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* Doctora en ciencia social con especialidad en sociología por El Colegio de México. [105] Este capítulo analiza cómo la interacción de un evento transición como la migración internacional.interfiere con el proceso de tránsito hacia la vida adulta. Aborda la relación entre eventosetapas de la vidamigración, así como la me diaciónque ejerce el contexto en la toma de decisiones y en el curso mismo de la acción. El objetivo final es contribuir a la comprensión de la complejización de los itinerarios que én la actualidad conducen a la adultez, un proceso que es mediado y modificado por otros eventos y tránsitos, como la migración internacional. La migración es concebida como un proceso que implica distintos momentos, en donde el curso de vida de las perso nas, entre otros factores, interviene en la modelación de cada · unode ellos. Comotodo evento, tiene un impacto diferencial en los individuos de acuerdo con la etapa de la vida en la que tenga lugar. Se parte de la premisa de que la sucesión de eventos previos condiciona la experimentación delcruce INTRODUCCIÓN LUCIANA GANDINI* MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA: LA RELACIÓN ENTRE EL CRUCE DE FRONTERAS INTERNACIONALES Y EL PROCESO HACIA LA ADULTEZ

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* Doctora en ciencia social con especialidad en sociología por El Colegio de México.

[105]

Este capítulo analiza cómo la interacción de un evento­ transición como la migración internacional.interfiere con el proceso de tránsito hacia la vida adulta. Aborda la relación entre eventos­etapas de la vida­migración, así como la me­ diación que ejerce el contexto en la toma de decisiones y en el curso mismo de la acción. El objetivo final es contribuir a la comprensión de la complejización de los itinerarios que én la actualidad conducen a la adultez, un proceso que es mediado y modificado por otros eventos y tránsitos, como la migración internacional.

La migración es concebida como un proceso que implica distintos momentos, en donde el curso de vida de las perso­ nas, entre otros factores, interviene en la modelación de cada

· uno de ellos. Como todo evento, tiene un impacto diferencial en los individuos de acuerdo con la etapa de la vida en la que tenga lugar. Se parte de la premisa de que la sucesión de eventos previos condiciona la experimentación delcruce

INTRODUCCIÓN

LUCIANA GANDINI*

MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA: LA RELACIÓN ENTRE EL CRUCE

DE FRONTERAS INTERNACIONALES Y EL PROCESO HACIA LA ADULTEZ

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En las últimas cuatro décadas, la perspectiva de curso de viaa (Elder, 1974, 1998; Elder, Johnson y Crosnoe, 2003; Elder y Giele, 2009) ha sido adoptada, particularmente por estudios sociodemográficos, como un enfoque atractivo y fructífero en la medida en que propone un abordaje con­ ceptual que posibilita afrontar el problema macro­micro en la investigación social. A pesar de que desde entonces existen trabajos que abordan temáticas relacionadas con la migración y la integración de los migrantes desde esta óptica, su desarrollo es aún limitado (Wingens et al., 2011). Su adscripción ofrece una opción analítica atractiva que permite rescatar la temporalidad del proyecto migratorio y la complejidad de las esferas que se entrelazan en el mismo. Los eventos y transiciones que confluyen con la migración van dando vida al entretejido de las propias trayectorias y nutriendo de sentido a dicho proyecto. ­· ­Aunque el vínculo analítico entre migración y curso de vida todavía tiene mucho terreno por explorar, los orígenes de sus antecedentes pueden rastrearse en algunos estudios

LA MIGRACIÓN Y EL PROCESO DE TRANSICIÓN HACIA LA VIDAADULTA

laboral de los migrantes argentinos en los dos contextos de recepción mencionados.

El presente capítulo se estructura en seis secciones. Comienza con una reflexión sobre el proceso de paso hacia la adultez y el papel de la migración internacional. Segui­ damente, se presenta una contextualización del caso que se estudia: la migración de Argentina en los albores del si­ glo xxr. Las secciones tres y cuatro analizan la incidencia de la migración en los dos grupos de análisis: CVI y CVM; y la quinta sección reflexiona sobre la impronta que otorga el contexto. Por último, en las consideraciones finales se r'esaltan los principales hallazgos del trabajo.

MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 107

1 Una primera versión de este trabajo se presentó como ponencia, en el V Congreso de la Asociación Latinoamericana de Población, Mo\ tevideo, Uruguay, del 23 al 26 de octubre de 2012. "

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de fronteras, al tiempo que el periodo en el que éste ocurré incide en la estructuración del curso de vida subsiguiente.

Las reflexiones que se presentan se realizan a partir, del análisis de trayectorias de migrantes argentinos haci~ dos contextos de recepción: Ciudad de México Y Madrid Estas trayectorias corresponden a la oleada de emigración argentina más reciente, que salió huyendo de la crisis que se materializó a fines de 2001. La situación de desventajat acumuladas que culmina en dicha crisis constituye un fenómeno estructural de tal envergadura que potencia r posibilidad de emprender el cruce de fronteras. La migraciói] aparece en el horizonte de posibles eventos a ser experimers tados en el itinerario vital, cuando antes no lo era o se la contemplaba de manera menos generalizada. , 1 La decisión de migrar se encuentra mediada no solo por el tiempo histórico y coyuntural de crisis, sino tambié,~ por la ubicación en determinadas etapas del curso de vid~. En este capítulo se comparan dos grupos analíticos: el p:r mero de ellos conformado por quienes migraron en una etaP.a inicial del curso de la vida ( CVI) y comienzan a exper imentej las transiciones hacia la adultez, de manera que este pr ~ ceso se encuentra en ciernes al momento de emprender el cruce de fronteras internacionales; y el segundo grupo es~a compuesto por quienes emprendieron dicho proceso cqn antelación a migrar, encontrándose en pleno tránsito a la adultez, por lo que pueden ser ubicados en una etapa me· dia de la vida ( CVM).

El presente trabajo se basa en la experiencia investig] tiva realizada para mi tesis doctoral (Gandi~,i, 2012! Y ~i nutre de la misma.1 Mediante la roconstrucción de b1ogi¡a·, fías, en dicho trabajo se estudió el proceso de incorporaciql

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coyuntural de crisis, sino también por la ubicación en dis­ tintas etapas del curso de vida (Mulder, 2003; Mulder y flooimeijer, 1999; Montes de Oca et al., 2011), vinculación que se desprende del análisis de la sucesión de aconteci­ mientos en cada trayectoria de vida, al tiempo que es ex­ puesto verbalmente en prácticamente todos los relatos de los entrevistados en esta investigación. Las repercusiones de un evento o transición en el desarrollo de una persona son contingentes y dependen del momento de la vida por el que se transita (Elder, 2002). De manera que un mismo suceso, como la migración, tiene efectos muy diversos en la vida de quienes lo experimentan según la edad y las circunstancias en las que se encuentre al ocurrir dicho acontecimiento (Blanco, 2O11).

Además de la relación entre eventos determinados y la migración en cada etapa de la vida, ésta también promue­ ve o retrasa la experimentación de otros acontecimientos sucesivos. La migración tiene un impacto diferencial en los individuos dependiendo del momento del curso de vida en el que tenga lugar (timing) (Ryder, 1965). La sucesión de eventos previos condiciona la experimentación del cruce de fronteras, al tiempo que el momento en el que la salida tiene lugar incide en la estructuración del curso de vida subsiguiente (Ariza y Oliveira, 2001).

Además, las diferencias también se expresan en la mane­ ra en que los actores perciben cada etapa de la vida. La forma en que dicho evento es pensado y resignificado se transfor­ ma con el paso del tiempo. Las acciones y sus interpretacio­ nes se ven influenciadas por el curso de la temporalidad, por lo que el sentido otorgado al proyecto migratorio se encuentra permeado por la concomitancia del tiempo social y biográfico, tanto en el momento de ocurrencia como en el periodo en el (ll!e el evento adquiere sentido, aquél en el que se reflexiona sobre el mismo y se puede suministrar una versión narrada (Leclerc­Olive, 1997).

