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  • 8/2/2019 Curso_Seguridad_Biolgica_M2_28_29_Anexo_XVIII_Arribas

    1/7

    29 Gac Sanit. 2005;19(1):29-35

    ORIGINALES

    ResumenObjetivos:Actualizar el coste medio a que asciende cada

    seguimiento de la hepatitis B y C, as como la infeccin por

    el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), en el perso-

    nal sanitario que ha experimentado una inoculacin accidental,

    desagregar el coste segn el estado serolgico de la fuente

    e identificar los apartados que influyen en mayor grado en la

    cuanta de este resultado.

    Mtodos:Se realiz una descripcin de los costes. El pro-

    grama postexposicin se modeliz en un rbol de decisin que

    combinaba las probabilidades (porcentaje de cada tipo de fuen-

    te en funcin de su positividad a los 3 virus e inmunizacin

    del accidentado frente a la hepatitis B) y los costes moneta-

    rios (en euros del ao 2002) relacionados con los gastos de

    personal, laboratorio, farmacia (incluida la profilaxis postex-

    posicin frente al VIH), energticos, de limpieza, telfono, ma-

    terial mdico y de oficina, amortizacin y prdidas producti-

    vas.

    Resultados:El coste medio de cada inoculacin fue de 388

    euros, con un rango de 1.502 (fuente positiva a la hepatitisC y el VIH) a 172 euros (fuente negativa a los 3 virus). Si la

    fuente era la hepatitis B positiva, el coste medio fue de 666

    euros cuando el accidentado no estaba inmunizado, y de 467

    si efectivamente lo estaba. La mayor parte del coste residi

    en las pruebas serolgicas y la administracin de profilaxis

    postexposicin.

    Conclusiones:El alto coste indica una evaluacin adecua-

    da del riesgo con el fin de evitar unos seguimientos innece-

    sarios. El modelo permite conocer el coste de cada episodio

    potencialmente evitable y puede aplicarse en cualquier hos-

    pital, con el objetivo de evaluar econmicamente los nuevos

    dispositivos preventivos.

    Palabras clave: Inoculacin accidental. Personal sanitario. Des-

    cripcin de costes. Anlisis de decisin.

    AbstractObjectives:To update the mean cost of each hepatitis B, he-

    patitis C and HIV follow-up in health personnel accidentally

    exposed to blood and body fluids, to stratify the cost depen-

    ding on the serological status of the source, and to identify

    the items that account for the main part of the cost.

    Methods:A cost analysis was carried out. The postexposu-

    re program was modeled on a decision tree combining pro-

    babilities (percentage of each type of source depending on

    positivity for the three viruses and immunization status of the

    health worker against hepatitis B) and monetary costs (euros

    in 2002). Costs included salaries, laboratory, pharmacy (in-

    cluding postexposure prophylaxis), water, gas and electr icity,

    cleaning, telephone, medical and office equipment, amortization

    and lost productivity.

    Results:The mean cost was 388 euros, ranging from 1,502

    euros (source positive for hepatitis C and HIV) to 172 euros

    (source negative for the three viruses). If the source was he-

    patitis B positive, the mean cost was 666 euros when the in-

    jured worker was not immunized and was 467 euros if the wor-ker was immunized. Serologic tests and postexposure

    prophylaxis accounted for the main part of the cost.

    Conclusions:The high cost suggests the need for appropriate

    risk evaluation to avoid unnecessary follow-ups. The model

    used allows the cost of each potentially avoidable episode to

    be determined and could be used in any hospital to perform

    an economic evaluation of new preventive devices.

    Key words: Needlestick injuries. Health personnel. Costs andcost analysis. Decision theory.

    Actualizacin del coste de las inoculaciones accidentales

    en el personal sanitario hospitalarioVctor M. Solano / Mara J. Hernndez / Francisco Javier Montes / Jos Luis ArribasServicio de Medicina Preventiva. Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza. Espaa.

