. Con esto podemos decir que el tipo de asistencia que la organizacin aprob era individual, personal, temporal y reformadora; d) el seguimiento de cada caso hasta que fuera resuelto; e) un cdigo deontolgico inci-piente, le lleva a mantener un registro confdencial central, con toda la documentacin utilizada; f) Para la organizacin territorial utiliz el Sistema Elberfeld, que divide a la ciudad en pequeos distritos, cada uno de los cuales era administrado para distribucin de socorros por un grupo de ciudadanos que actuaban como comisin voluntaria; g) un nivel de intervencin: El casework. Perfectamente ligado a su flosofa. La COS sent el precedente de lo que sera el futuro trabajo social de casos. En este sentido, se ocup de los casos de extrema pobreza que se pusieron en su conocimiento.Estos principios bsicos, y su peculiar flosofa, tuvieron una gran acogida y prendieron en el sentir de la poca. Su difusin se mate-rializ en la fundacin de numerosas ramas de la Organizacin, tanto en Londres, como en, otras ciudades inglesas y europeas llegando, incluso, hasta Estados Unidos en 1877 (Bfalo, Nueva York). Aqu recibiotrasdenominaciones:CharityOrganizationMovement (Movimiento para la Organizacin de la Caridad) y Scientifc Charity (Caridad Cientfca)25 .orgenes deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010orgenes deL Trabajo sociaL1Brown,H.P.(1991)Egalitarianismandthegenerationofineguality.Claren-don Press: Oxford (pg. 312) En www.hipatia.uab.es/paseos/2-sociedad/paseo.2.htm2 Chadwick, E. (1800-1890) Reformador sanitario. Escribi sobre las condicio-nes sociales y polticas que le interesaron. Las condiciones de vida de la clase obrera, y la infuencia que el ambiente tena en la salud. Sus escritos atrajeron la atencin de Jeremy Bentham (1748-1832), el flsofo utilitario. Chadwick hizo de secretario de Bentham y fue muy infuenciado por sus ideas flosfcas sobre la reforma judicial. 3 Booth, Ch. (1840-1916) Socilogo britnico Sus incansables investigaciones en el terreno social contribuyeron al conocimiento de los problemas sociales que sufran las clases menos privilegiadas de la sociedad inglesa como consecuencia de la Revolucin Industrial, y en el establecimiento de una metodologa moderna y exhaustiva de la que se sirvi posteriormente la sociologa. Miembro del Partido conservador y defensor de la poltica econmica proteccionista llevada a cabo por Chamberlain, Booth pasa a ser designado consejero privado del Gobierno y miembro de una comisin encargada de estudiar el estado de pobreza de las clases ms bajas inglesas con el fn de elaborar leyes tendentes a mitigar tan penosa condicin. Booth fue nombrado para desempear semejante cometido gracias a la publicacin de su impresionante obra Life and Labour of the People in London (Vida y trabajo de la gente en Londres), elaborada entre los aos 1902 y 1903, cuyos datos sobre las causas, localizacin y grados de pobreza en Londres infuyeron poderosamente para que las autoridades tomaran cartas en el asunto.La obra, en la que Booth cont con la apreciable colaboracin de Beatrice Webb, est dividida en diecisiete volmenes; el estudio se basa en tres reas o temas muy concretos: la pobreza en s misma, la industria y su determinacin en el medio y la infuencia, negativa o positiva, de la religin sobre las clases menos favorecidas y formadas intelectualmente. Booth describi primeramente las condiciones de vida de las diferentes clases sociales que cohabitaban en Londres, para pasar seguidamente a realizar un profundo anlisis para determinar las causas por las que mucha gente caa en los niveles de pobreza tan extremos que se daban. Para ello, Booth utiliz el ejemplo y testimonios directos de 4.076 casos reales a los que entrevist personalmente, distribuidos entre marginados, alcohlicos, parados, enfermos