2 A principios del siglo pasado, el trabajo de Thomas y Znaniecllj (2006 (1918­1920]) utiliza un abordaje de curso de vida al analizar a l!i migrantes polacos que llegan a Estados Unidos estudiándo el cambñ social a partir de la relación entre las historias de vida de los migrant1.· y la sociedad de acogida. r

3 La perspectiva de curso de vida surge como una posición crítica a I $

nociones de ciclo de vida individual y familiar, utilizadas en ese traba~ 4 En una etapa más avanzada de la vida, el retiro laboral (Kan, 1999­,

el surgimiento de enfermedades, la viudez (Walters, 2002) y las sepai~ ciones o divorcios incrementan las posibilidades de movilidad (Feijtenj van Ham, 2007; van Ham, 2007).

clásicos sobre migración. 2 En un conocido estudio de Masse~· et al. (1989) se presenta un análisis de la relación de lg,§ etapas del ciclo de vida familiar, la edad y la posibilidsj; de migrar de los miembros de las familias. 3 Los autor~~ encuentran que cuando los hijos crecen, se incorporan ~­ mercado laboral y se independizan del hogar, las necesid ·{. des familiares disminuyen, por lo que la presión económica para migrar también desciende. Aun cuando este trabaj·, etnográfico se abocó al estudio de la emigración en cuat~·~ comunidades mexicanas, la idea de que la migración tien un papel en las estrategias de supervivencia famili~res:if que se encuentra estrechamente relacionada con el ciclo Cl' vida de la familia ha sido extensamente aceptada. . . 'I

De forma general, se ha encontrado que la movilidad residencial suele incrementarse como consecuencia de dete · minados eventos a lo largo del curso de vida (Rossi, 1955~"' algunos de los cuales se han revelado más influyentes pa~a la adopción de la decisión de migrar en relación con el m 1 •

mento de la vida por el que transitan. En particular, pa:t·a los jóvenes y adultos jóvenes que comienzan la formación profesional o terciaria, la movilidad ha sido asociada a l' adquisición de un (primer) trabajo y la formación de unions (Mulder, 2003; Wagner, 1989).4 • ,

La decisión de partir del lugar de residencia habitu '· se encuentra mediada no sólo· por el tiempo histórico.á

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108 DESAFÍOS Y PARADOJAS

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de las trayectorias transicionales y, consecuentemente, su multiplicidad (Stauber y Walther, 2006).

Desde el campo de la sociodernografía se ha estudiado la transición a la adultez a partir de un conjunto de eventos que ocurren por primera vez en la vida de las personas. Los marcadores sociales clásicos de este paso son: la salida del hogar de origen, la salida de la escuela, el ingreso al mercado laboral, la conformación de una unión conyugal y la llega­ da del primer hijo. Desde la perspectiva del curso de vida suele analizarse la temporalidad y el orden de ocurrencia de esos sucesos, la existencia de un modelo normativo y en qué medida los casos de estudio se apartan o no del mismo.

·' Desde esta óptica, la relatividad y ambigüedad que rodea al concepto de juventud responde a .que aun cuando pueden identificarse y analizarse dichos eventos, el pasaje hacia la adultez no es una transición sincronizada y predetermi­ nada, lo que genera que muchas personas se encuentren en­estados difusos de transitoriedad (Calves et al., 2009; Antoine y Lelieve, 2009). Algunos de estos eventos tienen Iugar y otros no ­y es posible que nunca acontezcan­. Otros, incluso si ocurren, pueden suceder de manera parcial o ser reversibles y no necesariamente implicar un pasaje formal 5-un cambio de estatus significativo (Villeneuve­Gokalp, 1994; Bozón, 2002), y dar lugar a múltiples trayectorias de tíl:)e yo­yo (EGRIS, 2001; Gaviria, 2011). ·:i~'. En un esfuerzo por atender a esta "borrosidad" aludida, fa estrategia utilizada para la identificación de jóvenes en distintas etapas del proceso de transformación en adultos se·•basó en un análisis de los eventos clásicos, reconocidos como marcadores socialmente significativos del paso a la adultez y, complementariamente, de los elementos subjetivos que los protagonistas manifiestan acerca de los mismos. La consideración de la voz de los actores sobre dichos eventos permite comprender si su ocurrencia (o falta de la misma) ha sido deseada o no. Atender la subjetividad puede ayudar

MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 111

Diversos eventos del curso de vida son de gran irnpoj] tancia para comprender la migración en las biografías i dividuales (Mulder y Hooimeijer, 1999). En cierta medida porque el curso de vida está moldeado por las institucione. muchos eventos son típicos de determinadas etapas del e . so vital y se extienden a través de los años (Mayer, 2004~ Por tal motivo, la interrelación entre diversos eventoi y la migración se modifica en etapas distintas de la vi.,a de las personas. '~.

Una forma de profundizar en esta relación es a par~:·. del examen de la biografía previa, la transición­ migraciónj la trayectoria posterior, hilando la secuencia de decisionesjl acciones emprendidas a lo largo del proceso de la vida (pqv~ dependency) y la manera en que las dimensiones histórica. contextuales la moldean. En otras palabras, la consideraciój de la etapa del curso de vida en la que tiene lugar la mig~~ ción fomenta una comprensión más exhaustiva del sentide que se le otorga y la manera en la que se llevó a cabo.

Definir la etapa que corresponde a la "juventud" no e tarea sencilla, no sólo porque casi por definición constituJ:Jk; una etapa de paso (de la adolescencia a la adultez) y, p©.t~ tanto, su delimitación suele ser residual, sino tambiéf porque históricamente ha sido concebida de diversas m~· neras, con textualmente se vive y se concibe, diferente ~i

además, la etapa de juventud ha sufrido transformaciones estructurales en las sociedades contemporáneas. Partic;tj· larmente en las sociedades industrializadas, pero tambiá en las demás­aunque con patrones socialmente desigualg (Mora y Oliveira, 2009)­, existe un reconocimiento de l prolongación de esta etapa, consecuencia de un conjunto · e· cambios institucionales, económicos y culturales: extensi9n del periodo de formación educativa, retraso en el ingreso ... trabajo y en el proceso de emancipación, conformación d una familia y en el acceso a la parentalidad. La conjunció ' de estos procesos ha incrementado la desestandarizació ~'

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De diversas formas y con estilos diferenciados, Argentina lle­ va la impronta de la migración en su sociedad. El crecimiento gel país y de la sociedad tuvo como pilar a la inmigración. Esta ha sido sinónimo de movilidad social y crecimiento. Los procesos migratorios están asociados a la constitución misma de la nación (Devoto, 2004; Novick et al., 2005) y forman parte de la identidad nacional. Millones de europeos +,principalmente italianos y españoles­ fueron acogidos por ~ha Argentina "aluvial" desde antes del siglo xx, muchos de ellos o sus descendientes son los que en años recientes han

. regresado al viejo continente o se han ido hacia otras partes. El origen de los flujos hacia Argentina cambia a mediados del siglo pasado, cuando comienzan a llegar inmigrantes de

LA MIGRACIÓN RECIENTE ARGENTINA

antes de la migración, por lo que al momento de su ocu­ rrencia habían acumulado una considerable experiencia laboral. Todos habían comenzado el tránsito hacia la adul­ tez (en la medida en que han experimentado alguno(s) de los eventos considerados) pero con cierta asincronía en­ tre· los distintos dominios de la vida. Mientras unos ha­ bían avanzado paulatinamente en tal proceso, otros exhibían ámbitos de la vida en donde dicho paso se había estancado, a pesar del deseo manifiesto por lograrlo por parte de los entrevistados. Esto se expresa fundamentalmente en que, tras múltiples intentos, no logran independizarse del hogar de origen o ser autónomos económicamente; algunos, lue­ go de muchos años de noviazgo no pueden formar una unión conyugal por mantener compromisos económicos con sus padres; otros establecen su hogar conyugal en el de sus . progenitores. · ,¡, A continuación se analiza a cada uno de ellos, previa

.introducción sobre el contexto socioeconómico que propició la salida de argentinos que se toma como caso de estudio.

MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 113

5 En particular, porque las transformaciones en el mundo del traba¡ han sido unas de las más fuertes en los años precedentes a la últinla oleada migratoria.

a distinguir entre umbrales realmente verdaderos y no tanfü (Calves et al., 2009).

En la conformación de los dos grupos de análisis, la eda~ no constituyó el criterio central para su definición sino qu: se adoptó una estrategia de jerarquización de eventos en di'. tintos dominios de la vida. En primer lugar, se consideraron eventos relacionados con el mercado de trabajo: ingreso· consolidación de la trayectoria. El motivo de esta preferej¡¡. cía obedece a que la oleada más reciente de migración .q Argentina es esencialmente económica y la forma en la q •.e se expresa ­así como los motivos que la originan­ es labo., (por lo que éste constituyó un eje central en la investigad doctoral de la que deriva este trabajo).5 En segundo lug se tuvieron en cuenta la ocurrencia de­üramsiciones en otr~ _ dominios: salida de la formación escolar (finalizaciórrf abandono); independencia del hogar de origen y autononú económica; formación de una unión conyugal; tenencia .. e hijos; disolución de uniones y conformación de segundas] posteriores uniones.