    (Update of the cost of needlestick injuries in hospitalhealthcare personnel)

    El riesgo biolgico por una inoculacin accidentales uno de los ms frecuentes y el ms es-pecfico entre el personal sanitario1. Se defi-ne inoculacin accidental como la exposicin

    percutnea o mucocutnea a la sangre y los fluidos cor-porales potencialmente contaminados. Este riesgo se

    Correspondencia:Jos Luis Arribas Llorente.Servicio de Medicina Preventiva.Hospital Universitario Miguel Servet.P.o Isabel la Catlica, 1-3. 50009 Zaragoza. Espaa.Correo electrnico: [email protected]

    Recibido:2 de abril de 2004.Aceptado:26 de noviembre de 2004.

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    Solano VM, et al. Actualizacin del coste de las inoculaciones accidentales en el personal sanitario hospitalario

    Gac Sanit. 2005;19(1):29-35

    centra en la posibilidad de transmisin hemtica de 3virus: virus de la hepatitis B (VHB), de la hepatitis C(VHC) y de la inmunodeficiencia humana (VIH). Lacuantificacin actual estima que para el VHB oscila deun 1-6% (HBsAg positivo) a un 22-31% (HBsAg posi-tivo y HBeAg positivo), mientras que para el VHC seestima en un 0-7% y para el VIH en un 0,2-0,5%, aun-que distintas circunstancias pueden modificar estascifras2,3.

    El impacto de la accidentabilidad biolgica en Es-paa se puede expresar en las cifras aportadas por elgrupo EPINETAC (Exposure Prevention InformationNETwork, en su versin espaola), que establece unatasa de 14 exposiciones accidentales percutneas porcada 100 camas en el perodo 1998-20004. Por otro lado,el grupo GERABTAS (Grupo Espaol de Registro deAccidentes Biolgicos en Trabajadores de Atencin dela Salud) aporta una tasa de 104 accidentes biolgi-cos por cada 1.000 trabajadores en 19975,6.

    Dada la importancia de este problema en cualquiermbito sanitario se han establecido diferentes estrate-gias preventivas. Destaca la implantacin de dispositi-vos de bioseguridad, concepto amplio que incluira todoaparato, instrumento o material sanitario que incorpo-ra sistemas de seguridad de proteccin, diseados conel objetivo de eliminar o minimizar el riesgo de expo-sicin. En la seleccin y la evaluacin de estos dispo-sitivos se utiliza en ltimo lugar la metodologa de laevaluacin econmica. As, el conocimiento y la in-vestigacin econmica de la accidentabilidad biolgi-ca se han desarrollado bajo esta perspectiva median-te estudios de coste-efectividad en la evaluacin dedispositivos de bioseguridad, como los sistemas de ad-ministracin de medicacin intravenosa (sistemas sinagujas o con agujas protegidas)7,8.

    Estos estudios realizan anlisis sobre los costes dedichas inoculaciones para cuantificar el ahorro que su-pone la puesta en marcha de estos nuevos dispositi-vos de acuerdo con las inoculaciones prevenidas8-12. Apesar de ello, no se incluye en algunos estudios la va-loracin econmica del seguimiento del VHC o el VIH.Tampoco se especifica el total de determinaciones se-rolgicas (parte importante del coste) u otro tipo de gas-tos, y se omite, por ejemplo, cualquier referencia a loscostes debidos a la prdida de productividad. El re-sultado de estos estudios de coste-efectividad suele serclaramente favorable al desarrollo de estas innovacio-nes.

    En lo que respecta a los trabajos realizados en Es-paa, nuestro grupo de trabajo realiz una aproxima-cin al coste de las inoculaciones accidentales inten-tando solventar las limitaciones anteriores. Se describiel coste medio de cada seguimiento en el personal sa-nitario que haba sufrido una inoculacin accidental, ascomo ese coste segn el estado serolgico de la fuen-te, y adems se establecieron los apartados que inci-

    dan en mayor grado en su cuanta13. No obstante, larecomendacin de la administracin de profilaxis pos-texposicin (PPE) con medicacin antirretroviral en su-jetos que hayan sufrido inoculaciones con riesgo de se-roconversin frente al VIH ha supuesto una nuevaperspectiva en la cuantificacin de este coste2. A prio-ri, la inclusin de este nuevo concepto de coste puedesuponer un importante incremento en esta valoracineconmica.

