Download - Desahucio de un proyecto político
Franklin López Buenaño, Ph.D.
Nueva proposición de dicotomía Construccionismo
Afán de “construir” una sociedad más justa y próspera “desde arriba”, es decir, utilizando el poder coercitivo del Estado
Autonomismo
La sociedad “espontáneamente” descubre arreglos individuales y colectivos para satisfacer necesidades y deseos
El mito del construccionismo Hay una fe en que los gobernantes pueden ser ingenieros
sociales Se cree que se puede poner un impuesto por aquí, un subsidio
por allá, una regulación más allá y listo se obtienen los resultados deseados
El construccionismo tiene varios “tonos” El más radical es el comunismo marxista
El menos radical es la social-democracia
El ecuatoriano es más bien populista y caudillista Populista porque gasta para satisfacer las exigencias de los votantes
Caudillista por los cambios necesitan líderes fuertes con un marco constitucional que le empodere y que lo legitime la mayoría
El camino histórico El Ecuador, a partir de 1960, se embarcó en procesos
construccionistas
Gobiernos dictatoriales
Gobiernos socialdemócratas
Gobiernos conservadores
Gobiernos populistas
Gobiernos reformadores
CEPAL, NN.UU., Banco Mundial, FMI, Alianza para el Progreso, inclusive el Consenso de Washington
El proyecto político de la Revolución Ciudadana es construccionista
La Constitución de Montecristi concentró el poder en la Función Ejecutiva y es socialista
Mayor intervención del gobierno en todos los ámbitos
Planificación estatal (SENPLADES)
Políticas de redistribución de riqueza e ingresos
Sistema tributario progresivo
Democracia participativa: dictadura de la mayoría
El construccionismo es una pendiente resbalosa al despotismo Para cambiar desde arriba se necesita poder
Mientras más profundos y extensos los cambios más poder se necesita
La personalidad caudillista es un ingrediente adicional El poder es un ingrediente adictivo, similar a una droga, en
psicología se llama cratomanía, o adicción al poder
Los cratómanos o cratópatas, una vez en el poder no pueden dejarlo y más bien se afanan por conseguir más poder Pero el libro no es una crítica a Correa sino al proyecto político
implementado por la izquierda ecuatoriana
Las semillas de su propia destrucción El grado de utilización del poder
Primero hay que destruir para poder construir
Hay que concentrar el poder
La apariencia de legitimidad es indispensable
La disponibilidad de utilizar recursos ajenos
El que parte y reparte se queda con la mejor parte
Lo que no cuesta hagámoslo fiesta
En arca abierta el justo peca
Es fácil ser socialista con la plata ajena
La malignidad del poder Mientras más poder tienen los gobernantes
más fácil el derroche mayor la malversación de fondos más ubicua la corrupción
Cuando no hay límites al poder La utilización del poder atrae un séquito de sicofantes,
de adulones, de oportunistas, hasta de ingenuos que creen estar “haciendo por el bien del país”
– Los resultados son el autoritarismo, el despotismo, la violación a los derechos humanos
La limitación al poder dentro de la Revolución Ciudadana no existe
Dos características del proyecto socialista
La planificación estatal
SENPLADES
La redistribución de recursos
Impuesto progresivo a la renta
Gasto social
Subsidios
La falencia de la planificación La planificación supone establecer unos objetivos y aplicar
los medios necesarios para conseguirlos Por eso se llama ingeniería social
El problema es epistemológico ¿Quién sabe más, el gobierno (gobernantes) o usted?
Dos tipos de conocimiento Conocimiento general Conocimiento específico
Los planificadores nunca pueden llegar a tener el conocimiento específico porque es disperso Mientras más planifica el gobierno hay menos espacio para la
planificación individual
Los esfuerzos redistributivos Desincentivan las actividades productivas
Propician la dependencia
Es mejor enseñar a pescar
Se fomenta el mercantilismo o rentismo, porque las empresas que operan bajo los privilegios estatales se convierten en monopolios y oligopolios
Ahuyentan la inversión nacional y extranjera
Son políticas clientelares, no políticas para eliminar la pobreza
El magro desempeño económico
Conclusiones El proyecto político hace agua
Aumentan los inconformes
El despotismo se profundiza
La independencia de poderes casi ha desaparecido
El desempleo, la delincuencia, la corrupción se ha exacerbado
A pesar del gasto público las deficiencias en la salud, en la educación continúan
Recomendaciones Tal vez algo una buena lección que podríamos obtener es la de
haber caído en cuenta que los experimentos “socialistas” (construccionistas) están condenados al fracaso
Durante los años que vienen los autonomistas deberán identificar a los líderes y apoyarlos en la formación de un partido político que consagre en su ideario la defensa de los derechos económicos y civiles, la apertura a los mercados internacionales, la competencia, etc.
Pero sobre todo que establezca, sin dudas ni ambages, una Constitución diseñada para limitar el poder. Entonces sí creo que entraríamos a caminar por la senda que lleva a la paz y a la prosperidad.