y un largo etctera.Aparte de lo novedoso del tema y de los datos que aport, la importancia de la obra de Booth radic en la metodologa y forma de abordar el estudio que puso en prctica; fue el primero en utilizar lo que se dio en llamar posteriormente entre los socilogos las Social Surveys (encuestas sociales). Estas encuestas sociales, tal como las enfoc Booth, tenan por objeto recoger todos los datos o informacin posibles sobre las condiciones de vida y trabajo de una determinada localidad o estrato de la poblacin, en este caso los ms pobres, a fn de poder preparar posteriormente, una vez que se haba obtenido el conocimiento de la realidad existente, las adecuadas y oportunas medidas de accin social. La metodologa creada por Booth fue continuada hasta hoy por la escuela britnica de la Ciencia Social y la de Londres.NOTASUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLPor ltimo, preocupado Booth por la relacin directa que haba entre la edad avan-zada y los diferentes umbrales de pobreza, defendi un proyecto de pensiones para los ms ancianos que vivan en condiciones extremas de pobreza o bien que gozaban de ingresos peridicos insufcientes para llevar una vida digna. 4 Rowntree J. Y S. (1834- 1925). Padre e hijo. Pertenecientes al movimiento Quaker. J. Rowntree Aunque era empresario, dedic un tiempo considerable al trabajo pblico. Desempe tareas al servicio del comit responsable de dos escuelas de ququeros y enseaba en una escuela dominical para adultos. Rowntree tambin desempe un papel principal en el establecimiento de la biblioteca pblica de York. Infuenciado por los escritos sobre la pobreza de su hijo Benjamin Seebohm Rowntree (1871-1954), J. Rowntree procur mejorar la calidad de vida de sus empleados. Proporcion una biblioteca en la fbrica y la educacin a sus trabajadores menores de diecisiete aos. Emple a un profesional de la asistencia social, un mdico y un dentista para atender a sus trabajadores y estableci un fondo de jubilacin para sus trabajadores. La mayor preocupacin de Rowntree era encontrar formas de reducir la pobreza. En 1863 realiz un estudio estadsti-co que relacionaba crimen y pobreza. Dos aos ms tarde public un segundo estudio, Pauperismo en Inglaterra y Pas de Gales. Desde 1907 fnanci un diario semanal que abogaba por la reforma social. 5 Ruskin, J. (1819-1900) Artista, cientfco, poeta, ecologista, flsofo, e importante crtico del arte de su tiempo. Profesor de arte en Oxford ayud a iniciar el movi-miento de defensa del mediombiente. Se cas en 1848 con Euphemia Chalmers, de la que despus se separ. Posteriomente, Ruskin abandon el protestantismo evanglico. Son famosas sus conferencias sobre economa, arte, y mito sociales y polticos.6 Walvin, J. (1987) Victorian values. Penguin, Londres p. 101. En www.hipatia.uab.es/paseos/2-sociedad/paseo.2.htm7 Mill J. S. (1806-1873) y Harriet Taylor Mill (1807-1856). Entre otras cuestiones, se destacaron por su reivindicacin de la emancipacin femenina. El libro de J. S. Mill aparecido en 1869 fue clave para la expansin e internacionalizacin del movimiento sufragista. Filsofo y economista ingls, principal representante del positivismo utilitarista. Hijo de James Mill, se interes por las ciencias naturales, el derecho, la poltica, la economa y la flosofa. Su obra ms importante es A System of Logic, Ratiocinative and Inductive (2 vols., 1843). Recibi la infuencia de Hume y de otros empiristas ingleses, pero tambin del positivismo francs. Como em-pirista, su teora del conocimiento se apoya en la psicologa asociacionista. Dado que todo conocimiento nos llega por la experiencia, el rigor cientfco ha de tener como objetivo la constante observacin del hecho emprico. El mtodo ser el inductivo: de la observacin de los hechos naturales, a travs de la conexin de los fenmenos, se