las 10 cataratas más alucinantes del mundo · fuerza del agua se siente como un torbellino de...
TRANSCRIPT
Las 10 cataratas más alucinantes
del mundo Por Alberto Díaz Pinto
el 01/12/2014
La naturaleza es capaz de crear parajes increíbles e inigualables. Una de
las grandes maravillas de la naturaleza son las cascadas, hasta donde
millones de personas se desplazan, desde cualquier parte del mundo,
para visitarlas año tras año. Las Cataratas Victoria o el Salto del Ángel
son algunas de las más famosas, pero hoy descubriremos que hay
muchas más.
Grandes caídas y con un volumen de agua impresionante, estas cataratas
destacan sobre todo por ser las más hermosas, las más grandes y las más
visitadas. Echa un vistazo a las 10 cataratas más alucinantes del mundo:
1. Cataratas Victoria
No es de extrañar que el “humo que truena” fuera declarada como Patrimonio Mundial por la UNESCO
en el año 1989.
Descubiertas por David Livingstone en 1855, se les puso ese nombre en honor de la reina Victoria de
Inglaterra. Se encuentran en la frontera entre Zambia y Zimbabwe. Los zambianos las llaman “Mosi-oa-
Tunya” (el humo que truena), mientras que los zimbabuenses las llaman “Victoria Falls”.
Se trata de la cascada más grande y singular del mundo, con una anchura de 1,7 kilometros, una
altura de 108 metros y un caudal promedio de 1 millón de litros por segundo. El humo que
desprenden estas cataratas cuando cae el agua, a veces puede ser visto desde 40 kilómetros de
distancia.
2. Cataratas del Niágara
Se trata de las cascadas más famosas e impresionantes de América del Norte, ubicadas en la frontera entre
Ontario y Nueva York. Existen muchas versiones sobre cómo las cascadas adquirieron su nombre. El
nombre “Niágara” es originario de una palabra iroquesa que significa “trueno de agua”. Los habitantes
originarios de la región eran los ongiara, una tribu iroquesa llamada los neutrales por los conquistadores
franceses.
Aunque no son poseedoras de una gran altura, son bastante amplias las más voluminosas de
Norteamérica, ya que por ellas pasa el agua de los Grandes Lagos. Tienen 54 metros de altura y casi 1
kilómetro de anchura, y un caudal promedio de 2.800 metros cúbicos por segundo.
3. Salto del Ángel
El Salto del Ángel, con una altura total de 807m y con una caída total de 979m, es la cascada más alta del
mundo, con el tramo más alto de caída de agua del planeta. El pueblo venezolano de Penom, la llaman
„Kerepakupai merú‟, que significa :”la cascada del lugar más profundo”. Fue descubierta por James
Ángel en octubre de 1937.
Se trata de una las mayores atracciones turísticas de Venezuela, aunque, incluso en la actualidad, no es
fácil acceder a ellas, debido en gran parte a que la zona se encuentra aislada por una selva muy densa, y
los tepuyes, que son mesetas especialmente abruptas, con paredes verticales y cimas muy planas, hacen
que sea muy peligrosa la navegación aérea. Toda una aventura para poder ver este Patrimonio de la
Humanidad desde 1994.
4. Cataratas Kaieteur
Con una caída libre de 226 metros, las cataratas Kaieterur están situadas en el Parque Nacional
de Kaieteur en Guayana Esequiba, territorio situado entre Venezuela y Guyana. Llegan a ser
hasta 5 veces más altas que las cataratas del Niágara y fueron descubiertas en 1870 por Charles
Barrington Brown. Desde entonces se han convertido en uno de los destinos más turísticos del
país.
Se llaman Kaieteur en conmemoración al jefe tribal llamado “Kai”, que se sacrificó en canoa por las
cataratas para complacer al gran espíritu „Makonaima‟, para salvar a su pueblo de una tribu salvaje que
estaba atacando su tierra. La palabra “Teur” significa “cae” en su dialecto.
En la parte superior de este coloso de la naturaleza se encuentra una de las selvas más prístinas que
quedan del planeta, lo que las hace todavía un destino más exótico y atrayente.