De acuerdo con dichos criterios quedaron definidos l;: grupos de análisis de la siguiente manera: el de las persona que migraron en una etapa inicial de la vida (cVI) se caract riza por tener intentos poco fructuosos de ingreso al merca ·e laboral, ya que en todo su itinerario premigratorio (entre 3, 6 años de duración) no se consigue una incorporación establí sino experiencias de trabajo temporales, ad honorem, s·! remuneración salarial regular. En relación con los dema dominios de la vida, se distinguen por no haber experimeí · tado la mayoría de las transiciones hacia la adultez: vivíiÍ. · en el hogar de origen, sin uniones conyugales ni hijos. '

Los que migraron en una etapa media de la vida (e ·, 1

habían ingresado al mercado de trabajo entre 7 y 16 añ]

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Las edades del grupo de entrevistados clasificados como CVI oscilan entre los 20 y 35 años, de manera que sus cohortes de nacimiento corresponden al periodo de 1977­1988 y los episodios de migración tuvieron lugar entre los 18 y 31 años. Bn general, han terminado sus estudios en Argentina aunque algunos de ellos comenzaron o continuaron su formación en ros países de destino.

Este conjunto de personas se define por no haber experi­ mentado, con antelación a la salida de Argentina, las típicas transiciones hacia la adultez, motivo por el cual sienten que no tienen que asumir compromisos muy fuertes con ellos mismos (laborales, personales, educativos) o con otras

MIGRAR CUANDO NO HAY NADA QUE PERDER

de las exigencias del nuevo modelo global, de la nueva divi­ sión de trabajo internacional, así como de la implementación de las reformas estructurales que impregnaron de un nuevo signo a la economía y a la sociedad. Aunada a la consuma­ ción de este nuevo modelo, la inserción del país a la esfera global ocurre por medio de los movimientos de población que se unen al proceso migratorio mundial, fenómeno que ha

,tomado una relevancia extrema a nivel planetario (Castles y.Miller, 2004; Arango, 2007).

La sociedad argentina no había participado, con excep­ ción del periodo de la dictadura militar, en los procesos de migración internacional como emisora y ahora se une al concierto de las naciones que lo conforman, asemejándose a la mayoría de sus pares latinoamericanas. La salida de argentinos en esta coyuntura ha sido una de las vías por las que la sociedad argentina ha respondido a los procesos de transformación social de las últimas décadas (Castles, 2001, 2010; Schuerkens, 2005). La opción por la emigración se convirtió en una alternativa en el curso de vida, hasta entonces casi inexistente.

MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 115

:· 6 Las dimensiones de este fenómeno se ilustran en un artículo perip.'

dístico de 2002 con el siguiente dato: la población de argentinos que vi. fuera del país constituye un stock de 600 000 personas, y se conformó co ' o resultado de cincuenta años de crecimiento (Dandán, 2002). Actualmente; en poco más de tres años (entre 2000 y 2003), se fueron 193 030 persona~ es decir, una tercera parte de ese total que llevó décadas "acumulaf (Actis y Esteban, 2007; Novick y Murrias, 2005), Lelio Mármora (en Da dan, 2002) sostiene que en ninguna de las emigraciones anteriores qu · tuvo el país hubo una tasa de desempleo tan alta como en este mo~~~ to. En los años setenta, la tasa de desempleo era de apenas del 47\i, ~ comienzos de 2000 se observaba un 22% de desocupación que afectad especialmente a la clase media. Con este nuevo perfil de expulsados ec'0 nómicos, Argentina se incorpora por primera vez a un proceso que otrq países conocen desde hace décadas.

la región, principalmente desde países limítrofes, fenómeno que, con fluctuaciones, sigue presente hasta la actualidad,

Por su parte, los episodios de emigración han estada presentes en la historia del país aunque de forma esporádic~· (Mármora en Dandan, 2002), vinculados a hechos y épocas. concretos ­la migración de profesionistas e irrtelectua les, conocida como "fuga" de cerebros y el exilio político­­ e,' los cuales lo más grave no han sido las dimensiones de lo' flujos sino su velocidad. En los albores del presente siglo, 1 emigración adquiere relevancia por la novedad que signific~ en el contexto de los movimientos de población en Argentini y la conformación del actual escenario global de las migraci@., nes. Se trata de una emigración esencialmente económicsi en un contexto de fuertes cambios estructurales asociadosd un deterioro generalizado del bienestar de la población.6 La:' oleadas de emigración anteriores fueron cortas y masivaé pero el escenario de crisis y la amplificación que ha teriidl ésta son inéditos: en un año se fue la misma cantidad et personas que en el pasado lo hizo en diez años.

La década del noventa coloca al país en el escenarif mundial a partir de la apertura externa producida por J liberalización de inversiones y capitales financieros, corolarf

114 DESAFÍOSYPARADOJAS

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últimas se encuentran: fuerte incremento del desempleo y del subempleo, la ampliación del periodo de duración del primero, el constante aumento de las condiciones precarias de trabajo, altos niveles de rotación, las dificultades cre­ cientes de los jóvenes· para insertarse laboralmente a los que se suman las nuevas modalidades contractuales por tiempo determinado tras la reforma en la legislación labo­ ral a inicios de esa década (contrato de trabajo por tiempo determinado, contrato de práctica laboral para jóvenes, eontrato de trabajo­formación).

La reconstrucción de la trayectoria laboral a través de la secuencia de eventos que experimentó este conjunto de perso­ nas permite caracterizar los segmentos pre y pos migratorios en ese dominio. Sin embargo, en la concepción del ingreso en la vida laboral como un marcador clásico del paso hacia la adultez es posible que no sea suficiente la consideración de si entró o no al mercado de trabajo. Introducir factores subjetivos aporta elementos adicionales que permiten in­ cluir situaciones menos convencionales y desenmarañar el impacto que tiene en el paso hacia la adultez la progresiva incorporación al mundo del trabajo a lo largo de un proceso de

.reajustes sucesivos hasta el logro eventual de la estabilidad profesional (García Borrego, 2007).

~· · En relación con este dominio, los integrantes de este gru­ ·P@mencionan de forma reiterada los intentos frustrados de incorporación exitosa al mercado laboral en Argentina ("no liabia tenido un trabajo en serio", "siempre había trabajado ea negro"), el no logro de una inserción acorde a la formación {'~él diseño era un hobby, trabajaba de administrativa"), las dificultades para la obtención de una remuneración a las tareas laborales ("nunca había cobrado un sueldo completo"), así' como la necesidad de crecimiento y desarrollo laboral­ J!>.rofesional ("necesitaba prosperar, crecer ... y no podía"). Algunas voces manifiestan la imposibilidad de trabajar para s0lventar sus estudios.

MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 11 7

personas (familiares, conyugales). La condición de soltería y de tránsito por una etapa temprana de la vida influye en que la migración se conciba como una decisión poco riesgosa_ Existen pocos condicionantes, queda mucho por vivir y, e!Ji tal caso, "volver a empezar" puede no ser tan costoso conr9· para quienes se encuentran en otros momentos de la vida. Tal percepción sobre el momento de la vida por el que transi• tan los coloca ­como ellos mismos explican­ en un momenjg apropiado para salir del país, vivido como oportuno, com~ una etapa "correcta". '

En general, su incursión en el ámbito laboral comiem»; en Argentina, si bien se trata de trayectorias con duracionsl no muy extensas: entre tres y nueve años. En los segmento~ premigratorios destacan dos tipos de inserción laboral. Eri primero refiere a inserciones laborales tempranas asociadsí a la necesidad de trabajar para poder estudiar o la incorpi:i. ración al trabajo sin lugar para el estudio. Aunque la ded,l. cación laboral suele ser de tiempo completo, las condicione de trabajo no son buenas: corresponden a espacios laborale~ precarios y en muchos casos dentro de negocios familiares.

El otro tipo de inserción es la situación predorninanf y corresponde a la existencia de segmentos en situación d~ desempleo y episodios laborales aislados de corta duración ­en ciertos casos posteriores a la culminación de los est ·. dios ­, evidenciando la dificultad a la que se enfrentan pa~ el logro de inserciones propicias. Estos intentos se vincula a trabajos ad honorem en condiciones de precarieda& con inserciones asalariadas que no se corresponden con s · · formación u oficio. Generalmente son complementadas co trabajos por cuenta propia en los cuales sí logran ejercer s s profesiones u oficios. '·

Los inicios en el mercado de trabajo suceden a medí · dos de los años noventa, cuando las principales reforma estructurales habían sido puestas en marcha y sus reperc · siones en el ámbito laboral ya eran evidentes. Entre está!

