La corriente

del cristianismo originario

La forma de pensar y de vivir

de los verdaderos cristianos

Del programa de televisin,

que lleva el mismo ttulo,

escrito por Gabriele,

la profeta y enviada de Dios

para nuestro tiempo.

Se siempre

fiel y honesto,

confa en el Seor,

no dejes ni un momento

los caminos de Dios.

La corriente del cristianismo originario

La forma de pensar y de vivir

de los verdaderos cristianos

Jess de Nazaret

no quera una estructura de poder eclesial

ni una casta sacerdotal

La corriente del cristianismo originario comenz muy pronto despus de la muerte de

Jess de Nazaret al ser crucificado. Despus de la muerte de Jess, Su cuerpo espiritual

resucit y regres al Padre. l es el Cristo de Dios, el Redentor de todas las almas y

hombres. Los verdaderos seguidores de Jess de Nazaret -es decir, los cristianos

originarios-, en los pasados 2000 aos fueron siempre perseguidos por el aparato de

poder eclesial; y as sigue sucediendo hasta en la actualidad. La persecucin de los

cristianos originarios tiene un motivo, y es que Jess de Nazaret no quera una estructura

de poder eclesial, integrada por una casta sacerdotal con ttulos y grandes recursos, que

en todas las pocas ha utilizado al gobierno correspondiente para conseguir sus fines,

como tambin lo hizo en la poca de Jess. La casta sacerdotal de aquel entonces fue la

que instig al pueblo para que el para ella molesto Jess de Nazaret fuera entregado al

Csar y a sus secuaces. Fueron tambin estos ltimos quienes hicieron que fuera clavado

en la cruz del martirio, as como lo quera la casta sacerdotal, la que a su vez tambin tena

al pueblo bajo su dominacin.

Qu clamaba la masa del pueblo, aquellos hombres y mujeres que eran los lemingos de

la casta sacerdotal de aquella poca? Hosanna!. Pero poco tiempo despus ya

resonaba un: Crucificadle!. Por qu a raz de la instigacin de los sacerdotes el poder

estatal de aquella poca hizo que se crucificara a Jess de Nazaret? Porque Jess de

Nazaret hablaba en contra del gremio sacerdotal. l era un hombre de paz, un hombre

que rechazaba cualquier tipo de guerra y todo tipo de lucha contra los semejantes. Sus

enseanzas dicen: Todos los que tomen la espada, por la espada perecern.

l era amigo de todos los seres humanos, de los animales y de la naturaleza. l era y es el

Hijo de Dios, el Creador de toda vida.

Jess de Nazaret estaba en contra de todo tipo de cultos y cultos de sacrificios, amaba a

los animales y ayud a todas las personas que fueron a l confiando en Su ayuda

misericordiosa. l habl con poder a los representantes de la casta sacerdotal y no vacil

en mostrarles con palabras claras el espejo de su comportamiento alejado de Dios.

Jess de Nazaret ense a la humanidad los mandamientos de Dios y el Sermn de la

Montaa, que muestran el camino a la casa del Padre. Jess de Nazaret nos trajo a la

humanidad al Padre del amor, al Dios verdadero, a quien todos podemos tratarle de Padre.

Jess de Nazaret se apart decididamente de todo tipo de cultos ceremoniales, de los

ritos, y de los dogmas eclesiales. l estaba en contra de toda parafernalia.

A los escribas y fariseos, a los dignatarios eclesisticos de aquella poca, les dio a entender

claramente que ellos hacan alarde de sus filacterias slo para ser admirados y respetados

por el pueblo. Adems, puso ante sus ojos el espejo para que vieran cmo se presentaban

para ser admirados y les mostr que mantenan una apariencia externa, que en realidad

era falsa. Hasta en nuestros das est escrito: Ay de vosotros, escribas y fariseos,

hipcritas! porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera, a la verdad, se

muestran hermosos, mas por dentro estn llenos de huesos de muertos y de toda

inmundicia.

