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DOCUMENTO TÉCNICO Nº2 FEBRERO 2011

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  • DOCUMENTO TÉCNICO Nº2FEBRERO 2011

    Alsina 1586 piso15 of.9 CABA. Argentina | Tel.: 4383-0632 | E-Mail: [email protected]

  • LA INFLACIÓN BAJO EL RÉGIMEN DE TIPO DE CAMBIO COMPETITIVO

    Andrés Asiain

    DOCUMENTO TÉCNICO Nº2 - FEBRERO 2011

  • DirectoraFelisa Miceli

    IntegrantesAndrés Asiain

    Agustín CrivelliLorena PuteroJorge Marchini

    Graciela BarbieriGraciela Orfeo

    Gustavo Kun SabóAdrián González

    Ramón Torres

    Grupos de InvestigaciónAlejandro Rofman

    Rodrigo LópezCecilia GárganoDiego Mansilla Guido Perrone

    Valeria MutuberríaAgustín Mario

    Emilio Rodríguez

    CorrecciónMaría Gabriela Ini

    Las opiniones vertidas en el presente Documento Técnico son responsabilidad exclusiva del autor. El CEMOP no necesariamente coincide con las mismas. Para consultas dirigirse a [email protected]

  • 5

    ÍNDICE

    Resumen Ejecutivo 7

    Introducción 11

    1- Dinámica de precios bajo el régimen de cambio competitivo 12

    2- La evolución de los precios de la canasta de consumo 17

    3- Tipo de cambio, precio internacional de las materias primas y retenciones 19

    4- La mesa de los argentinos ante la “sojización” del campo 24

    5- Los salarios 29

    6- La competitividad industrial 32

    7- Las políticas de estabilización tradicionales 38

    8- Concentración de mercados y márgenes de ganancia 42

    9- El combate a la inflación bajo un régimen de tipo de cambio competitivo 45

    10- Conclusión 48

    11- Anexo I - La inflación en la opinión de la academia y los actores sociales 51

    12- Anexo II - La historia inflacionaria 53

    12.1- Industrialización e inflación estructural (1946-1974) 57

    12.2- La alta inflación, (1975-1991) 59

    12.2.1- Elementos claves de la dinámica inflacionaria 60

    12.2.2- El fracaso de los planes de estabilización 63

    12.2.3- La hiperinflación 64

    12.3- La Convertibilidad (1991-2001) 66

    13- Bibliografía 68

  • 7

    LA INFLACIÓN BAJO EL RÉGIMEN DE TIPO DE

    CAMBIO COMPETITIVO

    RESUMEN EJECUTIVO

    El contexto de excepcional crecimiento de la economía Argentina en los últimos

    años ha venido acompañado de un incipiente proceso inflacionario que se ha instalado

    como uno de los principales problemas a resolver. La inflación es un problema en

    cuanto afecta a dos de los pilares del modelo económico en curso (Fraschina, 2010). Por

    un lado, carcome el valor real del tipo de cambio industrial. Por el otro, impide la

    concreción de una distribución más justa de los ingresos al deteriorar el poder de

    compra de los salarios, jubilaciones, asignaciones, planes de empleo, etc.

    El reciente movimiento ascendente en el nivel general de los precios fue el

    resultado de incrementos en los precios de los distintos sectores y factores de la

    producción, cuyo movimiento no fue homogéneo. Más específicamente, la devaluación

    del peso en 2002 generó un alza importante en los precios relativos de los productos

    agropecuarios que se profundizó a partir de 2007 a causa del aumento de sus precios

    internacionales. En segundo lugar y en menor medida que los precios agropecuarios, el

    establecimiento de un tipo de cambio real elevado permitió el incremento de los precios

    de los productos industriales. Pese a acelerar su marcha ascendente hacia finales del

    período, el incremento del salario ha sido menor que el de los precios agropecuarios y

    manufactureros, aunque superior al de los servicios que fueron los que más terreno

    perdieron en esta nueva etapa.

    Estos ajustes de precios sectoriales y factoriales tienen como causa subyacente la

    tensión entre:

    1. la distribución del ingreso que resultó del establecimiento de un tipo de

    cambio real elevado en un contexto de elevados precios internacionales de

    las materias primas;

    2. las aspiraciones de los asalariados por recuperar el poder de compra de sus

    ingresos (y, en menor medida, las de los empresarios del sector de servicios).

  • 8

    Dinámica del proceso inflacionario bajo el régimen de tipo de cambio competitivo.

    Respecto a la evolución de la canasta de consumo con la que se suele medir la

    inflación, el período se caracterizó por un alza permanente del costo de sus

    componentes. Los principales saltos inflacionarios se corresponden, en primer lugar,

    con la devaluación de 2002 que impactó especialmente en el costo de los bienes

    transables que la componen; y en segundo lugar, a partir de 2007, con el alza

    internacional de las materias primas que se transfirió al precio interno de los alimentos.

    El impacto inflacionario de la devaluación y el encarecimiento internacional de

    las materias primas intentó contenerse mediante la aplicación de derechos de

    exportación a los hidrocarburos, la soja, el maíz y el trigo, fundamentalmente. Si bien

    esa política fue efectiva en términos de desacoplar el precio interno de dichos bienes

    respecto a su valor en el mercado mundial, sólo lo hizo parcialmente debido a que, en

    general, las tasas no se ajustaron en forma tal de absorber plenamente las variaciones

    del cambio y el precio internacional (entre otros motivos, por la exitosa oposición de los

    empresarios del sector).

    En las últimas décadas la producción agropecuaria argentina se caracterizó por el

    avance de la soja frente a otros productos, gracias a la alta rentabilidad asociada al uso

    de nuevos paquetes tecnológicos y su elevado precio internacional. Ello impone a futuro

    un desafío a las políticas de reducción del precio interno de los alimentos. Más

    específicamente, se requieren políticas sectoriales que permitan abastecer el mercado

    interno con alimentos baratos sin reducir la rentabilidad de su producción frente a la

    soja (que casi no se consume en el país).

    Los resultados de los intentos de los trabajadores de recomponer el poder

    adquisitivo de sus ingresos variaron de acuerdo al tipo de empleo. Los privados

    TCN ALIMENTOS

    INDUSTRIA

    SALARIOS

    SERVICIOS

    COMPETITIVIDAD

    INDUSTRIAL

    PRECIOS EXTERNOS

  • 9

    registrados comenzaron pronto la carrera detrás de los precios – gracias a la

    intervención estatal vía aumentos por decreto- superando el nivel real de fines de la

    convertibilidad a partir de comienzos de 2005. El alza del salario de los privados no

    registrados fue lenta al comienzo y se aceleró en los últimos años. Esa evolución parece

    explicarse por los cambios en el mercado de trabajo generados por la reducción del

    desempleo y las políticas de ingresos indirectos destinadas al sector informal. Los

    trabajadores del Estado fueron los grandes perdedores, cediendo sus salarios más de un

    20% del poder de compra respecto a los finales de la convertibilidad.

    Pese al aumento del costo salarial, la competitividad industrial pudo mantenerse

    gracias a la devaluación real del precio de las manufacturas frente a las de los EEUU y

    Brasil, facilitada por el incremento de la productividad laboral, el abaratamiento relativo

    de la energía eléctrica y el contexto de fuerte expansión de la actividad que permitió la

    obtención de una elevada rentabilidad, manteniendo (o reduciendo si se toma como base

    al año 2002) el margen empresarial sobre los costos.

    Las políticas tradicionales de estabilización mediante la reducción del gasto

    público y con él, del nivel de actividad, buscan ampliar el desempleo para reducir el

    poder de negociación de los sindicatos. De implementarse, afectarían a uno de los

    pilares del proceso de crecimiento de los últimos años: la búsqueda de una más justa

    distribución del ingreso. Y ello podría afectar el segundo pilar, la competitividad

    industrial, si el menor nivel de ingresos salarial deprime la demanda y el nivel de

    actividad económica, reduciendo las economías de escalas industriales.

    Otras medidas más heterodoxas como la regulación de precios en la industria y

    los servicios pueden ser útiles para reducir la rentabilidad extraordinaria de algún sector

    particular. Sin embargo, no pueden constituir una solución general a la inflación que

    surge del corazón de un modelo que tiene como uno de sus objetivos el desarrollo

    industrial mediante el mantenimiento de una elevada rentabilidad para los empresarios

    del sector.

    La contención de la inflación en el corto plazo debe descansar sobre la reducción

    del precio interno de las materias primas frente a su valor internacional. Como ya se

    mencionó para el caso de los alimentos, las medidas que se tomen deben evitar agudizar

    el avance de la soja dentro de la producción agrícola de las últimas décadas.

    En el largo plazo, la estabilidad de precios requiere la implementación de

    políticas de desarrollo industrial. Así, a medida que la industria incremente su

    productividad relativa frente al sector primario podrá ir reduciéndose el nivel del tipo de

  • 10

    cambio real sin afectar su competitividad. De esa manera se abarataría el precio interno

    de los productos del agro y los hidrocarburos, moderándose sus rentas extraordinarias y

    permitiendo el incremento no inflacionario del poder adquisitivo de los salarios.

    De lo contrario, el salario real implícito en la pauta cambiaria continuará siendo

    menor al que aspiran los asalariados. De esta manera, el éxito de los trabajadores en la

    conquista de aumentos salariales que les permitan acceder a un mayor nivel de ingresos

    deteriorará la competitividad industrial. A su vez, los intentos de preservarla conducirán

    a nuevas devaluaciones del peso que impactarán encareciendo el precio interno de los

    alimentos y otros transables, con el consiguiente deterioro del salario real. Así, se corre

    el riesgo de permanecer en un espiral tipo de cambio-salario sin lograr mantener el tipo

    de cambio real industrial a un nivel competitivo ni mejorar el poder adquisitivo de los

    salarios. La manifestación de la dificultad para consolidar esos pilares de un modelo de

    desarrollo industrial con inclusión social será un alza permanente de los precios.

