carta v

2
Carta V. A Martín Quiros MARQUÉS DE SADE Digitalizado por http://www.librodot.com

Upload: jordi-clapes

Post on 09-Nov-2015

212 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

asd

TRANSCRIPT

  • Carta V. A Martn Quiros MARQUS DE SADE

    Digitalizado por http://www.librodot.com

  • Librodot Carta V. A Martn Quiros Marqus de Sade

    LIBRODOT.COM

    2

    2

    Martn Quiros..., te ests poniendo insolente, hijo mo, si yo estuviera all te dara una buena paliza... te arrancara tu chorrera de falso tup que todos los aos renuevas con los pelos de coleta de los bids del camino de Courtheson a Pars, cmo hars, viejo mastn, para arreglar eso? te han dicho cmo hars? Saldrs como un picardo que a fuerza de tironeos voltea todas esas viejas cosas negras que bordean como nueces las tiendas a lo largo de la calle St. Honor, y luego al da siguiente con un poco de cola fuerte te lo arreglars sobre tu frente de coraza, de manera que no parecer ms que una ladilla sobre la "ollita" de una z... no es cierto, hijo mo? Vamos trata... trata un poco de callarte te lo ruego porque me aburre que la canalla me insulte tanto tiempo. Es cierto que hago como los dogos y cuando veo que toda esa jaura de cuzcos y alanitos ladra tras de m levanto la pierna y los meo en las narices.

    P... quin te ve sabihondo como un infolio, de dnde has sacado tantas cosas bellas...? esos elefantes que matan a Csar, ese Bruto que roba bueyes, ese Hrcules, esa batalla de las Endrinas, y ese Vario...! oh: qu hermoso es todo eso. Todo los has robado una noche cuando volvas de llevar a cenar a tu querida, a lo de su madre, le metas todo en la cola de su vestido, a medida que lo ibas pillando, y luego hacas como quien oye llover, de modo que la pobre marquesa lleg esa noche a su casa con elefantes, Hrcules y bueyes en su vestido, lo que la mantuvo erguida y rgida como si no hubiera sido la hija de una presidenta. Qu me hablas de mujer embarazada, no te he pasado la mano para tratando de juntarte con un tal seor Rtif, ah: no he olvidado todas tus hermosas proezas.

    Mucho me ha alegrado saber que mi escuadra estaba en la rada. No tardar en reunirme con ella, con mi esquife El Quebrantador, no espero ms que sesenta u ochenta piezas de artillera y cuarenta planchas de metal que estn en lo del fundidor y que deseo hacer poner sobre la cofa a fin de darle una apariencia ms temible, y en seguida me har a la vela para efectuar unos cruceros esta primavera.

    Dices como si tal cosa, Martn hijo mo que no escribo a tu gusto; atiende un poco mi razonamiento a este respecto.

    Slo escribo a mi mujer, que lee muy bien mi escritura por mala que sta sea. Los que sin ningn ttulo y ningn derecho quieren meter la nariz en esta escritura que no te agrada, si no estn contentos con ella pueden irse a la m... m... Ahora deseas erudicin sobre esto, pues bien hijo mo aqu la tienes y el macho y la hembra que se dan tales humos lejos de enojarse por el sitio al que los envo me respondern si es que quieren francamente confesar sus gustos lo que el regente le respondi a una mujer que se le quejaba porque el cardenal Dubois la haba enviado a donde yo os envo: "Seora, el cardenal es insolente. Pero a veces es un buen consejero". Adis Quiros. Mis respetos a Gautruche cuando lo veas; dile que estoy encantadsimo con su resurreccin y sobre todo te encarezco no olvidarme con respecto a milli Primavera.

    Hoy 4 a la noche al recibir tu 3 carta o al minuto como dice milli Primavera. Vincennes, 4 de octubre de 1779.