Jess de Nazaret estaba en contra de que se acumularan bienes, en contra de todo tipo de

riqueza. Recordemos al joven que se acerc a Jess para hacerle algunas preguntas: Vino

un hombre a Jess y le pregunt: Buen maestro, qu bien har para tener la vida eterna?

l le dijo: Por qu me llamas bueno? Slo uno es el Bueno. Mas si quieres obtener la

vida, guarda los mandamientos.

Y entonces le pregunt: Cules? Y Jess dijo: No matars. No cometers adulterio. No

robars. No dars falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre. Y: Amars a tu prjimo

como a ti mismo.

El joven le dijo: Todo esto ya lo he guardado desde mi juventud. Qu ms me falta?

Jess le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y

tendrs un tesoro permanente en el cielo; despus de eso ven y sgueme.

Oyendo el joven estas palabras, se fue triste, porque tena muchas posesiones. Entonces

Jess dijo a sus discpulos: De cierto os digo, que difcilmente entrar un rico en el reino de

los cielos. Jess de Nazaret estaba a favor de la igualdad y de la fraternidad. l estaba por

los pobres.

Sobre los que acumulaban dinero y bienes dijo: Otra vez os digo, que es ms fcil que

pase un camello por el ojo de una aguja, que un rico entre en el reino de Dios.

l, el hijo de Jos, el carpintero, ense que el principio que ha de regir la vida es el de

reza y trabaja, y no el de acumular dinero, oro y bienes a costa de las personas que por

su parte tenan que trabajar como esclavos para el clero. Jess de Nazaret estaba en

contra de todo tipo de usura, ya que sta lleva al aumento del distanciamiento entre ricos

y pobres.

Esta patada de camello de los ricos contra los ms pobres sigue practicndose hasta en la

actualidad. Pero en nuestro tiempo los desiertos son cada vez ms grandes. Para el

camello pronto el agua se va a hacer escasa.

Jess de Nazaret estaba en contra de las iglesias y los templos de piedra. Por qu?

Porque, como l nos ense, cada persona es el templo de Dios, y el Espritu de Dios,

nuestro Padre celestial, vive en cada persona, en cada alma.

Jess de Nazaret nos recomend rezar en estado de recogimiento cuando estemos solos,

en un aposento tranquilo. l dijo: Mas t, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la

puerta, ora a tu Padre que est en lo oculto; y tu Padre que ve en lo oculto te lo

recompensar.

Un gran regalo del Cielo que trajo el Hijo de Dios en Jess de Nazaret fue, entre otras

cosas, el Padrenuestro, que nos trae indicaciones sobre el Reino de Dios, sobre el Hogar

eterno, de donde partimos siendo seres espirituales y a donde regresaremos como seres

espirituales, gracias al gran acto redentor del Cristo de Dios. El Cristo de Dios es el camino

hacia la casa del Padre y la luz que nos ilumina en el camino hacia all.

El significado del acto redentor

de Jess, el Cristo

Las ltimas palabras de Jess en la cruz, Est consumado, tienen un profundo sentido.

Con ello su tarea celestial se haba cumplido, el asegurar el camino hacia la casa del Padre

a todas los hombres y almas, mediante una parte de Su herencia divina. sta pas como

luz y fuerza a las almas de todos los hombres y a las almas de los fallecidos que se

encontraban en los mbitos de purificacin del Ms all. A consecuencia de esto Jess, el

Cristo, es el Camino, la Verdad y la Vida. Siendo Jess de Nazaret, l ya nos haba indicado

que nadie llega al Padre eterno si no es a travs de l. Por eso su llamada dice

Seguidme!.

Por qu ningn alma y ningn ser humano llegan al Padre eterno si no es a travs de l?

Porque Cristo, el Hijo y Corregente del Reino de Dios, mediante el efluir de una parte de la

Ley Absoluta garantiza ante Dios, Su y nuestro Padre, que todos regresaremos al Padre

eterno en el Reino de Dios, a nuestro Hogar celestial. A esta parte proveniente de la

herencia del Cristo de Dios la llamamos la Luz redentora o la Fuerza parcial de la Fuerza

Primaria.

Tengamos presente una vez ms lo que l, el Hijo de Dios, el Corregente del Reino de Dios,

hizo por nosotros, por hombres y almas.