llega al conocimiento de las leyes por las cuales ellos se rigen. De lo que se trata, en un principio, es de encontrar relaciones causales entre los fenmenos observados; es decir, que de la observacin de un conjunto de datos se pueda concluir una generalizacin causal. Para ello, es necesario encontrar un sistema que permita diferenciar las generalizaciones accidentales (que expresan una mera casualidad) de las llamadas nmicas (del griego nomos, ley); son estas ltimas las que expresan relaciones entre sucesos que no son fruto de la casualidad y, por tanto, las que permiten formular por induccin las leyes de la naturaleza. Sin embargo, el principio de induccin permite generalizar cualquier informacin UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010a partir de las observaciones, sin distinguir si la generalizacin es nmica o acci-dental. Por ello, tal y como anteriormente haba hecho Francis Bacon al formular sus famosas tablas, John Stuart Mill dise un procedimiento que permita establecer sin lugar a dudas esa distincin entre lo causal y lo casual. Mill se preocup tambin de la tica. Bajo la infuencia de J. Bentham, propugna el utilitarismo hedonista: es bueno lo que es til. Puesto que todo hombre busca el placer y la felicidad, la tica debe tender a proporcionar la mayor felicidad al mayor nmero de personas posible. La tica de corte utilitarista no es, pues, una simple defensa del egosmo. En poltica se declara abierto defensor del libera-lismo, y apoya el voto de la mujer y la promocin social de la misma junto con la defensa de sus derechos.8 Elizabeth Gurney Fry (1780-1845). Perteneciente al movimiento quque-ro fue pionera de la reforma de prisiones. Sostena que las jvenes deben tenerunaeducacincompleta.Dedicmuchapartedesutiempoavisi-tar y ayudar a enfermos y pobres. Puso en marcha una escuela dominical Siguiendo los pasos de su madre, comenz a visitar uno de los workhouses para ensear a los hijos de los pobres all internados. Fue considerada, el ngel de la prisin de Newgate. En 1817, organiz un grupo de mujeres en la Asociacin para la mejora de los presos femeninos en Newgate. Este grupo organiz una escuela, y en ella las presas podran coser, hacer punto y vender la mercanca. El trabajo de E. Gurney Fry se extendi ms all de la prisin de Newgate. En 1818, un comit de la Cmara de los Comunes le pidi que atestiguara acerca de las condiciones de la prisin. Trabaj, asimismo en la creacin de sociedades que visitaban los barrios para ayudar a los pobres. En 1827, publicaba un libro llamadoObservations,respectoalsuperintendenceelvisitaryalgobiernode presos femeninos. En este libro, no slo defende la necesidad de la reforma de la prisin sino que abog por dar oportunidades a las mujeres presas condenando abierta y apasionadamente la pena de la muerte. 9 John Wesley nacido en Epworth (Lincolnshire, Reino Unido) el 17 de junio de 1702, y muerto en Londres el 2 de marzo de 1791.Hijo de pastor anglicano, de la iglesia metodista, estudi flologa clsica y flosofa en Oxford.10 East End. Extremo Este de Londres. Refejo del cambio social y econmico de la Inglaterra victoriana e industrial, que acoger las grandes oleadas de la inmi-gracin de Irlanda, Europa del este y Bangladesh. Uno de los distritos ms pobres y problemticos del Londres del XIX. Espacio fsico que atraer la atencin y la puesta en marcha de estrategias de las ms variadas orientaciones religiosas, polticas y sociales que dividieron y defnieron, a la sociedad britnica. Lugar, objeto de numerosos estudios sobre la pobreza, intentos de regulacin de los sistemas de alquileres para los numerosos habitantes de sus tugurios, etc. En Encyclopdia Britannica 2004.11 F. Denison Maurice (1805-1872). Fue educado por su padre e introducido en el puritanismo. Animado por su padre, formul