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116 DESAFÍOS Y PARADOJAS

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La idea extendida es que los intentos y tipos de inserl Además de lo que ocurre en la vida laboral y escolar, en ciones laborales premigratorios habían sido poco fecundosd este grupo de entrevistados la migración es, en gran medida, no permitían vislumbrar oportunidades de cambio hacia 1t un evento concomitante con otros de primera ocurrencia. El futuro. El ambiente incitador del contexto y de la coyuntun ·" evento que sobresale es la salida del hogar paterno/materno, fue un aliciente de importancia para los más jóvenes. La cr]: acontecimiento que había tenido lugar únicamente en muy sis económico­social que azotó al país es identificada como ,. .pocos casos ­aquellos en donde la realización de sus estudios evento que impidió el arranque de sus trayectorias laborales requirió un cambio de residencia (figura 1)-. En sentido

Otra forma de aproximarse a la relevancia que un event~ estricto, la salida del hogar no siempre es un anhelo desea­ laboral tiene para quien lo experimenta es considerando ~. do sino que se trata de un evento que ocurre en inevitable peso e interpretación que el propio entrevistado le otorga. E:, simultaneidad con la migración. Así, para unos buscada tal sentido, buena parte de quienes migraron en una etapa y. para otros simplemente enfrentada, la emancipación es inicial del curso vital ubican al primer trabajo important.é· común a prácticamente todo el conjunto y, las más de las que han tenido dentro los contextos de destino (figura 14 veces, vivida como un reto de gran envergadura. Notoriamente, hay una significativa concurrencia tempera Sin embargo, la secuencia que se aprecia con más fre­ entre este evento y la migración, por lo que la transiciéí cuencia es el paso del hogar de origen a la cohabitación en que produce el cruce de fronteras internacionales pareo, viviendas compartidas con otros pares (conocidos o no), una expresarse en el dominio laboral. dinámica frecuente entre (jóvenes) migrantes. La impor­

Este reconocimiento de la importancia del trabajo en lo~ .tancia que clásicamente se le ha dado a este evento en la destinos se explica, de acuerdo con los relatos, por el tipo d~ transición a la vida adulta se relaciona con la adquisición de inserciones que consiguen en el mercado laboral receptor: so:· mayores responsabilidades, mayor autonomía e independen­ empleos más estables y con mayor cercanía con su formaciói cia ­o en términos generales, con la incorporación a la esfera u oficio que lo acontecido con antelación a la migración. D: · pública­, situaciones que ocurren con una gran variabilidad tal forma que la centralidad en este dominio es otorgad·, ­ea­dichos arreglos de convivencia. La conformación de hoga­ más que al evento que marca la entrada a la vida del trabé ses propios (en soltería o en unión) generalmente comienza jo como punto de quiebre, a la conquista de cierto grado ,· · a surgir tras un tiempo de residencia en los destinos. estabilidad o logro laboral. : La simultaneidad de la migración con la conformación

En relación con la trayectoria escolar predomina ~ru' d..~:uniones es una situación menos frecuente, la ocurren­ situación de finalizar los estudios antes de emprende eiade esta última suele ser posterior, si es que tiene lugar. la migración. Generalmente coincide con la imposibilida:> La llegada de hijos es un evento poco común entre quienes de insertarse en el mercado de trabajo tras la obtención d' :iJfi?1'aron en una etapa incipiente del curso de vida, y para un título terciario. En otros casos, la inserción laboral e. 1qnienes tuvo lugar su ocurrencia fue temporalmente muy requisito para poder estudiar o terminar de hacerlo. Est,1 cercana al momento de observación. situación, aunque ocurre antes de la migración (casos 10, 1­'•'4 ., De acuerdo con la secuencia y la naturaleza de los eventos 17), para varios es posible sólo con posterioridad a la misnt¡ Q_ servados, es posible que para este conjunto de personas la (casos 1, 6, 12, 16, 17). il migración haya dinamizado el proceso de iniciación a la vida

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MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 119 118 DESAFÍOS Y PARADOJAS

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Nota: El número en el lado izquierdo de las trayectorias indica la edad xn ese momento. Las trayectorias comenzaron a graficarse desde el mo­ ­lliento que tiene lugar alguno de los eventos considerados en el análisis: EE (comienza estudios), AE (interrumpe estudios), TE (termina estudios); TI (primer trabajo importante),* primeras inserciones en el trabajo; N:.(comienzo noviazgo), RN (ruptura noviazgo); U (unión), C (matrimo­ Íiio), S (separación o divorcio); H (hijo); M (migración), R (retorno). r~!

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~ r r r ~ ~ ~ r r ~ · Año calendario 89 90 91 92 93 94 95 96 97 98 99 oo 01 02 03 04 05 06 01 os 09 Sexo

Figura l. Línea de tiempo de trayectorias de migración de personas de cvi

MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 121

.. (.,...

7 Lo mismo puede decirse de la situación que se advierte en mucho de estos jóvenes que se encuentran en situación de desempleo en el lap~ posterior a su titulación. Aunque han salido de la escuela, dicho paso ~ los ha habilitado para el logro de una ocupación en el mercado de trabaii

~ ¡

''Y lo que hice en mi cabeza fue buscar motivos por los cual~ 'no' y no encontré ( ... ). Era joven y sin compromisos" (Rafaéi. México). "Ya no tenía nada que perder, o sea ya no tenía nada. Buerl' en ese momento estaba con mi novia pero esa situación mis :

adulta. La distancia con la familia de origen y el acceso a u,rt trabajo remunerado propicia el comienzo de la autonornís­, independencia económica (Pascalis, 1992; Antoine y Leliew_

' 2009). Sin embargo, este tránsito desde la familia de origel[ hasta la formación de una familia de reproducción puede no ser conclusivo. Además de las dinámicas de convivenoíj mencionadas, luego de la migración tienen lugar episodiej de uniones que, tras un relativamente breve lapso de tiern:, po, se disuelven (casos 6, 8, 9, 12, 14, 17, 22). La diversidá de tipos de cohabitación con una pareja sentimental n"e necesariamente es el preámbulo de una consolidación má:· formal. En estos casos, un umbral teóricamente simbólico' ha sido cruzado, pero no se ha consolidado por un evens subsiguiente (Calves et al., 2009). ·t

En concordancia con el análisis de eventos presentadq para este conjunto de personas la migración es vista com,: una ventana de posibilidad para el despegue de sus itiner~­ rios de trabajo y para iniciar el camino hacia la adultez. J;;' anterior en la medida en que se entiende como una oport ! nidad de crecimiento y maduración, y como una experienci.~, de vida para la realización de diversas cosas: viajar, conoctl', otra cultura, enfrentarse a los retos de la vida cotidiana \e forma autónoma. Para muchos fue el impulso para "dej ·, el nido", conquistar la independencia económica y del hogil:11 materno/paterno. 1

120 DESAFÍOS Y PARADOJAS

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­ .;J _ "México ha sido una transición en muchos aspectos" (Lina,

­­:­­­ CVI, Madrid). ~;, "Era un nene de mamá, no sabía lo que era la vida". "Me ha

­ ayudado a madurar" (Fabricio, Madrid).

MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 123

La salida de Argentina, justificada por la no experi mentación de las transiciones centrales relacionadas con la transición a la adultez, son las que comienzan a tener lugar tras la migración. Ésta, que había sido concebida como un

;¡¡ Existe un reconocimiento extendido de que la migración

ha sido el evento gestor de otros, permitiendo el despegue d~ sus itinerarios, con independencia de la trayectoria laboral que hayan tenido (más o menos "exitosa"). En este conjunto de personas hay una total coincidencia en esa identificación en tanto que las expectativas que compartían asociadas a la migración han sido alcanzadas. Los proyectos migrator ríos son diversos ­vinculados a variados elementos moti, vadores­ pero, además de migran tes, son jóvenes, por lo que los primeros van acompañados de expectativas sobre lo que les gustaría ser y hacer (García Borrego, 2007). g

[el desempleo] llevó a que dijéramos que no va más, porque Ya: no era ni bueno para mí ni para ella" (Mateo, Madrid). ', "Terminaba la carrera, no había nada que me atara a quedarlll;_¡; mucho en Argentina, al final digo: bueno, al final si vuelvo y. me quedo sin trabajo, digo, soy joven, me podré mover y hace} lo que quiera" (Gael, CVI, Madrid). -l "La verdad que lo hice por la oportunidad y por vivir la exp - riencia" (Carla, México). _,1•

"Bueno, yo había terminado la carrera ( ... ) me quería sal~fi un poquito de ese camino pautado ... , nunca había trabajad,9 bien en mi vida prácticamente, entonces ya estaba como 4 poco harto de ser nene de papá y mamá( ... ). Creo que tambiérl hubo alguna que otra, aunque me ruborice ¿no?, pena amorosa¡ (risas), necesitaba olvidar un poco y, bueno, como que quería probar un tiempo, a ver qué pasaba (Pablo, México). 'J.

122 DESAFÍOS Y PARADOJAS

evento "casi sin riesgos" ­en tanto no era mucho lo que se ponía en juego­, genera varios cambios en el curso de vida que son recibidos con aquiescencia.