Cuando Jess expres Est consumado en la cruz del martirio, una parte de la Fuerza

primaria, una Fuerza parcial de Su herencia divina, fluy como un destello de luz a todas

las almas, a las almas en los mbitos de purificacin y a las almas que estaban encarnadas,

a los seres humanos. Esta fuerza parcial que procede de la Fuerza primaria, tambin

llamada destello redentor, no se puede cargar. Esta fuerza energtica de luz en cada uno

de nosotros es por as decirlo la garanta de que tarde o temprano vamos a regresar de

nuevo al Hogar eterno. El garante para ello es el Hijo de Dios, el Cristo de Dios. Por eso sus

palabras: Nadie lo llega al Padre eterno, sino es a travs de M y Seguidme.

Cristo es el garante, el aval, no importa cmo nosotros queramos llamar a esta fuerza

salvadora y conductora, a esta luz en el interior de cada alma; todas las almas recorren el

camino de regreso a la eterna casa del Padre en compaa del aval, la Fuerza parcial de la

Fuerza Primaria. En el camino hacia la casa del Padre, hacia nuestro Hogar eterno, cada

uno de nosotros va a aportar a la ley eterna de la vida, esta Fuerza parcial de la Fuerza

Primaria, la luz redentora. Entonces seremos de nuevo seres espirituales, luz procedente

de la luz eterna de Dios, la Luz Primaria.

A pesar de la oposicin encarnizada de la casta sacerdotal, la corriente del cristianismo

originario resurgi una y otra vez

Regresemos a la corriente del cristianismo originario, que hasta nuestros das no se ha

agotado, a pesar de que la casta sacerdotal de todas las pocas, con sus cultos y

parafernalias, y con la ayuda de sus privilegios frente a los gobernantes de cada poca ha

actuado de forma encarnecida contra ella. Las personas que siguen a Jess de Nazaret

-como ya se ha hecho alusin- fueron combatidas en todas las pocas, y ms de una

comunidad cristiano-originaria fue abatida y destruida cruelmente, es decir, exterminada.

Sin embargo, la corriente del cristianismo originario volvi a resurgir una y otra vez. El

Cristo de Dios en Jess de Nazaret prometi a Sus seguidores, que cuando l regresara a la

casa del Padre, les enviara a profetas, es decir, a mensajeros del Reino de Dios que

viviran entre ellos y que les transmitiran la Palabra de Dios.

Para la casta sacerdotal los profetas han sido siempre algo as como una espina clavada en

la piel. En todas las pocas sta luch contra los profetas, y al fin y al cabo contra la

Palabra de Dios. Puesto que Dios siempre habl contra el gremio sacerdotal y sus

maquinaciones de poder, que siempre utiliz al gobierno de cada poca para absorber el

pueblo para s. La jugada de las jugadas dice: Si no lo haces de forma voluntaria, entonces

lo hars por la fuerza.

En los siglos pasados las medidas rigurosas de la Iglesia han sido una obra sangrienta. Los

mercenarios catlicos mataron y masacraron todo: a nios, ancianos, mujeres y hombres,

a todo lo que no corresponda al carcter de culto catlico. Sangre, sangre y ms sangre

hasta incluso en el siglo pasado. Hoy en da el lema de la casta sacerdotal y de los

gobernantes que se apresuran a adherirse a ella, es el asesinato moral, dirigido a quienes

siguen la Palabra de Dios, que en la actualidad est hablando de nuevo a travs de la

palabra proftica.

Para una tica y moral ms elevadas:

el Padrenuestro y

los cinco principios para la vida

De nuevo fluye la corriente del cristianismo originario, y de nuevo Jess de Nazaret ha

hecho realidad Su promesa. Los seguidores de Jess de Nazaret son conducidos por Dios

Padre y por Cristo, el Redentor de todas las almas y hombres, a travs de la palabra

proftica.