    El objetivo del presente trabajo es actualizar los re-sultados de este estudio adaptando el clculo de cos-tes a la realidad derivada de las nuevas medidas pre-ventivas. Para ello, se utilizar la misma modelizacinmediante un rbol de decisin asignando las probabi-lidades asociadas con todos los nudos de aconteci-mientos y los costes correspondientes a cada nudo ter-minal. De esta forma, podr determinarse el costeesperado de cada acontecimiento en funcin del esta-do serolgico de la fuente de infeccin.

    Mtodos

    El tipo de anlisis seleccionado fue una descripcinde costes, como forma parcial de evaluacin econmicade los costes netos en unidades monetarias de unanica alternativa, sin realizar ninguna valoracin expl-cita de las consecuencias del procedimiento evalua-do14,15. Los clculos de valoracin de costes se reali-zaron desde la perspectiva del Sistema Nacional deSalud. Se estableci un marco temporal de 1 ao y todoslos recursos consumidos se valoraron a partir de losdatos del ao 2002.

    El mbito de estudio fueron 3.700 integrantes delpersonal sanitario del Hospital Universitario Miguel Ser-vet que potencialmente pudieron sufrir una inoculacinaccidental en el desarrollo de su actividad. Los suje-tos de estudio fueron las 1.427 inoculaciones acci-dentales registradas durante el perodo comprendidoentre el 1 de enero de 1998 y el 31 de diciembre de2002 en la base de datos del servicio de medicina pre-ventiva (SMP)16. En cada inoculacin accidental se eva-luaron el riesgo segn el contaminante, el tipo de ac-cidente y el estado de vacunacin del trabajador.Cualquier tipo de marcador serolgico desconocido seconsider como positivo (una fuente de origen desco-nocido, como una aguja abandonada, se consider comopositiva a los 3 virus). Si la fuente era conocida, pre-via solicitud al paciente, se solicitaron los marcadoresserolgicos correspondientes. Si indicaban positividada algn virus (o la fuente era desconocida), se aplica-ron las medidas preventivas (inmunoglobulina espec-fica y vacuna antihepatitis B o PPE frente al VIH) y serealiz el seguimiento serolgico segn las recomen-daciones internacionales vigentes2,17.

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    Como herramienta de apoyo a la descripcin de cos-tes se utiliz un anlisis de decisin modelizando el pro-grama de seguimiento tras la inoculacin accidental enun rbol (fig. 1), donde se representaron los nudos uopciones disponibles y las probabilidades asocia-das14,18-20. Los nudos terminales correspondieron a losdiferentes tipos de seguimiento realizados segn la po-sitividad del paciente fuente a algn virus y del estadoinmunitario del accidentado frente a la hepatitis B.

    La cuantificacin de cada tipo de inoculacin acci-dental (que se plasm en cada tipo de seguimiento) serealiz a partir de la base de datos informatizada delregistro. Con estos valores se calcularon las propor-ciones que cada nudo terminal representaba respectoal nudo precedente (fig. 1) y el resto se fue calculan-do progresivamente hasta alcanzar el acontecimientoinicial (inoculacin accidental). Estas proporciones ex-presaban la probabilidad de realizar cada tipo de se-guimiento si se cumplan las condiciones precedentes(p. ej., la probabilidad de realizar un seguimiento al VIH

    si la fuente era positiva a los otros 2 virus y si el per-sonal no estaba inmunizado fue del 98,2%).

    Las variables de consumo de servicios sanitarios seobtuvieron a partir de la informacin facilitada por losservicios de personal, control de gestin y suministros,que fueron las siguientes:

    Los costes de personal se consideraron indirec-tos al producto o servicio (el centro de coste SMP rea-liza muchas actividades o productos, como la atencina las inoculaciones), pero directos a dicho centro decoste21. Para su imputacin se utiliz una unidadcomn que midiera la productividad del centro, optn-dose por el tiempo de dedicacin del personal paraeste servicio21,22. Se calcul el coste que supona cadaminuto de trabajo por estamento y se multiplic por laestimacin del tiempo dedicado en el desarrollo de cadatipo de seguimiento (tabla 1).

    Los costes de laboratorio de las serologas reali-zadas se imputaron directamente y variaron en funcin

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    Solano VM, et al. Actualizacin del coste de las inoculaciones accidentales en el personal sanitario hospitalario

    Gac Sanit. 2005;19(1):29-35

    Figura 1. rbol de decisin con las proporciones asociadas a cada nudo. Entre parntesis figura el nmero absoluto deinoculaciones accidentales. La fuente de datos son las 1.427 inoculaciones accidentales registradas en la base de datos del

    servicio de medicina preventiva durante el perodo comprendido entre el 1 de enero de 1998 al 31 de diciembre de 2002.