junto a Sir Francis Burdett, Hume y Brougham las reformas sociales que crea necesarias. En 1838 escribi El reino de Cristo donde cuestion que la poltica y la religin fueran inseparables y defenda la idea de que la iglesia deba estar implicada en las reformas sociales. Rechaz el orgenes deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLindividualismo, por su competitividad y egosmo, y sugiri una alternativa socialis-ta a los principios econmicos del laissez faire. Termin siendo atrado por las ideas socialistas y educativas de Robert Owen. Fue partidario del cartismo y despus de que la Cmara de los Comunes rechazara la peticin de este movimiento, en 1848, intentar acoplarlas almovimiento socialista cristiano. 12 Robert Owen (1771-1858). Owen era propietario de las fbricas del textil de Lanark. Sin embargo, Robert Owen no estaba slo interesado en hacer negocio sino que tambin se propuso crear un nuevo tipo de comunidad. Crea frmemente que el carcter de una persona se formaba en contacto con su ambiente, por ello se opona frontalmente a los castigos fsico en escuelas y fbricas y prohibi inmediatamente su uso en sus fbricas. Entre sus primeras medidas estuvo la creacin de una escuela para atender a los menores de la localidad. Redujo el horario de trabajo de los menores y se neg a contratar a los menores de diez aos. En 1815 envi ofertas detalladas al parlamento sobre sus ideas en la reforma de las fbricas. Decepcionado con la respuesta que recibi en Gran Bretaa, Owen se decidi en 1825 a establecer una nueva comunidad en Amrica basada en las ideas socialistas que l haba desarrollado. A partir de ah dedic su tiempo a ayudar a los diversos grupos que promovan reformas: de las fbricas, el sufragio y el desarrollo de las organizaciones sindicales. 13 Jeremy Bentham (1748-1832) Filsofo, jurista, economista y poltico ingls. Tena la clara conviccin de que tanto las leyes como los procedimientos no deberan tender sino a la utilidad de los hombres o al menos de la mayora. Bentham, tras obtener la licenciatura en Oxford en 1763, ejerci durante algn tiempo la profesin de abogado, pero muy pronto la abandon disgustado por aquel legalismo oscuro e irracional. Entonces, comenz a escribir de forma crtica sobre aquel sistema y a plantear las posibles soluciones. A mediados de los aos ochenta del siglo XVIII se traslad al Continente, donde visit Francia y Rusia. Vol-vi a Inglaterra en 1788 y continu escribiendo, una actividad que no abandon desde su juventud. En 1792, la Repblica Francesa reconoci sus aportaciones al pensamiento ilustrado y revolucionario al concederle el titulo de ciudadano. Tuvo una gran infuencia sobre el pensamiento de Stuart Mill y fue amigo del padre de ste, el flsofo James Mill.Bentham desarroll un trabajo terico que sent las bases del utilitarismo social y econmico que plasm en sus obras The Rationale of Reward (La racionalidad de la recompensa) y The Rationale of Punishment (La racionalidad del castigo). Para Bentham, el nico principio capaz de explicar el nacimiento de la sociedad y de las leyes es el de la utilidad comn, que se resume en esta frase: la mxima felicidad para el mayor nmero posible de personas. Sobre esta base critic la legislacin inglesa, fundamentada en principios abstractos y que se consideran inmutables. Si las leyes deben buscar la utilidad de los hombres, deben basarse en hechos y motivos que guen las acciones humanas. Por lo tanto, deben ser mutables para promover la utilidad individual y colectiva. Aquello que el hombre no tiene inters en hacer tampoco lo asumir como un deber.Sobre el principio de lo til, Bentham fundamentar tambin la moral, con el propsito de hacer de ella una ciencia exacta. Los mviles de la accin y del juicio son el placer y el dolor. Lo justo e injusto no depende de los motivos