  • 11

    LA INFLACIÓN BAJO EL RÉGIMEN DE TIPO DE

    CAMBIO COMPETITIVO1

    INTRODUCCIÓN

    El contexto de excepcional crecimiento de la economía Argentina en los últimos

    años ha venido acompañado de un incipiente proceso inflacionario que se ha instalado

    como uno de los principales problemas a resolver. La inflación es un problema en

    cuanto afecta a dos de los pilares del modelo económico en curso (Fraschina, 2010). Por

    un lado, carcome el valor real del tipo de cambio industrial. Por el otro, impide la

    concreción de una más justa distribución de los ingresos al deteriorar el poder de

    compra de los salarios, jubilaciones, asignaciones, planes de empleo, etc.

    Adicionalmente, al ir acompañada de variaciones de precios e ingresos relativos

    genera inestabilidad y malestar social, disminuye el horizonte de planeamiento

    económico y las inversiones productivas, fomenta la sustitución del uso de la moneda

    local como reserva de valor, por el dólar u otros activos que afectan la capacidad local

    de implementar políticas monetarias y dificulta las decisiones de consumo (Heymann,

    1986a).

    En este trabajo se muestra que la inflación en la etapa actual es la manifestación

    de la tensión existente entre los dos pilares del modelo económico en curso: el tipo de

    cambio industrial competitivo y la búsqueda de una más justa redistribución del ingreso.

    Tensión que fue agudizada, a partir del 2006, por el incremento del precio internacional

    de los alimentos.

    En la sección que sigue se describen las principales características del proceso

    inflacionario actual y se esboza una hipótesis interpretativa del mismo. Luego se analiza

    con mayor detalle la dinámica de los precios de la canasta de consumo. Se pasa luego a

    estudiar el impacto de las devaluaciones y el alza internacional del precio de las

    materias primas sobre los precios internos. Después se describe la evolución reciente de

    los salarios y de la competitividad industrial. En las últimas secciones se discuten las

    políticas de estabilización a la luz de las hipótesis, que este trabajo sostiene, sobre las

    causas de la inflación. Tras una breve conclusión se incluyen 2 anexos. El primero,

    1 Se agradecen los comentarios y la colaboración para la obtención de información a Agustín Crivelli,

    Bulrich Campos S.A., Demian Panigo, Emmanuel Aggis, Ernesto Mattos, Felisa Miceli, José Luis

    Nicolini, Luis Mutuberría, Mariana Gonzalez y Valeria Mutuberría.

  • 12

    presenta las diversas explicaciones que se han dado sobre el fenómeno inflacionario

    actual, tanto desde el ámbito académico como desde el de los principales actores

    sociales. El segundo, describe brevemente la historia inflacionaria del país desde

    mediados del siglo pasado hasta el fin de la convertibilidad.

    1- DINÁMICA DE PRECIOS BAJO EL RÉGIMEN DE CAMBIO

    COMPETITIVO

    Entre los años 2002 y 2010, la inflación anual promedio fue del orden del 13%,

    aunque con importantes variaciones según los años. Como se observa en el gráfico 1,

    entre comienzos de 2002 y mediados de 2003, se verificaron las mayores tasas de

    inflación asociadas a la fuerte devaluación del peso que dio por finalizada la

    convertibilidad. Le siguió un período de baja inflación que se interrumpió a mediados

    de 2007. Comenzó allí una etapa de inflación moderada, que tras una breve

    desaceleración en 2009, continúa hasta el presente.

    Gráfico 1 - Índice de precios al consumidor. En niveles y tasas de variación anual y

    mensual. Base 2000=100. Enero 2001- abril 2010.

    0

    50

    100

    150

    200

    250

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    350

    400

    -5%

    0%

    5%

    10%

    15%

    20%

    25%

    30%

    35%

    40%

    2001

    M1

    2001

    M7

    2002

    M1

    2002

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    2003

    M1

    2003

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    2004

    M1

    2004

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    2005

    M1

    2005

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    2006

    M1

    2006

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    2007

    M1

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    2008

    M1

    2008

    M7

    2009

    M1

    2009

    M7

    2010

    M1

    Inflación mensual

    Inflación anual

    Nivel de precios(eje derecho)

    (tasas) (nivel)

    Nota técnica: se utilizó el IPC del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) hasta diciembre de 2006, a partir de allí se utilizó el promedio de 7 provincias del Centro de Estudios para el Desarrollo Argentino (CENDA) en base a información de la

    Dirección de Estadísticas Provinciales (DEP). La inflación mensual se obtuvo como la diferencia logarítmica entre el IPC de un mes

    respecto al anterior. La inflación anual se obtuvo mediante la diferencia logarítmica de un mes respecto al mismo mes del año pasado.

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC y CENDA.

  • 13

    Este despertar inflacionario ha dado lugar a variadas hipótesis interpretativas

    (ver anexo I) y hasta han existido quienes alertaron sobre un posible desborde

    hiperinflacionario2. Sin embargo, cabe decir que en comparación con la historia

    inflacionaria del país los niveles de inflación actuales son moderados y no existen

    desequilibrios estructurales - especialmente en el sector externo- que hagan posible

    siquiera imaginar un escenario hiperinflacionario (ver anexo II).

    El reciente movimiento ascendente en el nivel general de los precios fue el

    resultado de incrementos en los precios de los distintos sectores y factores de la

    producción, cuyo movimiento no fue homogéneo (ver gráfico 2). Más específicamente,

    la devaluación del peso en 2002 generó un alza importante en los precios relativos de

    los productos agropecuarios que se profundizó a partir de 2007 a causa del aumento de

    sus precios internacionales. En segundo lugar y en menor medida que los precios

    agropecuarios, el establecimiento de un tipo de cambio real elevado permitió el

    incremento de los precios de los productos industriales. Ello ha sido consecuencia no

    sólo del encarecimiento de los insumos importados o provenientes del sector primario,

    sino también del relajamiento de la competencia externa que un tipo de cambio más

    elevado significa. Pese a acelerar su marcha ascendente hacia finales del período, el

    incremento del salario ha sido menor que el de los precios agropecuarios y

    manufactureros, aunque superior al de los servicios que han sido los que más terreno

    han perdido en esta nueva etapa.

    2 Por ejemplo, los ―escenarios posibles‖ planteados por el Estudio Broda & Asoc. (2002, p.33), o

    declaraciones más recientes del ex presidente Carlos Menem (canal 26, 12/03/2010) y del ex ministro de

    economía, Domingo Cavallo (La Nación 27/09/2010).

    http://www.youtube.com/watch?v=vw8jcuXKNBUhttp://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1073197

  • 14

    Gráfico 2 - Salarios, tipo de cambio (TCN), precios agropecuarios, manufactureros

    y de servicios. Índices de valores nominales. Base IV trimestre de 2001=100.

    Octubre 2001 – mayo 2010.

    0

    50

    100

    150

    200

    250

    300

    350

    400

    450

    500

    2001M

    10

    20

    02

    M2

    20

    02

    M6

    2002M

    10

    20

    03

    M2

    20

    03

    M6

    2003M

    10

    20

    04

    M2

    20

    04

    M6

    2004M

    10

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    05

    M2

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    05

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    05

    M1

    0

    20

    06

    M2

    20

    06

    M6

    20

    06

    M1

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    07

    M2

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    07

    M6

    2007M

    10

    20

    08

    M2

    20

    08

    M6

    2008M

    10

    20

    09

    M2

    20

    09

    M6

    2009M

    10

    20

    10

    M2

    Salario TCN Agropecuarios

    Manufacturas Servicios

    Nota técnica: el salario tomado es el nivel general (que promedia el del sector público con el privado registrado y no registrado). El

    TCN es respecto al dólar. Los precios agropecuarios y manufacturados fueron tomados del índice de precios al por mayor. Los servicios constituyen un promedio ponderado de los servicios que intervienen en el IPC (tomados del INDEC hasta el 2006 y luego

    del promedio de Jujuy, Salta, La Pampa, Entre Ríos y Neuquén) y del precio de la energía eléctrica para la industria. Las

    ponderaciones fueron de (2/3) y (1/3) respectivamente. Fuente: elaboración propia en base a INDEC y Dirección de Estadísticas Provinciales.

    Esta evolución de los diferentes precios no es independiente entre sí, sino parte

    integral de un conjunto de acciones y reacciones que dieron origen a la dinámica

    inflacionaria del período bajo estudio. Si bien en el proceso inflacionario han

    intervenido múltiples elementos, algunos muy coyunturales, es conveniente para su

    mejor comprensión presentar en forma esquemática los elementos centrales que

    intervinieron en ella.

    Para ello es necesario tener presente que los mecanismos de conformación de

    precios son muy diferentes según el sector económico que se trate. Por un lado, el

    precio de las importaciones y de los productos primarios de exportación se determina a

    partir del precio que rige en el mercado internacional, convertido a pesos a la tasa de

    cambio vigente. La imposición de aranceles a la importación actúa como un incremento

    del tipo de cambio importador, al encarecer internamente los productos extranjeros en

    forma proporcional a la tasa que deban pagar para ingresar al país. Por el contrario, los

  • 15

    precio mercado mundial

    tasa de cambio peso/dólar

    arancel a la importación/derechos

    de exportación

    precio interno

    de bienes

    importados y

    primarios

    de exportación

    precio interno

    de bienes industriales y

    servicios no regulados

    costos de producción (salariales, insumos importados, primarios,

    industriales y de servicios)

    margen empresarial (condiciones

    de demanda y de competencia)

    derechos a la exportación actúan como una reducción del tipo de cambio exportador

    para el producto al que se aplican, reduciendo su precio interno al disminuir la

    rentabilidad de su venta al exterior:

    Para los productos industriales y gran parte de los servicios no regulados, la

    conformación de precios se determina a partir de la aplicación de un margen sobre los

    costos de producción. Los costos pueden ser los salarios desembolsados, la compra de

    insumos primarios, importados o provenientes de otras industrias y los servicios. El

    margen que se aplica depende de las condiciones de demanda y de competencia:

    Existen además una serie de precios cuyo establecimiento depende de

    condiciones muy particulares. Los salarios cuya determinación es muy compleja,

    depende, entre otras causas, de condiciones institucionales del mercado de trabajo y del

    nivel de desempleo3. Los precios de los servicios regulados, por ejemplo, se fijan a

    partir de la negociación de tarifas entre la entidad estatal correspondiente y la empresa

    que lo provee. Los precios de los servicios personales están compuestos básicamente

    por los salarios de quienes los proveen. Los precios de corto plazo de las frutas y

    verduras y, hasta cierto punto, algunos cortes de carne, depende de las condiciones de

    demanda y oferta sujetas a grandes variaciones estacionales. Y la lista podría seguir con

    las condiciones específicas para la determinación del precio de la vivienda urbana, la

    tierra, del financiamiento, etc.