5. Cascada Sutherland
Ubicada en el sur de Nueva Zelanda, esta cascada tiene una caída de 580 metros en total, pero el agua cae
en tres saltos, siendo el primero de 229 metros, 248 metros el intermedio y de 103 metros el más bajo.
Esto se conoce como caída en niveles. Los maoríes, el pueblo indígena de Nueva Zelanda, la conocen
como “el hilo blanco”.
Es posible caminar directamente por la base de la cascada Sutherland. Cuando nos encontramos ahí, la
fuerza del agua se siente como un torbellino de viento húmedo, la visibilidad es reducida, ya que el aire se
llena de niebla, y el rugido de la catarata es sorprendentemente fuerte. Dada su ubicación remota en el
Parque Nacional Fiordland (también Patrimonio de la Humanidad), rodeada de naturaleza salvaje, se
convierte en uno de los puntos más destacados de la ruta de „Milford Track‟, una de las mejores rutas
naturales del mundo.
6. Cataratas de Iguazú
Otro impresionante despliegue de cascadas ubicado en la frontera entre Argentina y Brasil. El borde de
las cataratas de Iguazú es más de 2,7 km de ancho, que se precipitan a más de 80 metros de altura a través
de los 275 saltos del río Iguazú. Una fabulosa experiencia activa gracias a los 1,3 millones de litros por
segundo que caen constantemente. Las cataratas se componen de unos 275 saltos y de otras tantas
cascadas individuales.
Las pasarelas hacen que sea muy fácil obtener unas preciosas y cercanas vistas de las cataratas y de los
alrededores de la selva tropical. Una maravilla de la naturaleza que la convierten en una atracción turística
bastante notable.
7. Cascada de Yinlianzhuitan
Esta espectacular cascada surge del río Yangtze, en China. Es una de las más bellas cascadas del mundo.
A pesar de las numerosas caídas de agua, la cascada Yinlianzhuitan no es ni la más alta ni la más grande,
pero su singular belleza y melancolía harán que te encante desde un primer momento.
Las cascadas tienen unos diez metros de caída en forma de embudo, cuyo agua es vertida en la preciosa
piscina natural de la parte inferior. La difusión del agua por las rocas, nos ofrece un efecto óptico
maravilloso, donde las rocas parecen hojas de loto y el agua cadenas de plata. Un verdadero capricho de
la naturaleza y un regalo para los ojos.
8. Cascada Garganta Baatara
Esta maravilla de la naturaleza se encuentra en el Monte Líbano, en Tannurin, Líbano. Su mayor
particularidad es que atraviesa tres puentes naturales, estructuras creadas en una montaña principalmente
de piedra caliza, hito que la convierte en una de las cascadas más espectaculares del mundo.
Fue descubierta en 1952 por Henri Coiffait y posee una caída de 255 metros, dentro de la impresionante
caverna jurásica. También se la conoce como la “Cueva de los tres puentes”. Cuando se derrite la nieve
de las montañas al llegar la primavera, una cascada de 90 a 100 metros surge por detrás de los puentes,
hasta precipitarse 250 metros al vacío, hasta el fondo del abismo.
9. Cascada de Fuego
Ubicada en el Parque Nacional Yosemite, California, esta cascada de fuego sólo es visible en el mes de
febrero y durante unos pocos días. Este milagro natural tan sólo dura unos minutos, justo cuando el sol se
pone y proyecta su luz naranja sobre la cascada situada en la ladera de este promontorio rocoso, cuya
parte más alta alcanza los 910 metros de altura.
Capturar una fotografía de este fenómeno de la naturaleza, quizás requiera mucha paciencia, sobre todo
porque además tiene que coincidir que el tiempo sea favorable para disfrutar de una visibilidad óptima,
pero estamos seguros de que merece la pena.
10. Cascadas de Ouzoud
La guinda del artículo la ponen estas maravillosas cascadas, las más grandes e impresionantes del norte de
África, en Marruecos. Son realmente impresionantes en cualquier época del año, especialmente durante la
época de lluvias. La flora del lugar está formada por idílicos valles verdes, molinos, huertos y las
espectaculares gargantas del río „El Abid‟, que significa “Los esclavos del río”, en árabe.
Es posible nadar en la base de las cascadas. El acceso se hace posible a través de un camino de olivos,
donde se puede ver a cientos de monos jugando durante el crepúsculo.