de la accin, sino de las consecuencias que de ella se derivan. El problema est en saber calcular con anticipacin las consecuencias de las acciones. Bentham consider que poda UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010calcularlas en una tabla en la que consign las caractersticas que hacen deseable un placer. stas son: intensidad, duracin, certeza, proximidad, fecundidad, pureza y extensin. El principio general de esta tabla es que los placeres ventajosos para el individuo promueven tambin la felicidad de la sociedad. Sus obras ms importantes son: A Fragment on Government (1776), Defence of Usury (1787), Introduction to the Principles of Morals and Legislation (1789), A Table of Springs of Action (1817), Essai sur la tactique des asambles lgislatives (1815), una Crestomata o seleccin de diversos fragmentos flosfcos (1816), Deontology or the Science of Morality.14 R. H. Tawney (1880-1962) Historiador. Trabaja en el Toynbee House. Figura importante en la reconstruccin de la educacin.15 Para ms informacin, ver: www.iespana.es/revista-arbil/(58)fabi.htm... y en www.wikipedia.org/wiki/fabia16 W. Lovett (1800-1877) Perteneciente al movimiento cartista, funda en 1836 la Asociacin Obrera de Londres y la Gran Liga del Norte. Fue un frme partidario de las ideas de Roberto Owen. Organiz a los miembros de la Asociacin Obrera a partir del modelo metodista e imprimi sus tareas de una fuerte orientacin educativa. Lovett y Collins pusieron en marcha escuelas pblicas para los obreros. All se imparta educacin para menores, primaria y secundaria, y en las tardes para los adultos. Asimismo se celebraban conferencias pblicas en ciencia fsica, moral y poltica; lecturas, debates, bailes y conciertos. Estos establecimientos contaban, tambin con bibliotecas que contaban con obras sobre poltica, ciencia e historia. Estas bibliotecas contaban con un orientador literario. El establecimiento principal fue el Holborn House, Londres. Fue instalado en una vieja capilla metodista. 17 Thomas Chalmers (1780-1847) Clrigo y economista escocs. Fue profesor de flosofa moral en la Universidad de Saint Andrews y se uni al cisma de la iglesia de Escocia, ocurrido en 1843. Chalmers fue admitido como estudiante en la Universidad de Saint Andrews en 1792 y en esta institucin escocesa estudi matemticas, flosofa, tica y poltica. Al fnalizar sus estudios en Saint Andrews, se traslad a la Universidad de Edimburgo, donde ampli sus conocimientos matemticos. En 1802 fue destinado a la parroquia de Kilmany, lo que le permiti ejercer como profesor asistente de matemticas. Dotado de una gran oratoria, tena una importante audiencia tanto en su actividad acadmica como eclesistica e incluso tenan gran aceptacin sus obras sobre los sistemas de benefcencia para los pobres. En 1815 fue destinado a Glasgow, ciudad entonces desbordada por la miseria. Profundamente afectado por las condiciones sociales en las que viva la mayora de la poblacin, Chalmers se implic activamente en las actividades de caridad, con el fn de auxiliar a los necesitados. Desarroll tambin una intensa actividad literaria, desde la que defendi un sistema para la proteccin de los desfavorecidos. En 1823 accedi a la plaza de catedrtico de flosofa moral en la Universidad de Saint Andrews y en 1828 dej el cargo para asumir la ctedra de teologa en la de Edimburgo, donde imparti clases hasta 1843. Ese mismo ao, como consecuencia del veto ejercido por la jerarqua de la Iglesia de Escocia sobre el nombramiento de los prrocos, medio millar de eclesisticos, entre los que se contaba Chalmers, se escindieron y fundaron la Iglesia Libre de Escocia. En 1834 fue nombrado miembro de la Royal Society y miembro correspondiente del Instituto de Francia. Entre sus principales obras destacan: Economa civil y cristiana de las grandes