Los verdaderos seguidores de Jess, el Cristo, es decir, los cristianos originarios en el

sentido del Nazareno, piensan y viven segn lo que Jess de Nazaret ense a la

humanidad. Se esfuerzan en cumplir los Diez Mandamientos de Dios, dados a travs de

Moiss, y el Sermn de la Montaa de Jess.

A los seguidores de Jess de Nazaret les han sido manifestados por el Espritu de Dios los

cinco principios divinos, contenidos del Sermn de la Montaa de Jess que son el camino

para la verdadera vida. stos abren al ser humano perspectivas gracias a las cuales es

posible una convivencia pacfica, sin superiores ni subordinados, as como nos lo ense

Jess de Nazaret y como nos lo expres en el Padre-nuestro, para que pueda surgir un

Reino de la Paz.

El Padrenuestro de los cristianos originarios dice:

Padre nuestro, que ests en los Cielos.

Santificado es Tu nombre.

Nuestro Reino viene.

Tu voluntad se hace, en la Tierra como en el Cielo.

Nos das nuestro pan de cada da.

Y nos perdonas nuestras deudas, as como nosotros perdonamos a nuestros deudores.

Nos guas en la tentacin.

Y nos liberas del mal.

Pues nuestro es el Reino, el poder y la gloria de eternidad a eternidad.

Los contenidos de los cinco principios para la vida, para una tica y moral ms elevadas,

son indicaciones y ayudas para quienes aspiran a Dios. Ellos son: igualdad, libertad, unidad,

fraternidad y justicia.

Cmo piensan y viven los verdaderos seguidores de Jess de Nazaret de la actualidad, los

cristianos originarios? Qu significa para ellos la igualdad?

Para los seguidores de Jess de Nazaret igualdad significa que ninguno se pone por

encima de otros.

Igualdad significa que los cristianos originarios no ven ni tratan a otras personas como si

fueran inferiores o incluso como si no tuvieran valor.

Los cristianos originarios no tienen iglesias de piedra. Tampoco estn organizados. Tienen

salas de oracin que estn abiertas para todo el mundo.

As lo quiso Jess de Nazaret, y as lo cumplen los verdaderos seguidores de Jess, el Cristo.

Rezan en habitaciones limpias y sencillas. A sus horas de oracin y de enseanza puede

acudir libremente cualquier persona, y tambin marcharse libremente.

Los cristianos originarios no misionan ni mendigan, porque cualquier forma de misionar es

ejercer coaccin haciendo uso de la elocuencia correspondiente. Quien viene a los

cristianos originarios de la actualidad, es bienvenido. Quien los apoya econmicamente, lo

hace libremente.

A ciertas horas escuchan meditaciones y profundizan en las palabras de interiorizacin.

Rezan por las personas que sufren, por los enfermos y los que estn en el lecho de muerte,

y siempre son conscientes de que en el Espritu del Padre del amor toda persona es su

hermano, o respectivamente su hermana.

En las empresas de los cristianos originarios estn empleadas personas de todas las capas

sociales, no importando cul sea su religin. Lo que es esencial en los contratos laborales

de los cristianos originarios es la honradez, la franqueza y la pulcritud. Debido a que en

estas empresas trabajan personas de diferentes religiones e ideologas, hay en ellas

empleados y responsables. El responsable que dirige la empresa, y que por tanto lleva la

responsabilidad por ella, gana algo ms que el empleado. Pero ambos -empleado y

responsable- son remunerados segn los criterios del Estado social. Los responsables no

se ponen por encima de los empleados, tampoco en lo que se refiere a posibles pagos

extras, al contrario de lo que es usual en las llamadas empresas del mundo, es decir, del

sistema del poder. En todas las circunstancias de la vida el lema de los seguidores de Jess

de Nazaret es: S siempre fiel y honesto.

La igualdad significa tambin tener respeto ante todas las formas de vida, tambin por los

animales como por la naturaleza. Los cristianos originarios no matan intencionadamente a

ningn animal. Tampoco consumen la carne de los animales, a los que denominan su

prjimo animal o sus hermanos menores. Todo animal respira el mismo aire que cada ser

humano; tiene la misma respiracin. El mandamiento de los verdaderos seguidores de

Jess de Nazaret significa, entre otras cosas, el ocuparse de las plantas con comprensin y

cuidado, pues cada rbol, cada hierbecita, toda forma de vida de la naturaleza lleva en s

la vida. Y la vida es el hlito de Dios.