En esta etapa inicial del curso de vida, el logro y la satis­ facción de los intereses personales se muestran particular­ wente importantes, debido a que obtener la independencia de los padres y vivir la propia vida constituyen motivos c~Jltrales para migrar ­evento que generalmente coincide con la salida del hogar materno/paterno (Da Vanzo y Kobrin, !;982; Monsutti, 2007)­. El alcance de mayor autonomía, i.l,:ldependencia económica y crecimiento profesional son los lp~ros que más se reconocen como conquistas fructíferas y que otorgan satisfacción. ,,, Además, característicamente en esta etapa, los recursos ~conómicos suelen ser escasos y frecuentemente el nivel de vida es relativamente bajo. En tal escenario, conseguir un in­ gr.eso asociado a un trabajo propio resulta lo suficientemente j1Jlportante como para valorar positivamente la migración, más allá del tipo de trayectoria experimentada o del nivel ge ingresos obtenido (Mulder y Clark, 2000). En particular, el hecho de conseguir un trabajo estable, relacionado con su &9.rmación o de cobrar un sueldo sistemáticamente­más allá del tipo de remuneración que otorgue­ genera satisfactores en el ámbito laboral. ­ i<tit ...

::.":r En definitiva, en este conjunto de jóvenes la migración t~ermina convirtiéndose en la transición que impulsa o des­ ~µcadena el proceso de transición a la adultez (Ariza, 2005; Monsutti, 2007). Las siguientes palabras identifican con

Fue una experiencia positiva independientemente del resj· ~t!iridad la manera en que, tanto éste como el resto de los tado (María, CVI, México). Q~mbios, refieren a la propia idea de ''enfrentarse a la vida"

-r f,j­nculados al tránsito hacia la vida adulta:

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•\,VA

1' ., Y ahora estamos pensando en volver [a Argentina]. Me gus­ ''' taría el año que viene. Creo que mi situación laboral no va a

.~:·<;' cambiar mucho más de lo que hay ahora, es como que llegué a un techo de lo que quería hacer y empiezo a tener una edad

r,• [30 años] que te empieza a dar ganas de hacer otras cosas ·, • que acá no he podido hacer. Me quiero casar, tener hijos, .;,.,­. pero cuando las haga no quiero estar acá. Entonces, necesito

i•;,_¡j_,, estabilizarme de nuevo allá, porque tampoco es fácil volver y n~" ponerte a trabajar ahí. Por eso, ya tenemos que volver porque ~~;·el tiempo pasa ... (Camila, México).

logrados por sobre el de "rezago" en aquellos que no tuvie­ ron lugar. Entre quienes se sienten más preocupados por

­la afectación de este último se encuentra Camila, quien a ,pesar de estar en pareja desde el inicio de la migración, com­ parte la vivienda con otros jóvenes. Sostiene que las redes

· fatniliares pueden ser más útiles para lograr una vida en pareja independiente, así como para la crianza de sus hijos.

MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 125

"Estoy muy feliz y agradecido con haber tomado esta decisióm:; vivo solo y trabajo de lo que estudié' (Ramiro, México). · "El haberte ido de tu casa necesariamente te cambia, te ha9~ madurar. Yo antes era sumisa, ahora aprendí a vivir" (Lalar ·•l

Madrid). ,., "Gané mi libertad" (Virna, México).

124 DESAFÍOS Y PARADOJAS

La etapa de la vida incide no sólo en la decisión de mign _, y la valoración del proyecto en función de las expectativsí que lo motivaron, sino que el momento (timing) en el qu~ tiene lugar una transición como el cruce internacional &,· fronteras impacta en la estructuración del curso de vida q·::: le sucede (Ryder, 1965; Ariza y Oliveira, 2001).

Las transiciones que en este conjunto de jóvenes ocurres de forma simultánea o con posterioridad a la migración se( la salida del hogar materno/paterno, el despegue de sll:,s trayectorias laborales y la independencia económica. 81 embargo, un evento que no sucede es la conformación · una familia propia, ya que muy pocos establecieron uni nes conyugales estables y la experiencia de la paternida .~;;, Por su parte, Mateo relata que se siente satisfecho con maternidad es exigua. , elitinerario de vida adoptado, defendiendo el haber seguido

La migración, que en su momento fue percibida co -1lm curso de vida distinto al "esperado". Asimismo, expresa un evento que acontecía en el momento preciso, paradójic ­la­decisión de no querer tomar un camino preestablecido y mente no ha propiciado la ocurrencia de esos otros evento .eLenfrentamiento con sus pares que sí han seguido un mo­ Es posible que el estilo de vida que se lleva a cabo co ·d..efo de sucesión de eventos de tipo normativo en Argentina migrante (la residencia en viviendas compartidas con ot ,(Jdeisering, 2003, Greene, 1990; Kohli y Meyer, 1986). La personas en similares condiciones, por ejemplo), así co ~,'O 1e*periencia del cruce de fronteras internacionales, suscitado las dificultade.s para encon~rar pa.reja, 8 sean f~ct?res qEe :1i11.as la crisis económica experimentada a comienzos de siglo ayuden a explicar la ausencia de dichos acontecimientos': ;en.Argentina, constituyó un evento relativamente nove­

Esta situación es vivida y percibida de distintas forma. · ·d@so en las expectativas de curso de vida de los jóvenes ar­ aunque prima el sentimiento de conquista por los evento gentinos. No era un evento percibido con naturalidad (como

~ · sucede en otras sociedades con una mayor tradición migra to­ s Un tema que excede a este trabajo es la dificultad que se expresi:1..15'11l1 .__n_· ª~), sino que abrió nuevas posibilidades y, en algunos casos,

el logro de una pareja que no sea de nacionalidad argentina, situación q ::nareciera que extendió el periodo de la juventud (Miranda, se encuentra prácticamente en todos los relatos, tanto de los entrevistadí úl:ravino y Martí, 2012). en México como en Madrid. '

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­tOsºentrevistados del grupo CVM se hallan en un estadio del curso de vida que puede denominarse como intermedio, i; -~.

MIGRAR PARA PODER CRECER

,­­·"No, estoy iniciando mi carrera, quizá más adelante" (Ramiro, U:.i México). .!.!.::.· .. "Al menos en los próximos 5 años no" (Rodrigo, México). ;.;fr: "No sé si volvería, creo que ya no encajo" (Lara, Madrid). ,;;ii '.'Para nada en mis opciones" (Carla, México). ~­~"No, acá me quedo" (Martín, Madrid).

;'lll "Vinimos con la idea de quedarnos, así que haremos lo posible por permanecer" (María, México).

Finalmente, la posibilidad de continuar o dar fin al proyecto migratorio se encuentra permeada por el conjunto de vivencias y percepciones previas. En casos excepcio­ nales se manifiesta el retorno como un evento cercano, en la medida que el proyecto migratorio es percibido aún como inconcluso. Quienes han experimentado trayectos laborales exitosos consideran que "están empezando" a capitalizar la oportunidad que cada destino les ofreció. Por su parte, para quienes han andado por recorridos laborales más sinuosos, la permanencia se fundamenta en· la consideración de que aún están _transitando por una etapa identificada como "el derecho de piso" para el despegue laboral. ¡¡tr .En general, permanece la sensación de continuar en una etapa temprana de la vida donde todavía vale la pena

._seguir arriesgando. Se permiten adaptar y en cierto sen­ :ti.do flexibilizar su itinerario de vida, lo viven como una :ganancia donde la migración ha jugado un papel central. Los siguientes extractos de los relatos ejemplifican el tipo .de respuestas que .otorgan ante la interrogación sobre el retorno:

MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 127

t¡ ·I ,. '

9 Bardo: Adj. (hacer ... ): Realizar alguna acción que vulnera normí sociales de convivencia (Diccionario de Lunfardo). Bardo: situación C!!! fusa y desordenada, http://bit.ly/xTPxfm. J