ciudades; La economa poltica considerada con relacin orgenes deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLal estado moral y al porvenir moral de la sociedad; y Suprema importancia de la moral para una buena organizacin de la sociedad.18 Moix Martnez, M. (1991) Introduccin al Trabajo Social. Trivium: Madrid. (op. cit. pp. 48-49).19 (op.cit p. 83).20 Rossell, T. (1992) La formacin para el Trabajo Social. En Actas del VII Congreso Estatal de Escuelas de Trabajo Social. Barcelona pp. 17-1821 Maza Zorrilla, E. (1987) Pobreza y Asistencia Social en Espaa, siglos XVI al XX Universidad de Valladolid. Valladolid pgina 13722 Las concepciones sociales de H. Spencer deben entenderse dentro de un marco general flosfco. El de una gran sntesis realizada por su autor para integrar los conocimientos de su tiempo en un todo signifcativo y coherente. Con la ayuda de la analoga organicista, la sociedad se entiende como naturaleza orgnica sui generis, que presenta un conjunto de elementos comunes con los organismos vivos, pero que tambin tiene elementos que no se concentran en ello y que la hacen irreductible a la nocin orgnica estricta. Esto le permite interpretar la marcha de la historia y de los hechos sociales en trminos naturalistas, sin recurrir a una providencia teleolgica. A primera vista puede parecer que el organicismo es una actitud incompatible con el individualismo, que propugna, a causa de su nfasis en las leyes que rigen a la especie. No obstante, Spencer cree que la especie humana impone un tipo de evolucin que proviene de la forzada cooperacin de las comunidades en origen, militares, y desemboca en la cooperacin libre y sin coaccin fsica de las sociedades industriales, no regidas por el mandato, sino por el contrato. As pues, es el de Spencer un individualismo liberal aplicado ha una sociedad industrial y capitalista, en su fase ms competitiva. Dentro de esta visin evolucionista Herbert Spencer sostiene la tradicin liberal antiestatista: la dura experiencia del devenir humano alienta en la lnea de la sociedad liberal, como la menos perjudicial de todas. Las doctrinas de Darwin sobre las Ciencias Sociales completaron y confguraron, defnitivamente, la inspiracin para explicar cientfcamente los fenmenos sociales, las ideas spencernianas y darwinistas eclosionaron en el darwinismo social, que impregn el rea cultural y cientfca de las sociedades avanzadas del momento. Con ello, se impona dos principios bsicos: la no intervencin, la autodeterminacin y la neutralidad valorativa. No obstante, lo que se predica entra en colisin dramtica con el contexto. Su intencin cientfca cae de esta forma en el terreno de lo ideolgico, bastante lejos de su pretendida asepsia.23 Op. cit.24 Molina Snchez, M. V. (1994 a) Las enseanzas de trabajo social en Espaa 1932-1983. Estudio socioeducativo: Universidad Pontifcia de Comillas. Madrid. Pgina 2825 Se puede ver, de forma detallada, esta evolucin estadounidense en el libro: Desde lo ms bajo de Bremner, R. H. (1993) Ministerio de Trabajo y Seguridad Social: Madrid pp. 71-93. UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010orgenes deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLFoToGRaFaS De La PoCaMayoresInmigrantesTrabajadores Sociales de un Settle-mentGrupo de nios Taller de costuraNios en una escuela con caren- Nios en un orfanato Vivienda insalubreUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Settlement house Eli Butes en ChicagoNios a la salida de un Settlement HouseNios trabajadoresFoTograFas de La PocaImagen de la pobrezaSettlemente House de Northwestern UniversityReparto de alimentos Talleres de costura Sesin de lectura en el Settlement House Eli ButesUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLPioneros del Trabajo SocialUNIVERSIDAD DE HUELVA 20101 