    Sin embargo, con las pocas herramientas desarrolladas se puede intentar

    ―racionalizar‖ la evolución de los principales precios presentadas en el gráfico 2. La

    devaluación del peso en 2002 generó un encarecimiento inicial de los precios

    agropecuarios (moderado por la imposición de retenciones) y, en menor medida,

    3 Sobre la evolución del mercado de trabajo en los últimos años, consultar Panigo y Neffa (2009).

  • 16

    industriales (vía costos de insumos importados y el relajamiento de la competencia

    externa). La pérdida del poder adquisitivo del salario estimuló la pelea por aumentos

    salariales que buscaron recomponerla. En primer lugar, fueron los aumentos por

    decreto, y luego la negociación en paritarias facilitadas por un contexto de elevada

    actividad económica que disminuyó los niveles de desempleo y fortaleció el poder de

    negociación obrero. Durante este período inicial, los servicios se ajustaron en forma

    similar a los salarios.

    A partir de mediados de 2006, el alza del precio internacional de las materias

    primas encareció aún más los precios internos agropecuarios con su consiguiente

    impacto en los costos industriales y en el precio de los alimentos. Ello intentó

    neutralizarse mediante la implementación de las retenciones móviles, pero el gobierno

    debió dar marcha atrás ante la oposición simultánea de las patronales agropecuarias, los

    grandes medios privados de comunicación y la oposición partidaria (que incluyó, a

    partir de allí, a varios de quienes integraban hasta ese momento el oficialismo –entre

    ellos el vicepresidente Julio Cobos-). A partir de allí se exacerbó la puja distributiva y

    se sucedieron los incrementos nominales de salarios que buscaron recomponer su poder

    adquisitivo. Los servicios se ajustaron en forma más moderada debido al impacto de los

    fuertes subsidios estatales a parte de los servicios públicos.

    Entre 2003 y finales de 2008, el tipo de cambio peso/dólar se mantuvo estable.

    Este período coincidió con la depreciación de la moneda norteamericana respecto de las

    principales monedas del mundo, lo que significó una leve devaluación implícita del

    peso frente al real y el euro, entre otras monedas. A partir de finales de 2008 comienza a

    devaluarse el peso frente al dólar en el intento de recomponer la competitividad

    industrial perdida por la inflación interna acumulada y la momentánea depreciación del

    real. Tras una breve pausa durante la crisis económica internacional de 2009, el impacto

    inflacionario de la devaluación del peso y una nueva alza del precio mundial de las

    materias primas comenzaron una nueva ronda inflacionaria.

    A partir del análisis anterior, podemos afirmar que el espiral inflacionario surgió de

    los continuos ajustes de precios sectoriales y factoriales que tienen como causa

    subyacente la tensión entre:

    la distribución del ingreso que resultó del establecimiento de un tipo de cambio

    real elevado - que forma parte del núcleo del modelo económico de los últimos

    años – en un contexto de elevados precios internacionales de las materias

    primas;

  • 17

    las aspiraciones de los asalariados por recuperar el poder de compra de sus

    ingresos (y, en menor medida, las empresas del sector de servicios).

    En la ilustración 1 se presenta en forma esquemática la hipótesis sobre la dinámica

    inflacionaria de los últimos años. En la próxima sección se analiza la evolución de los

    precios de la canasta de consumo de la población.

    Ilustración 1 - Dinámica del proceso inflacionario bajo el régimen de tipo de

    cambio competitivo.

    2 - LA EVOLUCIÓN DE LOS PRECIOS DE LA CANASTA DE

    CONSUMO

    En esta sección nos concentraremos en el análisis de la evolución de los precios

    de la canasta básica de consumo (IPC), con la que suele medirse la inflación y que

    resulta la de mayor relevancia para la población en general. En el gráfico 3 se presenta

    su evolución y se detallan 4 aperturas: el nivel general, los alimentos y bebidas, la

    indumentaria y equipamiento del hogar y los servicios.

    TCN ALIMENTOS

    INDUSTRIA

    SALARIOS

    SERVICIOS

    COMPETITIVIDAD

    INDUSTRIAL

    PRECIOS EXTERNOS

  • 18

    Gráfico 3 - Índice de precios al consumidor. Apertura según nivel general,

    alimentos y bebidas, indumentaria y equipamiento y servicios. Índices de valores

    nominales. Base IV trimestre 2001=100. Octubre 2001 – mayo 2010.

    0

    100

    200

    300

    400

    500

    600

    20

    01

    M1

    20

    01

    M8

    20

    02

    M3

    20

    02

    M1

    0

    20

    03

    M5

    20

    03

    M1

    2

    20

    04

    M7

    20

    05

    M2

    20

    05

    M9

    20

    06

    M4

    20

    06

    M1

    1

    20

    07

    M6

    20

    08

    M1

    20

    08

    M8

    20

    09

    M3

    20

    09

    M1

    0

    20

    10

    M5

    General

    Alimento y bebida

    Indumentaria y equipamiento

    Servicios

    Nota técnica: el nivel general se calculó tomando el IPC del INDEC hasta diciembre de 2006, a partir de allí se utilizó el promedio de 7 provincias del CENDA. Las principales aperturas fueron construidas especialmente para este trabajo por su autor, sobre la base

    de las estadísticas de precios de Jujuy, Salta, La Pampa, Entre Ríos y Neuquén.

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC, CENDA y Dirección de Estadísticas Provinciales.

    Como puede observarse en el gráfico 3, en un contexto general de alza

    permanente de todos los precios, los alimentos y bebidas y la indumentaria y el

    equipamiento del hogar han incrementado sus precios en mayor medida que los

    servicios, desde la devaluación del peso de 2002. Ello se debió al mayor componente de

    transables en aquellos agrupados, cuyo precio está determinado por el precio

    internacional y el tipo de cambio.

    A partir de mediados de 2007 se observa que los alimentos y bebidas pasaron a

    crecer en forma aún más acelerada. Como se muestra en la próxima sección, este hecho

    coincidió con el alza internacional del precio de las materias primas cuyo intento de

    neutralización por parte del Estado Nacional fracasó al deber dar marcha atrás con las

    ―retenciones móviles‖. Para tener una dimensión del impacto inflacionario de tal

    coyuntura, vale destacar que desde mediados de 2007 a mediados de 2010, el 40% del

    incremento del IPC se explicó por el alza de los alimentos y bebidas. A eso debería

    sumarse el efecto inflacionario indirecto (más permanente) que generó al agudizar la

    tensión entre el tipo de cambio y las aspiraciones distributivas de los asalariados.

    En resumen, el período se caracterizó por una inflación permanente de la canasta

    de básica de consumo. Los principales saltos inflacionarios se corresponden, en primer

  • 19

    lugar, con la devaluación de 2002 que impactó especialmente en el costo de los bienes

    transables que la componen. En segundo lugar, a partir de 2007, por el alza

    internacional de las materias primas que se transfirió al precio interno de los alimentos.

    3 - TIPO DE CAMBIO, PRECIO INTERNACIONAL DE LAS

    MATERIAS PRIMAS Y RETENCIONES

    El impacto del alza internacional de las materias primas y del tipo de cambio

    sobre el precio interno de los alimentos y bebidas se visualiza en el gráfico 4. En el

    mismo se observa que la evolución de las materias primas no energéticas - valuadas en

    pesos según la cotización del dólar de cada mes- se comportó en forma similar al precio

    interno de los alimentos y bebidas. Ambos subieron con la devaluación del peso en

    2002 y volvieron a aumentar con el alza internacional de las materias primas a partir de

    mediados de 2006.

    Durante 2008, los precios internos crecieron más aceleradamente que los

    externos, seguramente por el impacto inflacionario del conflicto en torno a la

    imposición de retenciones móviles y la momentánea apreciación del dólar4. Tras una

    pausa generada por el impacto de la crisis de 2009 sobre los precios internacionales, los

    alimentos y bebidas volvieron a incrementar su precio por el efecto combinado del alza

    del dólar y de los precios internacionales de las materias primas.

    4 El traslado de las variaciones en la cotización del dólar a los precios de los alimentos y bebidas es

    menos fuerte que el de las materias primas no energéticas. De ahí que cuando el peso se devalúa (revalúa)

    frente al dólar, la distancia entre ambas líneas en el gráfico, se incrementa (reduce).

  • 20

    Gráfico 4 – Índices del precio interno de los alimentos y bebidas en pesos y del

    precio internacional de las materias primas no energéticas valuados en pesos según

    cotización mensual del dólar. Base IV trimestre 2001=100. Octubre 2001 – mayo

    2010.

    0100200300400500600700800900

    2001M

    10

    20

    02

    M4

    2002M

    10

    20

    03

    M4

    2003M

    10

    20

    04

    M4

    2004M

    10

    20

    05

    M4

    2005M

    10

    20

    06

    M4

    20

    06

    M1

    0

    20

    07

    M4

    20

    07

    M1

    0

    20

    08

    M4

    20

    08

    M1

    0

    20

    09

    M4

    2009M

    10

    20

    10

    M4

    Commodities por tcn

    Alimentos y bebidas

    Nota técnica: el precio de los alimentos y bebidas se calculó tomando datos del INDEC hasta diciembre de 2006, a partir de allí se utilizó las estadísticas de Jujuy, Salta, La Pampa, Entre Ríos y Neuquén.

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC, Dirección de Estadísticas Provinciales y FMI.