Los cristianos originarios no viven en edificios suntuosos y de lujo. Viven de manera

ordenada en viviendas y casas, y si es posible, en viviendas comunitarias. Los cristianos

originarios dan importancia a una vivienda acogedora, slida y limpia. Se visten con ropa

limpia y presentable.

No dan valor alguno a ttulos ni a riquezas. Ningn cristiano originario se quiere destacar

ante el otro, por ejemplo, con su manera de vestirse o con sus ttulos. No exigen un trato

de acuerdo con los ttulos profesionales que tengan. Entre s todos son hermanos y

hermanas desde el espritu del Eterno.

La igualdad da origen a la libertad.

Quien aspira concienzudamente y con seriedad a cumplir el principio de la igualdad en la

comunidad cristiana originaria, no tiene motivo alguno para tener envidia o ser altanero.

De esa manera slo estara menospreciando a otros para sobrevalorarse a s mismo.

Los verdaderos seguidores de Jess de Nazaret, es decir del Cristo de Dios, hermanos y

hermanas en Su Espritu, no son pobres. Poseen lo que necesitan y ms an. Eso significa

que no consumen su existencia terrenal viviendo con escasez y que no son tacaos con

aquello que tienen.

Estimados lectores, qu significa para ustedes la libertad?

La libertad significa entre otras cosas: no obligues a tu prjimo a hacer nada que l no

quiera. Djale el libre albedro, pues ante la eterna ley csmica cada ser humano es

responsable por su manera de pensar, hablar y obrar.

La libertad est basada en la sinceridad y en el respeto por el prjimo. La falta de

sinceridad tiene siempre como base la deshonestidad: un juego al escondite ante los otros.

Quien se somete a s mismo a un autocontrol, inevitablemente se orientar a la frase de

Jess de Nazaret que dice: Lo que quieras que otros te hagan a ti, hazlo t primero a

ellos. O dicho de otra manera: Lo que no quieras que te hagan a ti, no se lo hagas

tampoco t a nadie. Esto vale para la forma de pensar, hablar y actuar.

Los seguidores de Jess de Nazaret, como todos los seres humanos, son ciudadanos del

Estado en el que viven. Respetan las leyes del Estado y se esfuerzan en cumplir las

palabras que dicen: Dad al Csar lo que es del Csar, y a Dios lo que es de Dios.

Los verdaderos seguidores de Jess de Nazaret no quieren convencer a sus semejantes, a

su prjimo, de su creencia y forma de vivir. Para ellos tiene validez el realizar en su vida

aquello de lo que estn convencidos y de esa manera demostrar la veracidad de su

conviccin. Por ello las personas en el Espritu del Cristo de Dios no misionarn, es decir

no querrn convencer a otros.

La libertad significa, entre otras cosas, no imponer a nadie una religin o el bautizo de un

nio. Los seguidores de Jess de Nazaret rechazan el bautizo de los nios. Por qu?

Porque el menor de edad todava no puede decidir qu creencia quiere seguir o a qu

confesin quiere pertenecer. Cuando la persona sea adulta puede decidir por smisma

cmo quiere vivir, y si desea ser bautizada o pertenecer a una confesin eclesial. Jess de

Nazaret, que fue un ejemplo de libertad para todos nosotros, nos mand: Primero

ensead y despus bautizad. El adulto debe decidir por lo tanto libremente cmo quiere

pensar y vivir. Juan el Bautista dijo en el Jordn: Yo os bautizo con agua. Pero el que

viene despus de m es ms poderoso que yo, y yo no soy digno ni siquiera de desatar la

correa de sus sandalias. l os bautizar con el Espritu Santo y con fuego.