Yo acá me acostumbré a hacer lo que tengo ganas de hacer./ se acabó y ellos [sus amigos de Argentina] no tanto. Por aliJ hacen más lo que deberían hacer que lo que tienen ganas ·,' hacer realmente. Porque, ponele, lo de casarse. A uno que s .. casó le digo: "¿por qué te vas a casar ahora?, ¿qué apuro t .. nés de casarte?" y me dice "no, boludo ya tengo 27" y le digo "dejate de hinchar las bolas, te casás si tenés ganas y puntlil;. Aparte, hace un año que la conocés". Bueno, ¡al otro año s casó! ( ... ) Todos se me vinieron en contra con lo mismo: "y,f que pasa es que vos estás boludeando" ­me dicen­ "te lapas' de joda todos los días". "No es joda, bol u do, yo trabajo y cuantfo puedo viajar, viajo y ya". "Pero tenés que tener novia" y que estó que lo otro. Pero si no tengo novia ¿qué voy a hacer, me vd] a quedar mirando tele en casa hasta que me caiga una novi ·~ Yo mientras tanto hago lo que me gusta. Y bueno con el tem ese me bardean9 bastante.( ... ) Cuando alguno me retruca alg' así yo le digo eso (sic), "yo me compré una casa y vos no", pei( bueno, no lo hago porque no me gusta, pero claro, a la hoi:.q de hablar, ellos me dicen de todo y al final termino hacierrif· las cosas que ellos no pueden hacer.( ... ) Cuando yo vine ac' como que le saqué diferencia a ellos en el tema de ... como ql{tl crecí más rápido, por decirlo de algún modo.( ... ) La [idea] '.' casarme y demás cambió seguro, es más, ya deja de ser utt, prioridad para mí. Si se da, se da y punto. ( ... ). Digamos q' lii

estar ahí [en Argentina] te contagia o te lleva a eso, segur_:· mente si estuviese allá estaría en la misma situación que elfo entonces eso sí, ese tipo de prioridad para mí cambió. Y o c:ne· que fue por el hecho de darme cuenta de que había un monté de cosas que me gustaban hacer y que no las hacía, entoncé un poco eso fue lo que fue llevando las cosas al hecho de;' desplazando otras cosas" (Mateo, Madrid). ·

126 DESAFÍOS Y PARADOJAS

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t\:y,a socialmente construida sobre su ocurrencia en etapas específicas de la vida.

interpretación del curso de vida como demorado y el anhelo de ocurrencia de las transiciones no experimentadas produce un replanteo del proyecto de vida en su conjunto. .. . La duración de sus trayectorias laborales en Argentina oscila entre 7 y 16 años; aunque se concentran por encima de los 12, de manera que las edades en las que inauguraron su y.ida de trabajo se ubica alrededor de los 16, variando entre

,lo.P 15 y los 23 años de edad. A diferencia del grupo ante­ ri.or, estos entrevistados exhiben trayectorias donde logran una mayor estabilidad laboral, con cierta continuidad y, en ~arios casos, con la adquisición de experiencia en determi­ roado rubro. Se trata de personas ­aun sin una formación _e9;pecífica­ con inserciones en ocupaciones de un sector en .el::que han tenido una importante permanencia. En estos .easos, quienes tienen niveles formativos superiores o han .a;dquirido un oficio parecen haber conseguido trabajar ­en d,istintos momentos de sus trayectorias­ en espacios relati­

.:v.amente acordes a su formación o capacitación. No obstante, existen algunas trayectorias a las que aún

les cuesta esa consolidación, presentando dificultades en el tipo de inserción o en el logro de ocupaciones acordes a su ifirmación y experiencia. Los inicios en la esfera laboral de este grupo tuvieron lugar en la "década perdida", dominada .W)r. un magro crecimiento y que, pese a mantener niveles de iiesempleo bajos, ya daba inicio un proceso de inestabilidad ¡y,~e$tancamiento económicos, que culminó con una hiperin­ flación sin antecedentes y la consecuente pérdida del nivel adquisitivo de los salarios y de los niveles de bienestar. 4J: El impacto de las transformaciones en el mundo del ttabajo es explícito en sus relatos y palpable en sus biogra­ fí:as. Episodios de desempleo en sus trayectorias pasadas, ~l! predominio de la precariedad y dificultad de posibilidad

MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 129

10 A excepción de un caso con 33 años de edad que se incluye en es~ ;, grupo debido a que ha experimentado un conjunto importante de transj• ciones hacia la adultez: ha ingresado al mercado laboral a los 14 años, unió, tuvo hijos, se separó y posteriormente migró.

11 La estructuración del curso de vida se refiere a que la sucesió · de eventos y transiciones en la vida se apeguen a la norma o expectat

en tanto que sus edades fluctúan entre los 37 y los 45 año8,1

cuya cohorte de nacimiento se ubica entre 1964­1975 y la edad a la migración entre los 26 y los 43 años. La situació~ que los define es la de haber comenzado el paso hacia la adu_d; tez con antelación a la migración: algunos han avanzado eÍ¡ ese camino, mientras que otros, a pesar de haberlo deseado, no han podido culminar dicho tránsito.

Dicho proceso truncado se manifiesta, en primer lugm ,¡ en la imposibilidad de emanciparse económicamente, lo qü;. repercute en la posposición de la conformación de una familf] tras noviazgos largos o la convivencia con una pareja en ca­ a de los padres. El fracaso en dicha independencia expresa un'~

'•' ingente disconformidad tras la acumulación de una serie d' proyectos frustrados en el ámbito laboral y económico. U:rra segunda expresión de la interrupción de la transición a 'l~ adultez se presenta en el ámbito conyugal como la ruptu{ de relaciones sentimentales y la consiguiente frustración é

la conformación de una familia. Se trata de la conclusión ei:''

proyectos de pareja, generalmente sin convivencia pero co trayectorias de noviazgo relativamente largas y una apues(a, a futuro que se esfuma.

La etapa del curso de vida por la que transitan molde, nítidamente el emprendimiento de la migración en la cu', confluyen motivaciones de distintos dominios de la vida. lí ocurrencia o ausencia de ciertos eventos son argumentadsj como rectoras de la decisión de migrar, con la enfatizad, coincidencia de una sensación de "retraso" en su calendarí]

·vital plasmada en la asincronía entre transiciones (indepe · .. dencia, unión, hijos) de diversos dominios de la vida." Da

128 DESAFÍOS Y PARADOJAS

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12 El deseo es una construcción o imaginario que el propio individuo realiza de lo que le gustaría conseguir.

muestran la existencia de uniones aun en condiciones de permanencia en el hogar de origen (figura 2, casos 1, 10, 16 y­17). En otros casos, se producen uniones en paralelo con la salida del hogar de origen pero, tras una ruptura, se re­ torna al hogar materno/paterno (figura 2, casos 3, 4 y 9). El r.etraso de la anhelada conformación de una familia sucede en el rompimiento de una relación sentimental tras muchos

.aftos de noviazgo (casos 11, 12 y 13). Esta complejidad de situaciones refleja la ausencia de linealidad y la diversidad en la naturaleza y secuencia de los eventos marcadores del acceso a la vida adulta (Molgat, 2008; Calves et al., 2009).

.. El retraso en la ocurrencia o la reversión de estos even­ , tos hacen que destaque en estas personas el sentimiento de _experimentar un calendario de vida retrasado. En parte, hay una comparación (implícita) con una visión normativa del .mismo pero, más allá de la misma, sus expresiones refieren .~1 deseo12 inalcanzado de querer encontrarse en otra etapa. ­­:'.­· En estos casos, al igual que en los que se encuentran .~)1· una etapa inicial del curso de sus vidas, la migración

.permite la consolidación de la independencia del hogar de .(),rigen, tanto para quienes nunca la habían logrado, como

.pana quienes no la habían consolidado con anterioridad al ­eruce de fronteras. Esta coincidencia de eventos es más .importante que la concomitancia de la unión conyugal con ~migración, ya sea porque había tenido lugar antes de la

r­wisma o porque es un evento que no ha tenido lugar. '-~!> En este mismo dominio, la migración también concreta l~ separación o el divorcio. De acuerdo con los relatos, la Qistancia física que se produce cuando uno de los miembros '­~·.fa pareja migra, exacerba las distancia~ y diferencias en <l1tros planos.

MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 131

de cambio, pluriempleo, ingresos insuficientes, son las cá racterísticas que resaltan en sus historias como detonantes de la decisión de migrar. La situación de crisis constituy;: "la gota que rebalsó el vaso". Si hasta el momento no habí~ sido posible progresar, queda claro que las circunstanciaa de entonces no serían las más favorecedoras para tal fin. En aquellos casos en donde las condiciones previas fueron Uf! poco más promisorias, la coyuntura constituyó un quiebrd jugando un papel de barrera en un momento central de lii. vida y del dominio laboral. · ''

La identificación del trabajo más importante, a diferend' del grupo anterior, se halla prioritariamente ubicada en­s segmento laboral postmigratorio (figura 2). Sin embargé el impacto de la crisis fue tal que las condiciones que caracte. rizaban a dicho trabajo generalmente se perdieron. Por eso,, el sentimiento que prima alude a la falta de consolidación de la trayectoria laboral relacionada con condiciones que no ~ alcanzan: estabilidad, continuidad, posibilidades de progrt so, logro de prestaciones sociales, aportes para la jubilación

En semejanza con el grupo antecedente, aunque en m~· nor medida, para quienes transitan por esta etapa medía de la vida continúa siendo significativa la coincidencia de la independencia del hogar materno/paterno con la migració (figura 2, casos 1, 2, 5, 7, 9, 11, 13, 15, 16 y 18). No obsta te, a diferencia de los primeros en este caso hay un dese explícito de poder lograrlo. Para gran parte de este conjuñ to de personas, el proceso de autonomizarse progresiva• mente de la familia de origen se ha prolongado temp·,, ralmente. La dificultad de acceso a la vivienda, al pago d una renta o la necesidad del aporte económico en la cas;ro de origen retrasa la emancipación de estos entrevisté dos de dicho hogar, alargando el periodo de convivencia con los padres (García Borrego, 2007).