    Una de las principales herramientas de política económica que se utilizó para

    evitar el alza de los precios internos por las devaluaciones y alza del precio

    internacional de las materias primas fueron los derechos de exportación, más conocidos

    como retenciones. Este tributo disminuye la rentabilidad de las ventas al exterior,

    deprimiendo de esa manera el precio al que el productor está dispuesto a vender en el

    mercado interno. Su eficacia al respecto ha sido notoria, tal como se deduce de los

    gráficos 5, 6, 7 y 8. En ellos se presenta el precio internacional e interno de la soja,

    trigo, maíz y el petróleo frente al teórico (obtenido mediante el descuento de las

    retenciones al precio internacional). La relativa coincidencia entre el precio interno real

    y el teórico muestra la eficacia de la política de retenciones para disminuir el precio

    interno de esos productos.

  • 21

    Gráfico 5 - Precio de la soja internacional (Chicago), interno (Rosario),

    internacional descontadas las retenciones (teórico) y tasa de retenciones (eje

    derecho). Pesos corrientes por tonelada y porcentajes. Enero 2000-marzo 2010.

    0%

    20%

    40%

    60%

    80%

    100%

    120%

    140%

    160%

    180%

    200%

    0

    200

    400

    600

    800

    1000

    1200

    1400

    1600

    1800

    2000

    20

    00

    M1

    20

    00

    M8

    20

    01

    M3

    2001M

    10

    20

    02

    M5

    2002M

    12

    20

    03

    M7

    20

    04

    M2

    20

    04

    M9

    20

    05

    M4

    2005M

    11

    20

    06

    M6

    20

    07

    M1

    20

    07

    M8

    20

    08

    M3

    20

    08

    M1

    0

    20

    09

    M5

    20

    09

    M1

    2

    teórico

    Rosario

    Chicago

    retenciones

    Nota técnica: el precio de Chicago fue transformado a pesos al tipo de cambio corriente promedio mensual. El precio teórico fue calculado descontando la tasa de retenciones al precio de Chicago valuado en pesos

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC, Ministerio de Economía y Bolsa de Rosario

    Gráfico 6 - Precio del trigo internacional (Chicago), interno (Rosario),

    internacional descontadas las retenciones (teórico) y tasa de retenciones (eje

    derecho). Pesos corrientes por tonelada y porcentajes. Enero 2000-marzo 2010.

    0%

    50%

    100%

    150%

    200%

    250%

    300%

    0

    200

    400

    600

    800

    1000

    1200

    1400

    200

    0M

    1

    20

    00

    M9

    20

    01

    M5

    20

    02

    M1

    200

    2M

    9

    20

    03

    M5

    20

    04

    M1

    20

    04

    M9

    200

    5M

    5

    20

    06

    M1

    20

    06

    M9

    20

    07

    M5

    200

    8M

    1

    20

    08

    M9

    20

    09

    M5

    20

    10

    M1

    teórico

    Rosario

    Chicago

    retenciones

    Nota técnica: el precio de Chicago fue transformado a pesos al tipo de cambio corriente promedio mensual. El precio teórico fue

    calculado descontando la tasa de retenciones al precio de Chicago valuado en pesos.

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC, Ministerio de Economía y Bolsa de Rosario

  • 22

    Gráfico 7 - Precio del maíz internacional (Chicago), interno (Rosario),

    internacional descontadas las retenciones (teórico) y tasa de retenciones (eje

    derecho). Pesos corrientes por tonelada y porcentajes. Enero 2000-marzo 2010.

    0%

    20%

    40%

    60%

    80%

    100%

    120%

    140%

    160%

    180%

    200%

    0

    100

    200

    300

    400

    500

    600

    700

    800

    900

    20

    00

    M1

    20

    00

    M9

    20

    01

    M5

    20

    02

    M1

    20

    02

    M9

    20

    03

    M5

    200

    4M

    1

    20

    04

    M9

    200

    5M

    5

    20

    06

    M1

    200

    6M

    9

    20

    07

    M5

    200

    8M

    1

    20

    08

    M9

    20

    09

    M5

    20

    10

    M1

    teórico

    Rosario

    Chicago

    retenciones

    Nota técnica: el precio de Chicago fue transformado a dólares al tipo de cambio corriente promedio mensual. El precio teórico fue calculado descontando la tasa de retenciones al precio de Chicago valuado en pesos.

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC, Ministerio de Economía y Bolsa de Rosario

    Gráfico 8 - Precio del petróleo internacional, interno, internacional descontadas

    las retenciones (teórico) y tasa de retenciones (eje derecho). Pesos corrientes por

    tonelada y porcentajes. Enero 2000-marzo 2010.

    0%

    50%

    100%

    150%

    200%

    250%

    300%

    350%

    400%

    450%

    500%

    0

    500

    1000

    1500

    2000

    2500

    3000

    2000M

    1

    2000M

    9

    2001M

    5

    2002M

    1

    20

    02

    M9

    20

    03

    M5

    20

    04

    M1

    2004M

    9

    2005M

    5

    2006M

    1

    2006M

    9

    2007M

    5

    2008M

    1

    2008M

    9

    2009M

    5

    20

    10

    M1

    Internacional

    Teórico

    Interno

    Retenciones

    Nota técnica: el precio de internacional es el del Golfo de México (WTI) y fue transformado a pesos al tipo de cambio corriente

    promedio mensual. El precio interno es el promedio nacional que publica la secretaría de energía. El teórico fue calculado descontando la tasa de retenciones al precio WTI valuado en pesos.

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC, Ministerio de Economía y Secretaría de Energía.

  • 23

    En el caso del trigo (gráfico 6), por momentos, su precio interno se ubicó por

    debajo del teórico debido al cierre momentáneo del registro de exportadores y otras

    restricciones cuantitativas. En el caso del petróleo (gráfico 8), sobre el que a partir de

    diciembre de 2007 rigen retenciones que fijan un precio interno máximo de 264 dólares

    el m3, la diferencia entre el precio interno y teórico parece responder a acuerdos

    privados entre las extractoras y las refinadores pertenecientes a un mismo grupo

    propietario. Sin embargo, más allá de estas leves divergencias, la evidencia empírica es

    contundente en cuanto a la efectividad de las retenciones para diferenciar el precio

    interno del internacional. Pero si fueron efectivas, ¿por qué no eliminaron la presión

    inflacionaria?

    En primer lugar, como se evidencia en los gráficos 6 a 8, las retenciones

    amortiguaron el alza del precio interno de las materias primas generado por la

    devaluación del peso y el alza de su precio internacional, pero en ningún momento lo

    neutralizaron. Es decir, las tasas de retenciones nunca se ajustaron de forma tal que

    eliminaran totalmente el impacto de las variaciones cambiarias y de los precios externos

    sobre el precio interno de los bienes. Cuando se intentó la neutralización mediante la

    aplicación de retenciones móviles (a comienzos de 2008), la respuesta fue una violenta

    protesta de las patronales agropecuarias que oblió al gobierno a dar marcha atrás al

    proyecto. De esta manera, puede afirmarse que la política de retenciones tendió a

    suavizar el impacto inflacionario de la política de tipo de cambio competitivo en un

    marco de elevado precio internacional de las materias primas. Pero, las tasas de los

    derechos de exportación nunca se ajustaron de forma tal de eliminar plenamente esa

    presión.

    La utilización de las retenciones como herramienta de estabilización de precios

    presenta otras dificultades, aparte de la oposición de los sectores empresariales que son

    gravados por las mismas. Èstas tienen que ver con la dinámica productiva de los

    sectores que se ven afectados por ella. Nos detendremos brevemente a estudiar algunas

    de estas dificultades en relación a su aplicación en el sector agropecuario. Respecto al

    sector de los hidrocarburos, su dinámica fue analizada en el primer documento técnico

    del CEMOP (Mansilla y Perrone, 2010).

  • 24

    4 - LA MESA DE LOS ARGENTINOS ANTE LA “SOJIZACIÓN”

    DEL CAMPO

    Desde mediados de la década del ‗90 hasta el presente, la producción

    agropecuaria del país fue concentrándose cada vez más en la de soja. Cómo se observa

    en el gráfico 9, el total de hectáreas sembradas con cereales y oleaginosas pasó de 22

    millones a 32 en los últimos 15 años, mientras que la siembra de soja se elevó de 6

    millones a 18 en igual período. La superficie sembrada de soja respecto a todos los

    cereales y oleaginosas avanzó del 27 al 56% en una década y media. Téngase en cuenta

    que la actividad ganadera que es quien más terreno cedió a la oleaginosa (especialmente

    en la zona pampeana), no está incluida en el gráfico5.

    Gráfico 9 - Superficie sembrada de cereales y oleaginosas. En millones de

    hectáreas. Campañas 1979/80 a 2008/09.

    0

    5

    10

    15

    20

    25

    30

    35

    79/80 82/83 85/86 88/89 91/92 94/95 97/98 00/01 03/04 06/07

    Soja Resto

    Fuente: elaboración propia en base a Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca.

    Este proceso se disparó por el abaratamiento de los costos de la producción de

    soja que permitió la aplicación de nuevas tecnologías (tanto por el incremento del rinde

    por hectárea como por los menores gastos de siembra y cosecha), en el marco de una

    fuerte alza de los precios internacionales de la misma (Azcuy Ameghino, 2000; Bisang,

    5 Desplazándose hacia tierras marginales o formas técnicas más intensivas en capital. Ver al respecto

    Paruelo, J.M., J.P. Guerschman y S.R. Verón (2005).

  • 25

    2003; Panigo, 2010). La sojización de la producción agropecuaria se refleja también en

    los números del comercio exterior. Así para 2009, casi uno de cada cuatro dólares que

    ingresaban por exportaciones a la economía, fueron generados por el complejo sojero

    (ver cuadro 1).

    Cuadro 1 - Participación del complejo soja en las exportaciones. Dólares corrientes

    y porcentajes. Año 2009.