    Inoculacin

    Fuentenegativa

    Fuentepositiva

    odesconocida

    VHB (+)

    VHB ()

    VHC (+)

    VHC ()

    VHC (+)

    VHC ()

    VHC (+)

    VHC ()

    PS No inmunizadofrente al VHB

    PS inmunizadofrente al VHB

    VIH (+)

    VIH ()

    VIH (+)

    VIH ()

    VIH (+)

    VIH ()

    VIH (+)

    VIH ()

    VIH (+)

    VIH ()

    VIH (+)

    98,4% (122) Seguimiento VHB, VHC y VIH

    1,6% (2) Seguimiento VHB y VHC

    16,7% (2) Seguimiento VHB y VIH

    83,3% (10) Seguimiento VHB

    98,2% (318) Seguimiento VHC y VIH

    1,8% (6) Seguimiento VHC

    12,8% (5) Seguimiento VIH

    87,2% (34) Sin seguimiento

    24,4% (29) Seguimiento VHC y VIH

    75,6% (90) Seguimiento VHC

    100% (30) Seguimiento VIH

    54,6% (779) Sin seguimiento

    45,4% (648)

    23% (149)

    73% (363)

    77% (499)

    27% (136)91% (124)

    9% (12)

    89% (324)

    11% (39)

    80% (119)

    20% (30)

    1427

    Ntese que estas proporciones se calculan respecto al nmero absoluto de inoculaciones asociadas al nudo precedente. VHB: virus de la

    hepatitis B; VHC: virus de la hepatitis C; VIH: virus de la inmunodeficiencia humana; +: fuente positiva; : fuente negativa; PS: personalsanitario.

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    del nmero de marcadores solicitados (36,4 euros parael HBsAg, anti-Hbc y anti-VIH, y 45,5 euros para el anti-VHC) por el tipo de seguimiento realizado2.

    Los costes de farmacia por las dosis de inmuno-globulina especfica antihepatitis B (85 euros) se asig-naron directamente al producto en los seguimientos queprecisaron su administracin (fuente portadora del VHBy accidentado no inmunizado). Los costes de una pautaexpandida estndar de 4 semanas con zidovudina, la-mivudina e indinavir, incluidos los controles para valo-rar su toxicidad (1.122 euros), se asignaron nicamenteen el caso de seguimientos por inoculaciones con fuen-tes confirmadas como positivas frente al VIH2.

    Los costes energticos (agua, gas y electricidad),de limpieza y telfono se consideraron como indirec-tos al producto y al centro de coste SMP por corres-ponder a todos los centros de coste hospitalarios. Paradistribuirlos se tomaron diferentes criterios de repartoy se imputaron como tiempo de dedicacin del perso-nal (tabla 1)13.

    Los costes de material mdico y de oficina, ascomo los de amortizacin de los equipos, se conside-raron como indirectos al producto, pero directamentelocalizables en el centro de coste SMP, y se imputaronal producto como ya se ha descrito (tabla 1). Para elclculo del valor anual equivalente de los equipos setom una tasa de descuento del 6%23.

    Los costes de prdidas productivas se asignarondirectamente al producto. Se realiz una estimacin deltiempo utilizado por el accidentado en cada tipo de se-guimiento y se ponder el coste del minuto trabajadopor estamento (que figuran como costes de personalen la tabla 1) con su proporcin dentro del conjunto deaccidentados. Este coste multiplicado por el nmero deminutos perdidos que supona cada tipo de seguimientoproporcion el coste indirecto asociado a ste24.

    El coste asociado a cada nudo terminal se calculsumando los recursos consumidos en cada seguimiento

    y el coste asociado a los nudos precedentes, ponde-rando el coste por la probabilidad asociada a cada nudoterminal correspondiente. El procedimiento se repiti su-cesivamente hasta alcanzar el coste medio de una ino-culacin accidental.