Por este motivo cada persona debera elegir libremente su creencia religiosa, porque

nadie puede demostrar al otro la existencia del Espritu de la Verdad, Dios. Dios, el Eterno,

y Su hijo, antao encarnado en Jess de Nazaret, ensearon a los seres humanos el

camino del autorreconocimiento y de que uno se experimente a s mismo. Si cada persona

sigue el camino que Dios, el Eterno, y Jess de Nazaret nos han mostrado, si se atiene a los

mandamientos de Dios y a las enseanzas de Jess, el Cristo, sobre todo al Sermn de la

Montaa, l mismo har as la experiencia de que Dios, la Vida universal, el Amor

universal, existe.

Jess de Nazaret no ense a los seres humanos a ir a una iglesia de piedra para rezar, es

decir, para conversar ntimamente con el Espritu eterno, Dios. l nos recomend: Mas t,

cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que est en lo

oculto; y tu Padre que ve en lo oculto te lo recompensar.

Los verdaderos seguidores de Jess, el Cristo, estn agradecidos por la palabra proftica.

Jess, el Cristo, el Inspirador divino, vuelve a ensear en la actualidad a los seres humanos

a travs de Su profeta a comprender los Diez Mandamientos dados a travs de Moiss y

cmo Su Sermn de la Montaa puede ser vivido.

Jess de Nazaret ense a los seres humanos la libertad, como tambin lo hace

actualmente el Cristo de Dios. Toda manera de ejercer coaccin no proviene de Dios,

como por ejemplo los muchos preceptos obligatorios de las instituciones eclesisticas.

Todos los preceptos eclesisticos han sido impuestos por la casta sacerdotal a sus

creyentes. Si estos no cumplen determinados mandatos, como por ejemplo las

enseanzas del catecismo y los dogmas de la institucin eclesial, de acuerdo con las

prescripciones eclesisticas ellos estn condenados eternamente. Segn la concepcin

eclesistica, el que ha sido condenado eternamente tiene que consumirse como alma para

siempre en el infierno, es decir por toda la eternidad.

Los que han sido canonizados por la Iglesia, los llamados santos, supuestamente bajan su

mirada al infierno y encuentran agrado con las torturas que padecen esas almas, tal y

como ense el padre de la Iglesia, Toms de Aquino, que fuera canonizado, y dijo: Para

que a los santos les agrade ms su santidad y agradezcan an ms a Dios por ello, les est

permitido ver plenamente los castigos de los condenados.

No obstante, en los Diez Mandamientos de Dios no se dice nada de todo esto y tampoco

Jess de Nazaret ense algo semejante.

En el Espritu de Dios no hay ninguna coaccin. Slo viviendo en libertad el alma se

despliega y el ser humano se desarrolla.

Como ya se ha dicho, en el Espritu de Dios no existe coaccin alguna. Los mismos Diez

Mandamientos de Dios dan testimonio de ello, ya que empiezan con las palabras No

deberas. (En idioma alemn, en vez del tiempo futuro usado en espaol, se expresan

como recomendaciones, en el sentido de No debes o No deberas. Nota de los

traductores). Sin embargo, en las instituciones eclesisticas se expresan (en alemn) en el

sentido impositivo de Tienes que.... Quien no se somete en obediencia a la Iglesia est

condenado eternamente. Y quien no pertenece a la Iglesia catlica est en todo caso

excluido de la salvacin. En el libro La fe de la iglesia en los documentos de la

promulgacin de la doctrina de la fe de los autores alemanes Neuner y Roos se lee: La

santa Iglesia de Roma, fundada por la palabra de nuestro Seor y Salvador, cree

firmemente, declara y proclama que nadie fuera de la Iglesia catlica, ni pagano, ni judo,

ni no creyente o una persona que se ha apartado de la unidad, puede participar de la vida

eterna, sino que caer en el fuego eterno, que est preparado para el demonio y sus

ngeles, si antes de morir no se adhiere a ella... Aunque uno d las limosnas que quiera,

incluso derrame su sangre en el nombre de Cristo, no podr ser salvo si no permanece en

el seno y en la unidad de la Iglesia catlica. (N 381)

Doctrinas eclesisticas de este tipo o similares no tienen nada que ver con Dios ni con