    U$S % del total

    Harina y "pellets" de la extracción de aceite de soja 8.209 15%

    Aceite de soja, en bruto incluso desgomado 3.194 6%

    Porotos de soja, exc. para siembra 1.690 3%

    Total selección 13.093 23%

    Total Exportaciones 55.750 100%

    Fuente: elaboración propia en base a datos del INDEC.

    El hecho de que el consumo interno de soja sea muy bajo, puede llevar a pensar

    que ya no rige la conflictiva relación entre la producción agropecuaria de exportación y

    el consumo interno de alimentos, tradicional en el desenvolvimiento de la economía

    argentina. Así podría suponerse que el aumento del precio interno de la soja, producto

    de la devaluación y su encarecimiento internacional, en nada afecta a quienes no

    consumen soja. Sin embargo ello no es así. La sojización del campo no anula el

    conflicto entre la exportación agropecuaria y el consumo interno, sino que lo

    complejiza en varias direcciones.

    Por un lado, porque la sojización del campo lleva al desplazamiento de otras

    producciones como el maíz, trigo, ganadería, tambos, frutas y verduras. Ello es así no

    sólo por los elevados márgenes de la soja generados por su precio internacional y las

    nuevas tecnologías que intervienen en su producción, sino también, porque la

    producción de soja compite con las demás en cuanto a la utilización de un insumo

    básico no reproducible: la tierra. Como se observa en el gráfico 10, el valor de la

    hectárea en la zona núcleo de la provincia de Buenos Aires se incrementó fuertemente

    en los últimos años, pasando de u$s4.000 la hectárea en 2001 a casi 13.000 en 2010.

    Daza (2009) muestra que la evolución del precio de la tierra tiene una fuerte correlación

    con el margen bruto de la producción de soja.

  • 26

    Gráfico 10 - Valor de la hectárea en la zona núcleo de la provincia de Buenos

    Aires. Dólares por hectárea. Abril 2000-marzo 2010.

    Fuente: Compañía Argentina de Tierras SA.

    La elevada rentabilidad de la producción de soja para la exportación encarece la

    producción de alimentos por otra vía pocas veces considerada: el encarecimiento de los

    insumos agrícolas como los abonos y fertilizantes. El incremento de su precio no parece

    tener vinculación con alguna restricción de oferta como en el caso de la tierra, sino

    fundarse en la política de formación de precios de empresas con poder de mercado.

    Como se observa en el gráfico 11, el precio de los abonos y fertilizantes desde mediados

    de 2002 parece calcar la evolución del precio de la tierra presentado en el gráfico 106.

    Puede decirse que las empresas proveedoras de abonos y fertilizantes fijan el precio

    midiendo el bolsillo de sus clientes, o en términos más técnicos, de acuerdo a la

    elasticidad precio de la demanda7.

    6 La correlación entre el precio de los abonos y fertilizantes con el precio de la tierra, parece mucho más

    fuerte que su correlación con el precio interno del petróleo – uno de sus principales insumos- según se

    observa de la comparación de los gráficos 8, 10 y 11. 7 Siendo los métodos de producción relativamente fijos, un incremento en el precio de la soja y

    consiguientemente en los márgenes brutos de su producción, vuelve más inelástica respecto a los precios

    a la demanda de abonos y fertilizantes. Ello permite a los oligopolios que lo proveen incrementar su

    precio sin que hayan variado sus costos de producción, obteniendo de esa manera su tajada en la renta

    agropecuaria.

  • 27

    Gráfico 11 - Precio interno básico mayorista de los abonos y fertilizantes agrícolas.

    Índice valores nominales. Base 1993=100. Abril 2000- marzo 2010.

    0

    100

    200

    300

    400

    500

    600

    7002000M

    4

    2000M

    12

    2001M

    8

    2002M

    4

    2002M

    12

    2003M

    8

    2004M

    4

    2004M

    12

    2005M

    8

    2006M

    4

    2006M

    12

    2007M

    8

    2008M

    4

    2008M

    12

    2009M

    8

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC.

    De esta manera, las políticas de reducción del precio interno de alimentos como

    el trigo, la leche, el maíz y la carne frente a su precio internacional, pueden terminar

    acelerando la sojización del campo al reducir aún más la rentabilidad de esas

    producciones frente a la soja. De ahí que las políticas de abastecimiento interno de

    alimentos sean complejas y requieran tomar en cuenta el avance de la soja dentro de la

    producción agropecuaria.

    Las posibles medidas para lograr un abastecimiento interno en materia

    alimentaria a precios más económicos son múltiples. Subsidio a la producción de

    alimentos internos; retenciones diferenciadas que graven a la soja en forma más

    pronunciada; intervención estatal en la producción y comercialización de alimentos ya

    sea mediante juntas reguladoras, empresas estatales o bien en base a acuerdos con

    empresas privadas o de la economía social; subsidios a la importación de alimentos;

    distribución de alimentos en la población de menores recursos económicos subsidiada

    por el Estado; etc.

    Algunas de ellas se aplican actualmente con variados resultados. Así sucede con

    las compensaciones a la cadena del trigo-pan, los $0,20 por litro leche que reciben los

    tamberos por sus 3.000 primeros litros de producción o los subsidios para la compra de

    granos utilizados para engorde en la producción avícola (ver cuadro 2). También se

  • 28

    ensayaron acuerdos de precios con grandes hipermercados aunque los resultados en este

    sentido han sido muy limitados. El Plan de Seguridad Alimentaria que promueve el

    Ministerio de Desarrollo Social alcanza a aproximadamente 1.836.899 personas8.

    También se grava a la soja con mayores derechos de exportación que a los demás

    granos, aunque la diferencia porcentual no es lo suficientemente amplia como para

    desincentivar el avance de la oleaginosa.

    De todas maneras y sin despreciar los esfuerzos realizados hasta el presente, la

    evidencia de una inflación impulsada por el alza de los alimentos muestra que estas

    medidas han sido insuficientes y que se requiere avanzar más ampliamente con ellas.

    Claro que esto no es simple ni una cuestión exclusivamente técnica. Existen muchos

    intereses en juego y seguramente algunos de ellos se verían afectados por una

    intervención estatal más decidida.

    Cuadro 2 - Compensaciones estatales a diversos eslabones de la cadena

    agropecuaria (pagos autorizados). Millones de pesos corrientes. Primer semestre

    de 2010.

    Rubro TOTAL PAGOS IMPORTE ($)

    Productores lecheros 29.883 303.703.816,40

    Faenadores avícolas 115 372.569.660,75

    Molinos de trigo 240 534.762.476,76

    Feed lots 385 364.950.875,03

    Criadores de Terneros Overos 13.082 2.981.200,00

    Harina de Maíz 3 1.287.751,91

    Productores de trigo 23 325.154,66

    TOTAL 43.731 1.580.580.935,51

    Fuente: ONCAA.

    8 Según informa el ministerio en http://www.desarrollosocial.gov.ar/planes/pa/default.asp.

    http://www.desarrollosocial.gov.ar/planes/pa/default.asp

  • 29

    5 - LOS SALARIOS

    Los salarios generales emprendieron su carrera detrás de los precios con cierta

    demora a causa del gran desempleo existente en 2002. Sin embargo, estuvieron a punto

    de alcanzarlos a mediados de 2006 y comienzos de 2009. Pero el salto en los precios

    que generó el alza internacional de las materias primas y la momentánea moderación en

    el incremento de salarios producto del impacto local de la crisis internacional, parecen

    haberlo impedido. De esta manera, la mayoría de los trabajadores todavía no han

    logrado recuperar el valor real de sus ingresos tras la desvalorización que les imprimió

    la inflación que acompañó la devaluación del peso en 2002 (ver gráfico 12).

    Gráfico 12 – Salario nominal, real e índice de precios al consumidor. Índice. Base

    IV trimestre 2001=100. Octubre 2001 – mayo 2010.

    0

    50

    100

    150

    200

    250

    300

    350

    400

    20

    01…

    20

    02M

    4

    20

    02…

    20

    03M

    4

    20

    03…

    20

    04M

    4

    20

    04…

    20

    05M

    4

    20

    05…

    20

    06M

    4

    20

    06…

    20

    07M

    4

    20

    07…

    20

    08M

    4

    20

    08…

    20

    09M

    4

    20

    09…

    20

    10M

    4

    Salario Real

    Salario Nominal

    IPC

    Nota técnica: el IPC se calculo tomando datos del INDEC hasta diciembre de 2006, a partir de allí se utilizó el promedio de 7

    provincias del CENDA. Los salarios corresponden al nivel general que pondera los ingresos de los privados registrados y no registrado y de los empleados públicos, que informa el INDEC.

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC y Dirección de Estadísticas Provinciales.

    En el gráfico 12 también se observa cómo la carrera de precios y salarios se

    acelera a partir de mediados de 2006, coincidiendo con el período de aceleración de la

    inflación que se visualizaba en el gráfico 1. Ello concuerda con la hipótesis esbozada

    anteriormente de que el alza del precio internacional de los alimentos exacerbó la puja

    distributiva y con ella la inflación.

    La trayectoria del salario real general es el resultado promedio de la evolución

    de las remuneraciones de los trabajadores privados registrados, no registrados y del

    sector público. La evolución de los ingresos reales de cada uno de ellos ha sido muy

  • 30

    dispar. Como se observa en el gráfico 13, tras una caída del ingreso real de los tres tipos

    de salarios por efecto de la inflación provocada por la devaluación del peso en 2002, el

    primero en recuperar su poder de compra fue el salario del trabajador privado registrado

    cuya remuneración real a partir de 2005 osciló entre un 8 y un 18% por encima del nivel

    de fines de la convertibilidad. Cabe destacar que en un principio su ascenso escalonado

    reflejó los incrementos salariales por decreto de los primeros años de la gestión

    Kirchner, mientras que a partir de 2005-6 su dinámica quedó determinada por la

    evolución del salario negociado en paritarias, los acuerdos obtenidos en el marco del

    Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil, y la trayectoria de los precios de la canasta

    de consumo (Panigo y Neffa, 2009)9.

    Gráfico 13 - Salario real de los trabajadores privados registrados, no registrados y

    del sector público. Índices. Base IV trimestre 2001=100. Octubre 2001 – mayo

    2010.