Esta situación resulta en cierta medida asincrónica con lo que ocurre en el plano conyugal: algunas trayectorias

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1 1

"Mirá, por un lado por problemas familiares, no estaba mu;M cómoda en mi casa, tenía una edad que ya es bastante ap: para vivir sola [27 años] y tampoco encontraba los recurStiís en la Argentina para poder salir adelante. Había trabajad' de recepcionista, en una línea aérea ... y nunca era suficien:t,e lo que ganaba como para poder independizarme. Entonce· un poco movida por la situación familiar y por la económiej bueno, tomé la decisión de venir para acá" (V anesa, Madrid]. "Bueno, yo estaba de novia con una pareja de hacía 9 años, y@ teníamos todo previsto, pero yo estaba esperando terminq;r de estudiar, para casarme. Y rompí con él ( ... ). Siempreq dinero que ganaba era la mayoría para mi casa, [vivía]· .~; mi mamá, y mis dos hermanas, hasta que me vine aquí, ifsi. que en parte también este cambio, me ayudó a mí a indepi!n~ dizarme totalmente. Y o quería independizarme pero esta ·a pagando la hipoteca de la casa hasta que me vine, no podí · (Aman da, México). "Trabajé durante dieciséis años en una fábrica textil, lbs· dueños eran gente de Bolivia, bolivianos, muy buena gen ,er Dieciséis años, entré con catorce ( ... ).Todo en negro, siemft~ en negro ... , me convenía pero después, cuando fui creciendi; me daba cuenta que eso no tenía futuro, porque yo tenía qµ~ cotizar y todo eso hasta el día que me jubile ( ... ) quería u1í cambio, pero rotundo. ( ... ) f

tf

1

Finalmente, la llegada de los hijos es un evento qu:e ocurre con mayor frecuencia en este grupo, si bien no Q'e manera generalizada. Aunque tiene lugar antes de migra ­ la más de las veces ocurre tras su experimentación. Quien~s no han sido padres ­en particular, las mujeres­, expresan: la preocupación por el tiempo biológico para lograrlo. siij embargo, en ocasiones quienes han ido a vivir a otro País sin pareja o habiendo experimentado una ruptura manifisé tan el desafío que implica conseguir una (nueva) pareja. ­ conformar una familia.

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.;y¡­ "Estoy en un momento decisivo, tengo que ver qué pasa con mi .¡, vida. O formo una familia con mi pareja o me vuelvo" (Gilda, .L. CVM, México). .,:".fh ·''Y ... ahora se complica volver, tengo un hijo mexicano" (Matías, n.t:· CVM, México). .\?,• ' "Todos los días pienso en volver, siempre pienso, pero ahora f · tengo un hijo y una mujer españoles" (Fabricio, CVM, Madrid).

·1'.f.i "España nada que ver con Argentina, es ilógico pensar en volver tv a esta altura del partido" (Agustín, CVM, Madrid).

llevado la conquista de ciertos logros laborales, económicos y de bienestar en general (en relación con lo sucedido en México). Entre quienes desean regresar, destaca la convic­ ción de que se trata de un hecho irrealizable, en la medida en que se lo concibe como "volver a empezar". En México, por su parte, el retorno se lo condiciona a la posibilidad de éxito laboral. La continuidad del proyecto migratorio descansa en el desarrollo en esa esfera, de manera que, mientras se siga una ruta próspera, la posibilidad del retorno no se considera. , .. v.r En síntesis, en general la migración les permitió experi­ ~entar aquellos eventos y transiciones que con anterioridad habían sido valorados como una situación de rezago. La 0cú1rrencia de estos eventos provoca cambios en los distintos

.aominios de la vida y genera nuevas necesidades por satisfa­ ­der. Así, la migración ayuda a la concreción de transiciones anheladas pero, por el particular momento de la vida en el que se encuentran, ocasiona nuevos desafíos por el conjunto

­de nuevos eventos que tienen lugar tras su ocurrencia. De manera que la decisión de prolongar el proyecto migratorio se relaciona con la· mayor calidad de vida alcanzada ­por vías de los beneficios sociales del Estado (Madrid) o a través dela recompensa salarial (México)­ misma que se valora no

:sólo en relación con la propia persona sino, y principalmente, 0011 los hijos.

MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 135

Este conjunto de personas que han migrado en una eta})," media de la vida insisten en recalcar el aprendizaje que ~ el dominio laboral han adquirido. Quienes transitaron pd. rutas laborales que culminaron en buenas inserciones lo v~·. así porque la migración les ha permitido reencarrilar, estao1. lizar y en algunos casos revitalizar sus carreras laborales qlie se percibían como detenidas en el origen. Asimismo, inclut0 para quienes no se encuentran en una posición propicia s

el mercado de trabajo al momento de la entrevista, el hab , tenido la posibilidad de trabajar­aun con altibajos­ de lo q\~ les gusta o en lo que se han formado les permite compartí la percepción de superación de esa "parálisis" que sentí~, ... en sus trayectos laborales en Argentina. ~

La posibilidad de permanecer o retornar es una decisió · · difícil de adoptar en este grupo. A diferencia de sus pare anteriores, la experiencia de algunos eventos ­formaci~' · . . ;J de uniones, en varios casos con parejas mexicanas o esp~· ñolas, y la (prevista) llegada de hijos­ genera nuevos de¡;¡, fíos y compromisos en el lugar de destino, como la decisiq de asumir una hipoteca para la compra de una vivienda o :.e asegurar la formación escolar de los niños. Asimismo, se ~ · tablecieron compromisos previos en e~ lugar de origen: P~f quienes habían sido padres con anterioridad a la migraciej y sus hijos permanecieron en Argentina (generalmente ~· trata de uniones ya disueltas), la responsabilidad de envisf remesas constituye un factor de peso. . f

En general, nadie piensa en un retorno inmediato. E. t Madrid, se anhela más esa posibilidad pero se desestima ­ ·1 menos en el corto o mediano plazo­ por el alto costo que h~

% i

''Y o vivía en casa de mi abuela, cuando me junté con la man¡( de mi hijo, ella se fue ahí. Después, cuando nos separamos, y0

me fui. Me quedé un tiempo viviendo en el taller, ahí vivía los dueños pero me dejaban quedarme en la parte de arribj (Martín, Madrid). .'

134 DESAFÍOS Y PARADOJAS

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"Ahora con la llegada de Luna los planes cambiaron, por ahof­a nos quedamos" (Irene, CVM, Madrid). 'Vamos a esperar a que termine la escuela y nos volvemo,; (Damián, CVM, Madrid).

·a'sociados a una política migratoria abocada a dar respuesta a los requerimientos de mano de obra barata y flexible, en puestos de trabajo predominantemente de baja calificación que ocupa el conjunto de trayectorias. Las redes y capitales, principalmente étnicos, no fueron suficientes para paliar las dificultades derivadas del estatus de irregularidad, de las cuales se libran con la adquisición de la ciudadanía 0 la adhesión a la política extraordinaria de regularización.