    Resultados

    El rbol de decisin con las probabilidades asocia-das con cada una de las ramas se presenta en la fi-gura 1. El 54,6% (779) del total de las 1.427 inocula-ciones correspondi a fuentes negativas a los 3 virus,y el 45,4% (648) a fuentes positivas o desconocidas aalguno de ellos. De estas 648 fuentes positivas o des-conocidas, 567 (87,5%) lo eran frente al VHC y 506(78%) frente al VIH. De las 499 (77%) fuentes positi-vas o desconocidas frente al VHB, el 73% afect al per-sonal inmunizado frente a este virus y el 27% al per-sonal no inmunizado.

    Si nicamente valorsemos las 169 (12% del total)fuentes confirmadas como positivas a 1 o ms virus,la distribucin sera la siguiente: 121 (8,5% del total)VHC positivas, 52 (3,6%) VIH positivas y 30 (2,1%) VHBpositivas. De las 122 fuentes consideradas como po-sitivas a los 3 virus, 121 correspondieron realmente ainoculaciones con fuentes desconocidas.

    En la figura 2 se expone el rbol de decisin con elcoste asociado a cada nudo. El coste medio de cadainoculacin fue de 387,7 euros, aunque variaba am-pliamente segn cada tipo de fuente. Disminua a 172euros si la fuente era negativa a los 3 virus, y ascen-da a 567 en el caso de que la fuente fuera positiva odesconocida a alguno de ellos.

    El mayor porcentaje del coste correspondi a la rea-lizacin de controles serolgicos y la aplicacin de laPPE. En las inoculaciones que precisaron seguimien-to, el porcentaje que represent el coste de las anal-ticas lleg al 88% (fuente positiva al VHB y VHC en per-sonal inmunizado). Respecto a la PPE, puede llegar asuponer un 67% del coste en los seguimientos dondese aplica (fuente confirmada como positiva frente al VIH).De hecho, el mayor coste (1.502 euros) se imput a lasinoculaciones que requieren un seguimiento frente alVHC y el VIH, que generalmente precisaban PPE al pro-venir de fuentes positivas confirmadas.

    Si la fuente era positiva o desconocida frente al VHB(independientemente de su positividad a los otros 2virus), se apreci una diferencia considerable de 200euros si el accidentado estaba inmunizado frente a estevirus (467 euros) o no (666 euros). Cuando la fuenteera positiva al VHB y el VHC, no hubo diferencias apre-ciables si adems era positiva o negativa al VIH (670frente a 644 euros en los no inmunizados, y 486 fren-te a 411 euros, respectivamente). Esto se justificaba por-

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    Solano VM, et al. Actualizacin del coste de las inoculaciones accidentales en el personal sanitario hospitalario

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    Tabla 1. Coste de las variables expresadas como tiempo dededicacin del personal en la prestacin del servicio (datos

    econmicos del ao 2002)

    Tipos de costes Enfermero/a Mdico/a Auxiliar de

    (euros/min) (euros/min) clnica (euros/min)

    Salarios 0,3 0,477 0,185

    Energticos 0,003 0,003 0,003

    Limpieza 0,006 0,006 0,006

    Telfono 0,001 0,001 0,001

    Material mdico

    y de oficina 0,002 0,002 0,002

    Amortizacin de equipos 0,001 0,001 0,001

    Total 0,313 0,489 0,197

    Fuente: Servicios de personal, control de gestin y suministros. Hospital Univer-

    sitario Miguel Servet. Zaragoza.

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    que las exposiciones consideradas tericamente comopositivas a los 3 virus provenan en muchas ocasionesde una fuente desconocida que no requera ciertos con-sumos reales de recursos (como la analtica que se rea-liza a la fuente cuando sta es conocida).

    Discusin

    El resultado de 388 euros como coste medio en elao 2002 difiere del obtenido previamente en nuestrohospital (238 euros del ao 1994) por 2 motivos fun-damentales: la actualizacin de costes en el tiempo yla inclusin de la PPE13. El efecto de este ltimo factores ms evidente al valorar el coste de las fuentes po-sitivas al VIH y, por tanto, con administracin de PPE.En este sentido, la distribucin de fuentes positivas esmuy similar a las del perodo anteriormente estudiado.De hecho, este porcentaje de positividad en fuentes co-nocidas (VHB, 2,1%; VHC, 8,5%; VIH, 3,6%) no es sig-nificativamente diferente del de otras series publicadas

    en mbitos distintos6. No obstante, la metodologa pro-puesta podra aplicarse a otras instituciones teniendoen cuenta sus particulares caractersticas epidemiol-gicas y econmicas.