Precedentes en la Historia de la Accin SocialUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010el rea de incidencia del Limosnero es el mundo de los desheredados, los menesterosos, aquellos que manifestan carencias en cualquier orden de cosas dentro de la sociedad a la que pertene-cen. En el siglo XV el aparato poltico y administrativo del estado medieval, tanto en el Reino de Castilla como en el resto de los pases europeos, no incluye resortes efcaces para la atencin de los infradotados o desposedos de la sociedad. Tampoco puede decirse que estas funciones se consideraran como propias de la competencia estatal, en realidad estaban vinculadas a fnes ca-ritativos de las instituciones eclesisticas. El monarca, en este caso la Reina, es considerada como protectora natural de sus sbditos encarnando a la vez la representacin del reino y del pueblo, el poder econmico y poltico, y el espritu altamente piadoso y caritativo.El ofcio de limosnero (el que recoge limosnas y las distribuye) institucionaliza al mismo tiempo la regia virtud caritativa y el soporte instrumental ofcial de la asistencia pblico-benfca. Los destinatarios de las limosnas eran las personas que estaban bajo la indigencia y la marginalidad, amplio sector de la poblacin que a su vez albergaba una diversa tipologa difcil de clasifcar. De modo muy general y con riesgo de imprecisiones puede estructurarse conforme a los siguientes estados carenciales: dinero, alimentacin, vestido, calzado, vivienda, trabajo, asistencia, medicinas, compaa y proteccin. Es esa multitud harapienta compuesta de pobres, mseros, mendigos, enfermos, tullidos, locos, cojos, mudos, ciegos, leprosos, cautivos, moros, extranjeros, judos, mu-sulmanes, excomulgados, hurfanos, viejos, viudas, desertores, homicidas, pcaros la que compone el grueso de los personajes del Limosnero. En los continuos desplazamientos de la comitiva real entre Crdoba, Santiago y Zaragoza, una multitud de menesterosos llenaban los salones de los albergues reales en cada ciudad y era all precisamente donde los agentes de la regia munifcencia ofrecan el auxilio a los indigentes.A.C.P.eL LImoSNeRo De ISaBeL La CaTLICa[1]El libro del limosnero de Isabel la Catlica [Ed. facs.]Madrid : Ministerio de Asuntos Sociales, 1989 2 v. ; 31 cm.Obra cedida por: Universidad de Huelva. BibliotecaUNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLUNIVERSIDAD DE HUELVA 20101492-1540JUaN LUIS VIVeSBIoGRaFaHablar de Juan Luis Vives supone acercarnos a una de las fguras ms importantes del Renacimiento, cuyo pensamiento aporta nuevas ideas al campo de las Humanidades, la Pedagoga y la Filosofa, y Accin Social entre otras.Nace en Valencia, el 6 de Marzo de 1492. Hijo de padre noble y origen judo, Juan Luis toma contacto con el mundo de las letras en el Estudio General en Valencia. En 1509 emigra a Pars, huyendo de las persecu-ciones de la Inquisicin y comienza Humanidades en la Universidad de la Sorbona. Ms tarde, en 1512, viajar a Brujas donde conocer a Bernardo Valldura, casndose en 1524 con su hija Margarita.En 1515 conoce en Brujas a Toms Moro forjndose entre ellos una gran amistad, proporcionndole ste la proteccin de Catalina de Aragn. Dos aos despus se encargar de la formacin de Guillermo de Croy nombrado despus Obispo de Cambray y Cardenal y Arzobispo de Toledo.En 1519 comienza su carrera docente en la Universidad de Lovaina y en 1522 es propuesto para desempear la ctedra que Nebrija haba dejado tras su muerte. Sin embargo, Vives renuncia a ella y un ao despus decide trasladarse a Inglaterra para impartir clases en la Uni-versidad de Oxford pero esta etapa termina en 1528 debido a la crisis matrimonial de Enrique VIII, y Vives regresa a Brujas donde continua escribiendo y entregado al estudio. Muere el 6 de mayo de 1540.Vives es consideradopor