    0

    20

    40

    60

    80

    100

    120

    140

    20

    01

    M1

    0

    20

    02

    M5

    20

    02

    M1

    2

    20

    03

    M7

    20

    04

    M2

    20

    04

    M9

    20

    05

    M4

    20

    05

    M1

    1

    20

    06

    M6

    20

    07

    M1

    20

    07

    M8

    20

    08

    M3

    20

    08

    M1

    0

    20

    09

    M5

    20

    09

    M1

    2

    Privado registrado Privado no registrado Público

    Nota técnica: el salario real se calculó tomando el índice de salario del INDEC, deflactado por el IPC del INDEC hasta diciembre de

    2006, a partir de allí se utilizó el promedio de 7 provincias del CENDA. Fuente: elaboración propia en base a INDEC y Dirección de Estadísticas Provinciales.

    Respecto al ingreso real del trabajador privado no registrado, su recuperación

    fue lenta y recién se aceleró desde finales de 2007 deteniéndose en niveles apenas

    menores que los previos a la devaluación de 2002. Los grandes perdedores fueron los

    9 En http://www.mecon.gov.ar/download/infoeco/apendice3c.doc, se enumeran las medidas adoptadas por

    el Gobierno Nacional a efectos de mantener una política de ingresos que procure recuperar el nivel de

    ingreso real de los trabajadores.

    http://www.mecon.gov.ar/download/infoeco/apendice3c.doc

  • 31

    trabajadores del Estado, cuya remuneración real permaneció, a lo largo del período, más

    de un 20% por debajo de los niveles de comienzos de siglo. Como se destaca en el

    gráfico 14, la dinámica de los ingresos reales de los diferentes trabajadores se produjo

    en el marco de un alza nominal permanente de los salarios y los precios, que se aceleró

    desde comienzos de 2007. En esa carrera, los sueldos de los empleados públicos han

    quedado rezagados.

    Gráfico 14 - Salario nominal de los trabajadores privados registrados, no

    registrados y del sector público, y evolución del IPC. Índices. Base IV trimestre

    2001=100. Octubre 2001 – mayo 2010.

    0

    50

    100

    150

    200

    250

    300

    350

    400

    450

    2001…

    2002…

    2002…

    20

    03

    2003…

    2004…

    20

    04

    20

    05

    2005…

    2006…

    20

    06

    2007…

    2007…

    2008…

    20

    08

    2009…

    2009…

    2010…

    Privado registradoPrivado no registradoPúblicoIPC

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC y Dirección de Estadísticas Provinciales.

    En resumen, en un contexto de permanente alza nominal de los salarios y los

    precios, la recuperación del valor real de los salarios varió de acuerdo al tipo de empleo.

    Los privados registrados comenzaron pronto la carrera detrás de los precios – gracias a

    la intervención estatal vía aumentos por decreto- superando el nivel real de fines de la

    convertibilidad a partir de comienzos de 2005. El alza del salario de los privados no

    registrados fue lenta al comienzo y se aceleró a en los últimos años, esa evolución

    parece estar determinada por la dinámica del mercado de trabajo, a medida que se

    redujo el desempleo y las políticas de ingresos indirectos destinadas al sector informal.

    Los trabajadores del Estado fueron los grandes perdedores, cediendo sus salarios más de

    un 20% del poder de compra respecto de los de finales de la convertibilidad.

  • 32

    6 - LA COMPETITIVIDAD INDUSTRIAL

    Tras su incremento por la devaluación del peso en 2002, la competitividad

    industrial frente a los principales socios comerciales, se mantuvo por encima de los

    niveles de la convertibilidad a lo largo del período bajo análisis. Ello se debió a que la

    permanente devaluación nominal del peso frente a las monedas de los principales socios

    comerciales, compensó una inflación interna del precio de las manufacturas superior a

    la de la competencia (ver gráfico 15).

    Gráfico 15 - Tipo de cambio nominal frente a los principales socios comerciales

    (TCN), real (TCR), precio interno de las manufacturas (Pm) y de los principales

    socios comerciales (P*m). Índices. Base IV trimestre 2001=100. Octubre 2001 –

    mayo 2010.

    0

    50

    100

    150

    200

    250

    300

    350

    400

    450

    20

    01

    M1

    0

    20

    02

    M4

    20

    02

    M1

    0

    20

    03

    M4

    20

    03

    M1

    0

    20

    04

    M4

    20

    04

    M1

    0

    20

    05

    M4

    20

    05

    M1

    0

    20

    06

    M4

    20

    06

    M1

    0

    20

    07

    M4

    20

    07

    M1

    0

    20

    08

    M4

    20

    08

    M1

    0

    20

    09

    M4

    20

    09

    M1

    0

    20

    10

    M4

    TCN P*m Pm TCR

    Nota técnica: el TCR industrial se obtuvo calculando el tipo de cambio real con Brasil, Unión Europea, EEUU y China, a partir del

    TCN y los índices de precios mayoristas de manufacturas respectivos (para Brasil se utilizó el índice de precios mayorista general y

    para China el IPC). Luego se los ponderó según su participación relativa en el promedio de las importaciones de los 12 meses

    anteriores.

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC y FMI.

    La competitividad de la industria en términos de precios internacionales no fue

    homogénea según los distintos socios comerciales. Para tener un panorama más

    detallado del tipo de cambio real industrial conviene desagregarlo. En el gráfico 16,

    presentamos el tipo de cambio real industrial con 4 países que constituyen los

    principales orígenes de las importaciones de manufacturas. Allí se observa que la

    competitividad de la industria argentina con Brasil y EEUU se acrecentó respecto a los

  • 33

    niveles de la convertibilidad, se mantuvo en niveles similares con la Unión Europea,

    mientras que con China descendió10

    .

    Gráfico 16 - Tipo de cambio real industrial con Brasil, EEUU, Unión Europea y

    China. Índices. Base IV trimestre 2001=100. Octubre 2001 – mayo 2010.

    Nota técnica: ver gráfico 15. Fuente: elaboración propia en base a INDEC y FMI.

    Esta evolución de la competitividad real se produjo como resultado de una

    importante devaluación del peso frente a todas las monedas, acompañada sin embargo,

    de una mayor inflación interna de los precios de las manufacturas (gráficos 17 y 18).

    Gráfico 17 - Cotización del peso respecto al dólar, real, yuan y euro. Octubre 2001

    – julio 2010. Índices. Base IV trimestre 2001=100. Octubre 2001 – mayo 2010.

    Fuente: elaboración propia en base a Bank of Canada.

    10

    Este último resultado debe matizarse por haberse estimado utilizando el índice de precios al

    consumidor de China, en lugar del mayorista de manufacturas.

  • 34

    Gráfico 18 - Índices de precios de Argentina, Brasil, EEUU, Unión Europea y

    China. Índices. Base IV trimestre 2001=100. Octubre 2001 – mayo 2010.

    0

    50

    100

    150

    200

    250

    300

    350

    400

    4502

    00

    1M

    10

    20

    02

    M4

    20

    02

    M1

    0

    2003M

    4

    20

    03

    M10

    2004M

    4

    20

    04

    M10

    2005M

    4

    20

    05

    M10

    20

    06

    M4

    20

    06

    M1

    0

    20

    07

    M4

    20

    07

    M10

    2008M

    4

    20

    08

    M10

    2009M

    4

    20

    09

    M10

    2010M

    4

    ArgentinaBrasilUnión EuropeaEEUU

    Nota técnica: para Argentina, Unión Europea y EEUU se utilizaron los índices de precios mayoristas de manufacturas respectivos, para Brasil el mayorista general y en el caso de China el IPC, por no disponerse de otra información..

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC y FMI.

    Para analizar la evolución de los costos laborales de la industria en términos de

    su competitividad internacional, hemos construido un índice de costo salarial

    multilateral. Este índice considera la evolución del salario por obrero industrial y su

    productividad, deflactada por la evolución ponderada de los precios manufactureros de

    Brasil, EEUU, Unión Europea y China, valuados en pesos. Como se observa en el

    gráfico 19, el costo salarial multilateral descendió abruptamente con la devaluación de

    2002 para luego crecer lentamente manteniéndose en 2009 un 30% por debajo del

    último trimestre de convertibilidad. El menor costo salarial multilateral se debe al

    incremento en la productividad laboral, ya que el nivel de salarios en relación a los

    precios de las manufacturas de la competencia externa recuperó los niveles del último

    trimestre de 2001.

  • 35

    Gráfico 19 - Costo salarial multilateral, producto por trabajador industrial y

    salario industrial en relación al precio en pesos de las manufacturas del exterior.

    Índices. Base IV trimestre 2001=100. Octubre 2001 – julio 2010.

    0

    20

    40

    60

    80

    100

    120

    140

    160

    IVI II III

    IVI II III

    IVI II III

    IVI II III

    IVI II III

    IVI II III

    IVI II III

    IVI II III

    2002 2003 2004 2005 2006* 2007* 2008* 2009*

    Cto. Salario multi. Salario/ precios externos

    Prod. por trabajador

    Nota técnica: la información de evolución del salario (S), el producto físico manufacturero (Q) y los obreros ocupados en la industria (L) se tomaron de la Encuesta Industrial Mensual del INDEC. Los precios internacionales en pesos (ePi) se tomaron

    multiplicando el TCR industrial por los precios internos de las manufacturas. Las fórmulas para calcular los indicadores son:

    i) Salario/precios externos: S/ePi ii) Prod. por trabajador: Q/L iii) Cto. Salario multi.: (i)/(ii)

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC y FMI.

    No se dispone de información sobre la evolución de los requerimientos físicos

    de insumos no salariales de la actividad industrial. Por ello presentaremos sólo la

    evolución de sus precios en relación a los precios de los productos industriales de los

    principales socios comerciales valuados en pesos. Su representatividad en la evolución

    de los costos no salariales de la industria depende crucialmente del supuesto de que no

    existieron variaciones relevantes en su rendimiento físico. De la observación del gráfico

    20 se destaca que la principal fuente de competitividad ha sido el abaratamiento relativo

    de la energía eléctrica, aunque esta conclusión debe matizarse por la existencia de

    restricciones cuantitativas en la provisión de energía para la industria durante parte del

    período11

    . El precio de los insumos agrícolas e importados fluctuó por encima (en los

    primeros años) y por debajo del precio de las manufacturas extranjeras (al finalizar el

    período), por lo que no ha constituido una fuente de competitividad para la industria

    local frente a la externa.