Jess, el Cristo. Dios no obliga a nada. Dios es la libertad, que dice: Libremente y sin

coaccin debes venir a Dios, tu Padre. Slo en libertad puede desarrollarse la vida. Slo en

libertad, orientndose libremente a los mandamientos de Dios ya las enseanzas de Jess

de Nazaret, el alma se despliega y el ser humano se desarrolla. La sinceridad y la honradez

son, entre otras cosas, las medidas de valor de la libertad. Del respeto hacia el prjimo y

de la fidelidad a Dios resulta el carcter noble. Las personas en el espritu de la libertad

son decentes; ellas se comportan tal y como nos ense Jess de Nazaret, cuando expres

palabras en el siguiente sentido: Quien desee seguirme a M, Cristo, que sea recto,

honesto, y sincero. l tiene respeto por su prjimo.

La tica que tiene una persona tal corresponde a la enseanza de Jess, quien nos dio

ejemplo de disciplina, lo que se expresa tambin en las siguientes palabras: Lo que

quieras que otros te hagan a ti, hazlo t primero a ellos. sta es la verdadera tica

cristiana que debera ser vivida en cada situacin del da. nicamente la verdadera tica y

moral cristiana contribuira a que a un pueblo le fuera bien. La verdadera tica y moral

cristiana est basada en una postura interna firme. De ella se desarrollan los verdaderos

valores cristianos. Quien se oriente a los verdaderos valores cristianos, es decir, aspire a

valores ms elevados, de acuerdo con la enseanza de Jess de Nazaret, se convertir en

una persona virtuosa, fiel y que vela por la moralidad en todo sentido.

La verdadera tica y moral cristiana es expresin de una postura espiritual. La fina

percepcin de un verdadero seguidor de Jess de Nazaret se muestra en su actitud

discreta y reservada. l no habla mal de nadie, ni polemiza. No se comporta de forma

grosera. No habla al gusto del prjimo. No cae en el darse importancia ni fomenta ningn

tipo de rituales de elocucin para ser escuchado y ser visto. Sus vestiduras tienen estilo

pero no estn provistas de ornamentos innecesarios ni de adornos. No se viste con

ropajes especialmente diseados para ser considerado por su prjimo como algo especial.

Como ya se ha dicho, las personas con un carcter espiritual se comportan de forma

discreta. Tienen estilo, por ejemplo respecto a la forma de comer y de vivir. Se comportan

sin imponerse, discretamente y con buenos modales, no de forma grosera, tanto en la

mesa como en las conversaciones en general. Tambin en casa cuidan su comportamiento

espiritual divino. Un carcter espiritualmente recto, que desde el interior ha crecido en

autodisciplina y conviccin positiva, capacita para tener una conducta recta, decente y un

comportamiento honesto.

Estimados lectores, en vista de estas palabras quizs piensen que una persona as debe ser

ya perfecta. De ninguna manera. No existe ningn ser humano absolutamente perfecto.

Pensemos en qu se puede considerar en la Tierra como algo absoluto? Absolutamente

perfecto es solamente Dios, al igual que los seres divinos, que son absolutamente puros,

porque viven en la Ley Absoluta del amor y de la libertad.

La medida para llevar una vida como Dios quiere: Qu ense Jess, el Cristo?

Los seres humanos podemos hablar de diferentes grados de consciencia. Un ser humano

puede tener un estado de consciencia ms elevado porque se orienta en su existencia

terrenal a los Diez Mandamientos de Dios y a las enseanzas de Jess de Nazaret, a la

elevada tica del Reino de Dios.

Todo ser humano tiene una consciencia que corresponde a los contenidos de su manera

de pensar, hablar y actuar. Esto no quiere decir que palabras elocuentes y elogiadoras, o

que la palabrera empalagosa signifiquen que se tenga un estado de consciencia elevado.

Como ya se ha dicho, lo decisivo son siempre los contenidos de nuestros pensamientos,

palabras y actuaciones, es decir, aquello que quizs ocultamos detrs de nuestro

comportamiento. Muchas veces se trata de aquello que no queremos revelar para que

nuestro prjimo no se haga una mala imagen de nosotros.