    Los resultados de nuestro mbito se aproximan alos que aportan diferentes estudios realizados en Es-tados Unidos. Sin embargo, la inclusin de costes di-ferentes dificulta la comparabilidad real de los resulta-dos y, adems, se han tenido que actualizar los valoresde estos estudios a euros del ao 2002. Laufer et alobtienen un valor de 363 dlares (303 euros actualizadosal ao 2002); no incluyen el seguimiento del VHC, peros el coste del tratamiento de las hipotticas serocon-versiones desarrolladas8. Yassi et al tampoco incluyenel seguimiento del VHC y aportan un rango que osci-la entre 83 dlares (122 euros) para fuentes negativasy 559 dlares (823 euros) para fuentes positivas al VHBy el VIH, sin incluir el coste de la PPE12. Gartner ob-tiene un coste de 373 dlares (356 euros); incluye unseguimiento de los 3 virus, pero contabiliza slo partede los costes (p. ej., no se incluye el coste de la sero-loga realizada a la fuente o la PPE)9. Orenstein et al

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    Solano VM, et al. Actualizacin del coste de las inoculaciones accidentales en el personal sanitario hospitalario

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    Figura 2. Resultados en euros del anlisis de costes, que expresan el coste asociado a cada nudo.

    Inoculacin

    Fuentenegativa

    Fuentepositiva

    odesconocida

    VHB (+)

    VHB ()

    VHC (+)

    VHC ()

    VHC (+)

    VHC ()

    VHC (+)

    VHC ()

    PS no inmunizadofrente al VHB

    PS inmunizadofrente al VHB

    VIH (+)

    VIH ()

    VIH (+)

    VIH ()

    VIH (+)

    VIH ()

    VIH (+)

    VIH ()

    VIH (+)

    VIH ()

    VIH (+)

    670,2

    643,8

    1.225,7

    508,3

    485,8

    411,8

    882,2

    244,4

    1.502,7

    339,5

    1.101,8

    172,1

    567,1

    719,4

    467,4

    521,5

    666,1

    387,7

    669,8

    627,8

    484,4

    362,2

    623,0

    1.101,8

    VHB: virus de la hepatitis B; VHC: virus de la hepatitis C; VIH: virus de la inmunodeficiencia humana; +: fuente positiva; : fuente negativa;

    PS: personal sanitario.

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    incluyen el seguimiento de los 3 virus y la PPE, por loque obtienen un coste medio de 260 dlares (381 eurosdel ao 2002) pero, al igual que en nuestro estudio, elensayo de estos autores presenta distintos valores segnla positividad de la fuente. En el caso del seguimientofrente al VIH y la administracin de PPE nicamentecon zidovudina, el coste asciende a 440 dlares (646euros de 2002)11. Debemos resaltar que todos estosdatos contrastan con los aportados por la Occupatio-nal and Safety Health Administration (OSHA) de Esta-dos Unidos, que estimaba en 1998 un coste entre 2.234y 3.832 dlares por cada inoculacin accidental25.

    La influencia que la inclusin de determinados cos-tes (energticos, de limpieza, telfono, corrientes, ana-ltica de la fuente) puede tener en la supravaloracino infravaloracin del resultado ya ha sido evaluada13.No obstante, una conclusin evidente de nuestro es-tudio es que el coste de las inoculaciones dependedirectamente del coste de las determinaciones ana-lticas empleadas y del grado de administracin dePPE, todos ellos considerados como costes directosdel producto. Respecto a los marcadores serolgicos,los resultados pueden variar segn los hospitales, in-cluso dentro del mismo mbito. En nuestro estudio, sehan considerado como un producto del centro el costede laboratorio, donde se incluyen todos los posiblescostes imputables (personal de laboratorio, energ-ticos...).