    11

    Sobre el funcionamiento del sistema energético nacional durante el período bajo análisis, consultar

    Mansilla y Perrone (2010).

  • 36

    Gráfico 20 - Precios internos mayoristas agrícolas, de productos importados y de la

    energía eléctrica en relación al precio en pesos de las manufacturas del exterior.

    Índices. Base IV trimestre 2001=100. Octubre 2001 – julio 2010

    0

    20

    40

    60

    80

    100

    120

    140IV

    I II III

    IVI II III

    IVI II III

    IVI II III

    IVI II III

    IVI II III

    IVI II III

    IVI II III

    2002 2003 2004 2005 2006* 2007* 2008* 2009*

    Agrícolas Importados Energía

    Nota técnica: los precios internacionales en pesos (ePi) se tomaron multiplicando el TCR industrial por los precios internos de las

    manufacturas. Los precios internos agrícolas (Pa), de productos importados (Pm) y de la energía eléctrica (Pe) son aperturas del

    índice mayorista del INDEC. Las fórmulas para calcular los indicadores son: i) Agrícolas: Pa/ePi ii) Importados: Pm/ePi iii) Energía: Pe/ePi

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC y FMI.

    Respecto al margen empresarial sobre los costos (mark up), en el gráfico 21 se

    observa que tras un incremento en el año 2002 – que refleja un intento de compensar

    por ese lado las pérdidas por menores ventas y por la situación financiera de la crisis –

    permaneció estable en un 31-2%. Sin embargo, las crecientes ventas asociadas a la

    expansión económica del período (que refleja la tasa bruta de ganancia) permitieron

    mantener una elevada tasa neta de ganancia que fluctuó entre el 13 y el 19% anual a

    partir de 2003.

  • 37

    Gráfico 21 - Margen bruto sobre ventas, tasa bruta de ganancia y tasa neta de

    ganancia en las manufacturas. Porcentajes. 2001 – 2008.

    0%

    20%

    40%

    60%

    80%

    100%

    2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

    margen bruto tasa bruta tasa neta

    Nota técnica: el margen bruto (mark up) fue obtenido como el resultado bruto (ventas – costos primos) sobre los costos primos (compras de insumos y demás gastos asociados a la producción). La tasa bruta de ganancia se calculó como el resultado bruto sobre

    el patrimonio neto al cierre del período. La tasa neta de ganancia se calculó como las utilidades contables sobre el patrimonio neto,

    ambos al cierre del período. Las utilidades contables se obtienen deduciendo al resultado bruto, los gastos administrativos, financieros, y otros no asociados directamente a las cantidades producidas.

    Fuente: elaboración propia en base a AFIP.

    En conclusión, podemos afirmar que la competitividad de la industria se

    incrementó respecto del período de la convertibilidad gracias a la devaluación real del

    precio de las manufacturas en relación a las de los EEUU y Brasil, facilitada por el

    incremento de la productividad laboral, el abaratamiento relativo de la energía eléctrica

    y el contexto de fuerte expansión de la actividad que permitió la obtención de una

    elevada rentabilidad manteniendo (o reduciendo si se toma como base al año 2002) el

    margen empresarial sobre los costos.

    La relevancia del contexto de expansión de la actividad para la competitividad

    industrial puede ser aún mayor, si se tiene en cuenta que no sólo mejoró la rentabilidad

    al aumentar la velocidad de rotación del capital invertido (entre otras razones por una

    mayor utilización de la capacidad instalada y de otros gastos fijos por unidad de

    producto), sino que podría ser la causa del incremento de la productividad industrial (de

    la que sólo tenemos información sobre la reducción de las horas hombre por unidad de

    producto)12

    . Desde este punto de vista, las políticas de ―enfriamiento‖ de la economía

    que suelen proponerse para estabilizar los precios podrían tener un efecto

    contraproducente que muy pocos toman en cuenta: el incremento de los márgenes sobre

    ventas y una menor productividad, con su consiguiente impacto en los precios de la

    industria.

    12

    Como lo afirma el conocido ―efecto Kaldor-Verdoon‖ de la literatura sobre organización industrial.

  • 38

    7 - LAS POLÍTICAS DE ESTABILIZACIÓN TRADICIONALES

    A la luz de los desarrollos anteriores, se pueden discutir las medidas de política

    económica para combatir la inflación. Es bueno empezar por las recomendaciones más

    escuchadas. Éstas suelen reposar sobre una interpretación del incremento general de

    precios como un exceso general de demanda frente a una oferta que no puede crecer a la

    misma velocidad (ver anexo I). En consecuencia, las propuestas que suelen derivarse de

    dicho diagnóstico son una serie de medidas tendientes a disminuir la demanda o bien

    incentivar la oferta.

    Respecto a la demanda, la posición ideológica de quienes suelen presentar estas

    recomendaciones políticas tiende a descargar el peso de la reducción de la demanda

    sobre el gasto público (Frenkel, 2008). Aunque existen excepciones que ponen el acento

    sobre el gasto privado de los sectores de elevados ingresos (Lozano y Raffo, 2007). En

    cuanto a la oferta, suele mencionarse la ―falta de seguridad jurídica‖ como la principal

    causa de una reducida inversión que no permite expandir en tiempo y forma la

    capacidad productiva.

    Sin embargo, estas hipótesis no parecen sustentadas por la evidencia empírica.

    En el gráfico 22 se presenta la evolución del nivel de uso de la capacidad instalada

    promedio de la industria frente a la inflación anual de los precios manufactureros, entre

    enero de 2006 y noviembre de 2010. A simple vista puede observarse que no existe una

    relación clara entre ambas variables.

  • 39

    Gráfico 22 - Nivel de uso de la capacidad instalada y tasa de variación anual de los

    precios. Porcentajes. Enero 2006-noviembre 2010

    -0,5%

    0,0%

    0,5%

    1,0%

    1,5%

    2,0%

    2,5%

    0%

    10%

    20%

    30%

    40%

    50%

    60%

    70%

    80%

    90%

    20

    06

    M1

    20

    06

    M5

    20

    06

    M9

    20

    07

    M1

    20

    07

    M5

    20

    07

    M9

    20

    08

    M1

    20

    08

    M5

    20

    08

    M9

    20

    09

    M1

    20

    09

    M5

    20

    09

    M9

    20

    10

    M1

    20

    10

    M5

    20

    10

    M9

    uso capac.

    (inflación)

    Nota técnica: la inflación anual se calculó como la tasa de variación del índice de precios mayoristas manufactureros de un mes respecto al mismo mes del año pasado.

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC.

    Por otro lado, en el gráfico 23 se presentan la información de incrementos de

    precios y el nivel de uso de la capacidad instalada de las principales aperturas de la

    industria. Como se observa, no existe una correlación clara entre ambas variables. Los

    sectores manufactureros que registraron mayores incrementos de precios entre los

    primeros tres trimestres de 2010 e igual período de 2005, no necesariamente se

    corresponden con aquéllos que presentaban un mayor nivel de utilización de su

    capacidad instalada a finales de ese período.

  • 40

    Gráfico 23 - Incrementos de precios y nivel de uso de la capacidad instalada en la

    industria. Principales aperturas. Porcentajes. I-III trimestres 2005–I-III trimestres

    2010

    Alimentos y bebidas

    Textiles

    Prod. papel

    Refinación de petróleoProd. Químicos

    Caucho y plástico

    Minerales no metálicos

    Metales básicas

    Metal mecánica

    90%

    95%

    100%

    105%

    110%

    115%

    120%

    65% 70% 75% 80% 85% 90% 95% 100%

    (var. precios)

    (uso capac.

    Nota técnica: el incremento de precios se calculó como la variación relativa de precios de cada sector entre el nivel promedio de los

    tres primeros trimestres de 2005 y 2010. El nivel de uso de la capacidad instalada se corresponde al promedio de los primeros tres trimestres de 2010. La información de precios de los productos de papel es el promedio simple de las categorías Papel y cartón y

    Edición e impresión, mientras que el nivel de uso de la capacidad instalada se corresponde al de Papel y productos de papel. . La

    información de precios de Metal mecánica es el promedio simple de las categorías Máquinas y equipos y Máquinas y aparatos eléctricos, mientras que el nivel de uso de la capacidad instalada se corresponde al de Metal mecánica excluyendo automóviles y los

    Automóviles.

    Respecto a la inversión, el período bajo análisis muestra la superación de los

    niveles de inversión real por unidad de producto respecto al máximo alcanzado en los

    años `90 (período donde reinaba la ―seguridad jurídica empresarial‖). La consolidación

    de un proceso de crecimiento económico sostenido con amplias tasas de rentabilidad

    (ver cuadro 5 en la próxima sección) parece pesar más que la ―seguridad jurídica‖ en las

    decisiones de inversión. De esta manera, desde 2003 se evidencia un importante

    incremento en la capacidad productiva de la economía, dado por una mayor tasa de

    inversión sobre un nivel de ingresos ampliamente incrementado (ver gráfico 23)13

    .

    13

    Amico y Fiorito (2010) argumentan que la inversión se encuentra determinada por el nivel de

    incremento de la demanda bajo el esquema clásico del ―acelerador‖.

  • 41

    Gráfico 24 - Inversión real total y en equipos durables de producción en relación al

    nivel de producto (columnas, eje izquierdo), y stock de equipos durables de

    producción (línea, eje derecho). Porcentajes y pesos de 1993. Años 1997 (máximo

    de los noventa) y 2002-2009.

    0%

    5%

    10%

    15%

    20%

    25%

    1997 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009

    0

    5.000

    10.000

    15.000

    20.000

    25.000

    30.000

    35.000

    40.000

    45.000

    Equipos

    Total

    Stock equipos

    Fuente: elaboración propia en base a INDEC.