Ahora bien, los verdaderos seguidores de Jess de Nazaret no son perfectos. Tambin

ellos tienen que luchar a diario con aquello que les trae el da. Como todo ser humano,

ellos tienen que luchar contra la ebullicin de sus emociones cuando, dicho con toda

franqueza, algo les resulta desagradable. Tambin tienen que practicar da a da el

autocontrol. Pero lo que no hacen es disparar a la cara de otros sus inclinaciones

demasiado humanas. En las conversaciones en general, pero tambin en las

conversaciones ms personales, tambin en las del trabajo, se retraen un tanto, sopesan y

se esfuerzan en tratar al interlocutor de manera justa y honrada. En el trabajo se

esfuerzan en captar y realizar con atencin lo que es la tarea del da y en confrontarse con

ella. Puesto que realizar correctamente un trabajo, as como el sentido de la

responsabilidad y un buen rendimiento pertenecen a su estilo de vida. No tienen afn de

protagonismo. No explotan a su prjimo disparndole de modo certero sus aspectos

humanos pecaminosos, para sacar provecho de ello.

Y si ahora se preguntaran por qu una y otra vez se habla de verdaderos seguidores de

Jess de Nazaret, hay que decir al respecto lo siguiente: En todo el mundo hay cristianos

originarios que se denominan seguidores de Jess de Nazaret. Pero nadie puede poner la

mano en el fuego sobre cmo ellos viven, sobre lo que piensan y cmo actan. Lo que se

describe aqu, es decir, lo que se ha explicado, son criterios para una elevada tica y moral,

para cristianos originarios que verdaderamente siguen a Jess de Nazaret.

Aqu se exponen ahora una vez ms los principios que son la medida y la orientacin para

el grado de veracidad de toda persona que se llame cristiana, no importa si pertenece a

una religin o si es libre de toda coaccin religiosa.

Todo lo que es eclesial e institucional y que tiene lugar en las iglesias de piedra

-recordemos tan slo los preceptos y dogmas eclesisticos-, debera ser cuestionado en

relacin a aquello que ense Jess de Nazaret.

Los cinco principios para una tica y moral espiritual ms elevada, que son la medida de

cristiano son: igualdad, libertad, unidad, fraternidad y justicia.

Todo ser humano es libre de creer y de hacer aquello de lo que actualmente est

convencido. Maana puede que sea algo totalmente diferente. Que cada persona sea y se

comporte honradamente, verazmente y que sea tambin fiel a s misma. Pero cada cual

tambin tiene la libertad de seguir desarrollndose libremente. Por ello se dice: Pero sea

vuestro hablar: SI, s, y no, no; porque lo que va ms all de esto, procede del mal. Y

quizs para uno u otro tenga validez la frase: Quien lo quiera captar que lo capte. Y

quien lo quiera dejar que lo deje.

Y, quien lo desee, puede dejar resonar una y otra vez en su interior las lneas de esta

antigua cancin popular alemana:

Se siempre

fiel y honesto,

confa en el Seor,

no dejes ni un momento

los caminos de Dios.

Mucho de lo que Jess haba enseado fue ocultado a la humanidad, pues en la Biblia

actual slo se encuentra lo que Jernimo (383) pudo incluir en los evangelios. En esta gran

obra divina manifestada sta es Mi Palabra leemos la verdad expresada por Cristo sobre

Su vida, su forma de pensar y vivir siendo Jess.

Del contenido: La infancia y juventud de Jess Los fariseos de ayer y hoy Jess amaba

a los animales y siempre los ayud El Sermn de la Montaa Sentido y finalidad de la

vida en la Tierra Condiciones para la sanacin del cuerpo Jess da enseanzas sobre el

matrimonio Sobre la entidad Dios Dios no se enoja ni castiga La enseanza de la

condenacin eterna es una burla a Dios Sobre la muerte, el renacer y la vida Igualdad

entre el hombre y la mujer El futuro de la humanidad El verdadero significado del acto

redentor, y muchos temas ms.

1.077 pgs., n de pedido S007es, 15 uros

ISBN: 978-84-8251-047-9

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