    Hemos incluido el coste de una pauta concreta es-tndar de PPE por 2 motivos. En primer lugar, somosconscientes que, de acuerdo con los protocolos esta-blecidos para la PPE, lo ideal es individualizar cada pautasi se dispone de informacin del paciente fuente y, ade-ms, es necesario valorar adecuadamente su pres-cripcin2. En la actualidad no se dispone de la infor-macin que permita generalizar las pautas msempleadas y realizar una ponderacin de stas. En se-gundo lugar, es cierto que no todos los accidentadoscompletan la pauta de PPE por la aparicin de efectosadversos, pero en la actualidad no se dispone de in-formacin fiable (p. ej., porcentaje de abandonos) a par-tir de los registros establecidos. Consideramos que lainclusin de este coste puede suponer una sobrevalo-racin del resultado en determinadas ocasiones, perosi no se incluyera, la infravaloracin habra afectado no-tablemente al resultado.

    Segn lo comentado, los profesionales que atien-den las inoculaciones accidentales deben responsabi-lizarse de la valoracin adecuada del riesgo de los tra-bajadores para evitar el uso de los controles serolgicoscomo placebo. Tambin es fundamental la identifi-cacin del mayor nmero posible de pacientes fuente,con el objetivo de no realizar o repetir estos controlesinnecesariamente. Con ambas medidas se lograr tam-bin una individualizacin adecuada de la recomen-dacin o indicacin de la PPE.

    Una posible limitacin es no haber realizado un an-lisis de sensibilidad para observar en qu medida la atri-bucin de valores hipotticos a variables relevantespuede modificar las conclusiones. En realidad, lamayor parte de las variables de costes no suponen unpeso especfico en el resultado final. En otras variables(marcadores serolgicos o administracin de PPE) nose ha dispuesto de la informacin para calcular su rangode variacin real. Por tanto, slo poda plantearse parael cumplimiento real del programa por parte del personal,asumiendo una baja conciencia del riesgo o un olvidoque provoquen su abandono13. Sin embargo, se ha con-siderado que en la actualidad las campaas de infor-macin, la concienciacin del personal y el acortamientode los perodos de seguimiento han llevado a cifras decumplimiento ptimas. Por tanto, asumimos que los re-sultados reales de coste son muy similares a los ob-tenidos en nuestro estudio.

    Los resultados de este estudio pueden utilizarse enla valoracin econmica de nuevos dispositivos de se-guridad. Al comparar 2 sistemas mediante la evalua-cin de su coste-efectividad, puede calcularse el aho-rro que supone la introduccin de un dispositivo msseguro a partir de las inoculaciones accidentales pre-venidas. Este valor debera descontarse de la diferen-cia del coste de la utilizacin de los 2 sistemas7. A modode ejemplo, en una institucin que cuente con 3.000 tra-bajadores se producirn 312 accidentes anuales, queconllevarn un coste de 121.000 euros5. Los gestoresde esta institucin debern valorar que este coste seevitara en gran medida si se introdujeran dispositivosde seguridad que minimizaran el riesgo. Estos mismosclculos realizados por la OSHA en 1998 estimaban unahorro de 106 millones de dlares en el estado de Ca-lifornia durante 1 ao25. Jagger et al, con esta meto-dologa, obtienen que por trmino medio el coste de lasinoculaciones accidentales supone el 36% del coste delos dispositivos de seguridad26.

    No podemos objetivar si la metodologa y los re-sultados propuestos en nuestro anterior estudio tuvie-ron un impacto real, a pesar de que hay pocos estu-dios sobre este tema concreto en el contexto del SistemaNacional Salud. No obstante, asumimos que es un ejem-plo ms que se puede aportar a las modernas tcni-cas de gestin sanitaria. Independientemente de estaaplicacin concreta, este tipo de estudios y la meto-dologa subyacente deberan tener repercusiones im-portantes en el conjunto de la gestin.

    A modo de conclusin deberamos destacar quems all de los resultados puntuales obtenidos, la granventaja de la metodologa utilizada es que permitecalcular el resultado en otros mbitos. Cada hospitalo institucin sanitaria puede obtener los datos de lasprobabilidades a partir de su programa de seguimien-to de inoculaciones accidentales. Por otra parte,podr identificar los costes en que incurre e inclu-

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    so valorar nicamente los que influyen ms en el costefinal. Por ltimo, se podr aplicar el rbol de decisinpropuesto y obtener los resultados de acuerdo consus propias caractersticas y los condicionantes de sumbito.

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