sus numerosas obras como uno de los grandes humanistas cristianos cuya lnea de trabajo estuvo centra-da en renovar la escolstica de la poca mediante nuevos mtodos educativos. Sus teoras e innovadoras concepciones psicolgicas se recogen en 1519 en una serie de escritos contra los falsos dialcticos parisinos y en el tratado De anima et vita. Este planteamiento tendr, sin duda, grandes repercusiones.Su primera obra Christi Iesus Triumphus data del ao 1514 donde se aprecia la profunda fe que marca la personalidad del autor y que expresa los honores que se deben a Cristo y que en la Roma pagana se otorgaban al vencedor.UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010Los Pioneros deL Trabajo sociaLHay que destacar, adems de su fe, el alto sentido moral que le carac-teriza y que aparece en su ya clsica Institutio faeminae Christianae de 1523, dedicada a Catalina de Aragn, donde va trazando el perfl de la mujer ideal.Por otro lado, la situacin histrica de su tiempo imprime carcter en Vives quien lejos de quedar impasible se enfrenta y toma posicin ante los problemas de la Europa del XVI. Su profundo sentido social aparece en De subventione pauperum fechada en 1525, donde analiza la situacin de los marginados de su tiempo buscando soluciones en las Instituciones pblicas por lo que algunos le consideran el primer socialista.El libro consta de dos partes. En la primera, expone los principios ge-nerales del ejercicio de la caridad, defne la necesidad de hacer el bien como condicin de la existencia de la sociedad, explica el origen de la pobreza atribuyndolo al desorden proveniente del Pecado Original y exhorta a los pobres a conformarse con su pobreza. Por el contrario en la segunda parte presenta un programa detallado de la reforma de la asistencia social ciudadana.Otro aspecto que preocupa a Vives y que retomar en 1528 al retornar a Brujas es el tema de la paz refejndolo en su obra De concordia et discordia in humano genere dirigida a Carlos V. A esta obra le seguir De pacifcatione.Por ltimo, cabe resaltar que como buen pedagogo pas su vida aprendiendo y enseando, quedando recogida su vocacin de edu-cador a lo largo de su obra. Las ms relevantes en este sentido son De trascendis disciplinis, De anima et vita anteriormente mencionada y De veritate fdei christianae concluida antes de morir.Noobstante,laobraporexcelenciaesDesubventionepauperum pues, adems de dejar una profunda huella, sigue siendo hoy lectura obligada para quienes tratan de conocer el pensamiento de Vives en el marco de lo social.A.G.M.UNIVERSIDAD DE HUELVA 2010[2]Vives, Juan Luis De subventione pauperum. EspaolTratado del socorro de los pobres / compuesto en latn por el doctor Juan Luis Vives ; traducido en castellano por el Dr. Juan de Gonzalo Nieto IvarraValencia : Vicent Garca, 1992 XXXIV, VI, 250 p. ; 24 cm.Reprod. facs. de la ed. de Valencia : Benito Monfort, 1781Obra cedida por: Coleccin particulara lo largo de esta magnfca obra encontramos una disertacin sobre las causas de la pobreza y los efectos negativos que conlleva, la necesidad de la caridad y los benefcios de cumplir con ella cristianamente. Realiza, adems, una propuesta de reforma donde las Instituciones Pblicas de la poca deben participar hacindose responsable de la situacin de marginacin existente. Sin duda, Vives, adelanta con esta propuesta los acontecimientos venideros respecto a la intervencin del Estado. Podemos decir as que estas pginas estn cargadas de vigente actualidad.A.G.M.BIBLIoGRaFaFideler, P. a. Christian humanism and poor law reform in early Tudor England. Societas, 1974, vol. 4, n. 4, p. 269-285Garcs Ferrer, Jordi Vives y la moderna administracin pblica. Revista de Servicios Sociales y Poltica Social, 1994, n. 34, p. 93-99michielse, H. C. m. Policing the poor: J. L. Vives and th