Fidelidad en el matrimonio5:15–23

Introducción: Los altos índices del divorcio en nuestro medio dan testimonio de que algo anda mal en la sociedad. La infidelidad en el matrimonio es un síntoma de la desintegración de la institución del hogar.

I. La importancia de mantener relaciones exclusivas “Bebe el agua de tu propia cisterna y de los raudales de tu propio pozo.” V.15.

A. Aquí hay una invitación a disfrutar la sexualidad en el matrimonio. Es en el matrimonio donde se disfruta con libertad la sexualidad. El amor, la pasión, el placer, se debe consumar con libertad dentro del matrimonio. Es allí donde está la fuente de satisfacción sexual.

B. La Biblia no acepta una relación extramarital. Tomar agua de otra cisterna es incorrecto y trae consecuencias amargas al hombre y a su familia. Una relación fuera de la familia deteriora, arruina una relación saludable.

C. La esposa debe ser fuente de amor, no de odio, ni rechazo. Que cuando el esposo la busque sacie su sed de amor y no tenga necesidad de ir a otros posos para beber.

D. Cuantas hay que su fuente de agua se ha secado, aquella abundancia de amor se ha ido terminando y ha sido reemplazo por la amargura, la ira, el rencor.

II. Es privilegio y deber mutuos “¿Se han de derramar afuera tus manantiales, tus corrientes de aguas por las calles?” v.16

A. Que el matrimonio prospere, sea de bendición, se multiplique en hijos saludables, que tengan fortaleza e integridad.

B. El matrimonio debe haber abundancia de amor, debe ser una fuente inagotable, donde no falte nunca el amor. Donde no haya necesidad de buscar otras relaciones para nutrir de amor

C.III. Es fuente para suplir necesidades personales.

A.IV. El privilegio de dar y recibir el amor.

A.V. Cada persona anhela la relación íntima que ofrece

el matrimonio.A.

VI. El compartir las intimidades de la vida nos hace más completos y da sentido de tranquilidad.

A.

VII. La satisfacción sexual en el matrimonio tiene la bendición de Dios.

A.VIII. Nos da alegría, v. 18.

A.IX. Nos recrea, v. 19.

A.

Conclusión: Hoy en día el sexo se ha degradado porque hay mucha comercialización del tema. Dios creó al hombre de tal manera que puede y debe gozar de la expresión sexual de sus necesidades dentro del matrimonio. Así el impulso sexual enriquece la vida.