La práctica constante de la lectura en los niños favorece el enriquecimiento del lenguaje y

desarrolla la fluidez y comprensión lectora.

¡Enriquece el lenguaje!

Si el pequeño comprende el significado de las palabras que constituyen el texto y las ideas que pretende transmitir el mismo, estará en capacidad de interpretar y analizar la información expuesta.

¡Desarrolla la comprensión lectora!

La lectura que se realiza tanto en el hogar como en la escuela desarrolla la concentración en los niños porque los invita a prestar atención al mensaje o argumento que plantea un libro o

cuento infantil.

¡Ayuda a la concentración!

Si acostumbras leer a tus hijos en las noches antes de dormir o leen juntos algún cuento, lo más seguro es que él se imagina las situaciones y los personajes e incluso antes de finalizar la

historia piensa en un posible desenlace.

¡Estimula la creatividad y la imaginación!

Los niños que leen son mejores escritores, ya que cuentan con la habilidad de expresarse de forma más efectiva y tienen la capacidad de reconocer la estructura del lenguaje y texto, lo cual podrán utilizar en los textos que ellos mismos producen.

¡Facilita el aprendizaje y la escritura!