Un propósito de este trabajo es el de homogeneizar la expe. Teniendo en cuenta lo anterior puede afirmarse que la riencia migratoria, con el afán de analizar el vínculo ent:i;,e manifestación por la permanencia y prolongación del pro­ migración y transición hacia la vida adulta, más allá de L yecto migratorio es predominante entre los entrevistados; diferencias contextuales. Sin embargo, merece presentaré . no obstante, hay diferencias en los motivos y deseos para una reflexión al respecto. Las principales diferencias eme:·. ello. En México, es el dominio laboral el que se privilegia a gen al momento de evaluar la posibilidad de prolongar o fo la­hora de tomar decisiones. Para quienes se encuentran en el proyecto migratorio, situación que se encuentra permead] ;un cvr, la permanencia se sustenta en mayor medida en los por el conjunto de vivencias y percepciones previas. logros y proyectos en dicho ámbito, tales como continuar

En relación con la finalización o continuación del proyec~o en una carrera que ven como prometedora, así como en la migratorio, las percepciones se posicionan en función de:' .posibilidad de estudiar y trabajar. Entre quienes se ubican etapa de la vida, pero también en combinación con el conte ,; en un CVM, la decisión ­a semejanza de los que se encuen­ de recepción en el que se encuentran y el rumbo adoptado t:r1an en una etapa incipiente del curso vital­ de retornar se

1 por la trayectoria laboral. Aunque no ha sido materia de es~e podrá pensar más adelante, aunque ese futuro está ubicado trabajo el abordaje del proceso de incorporación laboral . mayoritariamente al final de la vida laboral. Al depositar cada uno de los contextos de recepción analizados, basta de<::1• fa­mayor valoración en el dominio laboral, el proyecto des­ que en los resultados de mi investigación doctoral (Gandir cansa en el desarrollo en esta esfera, de manera que mien­ 2012) se corrobora la existencia de una diversidad de mod~. tras siga siendo próspera, la posibilidad del retorno no se de incorporación laboral entre los que sobresalen cursos pr~' considera. Los demás dominios de la vida parecen amoldarse píos en cada contexto de recepción. En México, destaca a­lo que acontece en éste. patrón rápido, definido por buenas modalidades de entrad.; 't:'· En Madrid, quienes transitan por una etapa de CVI des­ facilitadas por la existencia de contactos laborales informare~ eáoan más las consecuencias que propició la incorporación eficaces, situación que redundó en la capitalización de ''.1 laboral (como la independencia económica y la maduración capital económico­social, permitiéndoles evitar o resolvé personal) por lo que no se manifiesta una apreciación por el con prontitud los obstáculos asociados al sistema legal valor mismo que tiene el trabajo. Entre quienes se encuen­ la migración. En Madrid, por el contrario, el logro de .u;;;¡·n.,.~ ~t_r_a!l en un CVM, el no retorno se relaciona con el costo que espacio laboral propicio asumió un patrón temporalmente tuvo el mismo proceso de incorporación laboral. Quienes más diferido, resultado de modos de ingreso más costosé migraron en esta etapa son los que expresan que enfrentaron

136 DESAFÍOS Y PARADOJAS MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 137

LA IMPRONTA CONTEXTUAL: ¿SER JOVEN ALLÁ O ACÁ?

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La migración internacional exhibe claros vínculos de in­ tersección con el proceso de tránsito hacia la vida adulta, a}, tiempo que las transformaciones acaecidas en los iti­ nerarios vitales inciden en el proyecto migratorio mismo. fara quienes migraron en una etapa inicial de la vida (cvt) la migración se convirtió en la transición que impulsó el paso a la adultez. La misma era concebida como un evento :'Rin riesgos", el momento era el apropiado y constituía una 0,portunidad de cambio. Vista de manera retrospectiva se la e,<msidera un saldo positivo per se, incluso con independen­ cia de la experiencia laboral. Quienes cruzaron la frontera en una etapa media (cVM) depositaron en la migración una oportunidad para la experimentación de una conjunción de sucesos correspondientes a distintos dominios, entre los cuales se encuentra el laboral. El saldo positivo que arroja elproyecto migratorio se explica porque, más allá del mayor p:J:r).enor éxito en el proceso de incorporación al trabajo, se lo ­valora como un evento que permitió superar el estancamiento ~n. el que se sentían inmersos. · ;.:.·, ¿Cómo se expresa el vínculo entre migración y transición hacia la adultez en los dos grupos de estudio? La ausencia de ~§'terminados eventos y transiciones entre los del CVI propició la migración. Es el proyecto migratorio el que desencade­ J­1i! la transición hacia la vida adulta en la medida que impul­ sala ocurrencia de varios otros eventos y transiciones. Sin émbargo, una vez acaecido este tránsito pareciera que es el propio proyecto el que "retrasa" el calendario subsiguiente. B.@:i; su parte, el rezago que percibían los del CVM alentó el c,r,uce de fronteras. El proyecto migratorio, en este caso, coadyuvó a viabilizar o culminar el tránsito hacia la adultez.

REFLEXIONES FINALES

tuales, con el surgimiento de nuevos eventos y, finalmente, con el rumbo que adopte el propio curso de vida.

MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 139

13 En un principio, la migración se había concebido con un corto alean· ce, por lo que la perspectiva de retornar al lugar de origen se contemplah temporalmente cerca. . . i

~

más dificultades para poder salir de Argentina (venta d: inmuebles, renuncias a empleos, migración con la familia),:_

Una diferencia sustancial es que en Madrid el deseo· de permanecer se relaciona con la mayor calidad de vid~ alcanzada, misma que se valora en relación con la propia persona, pero con mayor importancia con respecto a los hijos (presentes o por buscar). Se mencionan los beneficios del Estado de bienestar (en materia de educación, salud~ prestaciones sociales) y la mayor seguridad con la que s_e. vive como factores de retención, así como las dificultadrj ­económicas, principalmente­ que implicaría un regresfii en este momento. Por tanto, a diferencia de los anteriore · la idea de retornar se modifica y la reevaluación de dichi:¡; posibilidad se asocia al alcance de ciertas etapas en el curs vital de sus hijos: "cuando termine la primaria", "cuandp sea más grande". 13 1

En pocas palabras, la decisión de migrar y sus inicios, ~ balance del proyecto, así como la valoración de su permanen cia o finalización (retorno), guardan estrecha corresponde . cia con los eventos del curso de vida y con las percepciond de oportunidad que ofrecen los contextos en los diversé dominios de éste. Dicha relación se va reestructurando, 1r:,_ definiendo y resignificando conforme transcurren el proyecf migratorio y la vida. De manera que las percepciones y di1•

cisiones no sólo están basadas en las motivaciones inicialeí · ­mayormente laborales y económicas­ que impulsaron .el cruce de fronteras, sino en la manera en que las dimensiones contextuales van moldeando la biografía y las percepcid nes de los participantes. El proceso de transición hacia f adultez asume particularidades dependiendo no sólo d.é· momento en el que tiene lugar la migración sino también ~e va (re)configurando en relación con las dimensiones conte ·

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MIGRACIÓN Y CURSO DE VIDA 141

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Tras su ocurrencia, una nueva sucesión de eventos incide en la decisión de permanecer o retornar. En este caso, estos nuevos eventos condicionan al proyecto migratorio mismo·

La migración parece acelerar el proceso hacia la adulte (Miranda et al., 2012) al significar la independencia del hog ~·· materno/paterno y, en gran medida, la consolidación de f participación en la actividad económica. El alejamiento d~ hogar de origen conlleva la adquisición de responsabilid.~·. des económicas y la toma de decisiones que necesariamen1f avanzan en el proceso de autonomización característico d~~ tránsito hacia la adultez.

En los relatos citados fue posible apreciar la manera e1í que la migración y la pertenencia a otra sociedad genera ID'&·

dificaciones en la percepción del tiempo biográfico, la flexibí lización en la estructuración de los recorridos transicional~ hacia la adultez, así como la posibilidad de reversibilidad tL eventos (Miranda et al., 2012; Leccardi, 2005) gracias al~ dinámicas propias de la vida tras la migración. .

El momento de la vida no sólo condiciona, impulsa'[ retrasa la migración, sino que también influye en el díñ rencial de oportunidades que los contextos ofrecen para 1: · satisfacción de las necesidades vitales. De manera que la~ decisiones y las estrategias concernientes a la migracirf están estrechamente relacionadas con el curso de vid. (Gardner, 2002), con el tiempo y el espacio (Schulenbergé Schoon, 2012).

Además de mostrar las vinculaciones existentes enfü: un evento­transición, como la migración internacional/e análisis de las trayectorias de los migrantes entrevistadf permitió evidenciar que, aunque el análisis de los evento". marca que son considerados clave en el paso hacia la adult<z. permiten identificar distintas situaciones en dicho paso p:í'Q gresivo, su ocurrencia no necesariamente implica un caml:ia de estado significativo en las etapas de la vida. Resulya necesario problematizar la relación entre estos eventos1,

140 DESAFÍOS Y PARADOJAS

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·~lación y la flexibilidad laboral. En la actualidad, deterioro ii'e~ondiciones laborales, crecimiento del sector servicios, Jelminización del mercado laboral, aumento del trabajo por :&:i\téhta propia, transformación de los modelos de regulación ~lti\boral y reestructuración productiva conforman marcos his­ ­~Gir.icos referenciales de una etapa en la que la inseguridad r~'.boral se ha intensificado y donde las formas que asume etntrabajo en la vida de los trabajadores pueden resultar ~~nitamente diversas y heterogéneas. Este nuevo contexto

;~pone un cambio en la forma en la que los trabajadores .m_gresan al mundo laboral, a la búsqueda y encuentro de

_.__44"""; . ...._•:n ~plpleo, y hacia las orientaciones al trabajo en general. '.'..¡;,¡~, Aunado a los cambios acaecidos en el mercado de trabajo, ·é's~teconocible la profunda transformación en la composición