    Pero analicemos las políticas de reducción del nivel de demanda como forma de

    combatir la inflación a la luz de la hipótesis de nuestro trabajo. Estas políticas podrían

    tener un efecto deflacionista sólo en caso de debilitar a los sectores del trabajo en su

    capacidad de lograr incrementos de salarios. Es decir, el objetivo detrás de las políticas

    de reducción del gasto y con él, del nivel de actividad, sería ampliar el desempleo y de

    esa manera reducir el poder de negociación de los sindicatos. Así, bajo la consigna de

    combatir la inflación se estaría afectando uno de los pilares del proceso de crecimiento

    de los últimos años: la búsqueda de una más justa distribución del ingreso. Y ello podría

    afectar el segundo pilar: la competitividad industrial se vería afectada, si el menor nivel

    de ingresos salarial deprime la demanda y el nivel de actividad económica, reduciendo

    las economías de escalas industriales.

    Otra propuesta de estabilización que implica sacrificar el exitoso modelo

    económico de los últimos años, es la apreciación cambiaria. Se argumenta que un tipo

    de cambio más reducido disminuiría la presión de las materias primas internacionales

    sobre el nivel de precios internos (Frankel, 2008 y 2010). Sin embargo, el tipo de

    cambio impacta también sobre la competitividad de la industria relativamente menos

    productiva que el agro. El costo de semejante política de estabilización nos lo muestra la

  • 42

    experiencia de la convertibilidad: desindustrialización, desempleo y un déficit externo

    insostenible en el largo plazo.

    Cuadro 3 - Desempleo, subempleo, pobreza e indigencia durante la convertibilidad

    y su crisis. Porcentajes de personas. 1992-2002

    1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002

    Desempleo (A) 7 9,3 12,2 16,6 17,3 13,7 12,4 13,8 14,7 18,3 17,8

    Subempleo (B) - 4,1 5,4 7,7 8,5 8,1 8,4 9,1 9,3 10,7 13,8

    (A+B) - 13,4 17,6 24,3 25,8 21,8 20,8 22,9 24 29 31,6

    Pobreza (*) 17,8 16,8 19 24,8 27,9 26 25,9 26,7 28,9 35,4 54,3

    Indigencia (*) 3,2 4,4 3,5 6,3 7,5 6,4 6,9 6,7 7,7 12,2 24,7

    (*) GBA

    Fuente elaboración propia en base a INDEC.

    8 - CONCENTRACIÓN DE MERCADOS Y MÁRGENES DE

    GANANCIA

    Otro tipo de políticas más heterodoxas de estabilización hace hincapié en la

    necesidad de regular los precios para evitar la aplicación de márgenes excesivos. La

    elevada concentración que caracteriza a los mercados en el capitalismo corporativo

    moderno, permite a las empresas aplicar amplios márgenes sin temor a verse

    enfrentados a competidores que les disputen el mercado. De ahí que en una economía

    con estas características, la búsqueda de una determinada redistribución del ingreso

    requiere la regulación de los márgenes de rentabilidad empresarial.

    En el caso Argentino, la formación de precios difiere según los sectores. En

    términos muy simplificados, el sector primario toma los precios del mercado mundial;

    la industria y algunos servicios los forman aplicando un margen sobre los costos; y en el

    caso de los servicios públicos, sus tarifas se encuentran reguladas por el Estado. La

    forma de regular la rentabilidad en el sector primario la abordaremos en la próxima

    sección, ya que ella constituye la política central para la estabilización de precios en la

    actualidad. Pasemos a estudiar la evolución de la rentabilidad en la industria y algunos

    servicios claves.

    En el cuadro 4 se presenta la información de los márgenes aplicados sobre los

    costos de producción en diferentes sectores. En el mismo se observa que tras un brusco

    incremento en 2002, los márgenes descendieron a niveles similares a los de fines de la

  • 43

    convertibilidad. Es sorprendente que industrias que lideraron los incrementos de los

    precios como la de Alimentos y Bebidas no muestren incrementos significativos en los

    márgenes sobre los costos. Excepto casos como el de los metales comunes (que

    aumentó fuertemente su mark up), el incremento de los márgenes como hipótesis

    explicativa de la inflación parece ser insuficiente.

    Cuadro 4 - Margen sobre los costos (mark up) aplicados en sectores seleccionados.

    Porcentajes. 2001-2008

    2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

    Industria manufacturera 32% 41% 34% 31% 32% 35% 32% 31%

    Alimentos y bebidas 29% 28% 20% 24% 25% 25% 27% 29%

    Textil, confección, cuero y

    calzado 24% 35% 25% 24% 26% 30% 26% 27%

    Papel y productos de papel 34% 39% 44% 39% 37% 37% 37% 36%

    Sustancias y productos químicos 58% 80% 66% 56% 58% 60% 57% 52%

    Caucho y plástico 26% 36% 32% 27% 24% 25% 24% 24%

    Vidrio 36% 28% 51% 49% 49% 50% 44% 39%

    Metales comunes 30% 79% 63% 60% 56% 57% 49% 43%

    Autos y sus partes 9% 32% 33% 14% 15% 17% 16% 15%

    Electricidad, gas y agua 54% 72% 58% 39% 41% 41% 39% 42%

    Construcción 28% 37% 31% 31% 30% 31% 32% 33%

    Comercio 27% 25% 25% 27% 28% 27% 29% 30%

    Nota técnica: el margen bruto (mark up) fue obtenido como el resultado bruto (ventas – costos primos) sobre los costos primos

    (compras de insumos y demás gastos asociados a la producción).

    Fuente: elaboración propia en base a AFIP.

    Sin embargo, el mantenimiento de los márgenes en niveles similares o aún

    superiores a los de finales de la convertibilidad no significa que los diversos sectores

    hayan mantenido niveles de rentabilidad similares a los de aquellos años. En el cuadro 5

    se presenta la tasa de ganancia en los mismos sectores en que antes analizamos los

    márgenes sobre los costos. En este cuadro se observa un incremento espectacular de la

    rentabilidad empresarial en todos los sectores excepto los servicios de electricidad, gas

    y agua, donde disminuye.

    La clave para explicar la aparente paradoja entre márgenes similares con tasas de

    ganancia tan diferentes, se encuentra en la expansión de la actividad económica que

    permite una mayor velocidad de recuperación del capital y una drástica disminución de

  • 44

    los gastos fijos por unidad de producto. Ello conduce a pensar que podrían regularse los

    precios (con la consiguiente reducción de los márgenes empresariales) en algunos

    sectores donde se están obteniendo tasas de rentabilidad extremadamente elevadas.

    Incluso, en el caso de regularse los precios de ciertas industrias básicas como los

    metales comunes, mejoraría la competitividad de las demás industrias que utilizan sus

    productos como insumos.

    Sin embargo hay que tener en cuenta que más allá de la regulación de algún

    sector puntual, la elevada rentabilidad promedio de la industria es uno de los objetivos

    explícitos del modelo económico en curso. De lo contrario, más sencillo que regular los

    precios sería apreciar el tipo de cambio, incrementando el peso de la competencia

    externa sobre la industria local.

    Cuadro 5 - Tasa de ganancia en sectores seleccionados. Porcentajes. 2001-2008

    2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

    Industria manufacturera 4% 11% 14% 13% 16% 22% 19% 18%

    Alimentos y bebidas 5% 12% 9% 7% 7% 12% 15% 18%

    Textil, confección, cuero y calzado 5% 9% 17% 10% 11% 21% 13% 10%

    Papel y productos de papel 4% -9% 16% 11% 11% 15% 14% 15%

    Sustancias y productos químicos 6% 7% 18% 15% 19% 23% 22% 20%

    Caucho y plástico 6% 4% 15% 14% 15% 17% 15% 11%

    Vidrio 2% 0% 8% 15% 18% 21% 20% 21%

    Metales comunes 6% 26% 14% 29% 25% 29% 26% 23%

    Autos y sus partes 1% 0% 15% 7% 14% 28% 18% 17%

    Electricidad, gas y agua 4% 4% 3% 1% 0% 9% 4% 0%

    Construcción 4% 3% 7% 5% 9% 18% 15% 15%

    Comercio 7% 7% 17% 12% 15% 24% 18% 19%

    Nota técnica: la tasa neta de ganancia se calculó como las utilidades contables sobre el patrimonio neto, ambos al cierre del período. Las utilidades contables se obtienen deduciendo al resultado bruto, los gastos administrativos, financieros, y otros no asociados

    directamente a las cantidades producidas.

    Fuente: elaboración propia en base a AFIP.

    En resumidas cuentas, los controles de precios pueden ser útiles para redefinir la

    distribución del ingreso y la tasa de rentabilidad al interior de la industria y los

    servicios. Sin embargo, no parecen ser suficientes para resolver el corazón de las

    presiones inflacionarias originado en el elevado precio de los bienes primarios internos,

    consecuencia del establecimiento de un tipo de cambio al nivel ―industrial‖ en un

    contexto de encarecimiento internacional de las materias primas.

  • 45

    9 - EL COMBATE A LA INFLACIÓN BAJO UN RÉGIMEN DE

    TIPO DE CAMBIO COMPETITIVO

    A partir de la hipótesis esbozada en este trabajo sobre las tensiones que desatan

    la inflación bajo la política de tipo de cambio industrial competitivo, se derivan dos

    grandes líneas de políticas de estabilización de precios (ver ilustración 2). La primera,

    de corto plazo, descansa fundamentalmente sobre la reducción del precio interno de

    ciertos bienes claves como los alimentos y el petróleo, en relación a su valor

    internacional. Estos son sectores que gozan de una extraordinaria rentabilidad

    determinada conjuntamente por su elevada productividad relativa (producto de la

    explotación de un recurso natural no renovable) y por los altos precios tomados del

    mercado mundial al tipo de cambio general.

    El tipo de cambio competitivo busca reflejar la competitividad industrial

    relativamente menor a la de estos sectores. Pero de esa manera, acentúa la rentabilidad

    extraordinaria de los mismos al elev